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C APÍTULO 55

Natalia Bassy Iza


Juan Rodríguez Solís
María Jesús Esteban Dombriz
ABDOMEN AGUDO
Raquel Chaves López

Introducción Presentación atípica del abdomen agudo


Se define abdomen agudo aquella situación «crítica»
en el anciano. Dificultades para su
que cursa con síntomas abdominales graves y que reconocimiento y abordaje
requiere un tratamiento médico o quirúrgico urgente. Hay una serie de factores que caracterizan la pre-
Las manifestaciones más frecuentes son: sentación atípica de la enfermedad en el anciano y
— Dolor abdominal agudo. otros que condicionan la realización de una correcta
valoración diagnóstica (2).
— Alteraciones gastrointestinales.
1. Historia clínica: muy importante para el correcto
— Repercusión sobre el estado general.
diagnóstico, pero a veces muy difícil por la difi-
Constituye un motivo frecuente de consulta en la cultad en la comunicación: alteración del lengua-
práctica médica habitual y su manejo exige mucha je, déficit cognitivo, delírium, deprivación senso-
experiencia y capacidad de juicio, ya que el más rial, etc.
catastrófico de los fenómenos puede ir precedido de 2. Antecedentes de patología abdominal (litiasis
unos síntomas y signos muy sutiles. biliar, hernia de hiato, estreñimiento crónico...)
El diagnóstico resulta más difícil, sobre todo en que pueden no ser responsables del problema
situaciones de urgencia, dado que la sensibilidad del actual y llevarnos a un diagnóstico erróneo.
anciano no es tan aguda como la del adulto, y las 3. Comorbilidad asociada, que puede modificar la
reacciones fisiopatológicas (p. ej., dolor, hipersensibili- presentación clínica o influir decisivamente en la
dad, respuesta a la inflamación) no son tan rápidas ni evolución clínica del abdomen agudo.
eficaces. Los cambios anatómicos, la dificultad en la 4. El consumo de determinados fármacos puede
comunicación, otras enfermedades coexistentes y el alterar la percepción del dolor, así como influir
mayor deterioro físico y mental también contribuyen a en los hallazgos de la exploración física. En
esa dificultad. concreto, el uso de AINEs puede disminuir la
En los ancianos con abdomen agudo, la presen- percepción del dolor, alterar la capacidad de
tación clínica más frecuente sigue siendo la forma respuesta del anciano y contribuir a la aparición
clásica (aparición aguda, existencia de dolor, náuse- de ciertas patologías abdominales.
as, vómitos, alteraciones del ritmo intestinal, reper- 5. Los síntomas pueden ser más tardíos e ines-
cusión del estado general, etc.), por lo que la sis- pecíficos que en los pacientes más jóvenes (3).
temática que suele aplicarse en la anamneis, Los síntomas típicos de dolor abdominal (náu-
exploración y diagnóstico resulta adecuada. Sin seas, vómitos o alteraciones intestinales, funda-
embargo, la enfermedad se presenta de forma atípi- mentalmente diarrea) no van a presentarse con
ca con mayor frecuencia, que a otras edades, mos- tanta frecuencia como en los pacientes jóvenes
trando una serie de características que no son y, cuando aparecen, lo hacen más tardíamen-
comunes en otros grupos de edad (cuadro confusio- te (4). Conviene recordar la posibilidad de que el
nal agudo, deterioro del estado general). Todo esto abdomen agudo se presente con manifestacio-
conlleva una menor exactitud diagnóstica, un retraso nes generales e inespecíficas (deterioro del esta-
en el diagnóstico etiológico y, por consiguiente, una do general, cuadro confusional, caídas, etc.).
tórpida evolución clínica en gran número de pa- 6. La exploración física puede ser más inespecífi-
cientes. ca. La hipotermia es cuatro veces más frecuen-
Su diagnóstico diferencial incluye gran variedad de te en los ancianos acompañando a un proceso
procesos intra y extraabdominales y puede corres- intraabdominal.
ponder tanto a procesos médico-quirúrgicos graves, 7. Pruebas complementarias. La leucocitosis tien-
como a situaciones menos serias (1). de a ser menor o incluso no aparecer, con el

