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Intensidad y timbre del sonido Arq.

MBEnv(SustDev)
Diego F. Gutiérrez Núñez
¿Qué crees que vamos aprender en la sesión?
El sonido

Desde un punto de vista físico, el sonido es una vibración que se propaga en un medio elástico (sólido,
líquido o gaseoso) , generalmente el aire. Otra definición para el sonido podría ser: es la sensación
producida en el oído por la vibración de las partículas que se desplazan (en forma de onda sonora) a
través de un medio elástico que las propaga.
Para que se produzca un sonido se requiere la existencia de un cuerpo vibrante llamado "foco" (una cuerda
tensa, una varilla, una lengüeta...) y del medio elástico transmisor de esas vibraciones, las cuales se
propagan a su través constituyendo la onda sonora. En ocasiones, para imaginar cómo se produce una
onda de este tipo se utiliza el símil mecánico que aparece representado a continuación.
Como onda, el sonido responde a las siguientes
características:
1. Es una onda mecánica
Las ondas mecánicas no pueden desplazarse en el
vacío, necesitan hacerlo a través de un medio
material (aire, agua, cuerpo sólido).
Además, de que exista un medio material, se
requiere que éste sea elástico. Un medio rígido no
permite la transmisión del sonido, porque no
permite las vibraciones.
La propagación de la perturbación se produce por
la compresión y expansión del medio por el que se
propagan. La elasticidad del medio permite que
cada partícula transmita la perturbación a la
partícula adyacente, dando origen a un movimiento
en cadena.
2. Es una onda longitudinal
El movimiento de las partículas que transporta la onda se
desplaza en la misma dirección de propagación de la
onda.
3. Es una onda esférica
Las ondas sonoras son ondas tridimensionales, es decir, se
desplazan en tres direcciones y sus frentes de ondas son
esferas radiales que salen de la fuente de perturbación en
todas las direcciones. El principio de Huygens afirma que
cada uno de los puntos de un frente de ondas esféricas
puede ser considerado como un nuevo foco emisor de
ondas secundarias también esféricas, que como la
originaria, avanzarán en el sentido de la perturbación con
la misma velocidad y frecuencia que la onda primaria.
Cualidades del sonido

Cualquier sonido sencillo, como una nota musical, puede describirse en su totalidad
especificando tres características de su percepción: el tono, la intensidad y el timbre.
Estas características corresponden exactamente a tres características físicas: la
frecuencia, la amplitud y la composición armónica o forma de onda.
Existe una distinción entre un sonido agradable y el ruido. Un sonido agradable está
producido por vibraciones regulares y periódicas. En cambio, el ruido es un sonido
complejo, una mezcla de diferentes frecuencias o notas sin relación armónica que
dan una sensación confusa, sin entonación determinada.
La altura o tono
Los sonidos musicales son producidos por algunos procesos físicos como por ejemplo, una cuerda vibrando,
el aire en el interior de un instrumento de viento, etc. La característica más fundamental de esos sonidos
es su "elevación" o "altura", o cantidad de veces que vibra por segundo, es decir, su frecuencia. La
frecuencia se mide en Hertz (Hz) o número de oscilaciones o ciclos por segundo. Cuanto mayor sea su
frecuencia, más aguda o "alta" será la nota musical. La altura es una propiedad subjetiva de un sonido
por la que puede compararse con otro en términos de "alto o "bajo". Los sonidos de mayor o menor
frecuencia se denominan respectivamente, agudos o graves; términos relativos, ya que entre los tonos
diferentes uno de ellos será siempre más agudo que el otro y a la inversa.
Mientras que la frecuencia de un sonido, es una definición física cuantitativa, que se puede medir con
aparatos sin una referencia auditiva, la elevación es nuestra evaluación subjetiva de la frecuencia del
sonido. La percepción puede ser diferente en distintas situaciones, así para una frecuencia específica no
siempre tendremos la misma elevación.

La frecuencia de las vibraciones de instrumentos de un mismo tipo es proporcional a sus dimensiones


lineales.
La intensidad

La distancia a la que se puede oír un sonido depende de su intensidad, que es el flujo medio de
energía por unidad de área perpendicular a la dirección de propagación. En el caso de ondas
esféricas que se propagan desde una fuente puntual, la intensidad es inversamente proporcional al
cuadrado de la distancia, suponiendo que no se produzca ninguna pérdida de energía debido a la
viscosidad, la conducción térmica u otros efectos de absorción. Por ejemplo, en un medio
perfectamente homogéneo, un sonido será nueve veces más intenso a una distancia de 100 metros
que a una distancia de 300 metros. En la propagación real del sonido en la atmósfera, los cambios
de propiedades físicas del aire como la temperatura, presión o humedad producen la amortiguación
y dispersión de las ondas sonoras, por lo que generalmente la ley del inverso del cuadrado no se
puede aplicar a las medidas directas de la intensidad del sonido.
El timbre

