Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Guía de Manejo de La Obesidad Canina PDF
Guía de Manejo de La Obesidad Canina PDF
1. INTRODUCCIÓN
2. FACTORES DE RIESGO
Los estudios epidemiológicos destacan diversos factores de riesgo aso- VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
ciados a los distintos niveles de obesidad canina; en la [Figura 2] se
muestran algunos ejemplos.
2.1. Raza
Si bien es cierto que cualquier perro puede sufrir sobrepeso u obesidad,
la práctica demuestra que algunas razas presentan una mayor predispo-
sición [Labrador Retriever, Cairn Terrier, Terrier escocés, Basset Hound,
King Charles Cavalier, Cocker Spaniel, Beagle, Dálmata, Dachshund,
Rottweiler, Golden Retriever, pastor de Shetland, razas mixtas] (Edney
y Smith, 1986; Lund et al, 2006). Esta predisposición racial está vincu-
lada al potencial genético de los perros que determina la proporción de
9
% de perros obesos o con sobrepeso EU USA otros
50
45
40
35
30
25
20
15
10
5
0
T A US S
SW UK UK UK G AU UK US US US US EU BR A AU FR IT
0 0 3 4 8 1 6 9 1 6 9 0 0 0 2 0 3 0 5 06 006
196 1 97 1 97 1 97 1 97 1 98 19
8
19
8
19
9
19
9
19
9
20 20 20 20 20 2
70
VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
60
61
>12
50 54
M
47 46
40 43 43 44
8-12
41
4-7
casera
N
si
37 36
Labrador
30 34 34
industrial
31
mixta
E
H
27
no
20 23
2-3
Shitzu
10 12
<1
0
Comen Alimentación Raza Edad Sexo Esterilización
entre horas
Figura 2. Factores de riesgo que propician el sobrepeso o la obesidad canina en una población
con una media de entre el 34 y el 39% de perros obesos o con sobrepeso.
10
masa no adiposa y masa adiposa de su cuerpo, así como los patrones
de ingestión y las preferencias alimenticias.
palpables
- La masa muscular es correcta
3. Examen visual
Observar al perro desde una visión
dorsal y lateral.
12
% sobrepeso
35
30
31,7
25
26,2
20
15
14,8
10
0
media No esterilizados Esterilizados
No esterilizados Esterilizados
% sobrepeso
50
40 45
41
38
30
0
Machos Hembras Machos+Hembras
Figura 4. Porcentaje de perros con sobrepeso según sean machos, hembras, machos y hem-
bras, esterilizados o no esterilizados (Fuente: Edney y Smith, 1986)
Ingesta de
alimento
g/día
300
250
VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
200
150
100
50
-1 1 2 3 4 meses
gonadectomía
14
18
16
Peso corporal (kg)
14
12
alimento controlado ad libitum
10
-10 0 10 20 30 40 semanas
gonadectomía
Figura 6. Evolución del peso corporal antes y después de una gonadectomía (con ingesta de
alimentos controlada o a voluntad)
10
0
Antes de la gonadectomía Después de la gonadectomía Después de la gonadectomía
con alimentación controlada con alimentación ad libitum
180
VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
160
140
120
100 gonadectomía
80
period
1 2
Figure 8. Necesidades energéticas (kcal/kg peso corporal 0,75) antes y después de una gona-
dectomía: es necesario una disminución importante (30%) para conservar el peso corporal en
las perras de raza Beagle.
16
PC (kg)
18
16 gonadectomía
14
12
10
-10 0 10 20 30 semanas
Figura 9. Tras la gonadectomía, las perras conservarán su peso corporal si se controla la ingestión
de alimentos.
PC (kg)
20 gonadectomía Peso (kg)
15 Tejido magro (kg)
10 Tejido graso (kg)
5
P0 P1
Figura 10. Masa corporal antes y después de la gonadectomía, cuando se controla la ingestión de
alimentos. Este control origina una mejora en la proporción entre masa muscular y masa adiposa
en las perras de raza Beagle.
2.3. Sexo
Las hembras constituyen el 60% de los perros obesos, presentando un
mayor riesgo de padecer obesidad, estén o no esterilizadas (Colliard
et al, 2006 y Jerico y Scheffer, 2002). En condiciones experimentales,
si se comparan los machos obesos de raza Beagle con hembras obe-
sas de esta misma raza, las perras tienen menos tejido magro y, en
VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
18
19 con ejercicio Esterilizado
No esterilizado
18
peso corporal (kg)
17
16
15
14
0 2 4 6 8 10 semanas
Figura 11. Evolución del peso corporal en perros esterilizados y no esterilizados si realizan
ejercicio y se les estimula enriqueciendo su entorno.
2.5. Edad
Estudios epidemiológicos muestran que la obesidad se presenta de
forma más frecuente tanto en perros como en propietarios de edad
avanzada. (Robertson, 2003; Edney and Smith, 1986). La prevalencia
de la obesidad y el sobrepeso es mayor en perros de mediana edad,
aproximadamente entre 6 y 10 años (Lund et al, 2006). Por cada año
de edad, el riesgo de desarrollar obesidad aumenta (Robertson, 2003;
Colliard et al, 2006). Al igual que en humanos, en los que la sarcope-
nia y la pérdida de masa muscular ha sido probada, el ratio de masa
muscular / tejido adiposo decrece en perros a medida que su edad va
avanzando (Kealy et al, 2002).
En el caso del ser humano, los bebés que nacen con poco peso y pre-
sentan una tasa de crecimiento mayor al principio de la vida postnatal,
el denominado crecimiento compensatorio, que provoca un índice de
20
masa corporal (IMC) más elevado y más grasa corporal en la edad adul-
ta (Ong et al, 2002).
2.8. Alimentación
La obesidad se desarrolla cuando el aporte energético es más elevado
que las necesidades energéticas. Se observan aportes energéticos ma-
La obesidad y los trastornos asociados a ésta son cada vez más fre-
cuentes en los animales de compañía, sobre todo en los perros.
inflamatorias).
Rotura del ligamento 1,6% (OR = 2,1), 1,1% (OR = 1,7), 0,5%
cruzado
23
Delgados Obesos y
% de enfermedad con sobrepeso
25
20
15
10
5
0
Figura 12. Porcentaje de perros afectados por determinadas enfermedades relacionado con su
condición corporal [perros con sobrepeso y obesos, o perros delgados] (Fuente: Lund et al, 2006).
*LVTD: Enfermedades urinarias de vías bajas.
*Problemas de movilidad: artritis/osteoartritis, cojera, trastornos musculoesqueléticos y/o rotura del ligamento
cruzado.
Los perros con obesidad crónica también presentan una mayor con-
centración de colesterol y triglicéridos en sangre (Jeusette et al, 2005a;
26
Pena et al, 2008). A diferencia de lo que ocurre en los seres humanos,
la aterosclerosis es poco frecuente en los perros, pero unos niveles ele-
vados de colesterol y triglicéridos en sangre pueden provocar lesiones
oculares y pancreatitis (Rogers 1977; Crispin, 1993; Crispin, 2002).
27
Diversos estudios demuestran que una dieta rica en grasas saturadas
y/o el aumento de peso guardan cierta relación con el aumento de la
frecuencia cardíaca, el rendimiento cardíaco en reposo, el rendimiento
cardíaco en la masa ventricular izquierda, la presión auricular izquierda,
la presión sanguínea (sistólica, diastólica y media), el volumen plasmá-
tico y la resistencia vascular sistémica, así como con una disminución
de la sensibilidad barorrefleja espontánea que provoca una leve hiper-
tensión arterial (Rochini et al, 1987; Van Vliet et al, 1995; Kuruvilla y
Frankel, 2003). El volumen ventricular izquierdo aumenta con la sístole
y la diástole, a pesar de no producirse cambios en el grosor de la mem-
brana. También se observa el aumento de la masa ventricular, lo cual
parece indicar que se trata de una hipertensión dependiente del volumen
(Massabuau et al, 1997).
3.8. Anestesia
Los riesgos que comporta la anestesia son mayores si el perro sufre
obesidad, una circunstancia que debe tenerse en cuenta a la hora de
intervenir a estos perros.
3.9. Cáncer
Se ha observado que en los perros la obesidad al año de edad y un
año antes de su diagnóstico está relacionada con la prevalencia de
tumores de mama (Sonnenschein et al, 1991). También los perros con
sobrepeso corren un riesgo mayor de desarrollar carcinoma de células
de transición de la vejiga (Glickman et al, 1989).
