ICALN. N°. 1804, casilla electrónica N°. 58008, abogado de SIXTO CHAVEZ RODRIGUEZ, en la investigación que se me sigue por la comisión del presunto delito de Tráfico de billetes y monedas falsas, en agravio del Estado, y siendo en la actualidad mi condición jurídica la de preso preventivo, a usted con respeto digo:
Que en virtud de la garantía constitucional que tiene todo
ciudadano, a pedir, solicitar, amparo jurisdiccional, y premunido del derecho a la presunción de inocencia, mientras no se demuestre lo contrario, mediante sentencia firme y consentida; solicito en virtud del art. 283° numeral 1), 2), 3), 4), y la jurisprudencia suprema, nacional y regional, así como teniendo como base también el art. 255° numeral 2) y la jurisprudencia suprema, nacional y regional, en el extremo que abarca dicho artículo y su aplicación en la realidad y a cada caso; que en su oportunidad y aplicado el derecho en forma justa, declarar FUNDADO el pedido de variación de prisión preventiva por una medida menos gravosa como es la comparecencia con restricciones, o de detención domiciliaria, al haber desaparecido el peligro procesal en sus dos vertientes, peligro de fuga y peligro de obstaculización, debido a la declaratoria del estado de emergencia por la propagación incontrolable de la pandemia producida por el COVID-19, y estando mi persona en potencial riesgo de contagio por tener en la actualidad 65 años de edad, es que solicito se varíe mi condición jurídica en base a los siguientes fundamentos de hecho y de derecho que a continuación paso a exponer:
FUNDAMENTOS DEL PEDIDO:
I.- EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE LA PRESUNCION DE INOCENCIA EN LA PRISIÓN PREVENTIVA, EN SALVAGUARADA DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES Y LA PROPORCIONALIDAD DE LA MISMA, MIENTRAS SU CONDENA NO ESTÉ FIRME: a) Principio de Presunción de Inocencia: El presente pedido se efectúa a la luz de la CONSTITUCION NACIONAL y de los TRATADOS DE DERECHOS HUMANOS que, conforme al art. 55° de la mencionada Norma Fundamental, en vigor forman parte del derecho nacional.
Mi defendido como toda otras personas que se encuentren dentro
de un proceso judicial deben ser tratados como inocentes, la obligación de respetar este status jurídico surge del artículo 2° literal e) de la Constitución Nacional y de diversos Instrumentos Internacionales, “Declaración Universal de Derechos Humanos Art. 11.1”; Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos Art. 14.2”; Convención Americana de Derechos Humanos Art. 8.2; Reglas mínimas para el tratamiento de los Reclusos art. 84.2, y requiere que toda persona sea considerada inocente hasta tanto no se obtenga el pronunciamiento de una sentencia condenatoria firme que destruya el estado jurídico de inocencia que el ordenamiento jurídico reconoce a todos los seres humanos. La Corte IDH ha señalado que en la presunción de inocencia subyace el propósito de las garantías judiciales, al afirmar la idea de que una persona es inocente hasta que su culpabilidad sea demostrada. En igual sentido, se ha dicho que esta garantía exige que una persona no pueda ser condenada mientras no exista prueba plena de su responsabilidad penal, debiendo ser absuelta en caso de que la prueba sea incompleta o insuficiente. El principio de presunción de inocencia exige, entre otros requisitos, que el imputado sea tratado como inocente durante la sustanciación del proceso, cosa que aquí no ha ocurrido. Pero que luce mucho menos justa si se atiende al hecho de que el 02 de enero del 2020 se dictó mandato de prisión preventiva, mediante resolución N° 02 emitida por el señor Juez del Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria de Cajamarca, que resolvió declarar fundado en parte el requerimiento de prisión preventiva realizado por el representante del Ministerio Público y otorgó prisión preventiva por el plazo de 24 meses a mi persona, es por está razón que el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial, mediante la Resolución Administrativa N° 000121-2020-CE-PJ, resuelve en su parte resolutiva artículo 1° establecer que la suspensión de plazos procesales y administrativos, dispuestos por el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial como consecuencia del estado de emergencia nacional, no se aplica para el computo del plazo de: a) las detenciones preliminares y prisiones preventivas, emitidas por los órganos jurisdiccionales a nivel nacional. Por lo que siendo ello así a la fecha de presentación del pedido d cese de prisión preventiva me encuentro 5 meses en condición jurídica de preso preventivo.
