Geologia Del Petroleo

Geologia de los Hidrocarburos UNMSM Ing.
Edwin Mendiolaza Bazaldúa

CAPITULO 1
LA PROFESION DEL GEOLOGO DE ,PETROLEOS
DEFINICIÓN E IMPORTANCIA
La geología del petróleo es la utilización de la geología en la búsqueda y explotación de yacimientos de

petróleo y gas natural. Los hidrocarburos líquidos y gaseosos están tan íntimamente asociados en la naturaleza
que es costumbre acortar la expresión «petróleo y gas, natural» diciendo simplemente «petróleo» y
presuponer la inclusión del gas natural. Se seguirá esta práctica en Geología del Petróleo.
La industria del petróleo se ha beneficiado mucho de su alianza con la geología de acuerdo con las
cifras recogidas anualmente por la Asociación Americana de geólogos de petróleos y publicadas en el número
de junio de su boletín, un promedio de cinco de cada seis pozos exploratorios (pozos perforados fuera de los
limites de campos petrolíferos conocidos) han sido localizados por procedimientos geológicos. Las
probabilidades de descubrir petróleo en estos pozos son de dos a cuatro veces mayores que en los localizados
sin ayuda de la geología. Por esta razón, toda compañía productora de alguna importancia tiene un
departamento geológico y la industria petrolífera emplea más geólogos que cualquier otra rama de la profesión.
En 1958 había probablemente bastante más de 20000 geólogos profesionales de petróleos en todo el mundo.
El valor practico de la geología1 en la búsqueda del petróleo es bastante bien conocido, pero los beneficios
alcanzado por la geología en la exploración petrolífera no han sido adecuadamente apreciados. La búsqueda
de nuevos depósitos de petróleo y gas ha conducido a levantamientos geológicos en todas las partes del Globo,
aumentando así considerablemente nuestro conocimiento de la geología del mundo. Con la perforación de
miles de pozos y la utilización mancomunada de los datos geológicos de estos pozos, la industria del petróleo
ha hecho posible una descripción mucho más exacta de la tercera dimensión de la corteza terrestre que la que
nunca hubiera sido posible alcanzar por extrapolación de las observaciones en la superficie. Koester llama la
atención sobre el hecho de que todo pozo moderno constituye una «sección medida» de la estratigrafía desde
la superficie hasta su profundidad total, que puede sobrepasar los seis kilómetros. «Más de doscientos millones
de pies (61000 km) de sección en pozos serán medidos con la barrena, el microscopio y por métodos eléctricos
este año. Estas rocas recibirán en general un estudio mucho más detallado en el sondeo, la oficina y el
laboratorio que el dedicado a un afloramiento normal en el campo.»2
Ya DeGolyer3 en 1921 citaba algunos de los descubrimientos geológicos debidos a la exploración
petrolífera y hoy podrían ser añadidos muchos más a esta lista. Ejemplos de ello son el descubrimiento de: 1)
montañas y levantamientos enterrados de rocas cristalinas, tales como la barrera granítica Nemaha en Kansas
y Oklahoma; 2) el gran espesor de la columna de rocas sedimentarias en cuencas de deposición y áreas de
engolfamiento tales como la de la Costa del Golfo; 3) los enormes prismas verticales de sal «(diapiros salinos»)
en la- misma región; y 4) la existencia y localización de valiosos depósitos de helio, dióxido de carbono, uranio,
carbón, caliza, salmuera natural, sal de roca, potasa y azufre, así como petróleo y gas.4 Por los datos recogidos
en los pozos perforados para hallar petróleo, los geólogos han podido añadir muchos capítulos nuevos a las
historias sedimentaria y diastrófica de la corteza terrestre. 5 Antiguas líneas costeras y lechos enterrados de
corrientes han sido consignados en planos; se han descubierto antiguos arrecifes, han sido reconocidas fallas
ocultas, y se ha encontrado evidencia de vulcanismo en períodos supuestamente «tranquilos». Desde un punto
de vista puramente científico, los pozos profundos perforados en la exploración petrolífera han hecho posible la
medida de las temperaturas de la tierra en los ocho kilómetros superiores de su corteza. 6
Illing7 ha dicho oportunamente: «...Si la geología ha contribuido considerablemente al desarrollo de la

industria petrolífera la deuda no es unilateral. La geología debe asimismo mucho a la industria del petróleo en la
'expansión' de sus conocimientos y en la mayor eficiencia de sus métodos. Se deberían enterrar los términos
geología "pura" y "aplicada" en tanto que se usen en un sentido discriminatorio. Existe sólo una geología. Su
pureza depende de su verdad, no de su aplicación.»
PRIMEROS TIEMPOS DE LA INDUSTRIA DEL PETROLEO8
El petróleo y el gas fueron usados por el hombre muchos años antes de que su producción se convirtiera en
una industria, El uso de las filtraciones de petróleo y asfalto en el área mediterránea para el calafateo de
embarcaciones se remonta a los albores de la historia y sin duda hasta la prehistoria. Noé, el del Antiguo
Testamento, era un mercader de asfaltos. Tenía sus mercados a lo largo del río Eufrates; 9 naturalmente
Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Geologia de los Hidrocarburos UNMSM Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldúa
calafateo su arca con sus propios productos. De modo análogo la cuna anfibiadel niño Moisés fue
impermeabilizada con asfalto. En el Nuevo Mundo, las filtraciones de petróleo en el norte de Pensilvania y en el
oeste del Estado de Nueva Cork eran recogidas por indios y blancos para su uso como lubricante, linimento y
laxante.
En los últimos tiempos de la historia preindustrial del petróleo y del gas, estas sustancias eran encontradas
accidentalmente en pozos perforados para buscar agua potable o aguas salobres. El arte de perforar pozos es
antiguo; Goodrich10 cita un pozo perforado en China en busca de sal hasta una profundidad de 137 m. en el año
221 a.J.C. Pozos de agua en las Montañas Allegheny alcanzaban profundidades de 250 m. en 1800 y un pozo
artesiano en San Luis llegó a una profundidad de 638 m. en 1854.
Durante la primera mitad del siglo XIX el área más activamente perforada de los Estados Unidos era el
cinturón que se extendía desde el Estado de Nueva Cork a través del oeste de Pensilvania y el este de Ohio
hasta Virginia Occidental y Kentucky. En esta zona las aguas madres, de las que se obtenía sal por
evaporación, podían encontrarse a profundidades relativamente escasas. En unos pocos lugares se encontró
gas. Se usó como combustible en el tratamiento de sal y en 1821 se usó para iluminar la comunidad de
Fredonía, Nueva Cork. En otros pozos se encontró petróleo, con gran desesperación de sus propietarios. En
algunos casos fue embotellado y vendido en la misma forma que las filtraciones de petróleo, pero la mayor
parte fue abandonado.
La hora de la industria del petróleo no sonó hasta el momento oportuno. En los comienzos del siglo XIX el
hombre empezaba a rebelarse contra la costumbre de acostarse con el crepúsculo. Estaba aprendiendo a leer y
eso requería mejor iluminación que el fuego del hogar. El movimiento de la urbanización estaba en camino y se
hacía deseable la iluminación de las calles. Un lubricante satisfactorio era necesario para la maquinaria de una
naciente civilización mecanizada. Todas estas demandas iban a multiplicarse en las siguientes, décadas y a
ellas se añadirían otras nuevas.
Durante los siglos anteriores la demanda relativamente modesta de aceites había sido satisfecha por la
industria ballenera. Pero en el siglo XIX los pedidos cada vez mayores pusieron en peligro incluso, la existencia
misma de las: ballenas y en 1850 el aceite de ballena se vendía a 65 centavos el litro. Este alto precio aceleró la
investigación para hallar un sucedáneo, que fue encontrado en el keroseno o «aceite de carbón» obtenido por
destilación del carbón.: Durante la década 1850-1860 se construyeron sólo en los Estados Unidos 56 plantas
para la obtención de keroseno. Aunque este producto podía competir con éxito con el aceite de ballena, era aún
un producto relativamente caro. El carbón tenía que ser extraído y destilado destructivamente, el aceite
resultante debía ser refinado y ,además quedaban gran cantidad de escorias. La ocasión era propicia para un
aceite extraído directamente de la tierra que sólo necesitara su refinado para ser utilizado por un mercado que
crecía rápidamente. Y las refinerías de aceite de carbón podían ser convertidas fácilmente, y muchas de ellas lo
fueron, para el refino del petróleo bruto. Al menos una de estas refinerías, que empezó con carbón en 1854 y
llegó a ser el mayor productor de keroseno del mundo antes de convertirse en refinería de petróleo en 1860,
está aún trabajando en el lugar original en Brooklyn, Nueva York.11
La producción comercial de petróleo enpoz9s excavados manualmente precedió a la producción comercial por
pozos perforados con medios mecánicos. Pierre Belon,12 botánico, escribía en un artículo publicado en 1553
que algunos pueblos del noroeste de Asia Menor «habían excavado pozos de hasta 18 metros para aumentar la
producción de petróleo que se obtenía de filtraciones. En: Birmania sé habían excavado 520 pozos activos en
1797, que producían el, equivalente de 9 500000 litros anualmente, y mucha parte de la producción era
exportada.13 En 1850 Rumania también producía petróleo comercialmente, con pozos excavados a manó
Canadá' se convirtió en productor en 1857 con sus descubrimientos cerca de Oil Springs, Ontario. La historia no
precisa si todos los primeros pozos de este campo fueron excavados a mano o no. En cualquier caso, no
transcurrió mucho tiempo hasta que Canadá y Rumania produjeron petróleo extraído de pozos perforados por
medios mecánicos.
Se considera generalmente que el primer pozo productivo de Estados Unidos perforado con el propósito de
encontrar petróleo fue el pozo Drake a que, aunque situado en el oeste de Pensilvania, fue financiado por un
grupo de la Costa Oriental. Entre los miembros de este grupo estaban George H. Bissell, joven abogado
neoyorquino; James M. Townsend, banquero de New Haven; Benjamin Silliman, profesor de química, geología y
mineralogía en la Universidad de Yale; Edwin L. Drake, coronel honorario y exconductor de ferrocarriles por
vocación; y William A. Smith, perforador de pozos de agua. En la terminología moderna estos hombres eran
respectivamente promotor, financiero, consejero técnico, superintendente de perforación y perforador. Nos agra-
daría poder consignar que la localización del pozo fue hecha por el geólogo Silliman, pero no es éste el caso. El
profesor Silliman contribuyó en .forma de un análisis químico y un optimista informe respecto a la utilidad
potencial del petróleo, que sirvió para que el banquero Townsend levantara el capital necesario, principalmente
en New Haven. El pozo (fig. 1-1) comenzó en junio de1859 cerca de Titusville, Pensilvania, junto a un antiguo
manantial de petróleo y el 27 de agosto empezó a manar petróleo a una profundidad de 21 m. ( Literalmente
fueron perforados miles de pozos en Pensilvania occidental pocos meses después de la puesta en producción
del pozo Drake, y la búsqueda se extendió prontamente a los estados vecinos y más allá. A finales del siglo se

producía petróleo comercialmente dentro de Estados Unidos en Ohio, VirgInia Occidental, Kansas, Oklahoma,
Texas, Colorado, Wyoming y California. En este período se había descubierto también petróleo Y se producía
en cantidad en Rusia, Indias Orientales Holandesas y Polonia.
EVOLUCION DE LA INVESTIGACION PETROLIFERA 13
PrImeros pasos de la investigación, El pozo Drake y sus inmediatos sucesores fueron perforados en el fondo de
barrancos. Por tanto la primera regla práctica en la prospección de nuevas reservas era no apartarse del fondo
de los barrancos. La. «barrancología» rigió hasta que algunos arredrados individualistas perforaron pozos con
éxito en las tierras altas. A continuación se observó que las bolsas petrolíferas de los Apalaches eran mucho
más largas que anchas y que sus ejes mayores tenían orientación N 30 E (que es el rumbo de las rocas en esta
región). En consecuencia se puso de moda seguir el eje «<geología de la regla») y es aún buena práctica
cuando las trampas tienden a ser alargadas. El descubrimiento del prolífico campo petrolífero Spindletop en la
Costa del qolfo en Texas indujo a los prospectores a buscar montículos topográficos similares al que cubría el
diapiro salino de Spindletop y en esta forma se encontraron otros .grandes campos.
Todos estos métodos han tenido un grado bastante bueno de éxito a causa de su base científica, aunque el
que usaba tal método pudiera conocer poco e importarle menos cualquier posible conexión científica. Puede
explicarse incluso la «barrancología», pues en la región de los Apalacheses corriente el drenaje rectangular y
muchas de las corrientes son o subsecuentemente paralelas al rumbo de las formaciones rocosas.
Sin embargo, entre los antiguos métodos de investigación petrolífera el de mayor éxito era perforar en la
vecindad de filtraciones. Es aún la mejor de las técnicas de descubrimiento donde puede ser aplicada pues se
comienza con una evidencia definida de la presencia de petróleo o gas. Como se describe en el capítulo 3,
muchos de los grandes campos petrolíferos del mundo' deben. su descubrimiento, en parte almenas, a la
presencia de filtraciones.
Nacimiento e infancia de la geología profesional del petróleo. Howell 16 ha publicado una historia detallada del
desarrollo de la teoría estructural de las acumulaciones de petróleo y gas. En 1842 William Logan, geólogo
canadiense, hizo notar la presencia de filtraciones de petróleo el1 las crestas de anticlinales en la península
Gaspé. Nueve meses después de la perforación del pozo Drake, en1860, el profesor Henry D. Rogers llamó la
atención sobre la situación anticlinal de los nuevos pozos de Pensilvania. El mismo pozo Drake fue perforado
sobre un anticlinal registrado años antes por Rogers y señalado en el mapa en 1858. La primera enunciación
clara sobre la teoría del anticlinal fue hecha por otro canadiense, T. Sterry Hunt, en 1861. En los años
subsiguientes muchos otros autores escribieron sobre.la teoría del anticlinal. Mientras tanto, en 1860, Alexander
Winchell notó que las areniscas no fracturadas eran 10 suficientemente porosas para contener petróleo.
Dos hombres destacan como iniciadores de la geología' profesional del' petróleo en los Estados Unidos.
Estos hombres son John F. Carll e l. C. White. Carll (1828-1904) inlgeniero civil que se convirtió en geólogo por
sus experiencias en los campos petrolíferos de Pensilvania occidental, y se incorporó al Departamento
Geológico de Pensilvania en 1874 como geólogo, teniendo a cargo la investigación de las reservas de petróleo
y gas natural. Sus siete informes fueron contribuciones fundamentales a la geología del petróleo. «Él vio el
papel que jugaba el gas en el movimiento del petróleo en el pozo y comprobó que el gas debía ser conservado
para producir la máxima cantidad de petróleo. Explicó también que el petróleo no se encuentra en un lago o
bolsa dentro de la formación productiva, sino en los poros de una arenisca. Demostró que la porosidad normal
de las areniscas era suficiente para explicar las mayores producciones descubiertas hasta aquel tiempo.» 17
En 1880 el profesor l. C. White (fig. 1-2) redescubrió la teoría estructural de las acumulaciones de petróleo y
gas y procedió seguidamente a aplicar su conocimiento de la geología al descubrimiento de campos de petróleo
y gas, siendo singularmente afortunado en ello. Entre 1884 y-1889 situó los pozos que descubrieron el campo
de petróleo y gas Washington, Pensilvania, el campo de gas Grapefield, el campo Belle Vernon, el campo
Mannington de Virginia Occidental y otros. 18 Geólogos posteriores que han trabajado en la misma área han
notado la naturaleza extremadamente errática de las areniscas almacén y han puesto en duda la aplicabilidad
de las teorías de White en esta provincia, pero queda patente que él empleó la geología con éxito en la bús-
queda de nuevos campos de petróleo y gas. '
Durante los restantes años del siglo XIX fueron empleados profesionalmente geólogos holandeses en las
investigaciones petrolíferas en las Indias Orientales, y los geólogos ingleses trabajaron de modo similar en
Méjico. En 1897- 1898 dos compañías en California establecieron departamentos geológicos.
Durante los primeros quince años del siglo xx, el Departamento Geológico de los Estados Unidos publicó un
gran número de artículos y monografías sobre la geología de diversos campos petrolíferos. Al mismo tiempo las
compañías petrolíferas se convencieron de la utilidad de la geología y buscaron activamente geólogos para
establecer departamentos de geología dentro de su organización. Un grupo considerable procedía de las filas
de los departamentos geológicos federales y estatales. Tan nueva es la profesión de la geología del petróleo
que muchos de estos «pioneros» viven aún.
Desarrollo subsiguiente. El período de 1911 a 1921 fue de grandes descubrimientos en América Central,

C:osta del Golfo, California y otras partes. En 1915--los departamentos geológicos eran la regla más que la
excepción en la organización de las compañías. La Asociación Americana de Geólogos del Petróleo.
(primeramente Asociación del Sudoeste de "Geólogos del Petróleo) 'nació en 1917. El geólogo se dedicaba al
levantamiento de anticlinales o, especialmente en la Costa del Golfo, a la búsqueda de indicaciones en la
superficie. Para este trabajo era adecuado un entrenamiento general en geología.
En el comienzo de 1920 el geólogo dedicado a la búsqueda de nuevas reservas de petróleo y gas se había
convertido en un especialista en la geología del petróleo. En primer lugar, la mayoría de los anticlinales
discernibles en la superficie estaban descubiertos y, en segundo lugar, empezaba a ser cada vez más obvio que
el plegamiento anticlinal era solamente uno de los muchos factores determinantes en la localización de petróleo
y gas en depósitos comerciales. Se desarrollaban nuevas técnicas y los conocimientos se extendían hacia
campos hasta entonces desconocidos o desdeñados. La micropaleontología, geofísica, sedimentación,
estratigrafía y paleontología se han convertido en ciencias esenciales para el' moderno geólogo de petróleos.
Muchos de los .laboratorios, académicos e industriales, de geología del subsuelo y de micropaleontología
aplicada iniciaron sus tareas entre 1915 y 1920. 19
Los años cumbre de levantamientos de planos con plancheta fueron 1920 y 1921. Los sondeos estructurales
hicieron posible el levantamiento de estructuras rocosas cuando por una razón u otra (generalmente a causa de
afloramientos inadecuados) tal levantamiento no era posible en la superficie. Esta innovación se introdujo en
1919 y alcanzó su máxima aplicación en 1920. La balanza de torsión fue introducida en 1920 y el sismógrafo en
1923. Es interesante señalar que la posible aplicabilidad del sismógrafo para el levantamiento de estructuras fue
discutido por J. A. Udden, geólogo del estado de Texas, en , una conferencia leída en 1920. Los instrumentos
geofísicos tuvieron su periodo de máxima aplicación entre 1925 y 1940. Desde 1917, la geología del subsuelo,
que es el estudio de la litología, estructura e historia geológica de una sección sedimentaria por medio de
pozos, incluyendo medidas eléctricas y estudio de muestras, ha crecido en forma sostenida y es ahora una
parte "ij importante de la organización de todo departamento geológico. Hoy en día se deben más
descubrimientos de campos de petróleo y gas, a estudios del subsuelo que a cualquier otra técnica de
investigación.
El método científico no ha eliminado enteramente las perforaciones al azar. La localización de pozos de
exploración dentro de una concesión puede ser debida a compromisos adquiridos en el contrato de
arrendamiento o por su accesibilidad o simplemente por una feliz idea. Tales pozos tienen a menudo éxito,
principalmente porque la concesión estaba en un área geológicamente favorable no habría sido adquirida.
TENDENCIAS ACTUALES EN LA GEOLOGIA DEL PETROLEO
Los geólogos del petróleo están actualmente pensando y trabajando en el sentido de: 1) desentenderse de
los prejuicios que han obstaculizado la investigación petrolífera desde sus comienzos; 2) crear nuevos terrenos
petrolíferos extendiendo la exploración más allá de los límites previos lateral y vertical; y 3) continuar mejorando
los instrumentos y técnicas de exploración y alcanzar una-mejor integración de los datos geológicos y
geofísicos.
Superación de las limitaciones artificiosas en la exploración petrolifera. Desde los mismos comienzos
de la industria petrolífera una de las mayores rémoras de la exploración ha sido las ideas ultraconservadoras.,
«Sería aleccionador e irónico publicar un mapa de los Estados Unidos mostrando los límites, lateral y horizontal,
más allá de los cuales los dogmáticos han dicho en un tiempo u otro que no podía encontrarse petróleo, límites
que han saltado bajo el empuje irresistible de la demanda.»20 A través de la historia relativamente breve de la
exploración petrolífera las limitaciones artificiosas tales como «no pueden encontrarse depósitos comerciales de
petróleo en calizas», «las cuencas estructurales no pueden contener campos petrolíferos», «no hay petróleo
bajo la caliza Mississippi (o la Dundee u otra cualquiera», «no hay porosidad por debajo de los 4500 m», «la
estructura es demasiado complicada», «las áreas de capas rojas son estériles» y «no hay petróleo al oeste de
la barrera granítica Nemaha», han sido destruidas por hombres de ideas inspiradas Y firmeza de ánimo. El
descubrimiento de petróleo en la llamada «cuarcita» Weber y en sedimentos de origen continental han desa-
creditado los prejuicios más firmemente arraigados.21
Otro obstáculo en los descubrimientos ha sido la tendencia a permitir que un pozo seco condene a toda una
ciudad o condado o incluso un área mayor. En la realidad un pozo seco condena poco más que su propia área y
se pueden citar muchos casos en que pozos productivos han rodeado por completo un primer pozo seco.
El hecho de que las falsas opiniones citadas y otras muchas más hayan sido abandonadas no significa que
no existan prejuiciosactualmente. Todo distrito contiene geólogos que limitan dogmáticamente la existencia de
petróleo a ciertas áreas y profundidades estratigráficas. «Algunas veces un geólogo llega a convencerse de que
no existe petróleo en un área y finalmente declara que es capaz de beberse todo el petróleo que se encuentre.
Cuando esto sucede, debía pedir, el traslado. Ha permanecido demasiado tiempo en esa área. Las posturas
negativas nunca encontraron un litro de petróleo.» 22

Afortunadamente, la tendencia presente en la geología del petróleo parece inclinarse hacia opiniones menos
prejuzgadas. Naturalmente el geólogo de una compañía debe también considerar los costos de una nueva
campaña exploratoria y los beneficios probables; así, los factores económicos tanto como los prejuicios pueden
conducir a rechazar una exploración propuesta. Desgraciadamente la tendencia a subestimar los posibles
beneficios ha sido también responsable del abandono de proyectos que posteriormente demostraron ser
altamente provechosos. Una estimación económica ultraconservadora es tan perjudicial como una postura
geológica ultraconservadora.
Creación de nuevas provincias. Durante muchos años fue obstaculizada la extensión de las exploraciones
petrolíferas por consideraciones tales como la ausencia de oleoductos en el área de posible interés. Hoy ,el
petróleo se ha convertido en un artículo de tanto valor que ningún área, por remota que sea, se considera
«fuera de límites, » y los geólogos no están ya tan restringidos en la exploración. En consecuencia se está
buscando petróleo en lugares tan apartados como las regiones polares, a mayores profundidades que las
alcanzadas hasta hoy y por debajo de las «máscaras geológicas» consideradas hasta ahora demasiado caras
de penetrar. Noble 23 cita como ejemplos de máscaras geológicas: agua, mantos de corrimiento, rocas
volcánicas, calizas de alta velocidad y disconformidades. Se despliega ya gran actividad en la exploración de
nuevos depósitos petrolíferos bajo las aguas que cubren escudos continentales: Esta costosa exploración ha
tenido éxito y las áreas sumergidas continuaran siendo investigadas como «tierras» potencialmente petrolíferas.
Mejora de las técnicas de exploración. En la discusión precedente sobre la evolución de la investigación
petrolíféra se vio que el método de exploración ha pasado del levantamiento de estructuras en la superficie por
medio de los sondeos estructurales y campañas geofisicas hasta la geología del subsuelo y la integración de la
geología y la geofísica. Cada una de estas tres técnicas de investigación alcanzó un máximo relativo y después
declinó bastante rápidamente. Esta caída se ha producido por dos razones: 1) el hecho, destacado por
DeGolyer,24 de que una técnica (una operación simple en la búsqueda de petróleo) agota sus posibilidades al
usarla; y 2) el éxito inicial y la popularidad resultante del siguiente método nuevo. Sin embargo, respecto al
primer punto debe indicarse que el agotamiento completo de toda Posibie aplicación es más teórico que un
verdadero punto finaI. Si hay un
cambio de escala -(Dar ejemplo, pasar de una campaña de reconocimiento a, una c;ampaña detaIlada) toda el
área puede volver a ser investigada por el viejo método, pero con la ocupación de muchas más estaciones. De
modo semejante la apertura de un nuevo territorio a la exploración, ya sea lateral o verticalmente, dará nuevos
ímpetus a los viejos métodos. Por tanto, incluso aunque la aplicabilidad de una vieja técnIca pueda reducirse y
de hecho disminuya, es posible que pase un largo tiempo antes de que desaparezca.
Los fenomenales éxitos de la prospección geofísica hicieron desaparecer los, métodos geológicos de superficie
concluyendo la fotogeología en algunas áreas mucho antes de haber agotado sus posibilidades. En las
provincias de la Costa del Golfo y de las Montañas Rocosas ha causado considerable'-pesar la verificación de
que los campos petrolíferos descubiertos por medios geofísicos podrían haber sido encontrados con tanta
facilidad por el método mucho más barato de estudios de la superficie. Según RusseIl, 25 varios campos situa-
dos en el centro y norte de Luisiana podrían haber sido encontrados por levantamientos de su superficie, pero
sólo dos fueron así descubiertos hasta 1941. El levantamiento de la geología de la superficie ha intervenido en
la detección de seis campos más, dejando 16 en que las posibilidades de su descubrimiento por medio del
estudio de la geología de su superficie fueron ignoradas. El primer pozo productivo en Mississippi fue localizado
mediante el estudio de la geología de su superficie. aunque el estado había sido previamente cubierto varias
veces por campañas geofísicas. RusseIl declara también que en 1941 habían justamente comenzado los
estudios estructurales detallados de la superficie en la región septentrional de la Costa del Golfo, incluyendo
partes de Texas, Luisiana, Arkansas, Mississippi, Alabama y Florida.
Una tendencia altamente significante en la geología. del petróleo ha sido la de reconocer la utilidad de
combinar y coordinar las técnicas de exploración. Ahora se reconoce que los varios métodos de exploración no
se excluyen mutuamente y no deben considerarse como antagónicos. El departamento de exploración de una
compañía petrolífera moderna está organizado en forma tal que la investigación hace uso de cualquier técnica
que pueda ser aplicable. En 1942 fueron recopiladas las opiniones de unos 200 geólogos de petróleos- sobre
métodos de exploración petrolifera.26 Un examen de las opiniones demuestra que la mayoría de los geólogos
eran partidarios de la «mejora y coordinación de los diversos métodos conocidos» como la mejor solución del
problema de descubrir petróleo y gas.27 Más recientemente Dennisan y Warman han dicho: «El rasgo principal
de la exploración petrolífera en el presente es la falta de una técnica revolucionaria y la improbabilidad de su
desarrollo en un futuro cercano. La búsqueda de nuevas y más ocultas reservas de petróleo se hace
principalmente con los antiguos métodos mejorados.» 28Weaver 29, ha apuntado las posibilidades de
reinterpretar los datos geológicos y geofísicos existentes para encontrar trampas potenciales de hidrocarburos
que pueden haber sido pasadas por alto en los primeros análisis de la misma información, especialmente si
estos primeros análisis fueron hechos en tiempos de conocimientos menos avanzados.
En las viejas regiones productivas del mundo se ha alcanzado el punto en que han sido agotados los lugares
obvios para buscar petróleo, determinados por fotografías aéreas, mediante la plancheta o con el sismógrafo.

Las llamadas trampas estratigráficas de acumulación de petróleo son rara vez visibles en la superficie por
buenos que sean los afloramientos existentes, y la mayoría de estas trampas eluden los instrumentos
mecánicos hasta ahora creados para determinar la geología oculta y profundamente enterrada. Por tanto se
hace necesario que el geólogo aprenda a localizar las más difíciles trampas estratigráficas y del tipo de
combinación. Para este trabajo debe hacer algo más que registrar simplemente las altitudes de las formaciones;
debe ser un intérprete, un geólogo especulativo. La interpretación y la especulación de valor práctico son
posibles únicamente a base de un conocimiento exacto de los procesos geológicos e historia geológica, de
sedimentación y estratigrafía, de diagénesis y diastrofismo. Solamente Con estudios paleogeológicos detallados
puede determinarse la presencia y la situación de tales trampas potenciales como cambios de facies,
variaciones de porosidad, existencia de cornisas y disconformidadeso determinarse las épocas de formación del
petróleo y de creación de la trampa. Tales estudios paleogeológicos constituyen investigación en su sentido más
puro.
Las compañías petrolíferas han reconocido el lugar que debe Ocupar la ti investigación en la exploración
petrolífera, y, como resultado, muchos geólogos de compañías están dedicados hoya la labor de investigación y
se han construido, laboratorios para albergar estas actividades. El Instituto Americano del Petróleo (A. P. I.) ha
patrocinado varios proyectos, inc1uyendo uno (nº 51) sobre sedimentos marinos recientes. 30 También los
geólogos holandeses han hecho estudios de los sedimentos recientes. 31 La paleoecología 32 ha adquirido gran
importancia como medio de localización de trampas potenciales del tipo de permeabilidad variable. La
micropaleontología 33 se utiliza no sólo como un medio de correlacionarlos estratos sedimentarios, sino también
para reconstruir la paleogeología.
Sin ninguna duda, más importante que todas las técnicas es la amplitud de criterio por parte del geólogo.
Cram 34 pide más imaginación en la localización de los puntos de emplazamiento de los pozos exploratorios.
Según DeGolyer «..tanto petróleo puede encontrarse en el futuro con nuevos puntos de vista como con nuevas
técnicas. El instrumento más importante que posee todo geólogo es su cerebro, único instrumento agudizado
que no se embota con el uso».35
Pratt aconseja la especulación ;nces_nte: «En última instancia, donde se halla primero el petróleo es en la
mente del hombre. El campo petrolífero aún no descubierto existe sólo como una idea en la mente de algún
investigador. Cuando los hombres crean que no queda más petróleo por descubrir, no se encontrarán más
campos petrolíferos, pero en tanto exista un solo hombre que crea en la existencia de petróleo, y haya libertad e
incentivo para explorar, se podrán descubrir nuevos campos petrolíferos.» 36
Dickey resume: «Varias veces en el pasado se pensó que estaba agotándose el petróleo, cuando
únicamente estaban agotándose las ideas».37
Pero por grandes que sean los avances en la ciencia de la exploración petrolífera es dudoso que pueda ser
eliminado alguna vez el elemento suerte. «El éxito de una exploración depende de la suerte y de la preparación.
Cuál deba ser la propia proporción de cada una, no lo sé. El éxito puede ser debido, y lo ha sido muchas veces,
sólo a la suerte, pero dudo que pueda haber algún caso en que se deba únicamente a la preparación científica.
La más perfecta de las campañas, llevada a cabo con la más perfeccionada y exacta de las técnicas, puede
ser- un fracaso. Por otro lado, un pozo perforado al azar por razones equivocadas o por ninguna razón el
absoluto puede dar lugar al descubrimiento de un nuevo e importante campo petrolífero.» 38
FUTURO DE LA GEOLOGIA EN LA INDUSTRIA PETROLIFERA39
No hay razón para creer que la demanda de petróleo y gas no siga aumentando anualmente como lo ha
hecho, con pocas excepciones, desde sus principios. Hay dos razones para este crecimientp constante -de la
demanda. La primera es que la población mundial aumenta a un promedio ligeramente
riiáyor del diez por ciento por década. La otra (y más importante) es el gran aumento anual en el consumo por
cabeza de productos petrolíferos. En la sociedad altamente mecanizada de los Estados Unidos el consumo
medio por habitante es de 2400 litros al año. Fuera de los Estados lInidos el consumo atiualpor persona es
aproximadamente de 160 litros.4o Solamente el uso rápidamente creciente de productos petrolíferos para los
transportes está haciendo aumentar la demanda mundial a grandes saltos. Se ha calculado que el consumo
mundial será cercano a los 8000 millones de litros por día en 1975, más de tres veces el consumo en 1957.." La
mayor parte de este petróleo tendrá que descubrirse antes de 1975, ya que la mayoría de las reservas
mundiales conocidas en el presente, estimadas en 40000 billones de litros, se, habrán consumido.
El desarrollo y' uso creciente de la energía atómica no debe ser causa de \ temor para la industria petrolífera.
En primer lugar la energía atómica, en el presente y durante algún tiempo, está lejos de poder competir en
coste, con los hidrocarburos; en segundo lugar, en el tiempo en que las dos fuentes de energía puedan ser
competitivas, si se alcanza alguna vez, las necesidades mundiales de energía alcanzarán niveles tan
astronómico s que la, ayuda del material radiactivo para satisfacer la demanda será bien recibida.
Es obvio que si la demanda' mundial de petróleo va a triplicarse en dieciocho años, esta industria va a
necesitar toda la ayuda que pueda conseguir de la geología. No sólo está aumentando rápidamente la demanda

