FINANZAS INTERNACIONALES

ENSAYO: SISTEMA MONETARIO MEXICANO Y PERSPECTIVA

INTERNACIONAL.

Constituyendo los principales pueblos indígenas asentados en el territorio que

posteriormente, se llamó Nueva España, núcleos ele población de características
sedentarias, toda su actividad económica tenía que estar en relación con esa .forma de vida.
En tales condiciones, los instrumentos de cambio indígenas cuya existencia ha llegado a
nosotros por las narraciones de los primeros hispanos que vinieron: a esta colonia fueron
especialmente mercancías de origen vegetal y mineral. En la generalidad de los casos los
cambios se efectuaban directamente .por medio del trueque. También el oro y plata no
acuñados se utilizaron en múltiples operaciones, entregando en vez de un castellano el peso
en metal que correspondía al mismo; hecho que motivó el nombre "peso" de nuestra actual
unidad monetaria.

El envío de moneda, a las islas Filipinas por embarques, es uno de los primeros elementos
que nos ilustran de la importancia que pronto llegó a alcanzar el peso, ya que de ese lugar
debe haberse dirigido éste a los puertos chinos, los pesos, que en un principio fueron
introducidos por el gobierno directamente, adquirieron durante el siglo XVII el carácter de
instrumento civilizador importante; y el de único medio de cambio del comercio
internacional de los pueblos, de Oriente. Pronto comenzaron a circular también en América,
hasta 1857, que por ley se prohibió el uso de monedas extranjeras, desaparecieron de la
circulación, fue perdiendo la secular importancia heredada de las monedas coloniales.

Lo anterior, señala Ortiz (1942) que se debió a cuatro factores que comenzaron a influir
hacia la segunda mitad del siglo XIX. En primer lugar, la creación de la Casa de Moneda en
las Pilipinas. En los pueblos asiáticos, el peso, en vez del premio que había alcanzado hasta
entonces, tuviera un descuento de 3 y 4 % con respecto a su valor intrínseco. El tercer
elemento que nos ilustra, fue la promulgación de la ley monetaria de Japón, en virtud de la
cual se estableció el yen plata; la fabricación del "trade dollar" americano, expresamente
acuñado para hacer la competencia al peso mexicano, y las diversas monedas ele comercio
que fueron apareciendo en diferentes lugares con esa misma finalidad; y al iniciarse la
depreciación de la plata en 1873, es el cuarto elemento.
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De principios del Siglo XVI a mediados del XIX el peso registró una depreciación del
38 %. Después de la Revolución, la amonedación debía adaptarse a las nuevas
circunstancias y necesidades del país. En el pueblo mexicano, desde la época virreinal
se había arraigado el uso de monedas de oro y, principalmente, de plata. Sin
embargo, debido a que se trastocó la equivalencia entre el valor del oro y la plata, el
gobierno tuvo la necesidad de adaptar a los nuevos tiempos la ley monetaria y surgió un
torrente de monedas en las que empezaron a predominar los metales industriales.

El Banco de México inició sus funciones el 1 de septiembre de 1925, gracias a los

esfuerzos presupuestales y de organización del entonces presidente de la República,
Plutarco Elías Calles. Al recién creado Instituto se le otorgaron las facultades exclusivas
de emitir billete y disponer la acuñación de moneda. También se le encargó regular la
circulación monetaria, las tasas de interés y el tipo de cambio. El Banco de México surgió
en momentos de grandes retos y aspiraciones para la economía del país. A la necesidad de
contar con una institución de esa naturaleza, la acompañaban otros imperativos: propiciar el
surgimiento de un nuevo sistema bancario, reactivar el crédito en el país y reconciliar a la
población con el uso del papel moneda, además de los atributos propios de un banco de
emisión, se le otorgaron a su vez facultades para operar como institución ordinaria
de crédito y descuento.

Con el fin de simplificar el manejo de las cantidades en moneda nacional, el 18

de junio de 1992 se estableció que a partir de 1993 se emplearía una nueva unidad
del Sistema Monetario de los Estados Unidos Mexicanos, equivalente a mil pesos de
la unidad anterior. La nueva unidad llevaba el nombre de “Nuevos Pesos” y se
identificaba con el símbolo “N$” o anteponiendo la palabra “Nuevo”. Para cumplir con
la disposición del decreto, el Banco de México emitió durante 1992, una nueva serie
de monedas en denominaciones de 10, 5, 2 y 1 peso y 50, 20, 10 y 5 centavos.

Una vez que el público se adaptó al nuevo régimen monetario, se emitió otra serie de
billetes en “Nuevos Pesos” con nuevos diseños, conocida como familia C. Esta serie se
puso en circulación a partir de octubre de 1994 y estuvo integrada por las
denominaciones de 10, 20, 50, 100, 200 y 500 Nuevos Pesos. Siendo en el 2004
cuando se emitió el billete de 1,000 pesos.
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CONCLUSIÓN

La tendencia del poder adquisitivo exterior del peso es la baja. Hay una relación funcional
directa entre el poder adquisitivo interior y exterior. La baja del poder adquisitivo exterior
del peso se ha debido fundamentalmente a desequilibrios entre la oferta y la demanda de
divisas. Los desequilibrios entre la oferta y demanda de divisas han sido provocados por la
suspensión en la entrada de capitales al país; por exportación de éstos; por un descenso
proporcional mayor de las exportaciones de mercancías que de las importaciones, etc. A su
vez estos factores han tenido por causas la situación política del país, el crecimiento de la
circulación monetaria, el aumento de los precios, etc.

Cuando la balanza de pagos ha registrado saldos desfavorables, y cuando esta situación se

prolongó, ha terminado el régimen monetario existente depreciándose a continuación la
moneda. Además, cabe destacar, que la moneda tiene 3 funciones: como medio de cambio,
medida de valor y como reserva de valor.

Si bien es cierto que le corresponde al Banco de México, en términos de su Ley,

cumplir con la obligación de proveer a nuestro país con el circulante suficiente para
satisfacer su necesidad de dinero. Donde el cálculo de la base monetaria, se hace a partir de
las variables macroeconómicas como Producto Interno Bruto; tasas de interés; e índices
de precios. Por ello, se puede afirmar que, la estabilidad monetaria no puede lograrse
únicamente con el empleo de los fondos en poder del Banco de México.
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Banco de México (2020). Historia de la moneda y del billete en México. 1-40.

Ortíz Mena R. (1942). El Sistema Monetario de México. Revista de Economía y

Estadística, Primera Época, Vol. 4, No. 4 4ºTrimestre, 519-561.