Sinopsis: “Too big to fail”

La película trata sobre la crisis de 2008. El tratamiento es que de pronto los bancos dejan de tener
liquidez gracias a las hipotecas subprime, ya que estas en un inicio no les importó que los clientes les
pagaran, sino únicamente vender. Sin embargo, al final toda la crisis la termina pagando el
contribuyente, ya que el congreso de Estados Unidos apoya la reforma de que el Estado inyecte capital
en los bancos, esto con el objetivo de que estos puedan dar créditos. Lo interesante de la película es que
comienza con la caída de Lehman Brothers, lo cual propició una de las grandes causas de la crisis
financiera. Entre los que se niegan a salvar a Lehman Brothers se ve como en Inglaterra en un principio
se interesan, sin embargo, al analizar la situación del mercado y la crisis creen que no es conveniente.
Por lo que deciden no adquirir la empresa. Se observa también como el gobierno se niega ayudar a
salvar esa compañía, una especie de mensaje hacia los demás en que deben responsabilizarse por las
finanzas. Sin embargo, esta decisión tiene efectos negativos en la economía de los Estados Unidos, por
lo que las acciones comienzan a caer. Entonces aquí lo que en un principio se trató de evitar, se debe
replantear, y llevar al congreso para que estos aprueben la reforma de inyectar capital al sector
financiero. Esto para no desencadenar en una debacle que acabaría con la economía. Al final de la
película se observa, como a pesar de que se inyectó dinero en las compañías financieras, la economía
siguió en caída libre.