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LA INCLUSIÓN DE OTRO PROFESIONAL DURANTE EL ANÁLISIS DE PAC'ESTES


BUL1MICAS
/ Función del analista ó modificación del encuadre?

Mabel Marcinavicius de Grieco

Evaluar las razones de los éxitos ó fracasos de los procesos


analíticos emprendidos con estos pacientes, implica considerar el proceso
adolescente y la reorganización narcisista propia de esta etapa y tener en
cuenta la cultura actual tanto como cultura del goce como en relación a los
ideales ofertados y el énfasis en la imagen de! cuerpo. Instituciones en
donde clínicos, nutricionistas, terapeutas individuales, familiares y grupales
se abocan al tratamiento de estos pacientes recurriendo a otros métodos y
teorías que las analíticas se proclaman exitosas en tanto ofrecen una
identidad al adolescente en crisis y reparten por igual estadísticas y rechazo
por el método analítico (basado en las limitaciones que muchas veces tiene
el análisis para modificar los síntomas). A la entonces nominada bulímica ó
anoréxica parece no interesarle que esa identidad se plasme en un rótulo de
enferma. ¿Pero no deberíamos nosotros revisar los análisis que conducimos y
profundizar más en los fracasos terapéuticos?. No deberíamos reconocer y
buscar en nuestro campo, por ejemplo, los fundamentos de un abordaje
familiar exitoso?. También detenernos un momento en ese encuentro con lo
somático para honrar y respetar sus razones. Al mismo tiempo debemos
poder diferenciar cuándo la bulimia, en el sentido específico de ingestión
desmesurada y paroxística( como evoca justamente el ataque de hambre )
es simplemente síntoma y goce autoerótico, acting out con su dimensión
transferencia! ó una conducta actuada que viene a tomar el lugar, que
cortocircuita el trabajo de elaboración psíquica. Entendemos que en este
último aspecto pueda aparecer para muchos autores como inabordable por
una técnica que se basa en la asociación libre y la historización. A esto se
agregan los errores cometidos , que es el de suplir inadvertidamente un
vacío representacional con interpretaciones de relleno, imponiendo un
sentido, como ocurrió durante mucho tiempo y aún sigue ocurriendo en el
trabajo psicoanalítico con pacientes psicosomáticos. No queremos con esto
negar que son pacientes de difícil acceso, que nos llevan a maniobrar en las
fronteras mismas de nuestro territorio, en los
— tes del lenguaje, en los límites del cuereo eregero . eí ;_=-cc rea en os
imites zz. acting out y el pasaje al acto.
Autores con cierta especificidad en la práctica con estas pacientes insisten
en determinados aspectos del análisis.
En su conferencia de Diciembre de 1993 en APDEBA, Jeammet nos
transmitió cierto acomodamiento del encuadre que él cree necesario
introducir para posibilitar que la terapia se encauce dentro de los
lineamientos generales de los tratamientos psicoanalíticos. A esa altura yo
tenía en tratamiento algunas pacientes que habían acudido al análisis con la
esperanza de resolver su bulimía , que nunca habían considerado seriamente
la consulta médica y donde el acto de derivación a otro profesional tuvo
efectos detectables en la mejoría de los síntomas. Melman en su Seminario
sobre Anorexia dictado en Rosario en agosto de 1992, pone especial énfasis
en la dificultad que tiene el analista en estos casos para introducir una
instancia enigmática entre la paciente y su madre, que implica nada menos
que la dificultad en ejercer la función analjtica. Maldonado también
remarca ,en relación a pacientes alcohólicos ,la importancia del
reconocimiento por parte del analista de sus propios límites y la renuncia al
deseo de curar..
La psicopatología actual tiende a dar cuenta del síndrome bulimia-vómito
como una patología de entrecruzamiento o encrucijada (carrefour ) somato-
psíquíca, índividual- familiar, individual y social que si bien no es asimilada
a ninguno de los grandes tipos de funcionamiento psíquico o estructuras se
la considera como acercándose a todas ellas, al mismo tiempo que se ie
otorga cierta especificidad. -. Desde las histéricas y obsesivas pasando por
la florida sintomatologia e inestabilidad psíquica de las borderline y
llegando a las personalidades adictivas con sus rasgos de urgencia e
inmediatez, sus fenómenos de dependencia y abstinencia . Transita asi la
vertiente narcisista con su característica circularidad infinita. .
