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ASÍ HABLÓ ZARATUSTRA

de FRIEDRICH NIETZSCHE

Este libro fue escrito por el filósofo Friedrich Nietzsche nacido en Alemania. Es
considerada una de las mayores obras de este autor. Nos habla sobre un
personaje histórico real, Zoroastro, un profeta persa el cual inventó la idea de
Dios, propuso la dualidad y eterna confrontación entre el bien y el mal, escribió
la primera Biblia. Nietzsche lo ocupa como personaje principal para este escrito,
ya que considera responsabilidad de Zoroastro reformar los fundamentos
filosóficos de nuestra civilización tan derrumbada, por lo tanto Nietzsche le hace
deshacer lo que hizo, utilizándolo para producir una visión naturalista de este
mundo y dar sentido a la Tierra.

De las primeras ideas planteadas en el texto, es la del superhombre. ¿Qué es el


súper hombre? Zaratustra llega a una ciudad y se acerca a una muchedumbre,
dando su primer discurso, expresando que el hombre siempre ha creado seres
superiores a él, pero no tenemos por qué ser el reflejo de aquellas creencias. El
cuerpo humano es lo supremo, lo que sucede es, no sabemos como explotar
nuestras habilidades, pero para lograr es necesario entender que no existe nada
por encima del hombre.

Según el autor lo importante es entender que la vida no tiene realmente un


propósito general, se tiene que acudir a la evolución y la sabiduría antes que a la
mediocridad que para Zaratustra serían los religiosos, los mentirosos, los necios,
la sociedad y su ignorancia, todos aquellos que adornen la realidad con algo que
sea ficticio. Entonces el superhombre es el auto-creador de su propia vida y
significado. El superhombre con su habilidad de águila y lengua de serpiente, usa
el intelecto para hablar persona a persona; enseñándoles que el ser humano
puede ser maravilloso y que lo más importante es el momento en el que decidimos
abrir los ojos.
Posteriormente comenta algo que él llama: la muerte de Dios. Habla sobre los
creyentes en religiones, los poetas y todos aquellos que no se conforman con el
cuerpo humano. Aquellos que buscan en la divinidad un espacio para esconder de
la realidad y una manera de engañar a la gente. Zaratustra tras haber vivido años
en la soledad del bosque, comienza su caminar por el mundo abriéndoles los ojos
a las personas y desmintiendo mitos, quiere enseñar que todo lo magnifico puede
ser humano, no hay la necesidad de la existencia de una divinidad para que algo
sea extraordinario. Enseña que Dios ha muerto y a su vez enseña la nueva meta
del ser humano, el superhombre es el sentido de la tierra.

Finalmente hablaré sobre las tres transformaciones planteadas por el autor. Para
Zaratustra existían tres transformaciones del hombre, metafóricamente hablando:
el camello, del camello al león y del león al niño.

La primera. El camello es capaz de cargar con toda la pesadez de la vida, las


caídas, los golpes, las tristezas. Es capaz de someterse a los héroes, y
divinidades sin objeción alguna. El camello dice: “yo estoy hecho para lo que los
demás digan y creo en los valores ya creados. Solo confió en ellos porque soy
capaz de cargarlos y aceptarlos”. El hombre se compara con un camello, que es
una bestia de carga que vive en cadenas y debe ser dócil y sumisa.

Se da cuenta que no tiene por qué someterse al “tú debes” de los valores ya
creados, su estado anterior lo deja enojado e indignado, y comienza a romper los
viejos ideales impuestos, sin embargo no es capaz de crear valores nuevos, pero
es capaz de buscar su libertad en la ignorancia para volverse un guerrero contra la
mentira. El león ya no acepta el “tú debes” y aprende el “yo quiero”. Esto da paso
a la mayor de las trasformaciones: el niño. Es inocente y simboliza un nuevo
comienzo en un mundo desconocido, aún sin explorar, el niño busca “su voluntad”
en “su mundo”.
En conclusión podemos decir que para Zaratustra el súper hombre es el sentido
de la Tierra, ese súper hombre es el hombre del futuro, el cual tiene que pasar por
las tres trasformaciones para abrir los ojos y buscar sus propias creencias. El
hombre que sabe que Dios ha muerto, sabe que todo más allá del ideal es una
ilusión. Si te entregas a las fuerzas de lo natural, de la tierra, serás feliz. Es el
análisis del hombre hecho a imagen de Nietzsche, el hombre que quiere crear más
de sí. A Zaratustra no le agrada lo que está impuesto para someter a las
poblaciones y volverlas victimas de ellas mismas, no le gusta que se castigue al
hombre por una “fe” y no le gusta que las cosas se queden quietas por siempre. A
Zaratustra le gusta la evolución, le gusta la voluntad y la superación, la creación
de nuevos valores en un mundo tan pobre.

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