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AL-ANDALUS

¿Cual es el legado de la civilización islámica?

El mihrab de la mezquita de Córdoba, siglo X.

En el siglo VII, los árabes iniciaron un proceso de expansión y conquistaron


un gran imperio.

La debilidad del reino visigodo permitió que en el año 711 dominaran la


Península Ibérica, puerta de entrada a Europa, donde permanecieron hasta
1492.

El territorio ocupado recibió el nombre de Al-Andalus y abarcaba la mayor


parte de la Península.

A lo largo de los siglos, este territorio fue conquistado por los reinos
cristianos que se habían creado en el Norte peninsular.

¿Cómo se expandió el Islam?


Después de la conquista de la península Arábiga por Mahoma y sus seguidores, los
musulmanes, en nombre de la nueva religión islámica, conquistaron un gran imperio que
se extendió desde el océano Índico hasta el océano Atlántico.

En esta expansión cruzaron el estrecho de Gibraltar y llegaron a la Península Ibérica. En


los primeros años del siglo VIII, la Península fue conquistada casi en su totalidad e
incorporada al Imperio islámico con el nombre de Al-Andalus.

¿Cómo y por qué se expandió el Islam desde su núcleo originario en Arabia? ¿Cómo se
gobernaba y organizaba el Imperio islámico?

A. La expansión del Islam (622-


846)

A la muerte de Mahoma (632), la mayor


parte de la península Arábiga había
adoptado el Islam. Los creyentes
conservaron un jefe religioso que tomó el
nombre de califa y que también tenía
atribuciones políticas.
Impulsados por el deseo de difundir su
nueva religión, los musulmanes
aprovecharon la debilidad de los imperios
vecinos para realizar una expansión
militar:

● En el siglo VII se enfrentaron al Imperio bizantino (conquista de Siria y Egipto) y


dominaron parte del Imperio persa.
● A lo largo del siglo VIII llegaron hasta el río Indo y asediaron Constantinopla en dos
ocasiones, aunque no pudieron conquistarla
.
● También vencieron a las tribus bereberes del Norte de África, conquistaron parte de
la Península Ibérica (718) y penetraron en el reino franco, donde fueron derrotados
en la batalla de Poitiers (732) y obligados a retirarse al Sur de los Pirineos.

● En el siglo IX se expandieron hacia Nubia (Sur de Egipto) y en Europa ocuparon


Palermo (831) e hicieron incursiones en el Sur y centro de Italia (846).

En algo más de un siglo, el mundo musulmán se había convertido en un gran Imperio,


que abarcaba culturas y religiones muy diversas.
El Imperio islámico dominó el comercio entre Oriente y Occidente. Navegantes
musulmanes controlaban el Mediterráneo y sus caravanas terrestres se adentraron por
Asia Central, llegando hasta China.

La expansión del Imperio Islámico

B. La organización del Califato

A lo largo de la Edad Media, el gobierno y la


organización del Imperio islámico pasó por diferentes
etapas:

● Los cuatro primeros califas (632-661) fueron


elegidos entre familiares próximos al profeta. Sin
embargo, la forma de elección generó una
división entre la comunidad musulmana:
○ Los chiitas defendían que el califa debía ser un descendiente directo de
Mahoma.
○ Los sunitas, que se basan en el Corán y en los textos del profeta (Sunna),
pensaban que el califa debía ser elegido entre los mejores creyentes.

● La dinastía Omeya, procedente de Siria, se hizo con el poder (661-750). Instaló la


capital en Damasco y protagonizó una gran expansión en la que, entre otros
territorios, conquistó la Península Ibérica.

● La dinastía Abasida (750-1258) derrotó a los omeyas y trasladó la capital a Bagdad.


● Durante este periodo algunas provincias (Al-Andalus, Egipto y Marruecos) se
separaron y se declararon independientes políticamente del poder de Bagdad.
● Posteriormente, el Imperio quedó en manos de los turcos, que, en 1453,
conquistaron Constantinopla, la capital bizantina, lo cual se considera el fin de la
Edad Media.

