Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
atrapar una
Oveja 2
Un Romance shifter con Mpreg
Tara Harris
Para
mis Lectores
Espero que disfruten este breve romance entre Ranulf y Fergus, dos
machos Alpha. Dado que se trata de una fábula romántica, el embarazo es la
única cosa que mis personajes tienen que temer al participar en relaciones
sexuales sin protección. Como las cosas son muy diferentes en nuestro mundo,
les pido que usen condones al tener cualquier aventura sexual propia.
3
Sinopsis
—No lo entiendes, ¿crees que sólo porque pasé la noche contigo,
realmente podría preocuparme por ti?
Una noche fatídica cambiará sus vidas para siempre. ¿Pueden dos
hombres de diferentes orígenes encontrar juntos un futuro?
La historia violenta entre los clanes estaba toda en el pasado, algo que era
mencionado brevemente en la escuela antes de pasar a gramática y
matemáticas. Ahora, como todo buen estudiante sabía, los lobos practicaban el
buen gobierno. Mantenían el pueblo seguro y limpio. La economía zumbaba a
un ritmo saludable, como ciudadanos comprometidos en el comercio con otras
localidades.
Excepto...
5
Excepto que la versión oficial, sancionada por el castillo, no tenía mucha
relación con lo que realmente se practicaba en la vida real. A pesar de lo que se
enseñaba a todos los pequeños shifter ovejas en la escuela del pueblo, muy
poco había cambiado desde los días en que los shifter lobo asolaban a los
pobres shifter oveja de los campos.
Y desde ese día, Fergus declaró una guerra no oficial contra los lobos del
Clan Wolverne.
No. El mejor robo tendría que ser indetectable. El último tío de Fergus,
Calum, había sido un alquimista aficionado. Calum nunca descubrió una forma
de fabricar oro, pero se había tropezado con algo que parecía similar. También 6
había encontrado una manera de duplicar joyas de vidrio. Con una buena
cantidad de retoques, Fergus pronto dominó el arte por sí mismo.
Capítulo 2
El día del impuesto caía el primer día de cada nuevo año, recordando a los
ciudadanos que la promesa del nuevo año era templada siempre por el
gobierno continuo del clan Wolverne.
Fergus estaba aún más incómodo por el hecho de que el día del impuesto
era una ocasión formal, forzándolo a ponerse un kilt formal en vez de sus
pantalones de costumbre. Le trajo a la mente todos los muchos días de fiesta
cuando su familia había sido forzada a usar sus mejores galas y reverenciar al
rey mientras que este se paseaba ante ellos. Como si alguien tan horrible como
el Rey se mereciera tal obediencia.
Fergus se enfadó por tener que usar el kilt ceremonial, pero no tenía otra
opción. Uno tenía que elegir sus batallas con los lobos, y prefería sus robos
nocturnos a la confrontación directa. Podía ser un poco imprudente, pero no
era tan estúpido como para meterse directamente con bestias que tenían
mandíbulas fuertes. No era justo que la naturaleza les hubiera dado a los lobos
todo, y que hubieran transformado ese poder crudo en riquezas incalculables.
Mientras Fergus se abría paso a través de los pasillos del castillo, frunció el
ceño al borde dorado que recortaba cada espejo del piso. Los lobos eran bestias
vanas. Como si él pudiera ayudar a que su forma no humana no fuera
elegantemente musculosa y mortalmente peligrosa cuando surgía.
Él era muy seguro y fuerte, era un hombre muy sólido, pero nunca se
sentía tan voluminoso cuando estaba en presencia de lobos. Un giro mal
calculado lo llevó a un encuentro con una alfombra torcida, y se encontró
siendo lanzando hacia delante, derramando el contenido de su cesta sobre la
alfombra.
8
Extendido en la gruesa alfombra, movió sus miembros, comprobando que
no hubiera nada roto. Al levantarse, levantó la vista y vio unas botas oscuras y
pulidas. Botas que se unían a unas piernas extremadamente firmes. Piernas en
muy buena forma por el aspecto de ellas, adornadas con vello oscuro que...
continuaba bajo la falda escocesa del hombre... donde se unían con... Oh. Oh
mi...
—Muy suplicante, ¿no es así? —una voz resonó desde algún lugar más
arriba en el hombre—. No es frecuente que un shifter oveja sea tan dispuesto en
su presentación a su príncipe.
—Mis disculpas, alteza —dijo Fergus, con la cara roja por la vergüenza de
su exposición, así como por la sensación humillante de tener que doblegarse
ante el Príncipe de estos detestables shifter lobo.
—¿Y qué tipo de pago tienes para nosotros hoy? —Preguntó el príncipe, su
mirada desdeñosa barriendo sobre Fergus.
—Debe haber sido un buen año para llenar una cesta así —dijo el príncipe
Ranulf.
La falda escocesa de Fergus estaba bien posicionada esta vez, pero su cara
continuaba ardiendo mientras se inclinaba para recoger las monedas de oro
errantes. Supuso que el príncipe había seguido caminando mientras se
agachaba para recoger las piezas de oro. No se dio cuenta de que el otro
hombre se había quedado a mirarlo mientras trabajaba, hasta que se puso de
pie, y casi tropezó con el príncipe. No sólo se sorprendió de que el príncipe
Ranulf todavía estuviera allí, sino que se dio cuenta de que al parecer el príncipe
se había acercado a él para observar su trabajo.
Ahora, de pie, frente a frente, pecho con pecho, Fergus se sintió nervioso
y más que un poco intimidado.