En tanto síntoma compulsivo más que impulsivo implica un mandato
impersonal que exige consumir. (Lugar que Lacan le da al Superyo,
modalidad perversa para B. López). Y puro goce autodestructivo. Obligada a
consumir y acusada porque consume con transiciones desde y hacia un
obsesivo contaje de kilos, calorías y otros ítems. Si el acting out predomina
se monta entonces una escena perversa donde se despliega una
fantasmática masoquísta diferente al acto bulimico en tanto caída de la
escena.
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ADOLESCENCIA. REORGANIZACIÓN NARCISISTA Y CULTURA IMPERANTE:
Como los datos epidemiológicos lo demuestran es una patología
esencialmente de la adolescencia femenina, a veces muy fugaz en su
aparición. Si bien es un tipo de comportamiento electivamente alimentario,
puede manifestarse en otros planos con las mismas características de
impulsividad '( ó compulsividad como decíamos anteriormente), avidez y
coerción y se relaciona con la anorexia nerviosa .
Una tarea fundamental de la adolescencia es el logro de un sentimiento de
identidad, que incluye, por un lado, la constitución de un proyecto
identificatorio autónomo y por el otro de puntos de certeza en estrecha
ligazón con los objetos externos y la cultura . El hallazgo de nuevos vínculos
y significados a través dé la inclusión en grupos de pares y las ofertas
identificatorias que son aportadas desde la cultura, no puede soslayar el
trabajo de historización. Sé trata ésta de una condición necesaria tanto para
reconocerse en una historia como para proyectarse en un futuro .
Las dificultades en este proceso en gran parte provienen de nuestra cultura
postmoderna. En tanto promueve la inmedíatéz y el brillo en un eterno
presente, llevan al adolescente a entronizar lo imaginario y a alienar su Yo
en un Yo Ideal donde la lógica del rasgo único prevalece. La perfección en la
imagen corporal es el espejo que la sociedad actual le ofrece. Inservible en
tanto los puntos de certeza así constituidos son evanescentes.
Por otro lado llama la atención en la anorexia que un supuesto goce
"natural"'’, admitido socialmente y por la mamá con placer .lleva
paradójicamente ai “no me come”, a la negativa a comer.
Nuestra cultura actual se comporta en relación a la sexualidad como la
madre de la anoréxica, sobre oferta de comida ó sobre oferta de sexualidad.
La respuesta oscila entre” desear nada”( como una manera de poner alguna
forma de límite en io real) y ceder el lugar del deseo al goce. El goce se
refiere al deseo de la nadre como función sin freno simbólico y es mucho
menos civilizado que éste. Está en consonancia con lo planteado por Freud
en “ El malestar en ia cultura”, en tanto que cada renuncia a ¡a satisfacción
pulsional refuerza paradójicamente la severidad del Superyo .
En ia sexualidad, desear nada es decir falta de deseo sexual. Por el otro la
respuesta es el goce, tan bien reflejado en el título del “Primer Journal de
adicción sexual y compulsividad. Desórdenes en expansión .”,que se acaba
de editar.
153
,'Ü
Según Green la liberalización de las costumbres ha llevado a una modificación
en las
problemáticas, que se centran actualmente en la relación entre el yo y los li
ideales, más
que entre Otro
el Yo ydeel Superyo.
los puntos de certeza
La desilusión proviene
resultante del sentimiento
es entonces de
más difícil de
hp
tolerar quepertenencia al propio
la frustración en relación a la sexualidad. ■
w cuerpo, tarea no fácil para el adolescente, no sólo por los
f
cue pub alvertiginosos
c mo< ans cambios
puberales sino porque a esto se agrega el corrimiento actual de la
íf:
moda de la ropa gf.
