Está en la página 1de 6

Astrología – Nivel inicial

Hamida Eugenia Gabrielli

POLARIDADES
EJE TAURO-ESCORPIO

PALABRAS PARA TAURO Y ESCORPIO:


TAURO ESCORPIO Observaciones
VIDA MUERTE
INERCIA PODER
SUSTANCIA (no CONTROL Tauro es el signo de la sustancia de la cual emergen todas las
forma) formas. Por eso tiene que ver con lo plástico la sustancia. La
forma no es plástica, tiene un grado de estabilidad altísimo. La
forma es propio de Cáncer y Capricornio
MATERIA PULSIÓN
NECESIDAD OSCURO
ACUMULACIÓN NEGADO Tauro es acumulativo porque circula muy lentamente, si no hay
acumulación no hay combustible. Hay que acumular. El proceso
tiene que hacer masa.
APROPIACIÓN CONFLICTO La energía escorpiana implica un antagonismo, una
confrontación de opuestos, no en el sentido mental, sino en la
tensión afectiva que implica toda destrucción, presencia de
fuerzas divergentes.
INCORPORACIÓN DESTRUCCIÓN El hecho de que Tauro no sea forma hace que sea tan posesivo,
porque es incorporativo. Yo puedo distinguir fácilmente una
forma distinta de mi propia forma; pero, si se trata de una
sustancia, ésta forma parte de mí, es mi continuidad. Ojo: es
incorporativo y no es asimilación, esa es una palabra para Virgo
SENSUALIDAD RESUREECIÓN
CONTEMPLACIÓN FUSIÓN Hay que distinguir la contemplación taurina de la libirana. La
contemplación libriana es más visual mientras la taurina
involucra la totalidad de los sentidos.
PERCEPCIÓN CURACIÓN La percepción taurina es sensorial mientras la pisciana es
SENSORIAL extrasensorial
PROCESO INTENSIDAD
ORGÁNICO
PLACER - GOCE DOLOR
APEGO ABSORCIÓN
CONSERVADURISM LIBERACIÓN DE
O ENERGÍA
NATURALEZA EXCRECIÓN
QUIETUD - PAZ TRANSFORMACIÓN
INEXORABLE Lo taurino es del orden de lo inexorable, es una necesidad que
debe satisfacerse, en cambio la perserverancia es Capricorniana.
SEXUALIDAD

Observando el listado de palabras, el nivel de antagonismo parece evidente.

1- TAURO MATERIALIZA – ESCORPIO DESTRUYE LA MATERIA PARA LIBERAR ENERGÍA

Podríamos decir que el movimiento taurino implica incorporar materia, hay una intensidad propia
de la incorporación de la materia.

1
Astrología – Nivel inicial
Hamida Eugenia Gabrielli

Tauro es puro metabolismo, es un proceso de tomar energía, masticarla.


Todo ese proceso: desde que el pasto está afuera del Toro hasta que pasa por adentro y vuelve a
crecer afuera ¿eso qué es? ¿Tauro o Escorpio? Ni una cosa ni la otra.

El movimiento escorpiano: anhela liberar la energía que está encerrada en la materia. La atención
del polo escorpiano está puesta en la energía. Escorpio va y destruye para liberar energía
estancada, destruye una sustancia porque esta sustancia contiene una energía que no circula. Esto
es lo que hace un curador

¿Con qué se queda Tauro de esa transformación? Con lo vital.


Vida en el sentido de Vida orgánica. Hay energía afuera, la incorpora y la acumula.
Y en este proceso hay CRECIMIENTO, GOCE, PLACER, PAZ, CALMA. Incorporación, de cuerpo a
cuerpo: del pasto a la carne del toro, de éste al bife en la mesa.

La materia es energía condensada, de modo que para volver a obtener energía debemos destruir
la materia. Destruimos materia para que pueda volver a a haber energía.

Si soy psicoanalista, iré a la energía que está guardada en los recuerdos del que viene a verme. Esa
historia, las imágenes, el recuerdo, contiene energía capturada. El terapeuta destruye esa
organización de la energía, rompe esas relaciones de la memoria y trae a la superficie otra cosa.
Eso libera la energía que estaba subyacente. Ahí no se alimenta a sí mismo, sino que cura. Hay que
matizar un poco los supuestos acerca de Escorpio y ver esta otra parte.