Si el tono permite diferenciar unos sonidos de otros por su frecuencia, y la intensidad los sonidos fuertes de
los débiles, el timbre completa las posibilidades de variedades del arte musical desde el punto de vista
acústico, porque es la cualidad que permite distinguir los sonidos producidos por los diferentes instrumentos.
Más concretamente, el timbre o forma de onda es la característica que nos permitirá distinguir una nota de
la misma frecuencia e intensidad producida por instrumentos diferentes. La forma de onda viene
determinada por los armónicos, que son una serie de vibraciones subsidiarias que acompañan a una
vibración primaria o fundamental del movimiento ondulatorio (especialmente en los instrumentos musicales).
Normalmente, al hacer vibrar un cuerpo, no obtenemos un sonido puro, sino un sonido compuesto de sonidos
de diferentes frecuencias. A estos se les llama armónicos. La frecuencia de los armónicos, siempre es un
múltiplo de la frecuencia más baja llamada frecuencia fundamental o primer armónico. A medida que las
frecuencias son más altas, los segmentos en vibración son más cortos y los tonos musicales están más
próximos los unos de los otros.
Ruidos molestos y ruidos agradables
Busca ruidos agradables y desagradables
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impulsos-que-me-genera-el-sonido-de-las-personas-
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Ruidos desagradables Científicos de la Universidad de New Castle,


en Inglaterra, realizaron un estudio donde
clasificaron los 11 peores sonidos del mundo.
Los investigadores encontraron que la
amígdala, parte del cerebro que regula las
emociones, puede hacerse cargo de la zona
auditiva cuando las personas escuchan un
sonido que les causa molestia.
Para este experimento los científicos utilizaron
imágenes de resonancia magnética y
observaron la actividad en el cerebro de 16
voluntarios sanos, los cuales escucharon 74
sonidos diferentes. Cada participante calificó
el sonido del más molesto al más agradable.
Aquí pondrás saber cuáles fueron los sonidos
más insoportables.
#11 Las cadenas oxidadas de un columpio
El sonido que producen las cadenas oxidadas de un columpio es considerado como
desagradable y molesto. Ese chillido agudo cuando se mueve altera los nervios y te provoca
piel de gallina.
#10 El constante goteo de agua
Si hay algo molesto es el constante goteo de una canilla. Es un sonido bajo y apagado, pero
inagotable. Tratas de olvidarte y enfocarte en otra cosa, pero cada golpe en el lavabo te
altera más y más.
#9 El micrófono cuando se acopla
Estás muy feliz esperando a que inicie un concierto, hasta que el staff de tu artista favorito
mueve el micrófono y se escucha un sonido que te pone los pelos de punta.
La reacción inmediata es taparse los oídos. ¿Te ha sucedido? Este ruido agudo se lleva el puesto
número 9 entre los participantes.
#8 El llanto de un bebé
No es por ser insensible, pero ¿puede alguien callar a esa criatura? El llanto permanente de un
bebé resultó desgarrador para los voluntarios.
Es algo natural que los pequeños experimentan ya sea por hambre, porque tienen algún
malestar o se hicieron del baño, pero no todos soportan ese sonido.
#7 Una sierra eléctrica
Ese sonido no sólo retumba en tus oídos, también en el lugar donde te encuentres. La sierra
eléctrica toma el puesto número 7, de acuerdo a los voluntarios, pues aunque no es un sonido
agudo sí es muy fuerte.
#6 El grito de una mujer
Para la mayoría de los participantes, el grito de una mujer resulta molesto porque suele ser muy
agudo.
Además de resultar desagradable, generalmente asusta porque es señal de que algo anda mal.
#5 Uñas en el pizarrón
Es muy probable que en tu colegio más de un compañerito hiciera esta pequeña broma, donde
sus uñas rasgaban lentamente el pizarrón del salón. ¡Ah, qué molesto! Todos gritaban e
imploraban que parara. ¿Te acuerdas?
Ese sonido es considerado como uno de los más desagradables, de acuerdo al estudio realizado.
#4 Las cuerdas de un violín desafinado
La música tiene la capacidad de hacernos sentir de mil formas. Su sonido transmite muchas
emociones, pero cuando un instrumento no está afinado, provoca todo lo contrario.
Las cuerdas de un violín o guitarra sin afinar se ubican en el puesto número 4.
#3 Gis en una pizarra
El ruido agudo del gis con el pizarrón puede causarnos escalofríos. La investigación arrojó que
dicho sonido tiene una frecuencia entre los 2,000 y 4,000 Hz a la que el oído es especialmente
sensible, es por eso que resulta desagradable.
#2 Un tenedor rasgando un plato
Al parecer, los cubiertos son molestos para el oído de muchas personas. El rasgar un tenedor en
un plato resulta desagradable y a más de uno le causa piel de gallina. Con tan sólo pensarlo, el
cuerpo se eriza.
#1 Un cuchillo en una botella
¿Quién no ha sentido escalofríos al escuchar un cuchillo rozar una botella? De acuerdo con
los investigadores, este sonido fue el más molesto para el oído de los voluntarios.
10 de los sonidos agradables para nuestro oído

Nuestro oído no sirve simplemente para escuchar, también es importante para el


equilibrio y, además, estimula diferentes zonas del cerebro. Ya desde antes de nacer
estamos rodeados de sonidos, los latidos cardiacos de nuestra madre, su respiración
y, de forma amortiguada, los del mundo exterior. Hay sonidos que podemos oír, otros
que no, sonidos familiares y extraños, sonidos agradables y desagradables, y
sonidos que curan.

