El problema que tiene la verdad en el mundo de hoy

En el hombre actual hay un problema que ya afecta a todos en general desde el

dirigente de un estado hasta el vendedor ambulante del mismo, pero como no puede
suceder esto si como ciudadanos tenemos la concepción de que los del alto mando son
los responsable de enseñar la verdad. El hombre se enfrenta en una posición en donde
es creída la mentira y rechazada la propia verdad, una mentira en donde se enlaza con
los propios sentimientos dejando el rencor por delante.

Muy a menudo se pretende mantener una separación tajante entre juicios de

hechos y juicios de valor, y se sostiene que los primeros no se discuten sino que se
comprueban, mientras que los segundos estarían abiertos a cualquier tipo de
interpretación y todas sus interpretaciones serían más o menos iguales.

“Para la conciencia natural, la verdad del conocimiento radica en la concordancia del contenido de la
idea con el objeto. A esta concepción la llamamos concepto trascendente de la verdad. Pero frente a él
existe otro que podía ser designado como concepto inmanente de la verdad. Para él, la esencia de la
verdad no se encuentra entre el contenido de la idea y un objeto que se halla fuera de nuestro
pensamiento, un objeto que trasciende nuestro pensamiento, sino en la relación con algo que reside
dentro del mismo pensamiento. La verdad es la concordancia del pensamiento consigo mismo. El juicio
es verdadero cuando estjá formulado con apego a las leyes o normas del pensamiento”. 1

Si tenemos ya una definición de la verdad y sabemos que viene o se forma en

nuestro conocimiento por qué pues el hombre miente y lleva esta mentira hasta el
extremo y un causa particular, lo miramos en los juzgados, hoy en nuestras cárceles
hay personas que están en ese lugar por una mentira, sabiendo que el acusado está
defendiéndose en la verdad no hay garantías para él ya que el acusador llegó en
primera instancia y logró que su mentira se convirtiera en verdad.

La situación de la verdad es un problema que reclama una solución rápida.

Nuestra práctica comunicativa se supone que nos debe llevar a una verdad pero no lo
estamos logrando y no estamos aprovechando el pensamiento de platón donde nos
afirma que la verdad se busca en comunidad, y es la misma comunidad que está

1
J. HESSEN, TEORIA DEL CONOCIMIENTO, Págs. 112, 113.
desechando la verdad, dando paso a una situación preocupante de poder salir
triunfador en alguna situación de la vida.

Si buscamos una verdad estaríamos en una búsqueda de la libertad pues nos lo

hace saber el mismo Jesucristo cuan nos afirma que la verdad nos hará libres, pero
libre ¿de qué? Si es tan normal ver que ya no se usa la verdad como lo decía al iniciar
este documento. Jesucristo nos afirma una libertad en la que todos seamos uno como
el padre es uno sin odios, sin rencores, sin divisiones por cosas mínimas cosa que
siempre han tenido soluciones y la solución era una verdad absoluta.

Lo que nos llevara a una verdad absoluta entonces sería que todos pensemos
en una sola verdad, una verdad que aleje de nosotros divisiones, una verdad en donde
todos pudiéramos dar nuestro propio punto de vista de una situación sin llegar a darle
otro sentido a favor nuestro. Mirando hacia pues el pensamiento de polo, es la verdad
la que encarga la tarea de pensar, por ende un mundo que está en verdad es un
mundo que tiene una concordancia de verdad.

“Esto puede probarse fácilmente si consideramos el idealismo lógico. Para él la verdad consiste en la
concordancia del pensamiento consigo mismo ¿en qué podríamos encontrar tal concordancia? La
respuesta es: en la ausencia de contradicción. Nuestro pensamiento concuerda consigo mismo cuando
está libre de contradicciones y sólo en este caso. La aceptación del concepto inmanente o idealista,
obliga necesariamente a la admisión de la ausencia de contradicción como criterio único de verdad”. 2

El hombre debe pues tener una verdad tan pura que no lo lleve a tener alguna
contradicciones que pueda afectar esa verdad que lleva en su vida. De ahí es que
debemos preguntarnos ¿la verdad ayuda al hombre? ¿El hombre pude vivir sin la
verdad? Estas simples preguntas dan su respuesta puesto que el mismo hombre que
redacta este documento y el que lo lee debe preguntarse automáticamente si ha
llevado la verdad por el camino de la libertad común.

Aunque hoy el término de verdad es muy azotado se puede rescatar en algunos

individuos que tienen el vivo deseo de no dejarlo morir. Todos podemos llevar la verdad
ya que no se nos pude quitar el don de pensar, si tenemos ese don debemos
aprovecharlo al máximo dejando que piense y descubra lo bueno que es la verdad.
2
J. HESSEN, TEORIA DEL CONOCIMIENTO. Pág. 116
 La objetividad de la verdad está maclada con el carácter público del
pensamiento, con el carácter solidario, social del lenguaje y con el carácter razonable
de la realidad. La comunicación interpersonal es el cauce mediante el que se establece
esa constelación de sentido. Por eso la verdad es lo más comunicable, por eso la
verdad es liberadora, por eso la verdad es lo que los seres humanos nos entregamos
unos a otros para forjar relaciones significativas entre nosotros.

Las verdades alcanzadas por el ser humano lo llevan a una superación como
persona, de este modo los seres humanos llegan al punto de encontrar una verdad
absoluta, dando respuesta con diversas evidencias a las distintas situaciones que se
presentan en el transcurrir de la vida, por este motivo tenemos a un ser humano que
tiene la capacidad de reaccionar en cada una de las diversas situaciones del mundo y
su búsqueda es incansable.

“La evidencia no es para ellos algo emocional, irracional, sino algo intelectual, racional. Significa
para ellos la visión inmediata de lo dado objetivamente. Esta evidencia se presenta como una evidencia
lógica u objetiva, en contraste con la evidencia psicológica o subjetiva anteriormente tratada. Pero esta
distinción no conduce al fin buscado. Los filósofos que la hacen no pueden menos de distinguir dentro
de la evidencia lógica u objetiva entre evidencia verdadera y falsa, real y aparente, auténtica y apócrifa.
Pero esto es abandonar la evidencia como propio y último criterio de la verdad. Pues ahora necesitamos
otro criterio que nos diga cuándo y dónde se trata de una evidencia verdadera y auténtica; y cuándo y
dónde, de una evidencia meramente aparente y apócrifa”. 3

No podemos tampoco quedarnos en solo las evidencias para demostrar la

verdad, tenemos que estar vigilantes para no dejar que decaiga y así llegaremos a esa
verdad total. Solo hay una verdad nos afirma san juan pablo II, en su obra (el hombre
frente a la verdad) y es esa verdad la que nos llevará muy lejos, descubriremos lo
mucho que podemos hacer a nuestro favor y en favor del otro en una sola verdad.

BIBLIOGRAFÍA

 J. HESSEN. TEORIA DEL CONOCIMIENTO.

3
J. HESSEN, TEORIA DEL CONOCIMIENTO. Pág. 119.
El problema que tiene la verdad en el mundo de hoy
 Jimmy junior landazuri sevillano

Seminario mayor la inmaculada concepción Girardot

Materia: epistemología
07 de octubre del 2016