Está en la página 1de 4

CARACTERIZACIÓN BIOLÓGICA DEL SUELO, MUNICÍPIO

DE LA CAPILLA, BOYACÁ

Tunja
Boyacá
Colombia
2019
1. INTRODUCCIÓN

El suelo está compuesto por horizontes superficiales o externos de las


rocas, que están influenciados por factores como: el clima, material
parental, organismos, relieve y tiempo, que, por acción del agua, el aire y
las distintas clases de organismos generan procesos como ganancias,
perdidas, translocaciones y transformaciones lo que da como resultado
epipedones y endopedones que caracterizan el suelo del lugar. En este
sentido la fracción más dinámica del horizonte A la constituye la materia
orgánica de la cual se alimentan los organismos que lo habitan y como
consecuencia de esto se generan cambios en las propiedades físicas
químicas y biológicas del mismo. La fauna del suelo constituye el 10 % de
esta biota, y comprende aquellos organismos que pasan toda o una parte de
su vida en el interior del suelo, sobre la superficie inmediata de este, en la
hojarasca superficial, en los troncos caídos en descomposición y en otros
ambientes anexos llamados suelos suspendidos. De acuerdo a la talla del
animal adulto y su forma de vida, existe una clasificación primaria de la
fauna del suelo que la divide en microfauna, mesofauna y macrofauna.
La microfauna contempla organismos acuáticos menores de 0,2 mm de
longitud y 0,1 mm de diámetro, que pueden ser hallados en el agua
contenida entre las partículas del suelo, e incluye a los nematodos,
protozoos y rotíferos. La mesofauna agrupa a individuos microscópicos, de
4 mm de longitud y entre 0,2 a 2 mm de diámetro. Vive en la hojarasca y/o
en el interior del suelo y entre sus integrantes se pueden señalar a los ácaros
del suelo, colémbolos, proturos, dipluros, psocópteros, tisanópteros o trips,
paurópodos, sínfilos y enquitreidos.
Por otra parte, la macrofauna está compuesta por invertebrados que poseen
una longitud igual o mayor de 10 mm y un ancho de cuerpo mayor de 2
mm, por lo que se pueden detectar a simple vista. Vive también dentro del
suelo o inmediatamente sobre él y reúne esencialmente las lombrices de
tierra (Annelida: Oligochaeta), las termitas (Insecta: Isoptera) y las
hormigas (Insecta: Hymenoptera: Formicidae) que intervienen en la
formación de agregados lo que influyen en la porosidad e infiltración,
además intervienen en la trituración de los restos vegetales como (e.g.
Coleóptera, Diplópoda, Isópoda, Gastropoda) y algunos funcionan como
depredadores de animales vivos de la macrofauna y la mesofauna edáfica
(e.g. Araneae, Chilópoda) (Cabrera, Robaina, Ponce de León, 2011.
Las comunidades de la macrofauna varían en su composición, abundancia y
diversidad, en dependencia del estado de perturbación del suelo causado
por el cambio de uso de la tierra, por lo que se consideran como
bioindicadores de calidad o alteración ambiental (Pashanasi, 2001; Lavelle,
Senapati y Barros, 2003; Ruiz, 2007; Velásquez et al., 2009; Cabrera,
Robaina, Ponce de León, 2011b).
De otra parte una fracción de los organismos del suelo lo constituyen la
meso y microbiota del suelo integrada principalmente por bacteria,
hongos y actinomicetos que también cumplan funciones relacionadas con
la conservación de las propiedades del mismo, como consecuencia de su
actividad en los ciclos biogeoquímicos del Carbono Nitrógeno Fosforo y
Azufre, lo que favorece la disponibilidad de nutrientes para las plantas
además de mantener el equilibrio del ecosistema.

También podría gustarte