de petróleo, sino que también las horas que los geólogos invierten en el descubrimiento de cada millón nuevo
de litros aumentan casi verticalmente. Este aumento es debido naturalmente al hecho de que hemos pasado
desde las trampas más o menos obvias a las trampas ocultas y que cada mil nuevas trampas descubiertas
están más ocultas que las mil precedentes. A fines de 1957 se estaba haciendo evidente en Estados Unidos
que: 1) el porcentaje de pozos, exploratorios con éxito estaba declinando; 2) el volumen de petróleo descubierto
por pozo exploratorio con éxito estaba disminuyendo; 3) los costes de exploración estaban aumentando, y 4) las
reservas encontradas por dólar dé exploración disminuían bruscamente.
Algunos han expresado el temor que el descubrimiento de un método directo de detección del petróleo
podría acabar con la geología del petróleo. como profesión. Tal descubrimiento es siempre una posibilidad, pero
es altamente improbable que el instrumento sea tan perfecto que no requiera interpretación por parte del
geólogo. La invención dé los métodos eléctricos no han desplazado al geólogo del subsuelo; por el contrario le
ha proporcionado un valioso instrumento adicional.
Pratt42 ha hecho resaltar la fusión de la industria petrolífera con la geología y la tendencia a emplear
geólogos, como administradores en las organizaciones de las compañías.
43
FORMACION DEL GEOLOGO DEL PETROLEO
En los últimos años se ha discutido ampliamente la base docente considerada esencial en la carrera de
geología del petróleo (Comité Geológico de )a Asociación Americana del Petróleo) o para la geología en general
(Conferencias sobre Preparación en Geología). Antes de considerar las recomendaciones específicas dadas por
estos grupos, se debe destacar el hecho usualmente olvidado de que la formación docente de un geólogo, y
especialmente de un geólogo del petróleo, tiene su máximo valor en la época en que empieza a ejercer su
profesión, después de la cual dicho valor decrece en forma directa, aproximándose a cero al cabo de veinte
años. Otros factores, que incluyen inteligencia natural, laboriosidad, personalidad, aprendizaje y experiencia
prácticas aumentan en importancia hasta que se convierten en capitales. - .. -- --'_ -- - .. -- -- ---
Sin embargo, subsiste el hecho de que la naturaleza de la preparación docente del geólogo es importante
para primero asegurarse Y después mantenerse en un puesto profesional. Todos convienen en, que el futuro
geólogo no debe dejar de adquirir una base adecuada en los campos de matemáticas, física; y química. La
biología es un tema obligatorio para los que intenten especializarse en paleontología. La composición y
redacción de informes son decididamente valiosos, pues para alcanzar y mantenerse en una posición de
responsabilidad se requiere casi siempre la habilidad de escribir inteligiblemente. Una mayoría de los
conferenciantes sobre este tema recomiendan también aprender al menos una lengua extranjera. Es
recomendable adquirir velocidad de lectura, pues el geólogo de hoy tiene que asimilar una vasta cantidad de
literatura.
El geólogo del petróleo debe poseer una enseñanza completa en los cursos fundamentales de geología.
Estos incluyen la geología física, histórica, estructural (elemental y avanzada) y geología práctica; mineralogía y
petrología; estratigrafía, paleontología y sedimentación; y fisiografía y geomorfología.
Un curso en el campo de una duración mínima de un verano es de extrema I importancia. Además, y de mucha
más importancia que el estudio de las técnicas de reconocimientos geológicos, es la geología fundamental que
el estudiante aprende prácticamente en el campo. El geólogo del subsuelo que intente estudiar por muestras o
diagramas eléctricos una capa de caliza de 15 m. tropezará con graves dificultades si nunca ha trabajado sobre
secciones análogas en una cantera o un acantilado. Otros dos cursos especialmente recomendables para el
geólogo que quiera progresar en la industria petrolífera' son la geología del petróleo y geofísica elemental.
Ninguno de estos cursos pueden producir por sí solos un geólogo del petróleo o un geofísico profesionales,
pero proporcionan al estudiante las bases para su subsecuente entrenamiento profesional.
Un tema constante de discusión es la extensión a la que las escuelas técnicas deben llegar al intentar enseñar
procedimientos profesionales tales como el estudio de muestras y la interpretación de diagramas eléctricos.
Tales conocimientos pueden adquirirse únicamente a costa de otras enseñanzas más fundamentales. La
mayoría de los jefes de los departamentos geológicos de compañías petrolíferas han expresado su preferencia
por quienes estén ampliamente familiarizados con los conceptos fundamentales en lugar de los que conozcan a
fondo únicamente temas altamente especializados.44
Es opinión prácticamente universal que cuatro años es un período inadecua para abarcar propiamente
los temas generales de enseñanza y los cursos fundamentales esenciales en geológía y campos anexos. Se
recomienda un mínimo de cinco años de formación docente.
Los estudios de la carrera son complementados, naturalmente, por el entrenamiento en la práctica. Este
entrenamiento varía en las diversas compañías desde un programa formal de aprendizaje de dos años hasta un
aprendizaje no oficial bajo la dirección de geólogos, más experimentados. LeRoy 45 y otros han hecho

recomendaciones sobre dichos aprendizajes.
1. IRA H. CRAM: '«Geology Is Useful, Bulz. A_. Assoc, Petrol. Geol., vol. 32, (enero,
1948), págs. 1-10.
2. EDWARD A. KOESTER: «Look Back Then Look Forward», Bull. Am. Assoc, Petrol.
Geol., vol. 39 (julio, 1955), pág, 1193.
3. E, DEGOLYER: ,«Debt of Geology to the Petroleum Industry», 'Bull. Am. Assoc.
Petrol. Geol., vol. 5 (mayo-junio, 1921), págs. 394-398.
4. HUGH D. MISER: «Some. Notes on Geology and 'Geologists, 1907-1947», Bull. Am.
Assoc. Petrol. Geol., vol. 32 (julio, 1948), págs. 1340-1348.
5. F. H. LAHEE: «Cohtributions of Petroleurn Geology to Pure Geology in the Southern
Mid-ContinentArea»,Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol.,vol. 43 (1932), páginas 953-964.
6. HUGH D. MISER: «Our Petroleum Supply», Jour. Washington Acad. Sciences, vol. 29
(marzo, 1939), págs. 93-109.
7. VINCENT C.' ILLING: Influence of Oil on Geology», 011 Weekly (septiembre,1946),
pág. 176.
8. PAULGIDDENS: Beginnings of Petroleum Industry (Pennsylvania Historical
Commission, 1941)
9. MERRILL HAAS: comunicado no oficial.
10. HAROLD B. GOODRICH: «Early Exploration Methods», World Petroleum, vol. 10
(mayo; 1939), págs. 32-37.
11. «Br'ooklyn»I,.FíY!ng Red Horse (otoño, 1954) pág.18.
12. R.J. FORBES: « [Pierre Belon and Petroleum» Mededelingen van de koninklijke
Vlaamse Academie voor Wetenschappen, Letteren en Schone Kunsten von Belgié,
klasse der Wetnschappen, año XX, 1958 nº 1 pags. 3 – 18 (referencia) por cortesía del
profesor W. R.Taylor, Departamento de Botánica, Universidad de Michigan, Ann
Arbor, Michigan).
13. SIR BOVERTON REDWOOD: Petroleum and Its Products, vol. I(1906), páginas 45-46
14. PARKE A.DÍCKEY: «The First Oil Well»,. Jour Petrol. Technol., vol. 9 (enero,1959),
págs. 14-26.
15. J. W;,HOWELL: «Historical Development af Structural Theory of Accumulation of 0il
and Gas», Problems of Petroleum GeoIogy (A,merican Association of Petroleum
Geology.1934), págs. 1_23; "W.B.HEROY; «PetroleumoGeology»;. Geology 1888-
1938, Geol. Soc.Am., volumen del 50 aniversario (1941) págs. 512-548" RALPH
ARNOLD: «Two Decades of Petroleum Geology, 1903 - 1922». Bull. Am. ASSOC.
Petrol. Geol, vol. 7 (noviembre-Diciembre,1923); págs. 603-624; E.,DEGOLYER:
«Development of the Technique of Prospecting», Science of Petróleum. (Oxford
University Press,1938). Vol I pag: 268.Y sigs.; PAUL H. PRICE: «Evolution of Geologic
Thought in Prospecting for Oil and Natural Gas», Bull. Am. Association Petrol. Geol.,
vol. 31 (abril, 1947), págs. 673-697; PARKE A. DICKEY: «The First Oil Well», Jour.
Petrol. Technol., vol. 9 (enero, 1959), págs. 14-26.
16. Op. cit.
17. W. S. LYTLE: «John F. Carll», Geotimes, vol.1 (marzo, 1957), págs. 8 – 14.
18. I.C. WHITE: «The Mannington Oil Field and the History of its Development», Bull.
Geol. Soc. Am., vol. 3 (abril, 1882), pág. 195.
19. HUBERT G. SCHENCK: «Applied Paleontology», Bull. Am. Assoc. Geol., Vol. 24
(octubre, 1940), págs. 1752-1778.
20. SAMUEL W. TAIT, JR.: The 'Wíldcatters (Princeton University Press, Princeton,N. J.,
1946), pág. XIII.
21. EARL NOBLE: «Geological Masks and Prejudices», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol.
31 (julio, 1947), págs. 109-147.
22. MERRILL W. HAAS: «The Oil Finder», The Link, vol. 23 (mayo-junio, 1958), página 1.
23. EARL NOBLÉ; Op. cit.
24. E. DEGOLYER:«Future_Position of Petroleum Geology in the' Oil Industry», Bull. Am:
Assoc. Petral. Geol., vol. 24 (agosto, 1940) pág. 1389.
25. R. DANA RUSSELL:«Future o-f Field Geology» , Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol..vo1.25
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27. C. DON. HUGHES: «Graphic Arrangement. Or a Symposiumon Petroleum Methods»,
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28. A. T, DENNISON y H. R. WARMAN: «Recent Trends in Exploration Methods», Inst.
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30. FRANCIS P.SHEPARD y CLARENCE L. MÓODY: «Guides to Future Oil Traps», Oil
and Gas Jour. (16 nov., 1953), págs. 228 y sigs.
31. D. J. DOEGLAS: «Progress ofRegional Sedimentology», Proc. Fourth World Petrol.
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32. RAYMOND C. MOORE: «J'dodern Methods of Paleoecology» , Bull. Am. Assoc.
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33. C. C. CHURCH : «Foraminifera, an EvaluatiorJ», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol.,
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34. IRA H. GRAM: «Excuses to Drill», World Oil (abril, 1951),págs.73 y sigs.
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37. PARKE A. DICKEY: «Oil is Found With Ideas», Oil and Gas Jour. (septiembre; 15,
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39. G. M. KNEBEL: «Blueprint for fue FutureD, Bull. Am.Assoc. Petrol Geol., vol. 40 (julio,
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40. FRANK A. MORGAN: «Opportunity for Petroleum Geology , A. G. l. Newsletter (abril,
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41. MERRILL W. HAAS: «Your Future as a Petroleum, Geologist», University of Michigan
(10 octubre, 1957).
42. WALLACE PRATT: «Geology in the Petroleum Industry», Bull. Am. Assoc. Petrol.
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43. Memorias del Comité para actividades profesionaies, Bull., Am. Assoc. Petrol. Geol.,
vol. 25 (mayo, 1941), págs. 969-972; ,vol. 26 (mayo, 1942), págs. 942-946; vol. 27
(mayo, 1943), págs. 694-697; vol. 28 (mayo, 1944), págs. 670-675; «Confe rences en
Training in Geology», GeoI. Soc:Am..lnterim proceedings (marzo, 1946); (junio, 1946);
(marzo, 1947) (4.& Y 5.& conferencias); (agosto, 19,47, Memoria final y
recomendaciones); «Proceedings of Joint Conference of Committee on Geologic
Education And Association of Geology Teachers», Geol. Soc. Am. ,Interim Proc.
(marzo,"1948.,.parte 2) ; «Report, of the committe on Geologic Education of the
Geological Society of America»; Geol. Soc.Am. Interim Proc. (julio, 1949, parte 2),
págs. 17-21;BRADFORD WILLARD: «Post-War Geology» , Science, vol. 100 (20 octu-
bre, 1944), págs. 348-350; JAMES T. WILSON: «Preparation for Petroleum Geology
and Geophysics», Jour. of Eng. Educ., yol. 42 (enero, 1952), págs. 295-296; JOHN E"
HAUN: «Training the Petroleum Geologist»,. Subsurface Geology in PetroIeum
exploratton (Colorado School of Min_s, 1958) pags. 3-8.
44. «Repoert of the Committee on College Curricula», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol.
(mayo, 1942), pág. 942.
45. L.W.LEROY; «Training Subsurface Geologist», World Oil (1 febrero, 1952), págs. 77-
80; «Discussion», World Oil (mayo, 1952), pág. 76.

FIG. 1-1. -Antes y ahora (1859-1959). Cortesía del Instituto Americano del Petróleo.

Fig. 1-2. - Profesor 1. C. WHITE <'1848-1827), el primero que utilizó con éxito los conceptos estructurales en la
búsqueda de petróleo y gas. Cortesía de la Sociedad Geológica de América.

CAPITULO 2
PERFORACION, PRUEBAS Y PRODUCCION EN POZOS PETROLIFEROS
En casi todos los pozos exploratorios existe un prólogo asignado al mismo durante su
perforación.1 La tarea del prólogo es examinar las muestras a medida que llegan a la superficie
y mantenerse de este modo en contacto con los cambios en la columna estratigráfica. Para
suplementar el examen de estos fragmentos puede exigir que se corten uno o varios testigos.
Es quien tiene la máxima responsabilidad en el descubrimiento de petróleo; recomienda el
programa de entubación y avisa dónde pueden esperarse zonas productivas. Sus
identificaciones estratigráficas y litológicas son la base de las decisiones respecto a la toma de
testigos para obtener datos de permeabilidades y saturaciones y a las pruebas para determinar
los rendimientos potenciales de petróleo y gas.
Cuando se termina la perforación, el geólogo debe ser consultado por el departamento
de operaciones respecto a las prácticas que han de seguirse. Si se descubre un nuevo campo,
los geólogos de producción deben ser consultados respecto al desarrollo de dicho campo. Por
tanto, aunque los programas de perforación y explotación son llevados a cabo por el
departamento de operaciones y los ingenieros del mismo, los geólogos también colaboran sea
como participantes activos o como consultores. Al menos son observadores interesados en
estas operaciones.
Las medidas y observaciones que se hacen simultáneamente con la perforación se
describen en el capítulo 4. Las variaciones en magnitud y las posibles causas de las presiones
de los yacimientos se describen en el capítulo 7.
Perforación de pozos.2 El geólogo está interesado en las técnicas de perforación por
dos razones por lo menos: 1) Si es quien recomienda el lugar de la prueba (“localiza el pozo”)
es de una importancia para él que el método de perforación sea adecuado para probar la
presencia o ausencia de petróleo a gas, y 2) aparte del éxito a fracaso del pozo como
productor, éste proporciona información geológica cuyo valor depende del perforador y del
método de perforación. Los datos ge0ológicos obtenidos durante la perforación de un pozo
consisten en medidas eléctricas y muestras de rocas, fragmentos y testigos. La cantidad y
características del agua, petróleo y gas encontrados durante las operaciones de perforación
constituyen también datos geológicos. La interpretación justa de estos datos depende del
íntimo conocimiento de la mecánica de rotura de la formación y de la recuperación de las
muestras de roca y fluidos.
Existen dos métodos completamente distintos de perforar pozos petrolíferos: el método
standard y el rotary. El standard es el más antiguo, pero el rotary lo ha desplazado en la
mayoría de los campos más modernos.
1
C.A. CASWELL.: “Sitting on a Well “a, World Oil, Vol. 130 (1 febrero , 1950), págs. 100 y stgs.
2
J.R. BRANTLY: “Oil Well Drilling Machinery and Practices”, Elements of the Petroleum Industry
(American Institute of Mining Engineers, Nueva York, 1940), cap. 10, págs. 126-158. A Primer of Oil
Well Drilling. 2.* ed. (1957), Petroleum Extension Service, Universidad de Texas y American
Association of Oil Well drilling Contractors, Dallas, Texas.
Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldúa Catedra Hidrocarburos UNMSM EAP.Ing. Geologica

Fig. 2-1 – Torre de perforación por percusión. Cortesía de United State Steel News

METODO STANDARD. El método Standard se conoce también con los nombres de
perforación con cable y a percusión. El sondeo se efectúa dejando caer repetidamente contra
el fondo una “herramientas” pesadas. Los golpes dados por el trépano colocado en la parte
inferior de la sarta arrancan pedazos de roca, que son removidos periódicamente para que
pueda continuar profundizando el pozo.
Una instalación de este género puede verse en la figura 2.1. Consiste en una torre,
usualmente de 25 m. de altura, con un bloque de poleas en su parte superior. Otras partes
esenciales de la instalación son el trepano y otros instrumentos perforadores; cable de
perforación, abrazaderas, tornillo de regulación, balances, biela, eje principal, tambor del cable,
cabrestante auxiliar y motores. Estos están colocados fuera de la base de la torre. Pueden ser
motores de combustión interna, máquinas de vapor o eléctricas. El eje principal se acciona por
medio de una transmisión de correa, y una excéntrica sobre este eje lleva una biela que
transmite al balancín, biela, eje principal, tambor del cable, cabrestante auxiliar y motores.
Estos están colocados fuera de la base de la torre. Pueden ser motores de combustión interna,
máquina de vapor o eléctricas. El eje principal se acciona por medio de una transmisión de
correa, y una excéntrica sobre este eje lleva una biela que transmite el balancín un movimiento
de vaivén. El extremo opuesto del balancín está situado exactamente encima del pozo que se
está perforando. De este extremo están suspendidos el tornillo regulador y las abrazaderas o
mordazas del cable. El cabrestante auxiliar está colocado detrás del eje principal y es
accionado por el mismo. En el lado opuesto de la base de la torre está situado el tambor del
cable, que también es accionado por el eje principal mediante una larga correa.
La sarta está compuesta por el trépano, que tiene un eje cortante en forma de V que se
aguza periódicamente; la barra de lastre, a la que se rosca el trépano; los martillos y el amarre
del cable. Los martillos tienen una sección interior y otra exterior. Cuando se levanta la sarta la
sección interior se desliza dentro de la exterior a lo largo de toda su longitud, momento en el
que empieza a subir arrastrando al resto de la sarta. Esta disposición hace posible un fuerte
tirón hacia arriba en el caso en que la barrera quede cogida en el lado del fondo del pozo. El
amarre del cable está situado en la parte superior de la sarta; este cable puede ser de acero o
de cáñamo. El cable pasa a través de las abrazaderas y el tornillo regulador situado en un
extremo del balancín y de allí sube hasta el bloque de poleas fijas, desde donde baja el tambor
del cable donde se arrolla.
El movimiento del balancín alza y deja caer el trépano. Sin embargo, a causa de la
elasticidad del cable, la oscilación vertical del trépano es considerablemente mayor que la del
balancín. Esta diferencia da lugar a un latigazo del trépano, aumentando su poder cortante. Se
deja siempre uno o dos metros de agua en el fondo del pozo para ablandar y emulsionar los
fragmentos de roca. A medida que el pozo avanza, el perforador aumenta la longitud del cable
por debajo del balancín, haciendo girar el tornillo de regulación y deslizando el cable a través
de las abrazaderas. Para sacar la sonda se quitan las abrazaderas, se coloca la correa que

mueve el tambor del cable y se va recogiendo cable hasta que la sarta de instrumentos emerge
por la boca del pozo.
Para sacar los fragmentos de roca acumulados y el exceso de agua se introduce la

cuchara, un largo tubo de acero con una válvula en el fondo, con ayuda de un cable enrollado
en el cabrestante auxiliar. Se saca y descarga tantas veces como sean necesarias. Si se desea
tomar un testigo, se reemplaza el trépano por un tubo sacatestigos, formado por un tubo
exterior perforador y un tubo interior para retener el testigo. 3 El tubo exterior tiene en su parte
interior unos dientes cortantes. Se levanta y cae al moverse el balancín, pero el tubo interior no
se mueve hasta que se saca la sarta. Al ir avanzando el tubo exterior, el tubo interior se desliza
a lo largo de un testigo intacto de roca. Un anillo de muelles montado en el fondo de este tubo,
rompe y retiene el testigo cuando se tira del cable para sacar la sarta del pozo.
En la perforación puede encontrarse una entrada de agua de tal magnitud que sea
imposible “secar” el pozo con la cuchara. Algunas veces, el agua de estas capas acuíferas está
sometida a tal presión artesiana que fluye hasta la superficie. Como no es posible perforar en
un pozo lleno de agua, han de cegarse todas las vetas de agua. Primeramente ha de
profundizarse el pozo por debajo de la arena acuífera hasta alcanzar una capa relativamente
impermeable, tal como un arcilla. Entonces se introduce en el pozo una tubería de
revestimiento desde el fondo hasta la boca. Después de esta operación se reanuda el trabajo,
pero ha de usarse un trépano de menor diámetro para que pueda pasar a través del entubado.
Hay otra razón para la introducción del entubado, aparte de evitar la entrada de agua. Sin él las
paredes del pozo pueden derrumbarse. En casos extremos pueden cegar el pozo atrapando la
sarta y haciendo necesarias largas y costosas operaciones de “pesca”. En cualquier caso, los
desprendimientos se mezclan con los fragmentos procedentes de la operación y pueden dar
lugar a confusiones. Por esta razón el geólogo, cuando se usa este método, debe tener en
cuenta la distancia al método del entubado en que fue obtenida cada muestra.
Además de recoger y etiquetar las muestras, el perforador posee un libro en el que
registra las profundidades a que se encuentran diferentes tipos de rocas. Anota también los
diferentes entubados del pozo, las zonas perforadas por percusión pueden hacerse otros tipos
de registros y mediciones. Se discuten en una sección posterior.
Si el pozo encuentra petróleo, se introduce una última sarta de tubería de
revestimiento, se cementa para impedir la entrada de agua de niveles superiores y se recupera
la mayor parte posible de los entubados exteriores. El petróleo fluye o es bombeado hasta la
superficie a través de una tubería de producción.
MÉTODO ROTARY. En el método Rotary, el movimiento de giro de la tubería hace
rodar la barrena sobre el fondo del pozo, arrancando pedazos de roca al girar. Los fragmentos
(el ripio) se remueven continuamente por medio de una corriente de lodo, aire o gas natural,
que se bombea desde la superficie a través de la tubería, sale por unas aberturas de la barrena
y vuelve a la superficie entre la tubería y las paredes del pozo.
3
R.C. GLOVER: “Cable Tool Coring”, World Oil (abril, 1951), págs. 147 y sigs..

Fig. Torre Rotary de perforación. Cortesía de la Compañía Oil Well Supply
1. Torre de acero; 2. Bloque de poleas fijas; 3. Bloque de poleas viajeras; 4.

Manguera del lodo; 5. Tubo de entrada del lodo; 6. Gancho; 7. Cabeza de
inyección; 8. Elevadores; 9. Válvula se seguridad; 10. Nelly (barra de arrastre); 11.
Mesa rotatoria; 12. Llaves de la tubería; 13. Motor de la mesa; 14. Malacate; 15.
Alimentador automático hidráulico Brantly; 16 Subestructura de la torre; 17.
Cable de perforación; 18. Caseta del perforador; 19. Indicador automático del
peso; 20. Transmisión general; 21. Bomba de lodo mezcladora de lodo; 26. Pistolas
mezcladoras del lodo; 27. Tubería de perforación; 28. Cable auxiliar (para
testigos).

Una torre Rotary moderna (fig. 2.2) puede tener 50 m o más de altura. Se distingue de
la torre por percusión, no sólo por su mayor altura, sino también por la presencia de un
balconcillo que rodea la torre por fuera a unos dos tercios de su altura. Como en las
instalaciones de percusión, tiene un bloque de poleas fijas en su parte superior y una planta
motriz. La parte mayor de la instalación es el malacate, mediante el cual se saca e introduce la
tubería en el pozo. Unidas a la transmisión del malacate o con motores independientes están
las bombas de lodo y la mesa rotatoria. Esta última es circular, pero tiene una abertura
cuadrada en su centro que hace girar el Nelly (barra de arrastre). La mesa gira en un plano
horizontal. Por encima de ella, suspendida del cable que pasa por las poleas fijas, está la polea
viajera, a la que está unido un enorme gancho.
La polea viajera y el gancho soportan el peso de las herramientas y tubería que se
encuentran en el pozo. El cable después de dar varias vueltas entre la polea viajera y las
poleas fijas, se arrolla en el tambor del malacate. En la parte superior de la sarta que llega
hasta la barrera situada en el fondo del pozo hay una gran cabeza de inyección; la parte no
rotatoria de esta cabeza está suspendida del gancho mediante elevadores de acero.
Inmediatamente debajo está el Nelly, tubo de sección cuadrada o hexagonal que ajusta
exactamente en la abertura de la guía del Nelly de la mesa rotatoria. Al dar vueltas la mesa, a
una velocidad de 50 a 300 revoluciones por minuto, gira el Nelly, que a su vez hace girar la
tubería y la barrera. La tubería de perforación, en cuya parte superior está roscado el Nelly, es
de sección circular. Realiza la doble función de transmitir el movimiento de giro a la barrera y
de conducir el lodo que se bombea desde la superficie. En la parte inferior de la tubería, entre
ella y la barrena, se colocan uno o más lastrabarrenas.. Un lastrabarrena es un tubo rígido de
paredes muy gruesas que proporciona el peso aplicado sobre la barrera y que puede resistir
los choques a compresión transmitidos por la misma. La barrena se rosca en la base del
lastrabarrena inferior. Existen barrenas4 de varios tipos; los más usados pueden verse en las
figuras 2-3 y 2-4. Al girar la barrena en el fondo del pozo, sus dientes arrancan pedazos de
roca. Al mismo tiempo sale una corriente de lodo a través de la barrena que mantiene frías a
ésta y a la formación para impedir la vitrificación, y simultáneamente lleva el ripio hasta la
superficie. En la superficie, el lodo pasa por una malla vibrante inclinada (el “vibrador”) que
separa del lodo los fragmentos más grandes de roca. Estos fragmentos caen por el extremo
inferior del vibrador y se recogen en un cubo o un cajón; el lodo pasa a través de la malla y
fluye hasta el tanque de asentamiento antes de volver a ser circulado (fig. 2-5).
En la práctica moderna, el lodo de perforación responde a especificaciones definidas
preparadas por un especialista en lodos.5 Los ingredientes líquidos y sólidos se mezclan en
una mezcladora situada en el borde del tanque en que se almacena el lodo. Este es absorbido
por unas potentes bombas que le hacen circular a través de un tubo y una manguera flexible
4
I.L. PAYNE: “conventional Rock Bits”, Subsurface Geology in Petroleum Exploration (Colorado
School of Mines. 1958), págs. 637-652; W.M. Boorh y R.M. Porden: “Jet Bits”, ibéd – págs 653-663.
5
“Syllabus on Drilling Muds”, cap. 14 revisado de J.E. Brandley Rotary Drilling Handbook, 5 ed. (Baród
Division National Land Company, Febrero, 1957); T.N. Dunn: “Drilling Fluids”, Subsurface Geology in
Petroleum Exploration (Colorado School of Mines, 1958), págs. 715-738.

hasta la cabeza de inyección, de donde pasa a través de la tubería de perforación hasta la
barrena y vuelve a la superficie por el espacio anular entre la tubería y las paredes del pozo. La
velocidad media de ascensión del lodo en este espacio anular es de 1 m por segundo, pero la
velocidad real en los distintos puntos del recorrido varía ampliamente. Después de atravesar el
vibrador, se puede hacer pasar el lodo por una gran centrifugadora con objeto de recuperar
ingredientes costosos y separar cuerpos perjudiciales como la arena.
El lodo tiene varias importantes funciones además de lubricar la barrena y transportar
el ripio hasta la superficie. En rocas blandas, el mismo lodo, a la velocidad con que sale de la
barrena, puede actuar como agente perforador erosionando el material del fondo del pozo. Si la
circulación se interrumpe, el lodo, a causa de la presencia de materiales coloidales, se melifica
impidiendo que el ripio en movimiento se asiente alrededor de la barrena y la atrape. El lodo,
cuando pasa a través de capas permeables, tiende a depositar en las paredes del pozo una
“costra” que sella el pozo, impidiendo que se pierda más lodo en estas formaciones. Por
desgracia, puede sellar asimismo formaciones con petróleo y gas, y no se puede calcular el
número de yacimientos malogrados por esta causa en el pasado. Ahora es posible contratar los
servicios de ingenieros especializados e instrumentos capaces de identificar estas zonas.
Están en uso distintos instrumentos para identificar la presencia de hidrocarburos, incluso en
cantidades increíblemente pequeñas, en el lodo y el ripio que salen del pozo. La influencia de
la costra de lodo en los diagramas obtenidos con métodos eléctricos, especialmente en los
“micrologs”, es considerable. Esta influencia se describe en el capítulo 4. El papel del peso del
lado para sellar rocas almacén es un gran avance tecnológico que hace posible la penetración
de yacimientos de petróleo y gas de alta presión, que anteriormente causaban erupciones
destrozas con la consecuente pérdida de vidas y equipos.
Los lodos de perforación son de dos tipos principalmente, de agua y de aceite. Los
primeros son los más utilizados, pues los lodos de aceite se emplean principalmente con
propósitos especiales. Los lodos de agua son una mezcla de diversas arcillas y productos
químicos en agua. Los productos químicos se añaden para modificar las propiedades de estas
suspensiones de partículas de arcilla en agua. Pueden añadirse otros productos químicos y
arcillas especiales con propósitos específicos.
Los lodos se fabrican de modo que se ajusten a las condiciones previstas. Para hacer
que el lado aumente de viscosidad si se interrumpe la circulación, puede añadirse bentonita u
otras arcillas. Los lodos que contienen un bajo porcentaje de arcillas, sólido o coloide pueden
tener perdidas altas por filtración, depositando una gruesa costra. Esta situación puede
remediarse añadiendo bentonita, almidón o celulosa. En calizas cavernosas o arenas no
saturadas se puede perder lodo en la formación. Esta “pérdida de circulación” es un serio
problema en la perforación Rotary. Usualmente se puede evitar esta pérdida añadiendo
materiales fibrosos o pastosos, tales como pulpas, serrín, trozos de sacos, cementos
especiales, celofán, tiras de plástico, heno e incluso materiales más extraños.

La perforación de potentes secciones de sal en lodos con agua dulce puede crear
cavernas por disolución de la sal en el lodo. Por tanto, cuando se espere cortar sal debe
saturarse el lodo con sal.6 Esta precaución no sólo evita futuras roturas del entubado, sino que
también permite obtener muestras de la formación.
Cuando los yacimientos contienen gas a alta presión, pueden evitarse las “erupciones”
preparando un lodo de tal densidad que el peso de la columna de fluido en el pozo exceda las
presiones encontradas cuando se penetre esta formación. El agua pura tiene un peso
específico de 1,0. Con arcillas de bajo peso específico puede alcanzarse la cifra de 1,30, pero
con más peso el lodo se hace demasiado viscoso para poderlo bombear. Para la perforación
de formaciones de alta presión se añade al lodo un material pesado, usualmente barita. De
esta forma puede llegar a conseguirse lodos de hasta 2,40 de peso específico. Esta cifra ha
probado ser adecuada en la mayoría de las situaciones.
Para obtener y mantener las cualidades requeridas en el lodo, en el sondeo se dispone
de instrumentos para determinar las distintas características del mismo, tales como peso;
viscosidad, gel, filtrado y salinidad. Los costes del lodo por pozo varían ampliamente,
dependiendo de la profundidad del pozo, peso máximo del lodo, pérdidas de circulación, etc.
Por ejemplo, los costes del lodo en un pozo de 3500 m en Oklahoma podrían ser $ 30000 y los
costes en un pozo de 3500 m en la Costa del Golfo $ 75000. Sólo en los Estados Unidos, las
perforaciones petrolíferas consumen anualmente alrededor de un millón de toneladas de barita,
medio millón de toneladas de bentonita y un cuarto de millón de toneladas de otras arcillas.
En los lodos de aceite se utiliza aceite en lugar de agua como fase líquida. Estos lodos
se usan principalmente para perforar yacimientos de baja presión, formaciones productivas que
contengan, arcillas que hinchen con el agua y para obtener testigos en su estado nativo. Los
lodos de aceite se usan generalmente en áreas de bajas presiones donde no son necesarios
lodos pesados. Estos lados son también útiles para perforar formaciones tales como sal,
anhidritas y arcillas que reaccionan con el agua. La obstrucción de las perforaciones del
entubado por la arcilla es menos probable en los lados de aceite que en el caso de lodos de
agua. Se ha experimentado con un lado de emulsión de agua en aceite que tiene los mismos
usos que el lodo de aceite. Se le atribuyen las ventajas de fácil manejo y de que no es
inflamable.7
El uso del lodo ha sido desplazado en algunas áreas por el aire o el gas. 8 Estos
circulan a presión por el interior de la sarta de la misma forma que el lodo. El ripio es despedido
a la superficie por efecto de la velocidad de la corriente de aire o gas y se descarga a través de
un tubo con su salida lejos de la torre, formándose un cono en el punto de descarga. Las
6
George R. Gray: “Chemicals in Drilling Mud”, Oil and Gas Jour, (15 diciembre, 1958), pág. 96.
7
J.L.Lummus: “Multipurpose” Water – in-Oil Emulsion Mud”, Oil and Gas Jour. (13 diciembre, 1954),
págs: 106 y sigs; G.G. PRIEST y T.O. ALLEN: “Non-plugging Emulsions Useful as Completion and
Well Servicing Fluids”, Jour. Petrol. Technol., vol 10 (marzo, 1958), págs. 11-14.
8
GEORGE .E. CANNON y RALPH A. WATSON: “Review of Air Gas Drilling”, Jour, Petrol. Technol.
vol. 8 (octubre, 1956), págs. 15-19; C.I. MOORE y V.A. LAFAVE: “Air and Gas Drilling”; Jour, Petrol.
Technol. vol 8 (febrero, 1956), págs. 15-16; M.M. BRANTLY: “Drilling”, Jour, Petrol, Technol. Vol. 8
(febrero, 1956), págs. 15-16; M.M. BRANTLY: “Drilling with Gas Air”, Subsurface Geology in
Petroleum, Exploration (Colorado School of Mines, 1958); págs. 735-741.

ventajas de este método de perforación son: 1) eliminación del problema de la pérdida de
circulación; 2) gran aumento (enorme) de la velocidad de perforación; 3) ahorro del 20 al 60 por
ciento en los coste, y 4) más fácil identificación de las zonas con petróleo y gas. Aunque la
mayor parte de los ahorros en los costes son debidos al mayor avance por hora, se han notado
otras economías, especialmente en los costes de barrenas. Sus desventajas son el mayor
riesgo de incendio y explosión (una torre se quemó después de establecer un nuevo record de
penetración), el tamaño de los fragmentos (en polvo) y los problemas presentados por las
formaciones acuíferas. La perforación con aire o gas es practicable únicamente donde 1) los
estratos acuíferos son pocos numerosos y de pequeño volumen; 2) ninguna de las formaciones
penetradas tiene tendencia a desmoronarse, y 3) las presiones de los yacimientos son lo
suficientemente bajas para la seguridad de las operaciones. También se han usado con éxito
los gases quemados y comprimidos de los motores de la torre, disminuyendo los riesgos de
fuego y explosión. Durante 1958 se han hecho muchos experimentos con agentes
“espumantes” y precipitados químicos para contrarrestar los inconvenientes del agua en la
perforación con aire o gas. Los agentes espumantes convierten al agua en neblina y los
precipitados químicos se solidifican en los poros del manto acuífero atravesado por el pozo.
Cuando el pozo es profundo, el cambio de barrena requiere muchas horas. Para sacar
la barrena, primeramente se levanta la sarta hasta que salga el extremo inferior del Nelly y se
colocan unas cuñas para evitar que caiga la sarta. Se desconecta el Nelly y se colocan unas
cuñas para evitar que caiga la sarta. Se desconecta el Nelly con la cabeza de inyección y se
coloca en un pequeño pozo inclinado, el “rat – hole”, preparado para este propósito en uno de
los costados de la torre. A confirmación se levanta la sarta hasta que salgan del pozo tres o
cuatro tubos, se colocan de nuevo las cuñas, se desconectan las tres o cuatro secciones
citadas y se apilan en una esquina de la torre. Otro hombre, el torrero, situado en una
plataforma a la altura del balconcillo, ayuda a apilar los tubos. Al llegar la barrena a la superficie
se reemplaza y se repite toda la operación a la inversa.
Durante el trabajo de la barrena, el perforador tiene ante sí un indicador y por medio de
palancas regula la presión de la barrena contra el fondo del pozo del acuerdo con el carácter y
estructura de la roca. Los sondeos por el método Rotary pueden desviarse considerablemente
de la vertical y seguir girando la barrena. La inclinación llegó a tal grado en pozos torcidos del
Distrito Semínola, Oklahoma, que la profundidad de la sarta era hasta 250 m mayor (en 1200
m) que la profundidad real.9 Obviamente los trabajos geológicos, tales como planos de
contornos de estructuras, basados en datos obtenidos de pozos desviados son de dudoso
valor. Sin embargo, desde los días de Semínola, la técnica de mediciones 10 en pozos se ha
desarrollado hasta tal punto que es ahora posible determinar la posición exacta, horizontal y
verticalmente, de cualquier punto del pozo. La práctica moderna evita en lo posible la
desviación usando la combinación correcta de peso, revoluciones por minutos y tipos de
9
F.H. LAHEE: “Crooked Holes-Next important Problem”. Oil and Gas Tour, (marzo 28, 1929), págs. 38
y sigs.
10
J.B. MURDOCK, Jr.: “Oil Well Surveying”, subsurface Geological Methods (Colorado School of
Mines, 1950), págs 548-591.

barrena. Sin embargo, si la desviación llega a ser demasiado seria para corregirla en esta
forma, puede volverse a la vertical usando una cuña, (fig. 2-6), que se coloca en el pozo para
dirigir la barrena en la dirección deseada. 11
No sólo se ha aprendido a evitar la desviación de los pozos 12 sino que también se ha
desarrollado la técnica para desviar pozos cuando se desee. Una aplicación muy útil de esta
técnica es su uso para “mater” pozos que hayan escapado fuera del dominio, perforando un
nuevo pozo que lo intercepte en profundidad y entonces bombear agua o lodo hasta
dominarlo.13 Por medio de la perforación direccional desde un solo punto, tal como una torre
flotante, situado en un terreno áspero, en un área de terrenos de algo valor, se pueden hacer
varios sondeos. Se han utilizado pozos en tierra firme para alcanzar yacimientos situados fuera
de la costa en California, Costa del Golfo y en otras partes. Un pozo productor fue perforado
debajo del Pacífico con una longitud total de pozo de 3489 m, una deflexión horizontal de 3124
m y una profundidad vertical de 1293 m; el máximo ángulo con la vertical fue de 75º. 14 Han
sido perforados otros pozos inclinados por debajo del puerto de Los Ángeles, el río Mississippi
y el canal navegable Corpus Christi. También se ha empleado la perforación direccional para
cortar perpendicularmente las fracturas productoras de petróleo de buzamientos agudos en la
formación Spraberry en Texas occidental y para deslizarse a lo largo del plano inclinado de
falla en el campo Domínguez en California.
Las muestras de roca obtenidas durante la perforación son de dos clases, fragmentos y
testigos.15 En el método Rotary los testigos pueden obtenerse de tres formas; con el tubo
sacatestigos convencional, con tubo sacatestigos con cable y con mecatestigos laterales. El
tubo sacatestigos convencional se coloca en la parte inferior de la sarta en lugar de la barrena.
Al girar la sarta, los dientes del tubo sacatestigos cortan un testigo que se recoge en su parte
interior al ir avanzando la perforación. Cuando el tubo está lleno, se saca la sarta y se retira el
testigo. Esta operación requiere mucho tiempo, pero proporciona testigos del máximo diámetro
posible.
El método con cable de cortar testigos evita la necesidad de hacer una maniobra
completa para retirar el testigo. En este método se coloca en el extremo de la sarta un tubo
exterior con una barrena de cola de pescado (o de diamante16). “La perforación ordinaria puede
hacerse en la forma usual dejando caer un tapón por el interior de la tubería que cierre el paso
del testigo a través de la barrena y que dirija la circulación por unas toberas hacía las hojas de
la barrena. Cuando se quiere cortar un testigo se quita el tapón con ayuda de una campana
11
JOHN R. SUMAN: “Drilling, Testing and Completion”, Elements of the Petroleum Industry (American
Institute of Mining and Metallurgical Engineers, Nueva Cork, 1940), págs. 161-180.
12
Harry C. Kent: “Directional Drilling”, Subsurface Geology in Petroleum Exploration (Colorado School
of Mines, 1958), págs. 677-694.
13
GORDON B. NICHOLSON: “Directional Hole Tames Canadian Wild Well”, World Oil, vol. 128
(octubre, 1948), págs. 213 y sigs.
14
GORDON JACKSON: “Directional Drilling Today”, Tour. Petrol. Technol., vol. 5 (septiembre, 1953),
pág. 28.
15
H.L. LANDUA: “Applications of. Coring”, Subsurface Geology in Petroleum Exploration (Colorado
School of Mines, 1958), págs. 711-714; WILLIAM M. KOEN: “Core Drilling, ibid., págs. 695-710
16
HOSKINS HARTWELL: “New Wire Line Diamong Core Drill Saves Round Trip Costs”, Oil and Gas
Tour. (27 diciembre, 1951), págs. 76 y sigs.

