CLORADORES E HIPOCLORADORES

10.1. Características a tenerse en cuenta en la instalación de cloradores

Para determinar la capacidad de un clorador, es necesario conocer en primer

lugar, el caudal máximo del agua a ser tratada.

Este caudal, debe señalarse en lt/sg o galones/minuto. Este dato, no debe darse
en caudal diario, como corrientemente se estila. El máximo caudal en un
determinado momento, es el dato básico para señalar la capacidad del clorador.

El siguiente paso, es determinar el dosaje del cloro necesario, para producir un

residual adecuado.

10.1.1. Demanda de Cloro del agua

Ella debe determinarse en el laboratorio, para saber el consumo de cloro durante

las diferentes épocas del año.

10.1.2. Dosis Promedio de Cloro

Para determinar este dato, debe tenerse en cuenta, el tiempo de mezcla y de

contacto del que se dispone, los posibles puntos de cloración, es decir, si va a
efectuarse pre-cloracion, post- cloración, o ambos; el tipo de residual que se va
a dejar en el agua, es decir si va a ser cloraminacion o cloración sobre el punto
de quiebre, y finalmente el tipo de microorganismo índice que se busca destruir
(coliformes, virus o protozoarios).

10.1.3. Selección del Clorador

Luego de haberse determinado estos datos, viene el momento de escoger el tipo

y la capacidad del clorador.

En cuanto al tipo de clorador, tendrá que seleccionarse el compuesto clorado a

utilizarse, es decir si será cloro líquido o hipoclorito. Para ello, evidentemente
tendrá que considerarse el aspecto económico, es decir, los costos del producto
químico, el embalaje, el transporte y los costos de los equipos y de su instalación.

En el cuadro 6.3 (capitulo VI) se muestra un resumen de estos criterios en

función de diferentes caudales, datos que pueden servir de guía.

Los aparatos cloradores, vienen por lo general calibrados para dosar en kilos o
libras por día, o en kilos o libras por hora.

La capacidad de un equipo en kilogramos por día, puede calcularse mediante la

fórmula:
 Capacidad (Kg/día) = Q x 2C

1000

Donde:

Q = caudal de la planta en m3/día

C = dosis promedio de cloro, en mg/lt

Si el equipo viene calibrado en libras/día, la formula anterior se transforma a:

Capacidad (lbs/día) = __ Q x 2C____

1,000 x 0.454

Se recomienda duplicar en el cálculo, la dosis de cloro, para tener como margen

de seguridad, el doble de la dosis promedio.

Ejemplo:

Se desea diseñar un sistema de cloración, para una planta que va a tratar 100
lt/sg de agua.

De acuerdo con las determinaciones de laboratorio, los datos obtenidos son:

Demanda Promedio = 1.5 mgr/lt

Residual Escogido = 0.5 mg/lt

Solución:

Del cuadro 6.3, se observa que para una dosificación total de 1.5 + 0.5 = 2mg/lt
debe escogerse cloro líquido en botellón de 68 Kg.

100lt/sg = 86,400 x 100 = 8,640 m3/día

 1000

Capacidad del clorador en Kg/ día:

86,400 x 4 = 34.56 Kg/día

1,000

Capacidad del clorador en lb/día:

34.56 = 76.12lb/día

0.454

Podrian adquirirse dos cloradores de 40 Kg/dia o de 80 lb/dia c/u. para tener a

uno de ellos como reserva.

10.2. Almacenamiento y transporte del cloro

10.2.1. Cloro gaseoso o Líquido

El cloro líquido está contenido en cilindros metálicos de 68 y 907 Kgs. De

capacidad y donde se le encuentra en estado liquido por compresión entre 5.3 a
6.3 Kg/cm3.

Todos los cilindros poseen por lo menos un dispositivo de seguridad, constituido

por un fusible cuyo metal se funde entre 70 y 74Cº, si es que por cualquier
circunstancia el cilindro se haya recalentado.

En los cilindros de 68 Kgs, el fusible está colocado junto a la válvula de salida

de cloro y cubierto con una caperuza de protección, mientras que en los de 907
Kgs. Hay tres fusibles en cada extremo del envase.

Los cilindros de 68 Kgs. pueden ser movidos en carritos manuales, mientras que
los de 907 kgs. Necesitan poleas instaladas sobre rieles, y ganchos especiales
que agarran los cilindros por los extremo, tal como se muestra en la figura 10.1.

Los cilindros de cloro de 68 kilos, se colocan directamente sobre balanzas, con

el objeto de medir la cantidad de cloro que se está dosificando y así saber cuando
están vacios. Para ello debe conocerse el peso total del envase.

