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Dramaturgia de todos los tiempos.

27/1/15

Trescientos millones. ROBERTO ARLT.


Máster en
Gestión
Cultural
UIC Barcelona

Alumnado de 60
nacionalidades.
Visitas especiales.
547 Alumni.
Profesorado en
activo.

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EL ESTADO DE SITIO. Albert Camus.

EL ESTADO DE SITIO Albert Camus


PERSONAJES LA PESTE LA SECRETARIA
NADA VICTORIA EL JUEZ LA MUJER DEL
JUEZ DIEGO ...

Trescientos millones

ROBERTO ARLT
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CELEBRACIÓN MANDARINA POESÍA

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Siendo reportero policial del diario Crítica, en el


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año
1927, una mañana del mes de septiembre tuve que
1 4 8 7 1 5 5
hacer una crónica del suicidio de una sirvienta 1 4 8 7 1 5 5
española, Etiquetas
soltera, de veinte años de edad, que se mató !Breve Breve monólogo de la Diva Diva Autor
Benjamín Gavarre
arrojándose bajo las ruedas de un tranvía que !LA NARCOTIENDITA DE LA ESQUINA DE
BENJAMÍN GAVARRE
pasaba !YO EL PEOR DE LOS DRAGONES

frente a la puerta de la casa donde trabajaba, a las ¡Filus! de Benjamín Gavarre


.
cinco de la madrugada. ' Entremés de LA MOZA RETOBADA De
Benjamín Gavarre
'El Infierno esa casa Autor Benjamín Gavarre
Llegué al lugar del hecho cuando el cuerpo 'El peor de los dragones Autor Benjamín
Gavarre
despedazado 'Filus

había sido retirado de allí. Posiblemente no le 'ISABELA ADOLESCENTE GORDA


CENICIENTA Y ASÍ Comedia Tres p
Femeninos
hubiera dado ninguna importancia al suceso (en 'PsiQUE Aut Benjamín Gavarre
aquella época veía cadáveres casi todos los días) si "Amor Tal

investigaciones "LA FIESTA DE LOS DISFRACES


"Personas Inestables
que efectué posteriormente en la casa *Delirio 23

de la suicida no me hubieran proporcionado dos /Unidad habitacional Lupita de Benjamín


GAVARRE

detalles /VÍA látexde Benjamín Gavarre


##MQuince Benjamín Gavarre
singulares. #ESPAGUETI LIPSTICK
#VÍA látexde Benjamín Gavarre
=GENTE DE PRIMERA De Benjamín Gavarre
Me manifestó la dueña de casa que la noche en
=SALA DE ESPERA
que la sirvienta maduró su suicidio, la criada no ACASSUSO De Rafael Spregelburd

durmió. Adamov Arthur EL PROFESOR TARANNE


ADIÓS ROBINSON JULIO CORTÁZAR.
Aguilera Malta Demetrio DIENTES BLANCOS
Ailyn Morera DICEN LAS PAREDES Costa
Rica

Un examen ocular de la cama de la criada permitió AILYN MORERA Folie à Deux COSTA RICA
Albarello Pablo La fluidez de la vida
establecer que la sirvienta no se había acostado, y
aLBEE eDWARD DELICADO EQUILIBRIO
se Albee Edward QUIEN LE TEME A VIRGINIA
WOOLF
suponía con todo fundamento que pasó la noche ALBEE TRES MUJERES ALTAS

sentada ALEJANDRO ACOSTA El Diario de José


Toledo CIUDAD DE MÉXICO

en su baúl de inmigrante. (Hacía un año que había ALEJANDRO BRANDES BURUNDI obra para
cuatro actores y un pingüino BUENOS AIRES
llegado de España.) Al salir la criada a la calle para ALEJANDRO BRANDES De acá no se va
nadie BUENOS AIRES ARGENTINA

arrojarse bajo el tranvía se olvidó de apagar la luz. Alfred Jarry UBÚ Rey
Allen Woody DIOS
Allen Woody Drácula

La suma de estos detalles simples me produjo una ALONSO ENRIQUE Dos tandas por un boleto
ALTARES DE TEATRO: PATRICIA RIVAS
impresión profunda.
Amor tal Benjamín Gavarre
AMORTAL Gavarre

Durante meses y meses caminé teniendo ante los ANA ISTARÚ Hombres en escabeche Costa
Rica

ojos el espectáculo de una pobre muchacha triste ANA ISTARÚ Baby Boom en el Paraíso
COSTA RICA

que, sentada a la orilla de un baúl, en un cuartucho ANDRÉS CARO BERTA David que no fue
Brenda Montevideo URUGUAY
de paredes encaladas, piensa en su destino sin ANDRÉS CARO BERTA El Orgasmo de María
MONTEVIDEO
esperanza, Andrés Caro Berta EL PEOR DÍA DE FREUD

al amarillo resplandor de una lamparita de ANDRÉS CARO BERTA La Linyera


ANDRÉS CARO BERTA Sade El Divino
veinticinco bujías. Marqués URUGUAY
Anónimo AUTO DE LOS REYES MAGOS
Anónimo medieval Auto de las vírgenes locas
De esa obsesión, que llegó a tener caracteres dolo y las vírgenes prudentes.
Anónimo OLLANTAY
rosos, nació esta obra que, posiblemente nunca hu Anónimo EDAD MEDIA EL JUEGO DE ADÄN

biera escrito de no haber mediado Leónidas Anónimo El Güegüense


Anónimo FARSA DEL LICENCIADO
Barletta. PATHELIN
Anónimo Rabinal Achí
Cuando Barletta organizó el Teatro del Pueblo me
Anouilh JEAN BECKET o EL HONOR DE
pidió que colaborara con él escribiendo una obra pa DIOS
Anouilh JEAN orquesta de señoritas
ra su empresa, en la cual no creía nadie, incluso yo; Anouilh JEAN ANTÍGONA

pero, a pesar de todo, un día me puse a trabaja r en Anouilh JEAN MEDEA


anouilh señoritas
ella sin la menor esperanza de éxito. AÑOS DIFICILES Roberto Cossa

El estreno, las representaciones (alcanzan a trein Aristófanes Asamblea de mujeres


Aristófanes LA PAZ
ta, lo cual es un fenómeno en un teatro de arte como
Aristófanes LAS AVES
el de Barletta), me han convencido de que si técnica Aristófanes LAS AVISPAS

mente no he construido una obra perfecta, la dosis Aristófanes Las nubes


Aristófanes Las ranas
de ARISTOFANES Las Tesmoforias

humanidad y piedad que hay en ella llega al público Aristófanes LISíSTRATA


ARISTÓFANES Los Acarnienses
y lo conmueve por la pureza de su intención. ARISTÓFANES Los Caballeros
Aristófanes PLUTO
Arlt Roberto SAVERIO EL CRUEL Argentina
Roberto Arlt Arlt RobertoLA ISLA DESIERTA Argentina
ARLT ROBERTO trescientos millones
ARRABAL BESTIALIDAD ERÓTICA
ARRABAL El arquitecto y el emperador de
Asiria
ARRABAL FERNANDO EL GRAN
Prólogo CEREMONIAL
ARRABAL FERNANDO FANDO Y LIS
ARRABAL FERNANDO PICNIC
Arrabal Pic
ARTURO VEGA REPTILES LEÓN
Zona astral donde la imaginación de los hombres GUANAJUATO MÉXICO

fabrica Así que pasen cinco años García Lorca


Augusto Boal El arco iris del deseo
Augusto Boal TEATRO DEL OPRIMIDO
con líneas de fuerzas los fantasmas que los acosan Juegos para actores y no actores

o recrean en sus sueños. Auto de las locas y vírgenes prudentes


Auto-da-fe Tragedia en un acto de Tennessee
Williams
Bang bang maestro
Marco de caverna, más allá del cual se distingue bARLOW pATRICK los 39 escalones

una llanura de cobre bloqueada por montañas. Beckett


BECKETT El expulsado
Cambiantes Beckett Samuel PLAY
luces violetas le prestan al panorama la se Beckett ACTO SIN PALABRAS

quedad del desierto y la magia irreal de los BECKETT GODOT


Beckett Samuel AH LOS DÍAS FELICES
escenarios Beckett SAMUEL ESPERANDO A GODOT

de fantasmagoría. Beckett Samuel Fin de Partida


BECKETT Samuel La última cinta de Krapp
Conciliábulo de fantasmas pueriles e ingenuos. Benavente Jacinto LOS INTERESES
CREADOS
Rocambole: En la estampa que lo presentan los Benedetti Mario PEDRO Y EL CAPITÁN
grabados de madera de las primeras ediciones BENJAMÍN GAVARRE Breve Monólogo de la
Diva Diva
Maucci BENJAMÍN GAVARRE DELIRIO 23 FARSA
ABSURDA EN DOS DÍAS
que aparecieron en Barcelona. Tubo gris, jaquel Benjamín Gavarre La fiesta de los disfraces

negro, Benjamín Gavarre PERSONAS INESTABLES


Cdde México
pantalón a cuadros endrinos y blancos, prendido Bergman Ingmar SONATA DE OTOÑO

sobre el empeine del pie por trabillas que cruzan bERkoff Steven DECADENCIA
Bertuccio Marcelo DOLOROSA LUCHA DE
bajo la suela del calzado. Látigo de cochero de MARÍA POR EVITAR QUE LA SERPIENTE LE
MUERDA LA COLA

punto Bertuccio Marcelo Señora esposa niña y joven


desde lejos Obra para escuchar Marcelo
bajo el sobaco. Esta arbitrariedad explica la Bertuccio
Bertuccio Marcelo Tres miradas sobre un
imaginación paraguas
Bertuccio Marcelo VALS 3
del ilustrador de cromos populares en Barcelona. Bertuccio Marcelo VíCTIMAS Sorprendidas en
un ruego inútil 2da versión
El picaro puede ser confundido con un empleado
BOCADILLOS BAJO TIERRA de CARLOS
de seguros, de pompas fúnebres o de asuntos TALANCON
BOJÓRQUEZ DAMIÁN La reina del maíz Una
judiciales. Representa cuarenta años. Crítica Pochoclera ARGENTINA
Brecht Bertolt ANTÍGONA
Brecht Bertolt LA ÓPERA los tres CENTAVOS
Hombre Cúbico: Tronco de caldera cúbica con Brecht Bertolt UN HOMBRE ES UN HOMBRE
Brecht Bertolt Terror y miseria del tercer reich
dos paralelogramos por piernas. Un triángulo
Brecht LOS SIETE PECADOS CAPITALES
equilátero DEL PEQUEÑO BURGUÉS Bertolt Brecht
Brecht Bertolt EL MENDIGO O EL PERRO
sustituye la cabeza. Carece de brazos, como MUERTO
Brecht Bertolt GALILEO GALILEI
todas las estructuras que idean los inventores de Brecht Bertolt LA BODA DE LOS PEQUEÑOS
homúnculos BURGUESES
Brecht Bertolt La honesta persona de Se-
y hombres mecánicos. Chuan
Brecht Bertolt LA RESISTIBLE ASCENSIÓN
DE ARTURO UI
Brecht Bertolt Las cinco dificultades para decir
la verdad

ESCENA ÚNICA Brecht Bertolt MADRE CORAJE Y SUS HIJOS


BRISA DE LUNA: DE HOMERO RIOS
Brook Peter EL ESPACIO VACÍO

Rocambole (entrando por el costado derecho) Büchner Georg Woyzeck


Buenaventura ENRIQUE LA ORGÍA
Anochece. Buenaventura A la diestra
Buenaventura Enrique EL ENCIERRO
Buenaventura Enrique EL PRESIDENTE
Buenaventura Enrique EN LA DIESTRA DE
DIOS PADRE Colombia
Hombre Cúbico (ídem por el lado izquierdo): Yo no Buenaventura Enrique La estación

me BUERO LUIS Ella 24... Yo 42!


BUERO LUIS el hombre que quiso desnacer
puedo sentar. Mí padre se olvidó de ponerme
Buero Luis LA COMEDIA DEL DESOCUPADO
bisagras Calderón de la Barca EL ALCALDE DE
ZALAMEA
en las piernas. Calderón de la Barca El gran teatro del mundo
Calderón de la Barca eL MÁGICO
PRODIGIOSO

Rocambole (sentándose en un peñasco): Llega la Calderón de la Barca EL MÉDICO DE SU


HONRA
hora Calderón de la Barca EL PRÍNCIPE
CONSTANTE
de trabajar. Calderón de la Barca LA DAMA DUENDE
Calderón de la Barca LA HIJA DEL AIRE
primera y segunda partes
Reina Bizantina: En días como hoy, cuando era Calderón de la Barca LA VIDA ES SUEÑO
Calígula ALBERT CAMUS
persona
Calvino Italo El hombre que llamaba a Teresa
humana, me dolía el hígado. ¿Quién diría que CAMUS Albert Calígula

pasaría luego a ser constructora de sueños? CAMUS Albert EL ESTADO DE SITIO


CAMUS Albert EL MALENTENDIDO
Camus Albert LA PESTE

Rocambole: No; los constructores son ellos, los Camus Albert LOS JUSTOS
Carballido Emilio FOTOGRAFÍA EN LA PLAYA
hombres. Carballido Emilio ORINOCO
Carballido Emilio Rosa de dos aromas
CARLO GOLDONI EL SERVIDOR DE DOS
Galán (incorporándose al grupo al tiempo que se PATRONES

limpia Cartografía Teatral: introducción al Teatro


Comparado Jorge Dubatti

los zapatos con un golpe de pañuelo): Somos los Casanova Marcos CALZONUDO Y PUNTO!!
Comedia hombre y mujer

fantasmas Casona Alejandro LA DAMA DEL ALBA


Casona Alejandro LOS ÁRBOLES MUEREN
de sus sueños. DE PIE
Casona Prohibido suicidarse en primavera
Celebration Harold Pinter
Demonio (que se ha sentado silenciosamente): cenizas harold pinter

¡Exprésese Cervantes Saavedra Miguel EL JUEZ DE LOS


DIVORCIOS

con más propiedad! Somos los protagonistas de Cervantes Saavedra Miguel EL RETABLO DE
LAS MARAVILLAS
sus sueños. Cervantes Saavedra Miguel LA CUEVA DE
SALAMANCA
Cervantes Saavedra Miguel La GUARDA
CUIDADOSA
Rocambole: No está bien esa definición. Cervantes Saavedra MiguelEL VIEJO
¡Representamos CELOSO
CHEJOV Anton El aniversario
los deseos del hombre! CHEJOV Anton El jardín de los cerezos
Chejov Anton LA GAVIOTA
CHEJOV Anton LAS TRES HERMANAS
Demonio: Existimos sin forma, como nubes. De Chejov Anton Platónov

pronto el deseo de un hombre nos atrapa y nos CHEJOV Anton Sobre el daño que hace el
tabaco
imprime CHEJOV Anton Tío Vania
Chejov Anton UN TRÁGICO A PESAR SUYO
su forma.
Chejov EL OSO
chicas católicas Casey Kurtti
Hombre Cúbico: Estoy confundido. CHRISTIE AGATHA obra LA RATONERA
CHRISTIE AGATHA LA RATONERA
ciudades invisibles Calvino

Reina Bizantina: Usted nos confunde, CLARA ANICH Algo de Amor Monólogo Clara
Anich de Argentina
CLARA ANICH De aArgentina Tanto que
querias De Clara Anich
Demonio: Yo me entiendo. CLITEMNESTRA O EL CRIMEN
MARGUERITE YOURCENAR
CLOTILDE EN SU CASA JORGE
IBARGÜENGOITIA
Galán: ¿Y qué nos importa que usted se entienda, si Cocteau Jean Los padres terribles
no lo entendemos nosotros? Cocteau Jean monólogo femenino LA VOZ
HUMANA
Commedia dellarte EL MARIDO SCENARI
Cañamazo o Canovaccio
Hombre Cúbico: A ver..., déjenme a mí, que soy de Confesiones Agustín de Hipona

origen puramente científico. Copi CACHAFAZ


Copi LA PIRÁMIDE
Copi eVITA pERÓN Y Las viejas travestís
Reina Bizantina: Ahora me explico su forma Corneille EL CID
CORTÁZAR JULIO ADIÓS Robinson
grotesca.
COSAS DE PAPÁ Y MAMÁ ALFONSO PASO
Cossa La Nona
creación Colectiva Buenaventura
CRÍMENES DEL CORAZÓN BETH HENLEY
Galán: ¡No es correcto eso, señora! Es lo mismo que DAMIAN BOJÓRQUEZ Piojos Damián
Bojórquez Argentina
si el Hombre Cúbico le dijera a usted que es un DANIEL DILLON Estudio de escena De Daniel
Dillon Dramaturgo de Lima Perú
mamarracho.
DARIO FO LA MUJER SOLA
Dario Fo NO HAY LADRON QUE POR BIEN
NO VENGA
Daulte Javier DOS mujeres

Hombre Cúbico: Nosotros somos ejes de fuerza. DE ALARCÓN Juan Ruiz el ANTICRISTO
DE ALARCÓN Juan Ruiz EL EXAMEN DE
MARIDOS
DE ALARCÓN Juan Ruiz LA AMISTAD
Rocambole: Eso... ejes de fuerza como este mango CASTIGADA

de látigo... DE ALARCÓN JUAN Ruiz LA CULPA BUSCA


LA PENA
DE ALARCÓN JUAN RUIZ La cveva de
Salamanca
Hombre Cúbico: En torno de estos ejes, como en DE ALARCÓN JUAN Ruiz LA VERDAD
SOSPECHOSA
torno DE ALARCÓN Juan Ruiz LAS PAREDES
OYEN
de ese mango de látigo, se acumulan los sueños de DE ALARCÓN Juan Ruiz LOS PECHOS
PRIVILEGIADOS
los hombres. De manera que el eje se conserva
DE BENJAMIN GAVARRE
independiente de Benjamín Gavarre

de su forma, como el vino del barril... DE CECCO SERGIO El reñidero


De Molina Tirso CELOS CON CELOS SE
CURAN
De Molina Tirso DON GIL DE LAS CALZAS
Galán: Muy bien por el hombre caldera... VERDES
De Molina Tirso El burlador de Sevilla
de Molina Tirso El condenado por desconfiado
Hombre Cúbico: Si yo tuviera brazos le daría a usted De Molina Tirso El vergonzoso en palacio

una lección. DE repente El Ultimo Verano TENNESSEE


WILLIAMS
De Rojas Fernando LA CELESTINA
De Santos OBRAS BREVES DE TEATRO
Rocambole: Eso les pasa a ustedes, que son CON POCOS PERSONAJES CUADROS DE
AMOR Y HUMOR AL FRESCO
aprendices DE TORO SEMIOTICA DEL TEATRO
de fantasmas, pero yo soy Rocambole desde que DEL PINO AMADO EL ZAPATO SUCIO
Del Pino Amado pENUMBRA EN EL NOVENO
tengo uso de inteligencia. CUARTO
Del Pino Amado TREN HACIA LA DICHA
DEL PINO AMADO TRIÁNGULO