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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes

mismo grado de inflamación. La radiología simple de causa responsable y poder tratar al paciente de la
abdomen y/o tórax ofrece una menor información que forma más adecuada y específica posible. Obviamen-
en los adultos (el neumoperitoneo puede no apreciar- te, la valoración del abdomen agudo en los ancianos
se en un 30-35% de los ancianos con perforación de requiere más tiempo y probablemente sean necesarias
víscera hueca). La ecografía abdominal es una prueba más pruebas complementarias que en otros sujetos
de imagen muy resolutiva, especialmente útil en pato- más jóvenes. En este grupo de edad, la intervención
logía biliar, hepática, aórtica y renal. quirúrgica precoz puede tener mayor trascendencia (5).
8. Aspectos psicosociales del anciano. En ocasio- La mortalidad crece vertiginosamente con la edad,
nes la minimización de los síntomas por parte llegando a ser unas 10 veces más elevada en los
del anciano que no quiere ocasionar problemas pacientes mayores de 80 años que en el grupo de
a sus familiares y/o la consideración por parte pacientes de 50 años. No se justifica sólo por la mayor
de los familiares/profesionales que los síntomas fragilidad de la población anciana, sino que existen
que presenta son consecuencia normal del otros factores, todavía más decisivos, como son (6):
envejecimiento (ageísmo) conllevan, en ocasio-
— Un menor índice de exactitud diagnóstica.
nes, un retraso en el diagnóstico y una peor
— Un tiempo más prolongado para la identifica-
evolución clínica del proceso.
ción del proceso responsable del abdomen
agudo.
Causas
La mortalidad puede predecirse por la escala ASA
Los grupos etiológicos son los mismos que en el (riesgo perioperatorio), el retraso en el tratamiento
paciente adulto; sin embargo, existen diferencias cuan- quirúrgico y por las condiciones previas del paciente
titativas según frecuencia de aparición. Mientras que que tan sólo nos permitan una cirugía paliativa. Se ha
en el paciente joven la causa más frecuente de dolor demostrado en varios estudios (7, 8) que la edad por
abdominal es el dolor abdominal inespecífico y la sí sola no aumenta la morbilidad, mortalidad ni estan-
apendicitis, en el anciano, en la mayoría de las series, cia hospitalaria.
la patología biliar y la obstrucción intestinal son las
responsables de la consulta, además de otras pato-
logías infrecuentes en los jóvenes, como la patología Evaluación inicial del paciente
tumoral o la vascular. Podemos destacar cuatro gru-
Siempre debemos realizar, de forma sistemática,
pos etiológicos:
una serie de pasos (6):
— Las enfermedades biliares causan el 25% de
1. Establecer la gravedad del cuadro y detectar la
todos los casos de dolor abdominal agudo en
existencia de shock (hipovolémico o séptico-
los pacientes ancianos que requieren hospitali-
tóxico) mediante una valoración rápida del
zación.
paciente: nivel de conciencia, constantes vitales
— La obstrucción intestinal y la hernia incarcerada
(PA, FC, FR, diuresis...).
son las siguientes causas más comunes.
2. Iniciar, en aquellos pacientes que lo precisen, la
— Apendicitis, malignidad, diverticulitis y ulcus
estabilización hemodinámica, simultáneamente
péptico.
con la valoración diagnóstica.
— También en el anciano son más frecuentes las
afecciones vasculares. — Asegurar al menos una vía venosa para la
reposición hidroelectrolítica.
Debemos tener en cuenta que en muchas ocasio-
— Administrar oxigenoterapia si precisa.
nes la causa del dolor abdominal tiene un origen
— Valorar la necesidad de sondaje vesical para
extraabdominal, pudiendo conducir, en ocasiones, a
controlar el ritmo de diuresis (y/o muestra
errores diagnósticos. Entre las causas más frecuen-
para sistomático de orina/urocultivo).
tes cabe destacar: hematomas en pared abdominal,
neumonía basal, TEP, cardiopatía isquémica, aplas- 3. Obtener una historia clínica detallada, con las difi-
tamientos vertebrales, cetoacidosis diabética, hiper- cultades que ello conlleva en el paciente anciano,
calcemia, insuficiencia suprarrenal aguda, mixede- mediante una anamnesis cuidadosa y una explo-
ma, hipertiroidismo, uso de laxantes y abstinencia a ración clínica completa, que, junto a los estudios
opiáceos... complementarios adecuadamente dirigidos y
valorados, nos ayudarán a emitir una aproxima-
ción diagnóstica lo más correcta posible.
Pronóstico
4. La laparotomía o laparoscopia exploradora puede
Como en cualquier grupo de edad, el pronóstico de estar indicada incluso en ausencia de un diagnós-
abdomen agudo dependerá en gran medida del tiem- tico exacto.
po que sea necesario para identificarlo, descubrir la

