VIVIR EN EQUILIBRIO

Tratamiento del estrés en

Medicina Herbal e Integrativa

por Florencia Fasanella

 ÍNDICE

Introducción 

¿Qué es el estrés? 

Mecanismo biológico del estrés 

Estrés, emociones y creencias 

Somos un todo 

Alimentación 

Conexión con la naturaleza 

Meditación 

Plantas Medicinales 

Infusión y Decocción 

Sobre mí 
 Introducción

La salud es mucho más que la ausencia de enfermedad. Es el

equilibrio entre el cuerpo físico, mental y emocional.

Por eso, al pensar soluciones para sentirte mejor, es necesario

ver todas las aristas que podés mejorar e incorporar en tu vida:
revisar tu nutrición y tu estilo de vida; conocer hierbas apropia-
das para el síntoma que presentes; practicar meditación; entre
otras.

Las emociones que sentimos liberan sustancias específicas en el

organismo (hormonas y neurotransmisores) que luego ejercen
un efecto a nivel del cuerpo físico (aumento de la frecuencia car-
díaca, broncodilatación, aumento o disminución de los movi-
mientos peristálticos del intestino, entre muchas otras). Esto
quiere decir que nuestras emociones afectan al cuerpo físico
directamente (comprobado de forma científica hace años).

Pero también funciona al revés: el estado del cuerpo físico influ-

ye en nuestras emociones y pensamientos. Por ejemplo, la ali-
mentación: no nos sentimos con el mismo ánimo cuando come-
mos continuamente alimentos procesados, que cuando come-
mos alimentos vivos.

Entonces los alimentos funcionan como estimulantes de emo-

ciones. Luego éstas emociones liberan determinadas hormonas
y neurotransmisores capaces de generar distintos efectos en
nuestro cuerpo físico.

Si, todo está conectado... ¿ves?


 ¿Qué es el estrés?

Suelo escuchar muchas veces la palabra estrés en ocasiones

donde, en realidad, no se aplica. Por ejemplo: “¡Esta situación
es muy estresante!” o “¡Estoy muy estresada!”. En estas expresio-
nes en realidad se usa la palabra estrés como sinónimo de sobre-
carga o frustración.

El problema de utilizarlo mal, es que cuando realmente estamos

en situaciones de estrés no tomamos consciencia de lo peligroso
que puede ser cuando lo experimentamos de forma crónica (ve-
remos más adelante la diferencia entre estrés agudo y estrés cró-
nico).

Lo que solemos experimentar más seguido es el distress: un

evento que nos pone nerviosas/os, por ejemplo, un examen, un
casamiento, el nacimiento de un/a hijo/a, etcétera).

El estrés, definido biológicamente, tiene que ver con la activa-

ción de ciertos mecanismos; con la liberación de neurotransmi-
sores y hormonas; y con cambios a nivel orgánico. No es una
sensación ambigua. Es algo fácil de determinar a nivel orgánico.

El objetivo del estrés es protegernos ante una situación peligro-

sa. Funciona como un mecanismo que nos estimula para la huída
o para la lucha. Su propósito es beneficioso. Pero el problema
resulta cuando lo sostenemos en el tiempo, cuando lo converti-
mos en algo crónico.


Y...¿Por qué podría volverse crónico el estrés?

Porque los seres humanos somos complejos.

El problema radica en que, a diferencia de los animales, los

seres humanos tenemos mente consciente e inconsciente, enton-
ces, lo que antes era un león que nos venía a comer, ahora puede
ser mi jefa/e; la situación del país; mi situación financiera; o lo
que me imagino que puede pasar pero aún no sucedió.

Ahora el león que conocíamos adquiere múltiples formas, inclu-

so formas que no sabemos que está aquiriendo.


 Mecanismo biológico del estrés

El estrés afecta, en una primera instancia, a tres sistemas del

cuerpo: sistema nervioso, endócrino e inmunológico. El sistema
nervioso es uno de los más complejos del organismo.