Jl:
inducido Seal cuerpo.
genera un La sentimiento
anatomía que de dibujaba
malestar layahistérica la develaban
que se desafía los
el propio ¡NT
cuerpo en diseñadores
tanto límitede la
invulnerable. Más que sentir que su cuerpo le pertenece,
la bulímicamoda. La nuevaestán
y la anoréxica anatomía se talla
poseídas en imagen
por una el cuerpo femenino
corporal real a
que impone
la moda. fuerza
Nos de bisturí y el entonces con que más que de estructuras
encontramos
ansia se
determinadas, detrataría
cirugíasdeestéticas se con
pacientes transmite y se difunde
desequilibrios tanto
en sus como la
regulaciones
técnica
narcisísticas. Y nodel
es vómito
otra cosa la que ocurre como característica casi universal
en la adolescencia, etapa en la que se necesita más que nunca del objeto
externo como sostén del narcisismo.
Adolescentes anoréxicas y bulimicas por igual buscan una identidad, pero si las
anoréxicas logran a través de la restricción alimentaria hacer surgir un limite,
una ley en lo real y acomodarse por e¡ otro a este ideal social de alimentación
racional, atenta a lo saludable, a la frugalidad y su concomitante rendimiento y
eficiencia, a las bulimicas no las corona el éxito y quedan subsumidas a un
mandato impersonal que exige consumir. El narcisismo moral de las anoréxicas
da lugar al goce autodestrucíivo de las bulimicas. Y a menos que sean
vomitadoras ó recurran a laxantes, la imagen corporal propia se ubica
exactamente en el polo opuesto al Yo Ideal, en el negativo del Yo Ideal.
Tampoco por este lado pueden alcanzar la autovaloración.
Como al acatar las imposiciones de la moda no logran una identidad, aunque
espúrea, la encontrarán en el rótulo que profesionales e instituciones tienen a
mano. Anoréxicas y bulimicas encuentran así su nominación, y aceptándose
enfermas, se acogerán a un saber que no deja de alienarlas .
MODO DE PENSAMIENTO:
1 D<7- -
n en las Según Charles Melman, el pensamiento en las anoréxicas (y bulímicasjestá
¿ales, más organizado por una dualidad del sí y del no, de lo repleto y lo vacío, de adentro
as difícil y de afuera ,y las interpretaciones son recibidas en el seno de esta dialéctica
de dual. Se absorben ó se rechazan. ,Ya sea que la comida -interpretación se
.nencia al rechace por demasiado mala ó demasiado buena, de todas maneras la
propio iginosos ¡ntroyecta, le” quedan “las interpretaciones.
cambios moda La anoréxica divide e| espacio en un adentro y un afuera pero como lo que es
de la ropa bueno es a la vez malo, porque lo bueno se hace malo en la medida que es lo
diseñadores de que no hay que quitar a la madre, el objeto alimenticio circula sin cesar entre
la rza de el adentro y el afuera. El objeto de que se trata es en realidad para Melman el
bisturí y el objeto fálico ,que no interviene en este caso en tercera posición. Lo da la
;nica del madre ,1o toma la hija, lo rechaza la hija porque haría caer a la madre de su
vómito 'opio posición fálica. Lo rechaza lisa y llanamente como en la anorexia o bien se da
cuerpo en la una incorporación muy breve con una restitución inmediata, como si se tratara
bulímica y la a de que ese objeto no pase por el cuerpo, como ocurre en la vomitadora. Lo que
moda, ¡vos s, señala Melman es ia dificultad de demostrarles que entre la madre y eiia hay
se trataría de una tercera instancia ,una instancia enigmática, cuya significación fáiica no
es otra cosa la agota todo el sentido. La clave en el tratamiento de estas pacientes se basa en
lad, pero si las
pa en la que se la tan necesaria función externa que límite y d¡7erenc¡e. sí mismo tiempo que
n limite, una
oesmeníínes la creencia en la potencia absoluta que la posesión de este objeto
ley racional,
les daría.
atenta
eficiencia, a Pero esta función antiintroyectiva es también una función antipensamiento.