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Situaciones clínicas más relevantes. Abdomen agudo

Anamnesis • Hacia el hombro (perforación por ulcus o irri-


tación frénica); hacia la espalda en cinturón
Aunque conlleva mayor dificultad que en los pacien-
(pancreatitis).
tes más jóvenes, una historia clínica ordenada y minu-
• Hacia la zona lumbar y genital (cólico nefrítico).
ciosa relatada por el paciente o cuidador es un instru-
mento valioso para la correcta orientación etiológica y — Intensidad, ritmo y duración.
poder así establecer un plan de cuidados correcto. — Factores que lo modifican. Los pacientes con
peritonitis difusa (irritación del peritoneo parietal)
refieren empeoramiento del dolor con los movi-
Antecedentes personales
mientos, mejorando cuando están inmóviles o
— Alergias medicamentosas, hábitos tóxicos. tumbados (ulcus perforado, apéndice perfora-
— Patologías conocidas: nos pueden orientar al do...). Pacientes con obstrucción intestinal sue-
diagnóstico de sospecha. len experimentar mejoría de los síntomas des-
pués de vomitar.
• Colelitiasis: colecistitis, colangitis, pancreatitis.
• Diverticulosis: diverticulitis.
• Cirugía abdominal: obstrucción intestinal, vól-
Síntomas asociados
vulo.
• Hernias: obstrucción intestinal. — Fiebre y escalofríos.
• Inmovilidad: pseudoobstrucción intestinal. — Náuseas y vómitos. Presentes en la mayoría de
• Estreñimiento: vólvulo colónico. los cuadros con afectación visceral y temprana
• Patología cardiovascular: IAM, TEP, isquemia en la obstrucción intestinal. En el caso de apen-
mesentérica. dicitis, cólico biliar o ureteral, son de tipo reflejo
comenzando al poco tiempo de iniciarse el
— Consumo de fármacos. Los AINEs y corticoides
dolor, aunque siempre después de éste. Son de
(acción lesiva sobre la mucosa gástrica); los
contenido alimenticio, gástrico o biliar y suelen
corticoides pueden enmascarar la fiebre y los
cesar cuando se vacía el estómago. Otras
signos de irritación peritoneal, y los antibióticos
veces se producen por un mecanismo inflama-
pueden haber enfriado procesos abdominales
torio (gastroentiritis aguda, GEA), acompañado
que seguirán un curso más larvado.
de dolor abdominal hasta la resolución del cua-
dro. En la obstrucción intestinal nos puede
orientar sobre el nivel de la obstrucción.
Enfermedad actual
En ancianos suele existir disminución en la acti-
Hoy en día se sabe que la administración precoz de vidad refleja y de la fuerza muscular, por lo que
analgesia en pacientes con abdomen agudo facilita la no es infrecuente su ausencia.
exploración física y no retrasa el diagnóstico (5, 8). — Trastornos del ritmo intestinal:
1. Estreñimiento: la ausencia de emisión de
Estudio del dolor gas o heces nos orientará a la existencia de
íleo mecánico o dinámico.
— Forma de comienzo. La presentación brusca y
2. Diarrea: debemos observar no sólo la consis-
repentina es habitual en casos de perforación de
tencia de las heces, sino también la presencia
víscera hueca, en embolia mesentérica, crisis
de productos patológicos (sangre, moco,
renoureteral, vólvulo, y, sin embargo, en los proce-
pus). Encontraremos diarrea en la isquemia
sos inflamatorios (apendicitis, hernia estrangula-
mesentérica, pseudobstrucción intestinal,
da, colecistitis) el dolor suele comenzar de forma
GEA y otros procesos inflamatorios. Un vacia-
progresiva; no obstante, en el paciente geriátrico
miento abdominal brusco (vómitos y diarrea
este patrón de presentación no es constante.
simultáneos) puede estar presente en la
— Localización del dolor. El dolor vago y difuso en
embolia de la arteria mesentérica superior.
la línea media, usualmente es de origen visceral.
La progresión de este tipo de dolor hacia una — Síntomas genitourinarios: disuria.
localización precisa sugiere irritación de perito- — Síntomas constitucionales.
neo parietal. Una vez que el dolor se localiza,
podemos hacer un diagnóstico diferencial más
Exploración física
preciso basado en los signos implicados en
cada región peritoneal (véase tabla 1). Es asombrosa la escasez de hallazgos físicos que
— Irradiación. Sin embargo, estos datos pueden algunas veces pueden estar presentes incluso en pre-
conducir a error y son difíciles de obtener en el sencia de peritonitis difusa. Este hecho debería tener-
paciente anciano: se especialmente en cuenta cuando nos hallamos