4. TRATAMIENTO
Sabor
Lengua
ACTH
Cortisol
nerviosas
Señales
Vago
Pancreas
Vago
SNS Insulina
Boca Comida
Estómago
Grasa
Hígado
Colecistoquinina
Enterostatina SISTEMA DE CONTROL
GLP-I
Grelina
Figura 14. Mejoras en la movilidad tras seguir una dieta de adelgazamiento baja en grasas y
rica en proteínas.
Apéndice 1.
4.1.1 Energía
La limitación del aporte energético es fundamental para lograr una
pérdida de peso y evitar que se recupere de nuevo.
33
PREVENCIÓN
Durante el crecimiento
En los perros de raza grande, un aporte energético excesivo durante
el crecimiento provoca un exceso de peso que incrementa el estrés
mecánico sobre los cartílagos de las placas de crecimiento en un sis-
tema osteoarticular inmaduro. Se sabe que la displasia de cadera, la
osteocondrosis, la carpocifosis y la osteodistrofia hipertrófica están
provocadas por un exceso de peso durante el crecimiento (Hedham-
mer et al, 1974; Dammrich et al, 1991). Sin embargo, es posible que
el estrés mecánico no sea el único mecanismo implicado. La obesi-
dad y un aporte energético excesivo también provocan modificacio-
nes en las secreciones hormonales (IGF-1, hormonas tiroideas…),
cuyas consecuencias para los perros todavía no se han evaluado.
En los perros de tamaño reducido las consecuencias sobre el sistema
osteoarticular de un aporte energético elevado son menos signifi-
cativas, pero pueden provocar obesidad en los perros jóvenes. La
obesidad a una edad temprana predispone a los perros jóvenes a su-
frir diversas patologías (insulinorresistencia, diabetes, dislipidemia,
hipertensión, osteoartritis, cáncer de mama, afecciones renales…)
y a tener una esperanza de vida reducida.
Es evidente que las necesidades energéticas son mayores durante
el crecimiento que en la edad adulta, pero debe evitarse el aporte
energético excesivo; al igual que en el caso de los adultos, el índice
VISIÓN GENERAL DE LA OBESIDAD CANINA
Después de la esterilización
Se recomienda trazar un plan dietético estricto después de la este-
rilización ya que los perros esterilizados tienen unas necesidades
energéticas menores y un comportamiento alimenticio modificado
que propicia el aumento de peso (Jeusette et al, 2004b y 2006a).
34
En las perras esterilizadas, el aumento de peso se evita reduciendo
el aporte energético un 30% de las necesidades energéticas de man-
IBW = Ideal Body Weight tenimiento (MER) (MER = 132 kcal/kg IBW0,75; Anantharaman-Barr,
(peso corporal ideal)
1990; Jeusette et al, 2004b y 2006a).
70
68
66
64
62
% MER
60
58
56
54
52
50
0 10 20 30 semanas
Figura 15. Restricción energética (en % NEM con NEM = 132 kcal/kg0,75) para lograr una
reducción del peso corporal en un periodo de 6 meses: con el tiempo es necesario reducir
la asignación energética a fin de conservar la pérdida de peso corporal.
4.1.2. Proteínas
En medicina humana, el procedimiento convencional para perder peso
recomienda una dieta pobre en grasa, rica en hidratos de carbono y
con un reducido aporte energético. Actualmente aumenta el interés
por dietas bajas en almidón y azúcar y dietas muy proteicas. Estas
últimas se basan en una mala utilización de la energía por parte del
organismo (pérdida de energía por orina en forma de cuerpos cetónicos
reducción de la energía neta, aumento de la termogénesis y una mayor
oxidación de grasas). A pesar de observarse un nivel de éxito elevado
en la práctica con dietas de adelgazamiento ricas en proteína (reduc-
ción espontánea del aporte energético debido a los efectos anorexigé-
nicos de los cuerpos cetónicos y nivel bajo de insulina y proteínas),
se podría cuestionar una estricta aplicación de estas dietas debido
38
a los posibles efectos tóxicos de una alta concentración de cuerpos
cetónicos en sangre y al posible efecto nocivo de la proteína sobre las
funciones renales.
250 350
500 500
250 150
Con incremento de proteína
y disminución de carbohidratos
Proteína
Carbohidratos
Grasa
Diferencia de
energía entre
ambas dietas
Proteínas vegetales
En medicina humana los datos indican que las dietas ricas en gra-
sa y proteína de origen vegetal pueden reducir ligeramente el riesgo
de padecer diabetes y enfermedades coronarias (Halton et al, 2006 y
2008).
42
4.1.3. Grasas
Generalmente suele reducirse el nivel de grasa en las dietas formuladas
para animales obesos. Es la forma más eficaz de reducir la densidad
energética y, por tanto, permitir que el animal consuma una cantidad
de comida relativamente mayor con la misma energía. Si las grasas se
sustituyen, por ejemplo, por hidratos de carbono complejos, se redu-
ce el contenido energético bruto a la vez que se incrementa el gasto
energético metabólico. De hecho, la eficiencia de utilización de los
carbohidratos es 9 – 12% menor que la de la grasa. ya que la grasa se
emplea más eficazmente para la producción de moléculas de ATP (más
energía neta) y para la acumulación de grasa en el tejido adiposo. Un
mínimo de grasa se requiere para cubrir las necesidades de vitaminas
liposolubles y ácidos grasos esenciales. Además, la grasa animal mejora
la apetencia de las dietas para los perros.
43
En el caso de los perros, como en otros mamíferos, se ha demostrado
que la proporción entre ácidos grasos omega 6 y omega 3 (v6/v3) mo-
dula las reacciones inflamatorias. Una proporción que oscile entre 5 y 10
reduce la producción de mediadores inflamatorios sin efectos secunda-
rios y, por tanto, podría ser beneficiosa para los perros obesos. Sin em-
bargo, además de la proporción entre v6 /v3, es necesario suministrar
una cantidad mínima de ácidos grasos v3 de cadena larga (DHA-EPA)
para lograr efectos positivos sobre la salud (Hall et al, 2006).
44
Sobrecarga Los macrófagos alrededor de los adipocitos hipertrofiados en
crónica de proceso de apoptosis liberan citoquinas y qumiocinas. De ese
nutrientes modo se amplia la respuesta inflamatoria a través de un mayor
Estressreticulo Inhibición de reclutamiento de macrófagos al tejido adiposo
endoplásmático transducción de señal
de la insulina
JNK Proteínas
Ikbkb quimiotácticas
de macrófagos
Adipocito hipertrofiado
Oxidación de lípidos
Acumulación ectópica de lipidos
Lipotoxicidad inducida por las ceramidas y/o DAGs
Los macrófagos activados e infiltrados liberan proteinas
Secreción de insulina por las celulas beta
quimiotácticas de monocitos (MCPs) y citoquinas
(TNF-`, IL-6, IL-1a, etc.) e inducen iNOS que amplifica
Resistencia a la insulina en el tejido no adiposo la respuesta inflamatoria en todo el tejido adiposo
(músculo esqueletico, higado, etc)
Apéndice 3. Posible mecanismo que relaciona la inflamación del tejido adiposo y la resistencia a la insulina.
Adaptado de Wozniak et al. (2008)
delgado obeso
vasos sanguíneos
célula en
tejido apoptosis tejido
adiposo adiposo
macrofagos
adipocitos adipocitos
Resistencia
hepática a
la insulina Adiponectina
+
Hígado
Adiponectina Leptina + CRP
IL-6 Resistina/FIZZ3 +
TNF`
Leptina
Inflamación
?
? + ?
IL-6
TNF`
Arterias + Resistina/FIZZ3
Antia- Respuesta Respuesta (Atherosclerosis)
terogenica muscular a la hepática ?
insulina Respuesta muscular
a la insulina
Apéndice 4. En la parte izquierda de la figura un individuo delgado tiene adipocitos de tamaño normal y niveles
bajos de macrofagos en el tejido adiposo (AT). Mientras que en la parte derecha un individuo obeso tiene adipocitos
hipertrofiados en proceso de apoptosis o muerte celular. Una gran cantidad de macrofagos estan presentes en el
tejido adiposos para digerir estos adipocitos en apoptosis. Adaptado de Lionetti et al. (2009)
45
Los estudios realizados en animales y personas demuestran que los
AGCM se utilizan fácilmente en el hígado y que favorecen un mayor
gasto energético. La mayoría de los estudios sobre animales también
confirman un menor aumento de peso y una reducción del tamaño de
los depósitos de grasa al cabo de varios meses de consumirlos. Asimis-
mo, tanto las pruebas con animales como con personas indican que el
efecto saciante de los triglicéridos de cadena media es mayor que el de
los triglicéridos de cadena larga. Se ha dicho que algunas hormonas,
como la colecistoquinina, el péptido YY, el péptido inhibidor gástrico,
la neurotensina y el polipéptido pancreático participan en el mecanis-
mo mediante el cual los triglicéridos de cadena media pueden inducir
saciedad. Sin embargo, no se ha determinado de qué mecanismos se
trata exactamente.