Demonio: ¡Qué gracia!... También a usted lo fabricó DELIRIO 23 DE BENJAMÍN GAVARRE SILVA
DELIRIO 23 GAVA
la imaginación de un novelista.
DELIRIO 23 GAVARRE
Desayuno en Tiffany's Truman Capote

Galán: De cualquier modo, el hombre es esclavo de DIáLOGOS Federico García Lorca


Diario de un loco Nikolai Gogol
su sueño... Es decir, esclavo nuestro. Así, yo, antes de Díaz Gutiérrez Jorge El lugar donde mueren
los mamíferos
hacer este papel de galán, hice el de pirata DÍAZ Gutiérrez JORGE El cepillo de dientes
CHILE
melancólico
Díaz Jorge Las cloacas del paraíso
y degollador. Fue un chico que después se suicidó Díaz Jorge NADIE ES PROFETA EN SU
ESPEJO
porque la hija de la carbonera, que era su vecina, no DICCIONARIO ABREVIADO DE LA
MITOLOGÍA GRIEGA
quería escaparse con él en una barca de oro. Así DIDEROT DENIS La paradoja del comediante

decía Discépolo Armando y De Rosas Rafael


Mustafá
el chico. disfraz 87
DISFRAZ de Benjamín Gavarre
DIVORCIADAS
Rocambole: Si empezamos a contar lo que dijeron DOCE HOMBRES SIN PIEDAD Reginald
Rose
los chicos y lo que cada uno ha sido, es historia de DOLOR DE PUBIS de LEONEL
GIACOMETTO
nunca acabar...
Dorfman Ariel LA MUERTE Y LA DONCELLA
DRAGO ALBERTO monólogo YO ME MANDO
A MUDAR
Hombre Cúbico: ¿Y a mí no me encuentran absurdo? Drago Alberto Se me murió entre los brazos

¿A que no adivinan quién me imaginó así? Dürrenmatt Friedrich LA VISITA DE LA VIEJA


DAMA
Dürrenmatt Friedrich LOS FÍSICOS
Egon Wolff LOS INVASORES
Reina Bizantina: Algún calderero loco.
Egon Wolff. Los Invasores. Chile.
Hombre Cúbico: Me ofende que me trate así. No, no Eichelbaum Samuel UN GUAPO DEL 900

es un calderero mi padre, no, sino un geómetra. EJERCICIOS TEATRALES


El Diablo Blanco WEBSTER John
Quiere inventar un aparato de buzo que resista todas El abanico de Lady Windermere Oscar Wilde

las presiones submarinas. Ayer, para no ir más lejos, El Acompañamiento Carlos Gorostiza Teatro
abierto argentino

me convirtió la cabeza en una elíptica, después en el EL AMOR DEL FONDO de Daniel Serrano
El arte de perder y El mago negro de Patricia
paralelogramo de fuerzas, hasta que por fin me largó Rivas

con este triángulo por cráneo. EL CEPILLO DE DIENTES De Jorge Díaz


Gutiérrez Chile
EL CEPILLO DE DIENTES GUION TEATRAL
El cerco de Leningrado. Sanchis Sinisterra.
Demonio: Es desagradable semejante calabaza. El Chico de la última fila Juan Mayorga

Hombre Cúbico: ¡Y vaya a saber en qué termina...! El enemigo del pueblo IBSEN
El Espejo 2 Emilio Carballido
Galán: Realmente uno hace todos los papeles.
El juego de las palomas de Sonia Daniel
Reina Bizantina: Igual que los artistas... El médico a palos Molière

Demonio: Que un día son porteros... EL MÉTODO DE LEE STRASBERG


El Método de Lee Strasberg. Stanislavski y
después... Karina Mauro
El pelícano STRINDBERG
Rocambole: Y otro generales... el peor de los dragones
El Presidente enrique buenaventura
EL PÚBLICO Federico García Lorca
Galán: O emperadores... EL SEÑOR GALINDEZ EDUARDO
PAVLOVSKY
El teatro en la Edad Media Jorge Dubatti
EL TERCER FAUSTO De Salvador Novo
Hombre Cúbico: Sin embargo, da gusto oírse EL ZOO DE CRISTAL

hablar... En LA DIESTRA DE PERALTA Federico


Medina Cano ensayo fragmento
en la diestra de dios padre

Reina Bizantina: Si por mí fuera me pasaría el santo EN LA TEBAIDA de VERONICA


MALDONADO

día y la noche charlando. Ensler Eve Monólogos de la vagina


ERDGEIST LULU FRANK WEDEKIND
Esquilo SUPLICANTES

Galán (a la Reina Bizantina,): Usted como de ESQUILO La orestiada


Esquilo LOS SIETE CONTRA TEBAS
costumbre...
Esquilo PROMETEO ENCADENADO
Esquilo. Los persas.

Reina Bizantina: Sí, a visitarlo a mi corredor de Estorino Abelardo EL ROBO DEL COCHINO
Eurípides HÉCUBA
sardinas... Eurípides El Cíclope
Eurípides ELECTRA
Eurípides Hipólito
Galán: ¡Oh, el hombre... el hombre!... Eurípides Las Bacantes
EURÍPIDES LAS TROYANAS
EURÍPIDES Medea
Reina Bizantina: Camina todo el día. Sus botines EVANGÉLICAS Y VEGETARIANAS Comedia
parecen para tres actrices
FARSA DEL ABOGADO PATHELIN
los del Judío Errante. Con su sombrero se podría Farsa infantil de la cabeza del dragón Ramón
María del Valle Inclán
instalar una graseria. Y este desarrapado, que Fassbinder Rainer LAS AMARGAS
LÁGRIMAS DE PETRA von KANT
tiembla cuando el jefe le hace una observación, por Federico García Lorca Así que pasen cinco
la años
Federico García Lorca Así que pasen cinco
noche sueña que es emperador de Bizancio. años y El Público Comentario de textos
Benjamín Gavarre
FERNANDO BRIONES PEDAGOGÍA
tEATRAL pOPULAR fREIRE CHEJOV
Rocambole: Debe ser entretenido. BRIONES FERNANDO TESIS MAESTRIA
UNAM.
FERNANDO ZABALA EL LLOVEDOR DE
TIROLESA CÓRDOBA ARGENTINA
Reina Bizantina: Es triste y fantástico. Unas veces se FERNANDO ZABALA GIL TRABAJADOR
CÓRDOBA ARGENTINA
imagina que le hace la guerra a los reyes de Europa, Feydeau George LA PULGA EN LA OREJA

otras que... FILOMENA MARTURANO de EDUARDO DE


FILIPPO
Fo Darío Y fRANCA rAME gORDURA ES
HERMOSURA
Demonio (al Galán,): ¿Y usted continúa con esa Fo Darío Misterio Bufo

chica?... Fo Darío MUERTE ACCIDENTAL DE UN


ANARQUISTA
Fo Darío NO TENGO NO PAGO o Aquí no
paga nadie

Reina Bizantina: ¿Y qué se hizo de la jorobadita?... Fo Darío Pareja abierta


Fo Darío Pareja abierta II
FONTANARROSA Roberto EL MUNDO HA
Galán: La visito todas las noches. VIVIDO EQUIVOCADO
Ford John LÁSTIMA QUE SEA PUTA
Friedrich Nietzche El origen de la tragedia

Rocambole: ¿Es cierto que es muy contrahecha? GABRIEL FERNANDEZ CHAPO: DESDE
ARGENTINA: CROMOSOMA GALIA:
MONOLOGO
GABRIEL FERNANDEZ CHAPO: DESDE
Galán: Horrible y mala. Además de ser fea, es ARGENTINA: LA CARRERA
Gambaro GRISELDA ATANDO CABOS
Gambaro GRISELDA Decir SÍ Argentina
perversa. GAMBARO GRISELDA TEATRO BREVE
Tiene los dedos callosos y una verruga en la nariz. Gambaro GRISELDA Antígona furiosa

A pesar de su facha, estoy obligado a fingirme deses Gambaro Griselda PEDIR DEMASIADO
García Lorca Amor de don Perlimplín con
peradamente enamorado, al punto que no queda Belisa en su jardín
García Lorca ASÍ QUE PASEN CINCO AÑOS
conforme García Lorca BODAS DE SANGRE

si no me arrodillo ante ella. Fíjense que vive en García Lorca DIÄLOGOS


García Lorca DOÑA ROSITA LA SOLTERA
un cuarto infecto. Al presentarme debo decirle García Lorca EL PÚBLICO
reglamentariamente García Lorca LA CASA DE BERNARDA ALBA
García Lorca LA ZAPATERA PRODIGIOSA
así: (declama) "Amor mío, ¿cuándo
García Lorca LOS TÍTERES DE
permitirás que mis labios cubran tus labios de CACHIPORRA
García Lorca MARIANA PINEDA
besos?" García Lorca YERMA
GARRO ELENA LA SEÑORA EN SU
BALCÓN
Hombre Cúbico: ¡Oh!... ¡Oh!... Garro Elena EL ENCANTO tendajón mixto
Garro Elena UN HOGAR SóLIDO México
Garro Elena el Rastro
Rocambole: ¿Por qué ese disforme hace ¡oh!, ¡oh!...? Garro Elena EL Árbol
Garro Elena Felipe Ángeles
GAVARRE
Galán: Después le digo: "Querida mía, tu GAVARRE BENJAMÍN EL INFIERNO esa
casa
indiferencia GAVARRE Benjamin FILUS

me hiela el alma; deja que te estreche contra mi GAVARRE BENJAMÍN LA NARCOTIENDITA


DE LA ESQUINA
pecho". GAVARRE BENJAMIN Yo el peor de los
dragones: de
Gavarre versión Tardieu Jean LE GUICHET
OFICINA DE INFORMES
Hombre Cúbico: ¡Oh!... ¡Oh!... Gavarre 1
Gavarre 2
Gavarre 3
Rocambole: ¿Por qué diablos hace ¡oh!, ¡oh!...?
Gavarre 4
GAVARRE BENJAMIN Entremés de la Moza
Retobada
Hombre Cúbico: Me gustaría estar en el papel del GAVARRE BENJAMÍN datos sobre el autor

Galán. Es más divertido que pasarse las horas con un GAVARRE BENJAMÍN DELIRIO 23
GAVARRE BENJAMÍN Espagueti Lipstick
geómetra imbécil. Gavarre Benjamín GENTE DE PRIMERA
GAVARRE BENJAMÍN Monólogo: BREVE
MONÓLOGO DE LA DIVA DIVA
Reina Bizantina: Déjense de interrumpir ustedes... GAVARRE BENJAMÍN PASO DEL agua De
Benjamín Gavarre
(Al Galán.,) ¿Y ella qué dice? Gavarre Benjamín PERSONAS INESTABLES
GAVARRE BENJAMIN SALA DE ESPERA
Gavarre Benjamín UNIDAD LUPITA
Galán: Se retuerce las manos y me suplica que me GAVARRE Benjamín Yo.... el peor de los
dragones
retire,
GAVARRE DISFRAZ
que la madre me puede ver, y lo curioso es que es GAVARRE la fiesta de los disfraces

huérfana; pero ella hace más sabrosa la comedia Gavarre Sala


Gavarre VIA LATEX
diciéndome: Genet Jean LAS CRIADAS

"Querido, anda, ándate antes que mamá Genet Jean SEVERA VIGILANCIA
Ghelderode Michel de EL EXTRAÑO JINETE
nos sorprenda..." GIACOMETTO DESPROPÓSITO Rosario
ARGENTINA
GIACOMETTO LEONEL Dolor de Pubis
ROSARIO ARGENTINA
Demonio: Interesante... ¿Y usted qué le contesta? GIACOMETTO Y SUÁREZ LA GATA MUJER
para GUIÑOL
GILDA SALINAS De México DIEGO DE
Galán: Al llegar a este punto, yo ya no tengo que LANDA o LA TARDE DEL SACRILEGIO
GLADIS GÓMEZ Chaco Argentina
contestarle nada, sino tomarla dulcemente de la GLADIS GÓMEZ Escrito en el Agua
ARGENTINA
cintura
GLENGARRY GLEN ROSS de David Mamet
y... GOETHE J W EGMONT
GOETHE J W Fausto
Gogol Diario de un loco
Hombre Cúbico: ¡Oh!... ¡Oh!... ¡Oh!... (Estos ¡oh! Goldoni Carlo THE SPENDTHRIFT MISER

son alaridos ahora.) Yo quiero hacer el papel de Goldoni Carlo THE BENEFICENT BEAR
Goldoni Carlo THE FAN
Galán, Goldoni Carlo A CURIOUS MISHAP A
COMEDY IN THREE ACTS
aunque sea con una jorobada... GONZÁlez DÁvila JESÚs De la calle
GONZÁlez DÁvila JESÚs INOCENTE... PARA
SIEMPRE
Reina Bizantina (a/ Hombre Cúbico,): ¡Qué fogoso GONZÁlez DÁvila JESÚs La fábrica de los j

es GONZÁlez DÁvila JESÚs LAS PERLAS DE


LA VIRGEN

usted... Sosiégúese, hombre. GONZÁlez DÁvila JESÚs TIEMPOS


FURIOSOS
GOROSTIZA CELESTINO El color de nuestra
piel
Demonio: ¡Ja, ja, ja!... Gorostiza Manuel Eduardo de CONTIGO PAN
Y CEBOLLA
Griselda Gambaro La señora Macbeth

Rocambole: Caldera parece nuevo en negocios de HAMLET


Hampton Christopher RELACIONES
imaginación... PELIGROSAS

. Handke PETER INSULTOS AL PÚBLICO


Handke Peter El pupilo quiere ser tutor Peter
Galán: Le regalo el papel... Handke
Harold Pinter El Amante
HAUPTMANN Gerhart los TEJEDORES

Hombre Cúbico: Sí, hace poco que soy fantasma... HÉCTOR OLIBONI MONGO Y EL ÁNGEL
BUENOS AIRES
HÉCTOR OLIBONI SOMBRAS ARGENTINA

Rocambole: Ya se acostumbrará. Aquí, como usted Hellman Lillian LOS INOCENTES


Hernández Luisa Josefina MARTA Y EL
me ve, con esta galera cochambrosa y polainas DRAGÖN
HOMUSDRAMÁTICUSAlbertoADELLACH
indecentes, HUMBERTO ROBLES El Arca de Noelia
COMEDIA EN UN ACTO MÉXICO
he hecho el papel de marqués y figuro en una
HUMBERTO ROBLES EL ORNITORRINCO
novela de cuarenta tomos. de Humberto Robles o y tú en quién piensas
cuando haces el amor MÉXICO
HUMBERTO ROBLES Secreto de Confesión
Obra breve anticlerical
Reina Bizantina: ¿Cuarenta tomos, señor HUMBERTO ROBLES SUEÑOS
INTERRUMPIDOS Testimonios y poemas de
Rocambole? los hermanos Cerezo Contreras Dramaturgia
Humberto Robles MÉXICO
Ibargüengoitia Jorge EL ATENTADO
Ibarra Edith OTRA ELECTRA
Rocambole (quitándose el sombrero): Ni uno más ni
ibarra Edith PEQUEÑA ESTANCIA EN EL
uno menos, que los escribió el muy insigne señor MAR
IBSEN ENEMIGO
Ponson du Terrail. Ibsen Henrik CASA de Muñecas
IBSEN HENRIK El pato salvaje
IBSEN HENRIK La dama del mar
Demonio: ¡Cuarenta tomos!... IBSEN HENRIK Un enemigo del pueblo
Ibsen ROSMERSHOLM
INTERIOR de Maurice MAETERLINCK
Galán: ¿Y usted es siempre el personaje?... Ionesco Eugene AMADEO O CÓMO SALIR
DEL PASO
IONESCO Eugene DELIRIO A DÚO
Ionesco Eugene EL MAESTRO
Rocambole: Soy siempre el mismo personaje a través Ionesco Eugene ESCENA PARA CUATRO
PERSONAJES
de distintos nombres. Una vez me llamo el Hombre
Ionesco Eugene JACQUES O LA SUMISIÓN
Gris, otra el Marqués de Chamery, otras... Ionesco Eugene LAS SILLAS
Ionesco Eugene RINOCERONTE
Ionesco LA CANTANTE CALVA
Hombre Cúbico: ¡Así sí que da gusto ser personaje!... Ionesco La improvisación del alma
Ionesco LA LECCIÖN
Ionesco Víctimas del deber
Rocambole: Y le he hecho ganar millares y millares ISABELA ADOLESCENTE GORDA
CENICIENTA y ASÍ De Benjamín Gavarre
de francos a mi patrón, el ilustre señor Ponsón du Comedia Tres personajes femeninos

Terrail. ISRAFEL Abelardo Castillo


Jaime Mario LILITH
Jarry ALFRED Ubú Rey

Hombre Cúbico: ¡Cuarenta tomos!... JEAN COCTEAU The Infernal Machine


JERZY GROTOWSKI Hacia un teatro pobre
JHONSONBen VolPoNe

Rocambole: Que han leído todas las tenderas, Jodorowsky “ EL JUEGO QUE TODOS
JUGAMOS ”
modistillas Jorge Arroyo azul marlene Costa Rica

y planchadoras del mundo... Jorge Arroyo FIGUEROA Notario de la Patria


Inédita Costa Rica
Jorge Arroyo LA ROMERÍA Costa Rica
Jorge Arroyo LA RUTA Costa Rica
Demonio: Y usted, señor Rocambole, ¿sigue fiel a su Jorge Arroyo TRÍO Costa Rica

sirvienta?... JORGE DÁVILA El viaje interminable Ecuador


JORGE DÁVILA Espejo roto Cuenca Ecuador
José Luis Ramos Escobar EL OLOR DEL POP
Rocambole: No merece ser sirvienta, sino gran CORN Puerto Rico
JOSÉ PASCUAL ABELLÁN Locas ESPAÑA
señora... José Triana LA NOCHE DE LOS ASESINOS
Cuba
JUAN CARLOS WASHINGTON Carlitos y
Cómo conectar un toma corrientes Dos
Reina Bizantina: ¡Qué honor para ella!... monólogos breves ARGENTINA
Juan Moreira Eduardo Gutiérrez Hnos
Podestá

Rocambole: Mi papel es fácil y simpático, aunqu e JUEGOS A LA HORA DE LA SIESTA de


ROMA MAHIEU
ustedes JUEGOS TEATRALES
JULIA VERSIÓN DE SEÑORITA JULIA DE
duden... STRINDBERG POR ALEJANDRO
TANTANIAN
Kaiser Georg GAS I

Hombre Cúbico: ¡Cómo no le vamos a creer al Kaspar Peter Handke


KESSELRING Arsénico y encaje
personaje La Fiaca RICARDO TALESNIK
de cuarenta tomos! La calle de la gran ocasión Luisa Josefina
Hernández El Juez y Don José
La calle de la gran ocasión Luisa Josefina
Hernández El poeta y Filomena
Rocambole: Los hombres tienen una simpatía LA CALLE DE LA GRAN OCASIÓN ELLA Y
EL POLICÍA LUISA JOSEFINA HERNÁNDEZ
descomunal La calle de la gran ocasión EVA Y ANTONIO
por los pilletes y bribones... LUISA JOSEFINA HERNÁNDEZ
LA CALLE DE LA GRAN OCASIÓN MARTA Y
EL DRAGÓN LUISA JOSEFINA HERNANDEZ
La fiebre del heno Noel Coward
Galán: Posiblemente porque en cada hombre hay un LA FIESTA

píllete... La Fiesta de los Disfraces


LA FIESTA DE LOS DISFRACES BENJAMÍN
GAVARRE
LA FIESTA DE LOS DISFRACES TEXTO DE
Reina Bizantina: Eso cae tan bien como aceite a la BENJAMÍN GAVARRE
LA FIESTA DE LOS DISFRACES edición 2011
ensalada. De Benjamín Gavarre
La fiesta gavarre
LA FIESTA GAVARRE BENJAMIN