las impersonal Queda un actuar operatorio, donde la motricidad y la sensación toman el lugar
que jgar al de! vinculo objetal. La paciente busca ei contacto pero no la absorción. La
goce as ó interpretación” le queda” como pegada, aislada del resto del pensamiento,
recurran a o evitada su entrada en las cadenas asociativas. La paciente llega a reconocer
opuesto al Yo con emoción muy posteriormente en el análisis cuando por fin puede” pensar”
den lentidad,
alcanzar una interpretación.
la GULA Y BULIM1A: EL INTERVALO.
aunque
tienen a La cocina y la gula son esencialmente la posibilidad de elaborar una sucesión, el
mano, se deseo de retomar una pluralidad en desmedro de una totalidad. En la gula hay
enfermas, se libertad posibilidad de distinción ,de elección. De una pulsión, la oral, a la
pluralidad de las pulsiones. Aparece un intervalo y en ese intervalo el niño
golpea la cuchara sobre la mesa o manipula la comida preambulando la
posibilidad de jugar. ( equivale al espacio transicionai de Winnicottj.La gula se
opone a bulimia,¿también a anorexia? Para C. Lacote sin embargo las anoréxicas
son capaces de ser golosas y cocinan
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comidas muy refinadas, organizando sus preparaciones con ia mirada en lugar
de
probarlas. En este sentido hay algo del orden de la diversidad insinuado .
También hay una diferente disposición temporal. Tomarse todo el tiempo y un
profundo respeto por la gastronomía en la golosa y contracción temporal en la
bulimia. En cambio la bulimia que se presenta en el marco de la neurosis
obsesiva
responde a la dificultad de aceptar que no se puede gozar de dos cosas al
mismo
La gula es la imagen bíblica del pecado original. Uno de los siete pecados
tiempo, donde el tiempo del que se trata es de ir a ver rápidamente que pasa
capitales.
en otro
En este sentido está del lado del mal, del pecado. Lo que es pecador es la
lado.
detención
en el brillo de la comida en el intervalo. La transgresión también está
presente en la
bulímica, de diferente manera. Se reitera en los atracones la alteración de lo
crudo y lo
cocido, lo frió y lo caliente y la subversión de las costumbres, de la cocina, del
arreglo
de la mesa y hasta el intento de desconocer las regulaciones neurofisiológicas
provocando el vómito. Distintas formas de transgresión pero que parecen
tener un
carácter más estructural ó estructurante.
EL VOMITO: Puede ser anulador y expiatorio frente al horror de una comida
Pero también el
canibalistica vómito
vivida puede
como tener una
crimen simple función
bulimico. calmante
El mismo de de
sentido la purga
angustia
espiritual,en donde interviene un elemento autoerótico de contacto.
tiene
i'
el uso de
Entre las laxantes. Pueden
adolescentes sentir muchas
ocurren que tienen necesidad
veces de comer
fenómenos para llenarse
de identificación
yhistérica.
luego i
el deber de provocarse el vómito para no engordar como un sintoma
Por ejemplo una paciente que se provocaba el vómito porque su mamá era en dos
tiempos.
demasiado
A diferencia del ayuno, higiénico y espiritual, que es una operación en unI
gorda.
tiempo
Y el clásico deseo incestuoso en el comer con la angustia que de él se
desprende.
continuo y que dura bastante tiempo.. i.
Otras pacientés no pueden vomitar ( aunque quisieran seguir los pasos de las
bulimicas vomitadoras para de esa manera conservar su silueta ). Por el hecho
de ser

-’■
. V'. Y'Wj'»>
■v
tV
contrario a la fisiología ,a la naturaleza ,de 1
tsr de I oono
- ser “como Dios manda “ es
fuerte de angustia.*
i SÍNTOMA. ACTING OÜT. ACTO:
W -:o y un r —
La concepción clásica del síntoma como un deseo incestuoso que bajo
poral en la r
la presión de la angustia lleva a una regresión a la oraiidad no debe ser
urosis
descuidada. Es el típico caso de la adolescente que como resultado de su
obsesiva cosas
ingesta está gorda y esto le sirve no , sólo como gratificación oral sustitutiva
al mismo que
sino también como protección a los fines de
pasa en otro
evitar la salida del vínculo endogámico. El síntoma en sí mismo mantiene la
meados ilusión de participación en el coito parental. También debemos incluir el
capitales, r es reiterado hallazgo del fantasma de embarazo oral en la histeria y la insistente
la detención preocupación de estas pacientes por no “tener panza”.
