Violencia social, otra crisis durante la pandemia

Luna G.Rodriguez Urbano

201924977
Programa año cero, universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia

Grupo 106, Competencias Comunicativas II

Lic. Rosa A. Briceño Bautista

15 de junio de 2020
 Violencia social, otra crisis durante la pandemia

La pandemia del covid-19 es la crisis de salud mundial que está cambiando por completo

la vida de todos, los países se encontraron en una carrera contra este virus por salvar vidas y

prevenir la propagación del mismo, además las personas se vieron en el desafío de aislarse por

un tiempo de sus rutinas, trabajos, amigos y familia para salvaguardar sus vidas. Este virus llego´

a Colombia el 6 de marzo y no solo ha sido una crisis de salud mundial, sino una ola de sucesos

que han puesto en evidencia la violencia en la que ha estado sumergida este país por muchos

años, puesto que La violencia social no cesa ni en tiempos de pandemia y las muertes por el

covid-19 no son las únicas que se viven durante el confinamiento, dado que según un informe de

la Fundación Ideas para la Paz (Indep’az) y el observatorio colombiano de las mujeres, entre

enero y mayo de este año aumentaron los asesinatos a líderes sociales, los desplazamientos

forzados y los feminicidios.

La sangre en Colombia es la tinta con que se dibuja el país y el covid-19 no es lo único

que está asesinando a la población. Las comunidades del Cauca, Antioquia y Nariño son los

territorios más afectados, donde además de tener miedo por el covid-19, temen por querer

defender sus derechos y hacer cumplir las normas, los asesinatos no paran ni en tiempos de

pandemia y la violencia impacta comunidades indígenas, líderes sociales y agricultores de

Colombia aumentando cada día más la tasa de mortalidad. Los grupos armados y criminales que

luchan por el control de las economías ilícitas, aprovechan las medidas de confinamiento dadas

por el gobierno para evitar la propagación del covid-19 y buscan apoderarse de los territorios,

matando, amenazando, callando y acribillando a todo aquel que les haga frente y tenga la

voluntad de ser la voz del pueblo. Según Indep’az desde la firma del acuerdo de paz con las farc

en el 2016 hasta el 2019 han muerto 756 líderes sociales, de los cuales 245 fueron asesinados en
el 2019. El 2020 puede convertirse en el año más aterrador para los líderes sociales, ya que en el

tiempo transcurrido del año (5 meses) han sido asesinados 100 de ellos de acuerdo al registro de

Indepaz, más de un tercio que los asesinados en el 2019.

La muerte de los líderes sociales se ha vuelto un panorama del diario vivir, donde el

Estado es indiferente y tiene oídos sordos, ya que no brinda las garantías necesarias para la

seguridad de los líderes sociales, por el contrario, envía a las fuerzas militares a los territorios

más afectados por esta problemática a combatir a los grupos criminales, pero no a ayudar a los

campesinos, dado que en medio de ellos queda la población, vulnerable como siempre. El

problema aquí, es que el estado no interviene investigando y castigando a los causantes de estas

muertes, sino que su intervención es militar, donde se deja a un lado la defensa de los derechos

de las comunidades.

Por otra parte, es desalentador ver como las mujeres aun en este tiempo de zozobra y

miedo siguen siendo un blanco vulnerable del machismo, según Maissa Hubbert coordinadora de

programas de Justicia para las Mujeres “las estrategias de distanciamiento social, si bien son

necesarias, tienen un efecto desproporcionado sobre las mujeres” y se evidencia cuando vemos

que el feminicidio en este tiempo de confinamiento no cesa, sino aumenta, puesto que el hogar

que resulta ser el lugar más seguro para protegerse del contagio del covid-19 en este momento de

pandemia, se ha convertido en un verdadero infierno para las mujeres que son víctimas de

maltrato físico y psicológico por parte de sus parejas, ya que no se sienten seguras y temen todos

los días por sus vidas. En Colombia el último reporte de atención en línea demuestra que las

denuncias por violencia hacia las mujeres han aumentado en un 80% además, se han registrado

33 feminicidios durante la pandemia. Los hombres en el afán de tener poder sobre las mujeres y
resolver los conflictos que se dan en casa optan por recurrir a la fuerza, la amenaza, la agresión

emocional y física, para contralarlas, hasta tal punto de asesinarlas.

Este uno de los tantos testimonio que llegan a través de correos electrónicos de mujeres

víctimas de maltrato, “Mi única forma de escapar de la realidad en la que vivo es irme al trabajo.

Por eso, cuando anunciaron la cuarentena, ya sabía lo que me esperaba. Yo he intentado

denunciar, pero él me tiene amenazada con los niños... la gente no entiende...”.  Las mujeres son

muy vulnerables en esta época, ya que el aislamiento, el silencio y las dificultades de acceder a la

justicia, no les permiten denunciar, por lo cual no tienen un respaldo que las acoja y proteja.

Además, cuando lo logran no sienten empatía con lo que les está sucediendo, dado que la

atención del estado está concentrada en el virus.

Es una controversia de principios, ya que para estos tiempos difíciles la única solución de

hacer más llevadera la situación es estar unidos en familia, donde la solidaridad, el respeto y la

paciencia son parte fundamental para sobrellevar las dificultades que se presentan.

Para finalizar, el panorama en el que se desenvuelve Colombia por estos tiempos es

aterrador, ya que produce un efecto perturbador y amenazante en la población. La sed de poder,

superioridad, violencia y daño superan el miedo que causa el número creciente de fallecidos por

covid-19 y se logra evidenciar en los dos casos anteriormente nombrados que la indiferencia por

parte del Estado es inmensa y es necesario que en Colombia las autoridades investiguen y

castiguen a los autores, porque nada hace más daño que la impunidad. Colombia necesita

liderazgo, solidaridad y empatía para vencer al coronavirus y creo, al igual que Jaime Garzón,

que es posible un cambio, que es posible vivir en paz, que así parezca una utopía podemos tener

un mejor país.
REFERENCIAS

Puentes, J.(2020). No es ni mitad de año y ya van 100 líderes sociales asesinados en 2020().

Editorial pacifista.

Montoya, A. (2020). La verdadera pandemia en la ciudad es la violencia contra la mujer ().

Editorial el tiempo

Martin, N, Mayorga C, (2020). Una curva que no se aplana: la violencia de género durante la

cuarentena( ). Editorial pacifista

Paola, A.(2020). La premisa “quédate en casa” les cuesta la vida a mujeres de Colombia.

Editorial Cinep

Santiago, A. (2020). Repunte de feminicidios durante la pandemia y el aislamiento a causa del

Covid-1. Editorial france24