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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes

Tabla 1. Causas de dolor abdominal según su localización

Cuadrante superior derecho Cuadrante superior izquierdo


Colecistitis. Colangitis. Cólico biliar. Aneurisma de aorta.
Pancreatitis aguda. Pancreatitis aguda.
Hepatomegalia congestiva. Hepatitis. Esplenomegalia. Rotura esplénica.
Apendicitis aguda. Gastritis.
Ulcus péptico perforado. Ulcus péptico perforado.
Absceso subdiafragmático. Absceso subdiafragmático.
Neumonía basal. Neumonía basal.
Pielonefritis. Cólico nefrítico. Pielonefritis. Cólico nefrítico.
IAM. IAM.

Periumbilical
Obstrucción intestinal.
Apendicitis aguda.
Diverticulitis aguda.
Pancreatitis aguda.
Aneurisma de aorta.
Isquemia mesentérica.
Cuadrante inferior derecho Cuadrante inferior izquierdo
Apendicitis aguda. Diverticulitis aguda.
Perforación de ciego. Colitis isquémica.
Hernia inguinal estrangulada. Perforación de colon.
Cólico nefrítico. Hernia inguinal estrangulada.
Cólico nefrítico.

ante la sospecha de una isquemia mesentérica o de sencia de masas, hernias, eventraciones, cicatri-
una obstrucción de intestino delgado (9, 10). ces, lesiones o erupciones cutáneas, circulación
En la exploración física deberemos tener en cuenta: colateral, contornos asimétricos o movimientos
respiratorios restringidos.
— Auscultación. Previa a la palpación para no alte-
Examen sistémico
rar la frecuencia de ruidos intestinales. Se valo-
— Estado general. Constantes vitales (TA, FC, Tª, ra la frecuencia y características de los ruidos
F resp.) grado de hidratación, estado nutricional, intestinales. La presencia de ruidos intestinales
coloración de la piel y mucosas (palidez, icteri- «de lucha» (incrementados o con tono agudo
cia, cianosis). Nos orientarán hacia la gravedad de carácter metálico) sugiere una obstrucción
de la situación. Presión arterial disminuida por del intestino delgado; sin embargo, su ausencia
hipovolemia, taquipnea en relación a acidosis no debe excluir este diagnóstico. Puede existir
metabólica, o fibrilación auricular como causa una disminución o abolición del peristaltismo en
de embolia mesentérica. La ausencia de fiebre caso de peritonitis. Los borborigmos se podrían
y una relativa bradicardia pueden estar presen- auscultar en casos de GEA. Se debe determi-
tes en pacientes con isquemia mesentérica, nar la presencia de soplos vasculares en la línea
colecistitis, obstrucción de intestino delgado, media cuando exista aneurisma aórtico.
apendicitis... — Palpación. Debe ser superficial y profunda, rea-
lizarse con extrema suavidad y comenzando
siempre desde las zonas más distales al dolor.
Examen abdominal
El dolor selectivo a la descompresión abdomi-
— Inspección. Se realizará en busca de distensión nal, considerado esencial en el diagnóstico de
(apendicitis, diverticulitis, obstrucción intestinal), irritación peritoneal, está ausente en gran
peristaltismo visible (obstrucción intestinal), pre- número de ancianos. Un signo más fidedigno

