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Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018 • ISSN 1666-8987 • Nº 14.

350 • AÑO LVI • ED 276

Director:
Guillermo F. Peyrano
Consejo de Redacción:
Gabriel Fernando Limodio
Daniel Alejandro Herrera
Nelson G. A. Cossari
Martín J. Acevedo Miño

D i a r i o d e D o c t r i n a y J u r i s p r u d e n c i a

La compensación económica en el divorcio NUEVO CÓDIGO CIVIL Y


por Alberto Jorge Gowland COMERCIAL DE LA NACIÓN
Análisis doctrinarios,
cia de su infracción, y consecuentemente, cualquiera pue­ comentarios y apostillas
Sumario: I. Aproximaciones. – II. Los presupuestos. – de iniciar un divorcio de carácter unilateral o consensuado.
III. Comparación con figuras afines. – IV. Ámbito tem- Pero quien inicia la demanda debe saber que si no ha ofre­
poral. – V. De la naturaleza jurídica. – VI. Conclusión. cido en el convenio regulador una compensación económi­ y ahora sí hablamos de “divorcio por mutuo consenti­
ca, muy probablemente, al producirse la contestación del miento”, que antes algunos llamábamos “por presentación
Una de las novedades que trajo el Código Civil y Co­ traslado de la demanda, se encuentre con que se la están conjunta”, y en esta presentación se incluye necesaria y
mercial de la Nación, en materia de derecho de familia, reclamando, y con más probabilidad aún, descubrirá que obligatoriamente la “propuesta reguladora” que prescri­
fue la “compensación económica” (en adelante CE), ins­ puede ser considerado deudor de una suma significativa, be imperativamente el art. 438, y en esta no se incluye
titución que hemos sabido importar del extranjero y que fijada conforme a criterios que no dejarán de sorprenderlo. la CE o, más claro aún, se la excluye expresamente, lle­
genera algunas perplejidades a la hora de desentrañar su Volviendo a la apuntada incoherencia del sistema, se­ gamos a la conclusión necesaria de que, salvo hipótesis
naturaleza jurídica y determinar su procedencia en los ca­ guramente producida por falta de claridad del instituto, cuasi inexistente de un acuerdo con salvedades al respec­
sos concretos. advertimos que muchos de los reclamos se basan –erró­ to, la compensación económica no rige en el divorcio por
Desde ya adelanto que me cuesta decir que no estoy de neamente– en la “inocencia” de la o el reclamante, y en la presentación conjunta con convenio regulador incluido y
acuerdo con ella, pues no niego que, en algún caso, su apli­ “culpa” del también “inocente”, y eventual iniciador del consensuado. Tengamos en cuenta que el art. 439 dispone
cación puede resultar procedente, justa, equitativa o conve­ divorcio. El repudiado abandono voluntario y malicioso y que el convenio regulador debe contener la CE. Quedará al
niente. Pero adelanto, también desde ya, que en términos el denostado adulterio aparecen desde debajo de la mesa y intérprete decidir si la omisión de la propuesta importa el
generales no resulta una figura simpática y es difícil sentir­ se instalan como supuestos fundamentos del instituto. Es acuerdo de las partes sobre la improcedencia de esta o si
se cómodo con ella, ya que es francamente extraña a nues­ verdad que no son el verdadero argumento, ya que, frente quedará abierto el camino para un reclamo posterior.
tras costumbres matrimoniales, aun las más novedosas. al texto del art. 441, será necesario acreditar como condi­ Este modesto razonamiento, siempre a modo de aproxi­
ción sine qua non el “desequilibrio económico”, pero, sea mación, nos lleva a concluir que no se trata de un instituto
como argumento de impacto, sea porque en el fondo se de orden público, ya que depende de la voluntad de las
I
cree que hay que castigar al incumplidor y resarcir alguna partes acordarlo o no. El art. 442, cuando dispone que, a
Aproximaciones
culpa, por más derogado que se encuentre, lo cierto es que falta de acuerdo sobre el tema, el juez deberá determinar
Primera aproximación. Lo primero que salta a la vista el que se aparta ingenuamente pensando que su libertad la procedencia y el monto de la compensación económica,
del observador es la incongruencia entre el instituto que sexual o su derecho a reconstruir su vida son inocuos y refuerza la idea.
nos ocupa y la supresión de toda idea de culpa, con la que recuperar su habilidad nupcial es gratuito debe tomar Tercera aproximación. Coherentemente con lo expues­
eliminación de las causales de divorcio, y de los deberes cuidado y tener en cuenta que puede tener que “compen­ to precedentemente, si el convenio no es consensuado y
jurídicos que un esposo tenía hacía el otro, cuyo incumpli­ sar” a quien fuera su cara mitad, por el desequilibrio que alguno de los esposos lo pide, y el otro lo resiste, y hay
miento daba lugar a un ilícito, y consecuentemente, dicho su grito de libertad haya generado. Y que el mentado dese­ un juez que deba resolver el diferendo, es que hay un es­
ilícito generaba responsabilidad y habilitaba la acción por quilibrio llegará sazonado de algunas imputaciones a su poso “desequilibrador” y otro que fue “desequilibrado” o
divorcio y sus consecuencias para quien resultara culpable conducta conyugal, entendida en términos hoy inexistentes perjudicado en el deseado equilibro. La noción de “causa
del fracaso matrimonial. legalmente. objetiva”, cuando hay una parte que tiene que compensar
En el régimen actual, no existe la culpa, solo hay algu­ Lo cierto e importante, a fin de cerrar esta primera y otra que es compensada por una conducta que generó
nos deberes “morales” y es muy poco clara la consecuen­ aproximación, es que ni la doctrina ni la jurisprudencia un “desequilibrio objetivo”, no termina de convencerme.
consideran que la CE debe guardar relación alguna con la Esto me preocupa, pues se acerca a la idea de culpa que,
Nota de Redacción: Sobre el tema ver, además, los siguientes tra- culpa, es pues –pese a las salvedades indicadas– indepen­ con mayor o menor fundamento, creíamos haber relegado
bajos publicados en El Derecho: Alimentos sentenciados o convenidos
antes del divorcio: ¿caducidad o subsistencia?, por Esteban Mazzinghi
diente de toda idea de culpa. al olvido. Evidentemente, si la CE va a prosperar es por­
(h.), EDFA, 53/-9; Reforma del código civil: deberes matrimoniales y ré- Segunda aproximación. Antiguamente se decía “no hay que uno de los esposos no fue suficientemente solidario,
gimen de divorcio, por Agustina Cagnasso, EDFA, 55/-19; Los efectos divorcio por mutuo consentimiento”, luego pasamos por atento o previsor, para evitar que los roles elegidos por su
del divorcio en el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación, por el art. 67 bis de la ley 2393, por el caso “Sejean”, por el matrimonio generaran una desigualdad de posibilidades
Agustín Sojo, EDFA, 61/-10; Deber de asistencia posterior al divor- futuras en caso de divorcio. Este, el que prosperó, tendrá
art. 336 del cód. civil, y llegamos al actual art. 437 del
cio. Coexistencia sucesiva: alimentos y compensación económica, por
Nahuel Bay, EDFA, 64/-20; El régimen patrimonial del matrimonio en cód. civil y comercial que dispone que el divorcio tiene que pagar por su falta de previsión que descolocó al otro al
el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación, por Agustina Cagnas- por causa la voluntad unilateral de uno de los esposos o la momento del divorcio.
so, EDFA, 71/-8; Los daños y perjuicios producidos en el matrimonio decisión conjunta de ambos. El art. 436 refuerza la idea de Ignoro si la idea es formular un nuevo “deber matrimo­
frente al sistema de divorcio incausado, por Josefina Bonifacio Costa, la nulidad de todo pacto, cláusula o condición que limite nial” de mantener el equilibrio de posibilidades para evitar
EDFA, 73/-17; Divorcio en Argentina: desprotección del cónyuge víc-
tima de un daño extrapatrimonial, por José Luis Báez y Martín Andrés
el derecho a ejercer la voluntad de divorciarse. las consecuencia de una eventual ruptura. Es decir, me
Flores, EDFA, 78/-12. Todos los artículos citados pueden consultarse en Ahora bien, si el divorcio depende del consentimiento pregunto, ¿el desequilibrio objetivo al momento de la cri­
www.elderecho.com.ar. o de la voluntad de solicitarlo, y la voluntad es común, sis matrimonial tuvo un responsable, o bien fue producto
CONTENIDO
DOCTRINA
La compensación económica en el divorcio, por Alberto Jorge Gowland..................................................................................................................................................... 1
Robos y hurtos: ¿diccionario o legislación?, por Julio Chiappini................................................................................................................................................................. 3

JURISPRUDENCIA
Federal
CUENTA Nº 13.547

Daños y Perjuicios: Situación extracontractual: perito que sufre una caída en remolcadores propiedad de la demandada; responsabilidad; presupuestos; relación causal. Prue-
ba: Carga de la prueba: eximente de responsabilidad; culpa de la víctima o hecho de un tercero; características; art. 1113 del cód. civil; riesgo o vicio de la cosa; factor
objetivo de atribución; riesgo creado; escalerilla en la cubierta de un buque; principio de autorresponsabilidad; no configuración; indemnización; incapacidad sobrevinien-
te; determinación del monto. Daño Moral: Situaciones en las que se presume: reparación; determinación de su cuantía. Intereses: Daños y perjuicios: tasa; cómputo (CNCiv. y
Com. Fed., sala II, octubre 31-2017)................................................................................................................................................................................................... 4

CASA
ARG OPINIONES Y DOCUMENTOS
INCUCAI crea el Programa de Donación Renal Cruzada, por Laura Belén Yachelini..................................................................................................................................... 8
C
2 Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018