Polisacáridos ≠ almidón
Fibra dietética
Hidratos de carbono
46
más prolongado. Por este motivo, las fuentes de almidón que provocan
una menor respuesta glicémica posprandial serían beneficiosas.
4.1.5. Fibras
Se entiende por fibra principalmente la matriz que compone las pare-
des celulares de las plantas, pero es un término que incluye diversos
tipos de sustancias bioquímicas como se indica en la [Figura 18].
47
Las fibras pueden reducir la glicemia posprandial en los perros
diabéticos (Nelson et al, 1991).
Las fibras contribuyen a reducir la concentración de lípidos en
sangre (Delaunois et al, 1990; Diez et al, 1996; Diez et al, 1997;
Egron et al, 1996; Hoenig et al, 2001).
48
LA FIBRA DIETÉTICA REDUCE LA CONCENTRACIÓN ENERGÉTICA
DE LA DIETA, EL VACIADO INTESTINAL, LA GLICEMIA POSPRAN-
DIAL Y LOS LÍPIDOS EN SANGRE DEL PERRO Y MEJORA LA SA-
LUD INTESTINAL Y LA SENSACIÓN DE SACIEDAD.
4.1.6. L-Carnitina
La L-carnitina es un nutriente condicionalmente esencial parecido a
una vitamina, que contribuye a la oxidación de los ácidos grasos en la
mitocondria. Gross et al (1998) y Allet et al (1999) demostraron que
una dieta con un suplemento de carnitina del 0,03% mejoraba la masa
corporal magra con una tendencia a una mayor pérdida de peso en los
perros sometidos a un programa de adelgazamiento.
4.1.7. Antioxidantes
El estrés oxidativo puede ser el mecanismo unificador que subyazca
al desarrollo de otras consecuencias derivadas de la obesidad. En me-
Figura 19. Evolución del peso corporal con y sin actividad física
5. CONCLUSIONES
51
2. COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
1. INTRODUCCIÓN
Composición corporal:
El peso corporal per se no puede utilizarse para evaluar la composición
corporal del animal (masa adiposa o masa muscular). Únicamente puede
cuantificar el porcentaje de peso excesivo si se compara con el peso
ideal, sea éste real o teórico. En la [Figura 20 y 21] se representa la
composición corporal (cantidad de agua, minerales, grasa y músculo).
Dos perros con el mismo peso pueden tener una composición corporal
distinta, como se observa en la tabla 2 donde se representa la composi-
ción corporal de un perro delgado y otro obeso de 30 kg. El cálculo del
porcentaje de grasa es importante para determinar el grado de obesidad,
mientras que el porcentaje de masa muscular es importante para calcular COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
el estado nutricional. Se han desarrollado diversas metodologías para
calcular la composición corporal de personas y animales:
53
PARÁMETROS PERRO DELGADO PERRO OBESO
Tabla 2: Composición corporal de dos perros con el mismo peso corporal, uno de ellos delga-
do y el otro obeso
Modelo básico de
2 compartimentos
TEJIDO
GRASO N,K,Ca,Na... Mineral Grasa Otros
Tejido
TEJIDO adiposo
MAGRO Oxígeno Agua Grasa
COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
celular
Músculo
esquelé-
tico
Modelos multicompartimentales
54
Grasa
retriperitoneal
Grasa
visceral
Grasa
subcutánea
Figura 21. Perro obeso con representación esquemática de la masa adiposa corporal
55
Esta metodología ha sido validada en el caso de los perros para esti-
mar la composición corporal en comparación con el análisis químico
(Munday et al, 1994; Lauten et al, 2001; Speakman et al, 2001; Raffan
et al, 2006) y se considera el método de referencia en la investigación
con perros y gatos (Speakman et al, 2001). No obstante, la metodolo-
gía DEXA constituye un método costoso y requiere la anestesia de los
animales, por lo que su empleo práctico resulta limitado.
H
COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
O 1
H 2
H 3
H
2
H Hidrógeno Deuterio Tritio
56
3. Tomografía axial computarizada (TAC)
La tomografía axial computarizada es una técnica de imágenes muy
empleada en la medicina moderna. Proporciona una vista en tres di-
mensiones del interior del organismo a partir de una amplia serie de
imágenes bidimensionales obtenidas con rayos X, que se toman gracias
a la rotación de un solo eje. Resulta útil en el diagnóstico de enfer-
medades como los accidentes vasculares cerebrales, los derrames in-
ternos, las fracturas de huesos y algunos problemas gastrointestinales.
La toma axial computarizada también se ha empleado en perros para
determinar la grasa visceral y subcutánea (Anderson y Corbin, 1982;
Wilkinson y McEwan, 1991). La zona adiposa se mide mediante el mé-
todo de detección de nivel a unos intervalos de atenuación variados y
se compara con el contenido graso corporal calculado con el método
de la dilución de óxido de deuterio. La ventaja de esta tecnología en
comparación con la DEXA es que pueden evaluarse por separado las
zonas de grasa visceral y subcutánea. La distinción entre grasa subcu-
tánea y visceral es importante, por lo menos en el caso de las personas,
porque la grasa abdominal se considera la más aterogénica y diabe-
togénica (Bouchard, 1996; Kopelman, 2000). La tecnología del TAC
puede contribuir tanto al diagnóstico clínico como a la investigación
sobre obesidad canina, sobre todo para establecer la relación entre la
distribución de la grasa corporal y las enfermedades relacionadas con
la obesidad (Ishioka et al, 2005). En la [Figura 24] se presenta un
ejemplo de TAC en perros.
Figura 24. TAC de un perro delgado sano que ofrece una sección
«virtual» del animal
57
4. Pletismografía de aire
La pletismografía de desplazamiento de aire [Figura 25] está basada
en el modelo de composición corporal de dos compartimentos (masa
adiposa y masa no adiposa) y se sirve de la relación inversa entre la
presión y el volumen (ley de Boyle) para deducir el volumen corporal
(l) del individuo, una vez se han empleado los principios de la densito-
metría para determinar la composición corporal a partir de la densidad
corporal.
5. Métodos semicuantitativos:
Los métodos descritos anteriormente precisan de equipos costosos y Figura 25.
Pleistomografía
su empleo no puede hacerse de forma sistemática, por lo cual en la de desplazamiento
práctica diaria se emplean métodos semicuantitativos que permiten de aire
COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
58
Figura 26. Disposi- determinar la composición corporal tanto de personas como de ani-
tivo de impedancia males. En el caso ideal, los métodos semicuantitativos deben estar
bioeléctrica
en correlación con los valores reales y deben ser fáciles de utilizar
en la práctica. Las técnicas empleadas deberían mostrar exactitud (lo
más aproximadas al valor real que sea posible) y precisión (el mismo
resultado estimado en análisis repetidos). Entre otras metodologías,
se emplean la impedancia bioeléctrica (BIA), el índice de condición
corporal (ICC) y las mediciones zoométricas.
MUY DELGADO
MUY DELGADO
DELGADO
IDEAL
IDEAL
SOBREPESO
OBESO
OBESIDAD
60
para predecir la cantidad total de agua en el cuerpo, la cantidad total
de potasio y la masa no adiposa si se combina con determinadas medi-
das morfométricas. Más recientemente Elliott et al (2002a, b) también
declararon válida la BIA multifrecuencia para determinar la cantidad
total de agua del cuerpo y el agua extracelular, si se comparaba con la
estimación de dilución de deuterio y bromuro.
0 2 4 6 8 ICC
CANICHE MEDIO
% grasa
0 2 4 6 8 ICC
GALGO
COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
% grasa
0 2 4 6 8 ICC
Figura 27. Correlación entre medida de grasa corporal y el índice de condición corporal (ICC).
62
5.3. Mediciones morfométricas
Puesto que la medicina aplicada al hombre se sirve de determinadas
ecuaciones antropométricas para calcular el porcentaje de grasa cor-
poral y el índice de masa corporal (IMC), también se han desarrollado
unas ecuaciones zoométricas para determinar el porcentaje de grasa
en los perros (Burkholder y Toll, 2000; Mawby et al, 2004).