Los cilindros deben almacenarse en un local seco y ventilado fuera de la acción

directa de los rayos del sol o de la lluvia. Deben estar a suficiente distancia de
fuentes de calor y materiales combustibles, de preferencia en compartimentos a
prueba de fuego.

Los riesgos pueden reducirse al mínimo, evitando un exceso de cilindros

almacenados, mediante un buen sistema de órdenes de compra.
Si se requiere utilizar varios cilindros a la vez, tienen que conectarse a una
tubería matriz, tal como lo indica la figura 10.2

Un buen diseño de esta tubería matriz, garantizara el flujo del cloro sin
obstrucciones.

En general, los cilindros de cloro llenos, contienen aproximadamente 85% en

estado líquido y 15% en estado gaseoso; al extraerse este último, baja la
temperatura interior y a veces aparece escarcha en la superficie del cilindro por
condensación de la humedad atmosférica, lo que indica que el cloro se está
gasificando rápidamente.

Existen conexiones especiales para no estar usando las roscas externas de las
válvulas, ya que ellas solo deben utilizarse para sujetar la tapa de la válvula
(figura 10.3).

Además, es conveniente utilizar un tubo de cobre de 3/8” flexible y resistente a

una presión de 500lb, para conectar el cilindro a la tubería matriz o conexión fija.

Los cilindros de 68 Kgs. Cuando están colocados en posición vertical (de pie),
descargan cloro en estado gaseoso. Si se les coloca en posición invertida (con
la cabeza para abajo) descargan cloro en estado líquido.

En los cilindros de 907 Kgs, por la válvula superior, se descarga cloro gaseoso y
por la válvula inferior, cloro liquido. En esta forma, se utiliza por ejemplo, en
estaciones grandes, donde se consume más de 1,000 Kg/día de cloro, y donde
se requiere del uso de varios cilindros a la vez. En este caso, se suele utilizar un
equipo evaporador cuyo esquema se muestra en la figura 10.4

El evaporador consiste en un tanque introducido dentro de un baño de agua

caliente, cuya temperatura es controlada por un termostato entre 70 y 75ºC. Esta
agua caliente puede ser recirculada entre un intercambiador de calor y el agua
del evaporador. El equipo evaporador, permite extraer cloro líquido en lugar del
cloro gaseoso de los cilindros, con lo que se obtienen las siguientes ventajas:

- Se disminuye el número de cilindros en servicio, necesarios para

alimentar al clorador.
- Se impide la relicuefaccion del cloro en la tubería de conducción, aspecto
que es de gran importancia cuando la longitud de dicha tubería, entre la
sala de almacenamiento de los cilindros y la de cloración es larga.

La capacidad de los evaporadores varía de 40 lb/día a 10,000lb/día. Los

evaporadores más ampliamente conocidos son los fabricados por Capital
Controls, Fisherand Parter y Wallace and Tiernan Div. De penn-walt. Estas
unidades son equipadas con elementos de calentamiento eléctrico C.E. calrod,
los cuales son de diferentes tamaños, dependiendo de los requerimientos de
vaporización.

Sin embargo el evaporador debe presentar un amplio margen de seguridad para

permitir el llenado parcial del depósito de cloro con impurezas propias de su
proceso de fabricación, las mismas que irán depositándose en las diferentes
etapas de la reducción de presión. Por esa razón, a la salida del evaporador se
debe instalar un filtro de gas cloro.

Se debe instalar también en la línea de cloro gaseoso, una válvula de cierre

automático, cuando el baño de agua baje de 65ºC para proteger al clorador
contra daños por la llegada de cloro liquido.

El cloro líquido debe conducirse en tuberías metálicas pues las de plástico son
atacadas rápidamente.

Para proteger de la corrosión el tanque de cloro y el recipiente del agua, debe

equipárseles con un sistema de protección catódica y además la parte exterior
del mencionado recipiente de agua, debe ser aislado con una cubierta de ½
pulgada de espuma de uretano.

En condiciones normales de temperatura y circulación de aire en el

comportamiento de cloración, se puede obtener un caudal regular de 1 a 3 Kilos
de cloro gaseoso por hora para los cilindros de 68 kilos, y de 10 Kgs. por hora
para los cilindros de 907. Pueden obtenerse descargas iníciales superiores a
esos valores pero solo por periodos cortos de tiempo; sin embargo ello
ocasionara una baja de presión en el interior del cilindro, lo que disminuirá el
caudal del cloro.