de un acuerdo –expreso o tácito– o tuvo otra causa? Vol­ nanciales, y tener a la vista el patrimonio que les pertenece Tienen un cierto parentesco con la CE, al punto de que
veremos sobre el rol del reclamante en torno a la situación a los cónyuges con carácter de bienes propios, pues pare­ la ley expresa que no proceden en favor de quien recibió
matrimonial desequilibrante. Tengamos en cuenta que la ce difícil poder medir el carácter “manifiesto” del dese­ la CE. La exclusión es razonable, pues técnicamente desa­
CE debe estar causada, además del desequilibrio por el quilibrio, o aun determinar si este existe, sin conocer la parecería la falta de medios o de recursos propios para la
empeoramiento de la situación, sobre todo por el vínculo totalidad de la realidad de la conformación del patrimonio subsistencia. La CE excede el alcance que podría otorgarse
matrimonial y su ruptura. de las partes. En mi opinión, la CE no es una forma de a los alimentos de extrema necesidad, que se limitan a lo
Cuarta aproximación. Otra vez sobre el consentimiento compensar hijuelas desparejas en la liquidación de bienes necesario para la subsistencia. Por cierto, es claro que para
y la autonomía de voluntad: a) los futuros esposos pueden comunes, pero es imposible fijarla sin conocerlas. la procedencia de la CE no es necesario el estado de ne­
elegir si van o no a efectuar convenciones matrimoniales, si b) “Empeoramiento de la situación”: es una calificación cesidad que requerían estos alimentos excepcionales. Sin
van a optar por el régimen de separación de patrimonios o el de desequilibrio económico, pues la ley dice “desequili­ embargo, no debería descartarse la posibilidad de incluir
de comunidad, con el sistema de comunidad como residual. brio económico que signifique un empeoramiento de la en esta categoría solidaria la CE, ampliado el supuesto de
La pregunta es si al hacer la convención matrimonial situación”, esto es, que no basta que exista el desequili­ la extrema necesidad cuando esta fuese consecuencia del
podrán o no pactar que no existirá CE. De hecho parecería brio, sino que este debe haber empeorado la situación del grave desequilibrio manifiesto.
lógico que, si pueden pactar que los bienes que adquieran reclamante. Por ejemplo, si la otra parte alcanza un desa­ b) Con los alimentos: ciertamente han desaparecido los
durante el matrimonio serán propios de quien los adquirió, rrollo económico extraordinario al tiempo del divorcio, alimentos posteriores al divorcio por las numerosas razo­
todo hace pensar que pueden pactar que no existirá com­ y el reclamante tenía una situación económica personal nes que no repetiremos, sin embargo, y a pesar de que se ha
pensación alguna en caso de divorcio. razonable, la mera diferencia entre el crecimiento de la dicho que la CE es incompatible con la prestación alimen­
b) También parecería claro que podrían pactar lo con­ otra parte con la situación del reclamante no bastaría para taria convencional entre excónyuges, llama poderosamente
trario, esto es, que la compensación en caso de divorcio, otorgar la CE, pues su situación económica no empeoró, la atención que las pautas que se establecen para la fijación
para uno de ellos, será de determinado monto o con deter­ sigue igual. La diferencia entre al desarrollo económico por el juez de la CE, en el art. 442, sean virtualmente las
minado bien, y el argumento sería el del art. 442, pero en entre uno y otro, por sí sola, no bastaría para reconocerle mismas que se establecen para fijar los alimentos en el art.
ambos casos que planteamos habrá de tenerse en cuenta el el derecho a la accionante. Sin duda no sería automática, 433. No puede dejar de pensarse que, si son idénticas las
art. 447 que prohíbe otro pacto que no sea la elección del requerirá pedido de parte y prueba. pautas para fijar una y otra pretensión, estas tendrán que ser
régimen. Téngase en cuenta que se trata de un empeoramiento a o idénticas o similares entre sí. La distribución de los roles
Pareciera una curiosa prohibición de “pacto sobre futu­ partir de la ruptura, lo cual exige una comparación entre desempeñados durante el matrimonio, criterio que habría
ro divorcio” que no puedo pactar en el origen al contraer la situación previa y la resultante de la ruptura, pero, co­ sido ya desarrollado por la jurisprudencia alimentaria y es
matrimonio, pero si puedo pactar al divorciarme. Esto es, mo hemos dicho, no bastaría la diferencia, aun manifiesta, contemplado hoy en los incisos a) y d) del art. 433, aparece
no podría pactar inicialmente en la convención matrimo­ entre una y otra situación si no empeoró la situación del también reproducida en los incisos d) y e) del art. 442.
nial cuál sería la CE en caso de divorcio. No estaría permi­ reclamante. El tiempo dirá como se va configurando la CE y si los
tido prever el “desequilibrio futuro” y cómo compensarlo. También se ha dicho(1) con relación a este punto que el planteos de reclamo se desprenden de la idea de culpa o
No parece una interpretación razonable. La ley me faculta instituto no persigue igualar patrimonios, de modo que no responsabilidad subyacente, que eran presupuestos de la
a elegir el régimen de bienes al que me someteré, desde es una compensación en el sentido de igualar patrimonios obligación alimentaria posterior al matrimonio en el régi­
el origen del matrimonio, pero no podría pactar las con­ hasta donde alcance el de menor cuantía, sino que es una men anterior.
secuencias de una eventual ruptura ni prever el eventual compensación de otra índole, y esto –precisamente– es lo c) Con el daño moral: recordemos que este fue recono­
desequilibrio. Como la convención matrimonial se puede que estamos tratando de desentrañar. cido en el divorcio por jurisprudencia plenaria(2) y luego
cambiar cuantas veces se desee, durante el matrimonio, Parece oportuno señalar que la CE no guarda relación calificado más específicamente, concediendo una indemni­
cabe preguntarse si se podrá acordar la CE, durante este o alguna con la situación anímica o moral de la parte recla­ zación a quien, como consecuencia de la gravedad excep­
al momento de la separación de hecho. mante, pues se trata de un planteo meramente económico. cional de las causales de divorcio incurridas por el cónyu­
c) Siempre sobre el consentimiento, ¿tendrá valor el Esto es así en teoría, pues, del mismo modo en que se ge, había sufrido un desmedro en su dignidad o su psiquis­
consentimiento tácito, por ejemplo, el de la mujer cuando introduce la culpa en los planteos de reclamo, se advierte mo, una afrenta moral de extrema gravedad; tales como la
renuncia a su desarrollo profesional y elige la vocación que a menudo se incluye una descripción de la situación falsa imputación de homosexualidad de una esposa que
hogareña, o tendrá que exigírsele que lo haga expresamen­ anímica de la parte reclamante, real o supuestamente cau­ obligó a medidas de prueba de descargo humillantes para
te?, y aun así, suponiendo un inusual pacto expreso, ¿po­ sada por la ruptura. el esposo, entre otros muchos casos que, partiendo de la
drá retractarse al momento del divorcio si advierte que hay Lo dicho no deja de ser contradictorio con las pautas a condena por un ilícito matrimonial reconocido por la sen­
desequilibrio económico que la perjudica? tener en cuenta por el juez (art. 442, inc. c]), en la medida tencia, indemnizaban una afección moral adicional sufrida
d) En la misma línea, todo hace pensar que puede ser que la situación anímica derive en enfermedad y transite por la parte inocente debido a la extraordinaria gravedad
“ella” (por ejemplo) la que consintió expresa o tácitamen­ el difuso camino y la borrosa frontera entre la tristeza, el de la conducta en que había incurrido el culpable.
te, quien pida el divorcio unilateralmente con la CE invo­ desánimo y la enfermedad psíquica. No va a ser fácil dis­ En el divorcio actual no hay culpables, por ende, no
cando el art. 441 y, en tal caso, ¿cómo juega la doctrina de tinguir los presupuestos para la procedencia de la CE de debería haberlos en la CE, y de hecho no los hay. Si no
los propios actos? ¿o no juega en el caso? Quien consintió, las pautas fijadas para determinar su monto. Sospecho que hay culpables, la asimilación al daño moral es imposible.
expresa o tácitamente, renunció a su profesión o empleo, van a tender a confundirse, y la jurisprudencia va a tener la El ejercicio legítimo de un derecho no puede dar lugar a
se dedicó a las tareas del hogar, y luego, además de su par­ difícil tarea de enmarcarlas. indemnización alguna. Salvo el abuso. Pero, en este deli­
te en los gananciales, reclama se le compense económica­ c) “Causa adecuada al vínculo matrimonial y su ruptu­ cado tema de medir desigualdades económicas o desequi­
mente porque advierte que hay un desequilibrio entre las ra”: tampoco resulta sencillo analizar este requisito, apa­ librios, se filtra una tendencia a convertir lo objetivo en
situaciones o posibilidades económicas, que han mejorado rentemente, se ha querido decir que el desequilibrio se ha subjetivo y esto conlleva un alto riesgo de injusticia.
su situación, ¿tiene un reclamo justo? debido producir por causa del matrimonio, y su ruptura d) Con los daños y perjuicios: la asimilación a los ca­
conduce a ponerlo de manifiesto. Algo así como imaginar sos de obligación de reparar el daño causado es imposi­
II que la persona siguiera soltera, con su profesión, ingresos ble cuando no se ha realizado acto dañoso alguno, ni se
Los presupuestos y realización en el mundo, a todo lo cual renunciara al ha incumplido una obligación, ni incurrido en ilícito de
casarse, y luego, al producirse la ruptura de la unión matri­ ninguna especie. Por otra parte, el consentimiento del pre­
Partimos de la base de que el matrimonio es un proyec­ monial, aparece el desequilibrio, quedaría en una situación sente damnificado libera de responsabilidad por los daños
to de vida en común, definición casi orteguiana, que supo­ de inferioridad por “causa del matrimonio”. (art. 1720), y queda descartada también la responsabilidad
ne cooperación, vida en común, respeto al deber moral de Sin tener la certeza de estar interpretando correctamen­ objetiva (art. 1723), pues el “deudor” no debía obtener
fidelidad y asistencia recíproca (art. 431). te, se vislumbra una concepción peyorativa de la institu­ ningún resultado terminado.
Dijimos que, si hay común acuerdo en la propuesta re­ ción y vocación matrimonial, que por cierto no se compar­ La CE no es, pues, asimilable a un reclamo de daños
guladora, que incluye la CE, debidamente consensuada, y te. Tampoco está claro que la “causa” sea el matrimonio y y perjuicios, lo cual no implica que no pueda analizarse
este acuerdo cae en el ámbito de la autonomía de la volun­ no la decisión voluntaria de la o el contrayente en cuanto algún tipo de responsabilidad civil por hechos ocurridos
tad, debemos concluir que, en este caso particular, los pre­ al rol que decide ocupar.
supuestos del art. 441 podrán o no existir, todos o alguno durante el matrimonio o su ruptura, pero no será invocan­
(art. 439), y que la CE corresponderá, pues así está pactada. da la CE del art. 441.
En cambio, si no hay acuerdo, exista o no propuesta III Por ello, la CE no puede ser fuente de resarcimiento, ni
distinta entre actor y demandado (art. 438), ante un pedido Comparación con figuras afines pretender garantizar el nivel de vida que se tenía durante
para que el juez se pronuncie, deberán concurrir las causa­ el matrimonio, no puede ser abusiva ni prolongarse dema­
a) Alimentos de extrema necesidad: se los ubica en el siado en el tiempo.
les del art. 441, a saber: a) “desequilibrio manifiesto”; b) art. 434 como los alimentos posteriores al divorcio, ya que
que este signifique un “empeoramiento de la situación”; Augusto César Belluscio piensa que la indemniza­
no hay alimentos posteriores al divorcio o la separación de ción de daños entrará por vía indirecta, atento a la ampli­
c) que este empeoramiento tenga “por causa adecuada el hecho como efecto propio de estos casos (art. 432).
vínculo matrimonial y su ruptura”. tud de pautas que deben tomarse en cuenta para fijación de
Se trata entonces, como lo establecía el régimen ante­ los montos(3). Habrá de tenerse muy en cuenta la predic­
a) “Desequilibrio manifiesto”: por cierto que serán los rior, de los alimentos debidos por un principio de solidari­
jueces los encargados de desentrañar cuando el desequi­ ción ilustre civilista pero, a nuestro juicio, ello desborda
dad matrimonial, aún entonces independientes de la culpa, el marco del instituto que nos ocupa, cuyos límites, por
librio ha sido “manifiesto”, pero en torno al tema se han
debidos a quien no tuviera recursos propios ni medios o cuanto, y ya lo hemos dicho, son bastante difusos.
planteado algunos interrogantes y algunas precisiones.
posibilidades para procurárselos.
Sin duda, se trata de una pauta abierta a la apreciación (2) CNCiv., en pleno, 20-9-94, ED, 160-162.
judicial, pero adelantamos, desde ya, que supone haber (1) CApel.CC Mar del Plata, sala II, sentencias del 18-11-16 y del (3) Belluscio, Augusto C., El matrimonio en el Proyecto de Refor-
realizado la liquidación y partición de la comunidad de ga­ 1-12-16, en idéntico sentido. mas, RDPyC, Rubinzal-Culzoni, 2012-2, pág. 183.
Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018 3

IV Ugarte sostiene que tiene carácter indemnizatorio, de


Ámbito temporal fuente legal, por daño objetivo(5). Solari dice que es una FONDO EDITORIAL
institución sui generis, destinada a proteger al integrante
No podría reclamarse durante el matrimonio, pues pre­ más débil(6).
cisamente tiene por causa la ruptura de este y el divorcio. También se ha dicho que intenta facilitar el comienzo
Queda a salvo la posibilidad de que pudiera pactarse al de una nueva etapa, aspiración loable, pero de muy difícil
tiempo de modificar las convenciones matrimoniales du­ María Elisa Petrelli
determinación, y que no termina de definir la naturaleza (coordinadora)
rante la vigencia de este. del instituto.
Tiene un plazo de caducidad breve, seis meses a partir de De ningún modo creemos que se pueda hablar de enri­ Manual de derecho
la sentencia de divorcio, lo que estimamos correcto, y algo quecimiento sin causa por parte del aportante del sustento de familia
nos dice sobre la situación de necesidad, ya que se presumiría del hogar frente a quien se dedicó a las tareas propias de ISBN 978-987-3790-51-5
que, si no se reclama dentro de los seis meses, esta no existi­ este, renunciando tal vez a un desarrollo profesional indi­ 456 páginas
ría. Aquí vuelve a emparentar con los alimentos del art. 434. vidual.
Y, por último, habrá de cuidarse mucho, sobre todo en
V ciertos planteos judiciales recientes, de caer en el abuso de
De la naturaleza jurídica derecho, siempre partiendo de la premisa básica de que el
Siempre intentando aproximarnos a desentrañar la na­ ejercicio legítimo de un derecho no puede constituir en ilí­
turaleza jurídica de este nuevo instituto, vemos que Gui­ cito ningún acto, y que parece muy difícil, sin alterar la Venta telefónica: (11) 4371-2004
llermo J. Borda sostiene: “La compensación económica concepción clásica del matrimonio, que se pueda considerar Compra online: ventas@elderecho.com.ar
es un instituto totalmente nuevo en nuestro derecho, pero abusiva la conducta de quien ha sido un consorte diligente, www.elderecho.com.ar
de aplicación en numerosos países del continente europeo económicamente exitoso, que ha sostenido el hogar familiar
(…) España, Francia, Italia, Suiza, Alemania…”. Y agre­ y, eventualmente, formado una sociedad conyugal, si se me so, mal delineado, y con dudoso basamento jurídico. He­
ga: “Este instituto tiene naturaleza exclusivamente asisten­ permite la antigua expresión, patrimonio este que se dividi­ mos señalado lo que no es y lo que debe ser, y prevenido
cial”. Más adelante, citando a Javier Santiso, expresa: rá por mitades. Ello por más que la posición económica de sobre su indebida utilización.
“Pareciera que con dicha compensación, de alguna manera uno al momento de la ruptura sea superior a la del otro. Nos preocupa que introduzca la conflictividad en un
se pretende reparar el daño que se ha producido con el di­ terreno donde precisamente se ha procurado evitarla.
vorcio, lo que lleva a pensar que la compensación importa VI A nuestro juicio, es una institución de carácter total­
una suerte de indemnización”. De lo expuesto preceden­ Conclusión mente excepcional, de interpretación sumamente restrin­
temente se desprende que no compartimos esta última ca­ gida y ciertamente extraordinaria, fundada exclusivamente
racterización de la CE, pero las diferencias en la doctrina A lo largo de estas “aproximaciones” hemos tratado de en la equidad.
desnudan la falta de claridad del nuevo instituto(4). acercarnos a la naturaleza jurídica de un instituto impreci­
VOCES: DERECHO CIVIL - FAMILIA - MATRIMONIO - SO-
(4) Ver Borda, Guillermo J., Código Civil y Comercial comentado, (5) Ugarte, Luis A., La Ley, 8-6-15. CIEDAD CONYUGAL - DIVORCIO - ALIMENTOS -
2ª ed., J. M. Curá (dir.), La Ley, t. II, autos 401/445. (6) Solari, Néstor E., Derechos de las familias, LL, 2015, pág. 95. CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL

Robos y hurtos: ¿diccionario o legislación? No obstante, se ha opinado que “las cantidades en la ley
deben escribirse en el texto en letras y luego en núme­
ros ubicados entre paréntesis”(4). Versión que sigue, urge
por Julio Chiappini
apuntar, el art. 5º, inc. b), de la ley 24.967 (digesto jurídico
argentino). Que elucida: “En caso de error, se tendrá por
“Robar” viene del latín rapere, metátesis de arpere, arre­ válido lo expresado en letras”. Un dislate. Los errores son
Sumario: 1. El Código Penal argentino. – 2. La tra- batar. Palabra que, a su vez, proviene del sánscrito har, inconcebibles en las leyes. La norma, tomada de los pa­
dición italiana. – 3. Conclusiones. “coger”. En griego, harpatol, “yo agarro”. peles de comercio, quiso decir “en caso de contradicción
entre letras y números”, cosa distinta.
Nuestros códigos y leyes, en general, se contentan con
1 2 expresar las cantidades con palabras. De todos modos con­
El Código Penal argentino La tradición italiana vengamos, aunque desde luego no hay ninguna obliga­
En los arts. 162-163 bis establece los hurtos y los hurtos Desconoce el robo y emplaza lo que nuestro derecho ción, en que lo más didáctico y facilitador de la lectura son
calificados. En todos los casos, el delincuente se abstiene estatuye como tal en una sola figura: hurtos calificados. los números arábigos(5).
de ejercer violencia en las personas o en las cosas. En el Esto así tanto en el código de 1889, en el que colaboró La reseñada tradición italiana deriva del derecho roma­
robo, en cambio, arts. 164-167 bis, debe haber “fuerza en Carrara aunque ya anciano y ciego, como en el de 1930. no imperial que estatuyó hurtos y hurtos agravados(6).
las cosas o violencia física en las personas”. Bien que, Algunas legislaciones acogieron esa terminología. El
en rigor, debió escribirse al revés: primero las personas art. 240, inc. 1º, del cód. penal colombiano establece: 3
y luego las cosas. La ley ha de lucir un concierto lógico “Hurto calificado. La pena será de seis (6) a catorce (14) Conclusiones
en las enunciaciones. Además, mejor suprimir el adjetivo años si el hurto se cometiere: 1. Con violencia sobre las
“física”. cosas”. En los códigos de habla hispana, lo correcto consiste en
La terminología que emplea nuestro ordenamiento, re­ Es cierto que en el código de 1936 la figura se emplazó, diferenciar los delitos de hurto y robo so pena de incurrir
tomamos, condice con la semántica “oficial”. Pues hurtar autónoma, como robo. Pero en el ordenamiento actual, en un defecto semántico. Ya que no hay razones para dejar
significa “tomar o retener bienes ajenos contra la voluntad sancionado en 1980, el tipo se ubicó entre los hurtos agra­ de lado el diccionario.
de su dueño, sin intimidación en las personas ni fuerza vados. Explican Arboleda Vallejo y Ruiz Salazar: Lo ideal consiste en que las palabras sean a la ley cual
en las cosas”(1). El legislador penal, salvo una poderosa “Recoge con ello el legislador la crítica doctrinaria que el número respecto al matemático. Claro que, como todo
razón a la vista, es mejor que respete las nociones castizas. no encontró mayores razones para convertir en figura au­ ideal, es un imposible por definición.
Incluso en el derecho comparado, en general, impera la tónoma, el hurto agravado por la violencia. Y también la Este principio se excepciona cuando la propia ley de­
distinción entre el hurto y el robo, en cuanto el robo es con crítica jurisprudencial, por la seria incidencia procesal, de fine un instituto. Verbigracia, los arts. 77 y 78 de nuestro
violencia sobre las personas o las cosas, no así el hurto. El esta separación, que acarreó frecuentes nulidades en razón código.
diccionario también observa esa diferencia: “Robar. Quitar de la errónea calificación jurídica de la infracción, por los Mientras, el legislador penal es el más aristocrático (del
o tomar para sí con violencia o con fuerza lo ajeno”(2). diversos criterios interpretativos que suelen presentarse en griego aristós, “los mejores”) de todos. Ya que escoge los
las instancias”(3). bienes que halla más excelsos para la sociedad y les con­
Nota de Redacción: Sobre el tema ver, además, los siguientes tra-
En cuanto a la técnica legislativa, en el listado de hurtos fiere la máxima protección posible. Que es la penal.
bajos publicados en El Derecho: El apoderamiento de una señal de
cable puede ser hurto o robo, por Julio E. Chiappini, ED, 243-906; El agravados resultaba preferible un concierto lógico. Desde VOCES: DERECHO PENAL - DERECHO PENAL ESPECIAL
hurto calificado por escalamiento, por Julio E. Chiappini, ED, 262-832; ya, y como sugerimos recién, deparar preeminencia a las - DELITO - DELITOS CONTRA LA PROPIEDAD
El hurto de un vehículo náutico dejado en aguas públicas es calificado, personas sobre las cosas. Y personas víctimas se advierten, - HURTO - ROBO - CÓDIGOS - DERECHO PENAL
por Julio E. Chiappini, ED, 266-665; Un caso (tal vez) de lesiones graves por ejemplo, en los incs. 2º y 4º del art. 240. Ese tipo de COMPARADO
y hurto calamitoso, por Julio E. Chiappini, ED, 269-30; Un caso de robo
consumado con cuchillo (arts. 166, inc. 2º, y 44 del cód. penal), por
casos debió encabezar la disposición.
Julio E. Chiappini, ED, 264-51; El hurto de energías y servicios, por Julio Respecto del monto de las penas, bastaba con escribir (4) Leiva Fernández, Luis F. P., Fundamentos de técnica legislativa,
E. Chiappini, ED, diario n° 14.332 del 20-12-17; El recurso del fiscal en “seis” y “catorce”. Reiterar entre paréntesis y con núme­ Buenos Aires, La Ley, 1999, notable monografía, pág. 288.
perjuicio del imputado es constitucional. El concepto de banda a los ros la cantidad parece una actividad innecesaria. La ley (5) Generalidades en Chiappini, Julio E., La reiteración de cifras: una
fines de la calificación del robo, por Julio E. Chiappini, EDPE, 09/2017- deficiente redacción del Código Penal, EDLA, 2016-A-689.
también debe aplicar la navaja de Occam. Que ya desde
5. Todos los artículos citados pueden consultarse en www.elderecho. (6) Mommsen, Teodoro, Derecho penal romano, Bogotá, Temis,
com.ar. hace un tiempo (en el siglo XV) rasura todo lo superfluo. 1976, pág. 477. Los romanos llamaban furtum a casi todos los delitos
(1) Real Academia Española, Diccionario de la lengua española, contra la propiedad, bien que elucidando en cada caso. Marciano, por
Madrid, 2014, t. h/z, pág. 1207. (3) Arboleda Vallejo, Mario - Ruiz Salazar, José A., Código Penal ejemplo, denominó a la estafa furtum invito domino: Chiappini, Julio E.,
(2) Ibídem, pág. 1929. comentado, Bogotá, Leyer, 2017, pág. 1082. El delito de hurto de uso, Bogotá, Leyer, 2017, pág. 87.
4 Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018