10
Capítulo 3
La sala de recaudación era bastante grande, pero en un estilo
terriblemente frío, imponente. El techo se elevaba muy alto, pero la habitación
era oscura y prohibida. Varias estatuas y armaduras adornaban el espacio, un
recordatorio no muy sutil de quién tenía el poder. Los lobos no eran estúpidos,
cualquier cosa que pudiera haber sido usada como un arma se mostraba
demasiado alta para que fuera de cualquier uso para Fergus o cualquier otro
shifter enojado. Fergus miró con ansiedad a un mazo que estaba suspendido
del techo. Tenía un gancho particularmente desagradable al final. No es que
pudiera realmente imaginar el lanzamiento de un instrumento tan odioso
contra este príncipe arrogante, pero poseerlo sin duda alteraría sus
interacciones, ¿no? Cuán diferente sería que el príncipe Ranulf lo mirara, lo
tratara, si se daba cuenta de que había límites. Si el príncipe Ranulf se diera
cuenta de que Fergus no podía ser intimidado por él. Si tuviera que mirar a
Fergus y saber que debía tratarlo adecuadamente, o la violencia engendraría
violencia. 11
El Alpha en Fergus se enfureció contra su servidumbre mientras
observaba las monedas de oro pasar a través de las manos del Príncipe. Era su
oro, su Clan, y cada pedazo de él era duramente ganado. Sin embargo, a pesar
de su trabajo, todavía no habría sido suficiente para pagar lo que se les exigía si
no se hubiera convertido en ladrón. Pero aun así habían comido muy poco los
últimos meses. Fergus siempre había sido ancho de cuerpo, pero incluso su
ropa había comenzado a quedar suelta alrededor hasta que su tía amablemente
le había hecho costuras.
—¡Como muchas jóvenes ovejas pueden dar fe! —Fergus espetó con rabia,
con el rostro cada vez más rojo, al recordar las terribles humillaciones que su
clan había sufrido durante siglos.
¿Podría ser, Fergus pensó, incrédulo, que el cruel reinado del Rey Cinead
terminara finalmente?
—Sí —dijo Prince Ranulf, mirándolo con los ojos estrechos, bajando la voz
por varias octavas—, no tengo ningún interés en las shifter oveja, pero
disfrutaría de un buen carnero.
Fergus había oído todas las bromas de las ovejas, pero lo que los lobos 14
olvidaron es que un carnero puede tener patas tan seguras como una cabra de
montaña. Lo cual, por supuesto, había hecho que su caída frente al Príncipe
fuera aún más vergonzosa y humillante. Pero ahora, por la noche, no tenía
ningún problema escalando las colinas debajo del castillo. Cuando llegó a las
pesadas paredes de piedra del castillo, Fergus cambió a forma humana y vistió
el disfraz que había traído consigo. Se había teñido los pantalones y las ropas
con un tono oscuro, para mezclarse mejor con las sombras.
Los brazos y las piernas de Fergus eran extremadamente fuertes por los
años de trabajo pesado en los campos, pero una subida vertical todavía tenía la
capacidad de hacer sudar incluso las almas fuertes de los hombres. Se sentó en
la ventana por un momento, recuperando el aliento y dejando que sus ojos se
ajustaran a la oscuridad, antes de entrar. La habitación estaba a oscuras, pero
había una cantidad decente de luz de luna desde la ventana. La luz caía
perfectamente, iluminando una impagable estatua de mármol de uno de los
antepasados del rey. La cabeza de la estatua estaba coronada con largos y
moldeados rizos y coronada con su premio, esa corona de oro que brillaba a la
luz de la luna.
—Esta es sólo mi primera noche en estas habitaciones —la voz gruñó bajo
y feroz—, ¿cómo sabías a que alcobas me había mudado?
—¿Coronarme?
—¿Disculpe? 17
—Pasé una buena parte de la tarde pensando en estar dentro de ti—dijo,
una sonrisa maliciosa en su rostro—, y el resto del tiempo pensando en lo
maravilloso que sentiría que tú me montaras, esa polla gruesa reclamando sin
cesar mi culo.
—¿Crees que no sabía que estabas mirando lo que había debajo del mío?
—Y, sin embargo, allí estabas. Fue toda una genuflexión1 —dijo el
Príncipe, su mano bajo la camisa de Fergus—. Lo admito, me sentí agitado... ...
¿y esta noche regresaste, buscándome en mis cámaras privadas? ¿Qué sería de
un lobo si no tomara un aperitivo que ha sido ofrecido a la medianoche?
1
Acción de doblar una rodilla, o ambas, hacia el suelo, generalmente en señal de reverencia,
sumisión o adoración. O.O
Fergus se retorció. Esa propuesta sonaba increíblemente atractiva.
—Oh, sí —dijo el Príncipe Ranulf, casi cepillando la boca de Fergus con sus
propios labios—, pensé mucho acerca de esta tarde. En el momento en que
llegue a la cama, ya estaré disparando hebras de....
Fergus lo empujó con tanta fuerza que el Príncipe cayó sobre una gran
cama con dosel. Cubrió al Príncipe con su cuerpo, fijándolo allí.
—¿Creo que las ovejas se supone que deben ser suaves? —Preguntó el
Príncipe.
19
—No confundas un carnero con una oveja. Son dóciles y suaves. Nosotros
no lo somos.
—Bueno —dijo el Príncipe—. Ninguno de los dos son shifter lobo —dijo,
agarrando a Fergus y lanzándolo por encima—. Me gusta un poco la agresión en
un amante —dijo el Príncipe, jadeando mientras cubría a Fergus con su cuerpo.
—Disculpa, no pensé que fueras uno, sólo tenía que preguntar. Estoy
encantado de escuchar que no habrá razón para usar un... —Él se mordió la
lengua, por casi decir "piel de oveja". Dudaba que habría sido bien recibido.
