Está en la página 1de 3

Las lenguas romances

Se denominan lenguas romances, también conocidas como lenguas románicas, aquellas


derivadas del latín vulgar. Las lenguas romances se encuentran dentro del tronco indoeuropeo, la
mayor familia de lenguas del mundo.
Actualmente, el número de lenguas romances son más de veinte, aunque lo cierto es que
muchas de las variedades regionales están amenazadas y sólo media docena de ellas tienen un
uso general y varios millones de hablantes por todo el mundo.
Entre los idiomas que agrupan las lenguas romances podemos encontrar las siguientes: en
el grupo galorrománico están el francés y el arpitán, en el grupo italo-rumano están el rumano,
italiano y el siciliano, en el grupo occitano-románico están el occitano el friulano y el catalán, en
el grupo iberrománico están el navarroaragonés, el español, el asturleonés, el gallego y el
portugués.
Como podemos observar en este mapa de las lenguas romances, las lenguas romances se
reparten por todo el mundo por las colonizaciones llevadas a cabo por los europeos siglos atrás.
Como ya hemos dicho anteriormente, las lenguas románicas son hereditarias del latín. El
latín se extendió por toda Europa como resultado de la expansión del imperio romano, quienes
usaban el latín como lengua materna.
En la caída del imperio romano las tribus germánicas tomaron el norte de Europa y el
latín se afianzó en el sur. Con los años, el latín que se hablaba en esos países del sur de Europa se
fue transformando hasta convertirse en lo que a día de hoy denominamos como las lenguas
romances.
Es por ello que a día de hoy en los países del norte de Europa se hablen idiomas como
alemán, inglés… que son los descendientes de las lenguas germánicas y que en cambio, en los
países del sur de Europa se hablen idiomas como el italiano, español, francés… que son los
descendientes del latín. Y por tanto, de las lenguas romances.
Aunque las lenguas romances son una evolución del latín vulgar, sus rasgos comunes se
deben a que prácticamente todas o la mayoría de lenguas tienen los mismos rasgos del latín.
Como decíamos, el latín ha evolucionado a cada una de las lenguas romances en
diferentes etapas. Estas se fechan de la siguiente manera:
 Entre el 200 A.C. y el 400 aproximadamente: diferentes formas del latín vulgar.
 Entre el 500 y 600: estas formas comienzan a distinguirse entre sí.
 A partir del 800: Se reconoce la existencia de las lenguas romances.

Lenguas italorromances
Son las lenguas del centro al sur de Italia. Están divididas de las galoitalianas por una
línea imaginaria que une las localidades de La Spezia y Rimini. Para algunos, no solo es la
frontera entre líneas del norte y las del centro y sur de Italia, sino también de las lenguas
romances occidentales y orientales.
En realidad el nombre de italorromances no responde a la realidad, ya que no son lenguas
que formen una unidad dentro de las lenguas romances. Así, en realidad habría que hablar de
cuatro grupos: toscano, centrales, meridionales y extremomeridionales.
El toscano es la lengua en la que se basa el italiano estándar. En el siglo XIX el italiano
literario era la lengua oficial de todos los estados italianos de antes de la unificación. Sin
embargo, al ser una lengua literaria, se había quedado un poco anquilosada. Era prácticamente la
misma lengua que la que había escrito Dante.
Se modernizó basándose en el toscano hablado en ese tiempo y esa nueva versión se
enseñó en las escuelas de todo el nuevo país. Así, Italia aprendió toscano en las escuelas, no
escuchando a los toscanos (a diferencia de, por ejemplo, el castellano, que fue llevado por los
castellanos en procesos de colonización hacia el sur). El toscano de la toscana, por lo tanto,
siguió evolucionando y ahora no es igual que el italiano estándar. Esta variante se habla, claro,
en Toscana y en Córcega.
El grupo central está formado por los dialectos de la provincia de Le Marche, Umbro,
Sabino, dialectos del centro y norte del Lacio (incluida Roma) y la provincia de Latina. El más
importante es el romanesco, el de la ciudad de Roma. Como curiosidad, la -l implosiva (a final
de sílaba) antes de consonante se pronuncia -r, como en Andalucía occidental (er Papa).
El napolitano y el apulo-barese son las lenguas del sur de Italia. El primero está muy vivo
y tiene una amplia tradición literaria. Es, por ejemplo, la lengua en que se cantan las canciones
folclóricas napolitanas, como Funiculì, funiculà. Sin embargo, siempre ha estado asociado a las
capas populares de la población, por lo que su prestigio no es el mismo que el del italiano.
No se estudia, no tiene apoyo institucional y su número de hablantes disminuye, aunque
aún hay alrededor de 11 millones. Se habla en la mayoría del sur de Italia, excepto en el tacón y
la punta de la famosa bota y en la región de Bari.
En Bari se habla apulo-barese, con un par de millones de hablantes, sin ningún tipo de
protección oficial y en retroceso.
El siguiente grupo son las lenguas extremomeridionales: siciliano, salentino y calabrés.
Hay algunos autores que las engloban a todas como lenguas siciliana, mientras que otros hablan
de tres lenguas distintas.
El siciliano es hablado en la familia y entre amigos en toda la región, es muy común
escucharlo. Tiene una extensa literatura y es la lengua italiana que más influyó en la lengua
maltesa. Tiene casi 5 millones de hablantes.

También podría gustarte