C. El esplendor económico y cultural

El árabe se convirtió en la lengua oficial del


Imperio. Aunque eran tolerantes con las
otras religiones, las ventajas
económicas y sociales de que gozaban los
musulmanes favorecieron la
islamización de la mayoría de la
población.

El Imperio se llenó de nuevas ciudades


(Samarkanda, El Cairo, Kairuán...), que
eran centros religiosos, políticos,
económicos y culturales.

En ellas se crearon escuelas,


bibliotecas y centros de traductores,
donde se conservaron y desarrollaron los
grandes conocimientos de la Antigüedad y
llegó el saber de las ciencias orientales.

2.- La conquista de Al-Andalus


La debilidad de la monarquía visigoda

Al iniciarse el siglo VIII, la monarquía


visigoda que gobernaba en Hispania se
hallaba sumida en una profunda crisis.

Por un lado, el empobrecimiento


general de la economía había provocado
el descontento de la población. Por otro,
se desencadenó una guerra entre los
partidarios de la monarquía hereditaria,
que apoyaban a Agila, hijo del rey
Witiza, y los defensores de la monarquía
electiva, que eligieron como rey a
Rodrigo.

Para derrocar a Rodrigo, los partidarios


de Agila pidieron ayuda al gobernador
musulmán de Túnez.

La conquista militar
En el año 711, un ejército formado por bereberes dirigidos por una minoría árabe cruzó el
estrecho de Gibraltar. Los visigodos no pudieron hacerles frente y fueron derrotados en la
batalla de Guadalete, donde murió el rey Rodrigo.

Los ejércitos musulmanes, que no debían superar los 25000 hombres, con Tariq y Muza al
mando, ocuparon todo el Sur de la Península y tomaron Toledo, la capital del reino visigodo.
El avance militar fue rápido porque encontró muy poca resistencia de la población y muchas
ciudades les abrieron sus puertas.

En el año 718, los ejércitos musulmanes controlaban casi toda la Península, a excepción de
las zonas más montañosas o despobladas. Algunos nobles y clérigos hispanovisigodos,
junto con una pequeña parte de la población, se refugiaron en las montañas cantábricas,
que no habían sido ocupadas.

La integración de Al-Andalus en el Imperio islámico


Los nuevos gobernantes musulmanes establecieron unos pactos de sumisión con los
nobles godos, según los cuales estos últimos conservaban su poder.

El Islam pasó a ser la religión oficial del nuevo Estado y la mayoría de los hispanovisigodos
acabaron por islamizarse, es decir, se convirtieron al Islam, aceptaron el idioma árabe, sus
costumbres y su manera de vestir. Se les conoce con el nombre de muladíes.
La población que se mantuvo cristiana fue denominada mozárabe. Aunque en general los
musulmanes eran tolerantes con los cristianos y los judíos, algunas veces estos fueron
perseguidos, y muchos mozárabes optaron por emigrar hacia las zonas no ocupadas del
Norte peninsular.

La conquista de la Península Ibérica.

¿Cómo se desvinculó Al-Andalus del Imperio islámico?

La presencia islámica en la Península duró casi 800 años, pero el territorio que dominaban y
la forma de gobernarse cambió a lo largo de todos estos siglos. Esta evolución fue debida a
dos factores:
● La disminución del territorio de Al-Andalus como consecuencia de las campañas
militares emprendidas por los condados y reinos cristianos del Norte peninsular.
● Las rivalidades y enfrentamientos entre los distintos grupos de poder dentro del
Imperio islámico y de Al-Andalus.

El Emirato dependiente (718-756)


Una vez finalizada la conquista militar, Al-Andalus
se convirtió en una provincia o emirato que
dependía del Califato Omeya de Damasco.

La capital se estableció en la ciudad de Córdoba y


se nombró a un valí para gobernar el emirato.

El poder de los emires en los territorios al Norte del


Sistema Central era escaso y se limitaba al mantenimiento de algunas guarniciones
militares.

