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Dirección General de Educación Tecnológica Industrial

Centro De Bachillerato Tecnológico Industrial Y De


Servicios Número 253

Tema:
¿El tercer género?: La transexualidad

Alumnos:
Alondra Salimar Rivero Santín

José María Alvarado Baquedano

Erick Manuel Gutiérrez Méndez

Julieta Mariam Ramírez Gómez

Glendy Mariana Solís magaña

José Luis Ek Beltrán

Daniela Hernández Escobar

Carrera técnica:
Laboratorio Clínico

Profesora:
Lic. Rosario Gpe. Gonzales Solís

Asignatura:
Lógica

Fecha de entrega:
Lunes 09 de Octubre de 2017
Introducción

La transexualidad es una realidad social. Esta no es el tercer sexo tal y


como nos preguntamos en el título, sino cómo la persona se siente de un sexo u
otro, además, la manera en cómo pretende vivir el día a día con ese rol de género
y comportamiento; porque la identidad de género “Es un constructo social y
cultural que las personas internalizamos de diversas formas durante toda la vida
por imitación y observación construyendo a partir de ellos un autoconcepto
basado en atributos estereotipados” (Conway, Jill K y otras. El concepto de
genero 1996).

En diversas culturas, un tercer sexo es una opción más, es una persona que tiene
un género intermedio entre hombre y mujer, que tiene categorías de los dos
géneros o que no tiene características de un sexo determinado. Incluso, se puede
hablar de individuos que tienen la habilidad de cambiar de género.

De esta manera se garantiza el libre desarrollo de la personalidad y la dignidad de


las personas cuya identidad de género no se corresponde con el sexo con el que
inicialmente fueron inscritas. Todo esto es un proceso complejo y largo, por esta
razón, el resto de las personas deberíamos apoyar y respetar a las personas que
inician el proceso de cambio.

A menudo en charlas informales o formales, no se respeta la diferencia, ni la


realidad de muchas mujeres y hombres transexuales. Simplemente se falsea su
realidad, se “ofende a conciencia”, hasta se brutalizan las opiniones. Por tanto, las
expresiones, gestos y signos de transfobia, por desgracia, son constantes en
nuestra Sociedad y por este motivo, se produce en demasiadas ocasiones su
autoexclusión y su invisibilidad por miedo a las represalias sociales y laborales.

Esta transfobia puede destruir y encerrar la identidad sexual de las personas


transexuales, pudiéndoles llevar a procesos de baja autoestima y autodestrucción
(Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas 2008). Nuestra
sociedad tiene miedo a lo desconocido y lo rechaza, ejemplo de ello son las
diferentes actitudes de rechazo y discriminación hacia el colectivo de personas
transexuales, visualizadas en diferentes ámbitos sociales y proyectadas de
diferente manera-. Y frente a las personas transexuales se llega a generar
violencia verbal y física.
¿Transexualidad o tercer género?

La transexualidad como afirma la Sociedad Española de Endocrinología y


Nutrición, más concretamente el Grupo de Trabajo sobre Trastornos de Identidad
de Género: “La transexualidad no es un fenómeno, existe desde muy antiguo y en
diferentes culturas. El término transexual empieza a utilizarse en 1940 para
denominar a los individuos que desean vivir de forma permanente como
miembros del sexo opuesto y que quieren someterse a la cirugía de reasignación
de sexo sintiendo pues una incongruencia entre el sexo con el que nacieron y el
sexo al que se siente pertenecer. El sentimiento de pertenecer a un determinado
sexo biológico y psicológicamente se llama identidad de sexo o de género"

El concepto sobre el tercer sexo se inició en los años setenta, cuando una serie
de antropólogos describió las categorías de género en distintas culturales, en las
cuales había características de los dos géneros, en ese momento, las feministas
empiezan a defender la idea de la separación del sexo de una persona o un
género, es entonces cuando empieza a tirarse por tierra la idea de que un sistema
de sexo/ género fuera lo adecuado, ya que era la que existía en las normas
sociales bajo la heteronormatividad.

A diferencia de los travestidos, que alivian su conflicto vistiendo y comportándose


como el sexo contrario, los transexuales necesitan conseguir la reasignación al
sexo opuesto. Los transexuales buscan adaptar su cuerpo al sexo opuesto, al que
se sienten pertenecer. El tratamiento hormonal juega un papel importante en este
proceso, que idealmente debe suprimir los caracteres sexuales secundarios del
sexo original e inducir los del sexo opuesto lo más completa y rápidamente
posible.

