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Este resumen describe la misa del Cuarto Domingo de Pascua celebrada el 3 de mayo de 2020. La homilía se centra en Jesús como el Buen Pastor que reúne a sus ovejas y las alimenta con su palabra y cuerpo. Las peticiones incluyen oraciones por los pastores de la Iglesia, los gobernantes mundiales, los que sufren soledad y por la comunidad que participa en la celebración. También se ora por los afectados por la pandemia de COVID-19.
Este resumen describe la misa del Cuarto Domingo de Pascua celebrada el 3 de mayo de 2020. La homilía se centra en Jesús como el Buen Pastor que reúne a sus ovejas y las alimenta con su palabra y cuerpo. Las peticiones incluyen oraciones por los pastores de la Iglesia, los gobernantes mundiales, los que sufren soledad y por la comunidad que participa en la celebración. También se ora por los afectados por la pandemia de COVID-19.
Este resumen describe la misa del Cuarto Domingo de Pascua celebrada el 3 de mayo de 2020. La homilía se centra en Jesús como el Buen Pastor que reúne a sus ovejas y las alimenta con su palabra y cuerpo. Las peticiones incluyen oraciones por los pastores de la Iglesia, los gobernantes mundiales, los que sufren soledad y por la comunidad que participa en la celebración. También se ora por los afectados por la pandemia de COVID-19.
Gracias a la tecnología estamos nuevamente reunidos en este
cuarto Domingo de Pascua en el que Jesús, como Buen Pastor, nos reúne para alimentarnos con su palabra y, espiritualmente con su cuerpo y su sangre. Dispongámonos a recibirlo en nuestras vidas y a quedarse para siempre con nosotros.
Con alegría iniciemos nuestra celebración.
PRIMERA LECTURA
El mensaje de la lectura de Hechos de los Apóstoles es el de la
conversión, lo cual significa un cambio de rumbo muy importante en lo que sentimos, en lo que pensamos y en lo que hacemos. No es algo externo, ni cultural. Si Dios ha constituido a Jesús crucificado como Señor y Mesías, es porque no hay otro camino de salvación. El bautismo en nombre de Jesús es una propuesta para vivir su vida, morir de amor y abrirse a su resurrección. Escuchemos la lectura
SEGUNDA LECTURA
La carta de Pedro manifiesta que Jesús, quien padeció por
nuestros pecados, es el mejor modelo para un cristiano que debe soportar dificultades y sufrimientos. Al expresar que con sus heridas no ha curado, propone el sentido del dolor solidario que Jesús vivió, es poner de manifiesto que su muerte es una muerte para que nosotros vivamos.
Escuchemos la segunda lectura
PETICIONES A cada intención respondemos:
________________________________
Por el Papa y todos los pastores de la Iglesia; para que tenga
la fuerza y sabiduría necesaria para dirigir su rebaño en estos momentos difíciles y duros. ROGUEMOS AL SEÑOR
Para que los gobernantes del mundo sigan la imagen del
Buen Pastor y conduzcan a los pueblos haca el progreso en libertad. ROGUEMOS AL SEÑOR
Por aquellos que sufren soledad y vagan por el mundo como
ovejas sin pastor; para que puedan entrar por la puerta que es Cristo, al rebaño del Señor. ROGUEMOS AL SEÑOR
Por quienes estamos participando de esta celebración; para
que nos mantengamos siempre unidos bajo la guía de nuestro único Buen Pastor. ROGUEMOS AL SEÑOR.
Te pedimos Padre Santo, que te compadezcas del sufrimiento de
todos los pueblos de la tierra que padecen con la pandemia del covid 19 y, en particular, de nuestro país y Región Lambayeque. Danos la fuerza para soportar con esperanza el aislamiento necesario en nuestros hogares con el firme propósito de superar esta nueva enfermedad, sin descuidar la solidaridad en la oración y en el compartir de bienes con los hermanos que viven con angustia estos días. ROGUEMOS AL SEÑOR
Te pedimos, Padre compasivo y misericordioso, cuides a nuestros
hermanos y hermanas de Reque de esta pandemia que nos aqueja. Ayúdalos a ser responsables en el cumplimiento de las ordenanzas emanadas de las Instituciones del Estado a fin de evitar contagiar o ser contagiados por este virus que puede matar. Asimismo, te pedimos por los enfermos y por los que ya no están con nosotros, para que los tengas en tu gloria. ROGUEMOS AL SEÑOR.