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INSTALACIONES FRIGORIFICAS
Autor: Ing. Sedrani Alberto – Facultad de Ingeniería Mecánica – UNMdP
2. BALANCE TERMICO
2.1 OBJETIVO
El objetivo de realizar un balance térmico es poder determinar cuál será el calor a extraer
de un ambiente refrigerado, según su aplicación particular de uso, tipo y cantidad de mercadería
a enfriar o congelar, elementos generadores de calor instalados en el ambiente, ingreso de calor
desde el exterior, etc.
Las partes de la carga frigorífica total son: (1) la carga de transmisión, calor transmitido
al espacio refrigerado a través de su superficie, (2) la carga del producto, calor eliminado del
ocasionado por los productos introducidos y mantenidos en el espacio refrigerado, (3) la carga
interna, calor producido por fuentes internas, por ejemplo, iluminación, motores eléctricos y las
personas que trabajan en el local, (4) carga por infiltración de aire, ganancia de calor asociadas
al aire que entra en el espacio refrigerado y (5) la carga del equipo.
Las primeras cuatro partes de la carga constituyen la carga neta de calor, por la cual es
preciso disponer de un sistema frigorífico; la quinta parte consiste en todas las ganancias de
calor creadas por el equipo frigorífico en el proceso de refrigeración, tales como motores de
forzadores de aire de los enfriadores, calor entregado en el proceso de descongelamiento de los
enfriadores y otros.
La ganancia de calor sensible a través de las paredes, del suelo y del techo varía con el
tipo de aislamiento, la construcción, el área de las paredes exteriores, el espesor del aislamiento
y la diferencia de temperaturas entre el espacio refrigerado y el aire ambiente.
El efecto del comportamiento global térmico de las superficies metálicas de los paneles
prefabricados o aislados es despreciable y no debe considerarse al calcular el valor del
coeficiente general de transmisión del calor.
1 1 ei 1
R (1)
K he i hi
Una vez conocido el valor del coeficiente general de transmisión del calor K, la ganancia
de calor se obtiene por la ecuación básica:
Q transmisión K * S * t (2)
Siendo:
𝑄̇ transmisión: Flujo de calor (kW)
K: Coeficiente general de transmisión del calor (kW/m2 ºC)
R: Resistencia térmica por unidad de área (ºCm2/kW)
S: Superficie exterior de la sección (m2)
Dt: Diferencia entre la temperatura del aire exterior y la temperatura del aire interior (ºC)
Si las paredes del ambiente refrigerado están expuestas al sol, a la carga térmica habrá
que añadir un calor adicional, debido a la influencia de la radiación solar. En la práctica, la
temperatura puede ajustarse para compensar el efecto solar. Los valores dados en la siguiente
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tabla son aceptables a lo largo de un período de 24 horas, y al calcular la ganancia de calor por
las paredes, se suman estos incrementos a la temperatura ambiente.
Nota: Añadir estos grados centígrados a la diferencia de temperatura normal para el cálculo del flujo
de calor para compensar el efecto del sol. No utilizarlos en el diseño de sistemas de climatización.
La cantidad de calor a extraer puede calcularse por el conocimiento del tipo de producto,
incluyendo su estado al entrar en el espacio refrigerado, el estado final, la masa, el calor
específico por encima y por debajo de la temperatura de congelación y el calor latente de
solidificación.