Desde el momento en que nacemos, los sonidos y la música que escuchamos pueden
ayudarnos al desarrollo pleno de las capacidades de nuestro cerebro, mejorando la
concentración, la memoria, la atención, así como las habilidades de lenguaje,
matemáticas y nuestra capacidad para resolver problemas.
Los sonidos agradables

Escuchar sonidos agradables nos ayuda a calmar los nervios, y nos proporciona paz
y serenidad. Un sonido agradable puede convertirse en minutos de relax y, según un
estudio presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, 30
minutos diarios contribuyen a fortalecer nuestro corazón. Los sonidos agradables
influyen en el endotelio, que es un tejido que regula el funcionamiento cardiovascular,
y tendremos mejores resultados si lo complementamos con una actividad física
frecuente.
La revista Psych Central realizó una encuesta entre sus lectores para conocer cuales
son los diez sonidos más agradables a nuestro oído:
La lluvia cayendo sobre el tejado
Pisar la nieve
Las olas del mar al romper en la orilla
El murmullo de un arroyo
La risa de un niño o de un ser querido
El viento de finales de verano
El ronroneo de un gato
El canto matinal de los pájaros
El gorgoteo de una botella de vino al servirlo
Efectos perniciosos del ruido
Actualmente la contaminación acústica es uno de los principales
problemas medioambientales y de salud pública a los que se
enfrentan los habitantes de las grandes ciudades del mundo, que
constituyen el 54% de la población mundial. Cuando el sonido se
encuentra por debajo de los 45 dB se considera que estamos en una
zona de bienestar, y a partir de los 55 dB se empiezan a manifestar
los efectos nocivos del ruido. Desde el punto de vista fisiológico, se
produce una contracción de los vasos sanguíneos de la zona precapilar
y se aumenta la resistencia periférica de la circulación de la sangre,
reduciéndose el volumen total impulsado por el corazón a lo largo del
cuerpo. La manifestación de estos efectos depende de la intensidad del
ruido y del tiempo de exposición al mismo. También se suelen producir
excitaciones nerviosas, una reducción de los reflejos y falta de atención.
En ocasiones, y como consecuencia de la fatiga de los huesos del oído,
se producen momentáneas sorderas. Otros síntomas son la hipertensión,
molestias digestivas, problemas respiratorios y vasculares, disfunciones
nerviosas y endocrinas, vértigo, estrés, insomnio e irritabilidad.
¿Sabes por qué los sonidos se puede
transformar en ruidos molestos?
La diferencia entre sonido y ruido es subjetiva.
En función de cómo se perciban los sonidos,
éstos pueden ser agradables o percibirse
como ruidos molestos. En realidad el sonido es
una sensación que reciben los órganos
auditivos, debida a las variaciones en la
presión del aire que se producen en sus
inmediaciones. En el umbral en el que estas
variaciones se producen desde 20 veces por
segundo, es decir 20 Hz, hasta 20.000 Hz,
el sonido es audible y por tanto lo percibe el
oído humano. Un ruido molesto se producen
cuando un sonido, debido a su intensidad y
características nos parece molesto.
¿Cómo se mide el sonido?

Medir el sonido consiste en medir su presión. La presión es fuerza por unidad de superficie, y se puede
expresar en varias unidades: Kp/cm2, atmósferas o Pascales (Pa). De entre ellas el Pascal es la más
adecuada para tratar temas relacionados con la acústica. El oído humano es capar de detectar 20
millonésimas de Pascal (20 Micropascales), y es capaz de soportar la nada desdeñable presión de 20 Pa.
Partiendo de la presión se obtienen los decibelios, que nos permiten medir el sonido en el umbral en el que
es percibido por nuestro oído. De esta forma queda establecido el umbral auditivo entre 0 dB y 120 dB,
punto a partir del cual comienza el umbral del dolor y el sonido afecta seriamente a nuestra salud
auditiva. A continuación se describen los valores admisibles de ruido en las situaciones más frecuentes:
Interior de una vivienda: por el día 40 dB y por la noche 35 dB
Exterior de una vivienda: por el día 65 dB y por la noche 50 dB
Actividad práctica
Actividad práctica

Desarrollo de la Actividad aplicativa 2: Entrega MIÉRCOLES 27 a las 23:55 Hrs.

Lean con detenimiento la separata y material obligatorio del presente módulo.


 Ambiente y generación de ruido: A través de un experimento demuestra la relación entre
distintos ambientes y la generación del ruido.
 Los alumnos deben realizar un informe en el que explican cómo se genera el ruido en
distintos ambientes.
Trabajo en equipos

¿Cómo hago el trabajo práctico?


Critica de desarrollo

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