El Emirato independiente (756-929)


A mediados del siglo VIII, cuando los califas de Damasco fueron destronados por los
Abasidas de Bagdad, el último miembro de la familia Omeya, el príncipe Abd al-Rahman,
huyó de su ciudad y se estableció en Al-Andalus.

Muy pronto, este príncipe rompió con el Califato de Bagdad, se proclamó emir
independiente, con el nombre de Abd al-Rahman I, y fundó el Emirato Omeya de Córdoba.

Este hecho supuso la ruptura de la unidad política del Imperio islámico, aunque el Estado de
Al-Andalus
se mantuvo
bajo la
autoridad
religiosa
del califa
de Bagdad.

El Emirato independiente de Córdoba (siglo VIII).


3. La evolución de Al-Andalus 929-1492)

El Califato de Córdoba (929-1031)

A principios del siglo X, el


Emirato cordobés se hallaba
enfrentado a numerosos
problemas: rebeliones internas,
ataques de los reinos cristianos (León,
Navarra y Castilla) y amenazas al
comercio marítimo desde el Norte
de África.

El emir Abd al-Rahman III quiso


reforzar su poder e imponer su
autoridad sobre las diferentes
familias que rivalizaban por el poder. Para ello, en el año 929 se independizó de la autoridad
religiosa de Bagdad, se proclamó califa e inauguró el Califato de Córdoba.

Los reinos de taifas (1031-1248)

A partir del año 1008, la unidad


del Califato se empezó a
resquebrajar. La aristocracia, los
altos funcionarios y el ejército
pugnaban por escapar del
control del califa y convertirse en
la máxima autoridad en su
provincia (cora).

En el año 1031, Al-Andalus se


dividió en más de 25 reinos
independientes llamados taifas.
La ciudad era el principal centro
económico y las taifas vivieron
una época de prosperidad y
desarrollo urbano.

Sin embargo, la fragmentación política las debilitó militarmente frente a los reinos cristianos.
Esto facilitó la invasión de los almorávides en el siglo XI y de los almohades en el XII, unos
pueblos que habían creado un gran imperio en el Norte de África. Ambos se instalaron en
Al-Andalus y controlaron la mayoría de los reinos de taifas.
Estas invasiones consiguieron frenar temporalmente el avance cristiano, pero no pudieron
hacer frente a las campañas militares que los reinos del Norte emprendieron en el siglo XIII
para conquistar la mayoría de taifas.

El reino nazarí de Granada (1248-1492)


El único territorio que sobrevivió al
avance cristiano del siglo XIII fue el
reino de Granada, que estaba
gobernado por sultanes o reyes de
la dinastía nazarí, relacionados
con los califas del Norte de África.

El reino poseía un extenso


territorio, una gran fachada
marítima, importantes puertos
comerciales y una rica agricultura.
La capital, Granada, era uno de los
centros culturales y comerciales
más importantes de Europa.

Todo ello permitió a los sultanes pagar elevados impuestos en oro a Castilla para evitar sus
ataques. Esto hizo posible su pervivencia hasta el año 1492, cuando Boabdil, el último rey
de Granada, se rindió ante los Reyes Católicos.

El esplendor del Califato de Córdoba

El Califato fue la época de máximo esplendor y poder militar de Al-Andalus, sobre todo
en tiempos de los califas Abd al-Rahman III, al-Hakam II e Hixem II.

Los califas consiguieron frenar la expansión de los reinos cristianos hispánicos y dominarlos
militarmente gracias a las victoriosas expediciones militares que organizó al-Mansur, a
finales del siglo X, y a los impuestos (parias) que les pagaban para obtener la paz.

Fue una época de prosperidad económica debido al papel que desempeñaba Al-Andalus
como intermediaria del comercio entre Oriente Medio (Bizancio, Bagdad, Samarkanda...),
el Norte de África (el Magreb, Mauritania...) y la Europa cristiana (reino de Francia,
Lombardía…).