Cuando él le había limpiado por completo, Ranulf estaba allí con su cabeza
en el regazo de Fergus, prácticamente envuelto en lujuria. Él se hubiera
contentado con pasar el resto de la noche de esa manera, apoyado en los
poderosos muslos, la cabeza en el regazo de Fergus, pero Fergus estaba
dispuesto a devolver el favor, y metió su mano entre las piernas y empezó a
jugar con su polla hasta que el Príncipe Ranulf estaba casi a punto de
explotar. Olvidando la boca de Fergus, su nivel de excitación era tan grande que
sólo no podía pensar.
21
—De rodillas carnero —Ranulf gruñó—. Estás a punto de conseguir el
tratamiento real completo.
—No sé lo que te gusta... —dijo Fergus—, pero se pondría mejor si usa una
esencia o aceite o algo...
—Sí —dijo Fergus, tomó sus rodillas con sus manos, para que el príncipe
fuera capaz de acceder a él.
—¿No va a llamar a los guardias? —Preguntó Fergus con una voz llena de
pánico.
—¿Y que te lleven al calabozo? —Ranulf negó con la cabeza—. No soy ese
tipo de hombre. Aunque..., —dijo, sonriendo ahora—, si te ofrecieras tú mismo 22
no creo que objetaría mucho.
—No, tonto carnero. Sólo creo que la idea de estar atado y encadenado es
muy muy excitante —lamió el hombro de Fergus para enfatizar su punto—. No
quiero hacer nada con la corona, excepto tal vez esto —dijo, levantando su boca
para un beso profundo.
Fergus asintió. Eso sonó como una descripción exacta. Su clan odiaba la
tiranía de la Corona.
—¿Crees que estoy ofendido por intentar robar algo de mí? —El Príncipe
preguntó—. ¿Cómo podría después de lo que mi padre y mis antepasados han
robado a tu clan y tantos otros? —Él dio un profundo suspiro—. Rompió mi
corazón el ver las miradas en las caras de mis súbditos en la actualidad. Y estoy
totalmente de acuerdo con ellos. Un Rey puede ser un gobernante fuerte y
potente sin aterrar a su propia población. El largo reinado de mi padre está
llegando a su fin, es hora de que empecemos a vivir de acuerdo con los
principios de nuestro reino, principios que, lamentablemente no se siguieron en
tantos siglos.
—¿Es en serio?
—Pensé que nunca lo preguntarías, pero, en primer lugar, tengo una boca
que amar —Ranulf dijo con voz ronca. Respirando con dificultad, inhalando el
aliento de Fergus, dio un gemido de agradecimiento—. Mmm...—dijo—, el
toque perfecto de montaña y campos de trébol...
23
Fergus se estremeció cuando los labios del príncipe Ranulf descendieron
sobre los suyos. Y mientras movía su lengua dentro de él, sus caderas se movían
al ritmo con sus bocas, todo fue superado por la necesidad de amor. No el
sexo. Necesitaba amor. Pero, ¿cómo puede ser esto amor? Tuvo que empujar ese
pensamiento, claramente su cerebro estaba tan confundido como el resto de su
cuerpo. Era solo sexo, incluso si el príncipe era una muy buena cogida.
Sin embargo, él sonrió, una gran torpe, sonrisa lujuriosa, cuando las bolas
del Príncipe golpeaban repetidamente contra él. Y la forma en que el Príncipe
movía las manos arriba y abajo de su eje palpitante... era imposible tener
suficiente contacto con el cuerpo increíble de este hombre.
Y entonces el Príncipe gruñó, un sonido áspero y gutural que sólo podía
provenir de un shifter lobo. Y gruñó. Y gruñó cuando su pene se liberó
violentamente, llenando el centro de Fergus con resmas de esperma caliente.
Fergus se quejó en voz alta y disparó su carga contra las fuertes manos del
príncipe, ronda tras ronda de semen saliendo de su cuerpo. En el momento en
que esperaba que el Príncipe Ranulf saliera de su cuerpo, Fergus se encontró
retorciéndose con una sorpresa inesperada.
—¿Qué es qué?
Ranulf negó con la cabeza. —No se sabe muy bien. Varía. A veces se acaba
en pocos minutos, a veces más tiempo. Sólo trata de respirar, mi
querido. Respiraciones profundas. Cuidado, no quieres respirar demasiado
rápido o hiperventilaras.
—Sí, supongo que es parte de ser un lobo, ¿o tal vez tiene algo que ver con
ser el Alpha designado? Incluso antes de ser Alpha, siempre fui el
heredero. Pero es diferente con el nudo. Si alguna vez me encuentro a mi
compañero predestinado, será increíblemente intenso cuando esto suceda, es
una forma de reclamar a mi Omega. El nudo será extremadamente poderoso, y
esa unión dará lugar a su embarazo.
—Claro— dijo Ranulf—. Creo que es justo lo que todos los lobos Alpha
hacen, supongo que es sólo mi cuerpo preparándose para cuando me encuentre
con esa persona especial.
—Su Majestad —Fergus gimió bajo él—, esto se está poniendo muy difícil
de tomar. Sigue creciendo en mí...
Él sabía que estaba adelantándose, pero ¿cómo dos personas que habían 26
estado conectados de la manera que lo habían hecho no podrían hacerlo como
amigos? Su química había sido explosiva. Esa boca. Esas pequeñas orejas,
nunca tuvo una cosa por las orejas antes, pero Fergus era absolutamente
delicioso. Muy, muy comible. Fergus retorciéndose debajo de él era increíble,
todos los shifter ovejas naturalmente tenían lana, a menos que estuvieran en la
esquila. Fergus tenía suficiente lana hasta donde contó. Además, su cuerpo
tenía el pelo suficiente para dos de ellos. Él sonrió. Tenía el clásico cuerpo de un
lobo, incluso en forma humana no había escondido su otro lado.