Voy a limitarme a explicarles lo más simple posible, ya que ayu-

dará a entender de qué forma puede afectarnos el estrés.

Cuando vemos algo que nuestro cerebro animal considera un

peligro al instante se activan mecanismos que nos preparan
tanto para huir como para defendernos.

Para que esto ocurra es necesario que se active el sistema ner-

vioso simpático, el cual también tiene su opuesto: el sistema
nervioso parasimpático.

El primero (simpático) es el que activa el estrés, mientras que el

segundo (parasimpático) genera todo lo opuesto, es decir, se
activa cuando estamos relajadas/os y predispuestas/os a descan-
sar. Cuando el sistema nervioso simpático se encuentra activa-
do, aumenta la frecuencia cardíaca, se dilatan las pupilas, se
abren las vías aéreas, se inhibe la digestión, se relaja la vejiga,
entre otras cosas.

En cambio, cuando el parasimpático se encuentra activo se favo-

rece la digestión, la frecuencia cardíaca disminuye, se contraen
las pupilas y las vías aéreas, entre otras cosas.

Por esta razón cuando estamos nerviosas/os (y se activa el sim-

pático) es muy frecuente tener problemas digestivos.


 Sistema nervioso Sistema nervioso
simpático parasimpático

dilata pupilas activa

relaja contrae
sistemta pupilas
vejiga
digestivo
aumenta
frecuencia disminuye
cardíaca frecuencia
bloquea cardíaca
sistemta
digestivo
broncodilatación broncocontricción
(ingresa más aire) contrae (ingresa menos aire)
vejiga


 Estrés, emociones y creencias

Las creencias que hayas construído en tu vida influirán en la

forma en que te afectan los sucesos de los días. Esto tiene una
relación directa con la descodificación de enfermedades (no voy
a desarrollar demasiado pero les invito a leer mi ebook ‘Decodi-
ficación de enfermedades’ que pueden descargar desde mi web)

Las creencias se forman debido a eventos traumáticos (que no

siempre es algo “terrible” pero para la persona que lo vive sí
puede serlo) que luego nos acompañan en nuestra vida de forma
consciente y/o inconsciente.

Si por ejemplo de niña/o sentiste que te abandonaron (aunque

no lo hayan hecho), durante tu vida es probable que sientas, en
muchas situaciones, que esto se repite. Esto no es literalmente
así, es decir, quizás que debido a lo que te pasó, comiences a
relacionar ciertas situaciones con la idea y el sentimiento de
abandono.

En relación con el estrés, si en algún momento sentís que te

pueden abandonar, al instante se activa el miedo y eso a la vez
genera la activación de los mecanismos biológicos del estrés.

Por eso es importante tomar consciencia y reconocer qué nos

genera miedo, qué nos activa estos mecanismos, y entonces, de
esta forma, poder sanar de raíz.


 Somos un todo

El tratamiento integrativo de los síntomas y las enfermedades

reconoce al cuerpo capaz de encontrar el balance y autoreparar-
se (si le damos las herramientas y generamos las circunstancias
para que eso suceda).

Las enfermedades son expresiones de un desbalance y no son,

necesariamente un diagnóstico de por vida.

Cuando una persona acepta que es “diabético”, “hipertenso”, “as-

mático”, está afirmando que es eso, y éste es un grave error. No
somos la enfermedad: somos seres humanos que por momentos
tenemos ciertos desequilibrios.


 Alimentación

Vitamina C

La vitamina C es esencial para un sistema inmunológico saluda-

ble y para la producción de hormonas suprarrenales. Ejerce un
efecto antiinflamatorio y por lo tanto, es protector de la corteza
suprarrenal.

Cuando estamos estresados, las glándulas suprarrenales traba-

jan más duro y, por lo tanto, se necesita más vitamina C.
Además, el estrés aumenta la excreción de vitamina C de los
riñones, por lo que, consumir una dieta alta en esta vitamina
ayudará a apoyar a las glándulas suprarrenales y al sistema
inmunitario durante los períodos de estrés prolongado.