Extracción de calor al enfriar desde la temperatura inicial hasta una temperatura final por
encima de la de congelación:
Extracción de calor al enfriar desde la temperatura inicial hasta el punto de congelación del
producto:
Extracción de calor por respiración (frutas y vegetales) desde la temperatura inicial hasta una
temperatura final por encima del punto de congelación del producto:
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Q3 = m Cresp (5)
Q4 = m hf (6)
Extracción de calor para enfriar desde el punto de congelación hasta una temperatura final por
debajo del punto de congelación:
Siendo:
Qproducto = Q(1-2)-3-4: extracción de calor (KJoule)
m: masa del producto (Kg)
Cp1: calor específico del producto por encima del punto de congelación (KJ/KgºC)
Cp2: calor específico del producto por debajo del punto de congelación (KJ/KgºC)
Cresp: calor de respiración (kW/Kg)
hf : calor latente de fusión del producto (KJ/Kg)
t1: temperatura inicial del producto por encima de la de congelación (ºC)
t2: temperatura más baja del producto por encima de la de congelación (ºC)
tf: temperatura de congelación del producto (ºC)
t3: temperatura final del producto por debajo de la de congelación (ºC)
𝑄̇producto = [m (Cp1 (t1 - tf) + hif + Cp2 (tf - t3)) / (3600 n)] + m Cresp (8)
Siendo:
𝑄̇ producto: carga de enfriamiento del producto (kW)
n: período de tiempo disponible para enfriamiento (hs)
En literatura específica se pueden encontrar los calores específicos por debajo y por
encima del punto de solidificación y los calores latentes de fusión de todos los productos. El calor
latente de fusión de un producto está relacionado con su contenido de agua y puede ser estimado
multiplicando el porcentaje de agua del producto (expresado en forma decimal) por el calor
latente de fusión del agua, que es 334 KJ/Kg (80 Kcal/Kg). La mayoría de los productos
alimenticios congelan entre los -3ºC y los -0.5ºC. Si no se conoce con exactitud la temperatura
de congelación, puede suponerse que es de -2.2ºC.
Las frutas y verduras frescas respiran y desprenden calor durante su almacenamiento. Este
calor de respiración varía con el producto y con la temperatura; cuanto más frío está el producto,
menor es el calor de respiración. Estos valores generalmente vienen expresados para los
diferentes productos en función de su temperatura, en W/Kg o Kcal/hKg.
Los cálculos anteriores no consideran el calor ganado cuando es preciso enfriar los
contenedores de los productos introducidos en el espacio refrigerado. Cuando los pallets, las
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cajas y otros materiales de envasado constituyen una parte importante de la masa introducida,
deberá calcularse esta ganancia de calor. El procedimiento es similar al detallado anteriormente,
donde se deberá conocer la masa a enfriar, su calor específico y su temperatura inicial, siendo
la temperatura final similar a la del producto.
En la carga interna de calor debe incluirse toda la energía eléctrica disipada en el espacio
refrigerado (de las luces, los motores, los calentadores y otros equipos).
(1) A utilizar cuando la potencia y las pérdidas eléctricas del motor se disipan en el espacio refrigerado;
motores de accionamiento de ventiladores en enfriadores de circulación forzada.
(2) A utilizar cuando las pérdidas eléctricas del motor se disipan fuera del espacio refrigerado y el
trabajo útil del motor se aplica dentro del espacio refrigerado; bombas de un sistema de circulación de
salmuera o de agua enfriada; motor de ventilador fuera del espacio refrigerado, accionando un ventilador
dentro del espacio refrigerado.
(3) A utilizar cuando las pérdidas eléctricas de calor del motor se disipan dentro del espacio refrigerado
y el trabajo se aplica fuera del mismo; motor en un espacio refrigerado accionando una bomba o un
ventilador fuera del espacio.
Las personas emiten calor en cantidades distintas según la temperatura, el tipo de trabajo,
el vestido, el peso y otros factores. La carga promedio debida a la ocupación de un espacio
refrigerado se muestra en la siguiente tabla. Cuando las personas entran en un espacio
refrigerado por poco tiempo, introducen una cantidad considerable y muy superior a la indicada
en la tabla, por lo que, si el tráfico es muy intenso, hay que hacer los ajustes adecuados.