El Estado cobraba diversos impuestos sobre la producción agrícola (zakat) y el tráfico


comercial. Su riqueza permitió mantener una gran burocracia y un numeroso ejército.
La mezquita de Córdoba. El califa Abd al-Rahman III en su corte.

LA ADMINISTRACIÓN DEL ESTADO


● Al-Andalus estaba dividido en unas 21 provincias o coras.
● El califa tenía un poder absoluto: era juez supremo, máxima autoridad religiosa y
general de los ejércitos.
● Por debajo se encontraba el hachib (primer ministro), ayudado por los distintos
visires (ministros). Juntos formaban el diwan (gobierno).
● Los gobernadores de las provincias eran los valís, y los de las marcas, los
generales o qaids.
● Los cadíes impartían justicia.
● Los almotacén controlaban el zoco y el comercio en las ciudades.
VIAJE AL PASADO

Hammal, un campesino de la alquería

Hammal es el padre de una familia campesina dedicada a la agricultura. Vive en una


alquería, una pequeña comunidad rural no muy alejada de la ciudad, que cuenta con
algunas casas habitadas por diferentes familias.

Hammal no es propietario de la tierra que trabaja, sino que cultiva unas parcelas que un
rico señor le ha arrendado. Es una tierra fértil y próspera, que da buenos frutos todo el
año porque está regada mediante un sistema de pozos, aljibes y acequias.

¿Qué productos cultiva Hammal en su hacienda? ¿Qué sistemas de riego ha construido


en sus campos para alcanzar una elevada productividad?

A. El cultivo de las tierras


La llegada de los árabes supuso la aparición en la Península Ibérica de una agricultura
nueva, con nuevas especies de plantas introducidas desde Oriente y con predominio del
regadío.

La base de la agricultura eran los cereales, las hortalizas y las verduras, las legumbres, el
arroz, los árboles frutales y las plantas aromáticas. También se cultivaban otras plantas de
uso comercial, como las moreras para la cría de gusanos de seda, las textiles (algodón y
lino), las medicinales y las empleadas en la fabricación del papel.

En sus parcelas, Hammal cultiva sobre todo frutas y verduras, que vende en el mercado
(zoco) de la ciudad vecina. También vende fruta a los artesanos que elaboran almíbares o
jarabes, y plantas aromáticas para crear perfumes.

Nuevos cultivos introducidos por los árabes


● Cereales: arroz.

● Hortalizas y verduras: berenjena, espárrago, espinaca, acelga, calabaza, pepino,


judía verde, ajo, cebolla, zanahoria, nabo.

● Frutas: sandía, melón, naranja amarga, limón, higo, granada, plátano, membrillo,
albaricoque.
● Especies: azafrán.

● Otros: caña de azúcar y algodón.

Las tierras de regadío estaban divididas en pequeñas parcelas, y la unidad rural más
importante era la alquería.

Una alquería de Al-Andalus.

B. Los sistemas de regadío

Los musulmanes mejoraron la agricultura gracias a la recopilación y traducción de gran


cantidad de tratados agrícolas orientales y al perfeccionamiento y aumento de los
sistemas de regadío usados anteriormente.

Las nuevas técnicas hidráulicas de extracción y conducción del agua de riego permitieron
un gran aprovechamiento del agua para la agricultura, que llevó a un notable aumento de
la productividad.

Esta prosperidad agrícola hizo posible alimentar a una población que crecía, desarrollar el
comercio y hacer surgir nuevas ciudades.

En su alquería, Hammal y los otros campesinos han construido un pozo para captar las
aguas subterráneas, una rueda para subir el agua del río y guardarla en la alberca y han
abierto canalizaciones o acequias que llevan el agua a los campos sirviéndose de los
desniveles del suelo.

También emplean técnicas de drenaje para desecar tierras pantanosas.

La noria
Para utilizar las aguas subterráneas cavaban pozos y elevaban el agua mediante una
noria.
La noria.