—Buenos días mi dulce oveja —dijo, sonriendo—. Tengo algo que decir —
dijo el Príncipe, llegando a rozar a Fergus—, ¡anoche fue un infierno de
celebración por convertirme en regente! Ahora, ¿qué debemos celebrar esta
mañana? ¿El amanecer de una nueva era en el reino?
—Uh huh. Una de las ventajas de ser un lobo Alpha es que somos atadores
fantásticos. Ayuda a prolongar la euforia orgásmica. Yo no tenía idea de que los
shifter ovejas podían hacer lo mismo.
—Creo que hay muchas cosas que no sabes acerca de las ovejas —dijo
Fergus. Podía haber añadido que su pene nunca había experimentado antes el
nudo, pero se mordió la lengua. Él había tenido un montón de tiempo con el
Príncipe, pero no había necesidad de dar una imagen desagradable y creer que 28
era más especial de lo que ya creía. Fergus sentía que tenía un tiempo
fantástico con el Príncipe, y fue de lejos el mejor sexo que había tenido en su
vida, pero ahora era de día, y el Príncipe Ranulf seguía siendo un lobo y él una
oveja, lo que se sentía natural entre sus cuerpos nunca podría ser conocido
públicamente.
—Te amo —Ranulf le dijo al oído—. Te amo —repitió, su voz más fuerte
ahora. No estaba preparado para la reacción de sorpresa de Fergus.
—Está bien —Ranulf le aseguró, sabiendo que anudar puede dar lugar a
una reacción intensa para ambos compañeros—. Soy sólo yo. Tú único y
verdadero Príncipe.
Tal vez eso es lo que había supuesto debía ser, pero tan físico como su
tiempo juntos había sido, Fergus también lo había encontrado
sorprendentemente tierno e íntimo, especialmente cuando el Príncipe le había
tranquilizado cuando se había anudado dentro de él. Ranulf había hecho todo lo
posible para aliviarlo, relajarlo. Le había estimulado, mordisqueado y susurrado
y Fergus no se había sentido como un objeto sexual, se había sentido cuidado y
atendido, no sólo deseado. Y él había tratado de mostrarle al Príncipe la misma
ternura inesperada cuando se había anudado dentro de él también. Pero al
final, era una oveja, y el Príncipe era un lobo, y los dos nunca estarían
juntos. Claro, el Príncipe parecía amable y bien intencionado, pero él sólo había
sido regente un día. Dale tiempo, y él resultaría tan loco de poder como su
padre enfermo. Fergus nunca podría permitir que nadie supiera lo que había
sucedido entre ellos, sobre todo, que había sido lo suficientemente débil como
para imaginar al Príncipe ser tan amable como guapo. Él era el Alpha del clan
Dougal. Su gente perdería todo el respeto para él si supieran que había ido
voluntariamente a la cama con el Príncipe.
—Porque —el Príncipe dijo con tristeza—, pensé que sentías algo entre
nosotros. Una conexión. Porque pensé que estábamos forjando un nuevo
comienzo, tú y yo, forjando un futuro en el que los lobos no son opresores y
donde las ovejas no son víctimas oprimidas.
—¿Y pensaste todo eso de un encuentro de una sola vez? Supongo que
crees en cuentos de hadas.
—Pensé que podía ser libre para ser yo mismo contigo. No un príncipe
pomposo. Sólo yo. Sólo yo acostado en los brazos amorosos de alguien muy
especial. Yo estaba obviamente muy mal —Ranulf miró hacia la corona en la
mano. —Aquí —dijo sosteniéndola hacia fuera—, tómalo como un regalo, un
símbolo de lo que podría haber sido si tan sólo pudiéramos ir más allá de
nuestras historias compartidas.
—Adiós, mi dulce carnero —Ranulf dijo con tristeza—. Lo siento por lo que
mi familia ha hecho a tu gente. Me gustaría poder hacer más, pero no puedo
deshacer el pasado. Sólo puedo avanzar y guiarnos hacia un mañana mejor.
Sería mi deseo tener un beso de despedida, pero ya sé que no concuerda con
tus propios sentimientos, no voy a obligarte. Te deseo un buen día y una buena
vida. 31
Y con esto, se volvió y salió de la habitación, cerrando la puerta de su
estudio adjunto.
Alisó las mantas de la cama, sorprendido por el daño que había infligido a
la lujosa ropa de cama. La corona se veía tan triste en la almohada, pero era lo
que había que hacer, incluso si rompía aún más el corazón del príncipe.
Fergus estaba casi en la ventana cuando corrió por la corona. Joder de ser
noble, tenía un clan de ovejas que cuidar. ¿Por qué los señores lobo tienen tales
galas, mientras que su pueblo sufría? Y así Fergus hizo lo que tenía intención de
hacer en primer lugar, deslizó la corona en su mochila, liberando al Castillo
Wolverne de uno de sus finos tesoros. Habría escapado con él la noche
anterior, se habría sentido victorioso, pero ahora le dejaba con un gran nudo en
la garganta. Y a diferencia de lo que había ocurrido entre él y el príncipe Ranulf,
no había nada bueno que decir acerca de la sensación.