OT
HS
Figura 28. Mediciones morfométricas empleadas en las ecuaciones que se realizan para
calcular la grasa corporal
63
MACHOS Circunferencia pélvica (cm)
HS (cm) 45 55 60 65 70 75 80
10 21.5 28.5 32 35.5 39 42.5 46
12 18.7 25.7 29.2 32.7 36.2 39.7 43.2
14 15.9 22.9 26.4 29.9 33.4 36.9 40.4
16 13.1 20.1 23.6 27.1 30.6 34.1 37.6
18 10.3 17.3 20.8 24.3 27.8 31.3 34.8
20 21.5 25 28.5 32
22 25.7 29.2
Tabla 3. % del tejido graso calculado con las medidas HS y CP usando las ecuaciones para ma-
chos y hembras. Ejemplo: macho con un HS de 16 cm debe alcanzar una CP menor de 65 cm
para no tener sobrepeso
COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
Al igual que para las personas, el índice de masa corporal (IMC) tam-
bién se ha definido de la forma siguiente:
IMC = PC/ (altura del hombro x distancia occipucio a la cola; Mawby
et al, 2004).
PC (kg)
60
50
40
30
20
10
0
0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
CP (cm)
Figura 29. Evolución del peso corporal y de la circunferencia pélvica de un perro durante el
programa de adelgazamiento. PC peso corporal; PCI peso corporal ideal; CP circunferencia pélvica
No obstante, parece que la circunferencia pélvica siempre está re- COMPOSICIÓN CORPORAL CANINA
lacionada con el peso corporal y con las pérdidas de grasa corporal
[Figura 29]. Por consiguiente, sería interesante hacer un seguimiento
de la circunferencia pélvica como posible indicador de los avances
realizados en el proceso de adelgazamiento cuando no resulte fácil
pesar a los perros.
65
3. CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA Y LA INFORMACIÓN
NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA
PEQUEÑOS ANIMALES
CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA E INFORMACIÓN NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA PEQUEÑOS ANIMALES
1. INTRODUCCIÓN
2. DEFINICIÓN DE ENERGÍA
8,7-9,5 kcal/g para las grasas; 5,3-5,8 kcal/g para las proteínas;
3,3-4,3 kcal/g para los hidratos de carbono y la fibra bruta (excepto
la lignina).
67
CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA E INFORMACIÓN NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA PEQUEÑOS ANIMALES
Energía bruta
Pérdida de calor
Energía neta
1g de hidratos 1g de 1g
de carbono no proteína de grasa
fibrosos
Tabla 4. Media de distintos cálculos energéticos del valor de los nutrientes considerando una
digestibilidad normal y el nivel proteico de los alimentos para perros de rango premium y
superpremium
69
CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA E INFORMACIÓN NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA PEQUEÑOS ANIMALES
TAL CUAL
Humedad % tal cual 8 10
Proteínas % tal cual 40 29
Grasa % tal cual 8 6
Fibra bruta % tal cual 9 9
Ceniza bruta % tal cual 7 7,6
Hidratos de carbono % tal cual = 100-8-40-8-9-7 = 100-8-29-10-9-7,6
(calculados) = 28 = 38,4
Materia seca
Humedad % MS - -
Proteínas % MS = 40/(100-8)*100 = 29/(100-10)*100
= 43,5 = 32,2
Grasa % MS = 8/(100-8)*100 = 6/(100-10)*100
= 8,7 = 6,7
Fibra bruta % MS = 9/(100-8)*100 = 9/(100-10)*100
= 9,8 = 10,0
Ceniza bruta % MS = 7/(100-8)*100 = 7,6/(100-7)*100
= 7,6 = 8,4
Hidratos de carbono % MS = 28/(100-8)*100 = 38,4/(100-7)*100
= 30,4 = 42,7
70
CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA E INFORMACIÓN NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA PEQUEÑOS ANIMALES
Advance Veterinary Diets Advance Veterinary
Unidad NEW OBESITY-HIGH PROTEIN Diets FÓRMULA ANTIGUA
NRC 1985
Energía bruta Kcal/100g = 5.7*40 + 9.4*8 + 5,7*29 + 9,4*6 +
4,1*28 + 4,1* 9 4,1*38.4 + 4,1* 9
= 455 = 416
Energía metabolizable Kcal/100g dieta = 3,5*40+8,5*8+3,5* = 3.5*29 + 8.5*6 +
28 3.5*38.4
= 306 = 287
NRC 2006
Energía bruta Kcal/100g = 5.7*40 + 9,4*8 + 5,7*29 + 9,4*6 +
4,1*28 + 4,1* 9 4,1*38,4 + 4,1* 9
= 455 = 416
% = 91,2-1,43*9 = 91,2-1,43*9
Coeficiente digestibilidad = 78 = 78
Kcal/100g = 455*78/100 = 416*78/100
Energía digestible = 355 = 324
Kcal/100g = 445- (1,04*40) = 324-(1,04*29)
Energía metabolizable = 313 = 294
En energía
Energía metabolizable Kcal/100g 313 294
NRC 2006
Humedad g/1000 kcal = 8/313*1000 = 10/294*1000
= 26 = 34
Proteínas g/1000 kcal = 40/313*1000 = 29/294*1000
= 128 = 99
Grasa g/1000 kcal = 8/313*1000 = 6/294*1000
= 26 = 20
Fibra bruta g/1000 kcal = 9/313*1000 = 9/294*1000
= 29 = 31
Cenizas brutas g/1000 kcal = 7/313*1000 = 7.6/294*1000
= 22 = 26
Hidratos de carbono g/1000 kcal = 28/313*1000 = 38.4/294*1000
= 89 = 131
Proteínas % Energía = 100/306*(40*3,5) = 100/287*(29*3,5)
metabolizable = 46 = 35
(NRC 1985)
Grasa % Energía = 100/306*(8*8,5) = 100/287*(6*8,5)
metabolizable = 22 = 18
(NRC 1985)
Hidratos de carbono % Energía = 100/306*(28*3,5) = 100/287*(38,4*3,5)
metabolizable = 32 = 47
(NRC 1985)
71
CÓMO LEER LOS DATOS SOBRE ENERGÍA E INFORMACIÓN NUTRICIONAL EN UNA ETIQUETA DE COMIDA PARA PEQUEÑOS ANIMALES
4. CONCLUSIONES
72
REFERENCIAS. Visión general de la obesidad canina
Allen TA, Jewel DE, Toll PW. The effects of carnitine of nutrition in weight management, Iams symposium
supplementation on body composition of obese prone presented at the North American Veterinary Conference,
dogs. In: Obesity : weight management in cats and January 21, 2003, Orlando, Florida, USA, p38-42.
dogs. Hills Pet Nutrition, 1999, monograph, 27. Brown DC, Conzemius MG, Shofer FS. Body weight as a
Anantharaman-Barr G. Effects of ovariectomy on ener- predisposing factor for humeral condylar fractures, cra-
gy metabolism. In: Proceedings of the 1st European nial cruciate rupture and intervertebral disease in Cocker
congress BSAVA, Harrogate, Great Britain, 1990. Spaniels. Vet Comp Orthop Trauma, 1996; 9:38-41.
Anderson RS. Obesity in the dog and cat. Vet Ann. Brunson BL, Zhong Q, Clarke KJ, Bedi D, Braden TD,
1973; 14:182-6. van Santen E, Judd RL. Serum concentrations of adi-
Armstrong PJ, Lund EM. Changes in body condition ponectin and characterization of adiponectin protein
and energy balance with ageing. Vet Clin Nutr. 1996; complexes in dogs. Am J Vet Res. 2007; 68(1):57-62.
3 :83-87. Burkholder WJ, Toll PW. Obesity. In: Hand, Thatcher,
Baba E, Arakana A. Myocardial hypoxia in an obese Remillard, Roudebush (eds), Small Animal Clinical Nu-
Beagle. Vet Med. 1984; 79: 788-791. trition, 4th Edition. Mark Morris Institute : Topeka,
Bailhache E, Nguyen P, Krempf M, Siliart B, Magot T, 2000, 292-347.
Ouguerram K. Lipoprotein abnormalities in obese insu- Burrows CF, Kronfeld DS, Banta CA, Merritt AM.
lin-resistant dogs. Metabolism. 2003; 52(5):559-564. Effects of fibre on digestibility and transit time in dogs.
Biourge V, Henroteaux M, Istasse L, Degroote A, J Nutr. 1982; 112: 1726-1732.
Bienfait JM. Traitement d’un cas d’obésité chez une Butterwick RF, Markwell PJ. Effect of amount and
chienne. Ann Méd Vét. 1987; 131 : 419-424. type of dietary fiber on food intake in energy-restricted
Blum J, Zentek J, Meyer H. Investigation on the in- dogs. Am J Vet Res. 1997;58(3):272-276.
fluence of different energy supply on growth perfor- Butterwick RF, Markwell PJ, Thorne CJ. Effect of level
mance and skeletal development of growing Great Da- and source of dietary fibre on food intake in the dog. J
nes. 2. Effect on the insulin-like growth factor-1 and on Nutr. 1994;121 :2695S-2700S.
thyroid hormones. J Vet Med A 1992; 39: 568-574. Carciofi AC, Gonçalves KNV, Vasconcellos RS, Bazolli
Boisen, S. & Verstegen, M.W.A., 2000. Developments in RS, Brunetto MA, Prada F. A weight loss protocol and
the measurement of energy contents of feed and ener- owners participation in the treatment of canine obesity.
gy utilisation in animals. In: Moughan, P.J., Verstegen, Ciência Rural. 2005;35: 1331-1338.