Demonio: O anillo al dedo... La Gringa Loca


LA MADONNITA Mauricio Kartun
lA mANDRÁGORA mAQUIAVELO
Galán: ¿Y su papel cuál es? LA MUJER SOLA MONÓLOGO DARIO FO Y
RAME MONÓLOGO FEMENINO
LA PROFESIÓN DE LA SRA. WARREN
George Bernard Shaw
Rocambole: Cuando la sirvienta se acuesta, cansada LA RATONERA THE MOUSETRAP de Agatha
Christie 1952
de trabajar todo el día, yo me acerco y le digo:
LA ÚLTIMA DIANA SERGIO MAGAÑA
"Señorita, LABICHE Y MICHEL El sombrero de paja de
Italia
soy el Hombre de Negocios; vengo a comunicarle LAS AMARGAS LAGRIMAS DE PETRA VON
KANT FASSBINDER
que ha heredado treinta millones". LAS BIZARRÍAS DE BELISA Lope de Vega
LÁSTIMA QUE SEA PUTA JOHN FORD
Le théâtre médiéval le tragique et le comique
Reina Bizantina: ¿Cuánto? réflexions sur la définition des genres
Élisabeth L ALOU
LEJOS DEL CORAZÓN de ESTELA LEÑERO

Rocambole: Me equivoqué. Son trescientos millones. LEONARDO y LA MAQUINA DE VOLAR de


Humberto Robles
Leonel Giacometto BARDO vigor en la
atmósfera Mónólogo para muchacho
Hombre Cúbico: Pero ¡es una barbaridad! ¿Por qué Licona Alejandro Raptola Violola y Matola
Liddell Angélica LA FALSA SUICIDA
Liddell Angélica Y cómo no se pudrió
trescientos millones? ¿No podrían ser treinta mil LIERA óSCAR EL CAMINO ROJO A SABAIBA

pesos? Liera Óscar LA PIÑA Y LA MANZANA


Liera Óscar LAS UBARRY
LIERA ÓSCAR LOS CAMALEONES
MONÓLOGO FEMENINO
Rocambole: Si un ciudadano, pudíendo soñar que he
LILITH de MARIO JAIME
reda trescientos millones, se imagina que hereda Lluïsa Cuillé EL BURDEL Barcelona

trein Lluïsa Cunillé LA CANTANTE CALVA EN EL


Mc'DONALD'S Barcelona

ta mil pesos, merece que lo fusilen por la espalda. Lo que pasó cuando Nora dejó a su marido o
Pilares de las Sociedades Elfriede Jelinek
Locos de amor Sam Shepard
Lope de Rueda EL CONVIDADO
Galán (al Hombre Cúbico,): ¡Había sido tacaño us
Lope de Rueda EL CORNUDO Y CONTENTO
ted, Caldera! Economiza hasta en los sueños... Lope de Rueda EL DELEITOSO (Paso)
Lope de Rueda LA CARÁTULA DE DIEGO
SÁNCHEZ
Reina Bizantina (diplomática): No está Lope de Rueda LA GENEOSA PALIZA Y
acostumbrado OTROS PASOS
Lope de rueda La TIERRA DE JAUJA
a soñar el amigo Caldera. Lope de Rueda LAS ACEITUNAS
Lope de Rueda LOS LACAYOS LADRONES
Lope de Rueda PAGAR Y NO PAGAR
Hombre Cúbico: Yo no quiero que me llamen Lope de Vega EL CABALLERO DE OLMEDO

Caldera... LOPE DE VEGA EL CASTIGO SIN


VENGANZA
LOPE DE VEGA El mejor alcalde EL REY
Lope de Vega EL PERRO DEL HORTELANO
LOPE DE VEGA el REMEDIO EN LA
Reina Bizantina (diplomática): Bueno, no se enoje; DESDICHA
LOPE DE VEGA El vellocino de oro
lo Lope de Vega Fuenteovej
Lope de VEGA FUENTEOVEJUNA
llamaremos Querubín. Lope de Vega LA DAMA BOBA
Lope de VEGA LA GATOMAQUIA
Lope de Vega LA NOCHE DE SAN JUAN
Hombre Cúbico: ¿Ve? Ese nombre me gusta... LÓPEZ WILLEBALDO MALINCHE SHOW
Los comanches ANÓNIMO TEATRO
CHICANO
Demonio: En cambio, mi hombre es un chico de LUIS PABLO MONTAÑO PASTORELA
PASTORES A LA TRAMPA MÉXICO
catorce MAETERLINCK MAURICE El pájaro azul

años. Él también, como los hombres de ustedes, MAETERLINCK MAURICE interior


MAETERLINCK MAURICE la INTRUSA
me llama antes de dormir: soy su demonio. Me llama MAETERLINCK MAURICE LOS CIEGOS

así, su "demonio". Estoy obligado a presentarme Mafalda


Magaña Sergio Como las estrellas y todas las
todas cosas

las noches y decirle: "Soy Lucifer; puedo concederte Magaña Sergio Cuatro diálogos de animales
Magaña Sergio LA ÚLTIMA DIANA
todos los poderes de la tierra. Elegí, qué preferís Magaña Sergio LOS FABULOSOS

ser: ¿el hombre más lindo del mundo, el más Magaña Sergio LOS MOTIVOS DEL LOBO
MAGAÑA Sergio LOS SIGNOS DEL
fuerte, el más sabio, el más rico?" Y mi muchachito ZODIACO
Magaña Sergio MOCTEZUMA II
se convierte una noche en el chico más fuerte, otra Mahieu Roma JUEGOS A LA HORA DE LA
en SIESTA
MAMET DAVID BÚFALO AMERICANO
el más sabio... Creo que esta noche quiere vencer a Mamet David GLENGARRY GLEN ROSS

Tony Canzoneri en el primer round y por knock- Mamet David OLEANNA


MANDRÁGORA
out... MANUAL DE JUEGOS Y EJERCICIOS
TEATRALES Hacia una pedagogía de lo
teatral

Galán (pensativamente): El hombre (Camina por el Maquiavelo LA MANDRÁGORA


Máquina Hamlet
estrado y se vuelve solo desde un extremo a los MARBER Closer

otros.) ¿Qué me dicen ustedes del hombre?... Marco Antonio de la Parra OFELIA o la Madre
Muerta CHILE
MARIELA ANASTASIO BUENOS AIRES
HIROSHIMA LÍBANO La Plata ARGENTINA
Reina Bizantina: Es infinitamente triste... MARIO JAIME Lilith BAJA CALIFORNIA
MÉXICO
Marlowe Christopher DOCTOR FAUSTO

Demonio: Dios le ha dado un alma cambiante como Marlowe Christopher EDUARDO SEGUNDO
Marlowe Tamerlan Primera parte
el mar... Marlowe THE JEW OF MALTA.
MARTÍ JOSÉ AdÚltera
mARTÍ jOSÉ AMOR CON AMOR SE PAGA
Rocambole: Busca el sufrimiento; eso es evidente. MASTER CLASS DE TERRENCE McNALLY
McNally Terrence MASTER CLASS

Hombre Cúbico: Más: busca la felicidad... MENANDRO Misántropo


MI AMIGO MOZART Esther Suárez Durán
Mighton John MUNDOS POSIBLES

Reina Bizantina: He visto hombres terribles: estaban Miguel Mihura Tres sombreros de copa
Miller Arthur eL DESCENSO DEL MONTE
entre Dios y la bestia. MORGAN
Miller Arthur EL PRECIO
Miller Arthur MUERTE DE UN VIAJANTE
Demonio: Convengamos que casi siempre están más Miller ARTHUR MUERTE DE UN VIAJANTE
MILLER Arthur LAS BRUJAS DE SALEM
cerca de las bestias que de Dios, ¿eh?
Miller Arthur Panorama desde el puente
Miller Arthur TODOS ERAN MIS HIJOS
Galán: Sí; no todas las veces es agradable ser Miller Después de la caída
Molière El Misántropo
instrumento MOLIÈRE Don Juan

de la imaginación de los hombres. MOLIERE EL BURGUÉS GENTILHOMBRE


MOLIÈRE EL ENFERMO IMAGINARIO
Molière EL AVARO

Rocambole: A mí francamente me gusta tomarme en Molière L'AVARE


MOLIÈRE LA ESCUELA DE LAS MUJERES
serio. MOLIERE La escuela de los maridos
Molière Las preciosas ridículas

Hombre Cúbico: ¿Qué quiere decir con eso? MOLIERE Mujeres sabias
Moliere TARTUFO
Monólogo breve femenino El silencio de las
tortugas de Lucia Laragione
Rocambole: Que cuando hago el personaje de algún monólogo diva

drama, me gusta sufrir y soñar como si fuera hombre Monólogos M de Diego


Monólogos Maxi de Diego
de carne y hueso en vez de fantasma. Müller Heiner Medea Material
Müller Heiner CUARTETO
Müller Heiner MÁQUINA HAMLET
Reina Bizantina: ¿De modo que si usted pudiera
MURILO DIAS CESAR LA PASIÓN DE
concederle OSCAR WILDE BRASIL
NERUDA PABLO FULGOR Y MUERTE DE
a la sirvienta se los facilitaría? JOAQUÍN MURIETA
NOREIDA FLORES CENIZAS VENEZUELA
Norman mARSHA Buenas noches Mamá
Rocambole: Claro. ¿Se imaginan ustedes lo que Novo
o borreguitos a Belén Teresa Valenzuela
significan
O'Neill Anna Christie
efectivos, contantes y sonantes? O'NEILL ANTES DEL DESAYUNO

¿en billetes de a cien pesos? O'NEILL EL GRAN DIOS BROWN


O'NEILL El largo viaje de regreso
Diez billetes forman un espesor de un milímetro. O'neill Eugene EL GRAN DIOS BROWN
O'NEILL EUGENE LARGO VIAJE DE UN DÍA
HACIA LA NOCHE

Hombre Cúbico: Está hecho el cálculo: se formaría O'neill Eugene Mourning Becomes Electra
O'neill Eugene THE FIRST MAN
una columna de trescientos metros de altura.
O'neill Eugene THE HAIRY APE
O'Neill The Emperor Jones

Galán: Muy bien por Caldera, quiero decir por O’Neill EUGENE Deseo bajo los olmos
O’NEILL Eugene MÁS ALLÁ DEL
Querubín. HORIZONTE
obra de teatro para dos jóvenes actrices
Morales Gracia
Obra para dos mujeres Silvia paredes Rojas y
Rocambole: Eso..., un pilar alto como la torre de Muñoz

Eiffel... Odets Cliford ESPERANDO AL ZURDO


Oliver Sacks El hombre que confundió a su
¿Se imaginan ustedes una sirvienta con tal cantidad mujer con un sombrero
Olmos Andrés fray EL JUICIO FINAL siglo XVI
de dinero? Oneill Emperador Jones
Oneill Marco Millones
ORTON JOE LOQUE VIO EL MAYORDOMO
Galán: Si el hombre supiera que todo lo que sueña
ORTON JOE UN RUFIÁN EN LA ESCALERA
queda impreso en esta zona astral, se espantaría. No Osvaldo Dragún HISTORIAS PARA SER
CONTADAS Argentina
podría creer en el poder de su imaginación. PABLO ALBARELLO AMARTE una aventura
con poco oxígeno
PABLO ALBARELLO Ansiedad oral

Rocambole: Yo creo que hay hombres cuya PABLO ALBARELLO Estocolmo


PABLO ALBARELLO Final tango ARGENTINA
imaginación
PABLO ALBARELLO GRAN SLAM (tragedia
al mejor de cinco sets) BUENOS AIRES
fabrica mundos y humanidades en los espados. PABLO ALBARELLO LOMBRICES Buenos
Aires ARGENTINA Abril 2012
PACO REDONDO Lo dejado iluminado
Hombre Cúbico: Si es como usted dice, también Basada en el Popol Wuj ARGENTINA
PANORAMA DESDE EL PUENTE de
deben ARTHUR MILLER Versión
Papá Querido Aída Bortnik
de crear monstruos espeluznantes...
Pareja Abierta Darío Fo y Franca Rame
PASO DEL AGUA De Benjamín Gavarre

Demonio: Es mejor no hablar de esos asuntos... PASO DEL AGUA de BENJAMÍN GAVARRE
PASO DEL AGUA QUE se ACABA De
Benjamín Gavarre
pastorela
Reina Bizantina: Sí, porque a mí se me pone la piel Pastorela Florencio Ibáñez

de pastorela El pleito de las calaveras


pastorela La caja misteriosa Dante del Castillo
gallina... Una vez distinguí a un monstruo que PASTORELA Los soplidos del diablillo
galopaba PASTORELA Pastores de la ciudad Emilio
Carballido en colaboración con Luisa Josefina
en las tinieblas... Hernández
PASTORELA TRADICIONAL
pastorelas

Galán: Si el hombre tuviera la vista más sensible nos pathelin


PATRICK SHANLEY John LA DUDA
vería... PEQUEÑA CRUEL BONITA de Santiago Loza
MONóLOGO femenino
Pérez Galdós Benito LA LOCA DE LA CASA
Rocambole: ¡Qué simple es usted! Claro que nos ven. PIJAMAS MARC CAMOLETTI

El hombre que lo imaginó a usted lo ve... Si nosotros PINTER COLECCION


Pinter fiesta de cumpleaños
somos hijos de su fantasía... Pinter Harold Blanco y negro
Pinter Harold El conserje
Pinter Harold El montaplatos
Galán: Lo que quería decir es que todos los hombres Pinter Harold Polvo eres
nos verían como ven a los pájaros y a las nubes... Pinter Harold TRAICIÓN
PIÑERA VIRGILIO Aire Frío
PIÑERA VIRGILIO DOS VIEJOS PÁNICOS
Rocambole: Algún día nos verán. PIOJOS OBRA DE DAMIAN BOJORQUE de
Sta Fe Argentina
PIRANDELLO ASÍ ES si así os parece

Hombre Cúbico: Si eso ocurre, los hombres no se PIRANDELLO COMO TU ME DESEAS


PIRANDELLO ESTA NOCHE SE IMPROVISA
atreverán a pensar... LA COMEDIA
Pirandello SEIS PERSONAJES EN BUSCA
Demonio: ¡Muy bien por Caldera! ¡Es todo un DE AUTOR

filósofo! PLAUTO Asinaria La comedia de los asnos


Plauto El soldado fanfarrón
Hombre Cúbico (con tono lacrimoso): Yo no quiero PLAUTO LA OLLA

que me llamen Caldera. POESÍA métrica española


Poéticas en el teatro medieval
Poéticas teatrales en la Edad Media y
concepciones estético ideológicas Jorge
Reina Bizantina: No, ocurrirá que los seres humanos Dubatti

en vez de pensar monstruosidades cavilarán cosas PSICODRAMA DE MORENO


PSIQUE
lindas... Puig Manuel EL BESO DE LA MUJER ARAÑA

Galán (llevándose la mano a la oreja): Siento que lla RACINE Jean FEDRA
RAMOS JOSE ANTONIO Tembladera
man... REPTILES Arturo Vega
Resumen del método José-Luis García
Barrientos
Una voz remota: ¿Dónde estás, mi reina? Reyes Alfonso Ifigenia C
Rezaei Pejman La cámara gris
rICARDO SEGUNDO
Reina Bizantina (moviendo desatentadamente los bra Rizo Félix Chicho Porras APOTEOSIS DE
ANA
zos): Ya voy, mi augusto esposo... (Sale.) Rizo Félix Chicho Porras TRES MAGNÍFICAS
PUTAS
Robles Gavarre Susana FESTÍN DE PERROS
Rocambole: ¡Maldito sea! ¿Dónde dejé mi látigo? Robles Gavarre Susana HUÉRFANO DE
BESOS
Robles Gavarre Susana PUNCHING BAG

Una voz: Te estoy esperando, amor... Vení amor... Rodolfo Usigli EL GESTICULADOR México
ROMEO Y JULIETA De William Shakespeare
Vení. Versión Mauricio Kartun
ROSTAND EDMOND Cyrano de Bergerac
Sacha Barrera Oro HERMANITOS
Galán: Es la contrahecha y el diablo... ¡Maldita sea SACHA BARRERA ORO HERMANITOS
Argentina
mi suerte! (Sale.) SACHA BARRERA ORO MAREA ROJA
SANGRE
Sacha Barrera Oro Oráculo ARGENTINA
Tercera voz distante: Quiero ser el hombre más lindo Salvador la culta dama
Sánchez Florencio Barranca abajo
del mundo.
Sánchez Florencio LOS MUERTOS
Santander Felipe EL EXTENSIONISTA

Demonio: Mi chico. Voy volando. (Sale.) Santillán Luis ALICIA a partir del texto de Luis
Carroll
Santillán Luis BRUJA BLANCA
Sartre Jean Paul A PUERTA CERRADA
Otra voz lejana: Rocambole... ¿Dónde estás, Hombre Sartre Jean Paul LA PUTA RESPETUOSA

Gris? SARTRE Jean Paul LAS MANOS SUCIAS


SARTRE Jean Paul LAS MOSCAS
Schiller Friedrich LA DONCELLA DE
Rocambole (enfático): Ya va el gran criminal. Ya va, ORLEANS
Schiller Friedrich María Estuardo
pero va arrepentido de sus crímenes... (Sale.) Schiller Friedrich INTRIGA y AMOR
Schiller GUILLERMO TELL
SEBASTIÁN HUBER 48 ENTRE 11 Y 12
Hombre Cúbico (desolado en las semitinieblas); Esta CONMORIENCIA
SEBASTIÁN HUBER VIENTO
noche mi geómetra no me llama. ¿Qué hago si se
Séneca MEDEA
olvida Shakespeare William A buen fin no hay mal
principio
de mí? Me dejará revestido de esta forma absurda. Shakespeare William ANTONIO Y
CLEOPATRA
¡Y la cara que muestra la luna!... (Se apoya en una Shakespeare William CIMBELINO

roca.) ¿Qué hago sin brazos y con esta catadura Shakespeare William COMO GUSTÉIS
Shakespeare William EL CUENTO DE
interplanetaria? INVIERNO

(Empieza a sollozar con mugidos a través Shakespeare William EL MERCADER DE


VENECIA

de la cornetilla de su boca. Una luna gris como un Shakespeare William EL REY LEAR
Shakespeare William ENRIQUE IV
huevo Shakespeare William HAMLET

de avestruz le guiña un ojo al fantoche en la Shakespeare William JULIO CÉSAR


Shakespeare William LA COMEDIA DE LAS
desolación de EQUIVOCACIONES

la noche astral.) Shakespeare William LA FIERECILLA


DOMADA
Shakespeare William LA TEMPESTAD
Shakespeare William LAS ALEGRES
Una voz lejana: ¿Dónde estás, bribón triangular?... COMADRES DE WINDSOR
Shakespeare William LOS DOS HIDALGOS
DE VERONA