Fergus estaba a medio camino abajo de las paredes del castillo cuando
sintió ardor en los ojos por las lágrimas. Maldita ambrosía, maldijo, a pesar de
que todavía estaba muy por encima de la tierra para ser afectado por su
polen. Pero era la única manera de que pudiera justificar sus lágrimas sin
admitir un corazón roto.
32
Capítulo 7
Varias semanas más tarde
Las primeras semanas del príncipe regente Ranulf habían sido muy
estresantes, y era aún peor porque pasaba el tiempo preocupándose por cómo
había dejado las cosas con Fergus.
—Hmm —El viejo doctor Drummond alzó la vista de sus gafas con una
mirada de preocupación.
Ranulf entró en pánico. —Por favor. Por favor, no me diga que tengo
alguna enfermedad rara.
—Oh, usted tiene algo raro su Majestad, pero yo no diría que es una
enfermedad. ¿Cómo desea manejar el asunto?, por supuesto, es su decisión
—Aparte del hecho de que no hay otro macho Alpha lobo en este
momento ¿Hay algún otro macho Alpha en el reino?
—Por supuesto que lo tienen. Sí..., —el viejo médico carraspeó—, Yo...
eh... tengo que consultar con algunos de los rollos antiguos para estar seguro
antes de hacer mi diagnóstico —dijo, sacudiendo la cabeza.
34
—Me temo que tendrá que sentarse para esto —dijo en tono de disculpa el
viejo médico. Tenía en la mano un gran cubo.
Al ver la mirada del Príncipe en el cubo, dijo, —en caso de que sea
necesario.
—Es muy grave pero no es su estómago. Es... es algo que nunca debería
haber ocurrido. Su alteza, no hay manera fácil de decir esto, pero ha
concebido.
—¿Estoy qué?
—Encinta. Embarazado.
—No sea tonto, Doc. Soy un macho Alpha. Los únicos hombres que son
capaces de embarazarse son los Omega.
Ranulf tragó. —¡Por supuesto que anudé! ¡Siempre tengo una cierta
cantidad de nudos!
—¿Por ejemplo?
—¿Significa?
—Los Alphas son los seres más dominantes. Un Alpha solamente
concebirá ante otro Alpha si ambos se someten.
—¿Hay otra cosa que usted deba decirme acerca de esta... esta situación
en que me encuentro?
—Su Majestad, tengo que admitir que tengo una sensación de... vamos a
llamarlo desdén... con respecto a las ovejas. Siempre les he creído débiles
mentales y perezosos, prácticamente son así por naturaleza, aunque algunos
dicen que tienen disposiciones dulces ... pero, nunca he conocido a este
compañero suyo, y no sería justo que yo le juzgue en nada que no sea sus
propios méritos. Podría ser un lobo viejo intratable, pero no estoy tan ido como
para no tener otro punto de vista. Se habla mucho de los compañeros
predestinados. Hay muchos que no encuentran al suyo y terminan muriendo
solos. Es evidente que usted ha encontrado al suyo. Sólo deseo lo mejor para
usted, Alteza... Para usted, su pareja y sus hijos.
—No es ese tipo de tri, ellos serían más fáciles. Los Trifters se producen
sólo en los embarazos Alpha. Una unión Alpha perfectamente alineada de
forma permanente no tiene padre dominante, y da lugar a descendientes que
terminan heredando las habilidades de cada padre. Si usted está teniendo un
trifter, su hijo tendrá la capacidad de cambiar de humano a lobo y a oveja.
No sería una cosa simple sacarlo del trono. Fue nombrado Regente, no
podía simplemente ser derribado sin luchar.
Ranulf negó con la cabeza, había pasado toda su vida en torno a los
lobos. Él sabía sus prejuicios demasiado bien. No aceptarían a su
heredero. Jamás se permitirá a ningún shifter oveja en el trono... Pero ¿y si de
hecho era un trifter? Él todavía sería un lobo, sólo uno con la capacidad inusual
de cambiar en un ser humano o una oveja. ¿Tal vez podría convencer a su clan
que era un regalo que ofrecía la capacidad única para espiar a las ovejas y
mantenerlos en su lugar?
¿Por qué había aceptado las duras palabras de Fergus sin examinar las
emociones detrás de ellas? Nunca debería haber dejado ir a Fergus. Tendría que
haberse dado cuenta de que Fergus había sido atrapado entre sus repentinos
sentimientos y la historia terriblemente oscura de su gente. ¿Cómo habría
reaccionado si su situación se hubiera revertido?
39
Capítulo 8
—¿Es cierto, lo que dicen en la ciudad?
Fergus miró a su primo Alban entrar en sus humildes moradas. —Me temo
que no estaba escuchando —dijo—, ¿qué es cierto?
—¿Qué por fin habrá un cambio para nosotros? ¿Qué el viejo rey se
encuentra en su lecho de muerte, mientras que su hijo el Regente se haya
enfermo?
—Oh bastante enfermo —dijo Alban—, por muchas semanas. Dicen que
apenas puede sentarse en el trono sin marearse. Mejora un poco durante el día, 40
pero prácticamente tira sus tripas en la mañana.
—¿Sí? ¿Has estado enfermo en la cama todas las semanas desde que
visitaste el castillo?
—El agua —su primo sugirió—, debe haber estado algo mal con el agua en
el castillo.
—Yo prefiero un problema como ese —dijo Alban—. ¿No te gusta ganar?
—Por supuesto —dijo Fergus, con una carcajada—, es sólo que ganar es
más satisfactorio cuando tu oponente da una buena carrera.
—Bueno, entonces, tengo una propuesta adecuada para ti, si estás
buscando un reto difícil, hemos estado hablando entre nosotros, y muchos han
acordado que el tiempo está a favor de nosotros. Esta es nuestra oportunidad
de tomar nuestra tierra, nuestras vidas, y estar libre de los lobos para siempre.
