Universidad de San Carlos de Guatemala

Facultad de Ingeniería

Escuela de Ingeniería Mecánica Industrial

Practicas Intermedias “C”

INGA. YOCASTA IVANOBLA ORTIZ DEL CID

Impacto Ambiental y Social generado por el Covid-19 a nivel

Nacional y Centroamericano

Stuardo Jose Davila López

201700967

Guatemala 02 de abril del 2020

 Introducción

Cuando nos referimos a un tema o de algún suceso que paraliza al mundo

entero se entiende que este tiene un impacto social, económico y ambiental
demasiado profundo. Pero para entender a que se refiere esto, es necesario
saber que es cada impacto.

El impacto social es un cambio significativo y positivo que aborda un desafío

acuciante. Impacto social, a menudo, se entiende como como los efectos en las
personas y comunidades que ocurren como resultado de una acción, actividad,
proyecto, programa o política.

Una forma común de pensar sobre el impacto social es considerarlo como el

cambio que ocurre para / a las personas como resultado de una acción o
actividad.

En este contexto, el impacto social tiene que ver con la contribución positiva
que las organizaciones (públicas o privadas), pueden hacer a las comunidades
locales en las que operan.

El impacto ambiental se refiere a los efectos sobre el ecosistema causados por

los seres humanos al modificar el medio ambiente. Cuando las condiciones del
medio ambiente cambian o aparecen nuevas condiciones, estas afectaran los
sistemas ecológicos, incluyendo la vida humana.

El ser humano ha explotado desde siempre la naturaleza para su beneficio. El

uso de los recursos naturales, la transformación de bosques en parcelas
agrícolas, el desplazamiento de comunidades de seres vivos para el
establecimiento de fábricas y ciudades involucran alteraciones del medio
ambiente.
 Impacto Ambiental y Social generado por el Covid-19 a nivel Nacional y
Centroamericano

La vida como la conocemos ha cambiado drásticamente de la noche a la

mañana como resultado del coronavirus. Alrededor del mundo se han tomado
diversas medidas para desacelerar el aumento exponencial de las infecciones y
reducir la presión en la capacidad de los sistemas de salud para atender estos
casos. En las últimas semanas, muchos países han incrementado sus
esfuerzos para adoptar medidas de distanciamiento social tales como cierre de
escuelas, limitaciones a grandes congregaciones de personas, y cierre de
fronteras. Estas medidas son algunas que han tomado especialmente
Guatemala y los demás países de Centroamérica para hacer que la
propagación de la enfermedad disminuya y se tenga un impacto controlado de
los efectos que la enfermedad provocara en las sociedades.

Es difícil calibrar ahora hasta qué punto la COVID-19 va a transformar los

fundamentos con los que hemos venido operando hasta este momento. Lo que
sí sabemos es que la devastación de la epidemia es cierta, que la respuesta
implicará un esfuerzo de envergadura posbélica y que el impacto será percibido
de manera muy diferente de acuerdo con el país en el que vivamos, en nuestro
caso Guatemala.

Principalmente se observa un impacto social, el cual es evidente que el

comportamiento de las personas está cambiando rápidamente. Aunque esto
puede ser parcialmente explicado por el miedo, el deseo de evitar el contagio, o
un compromiso personal para ayudar a reducir la propagación de la
enfermedad,

El aislamiento, el distanciamiento físico, el cierre de escuelas y lugares de

trabajo son desafíos que nos afectan, y es natural sentir estrés, ansiedad,
miedo y soledad en estos momentos.

Con el trabajo, las escuelas, los gobiernos, las iglesias, los deportes y los
eventos especiales que toman medidas dramáticas para frenar la propagación
del coronavirus, las rutinas diarias se ven interrumpidas y el aumento del
aislamiento social es una desafortunada realidad. Sabemos que debemos
lavarnos las manos, desinfectar superficies y practicar el distanciamiento social
para proteger nuestra salud física durante la crisis actual de COVID-19.