La rueda hidráulica
Para extraer el agua de los ríos construían grandes ruedas hidráulicas accionadas por la
propia corriente del río.

La rueda hidráulica.

La difusión de las obras hidráulicas


Al-Mutaim hizo llegar una acequia a la mezquita de Almería y corrió por vez primera el
agua en el I de Ramadán del año 458.
Luego hizo derivar un ramal de esta acequia más allá de la alcazaba almeriense,
haciendo correr dicha acequia por un canal subterráneo hasta alcanzar el pozo que
excavó en la parte Norte de la alcazaba. También construyó norias en dicho pozo para
elevar el agua hasta la fortaleza y hacerla llegar al huerto para regar los cultivos.
Al-Ugrí: La cora de Almería, siglo XI.

DESCUBRE
Las ciudades de Al-Andalus
En el mundo islámico, el centro de toda la actividad económica era la ciudad. Allí se
concentraba la producción manufacturera, se intercambiaban productos agrarios y
artesanales y se conectaban las rutas del comercio internacional a larga distancia.

La sociedad andalusí era eminentemente urbana y en las ciudades se concentraba una


elevada población, que reunía diversidad de religiones y categorías sociales.
¿Cómo eran las ciudades andalusíes? ¿Qué actividades se realizaban en ellas?

A. Una sociedad urbana

Al-Andalus fue un Estado muy poblado para su época y contaba con grandes ciudades.

Córdoba superaba los 300000 habitantes y era una de las ciudades más populosas del
mundo. Asimismo, como ciudades importantes se hallaban Sevilla, Toledo, Granada,
Badajoz, Zaragoza y Valencia.

La mayoría de ellas estaban rodeadas de murallas y contaban con varias puertas de


acceso que se cerraban cada noche. Las calles no seguían un trazado ordenado y
constituían un verdadero laberinto.

Los núcleos urbanos constituían importantes centros políticos y culturales. También tenían
una intensa actividad económica porque concentraban los trabajos artesanales y
comerciales.

LOS DISTINTOS GRUPOS SOCIALES


Los musulmanes se diferenciaban entre la aristocracia, la clase media y el pueblo llano:
● Árabes: eran una minoría y acaparaban cargos, privilegios y la propiedad de la
tierra.
● Bereberes: habían llegado con el ejército conquistador o emigrado desde el Norte
de África. Muchos se dedicaban al pastoreo y tenían una condición humilde.
● Muladíes: constituían la mayoría de la población y acabaron fusionándose con los
dos grupos anteriores. Hispanovisigodos islamizados
Los no-musulmanes pagaban más impuestos y tenían limitados algunos derechos:
● Mozárabes: profesaban la religión cristiana y vivían mayoritariamente en las
ciudades.
● Judíos: se dedicaban a la artesanía, el comercio, la medicina o la ciencia.
B. La artesanÍa y el comercio

Los artesanos se agrupaban por barrios


gremiales (textil, papel, cuero, forja,
vidrio, etc.).

El comercio interior era muy activo y en


todas las ciudades había zocos
(mercados) para el intercambio de
productos.

El comercio a larga distancia también era


muy importante:
● De Europa llegaban metales y madera; de África, esclavos, oro y marfil, y de
Oriente, objetos de lujo y especias.
● Por su parte, Al-Andalus también exportaba productos agrícolas y de artesanía.

Esta prosperidad estuvo estimulada por la existencia de una moneda única (el dinar de oro
y el dirham de plata) que circulaba por todas las tierras islámicas.

El centro de la ciudad era la medina, que tenía su propia muralla y albergaba la mezquita
mayor y el alcázar o residencia gubernativa. También tenía fuentes con agua potable y
baños públicos.

La actividad comercial se concentraba en el zoco (mercado) y en su proximidad había


alhóndigas (hospederías o casas públicas destinadas a la compraventa de trigo) para las
caravanas que llegaban a la ciudad. La alcaicería era un espacio cerrado dentro del
zoco, donde se vendían las mercancías más valiosas.