Fig. 2-6 – Cuña desviadora; izquierda: la barrena empieza a entrar por la parte
superior de la cuña. Derecha: la barrena y una lastrabarrena; desviados por la
cuña, perforan un nuevo pozo. Cortesía de la Escuela de Minas de Colorado.
Según LeRoy y Crain

(overshol) que pasa a través de la tubería unida a un cable. Entonces se mete por el interior de
la tubería un tubo sacatestigos interior con una válvula en su parte superior, que
automáticamente queda fijado al tubo exterior. Después de cortar el testigo se recupera el tubo
sacatestigos por medio de la misma campana y cable usados para retirar el tapón de la
barrena.”.17
La toma de testigos laterales ha demostrado ser muy practicable y, en consecuencia,
se han desarrollado varios instrumentos y métodos diferentes. 18 El tipo de percusión o de bala
es el más aplicado. Se dispara el tubo contra la pared, de donde se retira con ayuda de un
cable unido a un extremo de la “bala”. Los testigos laterales tienen la desventaja de estar más
lavados por el filtrado del lodo que los tomados directamente de la formación. En las
formaciones duras no se toman generalmente testigos laterales.
En la práctica no se cortan por lo general testigos laterales hasta después de perforar
el pozo y hacer los diagramas eléctricos del mismo. Entonces se toman testigos en los puntos
indicados por el estudio del diagrama eléctrico o en los puntos en que los testigos normales
fueron inadecuados por la falta de secciones o recuperaciones incompletas. Las ventajas de
este método son varias.19 La toma de un testigo continuo hasta el fondo del pozo es cara y a
menudo innecesaria. Pero terminando primero el pozo y examinando después las partes
críticas (determinadas mediante el diagrama eléctrico) con testigos laterales, pueden obtenerse
datos adecuados respecto a porosidades, saturación, contactos, facies y otros rasgos con un
gasto mínimo. Además los equipos y personal necesarios tienen que estar en el sondeo
durante un período breve, en lugar de tener que visitar el sondeo periódicamente.
Además de anotar los datos concernientes a los tiempos de perforación, el perforador
debe llevar un libro donde registre su identificación de los fragmentos y testigos cortados.
Mucho más importante, no obstante, son los diagramas eléctricos. En el capítulo 4 se describe
la forma de obtener y utilizar los diagramas eléctricos y de otras clases.
La práctica usual en la perforación rotary es cerrar la entrada a las aguas de la
superficie mediante una sarta relativamente corta de entubado y después perforar hasta el
fondo sin volver a entubar. Sin embargo, si el pozo ha de alcanzar profundidades de 4,500 m o
más, se puede colocar una sarta intermedia de entubación. El lodo que llena constantemente el
pozo evita los derrumbamientos de las paredes. Si se encuentra petróleo o gas, se mete una
tubería de revestimiento hasta la zona productiva, cementándola para fijarla, y se bombea fuera
el lodo.
Las ventajas del método rotary sobre el de percusión son tantas que éste ha sido
desplazado por el primero en la mayoría de las áreas, especialmente si los sondeos son
profundos. La necesidad de introducir repetidamente sartas de entubado y continuar la
perforación con un diámetro menor constituye una severa limitación en las profundidades
17
JOHN R. SUMAN: “Drilling, Testing and Completion”, Elements of the Petroleum Industry (American
Institute of Ming and Metallurgical Engineers, Nueva Cork, 1940), págs. 181-183)..
18
J.E. KASTROP: “Sidewall Sampling Tools and Techniques”, World Oil, vol. 128, parte 1 (noviembre,
1948), págs. 100 y sigs, parte 2 (diciembre, 1948), págs. 76 y sigs.
19
H. J.EE FLOOD: “Sidewall Coring in the Gulf Coast Area”, Petrol. Engineer , vol. 12 (marzo, 1941),
págs. 156-157.

alcanzables con el método de percusión. Muy pocos pozos por percusión han sobrepasado los
1500 m y el pozo más profundo conocido de este tipo alcanzó los 3077 m. 20 Por otro lado, no
hay límite absoluto conocido de la profundidad a que pueden llegar los pozos rotary. Pozos
más profundos que los perforados actualmente exigirán equipos mayores y más pesados y
costosos. El límite de profundidad es puramente económico; cuando los costes de perforación
sobrepasen los posibles beneficios, no habrá justificación para continuar.
Otras ventajas del método rotary son el taponamiento de arenas acuíferas sin tener que
recurrir al entubado, desprendimientos mucho menores, menor riesgo de explosiones, menor
coste por metro en pozos profundos, mayor velocidad (hasta 750 m por día) en rocas blandas
yt la facilidad en el corte de testigos y toma de diagramas eléctricos.
La investigación es constante en su intento de aumentar la eficiencia de las
operaciones de perforación. Durante años los laboratorios han estado trabajando para lograr
una barrena que combinara las ventajas del método de percusión (principalmente mayor
velocidad de penetración en rocas duras) con las del rotary. El último perfeccionamiento es una
barrena que, además de la rotación convencional, golpea el fondo del pozo de 300 a 1000
veces por minuto. El lado acciona la barrena por medio de un dispositivo de válvula pistón-
martillo.
La pérdida de la energía necesaria para mover la barrena en el fondo del pozo
haciendo girar la tubería en la superficie es directamente proporcional a la profundidad. Mucho
más eficiente en este aspecto es la tuboperforación, en la que gira únicamente la barrena
accionada por la corriente de lado bombeada a través de una tubería no giratoria. La energía
hidráulica de la corriente de lodo se convierte en energía rotatoria mediante una turbina alojada
en un cilindro colocado en el extremo interior de la tubería. Aunque los primeros ensayos de
este método fueron llevados a cabo en California hace unos treinta años, 21 han sido los rusos
quienes lo han perfeccionado hasta el punto de que se ha convertido en el método normal de
perforación en su país. Un observador americano en un campo petrolífero ruso ha declarado
que la tuboperforación es de 4 a 12 veces más rápida que el método rotary. 22 En consecuencia
fue introducido en los Estados Unidos el método ruso con modificaciones de origen francés y
ahora esta siendo ensayado. Según las primeras conclusiones, las velocidades de penetración
son mayores, pero los metros por barrena son menos. 23 Hay quienes creen que la
tuboperforación desplazará al método rotary de la misma forma que el rotary desplazó al
método de percusión.
20
F.M. VAN TULY y W.S. LEVINGS: “Revolution of Petroleum Geology in 1945”, Quarterly Colo.
School of Mines, vol. 41 (Julio, 1947), pág. 10.
21
W.R. POSTLEWAITE: “What’s Happening to Turbodrill Development”, World Oil (octubre, 1955),
págs. 156-160.
22
JOHN B. O’CONNOR: “Turbodrills for American Drilling”, Monitor, vol. 1 (noviembre, 1956), pág.
4.
23
J.A. MITCHELL: “How Are Turbodrills Performing, Oil and Gas Tour. (8 julio, 1957), págs. 106 y
sigs.; E. LAWSON LOMAX; “Comparison: Turbodrill and Conventional Bit”, Oil and Gas Jour. (3
marzo, 1958), págs. 133 y sigs.; J.B. O’ CONNOR: “Turbine Drillings”, Subsurface Geology in
Petroleum Exploration (Colorado School of Mines, 1958) págs. 665-675.

PROFUNDIDADES ALCANZADAS. Se desconocen la fecha y profundidad del primer
pozo perforado. Goodrich24 menciona un pozo situado en China que alcanzó los 135 m hacia el
año 221 a J.C. En 1854 los pozos pasaban de los 600 m; un pozo artesiano en St. Louis llegó a
los 669 m en aquel año. En 1928 el pozo más profundo era uno productivo en Texas occidental
con profundidad de 2598 m. Treinta años más tarde el pozo más profundo estaba en el
Condado Pecos. Texas occidental, que en octubre de 1958 alcanzó una profundidad total de
7715 m. En esta fecha el pozo productivo más profundo del mundo estaba en el sur de
Luisiana que explotaba una zona entre 6321,8 y 6323 m. Originalmente había establecido el
record mundial (6879 m) y había producido petróleo entre 6536 y 6542 m, pero inconvenientes
causados por arenas determinaron el abandono del nivel más profundo.
Aparentemente nada puede evitar el establecimiento continuo de records de
profundidad (excepto la necesidad de equipos más pesados y costosos y de penetración
completa de la acción de rocas sedimentarias). Como la profundidad máxima del basamento
rocoso en las provincias de la Costa del Golfo y California está comprendida en algún punto
entre los 10000 y 15000 m o quizá más, podemos esperar que continúen superándose marcas
en tanto que el precio del petróleo justifique exploraciones tan costosas.
PUESTA EN PRODUCCION DE UN POZO. Después de alcanzar una roca almacén
potencial, es posible que sea necesario invertir hasta dos tercios del coste original de
perforación en la obtención de datos y en las pruebas para determinar las posibilidades de
producción de la formación.25 Los factores a determinar son la porosidad, permeabilidad,
potencia de las partes productivas de la roca almacén, análisis de los hidrocarburos presentes
y volumen del agua fósil (singenética con el petróleo). Estos datos básicos se obtienen
principalmente por el examen en el laboratorio de los testigos cortados en la roca almacén. Es
una práctica cada día más común cortar un testigo continuo de toda la roca almacén. La
información así obtenida es fundamental para determinar la capacidad de producción del pozo
y para estimar la situación de las reservas.
El cálculo de la producción inicial de un pozo es una operación rutinaria. Si el pozo
fluye, se mide su producción durante un período dado de tiempo y se determina o estima su
producción durante veinticuatro horas. La marca de producción inicial parece ser la de un pozo
perforado en 1926 en la bolsa Yates en Texas occidental con una producción superior a los 32
millones de litros por día. En un pozo a percusión que no fluya puede estimarse su producción
introduciendo la cuchara y anotando la cantidad que puede retirarse por hora sin que baje el
nivel estático del fluido en el pozo. El procedimiento a seguir en un pozo rotary es
necesariamente completamente distinto. En el momento de penetrar la roca almacén, el pozo
está generalmente sin entubar por debajo de la zona de aguas superficiales y lleno de lodo. En
los primeros tiempos de la perforación rotary era necesario entubar por completo el pozo y
retirar de él todo el lodo antes de poder determinar su capacidad de producción. A menudo era
24
H.B. GOODRICH: “Early Exploration Methods”, World Petrol., vol. 10 (mayo, 1939), pág. 32.
25
“Testing Costs Money”, The Link, vol. 12 (abril, 1947), págs. 12-15; J.E. ECKEL: “Well Completion
Methods”, Subsurface Geology In petroleum. Exploration (Colorado School of Mines, 1958), págs. 763-
775.

omitida tal prueba a causa del tiempo y gastos necesarios, y no cabe duda de que quedaron
sin explotar muchos yacimientos capaces de producir petróleo o gas en cantidades comerciales
en aquel período. En 1920 se hicieron las primeras pruebas de producción usando la tubería de
perforación.
“Una prueba con la tubería de perforación es una puesta en producción temporal del
pozo. Esta prueba se hace usualmente por una o ambas de las siguientes razones: 1) para
determinar el contenido producible de fluidos de una formación, y 2) para determinar la
capacidad de producción de una formación. 26 También permite determinar la presión de los
fluidos del yacimiento. En estas pruebas27 la tubería de perforación actúa como tubería de
conducción y ovita la necesidad de entubar el pozo y sacar el lodo. Se introduce una sarta
vacía de tubería de perforación con una válvula en su parte inferior y un obturador (packer) que
se asienta justamente encima de la zona que va a ser comprobada. El obturador aisla por
completo la zona a probar de la columna de lodo del pozo de forma que, cuando se abra la
válvula, los fluidos del yacimiento fluyan hacia la tubería de perforación vacía. Esta corriente se
establece por la diferencia de presión entre la del fluido del yacimiento, que es
aproximadamente 0,685 kg por metro de profundidad, 28 y la del interior de la tubería, que es la
atmosférica.
En circunstancias iguales, la cantidad de fluido que entra en el pozo es directamente
proporcional a la permeabilidad de la roca almacén. Tres métodos para aumentar la
permeabilidad de la roca cercana al pozo son la acidificación, 29 la fracturación por explosión30 y
la fracturación hidráulica.31 No sólo producen estos métodos una permeabilidad adicional, en la
roca vecina al pozo, sino que también pueden abrir un sistema de fracturas no cortado por el
sondeo. La unión del pozo con las fracturas naturales de la “copa almacén aumenta la entrada
de petróleo en el pozo. En el caso en que el yacimiento no sea la roca misma sino las fracturas
26
W. MARSHALL BLACK: “A review of Drill-Stem Testing Techniques and Analysis”, Jour. Petrol.
Technol., vol. 8 (junio, 1956), pág. 21.
27
W.A. Wallace: “Formation Testing”, Subsurface Geologic Methods, 1950, págs. 731-746.
28
JOHN R. SUMAN: “Drilling Testing, and Completion”, Elements of the Petroleum Industry (American
Institute of Mining and Metallurgical Engineers, Nueva Cork, 1940), pág. 201.
29
E. DEGOLYER Y HAROLD VANCE: ·Bibliography on Petroleum Industry”, Bull. Agr. And Mech.
Coll. Texas, 83 (1944), págs. 460-461 (25 referencias).
30
Ibid., págs. 528/-530 (69 referencias); PAUL W. FITZGERALD: “A Review of the Chemical
Treatment of Wells”, Tour, Petrol, Technol., vol. 5 (septiembre, 1953), págs. 11-13; L. W. LEROY:
“Well Acidization”, Subsurface Geology Methods (1950). Págs. 750-760).
31
M. KING HUBRERT y DAVID G. WILLIS: “mechanics of Hydraulic Fracturing”, Jour. Petrol.
Technol., vol. 9 (junio, 1957), págs. 153-166; ROSCOE C. CLARK: “What Size Fractures”, World Oil
(mayo, 1956), págs. 159 y sigs; R. E. HURST, J.M. MOORE, y D.E. RAMSEY: “Development and
Application of “Frac” Treatments in the Permian Basin”, Jour. Petrol. Technol., vol 7 (abril, 1955), págs.
58-65; L.E. WILSEY y W.G. BEARDEN: “Reservoir Fracturing – a Method of Oil Recovery from
Extremely Low Permeability Formations”, Jour. Petrol. Technol., vol. 6 (agosto, 1954), págs. 21-27;
Warren L. Sallee Y Fred E. RUGG, “Artificial Formation Fracturing in Southern Iklahoma and Nort-
Central TEXAS”, Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 37(noviembre, 1953), págs. 2539-2550; W.E.
HASSEBROEK: “Hydrafrac Treatment”, Subsurface Geologic Methods (1950), págs. 723-731; C. J.
Hauck: “Formation Fracture Operations in Ohio”, Gas Supply, Transmission and Storage Conference (9-
10 mayo, 1955), Pittsburgh, Pennsylvania, Operating Section, American Gas Association, págs. 1-12;
Wendell S. Moore: “Fracturing in Eastern United States”, Am. Petrol. Inst. Spring Meeting of. Eastern
District (11-13 mayo, 1955), Reimpresión artículos 826-26-B; “Elements of Hydraulic Fracturing”,
Halliburton Oil Well Cementing Company, 2º ed. Duncan, Iklahoma (enero, 1958), Págs. 1-23

que atraviesan esta roca, las explosiones, acidificación o fracturación de la formación pueden
convertir un pozo seco en un pozo comercial.
La fracturación por explosión se consigue detonando dentro del pozo una carga de
nitroglicerina. La explosión quebranta la roca hasta una distancia considerable, produciendo
muchos frentes por los que pueden fluir petróleo. La acidificación es la introducción a presión
de grandes cantidades de ácido clorhídrico en rocas almacén de carbonatos. Este ácido
contiene un inhibidor que disminuye el efecto de corrosión sobre el entubado y herramientas de
acero. La roca de carbonatos es, sin embargo, atacada por el ácido hasta alguna distancia del
pozo. La introducción de esta técnica produjo la revitalización de muchos yacimientos en
calizas, con una segunda fase de producción comparable en magnitud a la de la fase inicial.
La fracturación hidráulica de formaciones productivas es el más moderno de estos tres
métodos de ampliar la superficie de entrada de fluidos, pero está recuperando el tiempo
perdido con una rapidez sensacional. Se empleó este método por primera vez en 1949, pero
antes de los cinco años se habían hecho 30000 aplicaciones de este proceso. Consiste en la
introducción a alta presión en la roca almacén de un fluido que contiene partículas sólidas en
suspensión, usualmente de arena. Esta mezcla produce nuevas fracturas o es forzada en las
grietas y fracturas preexistentes a tal presión que dichas fisuras se agrandan y extienden. La
arena se deposita en las grietas manteniéndolas abiertas para que el petróleo pueda fluir a
través de ellas libremente.
Inicialmente la fracturación hidráulica se hacía con un gel viscoso, que posteriormente
se adelgazaba poniéndolo en contacto con una solución, “rompedora” del gel. Aunque aún se
usa el gel ha sido desplazado casi enteramente por otros fluidos. Estos influyen aceites
refinados, petróleos brutos, agua, emulsión de agua en aceite y ácido clorhídrico en varias
formas. Aunque el ácido se usa algunas veces en areniscas cuyo cemento es carbonato
cálcico, su aplicación predominante es en yacimientos en rocas de carbonatos. En este caso el
tratamiento combina la acidificación con la fracturación. El procedimiento usual en una
operación de fracturación es hacer pasar el aceite o el agua (o quizás el ácido) por un
mezclador, donde se le añade la arena. Desde la máquina mezcladora la mezcla fluido – arena
es aspirada por una poderosas bombas, que la introducen en el pozo y la fuerzan dentro de la
roca almacén. El mezclador y las bombas están montados sobre camiones. Las presiones de
inyección en la superficie varían ampliamente desde unos pocos kilogramos hasta 700
kilogramos por centímetro cuadrado. Las presiones en el fondo del pozo varían de acuerdo con
la densidad del fluido, la profundidad del pozo y las pérdidas de presión por fricción en la
tubería.
La fracturación de rocas almacén ha alcanzado un éxito notable lo mismo en la
renovación de viejos campos como en el aumento de producción inicial en campos nuevos. Los
yacimientos en las arenas lenticulares a poca profundidad del este de Kansas o Oklahoma se
han revalorizado. Pozos con una producción diaria de 500 litros o menos dan así producciones
diarias de 8000 a 15000 litros. El pozo descubridor del viejo campo Cushing al nordeste de
Oklahoma que había sido abandonado, fue abierto de nuevo y después de un tratamiento de

fracturación ha vuelto a ser productivo con una producción inicial diaria de 103000 litros.32
Como regla general la producción que sigue inmediatamente a un tratamiento por fracturación
disminuye rápidamente, como pasa con la producción inicial diaria de un pozo recién perforado.
Por tal razón no pueden extrapolarse estas cifras para el futuro.
Algunos yacimientos económicamente marginales o incluso submarginales se han
convertido en comerciales por fracturación. La formación Spraberry, una arenisca fina que se
extiende a lo largo de miles de kilómetros cuadrados al oeste de Texas, contiene petróleo en
fracturas verticales; la introducción del tratamiento de fracturación aumentó enormemente el
potencial económico de este yacimiento.
Se ha estimado que los 13000 tratamientos de fracturación en la cuenca. Permian
llevados a cabo en 1955 han aumentado las reservas recuperables conocidas de esta área en
30000 millones de litros. La caída de producción en Illinois fue frenada y subió en un 13 por
ciento con la aplicación de la fracturación de formaciones en aquel estado.
Sabemos que pueden existir sistemas de fracturas en rocas quebradizas. Se ha visto
que rocas quebradizas tales como el granito y el pedernal así como areniscas y calizas
compactas, pueden contener petróleo en fracturas donde existen las condiciones necesarias
para su formación y acumulación. Los pozos comerciales de petróleo que producen en rocas
del basamento precambriano en Kansas y rocas del basamento procretáceo en Venezuela y
California demuestran este hecho el tratamiento por fracturación puede aumentar en el futuro el
porcentaje relativo de producción en este tipo de acumulación.
La puesta en producción de un pozo incluye todas las disposiciones tomadas para
transformar una prueba exploratoria en un pozo productor de petróleo o gas. Una vez
demostrado que un pozo puede producir los hidrocarburos suficientes para justificar los gastos
empiezan las operaciones necesarias. Puede seguirse el procedimiento más simple si. El
yacimiento está en una arenisca endurecida o en una caliza compacta. En estas circunstancias
se entuba el pozo desde la superficie hasta el comienzo de la zona productiva o hasta una roca
consolidada superior a dicha zona, donde se cementa 33 para fijar la tubería en posición.
Entonces se introduce una tubería de producción de diámetro menor, por la que ha de subir el
petroleo hasta la superficie, hasta el fondo del pozo que está sin revestir por debajo del asiento
del entubado.
Si la roca almacén es incoherente no es posible producir con el pozo desnudo. Un
método, empleado profusamente en pozos de agua, es introducir grava por debajo del asiento
del entubado para evitar el desplome de las paredes del pozo. Otro método es cementar los
granos sueltos de arena con una resina plástica “en tal forma que quede suficiente porosidad y
permeabilidad..”.34 Otro procedimiento es colocar secciones perforadas en la tubería de
revestimiento frente a los puntos interesantes y cementar la sarta antes de introducir la tubería
32
ANTHONY GIBBON: “Old Falhful Flows Again”, World Oil (octubre, 1956), pág. 108.
33
WILLIAM D. OWSLEY: “Twenty Years of Oil Well Cementing”, Tour, Petrol. Technol., vol. 5
(septiembre, 1953), págs. 17-18.
34
G.G. WRIGHTSMAN y H. H. SPAIN: “Consolidation of Sands in Oil Gas Wells”, Standard Oil
Company, N.J. Tech. Publs. (1947), págs. 141-148.

de producción. Otro método de amplia aplicación es entubar normalmente el pozo, incluido el
nivel productivo, cementar la sarta y después perforar el entubado en los niveles deseados por
medio de balas o cargas huecas.35
Producción de petróleo. Un pozo produce debido a la presión a que están sometidos
los fluidos del yacimiento. Las causas posibles de las presiones de los yacimientos se exponen
en el capítulo 7; los siguientes párrafos describen los tipos y resultados prácticos de esta
presión.
EMPUJE DEBIDO A GAS DISUELTO. El petróleo es forzado a entrar en un pozo por
una de estas tres causas o por una combinación de ellas: empuje debido a gas disuelto,
empuje de una capa de gas, empuje hidráulico. Un pronto reconocimiento del tipo de empuje
presente es esencial para el desarrollo eficiente, de un campo petrolífero. En el empuje por gas
disuelto, la fuerza propulsiva es el gas disuelto en el petróleo que tiende a escapar por la
disminución de presión en el punto de penetración en el pozo. El movimiento producido en el
petróleo por este gas disuelto es análogo a la efervescencia resultante al destapar una botella
de agua carbónica después de agitarla. El empuje por gas disuelto es el tipo menos eficiente
de empuje natural. Nada puede hacerse para gobernar la proposición gas-petróleo; las
presiones del fondo disminuyen rápidamente y la eventual recuperación total puede ser menor
del 20 por ciento.
EMPUJE DEBIDO A UNA CAPA DE GAS. Si el gas yace sobre el petróleo
inmediatamente debajo del techo de la trampa, está comprimido y puede utilizarse para
empujar el petróleo hacia los pozos que corten el yacimiento hacia la base de la zona del
petróleo únicamente por debajo de la capa de gas; es posible mantener una relación gas-
petróleo alta hasta casi el final de la vida de la bolsa. Sin embargo, si el yacimiento no se
desarrolla sistemáticamente, permitiéndose escapes de gas, se perderá una proporción
indebida de petróleo. La recuperación en un campo con capa de gas es del 40 al 502 por
ciento.
Normalmente el gas contiene además de metano otros hidrocarburos en forma de
vapor que pueden ser separados comprimiendo el gas. Un ejemplo bien conocido es la
gasolina natural. Sin embargo, a altas presiones como las que existen en los campos más
profundos de la Costa del Golfo y en otras partes del mundo, la densidad del gas aumenta y la
del petróleo disminuye hasta que forman una sola fase y son indistinguibles dentro del
yacimiento. Son los llamados yacimientos condensados retrógrados; retrógrados porque una
disminución en lugar de un aumento de la presión provoca la condensación de los
hidrocarburos líquidos. Cuando los fluidos de estos yacimientos llegan a la superficie y se
retiran los productos condensados, queda un gran volumen de gas residual. La práctica
moderna es establecer un “ciclo” con este gas comprimiéndolo y reinyectándolo en el
yacimiento. Así al mantener la presión adecuada en la capa de gas, se evita la condensación
dentro del yacimiento. Tal condensación impediría la recuperación del petróleo, pues el bajo
35
REGINAD L. ROBINSON y BLAKE M. CALDWELL: “Two Decades of Gun Perforating, Tour,
Petrol, Technol., vol. 5 (septiembre, 1953), págs. 14-16.

porcentaje de saturación líquida en el yacimiento indica que no existe una permeabilidad
efectiva.
EMPUJE HIDROSTÁTICO. La fuerza propulsora más eficiente para provocar la entrada
de petróleo en un pozo es el empuje hidrostático natural del agua subyacente al petróleo
menos denso. En las acumulaciones en anticlinales, los pozos estructuralmente más bajos
alrededor de los flancos del domo son los primeros que encuentran agua; después sube el
plano de contacto petróleo- agua hasta que sólo siguen produciendo petróleo los pozos de la
parte superior del anticlinal y eventualmente también tendrán que ser éstos abandonados al
desplazar el agua al petróleo. En un campo con empuje hidrostático es esencial que la
producción sea llevada a cabo racionalmente para que el agua suba en forma uniforme y con
velocidad suficiente para ocupar los espacios creados por la salida de los hidrocarburos. Es
necesaria una caída apreciable en las presiones del fondo para obtener el gradiente de presión
suficiente para provocar el movimiento del agua. La presión diferencial necesaria depende de
la permeabilidad de la roca almacén; a mayor permeabilidad, menor será la diferencia de
presión necesaria. La recuperación en un yacimiento con empuje hidrostático explotado
racionalmente puede llegar al 80 por ciento. El empuje hidrostático puede ser debido a la
presión hidrostática, a la expansión del agua del yacimiento o a una combinación de ambas.
OTROS EMPUJES. El empuje de la gravedad es un factor importante donde existe una
columna de petróleo de varios miles de metros, como sucede en algunos campos de las
Montañas Rocosas. Más aún, la última parte del petróleo recuperable es debido al drenaje por
gravedad del yacimiento. Otra fuente de energía durante las primeras fases de explotación de
yacimientos que contienen petróleo no saturado es la expansión del petróleo (la presión y
temperatura a las que el gas comienza a desprenderse de la solución).
METODOS DE PRODUCCIÓN.36 Los pozos pueden producir petróleo por surgencia
natural, surgencia inducida o por medios mecánicos. En la mayoría de los yacimientos la
energía es suficiente durante las primeras fases de la explotación para forzar al petróleo en los
pozos hasta la superficie, donde fluye a una batería de tanques. Sin embargo, algunos campos
inicialmente, y casi todos los campos eventualmente, tienen que producir ayudados desde la
superficie. El método más simple es la inyección de gas, en el que se bombea gas natural
hasta el fondo del pozo por el espacio anular entre la tubería de producción y el entubado. El
petróleo acumulado en el pozo es empujado hasta la superficie a través de la tubería de
producción por la fuerza del gas comprimido. La inyección de gas simplemente proporciona al
yacimiento la energía que nunca tuvo o que ya no posee. El gas usado es con frecuencia un
subproducto del petróleo que se ha separado en la superficie. Durante la comprensión del gas
toda la gasolina presente (gas “húmedo”) se separa antes de reinyectar el gas en el yacimiento.
Si la producción local de gas es inadecuada, puede usarse gas natural procedente de otros
36
C.V. MILLIKAN: “Production Practice”, Elements of the Petroleum, Industry (American Institute of
Ming and Metallurgical Engineers, 1940), págs. 260-270; MORRIS MUSKAT: Physical Principles of Oil
Production (McGraw-Hill, Nueva York, 1949); S.J. PIRSON: Elements of Oil Reservoir Engineering
(McGraw-Hill, 1950); J.C. CALHOUN: Fundamentals of Reservoir Engineering (University of
Oklahoma Press, 1953); Primer Of Oil and Gas Production (American Petroleum Institute, 1954).