En general, es conveniente tener presente las siguientes medidas de seguridad,

en el manejo y transporte de los cilindros:

a) Los cilindros de 68 Kgs. No deben moverse nunca, sin la caperuza protectora

debidamente atornillada.

b) Evitar el recalentamiento de los cilindros, inclusive por la acción de los rayos

del sol.

c) Los cilindros deben mantenerse amarrados mientras están en servicio, para

evitar su caída por accidente o temblores.

d) No se debe permitir que la temperatura dentro del cuarto, descienda por

debajo de los 10ºC, pues ello dificultaría la extracción del cloro.

10.2.2 Hipocloritos
El Hipoclorito de calcio, ya sea al 70%(importado) o al 30%(nacional), puede
venir en polvo o en tabletas. Estos compuestos, absorben fácilmente la humedad
del ambiente, convirtiéndose en una pasta muy corrosiva, de ahí que deben
almacenarse en envases de cerámica, vidrio, caucho o plástico, pero no debe
usarse envases de cartón u hojalata.

Estos envases se deben mantenerse en ambientes frescos y secos,

herméticamente cerrados para evitar la pérdida del cloro gaseoso.

Deben llevar etiqueta visible, ya que en muchas oportunidades, las personas

abren el envase y acercan la nariz para saber de que sustancia se trata,
recibiendo una fuerte descarga del cloro gaseoso, que produce quemaduras en
las mucosas.

Al manipularlo, evitar hacerlo con las manos descubiertas porque produce

igualmente quemaduras.

Al transportar los envases, no golpearlos ni exponerlos a los rayos del sol.

El Hipoclorito de Sodio, es un líquido amarillento que es vendido en envases

de plástico tipo galonera, cojines plásticos, o en botellas de vidrio.

Los envases totalmente cerrados, deben mantenerse en lugares secos y frescos,

lejos del alcance de los niños o animales, y también aislados de la luz.

El compuesto que se expende en botellas de vidrio, con el nombre de “lejía”, es

una solución destinada al lavado de ropa, con un contenido aproximado de 1.5%
de cloro libre, que en casos de carencia de otros compuestos, podría utilizarse
para desinfectar las paredes de cisternas, reservorios, etc., donde la técnica
recomienda que el proceso de desinfección se complete con el enjuague del
compuesto clorado, hasta que no quede rastros de él

En caso de no contarse con hipoclorito de calcio o de sodio de proveedor

conocido, para efectuar la desinfección de pequeñas cantidades de agua.

Puede utilizarse la lejía contenida en los cojines de plástico, que tengan marca
de fábrica registrada. Antes de su uso, se recomienda constatar en el laboratorio
la concentración de cloro libre que contiene o también, utilizando el método
practico que se señala en el capítulo VIII.

10.3. Tipos de Cloradores

10.3.1. Equipos que aplican Cloro gaseoso

Los cloradores que aplican este desinfectante, empleando cilindros metálicos,
fundamentalmente son de dos tipos: Los de presión y los de vacio (1, 2,3,).

Los de presión, como su nombre lo indica, actúan con la presión existente en el

cilindro; miden la cantidad de gas requerida, llevándola directamente a la tubería
de agua por medio de un difuso. (Figura 10.5)

Para su funcionamiento, no se requiere de un suministro adicional de agua, ni de

energía eléctrica, siendo así recomendable, para zonas remotas donde existen
limitaciones de electricidad para operar bombas y otros equipos.

Estos tipos de cloradores, pueden estar colocados en un pedestal; también

pueden ir directamente colocados en el cilindro o ubicados en la pared.

En cambio, Los cloradores de vacio están basados en la succión creada por el

tubo venturi de un inyector, a cuya salida el gas cloro es mezclado con agua y
llevado como solución al punto de aplicación.

En general, todos los cloradores deben contar con dispositivos de seguridad que
impidan que el vacio aumente o disminuya por cualquier motivo, o suba
demasiado la presión del agua.

Además de ello, existen también equipos de control de los cloradores, pudiendo

ser de tipo manual, semi-automático, automático y programable.

Todos equipos traen sus correspondientes manuales de uso, los que indican
pormenorizadamente la forma de manejarlos. Los operadores de estos equipos
tienen que conocer detalladamente el contenido de estos manuales.

Además, todo el equipo de cloración, debe estar instalado en cuartos ventilados

y de uso exclusivo. Estos cuartos deben tener ventanas en la parte baja de los
muros, ya que el cloro por ser más pesado que el aire tiende a quedar a ras del
suelo.