6 – El fundamento del riesgo creado como factor de atribución 13 – Si bien el caso de autos debe resolverse a la luz de lo dis-
JURISPRUDENCIA supone la introducción en la comunidad de alguna situación puesto por el art. 1113 del cód. civil, lo cierto es que también
Daños y Perjuicios: (uso de cosas) que potencia o multiplica la posibilidad de que
resulten perjuicios, es decir, agrava el peligro de dañar y con-
corresponde hacer lugar a la pretensión si se analiza la con-
ducta de la demandada desde su actuación negligente. Ello
Situación extracontractual: perito que sufre vierte la posibilidad en una seria probabilidad; por lo tanto, es así por cuanto la caída sufrida por el actor al intentar
una caída en remolcadores propiedad de la si se produce un hecho lesivo, es justo que asuma responsa- traspasar de un buque a otro mientras realizaba una peri-
bilidad quien ha generado ese riesgo especialmente intenso. cia lleva a ponderar no solo el déficit de seguridad con que
demandada; responsabilidad; presupuestos; Este aumento de potencialidad dañosa disminuye la seguri- contaba la escalera del remolcador, sino además la eviden-
relación causal. Prueba: Carga de la prue- dad de la que podían gozar los demás y esta incertidumbre te displicencia del encargado del buque al permitir que una
no debe ser padecida sin remedios jurídicos: la situación pe- persona de avanzada edad como era el accionante –setenta y
ba: eximente de responsabilidad; culpa de ligrosa debe asumirse a riesgo propio de quien la introdujo y seis años– emprendiera tal conducta, con irrelevancia de que
la víctima o hecho de un tercero; característi- no a riesgo ajeno. contara con conocimientos navales específicos, pues ellos re-
sultan ajenos a las limitaciones propias de la edad, que fácil-
cas; art. 1113 del cód. civil; riesgo o vicio de 7 – Una escalerilla colocada en la cubierta de un buque, sin
mente pudieron ser advertidas por quien era el responsable
ningún tipo de sostén a los costados (barandas, pasamanos,
la cosa; factor objetivo de atribución; riesgo etc.) para reducir la posibilidad de caída de quien la fuera
de la empresa demandada y permitió ese traspaso. Súmese
a lo antedicho que, si –a estar a los dichos de la demanda-
creado; escalerilla en la cubierta de un buque; a utilizar, resulta determinante para que esa cosa pierda su
da– ni siquiera era necesario el traslado del perito hacia el
condición de inercia y se transforme en riesgosa, en los tér-
principio de autorresponsabilidad; no confi- minos del art. 1113 del cód. civil. Súmese a ello que no puede
segundo remolcador, resulta incomprensible que se generara
una situación riesgosa para la seguridad de los sujetos que
guración; indemnización; incapacidad sobre- prescindirse, en el análisis de la cuestión, de que semejante
no se justificaba con la labor que los expertos iban a realizar,
viniente; determinación del monto. Daño objeto se encontraba colocado en la cubierta de un buque,
sin que resulte óbice a ello el “Certificado Nacional de Segu-
cuya superficie acuática le quita de por sí la estabilidad que
Moral: Situaciones en las que se presume: podría encontrarse si se tratara de una base firme.
ridad de la Navegación” acompañado en autos para avalar
las condiciones de seguridad del buque, pues en la medida
reparación; determinación de su cuantía. In- 8 – Para responsabilizar por las cosas, no es requisito su mo- en que este instrumento solo da cuenta del “estado satisfac-
tereses: Daños y perjuicios: tasa; cómputo. vimiento. Las cosas inertes pueden perjudicar cuando, me-
cánicamente pasivas, han sido causalmente activas. Esto se
torio” en que se encontraba el buque motor, la colocación
de elementos ajenos, como podría ser la escalera para tras-
1 – La situación que involucra al accionante con la demanda- verifica toda vez que su anormal situación circunstancial crea ladarse a un remolcador amarrado, excede los términos de
da, derivada de la caída sufrida por aquel en remolcadores la probabilidad y consecuente previsibilidad de una contin- certificación expuestos en ese documento.
de propiedad de esta última, mientras realizaba tareas en ca- gencia nociva. En el caso de autos, al tratarse de una esca-
lidad de perito que le fueran encomendadas en un expedien- 14 – Con relación a la incapacidad sobreviniente (daño físico y
lerilla colocada en la cubierta de un buque sin ningún tipo
te, debe ser analizada en el campo extracontractual. En esta psíquico), esta debe ser apreciada computando la situación
de sostén a los costados para reducir la posibilidad de caída
órbita, cabe recordar que la responsabilidad del sujeto queda actual de la minusvalía económica en que la víctima quedó
de quien la fuera a utilizar y la necesidad de asistir con la
comprometida cuando se configuran los siguientes presupues- frente a la vida. Su resarcimiento ha de ser determinado si-
mano a quien pretendiera traspasar de un buque a otro,  se
tos: el incumplimiento del deber general de no dañar a otro guiendo un criterio flexible que pondere el conjunto de todos
colige que si para cumplir con su finalidad o dar seguridad
(arts. 19, CN y 1109, cód. civil), la imputación jurídica de los elementos demostrativos de la concreta influencia negati-
se requería de la cortesía de otra persona a fin de obtener
este en razón de su culpa o dolo, o de alguno de los factores va de la minoración física de la víctima en el campo laboral
estabilidad en el pasaje de remolcadores, no quedan dudas
objetivos que prevé el ordenamiento legal, el daño sufrido por y en las actividades de esta con contenido económico, sin que
de que la escalerilla, por sí misma, resultaba riesgosa, lo que
el acreedor y la relación causal entre ese incumplimiento y el sea necesario aferrarse a cálculos matemáticos respecto de
lleva a considerarla impropia para su destino.
daño antes referido. Basta que uno de esos recaudos fracase los eventuales ingresos del reclamante durante su probable
para que el demandado quede exento de responsabilidad civil 9 – La culpa de la víctima (o la invocación del hecho del terce- vida laboral útil. Para tal fin, deben valorarse su edad, condi-
por las consecuencias de su actividad. ro) con aptitud para cortar totalmente el nexo de causalidad ción social, económica, familiar, actividad y capacitación la-
entre el hecho y el perjuicio al que alude el art. 1113 del cód. boral, estado civil, etc.; así como también el efecto producido
2 – No alcanza con comprobar que un hecho ha sido antecedente civil debe aparecer como única causa del daño, aparte de re- sobre el damnificado en sus distintos aspectos vitales.
de otro para considerarlo su causa eficiente. Para ese fin, es vestir las características de imprevisibilidad e inevitabilidad
menester que tenga, por sí mismo la virtualidad de producir 15 – En episodios como el de autos, en el que el actor, a raíz de
propias del caso fortuito o fuerza mayor.
semejante resultado; es decir, que el hecho haya provocado el un evento imputable a la demandada, sufre daños y secuelas
desenlace dañoso por virtud de su propia potencia generadora. 10 – El art. 1111 del cód. civil regula el “principio de auto- incapacitantes, el daño moral surge in re ipsa; es decir, que
rresponsabilidad”, el cual implica que el damnificado debe surge inmediatamente de los hechos mismos. Establecer su
3 – Incumbe a quien pretende ser resarcido –como imperativo asumir las consecuencias de su obrar negligente o impru- monto es una de las tareas más arduas del sentenciante y, si
de su propio interés– la carga de comprobar tanto la existen- dente. De esta forma, el codificador dispuso que el hecho de bien no hay parámetros estrictos para ese fin, tampoco puede
cia del perjuicio cuanto su vínculo causal con la conducta desplegar conductas imputables a la propia incuria de quien pregonarse que se cuenta con una absoluta discrecionalidad
de la persona a la que se atribuye su producción; sin em- reclama opera como eximente de la responsabilidad acha- para hacerlo.
bargo, en algunas oportunidades, la ley únicamente admite cada al demandado, es decir que, cuando se presenta este
que el demandado se libere demostrando la intervención de 16 – Al monto de condena establecido en concepto de incapaci-
supuesto, se confunde a la persona del agente dañador con la
una causa ajena. Tal es el supuesto de la responsabilidad por dad sobreviniente y daño moral, la condena deberá adicio-
del damnificado dañado; sin embargo, para que la conducta
daños derivados del riesgo o vicio de la cosa que dispone el narle intereses a la tasa activa que percibe el Banco de la
de la víctima desligue al dueño o guardián de la cosa del de-
art. 1113 del cód. civil, en virtud del cual se presume, iuris Nación Argentina en sus operaciones de descuento a treinta
ber de responder, es necesario que el “perjuicio” sufrido por
tantum, la relación de causalidad; por lo tanto, salvo prueba días, plazo vencido. Esos intereses deben comenzar a correr
ella reconozca su causa-fuente en la acción u omisión que se
en contrario de la eximente a cargo del demandado, su res- desde el día del accidente, toda vez que en ese preciso instan-
le imputa.
te quedaron configurados como daños definitivos; por ello,
ponsabilidad queda configurada.
11 – No se advierte el grado de incidencia causal que pudo haber el cálculo debe arrancar desde la fecha del evento dañoso
4 – A pesar de la divergencia planteada por los contendien- tenido el calzado atribuido a la víctima, cuando la demandada productor del perjuicio y hasta su efectivo pago. M.M.F.L.
tes en cuanto al modo en que se suscitó el desafortunado reconoce que el elemento desde el cual cayó el actor contaba
59.720 – CNCiv. y Com. Fed., sala II, octubre 31-2017. – F., V. S. O.
accidente y a que la dinámica de este tampoco ha quedada con medidas para evitar un posible deslizamiento al ser utili-
c. Trans Ona SAMCIF s/daños y perjuicios.
establecida, en la medida en que las apreciaciones formula- zado. En tal escenario, como los hechos que se atribuyen a la
das por los testigos presenciales del hecho no resultan coin- víctima no aparecen con entidad suficiente como para incidir En Buenos Aires, a los 31 días del mes de octubre de
cidentes entre sí, lo cierto es que, ya sea que el actor cayera causalmente en la generación del evento dañoso, no queda 2017, se reúnen en Acuerdo los señores jueces de la Sala
al subir el segundo escalón, el último peldaño o al intentar más que desechar el planteo formulado por la accionada en II de esta Cámara para dictar sentencia en los autos del
saltar de un buque a otro –ambos de propiedad de la deman- cuanto a la corroboración de la eximente de responsabilidad epígrafe. Conforme con el orden de sorteo efectuado, el
dada–, corresponde concluir que existen pruebas suficientes invocada con fundamento en el art. 1111 del cód. civil. doctor Alfredo Silverio Gusman dice:
para dar por acreditado el nexo causal entre el accidente
sufrido por el accionante, mientras realizaba tareas en cali-
12 – Corresponde revocar lo resuelto en la anterior instancia en I. A fs. 682/684 obra la sentencia del Juez de la anterior
cuanto desestimó la responsabilidad de la demandada en el instancia, en la que se rechazó la demanda por daños y
dad de perito que le fueren encomendadas en un expediente
accidente padecido por el actor, pues resulta errado el tem- perjuicios promovida por S. O. F. contra Trans Ona Sam­
–reconocido por ambas partes–, y los perjuicios derivados de
peramento asumido por el juez a quo, en la medida en que cif. El actor imputó a la demandada responsabilidad en
esa caída. Ello es así, pues tanto el perito psicólogo como la
atribuyó a la víctima la carga de la prueba y rechazó la de- los términos del artículo 174 de la Ley Nº 20.094, por las
perito médico atribuyeron, respectivamente, al referido acci-
manda con fundamento en la ausencia de producción de la lesiones que dice haber padecido con motivo del acciden­
dente secuelas incapacitantes psicológicas y médicas, por lo
pericia naval, sin advertir que uno de los encuadres jurídicos te sufrido el día 12 de febrero de 2007, mientras intentó
que, aun considerando que el fallecimiento del actor impidió
propuestos en la demanda (factor objetivo de atribución) im- pasar de la borda del remolcador “Ona Titan” hacia otro
concluir la totalidad de los estudios para la realización de la
ponía en la emplazada la obligación de acreditar alguno de denominado “Ona Don Vicente”.
pericia, existen suficientes elementos en la causa para tener
los supuestos liberadores que el propio art. 1113 del cód. ci- Para resolver de tal modo, el a quo consideró, en pri­
por demostrado que, a raíz del accidente, este padeció los
vil contempla. Sobre este punto, el dispositivo recurrido tam- mer término, que se encontraba acreditado que el Sr. F.
perjuicios que motivaron el inicio de esta demanda.
poco indica los motivos por los cuales la cuestión no debería se hallaba a bordo del remolcador de la demandada pa­
5 – El art. 1113 –párr. 2º, parte 2ª– del cód. civil contempla el ser resuelta desde el enfoque al que específicamente se hizo ra realizar una pericia conforme el nombramiento como
supuesto de perjuicios generados por el riesgo o vicio de la co- referencia en el escrito de inicio y que se corresponde con el perito naval en el arbitraje suscitado en el expediente
sa. En este caso, la cosa dañosa actúa sin autoría del hombre. carácter riesgoso de “la cosa”. nº 1.190.822/06 del Ministerio de Trabajo, Empleo y Se­
Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018 5

