Está en la página 1de 2

DEVOCIONAL Lunes 23 Marzo 2020

SINTONIZANDO NUESTRO CORAZÓN CON DIOS

Salmos 143:10-11 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi


Dios; Tú buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. Por tu nombre, oh
Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia.
Hoy orando el Señor me hizo recordar este cantico, este pasaje de la Biblia,
que es hermoso. Este es un salmo donde se refleja la súplica de liberación y
dirección del Señor. Hay varios matices que tiene este salmo. Hay un clamor,
para que Dios escuche prontamente la oración, hay un clamor para que Dios
saque la angustia del corazón, porque el corazón esta desolado. El salmista
recuerda los tiempos antiguos y todas las obras que Dios ha hecho, y por eso
aparece esta frase reflexionaba en las obras de Dios, en las obras de sus
manos. El salmista reconoce que hay un corazón sediento de Él. Hay un
clamor de pedir su ayuda pronto. Y también una convicción, él está confiando
plenamente en Dios. Hay una frase que es interesante, hazme saber el
camino por donde andar. Este es un tiempo para entregarle todo al Señor,
cada uno tiene aflicciones, peticiones, problemas, de la vida, familiar,
personal, problema de salud, problema futuro, lo que está afectando el
coronavirus en el presente y el futuro, en relación a la economía en el mundo
y el país. Sin embargo, en medio de este creo muy pertinente lo que dice el
salmista, en medio del clamor por pedir liberación, pide dirección, este
cantico del salmista, pide ENSEÑAME A HACER TU VOLUNTAD. En estos
tiempos, cuán importante en medio de nuestras peticiones personales, en
medio de nuestra angustia, nuestra aflicción, esta pena que quizás hay y que
no ha sido respondid0 por el Señor, en este clamor, en este gemido que hay
y que no hemos visto con nuestros ojos y que estamos esperando en el
Señor. El salmista dice “ENSEÑAME A HACER TU VOLUNTAD”. Y Parte de su
voluntad es amarlo, es servirle, es dar a conocer las buenas nuevas, ser de
bendición en el lugar que nos rodean, parte de su voluntad es caminar con
El, aferrado a una sincera comunión y profunda delante de su presencia.
ENSEÑAME A HACER TU VOLUNTAD PORQUE TU ERES MI Dios. Tenemos el
privilegio de que Dios nos ha permitido tener a Dios como nuestro Padre, ser
nuestro Dios, nuestro Señor, de ser nuestro Salvador, a través de
JESUCRISTO, nos ha permitido encontrarnos con El, nos ha permitido tener
una relación con El, conocerle a Él, y encontrar fortaleza y paz en El.
Podemos entregar nuestro anhelo de nuestro corazón, nuestras lágrimas,
nuestra angustia y como pedía esta mañana, Señor te pido por la salvación
de aquellos que te necesitan, sobre aquellos que necesitan tu bendición de tu
presencia y tu palabra.
Tu buen ESPIRITU ME GUIE por sendas de rectitud. Que el Espíritu nos guie
en este tiempo a fortalecernos. Es verdad los sentimientos van y vienen, por
lo frágil que somos, pero el Señor permita fortalecer nuestro corazón,
nuestra mente, nuestro espíritu nuestras convicciones y nuestra fe.
POR TU NOMBRE JEHOVA ME VIVIFICARAS, que el Señor alienta nuestro
corazón, el Señor fortalece nuestro corazón, anima nuestra vida, que, en
medio de este clamor interno, de esta petición que tenemos, no solamente
en relación a la salud, estamos pidiendo por la salvación de nuestra familia y
el mundo, es el anhelo que aquellos que yo amo, se encuentren con la
bendición, la salvación y la sanidad que el Señor puede hacer. Permita el
Señor que tu vida sea levantada y vivificada. Anhelo que cada corazón sea
vivificado y levantado por el Señor, levántate en el nombre de JESUCRISTO
con el gozo del Señor. Vivificar significa un corazón lleno del gozo del Señor,
lleno de la presencia del Señor.
POR TU JUSTICIA SACARAS MI ALMA DE ANGUSTIA. Así yo lo creo, cada vez
que hago mi oración, entrego mis lágrimas, entrego esa petición y esa carga
que está ahí, experimentamos esa paz del Señor, esa justicia que él tiene
cuidado de nosotros y está haciendo su voluntad en nosotros y el mundo. El
Señor nos saca de un corazón angustiado y lo transforma en paz, alegría y
en fuerza, es lo que necesitamos en este día. No pongamos la mirada en el
problema como tan difícil de solucionar, pongamos en la mirada en lo que
Dios puede hacer y está haciendo porque tiene poder. 10  Enséñame a hacer
tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tú buen espíritu me guíe a tierra
de rectitud.Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia
sacarás mi alma de angustia.
Sea nuestra oración hoy.
Muchas Bendiciones
Pr. Patricio Vásquez M.

También podría gustarte