El paciente, frecuentemente, luego de una de esas sesiones "fuertes" quedó deprimido por una
semana y luego, generalmente, renace, se pone mucho más vital. La energía que estaba en
Escorpio fue a Tauro.

Hay un ciclo de la energía entre los dos polos.

En este punto ya es bastante visible que esos dos polos son, en verdad, dos momentos de un
proceso. Hay un momento de materialización y un momento de destrucción de la materia. Es un
circuito en el que tanto Tauro como Escorpio son igualmente necesarios, es decir, ambos son
complementarios.

2- TAURO ESTÁ DENTRO DE ESCORPIO Y ESCORPIO ESTÁ DENTRO DE TAURO

Ya vimos que Tauro y Escorpio son complementarios, vayamos más allá para ver cómo cada uno
de los polos está dentro del otro:

TAURO TIENE ADENTRO ESCORPIO:


Recordemos la visualización de Tauro: está el toro comiendo su pastito, feliz, engordando, hay
quietud, placer, calma, pura vida (desde el punto de vista del toro). Esta misma escena desde el
punto de vista del pasto sería: pura muerte, destrucción Lo que ocurre es que cuando uno dice

2
Astrología – Nivel inicial
Hamida Eugenia Gabrielli

“Tauro” no incluye el punto de vista del pastito ni tampoco incluye que el toro también excreta lo
que come.

Vean cómo donde hay más vida tiene que haber más destrucción:
a- EN LA SELVA: que está llena de vida exuberante ¿sobre dónde camina uno en la selva? Sobre lo
podrido, todo el suelo de la selva está en putrefacción (ramas caídas, hojas muertas, frutos en
descomposición, humedad, etc.), y gracias a lo que se está pudriendo encontramos allí una
potencia vital extraordinaria. Los lugares donde hay más vida, es porque contienen más muerte.
b- SIEMBRA: El campo del granjero taurino que siembra maíz, lo logra gracias al “humus” que pone
en la tierra formado por bichitos en descomposición, bosta, etc.

c- EL CHEF: presenta la mesa con sus maravillosos platos con exquisitos olores, colores, sabores,
texturas, con una estética llena de gozo sensual. Pero vayan a la cocina del chef: sangre, desechos,
restos, putrefacción….

La polarización es justamente afirmar la belleza del plato de comida y negar la destrucción que
permitió esa belleza.

d- EL VINO: cuando tomamos un exquisito vino, lleno de aroma, sabor, color, cuerpo ¿qué estamos
tomando en realidad? Jugo de uvas podridas, pisadas, fermentadas. La bebida más deliciosa
proviene de la putrefacción. Y podríamos seguir con los yogures y los quesos…

e- VOLCÁN: La ceniza del volcán es lo más fértil que hay. Al principio destruye y deja todo yermo.
Pero luego, en el ritmo orgánico requerido, será el mejor de los fertilizantes. En la ladera de los
volcanes crecen los pastos más verdes y fértiles.

f- En la zona del cementerio más tradicional, la Recoleta, existen alrededor los restaurantes más
finos, o la Chacarita que tiene alrededor las mejores pizzerías. Es cuestión de clase social.

Es una cuestión energética que esos lugares se llenen de vendedores de alimentos. Como lo es, en
el mismo velorio, ponerse a contar chistes.

g- A nadie le gusta pensar en los intestinos de la persona que ama; pero están allí. La misma
belleza de ese rostro y ese cuerpo, tiene adentro ese proceso. Somos eso, todos. El problema es
no estar atentos a eso. Y nos perdemos la belleza de la totalidad porque estamos acostumbrados a
ver la belleza del fragmento. O sea, excluir el intestino, entre otras cosas. En consecuencia,
inventamos una belleza, un placer, un goce, que no es propio de la energía.

h- IGLESIA Y ABUNDANCIA ALREDEDOR:. Sin herir ninguna susceptibilidad religiosa, supongamos


que un marciano baja a la Tierra -es un marciano antropólogo-y le interesa entrar en los templos
de la religión más importante de occidente. ¿Qué energía registra como la más importante?