Hombre Cúbico (saltando): Gracias a Dios que no se Shakespeare William MACBETH


Shakespeare William MUCHO RUIDO Y
POCAS NUECES
olvidó de mí... (Sale bamboleándose, parecido a un Shakespeare William Noche de reyes
monstruomarciano.) Shakespeare William OTELO
Shakespeare William Ricardo II
Shakespeare William RICARDO III
TELÓN Shakespeare William ROMEO Y JULIETA
Shakespeare William SUEÑO DE UNA
NOCHE DE VERANO
Shakespeare William TIMÓN DE ATENAS
Shakespeare William TITUS ANDRONICUS
Shakespeare William Trabajos de amor
Acto I perdidos
Shaw Bernard Pigmalión
Shepard Fool for love
Shepard Sam EL VERDADERO OESTE
Sí: la vida es sueño de CARLOS ALBERTO
CUADRO PRIMERO ROMÁN
Simon Neil Extraña Pareja
sIMON nEIL RUMORES
Cuarto de servicio, con camita de una plaza, en un Sobre Hermenéutica
SOBRE ANTÍGONA DE SÓFOCLES
ángulo, un ropero de madera blanca, un velador., un
SOBRE DEMETRIO AGUILERA MALTA
banquillo cantinero de tres píes. Al foro, puerta. Al sobre el teatro en la Edad Media

costado de la puerta, un ventanillo. El cuarto, sOBRE EL AMOR DE LA ESTANCIERA


Sobre El atentado de Jorge Ibargüengoitia
encalado Texto y representación Benjamín Gavarre
Sobre el poema
de verde claro, tiene la desolada perspectiva de SOBRE EL TEATRO DE CREACIÓN
COLECTIVA bUENAVENTURA
policromía de una novela por entregas por Luis de
Sobre el teatro en Puerto Rico
Val. Durante unos segundos la escena queda en SOBRE EL TEATRO LATINO PLAUTO Y
TERENCIO INFORMACIÓN
silencio. SOBRE EL TERMINO POSTMODERNISMO
O POSTMODERNIDAD
Un rayo de luna entra en el cuarto, y remotos SOBRE LA COMEDIA DE ARISTÓFANES
se escuchan rechinamientos de tranvías y un distante sOBRE LOS INVASORES DE eGON wOLFF
sOBRE lUIS Valdez y el teatro campesino
final de vals al piano.
Sobre Piñera y Estorino
Sobre René Marqués

Personaje real: Sobre Roberto Arlt


Sobre Saverio el cruel
sobre Teatro Escambray

Sirvienta: Mujer de veinticuatro años. Expresión Sobre teatro latinoamericano


sOBRE tEATRO PERUANO
dura SOBRE TRAICIÓN DE PINTER

e insolente que de pronto se atempera en un Sófocles Áyax


Sófocles Antigona
aniñamiento Sófocles Edipo en Colono
voluptuoso de ensueño barato. Recuerda a Riña, el Sófocles Edipo Rey

Ángel Sófocles ELECTRA


Sófocles Filoctetes
de los Alpes, o cualquier otra pelandusca destinada a Sófocles Traquinias

enternecer Somigliana Carlos GRIS DE AUSENCIA


Teatro abierto argentino

el corazón de estopa de las lectoras de Carolina Sor Juana AMOR ES MAS LABERINTO
Sor Juana DIVINO NARCISO
Invernizzio o Pérez Escrich. SOR JUANA Los empeños de una casa
Stanislavski K Un actor se prepara
CONCENTRACION de la ATENCION
Personajes de humo: Stanislavski K Un actor se prepara I a IV
Stanislavski K Un actor se prepara VI a IX
Stanislavski K Un actor se prepara X a XVI
Strindberg August ACREEDORES
La Muerte, Rocambole, Capitán de transatlántico, Strindberg August LA MÁS FUERTE
Marinero, Galán, Niñera, Lacayo con patillas, las Strindberg August EL PELÍCANO

amigas Strindberg El viaje de Pedro el Afortunado


Strindberg La sonata de los espectros
Griselda y Azucena, Cenicienta en pañales. Srtinberg En revisión
Strindberg LA SEÑORITA JULIA
Suárez Patricia DEBILIDAD
Suárez Patricia DESPOJO
Suárez Patricia DEVOCIÓN
Suárez Patricia EL AMOR DE BERNARDA
ESCENA I Suárez Patricia EL BOCHORNO VS
SHAKESPEARE
Suárez Patricia HONRARÁS A TU MADRE

Sirvienta (recostada en el lecho, con las manos bajo la SUAREZ PATRICIA LA FLOR DE LO
SUEÑOS

nuca; SUÁREZ RANGEL ZENZONTLE MONGOL


SUSKIND PATRICK EL CONTRABAJO
guarda un momento de silencio): Si yo fuera rica TADEUSZ KANTOR EL TEATRO DE LA
esto MUERTE
TALANCÓN CARLOS Extraña fábula
no me pasaría. (Permanece nuevamente en silencio y empresarial
TALANCÓN CARLOS Historias del hoyo y del
se repiten los zumbidos de los tranvías que pasan, Nahual
TALANCÓN CARLOS La cría
todos Te duele César Brie
los ruidos de la noche en la ciudad. Se incorpora en la TEATRO DE GRUPO VENEZUELA
RAJATABLA
cama Terencio LA ANDRIANA

y permanece sentada en la cabecera del lecho Terencio LOS HERMANOS


THE SKIN OF OUR TEETH Thornton Wilder
tomándose TRAMA PROCESO Y CONSTRUCCIÓN DE
LA OBRA TEATRAL Edilio Peña
las rodillas con las manos.) Digo que si fuera rica TRATALA CON CARIÑO de Oscar Viale
esto no me pasaría. (Se oye un ruido blando en el TRIANA JOSÉ AHÍ ESTÁN LOS
TARAHUMARAS
piso, y TRIANA JOSÉ CRUZANDO EL PUENTE
MONÓLOGO
ella envuelta en una frazada, enciende la luz. Luego TRIANA JOSÉ EL PARQUE DE LA
FRATERNIDAD
se
trIANA JOSÉ La fiesta o Comedia para un
acerca al espejo y se mira.) Estoy flaca y fea... Ni la delirio
TRIANA JOSÉ LA MUERTE DEL ÑEQUE
muerte me querría... TRIANA JOSÉ la noche de los asesinos
Un actor se prepara COMUNIÓN
Un Dios Salvaje Yasmina Reza
UNDER AND UNDER AND UNDER: DE
SALOMON REYES
ESCENA II
URTUSASTEGUI CUPO LIMITADO
Urtusastegui Ofrenda del día de los muertos
México
De junto a la puerta se desprende cojeando con URTUSÁSTEGUI Tomás Cupolimitado

escrúpulos Valle Inclán LUCES DE BOHEMIA


Valle Inclán Ramón DIVINAS PALABRAS
de alcahueta, la Muerte. Se cubre la cabeza con un Valle Inclán Ramón Farsa infantil de la cabeza
del dragón
pañolón que torna más rígido y duro su rostro de
Valle Inclán Ramón ROSA DE PAPEL
líneas de Vargas Arístides DONDE EL VIENTO HACE
BUÑUELOS
yeso, con ojos desnivelados a lo largo de la nariz Vargas Arístides JARDÍN DE PULP

rectilínea. Verónica Maldonado POR LOS ARCOS DE


BELEM Pastorela México DF

Uñas de lata y ojeras de betún. VÍA LATEX de BENJAMIN GAVARRE


VÍA LÁTEX DE BENJAMIN GAVARRE
VÍA látexde Benjamín Gavarre
Muerte: ¿Me llamabas, queridita?... VICTOR HUGO CROMWELL
VICTOR HUGO EL REY SE DIVIERTE
VICTOR HUGO HERNANI

Sirvienta (frente al espejo, tocándose el rostro sin VILLAURRUTIA Xavier El hierro candente
VILLAURRUTIA Xavier EN QUÉ PIENSAS
volver Vitrac Roger VÍCTOR O LOS NIÑOS AL
PODER Roger Vitrac
la cabeza): A quien llamo es a la vida.
VOLVER A DECIR EL MAR Sergio Peregrina
Monólogo
Wedekind FRANK DESPERTAR DE
Muerte (detenida en medio del cuarto): Te PRIMAVERA
WEDEKIND LA CAJA DE PANDORA
recomendaron Weiss Peter MARAT SADE

que comieras jamón del diablo y te abrigaras, y, Weiss Peter MOCKINPOTT


WILDE Oscar LA IMPORTANCIA DE
en cambio, como una lujuriosa te miras los dientes LLAMARSE ERNESTO

en WILDE Oscar SALOMÉ


WILDE OSCAR Un marido ideal
el espejo. Además, eres descortés: ¿no me ofreces Wilde Oscar Una mujer sin importancia

asiento? Williams Tennesse DE REPENTE EL ÚLTIMO


VERANO
Williams Tennesse El caso de las petunias
pisoteadas
La Sirvienta avanza hasta el taburete y luego Williams Tennesse LO QUE NO SE DICE

permanece Williams Tennesse UN TRANVÍA LLAMADO


DESEO

sentada en la orilla de él con las manos apoyadas en Williams Tennesse AUTO DE FE


WILLIAMS Tennesse El Zoológico de cristal
el mentón y los codos en las rodillas. Mira frente a sí. Williams Tennesse Háblame como la lluvia y
déjame escuchar
La
WILLIAMS Tennesse La Gata sobre el tejado
Muerte, detenida, la observa. caliente
Williams Tennesse LA HABITACIÓN A
OSCURAS
WILLIAMS TENNESSEE LA MARQUESA DE
Muerte: Todas ustedes son iguales. Llaman a la LAR

Muerte y cuando llego me reciben con cara larga WILLIAMS TENNESSEE LA MUTILADA
WILLIAMS TENNESSEE NO PUEDO
como IMAGINAR EL MAÑANA
WILLY RUSSELL EDUCANDO A RITA
si me hicieran un favor. Todavía no he encontrado Witkiewicz LA MADRE

un alma piadosa que me ofrezca un vaso de vino. Wolff EGON Tras una puerta cerrada
y dónde está tu fortuna adaptación los dos
que soñaron

Sirvienta: Más tiene traza de rufiana que de Muerte. YO EL PEOR DE LOS DRAGONES
yo el peor de los dragones
Déjeme tranquila. YO EL PEOR DE LOS DRAGONES de
Benjamín Gavarre Silva
YO EL PEOR DE LOS DRAGONES
BENJAMIN GAVARRE SILVA
YOURCENAR Marguerite CLITEMNESTRA O
Muerte (dogmática, atisba en derredor): ¿Ves? Eso EL CRIMEN
ZANGARO PATRICIA El Confín
te Zorrilla José Don Juan Tenorio

pasa por no comer jamón del diablo. Si pasearas en


WWW.DRAMAVIRTUAL.CO
automóvil y fueras a la ópera, en vez de echar sangre M
por la boca venderías salud, y la salud es una gran
cosa,
hijita. ¡Una gran cosa! Por otra parte, continúas
sin ofrecerme asiento.
Sirvienta: Soy sirvienta y no tengo más que un
banquito
en mi cuarto.

Muerte: Tú has ido a la escuela, ¿no?

La Sirvienta la mira haciendo un gesto como


diciendo:
"¿Qué hay con esto?"

Muerte: ¿Y en la escuela no te han enseñado a ser


respetuosa
con los mayores?

Sirvienta: Siéntese en la cama, si quiere...


Casa de recuperacion para
mujeres...
Muerte: Es que debe de tener pulgas tu cama.
Ustedes
las fámulas son tan descuidadas...

Sirvienta: Entonces siéntese en el suelo. de Benjamín Gavarre, de México.

Denunciar abuso
Muerte: Yo no soy gitana para sentarme en el suelo.
LOMBRICES, de Pablo
Albarello (Buenos Aires,
Sirvienta: Entonces quédese de pie. Argentina)

Muerte (siempre moviendo la cabeza y husmeando


en derredor):
Chiquita, ¿sabes que eres mal educada?

LOMBRICES

Sirvienta: ¡Dios mío! Usted más que la Muerte LÍLITH, DE MARIO JAIME

parece
una partera por lo charlatana.

Muerte: ¿Y quién te dice que no sea una partera?


¿No hago acaso salir de este mundo a los vivos para LÍLITH, DE MARIO JAIME (México)

que entren otros? Además, si estoy aquí es porque ESTOCOLMO, DE PABLO


me ALBARELLO
has llamado. ¿O crees que soy sorda? Hace mucho
tiempo que me llamas. Bueno, me he dicho, vamos a
complacerla a esta chica. Y aquí estoy, hermosa...

Sirvienta (observándola): ¡QLié traza horrible!...


PABLO ALBARELLO

Muerte: Queridita... yo también he sido joven. ESPAGUETI-LÍPSTICK, DE


BENJAMÍN GAVARRE

Sirvienta: Es que yo no quiero morir. No quiero.

Muerte: Hágase tu voluntad, pichona. La gente


muere
en realidad cuando quiere morir. Quien tiene la
BENJAMÍN GAVARRE
voluntad
de vivir, vive. Se arrastra, pero vive. ¿No te LA NARCOTIENDITA DE LA
ESQUINA de Benjamín
has fijado, por ejemplo, en esos viejos avaros que Gavarre 31 07 10
agonizan años y años entre telarañas?...

Sirvienta: Bueno..., habló demasiado... puede irse...

Muerte (acercándose cojeando): ¿Sabes que eres LA NARCOTIENDITA DE LA ESQUINA

linda,
PIOJOS, de Damián Bojorque,
chica? (La Sirvienta, al oír los pasos sordos de la desde Santa Fe, Argentina
Muerte,
se pone violentamente de pie, con el rostro rígido, la
mirada clavada en el horizonte.) Eres linda... A ver... DAMIAN BOJORQUE

sonreí. (La Sirvienta hace muecas, hipnotizada.)


REPTILES, DE ARTURO
Cierto VEGA
que eres linda... ¿Sabes que quisiera verte
desnuda?...
A ver... (Hace sentar a la Sirvienta en el banquillo
y le abre la frazada de modo que los senos quedan al
descubierto. La Muerte retrocede con movimientos
de ARTURO VEGA, de León Guanajuato,
dromedario y estudia a la muchacha como un pintor México.

a su SÍ, LA VIDA ES SUEÑO, DE


modelo. Luego le señala el seno izquierdo alargando CARLOS ALBERTO ROMÁN
el
brazo.) ¡Qué lástima! Allí está el tirabuzón que te
agujerea el pecho. Y eres linda... Bueno, tú tienes la
culpa... ¿Quién te manda no comer jamón del
de México: SÍ, LA VIDA ES SUEÑO (Primera
colaboración en esta página en enero de
diablo? 2008).

¡Si te alimentaras de pollos asados no te pasaría


AMARTE: UNA AVENTURA
eso! ¡Y eres linda! (Menea la cabeza pensativamente.) CON POCO OXÍGENO de
Si Pablo Albarello publicada
aquí el 21 04 09
no trabajaras de sirvienta podrías vivir un tiempo.
(Confidencialmente.) ¿Por qué no te buscas un viejo
rico?
Los viejos son lujuriosos y cegatos. Un viejo te Pablo Albarello

daría jamón del diablo, no te quede duda. Y te Carlitos, y, Cómo conectar un


llamaría toma corrientes, dos
monólogos breves de Juan
su palomita, su tierna palomita. (Se escuchan Carlos Washington
tres golpes en las tablas de la puerta. La Muerte se
escurre
por un muro de papel, y la Sirvienta, escalofriada, cie
Juan Carlos Washington (ARGENTINA)

FINAL Tango, de Pablo


rra sobre su pecho ¡afrazada. Golpean otras tres veces Albarello
y se
abre la puerta.)

ESCENA III
FINAL TANGO, DE PABLO ALBARELLO

Entra Rocambole, caracterizado como en el prólogo,


SALA DE ESPERA, DE BEN
con la diferencia de que gasta gafas negras de GAVARRE
monedero
falso y botas de contrabandista. A la espalda, el
eterno látigo
de postillón vandeano. La Sirvienta permanece
inmóvil.
SALA DE ESPERA
Rocambole se detiene unos pasos tras ella.
VÍA LÁTEX, DE BENJAMÍN
GAVARRE 05 02 09
Rocambole: ¡Diablos! Hace frío. (Saca una pipa del
bolsillo y la enciende; luego avanza basta la Sirvienta,
se
para frente a ella y la observa con detenimiento de
cochero
que va a comprar un penco y que lo examina
VÍA LÁTEX
previamente.)
¿Así que usted es la huérfana? (La Sirvienta no UNDER AND UNDER AND
UNDER
contesta.) Disculpe que haya entrado sin esperar a
que
me abriera. Soy el Hombre de Negocios...

Sirvienta: ¿Eh?...
SALOMÓN REYES, de México.

Rocambole: Soy el Hombre Gris... Por otro nombre, DESPROPÓSITO, DE


LEONEL GIACOMETTO
más terrible, Rocambole. (Se quita las gafas desde Rosario ARGENTINA
enrejadas y 02 09 10

negras.) Vea mis ojos, quemados por la pólvora


cuando
quise escaparme del presidio.

Leonel Giacometto
Sirvienta (saliendo de su sopor): ¡Usted en
persona!... DELIRIO 23 FARSA
ABSURDA EN DOS DÍAS DE
¡Qué maravilla!... BENJAMÍN GAVARRE 18 09
10
Rocambole: En algunas partes me llaman ex
presidiario.
En otras, el ex jefe del Club de Sotas. (Hace un
gesto de fantoche sentimental y libertario, llevándose
un
pañuelo a los ojos.) Un ángel, la duquesa de Benjamín Gavarre

Chamery,
DISFRAz, DE BENJAMÍN
me redimió... GAVARRE

Sirvienta: Sí, yo sabía... ¡Qué buena la duquesa!... A


mí se me caían las lágrimas cuando leí esa parte. Y
usted se quedó pensando en París.

Rocambole: Eso es verdad como la Biblia. Yo me


DISFRAz, MONTAJE DE BENJAMÍN
quedé pensando en París. Y, cuando un ángel GAVARRE

terrestre
GENTE DE PRIMERA, DE
llora por el destino de un fantasma, el fantasma BENJAMÍN GAVARRE 17 08
cobra vida, su sangre son lágrimas... 01

Sirvienta: ¡Qué raro! Pero, a ver: déjeme que lo


toque.
GENTE DE PRIMERA
(Se acerca y le palpa los hombros.) Efectivamente,
usted GRAN SLAM (tragedia al
mejor de cinco sets) de
existe. ¿Por qué va vestido tan a la antigua? Hoy se PABLO ALBARELLO 21 04 09
venden
uniformes de chofer y de cochero muy baratos.

Rocambole: Es la vieja piel del bandido, señorita.