guridad. Asimismo, también tuvo por reconocido que en carácter riesgoso de la escalera como también enfatiza la
dicha oportunidad el accionante sufrió el referido acciden­ existencia de culpa de la víctima proyectándose como una NOVEDADES 2017
te mientras pretendía pasar de un remolcador a otro. Sin causal de eximición del deber de reparar.
embargo, advirtió que a lo largo de la causa, no se probó Se advierte entonces que no es un extremo puesto en
el hecho generador del daño como así tampoco la relación tela de juicio la existencia del hecho generador del daño, Alberto Silvio Pestalardo
de causalidad entre las condiciones de los remolcadores y quedando en evidencia que el Sr. Magistrado ha prescin­ COLECCIÓN CÓDIGO CIVIL
los daños sufridos por el actor. En ese sentido, destacó que dido de los términos en que ha quedado trabada la litis, Y COMERCIAL DE LA NACIÓN
tales extremos debieron ser corroborados mediante prueba ingresando en aspectos que las partes no han sometido a Prescripción liberatoria
específica y que la parte interesada desistió de la pericia su análisis. y caducidad
naval oportunamente ofrecida. Por último, impuso las cos­ Debe revocarse entonces lo resuelto en cuanto a que de los derechos
tas al demandante en su calidad de vencido. no se encuentra probado el hecho generador del daño al
que específicamente alude el a quo en la sentencia obran­ ISBN 978-987-3790-58-4
II. La sentencia fue apelada por los herederos del Sr. F., 230 páginas
quienes expresaron agravios a fs. 691/695, los que fueron te a fs. 682/684, pues respecto de esa circunstancia no
respondidos por la demandada a fs. 697/700. hay divergencia entre los contradictores. En consecuencia,
Las quejas que los apelantes traen a conocimiento y corresponde que esta Alzada ingrese en el conocimiento
decisión de la Alzada, en esencia fincan en: a) El senten­ y decisión de las cuestiones que sí han sido polemizadas
ciante omitió considerar que existen suficientes elementos durante el pleito. No está de más aclarar que la ausencia Venta telefónica: (11) 4371-2004
de prueba convincentes para tener por acreditada la res­ de un encuadre jurídico por parte del sentenciante y los Compra online: ventas@elderecho.com.ar
ponsabilidad imputada. En tal sentido, no resulta correcta agravios propuestos en esta instancia, permiten al Tribunal www.elderecho.com.ar
la apreciación del a quo en cuanto a que aquel extremo revisar lo resuelto de acuerdo al modo en que fue plantea­
sólo podía ser demostrado mediante la pericia naval; b) da la cuestión en la anterior instancia, que se corresponde producirlas. En otras palabras, indagaré si los perjuicios
La sentencia recurrida incurre en una grave contradicción con la configuración de factores de atribución de respon­ alegados por el Sr. F. guardan relación de causalidad ade­
en la medida que, en principio, reconoce expresamente sabilidad tanto objetivos (riesgo o vicio de la cosa) como cuada –según el curso natural y ordinario de las cosas–
la existencia del accidente que motivó el litigio y luego subjetivos (negligencia en las medidas de seguridad). con la conducta que le imputa a la accionada o con el
advierte que no se encontró acreditado el hecho generador hecho de personas o de cosas bajo su autoridad o control,
IV. Como punto de partida, es conveniente puntualizar sin que aparezca algún factor eventual que incida a tales
del daño; c) La relación de causalidad entre el daño y las que la situación que involucra al accionante con la deman­
condiciones de los remolcadores se desprende de los di­ efectos (conf. arg. arts. 901, 903 y 904 del Código Civil).
dada debe ser analizada en el campo extracontractual. En Sobre este punto, adelanto que no comparto la solución
chos del testigo S. Dicha prueba resulta de incuestionable esta órbita, cabe recordar que la responsabilidad del sujeto
valor respecto de las dificultades y el riesgo que implicó a la que arribó mi colega de la anterior instancia en cuanto
queda comprometida cuando se configuran los siguientes a la falta de acreditación de la relación de causalidad.
pasar de un buque a otro; d) El Magistrado de la ante­ presupuestos: el incumplimiento del deber general de no
rior instancia no ha meritado que la Ordenanza Nº 7 de la De los hechos relatados en el escrito inicial, el reco­
dañar a otro (arts. 19 de la Constitución Nacional y 1109 nocimiento formulado expresamente por la accionada a
Autoridad Marítima que reglamenta el art. 302.0307 del del Código Civil), la imputación jurídica de éste en razón fs. 113 vta. (punto III, c) y las experticias obrantes a fs.
Régimen de la Navegación Marítima, Fluvial y Lacustre de su culpa o dolo o de alguno de los factores objetivos 228/236 y fs. 402/405, surge el vínculo causal entre el
–en adelante, REGINAVE– refiere expresamente a la ne­ que prevé el ordenamiento legal, el daño sufrido por el accidente sufrido por F. en el remolcador propiedad de
cesidad de colocar planchadas o escalas con pasamanos acreedor y la relación causal entre dicho incumplimiento Trans Ona Samcif y las secuelas por él padecidas. En es­
o barandillas de ambos lados contando con cierta altura, y el daño antes referido. Basta que uno de esos recaudos te aspecto, el perito psicólogo expuso que “con motivo
ante la existencia de una inclinación determinada en caso fracase para que el demandado quede exento de responsa­ del accidente de autos, el actor presenta actualmente un
de que haya diferencia de niveles; e) Tanto de la pericia bilidad civil por las consecuencias de su actividad. cuadro reactivo de estrés adaptativo, de carácter modera­
médica legista, como así también de la pericia psicológica Cuando se imputa responsabilidad a un sujeto, resul­ do, con síntomas emocionales de ansiedad y depresión.
surgen las secuelas incapacitantes padecidas por el actor ta indispensable establecer el nexo de causalidad entre el Presenta además secuelas de estrés postraumático que se
que guardan relación causal con el accidente en cuestión. efecto dañoso y el hecho que suscita la responsabilidad en manifiesta en el temor fóbico a sufrir una nueva caída”
III. En primer lugar, considero que el sentenciador –co­ cuestión (Llambías, J. J., “Tratado de Derecho Civil, Obli­ (conf. fs. 234, punto b). En igual sentido, la experta Ga­
mo correctamente apuntan los apelantes– se equivoca al gaciones”, 2ª ed., t. I, nº 281; Bustamante Alsina, J., “Teo­ ribotti es concluyente al sostener que el accionante “…
sostener que no se encuentra acreditado el hecho genera­ ría general de la responsabilidad civil”, 5ª ed., nº 580; Bor­ la única secuela (…) relacionable en forma directa con el
dor del daño. Antes bien, pareciera que no se trata de un da, G., “Tratado de Derecho Civil. Obligaciones”, 4ª ed., t. hecho de autos corresponde a la fractura del cuerpo de la
extremo debatido que el Sr. F. –de, por entonces, 76 años II, nº 1313; conf. esta Sala, causa 7113 del 27.3.90). Por lo vértebra lumbar IV y la secuela funcional ocurrida a nivel
de edad–, el día 12 de febrero de 2007 sufrió una caída tanto, no alcanza con comprobar que un hecho ha sido an­ de la columna lumbar” (fs. 253 vta.). No desconozco las
en los remolcadores propiedad de la demandada, mientras tecedente de otro para considerarlo su causa eficiente. A ese impugnaciones formuladas por la accionada a fs. 409 en
realizaba las tareas en calidad de perito que le fueran en­ fin es menester que tenga, por sí, la virtualidad de producir lo relativo a que “... no existe nexo causal entre la supuesta
comendadas en el marco del expediente nº 1.109.822/06 semejante resultado. Es decir que el hecho haya provocado incapacidad del actor y el accidente sufrido el 12/2/2007”.
del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. In­ el desenlace dañoso por virtud de su propia potencia gene­ Sin embargo, más allá de que respecto de esa observación
cluso, dicha consideración efectuada por el a quo a fs. 684 radora (conf. esta Sala, causas 6924 del 14.11.89; 5076/98 no se confirió traslado alguno a la perito (v. fs. 410), lo
–segundo párrafo– para justificar el rechazo de la acción, del 16.10.2001; etc.; Llambías, J. J., ob. cit., nº 289). cierto es que de la historia clínica del Sr. F., remitida por el
resulta contradictoria con lo expuesto por el propio senten­ Sobre este aspecto, en principio, incumbe a quien pre­ Hospital Naval Buenos Aires a fs. 477/637; se desprende
ciante al inicio del Considerando II del veredicto recurrido. tende ser resarcido –como imperativo de su propio inte­ que el 19 de febrero de ese año el actor tuvo que ser aten­
En cambio, lo que sí discuten las partes es la mecánica rés– la carga de comprobar tanto la existencia del perjui­ dido en el citado nosocomio debido a un “traumatismo co­
del accidente y la configuración del factor de imputación cio cuanto su vínculo causal con la conducta de la per­ lumna lumbar” (fs. 598). Por otra parte, también es válido
material y jurídico por el cual la accionada debiera res­ sona a la que se atribuye su producción (arg. art. 377 del resaltar que la perito al momento de presentar su informe
ponder. C.P.C.C.N., conf. esta Sala, causas: 9255/92 del 24.9.93; basa sus conclusiones en los datos obrantes en la historia
En efecto, en el escrito inaugural el demandante ma­ 8302/99 del 21.12.99; 26.073/94 del 13.7.2000; 16.211/95 clínica y refiere al informe de la R.M.N. (resonancia mag­
nifiesta que “Al momento de pasar de la borda del ‘Ona del 8.11.2001; 7072/96 del 30.4.2002, entre muchas otras). nética nuclear) del 14 de abril de 2007 que “… destaca
Titan’ hacia el ‘Ona Don Vicente’, a raíz del movimiento Sin embargo, en algunas oportunidades la ley única­ el aplastamiento con fractura de cuerpo vertebral lumbar
originado por la ondulación normal del agua, se produce el mente admite que el demandado se libere demostrando la IV con hernias intraesponjosas en ambas placas termina­
levantamiento de éste y caigo hacia atrás sobre la cubierta intervención de una causa ajena. Tal es el supuesto de la les” (fs. 402 vta.). Por lo expuesto y aun considerando lo
del ‘Ona Titan’” (sic v. fs. 75 vta. pto. 3], tercer párrafo). responsabilidad por daños derivados del riesgo o vicio de apuntado por la accionada a fs. 409 vta. respecto a que
Sobre este punto, la accionada difiere en lo que respecta al la cosa que dispone el artículo 1113 del Código Civil. Ello el fallecimiento del actor impidió concluir la totalidad de
modo en que aconteció la caída advirtiendo que “... el actor implica presumir iuris tantum la relación de causalidad, los estudios para la realización de la pericia, entiendo que
quería alcanzar el segundo escalón de la escalerilla, colo­ por lo tanto, salvo prueba en contrario de la eximente a car­ existen suficientes elementos en la causa para tener por
cada en la cubierta y apoyada sobre la borda de este remol­ go del demandado, su responsabilidad queda configurada. demostrado que, a raíz del accidente del Sr. F., éste pade­
cador y cae sobre la cubierta” (v. fs. 105 vta. punto “a”). Sentadas así las pautas a emplear, parece prioritario ció los perjuicios que motivaron el inicio de esta demanda.
Por otra parte, el Sr. F. justifica la responsabilidad que centrar el análisis en este presupuesto de la responsabili­ Por otra parte, debo resaltar que más allá de la diver­
le atribuye a Trans Ona Samcif en virtud de lo dispuesto dad. Ello, en la medida que el sentenciante ha considerado gencia planteada por los contendientes en cuanto al modo
en la Ley de la Navegación, ante el incumplimiento de que el nexo no se encuentra demostrado, motivando esto la en que se suscitó el desafortunado accidente –esto es, si
las normas reglamentarias de seguridad de las personas a crítica concreta de los apelantes. También, porque el exa­ se produjo mientras se encontraba traspasando al buque
bordo. También funda su petición en el artículo 1113 del men causal es previo a la indagación de factores objetivos “Ona Don Vicente” o al intentar subir al segundo escalón
Código Civil, en la medida que considera que una escala o subjetivos de atribución: únicamente ante la producción en la cubierta del “Ona Titan”–, lo cierto es que no existen
sin candeleros y la ausencia de planchada para el pase de de un daño se averigua si concurre algún motivo para que dudas que, con motivo de aquel episodio, se corroboraron
un buque a otro constituyó una cosa riesgosa o defectuosa alguien deba responder por él (conf. Zavala de González, en el Sr. F. secuelas incapacitantes.
de la que derivó el daño (v. fs. 76/77). En este sentido, la Matilde “Actuaciones por daños. Prevenir. Indemnizar. Sólo a mayor abundamiento, aclaro que la dinámica del
emplazada expone que en lugar de las normas citadas por Sancionar”, 1era. ed., Hammurabi, 2004, p. 140). accidente tampoco ha quedado establecida en la medida
el actor, el presente caso debería dilucidarse a la luz de En este apartado, lo que, en definitiva, se confrontará es que las apreciaciones formuladas por los testigos presen­
las disposiciones del Código Civil que regulan la respon­ el hecho accidental junto con las consecuencias dañosas, ciales del hecho no resultan coincidentes entre sí. Sobre
sabilidad. Sintetizando su postura, dicha parte rechaza el con el objeto de esclarecer si aquel ha sido idóneo para este punto, interrogado el Sr. S. con relación a si recuerda
6 Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018