Cuando a principios de enero se conoció que algunas personas estaban

enfermas en China por un nuevo virus surgido en el mercado de animales de
Wuhan, nadie imaginó que dos meses después la enfermedad llegaría a más
de 100 países en todo el mundo y sería declarada pandemia por la
Organización Mundial de la Salud. Así, y en línea con las últimas
recomendaciones de adoptar medidas drásticas y se ataque en conjunto la
proliferación del virus, el distanciamiento social se presenta como una práctica
para reducir el contacto cercano entre las personas y frenar la propagación del
virus.

El distanciamiento social nos lleva a ser solidarios, porque el que se cuida a los
demás. Es decir, no tener una vida social como la habitual supone hacer un
bien a uno y un bien a los demás. En este contexto no dar un beso, no dar un
abrazo o no tener una charla presencial es una prueba de amor y cuidado.

Las medidas de distanciamiento social pueden causar una reducción

significativa en la actividad física durante el período de confinamiento y
conducir a un aumento de la mortalidad prematura. De hecho, algunos estudios
ya apuntan a un descenso de entre un 20 y un 30% en el ejercicio entre la
población. La actividad física es muy importante para la salud física y mental,
incluyendo el sistema inmunitario. El desarrollo de ejercicio en el hogar puede
mitigar algunos de estos efectos.

Con el objetivo de promover la actividad física, se han producido llamamientos

para realizar actividades físicas en familia como parte de los programas de
confinamiento en el hogar. Aunque es razonable, la pregunta es cómo
incorporar esta medida sin aumentar el riesgo de contagio..

La paradoja de este momento es que, si bien se requiere un distanciamiento

social para contener la propagación del coronavirus, el aislamiento social
también puede contribuir a la mala salud a largo plazo.

La sociedad guatemalteca es una cultura de interacción e intercambio. La

limitación de estas actividades sociales nos produce malestar que según cada
persona se va a manifestar de diferentes formas. Para algunos como irritación,
aburrimiento y ansiedad, y para otros como falta de aire, sensación de encierro
y molestias corporales

La soledad y el deterioro de la salud mental, problemas ya existentes en las

ciudades, también pueden aumentar debido al distanciamiento social y al
confinamiento en el hogar. Además, para muchos de los problemas mentales
existe una distribución desigual en la sociedad y es importante tomar medidas
para mitigar los impactos para los grupos más vulnerables.

Esta pandemia también ha puesto a prueba a el liderazgo de los gobernantes

en todo el mundo. Cada gobierno ha adoptado cursos de acción distintos, y en
algunos casos han evolucionado con el correr de las semanas. Los medios de
comunicación han dedicado casi enteramente su atención a las decisiones y
medidas implementadas; es prácticamente el único tema en agenda. Sin duda,
la manera en que se tomen las decisiones y el comportamiento de los
dirigentes políticos durante esta crisis tendrá un efecto claro sobre la
percepción de los votantes acerca de la capacidad de gestión y colaboración
versus obstrucción de las elites políticas, algo que podría constituir un criterio
de evaluación por parte de la ciudadanía en el futuro.

Además del daño directo que puede llega a causa la enfermedad, lo división
que crean los medios de comunicación hacen que la sociedad encuentre
posturas divididas al momento de la toma de decisiones por parte de los líderes
políticos encargados de manejar la situación.

En la época “moderna” en la que nos encontramos las redes sociales juegan un

papel importante para la sociedad, ya que este es uno de los medios masivos
en donde se dan a conocer muchos de los acontecimientos que se realizan en
el país. Pero debido a situaciones adversas, muchas veces la información que
se comparte por medio de estas es total o parcialmente falsa, por lo que
muchas veces la sociedad cae en un punto crítico y comienzan los
enfrentamientos.

Estos enfrentamientos han aumentado notablemente con la aparición de la

pandemia en nuestro país. Esto ha creado un ambiente de incertidumbre y de
duda en un sector de la población. Haciendo que nuestra sociedad cree una
brecha mayor en las creencias con respecto a la información de la enfermedad.

Por otro lado, la pandemia ha tenido un fuerte impacto en el medio ambiente.

Este impacto es uno de los efectos indirectos pero positivos de esta pandemia
inédita. Las restricciones a las actividades económicas, así como el cierre de
industrias y el confinamiento poblacional ha permitido una sorprendente caída
de la contaminación ambiental que se daba en los países centroamericanos.