Las buenas fuentes de vitamina C incluyen frutas y verduras y en

especial, rosa mosqueta, hojas de frambuesa, bayas de goji y
flores de hibiscus, brócoli, coliflor y cítricos.


Vitaminas B

Se utilizan para la producción de energía y son esenciales para

un sistema nervioso saludable. Ayudan a la relajación y a mejo-
rar los niveles de energía. Son solubles en agua, lo que significa
que el cuerpo no las almacena bien (con la excepción de la vita-
mina B) y, por lo tanto, necesitamos obtenerlas de forma
regular a través de nuestra dieta. Debido a que son solubles en
agua, las vitaminas B se excretan por los riñones, convirtiendo
la orina en un color amarillo oscuro.
Además se pierden fácilmente durante la cocción.

El consumo regular de alcohol, café, azúcar y carbohidratos

refinados puede agotar las vitaminas B y, por lo tanto, éstas
deben limitarse o idealmente evitarse en momentos de estrés.

Si tenemos deficiencia de , podemos sentirnos fatigados y

experimentar cambios en el estado de ánimo y en el rendimiento
mental.

La vitamina  (riboflavina) es un antioxidante que ayuda a pro-

ducir anticuerpos y a mantener la inmunidad. Durante los mo-
mentos de estrés, las glándulas suprarrenales necesitan niveles
más altos de vitamina  (ácido pantoténico) y  (piridoxina)
para producir glucocorticoides y adrenalina. La  también
juega un papel en la producción de neurotransmisores relajan-
tes como la serotonina y GABA. La vitamina  (niacina) apoya
las glándulas suprarrenales, participa en la producción de ener-
gía y, junto con el cromo, ayuda a equilibrar los niveles de
azúcar en la sangre.


Acidos grasos esenciales

Los ácidos grasos esenciales, en particular el omega-, son

necesarios para mantener la salud y mitigar los posibles efectos
inflamatorios del exceso de cortisol circulante.

El ácido linoleico (LA, un ácido graso omega-) y el ácido

alfa-linolénico (ALA, un ácido graso omega-) se clasifican
como ácidos grasos esenciales ya que el cuerpo no puede produ-
cirlos y, por lo tanto, deben obtenerse a través de la dieta. El
ácido linoleico del ácido graso omega- se metaboliza en ácido
gamma-linolénico (GLA), que luego se convierte en ácido diho-
mo-gamma-linolénico (DHGLA).

DHGLA produce prostaglandinas antiinflamatorias. Los acei-

tes de borraja y onagra son ricos en ácido linoleico y GLA, y por
lo tanto ejercen un efecto antiinflamatorio en el cuerpo. Sin em-
bargo, DHGLA puede metabolizarse más para producir ácido
araquidónico, (productor de prostaglandinas proinflamato-
rias).

El ácido araquidónico también se puede obtener de la dieta a

través de productos de origen animal que incluyen carne y
huevos. Reducir los alimentos ricos en ácido araquidónico y
aumentar los alimentos ricos en ácido linoleico y GLA ayudará
a aumentar las prostaglandinas antiinflamatorias.

Las semillas de lino, cáñamo, nueces y calabaza son ricas en

ALA, aunque la mejor fuente de estos ácidos grasos omega-3 se
encuentra en peces como el salmón, la caballa y el atún. Estos
ácidos grasos omega- también se encuentran en las algas mari-
nas y ofrecen a los vegetarianos y veganos una mejor alternativa
que el lino, el cáñamo, las nueces y las semillas de calabaza.


 Conexión con la naturaleza

Cuando afirmo que la respuesta está en la naturaleza me refiero

a muchas cosas, entre ellas a lo siguiente:

El ser humano es parte de la naturaleza.

