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2007
ISSN: 1885-446X
Directores:
Pedro C. Cerrillo
Santiago Yubero
Director de Arte:
José A. Perona
Administración :
Andrés Villanueva
Comité científico:
Fernando Fraga de Azevedo Teresa Miaja
(Universidad do Minho, Braga –Portugal–) (UNAM –México–)
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(Universidad Autónoma de Barcelona) (Universidad de Cornell –USA–)
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(Consejo Superior de Investigaciones Científicas) (Universidad de Valencia)
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(Universidad de Extremadura) (Universidad del País Vasco)
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(Universidad de las Islas Baleares) (Fundalectura -Colombia–)
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(Universidad de Alicante) (Universidad de Santiago de Compostela)
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(Universidad de Valencia) (Universidad de Passo Fundo –Brasil–)
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(Universidad de Murcia) (Universidad Nacional Educación a Distancia)
Eloy Martos Núñez Victoria Sotomayor
(Universidad de Extremadura) (Universidad Autónoma de Madrid)
Antonio Mendoza Ángel Suárez
(Universidad de Barcelona) (Universidad de Extremadura)
Michel Moner
(Universidad de Toulouse –Francia–)
Es necesario defender la lectura como salida de la crisis de la significación, como acto
de rebeldía contra el Enunciador Supremo y Único [se refiere al lenguaje de la publici-
dad] que aspira a dominar todo tipo de lenguaje (…) Ejercitar la competencia literaria nos
ofrece un territorio saludable –un oasis como refugio, un oasis de salud mental y lingüísti-
ca– donde todavía es posible ejercer la libertad de la palabra y la libertad del pensamiento,
si es que ambas libertades no son una misma libertad. Hoy más que nunca es necesario
disponer de este territorio, de este oasis, donde podemos permitirnos el lujo de construir
significados propios, significados que se rebelan contra los significados impuestos por ins-
tancias ajenas a nosotros mismos.
Luis Sánchez Corral, 2006
Diseño y maquetación :
José A. Perona.
© de la edición: UCLM.
© de los textos e ilustraciones: sus autores Esta revista ha sido impresa sobre papel Munken
Lynx, el cual está fabricado completamente sin
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ISSN: 1885-446X Stewardship Council).
nº 3
Sumario
Noviembre 2007
7 El núcleo de la lectura
Ciriaco Morón Arroyo
91 Cuentos y lecciones:
textos para los niños decimonónicos en Argentina
Norma Ayoatti
Aspectos del tema más personas pasen sus ojos por los li-
Deseo analizar en qué consiste leer. bros, no garantizan la comprensión del
Por supuesto, se trata de un trabajo de texto, donde radica la esencia del leer.
investigación, y en estos casos, el pri- Si alguien lee a un buen conocedor del
mer objetivo del autor es aprender él latín un texto latino que no entiende, el
mismo. Luego se proponen los resul- que lee propiamente es el que escucha,
tados a los lectores como una pregun- no el que articula palabras que para él
ta sobre si el intento ha culminado en no significan nada. Alberto Manguel
éxito o fracaso, y solo en tercer lugar (2002: 36-38) cuenta que en su juven-
se ofrecen los análisis y conclusiones tud le leía textos a Borges, ya práctica-
como posible enseñanza, si los colegas mente ciego. En este caso leían los dos,
o estudiantes encuentran alguna nueva pero más Borges.
idea sobre el tema tratado. Tampoco la sociología de la lectura
El tema de la lectura tiene muchos analiza el fenómeno de leer. Leemos en
aspectos. El primero, pero el más su- distintas edades, y la mayor o menor
perficial y derivado, es el que podemos dificultad de acceso a la educación y a
llamar “política de la lectura”. Se trata los libros, obliga a relacionar la difu-
de las actividades que los organismos sión de los hábitos de leer con los dife-
del Estado y otros individuos e insti- rentes estratos sociales y con las dife-
tuciones promueven para estimular el rentes profesiones. De estos aspectos
deseo de leer. Al llamar derivadas a las sociológicos se puede a la vez escribir
estrategias de promoción no les quito la historia, para calibrar la difusión
*
Fecha de recepción: 10/01/2007 importancia; pero presuponen la idea de la lectura en diferentes épocas. So-
Fecha de aceptación: 26/02/2007 de la lectura, y si logran que cada día bre estos temas han sido ejemplares los
estudios del profesor Roger Chartier, y principio que tiene sentido, en vez de
para España el clásico libro de Maxime buscarle desde el principio contradic- nº 3. 2007
Chevalier, Lectura y lectores en la España ciones o ambigüedades.
de los siglos XVI y XVII. Los campos de investigación indi-
En tercer lugar está la dimensión éti- cados: política, sociología, historia, y
ca. En general, esa dimensión ha sido ética, son ramas que piden un análisis
objeto de vigilancia en todas las socie- del fenómeno mismo de leer; pero el fe-
dades occidentales. En España nues- nómeno es tan complejo que tememos
tros libros clásicos comenzaban con siempre olvidar sus rasgos esenciales.
una “censura eclesiástica” o certificado
de que no contenían nada contrario a la Tipos de texto
fe y a las buenas costumbres. Basta re- Leer: voy conduciendo el coche, en-
cordar los Índices condenatorios y ex- cuentro el signo de “stop” y paro. He
purgatorios de la Inquisición, los “in- entendido el mensaje de una señal que
fiernos” que existían en las bibliotecas en este caso ni siquiera tiene letras,
para libros prohibidos, y los consejos pero es un texto cuyo sentido está acor-
de muchos educadores sobre lecturas dado por una convención social. Al fin
propias o inapropiadas según el estado y al cabo, también son una convención
de formación de los estudiantes. Hoy las letras del alfabeto de que se compo-
mismo, ya sin censuras ni quemas, la nen las palabras. Si no sé descifrar los
ética es un tema importante para los caracteres del hebreo, las palabras en
estudiosos, como demuestra el libro esa lengua son una serie de líneas con
Valores y lectura, publicado en la misma menos sentido que el signo de stop. Con
editorial que publica la revista Ocnos. la misma rapidez que el signo de circu-
Tanto el antiguo control como la ac- lación puedo leer una palabra o un sin-
tual reflexión sobre los valores se fijan tagma sencillo: “Ferretería”, “Frutos
de modo primario en el contenido de secos”. En los ejemplos dados he pasado
los textos que se leen. Pero es nece- de manera casi instantánea del signifi-
sario señalar que el hecho mismo de cante al significado, o sea, he realizado
leer supone una postura ética. El lector un acto de lectura.
muestra deseo de aprender y humildad En otros textos el significante se pue-
(pónganse tras esta virtud otras, como de leer en un solo acto, pero el paso del
abertura mental, generosidad), recono- significante al significado exige una
ciendo la necesidad de enriquecer sus reflexión prolongada. Ejemplos: el tí-
conocimientos. El deseo de entender tulo de la obra de Calderón “la vida es
un texto supone la decisión de abrirse sueño” y el aforismo-poema de Anto-
a su mensaje, aceptando que quizá ese nio Machado “Hoy es siempre todavía”.
contenido no se perciba en la primera “Hoy es todavía”, y no algunas veces,
lectura, sino que sea necesario repa- sino “siempre”. ¿Qué dicen esas cua-
sar varias veces el texto para hacerle tro palabras? Y si logramos descifrar
justicia. Quien juzga un escrito por la su significado ¿es verdad lo que dicen?
reacción espontánea que le suscita (“los “Hoy” es un significante que connota
primeros movimientos” de Sancho) una unidad cerrada de tiempo, como
o para afianzarse en una ideología in- si fuera un punto. Pero cada punto de
conmovible, es un mal lector. Todas nuestra vida se nos presenta como un
las palabras en cursiva pertenecen jalón entre el pasado y el futuro; lo que
al ámbito de la ética, al margen de los parece un punto (Hoy) es en realidad un
valores o contravalores del texto leído. inciso en la línea del perpetuo movi-
Después mencionaremos otro aspecto miento (todavía). Y esta es la condición
ético: acercarse al texto concediendo en de la vida humana en sentido universal;
por eso “hoy es siempre todavía”, porque ¡Válgame el cielo! ¿qué veo?
toda ilusión de apresar lo absoluto se di- ¡Válgame el cielo ¿qué miro?
nº 3. 2007
luye en un tránsito hacia otro momento Con poco espanto lo admiro,
tan limitado como los anteriores. Con mucha duda lo creo
...
¿Cómo hemos entendido las palabras
de Machado? Desde luego, se entienden
¿Yo Segismundo no soy?
Dadme, cielos, desengaño. 1
de manera más fácil conociendo toda Esa descompensación entre la expe-
la obra del poeta. Todavía se entienden riencia y la capacidad de comprenderla
mejor si se conoce el concepto de “durée” hace que la conciencia no se crea a sí
de Henri Bergson. Pero estos contextos misma. Todos nosotros nos enfrenta-
son solo ayuda, no auténticas claves. El mos a experiencias personales de ale-
verso de Machado se puede entender gría o de dolor y a experiencias socia-
desde sí mismo, porque sus palabras no les de perversión y ejemplaridad que
pueden significar otra cosa, o sea, no cabe remueven la percepción de nuestro yo
otra experiencia de la relación entre la y “nos parecen mentira”. Nuestra con-
ilusión de apresar y dominar el tiempo ciencia no puede asimilar o abarcar la
(Hoy) y la verdadera forma de vivirlo, realidad que tiene delante. Esa nebu-
que es la transición (Todavía). Otra lec- losa de la conciencia refleja, frente a la
tura posible sería atribuirle a Machado conciencia directa de la realidad, es la
la intención de decir cosas contradicto- plasmada en la proposición “la vida es
rias sobre el tiempo, o escudarnos en la sueño”.
panacea de que el verso es “ambiguo”. Ahora comienzo a leer El Quijote. Si
Pero eso sería renunciar a entender sus es mi primer contacto con el libro de
palabras. Una premisa fundamental en Cervantes, sólo podré decir que lo he
toda lectura es que el texto tiene senti- leído cuando haya terminado de leer-
do, no es contradictorio ni se subvierte, lo. En este caso, leer no es un acto, sino
como pretenden algunos deconstruc- una serie de actos parciales –la lectura
cionistas. Sólo cuando sea totalmente de cada frase– que se funden al final en
imposible encontrarles sentido a las el acto complejo de la lectura de todo el
palabras, debemos: primero reconocer texto. El acto complejo que lee todo el
que no las entendemos, y después de texto debe asimilar, corregir y ordenar
confesar nuestra ignorancia, recurrir las impresiones que me sugieren los ac-
a la posible contradicción, la ambigüe- tos parciales, tanto sobre el contenido
dad o el juego en el texto leído. como sobre el valor estético y humano
También se lee en un acto el título- de la obra. Leer, en este caso, es perci-
tesis de Calderón: “La vida es sueño”; bir contenidos fragmentarios y reaccio-
pero, como en el caso de Machado, la nar ante ellos en cada uno de los actos,
comprensión no es inmediata. Desde pero esas reacciones ante el fragmento
luego, los hombres necesitamos dor- deben ser provisionales y valorarse al
mir, pero es precisamente para vivir final en vista del texto completo.
despiertos. Y cuando el autor define la Ahora bien, ¿cuándo puedo decir que
vida como sueño, su definición es fruto he logrado entender y llegar a una valo-
de su conciencia despierta y refleja so- ración más o menos acertada del Quijote?
bre la vida. La vida, por tanto, no parece ¿Basta una sola lectura? La compren-
ser sueño. ¿Qué significa, pues, el tér- sión de un texto como el de Cervantes
mino en Calderón? ¿Y es aceptable ese exige estudio: lecturas repetidas en las
significado? Los personajes de la come- que se descubren las constantes y co-
dia de Calderón se enfrentan con expe- rrespondencias que constituyen la es-
riencias tan hondas que su conciencia tructura, los rasgos de los personajes,
refleja no puede comprenderlas: modos de expresión originales, valores
1
La vida es sueño, vv. 1224-1247.
estéticos como la sublimidad, la belleza completo. Es más, puede haber intro-
o la gracia, y valores humanos, como el ducido en las primeras páginas moti- nº 3. 2007
buceo en la frontera de la realidad y la vos que solo se le ocurrieron al escribir
ilusión. Un lector aficionado que lee el páginas posteriores. Algunos filólogos
Quijote por primera vez puede entender- han sugerido que Cervantes cambió de
lo mejor que un especialista equivoca- lugar varios episodios que en versiones 10
do por ignorancia o por hacerle al texto anteriores del Quijote estaban en otros
preguntas inanes; pero lo más probable lugares. Para nosotros esas conjeturas
es que, si el especialista equivocado no no tienen importancia, ya que debemos
entiende el texto, el simple aficionado leer el libro como nos lo dio su autor.
no tenga mejor fortuna. Sin embargo, dentro del texto puede
Los ejemplos aducidos nos han dado: haber señales (inconsistencias, faltas
- Textos que se leen y entienden en un de conexión entre episodios) que pue-
acto: stop, frutos secos. den dar valor a las especulaciones sobre
- Textos cuyo significante se lee en un versiones anteriores de la obra.
acto, pero el paso al significado exige Un texto es físicamente una línea de
una reflexión que sobrepasa los actos: ideas o motivos; pero como estructu-
“Hoy es siempre todavía”. ra de sentido es una esfera en la cual
- Un texto, como el Quijote (póngase un motivo que aparece al final puede
aquí cualquier otro escrito extenso, haber sido la premisa que ha fundado
sea o no sea literario), cuya inteligen- otros anteriores. El escrutinio de los
cia nos enfrenta con el núcleo y las libros en el capítulo VI condiciona toda
ramificaciones de la naturaleza de la la primera salida del hidalgo, motivada
lectura. Nuestro análisis tomará sus por la mala influencia de su biblioteca.
ejemplos del libro de Cervantes. Desde luego, los prólogos de Cervantes
El texto extenso requiere un tiempo son reflexiones críticas del propio autor
prolongado, y normalmente volver so- sobre su texto ya terminado. Después
bre lo leído para conocerlo de manera analizaremos un fragmento del prólogo
satisfactoria. La complejidad señala- de 1605 y veremos que sólo se entiende
da, incluso en textos que se leen con bien cuando se ha leído la primera par-
un simple vistazo, me lleva a evitar la te del Quijote. En realidad, en la primera
expresión “acto de leer” y a emplear la lectura, cuando el lector sólo va descu-
de “fenómeno de leer” 2. Pero, como he briendo y tanteando, no responde al
notado, el fenómeno de leer debe contar texto tal como lo ha dado el autor. Si tie-
con los actos de lectura, ya que la visión ne suerte, comienza a responder en la
final del todo acepta, matiza o descarta segunda lectura, cuando lee cada frag-
posturas provisionales sugeridas por mento en vista del todo ya conocido.
los fragmentos leídos en los distintos Hasta ahora he hablado de textos li-
actos. Al repetir las lecturas para estu- terarios y no literarios. La diferencia
diar la obra, se descubren patrones es- entre los dos tipos es muy importante
tructurales, rasgos que van definiendo para una reflexión sobre la lectura. Re-
a los personajes, ejemplos de ironía que cordemos el código de circulación y El
no se podían percibir en la primera lec- Quijote. Los textos no literarios condi-
tura, y el papel de cada uno de los signos cionan nuestra vida diaria: anuncios,
parciales en el todo. códigos y prospectos orientadores, in-
La razón de ese papel básico del todo formes, cartas y peticiones o expresión
como centro de referencia con respecto de deseos. En todos estos casos, enten-
a las impresiones y actos momentáneos, der un texto es percibir el significado o 2
Un libro de ISER, Wolfgang, lleva por
es que el autor nos da la última versión realidad que está condensada en el sig- título El acto de leer. Pero dentro del
de su texto desde su visión del texto nificante, y una vez percibido el men- texto habla del “proceso” o “fenóme-
no” (“der Lesevorgang”).
saje, descartamos el significante. Los tenida en los textos. La multitud de los
nº 3. 2007 textos no literarios utilizan la lengua lectores hace imposible ninguna cla-
solamente en su función de transmitir sificación sistemática; en cambio, es
ideas, o sea, en su función intelectual. posible acotar el concepto de la lectura
En cambio, el texto literario –repito ideal e invitar a los lectores a responder
11 una idea que se me ha convertido en a la llamada de ese ideal.
tópico, pero no he hallado una defini- El concepto de lector es muy ambi-
ción formal más clara del texto literario guo. Dámaso Alonso distinguió tres
frente al no literario– hace reverberar formas de acercarse al texto poético: la
la lengua en sus cuatro funciones: inte- del lector, la del crítico y la del cientí-
lectual, afectiva, sensorial y estructu- fico. Del primero dice: “El primer co-
ral. Con estas cualidades, el texto lite- nocimiento de la obra poética es, pues,
rario deja de ser mero significante y se el del lector, y consiste en una intui-
convierte también en significado. Un ción totalizadora, que, iluminada por
verso de Góngora o de Machado se pue- la lectura, viene como a reproducir la
de traducir a prosa (función intelec- intuición totalizadora que dio origen
tual), pero entonces deja de ser poético. a la obra misma, es decir, la de su au-
Como texto poético debe conservar el tor”.4 El lector vislumbrado por Dá-
ritmo que le viene de los acentos en el maso Alonso no es un primerizo, sino
orden inmutable de sus palabras, y sus el maestro que ha pasado por muchos
valores cromáticos y musicales. Por ejercicios de crítica y de “ciencia” li-
eso, al leer un poema o cualquier obra teraria. En realidad es el filólogo que
literaria, no se descarta el significante, yo considero lector ideal. En términos
que es también significado. Entender la generales los lectores se pueden agru-
obra de arte literario consiste en perci- par en dos categorías: el aficionado, y el
bir la realidad o el mensaje, pero tam- humanista o filólogo. El primero puede
bién la calidad de la expresión misma, ver Hamlet en el teatro (escuchar una
la textualidad. En el Quijote no es fácil comedia representada es una manera
decidir cuál es el tema principal: la his- de leerla) o leer el Quijote; pero el hu-
toria de sus personajes o la historia del manista estudia el drama y la novela y
personaje-autor luchando por producir los explica como experto en el teatro de
un libro extenso de ficción “hijo del en- Shakespeare o en la obra de Cervantes.
tendimiento”. De cada tipo de lector se pueden enu-
El contenido del texto literario está merar algunos rasgos. Los del lector
en su forma, no entendida en un sen- casual o aficionado serían:
tido reductivo de mero formalismo, - Lee lo que se lee a su alrededor; ge-
sino como lengua con toda su densidad neralmente los libros de última moda
significativa: fusión de idea, emoción, y los más accesibles. No es fácil que
valor pictórico y musical de la lengua, busque un libro clásico. Un aspecto
y correspondencias estructurales que de la crisis actual de las humanidades
producen placer estético.3 consiste en que hemos dejado de exis-
3 tir en la atmósfera de los clásicos.
Reflexiones sobre la lectura que
pueden servir como introducción y
La lectura ideal - Incluso aunque lea a los clásicos, el
constelación de las emitidas en este La lectura ideal es la que mejor en- aficionado los lee sólo una vez, sin
artículo, y sobre la naturaleza del texto tiende el texto. Esa lectura ideal es volver sobre lo leído. Este hecho sus-
y el conocimiento literarios, se encuen- también la lectura inocente. Como se cita en principio dudas sobre la com-
tran en mi libro Las humanidades en la ve, hablo de la lectura y no del lector o prensión del texto. De ahí que:
era tecnológica, caps. VI-VIII.
lectores, como es corriente entre los - Su juicio sea la impresión última o la
4
Poesía española, Madrid, Gredos, que acentúan el papel del lector en la más fuerte que le haya producido un
1950, p. 38. Cit. por GARRIDO GALLAR- “actualización” de la virtualidad con- pasaje.
DO, M. A. (2003: 84).
- Normalmente no articula su juicio La lectura ideal es la que mejor en-
sobre lo leído, y si lo articula será tiende y explica el texto completo, y es- nº 3. 2007
como opinión general sobre todo el tablece los criterios por los cuales ese
texto. A diferencia del estudioso, el texto ha ganado el lugar que ocupa en
lector casual no analiza sino que al- el canon de obras maestras. Los otros
canza un juicio global, que suele ser: tipos de lectura son legítimos y nece- 12
me ha gustado o no me ha gustado. sarios, pero su valor se medirá según el
- Estos juicios generalmente expresa- grado en que se acerquen a la ideal.
rán la pena del lector por las injus-
ticias inferidas al protagonista, o el El núcleo: la recepción
placer por la gracia, el interés y las La lectura sólo existe cuando se da el
alusiones a realidades sociales o psi- paso del significante al significado, y si
cológicas con las que se identifica. el texto es literario, cuando se despliega
- Si se trata de un texto literario, nor- el significante mismo como significado
malmente el lector aficionado presta- y el lector se mece en la convergencia
rá más atención al tema que a la forma y divergencia de la tríada: contenido,
y valores artísticos de la obra. forma y sentido. Ahora bien, incluso si
Frente al lector descrito está el profe- tenemos suerte en explicar de manera
sional: el humanista estudioso de una satisfactoria el Quijote, no pretende-
lengua y literatura concretas o de lite- remos haber agotado su significado y
ratura comparada, que dedica su vida llegado a la interpretación insuperable.
al esfuerzo de entender textos de otros Por eso, si la lectura ideal es entender el
autores.5 En principio, este lector es el texto, desde el punto de vista del lector
ideal. Pero si su perspectiva está sesga- será el esfuerzo por entender un texto.
da por prejuicios ideológicos o por mé- Ese esfuerzo, cuyo éxito será siempre
todos que impone al texto como camisas parcial, es lo que llamamos recepción.
de fuerza, el lector profesional puede ser Esta palabra tuvo su origen en la for-
un falsificador. Otro hecho innegable es mulación del esquema semiótico de
que podemos ser especialistas en muy Roman Jakobson: Emisión, mensaje,
pocas obras o autores. En este caso ¿qué contacto, código, recepción (Garrido
nos ocurre con respecto a la infinidad Gallardo, 2004: 128). A mí este esquema
de textos a los que solo hemos dedica- me ha parecido siempre desorientador
do una lectura? ¿Somos meros lectores por exceso de claridad, ya que asocia
casuales? Creo que no. La preparación con el emisor la dimensión de actividad
y disciplina adquirida en el estudio y con el receptor la pasiva. En cambio,
del Quijote nos prepara para una lectu- según la experiencia, el “emisor” es al
ra competente del Fausto de Goethe. El mismo tiempo receptor, ya que escribir
problema estará en que, si para conocer es siempre una búsqueda, un investi-
bien la obra de Cervantes necesitamos gar. Cervantes lo sabía muy bien; por 5
Para que el análisis de los tipos de
lecturas repetidas, o sea estudio, sabe- eso atribuye su libro al inspirador Cide lector sea completo conviene recordar
mos que una sola lectura del texto ale- Hamete Benengeli. Por consiguiente, al estudiante, que tiene con los textos
mán no nos permitirá percibir muchos el texto final es un mensaje, cuyo pri- una relación distinta a la del lector
casual y el profesional. El estudiante
de sus detalles; y si estudiamos el Fausto mer receptor es el autor que lo emite. toma un libro de texto, y trata de
como el Quijote, repitiendo las lecturas y En cambio, si leer el libro de Cervantes entenderlo. Pero normalmente no tiene
apuntando los pasos dignos de interés, nos cuesta varias lecturas, consultas, contexto como para situar lo leído
nos acabamos convirtiendo en lectores vueltas sobre ciertos capítulos, y notas en un cierto ámbito intelectual. El
ideales. En este caso lo único que nos para dar expresión refleja a nuestras estudiante es pasivo frente al libro que
estudia. Sin embargo, si el estudiante
faltará para ser especialistas en el Faus- impresiones, la recepción es un es- entiende el texto estudianto, percibe
to será conocer la bibliografía sobre el fuerzo creador: una emisión. No obs- el contenido del texto lo mismo que
clásico alemán. tante, matizado con estas precisiones, el estudioso o lector profesional en el
tema que estudia.
el esquema de Jakobson nos vale para delante: esa condición histórica de las
nº 3. 2007 nuestro propósito, ya que la recepción lecturas produce la “mediación de ho-
es el paso del significante al estallido rizontes”. Entonces nos preguntamos
del significado. Y en ese paso consiste si todas las lecturas tienen el mismo
la nota esencial de la lectura. valor, y como eso no se puede afirmar,
13 Junto a la noción de Jakobson, al ha- Jauss advierte que el juicio estético va
blar de la recepción se impone mencio- cortando la cizaña y dejando las buenas
nar, aunque sea brevemente, la llama- interpretaciones como “normativas”.
da “estética de la recepción”, concepto Lo que no se dice es que la extirpación
introducido en la crítica literaria por el de la cizaña supone una lectura nueva
profesor Hans Robert Jauss (1921-1997). del texto en sí mismo, en contra, por
Para no desviarme en una exposición lo menos de algunas direcciones de la
que aquí sería imposible –el marco recepción. Y si la recepción está sujeta
de este artículo no permite hacer una al escrutinio, sólo la vuelta inocente
lectura justa de la obra de Jauss– voy al texto puede darnos el criterio para
a citar unas palabras del profesor de poner sobre nuestra cabeza algunas
Konstanz, que exponen a la vez su idea interpretaciones y arrojar otras a las ti-
y el contraste con otro estudioso de la nieblas exteriores.
recepción: Esto significa que tiene poco senti-
“No quisiera entrar una vez más a do comenzar una teoría de la recepción
describir mi diferencia con Gada- desde una premisa historicista. La re-
mer, sino simplemente señalar que cepción es primariamente un hecho
yo acentúo la comprensión producti- individual. Sin tener una posición so-
va, de la cual no exceptúo ni los tex-
bre la obra no podemos apreciar la re-
tos clásicos, y por eso he opuesto a la
“fusión de horizontes” de Gadamer cepción que se ha hecho de ella. Cada
la producción activa de la “mediación reevaluación supone una inteligencia
6 de horizontes”, que nos da la posibi- prístina y directa del texto, desde la
“Auf meine Differenz zu Gadamer
möchte ich hier nicht erneut eingehen, lidad de la experiencia estética...En cual juzgamos las interpretaciones re-
sondern nur soviel bemerken, dass ich el cambio de horizonte de las lectu- cibidas. En el caso del Quijote con una
das productive Verstehen favorisiere, ras el texto poético toma un sentido trayectoria tan larga de imitaciones,
davon auch klassische Texte nicht concreto siempre distinto, pero no reelaboraciones y estudios, se impone
ausnehme und darum Gadamers Hori- cualquier sentido: la historia de la un escrutinio de la recepción; por eso
zontverschmelzung die aktive Leistung recepción es un proceso en la me-
der Horizontvermittlung entgegen-
discernimos en la extensa bibliografía
dida en que el juicio estético corrige
setzte, die uns ästhetische Erfahrung y tratamos de distinguir el trigo de la
constantemente las ocurrencias ar-
ermöglicht”...”Der poetische Text kon-
bitrarias, en la medida en que reco- paja. Pero de nuevo, el último funda-
kretisiert im Horizontwandeln seiner
noce las interpretaciones fructiferas mento de esa operación crítica es la lec-
Lektüren einen immer wieder anderen
como normativas y distingue la au- tura directa del texto, o sea, le fusión de
Sinn, aber nicht jeden beliebigen Sinn:
die Rezeptionsgeshichte ist ein Prozess, téntica explicación de la arbitrarie- horizontes de Gadamer.7
indem das ästhetische Urteil den histo- dad subjetiva”.6 Hay otro aspecto de la recepción, pro-
rischen Wildwuchs ständig korrigiert, Jauss le atribuye a Gadamer la idea de puesto por Heidegger, el maestro de Ga-
indem es fruchtbare Interpretationen que entender un texto separado de no- damer e inspirador de Jauss. La doctri-
als normbildend anerkennt und Deu-
sotros por varios siglos, supone la vuelta na estética del gran pensador se aplica
tung aus subjektiver Willkür ausschei-
det” (JAUSS, Hans Robert, Wege des
al tiempo de la obra para fundir nues- a todas las artes (y de manera especial
Verstehens: 381-382). tra capacidad receptiva con el mensaje a la poesía), pero con respecto a la re-
del texto leído. Esa vuelta produciría la cepción cobra un sentido especial, ya
7
Sin embargo, la moda de acentuar el “fusión de horizontes” del texto y el lec- que su ejemplo es el templo griego, y la
papel del lector produjo una actitud
tor. Frente a esa idea, él sostiene que no arquitectura es un arte para la colecti-
crítica muy difundida, que se llamó
“respuesta del lector”, y en muchos
se vuelve atrás, sino que el lector pre- vidad. La primera tesis en este punto es
casos desemboca en vulgar relativismo. sente está ya instalado en una línea que que el templo se instala en el “mundo”
Ver ECO, RORTY, CULLER Y BROOKE- hereda y que él va a transmitir hacia que el mismo templo conforma. Cuan-
ROSE (1992).
do en medio del campo se construye el El análisis anterior nos permite
templo, todo el medio circundante se concluir que la recepción tiene tres nº 3. 2007
reviste del halo que se difunde desde el sentidos:
recinto sagrado. En torno al recinto del La recepción semiótica: la lectura pro-
dios se reorganiza el resto del paisaje. El piamente dicha. El encuentro del re-
templo vive como tal mientras existen ceptor con el mensaje del texto. Esa 14
los fieles que lo conservan. La recepción recepción se da volviendo siempre al
(Bewahrung) en este caso es la forma co- texto y tratando de desplegar el signifi-
munitaria de vivir en el ámbito sobre cado objetivo de sus palabras.
el que irradia la presencia de lo divino. La recepción social: se suele repetir
De aquí deduce Heidegger que el arte es que el Quijote fue leído por los primeros
una de las formas básicas de expresión receptores como libro cómico y las lec-
de “un pueblo histórico”, mientras que turas “serias” vinieron después, como
las obras expuestas en los museos han atribución de significados ignorados
dejado de ser lo que originalmente fue- por el autor y sus contemporáneos. Es-
ron, porque su mundo se ha esfumado o tas ocurrencias son imprecisas y fal-
se ha destruido (Welt-entzug y Welt-zerfall) sas, porque un texto cómico puede lle-
(Heidegger, 1957: 30 y 54-55).8 var incrustado un mensaje serio. En La
Aquí se plantearían cuestiones im- vida es sueño se da un ejemplo precioso
portantes que es imposible desarrollar. en que el mismo autor desentraña el
La primera es que Heidegger asocia la contenido serio de su corteza graciosa
relación de creador y conservadores con y amena. Rosaura recita la historia del
la idea nacionalista que en 1936 –fecha sabio que sólo se alimentaba “de unas
de sus conferencias sobre arte– era bá- hojas que cojía”, y ella misma despliega
sica en el nacional-socialismo alemán. la moraleja en los versos que siguen al
Y la segunda es que las Eginetas del mu- cuento:
seo de Munich o el Cristo de Velázquez Quejoso de mi fortuna
en el Prado, son arte porque tienen algo yo en este mundo vivía,
que trasciende la dimensión religiosa y y cuando entre mí decía:
de identidad nacional que predominó ¿habrá otra persona alguna
de suerte más importuna?
en su primera recepción. El templo y el
Piadoso me has respondido,
cuadro son arte, no porque nos incitan pues volviendo en mi sentido,
a orar –eso es religión– sino porque hallo que las penas mías
además de alimentar nuestra fe tienen para hacerlas tú alegrías
ciertas cualidades específicamente ar- las hubieras recogido” (VS, vv.
tísticas que trascienden de la creencia 263-72).
concreta del receptor o conservador. La La recepción histórica: ¿Cómo se pro-
objeción más certera contra la estética duce el puente entre el texto de otros
marxista es que la obra de arte no se ambientes con el lector actual? En-
agota en ser reflejo de las condiciones tender es de alguna forma “fusión”
históricas del momento en que surge; (Gadamer), no indefinida “mediación
pues bien, algo parecido puede objetar- de horizontes” (Jauss). Ante cualquier
se aquí a Heidegger: la obra de arte no texto, nuestro propósito es la recepción
se agota en “su mundo”, sino que per- semiótica, o sea entenderlo. Tratándose
8
tenece al mundo que comparte con sus de una obra de hace cuatro siglos, habrá HEIDEGGER distingue con plena clari-
contempladores, incluso en el museo. una pregunta posterior: cómo hacemos dad entre arte y religión. No obstante,
su acento en las páginas aquí citadas
De hecho, una obra clásica de arte es el puente entre su fecha y la nuestra. Y
sobre la inserción de la obra en su
clásica en la medida en que supera las luego, podremos construir la historia mundo y el carácter trascendente que
condiciones sociales y culturales de su de la recepción y tomar postura frente le da a esa inserción, creo que le llevan
circunstancia. a ella. a postergar excesivamente los aspectos
del arte que llamamos formales.
Radiografía del entender su proverbial genialidad, convirtiendo
nº 3. 2007 Deseamos “leer”, o sea, entender el el Quijote en el precipitado de un inspi-
Quijote, un signo muy complejo que rador-autor Cide Hamete Benengeli, y
consta de muchos más simples. Para un autor-comprador de una traducción,
ver cómo se produce el estallido de luz, llamado Miguel de Cervantes. El Quijote
15 tomamos un párrafo que contiene di- es la historia cómica de unos personajes
versas maneras de producirse el relám- y la búsqueda épica de un libro extenso
pago (las cursivas son, naturalmente, de ficción, hijo del entendimiento.
mías): Por ser hijo del entendimiento se
“Desocupado lector: Sin juramento diferencia de los libros de caballerías,
me podrás creer que quisiera que este que son hijos de la fantasía loca. En
libro, como hijo del entendimiento, fue- este mismo párrafo el libro parece hijo
ra el más hermoso, el más gallardo y de dos padres: del entendimiento y del
el más ingenioso que pudiera imagi-
ingenio. Estas dos palabras mostrarán
narse. Pero no he podido yo contrave-
nir el orden de naturaleza; que en ella
su densidad a lo largo de todo el libro.
cada cosa engendra su semejante. Y El ingenio es el componente creador del
así ¿qué podrá engendrar el estéril y entendimiento, y el juicio su función de
mal cultivado ingenio mío sino la his- selección y disposición. Cuando el hi-
toria de un hijo seco, avellanado y lle- dalgo se vuelve loco, pierde el juicio, la
no de pensamientos varios?” (Primera capacidad de contrastar sus ilusiones
parte, prólogo). con la realidad, y se le queda el ingenio
No ofrece ninguna dificultad la ex- suelto. De ahí sus “pensamientos va-
presión “desocupado lector”. Pero pue- rios”, es decir, cogitaciones sin control
de tener un significado digno de nota. ni dirección, cuyo resultado en la pri-
El lector que lea la historia del ingenio- mera parte serán la derrota y los infi-
so hidalgo manchego no estará ocupado nitos palos. El Quijote en cuanto libro es
en labores graves, sino ocioso, y por eso hijo de un entendimiento que sabe ima-
puede dedicarse a leer un libro intras- ginar episodios y casarlos de manera
cendente. “Desocupado” es, en el fondo, que parezcan verdaderos: ingenio con
una declaración de modestia por parte juicio. Poco después en el mismo pró-
del autor, con respecto a la importancia logo Cervantes se llama “padrastro” de
social de su libro. don Quijote. Pero cuando Avellaneda
Después el autor declara su anhelo le usurpa la paternidad, Cervantes no
de corresponder a la atención del lec- cede la custodia: se proclama padre y
tor con el mejor libro posible (Quisiera). único creador de su libro. El juego pa-
Tampoco el lector encuentra enigma al- dre-padrastro es, desde luego, humo-
guno en el significado del verbo querer. rístico. Pero en el humor trasciende el
Pero sí surge el enigma en la oposición genial análisis de que todo autor es pa-
querer-poder. Porque el autor dice que ha dre de su texto, porque lo engendra con
experimentado una lucha entre el deseo esfuerzo, y al mismo tiempo padrastro,
(quisiera) y el resultado (no he podido porque tampoco surge si no se lo rega-
yo contravenir...). Después, a través de la Cide Hamete o una musa maternal.
todo el Quijote esa lucha entre el querer Cuando nos ponemos a escribir y “no
y el poder se manifiesta como la esencia nos sale nada”, es porque nos falta el
del fenómeno de escribir. Escribir es el regalo.
deseo y esfuerzo por producir el mejor La inteligencia del texto se ha produ-
texto imaginable, pero en contraste cido en los siguientes pasos:
con la sobria realidad de que produci- - El significado de la expresión “des-
mos lo que podemos o se nos ocurre. ocupado lector” es obvio, como el de
Cervantes analiza esta experiencia con stop de que hablábamos al principio.
No le exige al lector realizar en sí mis- teníamos delante: el verso de Macha-
mo el trabajo de descodificación des- do, el título de Calderón, la definición nº 3. 2007
de la propia experiencia, como el que del libro como hijo del entendimien-
exigían las proposiciones de Calde- to y la definición de la escritura como
rón y Machado (La vida es sueño, Hoy lucha entre el querer y el poder. Todo
es siempre todavía). Pero la apelación entender consiste en asimilar como 16
al lector cobra densidad significati- experiencia propia la realidad a la que
va desde el resto del libro: Cervantes el texto apunta. El sentido del sintag-
saluda con la modesta pretensión de ma “desocupado lector” ha mostrado
ofrecer una obra humilde de honesto su densidad significativa al ponerlo en
entretenimiento.9 relación con la actitud del autor ante
- Querer-poder es un contraste que co- su libro. Este ejemplo abre un segundo
bra pleno sentido como descripción camino para entender la comprensión:
del rasgo esencial de toda escritura: la relación del texto con contextos que
la lucha entre el deseo y la capacidad. sirven como claves para entenderlo. Un
El espesor significativo del pasaje se libro como el Quijote es un texto com-
percibe mejor cuando se ve que cons- plejo en sí, en muchas de sus frases;
tituye el término clave de la relación pero lo es mucho más por la riqueza de
Cervantes-Cide Hamete (y después contextos en los que se inserta. Hablo
Avellaneda), y la conversión del Qui- de contextos, en plural: el de su tiem-
jote en un taller sobre cómo se logra po, sociedad y cultura (pónganse aquí
un libro “hijo del entendimiento”. todos los aspectos de la historia de su
- La expresión “hijo del entendimien- época), y el de otros tiempos y socieda-
to” es la única que se parece a las de des, ya que es una obra universal pre-
Calderón y Machado, en el sentido de cisamente porque refleja experiencias
que su significante es un enigma cuyo humanas y artísticas no limitadas a sus
significado parece oculto. ¿No son to- circunstancias.
dos los libros hijos del entendimien- El ejemplo de lectura fundado en las
to? Según Cervantes, los libros de primeras palabras del prólogo permite
caballerías no lo son. Todo el Quijote concluir que debe hacerse un recorrido
será la interacción de tres personajes: analítico por todo el libro, desplegando
el caballero, llevado de su ingenio sin la densidad de todos los signos concre-
juicio (fantasía loca), Sancho, diri- tos que ofrezcan un espesor análogo al
gido por los sentidos, y el autor: el en- de las palabras analizadas por nosotros.
tendimiento, que va casando y dándole Esta función debiera cumplirse en una
al lector las claves de los desatinos de edición anotada del libro, que estuviera
sus dos personajes. El cuarto perso- a la altura de la teoría literaria actual.
naje principal, Dulcinea, es creado Hasta ahora, las ediciones de los eru-
por los tres anteriores, y cada uno la ditos han dado magníficas explicacio-
proyecta según su horizonte mental: nes de aspectos superficiales, pero son
fantasía (don Quijote), sentido (San- inútiles para la comprensión estética y
cho) y entendimiento (el autor). humana de la obra.
Entender el texto –leerlo– ha con- Después de desplegar el libro en sen-
sistido en realizar en nosotros la expe- tido analítico, habrá que buscar los sig-
9
riencia a la que nos invitaban las pala- nos constantes frente a los esporádicos. Puede encontrarse otro significado,
bras. Entender supone ver la realidad a En este punto nos servirán ciertos tér- si contrastamos la actitud conciliadora
de CERVANTES con el insulto al lector
la que el texto apunta y, por tanto, darle minos clave, cuya virtualidad se verá
que abre el Guzmán de Alfarache:
nuestra propia formulación, que ha unas veces por su frecuencia, pero otras “Contigo hablo, bestia fiera”. Pero
sido la interpretación. Esto ha ocurrido por su densidad significativa, aunque nuestra atención aquí no es el análisis
en cuatro casos al descifrar la frase que no sean muy frecuentes. Destacaría en del Quijote sino dar ejemplos para el
análisis del fenómeno de leer.
este punto el conjunto de términos que trato secreto supuestamente recubierto
nº 3. 2007 sirven para caracterizar la conducta de por el significante como corteza.
un personaje o de todos en general: en- El tipo de lectura inspirado en la idea
tendimiento, ingenio, voluntad, deseo, de Heidegger comprende estos pasos:
etcétera. 1) paráfrasis; formulación sencilla de
17 En tercer lugar, después de desplegar una lectura atenta; 2) análisis de cada
los signos parciales, debemos recordar fragmento en su espesor significativo;
que el Quijote es un signo único, a pesar 3) análisis de episodios en el mismo
de su inmensa complejidad. El texto, sentido (aquí será discutible la ma-
como totalidad, plantea preguntas fun- nera de acotar y seleccionar los episo-
damentales que no plantean los frag- dios); 4) el todo: signos fundamentales
mentos; entre ellas la pregunta básica: que afectan a todo el texto, rasgos de
si es una obra maestra ¿en qué consiste los personajes, estructura; 5) la maes-
su maestría? tría de la obra maestra: originalidad y
Y estamos en 2007, no en 1615. Existen profundidad de la experiencia humana
hitos de la recepción del libro: desde las dramatizada en el libro, y categorías
parodias cómicas primitivas a lecturas estéticas que conforman la realización
esotéricas de todo tipo. ¿Cuántas de es- de esa verdad en el texto concreto. 6) La
tas visiones son sensatas y cuántas son recepción ha ido suscitando temas so-
la cizaña u hojarasca (Wildwuchs) de que bre el ideario de Cervantes, sus actitu-
hablabla Jauss? Curiosamente, el úni- des personales sobre la religión y otros
co medio a disposición del lector actual valores sociales de su tiempo, etc. Este
para distinguir el trigo de la cizaña es la esquema, que me parece el más com-
perenne vuelta al texto original, la re- prensivo para leer el texto cervantino,
lectura cada vez más exigente; tratar de es el seguido en mi libro Para entender el
despojarnos de prejuicios y acompañar Quijote (Morón, 2005).
al texto para que se exprese por sí mis- El encuentro con el texto se hace po-
mo. El papel del lector, según Heideg- sible porque apunta a una realidad que
ger, es dejarse hablar por el texto, y la invita al lector a mirarla. Cuando el
interpretación es quitarle todo tipo de lector entiende un escrito de otro, no se
adherencias para que aparezca y brille funde con el conocimiento o intención
sin intervenciones extrañas. del autor de ese escrito, sino que ve la
El leer-entender no consiste en in- realidad plasmada en lo leído. El texto
troducir claves ni en descifrar supues- es el núcleo en el que se encuentran el
tos enigmas ocultos, sino en desplegar autor y el lector, los dos investigando
de manera refleja eso que está en la su- realidad. Pero quizá la expresión co-
perficie. “Hijo del entendimiento”: si rrecta de ese encuentro no sea “fusión”
conocemos el significado del término de horizontes, ya que ni el autor ni el
entendimiento en tiempo de Cervan- lector permanecen en su mundo res-
tes, se entiende perfectamente su ex- pectivo: la relación es una “diferencia”,
presión. La densidad significativa del es decir, un punto de convergencia y di-
sintagma “hijo del entendimiento” no vergencia.
proviene de ningún significado alegó- El entender presenta tres momen-
rico, sino que es el significado literal, tos: 1) compartir el modo de pensar del
percibido cuando se compara el libro autor de forma que nosotros mismos
de Cervantes con los de caballerías. pudiéramos presentar sus ideas como
Pero eso es también obvio desde las nuestras. Sin esa inicial aceptación
primeras páginas del Quijote. Por eso metódica no hay comprensión. 2) Re-
he insistido en que leer es desplegar el flexionar sobre lo leído y sus premisas
significante mismo, no postular un es- para ver si las aceptamos o rechazamos,
y desde esta postura aceptar o recha- introduce en el Quijote auténtica crítica
zar las tesis que hemos comprendido y, literaria y convierte el libro en un taller nº 3. 2007
por tanto, aceptado metódicamente. 3) de reflexión teórica sobre la naturaleza
Juzgar desde nuestro pensamiento el del texto literario. En varios trabajos he
valor humano y estético de la obra que notado que en la primera parte, des-
leemos. pués de cada narración algún personaje 18
comenta el interés de lo narrado y la ca-
La competencia para la lectura lidad en el modo de contar. En el capí-
Aquí, como al principio, prefiero ha- tulo III de la segunda parte y en otros
blar de la competencia para la lectura lugares (II.44), se hace autocrítica de la
y no de la competencia de los lectores. primera, y a partir del descubrimiento
El concepto abstracto se puede definir; del Quijote de Avellaneda (II.59) la com-
en cambio, ya hemos visto lo difícil que paración entre los dos libros es un tema
es definir al lector, que si es honrado, central.
será un estudiante en perpetuo proceso Cervantes no escribió para filólogos,
de preparación. La competencia para la pero escribió con una preparación in-
lectura ideal exige: telectual superior a la de los pajes lec-
- Conocimiento del resto de la obra del tores de su libro, con alusiones concre-
autor. Sus paralelos permiten dar el tas a los clásicos, la Biblia, la doctrina
último sentido a frases que de otra católica codificada en la escolástica, a
manera podrían ser ambiguas. los libros de caballerías y la literatura
- Conocimiento del significado de las española desde el romancero, y a varios
palabras y de sus combinaciones, clásicos italianos. El lector competente
cuando la distancia en el tiempo nos de hoy debe conocer ese legado, que está
haya enajenado algo del lenguaje de en el Quijote, si quiere apreciar el libro
una obra del pasado. de manera consciente. La competencia
- Conocimiento de la doctrina vigente ideal es la que permita reproducir el
–en este caso en tiempo de Cervan- saber que el autor puso en su libro, y no
tes– sobre los criterios de descrip- creo quepa duda de que muchos lecto-
ción y valoración de la persona y de res de su tiempo, formados en una co-
la estratificación social: rey-vasallo, legio de jesuitas o en una universidad,
noble-villano, hombre-mujer, se- tenían esa formación que hoy nosotros
ñor-criado, honor/nobleza-honor/ sólo logramos con la investigación.
conducta, cristiano viejo-cristiano Junto a la competencia para desvelar
nuevo. Sólo desde este trasfondo se los contenidos que llamaríamos de co-
pueden entender las valoraciones de nocimiento, en los cuales no hay distin-
las personas y su conducta. ción entre el texto literario y no literario,
- Un esfuerzo por superar intereses para valorar el Quijote como obra de arte
personales para permitir hablar al se necesitan criterios estéticos. Esta pa-
10
texto, según la sugerencia de Heide- labra tiene a veces connotaciones nega- “Yo recuerdo haber visto en el teatro
gger. Más que equiparnos, la compe- tivas, pero debemos dejarla en su sentido al público iliterato de las galerías
aplaudir entusiasmado aquellos largos
tencia lectora exige desnudarnos de más positivo y en su ambigüedad, ya que
romances de Calderón, de los cuales
prejuicios y expectaciones para abrir- la idea de estética hoy merece un análisis solo penetraba el hechizo musical, la
nos al mensaje del texto, sin olvidar lo más detenido, sobre todo cuando tantos espléndida armonía. Algo de esto ha de
que hemos dicho de la crítica. métodos de acceso al texto literario han sucederle a V. Hay en su estilo, aparte
No debiéramos repetir el tópico de olvidado esa dimensión. de la vida incomparable, no sé qué
generosidad, qué nobleza, que abre
que Cervantes no escribió para filólo- Además de la competencia intelec-
sus secretos al más rudo en letras, si
gos, sino para el “público iliterato”.10 tual está la ética (otra vez lectura y va- acierta a ser sujeto de corazón” (ESCA-
Por de pronto no escribió contra los lores). El lector puede abrirse a un texto LANTE, Amós de, Carta a MENÉNDEZ
eruditos o filósofos, cuando él mismo en actitud sana, deseoso de entender y PELAYO, Santander, 8.X.1889. Epistola-
rio, X, carta 174, p. 150).
de aprender, o con sospecha y resenti- legítimos, pero lo serán más o menos
nº 3. 2007 miento, por aversión previa al autor o en la medida en que se acerquen o ale-
por otras razones. Una forma pueril de jen del ideal.
resentimiento es la “deconstrucción”: El proceso de lectura-estudio, ejem-
acercarse a un texto para buscarle po- plificado en el Quijote, presenta varios
19 sibles contradicciones o defectos. ¿Qué estadios que van desde la interpreta-
sería una lectura deconstructiva del ción de cada frase en el enigma que
Quijote? Por de pronto, no sería una lec- pueda presentar en sí misma o por su
tura, ya que sólo podría fijarse en frag- situación en el contexto, hasta la crítica
mentos y no en el texto completo. de la recepción histórica y de los pro-
Como he dicho, fijar los rasgos de la blemas que los receptores han acumu-
competencia para la lectura es posible. lado en torno al libro entero.
¿Cómo se encarna en el lector? Los es- La esencia de la lectura es el entender
pecialistas en psicología del desarrollo, o la recepción en el sentido original de
concretamente en el proceso de apren- la semiótica: recibir es entender. En
der, nos enseñarán estrategias concre- ese misterio no fundimos nuestro ho-
tas. La fenomenología nos descubre rizonte de lectores con el del autor del
que el lector hace camino al andar. Las texto, ni menos entramos en la galería
lecturas repetidas y el aprovechamien- de supuestos mediadores en una correa
to de la bibliografía sobre el Quijote nos sin fin. La fórmula es: el emisor brinda
van haciendo más y más competen- una realidad que él mismo ha recibido
tes sobre el libro de Cervantes, si no (de Cide Hamete Benengeli), y el recep-
caemos en el berenjenal de preguntas tor sencillamente la estudia y la percibe
vacías, ideologías ajenas al texto o mé- según su capacidad o competencia.
todos sesgados. Después, el hábito ad- La competencia consiste en la ca-
quirido en la lectura ideal de un texto, pacidad de analizar con precisión los
nos prepara para entender otros quizá conceptos y situaciones que presenta
en la primera ojeada. el texto, incorporarlas a su contexto,
desvelar su trasfondo en la filosofía
Conclusiones de su tiempo, y valorarlas. Si el texto
He identificado la lectura ideal e ino- es literario, junto a la valoración ideo-
cente con el estudio más riguroso de lógica es imprescindible la valoración
un texto. Todos los demás niveles son estética.
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en el cuento ilustrado.
Un análisis multimodal*
21-38. ISSN 1885-446X.
prominencia especial al estar general- nía los brazos aún más largos: Pues yo
12
te quiero así, le respondió. ¡Umm…, Danes (1974) distingue otros dos ti-
mente situadas en el centro de la com- pos de progresión temática: progresión
cuánto!, pensó la liebre pequeña.
posición y son, por tanto, el núcleo de la Yo te quiero hasta aquí arriba, aña- constante, en la que la misma entidad
información al que están subordinados dió la liebre pequeña […]”. aparece ubicada en la parte inicial de
otros participantes secundarios, rela- una serie de oraciones; y progresión
Esta organización textual se refleja temática derivada, caracterizada por
cionados generalmente con el paisaje y también, en cierto sentido, en el com- la presencia de una serie de subtemas
la naturaleza. Por otra parte, el tamaño ponente visual ya que, como se puede derivados del tema global, que él deno-
de la liebre grande es casi humano, so- apreciar en las composiciones 3, 4, 5 y mina hipertema. No se han encontrado
bre todo si lo comparamos con las pro- 6, una vez expuesta la situación inicial, patrones de progresión temática deri-
porciones del paisaje y las dimensiones vada en nuestro cuento, debido a que
existe una alternancia en la aparición de esta estructura organizativa requiere
de la liebre pequeña, sobre la que mues- los dos personajes principales, de ma- inferencias y una capacidad mental
tra su poder y su situación ventajosa. La nera que la liebre que está manifestan- aún no desarrollada por el niño de cero
liebre pequeña, por otra parte, aparece do su amor a través del lenguaje corporal a seis años.
menos veces en una posición superior queda generalmente ubicada en la parte 13
en la página que su progenitora, mos- Parte de una plana de un libro
izquierda de la doble página, frente a la abierto que cae a la derecha de quien
trando su ausencia de poder. A su vez, el que recibe el gesto u observa la situa- cuenta o lee la historia, en oposición
hecho de que la liebre pequeña aparez- ción, localizada en el recto.13 En el cua- al verso.
ca de forma frecuente, hasta un total de
siete veces en la misma página (figura
2), implica, siguiendo las apreciaciones
de Nikolajeva y Scott (2001) y Moebius
(1986), falta de seguridad y falta de con-
trol sobre la situación descrita.
El ilustrador parece subordinar todos
los elementos visuales a las dos prota-
gonistas del cuento, hecho que también
parece reflejarse en el componente
textual, ya que éste está organizado
siguiendo una estructura repetitiva y
encadenada, de forma que los finales
de algunas oraciones se retoman como
Figura 2
dro séptimo (figura 3) este orden parece liebre pequeña más allá del río y de las
nº 3. 2007 alterarse y la liebre grande observa a colinas lejanas, en la siguiente página,
su pequeña desde la parte izquierda. A la pequeña protagonista se refiere a esta
partir de este momento, cambia la posi- alocución y dice: “¡Qué lejos!, pensó la
ción espacial y se rompe, en parte, este liebre pequeña color de avellana. Tenía
29 patrón visual tan reiterativo, aparecien- tanto sueño que no podía pensar más”.
do las manifestaciones de amor tanto en La ausencia de marcos (frames) en
el verso como en el recto. nuestra narración es una invitación al
En cuanto a la distribución de la in- receptor a formar parte de la historia
formación en las ilustraciones se suele y a implicarse o identificarse con los
seguir un patrón marcado o no pro- participantes representados, las dos
totípico, ya que el verso generalmente liebres (Nikolajeva y Scott 2001: 62;
encierra información novedosa o des- Nodelman 1988: 51). Moebius, por otra
conocida para el receptor. Como se ha parte, también relaciona el encuadra-
indicado anteriormente, en la parte miento con lo que él denomina código de
izquierda de las ilustraciones a doble formas redondas y rectilíneas. Según este
página una de las liebres represen- código, un personaje que esté encua-
ta a través de lenguaje corporal cuánto drado en un recinto circular tiene más
quiere a la otra, mientras que en la parte posibilidades de estar feliz y seguro que
derecha, el recto, la segunda liebre ob- un personaje situado en un recinto rec-
serva la acción representada en el verso. tangular. En el caso de Adivina cuanto
En la mayoría de los casos las acciones te quiero, los personajes parecen estar
expuestas en el verso intentan superar a enmarcados en recintos circulares en-
las precedentes ofreciendo, por consi- vueltos en ligeras tonalidades azules.
guiente, un componente novedoso que El uso del color es otro aspecto del sig-
aporta dinamismo a la trama narrativa. nificado composicional que es relevante
Solamente hemos localizado una ilus- para nuestro análisis. El color actúa de
tración, la doce, en la que se sigue una sombreado, matiza y dota de volumen al
distribución prototípica de informa- dibujo, además de humanizar la imagen.
ción, ya que se comienza con los elemen- Determinados colores evocan actitudes
tos conocidos, deducibles del contexto específicas y de esta forma se pueden
previo o introducidos en la composi- transmitir estados de ánimo y emocio-
ción precedente, para progresar hacia nes de una forma efectiva. En Adivina
lo novedoso o desconocido. Así, hacien- cuanto te quiero predominan fundamen-
do referencia a la respuesta de la liebre talmente los colores verdes, marrones y
grande cuando afirma que quería a la azules. El verde ha sido considerado tra-
dicionalmente el color del crecimiento y
de la fertilidad, y también implica cal-
ma y serenidad, reflejada, por ejemplo,
en las últimas páginas cuando la liebre
pequeña, protegida por su progenitora,
se dispone, segura, a conciliar el sueño
en un entorno en el que predominan
las tonalidades verdes y marrones. No-
delman (1988) sugiere que la combina-
ción de verde y marrón, los colores de la
tierra y el follaje, a menudo crean una
atmósfera de riqueza orgánica que im-
plica que el lugar no es amenazador ni
inquietante.
Figura 3
4. La relación texto e ilustración imágenes cuentan la misma historia,
en los cuentos infantiles repitiendo información a través de mo- nº 3. 2007
4.1. El modelo de Nikolajeva y Scott dos comunicativos diferentes (Nikola-
(2001) jeva y Scott 2000). En la interacción de
Una vez realizado el análisis semió- ampliación, sin embargo, las imágenes
tico-social propuesto por Kress y van amplifican, aunque sea de una forma 30
Leeuwen (2006 [1996]), centraremos la mínima, el significado de las palabras o
atención en el estudio de la interacción las palabras expanden el significado del
texto / imagen de nuestro álbum ilus- componente visual, de tal manera que
trado, aplicando el modelo de Nikola- la pequeña variación de información
jeva y Scott (2001). Aunque Kress y van que se transmite a través de los com- 14
Navas (1995) se ha centrado
Leeuwen consideran que el componen- ponentes verbal y visual produce una
también en la interacción texto e
te visual guarda una estrecha relación dinámica más compleja (Nikolajeva y imagen y distingue entre ilustracio-
con el textual, asumen, sin embargo, Scott 2000). Cuando la interacción de nes narrativas, que son un reflejo fiel
que no existe una dependencia directa ampliación es muy significativa y uno de la palabra escrita, e ilustraciones
entre ellos y, por ello, sus estudios no de los componentes semióticos ofre- interpretativas, que amplían el texto
proporcionándole una mayor gama de
informan acerca de los sistemas es- ce información relevante y diferente a
significados. En este sentido, Agosto
pecíficos para analizar la correlación la proporcionada por el otro, entonces (1999) indica que la lectura conjunta
que se pudiera establecer entre ambos pasa a ser complementaria. de texto e ilustración puede servir bien
componentes semióticos. La aplicación Estas interacciones pueden culminar para ampliar, extender y completar el
de las cinco categorías de Nikolajeva y en relaciones de contrapunto y contra- texto o bien para contradecirlo. Basán-
dose en estos dos modelos, Cañamares
Scott acerca de la interacción palabra / dictorias si las imágenes y las palabras
(2006) establece tres estadios diferen-
imagen suplirán este vacío y nos servi- hacen contribuciones independientes tes de interrelación entre la ilustración
rán de base para complementar el mo- al hilo argumental. Así, dependiendo interpretativa y el texto: (i) imágenes
delo semiótico utilizado hasta ahora. del grado de información que se pre- cooperantes con el texto, que man-
En línea con los planteamientos de senta, se puede desarrollar una dinámi- tienen con el componente verbal una
relación de redundancia o ampliación,
Nodelman (1988: 242) y Lewis (2001), ca de contrapunto, donde las palabras y
(ii) imágenes operantes con el texto en
Nikolajeva y Scott (2001: 2) definen el las imágenes colaboran para transmi- un sentido contextual, que requieren
proceso de lectura de un libro infantil tir significados más allá de su propio la alternancia de palabra escrita e
ilustrado como un círculo hermenéuti- campo de actuación, bien porque los imagen para alcanzar una comprensión
co y, en consecuencia, afirman: componentes verbal y visual cuentan la total del discurso, ya que transmi-
ten información complementaria y
Whichever we start with, the verbal historia desde una perspectiva diferen-
nueva que el texto silencia, describen
or the visual, it creates expectations te o bien porque ésta se presenta desde físicamente a los personajes, alertan al
for the other, which in turn provides un punto de vista irónico. Una forma lector del cambio de espacios reales a
new experiences and new expecta- extrema de interacción verbal / visual fantásticos, reflejan el paso del tiempo,
tions. The reader turns from verbal
es la contradictoria, donde las palabras anticipan la lectura o introducen una
to visual and back again, in an ever- historia paralela… y, por último (iii)
expanding concatenation of unders-
y las imágenes parecen estar opuestas,
imágenes no operantes, que funcionan
tanding. Each new rereading of ei- ofreciendo dos historias aparentemente como estructuras independientes o
ther words or pictures creates better dispares. Esta ambigüedad supone un antagonistas respecto al discurso. En
prerequisites for an adequate inter- reto para el lector, que tiene que mediar el caso de Adivina cuánto te quiero
pretation of the whole (Nikolajeva y entre ambas para poder entender lo que predominan los dos primeros tipos.
Scott 2001: 2). realmente está sucediendo, ya que ad- 15
Mientras que la versión inglesa
En función de esta posible comple- miten gran variedad de interpretacio- describe las orejas de la liebre grande
mentación entre texto e imagen, pro- nes (Nikolajeva y Scott 2000: 226). como “muy largas”, la versión en
ponen cinco categorías para describir Estos términos no son absolutos y los lí- castellano no las califica así y expone:
la interacción entre los componentes mites entre una categoría y otra no siempre “La liebre pequeña color de avellana se
verbales y visuales: interacción simé- agarraba fuertemente a las orejas de
están claros, coexistiendo en una misma
la gran liebre color de avellana”. Otra
trica, de ampliación, complementaria, composición más de una de las categorías diferencia importante relacionada con
de contrapunto y contradictoria.14 En la descritas, como se verá en el análisis que la traducción radica en el nombre de
interacción simétrica, las palabras y las realizaremos a continuación. las dos liebres. Mientras que la versión
inglesa repite constantemente que las
4.2. La interacción texto / imagen en aunque la luz no es tenue y la luna no
nº 3. 2007 Adivina cuánto te quiero aparece reflejada hasta prácticamente
El análisis del cuento muestra un pre- el final de la historia, la composición
dominio de relaciones simétricas (13), muestra la cama de la liebre pequeña,
complementarias (12) y de ampliación hecha de hierba, como una indicación
31 (3), debido a que el libro está destinado de que es la hora de dormir.15
a niños de cero a seis años, a los que co- En la segunda doble página la rela-
múnmente se les denomina “primeros ción es, a su vez, de ampliación y com-
lectores”. Un ejemplo de relación com- plementaria, pues bien la ilustración
plementaria se encuentra en la misma o bien el texto ofrecen información
cubierta. El título puede llegar a sugerir adicional significativa que no está pre-
dos eran color de avellana y las llama a que los personajes son humanos, ya que sente en el otro componente semiótico.
través de sus nombres, Big Nutbrown Los elementos del entorno, por ejem-
se mencionan los sentimientos de que-
Hare y Little Nutbrown Hare, la versión
española no utiliza mayúsculas y
rer y la capacidad cognitiva de adivinar. plo, aparecen únicamente reflejados
se refiere generalmente a las dos Las imágenes, sin embargo, indican al visualmente estableciéndose, por tan-
protagonistas como la liebre pequeña receptor que los personajes son ani- to, una interacción complementaria.
y la liebre grande, haciendo más males a los que se les atribuyen rasgos Ahora bien, la relación texto / imagen
hincapié en su descripción física que es, en parte, de ampliación y, hasta
y comportamientos humanizados. La
en sus nombres propios. Este carácter
descriptivo de la versión castellana (la
cuarta ilustración (figura 4) es también cierto punto, también complementaria.
liebre pequeña color de avellana) hace complementaria, pues es el texto el que Cuando el componente textual expre-
que la forma de introducir a las dos proporciona más información que el sa que la liebre pequeña quería estar
protagonistas en la primera página sea componente visual. El pensamiento de segura de que la liebre grande la escu-
menos rítmica y fluida que en inglés chaba, la composición representa este
la liebre pequeña no se puede deducir
(Little Nutbrown Hare): 3 palabras y 5
sílabas en inglés frente a las 6 palabras
de la imagen, que únicamente muestra hecho mediante una imagen en la que
y 13 sílabas de la versión española. como ésta observa a su madre. Tampo- la liebre pequeña aparece sujetando las
Otra de las diferencias encontradas co el proceso verbal (responder) apare- orejas de su madre. Sin embargo, la res-
entre la versión española y la inglesa, ce reflejado en la ilustración, ya que la puesta de la liebre grande “¡Uf!, no creo
publicada en la editorial Walter Books, que pueda adivinarlo”, materializada
boca del animal permanece cerrada.
está relacionada con el género de los
personajes. Mientras que la versión
En la primera ilustración la relación en dos procesos cognitivos (pensar y
original se centra en una relación de verbo-imagen podría considerarse si- adivinar), no está representada en la
cariño paterno-filial y se refiere a los métrica. De hecho, el texto no es más imagen, estableciéndose una relación
personajes en género masculino, la rico en contenido que el componente exclusivamente complementaria.
versión castellana describe una rela- La tercera ilustración del cuento
visual; todos los episodios escritos es-
ción materno-filial, dada la condición
semántica del sustantivo “liebre”, que
tán reflejados visualmente. Las grandes (véase figura 1, apartado 3.1.) parece
se caracteriza por poseer género epi- orejas de la liebre grande están repre- estar dominada, en principio, por una
ceno inherentemente femenino. sentadas así en la ilustración. Además, relación simétrica, ya que texto e ima-
gen expresan la misma información.
De hecho, la imagen ejemplifica, en
cierta medida, el significado de “así” y
“todo lo que podía”. Sin embargo, tam-
bién una relación de naturaleza com-
plementaria se ha identificado en esta
composición, ya que el paisaje, al que
no se hace mención en el texto, está am-
pliamente detallado en la ilustración,
al igual que la liebre grande, también
ausente del componente textual. Esta
doble interacción de carácter simétrico
y complementario caracteriza también
las ilustraciones quinta, sexta, sépti-
Figura 4
ma, octava, décima y duodécima. De ban para ejemplificar el amor que am-
hecho, aunque parte de la información bas liebres sentían. A su vez, como ya se nº 3. 2007
que los dos componentes expresan es ha indicado, la liebre que mostraba su
similar, los procesos de carácter men- afecto se situaba en la parte izquierda de
tal (pensar, desear, tener una idea), las la composición. Ahora son las extremi-
intervenciones directas del narrador dades traseras las que se utilizan para 32
(nada podía estar más lejos que el cie- mostrar cuánto se quieren (“Te quiero
lo) o las interjecciones (ojalá) no suelen hasta la punta de mis pies”) y, además,
aparecer reflejados en las composicio- la liebre que ejemplifica el afecto utiliza
nes visuales. Son significados típica- una postura diferente quedando situa-
mente transmitidos a través de la pala- da en la parte derecha de la imagen con
bra impresa. A su vez, como sucede en los brazos en el suelo y las patas traseras
las composiciones quinta y séptima, el levantadas, frente a la liebre que obser-
ilustrador representa a un personaje al va, que está ubicada a la izquierda de la
que el texto no hace referencia alguna. ilustración. De esta forma, se evita que
O bien, como se muestra en la ilustra- la lectura del libro se convierta en un
ción octava, un circunstancial locativo, proceso monótono, recurrente y prede-
el árbol, aparece solamente reflejado en cible. Aunque la estructura textual sea
el componente visual. lineal y repetitiva, característica de las
La estructura visual o pictórica del narraciones infantiles destinadas a los
cuento se ve alterada en varias oca- más pequeños, el componente visual
siones, ya que se producen diferentes aporta un elemento novedoso e inespe-
cambios que afectan principalmente rado, que otorga dinamismo a la trama
a la disposición de los personajes en el narrativa.
escenario narrativo, quizás con el ob- En la ilustración novena (véase fi-
jetivo de mantener la intriga y evitar gura 2, apartado 3.3.) la orientación
caer en una monotonía argumental que de la historia vuelve a cambiar, puesto
podría acabar siendo tediosa hasta para que la liebre pequeña está representa-
un niño menor de seis años. Se pueden da dando saltos, mostrando una suce-
distinguir cuatro cambios fundamen- sión simultánea de movimientos que
tales en la representación espacial de conduce a una secuencia de imágenes
la historia. Al principio de la narración disyuntivas (Nikolajeva y Scott 2001:
madre e hija aparecen juntas en la esce- 140). La ejemplificación del amor no se
na. La liebre pequeña está subida en el hace, por tanto, por medio de las par-
cuello de su madre y agarrada a sus ore- tes del cuerpo, sino con todo el cuerpo
jas con el propósito de acaparar su aten- saltando hacia arriba y hacia abajo. En
ción. A partir de aquí las dos liebres se
disputan el verso de la doble página
para ejemplificar su cariño, mientras
que el recto se reserva para la protago-
nista que recibe las manifestaciones de
amor. Esta orientación espacial cambia
en la séptima composición (véase figu-
ra 3, apartado 3.3.), introducida por el
marcador temporal “entonces”, cuando
el narrador omnisciente afirma: “En-
tonces tuvo una idea: se puso boca abajo
apoyando las patas sobre el tronco de
un árbol”. En las páginas anteriores,
las extremidades delanteras se utiliza-
Figura 5
este caso, la interacción visual/textual El último cambio de orientación es-
nº 3. 2007 es de naturaleza simétrica puesto que el pacial, anunciado de nuevo por el mar-
texto y las imágenes expresan el mismo cador temporal “entonces”, aparece en
mensaje. la composición trece, cuando la liebre
Un nuevo cambio de orientación es- pequeña dirige su mirada hacia el cie-
33 pacial aparece en la composición un- lo. En este momento parece que la his-
décima (figura 5). Cuando en la página toria está llegando a su clímax. El texto
anterior la liebre pequeña piensa “¡Qué anuncia: “Entonces miró por encima de
salto!” y expresa el deseo: “¡Cómo me los arbustos, hacia la enorme oscuridad
gustaría saltar así!”, el cuerpo deja de de la noche. Nada podía estar más lejos
ser importante a la hora de transmitir que el cielo”. La imagen, a su vez, nos
sentimientos. En su lugar, de ahora en proporciona espacio en blanco, que se
adelante, otros elementos pertenecien- convierte en oscuridad en el siguiente
tes a la naturaleza, el río, los senderos cuadro (14), donde la liebre grande está
o las colinas van a ser las herramientas cogiendo en brazos a la pequeña, hecho
que midan el amor de las dos liebres. que no está referido en el componente
En este momento, ninguna de las dos textual. A pesar de que toda la historia
protagonistas mira a la otra, sus mi- se desarrolla por la noche, es la primera
radas se dirigen más bien a elementos vez que se hace una referencia visual a
del paisaje. La liebre grande, ubicada la luna. De hecho, aunque el cuento co-
en el recto, parece alcanzar una mayor mienza así: “Era la hora de dormir”, la
dimensión visual que la pequeña que, mayoría de las acciones ocurren a la luz
desde el verso, proyecta su vector visual del día, dada la luminosidad del cielo y
hacia el río, más cercano que las leja- del paisaje, matizados en colores claros
nas colinas. El plano a larga distancia de tonalidades azules y blancas. Sola-
de esta doble página muestra entidades mente en las últimas ilustraciones se
que no aparecen referidas en el texto utilizan tonos más oscuros de azul gri-
estableciéndose, por tanto, una relación sáceo y aparece la luna en cuarto men-
de ampliación entre los componentes guante. La relación que se establece
verbales y visuales, puesto que tam- entre los componentes verbal y visual
bién vemos casas, árboles y arbustos es de nuevo complementaria.
en la composición y no sólo el río y las La luna introducida en la ilustración
colinas mencionados verbalmente por 14 será punto de referencia importan-
las liebres: ““Te quiero de aquí hasta el te en las ilustraciones posteriores y se
final de aquel camino, hasta aquel río a convertirá en la herramienta que pon-
lo lejos”, gritó la pequeña liebre”. drá fin a la competición entre madre e
hija. La palabra ‘luna’ está escrita en
mayúsculas en la composición 15 y tam-
bién está representada en la imagen,
caracterizada por una relación de na-
turaleza simétrica y complementaria,
ya que la información que encierran los
procesos verbales “está” y “dijo” no está
representada visualmente. Las imáge-
nes 16 y 17 son simétricas (véase figu-
ra 6), pues reproducen exactamente el
contenido del texto. La liebre grande
acuesta a su hija en la cama de hierba
y le da un beso de buenas noches. El
niño puede pensar en este momen-
Figura 6
to que la liebre pequeña ha ganado la ya que el ilustrador puede comunicar
competición. Sin embargo, al pasar la en un sólo instante información que nº 3. 2007
página la liebre grande aparece susu- llevaría tiempo y espacio transmitir
rrando al oído de la liebre pequeña: “yo en palabras. La ilustración, por tanto,
te quiero de aquí a la luna… y VUEL- además de reforzar la comprensión del
TA”, vocablo en letras mayúsculas que mensaje que transmite el componen- 34
no está reflejado en la composición te verbal, descarga al texto de prolijas
visual. Por tanto, si consideramos la descripciones acerca del paisaje y de
primera parte de la página, la relación la apariencia física de los personajes17
entre los componentes verbal y visual (Díaz Armas 2005: 190).
16
es de naturaleza simétrica. La última Sin embargo, las palabras, además A diferencia de la representación
verbal, la visual ofrece posibilidades
parte escrita “y vuelta”, sin embargo, de narrar los hechos más significativos
ilimitadas de interpretación. En términos
introduce una relación complementa- de la trama narrativa, reflejan tam- generales, en la descripción del entorno
ria, que solamente queda reflejada en bién lo que los personajes dicen, sien- se pueden barajar un amplio espectro de
el componente verbal. Las palabras, en ten o piensan. Los procesos mentales soluciones pictóricas, desde la ausencia
este caso, amplían la información que (pensar, sugerir, querer…) o verbales de entorno (ya sea visual o verbal) a un
entorno representado con todo detalle
se ofrece en la imagen, y no son una re- (decir, contestar…) suelen aparecer
con una gran variedad de combinacio-
producción fiel de la misma. Esta es la reflejados solamente en el componen- nes intermedias. La descripción narrativa
única ilustración en la que ambos per- te textual, sin ser representados en las incluye tanto detalles visuales externos
sonajes están tumbados. composiciones visuales.18 Únicamente (la representación de los personajes,
las ejemplificaciones de amor, realiza- cómo se mueven, cómo van vestidos,
etc.) como características emocionales,
5. Conclusión y comentarios finales das por procesos materiales (agarrar,
psicológicas y filosóficas. Puede también
El análisis realizado, basado en la gra- abrir, ponerse boca abajo…), aparecen incluir, aunque éste no es nuestro caso,
mática de diseño visual de Kress y van reflejadas tanto en la palabra impresa una dimensión temporal, reflejando
Leeuwen (2006 [1996]) y en el modelo como en la imagen. De esta forma, el cambios en la apariencia, situación y
propuesto por Nikolajeva y Scott (2001), componente visual reitera las acciones crecimiento interno o emocional.
muestra que texto e imagen colaboran transmitidas por la parte verbal, qui- 17
Díaz Armas (2005: 190-191) asigna
estrechamente en la construcción de zás debido a que la información que además a la ilustración otras funciones
significado y que cada modo semiótico transmiten los procesos materiales es esenciales: la anticipadora, presente en
se especializa en la transmisión de as- de especial relevancia para el desarro- las portadas y primeras páginas, a través
pectos específicos. Las imágenes son llo argumental del cuento, ya que hacen de las que se introducen los personajes
en la escena discursiva, el tono y el tema
esenciales para transmitir la posición referencia a las acciones llevadas a cabo
de la obra,…; la descriptiva, que permite
espacial de las protagonistas y su apa- por las dos liebres para intentar cuan- describir y mostrar la evolución de los
riencia física. Es también la ilustración tificar el amor mutuo que sienten. personajes; la actualizadora, ya que la
la encargada de mostrar el ambiente El análisis de la función representa- ilustración permite ambientar el texto
donde transcurre la trama narrativa, cional muestra que hay un claro predo- en un lugar y un tiempo determinado;
la narrativa, que permite presentar
un entorno rural plasmado de tonos minio de patrones narrativos, más en
aspectos relacionados con la estructura
verdes que alternan con los tonos de concreto, imágenes reaccionales que narrativa y la presencia del narrador; la
azul celeste y marrón. El hecho de que sirven para presentar acciones y aconte- expresiva-apelativa, que vigila para que
la descripción verbal del entorno sea no cimientos en desarrollo y disposiciones las ilustraciones se correspondan con
narrada y se represente solo de forma espaciales transitorias. A excepción de la intención del narrador o su punto de
vista y, por último, la extrañadora, que
visual permite al lector una libertad de los elementos que pertenecen al mundo
aporta espacios vacíos que requieren la
interpretación considerable, ya que las de la naturaleza: colinas, ríos, maripo- participación directa del receptor para
imágenes no lo fuerzan a apreciar de- sas, setas, pequeñas casitas y árboles de encontrar el sentido y la interpretación
talles concretos que la palabra escrita gran tamaño, los componentes visuales correcta del mensaje (Sánchez Corral
impondría en situaciones similares.16 que acaparan la atención del niño de 1995) y está típicamente relacionada con
los símbolos que aporta el componente
La descripción verbal de los rasgos fí- una forma especial son las dos liebres
visual. Esta última función aumenta las
sicos y psicológicos de los personajes protagonistas, a las que se les concede posibilidades de complicación narrativa
se ha omitido en aras de la visual, que mayor espacio que al resto de los ele- que el texto ofrece por si sólo, abriendo
resulta ser mucho más eficaz y rápida, mentos pictóricos, especialmente a la historias paralelas o referencias transtex-
tuales o intertextuales que enriquecen la
madre, que destaca por su gran tamaño el niño pueda descodificar el mensaje,
nº 3. 2007 y sus grandes orejas. En cuanto al sig- especialmente cuando éste todavía tie-
nificado interpersonal, aunque predo- ne dificultad para identificar las grafías
minan las miradas de ofrecimiento, ya y acceder al significado de las palabras
que no se establece un contacto visual (Yubero 1995: 68; Morueco 2000: 27;
35 directo entre los participantes repre- Blake 2000: 52). De esta forma, se suple
sentados y el receptor, y se utilizan las la limitada competencia literaria del
tomas largas, características que im- receptor y su escasa capacidad para en-
plican una relación de carácter imper- tender narraciones leídas por un me-
sonal y distanciamiento con el lector, diador o por si mismos. La ilustración
lectura (Genette 1962; Mendoza 2001; las imágenes se presentan desde una en una relación simétrica con el texto
Tabernero 2002). No se han activado
perspectiva frontal y desde un ángulo facilita la comprensión, describiendo
en nuestra historia elementos transtex-
tuales, debido a la precaria experiencia
medio, lo cual indica igualdad de po- el paisaje, los personajes y también las
intertextual de los primeros lectores der entre los dos personajes del cuento acciones principales que éstos desarro-
(presencia débil de un texto, denominado y el destinatario. El análisis de la me- llan.19 De hecho, tradicionalmente la
hipotexto, en otro, llamado hipertexto). tafunción composicional revela que los imagen ha estado subordinada al texto,
Tampoco se han utilizado hipotextos
PRs, típicamente situados en la zona reproduciendo visualmente lo que éste
relacionados con la pintura u otras
manifestaciones culturales.
central de la composición, proporcio- contaba.
nan el núcleo de la información al que Ahora bien, el valor de las ilustracio-
18
Halliday (2004) distingue va- se subordinan el resto de elementos. El nes en Adivina cuánto te quiero no sólo se
rios tipos de procesos verbales: los tamaño de los PRs como forma de crear mide en función de su similitud con el
materiales, que reflejan procesos del
prominencia está presente a lo largo de contenido verbal, en muchas ocasiones
mundo exterior y acciones (hacer,
causar, suceder…), los mentales,
toda la historia. La ausencia de marcos, desplazan hacia la imagen elementos
que pertenecen a nuestra experien- junto con el uso de espacio en blanco, narrativos, salvaguardando su pre-
cia interna y se subdividen en tres son características típicas de este libro sencia en la narración sin sobrecargar
subclases: perceptivos (ver, sentir…), infantil ilustrado e invitan al receptor a el texto. Ocurre habitualmente en la
de cognición (creer, conocer, pensar…)
ver la historia desde dentro, facilitando descripción visual de los personajes y
y de deseo (querer, desear, gustar…);
los relacionales, representados por el
de este modo la identificación de éste del escenario pues, si se utilizara úni-
verbo ser; los verbales o comunicativos con los personajes protagonistas. Todos camente la palabra, se demoraría en
(decir), existenciales (existir) y los de estos aspectos no podrían haber sido exceso el desarrollo argumental de
comportamiento (reír, escuchar…). deducidos si nos hubiéramos basado en la historia, contradiciendo el princi-
19 un análisis exclusivamente textual. pio de brevedad que caracteriza a las
Morón (1996: 17), sin embargo,
considera que, mientras que la imagen
Finalmente, el análisis de la inte- obras infantiles. En este sentido, las
puede satisfacer al receptor por “su racción verbo / imagen revela un claro relaciones complementarias y de am-
pura impresión sensible”, la lectura, predominio de relaciones simétricas pliación contribuyen de forma dife-
al exigir pensar, conduce a un mejor (13), complementarias (12) y de amplia- rente al hilo argumental, ya que parte
entendimiento del cuento. Bettelheim
ción (2), debido a que el libro está di- de la información que cada uno de los
(1984: 85) también rechaza el uso de
imágenes y considera que el proceso
rigido a primeros lectores, lo que exige modos semióticos ofrece es diferente
de lectura es más enriquecedor cuando una trama narrativa sencilla de fácil o novedosa. Las relaciones de amplia-
el niño crea sus propias imágenes: comprensión. Las primeras facilitan la ción y complementarias fuerzan al re-
“Las ilustraciones distraen más que comprensión de la línea argumental, ya ceptor a considerar tanto el texto como
ayudan […]”. Sin menospreciar el valor
que palabras e imágenes transmiten, la ilustración para poder descodificar
de la ilustración, Cerrillo (1995: 10)
reflexiona sobre la razón principal por
a través de distintos medios, la misma el mensaje del cuento, crean intriga y
la que en la actualidad la imagen ha información. La mayoría de las veces desarrollan la capacidad mental y la
desplazado a la palabra como medio en los libros destinados a primeros creatividad del niño, incrementan-
de expresión e información, y afirma: lectores las imágenes están asociadas do su deseo de aprender a leer (Agosto
“Lo que sucede es que lo escrito –y,
a la entidad que evocan pues, dada su 1999: 277; Cañamares 2006). En las úl-
precisamente, sobre todo la literatura–
sufre desde hace años la competencia
proximidad visual al objeto que repre- timas décadas los libros han integrado
desleal y despiadada de esos modernos sentan, lejos de la abstracción del signo la imagen como un elemento construc-
medios que tienen en la imagen el verbal, éstas son de gran ayuda para que tivo de la historia, de manera que texto
principal poder de fascinación”.
e ilustración desempeñan una función pliación el ilustrador consigue que la
complementaria en el desarrollo de imagen desempeñe una función espe- nº 3. 2007
la trama narrativa. En muchos casos, cífica dentro del libro y le hace ganar
como indica Díaz Armas (2005: 191), la riqueza significativa con respecto a la
ilustración sirve de apoyo al receptor, a versión escrita. El ilustrador se con-
la vez que aporta al texto literario espa- vierte así, utilizando palabras de Gar- 36
cios vacíos que requieren la participa- cía Padrino (2004: 19), en el mediador
ción activa del niño para otorgarles un privilegiado entre el creador literario
sentido. y su receptor natural.
No se han localizado relaciones de Lo verbal y lo visual parecen estar
contrapunto o contradictorias que cuidadosamente distribuidos en la es-
exigirían una mayor capacidad cogni- tructura de cada página de forma que
tiva para poder descodificar el mensa- ambos modos se complementan. Por
je del cuento. Si se hubieran utilizado, ello, palabras e imágenes expresan, 20
En este sentido, Colomer (1999) y
el autor y la ilustradora podrían haber en algunos casos, la misma informa- Cañamares (2006) previenen contra la
añadido gran cantidad de información ción. Sin embargo, en otros casos, ex- saturación narrativa, que puede llegar
diferente a través de los componentes panden la información que uno de los a ampliar las posibilidades interpreta-
tivas del receptor, de forma que se lle-
verbal y visual y ello hubiera dificul- dos modos semióticos ofrece. Autor e
gue a vulnerar la linealidad cronológica
tado ostensiblemente la comprensión ilustradora parecen combinar sus es- del discurso o se alimente la ambigüe-
del cuento . Estas interacciones hacen fuerzos para mostrar la historia desde dad entre la realidad y la fantasía. La
que las ilustraciones entre en con- dos perspectivas diferentes, la verbal y gran cantidad de información nueva
flicto con la información que el tex- la visual, con el objetivo de facilitar al que transmiten algunas ilustraciones
dificulta en ocasiones la percepción
to expresa y ralentizan la lectura. Sin niño la compresión del cuento y mante-
informativa del lector, sobre todo si
embargo, a través de la utilización de ner vivo su interés por el desarrollo de es información que el texto omite o
relaciones complementarias y de am- la trama argumental. silencia.
Referencias bibliográficas
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Referencias bibliográficas
I. Hábitos lectores
SÍ A VECES NUNCA
1. En tu casa se compran libros.
72
16. Elige uno de los libros que has citado antes y explica qué es lo que te gustó y lo que no te gustó
de él. Da una opinión personal.
17. Leer libros te resulta interesante porque:
® Te sirve para olvidarte de lo que te rodea
® Te identificas con algún personaje
® Te ayuda a comprender cosas
® Aprendes
® ...
® ...
V. Historia de la literatura
18. Completa la parrilla de abajo con nombres de autores y obras que conozcas.
Fíjate en que debes clasificarlos también por géneros literarios.
Siglo XVIII
Siglo XIX
Siglo XX
19. De los autores que has citado, ¿qué obras has leído?
20. Cita autores y obras que conozcas aunque no sepas clasificarlos en la parrilla.
22. Señala algún recurso literario (metáforas, paralelismos,...) de entre los que aparecen en los
textos de arriba. Pon ejemplos de los textos.
23. E lige uno de los textos de arriba y continúalo.
ANEXO 2
2ª ENCUESTA SOBRE COMPETENCIA LITERARIA nº 3. 2007
Este cuestionario es anónimo y secreto. Los datos obtenidos nos servirán para
un trabajo de investigación sobre la lectura en Secundaria. Te agradecemos tu co-
laboración.
CURSO: ® 1º ESO ® 2º ESO ® 3º ESO ® 4º ESO
74
EDAD: SEXO: ® MUJER ® VARÓN
FECHA: CENTRO DE ESTUDIOS:
I. Hábitos lectores
1. Pon en orden las actividades que prefieres hacer en tus ratos libres:
» Ver la televisión:
» Escuchar música:
» Hacer deporte:
» Salir con los amigos:
» Ir a bailar:
» Leer:
» Ir al cine:
» Ver teatro:
» Estudiar:
» Salir de excursión:
» Otros (indícalo):
4. ¿Cuántos libros has leído porque era obligatorios para clase durante este curso? Indica número
y asignaturas.
5. Además de los libros de lectura obligatoria de clase, ¿cuántos más has leído?
11. Elige uno de los libros que has citado antes y explica qué es lo que te gustó y lo que no te gustó
de él. Da una opinión personal.
12. Leer libros te resulta interesante porque:
® No te resulta interesante
® Te identificas con algún personaje
® Te ayuda a comprender cosas
® Te sirve para olvidarte de lo que te rodea
® ...
® ...
V. Historia de la literatura
13. Completa la parrilla de abajo con nombres de autores y obras que conozcas. Fíjate en que debes
nº 3. 2007
clasificarlos también por géneros literarios.
75 Edad
Media
Siglos de Oro
(XVI y XVII)
Siglo XVIII
Siglo XIX
Siglo XX
14. De los autores que has citado en el cuadro anterior, ¿qué obras has leído este curso?
Texto B
El pacifista
(Hay un movimiento coreográfico exaltado que se interrumpe cuando el pacifista dice:)
OTRO: Yo quiero la paz.
(Todos le miran, se detienen y avanzan hacia él.)
TODOS: ¿Tú quieres la paz?
OTRO: (Reafirmándose.) Yo quiero la paz.
TODOS: (Incrédulos.) ¿Tú quieres la paz?
OTRO: ¿Yo quiero la paz!
TODOS: Bien, entonces... (...)
UNO: No odies
DOS: No ambiciones.
TRES: No aconsejes.
CUATRO: No obligues.
TODOS: ¡Y sonríe!
CINCO: No permitas la tiranía!
SEIS: ¡No pagues impuestos que sirvan para comprar armas!
SIETE: ¡Deserta!
OCHO: No permitas la tiranía.
TODOS: ¡Y sonríe!
Alberto Miralles (texto adaptado)
Texto C
Ayer te besé en los labios.
nº 3. 2007
Te besé en los labios. Densos,
rojos. Fue un beso tan corto
que duró más que un relámpago,
que un milagro, más.
Pedro Salinas
76
15. Señala a qué género literario pertenece cada uno de los textos de arriba e indica todos los
elementos te han permitido reconocerlos.
16. Elige uno de los textos y coméntalo (argumento, tema, recursos literarios, etc.).
17. Elige uno de los textos de arriba y continúalo.
Martín Rogero, Nieves
“El uso del Quijote en el aula. Revisión El uso del Quijote en el aula.
histórica de ediciones escolares y
paratextos didácticos”, en Revista
OCNOS nº 3, 2007, p. 77-90. ISSN
Revisión histórica de ediciones
escolares y paratextos didácticos*
1885-446X.
Con motivo del cuarto centenario de las ediciones del Quijote destinadas a un
la publicación del Quijote, dentro del público infantil y juvenil o escolar so-
ámbito educativo se han llevado a cabo brepasan el centenar (Sotomayor 2005:
numerosas propuestas para acercar 224-234), y entre ellas se puede esta-
este clásico de la literatura española blecer una tipología que muestra las
de alcance universal a los más peque- diferentes formas de acercar la obra a
ños1; resulta obvio que el Quijote no fue los lectores en formación y profundizar
escrito para niños y que, por tanto, su en sus contenidos2. La variedad permite
accesibilidad viene determinada por la elegir a los adultos mediadores el libro
labor de mediación emprendida tanto que más se ajusta a unas intenciones
*
Fecha de recepción: 20/12/2006
por los educadores como por las propias que dependerán, en gran medida, del
Fecha de aceptación: 26/02/2007 editoriales. Entre los años 2000 y 2005 contexto en el que éste va a ser difun-
dido. Por un lado, la finalidad más re- El Quijote como enciclopedia
creativa queda patente en reescrituras escolar nº 3. 2007
de la obra –centradas en la infancia de El uso del Quijote en las aulas queda
don Quijote o en una actualización de testificado desde mediados del siglo
sus aventuras–, o en versiones a otros XIX por una serie de medidas legislati-
géneros, como los cómics o los audiovi- vas. Entre los libros de lectura válidos 78
suales; pero también se hace presente para la escuela primaria recomendados
en adaptaciones que conservan la im- por una Circular de 1856 se encuentra El
pronta del original. Por otro, la función Quijote de los niños y para el pueblo, cuyo
pedagógica, la utilización que se hace autor es Fernando de Castro. Esta obra
del clásico para trabajar conocimien- será reeditada en años posteriores sin
tos, destrezas y valores se pone de relie- apenas cambios, constituyendo un mo-
ve en aquellas ediciones que contienen delo de adaptación para distintas edi-
paratextos didácticos, demostrando así toriales. En la abreviación del título, El
su carácter genuinamente escolar. Es- Quijote de los niños, y la inclusión de gra-
tas guías de lectura o ejercicios anexos bados se percibe ya la especificidad de
1
Entre estas iniciativas cabe destacar
constituyen un muestrario de posibi- un lector infantil. El texto será asumido
la participación española en la Feria
lidades para trabajar el Quijote en las en 1904 por la editorial Hernando, una Internacional del Libro Infantil y
aulas que resulta indicativo de una de- de las más prolíficas en la publicación Juvenil de Bolonia 2005 con una
terminada concepción de la lectura, los de este clásico, y será reeditado tal cual exposición de Quijotes infantiles (Vid.
métodos para su comprensión y la en- hasta la 30ª edición de 1962. Por otra SOTOMAYOR, M. V.; NAVARRETE, A. M.
(2005). Don Quijote para niños ayer
señanza de la lengua y la literatura. parte, las órdenes religiosas, con gran
y hoy. Madrid: Ministerio de Cultu-
El aprendizaje de la lectura, y por ex- peso educativo en la época, realizan sus ra.); la exposición organizada por el
tensión de la escritura, sigue constitu- propias ediciones escolares, es el caso Ayuntamiento de Alcalá de Henares
yendo la pieza clave de cualquier sistema de los salesianos (Tipografía salesia- (Vid. Quijotes juveniles. El Quijote en la
educativo, por más cambios y reformas na), que publican dos Quijotes “para uso biblioteca infantil y juvenil. Alcalá de
Henares: Ayuntamiento); la realizada
que sufran los planes de estudio, y si este de los colegios” a finales de siglo, y par-
por la Fundación Francisco Giner de los
aprendizaje es entendido, más allá de cialmente de los jesuitas, que incluyen Ríos (Institución Libre de Enseñanza)
la adquisición de una técnica mecáni- en 1881 fragmentos del Quijote en la Co- en Madrid, El Quijote en las aulas,
ca, como la comprensión de textos pro- lección de autores clásicos para uso de los donde fueron recogidos distintos ma-
gresivamente más complejos, ocupa los colegios de la Compañía de Jesús. Además, teriales didácticos en torno al estudio
de la obra de Cervantes en la escuela;
distintos niveles de enseñanza, no sólo en 1875 la Propaganda Católica publi-
y los talleres dirigidos a niños, jóvenes
los obligatorios. El Quijote, a pesar de las ca El ingenioso hidalgo don Quijote de la y familias de la Biblioteca Nacional de
dificultades que encierra, siempre ha es- Mancha arreglado para que sirva de texto Madrid.
tado presente en las escuelas, bien sea en de lectura en las escuelas.3
su calidad de modelo de lengua castellana Los libros de lectura se convierten en 2
Dicha tipología ha sido materia de
estudio en el Proyecto de Investi-
o de paradigma literario e histórico, en “eje vertebrador de la práctica escolar”
gación La transmisión del Quijote a
muchas ocasiones revestido de connota- (Tiana Ferrer 1997: 255), ya que a tra- lectores infantiles durante el siglo XX
ciones patrióticas. Desde la aparición del vés de ellos se desarrolla una habilidad (Universidad Autónoma de Madrid);
primer Quijote para niños (1856) y la fecha básica dentro de la escuela elemental, dirigido por María Victoria Sotoma-
de celebración de su cuarto centenario ha y ello explica el lugar privilegiado que yor, cuenta con la participación de
Amelia Fernández Rodríguez, Nieves
pasado más de un siglo; lógicamente la ocupan dentro de la oferta editorial y
Martín Rogero, Alicia Muñoz Álvarez y
concepción de la lectura y de la educación su especialización en la iniciación o el Alberto Urdiales Valiente. Después de
literaria ha cambiado, aunque algunos desarrollo lector. Entre estos últimos llevar a cabo un minucioso trabajo de
aspectos permanezcan invariables ya se encuentran distintos subgéneros recopilación y análisis de las ediciones
que, al fin y al cabo, el conocimiento de (antologías literarias, fábulas, libros comprendidas entre las fechas del
tercer y cuarto centenario, se procedió
las aventuras del caballero y el escudero morales, cuentos infantiles, catones
a la ordenación y clasificación de las
más famosos de la literatura se considera de carácter enciclopédico...); algu- mismas para llegar al establecimiento
ineludible, al constituir una parte esen- nos constituyen el germen de lo que de una tipología que permite esbozar
cial de nuestro patrimonio cultural. luego serán los libros de las distintas la difusión de este clásico entre los
lectores más jóvenes.
materias y en ocasiones se presentan aquellos años cobra auge la instrumen-
nº 3. 2007 de forma graduada como parte de un talización pedagógica del Quijote, como
método de lectura. La editorial Calleja demuestran las selecciones y los para-
–pionera en la difusión de la literatura textos que acompañan algunas de las
infantil en España– incluye precisa- ediciones con finalidad escolar.
79 mente en 1886 una edición escolar del En 1913 se publica Cervantes en la es-
Quijote como última fase del método El cuela (por Hijos de S. Rodríguez), de
pensamiento infantil, “conforme con la Acisclo Muñiz, autor de un Catecismo
inteligencia de los niños” y compuesto de Cervantes, una especie de folleto
de ocho volúmenes. El clásico en esta aparecido en 1905 que, a modo de ca-
época más que objeto de conocimiento tecismo, plantea preguntas y respues-
en sí se convierte en material de lec- tas sobre la vida del escritor. Se trata
tura y modelo de lenguaje, al mismo de una selección de los fragmentos y
tiempo que “tesoro de avisos y ense- capítulos del Quijote que considera más
ñanzas, de agudezas y donaires”, según significativos (en algunos casos, en
indicaba Fernando de Castro, parafra- lugar del texto de la novela se toma un
seando a Alberto Lista, en el prólogo a romance para completar el argumen-
su Quijote de los niños. Su utilización to, por ejemplo cuando se presenta a
en las escuelas alberga también un Sancho Panza). En ella ya se incluyen
sentido político, al ser considerado el materiales preliminares destinados
idioma castellano como un “símbolo a facilitar la labor del maestro, y en
de identidad nacional” (Pozo Andrés la introducción se especifican algu-
2000: 192). nas consideraciones que muestran
A raíz de la celebración del tercer la práctica de la lectura en la época y
centenario de la publicación del Quijote su uso para repasar los contenidos de
se concretan las disposiciones legisla- distintas materias:
tivas recomendando o prescribiendo Ante todo, los capítulos concer-
con carácter obligatorio la lectura de nientes á la vida, á Cervantes como
la obra en las escuelas. Una Real Orden escritor, á la mayor parte de los refra-
de 28 de noviembre de 1906 declara su nes y sentencias y á los consejos dados
por Don quijote á Sancho gobernador,
utilidad para los maestros, que habrán
deben ser aprendidos por los escola-
de servirse de ediciones recomendadas res, una vez escuchada la conversa del
por el Gobierno. Entre éstas se encuen- Maestro, procurando éste que su elo-
tra la adaptación del diputado Eduardo cución sea clara, precisa y viva [...]
Vicenti, que lleva como subtítulo El li- Como se ve, pues, debe hacerse,
bro de las Escuelas; publicada en 1905 por quien corresponda, de Cervan-
por Hijos de M. G. Hernández ofrece tes en la escuela no sólo un libro de
como paratextos una biografía de Cer- lectura amena é instructiva para
3
A lo largo de este artículo se ha
vantes y una carta geográfica de la ruta todos los escolares, sino saber utili-
optado por no incluir la referencia
de don Quijote (presente en la edición zarlo también para que los más ade-
completa de las ediciones escolares
lantados, al contestar á las interro-
del Quijote, por considerar suficientes de 1780 de la Real Academia Española).
los datos sobre el título, en algunos gaciones precisas del Maestro, vayan
Seis años más tarde, en la Real Orden paulatinamente repasando, como
casos el responsable, la editorial y el
año de publicación que aparecen en el
del Ministerio de Instrucción Pública suele decirse, las materias conteni-
cuerpo del mismo. Algunas cubiertas y de 12 de Octubre de 1912 se hace ex- das en el actual plan de estudios de
páginas de dichas ediciones pueden ser plícita la obligación de que los maes- la primera enseñanza superior que
visualizadas en la exposición temática tros nacionales incluyan todos los días abarca las asignaturas de Lengua
virtual El Quijote en la escuela, a cargo Castellana, Religión y Moral, Geo-
entre sus enseñanzas “una dedicada a
de Ana María Badanelli Rubio (Centro grafía, Historia, Derecho, Aritméti-
de Investigación MANES, Universidad
leer y explicar brevemente trozos de la
obra cervantina más al alcance de los ca, Geometría, Agricultura, Indus-
Nacional de Educación a Distancia:
escolares”. La consecuencia es que en tria y Comercio, Ciencias Físicas y
www.uned.es/manesvirtual/ExpoTema/
MontajeQuijote/quijotes01.html).
naturales, Fisiología é Higiene.
En los cuestionarios a final de capí- La educación en los comienzos del
tulo se concreta este enfoque globali- siglo XX seguía teniendo un marcado nº 3. 2007
zador: carácter moralizante, manteniéndose
Enúnciense los artículos que se con- fiel al tópico horaciano del “instruir
tienen en esta composición poética. deleitando”. El Quijote continúa siendo
– Qué es artículo. Clasificación de “tesoro” de virtudes, ejemplos edifi- 80
éste: determinante é indeterminado. cantes y se pliega a distintas aplicacio-
– Declinense el determinante el, la y
nes didácticas, aunque, por otro lado,
el indeterminado un, una en singu-
lar y plural [...] también llegan a ser vislumbradas sus
Quién era Marcela? – Explíquense posibilidades estéticas y recreativas.
los conceptos de honra y honor [...] Los métodos de renovación pedagógica
Órganos de reproducción en los ve- introducidos por la Institución Libre de
getales. – Flor y fruto [...] Enseñanza apostaban por el desarrollo
Partes de que se compone el apara- de las capacidades creativas y críticas de
to circulatorio del hombre. – Qué es los estudiantes, de ahí que fuera consi-
el corazón [...] derada fundamental la calidad estética
Y a continuación se ofrece la solu- de las obras de lectura elegidas, su ade-
ción de algunos de los ejercicios. Las cuación al desarrollo de los lectores y su
actividades en torno a la lengua están potencial atractivo. Y para fomentar la
presentes en todos los cuestionarios, y educación literaria se estipulaban los
en ellas se advierte una programación cuentos, como primera obra que debían
secuenciada (Vocales y consonantes, leer los niños, el Robinsón como la se-
sílabas, signos gráficos y gramática). gunda y El Quijote de los niños como la
Al mismo enfoque enciclopédico se tercera (Romero López; Mariscal 1999:
refiere Ezequiel Solana –un prolífico 27-28). Como apostillaba Eduardo Vi-
autor de libros de texto que continúa centi en su adaptación de 1905 “si la
escribiendo en la posguerra– en la de- Biblia es el libro de la Iglesia, el Quijote
dicatoria “Al que leyere” de su Cervantes debiera ser el libro de las escuelas”. A lo
educador. Colección de trozos de obras cer- largo del siglo XX confluirán dos líneas
vantinas, dispuestos para ser leídos en las en la difusión del clásico: una de carác-
escuelas (Magisterio español, 1913): ter netamente escolar, con una carga
La doctrina cristiana, la gramática, didáctica patente en los comentarios
la literatura, el derecho, la geografía
o paratextos anexos que acompañan el
e historia, la economía doméstica, la
música, todas las materias escolares texto reducido de Cervantes; y otra de
pueden ser tratadas con sólo comentar carácter más recreativo, cuyo ejemplo
trozos y pasajes de este libro inmor- lo constituye en estas primeras décadas
tal, que despierta por modo admira- las Aventuras de don Quijote, adaptación
ble los primeros anhelos del sentir, publicada en 1914 por Araluce (el título
del pensar y del querer, moviendo el resulta indicativo del intento de trans-
corazón, enriqueciendo la inteligen- misión de la obra como si de una narra-
cia y contribuyendo poderosamente a ción infantil se tratara).
la formación del carácter. Con motivo del tercer centenario de
Además, en el prólogo se incide en la muerte de Cervantes vuelven a orga-
las posibilidades que brinda para el co- nizarse actos en los que se constata la
nocimiento del idioma; el libro había participación de los maestros con sus
sido compuesto y premiado en 1905 con alumnos (López-Ríos; Massari 1995:
motivo de la celebración del tercer cen- 881) y surgen nuevas ediciones en las
tenario y en él se recogen fragmentos que se hace explícita la intencionalidad
cervantinos (no sólo del Quijote) para didáctica. En 1916 aparece Enseñanzas
ilustrar ciertos temas: el amor fraterno, del Quijote, una selección de Federico
la ambición...
Climent Terrer publicada en Barcelona siglo XIX ya que Don Quijote le estorba
por Mariano Galve. La obra consta de en la escuela porque “no capacita, no
nº 3. 2007
treinta y una enseñanzas singulariza- prepara para la vida” y propone que se
das por un título que permite relacio- lean en la escuela los periódicos con
preferencia a toda la literatura. Orte-
narlas con capítulos del Quijote; des-
81 pués del texto seleccionado se ofrece un
ga discrepa de esta opinión y propone
la lectura de obras literarias adecua-
comentario en el que se ven extrapola- das a la edad de los estudiantes y sin
das algunas circunstancias o situacio- imposiciones.
nes reales. El escrutinio de los libros En cuanto a las ediciones escolares,
muestra, por ejemplo, la necesidad de aparecen algunas cuya difusión en los
selección de las lecturas; la historia de centros educativos se hace explícita por
la pastora Marcela, la substracción a los paratextos de la colección o el pró-
la belleza física; la aventura de los ba- logo, más que por el hecho de contener
tanes, los peligros de la imaginación anexos de orientación didáctica. Este es
exaltada... El clásico vuelve a ser uti- el caso de Don Quijote de la Mancha, pu-
lizado para trabajar distintos tipos de blicado en 1922 por el Instituto Escuela
conocimientos y valores. en la colección Biblioteca literaria del
La normativa a favor de su uso en las estudiante, una edición realizada por
escuelas culmina en el Real Decreto de José R. Lomba que presenta resúmenes
6 de marzo de 1920, por el que se espe- para completar las partes omitidas del
cifica la obligación de leer la obra: texto, sin añadir ningún tipo de inter-
A dicha lectura se dedicará cada día pretación; y de la adaptación publicada
laborable el primer cuarto de hora de
en 1926 por Dalmau Carles, que lleva
clase, terminado el cual, el maestro
una dedicatoria titulada “A los señores
explicará a los alumnos, con breve-
dad y en términos apropiados para profesores”.
su inteligencia, la significación e im- En 1925 también aparece la 4ª edición
portancia del pasaje o pasajes leídos. de Cervantes en la escuela (publicada por
En el texto del Decreto se aludía al Imp. Viuda R. P. del Río), de Acisclo Mu-
Quijote como “el libro más educativo ñiz, que figura como corregida. En ella
que ha producido el ingenio humano”. sobresalen, como indica su autor en la
La polémica en torno a su idoneidad introducción, “dieciséis hermosos fo-
continúa y crece, de manera que, según tograbados representando a las mujeres
han estudiado López Ríos Moreno y que más sobresalen en la narración epi-
Herrero Massari (1995: 885), aparecen sódica de El Quijote”. Los cuestionarios
casi a diario opiniones en los periódi- se sitúan ahora al final en el apartado “De
cos de la época. Estos autores señalan interés para los profesores” y se limitan
que Manuel Machado intervino en la a prácticas gramaticales, semánticas y
discusión elogiando la decisión del Mi- ortográficas; se advierte explícitamente
nistro de Instrucción Pública Natalio que los ejercicios se encaminan a que los
Rivas, impulsor del Decreto. Nieves alumnos adquieran “conocimientos de
Sánchez Mendieta (1999: 475), en un la lengua castellana”. Ésta será la tónica
análisis análogo de la normativa de la adoptada en los paratextos didácticos de
época, indica que los artículos más fa- las siguientes décadas.
mosos fueron los intercambiados entre
Antonio Zozaya y José Ortega y Gasset: La explotación lingüística
Ambos coinciden en la forma (es- La utilización del Quijote en relación
tán de acuerdo con la citada Real Or- con la lengua y la gramática ya se había
den de 1920) pero no en el fondo: se- dado en años anteriores, pero a partir
gún Ortega, el señor Antonio Zozaya de la década de los años treinta ocupa
defiende una pedagogía practicista un lugar preeminente, sustituyendo a
del giro usado en la segunda mitad del
las otras materias, tal como se demues- En cuanto a la enseñanza de la litera-
tra en los ejercicios didácticos que pre- tura, ésta sólo era contemplada en los nº 3. 2007
sentan algunas ediciones destinadas a planes del bachillerato. En principio
los niños. estaba vinculada a los estudios de retó-
El Quijote figuraba entre los libros de rica y preceptiva, ya que la historia de
lectura aprobados en el siglo XIX, cuan- la literatura no aparece como asignatu- 82
do éstos “se situaban, tanto por sus ca- ra hasta la Reforma de 21 de octubre de
racterísticas formales como por los te- 18684. El estudio de la retórica se situa-
mas tratados e intenciones creadoras, ba entre la gramática y la historia de la
en la ambigua frontera de lo utilitario o literatura, ya que incidía en el análisis
instructivo y de la lectura recreativa o de de las obras y los ejercicios de compo-
carácter más literario” (García Padrino sición así como en los preceptos de los
2003: 735). Suplían o complementaban géneros literarios. La materia de lengua
en muchas ocasiones, como ya hemos y literatura, tal como la conocemos en
visto también en relación con las pri- la actualidad, se encontraba dividida
meras décadas del siglo XX, a los libros en diferentes disciplinas, y no llega a
de texto de distintas materias hasta que convertirse en una asignatura unitaria
estos últimos empiezan a generalizar- hasta el plan cíclico de la República de
se. Los manuales tardan en afianzarse 1934.
por la precariedades económicas de las Volviendo a las ediciones escolares,
familias que debían comprarlos, la es- la explotación lingüística del Quijote se
casa dotación por parte del estado y al- muestra claramente en la adaptación de
gunas concepciones en su contra tanto F.T.D. (las siguientes ediciones serán
por parte de movimientos pedagógicos asumidas por Luis Vives o Edelvives).
progresistas, que abogaban por el tra- Al comienzo de la década de los treinta
bajo del maestro y los alumnos, como (1931) aparecen dos libros, uno dirigi-
conservadores, al desear imponer sus do al profesor y otro al alumno; en el
propias doctrinas y no someterse a tex- primero, dentro del apartado final “Al-
tos impuestos (Escolano 1997: 29-30). gunas advertencias muy pertinentes”
En relación con la enseñanza de la se especifica:
lengua, se utilizaban libros como el Consideren los señores Profeso-
Epítome de la Gramática y el Prontuario res que cada capítulo del inmortal
de Ortografía, publicados por la Real Libro es un rico venero de enseñan-
Academia Española; dichos manua- zas gramaticales para los lectores;
una lectura fría nada enseña […] Por
les “seguían un esquema de preguntas
necesidad han de ir en la parte del
y respuestas, al estilo de un catecis- alumno, precediendo al texto, el ex-
mo, que el alumno debía aprender de tracto de cada capítulo, que nosotros
memoria” (Tiana Ferrer 1997: 286). A llamamos “sentido” del mismo, y las
partir de la reforma educativa de 1901, breves observaciones tónicas que
con la adopción de la enseñanza cíclica al leerlo deben guardarse. También
y graduada los libros de texto alcanzan van en la parte citada los grabados
una mayor diversificación, difundién- ilustrativos de la obra y las “palabras
dose tres géneros didácticos distintos dibujadas”, los cuestionarios y diálo-
en correspondencia con los tres niveles gos que recogen las ideas derramadas
a profusión por las páginas de un li-
de la educación primaria: el epítome, el
bro […] Cuestionarios y diálogos van
compendio y el tratado; y junto a ellos, íntegramente contestados en el libro 4
Cf. RINCÓN RÍOS, F. (1992). Didác-
claro está, seguía teniendo preeminen- del Maestro. tica de la literatura española en la
cia la enciclopedia, un tipo de manual En el libro del alumno se comprueba enseñanza media: desde la postguerra
sincrético y ecléctico en el que eran re- un epígrafe titulado “Sentido del capí- (tesis doctoral en microforma). Bella-
cogidas todas las materias. tulo”, en el que se realiza una síntesis terra: Publicacions de la Universitat
Autònoma de Barcelona, 6.
del contenido; y después aparece otro, El hecho de que entre los años treinta
nº 3. 2007 “Tono o dicción”, que permite consta- y los sesenta se hallen estas muestras de
tar la práctica de la lectura en voz alta, actividades en ciertas ediciones escola-
transcribimos un ejemplo: res no demuestra que fuera una prác-
Tono o dicción. –Como en casi todo tica asumida por todas las editoriales,
83 capítulo habla el novelista, adóptese pero sí resulta indicativa de un tipo de-
un tono medio, como el que emplea el terminado de orientación pedagógica si
maestro al exponer un asunto. Elévese se compara con los paratextos didácti-
algo en los monólogos finales y respé-
cos que aparecen más tarde. La edito-
tense los paréntesis y entrecomados.
rial Rosales presenta en 1933, bajo la
A continuación aparece el fragmento
responsabilidad de Emilio Marín, una
adaptado del Quijote correspondiente al
edición idéntica al libro del alumno de
capítulo. A las ilustraciones –algunas
F.T.D. Y en 1936 Hijos de Santiago y Ro-
reproducen grabados de Doré– se su-
dríguez publica la adaptación de Felipe
man, después del texto, unos dibujos con
Romero Juan –profesor de Escuela Nor-
la palabra correspondiente debajo como
mal–, una edición escolar que incluye,
explicación del vocabulario: “pantu-
asimismo, un vocabulario y prácticas
flos”, “adarga”, “morrión”, “celada”. Los
gramaticales. Tiana Ferrer (2004: 218)
paratextos didácticos se completan con
apunta:
un cuestionario, con el fin de trabajar
El principal interés didáctico del
principalmente el vocabulario (a veces libro consiste en que el autor conci-
se hacen alusiones históricas o geográ- be la gramática como un examen sis-
ficas) y unas prácticas de lenguaje, don- témico del lenguaje, lo que le lleva a
de aparecen contempladas la prosodia, evitar el aprendizaje memorístico y
la gramática y la composición. Aporta- a optar por un enfoque activo, basa-
mos un ejemplo de estas últimas: do en la realización de abundantes
PRACTICAS DE LENGUAJE ejercicios.
Prosodia. – Distinguir oralmente Sin embargo, una editorial de gran
el trozo: “¡Oh, cómo se holgó nues- tradición escolar como Escuela Espa-
tro…” Las vocales de las consonan- ñola –su 1ª edición del Quijote aparece
tes, o bien escribirlo, sustituyendo ya en 1947– incluye sólo un vocabulario fi-
unas, ya otras por puntos o guiones, nal y un mapa con la ruta de don Quijote
cual si fuera el juego llamado fuga.
como paratextos didácticos. Y Hernan-
Análisis gramatical. –La frase: “En
un lugar de la Mancha…” Distíngan- do continúa ofreciendo la misma edi-
se en ella las partes de la oración y sus ción de años anteriores, una adaptación
accidentes de género y número. para que sirva de lectura en las escuelas
Ortografía. – Léase atentamente el –como se anuncia en la portada–, aun-
pasaje “¡Oh, cómo se holgó nuestro que no incluya ejercicios prácticos ni
buen caballero…” y reprodúzcase lue- explicación de léxico.
go al dictado para cerciorarse desde el Tanto los libros destinados a los
principio del estado de los alumnos en alumnos como los libros del maestro
esta importante rama de la Lengua. constituyeron una guía indispensable
Redacción. – I Trácese el retrato
para el proceso de la enseñanza, ya que
(descripción) de un caballero andante.
II. Describa el alumno el caballo de las programaciones no son concreta-
cartón que tantas veces ha amenizado das por las Administraciones educati-
su niñez. vas hasta los célebres Cuestionarios de
Estas mismas ediciones se mantie- 1953. Los libros del maestro tienen su
nen durante los años 40, 50 y 60, hasta mayor proyección en las enciclopedias
llegar a la edición de 1973, en la que se en este periodo, aunque también se de-
producen cambios sustantivos en los dican a materias determinadas, y en el
paratextos. caso de la editorial Luis Vives –con una
gran actividad en este género– a lectu- siderado imprescindible en la Primaria,
ras de tipo extensivo como el Quijote. El como demuestra Francisca Montilla nº 3. 2007
libro del maestro publicado por Edel- (1954) a partir de una encuesta realizada
vives constituye una excepción dentro a los maestros por el Instituto de Pedago-
del panorama de ediciones escolares gía del CESIC. Pero el uso que se hace de
del Quijote. De hecho Adolfo Maíllo, él en la escuela parece que cambia, según 84
inspector de enseñanza y director del queda testimoniado en los paratextos de
CEDODEP5, se quejaba de que este tipo las ediciones escolares de esta época.
de libros se publicaba y difundía con En el prólogo de la 30ª edición de Her-
dificultad (Gabriel; Iglesias 1998: 451). nando (1962) se considera necesaria la
Lo curioso de la editorial mencionada intervención de un educador para poner
es que mantiene el libro para el profe- la obra al alcance de los niños y se estipu-
sor hasta sus ediciones más modernas, lan siete conceptos a modo de recomen-
adaptándolo como es lógico a los perti- daciones con el fin de llevar esta tarea a
nentes cambios educativos y sociales. cabo. Interesa detenerse en los cuatro
El periodo de posguerra se caracteriza últimos: 4) es indispensable el manejo
por un fuerte control ideológico, la incul- usual del Diccionario y las aclaraciones
cación de valores acordes con el espíritu presenciales del maestro; 5) buscan los
nacional-católico y una pedagogía tra- editores en la lectura de la obra su sen-
dicional. Aunque se habla de una escue- tido interno no que sea materia de estu-
la primaria activa, graduada, intuitiva y dios lingüísticos y gramaticales; 6) hay
práctica, esta metodología no llega a entrar que encuadrar las figuras en su ambien-
en las aulas hasta los años 60. Los Cues- te social histórico; y, por último, 7) dejar
tionarios de 1953, primer currículum ofi- en el corazón de los lectores, un recuer-
cial con el que contó la Enseñanza Prima- do grato y amable para que en el futuro
ria, constituyen sólo un tímido intento de puedan gustar un día las bellezas ínte-
renovación. Sobre la lectura de los últimos gras, deliciosas de la obra cervantina. Al
cursos se apuntan algunas generalidades: finalizar cada capítulo aparece un apar-
su práctica expresiva, con finalidad esté- tado titulado “Resumen del capítulo”;
tica, o silenciosa; y su carácter reflexivo y éste, más allá de constituir una síntesis
de preparación para el estudio. que facilite la comprensión, incluye una
valoración por parte del adaptador. El
La incidencia en la lectura resumen concluye con una palabra ex-
comprensiva plicada mediante un dibujo. Transcri-
Hay que esperar a los Cuestionarios de bimos el resumen del capítulo XIV:
1965 para hablar de un nuevo sistema de Resumen del capítulo
enseñanza, conformado por la división Ésta es una de las más dolorosas
en cursos, frente a otras agrupaciones aventuras del Caballero manche-
(Período elemental, Período de perfec- go. Da libertad a unos presos, y ellos
lo agradecen apedreándole. Triste
cionamiento...), y la especificación de las
resultado de la condición humana,
distintas materias en relación con cada cuando es poco agradecida.
uno de ellos. Ello determina el destierro El diálogo entre Don Quijote y los
de las enciclopedias y, como consecuen- presos está lleno de expresiones de la
cia de ello, la utilización de manuales gente del hampa.
específicos, además de un nuevo género: Las exigencias de Don Quijote, a todas
las Unidades Didácticas. En las listas de luces impracticables, ocasionaron la 5
El Centro de Documentación y Orien-
pedrea de los que acabaron de libertar. tación Didáctica de Enseñanza Prima-
libros de lectura extensiva el Quijote sigue
Por si era poco, le roban parte de sus ria fue creado en 1958 con el fin de
manteniéndose impertérrito; las reedi- establecer las características técnicas
ciones de Hernando y otras editoriales vestidos, y a Sancho, todos los suyos.
de los libros y controlar su aprobación,
Galera naval (un dibujo acompaña
anteriores prueban que todavía era con- además de elaborar los cuestionarios y
la palabra)
programas de Primaria.
Y en la primera edición de la adap- ca generalizada, pero cuando aparecen
nº 3. 2007 tación de la editorial Everest (1964) se “suelen ser redacciones, resúmenes, vo-
señala: cabularios y comentarios”. El trabajo con
A nuestro entender un Quijote es- el vocabulario, el resumen y la redacción
colar ha de ser para la escuela, ante se encontraba presente en los paratex-
85 todo y sobre todo, un libro de lectu- tos de las ediciones escolares del Quijote
ra. Leer bien supone, aparte de lograr de los años 30; lo que cambia entonces,
una adecuada expresión y entonación
fundamentalmente, es la apreciación de
de los elementos fónicos que cons-
tituyen el texto, una visión exacta y los ejercicios gramaticales. Adolfo Maí-
comprensiva del mismo. A la mejor llo, mentor de los Cuestionarios de 1953,
asimilación de la obra se encami- se había opuesto ya en los años 50 al gra-
nan primordialmente los ejercicios maticalismo imperante en la educación
propuestos como Guía de Lectura al más tradicional, optando por el princi-
final de cada capítulo, sin descartar pio de actividad y promoviendo que el
un progresivo aprendizaje de los re- niño hablase, leyese, escribiese, ejerci-
cursos expresivos del propio idioma. tara “antes que sus facultades analíticas,
Como puede comprobarse, esos ejer- sus poderes de producción y creación”
cicios ofrecen un triple aspecto: 1º
(Escolano 1998: 322).
Señalar expresamente las palabras
que, a nuestro juicio, han de ofrecer La reedición de Luis Vives de su Qui-
mayor dificultad de comprensión. 2º jote escolar en 1973 confirma este nuevo
Destacar las expresiones que, si bien enfoque metodológico, ya que, man-
constituidas por palabras de fácil in- teniendo en lo esencial (texto e ilus-
terpretación, ofrecen en su conjunto traciones) la antigua edición de FTD,
un sentido no siempre fácil, que el presenta unos paratextos renovados.
alumno deberá precisar en cada paso. Los apartados “Sentido del capítulo” y
3º Estimular, por medio de una serie “Tono o dicción” continúan, así como
de preguntas y sugerencias cuida- los dibujos que explican determinadas
dosamente preparadas, la atención
palabras –se mantienen unas ilustra-
del alumno hacia el contenido total y
esencial del capítulo y le encaminan ciones muy graciosas de un puchero y
gradualmente a ejercitar la retentiva el rostro de Sancho con el pie “Sancho
y la facultad de expresión oral. Pue- haciendo pucheros”–, pero las activida-
den utilizarse también como guión des del final de capítulo han cambiado,
para temas de redacción escolar. ahora se recogen en los apartados “Vo-
Los ejercicios puramente gramati- cabulario” y “Comprensión”. En cuanto
cales han sido eliminados por comple- al primero, se menciona antes del texto
to de nuestra edición, pues entende- que los vocablos que aparecen en éste
mos que tienen un lugar más adecuado con un asterisco tienen su explicación
en la Gramática que los niños estudien
a final de capítulo; y sobre el segundo
y han de provenir de diversas y abun-
dantes fuentes […] Como complemen- apartado, presentamos un ejemplo:
to a los ejercicios, incorporamos al fi- COMPRENSIÓN
nal del libro un Vocabulario… Di la vida y posición social del pro-
tagonista del relato
La concepción del libro de lectura pa-
¿Cómo contrajo don Quijote la ex-
rece que ha cambiado. Alrededor de és- traña locura?
tos solían girar actividades relacionadas ¿En qué consistió dicha demencia?
con distintas materias: la propia lectura, ¿Cómo se preparó para su hazañosa
la escritura, el dibujo, la lengua... Según aventura?
ha comprobado Sánchez-Redondo Mor- Refiere a tu modo el contenido del
cillo (2004: 180), a partir de una mues- capítulo leído.
tra de 27 libros editados en la década de Descríbase la escena que figura en él.
los 60, éstas no constituyen una prácti- Mira en el mapa de la página 312 la
región de La Mancha y El Toboso.
Este tipo de planteamiento sigue to- chillerato elemental y quedar consoli-
davía vigente en la actualidad a la hora dada la enseñanza obligatoria hasta los nº 3. 2007
de abordar la explicación de los textos, 14 años en la llamada Educación General
aunque claro está, los cuestionarios de Básica. Se afianzan reformas llevadas a
lectura comprensiva se combinan con cabo en los años anteriores y se formaliza
otros procedimientos, en orden de po- el proceso de enseñanza-aprendizaje en 86
tenciar la imaginación de los lectores torno a unos objetivos predeterminados
o el estudio literario de los fragmentos legislativamente. Junto a los libros de
u obras seleccionados. Curiosamen- texto propiamente dichos, se extiende el
te, en una edición escolar del Quijote, uso de libros de consulta para profundi-
publicada en 1940 en Buenos Aires zar en el programa, los libros de lectura
por la editorial Estrada, las activida- que sirven de base para la explotación
des complementarias se encuentran didáctica vinculada a distintas áreas, los
en consonancia con tiempos más mo- libros de trabajo y/o cuadernos de fichas
dernos. Hay que advertir que los libros y los libros de ejercicios para vacaciones
de lectura y los manuales escolares en (Martínez Sánchez 1997: 338).
España sufren un claro retroceso des- Los libros escolares de los cursos su-
pués de la guerra civil. Como ejemplo periores toman en ocasiones los modelos
ofrecemos algunas de estas propuestas de los manuales que antes iban dirigi-
didácticas realizadas en los años 40: dos a la Enseñanza Media. La enseñan-
-¿Cuál es el episodio o capítulo za de la literatura es contemplada den-
del “Quijote” que más ha gustado tro de la enseñanza obligatoria, y como
al lector? Dar los motivos de esta consecuencia el Quijote se plantea como
preferencia. materia de estudio. La aparición de edi-
-Semblante o aspecto físico del hé-
ciones íntegras dirigidas a un lector de
roe, a través de la obra.
-Describir una de las láminas de formación media, con la inclusión de
ésta o de cualquier edición del “Qui- notas aclaratorias, se remonta a los años
jote” y explicar por qué se ha elegido. 40, aunque como apunta Nieves Sánchez
-El buen gobernante, según los Mendieta (1999: 475) en un artículo de
protagonistas del libro. Miguel Allué Salvador, fechado en 1948,
-El diálogo de Cervantes. se señala que los catedráticos de literatu-
-Estilo o diversos estilos narrati- ra de Enseñanza Media reunidos en una
vos empleados en la obra. asamblea cervantina proponen seleccio-
-Hojean don Quijote y Sancho al- nar capítulos de la voluminosa obra en
guna de las innumerables ediciones
lugar de su lectura completa. A partir de
ilustradas de sus aventuras; comen-
tarios que les sugieren las láminas los años 70 se siguen publicando edicio-
contempladas. nes con una intención purista, pero ya
-Asisten don Quijote y Sancho a queda claro que su uso queda restringi-
fiestas deportivas actuales. Imaginar do al bachillerato. El texto comienza a ser
sus impresiones ante lo que presen- visto en relación con otras formas artís-
cian en un estadio de football, en un ticas de expresión y se le intenta vincular
cuadrado de box, en un hipódromo, con su contexto histórico y literario.
etcétera. A partir de esta época también empie-
-De no ser español don Quijote, zan a prodigarse las antologías, edicio-
¿qué patria le convendría mejor?
nes que siguen la línea de conservar el
texto original y presentan un plantea-
Hacia una metodología más
miento más didáctico –al resumir algu-
creativa y diversificada
nas de sus partes–, el cual se ve refren-
En los años 70 la promulgación de la
dado por actividades complementarias
Ley General de Educación supone un
anexas. En 1973 Coculsa publica El Quijo-
avance sustantivo al desaparecer el Ba-
te: Antología, y como paratextos, además comentario, pero las actividades no se
nº 3. 2007 de una introducción sobre Cervantes inclinaban todavía hacia la recreación
y el Quijote, se verifican unas propues- de la obra de Cervantes. En cambio,
tas de trabajos para el estudio personal la antología de Bruño de 1999, junto a
o por equipos. En los años siguientes, aplicaciones didácticas acordes a una
87 se perfila un enfoque similar: el clási- etapa anterior, ofrece otras en las que
co continúa siendo objeto de estudio, se promueve la intervención del alumno
como demuestra la relación de temas mediante el trabajo creativo e interdis-
para posibles trabajos de la antología de ciplinar. Con la aprobación de la LOGSE
Haranburu (1983): “Importancia de lo en 1990 se pone de relieve “una forma-
social en la obra”, “El humor de Cervan- ción personalizada, que propicie una
tes”, “La mujer y el amor en el Quijote”. educación integral en conocimientos,
Y además se utiliza como soporte de un destrezas y valores morales de los alum-
tipo de aplicación didáctica que ha teni- nos en todos los ámbitos de la vida...” así
do mucha difusión en la enseñanza de la como “el desarrollo de las capacidades
literatura: el comentario de texto. creativas y el espíritu crítico”. El Quijo-
Según ha estudiado Francisco Rin- te en dicha antología es abordado desde
cón Ríos (1992: 72-73) la metodología distintos ángulos: el literario (“Cada
que intenta explicar los textos litera- alumno redactará una nueva aventura
rios y profundizar en ellos mediante un de don Quijote y Sancho, siguiendo el
análisis histórico, estilístico y crítico esquema general de los episodios...”); el
ya se encuentra mencionada en la Ley teatral-musical (“Se leerá y representa-
de Ordenación de la Enseñanza Media rá en clase la dramatización de Alejan-
de 1953, pero tendrá que esperar hasta dro Casona titulada Sancho Panza en la
los planes de estudio de 1967 para im- Ínsula”); el estudio monográfico (“Es-
ponerse definitivamente. En éstos se tudio del marco geográfico en el que se
recogen las orientaciones del método de desarrolla la acción...”); el debate (“Se
Lázaro Carreter y Evaristo Correa, con abrirá un debate en torno a la figura de
una larga proyección en la Enseñan- don Quijote como representante de los
za Media posterior. Ello explica que en valores morales y de los ideales a los que
antologías del Quijote de la década de los aspira la humanidad”); y la interrela-
80 y los 90 el comentario de texto, con ción con otros textos de distintas épocas
evidentes modificaciones, se mantenga (de Alonso Fernández de Avellaneda,
junto a otras actividades. Así lo demues- Unamuno, Rubén Darío...).
tra la publicada por Alhambra en 1989 y En los comienzos del siglo XXI,
la de Bruño de 1999 (las dos ofrecen un las nuevas disposiciones legislativas
comentario solucionado sobre uno de (LOCE, 2002, y LOE, 2005) no han su-
los capítulos o textos seleccionados). puesto grandes novedades en lo que
Los libros de texto elaborados des- respecta a la enseñanza de la literatura
pués de los Programas Renovados de –cada vez se pone más el acento en el
1981 y 1982 no presentan diferencias desarrollo de hábitos lectores y el uso
notables con respecto a los de las Refor- de la biblioteca escolar–, por lo que los
mas anteriores, aunque sí “se aprecia en anexos didácticos de las antologías si-
la mayor parte de los equipos editoria- guen las líneas marcadas en la década
les una clara tendencia a favorecer que anterior. En algunas se sigue optando
el alumno aprenda a trabajar de mane- por el análisis literario y narratológico
ra personal y creativa” (Martínez 1997: (Aljibe, 2002), pero ya se generaliza la
345). Hay que advertir que en la anto- línea interdisciplinar y creativa. En la
logía de Alhambra se proponían temas publicada por Marenostrum en 2002,
para la redacción y el debate, aparte del junto a un apartado de “Reflexión críti-
ca” (en relación con la vida de Cervan- el Islam es una secta” (el racismo). Y las
tes y los aspectos literarios de su obra), actividades de transformación-recrea- nº 3. 2007
aparece otros de “Actividades interdis- ción son más atrevidas: “¿Imaginas esta
ciplinares” (en relación con la música, novela sustituyendo a los protagonistas
el cine, el teatro, la geografía, la gas- por dos personajes femeninos, y uno
tronomía, los viajes, las ciencias natu- ellos tratando de convencer a su mejor 88
rales y las artes plásticas) y “Expresión amiga de que seduzca a su marido para
escrita” (“Inventar un capítulo de ac- probar su honestidad?”. Aunque el pa-
ción y otro de signo diferente. Imagi- ratexto introductorio es titulado “In-
nar que don Quijote se ha dedicado a la vitación a la lectura”, en consonancia
vida pastoril...”). La antología de Edel- con métodos menos formales de acer-
vives de 2004 –en el mismo año saca camiento a los libros, como la anima-
una adaptación, El caballero don Quijote, ción a la lectura, una de las propuestas
destinada a un lector infantil en la que didácticas propone la imitación de unos
no aparecen paratextos didácticos– es versos dichos por Lotario –práctica que
casi idéntica a la de 1990, llevada a cabo recuerda los antiguos estudios de pre-
por Fernando Gómez Redondo. En esta ceptiva literaria– y otra la sustitución en
nueva edición cambian el aspecto ma- un fragmento de “las palabras con sen-
terial y algunos paratextos; se siguen tido pleno (sustantivo, adjetivo, verbo,
manteniendo la guía de lectura –que adverbio) por un sinónimo –volviendo
incide en la comprensión–, las activi- otra vez a la explotación lingüística–.
dades de escritura e investigación y se Con motivo del cuarto centenario
incluyen los apartados “Para hablar y prácticamente todas las editoriales del
debatir” y “Otras lecturas, otras acti- ámbito escolar han publicado una edi-
vidades”. En este último se verifica la ción del Quijote. Las adaptaciones sue-
utilización de materiales audiovisuales len ir dirigidas a un público infantil y
e Internet –en concordancia con el auge las ediciones íntegras y antologías a un
de las nuevas tecnologías en el contex- público juvenil; entre las primeras sigue
to educativo– para acercarse al clási- dominando la línea recreativa, y por tan-
co. Además se perciben los intentos de to no presentan paratextos didácticos,
actualización del Quijote mediante la pero la abundancia de ediciones hace
inclusión de actividades del tipo “Ima- que encontremos ejemplos que rompen
gina que eres don Quijote. Debes dar la tónica general. En la adaptación de
consejos a un amigo que va a ocupar un Bruño (2004), hecha por Concha López
cargo político. Adapta los capítulos 42 y Narváez, se recogen bajo el epígrafe “Un
43 de la Segunda parte a este propósito: libro para soñar” una serie de activida-
¿qué ideas fundamentales dejarías?”. des que bajo un enfoque lúdico poten-
Y esta misma intención se pone de cian la proyección y la imaginación del
manifiesto en los paratextos de la se- lector (“¿Te atreverías tú a dedicarle un
lección Los cuentos del “Quijote”, de Si- poema a don Quijote?”), pero también
ruela (2002). En relación con El curioso incluyen conocimientos gramaticales:
impertinente, por ejemplo, se plantean […] resulta que las señoras pala-
cuestiones sobre una serie de temas bras tromba, zafia y espolear, a las que
que sugiere la novelita: “¿Qué diferen- ya conoces, celebran su cumpleaños y
cia existe entre conocidos, compañeros, han preparado una fiesta.
Sentarán a sus amigos y amigas en
colegas y amigos?” (la amistad); “Pien-
tres mesas distintas:
sa en la época actual, ¿ha desaparecido -En una, se sentarán los invitados de
el temor de la mujer a su marido?” (la doña tromba, que son todos nombres.
obediencia, el temor y la sumisión); -En otra, los de doña zafia, que son
“¿Consideras, al igual que Lotario, que todos adjetivos.
-En otra, los de don espolear, que lización en la enseñanza de la lengua y la
son todos verbos. literatura. Evidentemente faltan datos
nº 3. 2007
¿Sabrías decir en qué mesa se sen- sobre la práctica real llevada a cabo por
tarán los siguientes invitados? maestros y profesores, cuya constan-
Lista de invitados armas, condu-
cia es más fácil de verificar en épocas
89 cir, extrañas, pensamientos...
recientes, ya que se promueve la for-
En el anexo didáctico se deja un espacio
mación y la capacidad investigadora de
para que los alumnos escriban y se utili-
éstos a través de congresos, reuniones
zan ejercicios tipo pasatiempo (puzzle,
científicas y pedagógicas así como su
salto del caballo, tres en raya) para pro-
participación en revistas especializa-
fundizar en la comprensión lectora.
das6. Lo cierto es que la conmemoración
El formato se asemeja al de un libro de
de ambos centenarios goza de una gran
texto de lengua de Primaria, recordando
repercusión social, como se merece la
las fichas didácticas generalizadas en la
obra más conocida y traducida de nues-
enseñanza a partir de la Ley del 70.
tra literatura, y aunque no se trate de
Y como último ejemplo, dentro de
una obra para niños, éstos siempre han
este panorama histórico de ediciones
estado presentes como público potencial
de uso escolar, merece la pena citar la
al que había que atraerse a toda costa, de
libre adaptación ofrecida por la edito-
forma más o menos imperativa.
rial Nóbel (2001). Sin entrar a valorar
Si en los inicios del siglo XX su lectura
su calidad (se tergiversa bastante la
va unida a un enfoque pedagógico me-
historia original), aunque no recoge
morístico, moralizante y globalizador,
anexos de actividades, destacamos el
en cuanto que permite el repaso de dis-
hecho de presentar unas enseñanzas
tintas materias, con el paso del tiempo la
“curiosas” –el carácter de las mismas
explotación lingüística es la que gana te-
tiene el sabor de tiempos pasados–,
rreno. A partir de década del 70, en la que
ya que cada episodio seleccionado del
se produce un cambio decisivo en el sis-
Quijote termina con una frase que in-
tema educativo con la nueva Ley General
tenta influir en el comportamiento de
de Educación, parece que las actividades
los lectores. En el episodio de los mo-
gramaticales pierden peso, y se incide
linos se dice: “HAY QUE ESCUCHAR
más en la lectura comprensiva. Y pos-
LOS CONSEJOS DE LOS AMIGOS,
teriormente, la aparición de antologías
PUESTO QUE NOS QUIEREN Y NO
en las que se conserva el texto original
NOS ENGAÑAN”; y en el de los leones:
determina su lectura en las Enseñanzas
“Y ES QUE HACERSE VALIENTE EN
Medias. Los paratextos didácticos pre-
OCASIONES PUEDE TRAER GRAVES
sentes en éstas incluyen distintas pro-
PROBLEMAS”. El Quijote, excepcio-
puestas que enmarcan el clásico dentro
nalmente, vuelve a ser utilizado como
de la enseñanza de la literatura y se per-
tesoro de virtudes, aunque el sistema
cibe que el enfoque recreativo e inter-
de valores haya cambiado.
disciplinar –curiosamente la obra vuelve
a ser abordada en relación con diferentes
6
Por poner algunos ejemplos, en Conclusiones
disciplinas, aunque la metodología di-
abril de 2005 tuvo lugar en Ciudad El análisis de las ediciones escolares,
fiere bastante– es cada vez más acusado.
Real, organizado por la Escuela de centrado especialmente en aquéllas
Magisterio, el I Congreso de Reflexión En general se puede decir que los
comprendidas entre la celebración del
Pedagógica: Don Quijote en el aula. Y planteamientos a la hora de abordar la
tercer y el cuarto centenario de su pu-
en el nº 41(enero de 2006) de la revista lectura inciden más en lo lúdico y en
Textos de Didáctica de la Lengua y la blicación que incluyen paratextos di-
la participación activa del lector, así
Literatura (ed. Graó) se incluye una dácticos, permite esbozar una serie de
como en los aspectos literario-histó-
monografía, “El Quijote y la educación consideraciones acerca de la difusión
literaria”, en la que aparecen reflejadas ricos y culturales del texto. El lenguaje
del clásico en las aulas, la concepción de
diferentes experiencias didácticas en y el tratamiento gráfico intentan ser
torno al clásico.
la lectura a lo largo de un siglo y su uti-
más cercanos a sus potenciales desti- ción. Se puede decir que en la actuali-
natarios, pero el aprovechamiento di- dad, y con motivo de la celebración del nº 3. 2007
dáctico de la obra –vuelven a aparecer cuarto centenario de la publicación
propuestas de tipo gramatical, aunque del Quijote, el mercado editorial ofrece
no constituyan el núcleo de las activi- una variada gama de posibilidades para
dades– continúa. Al fin y al cabo estas acercar el clásico inmortal de Cervan- 90
ediciones tienen como principal foco tes a distintas edades y mediante dife-
de difusión la escuela, y los docentes rentes métodos, tal como corresponde
pueden ver facilitada su tarea si las edi- a una sociedad cultural y de consumo
toriales les proporcionan una orienta- cada vez más especializada.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Norma Alloatti
Buenos Aires
Gemma Lluch
Universitat de València
Janeth Chaparro
Fundalectura, Colombia1
*
Fecha de recepción: 31/01/2007 1. El contexto de los comités de mente con los organismos estatales para
Fecha de aceptación: 26/02/2007 evaluación: Fundalectura generar políticas y programas que pro-
La Fundación para el Fomento de la muevan la lectura y estimular la inver-
Lectura, Fundalectura, es una organiza- sión pública en programas para mejorar
ción privada, sin ánimo de lucro, creada la formación de lectores. En concreto,
en 1990 con el propósito de hacer de Co- los programas que en la actualidad lleva
lombia un país de lectores. Es miembro a cabo son los siguientes:2
activo del Consejo Nacional del Libro - Formación en Lectura y Escritura: Leer
y la Lectura y del Consejo Nacional de en Familia, Plan Nacional de Lectu-
Cultura y forma parte de la Internacio- ra y Bibliotecas 2002-2010, Congreso
nal Board on Books for Young People Nacional de Lectura y Simposio sobre
(IBBY). Promueve la lectura en la fami- lectura y literatura infantil y juvenil.
lia, en la escuela, en las bibliotecas y en - Servicio de Información y Documen-
otros espacios. Trabaja con entidades tación: Centro de Documentación,
1
En este trabajo han intervenido tam- públicas y privadas para lograr el acce- Comités que evalúan y recomiendan
bién Claudia Rodríguez, María Cristina so de todos los colombianos a la cultura libros para niños y jóvenes.