campos. Puede usarse aire en la misma forma, pero tiene las grandes desventajas de atacar
los metales con los que se pone en contacto y de formar una mezcla altamente explosiva.
El método más común de producir petróleo en pozos sin surgencia natural es con una
bomba que levanta mecánicamente los fluidos del yacimiento. Se introduce un cilindro en el
pozo con ayuda de una sarta de varillas sólidas de acero, conocidas con el nombre de “sucker
rods” (varillas aspirantes). El movimiento alternativo de estas varillas obliga al petróleo a subir
por la tubería hasta la superficie. Este movimiento vertical puede conseguirse por medio de un
balancín movido por un motor o con un crio de bombeo unido a una fuente motriz central por
medio de “varillas de transmisión”.
Algunos petróleos, especialmente en algunos puntos de California, son demasiados
densos y viscosos para que entren en los pozos en volumen adecuado. Ha resultado práctico
calentar estos petróleos en el mismo subsuelo para aumentar su fluidez y régimen de
producción.37 El método más usado es introducir una unidad calefactora en los pozos en
producción; si la producción aumenta un mínimo de 800 litros diarios el proyecto es económico.
La unidad calefactora puede estar calentada por una resistencia eléctrica o por la circulación de
agua caliente. Otro método es la combustión in situ. Se prende fuego a un pozo y el calor de la
combustión se propaga a través de toda la formación. La ignición se provoca por medios
químicos; el fuego se mantiene forzando aire comprimido en el pozo de inyección. Podría
también usarse explosiones nucleares subterráneas para calentar estos petróleos pesados. 38
SUSTANCIAS QUE PUEDE PRODUCIR UN POZO. Pueden producirse una
considerable variedad de materias en los pozos petrolíferos además de los hidrocarburos
líquidos y gaseosos. El mismo gas natural puede contener como impurezas una o más
sustancias no orgánicas.39 La más abundante de estas impurezas es el ácido sulfhídrico, que
comunica al gas un olor característico. Una pequeña cantidad de este compuesto se considera
una ventaja, pues permite identificar las fugas que se produzcan. Una cantidad mayor, sin
embargo, hace al gas molesto de manejar y difícil de vender. Tal gas se conoce como “gas
agrio” y se usa para la fabricación del negro de humo. Durante la segunda Guerra Mundial las
necesidades de azufre llegaron a ser tan grandes en los Estados Unidos y Canadá que se
instalaron plantas de recuperación de azufre en áreas de gas agrio (y crudos agrios) en ambos
países.
Unos pocos gases naturales contienen helio. Es interesante recordar que este
elemento se encuentra en cantidades comerciales en ciertos campos de gas de Texis,
Oklahoma, Colorado y UTA, pero no se ha encontrado aún en tal volumen en ninguna otra
37
H. WALTER: “Application of Heat for Recovery of Oil: Field Test Results and Possibility of Profitable
Operation”, Jour, Petrol, Technol, vol. 9 (febrero, 1957), págs. 16-22; BRUCE F. GRANT y STEFAN E.
SZASZ: “Development of Underground Heat Wave For Oil Recovery”, Jour, Petrol, Techno, vol. 6
(mayo, 1954), páginas 23-33.
38
“Promise in buried Atom Blasts”, Business Wek (22 marzo, 1958), pág. 28.
39
C.E. DOBBIN: “Geology of Natural Gases Rich in Helium, Nitrogen, Carbon Dioxide, and Hydrogen
Sulfide”, Geology of Natural Gas (American Association of Petroleum Geologists, 1935), págs. 1053-
1072; C.C. ANDERSON y H.H. HINSON: “Helium-Bearing Natural Gases of the United States”, U.S.
Bur. Mines Bull. 486 (1951), págs. 1-141-

parte del mundo.40 También se ha encontrado nitrógeno en algunos gases naturales. En estos
últimos años ha acontecido no sólo el descubrimiento, sino también el desarrollo comercial del
gas dióxido de carbono que se encuentra en yacimientos naturales en el sudoeste. 41
El dióxido de carbono natural se emplea en la manufactura del hielo seco. A causa del
gran efecto refrigerante en la expansión del dióxido de carbono, las tuberías de la superficie de
los pozos que producen un volumen apreciable de este gas se recubren de una capa de
escarcha. En Nuevo Méjico existen dos campos de dióxido de carbono y un campo al menos
en cada uno de los estados de Colorado, Utha y California. El origen de los gases que no son
hidrocarburos se expone en el capítulo 5 bajo el epígrafe “Origen del gas natural”.
Los hidrocarburos líquidos pueden contener hidrocarburos sólidos en solución que se
separan al alcanzar la superficie, taponando las tuberías y los cabezales de pozos. Los
hidrocarburos parafínicos y el bitumen42 son molestos en este aspecto.
Sustancia accesoria más abundante es el agua. Muchos pozos, especialmente en sus
años de declive, producen vastas cantidades de agua salada, que constituyen un serio
problema. Son corrosivas, lo que obliga a reemplazar con frecuencia el entubado, tuberías y
vávulas o pueden estar saturadas con lo que la sal tiende a precipitarse al alcanzar la
superficie. En todo caso el agua producida con el petróleo es una fuente de molestias
continuas.
Si la roca almacén es una arena incoherente o una arenisca pobremente cementada, el
petróleo o el gas producido contienen grandes cantidades de arena. En algunos casos la arena
ha llegado a perforar las tuberías y cabezas de producción. En la superficie la arena plantea el
problema de eliminarla. Algunos pozos petrolíferos europeos tienen grandes montones de
arena inmediatamente adyacentes.
MANTENIMIENTO DE LA PRESIÓN DEL YACIMIENTO. La práctica moderna es
mantener las presiones del yacimiento en sus valores originales bombeando gas o agua en el
yacimiento a medida que se retiran los hidrocarburos. Esta práctica tiene la ventaja no sólo de
retrasar la caída de producción en pozos individuales y aumentar considerablemente la
recuperación total, sino también la de conservar un gas que de otra forma se perdería y
eliminar las aguas saladas que podrían contaminar las aguas potables de la superficie.
Puesto que no fue mantenida la presión en los campos primitivos, es necesario volver a
estas áreas con métodos de recuperación secundaria, que se estudian en el capítulo “Reservas
futuras de petróleo” del libro Petroleum Geology of Word Oil Fields. Los principales métodos de
recuperación secundaria son el bombeo de gas (“recompresión con gas”) o agua (“inyección de
40
ANDREW-STEWART: “About Helium”, U.S. Bur, Mines Information Circular 6745 (septiembre,
1933).
41
FRANK E.E. GERMANN: “The Occurrence of. Carbon Dioxide”, Science, vol. 87 (10 junio, 1938),
págs. 513-521; J. CHARLES MILLER: “Discussion of Origin, Occurrence, and the Use of Natural
Carbon Dioxide in the United Status”, Oil and Gas Jour, vol. 25 (9 noviembre, 1933), págs. 19-20;
STERLING B. TALMAGE y A. ANDREAS: “Carbon Dioxide in New Mexico”, N. Mex. Bur. Mines
Bull., 18 (1945), páginas 301-307.
42
G.W. PRECKSHOT; N.G. DELISLE; C.E. COTTRELL, y D.L. KATZ: “Asphaltic Substances in
Crude Oils”, am, Inst, Ming Met. Engrs., T.P. 1514 (1942)

agua”) en el yacimiento. De hecho, la recuperación secundaria ha sido definida como
“mantenimiento diferido de la presión.43
En el mantenimiento de la presión mediante inyección de gas se habilitan algunos de
los pozos del campo, como pozos de inyección para su bombeo. El gas es usualmente del
mismo campo, pero puede usarse también gas de otros campos. En la isla Babrain del Golfo
Pérsico se emplea una combinación muy eficiente. Aquí el gas (para el que no existe mercado)
se lleva a la superficie desde un yacimiento inferior al del petróleo y se inyecta inmediatamente
en el yacimiento de petróleo. Como la presión natural del gas es mayor que la del yacimiento
de petróleo, no es necesaria una compresión adicional en la superficie.
El espacio de tiempo entre el desarrollo del campo y las primeras actividade4s para el
mantenimiento de la presión está acortándose. Así la inyección de gas ha sido llevada a cabo
en el campo relativamente nuevo Abqaiq de Arabia Saudita desde 1954 y la inyección empezó
en 1958 en el campo Ghawar, aún más reciente, situado a unos 30 km al sudoeste. La mayor
planta compresora de reinyección construida hasta ahora está a 11 km de la costa en el Lago
Maracaibo, Venezuela. Está situada sobre una plataforma de hormigón tan grande como un
campo de fútbol; la profundidad del agua es de 18 m. Se bombean diariamente alrededor de
3800000 m a través de cinco pozos en un yacimiento de petróleo a 1350 m por debajo de la
superficie de lago. El petróleo se produce a través de 59 pozos. “Este proyecto no sólo dará por
resultado una recuperación mucho mayor de petróleo, sino que también se está conservando
una enorme cantidad de gas para el futuro.44 En el tipo de yacimiento con capas de gas, se
espera que el mantenimiento de la presión mediante inyección de gas aumentara la
recuperación total hasta más del doble.45
Se ha llevado a cabo una considerable experimentación sobre el uso de diferentes
tipos de gas de inyección, por ejemplo con gas húmedo, gas enriquecido, gases de
hidrocarburos líquidos como butano y propano, 46 gas a alta presión e incluso nitrógeno. El gas
a alta presión no sólo mantiene la presión del yacimiento, sino que también puede producir un
cambio de hidrocarburos que aumenta la concentración de butano y propano en el petróleo. 47
El nitrógeno atmosférico ha sido utilizando con éxito en el campo Elk Basin de Montana
43
MORRIS MUSKAT: “Secondary Recovery”, Physical Principles of Oil Production (McGraw-Hill,
Nueva Cork, 1949), pág. 645.
44
T.O. EDISON: “Gas Injection Performance Review of. The LL370 Reservoir in the Bolivar Coastal
Field, Venezuela”, Jour, Petrol. Technol., vol. 9 (junio, 1957), página 19.
45
SHELDON F. CRADDOCK: “An Evaluation of Gas Injection in the Emery-West Pool, West Coyote
Field, California”, Jour, Petrol. Technol, vol. 7 (abril, 1956), págs 25-30; B.T. MILLIKEN, Jr.: “Twelve
Years of Gas Injection into Frio Sand”, Jour. Petrol. Technol., vol. 6 (junio, 1954), págs. 11-15; J.B.
JUSTUS, R.V. CASSINGHAM, C.R. BLOMBERG y W.H. ASHBY: “Pressure Maintenance by Gas
Injection in the Brookhaven Field, Mississippi”, Jour. Petrol, Technol., vol 6 (abril, 1954), páginas 43-53;
C.A. DAVIS: “The North Coles Levee Field Pressure maintenance Project”, Jour. Petrol. Technol., vol. 4
(agosto, 1952), págs. 11-21.
46
LOREN II. JENKS, JOHN B. CAMPRELL Y GEORGE G. BINDER, Jr.: “A Field Test of the
Gasdriven Liquid Propane Method of Oil Recovery”, Jour, Petrol, Technol, vol. 9 (febrero, 1957), págs.
34-39
47
H.A. KOCH, Jr.: “High Pressure Gas Injection Is a Success”, World Oil (octubre, 1956), págs. 260-
264.

Wyoming.48 Se utilizó porque el volumen de gas del campo era inadecuado y el campo de gas
más cercano estaba a 160 kilómetros. El nitrógeno se obtenía de la atmósfera quemando gas
local; un volumen de éste da nueve volúmenes de nitrógeno.
La inyección de agua es aun principalmente un proceso de recuperación secundaria.
Probablemente la principal razón de este hecho es que el agua de la formación no se produce
en volumen apreciable durante los primeros años de un campo petrolíferos y el agua originada
fuera del campo puede ser demasiado cara. Cuando un campo joven produce agua en
cantidades considerables, puede ser inyectada de nuevo en el yacimiento principalmente con el
propósito de solucionar los problemas planteados por ella, pero en el mantenimiento de la
presión es un valioso subproducto. Lo mismo sucede cuando se bombea agua en un
yacimiento, como en Wilmington, California, para impedir la subsidencia de la superficie.
La inyección de agua con el propósito de mantener la presión puede hacerse
simultáneamente a la inyección de gas. De ello tenemos ejemplos en Abqain. Arabia Saudita;
Poza Rica, Méjico49 y Hackberry Field, Luisiana.50
48
J.E. LANG: “Performance of the Elk Basin Tensleep Reservoir with Nitrogen Injection”, Mines Mag.,
vol. 43 (octubre, 1953), págs. 70-73, 80.
49
JOHN C. REIDEL: “Simultaneous Gas and Water Injection in Large Poza Rica Reservoir”, Oil and
Gas Jour, (noviembre, 1955), págs. 120-123.
50
R.L. EVANS y A. E. BARRY: “Unitization, and Water and Injection, Hackberry Field Louisiana”, Oil
and Gas Jour. (abril, 1954), págs. 112-116.

CAPITULO 3
EXPLORACION
Exploración es el término usado en la industria petrolífera par designar la búsqueda de

petróleo. Es la fase anterior al descubrimiento; las actividades posteriores al descubrimiento se
denominan explotación o desarrollo y producción. Este capitulo discute el papel del geólogo en
la exploración, mientras que el próximo trata de producción y geología del subsuelo, pues esta
rama de la geología del petróleo es tan útil en el desarrollo de la producción de petróleo como
en el descubrimiento de yacimientos nuevos.
OBSERVACIONES EN LA SUPERFICIE
Las observaciones en la superficie se emplean aun donde son posibles; se usan

extensamente en las primeras prospecciones de un territorio nuevo. Los métodos de superficie
incluyen:
1) Determinación de las indicaciones directas de la presencia directa de

hidrocarburos en el subsuelo.
2) Levantamiento de planos geológicos.
3) La utilización de planos y fotografías aéreas.
Indicaciones directas. La indicación directa más importante de la presencia de petróleo o

gas en las rocas es la existencia de filtraciones en la superficie. Otras manifestaciones posibles
son las peculiares a los diapiros salinos de la Costa del Golfo y las “microfiltraciones”.
Filtraciones. Benjamin Silliman definió una vez las filtraciones de petróleo como
“afloramientos naturales de la roca petróleo”. Otras manifestaciones de los hidrocarburos
naturales son las salidas de gas, las rocas impregnadas de petróleo y los asfaltos y ceras
sólidos y semisólidos.
Una filtración activa de petróleo es en realidad un manantial de petróleo cuyo caudal esta
comprendido entre unas pocas gotas y varios cientos de litros por dia. Casi invariablemente
tales salidas están en puntos topográficos bajos donde también se ha acumulado agua. El
petróleo más ligero flota sobre la superficie del agua y la cubre con una película iridiscente. En
casos raros, como en Kirkuk, Irak, son estas salidas lo suficientemente grandes para hacer la
separación y vender el petróleo con provecho comercial.
Las salidas de gas pueden ser detectadas por:
1) Olor, debido a la presencia de compuestos sulfurados.

2) Colores amarillentos en la roca que rodea el orificio, causados por sublimación.
3) Un silbido cuando sale a presión por un orificio reducido.
4) El “fuego eterno” cuando el gas se inflama por medios naturales o artificiales.
5) Rotura de burbujas cuando la salida esta cubierta por lodo o agua.
6) Volcanes de lodo.
Aun sabemos demasiado poco acerca de los volcanes de lodo. Durante cuatro años de
trabajo en el campo en la cuenca Sinu del noroeste de Colombia he visto cientos de volcanes.
Hay dos tipos, el volcán regular de lodo que va formando su cono en forma gradual (y es
parcialmente cuando llueve) y el tipo explosivo. Los volcanes de lodo normales tienen forma de
hormigueros y la altura de un hombre. Durante mi estancia en esta área, una violenta explosión
creo un nuevo lago de lodo de unos 80 metros de diámetro y medio metro de altura. Este lodo
estuvo hirviendo durante medio dia… La mayor costra de lodo que yo he visto esta al este de
Puerto Escondido en la costa del Caribe al noroeste de Colombia. Tiene unos dos kilómetros
de diámetro y 100 de altura. Clavados en este lodo hay grandes bloques y peñascos de hasta
cinco toneladas de peso. De donde procede el lodo de estos volcanes es un misterio; la roca
de la superficie es una arenisca moderadamente dura, pero se encuentra una potente sección
de arcilla pizarrosa a mayor profundidad. En todos los volcanes de lodo que he visto el lodo es
similar en consistencia y color al lodo ordinario.
Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldúa Catedra Hidrocarburos UNMSM EAP. Ing Geologica
Un tipo explosivo de volcán de lodo apareció a dos kilómetros y medio al sur de la costa de
Trinidad en noviembre de 1911 y en dos días creo una isla de más de tres hectáreas. El lodo
contenía fragmentos de arenisca y de arcilla pizarrosa. En el máximo de su actividad los
escarpes de gas se inflamaron, intensificando el espectacular carácter de la erupción. La isla
fue destruida en pocos meses por la erosión subaerea y marina.
Una roca impregnada de petróleo puede ser debida al petróleo que se ha abierto camino
hasta la superficie a través de una masa considerable de roca permeable en lugar de seguir
una simple fisura o puede ser una verdadera roca almacén que haya sido descubierta por la
erosión. En cualquier caso, el petróleo llena los intersticios entre los granos de arena o las
cavidades dispersas por la roca de carbonatos. Las arenas alquitranadas de Athabasca en el
nordeste de Alberta son un ejemplo de areniscas impregnadas. El contenido de asfalto de una
caliza del condado Uvalde, Texas, alcanza el 50% de su volumen. Areniscas y calizas
impregnadas de asfalto son extraídas en varias partes del mundo, molidas y usadas para
asfaltar carreteras.
No existen líneas de demarcación entre aceites muy pesados, asfaltos semisólidos y asfaltos.
Estos hidrocarburos relativamente pesados pueden encontrarse como impregnaciones, en
pequeños yacimientos en la superficie o en grandes “lagos”. Las impregnaciones son
exactamente idénticas a las impregnaciones de petróleo, excepto que los hidrocarburos han
perdido su movilidad. Los pequeños yacimientos superficiales de hidrocarburos alquitranados
son comunes en todo el mundo en áreas de afloramiento de sedimentos marinos terciarios. Un
ejemplo es el famoso Rancho La Brea de Los Ángeles, en el que fueron atrapados muchos
animales, algunos ya extinguidos. Brea y alquitrán son dos de los varios sinónimos aplicados a
los asfaltos semisólidos. Los lagos de pez son grandes depósitos de asfalto. Ejemplos
sobresalientes son el famoso lago de la isla de Trinidad en las Indias Occidentales y el Lago de
Bermúdez en Venezuela Oriental. Este último lago tiene una extensión de 45 hectáreas y se
estima que contiene 6 millones de toneladas de asfalto. Se ha trabajado activamente en el
1891 y 1931.
El asfalto natural es similar al producto de refinería que cubre la mayor parte de la demanda
comercial. Aunque los aceites muy pesados pueden ser “aceites jóvenes” que aun no han
evolucionado en tipos más comunes de petróleo, es probable que los asfaltos sean productos
residuales del petróleo bruto formados por el escape a la atmósfera de los hidrocarburos más
ligeros y volátiles. Es también posible que las reacciones químicas son las aguas del terreno
próximas a la superficie aceleren al proceso de asfaltizacion.
Los geólogos deben también saber reconocer las indicaciones falsas de la presencia de
petróleo o gas. Las películas de oxido de hierro sobre el agua producen un iridiscencia
semejante a la del petróleo. Tales películas son fácilmente identificables, sin embargo, pues se
rompen al agitarlas, mientras que una verdadera película de petróleo no puede ser rota sino
que las bandas coloreadas son arrastradas por lo que se use como agitador. Las filtraciones de
petróleo también pueden ser creadas artificialmente, ya sea por accidente o con ese propósito.
Muchas veces son causadas por fugas de gasolina o gas oil de tanques enterrados o de
oleoductos. Las “filtraciones” de petróleo de muchos pozos de granjas han sido debidas al
generoso uso del aceite de lubricación en las bombas. Podría escribirse un libro sobre las
“filtraciones” maliciosamente creadas en las que se usaron aceites vegetales, aceites de
refinería de diversos grados, y, muy raramente, petróleos crudos importados.
El gas de pantanos es dificil, sino imposible, de distinguir del gas natural. Ambos son
dominantemente metano, CH4. El gas de los pantanos esta originado por la descomposición de
la materia vegetal acumulada en el fondo de pantanos, marismas, ciénagas o lagos. Todo
escape de gas que haya pasado a través de material de este tipo debe ser mirado con
prevención hasta que se demuestre que procede verdaderamente de los estratos rocosos. Los
manantiales de lodo no son volcanes de lodo y no deben confundirse. Un manantial de lodo es
simplemente un manantial en el que el agua brota de una abertura de lodo.
Contrariamente a la opinion popular, la presencia de pizarras bituminosas no es una
indicación de la probable presencia de petróleo en acumulaciones comerciales. Se llaman así
porque pueden extraerse aceite del material orgánico contenido en estas pizarras mediante la
aplicación del calor; la misma cosa puede hacerse con el carbón.
Las filtraciones han sido y pueden ser de extrema importancia para descubrimiento de
yacimientos de petróleo y gas. Su valor en la búsqueda de petróleo ha sido destacado por
DeGolyer y Link. Las áreas donde las filtraciones han jugado un importante papel en el
descubrimiento de petróleo incluyen Pensilvania Oklahoma meridional, la Costa del Golfo,
Wyoming, California, México, Venezuela, Rumania, Oriente Medio, Indias Orientales
Holandesas y otras partes. No todas las regiones con filtraciones son productivas aun, pero la
lista de las áreas con filtraciones no productivas disminuye a medida que se intensifica la
exploración. Madagascar y Nueva Zelanda son ejemplos de áreas con salidas de petróleo, pero
sin producción comercial en el tiempo en que fue escrito este libro. Es de señalar que las
filtraciones son cualitativas pero no cuantitativas de la presencia de petróleo.
Fig. 3-1. Fugas paralela y transversal
El que las filtraciones sean de valor inmediato en el descubrimiento de petróleo, depende de

si dichas filtraciones son paralelas o transversales (fig. 3-1) a la estratificación y, si son
paralelas, si las rocas están suave o abruptamente plegadas. La filtración paralela es el
movimiento a través de la roca almacén por petróleo que se ha escapado de la trampa, quizá
debido a una reciente inclinación. Si los buzamientos son muy suaves, como en America
Central, el “filón” puede estar a muchos kilómetros. La filtración simplemente de evidencia de la
presencia de petróleo en cierta formación, aunque no conduce inmediatamente al
descubrimiento de un yacimiento petrolífero. Sin embargo, si el plegamiento ha sido intenso,
como en la mayoría de las provincias petrolíferas terciarias, la trampa puede ser encontrada
por un pozo perforado a pocos metros de la filtración.
La filtración transversal es debida a una reciente falla u otra fisura que penetra hasta el
mismo yacimiento petrolífero. En este caso el petróleo puede explotarse perforando en la
inmediata vecindad de la filtración; su situación depende del buzamiento de la fisura y
profundidad del yacimiento. Los movimientos transversales de hidrocarburos a través de las
rocas en un flanco del gran anticlinal Kirkuk. En Irak, han producido cientos de fugas, muchas
de las cuales se han inflamado y arden dia y noche. La conexión directa entre estas salidas y el
yacimiento bajo ellas lo prueba el hecho de que mas y mas de estas salidas van cambiando de
gas a medida que la capa de gas avanza hacia abajo con la desaparición del petróleo
producido por los pozos.
Como regla general, pero no invariable, el ciclo del descubrimiento de una región empieza
con la exploración motivada y guiada pos la presencia de filtraciones. La fase siguiente es la
perforación de los anticlinales visibles y la fase final es la búsqueda de la trampa oculta.
Indicaciones en la superficie en la provincia de diapiros del Golfo. Además de los

criterios usuales de la presencia de petróleo, algunos de los diapiros de la costa del golfo están
marcados en la superficie por signos peculiares a este tipo de estructura. Los diapiros son
inmensos diapiros de sal usualmente rematados en su parte superior por una mas de anhidrita-
calcita (sombrero de diapiro) que, en unas pocas localidades contiene azufre nativo. Las rocas
suprayacente esta abombada y la adyacente han sido arrastradas y truncada durante el
movimiento ascendente del prisma. El petróleo puede encontrarse en los estratos superiores
arqueados, en las zonas porosas del sombrero y en las capas truncadas de los flancos.
Indicaciones directas de las presencia de domos salinos bajo la superficie, son además de
manifestaciones de petróleo y gas, barros parafínicos, arcillas sulfuradas, manantiales de agua
salada y afloramientos del sombro del diapiro.
También han resultado valiosas las evidencias indirectas de la presencia de diapiros. El
empuje de la sal ha sido tan reciente en muchos lugares, que la superficie esta arqueada
formando una baja colina que se destaca en la llanura costera. Donde la colina es demasiado
baja para ser reconocible, el drenaje radial hecho por las aguas ha dado la pista. En otro s
lugares, la disolución de la sal cercana a la superficie, seguida por el hundimiento de cavernas,
ha producido una depresión en lugar de una colina. Donde el levantamiento ha ocurrido en un
pasado inmediato la erosión ha truncado el domo dejando ventana y una estructura circular en
el plano geológico, lo que constituye la mejor indicación de la presencia de un domo
estructural. Incluso aunque no hayan sido reconocidos y llevados al plano las diferentes
formaciones, la preferencia de la vegetación por ciertos tipos de rocas puede dar lugar al
desarrollo de vegetaciones en forma de círculos. Hasta 1920 todos los campos petrolíferos en
diapiros salinos fueron descubiertos por uno u otro o una combinación, de estas indicaciones
directas e indirectas de la superficie.
Análisis de suelos. Es una técnica de exploración que se conoce también como

prospección geoquímica. Es un intento de utilizar lo que podría llamarse microfiltraciones como
una guía de yacimientos petrolíferos en la misma forma en que han sido utilizadas las salidas
visibles. El análisis de suelos esta basado en la teoría de que una roca es completamente
impermeable y así los hidrocarburos mas ligeros, especialmente los gases, se abren paso a
través de las rocas de cubierta hasta la superficie. La prospección geoquímica es la evolución
natural de la utilización de las filtraciones de petróleo y gas.
Según esta teoría, no solo escapan los gases hasta la superficie, sino que también se forman
hidrocarburos líquidos y sólidos a partir de estos gases, cuya presencia puede determinarse
mediante técnicas microquímicas. En los análisis de suelos han sido aplicadas muchas
técnicas diferentes buscando evidencia de la existencia de microfiltraciones. El procedimiento
usual es obtener muestras a profundidades variables con ayuda de una broca de suelos y
después determinar químicamente diversas sustancias.
A causa de los varios millones de bacterias oxidantes de hidrocarburos por gramo que se han
encontrado en suelos empapados de petróleo crudo, se ha sugerido que tales bacterias
podrían constituir una señal de la presencia de petróleo escapado de os depósitos naturales
enterrados. Esta posible técnica ha sido llamado prospección petrolífera “microbiológica”. En lo
Estados Unidos esta aun en la fase investigadora, pero Soli informa que la información
microbiológica esta aplicada desde algunos años en Rusia, “donde ha obtenido resonantes
éxitos”. En 1954 fue perforado en California un pozo de exploración a base de un esquema
bacterial favorable, pero no encontró petróleo en cantidad comercial.
Durante los veinte años siguientes al descubrimiento de Spindletop en la costa del Golfo de
Texas, en 1901 la presencia de barros parafínicos jugo un importante papel en la búsqueda de
yacimientos petrolíferos en la búsqueda de yacimientos petrolíferos en diapiros salinos se
suponía que este material céreo contenía hidrocarburos parafínicos escapados de la
acumulación de petróleo en el subsuelo. Se sabe ahora que el barro parafínico es en realidad
pobre en hidrocarburos, peri de alto contenido en carbono orgánico y nitrógeno. Mas aun, es
alto su contenido en hongos fermentos y bacterias (incluidos los tipos que consumen
hidrocarburos), lo que probablemente le de su apariencia cérea el examen espectométrico de
suelos que contienen barros parafínicos ha demostrado que esta siendo atravesado por gas de
petróleo; se ha producido barro parafínico “sintético”, aparentemente análogo al material
natural haciendo pasar una corriente de gas natural y aire a través de una muestra del suelo.
Puede concluirse que el barro parafínico indica la presencia de escapes microscópicos de gas,
pero que dicho material no es en si mismo un hidrocarburo, sino que ha sido por
microorganismos que se alimentan de hidrocarburos.
Además de los análisis químicos y biológicos de las muestras de suelos se están haciendo
también investigaciones usando rayos gamma con el propósito de detectar las moléculas de
hidrocarburos gaseosos que se escapan a través del suelo. Además de las mediciones sobre el
terreno, se han empleado también contadores de centelleo montados en aviones en la
búsqueda de petróleo. Sin embargo un reciente estudio llego a la conclusión de que no existe
relación directa entre la radiactividad de la superficie y el petróleo en el subsuelo. Aunque han
sido recabados algunos descubrimientos por la prospección geoquímica hasta ahora la
aplicaron de estas técnicas ha dado como resultado un descorazonador numero de fallos. La
teoría en que se basa la prospección geoquímica es fundamentalmente sana. Esta técnica
tiene la gran ventaja, en teoría al menos, sobre los demás métodos de exploración hasta ahora
desarrollados de que intente localizar la presencia real de una acumulación de petróleo en el
subsuelo, mientras que todas las demás técnicas de exploración tienen por objeto localizar
trampas en las que pudieran haberse acumulado petróleo o gas. Las inconveniencias del
análisis de suelos como método de exploración también pueden ser vencidas en el futuro pro
un mayor perfeccionamiento del método. Si los análisis de suelos llegan alguna vez a
convertirse en un método práctico, tendrán probablemente sus mejores éxitos en el
descubrimiento de acumulaciones de petróleo en las rocas menos endurecidas, especialmente
las de edad terciaria. Es mucho menos probable que las rocas mas antiguas y compactas
permitan el escape de hidrocarburos hasta la superficie.
Geología de campo. Las campañas geológicas sobre el terreno, que en un tiempo fue la
única técnica del geólogo de petróleos es ahora una de las facetas que debe dominarse. Es
dudoso que la geología de campo desaparezca alguna vez como medio auxiliar en la búsqueda
de petróleo. Se utiliza intensivamente en la exploración de áreas nuevas en el reexamen de
regiones ya conocidas y para comprobar los resultados de las campañas geofísicas.
Los métodos y procedimientos seguidos en una campaña geológica dependen de si se trata
de una campaña de reconocimiento o de estudios detallados de la topografía y estructura de la
región en estudio.
Las campañas de reconocimiento tienen por objeto determinar las perspectivas petrolíferas
de un área relativamente extensa en un espacio limitado de tiempo. Es fundamental en una
campaña de este tipo una base sobre las que se puedan llevar las operaciones. Esta base
puede ser un plano o pueden ser fotografías aéreas. La disposición ideal es tener ambos,
usando pares estereográficos de fotografías en el campo, y transfiriendo los datos del campo
al plano base en la oficina. Cuando no existe un plano base puede emplearse en su lugar un
mosaico de fotografías aéreas. Sino pueden obtenerse fotografías aéreas ni planos adecuados,
el geólogo debe hacerse su propio mapa por triangulación y plancheta, con compás y pasos o
por, otro método.
Las observaciones recogidas y llevadas al plano o anotadas incluyen lo siguiente:
I. Observaciones generales y económicas.
a) accesibilidad de las diversas partes del área.

b) Medios de transporte presente y potenciales.
c) Proveedores locales y situación laboral.
d) Posibilidades del mercado local.
e) Situación de la producción de petróleo o gas más cercano.
f) Situación e historia de todos los pozos perforados en el área y sus
alrededores
II. Observaciones geológicas.
a) Evidencias directas o indirectas de petróleo o gas.

b) Tipo profundidad y distribución de las “mascaras” 22 que oscurecen la
geología de las rocas estratificadas.
c) Distribución de las rocas sedimentarias, ígneas y metamórficas. Edad
de la actividad ígnea y del metamorfismo.
III. Observaciones estratigraficas
a) Espesor de la sección de roca sedimentaria.

b) Presencia y profundidad de las posibles roca madre en sección. Edad
c) Presencia y profundidad de las posibles rocas almacén en sección.
Edad.
d) Presencia de posibles cierres de yacimientos.
e) Posición y carácter de disconformidades.
f) Cambios laterales de facies y especialmente de permeabilidad.
g) Convergencia.
h) Presencia de rocas solubles en sección.
i) Proporción de carbono en los carbones presentes.
IV. Observaciones estructurales.
a) Tamaño y posición de cuencas y de otros rasgos estructurales

regionales.
b) Presencia de anticlinales.
c) Profundidades de las posibles rocas almacén en diferentes partes de
área.
d) Presencia y naturaleza de fallas.
e) Grado y carácter de la fisuración y fracturación de las rocas
quebradizas dentro de las profundidades alcanzables.
El informe resultante contiene todos los datos geológicos y económicos que fueron
obtenidos. También contiene una clasificación de las posibilidades petroliferas25 de las
diferentes partes de la región y recomendaciones respecto a las áreas que merecen un estudio
detallado en algunos casos su inmediata comprobación sin otra nueva exploración geológica.
El objetivo de los estudios detallados de un área relativamente pequeña es determinar la

extensión de una anomalía estructural de la superficie, su magnitud vertical (cierre) y las
profundidades probables de las potenciales rocas almacén. El geólogo levanta un plano
geológico de la superficie y un plano estructural. Las posiciones y altitudes se determinan con
plancheta alidada y mira (fig. 3-2) o con compás y altímetro, determinando las distancias con
pasos o podómetro. Sin embargo, antes o durante el levantamiento, el geólogo debe preparar
una sección estratigráfica detallada que cubra todas las rocas encontradas en el trabajo en la
superficie. Por medio de esta sección es posible reconocer varias capas que pueden utilizarse
para determinaciones de altitudes y para ajustar estas altitudes a un solo plano de referencia
sobre el que pueden dibujarse las líneas de nivel de la estructura.
Un buen geólogo de campo tiene muchos recursos para hacer levantamientos geológicos.
Una cubierta de suelos no impide necesariamente todo conocimiento de las capas cubiertas
por ellos. La vegetación difiere en los suelos jóvenes dependiendo de la litología de las
formaciones de donde proceden.
Fig. 3-2. Levantamiento con plancheta en un área de “topografía árida y geología al desnudo” Cortesía
de la Compañía Standard Oil de California.
Los hormigueros y madrigueras de animales excavadores proporcionan muestras del

material existente bajo la superficie.
La creciente importancia de la paleogeología y paleogeografía en la búsqueda de trampas
estratigráficas significa que hoy en dia el geólogo de campo debe identificar las condiciones de
deposición no solamente de las posibles rocas almacén, sino de las posibles rocas madre y
rocas de cierre. Además debe intentar determinar el origen de los sedimentos clásticos, la
dirección del transporte y los limites deposicionales. La determinación de la dirección del
buzamiento de la estratigrafía cruzada es una ayuda en este aspecto.
Muchas cuencas sedimentarias están cubiertas, en parte al menos, por rocas volcánicas
estratificadas, que incluyen mantos de lava y depósitos piroclásticos tales como capas de
ceniza. La estructura de las rocas sedimentarias cubiertas estará reflejada en las rocas
volcánicas si los plegamientos mayores han tenido lugar después del vulcanismo. Mucho
trabajo de campo puede hacerse en las áreas enmascaradas por rocas volcánicas. Ya no
puede el geólogo del petróleo confinarse exclusivamente a las rocas sedimentarias.
Donde los campos petrolíferos se extienden bajo el mar, los afloramientos en el suelo de los
océanos contienen valiosas informaciones estructurales y estratigráficas. Anteriormente se
enseñaba a buceadores profesionales la forma de tomar lecturas de rumbo y buzamientos de
contactos, pero ahora se emplean geólogos buceadores. Estos geólogos no sólo obtienen
información estructural, sino que también pueden tomar muestras de las formaciones, medir
secciones y llevar a cabo otras facetas de la geología de campo. La geología submarina tiene
una valiosa ayuda en el batómetro, instrumento montado en un barco capaz de obtener perfiles
topográficos exactos. El mas reciente desarrollo en este aspecto es el Sonoprobe, 29 una sonda
de ecos de baja frecuencia con un alto grado de exactitud, que también penetra en los
sedimentos de los fondos de los mares.
Fig. 3-3. Mapa geológico que proporciona información estructural Sinclinal, Anticlinal y superposición
discordante del Terciario. Cortesía de U. S. Geological Survey.
El informe final de una campaña de estudios detallados debe incluir las secciones y otros
datos estratigráficos obtenidos, así como los planos geológico y estructural. Al mismo tiempo
pueden estar trabajando otras ramas del departamento de exploración con lo que se obtienen
una serie de informes que cubren por ejemplo el estudio geofísico de la misma área y un
informe del geólogo del subsuelo respecto a los pozos previamente perforados y sus hallazgos.
Los jefes responsables cotejan estos informes y deciden:
1) Si se debe seguir adelante.