M.W.A. and Visser, M. (eds.) Feed evaluation. Principle and Chan CB, Spierenburg M, Ihle SL, Tudor-Locke C. Use
practice. Wageningen Pers. The Netherlands, pp. 57-76. of pedometers to measure physical activity in dogs. J
Borne AT, Wolfsheimer KJ, Truett AA, Kiene J, Woj- Am Vet Med Assoc. 2005;226: 2010-2015.
ciechowski T, Davenport DJ, Ford RB, West DB. Diffe- Clutton R.E. The medical implications of canine obesity
rential metabolic effects of energy restriction in dogs and their relevance to anaesthesia. Br Vet J. 1988; 144:
REFERENCIAS
using diets varying in fat and fiber content. Obes Res. 21-28.
1996; 4: 337-345. Colliard L, Ancel J, Benet JJ, Paragon BM, Blanchard
Bouchard GF, Sunvold GD. Implications for starch in G. Risk factors for obesity in dogs in France. J Nutr.
the management of glucose metabolism. In : the role 2006;136(7 Suppl):1951S-1954S.
73
Crane SW. Obesity treatment and prevention in com- Diez M, Hornick JL, Baldwin P, Van Eenaeme C, Istas-
panion animals. Tijdschr Diergeneeskd 1992;117 Suppl se L. The influence of sugar-beet fibre, guar gum and
1:44S-45S. inulin on nutrient digestibility, water consumption and
Crispin SM. Ocular manifestations of hyperlipoprotei- plasma metabolites in healthy Beagle dogs. Res Vet Sci.
naemia. J Small Anim Pract. 1993;34: 500-506. 1998;64(2):91-6.
Crispin S. Ocular lipid deposition and hyperlipoprotei- Diez M, Nguyen P, Jeusette I, Devois C, Istasse L,
naemia. Prog Retin Eye Res. 2002;21(2):169-224. Biourge V. Weight loss in obese dogs: evaluation of a
Daminet S, Jeusette I, Duchateau L, Diez M, Van de high-protein, low-carbohydrate diet. J Nutr. 2002;132(6
Maele I, De Rick A. Evaluation of thyroid function in obe- Suppl 2):1685S-7S.
se dogs and in dogs undergoing a weight loss protocol. Vet Diez M, Michaux C, Jeusette I, Baldwin P, Istasse L,
Med A Physiol Pathol Clin Med. 2003;50(4):213-8. Biourge V. Evolution of blood parameters during weight
Delaunois A., Neirinck K, Clinquart A, Istasse L, loss in experimental obese Beagle dogs. J Anim Physiol
Bienfait J-M. Effects of two incorporation rates of guar Anim Nutr (Berl). 2004;88(3-4):166-71.
gum on digestibility, plasma insulin, and metabolites Dobenecker B, Kienzle E. Interactions of Cellulose Con-
in resting dogs. In Dietary fiber : chemical and biologi- tent and Diet Composition with Food Intake and Diges-
cal aspects. D.A.T. Southgate, K. Waldron, I.T. Johnson, tibility in Dogs. J Nutr. 1998; 128(12):2674S-2675S
G.R. Fenwick (eds). AFRC Institute of Food Research, Dumon H, Martin L., Nguyen P., Siliart B. Obesity
Norwich, 1990, 185-188. management in pets: does protein level matter? In:
De Paula RB, da Silva AA, Hall JE. Aldosterone antago- Proceedings of 15th ECVIM-CA CONGRESS (2005) 1st-3rd
nism attenuates obesity-induced hypertension and glo- September, Glasgow, Scotland. p118
merular hyperfiltration. Hypertension. 2004;43(1):41-7 Edney ATB. Management of obesity in the dog. Vet Med
De Rick A, De Schepper J. Decreased endurance as a Small Anim Pract. 1974;69:46-49.
clinical sign of disease in the dog. Vlaams Diergeneesk. Edney ATB, Smith PM. Study of obesity in dogs visiting
Tijdschr. 1980;49:307-321. x veterinary practices in the United Kingdom. Vet Rec.
Dämmrich K. Relationship between nutrition and bone 1986;118:391-396.
growth in large and giant dogs. J Nutr. 1991;121(11 Eisele I, Wood IS, German AJ, Hunter L, Trayhurn P.
Suppl):S114-21. Adipokine gene expression in dog adipose tissues and
Diez M, Minet V, Clinquart A, Dufrasne I., Istasse dog white adipocytes differentiated in primary culture.
L. Dietary fructooligosaccharides modify metabolism in Horm Metab Res. 2005;37(8):474-81.
dogs. In : Proceedings of the 6th Annual Congress of Egron G, Tabbi S, Guilbaud L, Chevallier M, Cadore JL.
the European Society of Veterinary Internal Medicine, Influence du taux et de la nature des fibres alimentaires
12-14 September 1996, Veldhoven, the Netherlands, dans l’alimentation du chien. I. Modifications fécales et
1996a, 27-28. biochimiques. Rev Méd Vét. 1996; 147: 215-222.
Diez M, Hornick JL, Baldwin P, Istasse L. Influence Ettinger SJ. Textbook of Veterinary Internal Medici-
of a blend of fructo-oligosaccharides and sugar beet ne. Diseases of the dog and cat. 2nd ed., WB Saunders
REFERENCIAS
fiber on nutrient digestibility and plasma metaboli- Company, Philadelphia, 1983, 97-99.
te concentrations in healthy beagles. Am J Vet Res. Fahey GC, Merchen NR, Corbin JE, Hamilton AK, Serbe
1997;58(11):1238-42. KA, Hirakawa DA. Dietary fibre for dogs: II. Iso-total
dietary fibre (TDF) additions of divergent fibre sources
74
to dog diets and their effects on nutrient intake, diges- Halton TL, Liu S, Manson JE, Hu FB. Low-carbohydra-
tibility, metabolizable energy and digesta mean reten- te-diet score and risk of type 2 diabetes in women. Am
tion time. J Anim Sci. 1990;68:4229-4235. J Clin Nutr. 2008;87(2):339-46.
Gayet C, Bailhache E, Dumon H, Martin L, Siliart B, Hannah S. Role of dietary protein in weight manage-
Nguyen P. Insulin resistance and changes in plasma ment. Comp Cont Educ Pract Vet. 1999;21 :32S-3.
concentration of TNFalpha, IGF1, and NEFA in dogs du- Hansen BD, Lascelles BD, Keene BW, Adams AK,
ring weight gain and obesity. J Anim Physiol Anim Nutr Thomson AE. Evaluation of an accelerometer for at-
(Berl). 2004;88(3-4):157-165. home monitoring of spontaneous activity in dogs. Am J
Gayet C, Leray V, Saito M, Siliart B, Nguyen P. The Vet Res. 2007;68(5):468-75.
effects of obesity-associated insulin resistance on Hansen RA, Harris MA, Pluhar GE, Motta T, Brevard
mRNA expression of peroxisome proliferator-activa- S, Ogilvie GK, Fettman MJ, Allen KG. Fish oil de-
ted receptor-gamma target genes, in dogs. Br J Nutr. creases matrix metalloproteinases in knee synovia of
2007;98(3):497-503. dogs with inflammatory joint disease. J Nutr Biochem.
Geoghegan JG, Cheng CA, Lawson C, Pappas TN. The 2008;19(2):101-8.
effect of caloric load and nutrient composition on in- Hedhammar A, Wu FM, Krook L. Overnutrition and ske-
duction of small intestinal satiety in dogs. Physiol Be- letal disease. An experimental study in growing Great
hav. 1997;62(1):39-42. Dane dogs. XI. Summary. Cornell Vet. 1974 ; 64, Suppl
German AJ, Holden SL, Bissot T, Hackett RM, Biour- 5 : 128-135.
ge V. Dietary energy restriction and successful weight Heidenberger E and Unshelm J. Verhaltensanderun-
loss in obese client-owned dogs. J Vet Intern Med. gen von Hunden nach Kastration. Tierarzrliche Praxis.
2007;21(6):1174-80. 1990;18:69-75.