desde dónde cayó el actor, contestó que “... lo hizo desde Desde este enfoque de la cuestión, señalo que para res­ Con relación al actuar del Sr. V. adelanto que no consi­
el punto más alto de la borda” (v. respuesta séptima de fs. ponsabilizar por las cosas no es requisito su movimien­ dero que su conducta deba ser encuadrada en lo normado
186 vta.). Sin embargo, el testigo R. al describir el modo to. Las cosas inertes pueden perjudicar cuando, mecáni­ por el art. 1111 del Código Civil. La referida norma, regula
en que aconteció el infortunio sostuvo que “... la caída se camente pasivas, han sido causalmente activas. Esto se el “principio de autorresponsabilidad” el cual implica que
produjo desde el segundo escalón” (v. respuesta segunda verifica toda vez que su anormal situación circunstancial el damnificado debe asumir las consecuencias de su obrar
de fs. 218 vta.). Pese a ello, reitero que tal extremo no mo­ crea la probabilidad y consecuente previsibilidad de una negligente o imprudente. De esta forma, el codificador dis­
difica en nada la conclusión a la que arribo en cuanto a que contingencia nociva (conf. Zavala de González, Matilde, puso que el hecho de desplegar conductas imputables a la
debe tenerse por demostrada la presencia del nexo causal. ob. cit., p. 342). propia incuria de quien reclama, opera como eximente de la
En efecto, en ejercicio de las potestades que me atribuyen Tampoco puedo dejar de ponderar las manifestaciones responsabilidad achacada al demandado. En otras palabras,
los arts. 386 y 456 del Código Procesal, tengo para mí que vertidas por los testigos, que coinciden con lo expuesto cuando se presenta este supuesto se confunde a la misma
las divergencias advertidas entre las exposiciones de las en la contestación de demanda a fs. 104 vta. –segundo persona del agente dañador con la del damnificado dañado
partes no resultan de significativa importancia como para párrafo–, en cuanto a la necesidad de asistir con la mano (según expone Cifuentes, Santos, ob. cit., p. 600). Sin em­
repercutir en el sentido de modificar un cambio en la con­ a quien pretendiera traspasar de un buque a otro. En ese bargo, reitero, para que la conducta de la víctima desligue
figuración de la causalidad. sentido, el deponente S. al ser indagado respecto de cómo al dueño o guardián de la cosa del deber de responder, es
Por todo lo expuesto, sea que el actor cayó subiendo el fue el paso de un remolcador al que seguía en orden de necesario que el “perjuicio” sufrido por ella reconozca su
segundo escalón, el último peldaño o al intentar saltar al proximidad contestó que “... lo hicieron usando unos es­ causa-fuente en la acción u omisión que se le imputa.
otro buque, considero que existen pruebas suficientes para calones para sortear la altura de la borda y llegar al otro, Sobre la base de lo expuesto y en la forma en que acon­
dar por acreditado el nexo causal entre el accidente sufrido que en ese caso alguno fue ayudado por quien ya estaba teció el suceso que provocó las secuelas incapacitantes del
por el actor –reitero, reconocido por ambas partes– y los en el segundo de los remolcadores” (v. respuesta cuarta a Sr. F., no se vislumbra que la omisión que se le atribuye
perjuicios derivados de su caída. De este modo, no com­ fs. 186 vta.). Concordantemente con ello, el Sr. R. en su (v. gr. ausencia de calzado de seguridad o suela de goma)
parto lo sostenido por el a quo pues la ausencia de prueba declaración testimonial expuso que “... recuerda haberle haya contribuido causalmente en la producción del da­
pericial naval no resulta óbice alguno para tener por confi­ ofrecido la mano como ayuda pero el actor no la tomo” ño. Para aseverar dicho extremo, tengo especialmente en
gurado este presupuesto de la responsabilidad civil. (sic v. respuesta segunda a fs. 218 vta.). De lo dicho se cuenta las manifestaciones de la propia accionada quien,
colige que si para cumplir con su finalidad o dar seguridad en oportunidad de describir el estado de las escalerillas
V. Antes de comenzar a analizar lo relativo a la exis­
se requería de la cortesía de otra persona para obtener es­ utilizadas para trasladarse de un remolcador a otro cuen­
tencia de un factor de imputación jurídica adelanto que, a
tabilidad en el pasaje de remolcadores, no quedan dudas tan con “escalones anchos de hierro rugoso o con dibujo
mi juicio, el presente caso debe ser resuelto a la luz de lo
que la escalerilla por sí misma resultaba riesgosa, lo que antideslizante, los cuales para mayor seguridad estaban y
normado por el artículo 1113 –segundo párrafo, segunda
me lleva a considerarla impropia para su destino. están protegidos con pintura antideslizante” (v. fs. 104, el
parte– del Código Civil. Dicho encuadre jurídico se co­
Por ello, y aun ante los esfuerzos argumentativos de la subrayado me pertenece). De este modo, no se advierte el
rresponde, incluso, con lo requerido por el peticionante a
demandada por descartar el carácter de “cosa riesgosa” grado de incidencia causal que pudo haber tenido el calza­
fs. 77, punto 2) y la defensa ensayada por la demandada a
que corresponde atribuirle a la escala colocada en la cu­ do atribuido a la víctima, cuando Trans Ona reconoce que
fs. 106/107 vta. No está de más recordar que la propia ac­
bierta del remolcador “Ona Titan” para ser utilizada en el el elemento desde el cual cayó el actor contaba con medi­
cionada manifestó a fs. 106 vta. de su escrito de responde
pasaje a otro buque amarrado; considero suficientemente das para evitar un posible deslizamiento al ser utilizado.
de la acción, que la cuestión planteada debe ser decidida
demostrada la potencialidad de generar consecuencias da­ En tal escenario, como los hechos que se atribuyen a
de acuerdo a las disposiciones que regulan la responsabili­
ñosas que tiene la colocación de una escalera sin ninguna la víctima no aparecen con entidad suficiente como para
dad en el Código Civil aunque, como se verá, la aplicación
medida de seguridad que pudiera disminuir la probabili­ incidir causalmente en la generación del evento dañoso, no
de esa normativa no favorece su postura.
dad de la caída de una persona. queda más que desechar el planteo formulado por la accio­
De este modo, habiendo quedado demostrada la presen­
nada en cuanto a la corroboración del eximente en cuestión.
cia del nexo causal, es insoslayable contrastar la existen­ VI. Volveré entonces sobre la corroboración del factor
Por todo lo dicho, corresponde revocar lo resuelto en la
cia de un factor de atribución contra el responsable, como de atribución que ya comencé a describir en el anterior
anterior instancia en cuanto desestimó la responsabilidad
motivo que explica su responsabilidad. Ello, pues a partir Considerando. Para ello, debe recordarse que en los daños
de Trans Ona Samcif en el accidente padecido por el Sr. F.
de un daño injusto se averigua y selecciona un criterio que por el riesgo o vicio de la cosa la responsabilidad se sus­
Ello así, pues considero que resulta errado el temperamen­
demuestre si corresponde que alguien responda por sus tenta en un factor objetivo de atribución.
to asumido por mi colega de la anterior instancia, en la
consecuencias. En estos casos, el dueño o guardián se exoneran de res­
medida que atribuyó al propio actor la carga de la prueba
Sobre este punto, cabe señalar que el artículo 1113 –se­ ponsabilidad acreditando una causa ajena al ilícito como
y rechazó la demanda con fundamento en la ausencia de
gundo párrafo, segunda parte– del Código Civil contempla interruptiva total o parcialmente del ligamen causal: culpa
producción de la pericia naval, sin advertir que uno de
el supuesto de perjuicios generados por el riesgo o vicio o hecho de la víctima, culpa o hecho de un tercero por
los encuadres jurídicos propuesto en la demanda (factor
de la cosa. En este caso, la cosa dañosa actúa sin autoría quien no debe responder y/o el caso fortuito externo (conf.
objetivo de atribución) imponía en la emplazada la obliga­
del hombre. Cifuentes, Santos, “Código Civil. Comentado y anotado”,
ción de acreditar alguno de los supuestos liberadores que
El fundamento del riesgo creado como factor de atri­ La Ley, T. II p. 662).
el propio artículo 1113 del Código Civil contempla. So­
bución supone la introducción en la comunidad de alguna Asimismo y tal como lo señalicé en el Considerando
bre este punto, el dispositivo recurrido tampoco indica los
situación (uso de cosas) que potencia o multiplica la posi­ IV, es el demandado quien para liberarse del deber de res­
motivos por los cuales la cuestión no debería ser resuelta
bilidad de que resulten perjuicios. Sin eufemismos: agrava ponder deberá demostrar en el proceso los extremos que a
desde el enfoque al que específicamente se hizo referencia
el peligro de dañar y convierte la posibilidad en una seria tal fin prevé el art. 1113 del Código Civil. De este modo,
en el escrito de inicio y que se corresponde con el carácter
probabilidad. Por lo tanto, si se produce un hecho lesivo, incumbe al legitimado pasivo –dueño o guardián demanda­
riesgoso de la “cosa”.
es justo que asuma responsabilidad quien ha generado ese do– acreditar la concurrencia de eximentes de responsabi­
riesgo especialmente intenso. Dicho aumento de poten­ lidad, lo que debe probar de modo fehaciente e indubitable, VII. Sin perjuicio de que lo hasta aquí dicho resulta
cialidad dañosa disminuye la seguridad que podían gozar dada la finalidad tuitiva de la norma. Se fortifica, entonces, suficiente para responsabilizar a la emplazada, considero
los demás. Esta incertidumbre no debe ser padecida sin la necesaria asunción de un rol procesal dinámico por parte necesario formular alguna precisión más en orden a la atri­
remedios jurídicos: la situación peligrosa debe asumirse del sindicado como responsable para exonerarse total o bución “objetiva-subjetiva” planteada al proponer la de­
a riesgo propio de quien la introdujo y no a riesgo ajeno parcialmente (conf. Galdós, Jorge Mario “El riesgo creado, manda. Desde ya adelanto, que también corresponde hacer
(conf. Zavala de González, Matilde, ob. cit., p. 230). la culpa y cuestiones conexas”, L.L. 23/11/2006, p. 1). lugar a la pretensión si se analiza la conducta de Trans
En el sub lite, el Sr. F. se precipitó al piso de la cubierta Por lo demás, la culpa de la víctima (o la invocación Ona Samcif desde su actuación negligente.
del buque “Ona Titan” luego de intentar traspasar al re­ del hecho del tercero) con aptitud para cortar totalmente el En primer término, aclaro que la situación ya descripta
molcador donde iba a realizar su tarea pericial, mediante nexo de causalidad entre el hecho y el perjuicio a que alu­ en la que se vio inmerso el demandante me lleva de inme­
la utilización de la escalera cuyas características da cuenta de el art. 1113 debe aparecer como única causa del daño, diato a ponderar no sólo el déficit de seguridad con el que
la fotografía acompañada por la demandada a fs. 97. En aparte de revestir las características de imprevisibilidad contaba la escalera del remolcador “Ona Titan” para poder
esa imagen puede observarse, a simple vista, que las con­ e inevitabilidad propias del caso fortuito o fuerza mayor acceder al “Ona Don Vicente”. No puedo dejar de ponde­
diciones en las que se encontraba colocada convertían a (Fallos 321:1462; 327:5224). rar la evidente displicencia del encargado del buque al per­
dicho elemento –en principio, inerte– en una cosa peligrosa En lo que a este aspecto de la cuestión se refiere, la mitir que una persona de setenta y seis años emprendiera
y riesgosa para cumplir con su finalidad. De este modo, una accionada aduce la “culpa de la víctima” en la producción tal conducta. Lo dicho, no se desvirtúa por la circunstan­
escalerilla colocada en la cubierta de un buque, sin ningún del daño para liberarse de su deber de responder. Advierte cia de que el Sr. F. contaba con conocimientos navales
tipo de sostén a los costados (barandas, pasamanos, etc.) que el Sr. F. “... no llevaba calzado de seguridad, ni siquie­ específicos, pues ellos resultan ajenos a las limitaciones
para reducir la posibilidad de caída de quien la fuera a utili­ ra con suela de goma; motivo por el cual resbaló al pre­ propias de la edad que fácilmente pudieron ser advertidas
zar, resulta determinante para que esa cosa pierda su condi­ tender pisar el segundo escalón de la escalerilla del ‘Ona por quien era el responsable de la empresa demandada y
ción de inercia y se transforme en riesgosa en los términos Titan’ y cayó hacia atrás, produciendo su propio acciden­ permitió ese traspaso.
del artículo 1113 del Código Civil. A ello agrego que, más te” (v. fs. 107, punto b.1). Agregó que el mencionado era En igual sentido, tampoco favorece la postura de la de­
allá de lo sostenido por el testigo presencial R. con relación Maquinista Naval, Perito Naval e Inspector de Buques de mandada sus argumentaciones vertidas a fs. 105, punto
a que a su juicio “... no existía movimiento alguno. Estaba la Prefectura Naval Argentina, por lo que su experiencia d.3) en cuanto a que “por la índole del cometido pericial,
totalmente calmo el recinto de la dársena” (v. fs. 219, cuarta implicó un conocimiento pleno y una previsibilidad supe­ no era necesario ir a bordo del remolcador ‘Ona Don Vi­
respuesta), no puedo escindir de mi análisis que semejante rior de las circunstancias fácticas que rodearon al hecho cente’, bastaba con entrevistar al Patrón y Jefe de Máqui­
objeto se encontraba colocado en la cubierta de un buque, (v. fs. 107 vta.). Por ello, desde este enfoque del conflicto na del remolcador ‘Ona Titan’, al cual –por estar junto al
cuya superficie acuática le quita de por sí la estabilidad que plantea su eximición de responsabilidad en virtud de lo primero de ellos– se podían trasladar el ‘Libro de Rol’, el
podría encontrarse si se tratara de una base firme. normado en los arts. 1111 y 1113 del Código Civil. ‘Libro de Navegación’ y demás documentación”. Por mi
Buenos Aires, lunes 19 de febrero de 2018 7