De igual manera, debe contarse con equipos de protección, en los que

necesariamente deben existir; alarmas, mascaras, equipos para reparar fugas y
botellas de amoniaco. El uso de estos equipos, se tratara con mayor
detenimiento en el capitulo XIII.

Como medida de seguridad, en las estaciones de cloración, las tuberías deben

quedar a la vista, sujetas a las paredes y en lugares accesibles que faciliten su
inspección y reparación.

10.3.2. Equipos que aplican Hipocloritos

Los hipocloritos de calcio o de sodio, son los compuestos del cloro que se utilizan
con bastante frecuencia en pequeñas y medianas estaciones de aplicación.
El método más utilizado, es el de obtener una solución de una concentración
determinada y luego añadirla al agua que se va a tratar.

Las soluciones de hipocloritos, son frecuentemente corrosivas, lo que obliga a

que los equipos dosadores sean de materiales especiales como cerámica, vidrio,
fibra de vidrio y materiales plásticos.

Existe una diversidad de modelos patentados de equipos de aplicación, La

selección del más adecuado, dependerá del estudio de las condiciones locales
de instalación, los puntos de aplicación, y el tipo y regularidad del servicio de
abastecimiento de agua ofrecido.

a) Bombas de membrana accionados por motores de velocidad variable

b) Bombas de membrana accionados por diafragmas hidráulicos de gran

superficie.

Las más utilizadas, son las bombas de diafragma que pueden dosar a gravedad
o en contra presión; pueden regular con bastante exactitud la dosificación y son
adaptables a los controles semi- automáticos. La capacidad de dosaje de estos
equipos es limitada y generalmente se utiliza con soluciones de hipoclorito al
10% de cloro activo.

Par lugares donde no se cuenta con corriente eléctrica y en general para

pequeñas instalaciones existe una diversidad de equipos que pueden ser
esquematizados en los cuadros Nº 10.1 y 10.2 y graficados a continuación.

DOSIFICADORES A GRAVEDAD

1. HIPOCLORADORES DE ORIFIO DE CARGA CONSTANTE

1.1. Propiamente orificio

El principio de funcionamiento consiste en mantener una carga constante de

solución (h) sobre un orificio, para obtener un caudal de dosificación constante,
el cual se calibra a la salida mediante una válvula.

Existen infinidades de estos equipos, construidos en diferentes materiales.

1.2. Orificio Calibrado

Constituido por un tapón de aluminio con una incisión de sección variable, el cual
va insertado en el extremo de una manguera flexible.
Se regula la dosis variando la sección del orificio, al extraer o introducir el tapón
en la manguera, colocando marcas en este para calibrarlo.

Comentarios
- Se producen obstrucciones en los orificios debido a la carbonatación
- El tiempo de operación del equipo es relativamente corto ( 2 a 3 días) por
ello requiere de una constante operación y mantenimiento.
- El tapón del orificio calibrado, es de un material (aluminio) que presenta
ventajas en la dosificación, pero es de alto costo.

2. HIPOCLORADOR DE ORIFICIO DE CARGA VARIABLE

El funcionamiento de estas unidades consiste en la reducción de la tasa de

incorporación de cloro, a medida que se vacía la cámara de cloro.

Se varia la dosificación, variando la carga sobre el orificio; esto origina una

situación de exceso de cloro por un lado e insuficiencia de cloro por el otro.

Comentarios
- El material empleado en la válvula flotadora es de bronce, material que
sufre la acción corrosiva del cloro.
- La operación de este equipo es permanente, pues la regulación de la
carga es manual(carga hidráulica sobre el orificio)
- No es conveniente el empleo de dos depósitos por:
o Alto Costo
o Se necesitaría mayor carga hidráulica disponible, para el buen
funcionamiento.

3. DOSIFICADOR TIPO CUENTA GOTAS

Su funcionamiento se basa en la incorporación de una solución clorada a un

ritmo constante, mediante el empleo de un cuenta gotas especial, del tipo usado
por los médicos para transfusiones (equipos descartables de venoclisis). La
solución ingresa por un orificio sumergido en el líquido para tener una carga
hidráulica constante.

Comentarios
- Dificultad en adquirir el cuenta gotas en las pequeñas comunidades.
- La presencia de impurezas en la solución carbonatada, produce
incrustación y obstrucción en los diámetros de ingreso y conducción de la
misma.
- Constante operación y mantenimiento
4. HIPOCLORADOR DE TAZA FLOTANTE

Esta unidad consta de una taza circular de plástico, con un orificio central en la
parte baja, con su tapa protectora (jebe).

