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Sara Ocampo Bermúdez

La cognición como profundización al desarrollo de una didáctica

Dentro del texto de Mariana Maggio, habilidades del siglo XXI, se nos plantea una
contrapartida para entender las habilidades que deben desarrollarse en las aulas de clase en la
época actual, habilidades que surgen por un histórico que Maggio en su primer capítulo presenta,
más allá de una línea temporal sobre el desarrollo que llevo a planificar y estipular estas
habilidades (que tal como nos lo deja saber, no son habilidades inamovibles o no pueden ser
luego replanteadas, puesto que con el rápido fluir de nuestra época la idea de trascendencia,
cambio y la adaptación continua de todo objetivo humano a las exigencias que el entorno solicita
está implícita en toda teoría, investigación y qué hacer educativo), nos induce pues, a una mirada
a las pedagogías cognitivas que permitieron reconocer el aprendizaje y la enseñanza desde un
paradigma que se alejaba de las ideas conductistas y nos acercaba hacia un nuevo planteamiento
acerca del cómo aprendía el estudiante (o a través de hipótesis, experimentación y teorías se
acercaba a ello), las estructuras de significado que subyacen a la hora de la enseñanza y la
renovación de significados y su aprehensión. Ahora bien, dentro del texto presentado me gustaría
enfatizar principalmente acerca del cómo el conocimiento sobre la cognición permite la
enseñanza de las habilidades del pensamiento en el aula de clase, pero más importante aún, que
es su conocimiento lo que nos permite desarrollar didácticas y tomar decisiones a la hora de
planificar o elegir un modelo de enseñanza, unas actividades, unos contenidos, una evaluación,
es decir que para el desarrollo de un currículo es indispensable tener presente también una
pedagogía cognitiva, puesto que es indudable el enfoque en la enseñanza de los estudios
realizados por estos psicólogos cognitivos.

En los intentos por estructurar la enseñanza se reconoce que los estudios cognitivos
permiten sentar bases para el desarrollo de dinámicas o planes que busquen como tal un fin
educativo, ya que la psicología cognitiva dentro de sus estudios tiene un enfoque sobre qué
estructuras subyace al pensamiento, convirtiéndose de esta manera la cognición como un aspecto
muy funcional a la hora de estudiar la educación, para que más allá de la repetición de saberes,
que la compensación o el castigo por un mérito exigido, la educación propenda hacia la
reestructuración de las estructuras significativas que posee el estudiante, todo esto con el fin de
que la educación no sea un proceso acabado, cerrado y utilitarista, sino más bien que se ciña a las
especificidades siempre actuales y que por lo mismo se imponga al cambio, al estudio y análisis
continuo. Sin embargo, el fin lo establece cada sociedad dependiendo sus necesidades y el
hombre en momento, lo que se busca con la psicología cognitiva, ya sea para la búsqueda del
criticismo en el estudiante o el conocimiento para la producción, es que sus estudios plantean
bases y objetivos que estructuran el quehacer educativo, por ejemplo, podemos ver la Taxonomía
de Bloom (1970) que propende a la formulación de objetivos educativos con una estructura
jerárquica que vaya de lo simple a lo complejo, de lo singular a lo plural, "reconoce una
dimensión afectiva, una dimensión psicomotora y una dimensión cognitiva. Esta última, a la que
se hace referencia más frecuentemente, está referida al conocimiento y la comprensión e incluye
como objetivos: conocimiento, comprensión, aplicación, análisis, síntesis y evaluación"
(Maggio, pág. 16)

Estudios cognitivos también revelan información acerca de la función del lenguaje y la


significación (manipulación de signos) y su favorecimiento al pensamiento, tal como el que
muestra Maggio en su texto destacando el programa de LOGO, “uno de sus creadores, Seymour
Papert lo ve como un medio para promover el pensamiento y las habilidades de pensamiento en
general” (Nickerson y otros, 1987, citado en Maggio, 2018) otro enfoque cognitivo que ha
rendido culto al estudio educativo ha sido la reestructuración de significados en el pensamiento;
el pensamiento lógico se encarga de aprehender y desarrollar modelos de conceptos ya
existentes, convencionalizados y tradicionales, por esta razón la mente funciona con modelos de
conceptos ya fijos, lo que limita bastante el uso de la nueva información a menos que se
disponga de una herramienta para reestructuras las estructuras de significación ya fijas
innovándose con nueva información objetiva, acerca de esto, el pensamiento Lateral y en los
estudios realizados por De Bono que se enfoca en esto aspectos particular del pensamiento nos
dice que “La función del pensamiento lateral es la reestructuración (perspicacia) de esos modelos
y la creación de otros nuevos (creatividad)” (De Bono, 1995, 17; citado en Maggio, 2018).

El pensamiento lateral, a mi modo de ver, es una función del pensamiento que permite el
cambio constante de la significación en el pensamiento, en cuanto a una estructura fija de
aprehensión de la realidad, el significado es una convencionalidad que permite nuestro
entendimiento, tanto desde el yo, como el yo con el otro y el yo con la realidad, sin embargo me
parece en suma importante resaltar que el hombre no es únicamente un ser social, sino que en sí
mismo es un ser creador, artístico y creativo, una de sus características es que constantemente
esta reinventadose a sí mismo y por esta misma razón que ese fluir constante, tanto en las ideas
como en la misma sociedad, es nuestra negación al estado atónito, a la inmovilidad; el
pensamiento lateral permite que podamos aprehender nuevos modelos de conceptos que se
adaptan tanto a la realidad del entorno actual como al pensamiento, incluso me parece importante
resaltar que al hablar de significados el pensamiento lateral permite construir (creatividad)
nuevas estructuras de significación que incluso se adapten a mí mismo, dependiendo mi análisis
del entorno, de esas estructuras significativas tanto tradicionales como actualizadas; al hablar de
nuestra realidad educativa que tiene como objetivo la criticidad y el análisis, la búsqueda por
implantar modelos educativos que estén en vía a la creación de hombres y mujeres con capacidad
crítica, analítica y un juicio a base de saberes serios, análisis propios, interpretaciones y no una
sociedad que está plagada por un pensamiento común (pensamiento medievalista) insertado y
guiado por una sociedad propagandística, sociedad que piensa lo que el otro piensa (y que este
otro tiende a ser los medios de comunicación, las redes sociales), sociedad que no está insertada
a pensar lo ya pensando, a pensar lo dicho, a pensar lo leído y presentado tanto en los medios
como en el voz a voz, sino una sociedad tan muerta en el pensamiento que pasa desapercibido
aquello que le dicen y que sepulturalmente va creyendo en esas realidad que le cuentan y no que
él ve, analiza y luego enjuicia. En cuanto a esto me parece en suma importante los aportes de De
Bono sobre el pensamiento lateral para una implementación de modelos cognitivos a la creación
de modelos educativos, y así mismo, la importancia de la cognición (sobre cómo funciona en
pensamiento) para la creación de didácticas y un currículo guiado con nuestros objetivos
educativos.

Bibliografía
Maggio, M. (2018). XIII Foro Latinoamericano de Educación. Fundació Santillana.

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