parte estoy persuadido de que tal extremo en lugar de men­ Presidió la Asociación de Peritos Navales, según da cuenta Asimismo, es importante destacar que, a juicio de esta
guarla todavía agrava la conducta adoptada por la empresa la testimonial obrante a fs. 191 (v. en ese sentido, respues­ Sala, la indemnización del daño moral cumple un papel
accionada. Si siquiera era necesario el traslado de los pe­ ta tercera). También se encuentra corroborado que con fe­ resarcitorio (confr. causa 4412 del 1.4.77 y muchas poste­
ritos hacia el segundo remolcador, ¿por qué se generó una cha 14 de junio de 2012 se produjo el lamentable deceso riores). Busca enjugar esa afección espiritual, a través del
situación riesgosa para la seguridad de los sujetos que no del Sr. F. (v. declaratoria de herederos obrante a fs. 145). único sucedáneo con que puede hacerlo una sentencia en
se justificaba con la labor que los expertos iban a realizar? En lo que aquí interesa, el perito psicólogo en su dicta­ un proceso patrimonial: una suma de dinero para procurar
Téngase presente que no se trataba de una inspección res­ men arriba a la conclusión de que el demandante presenta compensar los sentimientos padecidos.
pecto de las instalaciones del remolcador “Ona Don Vicen­ un “… DESARROLLO REACTIVO (Código 2.6.5), en En ese sentido, el dictamen efectuado por el perito psi­
te”, sino tan sólo de una compulsa de los libros ya detalla­ grado moderado, y que determina una incapacidad parcial cólogo designado en autos es categórico con relación al es­
dos, que bien pudieron ser retirados y exhibidos en tierra. y permanente del 25 % (veinticinco por ciento)” (fs. 236). tado anímico del accionante como consecuencia del evento
Por último, el “Certificado Nacional de Seguridad de la Asimismo, la experta Garibotti determinó que “… a la dañoso. Entre otras cuestiones el experto puntualiza que el
Navegación” adjuntado a fs. 99 por la accionada para avalar luz de las constancias obrantes en la causa y el examen Sr. F. presenta “impotencia y sentimiento de inutilidad”,
las condiciones de seguridad del buque, tampoco resulta de­ pericial del actor la única secuela relacionable en forma “incertidumbre frente al futuro”, “miedo a la invalidez”,
terminante para elucidar la cuestión. Ello así, en la medida directa con el hecho de autos corresponde a la fractura “vergüenza e inhibición”, “sensación de deterioro”, “ex­
que dicho instrumento sólo da cuenta del “estado satisfacto­ del cuerpo de la vértebra lumbar IV y la secuela funcional periencia de desamparo”, “sentimiento de frustración” y
rio” en el que se encontraba el buque motor. En ese sentido, ocurrida a nivel de la columna lumbar. La incapacidad del “sentimiento de inseguridad”. Es preciso agregar que de
la colocación de elementos ajenos como podría ser la esca­ actor por tales secuelas se estima como parcial, permanen­ aquel informe se desprende la existencia del desarrollo de
lera para trasladarse a un remolcador amarrado, excede los te y del 27 %” (fs. 404 vta.). En autos, se presenta la par­ ansiedad depresiva (fs. 233/234). En alguno de sus pasajes,
términos de certificación expuestos en ese documento. ticularidad de que el accionante falleció antes de realizar­ el citado parecer da cuenta que, al momento de su realiza­
Frente a tal realidad, la responsabilidad subjetiva de la se los estudios médicos solicitados por la perito médica, ción, el actor manifestaba “… ansiedad frente a su futuro
demandada también resulta evidente y se sustenta en lo circunstancia expresamente apuntada por la demandada laboral, social y de integración familiar dado las restriccio­
dispuesto en los arts. 512 y 1109 del Código Civil. A esa al impugnar ese dictamen (v. punto “h”] de fs. 409 vta.). nes de movilidad y desplazamiento que limitan sus chances
conclusión se arriba sin dificultad, a poco que se repare en Sin embargo, la mencionada profesional pudo arribar a profesionales, sociales y de contacto familiar” (fs. 233).
que se encuentra acreditado el hecho y la omisión de cui­ las conclusiones médicas de las que da cuenta su pare­ Por otra parte, también se encuentra acreditado el im­
dado que se verifica en la inobservancia de la obligación cer, teniendo en cuenta los estudios que ya se encontraban pacto que ese accidente originó en las actividades coti­
de no dañar a otro. agregados en la causa, como así también compulsando la dianas del demandante. En ese sentido, el testigo A., al
Todo lo hasta aquí dicho, torna innecesario adentrarme historia clínica reservada en autos. En razón de ello, la sa­ momento de ser interrogado respecto de la repercusión
en el debate planteado por las partes en orden a la aplica­ na crítica me lleva a atenerme a las consideraciones médi­ que tuvo el infortunio en la actividad de Don V. como
ción del art. 302.0307 del REGINAVE en cuanto regula las co-legales y a evaluar prudencialmente las consecuencias Presidente de la Asociación de Peritos Navales, contestó
normas de seguridad para el traslado de pasajeros. Más allá informadas por la experta que generaron la incapacidad que “… tuvo que asistir menos por problema de salud.
de la controversia de los contrincantes sobre este punto (v. laboral del pretensor (arg. arts. 386 y 477 del C.P.C.C.N.). Ha tenido que venir fajado en actos en representación de
manifestaciones de fs. 692 y contestación de agravios a fs. De todos modos, teniendo en cuenta las manifestacio­ la Asociación ante otras entidades. La faja se debía a sus
698), lo cierto es que el encuadre del caso en las previsio­ nes vertidas por Trans Ona al punto g) de fs. 409 vta., creo dolores” (sic fs. 191 vta., respuesta octava).
nes que regulan la responsabilidad civil resulta suficiente apropiado puntualizar que los porcentuales de incapacidad Sobre este punto, para justipreciar este rubro no puedo
para imputarle a la demandada la obligación de responder estimados por el galeno, observados o no por las partes, no pasar por alto el espíritu activo que se manifestaba en el Sr.
por los daños causados. Incluso, reitero, la aplicación de son por su naturaleza datos de matemática exactitud, sino F., que se vio negativamente afectado con el acaecimiento
las normas en base a las que aquí se resuelven se corres­ valiosas pautas de orientación prudencial (conf. esta Sala, del accidente que motivó la demanda. No me parece un
ponde con lo solicitado por la accionada en su contestación causa “Rivero, Vicente c/ Estado Nacional Estado Mayor dato menor la circunstancia de que se recibió de abogado
de demanda (v. en especial, fs. 106 vta. - segundo párrafo). Gral. de la Armada”, expte. Nº 1361/92, del 8.10.97 y sus unos meses antes del accidente –a sus 75 años de edad– (v.
Si bien la actora no ha fundado su petición expresamen­ citas). Es por ello que dicha estimación debe, a su vez, fs. 596/597, asiento del día 2.01.07) y que, con posterio­
te en lo normado en los artículos 512 y 1109 del Código conjugarse con las restantes circunstancias de la causa. ridad a dicho suceso, debió jubilarse. También se le difi­
Civil, recuerdo que aunque las partes no hayan invocado Evaluando ese cúmulo de factores y las condiciones cultó el ejercicio del cargo en la asociación que presidía
la norma o lo hayan hecho incorrectamente (iura curia personales del actor arriba indicadas, lo dictaminado en e incluso se vio imposibilitado de continuar sus estudios
novit), el juez al momento de sentenciar debe atribuir el los informes médicos obrantes en autos a fs. 228/236 y de posgrado ante la dificultad de su traslado (fs. 228/229),
adecuado encuadramiento jurídico de la situación bajo 402/405, el cálculo de la vida laboral útil hasta que se pro­ puesto que con motivo del accidente vio reducido su an­
examen. Es su cometido determinar la norma jurídica den­ dujo su fallecimiento, propongo fijar en la suma de $50.000 dar y debió comenzar a trasladarse con bastón (v. fs. 191,
tro de la que se encuentra subsumida la situación fáctica, (cincuenta mil) la reparación correspondiente a este rubro, séptima respuesta). Dada la edad de Don V. al momento
en pos de acordar, a partir del mismo, una solución a las suma a la que arribo, además, haciendo ejercicio de la fa­ del accidente, más allá de la repercusión patrimonial de
cuestiones planteadas en el proceso. cultad de apreciación prudencial que autoriza el art. 165, aquellos extremos –relativa, por cierto– resultan nítidas las
Por todo ello, entiendo que el veredicto recurrido debe última parte del Código Procesal. También tengo en cuenta implicancias emocionales derivadas de aquel cambio en
ser revocado, debiendo Trans Ona Samcif responder por para ello la edad avanzada del accionante al momento de su proyecto de vida. La circunstancia de que el actor, aun
los perjuicios generados al Sr. V. F. consolidarse su incapacidad (76 años) que, como ya señala­ a su edad avanzada, contaba con las ocupaciones referidas
VIII. Admitida la responsabilidad de la demandada co­ ra, si bien no es óbice para el reconocimiento del rubro, de­ y mantenía su interés en la especialización de su carrera,
rresponde fijarse los alcances de la indemnización destina­ be ser tenida en cuenta al momento de estimar su cuantía. debe ser considerado, incluso, para determinar las impli­
da a la reparación de los perjuicios efectivamente sufridos 8.2. En lo concerniente a la reparación del agravio mo­ cancias que en su esfera anímica el accidente produjo.
por el accionante: ral, en primer término recuerdo que, en episodios como Por lo tanto, obran en autos suficientes elementos de con­
8.1. Con relación a la incapacidad sobreviniente (daño el de autos, se trata de un daño in re ipsa; es decir que vicción para detectar en el Sr. F. el padecimiento de aflic­
físico y psíquico), recuerdo que en casos como el de autos surge inmediatamente de los hechos mismos. Por cierto, ciones que puedan ser subsumidas en el rubro daño moral.
debe ser apreciada computando la situación actual de la establecer su monto es una de las tareas más arduas del
minusvalía económica en que la víctima quedó frente a la sentenciante. Si bien no hay parámetros estrictos a ese fin, EDICTOS
vida. Su resarcimiento ha de ser determinado siguiendo tampoco puede pregonarse que se cuenta con una absoluta
CIUDADANÍA de la ciudadanía argentina. Cual-
un criterio flexible que pondere el conjunto de todos los discrecionalidad para hacerlo. quier persona que tuviere conocimien-
El Juzgado Nacional de Primera
elementos demostrativos de la concreta influencia negativa Ahora bien, para que proceda su reparación debe haber­ Instancia en lo Civil y Comercial Fe- to de algún acontecimiento que pu-
deral N° 8, Secretaría N° 16, sito diere obstar a dicha concesión, debe-
de la minoración física de la víctima en el campo laboral se producido una modificación disvaliosa del espíritu, en en Libertad 731, 7° piso de Capital rá hacer saber su oposición fundada
y en las actividades de ésta con contenido económico, sin el desenvolvimiento de la capacidad de entender, querer o Federal, hace saber que MANCERO al Juzgado. El presente se publica a
MOSQUERA XAVIER MARCELO na- los efectos del Art. 11 de la ley 346.
que sea necesario aferrarse a cálculos matemáticos res­ sentir, consecuencia de una lesión a un interés no patrimo­ cido en Milagro, Guayas, Ecuador, Publíquese por dos días dentro de un
plazo de quince días. Buenos Aires,
pecto de los eventuales ingresos del reclamante durante nial que habrá de traducirse en un modo de estar diferente el 07 de octubre de 1981, con DNI:
9 de febrero de 2018. Carlos G. Ma-
94.737.376 ha peticionado la con-
su probable vida laboral útil. A tal fin, deben valorarse su de aquel al que se hallaba antes del hecho, como conse­ cesión de la ciudadanía argentina, a llo, sec. fed.
edad, condición social, económica, familiar, actividad y cuencia de éste y anímicamente perjudicial (conf. Pizarro, fin de que los interesados hagan sa- I. 19-2-18. V. 20-2-18 6369
ber a este Juzgado las circunstancias
capacitación laboral, estado civil, etc.; como así también Daniel, “Daño Moral. Prevención. Reparación. Punición. que pudiesen obstar a dicho pedido. El Juzg. Nac. de 1ra. Inst. en lo Civ.
Buenos Aires, 21 de diciembre de y Com. Fed. Nro. 4, Sec. Nro. 8,
el efecto producido sobre el damnificado en sus distintos El daño moral en las diversas ramas del derecho”, pág. 2017. Sebastián Andrés Ferrero, sec.
informa que VALERIY NOSKOV, de
36, cita extraída del fallo de la Sala III de este tribunal nacionalidad ucraniana, imprentero,
aspectos vitales (conf. esta Sala, causas nº 2850/98 del I. 16-2-18. V. 19-2-18 6368 D.N.I. Nro. 93.871.896, ha inicia-
20.9.96; nº 21.830/94 del 26.12.06; entre otras). “in re” 17/6/08, “González y otros c/ Corporación Asis­ El Juzgado Nacional de Primera do los trámites para obtener Ia Ciu-
dadanía Argentina. Cualquier perso-
Ahora bien, de acuerdo a las pruebas que en este pun­ tencial S.A.”). Se trata de una lesión en los sentimientos Instancia en lo Civil y Comercial Fe-
na que conozca algún impedimento
deral N° 7, a cargo del Dr. Javier
to han sido aportadas en autos, resulta que el actor tenía que determina dolor o sufrimientos, inquietud espiritual, o Pico Terrero, Secretaría n° 14, a al respecto deberá hacer saber su
oposición fundada al Juzgado. Publí-
setenta y seis años de edad al tiempo en que se sucedió el agravio a las afecciones legítimas y, en general, toda clase mi cargo, sito en Libertad 731, 6°
quese por dos veces en un lapso de
piso de la CABA, comunica que el 15 días. Buenos Aires, 7 de febrero
accidente (ver fs. 228). Se desempeñó como perito naval, de padecimientos insusceptibles de apreciación pecuniaria Sr. RAMIRO BARRETO MANCERA, de 2018. Fdo. Dra. Mariana Roger,
encontrándose acreditado que gozaba de beneficio previ­ (Bustamante Alsina, Jorge, “Teoría General de la Respon­ con DNI N° 94.174.415, nacido el sec.
24/11/1976 en Inquisivi, La Paz,
sional jubilatorio (fs. 1 del beneficio de litigar sin gastos). sabilidad Civil”, pág. 208). Bolivia, ha solicitado la declaración I. 19-2-18. V. 20-2-18 6371