La taza flotante esta semi-sumergida, para ello se le coloca un lastre, dándole

así estabilidad

Tres tuberías atraviesan el jebe protector: ingresando por uno de ellos y

evacuando por el otro la solución de hipoclorito; por la tubería central pasa una
cuerda de nylon, que mantendrá la taza flotante en línea vertical con el liquido
de salida.

DOSIFICADORES A PRESION

5. DOSIFICADORES POR INYECCION

5.1. Hidroinyectores

5.2. Bombas Dosificadoras

Equipos interesantes en cuanto a su funcionamiento, pero por ser una tecnología

más complicada, resulta inapropiado;

6. DOSIFICADORES POR SUCCION

El principio de operación de estas unidades, se basa en la utilización de presión

diferencial, originada por la inserción de una placa con orificio, o de un tubo
venturi.

6.1. Por Desplazamiento

Esta unidad consta de un tanque herméticamente cerrado, donde se encuéntrala

solución desinfectante y de una placa con orificio.

La variación de velocidad, ocasiona un cambio de presiones, antes y después

del diafragma, produciéndose así el desplazamiento de la solución.

6.2 Venturimetros

La función básica es producir un estrangulamiento en la sección transversal de

la tubería, con la finalidad de aprovechar las diferencias de presión, creadas por
el flujo entre el cuello y la sección de salida en un tubo venturi.

Comentarios
 - El dosificador por desplazamiento presenta el inconveniente de diluir la
solución desinfectante en el transcurso de su funcionamiento,
perjudicando asi la concentración y dosificación.
- Operación y mantenimiento constante

DOSIFICADOR DE EROSION

7. HIPOCLORADOR POR PASTILLAJE

Este equipo funciona hidráulicamente, produciéndose primero la erosión de las

pastillas con una porción del caudal total y la posterior difusión de la solución
obtenida con el resto del caudal en una cámara de contacto.

En el interior de la unidad hay una cámara de aquietamiento para eliminar la

turbulencia que lleva el agua, encontrándose luego la cámara de erosión en
donde se forma la solución concentrada que sale a través de un vertedero final.

Las pastillas HTH se colocan en el cilndro portapastillas pudiéndose graduar la

concentración de la solución, graduando la sumergencia de las pastillas a través
del numero de vueltas que se de el cilindro, por el numero de tubos con pastillas
que se coloquen y, también por el caudal regulado con la válvula

Comentarios.
- Se emplea para mayor eficiencia y concentración el HTH, que contiene un
70% de cloro activo; insumo que para su empleo necesitamos importar
aumentando así el costo de operación.
- Para los pequeños sistemas de abastecimientos de agua, sería una
tecnología inapropiada.

HIPOCLORADORES DE DIFUSION

8. HIPOCLORADOR DE FLUJO DIFUSION

8.1. Hipoclorador de Flujo difusión-automático

Este equipo utiliza hipoclorito de calcio de fabricación nacional.

El hipoclorito se denomina de flujo, porque evidentemente existe el flujo vertical

de la solución concentrada, que se forma al sumergir el dosador al agua, por
razón de su mayor densidad y es también de difusión; porque la superficie libre
del hipoclorito en el mismo dosador, difunde la sustancia hacia el medio acuoso
que lo rodea.
Cada unidad es llenada con la pasta de hipoclorito de calcio (75% de agua en
peso) hasta una altura de 3cm, se colocan unas sobre otras en columna,
quedando listo para sumergirlo dentro del tanque de agua.

8.2. Hipoclorador de difusión modificado (DISABAR)

Este equipo es modificación del descrito anteriormente, presenta en la tubería

exterior una cantidad de orificios, que tienen como finalidad difundir el
desinfectante.

Esta unidad se carga, llenando el espacio anular con hipoclorito en polvo, se

apisona y compacta hasta llegar a 1cm del borde. Luego se le sumerge.

8.3. Tinajas clorinadas

Estas unidades se emplean para clorar pozos o reservorios, cuyos volúmenes

están comprendidos entre 9 y 13m3.

Se trata de tinajas, las cuales son perforadas en el fondo. La unidad se llena con
1.5 Kg. De hipoclorito de calcio, mezclado con 3 Kg. De arena gruesa, con la
finalidad que se disuelva y diluya lentamente en el agua.

Esta unidad es ubicada un metro bajo el nivel de agua. La aperacion y el

mantenimiento son cada dos semanas.

8.4. Jarro Duplo

Unidad empleada para clorar volúmenes de agua comprendidos entre 3.5 y

4.5m3.