Glickman LT, Sonnenschein EG, Glickman NW, Do- Hopkins GS, Schubert TA, Hart BL. Castration of adult
noghue S, Goldschmidt MH. Pattern of diet and obesity male dogs: Effects roaming, aggression, urine marking
in female adult pet dogs. Vet Clin Nutr. 1995;2:6-13. and mounting. J Am Vet Med Assoc. 1976;168:1108-
Glickman LT, Schofer FS, McKee LJ, Reif JS, Goldsch- 1110.
midt MH. Epidemiologic study of insecticide exposures, Houpt KA, Hintz HF. Obesity in dogs. Canadian Practi-
obesity, and risk of bladder cancer in household dogs. J ce. 1978;5:54-58.
Toxicol Environ Health. 1989;28(4):407-14. Houpt KA¸Coren B, Hintz HF, Hilderbrant JE. Effect of
Gross KL, Wedekind K, Kirk CA et al Effect of dietary sex and reproductive status on sucrose preference, food
carnitine or chromium on weight loss and body compo- intake, and body weight of dogs. J Am Vet Med Assoc.
sition of obese dogs. J Anim Sci. 1998 ; 76 suppl:175. 1979; 174:1083-1085.
Hall JA, Picton RA, Skinner MM, Jewell DE, Wander RC. Impellizeri JA, Tetrick MA, Muir P. Effect of weight
The (n-3) fatty acid dose, independent of the (n-6) to reduction on clinical signs of lameness in dogs with hip
(n-3) fatty acid ratio, affects the plasma fatty acid profi- osteoarthritis. J Am Vet Med Assoc. 2000;216(7):1089-
le of normal dogs. J Nutr. 2006 Sep; 136(9): 2338-44. 91.
REFERENCIAS
Halton TL, Willett WC, Liu S, Manson JE, Albert CM, Ishioka K, Omachi A, Sagawa M, Shibata H, Honjoh T,
Rexrode K, Hu FB. Low-carbohydrate-diet score and the Kimura K, Saito M. Canine adiponectin: cDNA structure,
risk of coronary heart disease in women. N Engl J Med. mRNA expression in adipose tissues and reduced plasma
2006;355(19):1991-2002. levels in obesity. Res Vet Sci. 2006;80(2):127-32.
75
Jerico MM, Scheffer KC. Epidemiological aspects of dogs. In: proceedings of the 17th ECVIM-CA congress,
obese dogs in the city of Sao Paulo. Clinica Veterinaria. Budapest, 2007
2002;37: 25-29. Jewell DE, Toll PW. Effects of fiber on food intake in
Jeusette I, Biourge V, Nguyen P, Istasse L, Diez M. dogs. Vet Clin Nutr. 1996;3:115-118.
Energy restriction during a weight loss program must be Jewell DE, Toll PW, Novotny BJ. Satiety reduces adipo-
stricter in female than in male dogs. In: Proceedings sity in dogs. Vet Therapeutics. 2000;1 :17-23.
of 22nd Annual ACVIM Forum, Minneapolis, June 9-12, Joshua JO. The obese dog and some clinical repercus-
2004a. sions. J Small Anim Pract. 1970; 11: 601-606.
Jeusette I, Detilleux J, Cuvelier C, Istasse L, Diez Kealy RD, Lawler DF, Ballam JM, Lust G, Biery DN,
M. Ad libitum feeding following ovariectomy in female Smith GK, Mantz SL. Evaluation of the effect of li-
Beagle dogs: effect on maintenance energy requirement mited food consumption on radiographic evidence of
and on blood metabolites. J Anim Physiol Anim Nutr osteoarthritis in dogs. J Am Vet Med Assoc. 2000 ;217
(Berl). 2004b;88(3-4):117-21. :1678-80.
Jeusette IC, Lhoest ET, Istasse LP, Diez MO. Influence Kealy RD, Lawler DF, Ballam JM, Mantz SL, Biery DN,
of obesity on plasma lipid and lipoprotein concentra- Greeley EH, Lust G, Segre M, Smith GK, Stowe HD.
tions in dogs. Am J Vet Res. 2005a;66(1):81-6. Effects of diet restriction on lifespan and age-related
Jeusette IC, Detilleux J, Shibata H, Saito M, Honjoh changes in dogs. J Am Vet Med Assoc 2002;220:1315-
T, Delobel A, Istasse L,Diez M. Effects of chronic obe- 20.
sity and weight loss on plasma ghrelin and leptin con- Kim SP, Ellmerer M, Van Citters GW, Bergman RN. Pri-
centrations in dogs. Res Vet Sci. 2005b;79(2):169-75. macy of hepatic insulin resistance in the development
Jeusette I, Daminet S, Nguyen P, Shibata H, Saito M, of the metabolic syndrome induced by an isocaloric mo-
Honjoh T, Istasse L, Diez M. Effect of ovariectomy and derate-fat diet in the dog. Diabetes. 2003;52(10):2453-
ad libitum feeding on body composition, thyroid sta- 2460.
tus, ghrelin and leptin plasma concentrations in female Kuruvilla A, Frankel TL Heart rate of pet dogs: effects
dogs. J Anim Physiol Anim Nutr (Berl). 2006a;90(1- of overweight and exercise. Asia Pac J Clin Nutr. 2003;12
2):12-8. Suppl:S51.
Jeusette I, Compagnucci M, Romano V, Vilaseca L, Laflamme, D.P., Hannah, S.S. Proc. Brit. Sm. Anim.
Crusafont J, Sole JM, Castell E, Torre C Effects of high Assoc, April (1988).
protein or high carbohydrate diets on weight loss in Laflamme DP, Kulhman G. The effect of weight loss
obese dogs. Compendium on Continuing Education regimen on subsequent weight maintenance in dogs.
for the Practicing Veterinarian (Supplement) 2006b; Nutr Res.1995 ; 15: 1019-1028.
28:69. Larson BT, Lawler DF, Spitznagel EL, Kealy RD. Im-
Jeusette I., Compagnucci M., Romano V., Vilaseca Ll., proved glucose tolerance with lifetime diet restriction
Crusafont J., Torre C. Effect of ad libitum low-energy favourably affects disease and survival in dogs. J Nutr.
high-protein diet consumption and physical exercise in 2003 ;133 :2887-2892.
REFERENCIAS
obese dogs. In: Proceedings of The European society of Lawler DF, Larson BT, Ballam JM, Smith GK, Biery DN,
Comparative Nutrition, Nantes, October 2006c Evans RH, Greeley EH, Segre M, Stowe HD, Kealy RD.
Jeusette I, Aquino F, Fischetti A, Torre C, Peterson Diet restriction and ageing in the dog: major observa-
M,Greco D. Effects of breed on body composition in tions over two decades. Br J Nutr. 2008;99(4):793-805.
76
Lekcharoensuk C, Lulich JP, Osborne CA, Pusoonthor- McGreevy PD, Thomson PC, Pride C, Fawcett A, Grassi
nthum R, Allen TA,Koehler LA, Urlich LK, Carpenter T, Jones B. Prevalence of obesity in dogs examined by
KA, Swanson LL. Patient and environmental factors as- Australian veterinary practices and the risk factors in-
sociated with calcium oxalate urolithiasis in dogs. J Am volved. Vet Rec. 2005;156(22):695-702.
Vet Med Assoc. 2000;217(4):515-9. Meyer H., Drochner W., Weidenhaupt C. Ein Beitrag
Le Roux PH. Thyroid status, oestradiol level, work per- zum Vorkommen und zur Behandlung der Adipositas des
formance and body mass of ovariectomised bitches and Hundes. Deutsche Tierärztliche Wochenschrift. 1978;
bitches bearing ovarian autotransplants in the stomach 85:133-136.
wall. J South Afr Vet Assoc. 1983;54:115-117. Mizelle HL, Edwards TC, Montani JP. Abnormal car-
Lionetti L, Mollica MP, Lombardi A, Cavaliere G, Gi- diovascular responses to exercise during the develop-
funi G, Barletta A. 2009. From chronic overnutrition to ment of obesity in dogs. Am J Hypertens. 1994;7(4 Pt
insulin resistance: The role of fat-storing capacity and 1):374-8 x.
inflammation. Nutr Metab Cardiovasc Dis. 2009 Jan 24. Mussa et al. Obesity in dogs: a survey results in Italy. In
Lucas A. Programming by early nutrition in man. In: proceedings of 10th Congress of the European Society
Bock GR, Whelan J., editors. The childhood environ- of Veterinary and Comparative Nutrition, October 5-7,
ment and adult disease (CIBA Foundation symposium 2006, Nantes, France.