b) Prisión preventiva como excepción. Finalidad. Requisitos: La
detención preventiva, como medida cautelar, sólo puede tener fines procesales. El carácter procesal de la detención significa que la coerción (la privación de libertad) se utiliza para garantizar "la correcta averiguación de la verdad y la actuación de la ley penal”. No se puede recurrir a la detención preventiva para obtener alguna de las finalidades propias de la pena (v. gr., impedir que el imputado cometa un nuevo delito). La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), cuya jurisprudencia –según lo entendió la Corte Suprema - debe servir de guía para la interpretación de la Convención Americana sobre Derechos Humanos ha consagrado, dentro del contexto general de los instrumentos internacionales vigentes, que la prisión preventiva es una medida cautelar, no punitiva, y que a su vez no debe constituir la regla general, como expresamente lo consagra el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (art. 9°.3), pues de lo contrario se estaría privando de la libertad a personas cuya responsabilidad criminal no ha sido establecida, en violación del principio de inocencia (8.2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y 9.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos) (conf. caso Suárez Rosero, sentencia del 12 de noviembre de 1997, párr. 77) .La prisión preventiva está limitada por los principios de legalidad, presunción de inocencia, necesidad y proporcionalidad, indispensables en una sociedad democrática.
Constituye la medida más severa que se puede imponer al
imputado, y por ello debe aplicarse excepcionalmente. La regla debe ser la libertad del procesado mientras se resuelve acerca de su responsabilidad penal. Manifestando que “ La limitación de la libertad personal durante el proceso motivada en el reproche o en la repulsa social de ciertas conductas – por más aberrantes que puedan ser como remedio tendiente a combatir el auge a la lesión de determinados bienes jurídicos, importa alterar arbitrariamente los ámbitos propios de las distintas esferas constitucionales para el ejercicio de prerrogativas legisferantes y desvirtúa la naturaleza cautelar de la prisión preventiva al convertirla en una verdadera pena anticipada, pues la aspiración social de que todos los culpables reciban pena presupone que se haya establecido previamente esa calidad” . Y es claramente este el sentido que este tribunal está dándole a la prisión preventiva de mis defendidos, debido a que es ostensible su inadecuación con la finalidad propia del instituto que es “asegurar que el acusado no se evadirá o interferirá de otra manera la investigación. La Comisión subraya que la detención preventiva es una medida excepcional y que se aplica solamente en los casos en que haya una sospecha razonable de que el acusado podrá evadir la justicia, obstaculizar la investigación intimidando a los testigos, o destruir evidencia”. Conductas que en mi caso no se ha realizado en respeto a la averiguación de la verdad y a la finalidad del proceso.
c) Incongruencia de la prisión preventiva: En reiteradas
jurisprudencias la Corte IDH ha establecido que las autoridades nacionales deben ofrecer los fundamentos suficientes que permitan conocer los motivos por los cuales se mantiene la restricción de la libertad compatibles con el artículo 7.3 de la Convención Americana, debe estar fundada en la necesidad de asegurar que el detenido no impedirá el desarrollo eficiente de las investigaciones ni eludirá la acción de la justicia. Las características personales del supuesto autor, y la gravedad del delito que se le imputa no son, por sí mismos, justificación suficiente de la prisión preventiva. A pesar de todo lo expuesto por los tribunales Nacionales e Internacionales, se resolvió ordenar la prisión preventiva por 24 meses (auto del 02 de enero de 2020, contenido en la resolución N°02) exponiendo como motivo “que existen elementos suficientes y graves para sostener como probable la participación del encartado en los ilícitos investigados, en el grado indicado”. Es decir que, la privación de libertad de mi defendido en el presente proceso, no ha residido en el fundamento de peligro de fuga o de que se obstaculice la averiguación de la verdad, único fundamento en el que puede residir una medida de coerción en el Derecho procesal penal, sino en un verdadero anticipo de pena. Siendo, este motivo – probable culpabilidad -, completamente errado para resolver una medida que restringe tantos derechos de mis protegidos, considero que en el caso de autos se ha utilizado la coerción procesal como un fin en sí mismo y no como medio para lograr el fin (sentido del instituto), es decir, se lo ha utilizado como una sanción, como un inconstitucional anticipo de pena. Degenerando, aún más, esta medida tan discutida y violando las garantías Judiciales del debido proceso.
d) Requisitos formales para su procedencia: Inexistencia de
peligro de fuga. El instituto de la excarcelación no resulta un beneficio concedido buenamente por el Juez o el Legislador, sino que se trata de un derecho derivado del estado de Inocencia del que gozan todos los habitantes. Y a pesar de considerar ilegal e infundada la prisión preventiva que se le ha aplicado a mi defendido, pido se tenga presente que el mismo no intentará eludir la acción de la justicia, puesto que su condición de vulnerabilidad social y de salubridad, forman un cuadro de impedimentos suficientes para acreditar que medios potenciales de escapar o ausentarse de la provincia de Cajamarca. Su pertenencia a un sector popular de la sociedad no sólo le ha impedido contar con una Defensa Técnica adecuada y comprometida con su causa, sino que, además, le ha afectado su derecho de RESISTIR fundadamente – basándose en la inexistencia de cuadro probatorio en su contra- una prisión preventiva que registra un alto grado de improbanza derivada de hechos que a la postre no se configuran como un alto grado de probabilidad o sospecha fuerte de la comisión de los hechos punible, el cual lo trataremos en el próximo fundamento.
