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Yo soy quetzalcóatl dios de la vida y la sabiduría.

Fui uno de los dioses prehispánicas más importantes, mi culto estuvo presente en la
civilización olmeca, tolteca, teotihuacán, maya y mexica.

Mi nombre viene del náhuatl “Quetzal”, ave de hermoso plumaje y “Coatl” serpiente, lo
que hace la “Serpiente Emplumada”.

Represento la dualidad humana: la «serpiente» es cuerpo físico con sus limitaciones y las
«plumas» son los principios espirituales del conocimiento, cultura, filosofía, y fertilidad.

Cuenta mi leyenda que cuando la creación del mundo había terminado, los dioses y
humanos vivían en armonía, todos eran felices, a excepción de mi que veía con enojo
como los humanos eran subyugados por los demás dioses.

Decidí entonces convertirme en humano y bajar a la tierra .Al llegar al mundo de los
humanos vagué por muchas tierras hasta llegar a Tollan, justo cuando llegué se estaba
ofreciendo un sacrificio en honor de mi hermano Tezcatlipoca, me enfurecí por esta
barbaridad y detuve la ejecución.   

 El sacerdote que realizaba el sacrificio, gritó furioso, mientras el cielo se tornaba gris con
nubes que anunciaban una gran tormenta, rayos y truenos. yo los calmé y les dije que
mientras yo estuviera en Tollan la ciudad florecería como ninguna.
Fui conocido por crear un reino de paz, sabiduría y proliferación artística. Así como por
prohibir los sacrificios humanos de los seguidores de Tezcatlipoca, los cuales los suplantó
por ofrendas como la liberación de aves y mariposas en lo alto de los templos.

Ahora les contaré como desaparecí…


Yo era un rey sacerdote de Tula, y nunca ofrecía sacrificios humanos, solo de plantas o
pequeños animales. En cualquier caso, Tezcatlipoca (mi hermano) estaba descontento y
quería deshacerse de mi. Tezcatlipoca logró entonces emborracharme, lo que me llevó a
cometer incesto con mi propia hermana, Quetzalpétatl. Al despertar, estaba tan
avergonzado de mi mismo que caminé sin rumbo hasta alcanzar la costa atlántica y zarpé
hacia el este en una balsa hecha de serpientes.

Pero durante la historia me han olvidado y mi nombre nunca será recordado por el
hombre.(exepto los mexicanos)

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