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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS


DESARROLLO Y GESTION INTERCULTURALES
ECONOMÍA DE LOS BIENES CULTURALES

Alumna: Yeret Vega Zarazua. Ana Ximena Pérez Cruz.


Materia: expresión y registros III Profesor: Karla Amozurritia.

“Royal México”
En la presente investigación etnográfica sobre el table dance, ubicado en la Zona Rosa de
la Ciudad de México, de nombre “Royal México” que tiene la característica ser de los más
exclusivos de la zona, nos enfocaremos en la descripción de las dinámicas laborares que se
gestan en el centro de espectáculos.
Decidimos llevar a cabo esta investigación ya que hemos realizado un estudio
previo sobre la prostitución en el metro “Merced”. Lo que despertó nuestro interés sobre el
tema de mercado sexual, que va mas allá de las calles, llegando al punto donde la mujer
misma resignifica su cuerpo y lo pone a la venta. Asimismo pretendemos contrastar los
diferentes contextos en que se desenvuelven estos mercados sexuales.

Hemos podido realizar esta investigación gracias a la relación de apadrinamiento1 que


Yeret, logró con un trabajador del lugar, quien nos condicionó el acceso a entrar mediante
el anonimato de nuestra investigación. Aplicando la observación participante, nos
infiltramos como promotoras de una bebida energética. En cada visita con este nuevo rol
llegábamos regalando las bebidas y así generamos relaciones empáticas dentro del campo.

Introducción

El Royal México pertenece a una cadena de table dance que en sus inicios era conformada
por 15 establecimientos, de los cuales en la actualidad solo se encuentran tres operando:
Farenheit, Cadillac y Royal México. Este último lleva abierto 21 años y al contrario de los
otros dos, donde las mujeres hacen su baile en un tubo la mesa del “antro”. Aquí los bailes
se realizan sobre pasarelas con pequeños tubos en forma de “T”. El establecimiento
mantiene políticas a favor del uso del condón aunque está prohibido el acto sexual dentro
del lugar.

El número aproximado de mujeres que trabajan al día es de 20, pero nos comentan
que son aproximadamente 40 las mujeres contratadas como bailarinas en el Royal México.
Ninguna rebasa los 40 años de edad, la mayoría de ellas son latinoamericanas, destacan las
que vienen de Colombiana, Venezuela, Cuba y México. Las trabajadoras no están sujetas a
ningún horario de trabajo por lo que pueden tomarse la libertad de asistir  a ocuparse los
días y las horas que ellas decidan. Su contratación no implica prestaciones de ley ni
beneficios de un seguro social.
1
Patrocinio que un hombre hace de una iniciativa particular o colectiva para que tenga éxito.
Asistimos al lugar los días martes, miércoles y jueves por la noche. En un principio nuestro
acceso al lugar era más formal, siempre mencionando que veníamos a visitar al gerente por
parte de la bebida energética; después de la tercera visita ya no era necesaria la estricta
formalidad y el personal ya nos ubicaba como las promotoras de la bebida.

Dentro de la investigación nos relacionamos con diferentes empleados del lugar. El primer
informante quien se desempeña como supervisor, Amauri, ha sido el más importante, ya
que fue él quien nos dio el acceso al lugar y algunos datos administrativos. Hemos
mantenido también una cercana relación con nuestra segunda informante, la señora Marta,
encargada del la limpieza, cuidado y vendimia dentro del baño de mujeres, ella nos habló
de la dinámica establecida entre el personal del lugar. También logramos contacto con un
mesero, quien nos atendió en todas nuestras visitas, su nombre es Oscar y fue el informante
que arrojó los datos de precios. Por último la boletera Gaby, quien nos habló de las
relaciones laborales, en especial entre ella y las chicas. Finalmente logramos el
acercamiento con distintas bailarinas quienes nos informaron sobre su situación en general
en el table dance.

Desarrollo.

