Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
3. Suelo.- El trigo requiere suelos profundos, para el buen desarrollo del sistema
radicular. Al ser poco permeables los suelos arcillosos conservan demasiada humedad
durante los inviernos lluviosos. El suelo arenoso requiere, en cambio, abundante lluvia
durante la primavera, dada su escasa capacidad de retención. En general se
recomienda que las tierras de secano dispongan de un buen drenaje.
4. pH.- El trigo prospera mal en tierras ácidas; las prefiere neutras o algo alcalinas.
También los microorganismos beneficiosos del suelo prefieren los suelos neutros o
alcalinos.
3. Suelo.- La cebada prefiere tierras fértiles, pero puede tener buenas producciones
en suelos poco profundos y pedregosos, con tal de que no falte el agua al comienzo de
su desarrollo. No le van bien los terrenos demasiado arcillosos y tolera bien el exceso
de salinidad en el suelo. Los terrenos compactos no le van bien, pues se dificulta la
germinación y las primeras etapas del crecimiento de la planta.
Los suelos arcillosos, húmedos y encharcadizos, son desfavorables para la cebada,
aunque en ellos se pueden obtener altos rendimientos si se realiza un buen laboreo y
se conserva la humedad del suelo.
Plagas de trigo
Pulgones
• Pulgón verde de los cereales (Schizaphis graminum): Su presencia es habitual en
poblaciones elevadas durante el macollaje. Daña a las hojas succionando la savia,
reduciendo el crecimiento y vigor de las plantas. Además, puede transmitir
enfermedades virósicas coomo enanismo amarillo de la cebada.
ROYA (Puccinia spp.) Las royas de los cereales de invierno, causadas por diversas
especies del género Puccinia, son consideradas como el grupo de enfermedades más
importantes de los cereales y las que han causado mayores pérdidas económicas a nivel
mundial.
Enfermedades de la cebada.
El carbón vestido. Las espigas infectadas tienen la apariencia de normalidad, pero sus
granos están llenos de polvo negro. Cuando la primavera tiende a su fin, pueden
aparecer manchas en las hojas de la planta de la cebada, a lo largo de la hoja. Se
conoce como la Helmintosporiosis de la Cebada . Cuando el ataque de esta enfermedad
es fuerte, puede incluso detenerse el crecimiento en la plantación y su espigado. El
rendimiento en la cosecha puede verse afectado en más de un 20 %.
El oídio.- Entre sus síntomas está las manchas blancas y grises en las hojas y en las
vainas.
El virus del Enanismo Amarillo tiene unos síntomas muy visibles, como las hojas de un
tono amarillento y rígido la formación de las espigas tiene un retraso y la producción
puede afectarse en un 20%.
Plagas de la cebada.