¿Cómo se concibe la globalidad en la localidad, desde una educación local
hacia una ciudadanía global?
La globalidad puede ser entendida como la forma en que el entramado entre la experiencia de los usuarios y las formas que adquiere la tecnología resultan entretejidos en la actividad multidimensional de la vida cotidiana. Dicho entretejimiento tiene lugar ya que “La educación debe formar a sujetos ciudadanos que valoren su cultura porque la conocen, pero que respeten las otras culturas porque las consideran tan valiosas como la propia. Se trata de construir ciudadanos que funcionen y cambien su entorno local, pero que construyan a la vez un mundo intercultural. ¿cómo crees que se puede asimilar, desde el nuevo territorio generado por la ciberciudadanía, en la realidad hipermoderna el concepto de lo político por medio del cual se resignifica el sentido de la ética social en el reconocimiento crítico de las diferencias culturales en la aldea global. Las prácticas éticas, particularmente las cívicas o ciudadanas, están demostrando con toda propiedad que el desarrollo económico y político del Estado debería ir a la par con el cumplimiento de principios o normas de moralidad pública. En una sociedad cada vez más globalizada es necesario orientar éticamente la racionalidad de nuestras acciones humanas hacia fines sociales mucho más justos, equitativos y democráticos. ¿cómo crees que gana protagonismo y es asertiva la ética en Javier Darío Restrepo periodista, en cuanto que es inevitable su presencia en todo conflicto para no excluir y anular a los ponentes en disputa? Al señor Javier Darío Restrepo se le ha llamado “el padre de la ética periodística en Colombia”. La ética es un concepto complejo que quizá hasta este momento no entendía muy bien, pero en palabras del maestro Restrepo, no hay discursos sobre los cuales elaborar “porque la ética es en esencia, el impulso que tiene todo ser humano de ser excelente”. Un periodismo de excelencia es el que necesitamos para el postconflicto. Y hacer periodismo de excelencia significa para él nada más que “responder positivamente a las urgencias que se plantean en el nacimiento de un país diferente”. ¿Cómo lograr que los medios de comunicación (masivos, comunitarios y redes sociales) se conviertan y contribuyan al perdón como dispositivo socioemocional para la paz y la reconciliación, a la convivencia, la controversia y el respeto a la diferencia y no se conviertan en una plataforma para quienes buscan legitimar o incitar la violencia? ¿cómo en el tema del conflicto para Sergio de Zubiría, la ética tendría un papel protagónico y relevante para asimilarlo y transformarlo, en pro de una adecuada convivencia social? Zubiría comentó que en una educación para el posconflicto debemos suprimir de la mente de las personas la idea de que se acaba el conflicto, pues el conflicto es parte de la naturaleza humana. La clave está entonces en tramitar el conflicto de manera democrática, dialógica y no violenta. Y, para ello, las humanidades, la ética, la filosofía y el arte son esenciales porque fomentan el pensamiento crítico, la imaginación creadora, la voluntad y las virtudes. Necesitamos entonces unas pedagogías del conflicto para una paz en una sociedad habituada a la guerra. El problema no es dejar las armas, según él, sino el hábito mental de la guerra y la agresividad.