Son las diez y media de la noche y nos disponemos a entrar a un lugar de fachada muy  alta,
es el Royal México, un table dance ubicado en Génova 59, en la colonia Juárez, dentro de
la Zona Rosa en la ciudad de México. Éste se ubica entre Wendy’s y Burguer King, ambos
restaurantes de comida rápida. Ofrece sus servicios a partir de las dos de la tarde donde el
cliente puede disfrutar del servicio de buffet con un costo de $150 o bien, elegir algún
platillo dentro del menú de comida internacional con el que cuenta el lugar. No hay hora
establecida para el cierre. Afuera del lugar se encuentran aproximadamente cinco hombres
vestidos de traje y con radio en la mano, son de seguridad y con ellos confirmábamos
nuestra visita. La entrada no tiene costo alguno y son ellos los que dan el acceso al público
en general. Subimos cinco escalones para llegar al lobby, con un techo muy alto y un
enorme candelabro colgante de bronce. Ahí nos encontrarnos a una primera hostess 2 quien
practica físico-culturismo, incluso la hemos confundido con un  travesti3 y sólo nos da la
bienvenida. A continuación subimos catorce escalones de madera sobre un pasillo, hasta
encontrarnos con una hostess más. Se nota que es mexicana y es muy atractiva. Usa un
vestido rojo muy corto, ajustado y con lentejuelas doradas en los pechos, nos dirigen a
nuestra mesa correspondiente. El lugar es oscuro, con muchas luces de colores y rayos láser
verdes y otros en forma de corazón. A cada mesa del lugar le corresponde una vela. Son 30
mesas cafés las que rodean las pasarelas, son redondas y con 4 pequeños sillones. En el
perímetro del lugar hay sillones más grandes que se encuentran un escalón más abajo del
resto del lugar y con menos iluminación. Esto le proporciona cierto aire de “privacidad”
pues lo divide una pequeña valla de cristal de medio metro de altura.

La pasarela principal cuenta con tres tubos en forma de “T”, de un metro de altura
aproximadamente: es aquí donde las chicas bailan; también encontramos un tubo completo

2
Mujer que recibe, acompaña y designa una mesa para el cliente
3
Persona de determinado género biológico que utiliza la vestimenta socialmente asignada al género opuesto
en cada una de las dos pasarelas secundarias. En todas las paredes vemos pantallas de
plasma grandes, en total son 8 grandes y 6 más pequeñas que se localizan en el área de bar.
En estas pantallas se proyecta un video erótico con una duración de poco más de minuto y
medio, alternándolo con publicidad de las bebidas Chivas Regal, Martel VSP y Jack Daniel
´s que son vendidas en el lugar; también es proyectado un promocional del bufett del table
dance y en ocasiones se muestra el video musical del tema que la chica está bailando. En
nuestra última visita notamos que las pantallas transmitían la final del partido de futbol
mexicano (Tijuana-Toluca)

Tomando de referencia la vista desde la entrada de derecha a izquierda, primero


encontramos un domo al que le cuelgan tres candelabros largos y de cristal y una tela para
hacer acrobacia aérea4, este domo cubre el área general de mesas y pasarelas hasta topar
con una pared (la más grande del lugar) de vidrio espejeado5, ésta divide al área de privados
(constituida por tres cuartos, con baño, sillones y una mesa), del área general.
De lado izquierdo se encuentra el área de bailes privados, que es un cuarto rectangular de
madera de aproximadamente 60m2. Este cuarto se encuentra dividido en cinco pequeños
gabinetes con un sillón de “kamasutra”6 y una mesa en cada uno. Frente a la entrada se
localiza el área de bar, junto a ésta los baños y la entrada a los “camerinos”. (término
designado por las chicas, al área de tocadores). Allí es donde las bailarinas se visten y se
maquillan antes de salir a trabajar. Hay lockers y el lugar es bastante amplio e iluminado
con enormes espejos.

Observamos que en su mayoría, el personal es del género masculino. Los capitanes usan
siempre traje de vestir con corbata. Los meseros llevan camisa blanca con chaleco gris y
pantalón negro. Los garroteros, andan con camisa blanca, pantalón negro y moño tipo
smoking. Y el personal de la barra porta camisa blanca, pantalón y chaleco negro con
corbata roja.
Anubis quien es bailarina nos informó que el vestuario y el calzado no es impuesto por el
lugar, son ellas mismas las que lo eligen y lo adquieren. Nos comenta la señora Marta que
pueden ganar aproximadamente $5,000 por noche, mientras que Kata, otra bailarina, nos
mencionó que alcanza a ganar $20,000 en una buena noche de viernes.
Las bailarinas pasan una a una a bailar por la pasarela central, pero cuando hay poca
clientela usan las 3 pasarelas para generar movimiento en el lugar. Ellas mismas eligen las
dos canciones que bailarán aunque pueden llegar a bailar 4 piezas. En la primera, sólo
bailan mientras que en la segunda se quitan el vestido y el brassier para quedarse
únicamente en tanga. Conocimos a Cony “la cachonda” quien es la única bailarina del lugar
que queda completamente desnuda al bailar y nos comentó que por ese hecho ella recibe
más dinero que las demás.