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Situaciones clínicas más relevantes. Abdomen agudo

para el diagnóstico de peritonitis es el hallazgo de con- renal. Una alteración en el cociente urea-creati-
tractura involuntaria de la pared abdominal. En la peri- nina refleja la deshidratación del paciente.
tonitis generalizada, el dolor es difuso y el abdomen — Iones (Na, K, Cl): hipo-Cl- hipo-K en pacientes
puede estar rígido, con gran contractura muscular con vómitos y depleción de volumen grave.
(vientre en tabla). Sin embargo, este dato está ausen- — Perfil hepático, amilasa (no específico de pan-
te en muchos pacientes mayores. El signo de rebote creatitis).
típico depende de la localización del proceso y de la
integridad del sistema nervioso, así como la velocidad
Gasometría venosa
de instauración.
La localización y descripción de masas en los — Valora las alteraciones del equilibrio ácido-base
ancianos pueden ser incluso más fáciles debido (vómitos, diarreas, cetoacidosis diabética...).
a la delgadez de la pared abdominal y a la
menor contractura muscular.
Coagulación
Deben explorarse los sacos herniarios de forma
sistemática, así como la presencia o alteración — Ante sospecha de sepsis, hepatopatía y posibi-
de los pulsos femorales. lidad de indicación quirúrgica.
La palpación de una masa pulsátil dolorosa
debe hacer pensar en un aneurisma de la aorta
abdominal. Hemocultivos
— Percusión. Evalúa el tamaño y densidad de los
Sedimento de orina
órganos abdominales y detecta la presencia de
liquido, masas o gas. En este último caso se per- — La hematuria y/o datos compatibles con infec-
dería la matidez hepática. Además, es una buena ción del tracto urinario orientan el diagnóstico
técnica para evaluar la irritación peritoneal. Una hacia patología urológica.
distensión abdominal timpánica puede hacer
pensar en la presencia de obstrucción intestinal o
Electrocardiograma
neumoperitoneo. La matidez suprapúbica, la pre-
sencia de globo vesical, y en flancos de ascitis. Debe realizarse a todo paciente anciano con dolor
abdominal de etiología desconocida. El infarto agudo
de miocardio de cara inferior se manifiesta con dolor
Examen genital, rectal y pélvico
en epigastrio. Pueden aparecer cambios en el ECG,
— Tacto rectal. Prueba imprescindible en la valora- asociados a pancreatitis aguda y shock, así como a
ción de abdomen agudo. Debe realizarse des- alteraciones electrolíticas.
pués del estudio radiológico. Nos aporta datos La presencia de arritmias tipo fibrilación auricular
acerca de las características de las heces puede orientarnos hacia el diagnóstico de abdomen
(melenas, diarrea), la ocupación de la ampolla agudo de origen vascular.
rectal (impactación fecal, masas) y la existencia
de dolor en las paredes rectales.
Pruebas de imagen
— Rx de tórax AP y LAT. Permite descartar las
Exploraciones complementarias
causas torácicas de dolor abdominal (neumo-
Laboratorio nías basales, neumotórax, hernias diafragmáti-
cas) y es la más sensible para detectar un
Hemograma
pequeño neumoperitoneo (presencia de aire
— Recuento leucocitario y fórmula. La leucocitosis debajo del diafragma), aunque puede estar
puede ser menor o no aparecer. ausente en casi el 35% de las perforaciones de
— La presencia de anemia nos puede orientar a víscera hueca en el anciano. Valoraremos la
un sangrado, proceso maligno. La anemia existencia de derrame pleural izquierdo en las
puede no estar presente si el paciente está pancreatitis.
severamente deshidratado o estar sobrevalora- — Rx de abdomen (simple y en bipedestación); en
da en caso de hemodilución (insuficiencia car- aquellos pacientes que no puedan mantener
diaca congestiva, hepatopatía, etc.). bipedestación se realizará en decúbito lateral
izquierdo con rayo horizontal. Especialmente útil
Bioquímica ante la sospecha de perforación y obstrucción.
— Glucosa, creatinina, urea e iones: nos permiten Aporta información acerca de: distribución y
valorar el estado de hidratación y la función cantidad de gas. En el íleo paralítico se ven múl-
tiples asas intestinales uniformemente distendi-