Pero GRAN SLAM DE Pablo Albarello

el bandido murió redimido por un ángel, y queda La CARRERA, de Gabriel


el Hombre Gris. Fernández Chapo, desde
Argentina para Dramavirtual
Publicado aquí el 030308
Sirvienta: Sí, ya sé... Yo lo admiro mucho. Leí toda
su vida cuando trabajaba de sirvienta en la casa de
una maestra que tenía un hijo hidrocéfalo.
La Carrera, de Gabriel Fernández Chapo

Rocambole: Cuarenta tomos, señorita.


¡FILUS!

Sirvienta: Los cuarenta tomos me leí...

Rocambole (descubiéndose magnánimo): Los


escribió
el señor Ponson du Terrail, muy noble señor... "¡FILUS!!! o "La máquina transformadora!, de
Benjamín Gavarre

Sirvienta: Eso..., pero yo nunca me puedo acordar La Moza Retobada, de


Benjamín Gavarre
del apellido de este señor. De la duquesa de
Chamery,
sí. ¡Qué buena!

Rocambole: Un ángel embalado en una mujer...

Sirvienta: También me acuerdo de Bacarat...

La Moza Retobada
Rocambole: Ella sí era una perdularia. Pero también
se redimió. Dejó de vender su cuerpo a los hombres, EL ORGASMO DE MARÍA,
DE ANDRÉS CARO BERTA
para dedicarse a las buenas obras. Pero usted nunca
conoció a un hombre sobre el que hubieran escrito
cuarenta tomos, ¿no es verdad? (Sepasea
De Uruguay: El orgasmo de María
enfáticamente
por la pieza.) ¡Cuarenta tomos! ¿No es cierto que es Monólogo de la Diva Diva
un honor?
Sirvienta (con admiración ingenua): Y claro que es
un
honor, y bien grande. ¡Cuarenta tomos!

Rocambole: Es lo que yo digo. ¡Cuarenta tomos!


¿Usted sabe que me lee todo el mundo?

Sirvienta: Si viera todo lo que lloré mientras leía sus


aventuras...

Rocambole: Y si mi muy noble patrón (vuelve a La Diva, monólogo de Benjamín Gavarre

descubrirse)^
Paso del Agua que se acaba,
el señor Ponson du Terrail, no hubiese de Benjamín Gavarre
muerto, hubiera escrito otros cuarenta tomos. ¿Se da
cuenta? Y en vez de cuarenta hubieran sido ochenta
tomos... Entonces sí que mi felicidad habría sido
completa... ¡Ochenta tomos!... Pero hay que
conformarse, Paso del Agua que se acaba

¿no le parece, señorita? Todos los días nacen


YO, EL PEOR DE LOS
miles de personas y se mueren otras tantas y nadie DRAGONES, DE BENJAMÍN
escribe GAVARRE
una línea sobre ellos. En cambio, sobre mí se
han escrito cuarenta tomos. Dígame: ¿no le parece
que tengo razón de estar orgulloso?

Sirvienta: Y bien orgulloso... Si fuera yo, no sé lo que


haría...

Rocambole: No es que yo sea vanidoso..., pero


también
hicieron películas. BENJAMÍN GAVARRE

Páginas Buscar obra


Sirvienta: Las vi: en series... Página principal
o autor
Buscar

Rocambole: No pusieron ni la décima parte de los Buscar este blog


cuarenta tomos... Lo que hay es que los empresarios Buscar

de cine son unos ladrones... ¿Usted no cree que es la


envidia?... (Confidencialmente.) Hay mucha gente
que
me tiene envidia. (Lamentándose.) ¿Y por qué?...
¿Quiere decirme por qué, señorita? Porque el muy
noble señor Ponson du Terrail (torna a quitarse
elsombrero)
escribió cuarenta tomos sobre mí..., aunque a
decir la verdad yo no he venido a hacer mi propio
elogio aquí, no, sino para algo mucho más
importante.
Usted ha recibido una herencia...

Sirvienta: ¡Una herencia!...

Rocambole: Sí, treinta millones...

Sirvienta: ¡Treinta millones!...

Rocambole: Me equivoqué... Quería decir...


trescientos
millones...

Sirvienta (llevando las manos al pecho): ¡Es


posible!...
¿Trescientos millones?

Rocambole: Con cincuenta y tres centavos...

Sirvienta (tambaleándose en la silla): Estoy


mareada...
No sé...

Rocambole: Pero usted ya no es la sirvienta, ¿me


entiende?
No. Usted es la huérfana. (Enfáticamente.) La
pobre huerfanita, la huérfana menesterosa.

Sirvienta: Esto es demasiado. No lo resisto, señor...

Rocambole: Hay que resistirlo... ¿Qué haría,


entonces,
si se escribieran cuarenta tomos sobre su vida?
¿Cómo resistiría? He resistido yo...

Sirvienta (tímidamente): Es que


no son cuarenta tomos...

Rocambole (indignado): Señorita..., por favor...


Usted
no va a comparar la despreciable e innoble cantidad
de con cuarenta tomos.
los tiene cualquier salchichero
enriquecido, cualquier tendero de Nueva York,
cualquier
analfabeto australiano... pero cuarenta tomos...,
no me indigne, señorita... ¿Usted puede citar
algún hombre sobre el cual se hayan escrito cuarenta
tomos? ¿Puede citarlo? Contésteme.

Sirvienta: No, en verdad.

Rocambole (satisfecho, respirando): Ya ve..., no hay


que confundir... (Imperativo.) Usted es la huérfana...
Yo he descubierto al que le robó los trescientos
millones...
y se los entrego a usted; magnánimamente le
entrego con cincuenta y tres centavos.
(Descarga un bulto en elsuelo.) Y usted me firma
recibo ahora. (Extrae un papel del bolsillo y una
estilográfica.)

Sirvienta: ¿Firmar recibo?

Rocambole: Los principios son principios, señorita.


Hay que respetarlos. Ésta es una operación
comercial.
Yo le entrego a usted y usted
me firma recibo. No salgamos después con que yo no
le he entregado...
Sirvienta: Pero, señor...

Rocambole (dogmático): Hay que respetar los


principios,
señorita. Firme...

Sirvienta (dichosamente ofendida); ¡Cómo no...,


cómo
no le voy a firmar!... (Firma.)

Rocambole (echándose el recibo al bolsillo): Porque,


usted
sabe, nunca puede preverse lo que ocurre en la
vida...

Suena el timbre de servicio y la Sirvienta sale.


Rocambole
se escurre por la puerta, y la escena queda por un
instante vacía.

CUADRO SEGUNDO

ESCENA I

Lentamente la luz decrece en el cuchitril hasta


convertirse
la progresiva oscuridad en tíniebla cimeriana. Se
escuchan
pasos, e insensiblemente una luz verdosa inunda la
habitación,
revelando ahora a la Sirvienta sentada a la orilla
de su camastro. Pero el cuchitril ha crecido,
prolongándose
su muro en el puente de un transatlántico, con
amarilla chimenea
oblicua y las plumas de los guinches, abiertas en
abanico.
Claridad anaranjada rueda sobre la nave y la
perspectiva
plateada y verdegay del océano quimérico.

Un Marinero entra en la zona del puente y sin decir


esta
boca es mía deposita una hamaca. Luego mira el mar
y sale.

La Sirvienta lentamente se desprende de su ensueño


y
avanza hacia la pasarela de la nave, poniéndose una
mano
sobre los ojos a modo de visera para mirar el
horizonte. La
criada, encogida y triste, se ha transformado en una
criatura
voluptuosa y elástica que sonríe con delectación al
paisaje que la rodea.

Importante: La Sirvienta en el transcurso de toda la


obra continúa vistiendo su guardapolvo de
menestrala, y
los personajes de humo afectarán no darse cuenta de
ello.

ESCENA II

Con andar de gato solapado se cuela en la escena,


tras
la Sirvienta, el Capitán. Éste observa un instante a la
criada y después sonríe con sonrisa fisgona.

Capitán: ¿Le gusta el paisaje, señorita? (En la


posición
en que están colocados ambos el paisaje es invisible,
pero
ellos actúan como si estuviera allí ante sus ojos,
revelándose
de este modo la maravilla de la imaginación creadora
y el poder soñador de la Sirvienta.,)

Sirvienta: ¡Qué curiosas esas calles que suben y


bajan
entre montañitas!

Capitán: Se llaman cerros. Ése, a su izquierda, es el


de San Andrés; el otro, por donde baja la fila de
burros,
el de San Antonio...

Sirvienta: ¿Y aquella cúpula de oro?...

Capitán: De la catedral. Esas callecitas eran antes el


camino que llevaba al pueblo de los gitanos... Por
aquí anduvo un cómplice de Rocambole antes de que
a Rocambole lo salvara un ángel...

Sirvienta: La duquesa de Chamery...

Capitán: Eso mismo.

Sirvienta: Ahora parece de fuego la montaña. ¡Qué


roja!

Capitán: Un efecto de sol.

Sirvienta: ¿Y ese camino tan blanco?

Capitán: No es camino, sino canal abandonado. Se


ha llenado de Lirios de Agua.

Sirvienta: Vea si no parece de diamante esa cascada


junto a los árboles rojos...

Capitán: Granados en flor. Es la estación.

Sirvienta: Yo sabía perfectamente que eran


granados...
Pero no se lo dije para dejarle a usted ese gusto,
Capitán.

Capitán: ¡Qué curioso!

Sirvienta: Se me ocurre que debe de ser desabrido un


viajero que no pregunta nada y lo sabe todo. Viajar
sabiendo no tendría gracia. Y, además, ¿cómo luciría
sus conocimientos el capitán del barco? ¿No le
parece?...
¿Y esa torre de oro?... Ahora sí que no sé...

Capitán: Mármol amarillo. Pertenece al castillo de


un grande de España.

Sirvienta: ¡Qué curiosa coincidencia, Capitán!

Capitán: ¿Qué coincidencia?

Sirvienta: Este paisaje es idéntico a uno que vi en "La


Esfera". Me acuerdo perfectamente.

Capitán: ¡Ah!... La revista española... Sí,


efectivamente,
ahora recuerdo yo también que lo reprodujo.
¿Ve? En aquel monte se dice que se reúnen los
gitanos.

Sirvienta: Se distingue bien a la pastora.

Capitán: Y los corderitos.

Sirvienta: El de atrás es el pastor...

Capitán: Sí, el que lleva la gaita.

Sirvienta: ¿Y ese de trabuco y faja colorada?

Capitán: Debe de ser un bandido o un contraban


dista...

Sirvienta: ¡Qué notable! De colorada que estaba la


montaña se pone violeta.

Capitán: Es debido a la puesta de sol... ¿Usted nunca


viajó?

Sirvienta: No, pero como hace poco recibí una


herencia
de trescientos millones, viajo...

Capitán: ¡Trescientos millones! Es una suma respe


table...

Sirvienta: Claro que lo es...

Capitán: Con razón yo me decía: "¿Quién será esta


señorita distinguida que viaja con tanto lujo?"...
Supongo
que estará conforme de la atención del servicio
aquí en el barco...

Sirvienta: Sí... Las mucamas son muy buenas chicas.

Capitán: Personal seleccionado. Mi barco es como


un templo. Los camareros son castos y las mucamas
virtuosas. ¿La comida es de su agrado?

Sirvienta: Sí... Además, yo no me fijo mucho...

Capitán: Cuando se tienen hay


que fijarse en todo.

Sirvienta: ¿Por qué?

Capitán: ¿Y para qué tener entonces?...


¿No le parece? Si no fuera así tanto derecho
tendría a fijarse y a tener pretensiones el que no
tiene un centavo como el que es multimillonario,
como
usted. (Mirando en derredor.) ¡Qué rápido que ha
salido la luna!

Sirvienta: Es maravilloso. Las montañas parecen de


plata.

Capitán: ¿No distingue esa hoguera?...

Sirvienta: Sí, lo más bien... Pero ¡qué notable!...


Fíjese
en esas mujeres...

Capitán: Bailan un bolero...

Sirvienta (poniéndose las manos en las orejas): Se


oyen
las guitarras...

Capitán: Fíjese cómo zapatea ese gitano...

Sirvienta (cayendo de rodillas): Señor, te doy las


gracias
por haber permitido que goce tamañas maravillas...

Capitán: ¿Qué le pasa, señorita? (La Sirvienta sepone


de pie.)

Sirvienta: Estoy conmovida, Capitán. ¡Ah, si usted


supiera! Cuando yo vivía en Buenos Aires y no había
recibido la herencia, para distraerme iba a las
estaciones...
Viajaba en tren... Naturalmente..., viajes
cortos..., media hora... Me parecía que me iba muy
lejos..., no sé adonde. Tenía la impresión de que el
tren sólo podía parar en una estación donde hubiera
casas en que todo el mundo era feliz...

Capitán: Es muy instructivo viajar.


Sirvienta: A mí no me interesa la instrucción. Me
gusta
el tren porque va lejos... y, además, ¿usted sintió
ese olor a carbonilla mojada que tienen las
locomotoras?...
(Cambiando de tono.) ¡Oh, qué lástima, ya no
se ve más la hoguera!...

Capitán: Comienza el desierto ahora. Permítame,


que me llama el segundo. (Sale. La Sirvienta se
sienta
en su mecedora.)

ESCENA III
Aparece el Galán caracterizado como en el prólogo.

Sobre la mecedora de (a Sirvienta cae un cilindro de


luz
blanca, fría y lunar.
Galán (de pie junto a la mecedora): Señorita..., señori
ta...

Sirvienta: ¡Ah! ¿Es usted...?

Galán (lentamente): Sí, soy yo... soy yo...

La Sirvienta lo mira un instante y luego resuelve


seguir
el juego de la comedia amorosa.

Sirvienta: ¡Ah!... ¿Es usted..., es usted...?

Galán: ¿Me permite decirle que la amo?

Sirvienta (con dulzura irónica): ¿No podría


decírmelo
de otra manera?
Galán (sorprendido): ¿Por qué?

Sirvienta (siempre con su modito irónico): Porque de


esa
manera se me han declarado varios dependientes de
tienda, farmacia y panadería.

Galán: ¡Oh, no me compare!... Usted desea que yo


sea un escogido.

Sirvienta: Sí... un poco más expresivo.

Galán: ¿Quiere que me arrodille?

Sirvienta: ¡Oh!... No, es viejo y, además, se le


mancharían
los pantalones.

Galán: ¿Entonces quiere que finj a el Galán


melancólico?

Sirvienta: ¡Hombre, qué duro de entender es usted!


Si
yo fuera hombre me vendría por detrás de la
mecedora
y, besándola fuertemente a la muchacha que
quisiera, le diría despacito: "Te quiero mucho...,
mucho..."

Galán: ¡Oh! Entonces lo que usted pide es un


procedimiento
de novela alemana...

Sirvienta (terminante): No he leído nunca novelas


alemanas.
He leído "Rocambole", que es bien largo...,
cuarenta tomos..., y nada más... (El Galán calla y
retrocede;
la Sirvienta cierra los ojos y el Galán, acercándose de
puntillas, la toma por ¡os maxilares y la besa en la
boca.)

Galán: Te quiero mucho..., mucho...

Sirvienta (condisplicencia): No está del todo mal...


Yo
también, dueño mío. (Se siente a la distancia el
rugido
del león arenero.) ¡El león!...

Galán: Ruge de amor...

Sirvienta: Igual que en el Jardín Zoológico.

Galán: ¿Dónde queda eso?

Sirvienta: Allá..., en Buenos Aires... Pero, hablando


de todo un poco... ¿así que usted me ama?

Galán: La amo desde que la vi en el comedor. Y me


juré interiormente que si usted me daba su mano la
haría mi esposa ante Dios y los hombres.

Sirvienta: ¿Por qué no habla de otra manera? Si yo


fuera hombre me declararía en otra forma...

Galán (malhumorado): ¿Puede decirme qué papel


hago
yo aquí? ¿Soy yo o es usted la que se tiene que
declarar?

Sirvienta: ¡No se enoje, hombre!... Pero, usted es


bastante estúpido como galán. ¿A quién se le ocurre
decirle a una mujer: ¡Te amo! Eso se dice en el
teatro;
en la realidad se procede de otra manera. En la
realidad,
cuando un hombre desea a una mujer, trata de
engañarla. Lo creía más inteligente. A nosotras las
mujeres nos gustan los desfachatados...

Galán: Hay que vivir para ver... y creer...

Sirvienta: Sea positivo. Yo soy una mujer positiva


como todas las mujeres. Y a las mujeres no les
gustan
los prólogos en el amor. No, señor Galán, convénzase
usted. (Imperativa.) Le voy a dar una lección.
Siéntese
en esa mecedora. (El Galán se sienta;
la Sirvienta retrocede, luego se acerca y se inclina
sobre
él.) Bueno, haga de cuenta que yo soy el hombre y
usted la mujer. (Dice en voz muy dulce.) Niña... me
gustaría estar como un gatito en tu regazo. (Se
inclina
bien sobre el hombre.) Quisiera que me convirtieras
en tu esclavo. Quisiera encanallarme por
vos... Bueno, ahora haga usted lo que quiera, pero
compréndame. (El Galán deja su asiento; lo ocupa la
Sirvienta.

Galán: ¿No se da cuenta de que una persona decente


no puede hacer eso?

Sirvienta: Si seguimos en ese tren no terminaremos


más. Aquí no se trata de pedirle un certificado de
buena conducta, sino de que proceda como a mí me
gusta. Usted es... Yo tengo trescientos millones...

Galán: Es que yo nunca tropecé con una mujer como


usted.

Sirvienta (menea la cabeza, luego se ríe): ¡Qué


hombre
éste..., qué Adolfo!...
Galán: ¡Oh!... ¡Usted sabe que me llamo Adolfo!
¡Oh! ¡Usted pronunció mi nombre! ¡Oh! ¡Puedo mo
rir tranquilo!

Sirvienta: En efecto, nada se perdería si usted reven


tara..., pero ¿por qué quiere morir joven?

Galán: Mi vida se desenvuelve bajo un signo fatal.


Me persigue el homicida amor de una gitana...

Sirvienta: ¡Joróbese, por zonzo!...

Galán (iracundo): Esto es imposible... Usted me echa


a perder los efectos.

Sirvienta: Cálmese; le voy a seguir el juego...


(Haciendo
gestos de primera actriz.) ¿Cómo..., tú me eres infiel?

Galán: No, no le he correspondido nunca..., pero


ella me sigue a través de montañas y de mares...

Sirvienta (cariñosa): Chiquito, ¡cuánta novelería!...

Galán: Es una mujer fatal.

Sirvienta: Chiquito..., las mujeres fatales sólo se


encuentran
en el cine. Nosotros nos casamos y sanseacabó
la mujer fatal.

Galán: No tengo dinero para casarme. Además, un


galán que se casa es ridículo y hace reír a las mujeres
a quienes engañó y con quienes no se casó.

Sirvienta: Me gustas y te compro. Tengo trescientos


millones.

Galán (rascándose la cabeza): La suma es respetable.


¡Trescientos millones! Pero ¿qué dirá ella, que
atravesó
montes y mares?...

Sirvienta: ¡Qué duro de entender es usted! Observe


que mares y montañas son una mentira para darle
un
poquito de poesía a mi sueño. Aquí la única que
sueña
soy yo, nadie más que yo.