La moda establecida entre las chicas, está trazada por el uso de vestidos de coctel
extremadamente cortos y zapatos de  gran plataforma transparente con un tacón de
aproximadamente 20 cm, la lencería que portan varía desde un bikini de una pieza, pasando
4
Es importante mencionar que en ninguna de nuestras visitar vimos desempeñar esta actividad e incluso
nos comentaron tenía tiempo que no la usaban.
5
Nombre que se le da a la clase de vidrio donde por un lado es espejo y del otro lado es una ventana.
6
Sillón diseñado con medidas anatómicas para conseguir las posturas del famoso libro Kamasutra. Su forma pareciera una “m” en
declive, donde una curva de la letra es más pronunciada que la otra.o
por diminutos bikinis de dos piezas y hasta llegar al conjunto tanga/brassier. En su gran
mayoría tienen el cabello largo y pocas se lo recogen. También es habitual verlas a la
mayoría mascando chicle.

La forma en que se maquillan se basa en resaltar bruscamente los ojos y la boca,


generalmente usan pestañas postizas y frecuentemente se retocan los labios, también la
mayoría de ellas lleva uñas postizas o con manicure Es necesario destacar el hecho de que
el total de las bailarinas están intervenidas quirúrgicamente ya sea con un aumento de
pechos, glúteos (los más comunes entre ellas) o cualquier intervención facial.

Se perciben las relaciones personales entre los trabajadores un tanto cortantes y meramente
laborales; sobre todo entre bailarinas y capitanes de meseros, pues nos comentan varias
chicas que ellos abusan de confianza y les roban dinero, pues son ellos quienes llevan el
conteo de los boletos de bailes que ellas venden y quienes se encargan de hacer el corte al
final de la jornada.

También pudimos ubicar a dos mujeres que se encuentran constantemente rondando


alrededor del  área general de pasarelas, ellas se desempeñan como boleteras. Portan un
chaleco y pantalón negro con camisa blanca. En contraste con las bailarinas estas mujeres
lucen hombrunas7 y tienen entre 35 y 40 años de edad, encontramos que las 4 boleteras
contratadas comparten la característica de ser madres solteras. Ellas son las intermediarias
entre el cliente y las bailarinas y son quienes les cobran los boletos para los bailes que les
harán en privado. Gaby nos comentó que sus salarios dependen de la cantidad de boletos
que vendan, de 1 a 19 boletos reciben $10 por cada uno, y a partir de 20 boletos en adelante
reciben $20 por cada uno. Ambas cargan con una cangurera donde guardan el dinero
recibido y los boletos por vender.

Los clientes que frecuentan el lugar, percibimos, pertenecen a un nivel socioeconómico


medio-alto. También encontramos la presencia de clientes extranjeros (principalmente
asiáticos) y parejas heterosexuales; nos comentó la Sra. Marta que parejas homosexuales
femeninas e incluso familias completas visitan el lugar. Al llegar el cliente al
establecimiento, la hostess le asigna una mesa. Ésta lo más cercanamente posible a la
pasarela. Posteriormente, el mesero le muestra la carta de bebidas y el cliente se dispone a
mirar a las chicas que se encuentran bailando mientras que otro grupo de bailarinas lo
rodean para que éste elija a la que será su acompañante. Solicita con la bolete
Una vez solicitada la chica con la boletera, ella lo saluda de beso en la mejillay busca
sentarse en las piernas del cliente dependiendo de la accesibilidad de éste. Si él así no lo
desea, ella opta por sentarse en el descansador de brazos o en otro sillón. A continuación
comienzan a platicar, ella empieza la conversación preguntando los datos básicos al cliente
ovacionándolo a cualquiera de sus respuestas, simultáneamente ella le acaricia el cuello, la
cabeza, juega con las orejas, aprieta las piernas y le toca “la pistola” 8 al cliente. En el caso
del cliente extranjero que no domine el español, ellas juegan retándolos a decir palabras
como “sexo”, “corazón”, “amor”, “orgasmo”, etc.