tá presente Para Denise Saint Fare Garnot la” necesidad " de comer, es la
en la i de lo manifestación de un pasaje al acto',de una compulsión que pasa del placer de
crudo y lo comer a un exceso que se produce de una manera imprevista y. descontrplada y
)cina, del donde éste desaparece. Tentativa de lograr un acceso inmediato al objeto y
arreglo exceso que incluye una tendencia ,.'l mortífera.
leurofisiológic Muchas veces el síntoma lleva dedicatoria y en este sentido es un acting out.
de una
as tarecen (Sabemos que las actuaciones en la adolescencia son moneda corriente). Así es
comida a
tener un como puede verse la gordura que una paciente le dedica a su padre , exquisito
espiritual
personaje dedicado al culto al cuerpo y cirujano plástico.
tiene llenarse
Pero es innegable que hay un camino que va desde el síntoma
y luego en
bulímico a la instalación de la transferencia y el análisis. La paciente que
dos tiempos,
cuenta en la sesión que come y vomita para inducir preocupación en el analista
■n en un
la angustia .en ó la paciente que hace ostentación de su miseria desde una posición
tiempo
masoquista. "Mire como como, mire esta porquería que soy yo”. Este acting out
:ación que se da en la transferencia y que ubica en el analista un personaje sádico ,lo
histérica, i involucra corttraíransferenciaimente y requiere de é¡ que sea j capaz de
era tolerar la identificación con este personaje para que el análisis prosiga.
demasiado En este sentido, tanto porque nos desplazamos del plano de lo inanimado
desprende. (comida) a io animado (actuación transferencia!) como porque nos aiejamos dei
; pasos de síntoma ,que es
‘Janine Pugef. Comunicación personaL
las el hecho
de ser
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3_-.osuficiente,en un intento de comunicar e involucrar al otro,
aumentarían las ccsibilidades de análisis y de éxito terapéutico.
Sabemos además que la relación masoquista tiene una función
preservadora del vínculo con el objeto y es un intento de ubicación
en una escena TERAPÉUTICA
PROPUESTA deseante . DE JEAMMET. OFERTA DE UNA
TRIANGULACIÓN Para Jeammet estas pacientes se caracterizan por
una marcada apetencia objeta! y una llamativa fragilidad de los
límites y los cimientos narcisísticos y dependencia en cuanto a su
narcisismo de los objetos externos. Al mismo tiempo que el Superyo
arcaico descalifica toda realización que podría sostener el narcisismo
ya que es inmediatamente connotado de un riesgo de amputación en
espejo de las ¡magos parentales. Circulación del falo en una relación
dual madre -hija para Melman, disregulación narcisística para
Jeammet.
Es frecuente el recrudecimiento de la bulimia en el comienzo
de un análisis. También he visto el desencadenamiento de un período
bulímico al instalarse la paciente adulta en análisis, aún cuando ese
síntoma hubiera estado circunscripto en su historia a la etapa de la
adolescencia. Benito López describió un caso similar. Reaparece a mi
entender frente a la dificultad para administrar la distancia
relacional. Surge el sometimiento a los deseos del otro, la relación
sadomasoquista con la madre buscada y temida. El placer hallado en
las sesiones deviene fuente de angustia porque es percibido como
riesgo adictivo. La interpretación es experimentada como una acción
insoportable del otro sobre uno mismo y cuando no provoca la
reacción de huida y la interrupción de la terapia, tiende al
agravamiento del síntoma como única manera de controlar la
amenaza fusional con el terapeuta. Jeammet lo ve entonces como
una regresión del pensamiento al acto . Implica una búsqueda de
contacto pero no de la absorción asimiladora, que se expresa en el
rechazo del alimento ingerido, antes tan codiciado, por medio del
vómito ó laxantes. Hay fascinación con el objeto real.
En este sentido el acceso bulímico está fuera de lo simbólico.