Las minorías mozárabe y judía acostumbraban a vivir en barrios separados. Los barrios
fuera de las murallas eran los arrabales.

Una ciudad andalusí.


Las tierras madrileñas en época musulmana

Fui sobre agua edificada, mis muros de fuego son

Las tierras de la actual Comunidad


de Madrid, una zona muy poco
poblada de la Meseta Sur, habían
sido ocupadas en el siglo VIII por los
musulmanes.
A finales del siglo IX, ante el avance de los reinos cristianos hacia la línea del Duero, los
emires cordobeses construyeron un cinturón defensivo, compuesto por castillos, atalayas
y torres, entre la Sierra de Guadarrama y Toledo.

Destacaron los recintos fortificados de las ciudades de Madrid, Talamanca del Jarama y
Alcalá de Henares, que fueron el embrión de los núcleos urbanos actuales.

Cuando el Califato de Córdoba se desintegró en reinos independientes (1031), gran parte


de los territorios madrileños pasaron a formar parte del reino taifa de Toledo.

Mayrit, la fortaleza árabe

El emir cordobés Muhammad I (852-886)


levantó un alcázar en un promontorio
junto al río Manzanares, conocido con el
término árabe de Mayrit, que significa
"tierra rica en agua". Era una zona
estratégica por su cercanía a Toledo y a
las rutas de acceso al territorio castellano.

Con el tiempo se rodeó de murallas, de


una ciudadela y de una mezquita. Los
soldados se proveían de alimentos y productos artesanales que les proporcionaban los
agricultores y artesanos que trabajaban para ellos.

De los restos de esta antigua fortaleza se conserva una parte de la muralla y algunas de sus
torres, un cuerpo de guardia que se encargaba de vigilar una de las puertas, pozos y silos
utilizados como basureros y hornos.

¿CIUDAD CRISTINA O MEDINA?

Desde hace ya varias décadas se ha venido relacionando la ciudadela musulmana de


Mayrit con el origen de la villa de Madrid.

Sin embargo, recientes excavaciones sitúan el inicio de la ciudad en época cristiana y


muestran que Mayrit era solo un enclave militar, sin un núcleo urbano propiamente.
Esta nueva teoría se sustenta en los restos de las casas que han salido a la luz y que se
han datado con posterioridad a la ocupación musulmana.

También atribuye algunos de los objetos islámicos encontrados a la población mudéjar,


que convivió con la cristiana a partir del siglo XIII, y relaciona los únicos restos
verdaderamente de época islámica (silos, hornos...) con una población que vivía
diseminada por los alrededores.
Mayrit en el siglo X.

El reino taifa de Toledo


El reino taifa de Toledo fue uno de los
de mayor extensión, pues abarcaba
no solo gran parte del territorio de la
actual Comunidad de Madrid, sino
también el de la actual Castilla-La
Mancha y determinadas zonas de
Extremadura y Andalucía.

La población que habitaba en el reino


de Toledo era en su mayoría
musulmana, pero también eran muy
numerosos los mozárabes. Además,
en Toledo existía una influyente minoría de judíos que habían emigrado desde Córdoba y
Sevilla.

Desde la época del Califato, la base de la economía del territorio fue la agricultura, en la
que destacaron los cultivos de regadío (hortalizas y frutales).

En las ciudades, la artesanía también fue muy importante y el comercio, muy activo. En
Toledo, por ejemplo, aún permanece la plaza de Zocodover, que fue un zoco destacado y
que ha seguido siendo centro de comercio y de reunión de la ciudad.
El reino taifa de Toledo.

LA CIUDAD DE TOLEDO

Toledo está rodeada de hermosas murallas y defendida por una ciudadela bien fortificada.

Pocas ciudades pueden comparársele por la altura de sus edificios (...) y la fertilidad de
sus campos regados por el gran río que se llama Tajo (...).

Los jardines que rodean Toledo están surcados por canales con norias para el riego de
las huertas, que producen una cantidad prodigiosa de frutos.