7
Mujeres de aspecto externo masculino.
8
“la pistola” es la manera en que ellas se refieren al pene del cliente.
Conforme va fluyendo la dinámica, ellas lo seducen mostrándoles sus pechos y se dejan
tocar por ellos, también suelen frotar sus pechos contra el rostro del cliente, y su trasero en
su pene, la labor de las bailarinas es hacer que el cliente les invite una bebida. Ésta tiene un
precio de $256 para cualquier bebida (de esto, la chica recibe $50) excepto la champaña
que cuesta $416 (de esto recibe $100). Una vez que el alcohol ha inhibido al cliente, la
siguiente labor de las bailarinas es convencerlo de que se vayan a que ella le haga uno o
más bailes en privado. Estos bailes tienen un costo de $300, de los cuales ellas ganan $2509.
Pueden ser en cualquiera de las tres áreas, ya sea detrás de la pequeña vaya de cristal donde
se realizan de uno a tres bailes; en donde se encuentra el sillón de “kamasutra” donde se
realizan 4 bailes o más o en el área de cristal espejeado, donde se requiere un consumo
mínimo de una botella de champaña y 10 boletos de bailes. Cabe destacar que la botella
más barata de champaña es de $3,500 y la más cara alcanza casi los $10,000. La labor de
convencimiento para estos privados comienza cuando ella lo invita a que conozca las áreas
antes mencionadas sin ningún compromiso, son acompañados por la boletera, un capitán y
un mesero. Una vez ahí, nos dice Niurka que ellas comienzan a acariciarlos intensamente y
al oído comienzan a decirle “mira papi esta súper bueno, aquí estaremos tu y yo mas
solitos, tranquilos, podrás tocarme todita, me cae que te va a gustar”, una vez que el cliente
accede y ella comienza a bailar, el cliente la toca, la besa y simulan el acto sexual. Al
terminar, se redirigen a su mesa, y la boletera pasa a cobrar al cliente.
Entre canciones y si no se encuentran ocupadas con algún cliente, las bailarinas se sientan
el sillones desocupados y conversan entre ellas sobre cualquier tema en relación al trabajo,
esto nos hizo darnos cuenta que las relaciones entre quienes trabajan allí son meramente
laborales, e incluso la señora Marta nos lo confirmó “no, entre ellas no son casi amigas,
salvo las hermanas que vienen, pero no, se tratan por puro trabajo”

Al fin de la jornada, ellas pasan a la caja a cobrar sus bailes y bebidas, recibiendo el pago
en efectivo y en ocasiones vales, pero existe un conflicto interno ya que los capitanes,
quienes son los encargados de pagarles, suelen omitir bailes y bebidas, provocando choques
continuos entre ellos y las bailarinas, Gaby nos comentó al respecto: “no si para estar aquí
no solo se necesita buen cuerpo, necesitas huevos para pelearte cada noche con esos
cabrones”…

Es curioso comentar que en nuestra última visita tuvimos la oportunidad de entrar al


Farenheit, pues Amauri insistió en que fuéramos a visitarlo antes de llegar al Royal México.
Estando ahí pudimos contrastar los dos establecimientos, el Farenheit es mucho menos
exclusivo que el Royal México; es un espacio mucho más pequeño, solo hay tres tubos en
una pasarela y las bailarinas no están operadas, varias tienen cicatriz de cesárea y con un
poco de sobrepeso. Al ver nuestro asombro en el lugar, Amauri nos comentó “hay lugares
para todos los presupuestos, ve estas, están reculeras a comparación de las mamis del
Royal”

Cony “La cachonda”