—Sí, y no soy el único. Nos liderarás por supuesto. Nada se puede igualar a
tu fuerza, y por supuesto, tu conocimiento de la disposición del castillo.
—Pero el Príncipe Regente, pronto será el nuevo rey, ¿crees que sería lo
mismo? Estaba allí cuando pagué nuestros impuestos, y no parecía estar hecho
de la misma pasta.
—¿Destruidos?
—Sí, por ti. Eso es menos que el augur de una batalla. Pero será mejor
hacerlo pronto. Si el Príncipe Regente muere, sería el siguiente hermano el que
estaría en la línea, y es un tirano en ciernes. Hay que asegurarse de que toda su
línea sea aniquilada.
—Pero una vez que estés sano, podemos atacar el castillo, y puedes
recuperar todas las monedas, además de mucho más.
Fergus negó con la cabeza. —Es una mala idea pasar más tiempo en ese
castillo de lo necesario.
—Sí, pero sus síntomas son mucho peores que los tuyos. Tal vez tu
enfermedad será más fácil de tratar.
43
Capítulo 9
Fergus se acercó al castillo con una sensación de inquietud. No por su
propia salud, sino también por el Príncipe Ranulf. En lugar de buscar de
inmediato un médico, Fergus se desvió hacia los aposentos privados del
castillo. Con cierta dificultad, y una gran cantidad de nervios, se encontró
subiendo las escaleras hasta el dormitorio del príncipe.
—¿Por qué debería ser diferente hoy? —El Príncipe dijo con tristeza.
—¿Cuántas veces he pensado que has vuelto a mí, sólo para ver que estoy
equivocado?
—Soy yo, mi Príncipe. Estoy aquí para ti. No puedo soportar verte así. No
voy a irme de nuevo. Tenemos que conseguir que te mejores.
—Si te vas a quedar, puedo sobrevivir las próximas semanas, voy a tener
todo lo que deseo.
—Eso es más de lo que merezco. Me temo que no te traté justamente
cuando nos separamos. Si puedes encontrar espacio en tu corazón para
perdonarme...
—Puedo más que encontrar el espacio para ello. ¿No entiendes? Eres
mi corazón.
—Sin duda, una maravillosa manera de pasar la noche, pero es mucho más
que eso. Si puedo sobrevivir este embarazo, serás el padre de mis hijos.
—¿Qué?
—¿No lo sabías?
—Eso fue todo. Ese fue el momento en que me quedé embarazado de tus
hijos. Ha sido un embarazo difícil, he estado bastante enfermo por las
mañanas, a veces todo el día. Ha interferido con mi papel como Regente, pero
sigo adelante con mis propuestas —dijo, extendiendo su brazo en la dirección
de una mesa cercana—. Ellas están allí si deseas leerlas. Confío en que será un
gran paso en la dirección correcta.
—¿No te molestaría?
—Sí.
—Lee primero.
Y así lo hizo. Fergus se puso de pie con una mano sosteniendo la mesa de
madera fina mientras leía el documento más increíble que jamás había visto en
su vida. —¿Un paso en la dirección correcta? No tenía ni idea de que fueras tan
subestimado. Este... Nunca esperaba ser un igual… Esto lo cambia todo.
—Mi padre, el rey Cinead murió en la noche. Fui declarado el nuevo rey
esta mañana, Rey Ranulf Primero. En toda la ceremonia apenas podía evitar
las arcadas.
Fergus asintió.
—Entonces, ¿Fergus Dougal me tomas como soy, me harías más que feliz
si fueras mi marido y el rey de este reino?
—Ambos, supongo.
—¿Un trifter?
—¿De hacértela? 48
—Mmm... Sí, también de todo tipo de formas pervertidas. Pero, sobre
todo, me encanta oírte decir 'mi marido'. Hay otra cosa que es sorprendente,
aunque...
—De acuerdo con el médico real, la única forma en que un macho Alpha
podría quedar embarazado de otro macho Alpha sería si su unión, su papel
como compañeros predestinados, fuera tan potente que...
—¿Qué?
—Que cada uno de ellos impregne al otro a su vez. Pero, supongo que
incluso el médico comete errores, y puesto que él estaba tratando con una
situación teórica no podía haber ninguna certeza.
—Creo que los bebés saben que su otro padre está aquí ahora y cuidará
de mí.
—¿En la cama del rey? —Él negó con la cabeza—. Pero nosotros debemos
casarnos tan pronto que sea posible, no podemos tener a los bebés, todos
nuestros maravillosos bebés, nacidos en el lado equivocado de la
manta. Quédate conmigo Fergus, quédate un poco más. Y luego vuelve a tu
gente y comparte la noticia, debe tomar un par de semanas preparar una fiesta
digna, y luego vamos a casarnos.
49
A Fergus le hubiera encantado pasar el resto del día en la cama, con sus
gruesos brazos envueltos protectoramente alrededor de su amado. Él no habría
sido capaz de separarse de Ranulf si no tuviera otras funciones importantes, es
decir, volver a casa con el fin de sofocar la charla de la rebelión. Si se quedaba
más tiempo en el castillo sin primero hablar con su pueblo, temerían lo peor por
una larga ausencia, podrían pensar que lo apresaron o algo peor. Lo último que
quería era que sus momentos de tranquilidad a solas con el rey terminaran
siendo los motivos de un ataque mortal.
Pero tendrían el resto de sus vidas para amarse. Es decir, si Fergus podía
convencer a su clan que el Rey merecía vivir. Eso podría ser un reto, incluso si él
era el Alpha.