Al-Idrisi (geógrafo y viajero hispanomusulmán): Libro de Roger, siglo XII.

EL ENIGMA

¿Cuántos libros tenía la biblioteca de al-Hakam?


Al-Hakam II fue el segundo califa Omeya de Córdoba (961-976), y sucedió a su padre,
Abd al-Rahman III. Fue un gran mecenas de las artes y las ciencias y fundó numerosas
escuelas públicas.

En Córdoba, creó la biblioteca más importante de toda la Europa medieval y en ella se


podían consultar muchas de las obras más destacadas de la época. Además, en sus
talleres se enseñaba caligrafía, poética, encuadernación y gramática.

¿Cuántos libros reunía la biblioteca de al-Hakam II? ¿Era Al-Andalus uno de los
principales centros culturales y científicos del mundo medieval?

A. El desarrollo de las artes, las letras y las ciencias

Los conocimientos científicos, el cultivo de


las artes y la educación tuvieron una enorme
importancia en Al-Andalus.

Los propios emires y califas, como Abd al-


Rahman II, Abd al-Rahman III y al-Hakam II,
fueron grandes eruditos que se rodearon de
sabios y de artistas.

Estos reyes mandaron traducir las


principales obras de la Antigüedad, crearon
bibliotecas y edificaron numerosas escuelas
para difundir los conocimientos de culturas
anteriores, como la grecolatina, la bizantina,
la persa, la egipcia y la india. Fue a través
de Al-Andalus cuando muchos de estos saberes llegaron a la Europa feudal.
Además, el hecho de que todos los musulmanes hablaran una misma lengua, el árabe,
permitió la transmisión de conocimientos de un territorio a otro.

Ciencias
● Los científicos andalusíes fueron reconocidos mundialmente por sus estudios en
matemáticas, astronomía, medicina, botánica, agronomía y astrología.

● Destacaron, en matemáticas, al-Mayriti; en medicina, Abu I-Qasim y Avenzoar, y


en agronomía, Ibn Bassal.

● Todos ellos influyeron enormemente en la Europa de su época, y sus textos fueron


estudiados hasta el siglo XVII.

Historia, geografía y filosofía


● Existieron numerosos historiadores y geógrafos, como al-Idrisi e Ibn Hayyan,
aunque muchas de sus obras se han perdido.

● En filosofía tuvieron una gran influencia Averroes y Maimónides, este último de


origen judío.

Prosa y poesía
● La prosa y la poesía fueron muy valoradas por los andalusíes, amantes de la
belleza y la naturaleza.

● Alcanzaron fama, como poetas, Ibn Hazem, autor de El collar de la paloma, y la


princesa Wallada.

● Además de esta poesía cultivada y elegante también surgieron formas populares


como el zéjel.

B. Los avances científicos y técnicos


Los científicos musulmanes incorporaron los conocimientos de culturas anteriores y los
perfeccionaron. Además, crearon nuevas técnicas e inventos que transformaron la vida y las
costumbres de sus contemporáneos. Su herencia ha llegado hasta nuestros días.

Elogio de las ciencias


Los distintos conocimientos científicos son los pilares en los que descansa el eje de la
religión y del mundo. Diferencian al hombre de los animales, y al ser racional del
irracional.
Ibn Abd RaBbihi: El collar único, siglo X.

Nuevas técnicas e instrumentos

● Construyeron molinos de viento con velas que hacían girar sobre un eje vertical.

● Para transportar pesos utilizaban un sencillo instrumento de origen chino: la


carretilla.

● Trajeron de Oriente el papel, que sustituyó al pergamino.

● Los conocimientos sobre la mezcla de ácidos y sales (química) permitieron la


elaboración de la cerámica vidriada.

● Expandieron hacia la cristiandad europea el sistema de numeración decimal


(arábigo), de origen indio, que reemplazó a la numeración romana.

● Difundieron el juego del ajedrez, inventado en Persia.

Coran

Cerámica vidriada del siglo XII.


Medicina y farmacia

● Ejercían la cirugía y crearon instrumentos que todavía se utilizan hoy día.