Cortocircuita la representación y toma el lugar de la elaboración
psíquica.
Al igual que en el paciente psicosomático, se requiere de una
situación paradojal como condición para el cortocircuito desde lo
psíquico -representacional a la conducta actuada en este caso. Una
vez desplegada la transferencia ,se presentifica la situación sin
salida, tanto el deseo de una relación de dependencia como el miedo
a
ser influenciado. Paradoja particular de estos pacientes, que pasa
entonces por un antagonismo narcísístico objetal: ”Lo que necesito, porque lo
sera del necesito y. en la medida t misma en que lo necesito es lo que amenaza mi
autonomía naciente”. Esto tiene
-C10N efectos siderantes sobre el pensamiento, propio de esta categoría de vínculos
;eter.cia lógicos. El par en cuestión es: apetencia objetal-disregu|ación narcisística.
objeta! y Introducir entonces una mediación, una función externa que limite y
; y dependencia diferencie, tiene el ;■ sentido de transmitirle al paciente, como dice
en Jeammet : "No soy omnipotente,
po que el necesito hablar con otro de su mundo interno. "Este es el sentido de introducir
Superyo lo que él llama un Referente en sus terapias bifocales. En su caso es otro
nsismo ya que terapeuta con funciones específicas.
izo
es de un . ¿FUNCIÓN DEL ANALISTA Ó MODIFICACIÓN DEL ENCUADRE?
análisis.de :o las
ejo al En mi experiencia la derivación a otro profesional (efectuada al
instalarse la o
¡magos principio por razones de orden médico fundamentalmente ) ha tenido efectos en
circunscriptopara
lija en !a sintomatología. ¿Implica ubicarlo a éste en un lugar de mediador ( Referente)?
5
Melman, un caso ¿ o tiene efectos por lo que este acto requiere del analista ?. Entiendo que el
similar, tanda acto de derivar implica que el terapeuta -■ acepte la interdisciplina, pero más
relacional. uista que en el sentido de ser capaz de integrar un
con la madre le equipo, en tanto renuncia a su deseo de curar,en tanto aceptación de
angustia que su saber tiene un límite dado por el cuerpo y sus propias leyes de
porque entada funcionamiento fisiológico. (Desde lo somático, por ejemplo, el vómito
como una 'ca la postprandíal vuelve a provocar el acto ¡ bulímico).
reacción de ! Paciente y analista estamos sujetos a una temeridad que nos
orna como trasciende y
única sí lo ve hacérselo saber a estas pacientes resulta una . tarea no fácil a pesar
entonces de de la aparente simplicidad de esta formulación. Al no asimilar nuestras
contacto perola
Cortocircuita interpretaciones ( lo que no quiere decir que rio las iníroyeeíen ) y considerarnos
alimento al mismo tiempo poseedores y proveedores de un saber absoluto, nos suelen
ingerido,.
:uación :ión provocar un profundo malestar. Wlelman señala estos problemas concretos de la
con el objeto
paradoja! práctica analítica ( de las pacientes i anoréxicas en su caso) y que lo lleva
sentacional a hasta a plantearse si no se trataría casi de una
la se estructura donde lo exterior no llega nunca a ser también lo interior.
presentifíca la Rígidamente dividido lo malo afuera y lo bueno adentro, llevando la posición
como el esquizoparanoide a mi
i
miedo a entender casi al rango de estructura.
i La formulación de Jeammet ,en cambio, implica la introducción de un
tercero real.
.¿Se trata de una estructura psicopatológica particular y por ende de una
limitación del
método analítico en tanto serían pacientes que no han accedido a la temeridad
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Estaríamos pensando que el análisis permite el acceso a una
estructura mental previamente inexistente y que creamos de la nada
? Ese tercero real tiene el sentido de evitar la angustia castastrófica
generada en un vínculo dual indiscriminado, como plantean
Berenstein y Puget en la estructura de terceridad limitada?