2) Que terrenos se deben denunciar.
3) Donde perforar e primer pozo.
Mientras, el equipo de geología ha empezado otro trabajo.
Planos geológicos. Los planos que muestran la geología de la superficie proporcionan

muchas pistas estructurales. No solo puede determinarse la estructura de las rocas
estratificadas por la presencia de ventanas sino también por la distribución de los afloramientos
de rocas de distintas edades (Fig. 3-3).
En combinación con buenos planos topográficos es posible determinar, por la intersección de
las líneas de nivel con los contactos de formaciones, la altitud del plano estratigráfico de
referencia en puntos diversos y con esta información se puede dibujar un plano estructural de
líneas de nivel.
Planos estructurales. Los planos estructurales muestran, con líneas de nivel (Fig. 3-4) o por
otros medios, anticlinales, sinclinales y fallas. Muchas culminaciones que aparecen en planos
de estructuras con intervalos grandes de líneas de nivel se convierten en pliegues cerrados
cuando se usan intervalos más pequeños. Otros siguen siendo morros estructurales en las
formaciones cercanas a la superficie pero cierran en profundidad, constituyendo posibles
formaciones petrolíferas. Por estas razones los morros estructurales constituyen rasgos
favorables para localizar pozos de exploración.
1720
1730
1770
1740
N
1780
1750
1760 1790
1770
1780 40
11
1790 30
11 130
1800 1800 1 0
4
0 1 2 11
km.
(Intervalo entre curvas de nivel-10 pies) Segun Allan y Valerius (1929)
Fig. 3-4. Mapas de contornos (curvas de nivel) de estructuras. Izquierda: contornos de caliza de la
superficie. Derecha: contornos en una formación del subsuelo. Campo Fairport, Kansas. Cortesía de la
Asociación Americana de Geólogos de Petróleos.
Muchos campos petrolíferos han sido descubiertos perforando anticlinales y otras trampas
estructurales levantadas y descritas por agencias gubernamentales tales como el
Departamento Geológico de Estados Unidos. Incluso hoy en Estados Unidos, después de años
de exploración han sido encontrados criterios que han inducido a perforar pozos exploratorios
con el descubrimiento de campos petrolíferos por un estudio continuado de planos de diversos
tipos previamente publicados.
Planos topográficos. Además de su valor como planos base, los planos topográficos
pueden también proporcionar información estructural de valor.
El geólogo entrenado puede reconocer buzamientos (Fig. 3-5) y los anticlinales pueden ser, y
lo han sido, reconocidos únicamente por observaciones de planos topográficos. Las fallas
pueden ser seguidas por sus escarpes. El reconocimiento de domos recientes por los dibujos
circulares del drenaje ha sido ya mencionado. La interpretación geológica de planos
topográficos es facilitada por el uso del “relieve sombreado”, que se puede ver en los planos
últimamente publicados por el Departamento Geológico de los Estados Unidos. La combinación
del trabajo en el campo y un buen plano topográfico puede hacer posible un plano geológico de
un área mucho mayor que la realmente cubierta por el geólogo en su trabajo.
Fig. 3-5. Mapa topográfico que revela información estructural. La montaña Duffy es evidentemente una
escarpa, buza hacia el nordeste. El intervalo entre líneas es 50 pies. Parte del Cuadrángulo Axial,
Condado Mopffat, Colorado. Departamento Geológico de Estados Unidos.
Fotogeología. La fotogeología es la interpretación geológica de fotografías aéreas. Aunque

las fotografías del terreno tomadas desde aeroplanos fueron consideradas de posible uso en la
exploración petrolífera en Oklahoma en 1982, no llego a ser técnica comun en la búsqueda de
petróleo hasta los años inmediatamente anteriores a la Segunda Guerra Mundial. Existen dos
fases en el uso de las fotografías aéreas:
1) La fotogrametría, que es la transposición a un conjunto coherente y exacto de

los datos que aparecen en varias fotografías individuales que solapan entre si.
2) La interpretación de los rasgos que aparecen en las fotografías en términos de
geología, ingeniería, operaciones militares u otras facetas de interés humano.
Entre las aplicaciones geológicas de las fotografías aéreas están en su empleo en

levantamientos de planos de superficie y estructurales, tanto generales como detallados, en el
estudio de los rasgos de costas, en trabajos estratigráficos y en geología minera y glacial. El
ingeniero las usa para construir planos topográficos, para localizar oleoductos y carreteras con
otros propósitos. El ingeniero agrónomo las usa para levantar planos de suelo y el
departamento administrativo de las compañías petrolíferas para corregir errores en los planos
de pertenencias y para la inspección de propiedades. En la figura 3-6 se muestran las partes
del mundo cubiertas por fotografías aéreas.
Fig. 3-6. Mapamundi que muestra las áreas cubiertas por fotografía aérea, 1957. Cortesía del Profesor
Kira H. Stone, Departamento de Geografía, Universidad de Wisconsin.
Aunque la fotogeología es posible en regiones de caracteres muy diversos, incluyendo

incluso áreas cubiertas de espesos bosques, tiene su máximo valor en aquellas regiones en
que el terreno es de “topografía árida y geología al desnudo”. En estas condiciones es posible
ver no solo las bandas paralelas de rocas sedimentarias (Fig. 3-7) sino también la dirección y
grado de los buzamientos de los estratos rocosos (Fig. 3-8). Pueden dibujarse directamente
planos de estructuras usando técnicas fotogrametricas es posible obtener suficientes datos de
altitudes y potencias estratigráficas para dibujar planos de estructuras con líneas de nivel y
planos de isopacas. Incluso cuando las rocas no están tan bien expuestas, puede obtenerse
información estructural de las fotografías aéreas. Las pistas pueden ser proporcionadas por la
disposición de afloramientos, corrientes de agua, colores de suelos y vegetación (incluso
submarina). Algunas de estas disposiciones, especialmente colores de suelos y vegetación,
pueden no ser visibles sobre el terreno, pero ser muy destacables en las fotografías aéreas.
Las causas principales de la distribución de tonos que aparecen en las fotografías son
diferencias en topografía, humedad del suelo y litología de rocas. En muchos lugares, tales
como Oriente Medio, la provincia de diapiros de la Costa del Golfo, California y Saskatchewan,
la topografía puede reflejar directamente la estructura del subsuelo. Muchas de estas colinas
sobre anticlinales son de suficiente relieve para ser visibles con el estereoscopio. Donde el
relieve es pequeño el drenaje radial36 del área mas alta, los ajustes de corrientes alrededor de
las tierras mas elevadas o halos tonales indican la presencia de una colina baja (Fig. 3-9) Los
halos tonales son bandas oscuras que rodean un área de color mas claro; son causados por el
mayor contenido de humedad de suelo alrededor del pie de la colina. Las fallas pueden estar
indicadas por líneas de fuentes (o zonas de suelos de mayor humedad) o por alineaciones.
Las alineaciones son rasgos lineales que aparecen en las fotografías aéreas. Son debidas al
relieve topográfico, a ajustes de corrientes y vegetación, pero pueden ser el resultado de la
presencia de fallas en el substrato rocoso.
Fig. 3-7. Fotografía aérea que proporciona información estructural. Domo. Cuenca Marfa, Condados
Presidio y Brewster, Texas Occidental. Cortesía de Edgar Tobin Aerial Surveys.
Fig. 3-8 Anticlinal Maverick Springs, Condado Fremont, Wyoming. Extremo sudeste de un anticlinal
asimétrico. Parte del campo petrolífero puede verse justamente al sur de la esquina noroeste del área
central de la estructura. En el núcleo erosionado del anticlinal afloran formaciones del Triasico y Jurasico;
las escarpas laterales son areniscas del Cretaceo. El flanco nordeste del anticlinal buza unos 18°,
mientras que las mismas formaciones en el flanco sudoeste son verticales e incluso tumbadas.*
Fotografía del Departamento Geológico de los Estados Unidos.
En Venezuela oriental tuvo lugar una curiosa aplicación de las fotografías aéreas para el
descubrimiento de petróleo. El domo Santa Rosa fue descubierto por medio de la geofísica,
pero el primer pozo, perforado presumiblemente en la cima del domo, fue un fallo. “La
inspección de fotografías aéreas mostró una mancha oval distinta de vegetación de tonos mas
claros a unos 3km. del pozo seco. Una investigación posterior demostró que este punto mas
claro estaba situado sobre el domo Santa Rosa”. Algunos de los diapiros de la Costa del Golfo
son visibles en la fotografías por la distribución circular de la vegetación. Desde la segunda
Guerra Mundial las fotografías aéreas han sido empleadas como uno de los instrumentos
principales en la exploración petrolífera en todas las partes del mundo, incluyendo
especialmente las Montañas Rocosas en la parte occidental de los Estados Unidos, la región
de las colinas de Alberta, norte de Alaska y Venezuela.
Fig. 3-9. Arriba: mosaico de fotografías aéreas del campo petrolífero Nottingham al sudeste de
Saskatchewan. Abajo: planos de contorno de subsuelo de las 16 secciones marcadas en la fotografía,
que muestra la posición de los pozos productivos y la relación entre el halo tonal y la estructura. Las
curvas de nivel están dibujadas sobre la parte superior de la superficie erosionada del Mississippiense por
E. Hayes, Departamento de Recursos Minerales de Saskatchewan. Cortesía de Walter Kupsch y del
departamento de Geología de la Universidad de Saskatchewan.
La fotografía aerea en color es la ultima innovación tecnológica de la fotogeología. Algunos
contactos estratigráficos, marcados por cambios de colores demasiado ligeros para ser
insignificantes en fotografías en blanco y negro, son claramente visibles en color. Pero, por otro
lado, la mayoría de los rasgos de valor geológico que pueden verse en una fotografía en color
pueden también ser reconocidos en blanco y negro. El mayor coste de la fotografía en color
hace improbable que desplace a la fotografía en blanco y negro como instrumento de
reconocimiento, pero puede ser útil para el estudio geológico detallado de áreas limitadas
donde las menores distinciones de color son importantes para determinar contactos.
Requisitos previos para especializarse en la interpretación geológica de fotografías aéreas

son buena visión, conocimientos de geomorfología es esencial para reconocer buzamientos y
otros rasgos geológicos que pueden reflejarse en la topografía. Por la misma razón es esencial
la experiencia de campo.
OBSERVACIONES DEL SUBSUELO
Los métodos de superficie pueden aplicarse únicamente donde los estratos rocosos están
adecuadamente expuestos. Si la roca esta oculta por una delgada cobertura de suelo, es
posible exponer la roca para su estudio por medio de calicatas o trincheras. Se han podido
penetrar no solamente suelos sino también capas reconocibles del substrato rocoso con brocas
manuales o con brocas montadas en jeeps. Pero donde los afloramientos naturales están
ausentes y no pueden exponerse en forma practicable o donde los estratos sedimentarios
expuestos no pueden correlacionarse de un afloramiento a otro, el levantamiento de
estructuras por observaciones en la superficie es imposible. Para 1920 la mayor parte del
territorio posiblemente petrolífero en el Continente Medio y la Costa del Golfo, que podía
explorarse con métodos en la superficie, había sido levantado por una u otra de las compañías
petrolíferas establecidas. Estas compañías se volvieron entonces hacia el área mucho mas
extensa donde la geología era un secreto a causa de una cubierta de suelo, arena, loess,
mantos aluviales o glaciales o donde el reconocimiento de capas individuales en potentes
series de capas rojas o arcillas margosas era dificil si no imposible. La presión de la demanda
dio como resultado el desarrollo de instrumentos de exploración que proporcionan al geólogo
un “martillo de mango mas largo” con que penetrar las mascaras que ocultan la pintura
geológica. Las técnicas desarrolladas incluyen la perforación con testigo continuo, la
prospección geofísica y la utilización máxima de los datos obtenidos durante la perforación con
testigo continuo (sondeos estructurales) y la prospección geofísica se describen en las
secciones siguientes; la utilización de los datos de pozos perforados se describe bajo
“Geología del subsuelo” en el capitulo 4.
Sondeos estructurales.44 Una de las primeras utilizaciones de la perforación de estructuras

mediante testigos para la búsqueda de anticlinales posiblemente petrolífero se hizo en los
condados Kay y Noble, Oklahoma, en los primeros mese de 1922. Esta campaña di o como
resultado el descubrimiento del campo de Tonkawa y en un corto espacio de tiempo estaban
trabajando muchas instalaciones de este tipo en el Continente Medio y en otras partes. Un gran
numero de descubrimientos, que incluyen algunos de los mayores campos petrolíferos, pueden
ser atribuidos justamente a la información geológica obtenidas mediante sondeos de
estructuras.
La perforación de sondeos estructurales se lleva a cabo con sondas ligeras montadas sobre
camiones. En los traslados se pliega el mástil hacia delante sobre la cabina del camión (Fig. 3-
10). Los pozos pueden alcanzar profundidades de más de 300 m, pero la mayoría de los
sondeos de estructura tienen profundidades menores. Los materiales blandos, tales como
arcillas, se perforan con una barrena de cola de pescado; las barrenas de diamante o de
aleaciones duras se usan para cortar testigos de la roca que pueden contener las “capas clave”
que han de utilizarse para determinar la altitud del plano estratigráfico de referencia.
(a)
(b)
Fig. 3-10. Torres perforadoras montadas sobre camiones. (a) perforadora de pozos para disparos de
geofísica. Cortesía de Seismograph Service Corporation. (b) Mástil doblado sobre el camión. Cortesía de
Engineering Service Laboratorios, Inc. (c) Torre rotary portable para profundidades grandes. Cortesía de
George E. Mailing Suplí Company.
El objetivo del geólogo asignado a una campaña de sondeos de estructuras es obtener
suficientes datos estratigráficos de altitudes para poder reconocer y delimitar cualquier
anomalía estructural que pueda estar presente. El procedimiento usual es hacer una serie de
pozos a lo largo de una línea recta en la dirección del buzamiento regional. Si se nota un
cambio en este buzamiento se hacen sondeos adicionales a lo largo de la línea base y a
ambos lados para poder levantar el plano de la anomalía. Es deber del geólogo determinar las
altitudes de los emplazamientos de los sondeos y vigilar los testigos y el ripio a medida que
salen a la superficie del estrato particular, o mas frecuentemente de la secuencia de estrato,
que va a usar para determinar el plano de referencia sobre el cual dibujar el plano de
estructuras de líneas de nivel. Los diagramas eléctricos y de rayos gamma, descritos en el
capitulo, se usan también para suplementar y muchas veces incluso para reemplazar las
muestras de rocas de estos sondeos, así como en pozos normales. Una vez alcanzado el
horizonte clave, se determina su altitud y se lleva al plano. Al mismo tiempo se para la
perforación y se lleva la perforadora a su siguiente emplazamiento.
Sondeos estratigráficos (“Slim Hole”). El hecho puesto de relieve por el desarrollo del
campo East Texas en 1931, de que el petróleo podía acumularse en trampas estratigráficas
tanto como en trampas estructurales despertó un mayor interés en la estratigrafía del subsuelo,
especialmente en los cambios laterales en la porosidad y potencia de las posibles rocas
almacén. Como la mayoría de esta información esta a mayor profundidad de las que pueden
alcanzar las sondas portátiles descritas en el párrafo anterior, se introdujo la instalación “slim
hole” para obtener información geológica a profundidades mayores. Con esta maquina, que es
simplemente una torre rotary ligera, es posible obtener la estratigrafía completa de una
columna de miles de metros a un coste menor que con el tipo convencional de torre rotary.
A causa de la ventaja del coste se están perforando pozos de esta clase (de 150 a 175mm
de diámetro) como pozos de producción de algunas áreas. Estos pozos, cuando se perforan
para obtener información geológica, se conocen por el nombre de sondeos estratigráficos.
Exploración geofísica. La geofísica es la física de la tierra; la exploración geofísica es la

aplicación de la física en la búsqueda de nuevos yacimientos minerales. La exploración
geofísica tiene una larga y honrosa historia en la geología minera. Muchos de los grandes
yacimientos de mena de hierro del mundo fueron descubiertos por estudios magnéticos, una
técnica que tiene ahora varios siglos de existencia. La balanza de torsión fue usada por primera
vez en Checoslovaquia en 1915.
Aunque hasta 1920 no se utilizo la geofísica en la búsqueda de petróleo, el desarrollo y
perfeccionamiento de esta técnica fueron rapidísimos. La rápida difusión del uso de los
instrumentos geofísicos fue debida a los muchos éxitos que obtuvieron. Hasta 1924 habían
sido descubiertos por métodos en la superficie 39 diapiros en la Costa del Golfo en Texas y
Lusiana. En los siguientes cinco años fueron descubiertos 64 diapiros y muchos más desde
entonces. Los descubrimientos posteriores a 1924 han sido debidos casi enteramente al uso de
instrumentos geofísicos. Los instrumentos gravimetricos y sísmicos han tenido éxitos en este
trabajo y un procedimiento comun ha sido usar los métodos gravimetricos mas baratos como
instrumentos de reconocimiento, comprobando las anomalías por los métodos sísmicos mas
caros.
La tendencia actual en la prospección geofísica es combinarla con las observaciones en la
superficie, usando la geofísica para confirmar y estudiar en detalle las estructuras cuya
presencia haya sido sospechada mediante observaciones en la superficie.
Ha habido una evolución bastante notable en los instrumentos geofísicos desde su primera
aplicación en la búsqueda de petróleo. El compás inclinómetro del buscador de menas de
hierro fue seguido por el magnetómetro. El magnetómetro de tierra ha sido desplazado a su
vez por tipos especiales transportados en aviones. El péndulo y su primera derivación, la
balanza de torsión, han sido seguidos por el gravímetro portátil, que puede ser llevado en
automóvil, canoa e incluso a lomos de mulo. El método de refracción del sismógrafo ha sido
sucedido, pero no enteramente desplazado, por el método de reflexión. En lo referente a los
diagramas, el papel convencional de registros esta siendo desplazado por las cintas
magnéticas.
El primer acontecimiento importante en la aplicación de la geofísica en la industria del
petróleo fue el descubrimiento en marzo de1924 por medio de la balanza de torsión del domo
de sal Nash en los condados Fort Bend y Brazoria, Texas. En menos de un año fueron
descubiertos cuatro diapiros más por compañías que usaron métodos geofísicos. Casi 500000
millones de dólares de petróleo y gas han sido producidos en campos descubiertos por
métodos geofísicos solamente en el distrito de la Costa del Golfo. El número de equipos que
hoy en dia están trabajando en sísmica y otros estudios geofísicos pueden contarse por
cientos.
La prospección geofísica es el único método factible de exploración de áreas grandes
cubiertas de agua, tales como las plataformas continentales. Los métodos magnéticos,
gravimetricos y sísmicos han sido adaptados para poder trabajar fuera de la costa. Como regla
general la prospección es mas barata en el agua que en la tierra.
Naturalmente, el gran desarrollo de la geofísica ha ido acompañado de la publicación de un

gran número de artículos y tratados. No solo se han publicado en los últimos años por lo menos
cuatro libros y un compendio (en ingles), sino que también han sido enormes el número de
contribuciones más breves en este campo. Por ejemplo, la bibliografía de Degolyer y Vance
cita 426 títulos de artículos, la mayoría de los cuales fueron publicados antes de 1943. El
departamento Geológico de los Estados Unidos edita periódicamente el Geophysical Abstracts,
una bibliografía de los artículos aparecidos sobre geofísica. La Society of Exploration
Geophysicists publica mensualmente la revista Geophysics. Ha comenzado la publicación de
Geophysical Case Histories; hasta ahora han aparecido dos volúmenes. La Asociación
Europea de Geofísica empezó a editar semanalmente en 1953 la revista Geophysical
Prospecting.
Métodos magnéticos. Donde el mineral bastante comun magnetita esta presente en las
rocas del subsuelo, el magnetómetro o cualquier otro instrumento magnético registra lecturas
anormalmente a su vecindad. “Puesto que las rocas sedimentarias son muy débilmente
magnéticas, sino completamente amagneticas, una campaña magnética determina las
condiciones existentes en las rocas ígneas subyacentes, el llamado basamento rocoso. Esto
hace posible determinar las profundidades del basamento magnético y delimitar de esta forma
las cuencas de sedimentación”. El magnetómetro sirve también para determinar la presencia
de rocas ígneas básicas, especialmente diques y mantos interestratificados, que se han
introducido en la sección de rocas sedimentarias.
El magnetómetro aéreo fue desarrollado durante la Segunda Guerra Mundial como medio
para descubrir la presencia de submarinos. Inmediatamente después del cese de hostilidades
esta técnica fue adaptada para la exploración de minerales. Con un solo magnetómetro aéreo
es posible conseguir un registro continuo de un perfil de 800 a 1500 km por dia. Además el
instrumento aéreo no es afectado por las desviaciones magnéticas puramente locales, tales
como masas erráticas de magnetita, que pueden hacer una campaña sobre la superficie
completamente inefectiva. El magnetómetro aéreo esta usándose hoy en dia como instrumento
de reconocimiento en las prospecciones petrolíferas y en la búsqueda de nuevos yacimientos
de menas de hierro. El campo Lund en el extremo nordeste del condado Travis, Texas, es la
primera bolsa petrolífera encontrada (diciembre de 1948) con el magnetómetro aéreo. Esta en
una acumulación de serpentina.
La presente aplicación (1958) del magnetómetro aéreo parece ser la exploración de las
cuencas de sedimentación virtualmente inexploradas. “Una vez perforados los posos
suficientes para definir la extensión y potencia de una cuenca, no existe mucho interés en
continuar la exploración magnética.”
Métodos gravimetricos. Los instrumentos gravimetricos registran las variaciones de la

gravedad terrestre producidas por masas de diferentes densidades. Como en los métodos
magnéticos, las grandes anomalías de la gravedad pueden ser debidas a diferencias en el
basamento rocoso que no guardan relación con la estructura de las rocas sedimentarias
suprayacentes, pero el gravímetro es también muy sensible a las variaciones en la sección
sedimentaria.
El instrumento gravimetrico mas simple, el péndulo, oscila con un periodo inversamente

proporcional a la raíz cuadrada de la gravedad. Cuando la roca subyacente es de mayor
densidad que la normal, oscila con mas rapidez. Inversamente, cuando existe roca de densidad
inferior, tal como la sal, el péndulo oscila más lentamente. La medida exacta del periodo de
oscilación del péndulo determina las variaciones de gravedad de un punto a otro. El péndulo y
balanza de torsión fueron los antecesores del moderno del moderno gravímetro (fig. 3-11) que
se usa ahora casi exclusivamente.
El gravímetro es un instrumento extremadamente sensible que mide las variaciones de la
gravedad por medio de una masa suspendida del brazo de una balanza. El otro extremo del
brazo va unido a un muelle. Las lecturas se hacen en miligales; un miligal es la milésima parte
de un gal, y un gal es la aceleración de un centímetro por segundo por segundo. A diferencia
de los aparatos predecesores, el gravímetro es de extrema portatibilidad (figura 3-12), y las
observaciones pueden hacerse con relativa rapidez. Cuando existen carreteras, el gravímetro
se transporta en un coche o en un camión. En cada estación se clava un trípode en el suelo y
se coloca el gravímetro sobre este trípode. Donde es imposible entrar con vehículos, el
gravímetro se lleva a mano o en canoa y se asienta periódicamente para tomar lecturas. Se
usa también para investigaciones fuera de la costa. El gravímetro se baja hasta el fondo del
mar encerrado en un recipiente hermético. Se nivela y se suelta el tornillo de sujeción desde la
superficie; las lecturas se toman mediante una cámara fotográfica incluida en el gravímetro.
Fig. 3-11. Gravímetro. Cortesía de North American Geophysical Company.
Los aparatos gravimetricos acusan fuertemente toda discontinuidad importante (el plano de
contacto entre dos rocas de densidad marcadamente diferentes) excepto cuando el plano de la
discontinuidad es horizontal. Con el gravímetro se pueden determinar fallas a poca profundidad
cuando el contraste de densidad es grande.
Los métodos gravimetricos han obtenido sus mayores éxitos en el descubrimiento de diapiros
salinos a causa de las marcadas variaciones de densidad entre el prisma de sal y la roca
atravesada por el. Un plano en el que se anoten las lecturas del gravímetro muestra un área de
baja atracción gravitatoria encima de la masa enterrada de sal. Los métodos gravimetricos han
tenido éxitos no solo en la Costa del Golfo, sino también en la determinación de estructuras
atravesadas por la sal en otros lugares, como en las provincias marítimas al este de Canadá y
en el Oriente Medio. Como podía esperarse, las intrusiones ígneas se comportan en formas
opuestas a los diapiros salinos; aparecen en el mapa como áreas de alta atracción gravitatoria.
Fig. 3-12. Gravímetro aéreo. Cortesía de North American Geophysical Company.
Muchos de los campos de gas en arrecifes del Siluriano en el sudoeste de Ontario fueron
encontrados perforando anomalías de la gravedad. No es seguro, sin embargo, si son los
arrecifes o las evaporitas asociadas las que producen anomalías.
Es incluso posible seguir una discontinuidad a lo largo de un itinerario en el caso que:
1) La discontinuidad sea lo suficientemente intensa.

2) No se mantenga a excesivas profundidades.
Algunas rocas arqueadas tales como el anticlinal Lost Hills en el valle San Joaquín en
California, pueden ser consignadas en plano con instrumentos gravimetricos debido a la
presencia de una roca más ligera, en este caso una arcilla con diatomeas. Otros anticlinales
pueden determinarse por existir una roca anormalmente pesada en su parte posterior. Es obvio
que el geólogo debe conocer a fondo la sección estratigráfica antes de poder interpretar las
anomalías positivas y negativas en términos de estructura geológica.
Fig. 3-13. Ondas sísmicas reflejadas y refractadas. Cortesía del Instituto Americano de Ingenieros de
Minas y Metalúrgicos.
El gravímetro tiene quizá su mayor utilidad para descifrar las tectónicas regionales. Dentro de
las áreas de grandes cuencas pueden seguirse sus ejes estructurales mayores y determinarse
la historia tectonica mediante campañas gravimetricas.
Métodos sísmicos. El instrumento geofísico mas perfeccionado, mas caro y mas efectivo
actualmente es el sismógrafo. El magnetómetro y el gravímetro se consideran generalmente
como instrumentos de reconocimiento para determinar en detalle la geología estructural.
Wyckoff llama la atención sobre el hecho de que los métodos magnéticos y gravimetricos
miden fuerzas a distancia y son en consecuencia métodos indirectos, mientras que los métodos
sísmicos registran ondas sonoras generadas en la superficie o cerca de ella que realmente
“alcanzan y tocan o atraviesan los estratos rocosos.”
Fig. 3-14. Un equipo de sismografia “busca petróleo”. Las ondas originadas en la explosión de una carga
de dinamita viajan hacia abajo a través de la tierra y son reflejadas hacia la superficie por las capas de la
roca. En la superficie los geófonos recogen los ecos y los convierten en impulsos eléctricos. En el camión
laboratorio los impulsos son registrados sobre una película, formando un “sismograma.” Así, pueden
descubrirse las posibles estructuras petrolíferas. Cortesía de The Horizons, Pan-American Oil and Gas
Company.
Una campaña sísmica se lleva a cabo por el método de refracción o por el de reflexión.
Ambas técnicas están basadas sobre el hecho de que las ondas creadas por explosiones
viajan a través de los estratos rocosos y son refractadas y reflejadas de nuevo a la superficie
por rocas de densidad distinta.
El tiempo transcurrido es una indicación de la profundidad de la capa refractora o reflejante.

Ambas técnicas están basadas sobre el hecho de que las ondas creadas por explosiones
viajan a través de los estratos rocosos y son refractadas y reflejadas de nuevo a la superficie
por rocas de densidad distinta. El tiempo transcurrido es una indicación de la profundidad de la
capa refractora o reflejante. Por tanto estas técnicas pueden usarse para determinar las
elevaciones y depresiones estructurales de las formaciones rocosas del subsuelo.
La diferencia entre los métodos de refracción y reflexión se muestra en la figura 3-13. El

método de refracción fue usado por primera vez en los Estados Unidos en 1923. Obtuvo
grandes éxitos en la búsqueda de nuevos diapiros de sal en la Costa del Golfo en Texas y
Lusiana. El método de refracción ha vuelto a adquirir recientemente importancia para
determinar la estructura de la roca en sedimentos profundos de alta velocidad de carbonatos y
evaporitas, en los que falla el método de reflexión. Además, en algunas áreas es la forma mas
económica de llevar a cabo reconocimiento en gran escala. La refracción tiene la ventaja de
proporcionar datos que hacen posible la identificación de formaciones. Por ejemplo, la caliza
Rundle en el cinturón de colinas del Canadá puede ser levantada por refracción a causa de la
velocidad característica de su superficie.
El método de reflexión fue usado por primera vez comercialmente en Texas en 1926 (Fig.3-
14). Se ha causado no solo para encontrar diapiros salinos, sino también en al investigación de
estructuras de anticlinales. Ha desplazado casi enteramente al método de refracción.
En este método se perfora un pozo y se coloca en el una carga explosiva. Para cada
explosión, o terremoto artificial, se colocan sobre el terreno una serie de geofonos a lo largo de
una línea o de acuerdo con cierto esquema.
La vibración de los geofonos convierte las ondas de choque de la tierra en energía eléctrica
que se transmite por un cable al camión de registro. El tiempo que tardan las ondas en viajar
desde el punto de explosión hasta la superficie reflejante y de nuevo hasta la superficie se
convierte en metros de profundidad usando velocidades distintas para distintos tipos de roca.
Las variaciones de profundidad forman la imagen de la estructura geológica. En condiciones
favorables es posible determinar con el sismógrafo de reflexión el aspecto tridimensional de un
anticlinal o de una falla con considerable exactitud.
En 1944 las compañías petrolíferas empezaron a explorar la geología del suelo del Golfo de
Méjico mediante la exploración sísmica marina. El procedimiento es el mismo que en tierra,
excepto que la carga es detonada sobre el fondo del mar o por debajo de la superficie del agua
en lugar de hacerlo dentro del pozo. Los detectores están unidos a un cable y se colocan sobre
el fondo del mar en línea recta. Los instrumentos registradores están en un bote en lugar de un
camión. Aparte del tiempo, que es el factor más importante, la única complicación en una
campaña marina es el problema de localizar exactamente los puntos de detección. Esta
localización se hace por triangulación o por uno de los varios métodos electrónicos existentes.
Se esta usando cada dia mas en la prospección sísmica la “técnica de caída de pesos”, en
que se levanta un peso de tres toneladas y se deja caer contra el suelo en lugar de hacer
estallar cargas por debajo de la superficie mediante pozos perforados.
Durante la última década el sismógrafo de reflexión ha mejorado marcadamente su eficiencia

debido a los perfeccionamientos de los instrumentos y su exactitud debido a los avances en la
interpretación. En áreas de estructura compleja, puesto que se tendría una imagen errónea si
se dibujasen los buzamientos directamente debajo del punto de explosión, estos deben ser
“trasladados” a su verdadera posición.
Métodos radiactivos. El intento de emplear instrumentos sensibles a la radiactividad para

detectar directamente la presencia de petróleo se discutió en este capitulo bajo el epígrafe
“Análisis de suelos”. Un éxito considerablemente mayor ha tenido el uso de las medidas de la
radiactividad mediante instrumentos sobre el terreno y aéreos en el levantamiento de contactos
litológicos. Este método hace posible la determinación de fallas ocultas y la preparación de
planos geológicos estructurales y de superficie.
CAPÍTULO 4
GEOLOGÍA DEL SUBSUELO Y DE PRODUCCIÓN
La geología del subsuelo es el estudio de la geología en tres dimensiones utilizando

todas las muestras y datos existentes. Estos datos incluyen los obtenidos por la
geología de la superficie y geofísica, por los sondeos de estructuras y estratigráficos
(slim-hole) y por la perforación de pozos de agua, pozos exploratorios, pozos de
producción, pozos para la eliminación de aguas salinas y pozos para recuperaciones
secundarias. El motivo puede ser únicamente científico o puede tener el propósito de
encontrar nuevos campos petrolíferos o el desarrollo eficiente de un campo petrolífero
ya descubierto. La aplicación de la geología del subsuelo al desarrollo y posible
extensión de un campo existente se conoce por geología de producción.
Como una es parte de otra, la geología de producción no puede separarse de la

geología del subsuelo. Ambas utilizan las mismas fuentes de información, aunque con
algunas diferencias en la importancia de dichas fuentes.
FUENTES DE DATOS
El geólogo del subsuelo o de producción está constantemente recogiendo datos. Él

reúne toda la información existente obtenida en la superficie, geológica y geofísica.
Los pozos le proporcionan testigos, fragmentos de rocas y diagramas. Por último
existen los registros de las pruebas y producción que le proporcionan datos sobre los
yacimientos petrolíferos.
Datos obtenidos en la superficie. Toda la información obtenible en la superficie por

mediación de los geólogos de exploración está también a disposición del geólogo del
subsuelo. Los informes geológicos y los resultados de los trabajos de geofísica pueden
ser reunidos y correlacionados con los datos del subsuelo obtenidos durante la
perforación.
Datos geológicos. El geólogo del subsuelo estará mejor preparado para iiionu::car ias
formaciones penetradas durante la perforación si conoce la posición estratigráfica y la
estructura geológica de las rocas existentes en la superficie en el punto de sondeo.
Debe conocer también la sección estratigráfica regional. Principalmente por tradición
los nombres de formaciones que usa son en la mayoría de los casos los nombres
dados en la superficie. Es tarea del geólogo del subsuelo adoptar esta nomenclatura
para las rocas enterradas dondequiera que sea posible. Por tanto, todos los
conocimientos que tenga de la estratigrafía de la superficie harán su tarea más fácil.
La geología estructural de la superficie es también de considerable importancia para el

geólogo que trabaja en tres dimensiones. Los buzamientos regionales y locales
pueden ser extrapolados hacia abajo. La situación y buzamiento de los planos de falla
en la superficie pueden utilizarse para prever los puntos en que cortará al pozo.
En la mayoría de las áreas se han publicado informes y planos geológicos hechos por
agencias gubernamentales anteriormente a la exploración, aunque con demasiada
frecuencia son de reconocimiento en naturaleza y escala. Usualmente geólogos de
superficie patrocinados por una o más compañías petrolíferas han hecho trabajos de
detalle y sus informes pueden estar en los archives de la compañía.
La geología de superficie no debe ser abandonada durante los trabajos de desarrollo y

los planos de superficie deben ser mantenidos al día. Los trabajos de excavación para
carreteras, pozos,'tanques y otros proporcionan nuevas exposiciones que deben ser
Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldúa Catedra Hidrocarburos UNMSM EAP. Ing Geológica
examinadas cuando estén recientes. Además, pueden ser accesibles a la
investigación sólo temporalmente.
La solución de problemas geológicos locales del subsuelo requiere repetidamente

consideraciones sobre la geología regional. Por ejemplo: 1) la sección estratigráfica
encontrada en un campo no siempre incluye la secuencia completa ce formaciones
que existen en la región y deben consultarse los datos regionales para determinar las
posibilidades de trampas estratigráficas en capas que acuñen los flancos de una
estructura productiva; 2) la información regional es necesaria para determinar las
posibilidades más profundas de un campo; 3) el conocimiento regional de las
condiciones de deposición es importante para el estudio de las rocas almacén, y 4) la
disposición regional de fallas y plegamientos puede sugerir analogías que sirvan para
resolver problemas locales.
Por estas razones, es completamente esencial la adquisición de un conocimiento de la

geología regional a partir de la literatura publicada, informes. no publicados y
frecuentes consultas con los geólogos de exploración.
Datos Geofísicos. Las probabilidades están a favor de que un descubrimiento esté

precedido por unas campañas gravimétricas, sísmicas o ambas. Los registros de estos
trabajos deben ser combinados con la información recogida en el subsuelo,
particularmente en las primeras fases del desarrollo, cuando existen pocos datos
geológicos del subsuelo. El geólogo, sin embargo, debe conocer la exactitud y
limitaciones de los datos sobre los que se basa la interpretación geofísica. Debe ser
también capaz de juzgar dónde un trabajo adicional de geofísica le ayudará a
interpretar la estructura del subsuelo.
Muestras. Las muestras de formaciones obtenidas durante la perforación proporcionan

información de primera mano sobre la litología y estratigrafía, características texturales
y estructurales de las rocas, porosidad y permeabilidad e indicaciones de los fluidos
contenidos en los estratos penetrados. Son del máximo valor para el geólogo del
subsuelo o de producción. Su examen y descripción es, por tanto, un tema al que hay
que prestar mucha atención para conseguir la máxima información del material
existente.
Las muestras de roca recogidas durante la perforación están en forma de ripio o

testigos. Estas muestras se describen en los párrafos siguientes. Otras muestras,
como por ejemplo las de agua, petróleo y gas cortadas durante la perforación, se
tratan en el capítulo 7, “Fluidos de los yacimientos”.
El ripio está constituido por los fragmentos rotos o arrancados de la roca que es
perforada por la barrena en el fondo del pozo. Se estudian para determinar
correlaciones litológicas y paleontológicas, encontrar niveles de referencia en el
subsuelo e investigar los estratos almacén. En secciones de arcillas y arenas blandas
los diagramas eléctricos, combinados con la toma de muestras de las paredes, han
eliminado casi enteramente el uso del ripio, excepto para su examen paleontológico.
Por otro lado, en formaciones duras y especialmente en rocas almacén duras donde la
alta resistencia eléctrica de la roca enmascara la resistencia eléctrica de los
hidrocarburos, el examen del ripio sigue siendo importante. Lo mismo puede decirse
de las secciones que contengan sal.
Cuando se emplea el método de percusión, los fragmentos son arrancados de la roca