El recipiente interno se llena con 1 Kg. De Hipoclorito de calcio y 2 Kg. De arena

gruesa (2mm.) luego es colocado dentro del recipiente exterior.

La operación y mantenimiento es cada tres semanas.

Comentarios
- Debe asegurarse en el reservorio un flujo constante, de manera que el
equipo este siempre sumergido.
- Resulta económico el costo de estos equipos.

9. HIPOCLORADOR POR IMPACTO (DISABAR-TARMA)

Este hipoclorador tiene las mismas dimensiones que el hipoclorador de difusión

modificado, pero presenta variantes en cuanto a su diseño y principio de
funcionamiento.
El diseño de esta unidad presenta en la tubería exterior un mayor número de
orificios, los cuales se encuentran ubicados tal como muestra la figura.

Tiene como principio de funcionamiento, el impacto que genera el chorro de agua

al ingresar al tanque de almacenamiento, logrando la mezcla y entrega del
desinfectante.

Comentario

En el centro Panamericano de Ingeniería Sanitaria y Ciencias del Ambiente

(CEPIS, Perú), se presentaron trabajos de Investigación, algunos de los cuales
se esquematizan a continuación (1983).

10.3.3. Hipocloradores utilizando equipos descartables de venoclosis

En el “manual para la desinfección de aguas mediante la cloración” que

preparamos en el año 1971, sugerimos la idea de utilizar como dosificadores de
soluciones cloradas, los equipos descartables de venoclosis (para transfusiones
de sangre, suero, etc.

Este dosificador se puede utilizar para ser adaptado a sistemas de bombeo de

agua y también para aquellos que funcionan por gravedad. Su operación es
manual, pero tiene una gran exactitud ya que regula el número de gotas por
unidad de tiempo, a través de una llave de estrangulación y una bureta
transparente, que debe permanecer llena en una tercera parte.

Estos equipos descartables de venoclisis, son de bajo costo y muy utilizados por
médicos y enfermeras en casos de emergencia, de manera que no son difíciles
de obtener.

Para su utilización se debe preparar una solución clorada, luego calcular el

número de gotas por unidad de tiempo que debe dosarse de acuerdo al caudal
de agua a tratarse, la dosificación de la solución clorada y la concentración de
esta última.

Por ejemplo si la solución que se prepara es al 1% es decir contiene 10,00mgr/lt.

(ppm) de cloro libre, una gota contendrá 0.6 miligramos de cloro libre. A
continuación, debe regularse a la llave de estrangulación, para que se deje caer
el número de gotas calculado.

Los gráficos 10.7 a 10.10 detallan la forma de instalación de estos dosificadores

por goteo en equipos de bombeo y también su uso en otros tipos de cloradores
por gravedad.
 Tabla.- Cantidad de cloro libre en una gota y en un milímetro, en
soluciones de diversos porcentajes

Porcentaje de cloro libre Cantidad de cloro libre en (mgr)

en la solución (%) 1 gota 1 ml.
1 0.62 10
2 1.24 20
3 1.86 30
4 2.48 40
5 3.10 50
6 3.72 60
7 4.34 70
8 4.96 80
9 5.58 90
10 6.20 100
20 12.4 200
30 18.6 300

Ejercicios.-
1) Por razones de cortes prolongados de agua, los moradores de una parte de
la ciudad, se ven obligados a extraer agua de la pileta ornamental de la plaza
pública. Se les recomienda que al llegar a sus casas, desinfecten el agua
utilizando lejía en cojín. ¿Cómo debe realizarse la desinfección?
a. La autoridad debe determinar el porcentaje de cloro libre que tiene el cojín
de legía. Supongamos que se ha determinado tiene 3.5%
b. Entrando a la tabla anterior e interpolado se obtiene el cloro libre que cada
gota de lejía tiene:

X = (3.50 x 1.86)/3 = 2.17 mgr.

c. Como el agua de la pileta se está extrayendo en baldes, debe

recomendarse que el dosaje de cloro libre sea de 2.0 mgr/l. Es decir,
deberá echarse una gota de lejía por cada litro de agua.
d. Si por ejemplo se utilizan baldes de 5 litros, deberá echarse 5 gotas del
desinfectante, agitar bien con un utensilio limpio de cocina y dejar reposar
durante 30 minutos antes de usar el agua.