Conforme el otro fin de esta medida cautelar de PRISIÓN
PREVENTIVA, el de “evitar que el acusado pueda obstaculizar la investigación preliminar intimidando a los testigos, o destruir evidencia”, quiero resaltar que la etapa de investigación del proceso se está llevando a cabo con toda lealtad por parte de mi persona, habiéndose recogido todas las pruebas sin que exista un sesgo de obstaculización o destrucción de las mismas, u evadir mi deber de colaborar con los actos de investigación y procesales son deberes que el suscrito ha realizado y cumplirá con la mayor diligencia posible en procura de la averiguación de la verdad, por lo que tanto el fin de eludir la condena del Poder Judicial, como de obstaculizar el proceso quedan completamente desacreditados, desvirtuando los motivos por los cuales pueda seguir en prisión hasta tanto haya condena firme. Por lo expuesto, solicito se deje sin efecto de forma inmediata la prisión preventiva y se varíe a una medida coercitiva menos gravosa como es la comparecencia con restricciones, para lo cual solicito imponerme una caución en suma de dinero o cantidad que su despacho crea conveniente, proporcional y razonable, y así permita mi libertad hasta tanto recaiga sentencia firme en su proceso penal.
II.- EL TRIBUNAL NO TIENE PRUEBAS PARA CONDENAR A MI
DEFENDIDO POR CRIMEN ORGANIZADO O ACCESORIAMENTE POR TRAFICO DE BILLETES Y/O MONEDAS FALSAS Y NUNCA LAS TUVO TAMPOCO PARA TENERLO PRIVADO DE LA LIBERTAD: A todo evento, y para el caso en que considere dignísimo magistrado, evaluar el pedido de cese de prisión preventiva, en el extremo de que subsistan a la fecha los graves y fundados elementos de convicción que hagan prever que el investigados haya cometido el delito, pido tenga presente que la “causa probable” de culpabilidad en base a la cual se decidió la medida cautelar de prisión preventiva, no existe. Es más, la investigación contiene graves y serias irregularidades que además de contener una falta de sindicación objetiva acerca de la autoría o la participación de mi defendido no está plenamente explicitada, ya que para el presunto delito de crimen organizado en el transcurso de la investigación, el Ministerio Público no ha corroborado hasta la fecha lo que expresa el Acuerdo Plenario 1-2017-SPN del I Pleno Jurisdiccional 2017 de la Sala Penal Nacional y Juzgados Penales Nacionales, el cual establece pautas interpretativas para los órganos jurisdiccionales del referido subsistema de administración de justicia penal, señalando como elementos de la estructura de la organización criminal los siguientes: elemento personal, elemento temporal, elemento teleológico, elemento funcional, y elemento estructural. Por otra parte, el Acuerdo Plenario N° 08-2019/CIJ-116, Sobre diferencias hermenéuticas entre organización criminal, y delitos cometidos por integrantes de una organización criminal. Establece como doctrina legal vinculante, los criterios expuestos en los fundamentos jurídicos del 17°. al 26°. del presente acuerdo plenario invocado. En efecto en el fundamento 18° dice “Crimen organizado, conjunto de actividades delictivas que son:…v) que usan la violencia (directa o indirecta) y la corrupción (en diferentes niveles como medios de operación, no solo en las altas esferas de poder, sino también en aquellas esferas burocráticas necesarias para sus actividades delictivas)”. Extremo que no ha podido probar el Ministerio Público.
III.-LA INEXISTENCIA DEL PELIGRO DE FUGA O DE
OBSTACULIZACION A LA INVESTIGACIÓN O AL PROCESO (PELIGRO PROCESAL), VERIFICACION DE LA PERDIDA DE LA PRISION PRVENTIVA, SITUACIÓN DE LOS INTERNOS EN EL ESTABLECIMIENTO PENITNCIRIO DE CAJAMARCA, IMPOSIBILIDAD DEL INPE DE GARANTIZAR LAS MINIMAS CONDICIONES DE SALUBRIDAD A LOS INTERNOS Y LA CONSECUENTE VULNRACIÓN DEL DERECHO A LA SALUD Y A LA VIDA: Análisis en base al auto de vista expedido por la Sala Penal Mixta de Emergencia de la Corte Superior de Justicia de Cajamarca.
