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Comentario de texto “El Avaro”.

Marta Izquierdo Ortega

Este fragmento pertenece a la obra “El Avaro”. Escrita en 1668, es una comedia de Molière
(1622-1673), actor, director y dramaturgo francés, además de ser el gran representante del teatro
clásico francés. Tras la pérdida de su madre a la edad de 10 años, Jean-Baptiste Poquelin, mejor
conocido como Molière, entra en contacto con el teatro gracias a su abuelo, que frecuentemente
acude con él a ver farsas y obras de Comedia del Arte. En este ambiente conoce a la familia
Bejart, con quienes funda la compañía del Ilustre Teatro en 1643. Tras sufrir algunas dificultades
económicas y sociales, logra convertirse en uno de los primeros proveedores de los espectáculos
de la corte real y finalmente muere minutos después de terminar de representar su obra “El
enfermo imaginario”. Escribe más de 35 obras, que se dividen en dos etapas: las que escribió
antes de llegar a París, como “Los celos del farfullero”, o “El doctor enamorado” y las que
escribió en París como “Tartufo” o “El Avaro”.

Esta comedia pertenece a la corriente del teatro clásico francés, que surge como oposición al
teatro barroco. Este tipo de teatro elimina lo irracional, separa lo trágico de lo cómico, cumple la
norma del decoro y la verosimilitud y se basa en la razón y el equilibrio renacentista. Podemos ver
esto reflejado en la obra ya que los personajes no son groseros y son muy cercanos a la realidad
de la época. Además vemos también algunas de las características del teatro de Molière como
son la presencia de recursos de la comedia antigua como la línea de conducta del protagonista,
la creación de un humor universal y atemporal que retrata las tachas y vicios del ser humano que
perduran en la historia, y la tipificación de los personajes (viejo adinerado, jóvenes muchachas
que deben ser casadas, cocineros, sirvientes, etc.).

Harpagón tiene dos hijos, Elisa y Cleante. Elisa está enamorada de Valerio, mayordomo de
Harpagón, y Cleante está enamorada de Mariana, pero Harpagón quiere casar a Elisa con el viejo
Anselmo por su dinero, y desea casarse él mismo con Mariana. Entonces, a sabiendas de sus
planes, Elisa y Mariana se desesperan y Cleanto decide pedir un préstamo a un usurero para
poder independizarse de su padre, a través de La Fleche, su criado, pero el usurero termina
siendo su propio padre y Cleanto descubre sus negocios. Finalmente Cleanto acaba confesando
su amor por Mariana a Harpagón por una trampa de su padre, y este le prohíbe amarla y tras una
discusión lo deshereda. Más tarde La Fleche descubre el tesoro escondido de Harpagón y se lo
comunica a Cleanto. Harpagón descubre que su dinero ha sido robado y Maese Santiago culpa a
Valerio porque le guarda rencor. Harpagón inculpa a Valerio y este se confunde creyendo que lo
está inculpando por casarse a escondidas con Elisa, y acaba confesando, por lo que Harpagón
ordena que lo condenen. Antes de ser condenado Valerio revela su identidad como el hijo de Don
Tomás de Alburcy, y Mariana corrobora la historia al declararse la hija de este mismo, con lo que
don Anselmo consigue recordar que él es Don Tomás de Alburcy. Entonces Cleanto aparece y le
dice a su padre que apruebe el matrimonio o no volverá a ver su dinero y Anselmo le pide a
Harpagón que reconsidere el matrimonio, el cual lo acepta con la condición de que Anselmo
pague el coste de ambos matrimonios.

El tema principal de la obra es la avaricia, presente durante toda la obra en el personaje principal,
Harpagón. Este tema también lo encontramos en todo el fragmento que analizamos, el cual
podemos dividir en partes según los subtemas que encontramos: en la primera parte, hasta la
línea 11, distinguimos la desesperación ya que Harpagón se lamenta porque no concibe la vida
sin su dinero; en la segunda parte, hasta la línea 19, encontramos el tema de la desconfianza ya
que este desconfía de todo le mundo, incluyendo sus propios hijos; y finalmente las dos últimas
líneas tratan el tema de la venganza que Harpagón planea darles a todos por robar su dinero.

Prácticamente cumple las unidades aristotélicas de espacio y tiempo ya que se desarrima en la


casa de Harpagón en un mismo día.

La obra consta de 5 actos, una característica típica del clasicismo francés, con 10, 6, 10, 7 y 6
escenas cada uno. Este fragmento se localiza al final del cuarto acto, en la séptima escena
cuando Harpagón acaba de descubrir que han robado su dinero, y se trata de un solo monólogo
de este.

En el fragmento distinguimos una acotación al principio de la intervención que indica el


movimiento del personaje, su actitud vocal y la falta de su sombrero.

La obra está escrita en prosa y el lenguaje es generalmente formal pero con gran naturalidad. En
este fragmento podemos observar abundantes hipérboles que denotan la exageración de la
tacha del personaje (“sin ti no puedo vivir” refiriéndose al dinero, “me muero”…), abundantes
determinantes posesivos que denotan egocentrismo y resaltan la avaricia de Harpagón y
abundantes oraciones exclamativas e interrogativas para resaltar la desesperación del
protagonista.

Los personajes son personajes tipo, y el protagonista, en el cual reside la tacha de la avaricia con
la que Molière pretende ridiculizar los vicios del ser humano, es Harpagón, un viejo autoritario,
avaricioso, desconfiado y de aspecto descuidado.

Cleantes es otro de los personajes principales, joven hijo de Harpagón, el cual no acepta su
autoridad, y es decidido, valiente y elegante. También distinguimos a Elisa, su hija, mujer joven
que no acepta la autoridad de su padre pero no es capaz de enfrentarse a este ya que su
carácter es dócil y flexible.

En mi opinión esta obra está algo anticuada ya que leída hoy en día no resulta cómica debido a
las abundantes exageraciones de los personajes y la falta de acción de la trama. Aún así,
considero que para su época es brillante ya que cumple con todas las características del teatro
clásico francés, no tiene elementos groseros ni irreales y aún así consigue la comicidad que
requiere la comedia. Creo que es digno de admirar también como Molière consigue reflejar uno
de los vicios más característicos en el ser humano como es la avaricia y enfocarlo de forma
cómica, pero a la vez intentando enseñar al público la ridiculez a la que puede llegar el ser
humano si no controla sus fallos. Esta forma de enseñar al pueblo a través del teatro, en mi
opinión, es una de las características más destacables de esta obra.

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