● Practicaron la disección de cadáveres para conocer el funcionamiento del cuerpo


humano.

● Prepararon nuevas recetas curativas con sustancias vegetales y usaron la


belladona como anestesia.

Navegación
● Construyeron naves mayores gracias a la vela latina y a un nuevo timón llegado de
Oriente.

● Desarrollaron cuadrantes náuticos y trajeron la brújula de China.

Barco de comerciantes árabes.


EL RINCÓN DEL ARTE

El arte andalusí

Las manifestaciones artísticas de la cultura islámica están muy vinculadas a la religiosidad


y se caracterizan por el predominio de la arquitectura sobre las demás artes.

La construcción más representativa es la mezquita, pero también se levantaron


edificaciones civiles como alcazabas, palacios, zocos, baños públicos y escuelas
(madrasas).

La prohibición coránica de representar imágenes de figuras humanas comportó un escaso


desarrollo de la pintura y la escultura, y el predominio de motivos abstractos y
geométricos. Su función primordial fue la ornamentación de los muros arquitectónicos.

Los artistas cultivaron distintas artes decorativas, entre las que destacan los objetos de
metal, cristal y marfil (vajillas, jarras, aldabas...), la marquetería y, sobre todo, la cerámica
y el mosaico, decorados con una enorme variedad de motivos, formas y colores.

Brazalete de oro, siglo XIV.


Arqueta de madera y nácar, Jarrón de las gacelas, siglo
siglo XIV. XIV.

A. El predominio de la arquitectura

La arquitectura islámica presenta una serie


de características comunes:
● Uso de materiales de construcción
sencillos: ladrillo y madera.

● Cobertura de edificios mediante


bóvedas y cúpulas profusamente
decoradas.

● Utilización de pilares y columnas


como sustentos y gran profusión de
arcos.

● Austeridad en la decoración de los


muros exteriores, que contrasta con
la rica y variada ornamentación
interior a base de mármoles, Tipos de arcos.
azulejos, yeserías y maderas.

● Muchas de las construcciones, sobre todo los palacios, presentan hermosos


jardines en los que la vegetación y el agua se combinan para crear un ambiente
tranquilo y relajado, integrando arquitectura y naturaleza.

MemoArt: Decoración ornamental


La pintura, el mosaico y el estuco se utilizaron para recubrir las superficies de los muros.
Según el tipo de ornamentación, se distinguen:

● Lacería: motivos geométricos.

● Ataurique: motivos vegetales.

● Arabesca: motivos vegetales y geométricos entrelazados.

● Caligráfica: escritura de textos del Corán.


Tipos de decoración.

B. La arquitectura de Al-Andalus

La arquitectura de Al-Andalus seguía los modelos del arte islámico, pero adoptó algunas
elementos propios: el arco de herradura enmarcado por un alfiz y el lobulado simple o
entrecruzado, así como una gran variedad de bóvedas.

La grandiosidad de sus construcciones y su riqueza ornamental sitúa la arquitectura de Al-


Andalus entre las más relevantes del mundo musulmán medieval.

1. Época del emirato y califato (756-1031)


Es el periodo en el que se realizan las aportaciones técnicas más relevantes y el que
presenta mayor riqueza constructiva y ornamental.

Destacan la mezquita de Córdoba y el palacio de Medina Azahara (Córdoba).

Mezquita de Córdoba.

2. Epoca taifa y almohade (1031-1212)


● Presenta una arquitectura más austera, que potencia la estructura arquitectónica y
descuida la ornamentación.
● Destacan la Alcazaba de Málaga, la Aljafería de Zaragoza y la Giralda y la Torre
del Oro de Sevilla.
Aljafería de Zaragoza.

3. Época nazarita (1238-1492)


● Se caracteriza por una gran riqueza decorativa en el interior de las edificaciones,
que esconde la pobreza de los materiales constructivos.
● Destacan la Alhambra y el Generalife de Granada.

Jardines del Generalife.

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