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𝑄̇infiltración = 𝑞̇ * Dt * Df (9)
Siendo:
𝑄̇infiltración: ganancia horaria promedio de calor en 24 hs u otro período (kW)
𝑞̇ = ganancia frigorífica sensible y latente con flujo completamente establecido (kW)
Dt: factor de apertura temporal de las puertas
Df: factor de flujo de las puertas
Gosney y Olama (1975) dan la siguiente ecuación para el intercambio de aire en el caso
de un flujo completamente establecido:
0,5
i
q 0,221 * A * hi hr * r * 1 * gH * Fm
0,5
(10)
r
Donde:
A: superficie de las puertas (m2)
hi: entalpía del aire de infiltración (KJ/Kg)
hr: entalpía del aire refrigerado (KJ/Kg)
ρi: densidad del aire de infiltración (Kg/m3)
ρr: densidad del aire refrigerado (Kg/m3)
g: aceleración de la gravedad (m/s2)
H: altura de la puerta (m)
Fm: factor de densidad
1, 5
2
Fm 0 , 33
(11)
1 r
i
5
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Siendo:
Dt: proporción decimal del tiempo en que la puerta está abierta durante el período considerado.
P = el número de puertas
Өp = el tiempo de apertura y cierre de la puerta, por tránsito (s)
Өo = el tiempo en que la puerta está abierta (min)
Өd = el período de tiempo diario (u otro) (hs)
La experiencia muestra una cierta constancia entre el tráfico y el tiempo de apertura de una
puerta, lo cual indica que un factor medio, Df = 0,8, es una buena estimación para la mayoría de
los casos de infiltración de aire por intercambio, tanto si la puerta está constantemente abierta,
como si funciona cíclicamente, o en casos intermedios.
Una forma más simplificada de calcular la carga debida a las infiltraciones es considerar
los cambios de aire que se originan en la cámara por día, y luego considerando las condiciones
del aire refrigerado e infiltrado, determinar la carga total.
renov. r i
Qinf iltración Vc * * * h (13)
dia 2
Siendo:
Qinfiltración: carga infiltración por día (kJ)
Vc: volumen de la cámara (m3)
renov/dia: renovaciones de aire en la cámara cada 24 hs (de tabla)
dr: densidad del aire refrigerado (Kg/m3)
di: densidad del aire infiltrado (Kg/m3)
Dh: Diferencia de entalpía del aire infiltrado y refrigerado (KJ/Kg)
Esta carga de calor deberá ser eliminada en el tiempo de enfriamiento deseado (s/día).
A continuación, se muestran dos tablas para determinar las renovaciones de aire por día
en cámaras de diferentes volúmenes internos, para dos tipos de temperaturas internas, por arriba
de 0ºC (mantenimiento de productos frescos) y por debajo de 0ºC (mantenimiento de productos
congelados).
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Para las cámaras que cuenten con antecámara, estos valores se reducen al 50%. Una
antecámara es un ambiente refrigerado que se interpone entre la cámara en sí y el ambiente
exterior. Para uso de servicio pesado, agregar 50% a los valores indicados en tabla. Para
cámaras en plantas que tienen gavetas o troneras, duplicar los valores indicados en tabla, en el
caso de temperaturas por debajo de 0ºC.
En esencia, la carga calorífica del equipo consiste en el calor de los ventiladores, cuando
se utiliza la circulación forzada del aire; el calor del recalentamiento cuando hay control de
humedad (el aire se subenfria y luego se calienta); la ganancia de calor del desescarche cuando
se utiliza éste, y la evaporación de la humedad cuando el proceso de desescarche se expone al
aire refrigerado.
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En general, se aplica un factor de seguridad del 10% sobre la carga calculada total, para
tener en cuenta posibles discrepancias entre los criterios de diseño y el funcionamiento real.
El cálculo de cargas es un proceso inexacto y por ello muchos diseñadores utilizan sus
propias estimaciones sobre los diferentes componentes de carga simplificando los valores
expuestos en este capítulo. El uso de factores de sobredimensionado es algunas veces
interesante puesto que a pesar de suponer un mayor costo inicial puede hacer frente a
inesperadas ampliaciones a nuevos productos y/o procesos.
Debe de comprobarse que los valores calculados no difieren en exceso de los números
índice mostrados en la siguiente tabla. Los números índice más pequeños se aplican a
volúmenes más grandes (2.500 m3 o más, por ejemplo), y viceversa.
Referencias: