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LA INSTITUCIÓN NACIONAL DE DERECHOS HUMANOS Y

DEFENSORIA DEL PUEBLO COMO GARANTÍA

Resumen
En el conjunto de las garantías de los derechos humanos, se encuentra la Institución Nacional de
Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) dentro del ordenamiento jurídico. Sus
competencias están desarrolladas en la ley 18.046 y las ampliaciones hechas por leyes recientes.

Se plantea en este módulo que las acciones de los funcionarios públicos tienen impacto en la
plena vigencia de los derechos humanos de la ciudadanía en sentido amplio, por lo cual es
verdaderamente importante reflexionar sobre cuáles son las estrategias para evaluar la calidad
de los servicios públicos desde un enfoque de derechos humanos. A la vez, los habitantes pueden
acudir a la INDDHH para consultar sobre vulneraciones de derechos por parte del Estado y sus
funcionarios, por lo cual se verá a partir de algunos ejemplos, cómo se procesan dichas consultas
y/o denuncias.

Las garantías de los derechos humanos en una sociedad democrática


Como hemos visto, los derechos humanos son inherentes a todas las personas, los Estados están
obligados a protegerlos y garantizarlos. Sin embargo, encontramos que hay mucho camino por
recorrer para que sean efectivos. Para ello, es necesario contar con garantías que poder activar
cuando los derechos puedan estar corriendo riesgo de ser vulnerados, sea necesario cesar su
vulneración, o bien haya que reclamar su reparación.

En un estado democrático, se pueden identificar garantías genéricas como ser el respeto a la


Constitución vigente, la separación de Poderes, con lo que se entiende como “sistema de pesos
y contrapesos” del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en el sentido de la diferenciación clara
de competencias y diferentes formas de contralor. La principal garantía entonces, es la existencia
de un Poder Judicial independiente, profesionalizado, que custodia los derechos de los
habitantes y tramita las denuncias emitiendo sentencias de cumplimiento obligatorio para las
partes.

En ese sentido, la INDDHH es creada para actuar de manera complementaria con los otros
sistemas nacionales de protección de los derechos humanos. En la Exposición de Motivos de su
ley de creación se expresa: “La INDDHH no sustituye ni desplaza las competencias originales de
los diversos poderes del Estado. En ningún caso la INDDHH ejercería función jurisdiccional, ni
tendría facultades para revocar actos administrativos, no desempeñaría funciones ejecutivas, ni
legislativas. Sus cometidos se acotarían a sugerir medios correctivos, efectuar recomendaciones
no vinculantes e intervenir en denuncias por violaciones a los derechos humanos, sin interferir con
las funciones jurisdiccionales, ejecutivas o legislativas que a los respectivos poderes
correspondan.”

Las Instituciones Nacionales de derechos humanos


Constenla (2018) señala que en América Latina a mediados de la década de los años 80 y en
especial desde los 90, comienzan a establecerse las defensorías del pueblo, a veces con otros
nombres, pero también —y claramente— con otros contenidos. Se siguió el modelo ibérico,
establecido en las constituciones de Portugal (1976) y España (1978), que le asignan a las
Defensorías del pueblo centralmente la protección de los derechos humanos. La primera
institución nacional de derechos humanos establecida en la región, es la de Guatemala, creada
en 1985, como consecuencia de las graves violaciones a los derechos humanos en los conflictos.
(p. 40)

Las Defensorías del Pueblo vienen de una tradición institucional más antigua, vinculada con el
Ombudsman de los países nórdicos (s. XVIII) y luego incorporada en países de Europa central,
representadas por organismos unipersonales, con alta idoneidad moral, con capacidad de
influencia para realizar recomendaciones a la Administración.

En la actualidad, en el ámbito de la Organización de las Naciones Unidas, se reserva la


denominación de instituciones nacionales de derechos humanos, a aquellas que cumplan con los
Principios de París, adoptados por la Resolución N° 48/134 de la Asamblea General, de 4 de marzo
de 1993, sobre “Instituciones nacionales de promoción y protección de los derechos humanos”.
Como desarrolla Faroppa (2018), estos Principios establecen criterios excluyentes para su
caracterización: autonomía e independencia, alcance de sus cometidos y facultades, la
informalidad y la inmediatez para la atención de casos, así como la obligación de rendir cuentas
de su gestión. (p. 76)

Como reflexiona Helander (2018) “el desafío mayor que tienen por delante las inddhh como
instrumento de consolidación del Estado social y democrático de derecho moderno, en el que
puede estar la clave del progreso en el efectivo goce de los derechos de las personas, es aportar
para la construcción de una democracia dialógica. Democracia dialógica significa aportar
estratégicamente para avanzar en una comunicación interinstitucional que no se agote en sí
misma, sino que sea un medio para el fin de que las personas y los colectivos vulnerables avancen
hacia logros de progresivo disfrute de los derechos humanos”. (p. 61)

Porque está reconocida en las normas: es una garantía jurídica.

Porque prevé la atención de denuncias, mediante un proceso en el que participan las partes
implicadas, pero no culmina en una sentencia, sino en una resolución no obligatoria: es una
garantía cuasi-jurisdiccional.

Por el ámbito en que se desarrolla: es una garantía estatal.


En 2019, la INDDHH aprobó su plan estratégico para 2019-2023, definiendo su misión, su visión,
las principales líneas de acción. Los valores que guían la acción de la INDDHH son: autonomía;
calidad; informalidad y agilidad; igualdad y no discriminación; independencia; transparencia;
integralidad; participación.

Misión de la INDDHH: Defender, promover y proteger los derechos humanos


reconocidos por el marco legal nacional e internacional vigente, dando cuenta de la
innovación en el proceso de reconocimiento de derechos.

Visión de la INDDHH: Ser una herramienta efectiva para la defensa, promoción y


protección de los derechos humanos ante el Estado para todas las personas.

Competencias de la INDDHH
La Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) fue creada por
la ley 18.446 de 2008, aunque inició sus funciones años más tarde, ya que su primer Consejo
Directivo entró en funciones el 22 de junio de 2012. Está presidida por un Consejo Directivo (CD)
colegiado, integrado por 5 directores que anualmente rotan en la Presidencia. Pueden durar en
funciones hasta 5 años y sus integrantes son electos por la Asamblea General del Poder
Legislativo, pudiendo ser reelectos por un período más.

Para ser integrante del Consejo Directivo se deben cumplir una serie de requisitos: ser propuestos
por organizaciones de la sociedad civil, así como por parlamentarias y parlamentarios; tener
reconocida trayectoria en materia de derechos humanos e idoneidad moral, así como algunas
inhibiciones para el desempeño del cargo que están previstas en la ley. Además, el Consejo
Directivo debe tener equilibrio de género, de manera que dos de tres de sus integrantes sean
hombres y mujeres.

La Presidencia es rotativa y tiene entre sus potestades la de convocar al menos una vez al año a
sesiones extraordinarias del Consejo Directivo, denominadas Asambleas Nacionales de Derechos
Humanos. En ellas participan representantes de organizaciones de la sociedad civil y organismos
públicos, constituyendo una importante instancia de rendición anual de cuentas, así como de
diálogo e intercambio de agendas sobre la situación de los derechos humanos en el Uruguay.

La INDDHH tiene como principales competencias:

 Dar seguimiento y hacer recomendaciones sobre la adecuación de las normativas y


prácticas institucionales a las obligaciones y estándares internacionales en materia de
derechos humanos;
 Hacer informes sobre la situación de los derechos humanos a nivel nacional,
departamental o zonal;
 Emitir opiniones sobre proyectos de ley;
 Proponer la adopción de medidas provisionales de carácter urgente con el fin que cese la
presunta violación de los derechos humanos y/o impedir la consumación o incremento
del daño;
 Promover ampliamente los derechos humanos y la educación en derechos humanos;
 Cumplir con la función del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP), de
acuerdo a lo establecido por el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura
y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes ratificado por Uruguay.
 Colaborar con las autoridades competentes en la educación en derechos humanos en
todos los niveles de enseñanza (…).

Se han ampliado sus competencias a partir de nuevos cometidos que se han asignado en la ley
sobre Servicios de Comunicación Audiovisual (Ley N° 19.307), la ley de Salud Mental (Ley N°
19.529), la ley de Sitios de Memoria (Ley N° 19.641) y recientemente la ley sobre Búsqueda de
Detenidos Desaparecidos (Ley N° 19.822).

La INDDHH está ubicada en un edificio emblemático que fue cedido por la Presidencia de la
República. Allí, durante la dictadura, funcionó el Servicio de Información de Defensa (SID), del
Ministerio de Defensa Nacional, uno de los principales órganos represivos del terrorismo de
Estado uruguayo en el contexto de las dictaduras militares de la región. A la vez, en este local
estuvo ubicado uno de los peores centros clandestinos de detención y tortura.

Desde el 27 de junio de 2018, se constituyó el Sitio de Memoria ex-SID, el cual se encuentra


abierto al público y en particular, se desarrollan visitas para grupos de estudiantes de distintos
niveles de enseñanza.
Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura
El Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP) es un organismo de control y de
colaboración de carácter autónomo e independiente de los poderes del Estado. Ha sido creado
por mandato del Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y otros Tratos Crueles,
Inhumanos o Degradantes (OPCAT), a fin de prevenir prácticas de tortura u otras formas de malos
tratos hacia las personas privadas de libertad. Actualmente son más de 65 países del mundo
donde se han establecido MNP.

Su accionar consiste principalmente, en: Desarrollar visitas de monitoreo, no anunciadas, a


centros de privación de libertad. Diseñar herramientas propias de análisis para cada uno de los
ámbitos de encierro que monitorea. Elaborar informes para comunicar las constataciones
realizadas en las visitas, sobre las situaciones de las personas privadas de libertad, que se
difunden a través de distintos canales. Los informes son insumos para el intercambio con las
autoridades gubernamentales. Realizar recomendaciones a las autoridades para minimizar los
riesgos de violencia institucional y prevenir el maltrato y la tortura. Proponer modificaciones a la
legislación vigente o proyectos de ley tendientes a reducir las situaciones de encierro institucional
o circunstancias derivadas de éstas.

¿Qué lugares se monitorean?

Se concibe los lugares de privación de libertad en un sentido amplio, en el cual se comprende


cualquier lugar de detención o encarcelamiento o de custodia de una persona por orden de una
autoridad judicial o administrativa o de otra autoridad pública, en una institución pública o
privada de la cual no pueda salir libremente.

El universo de monitoreo, sin ser exhaustivo, incluye: dependencias policiales, unidades


penitenciarias; centros de privación de libertad para adolescentes en conflicto con la ley penal,
Instituciones de internación (hospitales psiquiátricos, residencias para personas con
discapacidades, centros para el tratamiento de personas con consumos problemáticos de
drogas), centros de 24 horas para niños, niñas y adolescentes (bajo autoridad estatal o privada).

¿Cuáles son las funciones del MNP?

El MNP opera en el entendido que los lugares de privación de libertad son espacios cerrados,
donde el derecho ambulatorio de las personas está suspendido, por lo tanto, la población que
allí reside se encuentra fuera del control que normalmente ejerce la opinión pública.

Las poblaciones en condiciones de encierro están en situación de dependencia de sus cuidadores


y autoridades responsables por lo cual la situación de vulnerabilidad se ve agravada y el riesgo
de malos tratos y tortura aumenta significativamente.

Las Naciones Unidas han condenado desde sus comienzos la práctica de la tortura por ser uno de
los actos más atroces que los seres humanos cometen contra sus semejantes. Los Estados no sólo
están obligados a respetar la prohibición absoluta de tortura, sino que también tienen la
obligación de evitar que se produzcan casos en que se infligen tratos crueles, inhumanos o
degradantes.
ÁREA DE DENUNCIAS E INVESTIGACIÓN

Las instituciones nacionales de derechos humanos y Defensorías del Pueblo llevan adelante la
protección no jurisdiccional de los derechos humanos, lo que constituye una garantía para el
efectivo goce de los derechos humanos frente a la Administración Pública. En el marco de sus
respectivos mandatos este tipo de instituciones incluyen como eje sustancial de su actuación la
recepción e investigación de presuntas violaciones a los derechos humanos por parte de la
Administración Pública. Es importante tener presente que la protección no jurisdiccional implica
la adopción de recomendaciones y no de sentencias como es el caso del Poder Judicial.

En Uruguay, atento a lo establecido en el artículo 4, literal J, de la ley de creación de la Institución


(No. 18.446) la misma es competente para: “Conocer e investigar presuntas violaciones a los
derechos humanos, a petición de parte o de oficio, de acuerdo al procedimiento que se establece
en la presente ley.” Esta competencia está regulada ampliamente en la ley en los capítulos III
(procedimiento de denuncias) y IV (facultades) sin perjuicio de otras previsiones que puedan
también ser aplicables. En el marco de las competencias del artículo 4 las recomendaciones que
emita la INDDHH deberán ser fundadas y no admiten recursos. Esto está regulado en el artículo
7 (impugnabilidad).

En el ejercicio de dicha competencia la INDDHH puede actuar a petición de parte o de oficio. Es


a petición de parte cuando son las personas quienes se comunican con la INDDHH para plantear
una situación de posible vulneración de derechos humanos. Se actúa de oficio, cuando la propia
Institución resuelve investigar, para lo cual puede acudir a un lugar donde se presume que
podrían vulnerarse los derechos humanos.

A los efectos de cumplir con sus funciones, la INDDHH cuenta con equipos interdisciplinarios
integrados por Trabajadoras/es Sociales, Psicólogas/os y Abogadas/os, que brindan
asesoramiento a quienes realizan consultas o denuncias, o se acercan a los lugares en los que
ocurren presuntas vulneraciones de derechos humanos.

¿Qué es una vulneración de Derechos Humanos?

Las vulneraciones a los derechos humanos pueden ser cometidas por los organismos públicos o
con el apoyo de éstos. Ello puede producirse cuando se realizan acciones, se toman decisiones o
debido a omisiones que provocan daños a los habitantes del país (personas, grupos, minorías,
comunidades, etc.).

¿A quién se puede denunciar?

A todos los Poderes y organismos públicos cualquiera sea su naturaleza y función, incluso
entidades paraestatales, sociedades de economía mixta, personas públicas no estatales y
entidades privadas que presten servicios públicos o sociales.

El plazo para la presentación de la denuncia no podrá ser mayor a seis meses, contado a partir
del momento que se ha tomado conocimiento de los actos o hechos que la motivan, salvo
situaciones graves que serán evaluadas por el Consejo Directivo o delitos de lesa humanidad que
no prescriben.

¿Quién puede denunciar?

Cualquier persona, grupo, asociaciones, colectivos, organismos, incluidos los órganos estatales.
No resulta impedimento ser menor de edad, la discapacidad intelectual, la nacionalidad o la
vinculación jerárquica o funcional con el Estado.

Cuando la persona lo solicita se le garantiza reserva de su identidad.

¿Qué se puede denunciar?

- Situaciones en los que por abuso de poder por parte de funcionarios del Estado se
ocasione daños a algún sujeto o grupo.

- Irregularidades o vacíos de las políticas públicas por las que algún grupo de
ciudadanos resulta perjudicado en la satisfacción de sus derechos.

- Prácticas institucionales estatales, medidas administrativas o criterios utilizados


que no se adecuan a los instrumentos internacionales de derechos humanos, a la
Constitución o a las leyes.

- Normas que no se adecuen a la protección de los derechos humanos.

¿Qué no corresponde denunciar ante la INDDHH?

- Conflictos entre personas particulares: familiares, vecinos, comerciantes.

- Conflictos con empresas privadas, (los que deben ser denunciados ante los
organismos estatales responsables de su contralor).

- Asuntos que se encuentren en trámite de resolución en la vía judicial ante los


organismos competentes o ante el Contencioso Administrativo.
- Situaciones con una antigüedad mayor a seis meses, salvo hechos muy graves que
serán evaluados por el Consejo Directivo, o delitos de lesa humanidad debido a que no
prescriben.

¿Cómo se realiza la denuncia?

La denuncia se puede presentar por distintas vías: presencial, trámite en línea, por teléfono o
mail. Debe contener datos personales del o los denunciantes: nombre completo, documento de
identidad, domicilio, celular y/o teléfono. No se admitirán denuncias anónimas, las mismas
deberán ser firmadas. El trámite será gratuito y no requiere asistencia letrada.

CRITERIOS PARA DETERMINAR SI HAY O NO COMPETENCIA DE LA INDDHH

PARA ADMITIR LA DENUNCIA:

a) Que estén involucrados uno o más derechos humanos específicos, reconocidos en normas
nacionales y/o internacionales incorporadas por Uruguay.

b) Que haya una presunta responsabilidad de organismos del Estado (directa o

indirectamente).

c) Que los hechos hayan ocurrido en los últimos 6 meses, salvo situaciones graves (previa
evaluación del Consejo Directivo) o delitos de lesa humanidad (porque no prescriben).

d) Que en caso que corresponda, se haya presentado previamente en el organismo


correspondiente sin obtener respuesta y/o se hayan agotados los plazos.

e) Que la situación no se encuentre en la órbita de la Justicia ni en el Contencioso Administrativo.

La INDDHH ha definido etapas para el procedimiento de denuncias:

a) la recepción; b) la investigación; c) la resolución; y d) el seguimiento de la resolución.

a) Recepción. La recepción implica una revisión inicial que determinará la admisibilidad o


inadmisibilidad de la denuncia. Es realizada por un equipo interdisciplinario, el que brindará
asesoramientos y derivaciones cuando las situaciones no sean consideradas en primera instancia
como denuncias. La mayoría de las situaciones que se reciben actualmente en la INDDHH son
consultas y no constituyen específicamente denuncias, en tanto de su análisis surge que no
plantean vulneraciones de derechos humanos. Siendo esta, una de las razones por las que se
entiende necesario brindar información a los funcionarios públicos y a la ciudadanía sobre cuáles
son las situaciones que se consideran de presunta vulneración de derechos y cuáles no.

Para que exista una denuncia de eventuales vulneraciones de derechos humanos, la INDDHH
debe identificar un derecho y el acto u omisión estatal que lo genera, puesto que la intervención
de la INDDHH se centra en la actuación de la Administración, por ser el Estado el responsable del
cumplimiento de los derechos humanos. Tal como lo establece el artículo 5 de la ley 18.446. La
denuncia podrá ser rechazada cuando fuera presentada fuera del plazo previsto (últimos 6
meses), o sea notoriamente improcedente por incompetencia, inadmisibilidad manifiesta, falta
de fundamentos o evidente mala fe. Cuando existe un organismo estatal específico para actuar
ante un derecho vulnerado, se deben agotar las actuaciones en el mismo, antes de acudir a la
INDDHH.

b) Investigación. La investigación debe ser inmediata, de carácter sumario, informal y reservada,


tendiente a esclarecer los hechos denunciados. Para ello, la INDDHH cuenta con varias facultades:
efectuar, con o sin previo aviso, visitas de inspección a cualquier lugar, entrevistarse con
cualquier autoridad, pedir informes, examinar expedientes, archivos y todo tipo de documento,
presentar denuncias penales e interponer recursos de hábeas corpus o amparo. Asimismo, la
IDDHH puede solicitar, en cualquier etapa del procedimiento, la adopción de medidas
provisionales urgentes. Estas medidas, establecidas en el artículo 24 de la ley 18.446, tienen su
origen en función del mandato de la INDDHH para la protección de los derechos humanos.
Cuando el/los organismo/os emite/en respuestas por escrito, se le entrega copia al denunciante
quien podrá realizar observaciones o descargos.

c) Resolución. Finalizada la investigación, la INDDHH realiza una resolución en la que establece si


hubo o no violación de derechos humanos y podrá realizar recomendaciones al organismo
involucrado. Se le entregará copia de la resolución a los organismos involucrados y al
denunciante.

d) Seguimiento. Se realiza un seguimiento de todas las resoluciones que proponen


recomendaciones a los organismos. En el propio texto de la resolución, se señala que la INDDHH
solicita al organismo involucrado que en el plazo de diez (10) días informe sobre su disposición
para cumplir con las recomendaciones y, en su caso, las acciones que implementará para hacer
efectivas las mismas.

Tipos de Resoluciones

De acuerdo con el mandato legal, las resoluciones pueden clasificarse de la siguiente manera:

A) Con recomendaciones o de vulneración de derechos. Cuando se les recomienda a las


autoridades competentes que adopten medidas para poner fin a la vulneración de derechos
humanos que hubiere constatado y las medidas necesarias para eliminar o prevenir situaciones
similares. También se pueden proponer medidas de reparación dirigidas hacia el o los
denunciantes, abarcando distintas dimensiones: satisfacción, rehabilitación, restitución,
indemnización, garantías de no repetición.

B) Solución satisfactoria. Refiere a aquellas situaciones en las que en el transcurso de la


investigación el organismo adopta medidas para reparar la violación denunciada.

C) No vulneración. Cuando luego de realizada la sustanciación, no se encuentren méritos para


comprobar la violación denunciada.

D) No admisibilidad. Cuando fuera presentada fuera del plazo previsto, o sea notoriamente
improcedente por incompetencia, inadmisibilidad manifiesta, falta de fundamentos o evidente
mala fe.

E) No colaboración. Refiere a la negativa de brindar información por parte de los organismos


denunciados.

F) Suspensión de actuaciones. Refiere a la inhibición de continuar interviniendo en una situación


porque esta fue sometida a instancia jurisdiccional.

G) Otras. Se trata de un conjunto de resoluciones que abarcan diversas situaciones, entre ellas
las relativas a archivos de actuaciones por abandono del trámite por la persona denunciante, o
aquellas referidas a la publicación de incumplimientos de recomendaciones realizadas a los
organismos involucrados.

Las resoluciones con recomendaciones y las de solución satisfactoria permiten que la INDDH,
teniendo en cuenta la situación particular planteada, brinde orientaciones a los organismos
involucrados para revisar el ordenamiento jurídico, las prácticas administrativas e institucionales
y su armonización con los instrumentos internacionales relacionados con derechos humanos en
los que el Estado sea parte.

Es importante conocer las competencias de la INDDHH

Con frecuencia se acercan personas con expectativas que no se adecuan a las competencias de
la INDDHH. A modo de ejemplo, muchas veces las personas preguntan:

1. ¿Cuentan con abogados defensores gratuitos para el caso que se necesite accionar ante la
justicia o en el ámbito administrativo si correspondiera? No, para contar con un abogado que lo
asista gratuitamente en un conflicto que requiera asesoría letrada se puede concurrir a las
Defensoría Públicas o consultorios jurídicos gratuitos a nivel barrial o universitarios.

2. ¿Se pueden denunciar situaciones de personas privadas de libertad? La INDDHH comparte con
el Comisionado Parlamentario (creado por ley 17.684), el monitoreo no jurisdiccional de la
situación del sistema carcelario de todo el país. En mérito a la especificidad del mandato del
Comisionado Parlamentario que refiere concretamente a la protección no jurisdiccional en el
ámbito carcelario, y atento a lo previsto en el artículo 10 de la ley 18.446 relativo a la obligación
de colaboración con otros institutos de igual naturaleza como lo es éste, en primera instancia se
prevé que la persona se dirija al Comisionado Parlamentario Penitenciario, ubicado en el Anexo
del Palacio Legislativo. Asimismo, puede solicitar asistencia a la Oficina de atención a familiares
de personas privadas de libertad perteneciente al Instituto Nacional de Rehabilitación. Ello no
impide que la INDDHH actué en situaciones que entienda así lo ameritan.

3. ¿Se pueden denunciar conflictos entre vecinos? No. En problemas que se susciten entre
particulares puede concurrir a los Centros de Mediación del Poder Judicial, consultorios gratuitos
o Defensorías de oficio en lo penal. En Montevideo además se cuenta con la Defensoría de
Vecinas y Vecinos.

4. ¿Se pueden denunciar delitos? No. De acuerdo al nuevo código de procedimiento penal puede
concurrir a denunciar directamente ante la Fiscalía General de la Nación en Montevideo en la
calle Cerrito 431 esquina Misiones y en el interior en la Fiscalías Letradas Departamentales.

Entre los materiales complementarios encontrarán mayor información sobre las diferentes áreas
de la institución, así como también en el sitio web de la INDDHH: http://www.inddhh.gub.uy
donde se publican noticias de las actividades de la INDDHH y todos los informes institucionales.
La Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo

Biliografía consultada:

Constenla, Carlos (2018) Panorama de las defensorías del pueblo en América Latina, en Desafíos
en materia de derechos humanos y garantías Obra colectiva, Montevideo, Institución Nacional
de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo, pp. 33 – 52, publicación digital.

Faroppa, Juan (2018) Las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos, en Uriarte, Daoiz, Curso
de Derechos Humanos y sus Garantías, tomo II – volumen 1, pp 73 – 87, FCU, Montevideo.

Helander, Nils (2018) La Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo en
Uruguay: una revisión al desafío de «controlar y dialogar» con el Estado en materia de derechos
humanos, en Desafíos en materia de derechos humanos y garantías Obra colectiva, Montevideo,
Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo, pp. 53 – 62, publicación
digital.

Instituciones nacionales de derechos humanos. Antecedentes, principios, funciones y


responsabilidades, 2010. OFICINA DEL ALTO COMISIONADO DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LOS
DERECHOS HUMANOS. NACIONES UNIDAS Nueva York y Ginebra.

Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (2019) Informe anual
INDDHH 2018. Inddhh, Montevideo.

Blengio, Mariana, Navarrete, Margarita y Robaina, María Celia (2019) La Institución


Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo como garantía, Montevideo:
INDDHH.

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