por los golpes del extremo aguzado del trépano. Se retiran periódicamente mediante la
cuchara y las muestras son recogidas en la plataforma de la torre cuando se descarga
la cuchara; El ripio de los pozos por percusión constituye un registro bastante bueno
de las capas penetradas. Son mejores que las muestras del rotary para estudios de
residuos insolubles.
En el método rotary los fragmentos son arrancados de la roca al girar la barrena y son
llevados a la superficie por la circulación del lodo de perforación. Son recogidos a la
salida del vibrador o desviando parte de la corriente de lodo a un tanque de
asentamiento. Este tanque tiene una compuerta en un extremo para facilitar su
limpieza después de la recogida de cada muestra. En los primeros tiempos del rotary,
las muestras obtenidas eran de valor dudoso a causa de: 1) contaminación por
desprendimientos de capas situadas más arriba; 2) pulverización de los fragmentos
por la barrena; 3) fallo del lodo para llevar los fragmentos hasta la superficie, y 4)
recirculación de los mismos fragmentos. Los intensos estudios sobre lodos han
determinado el peso, consistencias y presiones necesarias para recubrir y sostener las
capas más altas y al mismo tiempo transportar todos los fragmentos hasta la superficie
con eficiencia y velocidad. La recirculación de los fragmentos de roca puede evitarse
usando tanques de asentamiento.
La introducción de la circulación inversa (envío del lodo por el espacio anular entre la
tubería y las paredes del pozo y vuelta a la superficie por la tubería) ha sido un factor
importante para la obtención de mejores muestras. Como los fragmentos son más
grandes y hay menos oportunidad de contaminación, son muy convenientes para los
análisis de porosidad y permeabilidad por los métodos últimamente desarrollados. Por
ser más corto el tiempo en alcanzar la superficie puede estimarse la verdadera
profundidad de las muestras con más exactitud que cuando se usa la circulación
normal. Este método es particularmente valioso para asegurar la consecución de
muestras en rocas almacén de caliza y dolomita, pues los métodos convencionales y
con cable de cortar testigos no recuperan usualmente las partes más porosas.
Las muestras de ripio deben normalmente lavarse y guardarse en sacos de lona o

recipientes metálicos a los que se les adjunta una etiqueta con la profundidad, nombre
del pozo y situación. Sin embargo, no se pueden lavar los fragmentos de formaciones
blandas ni siquiera quitarles ligeramente el lodo sin pérdida de la muestra. Cuando es
necesario un cuidado especial para evitar tal pérdida, por ejemplo, para ciertas
investigaciones paleontológicas, deben recogerse muestras adicionales y guardarlas
sin lavar. El tratamiento posterior puede hacerse en el laboratorio en condiciones
mejores.
El ripio recuperado de una corriente de petróleo- o de un lodo de aceite debe lavarse

con agua caliente o primero con kerosene y después con agua caliente. La saturación
de hidrocarburos original de la formación no es afectada con este procedimiento.
Usualmente las muestras se secan antes de ensacarlas, ponerles la etiqueta y
enviarlas al laboratorio. Con circulación inversa el ripio destinado a pruebas de
saturación en el laboratorio y análisis físicos se lava, y después de escurrir el agua, se
guarda en recipientes metálicos con el objeto de reducir la pérdida de hidrocarburos.
Las muestras de ripio se toman a intervalos de 0,25 a 10 m, dependiendo del propósito

para el que se recogen las muestras. Para la correlación litológica y construcción de
cortes litológicos, son adecuados intervalos de 1,50 a 3 m, y para la investigación de la
roca almacén normalmente es suficiente tomar muestras cada 1,5 m. Con circulación
inversa las muestras que, debido a la velocidad más alta del lodo a través de la tubería
de perforación, alcanzan la superficie en buenas condiciones, se recogen a intervalos
de 0.25 m para calizas y 0,50 para areniscas. En formaciones blandas, donde la
determinación de la columna litológica tiene menos utilidad, la toma de muestras se
limita algunas veces a las zonas sujetas a investigación paleontológica. El intervalo es
usualmente de 10 m. pero puede acortarse a 5 m o 3 m si lo exige el paleontólogo.
Debe tenerse en cuenta, sin embargo, que el espacia-miento en la toma de muestras
disminuye la información obtenible en el subsuelo y, por tanto, este sistema debe
adoptarse únicamente cuando se esté seguro de que tal información no es necesaria.
Los fragmentos de la roca perforada alcanzan la superficie algún tiempo después de

haber sido cortados en el fondo del pozo. Este tiempo varía con la velocidad y tamaño
de las bombas de lodo y con la profundidad y diámetro del pozo. Se comprueba
cuando es necesario, en particular cuando se atraviesan secciones productivas. Puede
hacerse una comprobación efectiva introduciendo un puñado de mica roja o amarilla
en la corriente de lodo al hacer la conexión de un tubo. El tiempo que tarda el lodo en
viajar desde la superficie hasta el fondo del pozo puede calcularse con bastante
exactitud y restándolo del tiempo que tardan en aparecer las partículas de mica en el
vibrador tendremos el tiempo necesario para subir el ripio.
Otra buena indicación es el tiempo que tarda en aparecer el ripio después de empezar
a perforar. Se observará entonces que aparecen en primer lugar los fragmentos más
finos y con cierto retraso los fragmentos grandes; consecuentemente, hay una cierta
mezcla de fragmentos en su traslado a la superficie. Además, cuando se pasan de
estratos duros, de penetración lenta, a estratos blandos cuya perforación es más
rápida, suelen salir concentraciones mayores de fragmentos, algunas veces de
caracteres litológicos diferentes. Pero, finalmente, pueden hacerse las correcciones
cotejando los contactos de formaciones obtenidos por el examen del ripio con el
diagrama eléctrico o con la curva de tiempos de perforación.
Testigos. Los testigos son las muestras más grandes obtenibles de formaciones del
subsuelo y proporcionan la información más clara y segura respecto a la litología,
textura, estructura de la roca, contenido de fósiles, buzamientos y alteraciones
tectónicas. Además los análisis de los testigos en el laboratorio dan valiosas
informaciones sobre porosidad, permeabilidad contenido de fluidos y salinidad del
agua fósil o singenética. En formaciones duras tiende a hacerse general el uso de
coronas de diamante, pues permite recuperaciones virtualmente completas de testigos
de hasta 18 metros de longitud a un coste razonable. Esta práctica tiene particular
valor en la investigación de rocas almacén de caliza y dolomita, pues las partes más
porosas de estas rocas no se recuperan generalmente con los métodos convencional
o con cable de corte de testigos. La verdadera naturaleza de muchas de estas rocas
almacén no pudo apreciarse hasta la introducción de las coronas de
Puesto que la toma de testigos aumenta considerablemente el coste de la perforación,
se estimula el desarrollo de métodos menos caros. En la actualidad los diagramas
eléctricos y radiactivos en unión de la toma de muestras ce las paredes y
procedimientos mejores para la recogida e investigación del ripio han desplazado en
gran parte a los testigos. Sin embargo, la tendencia general a restringir el número de
testigos ha dado como resultado la pérdida ce información sobre buzamientos que ha
constituido un serio obstáculo para 1a interpretación de campos estructuralmente
complicados. Es obligación del geólogo de producción que trabaje en tales campos
exigir la toma de testigos en los intervalos elegidos para investigar los buzamientos, si
no es posible obtener esta información con el dipmeter (aparato para determinar bu-
zamientos).
En general se adopta una actitud más liberal en los pozos de exploración. No pueden
darse reglas generales, pues el valor de la información obtenible ce los testigos varía
grandemente de un proyecto a otro.
Después de la extracción del testigo del tubo sacatestigos, se debe anotar

inmediatamente las profundidades de las caras superior e inferior del testigo y la
cantidad recuperada. Los testigos son entonces examinados geológicamente y se
separan muestras para los análisis de laboratorio, examen paleontológico o para otros
propósitos especiales.
Los testigos elegidos para la determinación en el laboratorio de porosidad,

permeabilidad y contenido de fluido deben manejarse en tal forma que dicho contenido
sea afectado lo menos posible. Los testigos no deben extraerse del tubo sacatestigos
con ayuda de agua a presión, pues esta práctica puede aumentar la saturación de
agua. Por la misma razón, el lodo debe quitarse frotando el testigo y no lavándolo. El
testigo debe colocarse en un recipiente metálico que debe quedar lleno para evitar
roturas. El recipiente, por tanto, cebe tener el diámetro del testigo. No deben meterse
trapos o papel si se van a efectuar pruebas de saturación. En arenas inconsolidadas
debe prepararse una muestra de material limpio libre ce contaminación por el lodo de
perforación. A los testigos se les adjunta una etiqueta (con el nombre de la compañía,
nombre y número del pozo, nombre del campo o distrito y profundidad de la muestra) y
se guardan tan pronto como sea posible, pues-un testigo expuesto a la atmósfera
pierde rápidamente agua y fracciones volátiles ce hidrocarburos.
Las muestras para análisis en el laboratorio deben tomarse cada 30 cm. de testigo si
el intervalo es menor de 3 m de potencia. Sin embargo, pueden tomarse menos
muestras en secciones más potentes y uniformes, excepto cuando se sospeche que
en el intervalo pueda existir un contacto petróleo-agua o gas-petróleo. Las secciones
con arenas y arcillas alternadas deben ser desmuestradas tan cerradamente como sea
posible, cada 15 o 30 cm. En pozos exploratorios, deben acompañar al testigo enviado
al laboratorio dos muestras del lodo de perforación.
La selección de partes del testigo para la investigación paleontológica debe hacerse

de acuerdo con las instrucciones del paleontólogo, pero no se considera ya buena
práctica demostrar únicamente litologías elegidas (por ejemplo, únicamente las arcillas
de una secuencia de arena y arcilla), pues constantemente se están introduciendo
nuevas técnicas de examen de muestras que exigen la presencia de todos los tipos de
material existentes.
Existe una tendencia general a tirar el material del testigo que no se use
inmediatamente para investigaciones en el laboratorio. Sin embargo, la experiencia
nos dice que los antiguos testigos son repetidamente reexaminados si existen
revisiones posteriores del subsuelo. Estos nuevos exámenes hechos para la
comprobación de datos corrientemente proporcionan información adicional que fue
pasada por alto en el primer examen. En el estudio de antiguos testigos puede
obtenerse también información valiosa para proyectos de recuperación secundaria en
las últimas fases de la producción. Además, con frecuencia los viejos testigos pueden
ser examinados con nuevas técnicas que no se usaban o no existían en el tiempo en
que los testigos fueron cortados. Es, por tanto, esencial preservar los testigos. Deben
ser almacenados de forma que sean fácilmente accesibles y el lugar de su almacenaje
no debe usarse con otro propósito. El almacén, las cajas de los testigos y las etiquetas
que los acompañan deben ser hechos de forma que los testigos y su identificación
resistan los ataques del clima y de los insectos.
Las muestras y testigos de las paredes se toman principalmente para investigar las
posibles acumulaciones sugeridas por el estudio de los diagramas eléctricos.
Frecuentemente, en las secciones productivas se toman testigos laterales para su
análisis en el laboratorio a fin de determinar el intervalo productivo. Estas muestras,
así como los testigos, deben manejarse con el máximo cuidado para evitar la pérdida
del contenido de fluidos por evaporación.
Examen y Descripción. Ordinariamente los testigos se examinan con lupa y los
fragmentos de roca con el microscopio binocular, usando generalmente de 10 a 18
aumentos, pues esto es suficiente para la observación de las características
esenciales. El primer y algunas veces único examen de las muestras lo hace el
geólogo en el mismo pozo. Es, por tanto, de extrema importancia que sus
descripciones sean completas, exactas y claras, tanto en beneficio de su propio
trabajo y el de sus sucesores en el campo como para el de aquellos que han de basar
sus conclusiones en los informes escritos archivados en la oficina lejos del pozo. Por
la misma razón las descripciones deben emplear términos sistematizados para
alcanzar la uniformidad.
Las principales características geológicas determinadas en el examen de testigos y

ripio son las de tipo litológico, color, minerales accesorios, contenido de fósiles, textura
y estructura de la roca, porosidad e indicación del contenido de fluido. Estas
características constituyen los datos básicos para las correlaciones del subsuelo y
para el estudio geológico y petrofísico de las rocas almacén. El primer paso es la
identificación de la roca o rocas existentes en la muestra; el segundo es la búsqueda
de: a) características litológicas y paleontológicas que pueden ser determinantes, y b)
evidencia de disconformidades.6 Cosas aparentemente sin importancia, tales como
granos grandes de arena o zonas calcáreas en arcillas, no deben ser pasadas por alto.
Pueden ser pistas que conduzcan al descubrimiento de rocas almacén próximas —por
ejemplo, masas lenticulares de areniscas en arcillas o arrecifes de carbonates.
La textura y estructura de la roca se examinan y describen en detalle pues

proporcionan criterios claros para correlaciones del subsuelo y para la interpretación
de la formación de las capas productivas. Han de observarse los rasgos de la roca
formados durante la sedimentación (por ejemplo, estratificación, deformación
contemporánea) y después de la sedimentación (cementación, solución,
meteorización, deformación por acción tectónica). Los testigos son especialmente
importantes para obtener información textural, pues no es ordinariamente posible,
observar estos rasgos en los fragmentos de roca. Incluso rasgos estructurales, tales
como discordancias y buzamientos de rocas,» pueden ser visibles en testigos,
especialmente en aquellos de gran diámetro obtenidos en la actualidad con coronas
de diamante. Weaver y Wagner han destacado el valor de los rasgos petrográficos
para determinar la posición estructural de un pozo aislado y para reconocer fallas por
los planos de deslizamiento y zonas fracturadas.
La porosidad en rocas sedimentarias puede clasificarse en dos tipos: la porosidad

normal o primaria, que está relacionada con la textura primaria de la roca y formada
durante la sedimentación y petrificación, y la porosidad secundaria, que se superpone
a la porosidad primaria después de la petrificación, principalmente por acción de
solución, fracturación o meteorización. La descripción de la textura de una arenisca
incluye el tamaño de los granos, clasificación de los mismos y grado de cementación.
Estos factores están íntimamente relacionados con la porosidad, permeabilidad y otras
propiedades. La porosidad se estima cualitativamente como pobre, media, buena y
excelente, dependiendo del tamaño y también de la frecuencia de los poros visibles.
El examen de los fragmentos de las rocas de carbonates envuelve tres

consideraciones principales: 1) la proporción calcita-dolomita; 2) la textura de la matriz,
y 3) el carácter de la estructura visible de poros. La proporción calcita-dolomita puede
ser importante al apuntar la dirección de una mayor dolomitización, acompañada quizá
de una mayor porosidad.11 La textura es el carácter de la estructura microscópica de
poros entre los cristales, granulos o fósiles. Esta estructura microscópica no puede ser
vista o investigada fácilmente y sin embargo es importante en la distribución de fluidos
dentro de la roca. Se estima el tamaño y distribución de los poros visibles para obtener
una aproximación de la porosidad total de la roca.
Hay que insistir sobre la importancia de la determinación de hidrocarburos en las

muestras recogidas. El éxito de un pozo exploratorio puede depender de esta
determinación. El descubrimiento de acumulaciones nuevas y algunas veces de
campos nuevos se ha retrasado a menudo por no haberse determinado los
hidrocarburos en las muestras de ripio.
En el examen en el mismo pozo se hacen únicamente ensayos cualitativos del

contenido de fluidos en testigos, muestras de las paredes y ripio, excepto cuando
existe Un laboratorio portátil Los objetivos principales del examen en el campo son,
aparte de la determinación de la presencia de petróleo y gas, facilitar la interpretación
de los diagramas eléctricos y radiactivos, localizar contactos gas-petróleo y petróleo-
agua " y elegir los intervalos para pruebas de producción con la tubería de perforación
y puesta en producción final de los pozos.
El gas viene indicado por la presencia de burbujas de gas en las muestras recientes
de testigos y ripio y en la corriente de lodo. La salida de burbujas de gas puede
acelerarse aplicando el vacío.11 En los laboratorios portátiles el detector de gas
registra cantidades diminutas. El gas seco no tiene olor, pero el gas húmedo tiene olor
a petróleo o productos destilados y da reacción positiva con éter y fluorescencia. Los
productos de condensación vienen indicados por el olor y ligeras fluorescencia y
reacción con éter. El petróleo es indicado por saturación y manchas de petróleo, olor,
color (negro, pardo a pajizo, o verde a amarillo), iridiscencia, reacción con el éter
(también reacciones con acetona, tetracloruro de carbono y cloroformo) y por
fluorescencia. La acetona da también color cuando hay presencia de material
carbonáceo, por cuanto debe usarse con cuidado.
Las reacciones con el éter deben normalizarse en lo posible usando una cantidad
constante de muestras molidas en una cantidad constante de éter. La reacción
resultante se evalúa por medio de una escala calorimétrica que va del negro al ámbar
claro, clasificándola en débil o sin reacción. La intensidad de la reacción depende no
sólo de la cantidad de petróleo, sino también de su peso específico y del tipo de
petróleo.
La fluorescencia se clasifica en fuerte o buena, media y ligera o positiva. El uso de la

lámpara de fluorescencia es muy conveniente para examinar las muestras con objeto
de determinar la presencia de hidrocarburos. Si las manchas de petróleo son muy
débiles, la reacción con el éter se ve más fácilmente examinándola bajo luz
ultravioleta.
Los ensayos con ácido han probado ser un modo práctico de determinar manchas
microscópicas de petróleo en caliza, dolomita y arenisca calcárea. Cuando se
sumergen las muestras en ácido clorhídrico diluido, 60 por ciento de agua y 40 por
ciento de HCl, se forman burbujas relativamente grandes que duran lo suficiente para
que los fragmentos floten. Las burbujas que se forman en la superficie de fragmentos
similares limpios se rompen antes de ser lo suficientemente grandes para hacer flotar
el fragmento.
El agua de formación en las muestras puede reconocerse por su sabor salado o ácido,
olor (aguas sulfurosas), fuerte reacción con el nitrato de plata cuando la muestra
quebrantada se cubre con agua destilada, el lustre grisáceo causado por la película de
agua sobre los granos de la roca y las manchas de petróleo “muerto” o de petróleo
alquitranoso negro.
Además ce la descripción litológica rutinaria del geólogo del pozo, las muestras son
corrientemente examinadas por diversos expertos en técnicas especializadas para
mejorar las correlaciones, tanto locales entre pozos como regionales entre campos
petrolíferos. El geólogo de producción debe estar familiarizado con los fundamentos de
estos métodos especializados y debe ser capaz de utilizar sus resultados
inteligentemente en el desarrollo de campos petrolíferos.
La micropaleontología es una de las más importantes de estas ayudas para las

correlaciones y para el estudio de las condiciones de deposición de los sedimentos. En
áreas como la Costa del Golfo y California, es procedimiento normal examinar los
microfósiles.
En los últimos años, el polen y las esporas fósiles se han convertido en importantes
indicadores de la edad geológica. En los testigos pueden existir macrofósiles, que se
usan para la determinación de la edad exactamente como en los afloramientos.
Los estudios de sedimentación o sedimentológicos, particularmente de arenas y
areniscas incoherentes, pueden indicar las condiciones de deposición de las arenas
petrolíferas. La separación y examen de minerales pesados18 en arenas y residuos
insolubles en rocas de carbonato 19 han proporcionado valiosos datos para
correlaciones. Los últimos desarrollos en el examen de rocas y minerales, incluyen el
uso de los diagramas de difracción con rayos X,=0 análisis de diferenciación termal y
los estudios de termoluminiscencia en rocas de carbonatos. El examen de secciones
delgadas de testigos y fragmentos del ripio, se está convirtiendo en una práctica
normal en el estudio de la porosidad de rocas arenáceas y de carbonates.
Diagramas, tablas, gráficos y diarios. Todos estos medios constituyen un resumen,

directo o indirecto, de las formaciones geológicas atravesadas. Algunos son
relativamente simples, como la identificación del perforador de las rocas atravesadas o
el tiempo consumido en la perforación de cada metro de pozo. Otros son más
complejos, hechos únicamente después de un estudio completo del ripio o con
observaciones tomadas con ayuda de un complicado equipo físico o químico.
Pueden clasificarse en dos tipos: 1) los que están basados en el estudio de las
muestras de rocas, y 2) los que están basados en el efecto de las paredes del pozo
sobre un instrumento introducido en el mismo. A la primera categoría pertenecen el
diario del perforador y todos los tipos de diagramas y gráficos de muestras. Los partes
del tiempo de perforación, los diagramas eléctricos y radiactivos y el gráfico de
diámetros del pozo entran en la segunda categoría. Con éstos se puede conseguir una
identificación exacta y eficiente de formaciones después de una determinación inicial
de las formaciones basada en el estudio de las muestras. En un territorio nuevo, todos
los diagramas y perfiles han de estar precedidos por un perfil de «tipos» de
formaciones basado en el examen de las muestras.
Sería difícil expresar toda la importancia de estos perfiles, diagramas y tablas en la

búsqueda de petróleo. Por medio de la información geológica del subsuelo de ellos
deducible, es posible determinar el esquema estructural de las rocas y reconocer
cambios laterales en facies. Ambas cosas son importantes para descubrir trampas de
petróleo y gas.
Diario del perforador. En los primeros tiempos, las identificaciones litológicas y las
profundidades estaban registradas únicamente en la mente del perforador y todavía
trabajan algunos perforadores de pozos de agua fiados de su memoria. El paso
siguiente fue escribir los datos en un «libro» llevado al día por el perforador. En miles
de pozos perforados durante las primeras décadas del presente siglo, el diario del
perforador es el único registro existente. Por tanto, el geólogo que trabaja en dichas
áreas debe aprender a interpretar la terminología usada. Debe recordarse que el
perforador de una instalación por percusión hace sus identificaciones de rocas basado
principalmente en la experiencia práctica por la tensión que observa en el cable
mientras está siendo perforada la formación, por el aspecto del ripio descargado, por
la cuchara y por el estado del filo del trépano cuando se saca del pozo.23 Un
perforador experimentado es capaz de distinguir en esta forma las tres rocas
sedimentarias más comunes, arcillas, areniscas y calizas.
El diario del perforador en el método rotary ofrece mucha menos confianza que en el
método por percusión. Este hecho fue una de las razones principales para el
desarrollo de métodos exactos para el registro de muestras y de diversos métodos
indirectos para determinar las características de los estratos atravesados.
Cuando existe únicamente el diario del perforador, el procedimiento usual para

propósitos de correlación y estudio geológico del subsuelo es trasladarlos a tiras de
papel especialmente preparadas a una escala de 1:1000. Se usan lápices de colores
para los diferentes tipos de roca, usualmente amarillos para arenisca y azul para
caliza, indicándose la arcilla por la omisión de color. Estas tiras pueden «deslizarse»
unas respecto a las otras sobre la mesa de dibujo hasta que se obtenga la
«correspondencia» más probable. De este modo se correlacionan las formaciones del
subsuelo de pozo a pozo y eventualmente de un costado a otro de una cuenca de
sedimentación.
Aunque actualmente es de una importancia relativa menor, a causa de la existencia de

otros muchos datos, aún se lleva al día el diario del perforador, y en algunas
compañías se dibuja una tira con dos columnas, una conteniendo el perfil de las
muestras, seguida de una descripción, y la otra deducida del libro del perforador.
Una característica adicional e importante del diario del perforador, especialmente en

pozos por percusión, es su anotación de las muestras de petróleo o gas y de la
presencia de formaciones con agua. Algunas muestras de petróleo consisten
únicamente en la presencia de películas coloreadas sobre la superficie del agua
achicada del pozo. Una muestra de gas puede ser simplemente un ligero burbujeo o
efervescencia notado cuando se descarga la cuchara. Estas ocurrencias pueden ser
observadas únicamente por los hombres que trabajan en la torre. No dejan señales en
las muestras para la subsecuente consideración del geólogo y, sin embargo, incluso
tales pequeñas muestras de petróleo o gas pueden ser muy significativas. Muchos
campos petrolíferos han sido descubiertos por las señales alentadoras dadas por las
muestras de petróleo o gas en pozos por lo demás infructuosos.
En la misma forma, la anotación por el perforador «pozo lleno de agua» o cualquier

otra referencia a la presencia de agua en abundancia en una formación del subsuelo
puede ser de gran valor para el geólogo. Tal información indica un estrato poroso y
permeable que bajo condiciones más favorables puede estar tan lleno de petróleo
como allí lo está de agua. Incluso las profundidades del entubado anotadas en el diario
del perforador pueden ser interpretadas en términos de litología y contenido de agua.
Perfiles de muestras o Litológicos. El perfil de muestras o columna litológica es uno

de los métodos auxiliares más importantes, pero su exactitud depende de muchos
factores, el más importante de los cuales es probablemente la experiencia del geólogo
que examina e interpreta estas muestras.
Los perfiles de muestras son tiras de papel que presentan las identificaciones hechas
por el geólogo que examina las muestras del ripio con un microscopio binocular.
Aunque básicamente similar a la columna de formaciones deducida del diario del
perforador al mostrar por diferentes colores los tipos de roca, incluye muchísimos más
detalles. Están incluidos los tipos de roca menos comunes o menos fácilmente
distinguibles, como dolomía y anhidrita. Más aún, pueden indicarse los porcentajes
aproximados de sílice en caliza, o anhidrita en caliza u otros ingredientes en una roca
mixta, por el espesor del trazo coloreado en la columna vertical. A causa de las varia-
ciones en la presencia de constituyentes menores que ordinariamente son pasados
por alto por el perforador, puede ser posible obtener correlaciones más precisas y es
completamente cierto que los cambios de facies pueden estudiarse con mucho más
detalle.
FIG. 4-1.- Un geólogo compara tablillas de formaciones con diagramas eléctricos para
correlaciones del subsuelo y estudios de facies. Cortesía de R. Dana Rusell y de Ohio Oil
Company.
Como una considerable proporción de cada muestra obtenida durante la perforación

del pozo consiste en roca desprendida de niveles más altos, el porcentaje indicado en
el perfil no da una verdadera representación de cada estrato individual penetrado. Por
tanto, en algunas áreas la -descripción por porcentajes de las muestras ha sido
desplazado por los perfiles interpretativos, en la construcción de los cuales el geólogo
intenta describir únicamente el material nuevo cortado por la barrena. Otro tipo más es
el diagrama de tipos de partículas," en el que los fragmentos, partículas o granos se
clasifican o describen como minerales en lugar de tipos de rocas.
Un perfil de muestras completo de cualquier tipo contiene también toda la información
existente sobre muestras de petróleo y gas.
En casi todos los estudios geológicos del subsuelo, el estudio de las muestras y la
construcción del diagrama basado en este estudio es un procedimiento normal. Para
obtener consistencia en las descripciones texturales de un día a otro y de una persona
a otra se ha aconsejado el uso de una «tabla de terruños texturales».
Tabla de formaciones. Una variación de los perfiles de muestras es montar éstas

sobre tablillas a una escala 1:250 (fig. 4-1). Primeramente se extiende cola sobre la
parte de la tablilla que representa el intervalo de la muestra, y después se van
colocando fragmentos de la muestra sobre la cola hasta cubrir toda la superficie. Los
cambios en la litología son tan obvios en la tablilla de formaciones como en el perfil
dibujado y las variaciones de color son mucho más notables. Más aún, se usa el
material original en lugar de la interpretación del mismo para determinar correlaciones
y cambios de facies. Pero a causa de la preparación y del tamaño no se usan muy
ampliamente.
Gráficos de tiempos de Perforación. Los gráficos de tiempos de perforación o

velocidad de penetración consisten en curvas de coordenadas tiempo y profundidad.
La tangente de la curva indica la velocidad de penetración. Cualquier cambio abrupto
indica un contacto entre rocas de desigual penetrabilidad. Los factores principales que
afectan la velocidad de perforación son la tenacidad y la resistencia de la roca a ser
perforada. La tenacidad depende de la clase de mineral y del cemento y grado de
cementación, de la Textura y de la porosidad, mientras que la resistencia varía con la
presión del fluido en el espacio de poros. Es obvio que la velocidad de penetración es
también función de varios factores relacionados con el equipo y el trabajo, como la
clase y estado de la barrena, la presión sobre ella, las características y velocidad del
lodo, la velocidad de rotación de la barrena y la habilidad del perforador. A pesar de
estas variables, el gráfico de tiempos de perforación es ordinariamente un índice fiel
de la naturaleza de las formaciones penetradas. Corrientemente esta curva es
dibujada automáticamente por aparatos como el “Geolograph” o el “Log-O-Graph”
aunque a falta de ellos, puede anotarse manualmente la velocidad de penetración.
Las curvas de tiempos de perforación pueden usarse para corregir el retardo en la

salida del ripio y para las correlaciones de pozo a pozo. Son especialmente valiosos
durante la perforación a causa de su inmediata determinación. El paso de un contacto
de formaciones puede reconocerse en la curva de tiempos antes de que la circulación
del lodo traiga las primeras muestras a la superficie. En el corte de testigos, la curva
de tiempos puede usarse para interpretar los fallos del testigo debidos a una
recuperación incompleta. Con este tipo de gráfico ha sido posible localizar intervalos
porosos y permeables durante la perforación de secciones potentes de roca de
carbonates.
Gráficos de análisis de lodo. Es muy importante hacer un examen detallado del lodo
que vuelve del fondo del pozo, especialmente en pozos exploratorios. Ciertas
compañías especializadas pueden proporcionar camiones o remolques
completamente equipados para los análisis de lodo y especialistas entrenados. Parte
de la corriente de lodo que sale por la boca del pozo es enviada a este laboratorio
móvil. Los análisis de lodo permiten la detección de cantidades diminutas de petróleo y
gas en el lodo de perforación y en el ripio. El gráfico construido con estos datos
contiene tres curvas y usualmente se combina con la columna litológica o el gráfico de
tiempos de perforación, o con ambos. Una curva muestra el contenido de petróleo,
otra el contenido de hidrocarburos gaseosos distintos del metano (y etano) y la tercera
el contenido total de gas.
El principal valor del gráfico de análisis de lodo es la indicación que da del contenido
de fluidos en las arenas petrolíferas penetradas. Aunque únicamente cuantitativa, esta
indicación permite reducir el número de testigos sin demasiado riesgo de pasar por
alto una zona potencialmente productiva.
Gráficos de Temperatura. La más antigua prueba física hecha en sondeos fue la
inserción de termómetros para determinar la temperatura de la tierra en las
profundidades alcanzadas. Más recientemente, el perfeccionamiento de los
termómetros registradores sensibles ha hecho posible obtener un registro continuo de
las temperaturas en un pozo. Sin embargo, este registro no represente normalmente la
verdadera temperatura de la formación, pues las paredes de un pozo y el lodo que
contiene están rara vez en equilibrio térmico. El lodo tiene una temperatura mayor que
la de las formaciones a poca profundidad y menor que la temperatura de las situadas
en la parte profunda del pozo. Al cesar la circulación, esta diferencia de temperatura
tiende a desaparecer por conducción de calor a una velocidad que varía con las
distintas formaciones. Por ejemplo, la arcilla conduce el calor menos que la arena. Las
anomalías más pronunciadas se producen de 24 a 36 horas después del cese de la
circulación y las pruebas hechas en este período reflejan cambios en litologia que en
cierto grado son correlacionares de pozo a pozo. Sin embargo, el principal uso que se
hace de los gráficos de temperatura es para determinar la cabeza del cemento que
llena el hueco detrás del entubado. El calor generado por el fraguado del cemento
tiene un pronunciado efecto sobre la temperatura del sondeo, efecto que persiste
durante varios días después de la inyección del cemento.
El registro detallado de temperaturas con un termómetro especial de alta sensibilidad

proporciona un medio de localizar zonas de entrada de gas en el pozo.-'0 La
expansión del gas causa un pequeño descenso de temperatura. De modo similar, el
gráfico de temperaturas en condiciones favorables puede indicar entradas de fluidos
por un pequeño aumento de la temperatura.
Diagramas Eléctricos. Un diagrama eléctrico es, en esencia, el registro de las

resistividades de las formaciones del subsuelo y de los potenciales espontáneos
generados en el pozo. Desde la introducción de los métodos eléctricos en 1920 se ha
convertido en práctica general hacer las medidas eléctricas al terminar la perforación
de todo pozo, o a intervalos durante la perforación, con el propósito de obtener
rápidamente un registro completo de las formaciones atravesadas. Este registro es de
inmediato valor para la correlación geológica de los estratos y para la detección y
evaluación de los horizontes posiblemente productivos.
Los diagramas eléctricos han reducido pero no eliminado la necesidad de las

columnas litológicas y testigos. Además de la velocidad y economía de la
determinación de formaciones por este método, otras de sus ventajas son que el
diagrama se toma mecánicamente y no está influido por factores personales, que las
medidas de profundidad son exactas e impresas continuamente y que las medidas
eléctricas se hacen en el sondeo con las formaciones en su estado natural, excepto
por algo de invasión de lodo y el efecto del propio sondeo sobre las presiones de los
yacimientos.
Al mismo tiempo que un continuo perfeccionamiento de los instrumentos

convencionales de registro, se ha progresado en el arte de interpretación de los datos
recogidos en términos de parámetros esenciales geológicos y de ingeniería. Al
aumentar la eficiencia de la interpretación se hizo evidente la necesidad de aparatos
especiales auxiliares para la medida de parámetros adicionales y para operar con tipos
extremos de lodos. Asimismo, en un sentido amplio, se consideran estos diagramas
auxiliares o suplementarios como diagramas eléctricos y se discutirán individualmente
a continuación de la discusión del diagrama eléctrico convencional.
Estos diversos diagramas eléctricos se hacen en una cabina de instrumentos montada

en un camión especial (fig. 4-2). Los instrumentos registradores están unidos al
aparato introducido en el pozo por medio de un cable que contiene conductores
aislados y se arrolla sobre un tambor situado en la parte posterior del camión (fig. 4-3).
Al subir o bajar el aparato introducido en el -pozo, se imprime sobre película un
registro continuo de las lecturas y las profundidades correspondientes. Las
profundidades van indicadas cada 25 m sobre una columna especial del diagrama y
las profundidades intermedias se determinan con ayuda del rayado de profundidades.
El diagrama eléctrico, tal como se entrega en el campo, consta normalmente de dos
escalas de profundidades, una para el estudio detallado y otra para correlación. Los
multigalvanómetros registradores que se usan actualmente hacen posible presentar,
en cada una de estas dos películas, un complemento total de curvas registradas
simultáneamente.
FIG. 4-2.- Cabina de instrumentos de un camión registrador de diagramas eléctricos. Cortesía

de Schlumberger Well Surveying Corporation.
La cabina de instrumentos tiene un cuarto oscuro especial en el que puede ser

revelada la película inmediatamente después de ser impresionada. Los originales o
copias de ellos se llevan a continuación a una máquina especial de fotocopias. La
operación completa, empezando en el momento en que termina de salir la tubería del
pozo y terminando con la entrega de la primera copia de la película, se lleva a cabo
normalmente en unas pocas horas.
Es posible hacer uso de los perfiles eléctricos como medio de correlación del subsuelo
con pocos o ningún conocimiento del significado de la forma errática de las curvas.
Los perfiles pueden hacerse “deslizar” uno junto a otro en la misma forma que las
columnas litológicas o las tablillas de formaciones y las correlaciones pueden hacerse
de pozo a pozo por la forma de los «picos» de las curvas. Si las formaciones han sido
identificadas sobre un perfil eléctrico basándose en el estudio de las muestras, se
pueden seguir estas formaciones por su forma característica durante considerables
distancias lateralmente utilizando solamente los diagramas eléctricos. Sin embargo,
pueden evitarse muchos errores si el investigador conoce algo acerca de las posibles
razones que explican los “picos” de las curvas, y quienes sepan interpretar diagramas
eléctricos podrán descubrir muchos datos valiosos sobre litología y contenido de
fluidos.
FIG. 4-3.- Camión registrador de diagramas eléctricos. Esta vista posterior muestra el cable
arrollado sobre su tambor. Las puertas rayadas de cada costado contienen compartimientos
donde se transportan los diversos instrumentos que pueden utilizarse. En los costados están
las poleas que se colocan en la torre y por las que pasa el cable durante la operación. Los
brazos de filos aserrados, colocados junto a las poleas, se bajan hasta el suelo y sujetan el
camión contra el tiro de cable. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
Las resistividades de las formaciones constituyen pistas importantes para deducir su