Fergus besó a su Rey diciendo adiós, después de haber asegurado su
promesa de que el médico real le asistiría en su ausencia.
50
Capítulo 10
Los rangos superiores del clan Dougal estaban reunidos por orden de
Fergus, curiosos en cuanto a los planes de su líder.
Fergus los saludó a todos con ganas. Él tenía tanta alegría en su corazón
porque tenía el amor de su vida, y el don de la libertad que ni siquiera se habían
atrevido a soñar.
—Sí, tuve una audiencia privada con el nuevo Rey. Él es nuestro aliado, no
nuestro enemigo. Durante su regencia, había elaborado un plan para un nuevo
gobierno que tiene la intención de poner en práctica pronto. En cada paso,
supera cualquier cosa que habría exigido de él.
—Entonces, tal vez puedas tener una feliz diversión. El Rey ha invitado a
todo el clan a celebrar con él dentro de dos semanas.
52
—No voy a ir a eso —dijo Euan—. No dejaré un tirano por otro
tirano. ¿Supongo que estaremos allí de pie lamiéndole los pies?
—El Rey Ranulf es diferente —dijo Fergus—. Y creo que ningún Rey ha
invitado al clan Dougal a su boda antes.
—¿Una boda? ¿Invitando a gente como nosotros? Hay algo mal allí.
—No, todo está bien. No sería bueno para el Rey, casarse y no invitar al
pueblo de su enamorado...
—Admito que es inusual, pero parece una forma correcta de manejar las
cosas. No es adecuado que lo impregne sólo para que nuestros hijos no sean
elegibles para el trono.
Esta vez, el shock en sus caras era aún mayor.
—Sí —dijo Fergus—, Aunque parece que los bebés podrían ser una rara
combinación de hombre, lobo y oveja, capaz de cambiar entre sus formas.
—Pero si está casado con el rey, y él da a luz, ¡usted será capaz de tomar el
control del reino si le corta la garganta! —Gritó el mismo joven impetuoso que
lo había interrumpido antes.
—¿Te permití hablar? —Fergus fulminó al joven—. Lo que iba a decir antes
de tu interrupción intolerablemente grosera es esto, el Rey Ranulf estableció un
nuevo orden de gobierno. Se conservará algo de poder, pero el resto reside en
el pueblo, lobos y ovejas por igual. Ninguno tendrá derechos sobre el otro,
todos son iguales.
Alban se acercó a él. —Primo, son extraños tiempos estos que estamos
viviendo, pero al parecer el mejor de ellos. Nunca en mi vida habría pensado
que te casarías con un lobo, y mucho menos el Rey, pero déjame ser el primero
en felicitarte y ofrecerte mis mejores deseos para los dos. Hace tiempo que juré
dar mi vida por ti, y aunque no soy llamado a hacer eso, te ofrezco mi apoyo
inquebrantable. Si alguien aquí no lo hace, van a tener que pasar por mí
primero.
—Y por mí.
—Y por mí.
—Y yo.
El corazón de Fergus se hinchó cuando uno por uno, cada miembro del
clan Dougal afirmó su solidaridad. Su familia, sus hombres, se acercaron a
Fergus, con ganas de abrazarlo. Para alguien que siempre había sido gruñón,
era demasiado. Fue vencido por la emoción.
—Cuidado —dijo Fergus con lágrimas en los ojos cuando Alban puso su
brazo alrededor de él—, estoy llevando una carga preciosa.
Y esta vez, su clan no lo miró en estado de shock, pero lanzaron sus manos
en el aire y gritaron sus calurosas felicitaciones.
54
Capítulo 11
Habían pasado décadas desde la última boda real, y los que la recordaban
sabían que la novia había aparecido mucho menos que entusiasta a la unión con
su marido real. Cuan diferente era con la nueva generación.
—Pero he estado muy bien desde la semana pasada. No, he estado bien
desde que aceptaste mi propuesta de matrimonio —Sonrió Ranulf—. Yo te
necesitaba. Nuestros bebés te necesitaban. Una vez que volviste a nosotros...
—Si puedes levantarte de nuevo después de ese arco, sería un honor —dijo
Ranulf con una sonrisa.
—Oh, estas piernas pueden soportar mucho más que este
vientre hinchado —respondió Fergus—. ¿O lo has olvidado?
—¿Olvidado? Paso mis noches soñando con ser amado por ti. Una vez que
el médico real de su aprobación, vamos a ver cuántas posiciones esas
poderosas piernas pueden soportar.
—Ah... no... —Fergus se quedó sin aliento, dando tumbos hacia adelante,
con el rostro aterrado mientras agarraba su vientre. Líquido se derramó entre
sus piernas.
—Los bebés tienen que ser capaces de salir —dijo el médico suavemente—
57
, y Fergus no está bien dilatado. Y para complicar las cosas, los bebés no se han
dispuesto en la posición adecuada para el parto todavía.
—¿Qué vas a tener que hacer? —Preguntó el Rey Ranulf con nerviosismo.
—Voy a tener que cortar a Fergus con el fin de sacar a los bebés. Y te
necesitaré por ayuda adicional. Voy a necesitar ayudantes para la operación, y
los bebés necesitarán atención.
—¡Los bebés! —Se sentía como un padre terrible, ni siquiera había tenido
tiempo de pensar en el riesgo para ellos—. ¿Pueden los bebés sobrevivir a
esta edad?
El médico real bajó la mirada hacia sus pies. —El período de gestación
típica es generalmente más largo para los shifter ovejas. Pero ya que él lleva a
sus hijos, no lo sé.
