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Nos indica de igual modo que los jóvenes integrantes de las barras, ven los
símbolos como el uso de las banderas, los uniformes y los cánticos como un todo
a favor de un equipo y que en ello se esconden aspectos como la territorialidad, la
violencia y la identidad y por medio de estos aspectos buscan legitimar en
algunas ocasiones los métodos violentos frente a un contrario.
Señala que los Barristas viven o ven el fútbol como un rito. Para ellos el
fútbol es su razón de vida, en donde la mayoría de las veces, ven el
espectáculo más con ansiedad que con razón.
De igual modo se debe realizar todos los esfuerzos necesarios para mantener un
diálogo permanente con los integrantes de las barras y que a partir de ese dialogo
se fortalezcan los procesos de reconocimiento de los barristas como actores, para
fortalecer sus barras como organizaciones sociales que trabajan en pro de sus
miembros adscritos desligándose definitivamente de las actividades que estén
fuera de lo legal.
¿Es una buena idea pertenecer a una barra brava?
Tu opinión
Además del hecho que muchos de estos muchachos que conforman estas barras,
encuentran en ellas, un espacio que les permite tener afectividad, tener
reconocimiento, amistad, lealtad, emociones, la posibilidad de tener una pasión
jugársela con algo y se lo dan las barras del fútbol, cosa que la mayor parte del
tiempo no se lo estamos dando nosotros como sociedad.
Tus argumentos
2. Las barras bravas son una pequeña comunidad dentro del estadio, en donde
no existe condición social, ni estrato, lo único que vale es estar allí para alentar el
equipo, todos gozan por igual.
3. Son jóvenes que quieren expresar su pasión deportiva y son espacios donde
existen sentimientos de amistad, de solidaridad y de lealtad y en donde los
jóvenes que integran las barras encuentran en el fútbol un medio efectivo para
conseguir una reivindicación social ya que se genera una conexión moral en
función del sentimiento de identidad hacia la barra y hacia el equipo.
1. Cuando se llega al punto de perder el respeto por la vida, tal como se ha visto
con algunos hinchas que se matan entre ellos, ya es algo por lo que se necesita
actuar al respecto.
2. Se considera ya como problemática que vas más allá del amor por la camiseta,
es visto como algo que tiene corrupción, delincuencia y drogas de por medio
Conclusiones
Algunas veces también por el afán de protagonizar, ya que sienten que no son
protagonistas incluso ni de su propia vida y que dicho protagonismo lo poseen
estos grupos.
¿El fútbol como refugio?
El fútbol es una de las más grandes pasiones, cada grito de gol es sinónimo de emoción y amor
por un equipo
El fútbol es sin duda alguna uno de los deportes que más simpatizantes o
aficionados tiene alrededor del mundo, al cual asisten toda clase de personas,
sean estos pobres, acomodados o ricos, por eso es que se dice que, este no tiene
ninguna distinción social. Sin embargo hemos visto como en los últimos tiempos,
la percepción de su espectáculo ha venido decayendo, debido a la violencia que
se ha venido presentando en los estadios y que muchas veces se ha trasladado a
otros escenarios fuera de lo deportivo.
Hoy por hoy este deporte reúne a un gran número de jóvenes que comparten
entre sí ideas, gustos, identidades y necesidades en torno de un equipo fútbol. El
fenómeno de las barras en Colombia es gigante, y aunque son más conocidas por
sus desmanes y atropellos, no todo es malo. Algo con lo que no están de acuerdo
algunos miembros de las mismas barras es el título de “Barras Bravas”. Algunos
proponen, más bien, el término 'barristas'.
Cada equipo tiene como mínimo una barra que los alienta o acompaña siempre en
cada partido, pero considero que no todas son barras bravas, las barras en sí, no
son siempre lo que parecen: Turbas enloquecidas y desorganizadas que
sólo quieren hacer daño. Para mí con el paso del tiempo han ido convirtiéndose en
un distintivo de los equipos y del mismo fútbol. Suele decirse que las barras de
fútbol surgen como respuesta a la pérdida de referentes tradicionales, como el
Estado, la religión o la familia. En este sentido, la agresividad de los barristas sería
parte de su frustración ante las promesas incumplidas de la sociedad.
En mi opinión asistir al estadio es una de las mejores terapias que puede existir
para olvidarse del estrés y de los problemas que se tienen. Cuando se acude a los
partidos, se reúne gente de los diferentes sexos, de todas las religiones, de todos
los estratos sociales solo con un fin, apoyar, ver y disfrutar de su equipo favorito,
sea el que sea. Esta es una manera de divertirse muy sana que no le hace daño a
nadie si se sabe manejar y siempre está al alcance del bolsillo de casi todos.
Es entonces permitido decir que las barras se convierten para quienes asisten a
las mismas en más que una familia, un espacio donde coinciden ideales en pos de
un mismo fin y donde a la persona le es permitido una liberación de sus tensiones,
todo en búsqueda de mantener el símbolo de unión y victoria en que se convierte
el equipo amado.
Desde mi experiencia personal sin las Barras se pierden casi todo lo que a
muchos hinchas nos gusta de ir a la cancha. Cuando uno va a la cancha se siente
como protagonista, siente que juega el partido, que el aliento le llega al jugador,
sentimos que cuando uno canta, se destroza la garganta y si se gana el partido
nos sentimos como que también ganamos el partido por ello.
Sin embargo desde mi óptica opino que los equipos de Futbol no necesitan de una
barra brava como tal, sino más bien necesitan de su hinchada que los apoye en
todo momento, no que lo perjudique, nadie con dos dedos de frente quiere a su
lado alguien que resta y más si tenemos en cuenta que el Club sobrevive del
hincha que paga su entrada, del socio entre otros.
En este orden de ideas también es válido señalar a favor de las barras que hoy
muchas de ellas no son factor de solo Violencia sino por el contario, estas se
encuentran aportando a la sociedad desde una esfera social y cultural como Por
ejemplo, Los de Sur, de Atlético Nacional, crearon una escuela de fútbol para
niños con la idea de formarlos en valores y conocimientos; llevan a cabo un
concurso de literatura; y participan en más labores sociales. Los Comandos
Azules de Millonarios en Bogotá, han organizado conciertos con grupos de cumbia
argentina. También la Guardia Albirroja Sur de Santa Fe está pronta a sacar un
disco al mercado con la ayuda de un programa financiado por la Alcaldía.
Es muy conocido el nombre del programa Goles en Paz, tal vez más conocido por
el Padre Alirio López quien lo dirige. El programa empezó en 1999 y actúa en
varias localidades y busca educar a los jóvenes; capacitarlos, hacer talleres y
educarlos. Todo esto enfocado a fortalecer la paz.
En Medellín está el proyecto Hinchas por la Paz, iniciado por Wilmar Herrera, que
también trabaja por la paz en los estadios y entre las barras. Se enfoca en la
educación, en el uso de la no violencia y en fomentar la convivencia. Según
Herrera, a muchos jóvenes es necesario enseñarles cosas básicas como que las
drogas son malas entre tantas otras cosas.
Como conclusión a todo lo expuesto hasta aquí podríamos indicar que los jóvenes
pertenecientes a estas Barras encuentran en la misma un medio efectivo para
conseguir un reconocimiento social importante, encontrando la posibilidad de
integrarse como individuos presentes y determinantes dentro de un contexto
social.