DIOS DE VIVOS Y NO DE MUERTOS Lc.

20:38
I. DÍA DE MUERTOS
A. A. ORÍGEN DEL DIÁ DE MUERTOS
1. El culto a los muertos se practica desde la época prehispánica, desde el
1800 A.C. Creían en mundo superior para los vivos y otro inferior para
los muertos.
2. • Muchos esperan recibir las almas de sus difuntos el 1 y 2 de
Noviembre.
B. OFRENDA A LOS MUERTOS
1. A los muertos se les otorgaban ofrendas que les proporcionaban fuerza
para su tránsito al inframundo; alimentos, agua, sal, juguetes para los
niños y el perro en el que viajarían por el río Chiconahuapan
2. Al ofrendar se está estableciendo un sometimiento a lo que se ofrece
C. SIGNIFICADO DEL ALTAR:
1. El altar es un lugar de Reconocimiento. Génesis. 12:7; Exodo.24:4
2. Un lugar para ofrecer Génesis. 22:22
3. Un lugar para intimidad Romanos 12:1
4. Es una señal de pacto Génesis. 8:20
II. ORIGEN DE HALLOWEEN
A. Celtas (300 A.C.) habitaron en Islas Británicas. Escandinava Europa
Occidental, los dirigían sus sacerdotes que eran conocidos como druidas
1. Los Druidas eran satanistas que alababan y servían al dios de la muerte
Samhain
2. Controlaban la vida de las personas a través de un mecanismo de
temor
B. DULCE O TRAVESURA
1. Origen: Sacerdotes Druidas.
2. • Casa por casa demandaban comidas extrañas.
3. • Esa comida era ofrecida en el festival de la muerte.
4. • Conjuraban una maldición demoníaca sobre el hogar que se negara.
C. LA CALABAZA
1. • Los Druidas llevaban consigo un gran nabo hueco con un rostro
esculpido.
2. • Representaba el espíritu demoníaco que les daba poder y
conocimiento.
3. • Este espíritu es llamado un espíritu familiar.
 4. Cuando esta práctica vino a América, los nabos no eran conocidos, y
se les cambió por una calabaza.
D. LA PALABRA HALLOWEEN
1. • Cuando el emperador Constantino decretó el cristianismo, muchos
ritos paganos se introdujeron. En el siglo IX el Papa declaro el 1 de
Noviembre como el día de todos los santos, en honor a todos los
martirizados.
2. • La iglesia católica decidió “santificar” algunas costumbres paganas.
3. La misa se llamaba en inglés "All hallow mass" (Misa de todos los
santos).
4. Se convirtió "All Hallowed Eve" (Víspera de todos los santos) y
finalmente Halloween.
REFLEXIÓN
A. Pero ¿Todo es tan bueno cómo se ve? ¿Podemos vencer a la muerte con
reírnos de ella, comiendo una calavera de dulce y haciéndole poemas y
canciones? ¿Puede un inocente disfraz enfrentar a nuestros hijos con lo
malo y oculto?
III. ENSEÑANZA BÍBLICA
A. Cuando Dios estableció leyes para su pueblo, claramente ordenó no
consultar a los muertos ni participar en ocultismo, diciendo: "No sea
hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien
practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador,
ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es
abominación para con El Señor cualquiera que hace estas cosas...",
Deuteronomio 18:10
B. NUESTRA POSICIÓN COMO CRISTIANOS
1. La fiesta de Halloween, es una fiesta dedicada a Satanás y a sus
demonios y no consideramos que sea una opción para divertimos. "Y no
participéis en las obras de las tinieblas, sino más bien reprendedla"
Efesios 5:11
2. No estamos en contra de recordar a nuestros seres queridos que ya
fallecieron, pero si en el ofrecerles culto.
3. Creemos que lo importante no son las expresiones externas de la fiesta,
sino lo que se esconde tras ellas: la adoración a la muerte y Satanás.
4. Sostenemos firmemente que el único digno de adoración es JESÚS, el
hijo de Dios.
5. "Para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están
en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese
que Jesucristo es el Señor para la gloria de Dios Padre". Filipenses
2:10-11.
CONCLUSION:
1. No debemos de ofrecer culto a los muertos
2. Las animas de los muertos no regresan. Hebreos 9:27; Lc. 16:19-31
3. No pueden participar en lo que está debajo del sol Eclesiastés. 9:6
4. No ofrezcamos ofrenda a los demonios. Lv. 17:7; Dt. 32:17; Sal. 106:37; 1ª Cor.
10:20
5. La adoración a la muerte no es bíblico Isaías 28:15 y 18
6. Levantemos un altar sí, pero al Dios vivo y poderoso.