2) Luego de un corte de agua, se sospecha que cuando se reinicia el servicio

el agua llega contaminada bacteriológicamente por causa de la presión
negativa en la red. En una vivienda que tiene un tanque eternit de 500 l,
durante el corte de agua este quedó vacío. Se recomienda desinfectar el
agua que va a almacenarse nuevamente en este reservorio, para ello se
cuenta con cojines de lejía marcha “chanchito”, en el que la autoridad ha
constatado que existe 4% de cloro libre. Se desea saber qué cantidad de
solución de cloro debe utilizarse y como debe efectuarse la desinfección del
agua.
 a. Si el agua que se distribuye, al reiniciar el servicio presenta cierta turbidez,
se recomienda una dosificación de 1.5 mgr/l de cloro libre.
b. En los 500 l que se almacenan deben dosificarse:
500 x 1.5 = 750 mgr de cloro libre
c. En la tabla se observa que una solución de hipoclorito de sodio al 4% tiene
40 mgr de cloro libre en 1 milímetro, luego se requerirá:
750/40 = 18.75 = 19 mililitros
d. Se deberá echar al reservorio vacío, antes que se restituya el servicio 10
mililitros de hipoclorito de sodio (utilizando, por ejemplo, una jeringa
descartable graduada y limpia). Cuando el reservorio esté a medio llegar
se agregará los 9 mililitros restantes. El chorro de agua que llegará
posteriormente efectuará la mezcla respectiva.
e. El agua no debe usarse antes de 30 minutos después que se haya llenado
el reservorio.

3) Por razones de emergencia, se necesita bastecer de agua a una población

utilizando las aguas de un río cuyas aguas, aparentemente limpias, están
contaminadas. El agua será almacenada en un reservorio, del que se
entregará directamente para su consumo. Se desea instalar un hipoclorador
de emergencia cuyo funcionamiento habrá de regularse para un gasto de
agua de 1 l/seg disponiendo de hipoclorito de calcio, con una concentración
de 70% de cloro.

a. Teóricamente, ¿Qué cantidad de cloro se debe agregar al agua?,

suponiendo que hecha la prueba de la demanda de cloro, se ha obtenido
una cifra de 0.4 mgr/l y se quiere matar al 99.99% de bacterias patógenas
en 10 minutos. La temperatura del agua es de 20ºC y su pH es de 9.8.
- De acuerdo con el Gráfico 7.1, para obtener la muerte del 100% de E.C,
a una temperatura de 20ºC y pH de 9.8, se debe aplicar 0.3 mgr/l de
cloro.
- La dosificación deberá ser dual a:
0.4 (demanda) + 0.3 (residual) = 0.7 mgr/l
Es decir, por cada litro de agua deberá aplicarse 0.7 mgr de cloro por
segundo.
- Como la concentración de hipoclorito es del 70%, la dosificación deberá
ser de:
0.7/0.7 = 1 mgr/seg de cloro
- Si se escoge un clorador de tipo botellón, se deberá preparar una
solución que contenga
1% de cloro = 10,000 mgr/l = 10,000 mgr/1,000 ml

1 mgr de cloro estará contenido en 0.1 mililitro, es decir, se dosará 0.1

mililitros por segundo.
 - Calibrando el equipo de goteo (equipo descartable de venoclisis) se ha
encontrado que:

1 mililitro es igual a 16 gotas, es decir, 0.1 mililitro es igual a 1.6 gotas

Entonces, el dosador se calibrará para que entregue por minuto:

1.6 x 60 = 96 gotas = 6 mililitros

- Si el botellón de vidrio que se escoge es de 4 litros, éste durará para

un tiempo de:

4000 mililitros = 666 minutos = 11 horas

6 mililitros/minuto

b. De existir materia orgánica en el agua, que permita la formación de

cloramina, ¿qué dosificación de cloro y que tiempo de contacto se
debería considerar para matar el 100% de bacilos coli?

- Del Gráfico 7.1 vemos que para un pH = 9.8 y para un tiempo de

contacto de 60 minutos, se debe aplicar 1.6 miligramos de cloro por litro
de agua
- La dosificación total será:
0.4 + 1.6 = 2 miligramos de cloro por litro

10.4. Unidad de desinfección Moggod

Esta unidad de desinfección produce una mezcla de gases oxidantes generados

in situ (7). Consta de una celda electrolítica que produce dichos gases (cloro,
ozono, oxigeno) en el comportamiento del ánodo, e hidróxido de sodio y gas
hidrogeno en el comportamiento del cátodo. Estos dos comportamientos se
hallan separados por una membrana semiimpermeble. El cátodo es de acero
inoxidable y para el anodo pueden emplearse diversos materiales. El termino
MOGGOD está formado por las siglas de: Mixed oxidant gases generated on
side for desinfection.