El profesional médico endocrino supervisará la hormonación, que es esencial para


que se produzca el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios del sexo
que se siente y que deberá mantenerse el resto de su vida, ya que suplirá las
hormonas que producía su cuerpo y que después de las operaciones quirúrgicas
ya no podrá producir.
Vista biológica

En los animales que presentan un dimorfismo sexual, un pequeño número


de individuos de una población no se diferenciarán sexualmente en su desarrollo
en cuerpos típicamente masculinos o femeninos. Esto puede denominarse
hermafroditismo o (especialmente en humanos) intersexualidad. La incidencia
varía de una población a otra y también varía dependiendo en cómo se entienden
la masculinidad y la feminidad. La bióloga y teórica del género Anne Fausto-
Stirling propuso en un artículo de 1993 que sería más adecuado hablar de cinco
sexos en lugar de dos para describir los cuerpos humanos.

Sus denominaciones según la cultura

Por ejemplo, en la India o Pakistán, reciben el nombre de hijra; en Tailandia


se llaman kathoey. En Occidente, ha habido mucha controversia si las personas
intersexuales o transgénero se pueden considerar pertenecientes a un tercer
sexo, ya que hay muchas objeciones hacia esta idea.

Los miembros del tercer sexo más estudiados son los hijras, que se encuentran
en Bangladés, India y Pakistán, que suelen nacer con apariencia masculina o
intersexual, pero lucían vestuario femenino y no se solían considerar ni hombres
ni mujeres. Un 8% de las hijras visitan clínicas privadas para ser castrados,
solamente. Incluso, en el pasado año 2005 lograron que en la India se
reconociera la existencia de tres sexos en el pasaporte: masculino, femenino y
eunuco.

En la zona del Himalaya, tenemos a los gaddhi que han nacido mujeres y adoptan
el rol de sadhin, que implica renunciar al matrimonio, trabajan y visten como
hombres. En Tailandia, tenemos las Kathoey (en inglés, el término que se emplea
es ladyboy, o sea, "chico-dama") que ni se considera hombre, ni se considera
mujer. Un 50% de la población tailandesa considera que son varones cuya mente
no tiene que ver con su género y el otro 50% como mujeres que nacen en un
cuerpo equivocado.
La primera aparición del término en Europa fue en Inglaterra en 1700, con el
término "sodomita masculino", que eran varones afeminados.

Aceptación

Un paso muy importante, en su aceptación, fue en Alemania, el 1 de enero


del 2013: Los padres tienen derecho a no inscribir a sus hijos bajo un determinado
sexo u otro, al ir al registro civil. Pero, si una cultura nos adelanta en este
concepto es la indígena de América del Norte, que hablaban de individuos con
dos espíritus. Por ejemplo, las muxe zapotecas en México o los winkte dentro de
la cultura Dakota y era una identidad completamente reconocida. Aunque haya
personas con ideologías conservadoras a las que les cuenta entender la
existencia de personas diferentes, es algo que no es de nuestra época, que no se
lo ha inventado alguien esto es muy antiguo y no se puede negar.
Conclusión
En conclusión, el tercer género no es una enfermedad y es algo que debe
ser aceptado por la sociedad con normalidad pues esto ya existía desde la misma
creación del hombre y esto se da mucho más de lo que se puede ver. A nuestra
sociedad aún le falta pasar por varias etapas, ya que hay poca tolerancia hacia
las distintas formas de pensar, expresarse

Un tercer genero puede representar no solo la reasignación de uno si no el


intermedio entre hombre y mujer o bien ambos o ninguno o una categoría del todo
independientemente de lo masculino y lo femenino.

“No es una enfermedad, por lo tanto, no se cura. No es una elección, por lo tanto,
no se cambia. No es una moda, por lo tanto, no es estacional. No es externa, por
lo tanto, no se puede dejar de ser”

-Psicología CSM
Bibliografías

 http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=18101703  
 Conway, Jill K y otras. El concepto de genero 1996
 Nómadas. Revista Crítica de Ciencias Sociales y Jurídicas 2008
 http://activismolgbtiespiritual.blogspot.mx/2011/10/tercer-sexo.html  
 https://www.clarin.com/sociedad/hombre-mujer-tercer_sexo-
sexo_neutro_0_HyoBdI09Pmg.html 
 http://es.blastingnews.com/sociedad/2017/05/que-es-el-denominado-como-
tercer-sexo-001723861.html 
 https://elpais.com/sociedad/2013/08/19/actualidad/1376938559_453077.ht
ml 
 http://www.monografias.com/trabajos92/sexualidad-y-genero/sexualidad-y-
genero.shtml 
 http://es.catholic.net/op/articulos/20247/cat/1182/una-reflexion-sobre-la-
transexualidad.html 
 https://verne.elpais.com/verne/2017/01/31/mexico/1485834145_612368.ht
ml 
 http://www.eluniversal.com.mx/entrada-de-opinion/articulo/angel-gilberto-
adame/cultura/2016/12/17/el-tercer-sexo 

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