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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes

das que afectan al estómago, intestino delgado e • Hemorragia intestinal cuando la endoscopia
intestino grueso; el diagnóstico diferencial hay que es negativa.
establecerlo con la obstrucción colónica baja. En el
— Laparoscopia y/o laparotomía exploradora. Se
íleo mecánico el diagnóstico se basa en la demostra-
valorará la realización en aquellos casos en los
ción de asas llenas de gas o líquido próximas al punto
que los resultados de las exploraciones com-
de la obstrucción con poco o nada de gas en la región
plementarias no sean concluyentes como
distal y generalmente con múltiples niveles hidroaére-
opción diagnóstica y terapéutica.
os.
Son ya numerosos los estudios que demues-
— Ecografía abdominal. Técnica inocua y de bajo
tran su rentabilidad diagnóstica y terapéutica,
coste. Es rápida, no invasiva y sin contraindica-
no siendo necesario un preoperatorio complica-
ciones. Útil en la valoración de hipogastrio,
do. Se ha demostrado una reducción de la
hipocondrio derecho e izquierdo. La solicitare-
mortalidad (12).
mos ante la sospecha clínica de:
• Patología hepato-bilo-pancreática: colecisti-
Actitud y tratamiento
tis, colangitis, dilatación de vías biliares.
• Masas abdominales inflamatorias: apendici- Hay que establecer el diagnóstico diferencial entre
tis, diverticulitis (más indicada la TAC). entidades que requieran tratamiento médico y aque-
• Abscesos y colecciones intraabdominales. llos que constituyan una emergencia quirúrgica. El
• Patología genitourinaria: pielonefritis, obstruc- enfermo debe ser valorado por el cirujano, ante la
ción urinaria aguda. menor duda de indicación quirúrgica.
• Disección de aneurisma aórtico.
— Criterios de tratamiento quirúrgico:
— TAC abdominal. Hoy en día se sabe que la TAC
1. Peritonitis localizada o difusa (apendicitis
es una herramienta de gran valor en la sala de
aguda, hernia estrangulada...).
emergencias para la valoración de los pacientes
2. Perforación de víscera hueca (existencia de
ancianos con dolor abdominal agudo y puede
neumoperitoneo).
influir notoriamente en la toma de decisiones
3. Obstrucción intestinal completa.
(necesidad de ingreso, indicación de cirugía,
necesidad de antibióticos...) (11). — Pueden requerir tratamiento quirúrgico:
Puede estar indicada cuando la clínica y las prue- 1. Colecistitis aguda.
bas realizadas dejen dudas sobre el diagnóstico. 2. Diverticulitis aguda.
Las principales indicaciones de la TAC son: 3. Pancreatitis aguda.
4. Megacolon tóxico.
• Patología aórtica aguda. Aneurisma de aorta
abdominal. Los pacientes que van a precisar tratamiento
• Patología retroperitoneal (hematoma). quirúrgico deben ir a quirófano en las mejores condi-
• Isquemia mesentérica. ciones posibles, por eso es preciso un correcto mane-
• Pancreatitis aguda grave. jo de las alteraciones hidroelectrolíticas, profilaxis anti-
• Abscesos abdominales. biótica preoperatoria, etc.
• Procesos inflamatorios intestinales. Es más Se hace imprescindible la existencia de una guía clí-
sensible que la ecografía en el diagnóstico de nica adaptada al medio para el correcto abordaje del
apendicitis o diverticulitis. abdomen agudo en el viejo (10).
— Estudios de contraste.
Apendicitis
• Enema opaco: para valorar obstrucción de
colon. Sigue siendo una entidad relativamente frecuente
• Contraste hidrosoluble oral: para valoración en el viejo y a menudo mal y tardíamente diagnostica-
de perforaciones o fístulas. da, asociada a una alta morbimortalidad. Una vez
diagnosticada, la pronta indicación quirúrgica, y el
— Arteriografía. Su uso ha disminuido por la exis- correcto uso de antibióticos perioperatorio son deter-
tencia de la TAC helicoidal. Sus principales indi- minantes en el pronóstico. La comorbilidad previa es
caciones son: el factor decisivo (13).
• Isquemia mesentérica: debe realizarse cuan-
do la sospecha clínica es alta y la TC helicoi- Bibliografía
dal es negativa. Puede tener fines terapéuti- 1. Kay L. Prevalence, incidence and prognosis of gastroin-
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