Galán: Me arrodillo entonces...

Sirvienta (malhumorada): Haga lo que quiera.


(Aparte.)
Este hombre es un perfecto imbécil, como todos
los galanes...

Galán (declamatorio): Recorrió los mares y las


montañas.

Sirvienta: Y los bosques, ¿dónde los deja?...

Galán (porsu cuenta): Yo miraba a una mujer...


miraba
a otra y ninguna me gustaba... (La sirvienta lo mira
y menea la cabeza consternada ante el latoso.) Y me
decía: "¿Por qué ninguna doncella me ama? ¿Porqu é
ninguna jovencita corre a mi encuentro y me
estrecha
contra su pecho?... ¿Por qué las ciudades no se
derrumban
cuando paso y los gobernadores no me coronan
de flores..., y el cordero no come pasto junto
al león, ni el león juega con el cabrito, si mi corazón
está repleto de amor?"

Sirvienta: Eso es interesante.

Galán (pensativamente): ¿Qué se cree, que no sé


pensar
por mi cuenta? ¡Claro que he pensado! El papel
de galán es simultáneamente ridículo y dramático.

Ya ve, usted y yo estamos aquí con el mar al frente y


todavía no nos hemos dado un beso sincero.

Sirvienta: ¿Y a usted le gustaría besarme?

Galán: Me gustaría quererla, a pesar de su carácter


endiablado.

Sirvienta (cavilosamente): ¿Querer?

Galán: Sí, me gustaría quererla mucho, aunque usted


no me quisiera, y humillarme ante usted como un
perro.

Sirvienta: ¿Por qué humillarse?...

Galán (con repentina angustia en la voz)'. No sé...,


pero
hay mujeres que nos producen ese efecto. Primero
las tratamos irónicamente... es como si tuviéramos
la sensación de que podemos azotarlas... y de
pronto esa sensación se nos rompe y en el corazón
nos queda el dulce deseo de ser humillados por esa
mujer, sufrir...

Sirvienta: Es muy lindo lo que dice usted. Siéntese a


mi lado. (El Galán se sienta.) Nosotras a veces
sentimos
también esa sensación: que nos conquiste un
hombre que de una sola mirada nos haga temblar...
y que nos pegue... y que nos bese... ¿Por qué no me
besa ahora?... Me gustaría que me besara.

Galán: No tengo ganas de besarla. (Se levanta y va


has
ta la pasarela de la nave.) El mar..., la luna..., el
corazón
del hombre es más cambiante que el mar...

Sirvienta: ¿Es cierto lo de la gitana?

Galán: ¿Para qué me pregunta eso?

Sirvienta: Es que nosotros estamos enamorados, de


algo tenemos que hablar.

Galán: ¿Nos engañamos mutuamente entonces?

Sirvienta: ¿Y si no nos engañamos ni mentimos?...

Galán: Tendremos que decir enormidades...

Sirvienta: Dígalas.

Galán: Bueno... Me revientan todas las mujeres,


empezando
por usted. Me revientan la forma como besan...,
la comedía que hacen... Me revientan porque
todo el placer que proporcionan no vale los copetines
que se beben a costa de uno. (Súbita transición.)
Perdóneme,..,
me olvidaba de que estaba haciendo el
papel de Galán...

Sirvienta: ¿Y por qué me pidió un beso antes?

Galán: Por pedirlo... Un galán está obligado siempre


a pedir besos, como un boxeador a dar trompadas.
Es el "métier".

Sirvienta (amablemente): Usted es un cínico...


Galán: Es el único elogio que me encanta. Sí, soy
cínico
y desvergonzado y., además, me gusta serlo. En
cuanto dejo de ser desvergonzado se me oprime el
corazón...,
me ataca el asma. Voy por el mundo haciendo
comedia. Conozco los mil gestos que hay que
dibujar para engañar a una tonta; la sonrisa diluida,
la mirada sombría y en el fondo de mí mismo la
burla
hacia la inconsistencia humana. A veces estudio
una pareja de enamorados, y en la expresión de ella
me doy cuenta de qué sistema utilizará para
avinagrarle
la vida al marido, así como en la fisonomía de
él descubro los minutos que durará su fidelidad...

Sirvienta: ¿Y cuáles son las mujeres que le gustan a


usted?

Galán: Las bien vestidas. No importa que sean feas.


Entre una mujer fea bien vestida y una linda
modestamente
trajeada, me quedo con la fea. La mujer no es
nada más que un vestido..., una piel y un sombrero...

Sirvienta: Me gusta y lo compro a.. .

Galán: Usted tiene y yo me vendo...

Sirvienta: Perfectamente. Trato hecho. Allí vienen el


Capitán y Azucena; anuncíeles nuestro compromiso.

ESCENA IV

Por la izquierda aparecen el Capitán, Griselda y


Azucena.
Las amigas llevan un traje de crepé satín marfil y
esmeralda,
ceñido al cuerpo de manera que dibuja una silueta
elegante destinada a contrastar con el guardapolvo
proletario de la menestrala. El Capitán, las Amigas y
el
Galán cambian irónicas miradas de gente de otra
sociedad
que alterna por compasión con una pclafustana
colocada
en su "esfera" por un instante. Luego se doblan a las
exigencias
de la comedia y ya es imposible discernir si ellos son
camaradas o enemigos.

Capitán: ¿Mirando el mar?

Azucena y Griselda (a un tiempo): Buenas noches...

Galán: Señoritas..., Capitán..., llegan ustedes en un


momento muy feliz para mí. Acabo de
comprometerme
con la señorita Sofía.

Capitán: La felicito, señorita... Lo felicito, caballero...

Azucena: Te felicito, queridísima... Y a usted, señor,


también...

Galán: Gracias...

Griselda: Espero que será éste para vos un...

Suena repetidamente el timbre de servicio, y la Sir


vienta pasa a su cuarto y hace mutis. La iluminación
del
barco decrece y los personajes continúan ahora el
diálogo
en escena por su cuenta.
ESCENA V

Griselda: Esta mujer está loca...

Galán (furiosamente): Todas ustedes son unas


chifladas...
Azucena: ¿Qué tenemos que ver nosotras con su
lío?...

Griselda: No se olvide que somos fantasmas como


usted.

Capitán: Su imaginación: la base es "Rocambole" y


su geografía la estudió en la revista "La Esfera".

Griselda: Lo único que ha leído y ha visto.

Azucena: Me dan ganas de no seguir trabajando.. .

Galán (apaciguado): Usted sabe que no se puede.

Capitán: Y se cree seriamente millonada.

Griselda (al Capitán): ¿Vio usted cómo nos tutea?

Azucena (al Galán,): ¿Y cómo le fue a usted?

Galán: Como al diablo.

Capitán: ¿Le hizo hacer la comedia?

Azucena: ¿No se desmayó?

Griselda: ¿No se hacía la pudorosa?...

Galán: ¿La vergonzosa?... ¿Ella hacerse la


vergonzosa?
Están locas ustedes. Casi me da de cachetadas
porque yo, siguiendo mi sistema, no quería represen
tar como se le antojó.

Capitán: Es un oficio bien sucio el nuestro.

Azucena: Me iría, pero tengo los zapatos como


encolados
al piso.

Galán: Yo estoy descuadrillado... Después de la


jorobada
me toca la Sirvienta. Voy de mal en peor.

Griselda: Y yo.

Capitán: Y yo.

Galán: ¡Cuando me acuerdo de mis buenos


tiempos!...

Griselda: Debería prohibírseles soñar a los pobres...

Azucena: Verdad. Un pobre soñando imagina los dis


parates más truculentos.

Galán: Es la falta de cultura.

Capitán: De un tiempo a esta parte el último


lavaplatos
se cree con derecho a tener imaginación.

Griselda: La culpa la tiene el cine... créanme.

Galán: ¡Qué tranquilos estábamos antes en nuestro


mundo astral!

Griselda (a AzucenaJ: ¡Qué bien habla el Galán! (Al

Galán.,) ¿Sabe que me enamora usted?...


Galán: Lástima..., pues no soy nada más que un poco
de humo y éter.

Capitán: Hemos perdido nuestra fuerza antigua;


cualquiera nos esclaviza.

Galán: Y esta mujer tiene una endiablada fuerza de


obsesión.

Griselda: No es cierto.

Capitán: Es como un imán.

Galán: Yo siento que me sacude el ir y venir de su


pensamiento.

Azucena: Lo que yo me pregunto desde hoy es en qué


va a terminar esto.

Galán: Somos como los actores de una obra de tea


tro.

Capitán: La autora es ella...

Griselda: Con la diferencia de que sólo ella nos ve.

Azucena: De cualquier manera, tengo unas ganas


bárbaras de irme.

Capitán: Sí..., uno se harta de fantochadas.

Galán: Las ligaduras que me ataban se aflojan...

Griselda: Efectivamente.

Capitán: Ella está con el pensamiento en otra parte.

Nuevamente la luz decrece en escena, hasta nublarse


el
paisaje en la incertidumbre de la noche.
Galán: Levantemos el vuelo. (Vanse. La escena
queda
desierta durante algunos minutos. En ese silencio se
oye
ejecutado a la distancia en el piano, "Asturias", de
Alhéniz.
Todo se oscurece totalmente y, como en el cuadro
anterior,
se repiten los pasos de la criada, que camina en su
cuchitril.)

CUADRO TERCERO

ESCENA I

Al encenderse la luz la escena aparece desierta. En la


extensión
del muro anteriormente ocupada por el puente
de la nave se abre ahora un ventanal inmenso con
vitraux
de colores emplomados y una hoja entreabierta
que deja ver hileras de olivos y cordones de montes.
La
primera persona que aparece en escena es una
Niñera,
de cofia blanca, y una criatura de meses en los
brazos.
Tras ella, la puerta lateral, entra el Galán, del brazo
de
la Sirvienta.

Galán: Bueno, hasta luego, querida.

Sirvienta: No vengas tarde.

Galán: Daré una vuelta por la montaña.

Sirvienta: No tardes, porque al anochecer, no sé por


qué, me pongo inquieta.
Galán: Quédate tranquila. (Se inclina sobre la
criatura
que sostiene la Niñera y la besa, (faciéndole.) Dígale
adiós a su papito. (Sale saludando con la mano.)

Sirvienta: Hasta luego, querido. (A la Niñera.,) ¿Está


bueno el tiempo?

Niñera: Templado, señora.

Sirvienta: Vaya hasta el jardín. Tenga cuidado con la


nena.

Niñera: Sí, señora.

Sirvienta: Póngase a la sombra, pero donde no haya


humedad ni viento.

Niñera: Sí, señora.

Sirvienta: Si se duerme tráigala en seguida.

Niñera: Sí, señora.

Sirvienta: Póngala en el cochecito.

Niñera: ¿Nada más, señora?

Sirvienta: Vuelva dentro de media hora.

Niñera: Hasta luego, señora.

Sirvienta: Hasta luego. (Mutis de la Niñera.)

ESCENA II

Entra el Lacayo y anuncia.


Lacayo: Con su permiso, señora. Las niñas Griselda
y Azucena preguntan por usted.
Sirvienta: Que pasen. (Mutis del Lacayo.)

ESCENA III

Entran Griselda y Azucena, corren al encuentro de la


Sirvienta, y la abrazan por turno.

Griselda: ¡Tanto tiempo sin verte!

Azucena: ¡Qué linda estás!

Sirvienta: Ustedes sí que están bien...

Griselda: Estás más gruesa... ¡Qué buen color!

Azucena: ¿Y la nena?... Quiero ver a la nena.

Sirvienta: Está en el jardín... Ahora la hago traer.

Griselda: ¿Cómo es?... ¿A quién se parece?

Azucena: Un momento, cállate, a ver sí adiviné yo.


¿Es rubia?

Sirvienta: No, tiene el cabello negro.

Griselda: ¿Viste cómo acerté yo?

Sirvienta: La nariz es del padre... En cambio, la fren


te y la boquita, iguales a las mías.

Azucena: ¡Qué monada debe de ser! Me muero por


verla.

Griselda: ¿Y Adolfo?
Sirvienta: Salió hace un momentíto.

Azucena: ¿Y qué tal es la vida de casada, che?

Griselda: ¿Sos feliz?...

Sirvienta: Sí..., dentro de lo relativo.

Azucena: ¡Qué fría lo decís!

Sirvienta: Te soy sincera, no vale la pena casarse.

Griselda: ¿Adolfo no se porta bien?

Sirvienta: No es eso... Además, no sé por qué me pa


rece que de un tiempo a esta parte Adolfo anda
preocupado.

ESCENA IV

Alboroto exterior compuesto de gritos femeninos, de


preguntas y roncas voces detrás del telón. La
Sirvienta se
pone instantáneamente de pie y sus amigas la
imitan.

Sirvienta: ¿Qué pasa?

Lacayo (entra desaforadamente): ¡Señora, la nena!...

Niñera (se presenta manchada de sangre): ¡Me


robaron
a la nena, me robaron a la nena!...

Sirvienta (avanza fríamente, tomándose las sienes


con las
manos): ¿Qué dice esta mujer?
ESCENA V

Dando grandes zancadas aparece el Galán, el busto


doblado, las manos tomándose el corazón.

Galán: Me han muerto..., la gitana..., mi hija... ,


Dios. (Se desploma en los brazos de la Sirvienta.,)

Sirvienta: Me vuelvo loca.

Galán: Es la venganza de la gitana. ¡Que busquen a


mi hija! (Cae por tierra.)

Sirvienta (volviendo el busto, con los brazos al aire):


Esto
es un sueño.

ESCENA VI

Sonambúlico y fantoche aparece Rocambole en el


umbral del cuarto, extendiendo el brazo
melodramáticamente.

Rocambole: ¡Juro que encontraré a su hija, señora!

La Sirvienta cae de rodillas junto al Galán. Griselda y


Azucena se aprietan una junto a otra. Suena el timbre
de
servicio tan furiosamente, que la Sirvienta de un salto
se
precipita a su cuarto. Mutis de Rocambole y la
Sirvienta.

ESCENA VII

Galán (incorporándose del suelo, donde bacía la farsa


del
cadáver): Juro por mi honor que esta mujer está más
loca que una cabra.
Griselda: No se anda con chiquitas. Su drama
necesita
una docena de cadáveres, por lo menos.
Azucena: Así es la imaginación plebeya.

Galán: ¡Al diablo con el oficio de personaje!


Niñera: Gracias a Dios, no tengo nada más que hacer
aquí.

Griselda: ¿De modo que usted se va?

Galán: Afortunadamente.

Azucena: Tiene suerte.

Griselda: ¿No quiere que lo acompañe?

Galán: No quiero líos, tramoyas ni complicaciones;


bastante me amargan la vida las corcovadas y las
dementes,
para entramparme con fantasmas.

Niñera: ¡Como si usted no lo fuera!

Galán: No discuto eso..., pero me voy. (Sale el Galán


y detrás, encorvados y graves, uno tras otro, los
fantasmas
del drama. Lentamente se apaga la iluminación
brujesca
del decorado. En la desolación gris del rectángulo de
los
sueños aparece, alcahueta y cojeando, la Muerte.
Espía
por un resquicio el cuarto de la Sirvienta,,)

Muerte: Todavía no está a punto la palomita


fantasiosa.
Todo le pasa por no comer jamón del diablo.
TELÓN

Acto II

Ahora el cuarto de la Sirvienta es prolongado en la


zona
del ensueño por una carbonería de arrabal. A los
costados
del foro, pilas de carbón, que dejan un pasillo
estrecho.
Allí se ocultan rápidamente Rocambole y la
Sirvienta.
No terminan de esconderse tras la pila cuando
avanza hacia
la escena una chiquilla de catorce años en alpargatas.
Largo vestido rojo, y el cabello suelto sobre la
espalda,
como reproducen a Genoveva de Brabante ciertas
tricromías
que ilustran los salones de barberos y betuneros. La
niña arrastra una pala de carbón con una mano y en
la otra
lleva una bolsa. Comienza a llenar la bolsa, luego se
detiene
y se arrodilla en medio de la escena.

Personajes reales:

Sirvienta, Patrona.

Personajes de humo;
Cenicienta, Compadre Vulcano, Ruñan Honrado,
Rocambole.

ESCENA I

Cenicienta: Dios mío, ¿por qué no me diste una


madre
buena como a las otras chicas? ¿Por qué estoy sola
en este mundo, Señor de los Cielos, si yo nunca he
hecho ningún mal? (Tras la pila visible para el
público,
en esta escena, la Sirvienta trata de precipitarse hacia
la
niña, pero Rocambola la contiene con un gesto y
luego
saca de su bolsillo un revólver. La Sirvienta se
sosiega. La
Cenicienta, incorporándose.) ¡Dios mío, si vos existís
hace que encuentren a rni mamita! (Cuando la
Cenicienta
pronuncia estas palabras penetra en el antro, por el
pasillo, un hombregigantesco, con el rostro
manchadode
carbón, gorra de visera de hule y blusa proletaria.
Elgandul,
llamado Compadre Vulcano, escucha la imploración
de la Cenicienta, avanza hasta ella en puntas de pies,
la toma de una oreja y exclama.)

Vulcano: ¡Así correspondes a mis sacrificios:


invocando
a Dios para que perjudique mi comercio!

Dicho esto, el Compadre Vulcano suelta de la oreja a


la
niña y con las manos en ¡arras se queda
contemplándola.
Cenicienta: Rezaba, tío...

Vulcano: En mi carbonería está prohibido rezar.


¿Qué necesidad tenes de rezar? ¿No estás bien acaso:
gorda y lustrosa como una liebre?

Cenicienta: Tío... perdóneme...

Vulcano: No soy tu tío. No quiero serlo. Además no


lo soy. Jurídicamente no puedo ser tu tío. Que lo sea
Satanás. Sí, Satanás. ¡Y correspondes a mis
sacrificios
invocando la ayuda de Dios en mi propia carbonería
para que me perjudique, porque la clientela no
quiere saber nada con Dios!

El truhán se pasea de un lado a otro del


"establecimiento",
mientras la Cenicienta, consternada, menea la
cabeza. Vulcano se enjuga la frente con un pañuelo
de
cuadros, y luego continúa con su tono de bufón
consternado.

Vulcano: No sé por qué me parece que he visto a


Rocambole
en los alrededores de esta casa. ¡Maldito sea
el bandolero! (Dirigiéndose a la chica.) ¿Negarás que
soy bondadoso con vos? ¡No! ¿Podes negar que
tengo
el corazón de pasta flora? ¡No! Cuando te trajeron
fue para que te cortara la lengua y te quemara los
ojos con vitriolo.

Tras la bolsa de carbón la Sirvienta se toma la


cabeza,
en compañía de Rocambole, que aventura un gesto
de
fantoche justiciero.
Vulcano: Si yo me hubiera portado honradamente
con la gitana que te hizo robar, no podrías ahora
invocar
la ayuda de Dios para que me perjudicara. (La
Cenicienta se estremece y junta los brazos, encogidos
por
el codo, al cuerpo.) Ya ves si soy bondadoso. No te
corté
la lengua. ¿Quién me lo impedía? En la Taberna de
la Sangre le corté la lengua a una chica. Que lo diga
el maldito Rocambole si no se la corté. Ya ves. Pero
escuchando los pedidos de mi tierno corazón no te
corté la lengua.