litología y contenido de fluidos. Las formaciones conducen la corriente eléctrica
solamente a través del agua mineralizada que contienen. Los minerales que
constituyen la parte sólida de los estratos son aislantes cuando están absolutamente
secos. Las escasas excepciones son los sulfures metálicos, el grafito, etc., que
conducen la electricidad como los metales. De modo análogo, el petróleo puro o el gas
en las formaciones son eléctricamente no conductores. Otros factores importantes de
la resistividad de una formación son la forma e interconexión de los espacios porosos
ocupados por el agua. Estos factores dependen de la litología y, en rocas almacén, de
la presencia del petróleo y gas no conductores.
FIG. 4-4.- Ala izquierda diagrama de potencial espontáneo. Las dos columnas centrales
muestran las tres curvas normalizadas de resistividad. La columna derecha es un microlog.
Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
La resistividad eléctrica es la propiedad que tiende a impedir el flujo de electricidad a

través de una sustancia. Es una propiedad específica de la sustancia y es
independiente del carácter o de la forma en que dicha sustancia se encuentre. La
unidad de medida de resistividad en los perfiles eléctricos de pozos es el ohmio-metro.
Como se ha mencionado previamente, las formaciones conducen la corriente eléctrica
únicamente a través del agua mineralizada que contienen. Por tanto, la resistividad de
una formación depende directamente de la cantidad y resistividad del agua que
contiene. En los perfiles eléctricos la resistividad del agua de una formación ha de
deducirse muy a menudo del conocimiento de su contenido en sal y temperatura. Al
aumentar la concentración de sal en solución, disminuye la resistividad del agua; al
aumentar la temperatura de la solución, baja la resistividad del agua.
La curva del potencial espontáneo (SP) de un diagrama eléctrico (fig. 4-4) nos da
informaciones por las que pueden determinarse la salinidad del agua y la resistividad
resultante. El diagrama SP (spontaneous potential) es el registro de los potenciales
naturales a lo largo del pozo. Se registran diferencias de potencial cuando el electrodo
pasa de una arcilla a una arena o una caliza. La línea base de la curva corresponde,
en la mayoría de los casos, a arcillas y capas impermeables, mientras que los picos
están generalmente opuestos a capas permeables. Esta variación con la litología ha
hecho desde un principio del perfil SP una valiosa curva de correlación. La magnitud
de las deflexiones en el diagrama SP está íntimamente relacionada con las salinidades
relativas del lodo y del agua de la formación. Esta relación ha sido estudiada a fondo y
es un factor fundamental para las interpretaciones cualitativas y cuantitativas.
Una vez deducida de la curva SP la resistividad del agua de la formación es posible

determinar, por las curvas de resistividad, la cantidad de agua presente en la
formación. Dos factores principales gobiernan la cantidad de agua presente en la
formación: el primero es su porosidad y el segundo el porcentaje de esta porosidad
que está ocupado por hidrocarburos. Siendo constantes los demás factores, al
aumentar la porosidad disminuye la resistividad de la formación. Cuando el espacio de
poros está ocupado en parte por hidrocarburos, una zona de una porosidad y
resistividad del agua de la formación dada indicaría una resistividad más alta que
cuando está completamente saturado de agua. Esto, esencialmente, es lo que sirve de
base para interpretar los diagramas eléctricos con el fin de determinar las
características del yacimiento y del contenido de fluidos que necesitan los geólogos
e ingenieros.
La evaluación exacta de un yacimiento depende en alto grado de la exactitud con que

se determina la verdadera resistividad de la formación. La gran cantidad de
información exigida a las determinaciones eléctricas modernas en pozos, juntamente
con las restricciones impuestas por las condiciones del sondeo, la heterogeneidad de
espesores, contenido de fluidos y características físicas de las formaciones hace
imposible que una sola determinación responda por completo a todas las exigencias
impuestas. Estas variaciones exigen la toma de diferentes perfiles en diferentes áreas
y a menudo incluso en diferentes secciones del mismo pozo.
El diagrama eléctrico convencional es una combinación de la medida del potencial

espontáneo y de las medidas de resistividades de formaciones usando electrodos
separados. Se obtiene los mejores resultados cuando se emplean con lodos frescos,
formaciones de resistividad baja a moderada y capas bastante potentes. En estas
condiciones la influencia del lodo como conductor de derivación a través de los
electrodos y de las capas adyacentes a la formación en el punto de medida son
mínimas. Como los restantes aparatos de medidas de resistividades, el uso del
diagrama eléctrico está limitado a pozos sin entubar, pues el metal de la tubería de
revestimiento cortocircuito los electrodos.
Frecuentemente se aplican correcciones a las lecturas registradas para obtener la

verdadera resistividad.
El perfil de resistividades incluye usualmente tres curvas (fig. 4-4) elegidas por la
experiencia para obtener la máxima información. El registro múltiple de resistividades
es esencial para la adecuada interpretación de las características de la formación. Las
curvas de escasa penetración, tomadas con electrodos poco espaciados entre sí, son
necesarias para definir exactamente los límites entre capas y para ayudar a determinar
la resistividad de la zona invadida por el lodo próximo al pozo. Las curvas de
resistividad de penetración profunda, tomadas con electrodos más espaciados entre
sí, son igualmente esenciales para determinar la verdadera resistividad de la for-
mación, que es la clave para localizar y evaluar las posibles zonas productivas. La
disposición de los electrodos y sus espaciamientos determinan la respuesta y la
profundidad de investigación bajo cualquier serie particular de condiciones. Las
medidas de resistividad con este sistema convencional se llevan a cabo haciendo
pasar una corriente eléctrica conocida a través de una serie de electrodos hacia la
formación y midiendo los potenciales resultantes con otro juego de electrodos. Una de
las mayores dificultades de este sistema es que las corrientes no están focalizadas;
son libres para seguir la senda de mínima resistencia. Puesto que el sistema depende
del flujo de corriente que entra en la formación procedente de los electrodos, es obvio
que no puede emplearse cuando el pozo está lleno con un medio no conductor tal
como petróleo, lodos de aceite, gas o aire.
El diagrama de inducción no exige flujo de corriente desde el aparato a la formación.

En vez de esto se activan las formaciones mediante un campo magnético alterno
creado por el aparato introducido en el pozo. Puesto que no es necesario ningún
contacto a través del lodo, el método de inducción hace posible registrar las curvas de
conductividad (recíproca de la resistividad) y de resistividad en pozos vacíos o con
lodos de aceite no conductores, así como con lodos normales. Las características de
la curva bajo estas distintas condiciones son casi idénticas. Cuando es normal el uso
del método de inducción, pueden ser comparados directamente los diagramas de todo
un campo incluso aunque los programas de perforación y puesta en producción
puedan exigir cambios a lodos de aceite o el uso del gas en lugar del lodo de
perforación.
La señal registrada en el diagrama de inducción es menos afectada por los materiales

resistivos dentro del volumen medido que por los materiales conductivos. Por tanto, los
valores registrados se aproximan mucho a la verdadera resistividad de la formación en
lodos resistivos (de agua potable o de aceite), y es capaz de detectar zonas
conductivas, esto es, arenas con agua salada, incluso detrás de una zona invadida
resistiva.
En el método de inducción un sistema de enfocamiento permite determinar más

exactamente la verdadera resistividad de capas relativamente delgadas. Incluso en
lodos normales de perforación, la mayor profundidad de investigación y la reducción
de los efectos de las capas adyacentes por el enfocamiento han hecho del método de
inducción un excelente instrumento de investigación. El diagrama eléctrico
convencional está corrientemente afectado por diversas inversiones, zonas ciegas,
picos de reflexión y saltos que pueden ser causa de confusión en la investigación de
las curvas de mayor penetración. No existen tales efectos en el método de inducción.
Las ventajas del método de inducción han conducido a su combinación con el corto
normal y la curva SP para formar el diagrama inductivo-eléctrico (fig. 4-5). Esta
combinación está reemplazando, en un grado importante, al método eléctrico
convencional como instrumento básico de investigación. Lleva a cabo las mismas
funciones básicas de correlación para el estudio geológico y la detección y evaluación
de las formaciones productivas, pero la claridad de detalle, su mayor penetración y su
alta exactitud en capas delgadas permite la consecución de un diagrama más
eficiente. El método eléctrico de inducción es ampliamente aplicable en las mismas
condiciones que el método eléctrico, esto es, con lodos normales de perforación.
Con lodos de sal ambos métodos, el eléctrico convencional y el de inducción, son

afectados por la baja resistividad de la columna de lodo.
FIG. 4-5.- Diagrama eléctrico y microlog con curvas de inducción en las dos columnas
centrales. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
Para estas condiciones, donde el lodo es considerablemente más conductor que las
formaciones, se desarrolló el laterolog. Como en el diagrama eléctrico, la corriente es
enviada a la formación a través de electrodos situados en el aparato introducido en el
pozo. Sin embargo, por medio de una disposición apropiada de electrodos y un
sistema automático de control, la corriente es fuertemente enfocada en una franja de
espesor predeterminado (fig. 4-6). Este enfoca-miento permite la medición de una
parte del terreno de extensión vertical limitada y elimina virtualmente el efecto de
cortocircuito de la columna de lodo.
El laterolog tiene su principal aplicación en pozos perforados con lodos saturados de

sal. En estas condiciones los valores registrados se aproximan mucho a la verdadera
resistividad en formaciones con agua salada y en formaciones impermeables. También
en las formaciones petrolíferas, los valores registrados son muy aproximados a la
verdadera resistividad si la invasión no es profunda. En lodos recientes los valores
registrados para formaciones con agua salada son demasiado altos a causa de la
invasión del filtrado de lodo. Con lodos de agua dulce, en general, no se usa el
laterolog para la determinación de la verdadera resistividad a menos que la resistividad
de la formación sea alta.
Los métodos micrologs se usan para medir las resistividades de pequeños de
formación justamente detrás de las paredes del pozo. Existen diversos generales, no
focalizados, tales como el microlog, y focalizados. Estos métodos proporcionan una
información tan importante cerno la detección y definición exacta de los límites de
capas permeables permitiendo así un recuento exacto de arenas y el grado de
porosidad ce las formaciones permeables.
FIG. 4-6.- Dibujo esquemático comparando la distribución de las líneas de corriente en un

instrumento normal a la izquierda y el laterolog a la derecha frente a una capa delgada
resistente. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
Como se indicó previamente, la resistividad verdadera de una formación, para 'una

resistividad dada del agua de la formación, viene determinada por :2 cantidad de agua
que contiene. Puesto que una disminución en porosidad afectaría la resistividad de la
formación en la misma forma que el aumento ce la saturación de hidrocarburos, es
necesario disponer de medios de evaluar la porosidad que sean independientes de los
aparatos que miden la resistividad verdadera. Los micrologs, al medir la resistividad de
la zona invadida por el nitrado del lodo, proporcionan esta evaluación
independientemente.
Les dos tipos generales de micrologs se registran con electrodos colocados muy
juntos sobre una almohadilla de caucho aislante que es mantenida, por la acción de un
resorte, contra la pared del pozo (fig. 4-7). De esta forma el electrodo de corto circuito
de la columna de lodo se reduce al mínimo. En el otro tipo como en el caso del
diagrama eléctrico, se permite que la corriente torce la senda de mínima resistencia,
mientras que en el método de como en el laterolog, se canaliza la corriente
fuertemente. Como podría esperarse, el método de enfocamiento se usa
principalmente en lodos de sal donde el efecto de cortocircuito del lodo es las
reversas. Los diagramas hechos con ambos métodos suelen incluir una curva ce
microcalibre, que es la medida del diámetro entre la cara aislante y la cara de otra
almohadilla situada al lado opuesto del aparato.
Aipmeter: es un aparato que se introduce en los pozos para determinar el grueso y

dirección del buzamiento de las diversas formaciones atravesadas por la roca. Se
registra cualquiera de los tres tipos de curvas eléctricas
La resistividad y micro resistividad, por medio de electrodos colocados sobre los

brazos de un vástago, que son mantenidos contra las paredes del pozo. Los brazos
están a 120° entre sí y los electrodos están situados en una forma perpendicular al eje
del instrumento. Las curvas registran todos los de formaciones y si un plano de
estratificación cruza el pozo bajo cierno ángulo, se produce un desfase vertical entre
las curvas. La correlación entre las tres curvas determina la cantidad de
desplazamiento (fig. 4-8).
FIG. 4-7.- Microsonda moderna. Las almohadillas están montadas sobre brazos en forma de
paralelogramos y son mantenidas contra las paredes del pozo mediante muelles espirales.
Para el descenso en el pozo y para una rápida recuperación del aparato después de terminar el
trabajo los brazos se pliegan contra el cuerpo de la sonda mediante un motor eléctrico.
Nótense los tres pequeños electrodos circulares en al parte exterior de la almohadilla. Cortesía
de Schlumberger Well Surveying Corporation.
El áipmeter continuo, como implica su nombre, hace un registro continuo ce tres
curvas focalizadas de microrresistividad. Al mismo tiempo se registran con un
fotoclinómetro las inclinaciones del pozo y se toma un diagrama de microcalibre. Como
resultado, la película, revelada por el camión de instrumentos en la superficie, contiene
datos de los que pueden deducirse el rumbo y buzamiento de los estratos rocosos
penetrados, con las correcciones necesarias debidas a la inclinación del pozo, y
pueden hacerse correlaciones con otros pozos. El dipmeter de intervalos más antiguo
toma una serie de lecturas, ya de SP o de resistividad, en intervalos de 15 a 20 metros
donde los diagramas eléctricos previamente tomados indiquen contactos claros. Pue-
den tomarse también inclinaciones del pozo; en un solo viaje del instrumento dentro
del pozo pueden tomarse lecturas de hasta 12 intervalos.
El dipmeter es una de las ayudas más valiosas que tiene el geólogo del subsuelo para
determinar la estructura del mismo. En ausencia de buenas correlaciones es posible
deducir interpretaciones que se ajusten a la realidad. La interpretación de los registros
del dipmeter es tarea para un especialista familiarizado con el área en estudio. Los
datos pueden ser también muy valiosos para la preparación de mapas
paleogeológicos, pues los rumbos y buzamientos pueden ser muy vagos sin ellos. El
dipmeter proporciona también información de un solo pozo inobtenible en otra forma y
permite un mejor planteamiento del futuro desarrollo de un campo a partir de un primer
pozo descubridor.
FIG. 4 – 8.- Dibujo esquemático de las curves registradas por el diptemer en un contacto
inclinado de dos formaciones. El cambio brusco en cada curva se produce en el momento en
que el electrodo correspondiente cruza el límite señalado en la figura entre las formaciones.
Las diferencias “L” entre las curvas registradas por los electrodos I y II y “M” entre las
registradas por los electrodos I y III son los elementos básicos para el cálculo del buzamiento
del contacto de formaciones. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
El método sónico (conocido también por método de velocidad continua) consiste

fundamentalmente en el registro del tiempo que necesita una onda de sonido para
desplazarse a través de una longitud definida de formación. Estos tiempos de
desplazamiento se registran continuamente respecto a la profundidad mientras la
sonda sónica sube por el pozo y son inversamente proporcionales a la velocidad del
sonido en las diversas formaciones.
La Tabla 1 presenta las velocidades del sonido y los correspondientes tiempos de

desplazamiento (en microsegundos por metro) en diversos fluidos y materiales sólidos.
Algunos de estos valores son medios y pueden variar con la profundidad de la
formación del subsuelo.
La velocidad del sonido en las formaciones del subsuelo depende de las propiedades
elásticas de la matriz rocosa, la porosidad de las formaciones y el contenido y presión
de los fluidos. Por debajo de la capa «meteorizada» o de baja velocidad, que puede
extenderse desde la superficie hasta los 15 o quizá 30 metros, la velocidad del sonido
puede variar entre 1800 metros por segundo en arcillas a poca profundidad hasta 8100
metros por segundo en dolomías. El perfil sónico es muy detallado y reflejo tan
fielmente los cambios en litología que incluso en su actual estado inicial de desarrollo
es un excelente diagrama para correlaciones (fig. 4-9).
En formaciones moderadas a duras, donde las porosidades son bajas, el diagrama
sónico es considerablemente afectado por la cantidad de fluido presente en la
formación; por tanto, el diagrama sónico da indicaciones de porosidades. En todos los
tipos de formaciones, estos diagramas ayudan al geofísico en la interpretación de los
registros sísmicos.
FIG. 4-9.- Diagrama sónicos de pozos, que muestran como la

anhidrita y la sal son fácilmente diferenciables y como es posible
una exacta correlación entre pozos. Cortesía de Schlumberger Well
Surveying Corporation.
Gran parte del éxito del diagrama sónico puede ser atribuido al instrumento de dos
receptores (fig. 4-10) que elimina virtualmente el efecto del sondeo sobre el diagrama.
En este sistema un transmisor emite cada décima de segundo un corto impulso de
energía sónica. La energía de este impulso viaja a través del lodo y la formación y es
recogida por cada uno de los dos receptores. Se registran las diferencias en tiempos
entre la recepción de la energía en los dos receptores. Este tiempo de recorrido. At, es
el necesario para que el sonido recorra un pie de formación. Es, por tanto, la inversa
de la velocidad del sonido. Únicamente la parte de formación situada -entre los dos
receptores afecta a la lectura. Usado el perfil sónico en unión de otros diagramas
eléctricos ha demostrado ser muy útil para los análisis de formaciones y yacimientos.
Diagramas Radiactivos." Estos diagramas son de dos tipos muy generales: los que
miden la radiactividad natural de las formaciones (diagramas en rayos gamma) y los
que miden la radiación reflejada o inducida en las formaciones a consecuencia del
bombardeo de las mismas con neutrones emitidos por un manantial de neutrones
encerrado en el instrumento que se introduce en el pozo (diagramas neutrónicos). Los
diagramas de rayos gamma se introdujeron en 1940 y los neutrónicos
aproximadamente un año más tarde. La ventaja principal de los diagramas radiactivos
es que pueden obtenerse a través de varias sartas de entubado e incluso a través de
cemento. Los diagramas radiactivos se consideran más como un medio auxiliar para el
estudio de la columna litológica que como un instrumento de correlación. Las curvas
obtenidas están sujetas a diversas interpretaciones y son necesarias las tablas de
formaciones para alcanzar la solución litológica correcta.
La teoría de la curva de rayos gamma es simple. Todas las rocas contienen material
radiactivo, pero la cantidad es altamente variable. Las sustancias radiactivas están
sufriendo una desintegración constante, en el curso de Ia cual emiten varios rayos. Los
más penetrantes de estos; rayos son los gamma. Por regla general, puesto que las
arcillas contienen más material radiactivo que las areniscas y calizas, la arcilla produce
un “pico” prominente en la curva de rayos gamma. En este aspecto, el diagrama de
rayos gamma es también un perfil litológico.
La curva neutrónica, producida por un bombardeo artificialmente inducido de

neutrones sobre las paredes del pozo, es una medición inversa de la cantidad de
hidrógeno presente. A causa de que la mayoría del hidrógeno en la roca está en forma
de agua intersticial o petróleo, la curva neutrónica indica (por las lecturas debajo de lo
normal) la presencia de fluidos y es, por tanto, un perfil de porosidades. No es posible
distinguir el petróleo del agua con el diagrama neutrónico.
FIG. 4-10.- Dibujo esquemático de un instrumento registrador de diagramas sónicos de dos
receptores. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
Sin embargo, esta curva sirve de complemento al diagrama de rayos gamma al hacer
posible la distinción entre formaciones porosas y no porosas. La exactitud de las
identificaciones aumenta apreciablemente usando los diagramas radiactivos en
conjunción con los diagramas eléctricos (fig. 4-11).
Aunque las curvas pueden ser registradas por separado, las curvas de rayos gamma y
neutrones se obtienen por lo general simultáneamente en un solo viaje en el pozo por
medio del moderno equipo de registro doble (fig. 4-12). Como en los métodos
eléctricos, un cable aislado transmite las medidas tomadas por el instrumento dentro
del pozo hasta los instrumentos y aparatos registradores montados en la cabina de
instrumentos de un camión. Se usan varios tipos de aparatos para la detección de los
rayos gamma. Los contadores Geiger-Mueller o cámaras de ionización, que se usan
algunas veces, se hacen eléctricamente conductores cuando penetran en ellos rayos
gamma. El detector de centelleo emplea un cristal de yoduro de sodio que brilla
cuando inciden sobre él rayos gamma. La intensidad del brillo es proporcional a la
concentración de rayos gamma. Una célula fotoeléctrica y un multiplicador transforman
estas variaciones de luz en cantidades eléctricas medibles.
En el método neutrónico los aparatos utilizados pueden ser sensibles a la radiación

gamma inducida o a los neutrones mismos. En el sistema neutrón-gamma, una
cámara de ionización debidamente protegida reacciona con los rayos gamma de
captura de alta energía que se producen cuando un neutrón es capturado por un
átomo. En el sistema neutrón-neutrón el aparato reacciona directamente con los
neutrones. Los resultados de los dos métodos son casi idénticos. Las velocidades de
trabajo están comprendidas corrientemente entre los 7 y 15 m por minuto.
La posibilidad de trabajar con métodos radiactivos a través del entubado (son los
únicos instrumentos que pueden hacerlo en la actualidad) es la razón de que se
empleen ampliamente en los programas de terminación y puesta en producción de
pozos. Muchos pozos antiguos fueron perforados y entubados antes de la introducción
de los eficientes métodos eléctricos.
Muchos de estos pozos han sido puestos comercialmente en producción basados en

la información conseguida con los diagramas radiactivos. La geología y planos del
subsuelo han mejorado a menudo con la información obtenida en antiguos pozos
entubados que estaban situados .estratégicamente. En pozos entubados es costumbre
registrar la posición de cada cuello en el diagrama radiactivo mediante un localizador
magnético de cuellos del entubado, que se incorpora al instrumento registrador.
Puesto que el entubado se relaciona así especialmente con las formaciones, cualquier
profundidad elegida para perforarlo puede situarse con toda exactitud por medio de un
localizador de cuellos incorporado al cañón perforador y no es necesario depender de
la medida precisa de una gran longitud de cable.
Además de la ayuda que constituyen para el ingeniero de producción, los diagramas

radiactivos pueden ser utilizados por los geólogos para el levantamiento de planos
estructurales del subsuelo. Algunas formaciones dan lugar a curvas altamente
distintivas que permanecen casi constantes en grandes distancias. Un ejemplo notable
de estas curvas es la arcilla Chatta-nooga, que es fácilmente reconocible por los
característicos «picos» de su curva de rayos gamma desde los Montes Apalaches
hasta Texas occidental y desde Canadá hasta Oklahoma.
FIG. 4-11.- Ejemplo de las reacciones típicas del diagrama sónico y de las medidas eléctricas y
con neutrones. Puesto que cada diagrama mide un parámetro diferente, es posible una
interpretación cualitativa exacta. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
Perfil de calibre. El calibrador de pozos es un aparato que se usa para determinar las
variaciones del diámetro del pozo desde el fondo hasta la superficie. A causa de las
diferencias en fragibilidad, cohesión y solubilidad entre los diferentes estratos rocosos,
los sondeos no tienen paredes verticales pulidas. Algunas formaciones son
especialmente propensas a desprendimientos o se erosionan bajo el chorro de lodo
que sale de la barrena o van desgastándose por la subsecuente circulación del lodo de
perforación. Otras rocas, especialmente la sal, son solubles en el agua del fluido en
circulación, a menos que esté previamente saturado, y así puede producirse una
lixiviación lateral. Es obvio que pueden evitarse en un grado bastante considerable las
variaciones en el diámetro de los pozos mediante los procedimientos de perforación,
pero se influye principalmente sobre su magnitud más que sobre la presencia de
variaciones.
FIG. 4-12.- Diagramas de rayos-gamma y neutrones de secciones arcillosas (arriba) y arenosas

(abajo) registrados de un pozo sin entubar con lodo de base acuosa. Reacción de las delgadas
capas de areniscas arcillosas A y B intermedias entre arcillas y areniscas. Cortesía de
Schlumberger Well Surveying Corporation.
Como regla general, cuando el pozo atraviesa calizas masivas y areniscas
endurecidas es solamente de diámetro ligeramente mayor que el diámetro de la
barrena. En rocas blandas, inconsolidadas o pobremente cementadas, tales como
arcillas, el diámetro del pozo puede aumentar considerablemente.
El calibre consiste en tres o cuatro brazos plegables espaciados uniformemente

alrededor de un vástago de acero. El instrumento se baja hasta el fondo del pozo,
donde se sueltan los brazos. Entonces se le sube hasta la superficie a una velocidad
de unos 30 metros por minuto. Durante el ascenso, unos muelles individuales
mantienen cada brazo contra los costados del pozo y las desviaciones del diámetro de
la barrena son registradas automáticas y continuamente con las profundidades por un
aparato registrador accionado eléctricamente, montado en el camión instrumental.
El diagrama de calibres fue inicialmente imaginado y desarrollado con el fin de facilitar

la solución de ciertos problemas de ingeniería tales como determinar la cantidad de
cemento necesaria para colocar un tapón en el pozo o la cantidad de material
necesario para colocar un paquete de grava en un pozo. Se emplea también para
examinar los efectos de los disparos y acidificaciones. El diagrama de calibres es una
ayuda en el examen de muestras, dando indicaciones respecto a la cantidad y origen
de desprendimientos en las muestras. Además, los picos y valles del perfil del calibre
representan una sucesión estratigráfica, por lo que el diagrama de calibres puede
usarse en correlaciones de pozo a pozo. Sin embargo, para interpretar los diagramas
de calibres es aún esencial tener a mano el perfil de muestras o litológico.
Los diagramas registrados con los modernos aparatos de microrresistividad les

incluyen una curva de calibres, que es la distancia entre las caras de las almohadillas
que están en contacto con costados opuestos del pozo. Este microcalibre es de gran
ayuda debido a que la presencia de costra de filtrado, indicada por diámetros inferiores
al de la barrena, señala aquellas formaciones que son lo suficientemente permeables
para permitir la invasión. Las zonas de desprendimientos vienen señaladas en la
misma forma que cuando se usa el aparato normal de calibración.
USOS DE LOS DATOS
La reunión de datos de subsuelo es una tarea necesaria que no tiene valor geológico
hasta que haya sido estudiada, clasificada, registrada e interpretada. El objetivo
principal del geólogo que explora el subsuelo es encontrar las trampas ocultas hasta el
momento, ya sean estructurales o estratigráficas; el geólogo de producción busca
información que pueda conducirle a aumentar el rendimiento en hidrocarburos dentro
de un área productiva. Pero ninguno de ellos puede alcanzar su objetivo hasta que
haya levantado la sección estratigráfica incluso en sus menores detalles. Este trabajo
comprende la correlación de unidades sedimentarias y el reconocimiento de
disconformidades dondequiera que existan.
La principal aplicación de diagramas y muestras es la correlación 3e de los estratos

sedimentarios de pozo a pozo. Las muestras son esenciales para la correlación de la
superficie con el subsuelo. Las correlaciones en el subsuelo se hacen comparando la
litología de las muestras, por medio de los fósiles del ripio y de los testigos, y
comparando las curvas obtenidas mediante los métodos eléctricos y radiactivos.
Cuando los datos del pozo están expresados en forma de diagramas es costumbre
deslizar éstos unos junto a otros para encontrar el nivel en que las curvas son
equiparables.
Las diferencias de potencias en las secciones estratigráficas entre pozos pueden ser
el resultado de diferencias originales en la profundidad de deposición, diferencias en
grado de compacidad, intersección por fallas o la presencia de disconformidades.
Aunque las disconformidades son rara vez realmente vistas por el geólogo del
subsuelo (y cuando lo son es únicamente en testigos), él está en mejor posición para
encontrarlas que el geólogo de la superficie a causa de su punto de vista regional en
tres dimensiones. La mayoría de las disconformidades se identifican por el
acortamiento o alargamiento de secciones causado por las unidades estratigráficas
que faltan en un caso y los estratos adicionales en el otro.
Los datos obtenidos por el geólogo del subsuelo son muy valiosos para evaluar las
posibilidades de las diferentes formaciones para que actúen en el área investigada
como rocas madre, rocas almacén o rocas sello. Las descripciones físicas y las
mediciones mecánicas incluyen información tan pertinente como contenido orgánico,
porosidad, permeabilidad y potencia.
Después de terminar con este trabajo (o mientras se está haciendo) los datos
obtenidos son llevados a planos y secciones. Entonces es el momento para la
interpretación geológica, conclusiones y recomendaciones.
Planos del subsuelo y secciones.37 Los diagramas y muestras de rocas obtenidos

durante la perforación de pozos individuales pueden ser de considerable valor incluso
considerados aisladamente,38 pero cuando se reúnen con la información similar
obtenida de otros pozos, los planos y secciones transversales resultantes son de
inestimable valor para el hallazgo de petróleo. Es tarea del geólogo del subsuelo reunir
los datos de pozos individuales en ihisiraciones geológicas que guíen a los jefes
administradores de la compañía en el desarrollo del programa de exploración. A
continuación se describen les diversos tipos de planos del subsuelo.
Planos geológicos. En muchas áreas, debido a la potente cobertura de suelo glacial

o de otros tipos de mantos, las formaciones geológicas de la Superficie de los estratos
rocosos pueden ser llevadas a un plano únicamente por los datos recogidos en pozos.
Ésta fue probablemente la más antigua aplicación de la geología del subsuelo. Los
pozos de aguas dulces, de aguas saladas y de petróleo proporcionaron la información
necesaria para levantar el plano geológico de la península meridional de Michigan,
donde existen condados enteros sin un solo afloramiento.
La utilización de los planos geológicos de superficie en la búsqueda de petróleo fue

discutida en una sección anterior. Tales rasgos estructurales como domos, anticlinales
y cierres pueden ser discernibles sobre un plano geológico por la presencia de
ventanas y otras significantes distribuciones de afloramientos. Las fallas pueden ser
importantes en el hallazgo de petróleo
Planos Paleogeológicos. Un plano paleogeológico muestra la geología de la superficie

en un período dada en el pasado. Es, en efecto, el resultado que se obtendría
retirando los estratos de rocas más jóvenes por encima de una disconformidad. Los
planos paleogeológicos se construyen llevando sobre un plano las formaciones que
según los datos de los pozos yacen inmediatamente debajo del plano de la
disconformidad y dibujando los límites de las formaciones después de trasladar los
datos de todos los pozos.
El plano paleogeológico es de incalculable valor para el geólogo petrolífero. Revela no

solamente muchos rasgos estructurales enmascarados por la discordancia, sino
también mucha información del pasado geológico que es pertinente para la búsqueda
de trampas sedimentarias o estratigrafías. “El petróleo y el gas se encuentran dentro
de la roca almacén que los contiene tan altos como hayan podido moverse. Si esto es
verdad en el presente, debe haber sido verdad en el pasado, y un estudio de los
cambios geológicos en la superficie y en las estructuras durante el pasado geológico
es de primordial importancia”.
FIG. 4-13. - Plano paleogeológico Premississipense, Oklahoma y Kansas. Cortesía de

Schlumberger Well Surveying Corporation.
Una de las primeras aplicaciones de los planos paleogeológicos tuvo lugar en la región
central de Estados Unidos, donde un plano de las formaciones anteriores al
Mississippiense en Oklahoma y Kansas (fig. 4-13) ha sido ampliamente usado como
guía en la exploración petrolífera.
Un interesante tipo de plano paleogeológico (fig. 4-14) es el que muestra la

distribución de las formaciones geológicas inmediatamente por encima de una
discordancia, como si ésta fuera una ventana a través de la cual se estuviera mirando
desde abajo. Ningún otro tipo de plano muestra en forma tan clara el sucesivo
acuñamiento de las formaciones sedimentarias que yacen encima del plano de la
disconformidad. Estos acuñamientos pueden ser debidos a la deposición original
(líneas costeras) o pueden ser debidos a emergencias y trucación después de una
deposición más extendida.
Fig. 4-14.- Plano paelogeológico, visto desde abajo, de las formaciones que descansan sobre
la discordancia Devoniano-Siluriano en la Península Meridional de Michigan. El buzamiento
regional es hacia el noreste; la formación Lucas es la más moderna de las dibujadas y la Bois
Blanc (“Bob Low”) la más antigua. Por J. K. C hrow, 1958.
Planos Paleogeográficos. El plano paleogeográfico tiene como propósito mostrar las

áreas sumergidas y emergidas en un tiempo dado en el pasado geológico. Muy
frecuentemente las líneas costeras señaladas son el producto de simples
suposiciones. Los datos existentes para la construcción de un plano paleogeográfico
de un período dado están limitados a los restos dejados por la erosión de los
sedimentos depositados durante aquel tiempo. Estos restos pueden ser llevados a un
plano por los afloramientos en la superficie y los datos del subsuelo, pero los límites
son casi siempre el resultado de la erosión y la línea costera original estaba a una
distancia completamente desconocida más allá de los límites actuales.
Únicamente pueden construirse planos paleogeográficos verdaderos allí donde las

verdaderas líneas costeras hayan estado sumergidas y cubiertas con sedimentos más
jóvenes antes de que la erosión haya destruido toda la evidencia del primitivo contacto
tierra-agua. Esta situación ideal es rara. Sin embargo, podrían construirse mejores
planos paleogeológicos que los existentes actualmente con estudios más completos
de la paleoecología de los sedimentos y de las faunas contenidas. Estos estudios
formarían por lo menos la base para una suposición más inteligente respecto a la
distancia de los restos del depósito sedimentario al área emergida original.
Planos de estructuras con contornos. Los planos de contornos de estructuras del

subsuelo se preparan llevando primeramente sobre el plano las cotas de una
superficie de referencia enterrada (usualmente la cara superior de una formación) y
trazando después las curvas de nivel. Estas cotas pueden obtenerse con ayuda de las
altitudes de la superficie exterior, mediante testigos, diagramas de todos tipos,
estudios de muestras y campañas geofísicas (especialmente sísmicas). Las curvas de
nivel pueden estar referidas a cualquier plano conveniente. Muchos campos
petrolíferos han sido descubiertos por planes de contornos de estructuras en una
formación cercana a la superficie y penetrada por pozos de agua, pozos de testigo
continuo y sondeos exploratorios poco profundos.
Evidentemente un plano de contornos de una estructura referido a la roca almacén