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Con motivo de lo expuesto, propongo al Acuerdo reconocer donantes y receptores, incluyendo datos personales, grupo san- miento y los criterios que se utilizarán para la priorización en
por este concepto la suma de $90.000 (noventa mil pesos). guíneo, inmunológicos, clínicos, así como, también, criterios de la elección de parejas.
inclusión en el programa y fechas de inicio de diálisis.
IX. Finalmente, la condena deberá llevar intereses a la Procedimiento luego de la combinación de parejas
Si el donante y receptor aceptan entrar al programa, se
tasa activa que percibe el Banco de la Nación Argentina realizará la inscripción en el registro y se ingresarán sus datos Luego de la combinación de las dos parejas se notificará a
en sus operaciones de descuento a treinta días, plazo ven­ manteniendo en todo momento la confidencialidad de estos, los centros de trasplantes implicados para proceder al Cross
cido. En lo atinente al punto de partida de los intereses, conforme a la protección según normativa de la Ley de Pro- match entre pares constituidos, el cual deberá dar negativo.
este Tribunal ha señalado en numerosas oportunidades que tección de Datos Personales 25.326 y la Ley de Trasplante de Cuando el donante y el receptor hayan sido evaluados y se
tales accesorios deben comenzar a correr desde el día del Órganos y Tejidos 24.193. encuentren aptos para realizar el trasplante, deberán solicitar
accidente, toda vez que en ese preciso instante quedaron El programa buscará entre todas las parejas incluidas en el la autorización judicial para llevarlo a cabo, en el marco del
configurados como daños definitivos. Por ello, el cálcu­ registro las que sean probablemente compatibles. Este entrecru- “Procedimiento Judicial Especial”.
lo debe arrancar de la fecha del evento dañoso productor zamiento de parejas será realizado cuatro veces al año. Una vez que el juez autorice la donación se fijará la fecha
del perjuicio, es decir, desde el 12 de febrero de 2007 y Los implicados pueden permanecer en el registro hasta que del trasplante: los procedimientos quirúrgicos se realizarán en
hasta su efectivo pago (conf. esta Sala causa nº 8368/01 se encuentre una pareja con la que realizar el intercambio o, forma simultánea aunque se efectúen en instituciones diferentes
“D’Amelio Domingo Ángel c/ Edenor S.A. s/ daños y per­ por el contrario, salir del registro en el momento que lo desee, para garantizar que ambos procedimientos se realicen en el
juicios” del 20/12/13; Sala III, causa nº 937/92 “Dos San­ mediante revocación. mismo momento y darle la oportunidad a las parejas de poder
tos Walter c/ Sanatorio Colegiales S.A. y otro s/ daños y expresar su arrepentimiento hasta el momento mismo del inicio
perjuicios” del 25/02/10, Sala I, causa nº 5842/94 “Araujo, Criterios de inclusión de la cirugía. La reversibilidad de los procedimientos quirúrgi-
Silvia Ema y otros c/ Ávila Mario Guillermo y otros s/ da­ cos tiene como límite el clampeo vascular(4).
Para ingresar en el programa, el donante y receptor debe-
ños y perjuicios” del 28/11/10, entre otras). rán reunir al menos uno de ciertos requisitos, a saber: incom- Algunas reflexiones
X. En mérito a lo expuesto, voto por revocar la sen­ patibilidad del grupo sanguíneo; Cross match positivo donante
La exigencia de que el dador sea un familiar tiene por fi-
tencia apelada en cuanto rechazó la acción entablada por y receptor (el paciente posee anticuerpos contra los antígenos nalidad prevenir y evitar el comercio de órganos. En este or-
el Sr. V. S. O. F. En consecuencia, propicio hacer lugar de histocompatibilidad del donante y contraindica la realiza- den de ideas, es dable recordar que dicha intención ha sido
a la demanda y condenar a Trans Ona Samcif al pago de ción del trasplante)(2); presencia de antígeno no deseado en contemplada en el ordenamiento jurídico argentino desde sus
la suma de $140.000 (ciento cuarenta mil pesos) en con­ el donante, Mismatch HLA donante y receptor (no coinciden orígenes en el año 1977 con el dictado de la ley 21.541, que
los números en el antígeno leucocitario humano)(3); diferencia contenía ya varias de las líneas directrices que habrían de ca-
cepto de incapacidad sobreviniente y daño moral, los que
de edad donante y receptor mayor de 20 años; diferencia de racterizar a la legislación argentina en la materia(5).
devengarán los intereses indicados en el anterior conside­
peso donante y receptor mayor o menor del 30 %. Así las cosas, la exigencia que contiene el programa, como
rando. Las costas de ambas instancias a la demandada en
su condición de vencida, pues no encuentro motivo alguno Criterios de exclusión también las precisiones con las que se describen los procedi-
para apartarme del principio objetivo de la derrota (art. 68, mientos, otorgando la información necesaria tanto al donante
A su vez, no podrán incorporarse al programa cuando se como al receptor y haciendo hincapié en que la participación
primer párrafo, Código Procesal).
presente alguna de las siguientes situaciones: donante vivo no en este no otorga más que la gratificación de haber ayudado a
Los doctores Ricardo Víctor Guarinoni y Eduardo Da- relacionado; inobservancia de las disposiciones contenidas un familiar y a otra persona a recibir un trasplante, dan cuenta
niel Gottardi, por razones análogas a las expuestas por el en el art. 15 de la ley 24.193; contraindicaciones para el de que la autorización de este tipo de prácticas no implica
doctor Alfredo Silverio Gusman, adhieren a su voto. trasplante del receptor; contraindicaciones para la donación abandonar el objetivo principal: resguardar el derecho a la
de el/los donante/s; ausencia del apto para el trasplante por salud de las personas evitando que los órganos se conviertan
En virtud del resultado que instruye el Acuerdo que an­ parte del equipo de trasplante; ausencia de consentimiento in-
tecede, el Tribunal resuelve: 1) Revocar la sentencia ape­ en objetos de comercialización y asegurarse de que quien to-
formado por escrito, del donante o receptor para el ingreso al me una decisión de dicha magnitud, tal como desprenderse de
lada en cuanto rechazó la acción entablada por el Sr. V. S. Programa de Donación Renal Cruzada. una parte de su cuerpo, tenga plena conciencia de las conse-
O. F.; 2) Hacer lugar a la demanda y condenar a Trans Ona
Criterios de selección cuencias que ese acto puede acarrear. Igualmente, al recurrirse
Samcif al pago de la suma de $140.000 (ciento cuaren­
a un procedimiento judicial especial, se brinda una garantía
ta mil) en concepto de incapacidad sobreviniente y daño A tal fin se contemplan parámetros que ayudarán a definir adicional en línea con las directivas de la ley vigente.
moral, los que devengarán los intereses indicados en el qué par de receptor/donador será seleccionado para realizar
Considerado IX del primer voto. 3) Imponer las costas de el procedimiento.
Laura Belén Yachelini
ambas instancias a la demandada en su condición de ven­ www.centrodebioetica.org
Las parejas se cruzarán según el grupo sanguíneo compa-
cida (art. 68, primer párrafo, Código Procesal). 15 de enero de 2018
tible, la ausencia de antígenos no deseados en el donante, y
Regístrese, notifíquese y devuélvase. – Alfredo S. Gus- en el caso de receptores pediátricos, con donantes menores de VOCES: PERSONA - PROFESIONES LIBERALES - DERE-
man. – Ricardo V. Guarinoni. – Eduardo D. Gottardi. 50 años. CHOS HUMANOS - SALUD PÚBLICA - BIOÉTICA
En la situación en que se presente más de una pareja com- - MEDICAMENTOS - TECNOLOGÍA - MÉDICO -
OPINIONES Y DOCUMENTOS patible, se establece una prioridad conforme a una fórmula que FAMILIA - ACTOS Y HECHOS JURÍDICOS - TRAS-
evalúa un “puntaje” obtenido por cada pareja, compuesto por PLANTE DE ÓRGANOS
INCUCAI crea el Programa de Donación Renal la sumatoria de ambos puntajes especiales de cada receptor.
Cruzada Según el resultado obtenido, se utilizará electrónicamente un (4) Ver https://www.incucai.gov.ar/index.php/institucional/glosa-
El Instituto Nacional Central Único Coordinador de Abla- algoritmo que representará el proceso de toma de decisiones. rio/Glosario-1/C/Clampeo-25/.
(5) Felizia, Agustina - Díaz Cafferata, Santiago, La donación de
ción e Implante (INCUCAI) a partir de la resolución 435- El Puntaje Especial del Receptor se encuentra definido en órganos entre vivos y el derecho del hombre a disponer de su cuerpo.
2017(1) creó el Programa de Donación Renal Cruzada para una tabla que establece la cantidad de puntos que recibe el Cita Online: AR/DOC/1919/2015.
aquellos casos en que el receptor no posea donantes relacio- receptor según la presencia de las distintas variables, a saber:
nados biológicamente compatibles con el fin de detectar un re- grupo 0: 5 puntos; PRA menor o igual que el 80%: 3 puntos;
ceptor compatible correspondiente a otra pareja con el mismo PRA mayor o igual que el 80% o menos del 50%: 2 puntos; pa-
NOVEDADES 2017
inconveniente entre sí y poder realizar un trasplante cruzado. ciente pediátrico: puntos según resolución 062/17, tiempo de
La resolución describe que ante una insuficiencia renal cró- diálisis: 0,5 por año; Mismatch HLA-A-8-OR Donante Receptor
nica, la opción del trasplante resulta más beneficiosa frente a cruzado: puntos según resolución 062/17. S. J. Danessa - L. B. Scotti -
la diálisis en cuanto a supervivencia, calidad de vida y rela- A su vez, el programa establece un sistema de desempate, F. Zubarán
ción costo-beneficio. el cual se solucionará según la coincidencia de parejas de
Para llevarla a cabo, el art. 15 de la Ley 24.193 de Tras- Guía de Derecho
equipos de trasplante de la misma provincia y la suma de tiem-
plantes de Órganos y Materiales Anatómicos establece como po en diálisis de ambos receptores. Internacional Privado
requisito esencial la relación de parentesco entre el receptor y EDUCA
el donante. Cuando un receptor no posee donantes relaciona- Consentimiento informado
2017
dos biológicamente compatibles, el trasplante con donante vivo La resolución contempla un anexo en el cual tanto el donan- ISBN 978-987-620-349-4
no puede realizarse. te como el receptor deberán consignar su consentimiento infor- 515 páginas
Registro de Donación Renal Cruzada mado. En este, el Instituto incluye un prólogo explicativo del
proceso, así como también la información acerca del derecho
El registro incorporado al programa recopila la información a revocar la adhesión al programa, la descripción del procedi-
necesaria para la valoración clínica e inmunológica de los Venta telefónica: (11) 4371-2004
(2) Ver http://www.incucai.gov.ar/index.php/component/glos- Compra online: ventas@elderecho.com.ar
(1) Ver http://www.incucai.gov.ar/files/docs-incucai/Legislacion/ sary/Glosario-1/C/Cross-match-43/. www.elderecho.com.ar
Reso_INCUCAI_435-17.pdf. (3) Ver https://medical-dictionary.thefreedictionary.com/HLA+mismatch.

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