156). Chichester: Wiley; 1991. p. 38-55. Nelson RW, Ihle SL, Lewis LD, Salisbury SK, Miller
Lund EM, Armstrong PJ, Kirk CA, Kolar LM, Klausner JS. T, Bergdall V, Bottoms GD. Effects of dietary fiber
Health status and population characteristics of dogs and supplementation on glycemic control in dogs with
cats examined at private veterinary practices in the United alloxan-induced diabetes mellitus. Am J Vet Res.
States. J Am Vet Med Assoc. 1999;214(9):1336-1341. 1991;52(12):2060-2066.
Lund E, Armstrong J, Kirk C, Klausner J. Prevalence Nguyen et al. Energy expenditure and body composition
and risk factors for obesity in adult dogs from priva- of dogs from 4 different breeds. In: Proccedings of The
te US veterinary practices. Intern J Appl Res Vet Med, Waltham international nutritional sciences symposium.
2006; 4: 177-186. x Innovation in companion animal nutrition. Washington
Mattheeuws D, Rottiers R, Kaneko JJ, Vermeulen DC, USA, September 15-18, 2005.
A. Diabetes mellitus in dogs : relationship of obesity NRC. National Research Council. Nutriment require-
to glucose tolerance and insulin response. Am J Vet ments of dogs and cats. Revised Edition 2006. The Na-
Res.1984a; 45:98-103. tional Academies Press, Washington, D. C.
Mattheeuws D, Rottiers R, Byens D, Vermeulen A. O’Brien JA, Buchanan JW, Kelly DE. Tracheal collapse
Glucose tolerance and insulin response in obese dogs. J in the dog. J Am Vet Radiol Soc. 1966 ;7:12-20.
Am Anim Hosp Assoc. 1984b; 20:287-293. Ong KK, Dunger DB. Perinatal growth failure: the road
Mason E. Obesity in pet dogs. Vet Rec.1970;86:612- to Obesity, insulin resistance and cardiovascular disea-
616. se in adult. Best Pract Res Clin Endocrinol Metab 2002;
Massabuau P, Verwaerde P, Galinier M, Fourcade J, 16: 191-207.
REFERENCIAS
Rouge P, Galitzky J, Senard JM, Berlan M, Bounhoure Pak-Son Il, Youn-Hwa Young, Pak SI, Youn HY. Risk
JP, Montastruc JL. Left ventricular repercussion of obe- factors for Malassezia pachydermatis-associated derma-
sity-induced arterial hypertension in the dog. Arch Mal titis in dogs : a case-control study. Kor J Vet Clin Med
Coeur Vaiss. 1997; 90(8):1033-1035. 1999;16 :80-5.
77
Parker, H.G., Kim, L.V., Sutter, N.B., Carlson, S., Lo- Serisier S, Leray V, Poudroux W, Magot T, Ouguerram
rentzed, T.D., 2004. Genetic structure of the purebred K, Nguyen P. Effects of green tea on insulin sensitivity,
domestic dog. Science 304, 1160-1164. lipid profile and expression of PPARalpha and PPARga-
Pelat M, Verwaerde P, Tran MA, Montastruc JL, Senard mma and their target genes in obese dogs. Br J Nutr.
JM. Alpha2 -adrenoceptor function in arterial hyperten- 2008 ; 99 : 1208-1216
sion associated with obesity in dogs fed a high-fat diet. Sloth C. Practical management of obesity in dogs and
J Hypertens. 2002 May;20(5):957-64. x cats. J. Small Anim. Pract. 1992; 33:178-82.x
Peña C, Suárez L, Bautista I, Montoya JA, Juste MC. Smith GK, Mayhew PD, Kapatkin AS, McKelvie PJ,
Relationship between analytic values and canine obesi- Shofer FS, Gregor TP. Evaluation of risk factors for de-
ty. J Anim Physiol Anim Nutr. 2008; 92:324-325. generative joint disease associated with hip dysplasia
Robertson ID. The association of exercise, diet and in German Shepherd Dogs, Golden Retrievers, Labrador
other factors with owner-perceived obesity in privately Retrievers, and Rottweilers. J Am Vet Med Assoc. 2001
owned dogs from metropolitan Perth, WA. Preventive ;219(12):1719-1724.
Veterinary Medicine 2003;58:75-83. Smith GK, Paster ER, Powers MY, Lawler DF, Biery
Rocchini AP, Moorehead C, Wentz E, Deremer S. Obe- DN, Shofer FS, McKelvie PJ,Kealy RD. Lifelong diet
sity-induced hypertension in the dog. Hypertension. restriction and radiographic evidence of osteoar-
1987;9(6 Pt 2):III64-8. thritis of the hip joint in dogs. J Am Vet Med Assoc.
Rocchini AP, Yang JQ, Gokee A. Hypertension and in- 2006;229(5):690-693.
sulin resistance are not directly related in obese dogs. Sonnenschein EG, Glickman LT, Goldschmidt MH,
Hypertension. 2004;43(5):1011-6. Epub 2004 Mar 8. x McKee LJ. Body conformation, diet, and risk of breast
Rocksin A., Jeusett I, Torre C, Seipel J, Schaeufele cancer in pet dogs: a case-control study. Am J Epide-
N, Simon D, Nolte I. Long-term management of obese miol. 1991;133(7):694-703.
dogs with two diferent weight - Reduction diets. In: Speakman JR, Booles D, Butterwick R. Validation of
Proceedings of 17th ECVIM-CA congress, Budapest, dual energy X-ray absorptiometry (DXA) by comparison
Hungary, September 13-15, 2007. with chemical analysis of dogs and cats. Int J Obes
Rogers WA. Lipemia in the dog. Vet Clin North Am. Relat Metab Disord. 2001;25(3):439-47.
1977; 7: 637-647. Steininger RE. Die Adipositas und ihre diatetische Be-
Rubner M. The energy value of human food. Z Biol. handlung. Wien Tierarztl Mschr. 1981 ;68 :122-30.
1901; 42:261-308. St-Onge MP and Jones PJ. Physiological effects of
Russsel J and Bass P. Canine gastric emptying of fibre medium-chain triglycerides: potential agents in the
meals: influence of meal viscosity and antroduodenal prevention of obesity. J Nutr. 2002; 132: 329-332.
motility. Am J Physiol. 1985; 249: G662-G667. St-Onge MP, Bosarge A. Weight-loss diet that includes
Saker KE and Remillard RL. Performance of canine consumption of medium-chain triacylglycerol oil leads
weight loss program in clinical practice. Vet thera- to a greater rate of weight and fat mass loss than does
peutics. 2005;6: 291-302. olive oil. Am J Clin Nutr. 2008; 87:621– 626.
REFERENCIAS
Salas A, Subirada F, Pérez-Enciso M, Blanch F, Jeuset- Sunvold G, Vickers RJ, Kelley RL, Tetrick MA, Daven-
te I, Romano V, Torre C. Plant polyphenol intake alters port GM, Bouchard GF. Effects of carnitine during ener-
gene expression in canine leukocyte. J Nutrigenetics gy resytriction in the canine. Faseb J. 1999; 13: A268.
and Nutrigenomics (in press).
78
Sunvold G, Vickers RJ, Kelley RL, Tetrick MA, Daven- Van Vliet BN, Hall JE, Mizelle HL, Montani JP, Smith
port GM, Bouchard GF. Effects of carnitine during ener- MJ Jr. Reduced parasympathetic control of heart rate
gy restriction in the canine. Faseb J. 1999;13: A268 in obese dogs. Am J Physiol. 1995;269(2 Pt 2):H629-
Torre C, Jeusette I, Romano V, Vilaseca Ll. Effects of 37. x
oral plant polyphenols on blood antioxidant status of Verwaerde P, Senard JM, Galinier M, Rouge P, Mas-
adult dogs. Compendium on Continuing Education for the sabuau P, Galitzky J, Berlan M, Lafontan M, Mon-
Practicing Veterinarian (Supplement.) 2006a; 28: 50. tastruc JL. Changes in short-term variability of blood
Torre C, Jeusette I., Romano V, Blanch F, De diego pressure and heart rate during the development of
I, Subirada F, Duran O. Plant Polyphenol intake alters obesity-associated hypertension in high- fat fed dogs.
gene expression in canine leukocytes. In: Proceedings J Hypertens. 1999;17(8):1135-43.
of 3rd. International Conference for Advances in Cani- Vincent HK, Taylor AG, Biomarkers and potential me-
ne and Feline Genomics and Inherited Diseases, Davis chanisms of obesity-induced oxidant stress in humans.
(California). 2006b. Int J Obes (Lond). 2006;30(3):400-418.