El bandido se pasea de un lado a otro y luego


continúa
enfático y magnánimo.

Vulcano: Es que soy un sentimental. No puedo


negarlo.
Mi santa madre me lo decía: No irás a ninguna
parte, Vulcanito, con tu tierno corazón. Sos
demasiado
virtuoso. Tenía razón la pobre. Soy un
sentimental. Perjudicando mis intereses te visto y te
alimento. Y ¿cómo me lo agradeces? ¿Se puede
saber?
Invocando la ayuda de Dios para que me perjudique.
¿No sabes que está prohibido invocar el nombre
de Dios en vano? ¿No leíste los libros santos? No
invocarás el nombre de Dios en vano. Y vos
obstinadamente
con tu mala conducta llamando la cólera de
Dios sobre mi establecimiento comercial, y la
indignación
de mis clientes. Tenías que llenar diez bolsas
de carbón... ¿y dónde están?...

Cenicienta: Llené cuatro..., tío.


Vulcano: Y yo sacrificándome. ¿Para esto te engordo
con alimentos nutritivos? Y mientras yo exploro las
calles de esta ciudad, porque es necesario que un
honrado ciudadano observe la vida de sus prójimos
para saber cómo robarles..., holgazaneas en mi
carbonería
igual que la hija de un general y te divertís
como si tuvieras que heredar a un banquero.

Cenicienta: Tío..., ¿divertirme yo?

Vulcano: ¿Cómo?... ¿No es un divertimiento llenar


bolsas de carbón? ¡Oh, ingratitud humana! ¿Y con
qué me pagarás entonces el vestido que llevas
puesto?
¿Y esas hermosas zapatillas? ¿Qué sería de vos si
hubieras naufragado en una isla desierta? ¿Con qué
te alimentarías? ¿Qué querés vos, que traiga la ópera
lírica a mi establecimiento? ¿Qué contrate el circo
Hagembeck? ¿Pretenderás acaso que implore la
caridad
pública para que con el producto de mis sacrificios
te emperifolles como la hija de un espadón? No,
no... gracias al diablo, esto termina. Escucha, vení.

La Cenicienta se acerca a Vulcano y éste le habla al


oído unos momentos. Se oye que golpean las manos
afuera,
y Vulcano exclama.

Vulcano: ¡Allí está! ¡Adelante!

ESCENA II

Entra un viejo gordo, grasicnto y granujiento, con


traje de color canela, bastón-garrote y una chisterita
jovial.

Viejo: Buenas tardes, señor Vulcano.


Vulcano (a la Cenicienta^: Querida sobrina, éste es
el
Rufián Honrado, de quien te hablaba recién.

Viejo: ¡Oh!... En cuanto a honrado..., nadie como


yo... En cuanto a rufián, es mi profesión, porque yo
desde chico siempre me atuve a esta máxima: la
ociosidad
es la madre de todos los vicios.

Vulcano: ¿Ves, sobrina, cómo coincide conmigo este


hombre de bien?

Viejo (estirando el bastón y tocando a la Cenicienta


con
él): ¿Ésta es la paloma que vas a vender?

Vulcano: La misma.

Viejo: Flaca está.

Vulcano: En eso se demuestra su buena condición.


No
es golosa. Sólo engordan las perezosas. Además las
gordas
no les gustan tanto a los hombres como las flacas.

Viejo: Es un parecer.

Cenicienta: ¡Dios mío!

Viejo: ¿Qué le pasa a esta cabrita?

Vulcano: Exclama ¡Dios mío! Por la alegría que le


causa ir a vuestra casa.

Viejo: ¿Es cierto, palomita?


Cenicienta (tristemente): Sí, señor.

Viejo: Demuestras una excelente educación.

Vulcano: Son mis sacrificios. El sudor de mi frente...

Viejo (sardónico): Se explica que quiera estar ya en


mi
establecimiento. (Dirigiéndose a la Cenicienta.^
Tengo
muchas chicas como tú..., eso sí..., bien vestidas y
mejor alimentadas. Todas están muy contentas.

Cenicienta: ¡Qué alegría! ¿Es muy grande su colegio,


señor?...

Vulcano: Grande como un barco. Con varios pisos y


muchas luces y hasta música.

Viejo: Yo soy para mis muchachas como un padre. A


ver, niña... (El Viejo estira el garrote.) Vuélvete... (La
Cenicienta gira sobre sí misma y el Viejo poniéndose
la
palma de la mano a modo de visera sobre los ojos
examina
atentamente.)

Vulcano: No le quitarás méritos a la mercadería,


viejo
tramposo.
Viejo: Es flaca. Tiene un hombro más alto que el
otro. (A la Cenicienta.,) ¿Tú sabes hablar en francés?
Cenicienta: No, señor.
Viejo: ¿Bailas danzas clásicas?
Cenicienta: No, señor.
Viejo: ¿Tienes novio?

Cenicienta: No, señor.


Viejo: Malo..., malo... ¿Qué es lo que sabes hacer
para atraer a los hombres?

ESCENA III

Tras la pila de carbón salta la Sirvienta esgrimiendo


un revólver y tras ella Rocambole con otro pistolón.
Sirvienta: ¡Cállese, monstruo!... ¡Viejo maldito!...
Vulcano: ¿Y esta vieja de dónde sale?
Viejo: ¿Y este señor con un revólver? (A Vulcano.

Me has tendido una trampa...


Rocambole: Buenas tardes, caballeros.
Vulcano (enfático): Me quejaré a la policía. ¿Quién
es
usted? Ha violado mi domicilio.

Rocambole: ¡Buenas tardes he dicho!

Viejo: Con su revólver interrumpe nuestros tratos


comerciales.

Sirvienta: ¡Cállese, bandido!

Viejo: Yo no puedo tolerar que una vieja cabra me


trate de bandido.

Sirvienta: ¡Y de rufián espantoso!

Viejo: Yo no puedo tolerar esto. Soy un comerciante.


Ejerzo una profesión lícita. Pago patente. Soy útil a
la
sociedad. Estoy al día con mi matrícula. (El Viejo
patea
el piso indignado.) ¿Por qué viene a interrumpir
nuestras transacciones comerciales?

Rocambole: He dicho buenas tardes y nadie me ha


contestado.
Vulcano: ¿Qué me importa a mí que usted me desee
buenas tardes?

Viejo: ¿Quién diablos es usted para que nosotros lo


honremos con nuestro saludo?

Sirvienta (a la Cenicienta,): Ven aquí., pobre


criatura.

Cenicienta: Sí, señora... Usted tiene cara de buena.


(Se pone al lado de la Sirvienta.,)

Vulcano (a Rocambole,): Usted está violando las


leyes...
Me amenaza a mano armada...

Rocambole: Soy el ex presidiario. ¡Soy Rocambole!

Viejo: ¡Rocambole!...

Vulcano: ¡Muerto soy!...

Viejo: Pero ¿usted no se había muerto?

Rocambole: Allí donde hay una huérfana que


proteger
de malvados, o una viuda, de abogados, allí estará
Rocambole.

Viejo (quitándose el sombrero): Si usted es


Rocambole...
y debe de serlo... prudentemente retiro todo lo
que he dicho. Sí, señor, retiro lo que he dicho. A
usted,
señora, la he llamado vieja cabra. Desde hoy deja
de ser una vieja cabra para convertirse en una
dignísima
dama.

Sirvienta: ¡Cállese, monstruo!


Viejo: Los débiles y los viejos estamos obligados a ser
bufones para que no nos echen a puntapiés de los
rincones
donde nos metemos. Además la tormenta es
con el señor Vulcano, si no me equivoco.

Cenicienta: Señora, este viejito quería llevarme a un


colegio.

Viejo: Digan si no da gusto tanta inocencia. Lo que


yo quiero es dejar constancia de que no he atentado
contra su pudor. Como la encontré, queda.

Cenicienta: ¿Qué tiene de malo que quisiera llevarme


al colegio?

Vulcano (patético): ¿Ven qué educación más


esmerada
ha recibido? No tiene tanto así de malicia. Son mis
sacrificios... el sudor de mi frente.

Viejo: Con perdón de ustedes me escurro... No


quiero
sacarle las castañas del fuego a un mal hombre como
éste. (Señala a Vulcano.,) Señor Rocambole,
dignísima
dama..., siempre a sus órdenes. (Se retira caminando
pa
ra atrás con el sombrero en la mano y al llegar al final
del
pasillo exclama:) ¡Pueden despellejarlo
tranquilamente,
que yo no diré palabra! Quien mal anda mal acaba.

ESCENA IV

Rocambole, la Sirvienta, Compadre Vulcano y la


Cenicienta.

Rocambole: Bueno..., ahora que estamos solos


vamos
a conversar, amigo Vulcano. ¿Dónde está tu legítima
esposa?

Vulcano: En la cárcel.

Rocambole: ¿Tus hijos?

Vulcano: En presidio.

Rocambole: ¿De manera que toda la familia


veraneando?
Vives más tranquilo y solitario que un canónigo.
Los parientes no te molestan.

Vulcano: Ni la policía tampoco. Me he regenerado,


vivo, y os juro, señor Rocambole, que no hay
satisfacción
más grande que vivir honradamente. (Volviéndose
a la Sirvienta.,) ¿Así que usted es la esposa de
este digno caballero? ¡Qué orgullo debe de
ensanchar
su corazón de matrona virtuosa al tener por marido
a tan grande hombre!

Sirvienta: ¡Cállese! (Vulcano intenta dar un paso más


adelante.)

Rocambole: Queridito..., como te muevas otra vez te


limpio el corazón de porquerías. (Vulcano
retrocede.)
Hablemos seriamente. ¿De dónde sacaste esta
chiquita?

Vulcano: Me la dio a cuidar una mujer cuando era


una tierna criatura.
Rocambole: Habla lisa y llanamente. ¿Quién era esa
mujer?

Vulcano: La madre.

Rocambole: Estás mintiendo, Vulcano.

Vulcano: El padre murió en presidio.

Rocambole: Compadre Vulcano, hay que mostrar el


juego o terminaremos mal.

Vulcano: Vino la madre y me dijo: "Te entrego esta


perlita de mis ojos".

Rocambole: Me estoy aburriendo. ¿De modo que la


chiquilla te la dio la madre?

Vulcano: Lo juro bajo mi honrada palabra.

Rocambole (a la Sirvienta): Descúbrale la espalda,


señora.

La Sirvienta le rasga el vestido y mirando a la


criatura
exclama:

Sirvienta: ¡Aquí tiene la crucecita que le hizo la


partera
al nacer! ¡Hija mía!

Cenicienta: ¡Madre mía, qué alegría!

Sirvienta: Hija mía..., tantos años..., queridita.

Cenicienta: Yo sabía que tenía que llegar este día.

La criatura y la Sirvienta se abrazan repetidamente y


se establecen unos segundos de silencio.
Vulcano: ¡Qué grupo más emocionante! (Siempre en
comediante.) Dan ganas de llorar. (Avanza un paso,
pero
Rocambole interpone rápidamente el revólver.)

Rocambole: ¡Quieto, bandido!

Vulcano: Estoy emocionado. No en vano decía yo


siempre que esta criatura era de noble linaje.

Rocambole: Pichón, tenes que cantar..., hay que


cantar,
querido...

Vulcano: ¿Y si no canto?

Rocambole: Sabes que me cuesta mucho menos


trabajo
enfriarte que decirlo.

Vulcano: Bueno, patrón, cantaré como un canario.


Estaba mal. Me ofrecieron la tenencia de la nena. El
que le dio la puñalada fue Lagarto. El que robó la
nena
fue Monseñor...

Rocambole: Tú estabas allí. Monseñor en ese tiempo


estaba preso.

Vulcano: ¿Qué diría mi santa madre...?

Rocambole: Deja tranquila a esa vieja maldita.

Vulcano: Lagarto fue el que le dio la puñalada al


padre.
Yo robé a la nena. Por los Santos Evangelios, patrón,
que yo únicamente robé a la nena. La gitana no
cumplió lo estipulado.
Rocambole: Y sólo recibiste cincuenta mil francos en
vez de los cien mil tratados...

Vulcano: ¿Cómo sabe eso, patrón?

Rocambole: Queridito: yo no estoy aquí para


contestar
sino para preguntarte... Y si no le arrancaste la
lengua a la criatura ni la dejaste ciega fue con la
esperanza
de sacar más provecho...

Vulcano: Esas son mentiras del Lagarto. Si yo no le


hice daño a la criatura fue debido a mi tierno
corazón.
Que lo diga la chiquilla. (Dirigiéndose a la
Cenicienta.,)
¿No es cierto que te cuidaba como a la hija de
un coronel? ¿No es cierto que he querido darte una
educación esmerada? ¿No es cierto que te daba
alimentos
nutritivos abundantes en vitaminas?

Cenicienta: Pero muchas veces me pegaba...

Vulcano: Como un padre. ¿Qué padre no le da una


palma de vez en cuando a sus hijos?

Cenicienta: Me pegaba con alambres cuando se


enojaba...

Sirvienta: ¡Monstruo!... ¡Hijita querida!... ¡Pobre


chiquita mía!...

Vulcano: ¡Oh! ¡Oh! Se me desgarra el corazón. No,


yo no le he pegado... con alambres, no.

Rocambole: ¿Así que te pegaba con alambres?


Cenicienta: Pero decía que era por mi bien.

Sirvienta: ¡Monstruo!... ¡Monstruo! ¿No le da


vergüenza?...

Rocambole: Hay que arreglar cuentas, Compadre


Vulcano. Mataste al padre. Robaste a la hija.
Destruíste
la vida de una dama dignísima. Tenes que
arrodillarte, Vulcano.

Vulcano: Yo no quiero morir.

Rocambole: Si tu gusto es morir parado, no tengo


inconveniente.
(Vulcano se arrodilla. Rocambole, con
voz tonante.) Le cortaste la lengua a la mudita de la
Taberna de la Sangre, Vulcano. Asesinaste a tus
semejantes.

Vulcano: ¡Perdón!

Rocambole; Que te perdone la esposa cuyo marido


mataste.

Sirvienta: Yo no puedo perdonarlo.

Vulcano: ¡Perdón!

Rocambole: Que te perdone la madre cuya hija ro


baste.

Sirvienta: No puedo... Rezaré por él...

Vulcano: Yo no quiero que recen sobre mi tumba. Yo


quiero vivir, comer.

Rocambole: Que te perdone la sociedad a la que


ofendiste con tus graves crímenes. Tenes un minuto
para rezar y encomendar tu alma a Dios.

Cenicienta: Yo lo perdono, señor Rocambole. (Vul


cano se arrastra y le besa los pies.)

Rocambole: ¿Lo perdonas de todo corazón, niña?

Cenicienta: Sí, señor Rocambole. Le perdono todo


porque no me cortó la lengua ni me dejó ciega.

Rocambole: Miserable, la súplica de este ángel salva


tu inmunda piel. (La Sirvienta y la niña retroceden.
Rocambole
saca rápidamente un frasco del bolsillo y dice:
Pero como no puedes quedar sin castigo...

Le arroja el contenido del frasco a los ojos; Vulcano


lanza un terrible grito y se levanta moviendo los
brazos al
mismo que tiempo que aulla.

Vulcano: ¡Estoy ciego..., estoy ciego! ¡Oh!

Rocambole: Es un castigo misericordioso el que te


hemos dado. (Suena largamente el timbre de
servicio,
que por unos instantes ninguno de los personajes
escucha.
De pronto la Sirvienta oye el llamado y retrocede
despavorida
de la zona del sueño al espacio de su cuarto.)

ESCENA V

Súbitamente en la puerta del cuartito asoma la


Patrona
de la casa, mira a la Sirvienta y le dice:
Patrona: Oiga... ¿se puede saber lo que le pasa que
no viene cuando la llaman? Hace media hora que
está
sonando el timbre.

Sirvienta: Disculpe, señora... (Salen ambas. Los


personajes
de humo quedan un instante en la posición
estatuaria
en que los inmovilizó la voz de la Patrona al entrar
en
el cuarto de la criada. La luz verdosa que inunda
laescena
disminuye lentamente.)

TELÓN

Acto III

La pieza de la Sirvienta es ahora prolongada por un


salón
tapizado como aquellos que aparecen en las
ceremonias de
los personajes de cualquier parte. Pórticos dorados y
cortinas
rojas dan la impresión de una opulencia
extraordinaria.
Moblaje, espejos y sofás. Una claridad triste flota en
este último cuadro del sueño. Personajes reales:
Sirvienta,
Hijo de la Patrona.

Personajes de humo:

Azucena y Griselda, totalmente envejecidas y


ataviadas
con trajes negros, Lacayo con patillas, Cenicienta,
Galancito, Rocambola.

ESCENA I

Lacayo gordo, con librea verde y patillas blancas,


entra
con bandeja de licor, sirve y se va.

Vieja 1a: ¡Cómo pasan los años!

Vieja 2a: Y ésta es la vida.

Sirvienta: Sufrir.

Vieja 1a: ¿Para qué la vida?

Vieja 2a: Todo es desengaños.

Sirvienta: Monotonía.

Vieja 1a: Tristezas.

Vieja 2a: Querer.

Vieja 1a: Dejar.

Sirvienta: No hables.

Vieja 1a: Sí, es mejor no hablar.

Vieja 2a: No conviene nombrar ciertas dulzuras.

Sirvienta: ¿Por qué hablo yo como ustedes?

Vieja 1a: ¿Qué dice?

Sirvienta: Yo soy joven.

Vieja 2a: Está loca.


Vieja 1a: Dice que es joven... ¡ja... ja... ja!...

Sirvienta: Yo puedo esperar y vivir. No tengo nada


más que veinticuatro años.

Vieja 1a: Está loca. Dice que tiene veinticuatro años.

Sirvienta: ¡Oh!, no... es cierto... Yo también soy vieja.

Vieja 2a: Era una broma.

Vieja 1a: Es claro. Una broma.

Sirvienta: Pero mi cabello es negro.

Vieja 2a: ¿Empieza otra vez a desvariar? No tenes el


cabello negro.

Vieja 1a: Lo tenes blanco como el nuestro.

Sirvienta: Tengo una hija perdida...

Vieja 2a: Delira. No sabe lo que dice.

Vieja 1a: ¿No te acordás de que la encontró Rocam


bola a tu hija?...

Vieja 2a: En la carbonería del Compadre Vulcano.

Vieja 1a: Y ahora es una señorita.

Sirvienta: Sí... No me acordaba.

Vieja 2a: Vos estás trascordada.

Vieja 1a: Es la vejez.

Vieja 2a: Nosotros estamos más fuertes que ella.


Vieja 1a: Y más jóvenes.

Vieja 2a: Es que sufrió mucho.

Entra el Lacayo, se inclina ante las viejas y dice.

Lacayo: Ya está el coche, señorita Griselda.

Vieja 2a: Vamos, Azucena.

Vieja 1a (inclinándose y besando a la Sirvienta, que


permanece
rígida en su silla): Hasta mañana, querida.

Vieja 2a (haciendo lo mismo que la Vieja laj: Hasta


mañana,
querida.