—Les quedan dos días. Por lo que no sabemos. Si los suyos están listos
para nacer, tal vez los de Fergus también.
—Sí —dijo Ranulf, la cabeza entre las manos—. Haga lo necesario para
salvarlo, para salvarlos a todos ellos.
—Parece que la boda real fue justo a tiempo, todos estos bebés están
ansiosos de convertirse en príncipes y princesas —dijo alguien en la habitación.
Ranulf quería gritar, pero le dieron algo para morder en su lugar. El dolor,
la agonía fue tan grave que casi atravesó el cuero que se colocó en la boca.
Alguien le pasó un paño húmedo sobre la cara, mojando los labios que
estaban lo suficientemente secos como para romper las ondas de dolor
apoderándose de su cuerpo. Estaban llegando más rápido ahora y duraba más
tiempo. Se sentía como si estuviera a punto de morir.
—Empuje, señor, empuje —voces le rogaron.
—Sus hijos, señor —dijo la enfermera, y abrió los ojos para ver a varias
mujeres y hombres de pie sobre su cama, cada uno con un hermoso bebé,
cuidadosamente envuelto en lino suave.
—Mi marido, ¿vive? —Preguntó el Rey Ranulf, con los ojos salvajes, con
pánico.
El médico real intervino. —Si usted promete no atacar a nadie —dijo con
gravedad—, y menos a mí. Los bebés de Fergus están todos sanos, pero fue una
operación muy difícil, y lo dejaron bastante débil. Él aún vive, pero no puedo
prometer por cuánto tiempo. Si es capaz de sobrevivir la noche, entonces debe
tener una buena oportunidad de sobrevivir, pero…
Ranulf miró a su marido, una sonrisa en su rostro mientras Fergus abrió los
ojos, teniendo la vista de sus hijos por primera vez.
—¿Lo hicimos? —Preguntó Fergus, su voz ronca y temblorosa—. ¿En
realidad lo hicimos?
Cada bebé sobrevivió. Cada uno de nosotros llevó a tres, tenemos seis
hijos Fergus, seis hermosos niños —dijo, sintiéndose que lloraba de nuevo.
—¿Dónde más podría ir? —Fergus preguntó—. Los amo mucho a todos.
61
Epilogo
Ranulf estaba recostado en su cama, la bebé Lorna en sus brazos,
mientras sus párpados empezaron a revolotear y decaer. En silencio Fergus
entró, cogió a su hija querida, y la mantuvo cerca. Cuando ella comenzó a
quejarse, Fergus la meció en la silla, tarareando suavemente una vieja canción
de cuna. Pronto, ella estaba dormida. Fergus se abrazó a su bebé para dormir,
su dulce aliento lechoso tirando de su corazón. Eran dos hombres
increíblemente afortunados de tener seis hijos maravillosos. Besó a Lorna en la
parte superior de su cabeza, saliendo a regañadientes de la habitación y
poniéndola en su cuna tallada a mano en el vivero real. Él hubiera querido
abrazarla mientras dormía, pero sabía que era mejor para sus bebés si tenían su
propia cama, y ellos necesitaban un montón de sueño.
El médico real les había dicho que sus cuerpos se habían curado, por lo
que este tipo de actividades eran seguras, pero con seis bebés, las alegrías de la
paternidad fueron acompañadas por una buena cantidad de agotamiento,
incluso con su enfermera y otros agentes para asistirlos. Se hubiera reído al
imaginar dos hombres en el mejor momento de sus vidas, sus impulsos
naturales frustrados por seis bebés que aún no podían hablar ni caminar hasta
ahora. No es que ellos no se demostraran amor. Ninguno de los dos podía
soportar estar cerca de su compañero sin su toque, no pasaba un día en el que
no se abrazaran entre sí. Nunca había esperado encontrar tal dicha
simplemente tumbándose en los brazos del otro, escuchando los latidos del
corazón del otro. Buscando la calidez de su marido, Fergus cuidadosamente se
deslizó junto al Rey Ranulf
—Tenemos suficiente espacio para ellos —dijo el Rey Ranulf—, pero son
demasiados niños y no seremos capaz de cuidar de cada uno como se merecen.
Sin embargo, las probabilidades de que se repita son bastante
raras. Médicamente, un embarazo doble Alpha es extremadamente raro, fue el
descubrimiento de que estamos destinados que empujó a nuestros cuerpos
más allá de estar diseñados a ser Alphas. Tal embarazo podría no suceder de
nuevo, para cualquiera de nosotros.
—Creo que se va a sentir bien... porque va a ser contigo —Fergus dijo con
ternura, reuniendo a su marido en sus brazos
—Increíble —Ranulf respiró, un rubor en su rostro.
—Fue más que eso mi amor. Sé que he tratado de negarlo, pero era más
que nuestros cuerpos, fue nuestro corazón —dijo Fergus.
—Una a la vez, mi amor, una a la vez —dijo Fergus, su voz baja y fuerte
cuando él presionó a su marido en el colchón.
Ranulf dio un gruñido y se volcó sobre Fergus. —No he dicho lo que quería
en primer lugar —dijo, rasgando los pantalones de su marido.
Fin
Con amor a mis
lectores:
¡Hola! Espero que hayan disfrutado esta novela. ¡Cada individuo tiene
derecho a su final feliz! Me encanta el amor entre chico y chico, escribo novelas
MM románticas y contemporáneas, novelas de Shifter con MPREG. Si estás
interesado en más romance MM, tanto de shifter y contemporáneas, por favor,
sígueme en Facebook Tara Harris autor.
66
Créditos
Shiva
Dragon moon
Clau
Isis
Pervy
67
Morgana Celtic