Rincón y Andrea Victorino, todas ellas escrita. En calidad de organismo asesor - Asesoría a Bibliotecas: Asesoría y ser-
de Fundalectura.
del Gobierno para la formulación de pla- vicio integral a bibliotecas públicas y
2
Los diferentes programas pueden nes y programas de fomento a la lectura, escolares, Paraderos Paralibros Para-
consultarse en www.fundalectura.org. Fundalectura interactúa permanente- parques (PPP) y servicios itinerantes.
- Publicaciones: Libros, cartillas y re- bién en los datos reunidos por medio de
vistas especializadas en bibliotecas, una encuesta anónima realizada a los nº 3. 2007
lectura y literatura infantil y juvenil, miembros de los comités y a las perso-
impresas y en Internet. nas de Fundalectura que lo coordinan
- Redes: Red Prolectura e IBBY. o que participan en ellos. En la segun-
- Premios: Premio Latinoamericano da parte, Recopilación de información de 104
de Literatura Infantil y Juvenil Nor- las valoraciones de los comités, reunimos
ma-Fundalectura y Premio Mejor los datos necesarios para analizar qué
Proyecto de Promoción de Lectura argumentos se utilizan para valorar
Fundalectura-Premio Compartir al positiva o negativamente los libros li-
Maestro. terarios e informativos para niños y jó-
- Librería: Literatura y libros informa- venes. Finalmente, concluiremos el es-
tivos para niños y jóvenes, Libros y tudio con una tercera parte, Análisis de
revistas especializadas en biblio- las valoraciones de los comités, donde se
tecas, lectura y literatura infantil y resumirán los aspectos que los comités
juvenil. utilizan para valorar los libros, clasifi-
Una de las actividades que se ha veni- cándolos según el tipo de narrador, los
do desarrollando de manera sistemática personajes, la tipografía, y también se-
en Fundalectura desde su fundación ha gún las edades y géneros, entre otros.
sido la de los comités que evalúan y reco- En este artículo, pretendemos pre-
miendan libros para niños y jóvenes. sentar de manera resumida las dos
primeras partes de la investigación, es
2. Presentación de la decir, la descripción de los comités de
investigación evaluación y la metodología que esta-
Por la importancia y las repercusio- mos utilizando para recopilar los datos
nes que tiene la labor de los comités que nos permitirán conocer los crite-
para Fundalectura y por la responsabi- rios utilizados para la valoración de los
lidad social que implica esta actividad libros.
en relación con los autores, ilustrado-
res, empresas editoriales, mediadores, 3. Descripción de los comités que
la academia y los futuros profesionales, valoran y recomiendan libros
nos hemos propuesto analizar su fun- Los comités que valoran y recomien-
cionamiento para recoger esta expe- dan libros están formados por un equi-
riencia, formular unos criterios propios po de colaboradores de la Fundación y
de evaluación para los libros dirigidos personas de distintas especialidades
a niños y jóvenes y sugerir algunas re- que se reúnen de manera voluntaria
comendaciones a las personas e insti- cada semana en Fundalectura, con el
tuciones que promueven la circulación propósito de intercambiar conoci-
del libro. mientos y experiencias, y a partir de
La investigación que venimos desa- de ello reflexionar, discutir y aprender
rrollando y que presentamos en este sobre la lectura y los libros dirigidos a
artículo consta de tres partes. En la pri- niños y jóvenes. Son personas cualifi-
mera, Descripción de los comités que valo- cadas y conscientes, como Fundalectu-
ran y recomiendan libros, presentamos ra, de la necesidad de dar una mirada
la composición, el funcionamiento, los crítica a la oferta editorial disponible
materiales y la repercusión del traba- para destacar libros sobresalientes por
jo realizado por los comités a partir de su alta calidad, aquellos que contribu-
la información que tiene la Fundación yen a formar mejores lectores; orientar
sobre su funcionamiento a lo largo de a los adultos en bibliotecas y centros
su historia; nos hemos basado tam- educativos, entre otros espacios, como
el de la familia o los ámbitos laborales, como docentes, bibliotecarios, edito-
nº 3. 2007 sobre los mejores libros disponibles; res, ilustradores, científicos preocupa-
planificar las inversiones públicas en dos por la divulgación del conocimien-
libros para bibliotecas públicas y esco- to, mediadores de la lectura todos ellos.
lares; contribuir al trabajo de norma- Para la Fundación, los comités son
105 lización en las bibliotecas, clasificando una fuente de información permanente
los libros recomendados por géneros y sobre libros recomendados que utiliza
niveles de lectura; publicar listados de en todos sus programas. Es decir, en la
los libros recomendados y reseñas en Asesoría y Servicio Integral a Bibliote-
revistas, libros y página Web de Fun- cas Públicas y Escolares, donde se con-
dalectura. forman colecciones con los libros que
Los comités de evaluación fueron los comités recomiendan, bien para las
creados en 1990 y con el tiempo han bibliotecas, o bien para las cajas viaje-
ido evolucionando; hoy representan ras, los morrales de lecturas o los Pa-
un trabajo sostenido y conjunto entre raderos Paralibros Paraparques (PPP),
la Fundación y las personas que asis- entre otros, que se hacen con institucio-
ten a ellos. Un espacio para compartir nes que contratan los servicios de Fun-
conocimientos y experiencia en el que dalectura; la Librería los comercializa
los participantes asisten por voluntad y programas como Leer en Familia se-
propia y no reciben retribución econó- lecciona algunos de ellos para incluirlos
mica. Anualmente, lo forman hasta 80 en folletos, en la bolsa de “Los bebés sí
personas. pueden leer” y en cartillas como Leamos
En la actualidad, funcionan dos tipos con nuestros hijos. La información sobre
de comités: los que evalúan libros lite- libros recomendados ocupa un lugar
rarios y los que evalúan libros infor- muy importante en la revista trimestral
mativos. Los dos comités literarios están Nuevas hojas de lectura, que la Fundación
integrados por estudiantes avanzados edita y hace llegar a las bibliotecas pú-
y profesionales con experiencia en las blicas del país, además de distribuirla
áreas de literatura, filosofía, educación entre instituciones educativas, maes-
preescolar, psicología, fonoaudiolo- tros y padres de familia. La página web
gía, filología y lingüística, traducción, de la Fundación y otras publicaciones no
comunicación social, bibliotecología, periódicas como el Manual de la lectura
promoción de lectura, ilustración, di- en voz alta también publican las rese-
seño gráfico y edición. El comité de li- ñas de estos libros. Adicionalmente, el
bros informativos, por profesionales y Cedoc edita para la Feria Internacional
estudiantes de antropología, ciencias del Libro de Bogotá el listado anual Al-
políticas, historia, biología, microbio- tamente recomendados, que destaca los
logía industrial, ingeniería industrial, mejores libros seleccionados por los co-
química, economía, física, geología y mités de evaluación.
diseño industrial. En calidad de organismo asesor del
Quienes participan en los comités Gobierno para la formulación de pla-
encuentran en este espacio la posibi- nes y programas de fomento a la lectura
lidad de intercambiar conocimientos (Ley 98 de 1993, art. 31), la Fundación
y experiencias en torno a los libros in- pone a disposición de las entidades pú-
fantiles y juveniles, actualizarse sobre blicas esta información; así contribuye
la oferta editorial, construir y ajustar a consolidar las colecciones que con-
en un diálogo permanente los criterios forman programas de lectura de amplia
de evaluación de los libros literarios e cobertura; elabora selecciones especia-
informativos. Una dinámica que apoya les para radio, televisión y prensa; di-
la labor de los miembros de este equipo vulga el trabajo de autores, ilustradores
y traductores colombianos; orienta a las Las intervenciones de los participan-
bibliotecas, escuelas y padres sobre la tes dependen de la cantidad de libros nº 3. 2007
mejor oferta editorial disponible en el leídos. Sin embargo, quienes no par-
mercado. ticipan en la discusión sobre un título,
porque no lo han leído, también tienen
3.1. El funcionamiento de los comités el trabajo de cuestionar y validar los ar- 106
Los comités de evaluación están a gumentos de las personas que sí lo han
cargo del Centro de Documentación de leído.
Fundalectura (Cedoc), que para reali- Los comités establecen un rango o
zarlos pone en marcha un proceso que prioridad a los libros recomendados de
empieza desde que llegan los libros a la acuerdo con su calidad. También, defi-
Fundación e incluye el repartirlos entre nen el género, los descriptores o temas
los miembros de los comités, organizar de los que tratan y el nivel de lectura
las reuniones y los materiales que se para el cual, según consenso, se diri-
utilizan, etcétera. gen. Esta información se registra en
Los comités se reúnen de febrero a la ficha bibliográfica correspondiente
noviembre todas las semanas en se- a cada título (Apéndice 1). Terminada
siones de dos horas y asisten entre 8 y cada sesión se actualizan los contro-
20 personas a cada una. Antes de cada les de muestras recibidas, señalando
reunión, los distribuidores o editores qué libros se recomiendan y cuáles no.
han enviado los libros con el interés de Las fichas se complementan con los
que sean incluidos en los programas de comentarios de los participantes y los
la institución. Es preciso aclarar que el descriptores asignados se normalizan
precio de venta del libro no es un factor y verifican.
de juicio que determine su evaluación. Los libros evaluados con sus respec-
Los miembros del Cedoc registran los tivas fichas y comentarios se entregan a
libros recibidos, los distribuyen entre la persona que actualiza la base de datos
los miembros del comité, quienes los en Internet. Ella registra todos los datos
leen y realizan un comentario escrito del libro, incluye los datos de evaluación
en el que exponen las razones para re- y escanea la portada. En algunos casos,
comendarlos o no. El funcionamien- añade la reseña.3 Esta base está a dispo-
to de los comités está marcado por un sición del público, que puede consultar
protocolo que ha ido mejorando con los sólo la información relativa a los libros
años y es conocido por todos sus miem- recomendados.
bros. La sesión se inicia con la presen- La base de datos en Internet también
tación de uno de los libros que están por está sincronizada con la base de venta
evaluar: se evalúan en primer lugar los de libros de librería, tanto física como
libros que ya tienen tres lecturas y en virtual, y a partir de este registro se
cada evaluación se discuten, analizan y pueden comenzar a vender los libros en
confrontan los criterios de los lectores. ella.
Al final, se decide si el libro se incluye o Los libros recomendados rotan al
no en las listas de recomendados. departamento de Bibliotecas, donde se
Para ser evaluado un libro debe reunir registran en la base de datos que ali-
un mínimo de dos lecturas por parte de menta las colecciones que la Fundación
dos evaluadores, que coinciden en la vende a bibliotecas públicas y escola-
decisión de recomendarlo o no. Una vez res, y donde se incluyen servicios itine-
se verifica esta decisión, cada evaluador rantes como cajas viajeras y morrales de
procede a exponer sus argumentos. En lectura. Una vez registrados se devuel-
caso de discrepancia se pide una tercera ven al Cedoc donde se incorporan en la 3
En 2007, la Fundación publicará
lectura. muestra de libros infantiles y juveni- cerca de 3.000 reseñas elaboradas
durante los últimos dos años.
les de varios países, que actualmente errores tipográficos, traducción, en-
nº 3. 2007 cuenta con cerca de veinte mil ejempla- tre otros) lo que hace que su califica-
res. Esta muestra está a disposición de ción no sea más alta.
autores, ilustradores, editores e inves- La inclusión de los títulos en estos
tigadores, pero también de jardines in- rangos, así como su no recomendación,
107 fantiles, colegios, universidades y fun- es información confidencial y sólo ata-
daciones que llevan a cabo programas ñe a procesos institucionales (se alude
de promoción de lectura y que carecen a estos rangos como prioridad porque
de biblioteca, pues el Cedoc conforma en los programas de Bibliotecas se ad-
colecciones itinerantes que les presta quieren en primer lugar los libros con-
de manera gratuita. ceptuados como excelentes).
Actualmente, la base de datos re-
gistra un total de 10.683 títulos eva- 3.2.2. Sobre los géneros
luados, de los cuales 6.196 (58%) han Para la clasificación según el género
sido recomendados e incluidos en las literario se tiene en cuenta la tabla del
publicaciones de Fundalectura y pue- Repertorio Iberoamericano de Libros
den consultarse en www.fundalectura. Infantiles y Juveniles (Apéndice 2),
org/cedoc. coordinado por el Cerlalc y desarrolla-
do entre 1996 y 1997 por la Fundaçao
3.2. Los criterios de clasificación de Nacional do Livro Infantil e Juvenil
los libros (Brasil), Fundalectura (Colombia),
Cuando los comités recomiendan un Fundación Germán Sánchez Ruipérez
título, por consenso establecen su cali- (España), Asociación Mexicana para
dad, definen el género, los descriptores el Fomento del Libro Infantil y Juvenil
o temas de los que tratan y el nivel de (México) y el Banco del Libro (Vene-
lectura para el cual se dirigen. zuela).
2. Estructura
® Tabla de contenido
® Índices (analítico, cronológico, temático, de autor…)
® Glosario
® Bibliografía
® Direcciones de Internet
® Apéndices
® Introducción
® Orientaciones sobre tipos de información del libro
® Epílogo
® Títulos y subtítulos de sección destacados y diferenciados
3. Manejo de la información
Lenguaje empleado Claro Sencillo Preciso descriptivo
Directo Objetivo Define los términos especializados
Coherencia
® Hay conexiones lógicas entre los párrafos
® Se pueden establecer relaciones causa-efecto y seguir línea argumental
® El lector puede acceder a distintos niveles de información y relacionarlos:
® Anécdotas ® referentes históricos ® ref. Geográficos
® Ref. Ambientales ® ref. Literarios ® ref. Gráficos
Rigor
® Delimita lo que está comprobado y lo que aún se está investigando
® Sustenta la información (argumentos, citas, investigaciones recientes)
® Diferencia la información objetiva de las opiniones del autor
® Evita sesgos o discriminación en la información
® Apela a elementos del método científico (observación, hipótesis, tesis; solu-
ción de problemas; desarrolla la inducción, la deducción, la argumentación)
4. Contenido
nº 3. 2007 ® Contribuye a la formación científica o humanística del lector
® Presenta los conocimientos básicos que se deben tener sobre el tema
® Presenta información completa sobre los subtemas
® Es innovador
117 ® Invita a continuar explorando el tema
® Es ameno
® Presenta los conceptos con una complejidad apropiada al tema y a la edad del
lector al que se dirige la información
Juegos (lupas, rompecabezas, figuras para armar, linternas…)
® Amplían la información
® Estimulan la comprensión y el interés sobre el tema
® Desarrollan la percepción
Actividades y experimentos
® Amplían la información
® Estimulan la comprensión y el interés sobre el tema
® Sugieren el uso de materiales fáciles de encontrar
® Estimulan la aplicación del método científico
® Son divertidos
® Los niños pueden realizarlos solos o con ayuda de adultos no especializados
® Tienen alertas de seguridad
5. Ilustración y diagramación
Dibujos y fotografías
® Amplían la información
® Las caricaturas complementan el texto
® Tienen pie de ilustración (nombran lo representado y/o lo describen)
® Se identifica su fuente/autor
® Permiten establecer comparaciones
® Permiten reconocer proporciones y representan escalas
® Ubican el contexto (de comunidades, especies animales y vegetales, fenóme-
nos atmosféricos…)
® Los mapas son completos y proporcionados (pueden contener dibujos)
Gráficas
® Las tablas, cuadros, mapas conceptuales y diagramas sintetizan y organizan la
información
® Son fáciles de leer
Diseño y diagramación
® Es estéticamente atrayente
® Páginas aireadas
® Tipografía: legible y de tamaño adecuado a la edad
® Se diferencian diversos tipos de información dentro de cada página (con sub-
títulos, recuadros, distintas tipografías…)
® Hay equilibrio entre dibujos, fotografías, texto y diseño
Comentario crítico del evaluador
______________________________________________________________________________
______________________________________________________________________________
________________________________________________________________________
Recomienda el libro: sí ® no ®
Edades para las que se recomienda ____________________________________
Evaluado por _______________________________________________________
Apéndice 2. Tabla para la clasificación del género literario
nº 3. 2007
CLAS DESCRIPCIÓN
AD Adaptaciones de los clásicos
AN Antologías, misceláneas, colecciones
118
BI Biografías
CU Cuento de autor
CP Cuento popular
EN Ensayo
FA Fábulas
HI Historieta (tira ilustrada)
IN Informativo, biografías, actividades, instrucciones
AL Libro de imagen, álbum, abecedarios
LJ Libro juguete
LE Mitos y leyendas
NC Narraciones científicas, ciencia-ficción
Narraciones de aventura (acción, oeste, piratas, viajes,
NA
etc.)
CH Narraciones de humor, chistes
NT Narraciones de tema religioso
NF Narraciones fantásticas
NH Narraciones históricas
NP Narraciones policíacas, terror y misterio
NR Narraciones realistas
PO Poesía, canciones, rimas infantiles, adivinanzas y juegos
TE Teatro, marionetas, títeres
Apéndice 3. Niveles de lectura
nº 3. 2007
Desde el nacimiento
Al nacer los bebés leen a través de sus padres. Canciones, cuentos, juegos cor-
porales, rimas y poesías son los primeros textos con los que ellos se acercan a la
119 lectura. Una vez se sientan les encanta explorar los libros ilustrados sin palabras y
con situaciones familiares, personas y objetos de su entorno, mientras los padres
les relatan historias y conversan a partir de ellas.
Desde los tres años
Libros ilustrados, cuentos populares y de hadas, fábulas, historias absurdas con
finales inesperados. Literatura de tradición oral: coplas, mitos, leyendas, juegos de
palabras, rondas. Poesía. Libros informativos y sobre situaciones cotidianas.
Desde los seis años
Libros ilustrados, primeras novelas o relatos cortos fantásticos, de aventuras
cotidianas, humorísticos, de la tradición oral. Libros informativos sobre historia,
otras culturas, ciencia, arte y sobre cómo hacer las cosas.
Desde los nueve años
Obras de mayor extensión y complejidad estructural, literaria y conceptual.
Cuentos clásicos, fantásticos, de aventuras, mitológicos; relatos de misterio y de
detectives; de ciencia ficción; humorísticos. Narraciones que hablen de la familia,
la amistad, la escuela. Libros informativos sobre historia, otras culturas, ciencia,
arte, deportes y sobre cómo hacer cosas. Biografías noveladas.
Desde los doce años
Relatos que tratan los conflictos que viven los adolescentes: relaciones de amis-
tad, primer amor, conflictos personales. Narraciones clásicas, de aventuras, de
suspenso, policíacas, de ciencia ficción. Poesía. Libros informativos sobre ciencia,
oficios, religión, historia, arte, sexualidad. Biografías. Cómic.
Desde los quince años
Relatos y poemas que ahondan en búsquedas existenciales: identidad, relaciones
familiares y de amistad, amor, intereses sociales y políticos. Libros donde se sien-
tan representados, protagonizados por jóvenes que buscan su lugar en el mundo,
por antihéroes que rompen con el orden establecido. Narraciones sobre cómo vi-
ven los jóvenes en otros lugares; sobre música, cine, arte.
Romea C astro, Celia
“El cine de la tele. Su implicación con El cine de la tele. Su implicación
la literatura infantil y juvenil”,
en Revista OCNOS nº 3, 2007, p. 121-138.
ISSN 1885-446X.
con la literatura infantil y juvenil*
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
140
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cada caso. La calidad de las ilustraciones deberá ser nítida, ya que en caso contra-
rio no será posible reproducirlas. Las imágenes se podrán entregar digitalizadas,
siempre y cuando el autor tenga los equipos que permitan su tratamiento con gran
calidad de resolución (300 dpi). Se recomendará el uso de formatos comunes (.tif,
.jpg, .eps), que se entregarán en archivos independientes al que contiene el texto,
indicando en el interior del mismo el nombre del archivo que corresponde a tal
lugar. No se admitirán fotocopias ni originales de mala calidad.
10) Los autores remitirán sus trabajos a la dirección de Ocnos: CEPLI, Facultad
de Ciencias de la Educación y Humanidades. Avenida de los Alfares, 44, 16071 -
Cuenca (España - Spain). Los trabajos serán examinados, en primera instancia,
por el Consejo de Redacción, que verificará los aspectos formales del mismo;
posteriormente, se enviarán a dos especialistas para su evaluación externa, con
carácter anónimo.