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En el caso de Cony “la cachonda” ella recibe $280 por sus bailes privados $80 y $120 por sus bebidas
invitadas, esto por hecho de haber bailado completamente desnuda.
Ana y Yeret nos encontrábamos sentadas observando el lugar, cuando de pronto se acerca
una bailarina quien usaba un brassier negro con un diseño que facilitaba mostrar los pechos,
se paró frente a nosotras, nos mostró sus pechos y se presentó:
Cony: Hola soy Cony “la cachonda”, y ustedes ¿porqué tan solitas?
Yeret: Pues somos de Monster Energy, qué no te tocó?
Cony: Ah! Ustedes son las de la bebida, yo pensé que eran clientas.
Después de la aclaración, dispuso a sentarse y platicar un rato con nosotras. Ahí le
insinuamos que nos interesaba trabajar como bailarinas y le preguntamos:
Ana: Oye? qué se necesita para trabajar aquí?
Cony: Pues primero ser un culo de vieja como yo jaja… luego pues aquí el gerente te hace
casting donde tu bailas en la pasarela y él te ve por las cámaras, ya después te dice si te
quedas o no. Aquí prefieren a las extranjeras, a mi me supieron cubana y luego luego me
dijeron que si, y que si me atrevía a mostrar la cola me pagaban mas…
Continuamos platicando y le preguntamos sobre su vida personal:
Cony: De mi familia nadie sabe que soy teibolera, excepto mi hermana, todos piensan que
soy modelo de trajes de baño…de mis dos hijos el de 14 si sabe y el de 3 vive con su papá.
Yeret: en una noche, ¿cuánto es lo que más te has llevado?
Cony: Uff! No mames! Me lleve ochenta mil varos en una sola noche! Fue con el wey de
los mascabrothers, re perico el wey… También le guste a su chofer, entonces por eso él me
enseño a fingir tomarme una copa y tirarla, porque yo no tomo, yo hago mucho ejercicio y
me cuido; también me enseñó disque a periquerame, me dijo que me metiere papel a la
nariz con un ganchito, le jalara y después me sacara el papel.
Finalmente nuestra entrevista concluyó cuando se fue a sentar con el señor de la mesa de
enfrente, con quien intercambió miradas mientras platicaba con nosotras.

Conclusiones.

Al hacer esta investigación nos dimos cuenta de los diferentes contextos en que se puede
desarrollar la industria sexual. Generalmente se piensa que las prostitutas y las teiboleras
son prácticamente lo mismo, la realidad en este caso es otra: las prostitutas callejeras
ejercen por necesidad o porque son obligadas; en cambio aquí, las mujeres trabajan por
vanidad y acumulación de capital, muchas ellas al ser extranjeras y encontrase en una
situación ilegal en el país, ven en el oficio una camino fácil para mantenerse y llevar una
vida de lujos y de desmadre.

El ambiente que pudimos detectar en el lugar es vacío y superficial, cada vez que
platicábamos con las chicas, al referirse a sus compañeras (os) solían hacer muecas y malas
caras. Por parte del personal masculino pudimos percibir que no respetan la integridad de
las chicas, suelen referirse a ellas despectivamente y las tocan a su disposición.
Cuando hablamos con Cony quien en realidad se llama Nora, vimos que no cuenta con
amistades ni relaciones sinceras con la gente que la rodea, presume de su buen físico, de sus
viajes y parejas, e incluso no pudimos establecer una conversación que fuera mucho más
allá de eso, lo mismo sucedió con las demás bailarinas con quienes tuvimos contacto.

Creemos fue una muy buena investigación de campo, pues hemos entendido la
complejidad que conlleva realizar una etnografía. En un principio al observar que era un
espacio relativamente pequeño con poca población, creímos no sería tan complicado
realizar la etnografía. Conforme se fueron llevando a cabo las visitas, notamos que cada
vez, encuentras nuevos rasgos y van surgiendo nuevos cuestionamientos, incluso hasta la
fecha, nos hemos quedado con algunas dudas como el nombre de la empresa que maneja la
cadena de establecimientos, también nos hemos quedado con ganas de escuchar historias de
vida, etc…

En nuestro caso, al mantenernos anónimas con respecto a nuestra investigación generó una
especial atención y concentración para poder obtener la información que necesitábamos. Al
final de la investigación algunos empleados comenzaron a sospechar de nuestras
intenciones, incluso algunos como la señora Marta, quienes eran en un principio muy
buenos informantes se mostraron un tanto herméticos.

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