Torres CL, Hickenbottom SJ and Rogers QR. Palatabi- Weber M, Bissot T, Servet E, Sergheraert R, Biourge V,
lity Affects the Percentage of Metabolizable Energy as German AJ. A high-protein, high-fiber diet designed for
Protein Selected by Adult Beagles J Nutr. 2003; 133: weight loss improves satiety in dogs. J Vet Intern Med.
3516–3522. 2007;21(6):1203-8.
Valtonen MH, Oksanen A. Cardiovascular disease and White RAS, Williams JM. Tracheal collapse in the dog-
nephritis in dogs. J Small Anim. Pract. 1972: 13; 687- is there really a role for surgery? A survey of 100 cases.
697. J Small Anim Pract. 1994; 35:191-196.
Van Citters GW, Kabir M, Kim SP, Mittelman SD, Dea Wolfsheimer KJ. Obesity in dogs. Comp Cont Educ
MK, Brubaker PL, Bergman RN. Elevated glucagon-like Small Anim Pract. 1994;16:981-98x.
peptide-1-(7-36)-amide, but not glucose, associated Wozniak SE, Gee LL, Wachtel MS, Frezza EE.2008.
with hyperinsulinemic compensation for fat feeding. J Adipose Tissue: The New Endocrine Organ? Dig Dis Sci.
Clin Endocrinol Metab. 2002;87(11):5191-5198. 2008 Dec 4.
panion animals. Tijdschr Diergeneeskd 1992;117 Suppl obesity, and risk of bladder cancer in household dogs. J
1:44S-45S. Toxicol Environ Health. 1989;28(4):407-414.
Sloth C. Practical management of obesity in dogs and Armstrong PJ, Lund EM. Changes in body condition and
cats. J. Small Anim. Pract. 1992; 33:178-182. energy balance with aging. Vet Clin Nutr. 1996; 3:83-87.
79
Lund EM, Armstrong PJ, Kirk CA, Kolar LM, Klausner Raffan E, Holden SL, Cullingham F, Hackett, RM,
JS. Health status and population characteristics of dogs Rawling JM, German AJ. Standardized positioning is
and cats examined at private veterinary practices in the essential for precise determination of body composition
United States. J Am Vet Med Assoc. 1999;214(9):1336- using dual-energy x-ray absorptiometry in dogs. J. Nutr.
1341. 2006;136:1976S-1978S.
Lund E, Armstrong J, Kirk C, Klausner J. Prevalence Ferrier L, Robert P, Dumon H, Martin L, Nguyen P.
and risk factors for obesity in adult dogs from priva- Evaluation of Body Composition in Dogs by Isotopic Di-
te US veterinary practices. Intern J Appl Res Vet Med. lution Using a Low-Cost Technique, Fourier-Transform
2006; 4:177-186. Infrared Spectroscopy. J. Nutr. 2002;132:1725S-1727S.
Jerico, M.M., Scheffer, K.C. Epidemiological aspects of Son HR, d’Avignon A & Laflamme DP. Comparison of
obese dogs in the city of Sao Paulo. Clinica Veterinaria. dual energy X-ray absorptiometry and measurement of
2002;37:25-29. total body water content by deuterium oxide dilution
Robertson ID. The association of exercise, diet and for estimating body composition in dogs. Am. J. Vet.
other factors with owner-perceived obesity in privately Res. 1998; 59:529-532.
owned dogs from metropolitan Perth, WA. Preventive Anderson DB, Corbin JE. Estimating body fat in mature
Veterinary Medicine 2003;58:75-83. beagle bitches. Lab Anim Sci. 1982; 32(4):367-370.
McGreevy PD, Thomson PC, Pride C, Fawcett A, Grassi Wilkinson MJ, McEwan NA. Use of ultrasound in the
T, Jones B. Prevalence of obesity in dogs examined by measurement of subcutaneous fat and prediction of to-
Australian veterinary practices and the risk factors in- tal body fat in dogs. J Nutr 1991;121: s47-50.
volved. Vet Rec. 2005;156(22):695-702. Bouchard C. Dexfenfluramine and abdominal visceral
Colliard L, Ancel J, Benet JJ, Paragon BM, Blanchard fat. Obes Res. 1996;4(1):77-79.
G. Risk factors for obesity in dogs in France. J Nutr. Kopelman PG. Obesity as a medical problem. Nature.
2006;136(7 Suppl):1951S-1954S. 2000; 404 (6778): 635-643.
Mussa et al. Obesity in the dogs : a survey results in Ishioka K, Okumura M, Sagawa M, Nakadomo F, Ki-
Italy. In proceedings of 10th congress of the european mura K, Saito M. Computed tomographic assessment
society of veterinary and comparative nutrition, Octo- of body fat in beagles. Vet Radiol Ultrasound.
ber 5-7, 2006, Nantes, France. 2005;46(1):49-53.
Munday HS, Booles D, Anderson P, Poore DW, Earle Kyle UG, Bosaeus I, De Lorenzo AD, Deurenberg P,
KE. The repeatability of body condition measurements Elia M, Gamez JM, Heitmann BL, Kent-Smith L, Mel-
in dogs and cats using Dual Energy X-ray. Absorptiome- chior JC, Pirlich M, Scharfetter H, Schols AM, Pichard
try. J Nutr. 1994;124: 2619S-2621S. C. Composition of the ESPEN Working Group. Bioelectri-
Lauten SD, Cox NR, Brawner jr WR, Baker HJ. Use of cal impedance analysis-part I: review of principles and
dual energy x-ray absorptiometry for noninvasive body methods. Clin. Nutr. 2004;23:1226-1243.
composition measurements in clinically normal dogs. Stanton CA, Hamar DH, Johnson DE, Fettman MJ.
Am. J. Vet. Res. 2001;62: 1295-1301. Bioelectrical impedance and zoometry for body com-
REFERENCIAS
Speakman JR, Booles D, Butterwick R. Validation of position analysis in domestic cats. Am. J. Vet. Res.
dual energy X-ray absorptiometry (DXA) by comparison 1992;53: 251-257.
with chemical analysis of dogs and cats. Int J Obes Elliott DA, Backus RC, Van Loan MD, Rogers QR. Extra-
Relat Metab Disord. 2001;25(3):439-447. cellular water and total body water estimated by mul-
80
tifrequency bioelectrical impedance analysis in healthy Edney ATB, Smith PM. Study of obesity in dogs visiting
cats: a cross-validation study. J Nutr. 2002;132(6 Suppl veterinary practices in the United Kingdom. Vet. Rec.
2):1760S-1762S. 1986;118: 391-396
Elliott DA, Backus RC, Van Loan MD, Rogers QR. Laflamme DP, Kealy RD, Schmidt DA. Estimation of
Evaluation of multifrequency bioelectrical impedance body fat by body condition score. J. vet. Int. med.
analysis for the assessment of extracellular and total 1994; 8: 154.
body water in healthy cats. J Nutr. 2002;132(6 Suppl Laflamme D. Development and validation of a body
2):1757S-1759S. condition score system for dogs. Canine Pract. 1997;22:
Scheltinga MR, Helton WS, Rounds J, et al. Impedan- 10-15.
ce electrodes positioned on proximal portions of limbs Burkholder WJ, Toll PW. 2000. Obesity. In: Hand,
quantify fluids compartment in dogs. J appl Physiol Thatcher, Remillard, Roudebush (Eds); Small animal
1991; 70: 2039-2044. clinical nutrition, 4th edition. Topeka. Mark Morris Ins-
Jeusette I, Aquino F, Fischetti A, Torre C, Peterson titute. 401-430.
M,Greco D. Effects of breed on body composition in Mawby DI, Bartges JW, DAvignon A, Laflamme DP,
dogs. In: proccedings of the 17th ECVIM-CA congress, Moyers TD, Cottrell T. Comparison of Various Methods
Budapest, 2007. for Estimating Body Fat in Dogs. J Am Anim Hosp Assoc.
2004;40(2):109-114.
Kienzle E, Opitz B, Earle KE, Smith PM, Maskell IE, NRC. National Research Council. Nutriment Require-
Iben C. The development of an improved method of ments of Domestic Animals. Revised Edition, 1985. Na-
predicting the energy content in prepared dog and cat tional Academy Press, Washington, D.C.
food. J. Anim. Physiol Anim. Nutr. 1998a; 79:69-79. NRC. National Research Council. Nutriment Require-
Kienzle E, Opitz B, Earle KE, Smith PM, Maskell IE. ments of Dogs and cats. Revised Edition 2006. The Na-
The influence of dietary fiber components on the appa- tional Academies Press, Washington, D.C.
rent digestibility of organic matter and energy in pre- Rubner M. The energy value of human food. Z. Biolo.
pared dog and cat foods. J. Anim. Physiol Anim. Nutr. 1901; 42:261-308.
1998b; 79:46-56.
REFERENCIAS
81