"Adoran a alguien que está agonizante y sangrando", informa a su astro-nave. El instructor de la


nave, que conoce los procesos de la energía, le dice, "fíjate entonces, porque esos templos deben
estar llenos de objetos preciosos, oro, etc., y los sacerdotes deben amar la buena mesa".
Por supuesto, como saben de energía, al escuchar un polo inmediatamente escuchan el otro. Es
natural: si la muerte está ahí, todo el tiempo presente, alguien o algo tiene que hacerse cargo del
otro polo. Pretender que el Vaticano distribuya sus riquezas mientras se siga adorando el crucifijo,
3
Astrología – Nivel inicial
Hamida Eugenia Gabrielli

es energéticamente absurdo. Tendrían, para esto, que adorar al Cristo resucitado: pura luz. Quizá
sería otra cosa.
En el celibato de los curas hay más polarización todavía, porque no pueden vivir la parte vital de la
sexualidad.
No podemos darnos cuenta de cómo una cosa está ligada a la otra.

i- En el crecimiento energético de algo: hay dolor de algunas partes que se destruyen para darle
paso a ese crecimiento. Algo dolerá, al menos en cierta zona. Cuanto más la conciencia lo excluya
y no lo considere como formando parte de un proceso vital, más se agranda y se fija. Nosotros
decimos "los procesos vitales no deberían causar dolor"; en realidad, confundimos dolor con
sufrimiento. El dolor forma parte de esto, pero porque habla de un proceso vital. Sufrimiento es
quedar absorbido por ese dolor, por eso es otra cosa.

ESCORPIO TAMBIÉN TIENE ADENTRO TAURO

a- En el eje Tauro-Escorpio hay además otro hecho interesante por el cual no se le hace fácil a la
conciencia acompañar el movimiento. Porque de los dos polos, Tauro es más fácil para la
conciencia. Porque, si fuera realmente Escorpio, la identidad profunda debería aceptar el hecho de
soltar absolutamente todo. Esto no es fácil para la conciencia.

b- ¿Por qué en la descripción tradicional de Escorpio aparecen las personas conflictuadas, llenas
de resentimientos, sufrimiento y odios? Es porque, psicológicamente, la mayoría de los
escorpianos son acumulativos. No sueltan nada.
Escorpio se maneja con la muerte -curadores, médicos, psicólogos- pero la tendencia psíquica es
acumular energía. Y esto es así, porque no es realmente Escorpio; acá aparece el polo taurino.

c- Si fuera realmente escorpiano, no habría retención del dolor y del conflicto; pasaría a través de
él. Pero cuando vemos a un "típico" escorpiano pegado a sus odios y resentimientos, pues bien, en
él está operando el aspecto de acumulación taurino. Noten que, hasta ahora, no veíamos en ese
rasgo escorpiano lo taurino; creíamos que era una característica pura del signo.

Para ser realmente de Escorpio, habría que confiar en que, soltando absolutamente todo, vuelve
la energía de tal manera que de nuevo se produce la acumulación vital.

Si estoy determinado por el lado escorpiano del proceso, estoy mucho tiempo en el lado de la
disolución y de la muerte. Reconozcamos que estructurarse desde ese lado es mucho más difícil
que hacerlo desde el lado taurino.

d- Cualquier persona de Tauro es Escorpio, en muchos momentos de su vida. Si vemos la carta de


Hitler, Robespierre o Lenin, los tres taurinos, vemos que resultan tan acumuladores que
finalmente son de Escorpio. La carta de Hitler es el hazmerreir de cualquier astrólogo porque es
Tauro-Libra, pero si miramos su vida vemos que esa energía está polarizada: Hitler luchaba porque
contaba con pocos recursos y no tenía espacio vital, como taurino luchaba por su espacio vital. Y
por supuesto, buscaba la pureza de la raza. Todo esto es propio del eje.

