TEMA 9

MI VIDA. UNA COMUNIÓN CON JESÚS

“NO ES LA GENTE SANA LA QUE NECESITA MÉDICO SINO LOS ENFERMOS. NO HE VENIDO
A LLAMAR A JUSTOS, SINO A PECADORES PARA QUE SE ARREPIENTAN.”
Con estas palabras el Señor nos invita a unir nuestro corazón a su corazón, a unir nuestros
ojos a sus ojos, a unir nuestras manos a sus manos.
¿Qué sentido puede tener la comunión si no nos identificamos con el Cristo que es siervo
de todos?, la intención de Jesús no es solo mostrar su presencia real entre nosotros, sino
también que nosotros nos hagamos como Él. Participemos con Él en la redención de tantos
hombres que han perdido el sentido de la vida, el sentido de la fe.
Jesús nos invita a vivir una comunión con Él, quiere vivir en nosotros. Con nuestras acciones,
con lo que decimos y hacemos. Dios quiere llevar a través de nosotros, el consuelo a tantos
hombres y mujeres sufren.
¿Qué te parece el plan de Dios? ¿no es maravilloso?
En su palabra y en todos los sacramentos, Jesús nos ofrece un alimento para el camino.
La Eucaristía es el centro vital del universo, capaz de saciar el hambre de vida y felicidad.
“El que coma vivirá por mi” (Jn 6, 57). En ese banquete, feliz participamos de la vida
eterna y, así, nuestro vivir día a día se convierte en una Misa prolongada, DONDE EL
SEÑOR VIVEN MI Y YO VIVO EN ÉL.

Los regales que Dios nos da. Requiere de nuestra buena disposición para aprovecharlo. Si
lo descuidamos, lo perderemos por descuido y sería una tristeza echar a perder los
regalos que nos da nuestro Padre Dios.
Dios nos regala día a día muchas cosas. Pero el regalo más grande es ÉL MISMO EN LA
EUCARISTIA, otro gran regalo es que el Señor nos ofrece VIVIR PARA ÉL. Esto nos exige
un espíritu comunitario, solidario para ayudar, y abrir los ojos para reconocerlo y servirlo
en los más pobres y necesitados.

SER DISCIPULO DE JESUS IMPLICA APEGARNOS INFINITAMENTE A SUS ENSEÑANSAS,

ESCUCHARLO ATENTAMENTE, Y PONER EN PRACTICA TODO LO QUE ÉL NOS DICE.
“AMAR A DIOS Y AMAR AL PROXIMO”