a) Sobre el peligro de fuga: Sobre la alta probabilidad o
sospecha fuerte de que mi persona como investigado, me sustraiga a los fines de la investigación en cuanto a la averiguación de la verdad, o a los fines del proceso, en el expediente ut supra la Sala Penal Mixta de Emergencia de Cajamarca, expresa en el CONSIDERANDO VI. ANALISIS JURIDICO FACTICO: Peligro procesal de Sixto Chávez Alvarado, Fundamento 104; “A fin de acreditar la inexistencia de un peligro de fuga, la defensa del imputado ha presentado un certificado domiciliario expedido por notario público, con ello pretende acreditar su arraigo domiciliario, asimismo ha presentado una escritura pública de compra venta de un bien ubicado en el Jr. Vista Alegre N° 236, bien que lo sujetaría a esta ciudad y constancia de trabajo como ayudante de camión”. Fundamento 105; “Sin embargo este colegiado, en coincidencia con el juez a quo, considera que el domicilio y la propiedad de un bien por si solos no sustentan que el imputado se someterá voluntariamente al proceso, pues no se ha acreditado un trabajo permanente (pues tiene la edad para trabajar de manera activa), no tiene hijos que dependan de él, y su esposa la señora Lidia Alvarado Sánchez también es parte del presente proceso. Atendiendo al supuesto tiempo de trabajo para la misma entidad no ha adjuntado otro medio de prueba idóneo que corrobore su empleo”. Fundamento 106; “El delito materia de investigación es un delito muy grave ya que afecta tanto al estado, como a las personas como a las personas que son afectadas con la entrega de billetes falsos, más aún si conforme a los informes de investigación realizada por la policía y a las escuchas telefónicas sus víctimas resultan ser de bajo nivel económico (aun cuando no se haya determinado agraviados directos). A ello se suma la gravedad de la pena, pues conforme se ha señalada precedentemente ésta tendrá la calidad de efectiva, situación que sin duda influirá en su decisión de evadir la justicia”. Por lo que se
hace necesario señor magistrado considerar que a la fecha
han transcurrido 5 meses y más, tiempo en el cual mi patrocinado se encuentran en prisión preventiva él cuan cuenta en la actualidad con 65 años de edad. -El gobierno nacional mediante Decreto de Urgencia N° 044- 2020-PCM, decretó el ESTADO DE EMERGENCIA NACIONAL, debido a la propagación incontrolable de la pandemia del COVID-19, estado que ha sido ampliado hasta el día d presentación del presente escrito, siendo que al no descubrirse una vacuna o un medicamento, que cure la enfermedad ocasionada por el COVID-19, tendremos que convivir con esta enfermedad la cual es altamente contagiosa, altamente letal, y altamente mortal. -Mediante Decreto Supremo N° 013-2018-JUS, el cual prorroga la emergencia dispuesta por el Decreto Legislativo N° 1325, para la restructuración del Sistema Nacional Penitenciario, y el Instituto Nacional Penitenciario, por el periodo de 24 más adicionales. -La Ley General de Salud N° 26842. Expresan: Que una de las poblaciones más vulnerables potencialmente es la población penitenciaria, aunado a mi persona cuenta con 65 años de edad, lo que hace más ACCESIBLE para que el COVID-19, pueda ser letal en mi organismo, dada que las personas de la tercera edad son población vulnerable, ya qu la mayor tasa de mortandad por el coronavirus se encuentra en las personas de la tercera edad. El peligro de fuga es el riesgo de la huida del imputado, su no sometimiento al proceso frustraría su desarrollo, así como la ejecución de la probable pena. La emergencia sanitaria mundial hace imposible (improbable) e razonable seguir considerando que el imputado genera peligro de fuga, en la realidad actual no presenta riesgo de huir, de salir del país, incluso de Cajamarca. Es un hecho público el estado de emergencia sanitaria declarado por el presidente de la República, con el que se cerraron las fronteras terrestres, aéreas, marítimas y fluviales, así como se ha prohibido el traslado o transporte interprovincial de personas. Es un hecho público que el gobierno ha ordenado como única medida para prevenir el contagio del coronavirus el aislamiento social obligatorio en los domicilios (hogares) de las personas, en las condiciones establecidas por el Ministerio de Salud. Por lo tanto, ha desaparecido en su totalidad el riesgo de fuga establecido en la resolución de prisión preventiva. Además, no nos pronunciamos sobre la desaparición del peligro procesal, porque en el auto de vista no se hace referencia a este extremo. En consecuencia, mi condición de Anciano de la tercera edad (65 años), y mi condición de vulnerable por la pandemia, solicito variar la prisión preventiva, por una medida cautelar coercitiva menos gravosa, como es la comparecencia con restricciones, para lo cual estoy en condición de pagar una caución en la cantidad que su judicatura crea conveniente; o la detención domiciliaria, dada mi avanzada edad.
OTROSI DIGO: Mi abogado defensor al letrado que firma el
presente escrito, señalo mi domicilio procesal en la casilla electrónica N°. 58008, teléfono N° 941610735.