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LA MATERIA EXTRAÑA, LA MATERIA QUE LO CONVIERTE TODO

Comúnmente en nuestra vida cotidiana interaccionamos con materia compuesta de


protones, neutrones y electrones, organizados de diferentes maneras formando los
átomos de la tabla periódica que conforma todo aquello que vemos día a día; sin
embargo, existe la posibilidad de que en alguna parte del universo haya otro tipo de
materia: “la materia extraña”.

¿Qué es?

Como se mencionó anteriormente la materia está compuesta por electrones, protones y


electrones, estos dos últimos forman el núcleo atómico y a su vez estas partículas están
formadas por partículas más pequeñas llamadas Quarks.
Por lo general los núcleos atómicos de los elementos de nuestra tabla periódica está
compuestos por dos tipos de quarks, los up y los down, por ejemplo los neutrones están
conformados por 1 quark up y 2 down, y los protones por 2 up y 1 down. No obstante,
existe otro tipo de materia que está compuesta por 1 quark up, 1 down y 1 quark extraño,
Pero ¿qué es un quark extraño?

El quark extraño (strange) fue propuesto por Murray Gell-Mann para explicar la enorme
variedad de hadrones observados hasta 1964, los cuales no podrían existir sólo con
combinaciones de quarks up y down. Fue propuesto originalmente junto a los quarks up y
down, y la 's' de su nombre venía seguramente de 'sideways' (de lado), en contraposición
a lo de up y down. Más tarde tomaría el nombre de quark extraño, porque forma parte de
lo que se conocían entonces como partículas extrañas, que tenían una vida media
"extrañamente" superior a la esperada. Posteriormente, la idea de que algún tipo de
materia de quarks pudiera ser el estado fundamental de la materia bariónica (conformada
por 3 quarks) fue propuesta, ya en 1984, por el físico Edward Witten, que sugirió la
existencia de la SQM (Strange Quark Matter, o "Materia de Quarks Extraña").

Formación

En condiciones normales, el quark extraño sometido a la interacción nuclear débil se


desintegra en quarks up y down, pero, por otra parte, en condiciones especiales en las
que se sobrepasen la presión y densidad críticas, se podría dar una reacción inversa y los
quarks u y quarks d se podrían fusionar para dar lugar a quarks extraño, de modo que el
objeto resultante de tales reacciones no es ya solo quarks, sino "materia extraña".

Se teoriza que el Universo habría materia extraña en dos estados:


1. Dentro de las estrellas de neutrones, donde si la presión en su núcleo es
suficientemente alta (superior a la presión crítica), y al tipo de densidades que son
esperables en el centro de una estrella de neutrones, la materia de quarks sería
probablemente materia extraña.

2. Los strangelets son pequeñas piezas de materia extraña, tal vez tan pequeñas como
los núcleos atómicos. Se producirían cuando las estrellas extrañas se forman o colisionan.

Los peligrosos strangelets


Si hay strangelets sueltos alrededor del universo, entonces ocasionalmente uno de ellos
debería chocar con el planeta Tierra, donde aparecería como un tipo exótico de rayo
cósmico. Esto da pie a la pregunta de si un strangelet desde el espacio convertiría el
planeta entero en materia extraña. Este escenario de desastre es como sigue: un
strangelet golpea un núcleo, catalizando su conversión inmediata a materia extraña. Esto
libera energía, y manda pedazos (más strangelets) volando en todas direcciones. Estos
se unen con otros núcleos y los convierten, llevando a una reacción en cadena, al final de
la cual los núcleos de todos los átomos habrán sido convertidos, y la Tierra habrá sido
reducida a una nube caliente de strangelets.

Sin embargo, por suerte se cree que esto no ocurriría, ya que, la mayoría de los modelos
predicen que los strangelets, como los núcleos, están cargados positivamente, entonces
son repelidos electrostáticamente por los núcleos, y raramente se unirían con ellos.
Aunque experimentos realizados en el Relativistic Heavy Ion Collider (RHIC) en
Brookhaven no descartan la posibilidad del todo.

En las estrellas de neutrones, dicha conversión parece ser más factible. Ya que estas en
cierto sentido se pueden considerar como núcleos atómicos gigantes de unos 20 km de
diámetro, sostenido por la gravedad. Si un strangelet golpea una estrella de neutrones,
podría convertir una pequeña región de la misma, y esa región crecería hasta consumir la
estrella enteramente.

Por: Diosceline Torra

Fuentes: ABC.es Quimica.es

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