EN SÍNTESIS:
4
Astrología – Nivel inicial
Hamida Eugenia Gabrielli

 Acá ya podemos ver que Escorpio está totalmente implícito en Tauro. En principio no se lo
ve, porque no estamos viendo la totalidad. Separamos una cosa de la otra y ni siquiera vemos
la totalidad de lo que separamos. Las polaridades crecen en este terreno, el de la
fragmentación.
 No miramos todo sino que fijamos rápidamente algo, concentrándonos solamente en eso.
Excluimos automáticamente lo otro.
 Tauro y Escorpio son dos caras de la misma moneda, es el mismo proceso necesario, los dos
forman parte de un mismo eje. A la totalidad del proceso la denominamos con el nombre de
uno de los polos, con lo cual evidenciamos el anhelo de que uno sea superior al otro para así
eliminar el otro lado. Si la conciencia no fragmenta, no elimina, no excluye, si comienza a
mirar todo -y si lo mira durante el tiempo suficiente- comienza a ver el arco que hacen los dos
polos. Y que, extremando un polo, se llega al otro. Si uno quiere ir en una dirección, lo mejor
es ir a fondo en la opuesta. Cuanto más crece un polo, tarde o temprano genera el opuesto.
Esto es inevitable. El que no lo ha experimentado, es porque no observa bien lo que vive.
 En nuestra vida propia, constantemente se está muriendo algo. Y es maravilloso, santo y
bueno que así suceda. Terrible sería que no muriera nada.

Vimos que la energía que llamamos de Tauro y de Escorpio, son dos aspectos de la misma energía.
Emana de un mismo núcleo y en una dirección se la llama Escorpio y en la otra se la llama Tauro.
No es posible independizarlas. Cuando decimos por separado “Tauro” o “Escorpio” estamos
haciendo simplemente una abstracción mental.
Llegando al punto de tocar esta totalidad, nos aparece la palabra VIDA, en el sentido más amplio,
la vida que incluye la muerte y la destrucción de una manera liberadora. Toda vida que no incluya
a la muerte y a la destrucción de una manera liberadora, está entonces polarizada.

REFLEXIÓN SOBRE POLARIDAD:

Estamos redefiniendo una mirada, por lo tanto. A partir de ahora, aprenderemos a ponernos "del
otro lado" de la manifestación energética. Cada vez que veamos a un taurino gozando de su
comida, sabremos que al mismo tiempo que incorpora, está liberando energía. Porque, para poder
acumularla, tiene que liberarla por otro lado.
Por lo tanto hay un campo energético Tauro-Escorpio. Generalmente habrá un polo que
predomine y otro que sea pequeño.

A los seres vivientes del planeta, este ciclo de la Vida no les ofrece ningún inconveniente porque
saben instintivamente cuándo es el momento de un polo y cuándo el del otro.
A nosotros, los humanos, en cambio, cuando hay conciencia -y autoconciencia- suele haber temor
de completar el ciclo de la energía. Pero el ciclo de la energía es inexorable. La conciencia no
acompaña este movimiento.

Descubrir que somos seres oscilantes y que nuestra oscilación depende del campo vincular en el
que estamos, es algo que nuestra sociedad aún no permite. No somos los mismos con todas las
personas. La diferente composición energética hace que vayamos hacia un lado o hacia otro.

Es posible estar una etapa de la vida en un polo, acumulativo, de gozo, de placer, de crecimiento, y
luego entrar en otra etapa, de conflicto, lucha.
5
Astrología – Nivel inicial
Hamida Eugenia Gabrielli

Comenzar a mirarnos como seres de energía oscilante, nos hace dar cuenta de que hay ciertos
movimientos que nuestra conciencia no quiere hacer. Llega un momento en que se atora y
comienza a repetir cierto movimiento pequeño, en lugar de recorrer con toda la amplitud el
movimiento que el ciclo ofrece. En el lado escorpiano, nos quedamos masticando taurinamente
-con doble estómago- todo el dolor, el resentimiento, el conflicto.

Cuanto más la conciencia comprende el sistema que habita, lo acompaña y cambia.


Para que acompañe y se deje oscilar, la conciencia debería darse cuenta de la totalidad del
proceso. Allí comprende que, cuando se llega a un máximo de un polo, automáticamente viene el
otro. Pero la conciencia tiene miedo a quedarse en un solo polo.

La estructuración belicosa de nuestro ser básico -la vida es lucha - es porque no comprendemos
que el movimiento va de un lado al otro. No confiamos en el retorno de la energía, porque hemos
vivido muy poco la totalidad del proceso.

Hay distintos niveles de observación:


1- En primer lugar, ver que donde hubo mucho de un polo, habrá inevitablemente mucho del otro.
2-Luego, comenzar a observar cómo la conciencia no quiere, se resiste a pasar al otro polo.
Entonces, distorsiona su propia vivencia de cualquiera de los dos polos.

También podría gustarte