La investigación también confirma las hipótesis psicoevolutivas

de que los entornos naturales de bajo riesgo facilitan una recu-
peración del estrés más rápida y exhaustiva que la exposición a
entornos urbanos. Por ejemplo, en  descubrieron que la
frecuencia cardíaca, la tensión muscular, el tiempo de tránsito
del pulso (el tiempo requerido para que una onda de pulso viaje
a través de una longitud de la arteria) y la presión arterial, se
regulan más completa y rápidamente hacia un estado parasim-
pático (estimulado por el contacto con la naturaleza).

Esta investigación concluye respaldando la sabiduría conven-

cional de que las experiencias en la naturaleza pueden tener
influencias restauradoras que contribuyen a un estado emocio-
nal positivo, mayor concentración, atención y percepción soste-
nida.

La investigación también sugiere que no es necesario un tiempo

prolongado en el desierto o vivir en un área rural para acceder a
los beneficios de la naturaleza para la salud. Obtener acceso al
espacio verde urbano es suficiente para tener efectos medibles
en el estado de ánimo, la ansiedad y la sensación de bienestar.


 Meditación

La meditación involucra concentrar la atención en algo para

disminuir las revoluciones mentales y activar el sistema nervio-
so parasimpático.

Practicar la meditación puede ayudarte a reaccionar de mejor

manera. Se ha practicado por miles de años y existen muchos
estilos distintos.

La mayoría de los tipos de meditación usualmente incluyen:

Atención enfocada: concentrarse en la respiración, en un objeto

o en un conjunto de palabras.

Silencio: la mayor parte de la meditación se realiza en lugares

silenciosos para limitar las distracciones.

Posición corporal: la mayoría de las personas cree que la medi-

tación se lleva a cabo sentado, pero también se puede hacer
acostado, caminando o de pie.

Una actitud abierta: esto significa que te mantengas abierta/o

a los pensamientos que vengan a tu mente durante la medita-
ción. En lugar de juzgar estos pensamientos, déjalos pasar lle-
vando tu atención de vuelta a tu concentración.

Respiración relajada: durante la meditación, debes respirar de

manera lenta y tranquila. Esto también ayuda a relajarse.

Fuente: MedlinePlus 

 Plantas medicinales

¿Te parece que las plantas medicinales no son lo suficientemen-

te poderosas para disminuir al estrés?

Cuando comenzamos a observar los cientos de químicos presen-

tes en cada hierba, se hace más fácil entender que una planta
medicinal no es una sola cosa: es un grupo de componentes que
trabajan juntos sinérgicamente.

Del mismo modo que nosotras/os, seres holísticos, somos una

serie de componentes (mental, emocional, físico y espiritual)
que trabajan juntos en sinergia.

A diferencia del único componente químico de un medicamento

que ingresa al cuerpo y asume la función, los cientos de compo-
nentes herbales pueden funcionar en muchos niveles para mejo-
rar la función del cuerpo en general. El resultado deseado es
que el cuerpo puede funcionar de nuevo de manera óptima,por
sí solo.


PLANTAS SEDANTES

Como el sistema nervioso es fundamental para el manejo del

estrés, tomar plantas sedantes puede ayudar a disminuir los
efectos nocivos del estrés en el organismo. La idea es activar el
sistema nervioso parasimpático disminuyendo la activación del
simpático.

Pasionaria (Passiflora incarnata)

Hierba de gran capacidad ansiolítica. Es beneficiosa para dis-

minuir el estrés, para calmar dolores menstruales, dolores de
cabeza y problemas digestivos. Además es óptima para dismi-
nuir la presión arterial.

Preparado: se infusionan  cucharadas de hierba por taza. Se

puede tomar  tazas al día.


Lavanda (Lavandula angustifolia / Lavandula officinalis)

Hierba sedante por excelencia. Disminuye el período de laten-

cia de sueño, alterando la duración para que descansemos
mucho mejor. En personas que tomaban benzodiacepinas
cuando dejaron de tomar dicho medicamento se observó que
disminuían sus horas de sueño, pero que al tomar lavanda estas
horas se recuperaban. Se capacidad sedativa se debe especial-
mente al linalool (un monoterpeno).