Es un hecho de observación el que una vez efectuado el acto de
derivación (ó una vez introducido este tercero), disminuye la
sintomatología que restringe las sesiones a una rumiación obsesiva y
estéril centrada en la relación con el alimento, y se hace evidente la
existencia de una vida fantasmática jamás sospechada. Justamente
porque, a diferencia de la anoréxica, con contrainvestimientos
menos frágiles, la bulimica necesita recurrir a una evitación fóbica
de la producción fantasmática. En este mismo sentido he observado
en una paciente que los sueños no son reprimidos sino que se evita su
relato. Un intolerable sentimiento de transparencia se instala al
comienzo, cuando éstos comienzan a ser traídos a las sesiones.
Por otro lado, una vez que introducimos el tercero este puede
sufrir diversos avatares: El tercero puede ocupar el lugar de tercero
excluido, ubicándose el paciente en cada una de las relaciones como
en un vínculo dual maravilloso donde el otro queda afuera, puede
haber erotización de una situación donde un tercero .cualquiera de
los tres o alternativamente alguno de ellos, queda como un testigo
que presencia una escena primaria atractiva y fascinante. En otras la
derivación no se efectivíza pero tiene sus efectos en tanto que
"indicación desafiada". Por otro lado señala Jeammet que lo que
incluyo como “terceridad limitada'’ estaba en juego desde el
comienzo. Los vómitos se ocultan por vergüenza , elemento
característico de las primeras triangulaciones. La mentira y el
engaño, tan habituales también , tienen el sentido de prersentificar
un otro, de reconocerlo, rudimentariamente si se quiere, en su
alteridad. Necesitará por ello hacerse presente en lo real,, como una
manera de establecer un límite?
Seiguer y Ferrari plantean que la teoría se ocupa
predominantemente de la génesis de los fenómenos mentales
mientras que las reglas se orientan hacia las condiciones necesarias
para un cambio. Siguendo a Thoma y Kachele, insisten en que la
técnica en psicoanálisis no es simplemente una aplicación de la
teoría. Fue en primer lugar la experiencia la que nos ha demostrado
que el encuadre de pareja permite desplegar aquello muchas veces
inabordable en el encuadre analítico clásico. Alicia Sirota también
encontró que la inclusión de un tercero (un progenitor en los casos
que ella
-160-
jra mental
el sentido describe) en el encuadre analítico de pacientes fronterizos tenía
de Y efectos positivos. Es esperable que también aquí encontremos un
,-iminado, modelo teórico que pueda dar cuenta de los cambios favorables
observados.
erivación (ócomo
una
vez nge las
sesiones a
alimento, y se
hace chada.
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Alicia Sírota
3S casos que
ella
- 161 -

-Ekstein, Rudolph. "Psicosis infantil”. Editorial Pax México.1969.


Ferrari, H. y -- Seiguer,Guillermo. "Consideraciones sobre la
frecuencia de las sesiones y las reglas del método en psicoanálisis”.
Congreso IPA ,agosto 1995.
-Green.André. "El adolescente en el adulto”Revista "Psicoanálisis”
Vol.xv. 1993. -Jeammet, Philíppe. Conferencia en APDEBA sobre
bulimia . Diciembre de I993.
-Lacan, J.”La angustia”. Seminario inédito.
-Lacote,Christiane. "¿Qué es la gula?” en La oralidad, Ediciones Homo
-Sapiens. 1993.
-López Benito. "Bulimia. Un modelo adjetivo” Revista Vertex .1991.
-Maldonado, Jorge. “Sobre la patología del alcoholismo y la
drogadicción en la experiencia psicoanalitíca”. APDEBA 1994.
-Marcinavicius de Grieco, Mabel, "Bulimia. Una propuesta no
alienante desde el
psicoanálisis”. Trabajo presentado en las: "Segundas Jornadas de ---
Psicoanálisis, Salud Mental e Instituciones”. APDEBA 1994.
-Meiman, Charies. "Observaciones sobre la anorexia" en “La oralidad".
Ediciones Homo Sapiens, 1993.
-Puget, Janine y Berenstsin, Isidoro. "Psicoanálisis de la pareja
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"La inclusión
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-Puget, Janine. ”En laRevista “Psicoanálisis".
búsqueda APDEBA 1931.
de un reconocedor privilegiado”.
Actualidad Psicológica.1993.

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