Pasión la energía que ha impulsado mi vida.

Soy José Gregorio Colmenarez Cordero Nací en 13 de mayo de 1994 en Maracay

estado Aragua Venezuela, soy hijo de Vilma Cordero y Frank Colmenarez,
hermano mayor de Carlos Colmenarez y Francis Colmenarez, mi nombre en
Venezuela representa a un médico que dio todo por los más necesitados siendo
considerado una figura santa, la historia porque me adjudicaron su nombre cuando
nací por presentar complicaciones. Viví en Maracay mis primeros años de vida
para luego fui a vivir con mi madre y mis dos hermanos a Valencia donde vivimos
unos años y luego pasamos a vivir en Turen estado Portuguesa con mi abuela
Rafaela Lobaton y mi tía Doris, un pueblo pequeño agrícola catalogado como el
granero de Venezuela a pesar de ser pequeño siempre me asombra su historia de
tantas sus momento de oro del impulso y la importancia que tiene para el país; allí
fue donde viví una gran infancia con mucha libertad donde aprendí muchas cosas
sobre la agricultura, mecánica, electrónica, entre otras cosas. Todo esto gracias a
que siempre estuve rodeado de personas muy creativas y siempre desde pequeño
me ha llamado la atención la invención como el ser humano siempre le consigue
soluciones a las cosas, gran parte de mi vida trabaje desde los 8 años de edad en
una bodega de un tío llamado Orlando Parra allí desarrolle la habilidad de sacar
cuentas matemáticas en mi mente en segundos, en la etapa escolar me destacaba
en el área de las matemáticas siendo esta mi área favorita, aunque también
desarrolle diferente áreas siempre he sido una personas de muchas palabras,
extrovertido, enérgico, algo distraído, amigable, con carisma y siempre con la
intención de ayudar a los demás. Gracias a estas características era elegido para
dar exposiciones, obras, concursos esto junto a un amigo de la infancia llamado
José Almao; luego entre en el bachillerato siendo destacados en mis primero años
de estudio pero luego tuve una decaída simplemente porque no me sentía cómodo
con la forma de aprendizaje no sentía que aprendía o tenía una sensación de que
el aprendizaje era algo mecánico solo memorizar sentía que él estudia no me
hacía crecer hasta que un día vi por primera vez física con un profesor fuera de lo
normal sin igual Hugo Fernández, que nos enseñó con la practica con ejemplos
reales del día a día allí vi lo hermoso de las matemáticas, la física y entendí por
primera vez que las “matemáticas son el lenguaje de la naturaleza o la forma de
que dios se comunica” que es la forma de entender el mundo, siempre me ha
encantado los documentales de los programas de ciencia era algo sin igual pero
sentía que cuando iba a estudia no nos enseñaban nada de esos hasta ese día
que despertó algo en mí, logre mi bachillerato con la ilusión de estudiar en una
gran universidad pero lamentablemente no tuve esa oportunidad, lo intente
muchas veces pero sin éxito jama baje los brazo aun así intente estudiar otras
carrera pero no sentía que me llenaba que me apasionara mientras esperaba esa
oportunidad le di un cambio radical a mi vida no era alguien que practicara deporte
todo lo contrario, entonces un día me decidí por enfocar esa energía en el
levantamiento de pase en pocos meses ya veía resultados y cada día me cultivaba
más en esta área, antes de un año por casualidad acompañé a un amigo a un
gimnasio allí conocí a misnelly que posterior mente se convirtió en una persona
importante en mi vida como figura y yo para ella en un instructor a pesar de que no
tenía el cuerpo como un gran atleta tenía muchos conocimientos que la
asombraron y me dio una oportunidad donde dure 8 años como instructor
focalizando toda mi pasión en ello logrando ser uno de los mejore en portuguesa,
entre esos 8 años estando allí comencé a estudiar gracias a mi mama y a su mejor
amiga Rita de Pastore Ingeniería Industria junto a mi hermano desde el primer día
quede total mente enamorado, en los primeros años conocí personas que fueron
figuras importante para lograr muchas metas entre ella el profesor Daniel Caripa,
el profesor Alí matos, la profesora Jennifer Zarate y una amiga que se convirtió
parte de mi vida y mi familia Bárbara Lugo.

En las universidad pude desarrollar parte de ese potencial que tenía oculto gracias
a las herramientas que me dieron allí pude conocer todas esas cosas que desde
niño me llamaba la atención las maquinarias, experimento, cómo funcionan las
cosas era algo que me enamoraba cada vez más y más siempre fui conocido por
que dominar fácilmente los numero y en mis exposiciones siempre realizar
experimentos. Mis amigos en la universidad me colocaron como apodo Energía
porque siempre cuando algo me apasiona le coloco todo de mí. A pesar de todas
las dificultades de que estudie con muchos sacrificios y estudien en el peor
momento que atravesaba mi país vi como mis compañeros se fueron no solo de la
universidad si no del país, familiares una agonía constante con cada día que
pasaba y a pesar de todas esta dificultades logre llegar al final de mi carrera para
luego entra en otra incertidumbre “donde trabajar”, todos quería en empresas
grandes Bárbara y yo queríamos trabajar juntos, comenzamos a buscar en
distintas empresas siempre nos rechazaban porque o no aceptaban a ninguno o
solo a uno solo hasta que un día visitamos TANAPO S.A y nos dio la oportunidad
no solo eso sino que me dio la oportunidad que siempre soñé de crear, construir
desarrollar, inventar. Cuando me dijeron de hacer un proyecto nuevo algo que era
un súper reto para mi sentí que un consejo que me dieron hace mucho una señora
que es como mi otra mama la señora Antonia Morales “el que obra bien le va bien”
ese día me di cuenta que es verdad el que obra bien le va bien. Ese nuevo
proyecto era algo que no me imagine que podía dale otro giro positivo a mi vida
durante 14 semana investigue, diseñe junto a un equipo excepcional de trabajo en
la empresa un implemento que no tenía conocimiento que era el primero en ser
diseñado y construido en el país hasta su culminación este proyecto era el diseño
y construcción de una sembradora de papas. Durante esas 14 semanas puse todo
de mí no dormí bien mucho tiempo, no descansaba todo para logra eso nunca
antes me había sentido tan apasionado por algo a pesar del cansancio tenía una
energía que me impulsaba a estar seguro de mí siempre hasta en los momento
más difíciles siempre y luego de tanto esfuerzo pudimos terminar así la primera
sembradora de papa en el país algo que me llena de orgullo porque puede
demostrar que en Venezuela si se puede y los Venezolanos podemos, lo que he
hecho lo hice porque me apasiona me siento vivo cuando invento cuando
construyó cuando ayudo.