Además de tener propiedades para el tratamiento del estrés, es

beneficiosa en casos de asma, inflamaciones intestinales y dolo-
res de cabeza.

Preparado: se infusionan  cucharadas de hierba por taza. Se

pueden tomar  al día.


PLANTAS ADAPTÓGENAS

Son aquellas que ayudan al organismo a adaptarse al estrés. Sus

mecanismo de acción y propiedades medicinales son distintas
en cada planta, pero todas, de alguna forma, ayudan a disminuir
el estrés del organismo y a que el cuerpo se adapte lo mejor posi-
ble a esa situación.

No es bueno tomarlas porque sí, porque “me van a hacer bien”,

ya que si vivimos bajo estrés constante, el hecho de que yo lo
sienta menos porque las plantas me ayudan a la adaptación, no
va a impedir que otras funciones del organismo se vean afecta-
das. Tal vez se verán menos comprometidas, pero no es la solu-
ción.

Como siempre digo: tratemos seres humanos, no enfermedades.

Lo ideal es generar cambios en la vida que disminuyan el estrés

y además tomar plantas medicinales.


Reishi (Ganoderma lucidum)

Hongo utilizado por la medicina china debido a sus poderes

antioxidantes y anticancerígenos. Fortalece el sistema nervioso
y el sistema inmune. Favorece la circulación sanguínea, estimu-
la la regeneración de las células hepáticas y tiene propiedades
antihistamínicas entre muchas otras propiedades. Como inmu-
noestimulante, el Reishi favorece interleuquinas y la fagocito-
cis. También refuerza los linfocitos y las células NK (entre
otros). Como antiviral actúa sobre numerosos virus; y como
antitumoral actúa en la proliferación de células tumorales.

Contraindicaciones: contraindicado en caso de obstrucción de

conductos biliares. Ocasionalmente puede generar sequedad en
la boca, somnolencia, hinchazón, micción frecuente, sudoración
o nauseas. Las reacciones adversas cesan al dejar de consumir la
planta.

Preparado: cucharada en una taza de agua caliente al día.


Gingseng (Panax ginseng):

Raíz que encontramos por China y Corea, que ha sido venerada

por ser la “cura de todas las cosas”. Se utiliza para brindar ener-
gía en casos de falta de vitalidad, fatiga, agotamiento. No es
estimulante, más bien, es revitalizante. Favorece la circulación
sanguínea y tiene propiedades antitumorales, inmunomodula-
doras y antioxidante. Su efecto hipoglucemiante se debe a que
diminuye la generación de glucosa en el organismo, mejorando
la resistencia a la insulina y protegiendo a las células del pán-
creas (encargadas de generar insulina).

Se encuentra contraindicada en caso de arritmias cardíacas,

hipertensión, ansiedad, embarazo y lactancia. Dentro de sus
efectos secundarios se encuentran la hipersensibilidad cutánea
y trastornos gastrointestinales.
También en interacción con los antidepresivos inhibidores de la
monoaminooxidasa como Isocarboxazida, Nialamida, Fenelzi-
na, Tranilcipromina, Iproniazida, Iproclozida, Fenilalanina,
Harmalina.

Preparado: se coloca entre gr de raíz por taza y luego se pre-

para en deccocción.


 Infusión y Decocción

Para saber diferenciar cuándo hago una infusión y cuándo hago

una decocción debo saber qué parte de la planta voy a utilizar.

Para frutos, semillas, cortezas y raíces: hacer decocción (debido

a que éste proceso es más fuerte que la infusión entonces lo rea-
lizo con las partes más duras de las plantas).

Para hojas, flores y mezcla de éstas con tallos: haceo infusión

(debido a que son partes más blandas de la hierba).

Infusión: coloco la hierba en un recipiente, le agrego el agua

hirviendo, tapo y espero entre  minutos. Luego cuelo.

Decocción: coloco la hierba en un recipiente que pueda ir al

fuego directo, le agregó agua fría (sin calentar), lo coloco al
fuego y cuando rompe el hervor cuento  minutos, apago el
fuego. Tapo el recipiente y espero  minutos. Luego cuelo.