Como es de conocimiento mundial, China fue el primer país en disminuir sus

índices de contaminación ambiental, esto debido a que fue el primer país
afectado por la pandemia. Pero en nuestro país se logra ver una reducción
considerable en la contaminación. Luego de varios días de aislamiento social,
los cuerpos de agua muestran una mejoría perceptible en ellos, se puede
observar en el casco urbano un incremento en las especies de aves y gracias a
la poca circulación de vehículos la contaminación de aire ha disminuido.

Además de los beneficios para la salud, estas drásticas medidas de prevención

han causado una enorme disminución del tráfico por carretera y de la actividad
industrial -70-80% o más-, que a su vez puede haber resultado en reducciones
significativas en las emisiones de CO2 y en la contaminación del aire.

A pesar de estos signos de recuperación ambiental. Más aún, que la

reanudación de las actividades económicas e industriales sea particularmente
contaminante. Otros países podrían aumentar sus demandas de actividad
industrial, por el momento en un nivel bajo, para reactivar lo antes posible la
actividad económica.

Sin embargo, el tema del coronavirus es muy serio y eso no va a cambiar en el

corto plazo, sin embargo, el impacto ambiental es positivo. Esta reacción a un
problema tan grave, como el aislamiento social y el movimiento limitado de los
consumidores, ha hecho más por el medio ambiente que años de campañas
ambientales.
En los países centroamericanos, que cuentan con una flora y fauna muy
abundante, se espera que esta situación ayude a que el medio ambiente logre
proliferar y pueda mantenerse en una mejor manera debido a todas las
restricciones que se mantiene en cada país.

Debido a toda esta situación también se sufren consecuencias del cambio

climático por el cual ha estado atravesando el mundo a lo largo de la historia.
En días recientes, en el territorio guatemalteco, se han experimentado lluvias
torrenciales acompañadas de granizo. Lo cual es muy atípico en esta
temporada del año. En Guatemala se acostumbra a tener un clima con
temperaturas altas, esto debido a que el país se encuentra en época de
verano.

Con un “respiro” como el que se esta presentado en el territorio nacional, se

espera que el medio ambiente pueda descansar un poco de la explotación que
se le da en el país. Se espera que la deforestación y la contaminación de
cuerpos acuáticos disminuya considerablemente, además de la poca
contaminación que se vive en los espacios industriales del país.

Esto se trata de una buena noticia para el clima, pero esta drástica reducción
de la contaminación atmosférica también es beneficiosa para los seres
humanos. Al reducir los contaminantes que causan muchos problemas
pulmonares, también se reduce el riesgo de mortalidad por infección de
coronavirus.
 Conclusiones

La mejor herramienta ante el de Covic19 es la prevención, el control y la

respuesta oportuna, ignorar los efectos puede ser perjudicial. La campaña de
preventiva masiva y presentar los detalles de las medidas de prevención, salva
vidas y beneficia a toda la sociedad.

El cese a las actividades humanas regulares le ha proporcionado al ambiente

un cambio favorable al darle momentos de paz. Se han disminuido las
actividades que perjudican al mismo. Los índices de contaminación han
disminuido considerablemente no solo en Guatemala, sino también, en los
países de la región centroamericana. Esto ayudando a que el planeta tome un
respiro y la naturaleza pueda ser libre. Esto nos ayudara mucho en el futuro,
pero también se corre un riesgo al momento del cese de la pandemia. Se
espera que la actividad humana se reincorpore de una manera alarmante,
haciendo que la contaminación sea mas de lo habitual para tratar de reponer la
crisis que se avecina.

La sociedad se ha visto afectada no solo psicológicamente, sino que, en los

temas de salud física y mental se corre un gran riesgo. Esto se debe a las
medidas que han tomado los gobiernos de los países centroamericanos. Estas
medidas se han tomado para prevenir el contagio y proliferación de la
enfermedad, pero cuenta con efectos colaterales. En momentos como estos se
espera que la sociedad se una, como siempre lo ha hecho. Como sociedad
guatemalteca debemos hacer un llamado a la paz, a la empatía y al
solidarismo. Debemos demuestra que somos una sociedad unida y que juntos
podremos vence todos los obstáculos a los que nos enfrentemos.