La figura Nº 10.11 muestra el diseño básico de uno de los prototipos de las

unidades MOGGOD, fabricado por la Ozone Technology Corp., Cuyo cuerpo es
de material acrílico, resistente al cloro y al ozono.

El equipo MOGGOD, utiliza soluciones saturadas de cloruro de sodio en el

comportamiento del ánodo y de soda caustica en el del cátodo, requiriendo de
corriente eléctrica de bajo voltaje (de 3 a 10 voltios), para llevar acabo la
electrolisis.
Los elementos ozono/cloro, son absorbidos fuera del comportamiento del ánodo
por un tubo de polipropileno conectado a un venturi; el gas hidrogeno proveniente
del cátodo es eliminado a la atmosfera.

El hidróxido de sodio generado en el compartimiento del cátodo, debe ser diluido

a intervalos regulares, procurando mantenerlo por debajo del 10% para que el
proceso de electrolisis continúe siendo eficiente, El hidróxido de sodio diluido, se
haga fluir añadiendo agua al compartimiento del cátodo. También es necesario
añadir cristales de cloruro de sodio(o pellets) y agua a la cámara de sal del
comportamiento del ánodo, una o dos veces a la semana. Visualmente se puede
determinar cuando es necesario añadir agua o sal.

El venturi, debe fabricarse con materiales resistentes a la oxidación, tales como

el propileno, e instalarse directamente en el conducto que lleva el agua para ser
desinfectada, pudiendo instalarse sobre un circuito de derivación o en el mismo
conducto.

El equipo MOGGOD, no muestra partes móviles y en general, todos sus

componentes son bastantes durables. La membrana semipermeable es:

1. Comportamiento del ánodo

2. Comportamiento del cátodo
3. Orificio por el que se agrega agua/soda caustica, al comportamiento en que
se encuentra al cátodo.
4. Ánodo
5. Cátodo
6. Tapón de plástico del orificio por donde se agrega la sal.
7. Compartimiento visor del nivel de la sal.
8. Tubo de salida del hidrogeno
9. Línea de rebose de la soda.
10. Tubo para el ingreso del aire.
11. Tubo de salida de la mezcla de gases.
12. Visor del nivel de la soda.
13. Menbrana

Probablemente el componente más frágil, pero si no se toca y se limpia

periódicamente con un chorro de agua, puede durar 5 años o más.

La tasa de generación de gas, es controlada por la electrolisis de la solución

saturada de cloruro de sodio. La velocidad de la electrolisis se controla variando
la corriente eléctrica que fluye entre los electrodos. Ello se controla alterando el
voltaje, usando un reóstato. Esto quiere decir que el desinfectante residual se
obtiene simplemente ajustando el dial del reóstato. No se requiere ninguna
mezcla o medición de sustancias químicas. El análisis químico, se concreta a las
pruebas del residual existente en el sistema de distribución.

En la mayoría de los casos, el oxigeno y el ozono, satisfacen la demanda

oxidante y el cloro, provee al sistema de tratamiento el desinfectante residual
deseado.

Los gases oxidantes producidos en la unidad “MOGGOD” se componen

aproximadamente de 70% de oxigeno y ozono, y 30% de cloro, pudiendo
obtenerse entonces los mismos subproductos de desinfección que se presentan
cuando estos elementos se utilizan por separado.

Además, parece que el ozono y los radicales libres del oxigeno, reaccionan con
mayor facilidad que el cloro ante sustancias orgánicas, dando como resultado un
nivel significativamente menor de trihalometanos(THM) que aquel que se
obtendría usando solo el cloro.

De igual manera, el ozono y oxigeno pueden reaccionar con mayor facilidad que
el cloro, ante los fenoles y las algas, debido a su afinidad por la materia orgánica,
reduciendo así los problemas de sabor y olor, así como la formación de
compuestos organoclorados no deseados.

Sin embargo, la experiencia con este equipo es aun limitada, debiendo realizarse
pruebas adicionales de laboratorio y de campo, para descubrir posibles
problemas o limitaciones en su uso.

Por otra parte se han llevado a cabo experiencias exitosas con el equipo
MOGGOD, para eliminar por oxidación, iones metálicos de fierro y manganeso y
su posterior remosión por filtración.

Asimismo esas experiencias han mostrado que la capacidad desinfectantes de

los gases producidos en el equipo MOGGOD, es superior a la del hipoclorito de
sodio y gas cloro, por requerir de menores tiempos de contacto y dosis mas
pequeñas de gases provenientes del equipo.