 Sobre mí

Me llamo Florencia Fasanella, soy apasionada de las plantas me-

dicinales, nerd (¡amo estudiar!) y una enamorada de la naturale-
za.

Difundo saberes de plantas medicinales con el objetivo de que

estemos cada vez mas conectadas/os a la tierra y que, gracias a
la medicina que ella nos provee, cuidemos nuestra salud y viva-
mos en plenitud.


Sueño con que cada vez más personas comprendan que su salud
pueden ser mejorada enormemente con plantas medicinales y no
solo eso, integrándolas en nuestros hábitos podemos también
prevenir. La Fitomedicina puede tratar patologías pero además
puede ser una medicina preventiva.

Por todo esto, quiero guiarte para que apliques los beneficios
de las plantas medicinales en tu vida. Mi pasión y vocación es lo
que te brindo desde un profundo respeto y un estudio exhausti-
vo.

Acompaño y enseño a personas que tengan ganas de aprender el

valor medicinal de las plantas, sentirse bien y hacerse responsa-
bles de su salud.

Me formé como Farmacéutica en la Universidad de Buenos

Aires, hice posgrados de fitomedicina, y fitodermatología (So-
ciedad Latinoamericana de Fitomedicina), fitocosmética (Uni-
versidad de Buenos Aires), Psicoinmunoneuroendocrinología
del estrés (Facultad Favaloro) y Métodos Biológicos de Diag-
nóstico (Fubiner).

En este momento me encuentro estudiando Medicina China.

Soy Terapeuta Floral y Biodecodificadora.

¿Porque una farmacéutica elige ampliar su mirada y conectar

con la medicina natural?

Porque tuve una experiencia que me marcó.


Hace muchos años sufría de terribles dolores en la boca del estó-
mago, tomaba muchos medicamentos y los dolores continuaban.
Llegaba a tomar pastillas al día pero aun así a veces no alcan-
zaba.

En ese momento llegó a mi vida el libro “la enfermedad como

camino”; leyéndolo entendí que el síntoma fisico visibilizaba mi
estado emocional. Estaba enojada conmigo misma y eso tenía un
gran vinculo con ese dolor.

Pero esto no quedó solo en un entendimiento intelectual, lo hice

carne, por eso sé que esto es real.

Comencé a tratarme amorosamente en vez de enojarme conmi-

go, me cuidé, me mimé, me dí lo que necesitaba a cada momen-
to. También tomé plantas medicinales y al poco tiempo el sínto-
ma desapareció.

Fue en ese momento cuando entendi profundamente que la

salud depende no solo del cuerpo fisico sino tambien del estado
emocional y mental, que el estado del cuerpo ficiso muestra el
estado emocional y mental de la persona y que las plantas medi-
cinales podían ayudarme a equilibrarme fisica, mental y emocio-
nalmente.

Creo en el poder de la naturaleza, creo que nos sana conectar

con la tierra, porque es un camino saludable y natural para sen-
tirnos plenas/os y vivir en armonía.


 Contacto
Mail: florecermedicinanatural@gmail.com

Web: https://florecer-medicinanatural.com/

IG: @florecerfitomedicina

FB:Florecer Medicina Natural – Farm. Florencia Fasanella

Cursos

BOTIQUIN HERBAL (online)

Curso. Aprenderás acerca de los poderes y propiedades de las

plantas medicinales, su historia, efectividad y aplicaciones. Tam-
bién aprenderás a hacer tus fito-preparados para consumirlas de
manera práctica y correcta.

DECODIFICACIÓN DE ENFERMEDADES (online)

Curso. Veremos todos los sistemas que forman nuestro organis-

mo para aprender a interpretar sus dolores.

FITOMEDICINA APLICADA A LA PIEL (online)

Workshop. Veremos tratamiento para psoriasis, rosácea, acné,

seborrea, caspa, hongos, aceites vegetales, hidrolatos, formas de
aplicación, más.

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