Sirvienta: Hasta mañana.

El Lacayo sale detrás de las viejas; de pronto se


vuelve
y, con la mano abierta y el dedo en la punta de la
nariz le
hace "pito catalán" a la Sirvienta, que no lo ve. La
Sirvienta
permanece rígida en su silla. Se oyen unas carcajadas
lejanas, y de pronto aparece Cenicienta, la hija de la
Sirvienta. Es una muchacha que tiene la misma edad
que
la madre. Viste un traje blanco, capelina blanca,
tomada
por la cinta bajo el mentón, trae un ramo de flores
entre
los brazos. Entra corriendo en la sala.

ESCENA II
La Sirvienta, sentada y la Cenicienta, su hija.

Hija: ¿Cómo te va, mamita querida? Te traigo unas


flores. (Le pone las flores en el regazo.)

Sirvienta (reanimándose lentamente): ¿Cómo estás,


hijita?
¿De dónde venís?

Hija: Estuvimos en el campo, juntando flores.

Sirvienta: Yo creía que en el campo no había nada


más que pasto.

Hija: ¡Qué bromísta sos, mamita! El campo está


lleno
de flores. Por donde miras no se ven nada más que
flores. Hasta fas nubes parecen que están cargadas
de
flores. Sentate, mamita, que te vas a cansar.

Sirvienta: ¿Y te gustan mucho las flores?

Hija: Sí, me gustan las flores. Me gusta todo lo que es


lindo. (Mientras habla se pasea por el cuarto.)
Cuando
una ve flores, le parece que el mundo todo debe ser
un
jardín, que por donde vaya no encontrará nada más
que perfumes, colores, nubes arriba, flores abajo...

Sirvienta: Yo creía que en el campo no había nada


más que vacas y caballos.

Hija: Mamita, no tenes imaginación. A vos no te


gusta
soñar. Estoy segura de que vos nunca has soñado
que volabas.

Sirvienta: ¿Cómo es eso?


Hija: Sí, que volas. De pronto el mundo se hace
chiquito
para toda tu voluntad y en los talones sentís
una fuerza elástica... Parece que si quisieras de un
salto podrías llegar a las estrellas.

Sirvienta: Son tus veinte años.

Hija: Mamita..., decime..., ¿las otras mujeres son


como
yo? ¿Sueñan como sueño yo? ¿Sienten como siento
yo?

Sirvienta: Algunas, sí.

Hija: Mamita, tengo que decirte una cosa. Estoy


enamorada.

Sirvienta: ¡Ah!... ¿Sí?...

Hija: ¿No te disgusta?

Sirvienta: No..., me encanta...

Hija (arrodillándose al lado): Te voy a contar,


mamita...
(Súbita transición.) ¿Es obligatorio que una hija
se arrodille al lado de la madre para contarle que
está
enamorada...?

Sirvienta: No, algunas le hacen esa confesión a la ma


dre mientras la madre recalienta unas milanesas.
Hija: Sos muy chistosa, mamita..., mira que me voy
a enojar...

Sirvienta: Bueno, preciosa..., no te enojes...


Hija: ¿No es cierto que estoy preciosa?

Sirvienta: Sí, estás muy linda.

Hija: ¿Te acordás qué fea era cuando estaba en la car


bonería del Compadre Vulcano? Bueno, como te
decía,
es alto, rubio, buen mozo.

Sirvienta: ¿Joven?...

Hija: Pero ¡claro!

Sirvienta: ¿No está casado?

Hija: Yo me enojo con vos, mamita. Estoy enojada.


No se puede hablar en serio con vos. ¿Por qué no me
preguntas cuántos hijos tiene? ¿O si estuvo
procesado
por criminal?

Sirvienta: Disculpa, mi hijita... estoy con el


pensamiento
en otra parte. ¿Así que tu novio es buen mozo?
¿Y te quiere?

Hija: No es mi novio, mamita..., o sí..., sí..., novio


es... siempre que vos no te opongas.

Sirvienta: ¿Y es por él que ves el campo lleno de flo


res?...

Hija: Y no sólo el campo..., hasta las nubes...


(Acercándose.}
¡Si supieras qué bueno es!...

Sirvienta: Todos los novios son buenos.

Hija: Parece que estuvieras envidiosa de que yo


tenga
novio...

Sirvienta (retrocediendo): ¿Qué has dicho?...

Hija (abrazándola): Perdóname, mamita.

Sirvienta (aparte): A veces los autores les tienen envi


dia a sus personajes. Quisieran destruirlos.

Hija: ¿Que decís, mamita?...

Sirvienta: Quiero que seas feliz..., hijita querida. Yo


no te he dicho nada para ofenderte, sino que
nosotros
los viejos tenemos el corazón lleno de tristeza...

Hija: Estás triste, mamita..,, ¿de qué?.. .

Sirvienta: Te casarás..., te irás... y yo me quedaré


otra vez sola..., sola otra vez... (Se aparta de la
muchacha
y, sentándose sobre una butaca,se pone a llorar.)

Hija: Mamita..., ¿por qué lloras?... Si vos no querés...

Sirvienta: Sí, yo quiero. Quiero que seas feliz, hijita


querida, que toda la tierra te parezca siempre llena
de
flores, que tu esposo te quiera eternamente.

ESCENA III

Entra el Lacayo, de librea verde, con una bandeja en


la
mano.

Lacayo: Señora... (Le alcanza la bandeja. La Sirvienta


toma una tarjeta.)
Hija: Mamá..., es él...

Sirvienta: Que pase. (Sale el Lacayo.,)

Hija: Vas a ver, mamá, qué bueno; de verdad que


es...

Sirvienta: Te creo, hijita. (Aparece el Lacayo y abre el


portier para que entre el Galancito, que será un
joven
simple. La muchacha corre a su encuentro y lo toma
de la
mano. La Sirvienta se levanta.)

Hija: Mamita..., este...

Galancito (tropezando en sus propias palabras):


Señora,
vengo a decirle que quiero a su hija. (Avanzan los
dos
hasta ella.) Que nos queremos mucho.

Hija: Vos arrodíllate, que yo me arrodillo también.


(Se arrodillan ambos.) Mamita, te pedimos la
bendición.

Sirvienta: Yo, hijos míos, los...

ESCENA IV

En ese mismo instante, en el cristal del ventanuco


del
cuarto de la Sirvienta se hace visible, la carátula
grotesca
del Hijo de la Patrona. Desmelenado y ebrio, grita:

Hijo: Abrí, Sofía... Abrí, no seas testaruda, Sofía...

Los personajes de humo permanecen inmóviles. La


Sirvienta mira con un gesto de extrañeza dolorosa al
fantoche
humano que le pide placer en el instante en que ella
bendice en su ensueño la felicidad de una hija que no
existe,
y a medida que la luz disminuye en escena se hace
más
nítido en el rojo cristal del ventanillo el mascarón del
ebrio
atenaceado por la reja.

Hijo: Abrí... Abrí, no te hagas la estrecha...

La Sirvienta coge el revólver y apoya el caño en su


frente.

Hijo: No te hagas la loca, Sofía...

Suena el estampido. La Sirvienta cae. Bruscamente


se
amontonan en el cuarto de la Sirvienta los fantasmas
que
actuaban en el salón dorado.

Hija: Libres,.., por fin estamos libres de esta loca.

Galán: De la Sirvienta Millonaria.

Lacayo: Ha muerto para nuestra tranquilidad.

Vieja 1a: Respiro..., era inaguantable.

Griselda y Azucena, la Cenicienta, el Galancito y el


Lacayo se dan la mano y comienzan a danzar en
círculo
en torno del mantoncita humano, cantando al tiempo
que
en paso de danza levantan desaforadamente las
piernas.
Por fin se ha muerto la loca.
Por fin se ha muerto la loca.

ESCENA V

Enfático y lúgubre, entra Rocambole con paso tardo.


Mira la danza de los personajes de humo, luego una
cólera
tremenda se apodera de él y, esgrimiendo el látigo, lo
descarga sobre las espaldas de los fantasmas. Se
desbandan
éstos y huyen de la escena. El ex presidiario se quita
las gafas, la galera, coloca el látigo de cochero en el
suelo,
se arrodilla frente a la Sirvienta y la besa en la frente
con
gesto compungido.

Rocambole (juntando las manos en el pecho): Señor,


el
empedernido criminal te pide piedad para esta
pobrecíta
criatura, que tanto ha padecido sobre la tierra.
(Se levanta, recoge sus utensilios y vase.)

Hijo (aún pegado en los vidrios, con voz ronca):


Abrí,
Sofía. Abrí..., no hagas chistes.

TELÓN FINAL

a la/s enero 27, 2015


Etiquetas: ARLT ROBERTO trescientos millones

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Benjamín Gavarre
INSTRUCCIÓN ACADÉMICA:

Licenciatura en Literatura Dramática y Teatro: UNAM. Facultad de Filosofía y Letras. Ciudad Universitaria.
Promedio final 9.08 (UNAM 1981-85). Titulado en 1993 con mención honorífica. Tesis: Elementos del Teatro
Surrealista y del Absurdo.

Maestría en Literatura Comparada, en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM 2000-2002. Promedio de


9.25 (Obtuvo el grado con mención honorífica en junio 9 de 2005). El tema de la tesis es sobre la construcción de la
imagen del personaje “Emperatriz Carlota” en la dramaturgia mexicana y francófona siglos XIX a XXI a partir de
una perspectiva histórico-imagológica.

IDIOMAS

Francés : IFAL, CELE. Diploma de DOMINIO por el CELE

Inglés: Diploma de COMPRENSIÓN por el CELE (Centro de enseñanza de lenguas extranjeras, UNAM).

2) TRABAJO ACADÉMICO

2. INVESTIGADOR

IIFL, UNAM. Becario en el proyecto sobre archivos de la Inquisición en la Nueva España: “La otra palabra”, a cargo
de la Dra. Mariana Masera del seminario de Poéticas del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, desde
octubre de 1999 a octubre de 2002.

Ponente en el XIV Encuentro Nacional de Investigadores del Pensamiento Novohispano. UAZ. Zacatecas noviembre
de 2001. Ponencia: “La selección de información en algunos procesos inquisitoriales del siglo XVII”.
Moderador en el Coloquio “La otra palabra”, el 18 de abril de 2002.

Investigador y compilador de textos dramáticos en francés para la Antología de textos de letras modernas de la
Facultad de Filosofía y Letras (2007).

DOCENCIA EN TEATRO NIVEL SUPERIOR

EAT (Escuela de Teatro del INBA). Profesor suplente de Historia del Teatro I (1997)

PROFESOR EN LA UAM

omo profesor interino: Historia del teatro, teatro de los Siglos de Oro Español. Narrativa modernista y naturalista. Año 2001
PROFESOR EN LA UNAM

—FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS. Licenciatura en literatura dramática y teatro. Profesor de asignatura:


MORFOSINTAXIS Y COMENTARIO DE TEXTOS I Y II (Ahora llamada Análisis de textos I y II) (1999-a la
fecha de hoy).
—FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS. Licenciatura en literatura dramática y teatro. Profesor de asignatura
en la materia TEATRO VIRREINAL I y TEATRO IBEROAMERICANO II. (Desde 2003-1 a la fecha de hoy).
—FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS. Licenciatura en literatura dramática y teatro. Profesor de asignatura
en la materia HISTORIA DEL ARTE TEATRAL I Y II (TEATRO GRIEGO, LATINO, MEDIEVAL Y
RENACENTISTA) (Desde 2003-1 a la fecha de hoy).
—FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS. Licenciatura. Profesor de teatro de los Siglos de Oro español. Como
interino. Semestre 2005-1.
OTRAS FUNCIONES EN LA FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS DE LA UNAM (Colegio de Teatro):
Asesor de algunas tesis de licenciatura y una de maestría. Sinodal de muchas. Encargado de los exámenes
extraordinarios de mis materias. Encargado de tutorías.

LITERATURA Y REDACCIÓN.

PROFESOR NIVEL MEDIO Y MEDIO SUPERIOR


UNAM DGIRE DEFINITIVIDAD DICTAMEN 10

Instituto María Isabel Dondé: profesor de literatura mexicana, universal, hispanoamericana y taller de redacción
(1993-1994).

Universidad Latina: profesor de taller de redacción, investigación de campo, técnicas de investigación documental,
taller de literatura universal y taller de clásicos hispanoamericanos. (1994-1996).

CLAM: Colegio Latinoamericano de México. Profesor de literatura mexicana y universal (1997-1999).

3) TRABAJO (NO ACADÉMICO):


2.

3. TRABAJO EDITORIAL

Editorial Vuelta: corrector de estilo, y al cuidado de distintas ediciones de novelas y libros de poesía (1989).

Letras y Palabras, servicios editoriales: diseñador de originales mecánicos para libros, revistas, folletos y tipografía
en general; editor de revistas y folletos. Manejo de los programas de computación "Word Perfect", "Page Maker" y
"Corel Draw" (1990-1992).

Revista Proceso (1995): corrector "free lance".

CITRU (Centro de Investigación teatral Rodolfo Usigli: corrector 1997-1998

FIC (Festival Internacional Cervantino): traductor francés-español (free lance) de folletos y fichas técnicas, 1990-93.

Editorial Santillana-Alfaguara-Nuevo México.

Elaboración de guías de lectura para las novelas Los años con Laura Díaz, de Carlos Fuentes y Cruz de olvido, de
Carlos Cortés (1999-2000)

AUTOR (EN COLABORACIÓN CON Alberto Chimal et. al.) DE LOS LIBROS DE SECUNDARIA
ESPAÑOL I Y ESPAÑOL II CONEXIONES. México. 2007. Editorial Alfaguara- Nuevo México.
(Reeditado hasta la fecha de hoy)
.
3.

4. COLABORADOR EN PUBLICACIONES PERIÓDICAS

(Cuento, Poesía, Crítica, Reseña).

Revista: Artes Escénicas (crítica teatral), con Josefina Brun.

Revista: El Faro (cuento, poesía, teatro), con Juan Coronel.

Periódico: El Día (en: El día de los jóvenes, cuento, poesía, reseña).

Periódico: El Economista (reseña de libros, críticas de obras de teatro).

Periódico: Uno más Uno (en: Sábado, poesía).

Revista de la Universidad de México (poesía).

Revista Tramoya: obra de teatro finalista en el concurso de dramaturgia "Emilio Carballido" (1996).
Colaboró como crítico teatral para la Revista Mexicana de Cultura del periódico El Nacional (coordinador editorial:
Miguel Ángel Quemáin). (1998).

Colaborador de artículos sobre teatro para la revista Casa del Tiempo, de la UAM (1998 a la fecha).

CREADOR. TEATRO

DRAMATURGO

Vístete Rápido (1984) (Publicada, revista El Faro).

Delirio 23 (1985) (Publicada, revista El Faro).

Amor Tal... (1986) (Representada Teatro Legaria).

La Fiesta de los Disfraces (I987) (Representada Teatro Santo Domingo).

En tres Cervantes te veas, adaptación e "Intermeses"(1990) Representada en el FIC 90.

Filus (1991) (Inédita).

Yo, el Peor de los Dragones (1993). Representada en el Museo del Chopo y en el Foro El ensayo (1995).
Finalista en el concurso "Emilio Carballido". Publicada en la revista Tramoya de enero de 1996. Representada
en una lectura dramatizada dirigida por Edoardo (sic) Alcántara durante el 50 aniversario de la EAT Escuela de
Arte Teatral del INBA en el ciclo de lecturas de dramaturgos mexicanos de la segunda mitad del siglo XX.
Representada en el Museo del Carmen en abril y mayo de 1998 bajo la dirección de Edoardo Alcántara. Obra
elegida para el Festival de la Universidad de Monterrey, 2005 así como para el festival de la BILINGUAL
FOUNDATION OF THE ARTS en Miami 2005

Sala de Espera (1997).

Becario del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, FONCA–CONACULTA. Trabajó en un proyecto de
dramaturgia bajo el sistema Jóvenes Creadores (1996/1997).

Sala de Espera: Proyecto Coinversiones FONCA 1999 Dirección de Alejandro Ainslie. La Gruta. Instituto
Cultural Helénico (1999)

Unidad Lupita, Versión libre del cuento del mismo nombre de Jaime Alfonso Martínez Sandoval. Dirección
Rocío Carrillo. Producción IEDF (2005).

Gente de primera, melodrama didáctico. Estreno el 6 de julio de 2007 en el Instituto electoral del Distrito
Federal.

Creador del BLOG DE DRAMATURGIA: www.dramavirtual.com (desde enero de 2008 a la fecha)

DIRECTOR DE TEATRO

Amor tal..., de Benjamín Gavarre (Ciclo de Nuevos Directores Universitarios de la UNAM. Teatro Legaria, 1987).

La Fiesta de los Disfraces, de Benjamín Gavarre (Teatro Santo Domingo, 1988).

En tres Cervantes te veas. (Teatro Santa Catarina; Festival Internacional Cervantino, 1990).

Yo, el Peor de los Dragones, de Benjamín Gavarre. (Museo del Chopo, 1995).

ACTOR

Hécuba, La Perra; basada en Hécuba y Las Troyanas, de Eurípides. Adaptada y dirigida por Hugo Hiriart (1982).

El Gato con Botas, de L.W. Tieck; adaptada y dirigida por J. J. Gurrola (1983).

Serpientes y Escaleras y Fisura, coreografías de Lydia Romero. Actor-bailarín invitado del grupo Cuerpo Mutable
(1983).

Teatrísimo, serie de televisión dirigida por J.J. Gurrola. Programas: La Máquina de Sumar, de Elmer Rice; Un
Hogar Sólido, de Elena Garro; La Cena del Rey Balthazar, de Calderón de la Barca (1983).

El Maravilloso Traje de Helado Crema, de Ray Bradbury. Dirección de Eduardo Ruiz Saviñón (1984).

Bodas de Sangre, de Federico García Lorca. Dirección, Rubén Paguagua (1985).

La Madre, de S.I Witkiewicz. Dir. Rocío Carrillo (86)

La Cueva de Salamanca, de Cervantes. Dirección, Raúl Zúñiga (Festival de Siglos de Oro, Taxco, 1986).

De cómo el señor Mockinpott logró liberarse de sus padecimientos, de Peter Weiss. Dir. Néstor López Aldeco
(1987)

Infinitamente Disponible, creación colectiva del grupo Teatro de la Rendija (Teatro de la iglesia de Santo Domingo
1988).

Los Enemigos, de Sergio Magaña. (1988–90)

¡Ah Cábala Vida! Espectáculo de Raúl Zúñiga (1990).

Los Desfiguros de mi Corazón, de Sergio Fernández. Dirección de Néstor López Aldeco (Foro sor Juana Inés de la
Cruz, 1992-1993).

Asesino Personal, creación colectiva del grupo organización secreta, confabulación teatral. Idea original y dirección
de Rocío Carrillo (Claustro de sor Juana, 1993; Salón México 1994). Nominada para la mejor obra de 1993, teatro
de grupo, APT.

Pastorela Típica de Tepozotlán, dirección Raúl Zúñiga. Desde 1985 a 2004

Tema Filigrana. Con tecnología de Blogger.

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