(fig. 3-5) es mucho más adecuado para un estudio de la acumulación de petróleo que
el que esté basado en una formación que aflora en superficie. Normalmente un plano
de estructura del subsuelo muestra mayor relieve y cierre * que un plano de estructura
de la superficie.
Existen dos razones principales para el aumento del cierre con la profundidad. Una es
que muchos anticlinales han sido plegados más de una vez. Si las formaciones más
antiguas (y más profundas) han pasado por más períodos de compresión que las
formaciones de la superficie, obviamente la intensidad del plegamiento será mayor. La
segunda razón para el mayor cierre con la profundidad es el amortiguamiento que
tiene lugar cuando una roca más profunda es empujada hacia arriba (relativamente)
por una causa u otra o cuando los sedimentos se asientan sobre una colina, arrecife o
banco de arena enterrado. El efecto es similar al de apretar un dedo contra una
almohada o un colchón.
Existen también ejemplos de disminución del cierre con la profundidad. Esta situación
puede tener lugar donde el buzamiento regional aumenta con la profundidad. El cierre
de un anticlinal de la misma magnitud es mayor cuando reposa sobre una superficie
casi plana que cuando lo hace sobre un plano inclinado, como en el flanco de una
cuenca de sedimentación.
La posición del vértice de un anticlinal puede desplazarse lateralmente con la

profundidad debido a asimetría, convergencia o discordancias. El plano axial de un
anticlinal asimétrico buza alejándose del flanco más empinado, con lo que la parte
superior de la estructura está en profundidad debajo del flanco de buzamiento más
suave. La convergencia de los estratos entre la superficie y la roca almacén es la
causa de que la parte superior del anticlinal emigre en dirección de la convergencia. El
desplazamiento del eje del levantamiento más intenso después de una emergencia y
una nueva sumersión produce el traslado del vértice del pliegue por encima de una
discordancia.
El petróleo y el agua dentro de una roca almacén se ajustan naturalmente a la

estructura de la roca almacén y no a la estructura de las formaciones superiores.
El plano de contornos de una estructura revela también la situación de las fallas 4r que
cortan a la formación en estudio. Debido al amortiguamiento hacia arriba, o a la
presencia de disconformidades, puede suceder que no se vean las fallas en las
formaciones que afloran en la superficie y, sin embargo, pueden haber jugado un
importante papel en la acumulación de petróleo. Como se verá en el capítulo 13. la
intersección de un anticlinal de eje buzante con el plano cerrado de una falla crea una
trampa para hidrocarburos. Los planos de contornos de las estructuras en el subsuelo
de las formaciones productivas dan la situación de tales trampas. Otra ayuda para la
búsqueda de trampas es el plano de contornos del mismo plano de falla. El levanta-
miento de fallas en tres dimensiones ha demostrado que la superficie de las fallas son
curras más o menudo que planas.
Los planos de contornos de estructuras de los subsuelos, tanto locales como

regionales, contienen información geológica de gran valor. El plano local señala las
posibles acumulaciones cíales para completar el cierre en la mayoría de los tipos de
trampas por variación de la permeabilidad («estratigráficas») que se describen en el
capítulo 14. Los planos estructurales regionales muestran las profundidades (por
medio de planos de líneas de nivel de la superficie) de las posibles rocas almacén.
También muestran el tamaño en la actualidad del área potencial de drenaje a través
de la cual puede haberse movido el petróleo antes de quedar atrapado.
Planos de paleoestructuras, paleotectónicos o palinspaticos. Los planos

palinspásticos muestran la historia estructural o tectónica de una región.
FIG. 4-15.- Mapa paleotectónico de Alaska, que muestra la estructura regional durante los
periodos triásico y jurasico. Cortesía de Schlumberger Well Surveying Corporation.
(Fig. 4-15). Como se verá posteriormente, bajo “Época de acumulación” (capítulo 10),
la época de los movimientos de la Tierra es de la máxima importancia. Evidentemente
una trampa en la que el petróleo se ha acumulado debe haberse formado antes de
que el petróleo existente en la actualidad se hubiera generado. Woodward50 describe
tres períodos de plegamientos en los Apalaches, en el presiluriano, últimos del
devoniano y últimos del paleozoico. Cada plegamiento fue suficiente para producir su
propia serie de trampas estructurales potenciales.
El tipo más simple de plano de paleoestructura es el construido eliminando el

buzamiento regional. El plano muestra el carácter del plegamiento antes de que se
produjese el basculamiento regional. Si este basculamiento fue muy reciente, el
petróleo puede no haberse ajustado aún por completo a las nuevas condiciones
estructurales y así la forma de la situación estructural más antigua puede servir de
guía para el petróleo.
Planos de isopacas. Una isopaca es una línea que pasa por los puntos de espesores
iguales. El geólogo del subsuelo determina la potencia de una unidad rocosa y lleva
estos datos a un plano. Las líneas isopacas pueden entonces dibujarse en la misma
forma que las líneas de nivel.
Si la cara superior de la sección incluida en un plano de isopacas representa una

superficie de deposición originalmente horizontal más que una superficie de erosión,
entonces las líneas isopacas forman el negativo del fondo del mar al comienzo de la
deposición de la sección llevada al plano. Esta imagen negativa muestra las colinas o
anticlinales como depresiones y los valles o sinclinales como promontorios. En otras
palabras, este negativo representa una superficie de erosión o la superficie de una
estructura. Si es esto último, la superficie estratigráfica inmediatamente inferior debe
ser paralela.
FIG. 4-16.- Mapa de isopacas, grupo Traverse (Devoniano), Michigan. La potencia disminuye
hacia el sur desde el centro de la cuenca de Michigan hacia los ejes de los arcos Kankakee y
Findlay y al norte hacia el escudo precambriano. Las áreas rayadas indican que las rocas
Traverse han sido erosionadas. Departamento Geológico de Estados Unidos. (revisado).
Si las caras inferior y superior de la sección estudiada en un plano de isopacas son

discordancias erosiónales y fueron una vez planas o casi planas, el plano refleja la
estructura de la cara inferior en la época de deposición de la cara superior. Sin
embargo, si una de las superficies fue erosionada irregularmente anteriormente a la
deposición, la imagen estructural puede estar enmascarada debido a la presencia de
canales locales en la sección sedimentaria. Como regla general, los planos de
isopacas son indicadores fieles de la estructura en áreas de rocas plegadas donde las
irregularidades erosiónales son relativamente insignificantes. Son también útiles para
determinar la paleoestructura regional en regiones llanas donde el plegamiento ha sido
de escala reducida.
Sin embargo, cuando interpreta planos de isopacas que cubren áreas locales llanas, el
geólogo debe conocer el grado en que ambas superficies fueron destruidas antes de la
deposición.
Las cuencas sedimentarias, donde se encuentra la mayoría del petróleo del mundo, se
identifican y estudian mediante planos de isopacas (fig. 4-16). El número y época de
los sucesivos hundimientos pueden determinarse dibujando planos de isopacas de
diferentes intervalos de sedimentación. Estos planos delinean también las áreas de
«adelgazamiento» de las posibles rocas almacén. Tales adelgazamientos hasta -la
extinción se debe en la mayoría de los casos al aplanamiento y corte de la cara
superior de la sección en cuestión anteriormente a la deposición de los sedimentos
que reposan directamente sobre ella, pero en algunos casos los acuñamientos son
verdaderamente líneas costeras originales.
Los planos de isopacas son empleados con frecuencia en la búsqueda de petróleo.

Por ejemplo, una reducción local en potencia en un plano de isopacas, si no está
causada por la presencia de una colina en la cara inferior o un canal en la cara
superior, es con toda probabilidad un anticlinal o un domo que se formó y fue cortado
antes de que la roca que yace sobre la zona cubierta por el mapa fuera depositada.53
FIG. 4-17.- Plano de litofacies que muestra el carácter de los depósitos cambrianos en el norte
de las Rocosas. Cortesía de la Asoc. Americana de Geólogos de Petróleos.
Un tipo especial es el plano de convergencias 54 que muestra la dirección y grado del

adelgazamiento (convergencia) de una sección estratigráfica. Si este adelgazamiento
es de considerable magnitud, la estructura (y especialmente la posición de los ejes de
anticlinales) de las rocas más antiguas es completamente distinta de la mostrada por
las rocas que yacen sobre la unidad convergente. Para determinar el desplazamiento
estructural entre la superficie y las rocas situadas debajo de la sección convergente,
es necesario construir un plano de la estructura de superficie así como un plano de
convergencias. La construcción del plano de contornos de la estructura anterior a la
convergencia es relativamente sencilla y está basada en el cálculo de las cotas de las
rocas más profundas donde las curvas de nivel de la estructura superior cortan a las
líneas de isopacas o convergencia.
Los planos de isopacas son también útiles para determinar el volumen de una roca
almacén con el propósito de calcular las reservas de petróleo.
FIG. 4-18.- Plano paleogeológico (visto desde abajo) que muestra las facies en la formación
basal Dundee en la Península Meridional de Michigan. La roca basal Dundee que descansa
sobre la discordancia pre-Dundee es caliza dolomítica o caliza de alto contenido de calcio.
Según Landes, 1951.
Ya se ha indicado " que un plano de isopacas solamente muestra la potencia total del
intervalo que se esté estudiando y que para obtener los cambios laterales en
diferentes épocas geológicas es necesario tener una serie de dichos planos. Esto
puede evitarse determinando el porcentaje de adelgazamiento o engrosamiento para
diferentes intervalos entre pares de pozos y llevando estos datos sobre una sola hoja.
Planos de Facies. Las diferencias de un punto a otro en el carácter de los sedimentos

físicos (litofacies) o de los sedimentos orgánicos (biofacies) pueden representarse
sobre planos de facies (fig. 4-17). El procedimiento usual es convertir los datos en
números, como cifras de porcentajes, y entonces construir los planos dibujando las
líneas que unan puntos de igual valor. Los datos iniciales se obtienen de testigos o
fragmentos de ripio en los pozos, de muestras de afloramientos o de ambos.
Krumbein ha confeccionado una lista con un considerable número de características
de rocas sedimentarias que han sido utilizadas o pueden utilizarse para la
construcción de planos de facies. Ejemplos de planos de litofacies son los que
muestran las variaciones en tamaño del grano, porosidad, permeabilidad, contenido de
minerales pesados, contenido de arcilla, esfericidad de los granos, contenido de
magnesio, residuos insolubles y grado de cementación. Los planos que muestran los
cambios laterales en el contenido de arena o arcilla son especialmente valiosos. Las
variaciones en el carácter de los fluidos contenidos, tales como el contenido de sal en
el agua fósil, y el grado de saturación se ven fácilmente sobre planos de esta clase.
Entre los tipos de planos de biofacies están los que muestran las variaciones en el
porcentaje de un tipo particular de organismo o en el contenido total orgánico.
Los planos de facies pueden ser de tres o dos dimensiones. La figura 4-17 tiene tres
dimensiones; muestra la litología dominante a través de toda la sección del cambriano.
Los planos de facies de dos dimensiones muestran la litofacies o biofacies de la roca
inmediatamente por debajo o por encima del contacto de una formación. Este último
puede verse en la figura 4-18.
FIG. 4-19.- Plano de perfiles. El perfil se dibuja junto al pozo correspondiente sobre el plano. La
relación entre convergencias y otros cambios laterales y su posición geográfica pueden verse
inmediatamente. Dibujo de John Jesee Hayes.
Las facies son de gran importancia en los problemas del origen y acumulación del
petróleo. Por medio de los estudios de facies pueden determinarse las imágenes
paleogeográfica y paleoecológica. En escala regional pueden identificarse las áreas
emergidas y sumergidas en cualquier época del pasado geológico; estimarse el tipo
del terreno emergido y su relieve, determinar la paleoclimatología y clasificar las áreas
sumergidas respecto a la profundidad del agua, cercanía a la costa y topografía del
fondo del mar. Es necesaria toda esta información para el estudio de las posibles
rocas madre, rocas almacén y rocas sello y para la búsqueda de áreas favorables a
las trampas, especialmente las debidas a la desaparición de permeabilidad.
En escala local los estudios de facies pueden apuntar en dirección de zonas no

descubiertas de bancos de arena, arrecifes y dolomías porosas.60 Los cambios de
facies en una formación poco profunda pueden incluso ser un reflejo de anticlinales y
sinclinales más profundos.
Secciones transversales. Por medio de secciones transversales, el geólogo del

subsuelo puede reunir en un solo dibujo la información que se encuentre distribuida
sobre varios planos. Se puede emplear una sola sección transversal para mostrar la
topografía de la superficie, potencia de la cobertura, la columna estratigráfica, cambios
de facies, convergencia, recubrimientos y la estructura a diversos niveles. La
desventaja de la sección transversal reside en su limitación a dos dimensiones. Por
tanto, las secciones transversales deben usarse siempre en unión de planos y
viceversa.
Las secciones transversales se construyen introduciendo la información obtenida en

los pozos e interpolando los límites de formaciones y otros datos entre pozos. Pueden
dibujarse tomando como base el nivel del mar, con lo que la topografía y la estructura
pueden verse tal como son en la actualidad, o puede tomarse como base el límite de
una formación con objeto de acentuar la convergencia o los cambios de facies.
La costumbre americana de exagerar la escala vertical respecto a la escala horizontal

en secciones transversales ha sido censurada, y con justicia, por Suter." Un
buzamiento de 5° se convierte en uno de 46° si la escala vertical se exagera doce
veces, lo cual no es muy raro. La única excusa para el aumento de la escala vertical
es mostrar detalles estratigráficos que serían demasiado pequeños para ser visibles si
se usara la verdadera escala.
Otros métodos de ilustraciones geológicas incluyen los planos con perfiles de pozos "
(fig. 4-19), los bloques (fig. 4-20), los dioramas de estructuras64 y los modelos con
varillas, que tienen una varilla de madera sobre las que las formaciones se marcan con
colores para cada pozo. Los bloques fueron usados con mucha efectividad por Bass M
para mostrar potencias de arenas almacén. Cada pozo está en la intersección de dos
tabiques que se cortan perpendicular-mente entre sí (fig. 14-10).
Búsqueda de trampas. La principal razón para el empleo de geólogos petrolíferos es

su capacidad para encontrar yacimientos de petróleo. Como hasta ahora no ha sido
perfeccionado ningún método directo para el hallazgo de petróleo, los geólogos
concentran principalmente su atención en la búsqueda de trampas enterradas en las
que pueden ocultarse petróleo o gas. En el capítulo 3 se revisaron los métodos,
geológicos y geofísicos, por medio de los cuales se buscan las trampas basándose en
los datos obtenidos desde la superficie sin recurrir a la perforación de pozos. Estos
métodos han obtenido muchos éxitos en el descubrimiento de anticlinales y otros tipos
de trampas estructurales, pero no han obtenido tantos en la búsqueda de trampas por
variación de la permeabilidad («estratigráficas»).
La geología del subsuelo aumenta cada año su valor relativo como método de
búsqueda de trampas por: 1) disminuir las áreas en que pueden desarrollarse
prospecciones desde la superficie, y 2) aumentar la información existente del subsuelo
por la continua perforación de pozos de exploración. Los éxitos de la geología del
subsuelo pueden considerarse dividendos de las inversiones hechas en pozos secos.
Aunque se debe a la geología del subsuelo el descubrimiento de muchas trampas
estructurales, su principal ventaja reside, quizás, en que hasta la fecha ha probado ser
el único método consistente en la búsqueda de trampas del tipo estratigráfico.
El mayor obstáculo en la búsqueda de trampas mediante la geología del subsuelo es

que ésta es incapaz de situar exactamente su posición, lo cual es factible con los
métodos de superficie en anticlinales. Por tanto, la búsqueda de petróleo mediante la
geología del subsuelo exige la perforación de más pozos exploratorios para estudiar la
sección estratigráfica, lo que da como resultado un mayor gasto por litro de petróleo
descubierto.
La búsqueda de trampas mediante la geología del subsuelo exige primero la reunión

de todos los datos existentes y después su proyección sobre planos, cartas,
diagramas y secciones. Se ha visto ya, en cada una de las secciones individuales,
cómo estas ilustraciones apuntan hacia las vecindades generales de posibles trampas
tanto estructurales como estratigráficas. La superposición de los datos pertinentes
sobre un único plano puede ayudar a delimitar las áreas más prometedoras.
Después de haber encontrado la trampa y descubierto el petróleo, la geología de
producción juega un importante papel en el desarrollo subsiguiente y en los programas
de recuperación secundaria.
FIG. 4-20.- Modelo en bloque. Domo de sal Anse la Butte, Luisiana. Cortesía de la Escuela de
Minas de Colorado.
CAPÍTULO 5
ORIGEN Y EVOLUCIÓN DEL PETRÓLEO Y EL GAS 1
Los geólogos han escrito más sobre el origen del petróleo que sobre cualquier otro tema.2
La especulación en este campo fue iniciada en el año 1860 y el problema del origen está aún
en vigencia. «La cantidad de artículos nuevos que vienen a añadirse todos los años al ya
formidable montón, amenaza enterrar el tema con el propio peso de las diversas opiniones, y el
lector interesado, que busca ansiosamente la verdad, se pierde en 'el laberinto! de las
opiniones en conflicto.»-1 Esta prodigiosa cantidad de investigación y discusión no ha sido, sin
embargo, en vano. Muchas teorías han sido puestas a prueba y se las ha encontrado falsas.
Aunque han aparecido muchas más teorías para reemplazar a las descartadas, no es sino
cuestión de tiempo el que éstas sean puestas a prueba y sean rechazadas las inadecuadas
hasta que obtengamos una imagen bastante clara del origen y evolución del petróleo y, el gas.
«Los misterios relacionados con la formación del petróleo están j desapareciendo debido
principalmente a la aparición de más y mejor información química, geológica y bacteriológica.»
La última década ha contemplado un considerable avance en nuestra compresión de la

génesis del petróleo. Este hecho ha sido debido a: 1) perfeccionamientos en las técnicas, y 2)
una investigación adecuadamente financiada por las industrias interesadas. Una técnica
relativamente nueva es la congelación inmediata de las muestras de sedimentos recientes.
1 WILLIAM B. HEROY , Jr.: «Petroleum Geology», Geol. Soc. Am. 50th Anni-versaru Val. (1941).
págs. 512-548; V. C. ILLING : «Origin of Petroleum», Science 1 of Petroleum (Oxford University Press,
1938), vol. 1, págs. 32-38; U. S. Geol. Survey: «Geology and Occurrencos of Petroleum in the United
States», Petroleum Inves-tipntion, Lecturas 73." Congreso, II. R. '441 (1034), págs. 805-910; E.
DioGoi.YKH y ]!AHOLI> VANCK: «Petroleum Bibliography. Bull. Agr. and Medí. Coll. Texas, 83 (1044).
págs. 330-338; A. G. SKKLTON y M. SKET.TON: «A Sclcctcd Bibliograpby of thc Theories of the Origin oí
Petroleum», Ofcínhomtt Geol. Survey, Mineral Rcpt. 7 (1042); G. D. HOBSON : «Petroleum Geology»,
Rev. of Petrol. Technol. (Institute of Petroleum, Londres, 1047), vol. 7, págs. 1-16; F. MORTON: «Origin
of Petroleum», Petrol. Engineer (enero, 1953), págs. A-60 y sigs.; NELSON P. S^EVENS: «Origin of
Peroleum— a Review», Bwlt Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 40 (enero, 105G), páginas 51-61.
2 G. M. KNEBEL : «Progress Report of API Research Project 43, The Transfor-mation of Organic
Material hito Petroleum», Culi. Am. As'soc. Petrol. Geol., vol. 30 (noviembre, 1946), pág. 1945.
' V. C. ILLINC ?; «Gooíogy of Petroleum», Jour. Inst. Petrol. TecnnologistS,
vol. 21 (1035), pág. 491.4 BENJAMÍN T. BROOIÍS: carta dirigida al Dr. Robert W. Schiessler,,7 julio 1955.
1
La cromofotografía permite una determinación más exacta de diminutos porcentajes dé
hidrocarburos de la que había sido posible hasta ahora. Por último, la edad en años de
compuestos de carbono geológicamente recientes puede encontrarse por medio de la
determinación del carbono 14. Como resultado es ahora posible analizar sedimentos y rocas
para determinar su contenido de hidrocarburos mucho más exactamente que anteriormente y
distinguir el petróleo más antiguo de la materia orgánica reciente.
La industria ha financiado las investigaciones sobre la génesis del petróleo a través de

actividades en laboratorios de investigación do compañías individuales (a las que nos referimos
a continuación) y m a través de proyectos de investigación establecidos por asociaciones tales
como él American Petroleum Institiite (API). Especialmente diarios de mención en esta última
categoría son el Proyecto de Investigación APl n." 6, «Composición del petróleo» al cual nos
volveremos a referir en el capítulo 7, el proyecto API nº 4., «Transformación del material
orgánico en petróleo»," y el Proyecto API nº 51, «Estudio de los sedimentos recientes cercanos
a la costa y sus condiciones ambientales en el norte del Golfo de Méjico».7
La investigación do la génesis del petróleo no os un ejercicio puramente académico.
Cuando podamos determinar exactamente bajo qué condiciones se forman los depósitos
comerciales de petróleo y la fecha de su formación, podremos limitar la exploración petrolífera
a: 1) los lugares que reúnan estas condiciones, y 2) las «trampas» que estaban en existencia
en el tiempo debido
PROBLEMAS Y FASES EN LA HISTORIA NATURAL DEL PETRÓLEO Y EL GAS
2
Los problemas que surgen al analizar el nacimiento y evolución del petróleo y el gas y las
fases envueltas en esta evolución son varios. Los más importantes son:
1. La procedencia de los elementos (hidrógeno y carbono).

2. La acumulación de los materiales originarios.
3. El enterramiento de estos materiales.
4. La transformación de sólido a líquido (o gas).
5. Evolución del petróleo.
Estos cinco puntos no pueden darse en su orden cronológico exacto, pues algún
solapamiento puede ocurrir entre las diversas etapas; y nadie sabe con seguridad justamente
cuándo tiene lugar la transformación de sólido a líquido.
El problema de la génesis del petróleo se complica por la misma complejidad del petróleo
(capítulo 7). El petróleo crudo «contiene moléculas que varían en tamaño de uno a cincuenta o
más átomos de carbono por molécula y que comprenden una gran variedad de tipos».9 Hasta
1957 se habían aislado 108 compuestos de hidrocarburos solamente en el gas y en la fracción
de la gasolina de un petróleo crudo. Además se cree que «todos los petróleos contienen
sustancialmente los mismos compuestos de hidrocarburos» y dentro de cualquiera de las cinco
clases principales de hidrocarburos «los compuestos individuales se encuentran en
proporciones que son generalmente del mismo orden de magnitud para los diferentes
petróleos».10 Cualquier teoría del origen del petróleo ha de ser compatible con esta
uniformidad de complejidad de los petróleos naturales.
La solución del problema está definitivamente dentro del dominio de la química de acuerdo
con Brooks: «Estoy firmemente convencido que la formación del petróleo es esencialmente un
problema químico y que los geólogos han determinado ya las condiciones (tales como el marco
ambiental) dentro dé las cuales los procesos químicos han de ser explicados».11
PROCEDENCIA DEL HIDRÓGENO Y EL CARBONO 12
Origen primario. Poca duda cabe de que el carbono y el hidrógeno del petróleo y el gas
natural estaban, en sus estados iniciales, así como los restantes elementos de la Tierra, en
solución en la roca o magma líquido caliente. El metano, di,, el hidrocarburo más estable, ha
sido encontrado en gases volcánicos. Los meteoritos, muestras de rocas procedentes del
espacio, pueden contener hidrocarburos.1-1 Los espectros de Neptuno, Júpiter, Saturno y
Urano muestran la presencia de metano en cantidades astronómicas.14 Dentro de las rocas
ígneas de la corteza terrestre se encuentran el hidrógeno y el carbono combinados en forma
mineral, pero no en cantidad y concentración suficientes para su explotación comercial.
Ejemplos son los hidrocarburos oscuros que se han encontrado en las pegmatitas en
cantidades diminutas.
" FREDEIUCK D. ROSSINI: «FTydroearbons from Petroleum», Jour. Inst. Petrol., vol. 44 (abril,
1958), págs. 97-107." «Fundamental Research on Occurrence and Rccovery of Petroleurr), 1950-
1051»: Am. Petrol. Inxt. (1052), págs. 08-225; 1952-53 (1954), págs. 151-220.
' Ibíd.: 1950-51 (1952), pág. 25G; 1952-53 (1954), págs. 241-371; 1954-55 (1956), páginas 91-340.
* HAROLU W. HOOTS : «Origin, Migration and Accumulation of Oil in California», Calif. Dw.
Mines Bull 118 (agosto, 1941), pág. 259.
3
La cuestión que ha de determinar el geólogo es si este hidrógeno y carbono originalmente
magmáticos (inorgánicos) fueron absorbidos por plantas o animales antes de su conversión en
petróleo. En otras palabras, ¿pasaron el carbono y el hidrógeno a través de una fase orgánica
'en la historia natural del petróleo crudo? Las siguientes secciones describen los cinco puntos
evidentes que deben ser considerados antes de alcanzar una respuesta a esta cuestión.
Síntesis de hidrocarburos a partir de materias primas inorgánicas. Se ha demostrado

frecuentemente en oí laboratorio quo los hidrocarburos pueden ser obtenidos de: 1) dioxido de
carbono, metales alcalinos libres y agua, y2) carburos metálicos y agua. El método de
obtención a partir del dióxido de carbono, los álcalis y el agua fue demostrado por primera vez,
por Berthelot en 1886. Se atribuye a Mendeleyev la obtención cíe hidrocarburos a partir de
agua y carburos en 1877. Desde entonces ambas síntesis han sido repelidas muchas veces.
Éstos son los dos métodos principales para la obtención do hidrocarburos a partir de materiales
inorgánicos. Debe notarse que ambos procedimientos exigen sustancias (metales alcalinos
libres y carburos metálicos) que son desconocidos o al menos hasta ahora no encontrados en
la naturaleza. Es cierto que la Tierra tiene un núcleo pesado, pero los estudios del magnetismo
terrestre y de los meteoritos nos inducen a creer que este mayor peso específico es debido a la
concentración de hierro y níquel en el núcleo de la tierra más que a la presencia de metales
libres alcalinos o de carburo de hierro. Además, las presiones son de tal magnitud por debajo
de la corteza terrestre, que la permeabilidad desaparece con la profundidad. Por esta razón, es
imposible imaginar una transferencia de materiales entro el centro de la Tierra y las liarles
superiores do la corteza terrestre.
Síntesis naturales cíe hidrocarburos dentro de organismos.1" Ciertos hidrocarburos son
producidos por procesos vitales normales sobre la superficie de la Tierra. Se ha citado la
producción de hidrocarburos diversos en minúsculas cantidades por líquenes, algas, plantas do
mayor complejidad, moluscos, corales, insectos, gusanos, peces, y animales superiores
incluyendo al hombre." De hecho, cierto número de plantas y animales producen aceites grasos
en cantidades comerciales. Ejemplos son el aceite de ballena, el aceite de hígado de bacalao,
el aceite de castor y el aceite de palma.
Fotosíntesis. Quizá los organismos más prolíferos en la producción interna de hidrocarburos
son las plantas verdes, a causa de su capacidad de fotosíntesis cuando se exponen a la luz.
Bajo la acción de la luz las plantas verdes absorben dióxido de carbono y agua para producir
compuestos orgánicos de carbono más oxígeno. «En las hojas de algunas dicotiledóneas los
compuestos orgánicos están presentes en forma de almidón; en otras hojas se acumula
azúcar; en algunas algas se forman grasas.»17 La posibilidad de que al menos algunas algas
produzcan grasas por fotosíntesis puede ser extremadamente importante, pues estas plantas
son las más abundantes en el plancton.
Síntesis artificial de hidrocarburos a partir de materias orgánicas. Además de las plantas y

animales previamente mencionados a los que se puede recurrir para la obtención de aceites
naturales, pueden producirse hidrocarburos por síntesis a partir de cualquier materia que
contenga carbono incluyendo pescados, desperdicios de granjas, turba, carbón y pizarras
bituminosas. En la actualidad se están produciendo productos petrolíferos comercialmente a
partir del carbón y pizarras bituminosas en diversas partes del mundo.
El hecho de que el petróleo pueda ser producido a partir de material inorgánico no es por
tanto un argumento válido para que se haya derivado de fuentes inorgánicas, pues también
puede sintetizarse a partir de restos orgánicos.
" FHKDF.UICK D. ROSSINI: op. c¡t.,-p;ÍR. 97. '" Op. cit., pág. "ENJAMÍN T. BHOOKS: carta chada en 12
agosto 1058.12 F. W. CLAHKE: «Data of Geochemistry», U. S. Gcol. Survcy Bull. 70 (1924), páginas
44-755." TIIEODOHK A. IiiNK: «Whence Cnme the ITydrocarbons?», Bidl. Am. Assoc.
4
Testimonio del petróleo y el gas. Los análisis químicos de petróleo y gas y los estudios
ópticos del petróleo han revelado una considerable información, parte de la cual parece tener
relación con el origen del petróleo. Unos pocos gases naturales contienen helio, un producto de
la desintegración radiactiva. Es más fácil explicar este elemento como procedente de minerales
radiactivos cogidos en la misma trampa que el gas natural, que relacionar su presencia con
cualquier ciclo orgánico. Por otro lado, como mejor puede explicarse la presencia de níquel y
vanadio en algunos coques de petróleo es por su origen orgánico, pues los análisis de las
cenizas producidas al quemar ciertos tipos de plantas muestran la presencia de estos metales.
Tales plantas parecen absorber dichos metales del suelo adyacente concentrándolos en ellas.
Otras indicaciones de su origen vegetal son la presencia de compuestos nitrogenados en
algunos petróleos y la actividad óptica de los hidrocarburos del petróleo.
Sanders y Waldschmidt19 han descrito la presencia en petróleos crudos de objetos

microscópicos tales como foraminíferos, diatomeas, restos de plantas, élitros de insectos y
espinas, así como fragmentos de otros materiales. Estos descubrimientos pueden tener o no
significado en términos del origen del petróleo. Es posible que en el curso de su emigración a
través de rocas sedimentarias ricas en materiales orgánicos, el petróleo haya recogido estos
objetos microscópicos.
De máxima importancia para la génesis del petróleo fue el anuncio hecho por Treibs20 en
1934 del descubrimiento de clorofila en pigmentos en el petróleo. Las porfirinas de la clorofila
se encuentran también en pizarras bituminosas, carbón y asfalto. Esto «es una evidencia
concluyente de que el material orgánico originario del petróleo estaba asociado con algas
verdes u otras plantas marinas, que los restos orgánicos fueron bastante rápidamente
protegidos de la oxidación y mantenidos en condiciones anaeróbicas y que Ia presencia de
estas porfirinas de clorofila prueban la existencia de una historia de temperaturas relativamente
bajas».21 La importancia de las' temperaturas bajas en la historia del petróleo crudo so
discutirá posteriormente en este capítulo.
Testimonio de las rocas asociadas.
Las asociaciones geológicas del petróleo y el /;as han conducido prácticamente a que todos
los geólogos rechacen las teorías como completamente inadecuadas. Más del 99 por ciento del
petróleo y gas del mundo producido hasta la fecha procede de rocas: sedimentarias. Más aún,
en todas las regiones petrolíferas la sección de ¡rocas sedimentarias incluye capas que
contienen o han contenido considerable cantidad de material orgánico. Heald22 expresa la
creencia de que la distribución del petróleo dentro de la serie sedimentaria depende de la
situación de material originario dentro de la columna de rocas. En su opinión el petróleo que se
encuentra en capas situadas por encima y debajo de rocas que contengan agua debe tener su
origen en esta zona interior.
Se podría esperar que las rocas cristalinas, cuando existe porosidad, con tuvieran más
petróleo que las rocas sedimentarias si el origen del petróleo' fuera inorgánico. En la realidad,
existen ejemplos de petróleo en cantidades comerciales en rocas t cristalinas. «Más de
2500000 m" de petróleo han producido las rocas ígneas y metamórficas; un campo de gas se
encuentra en un manto de basalto; en un área se encuentran en serpentinas... varios millones
de toneladas de asfalto...»23 En la actualidad se está produciendo petróleo comercialmente en
fisuras de granito precambriano en Kansas24 y en pizarras metamórficas anteriores al
Cretáceo en California.25 Podrían citarse otros muchos ejemplos,2" pero en todos ellos se
encuentran en la cercanía rocas sedimentarias orgánicas que podrían haber sido la fuente del
material bituminoso y, con frecuencia, a altitudes menores.
E. PUATT: «Discussion. Whonco Cnme tho Ttvdrnearbonr;?», Am. Assoc. Pí.'íroí. Gcol.. vol. 41
(noviembre, I!)57), pág. 2. r)í!4 ; C. K. VAN OIIÍ!TÍIANI>: «Cosmin OrÍK¡n of Oil and Gas». World OH, vol.
12Í! (noviembre, !ÍM!t), págn. 150-5!!. '•"' F. C. WHITMOIIK : Revisión del API Rcsoaroh Projoot l.'iB,
Tír'sprrrrli on Occiirrcnce and Recovcrii o/ /'c(ro/cuw. (American Pelroloum Instituto, 1943),
pág. 124: WEHNEH BEHCMANN : «Coral ReoCs Mav Arld to Petroleum Supply Somo rin,,« Kr-i^nfK
Wpins 1 .rttrr CÍO octubre. 1!)48), pág. 2R1.
5
Conclusiones. Para un geólogo la conclusión inequívoca es que el petróleo ha pasado por
una fase orgánica. Que la literatura sobre el origen inorgánico del petróleo haya alcanzado
tales proporciones se debe evidentemente a que los geólogos no han explicado al público
suficientemente el ambiente geológico del petróleo y a la ignorancia por parte de los químicos
de este ambiente geológico. «Si se hubiera insistido, como debía haberse herbó, en que
ninguna teoría sobre el origen del petróleo os admisible a menos que explique la estrecha
asociación entre el petróleo y los sedimentos, la mayoría de las teorías químicas sobre su
origen no habrían sido propuestas.»27 El químico Brooks está de acuerdo con esta afirmación,
pero añade: «Algunas de las teorías propuestas en el pasado por geólogos sin conocimientos
químicos son igualmente tan fantásticas».28 Así es.
POSIBLES ORGANISMOS ORIGINARIOS
No es posible nombrar, con alguna seguridad, los organismos particulares que produjeron el
petróleo en un yacimiento petrolífero dado. Sospecharnos que cualquier tipo de organismo que
contenga aceites grasos o ácidos grasos es en potencia un material origen. Sin embargo, entre
el tiempo de la muerte del organismo y su transformación en petróleo tienen lugar .muchos
cambios, durante los cuales el material orgánico tiende a perder su identidad.
Somos capaces, siguiendo dos líneas de razonamiento, de eliminar de futuras

consideraciones como posible material origen algunas clases bastante amplias de vida vegetal
y animal. Una de las líneas de razonamiento envuelve el factor tiempo. Es obviamente
imposible que los petróleos antiguos se hayan derivado de organismos modernos. «Como el
petróleo se encuentra en rocas que fueron formadas millones de años antes de que existieran
formas tan complejas de vida como árboles, animales terrestres o incluso peces, es evidente
que unas formas muy simples de vida bastaron para proporcionar los materiales que pudieron
transformarse en petróleo...»20 Otro factor lógico dé consideración es el de las oportunidades
de supervivencia. Si un organismo vivió bajo tales condiciones ambientales que fueron escasas
las probabilidades de que subsistían sus restos después de su muerte lo suficiente para llegar
a ser enterrados en sedimentos, entonces las probabilidades de que este organismo sea un
material productor do petróleo también serían escasas.
Estas limitaciones dejan inmediatamente fuera de ulterior alas plantas terrestres no

acuáticas y a los animales, li.'i mayoría de ellos do existían en la época en que se formó, por
ojemplo, el petróleo del ordoviciense. Para organismos que vivan sobre la tierra, las
probabilidades de escapar a la destrucción por putrefacción o por ser devorados por otros
animales son muy escasas. Las posibles excepciones son los organismos terrestres que
pueden ser transportados fácilmente por el viento, como esporas, polen y hojas. Si es
tos materiales se asientan sobre masas de agua pueden quedar atrapados por el limo en el
fondo del mar o del lago y ser preservados de esta forma. Los organismos que viven en aguas
dulces, especialmente en lagos, constituyen naturalmente otro "apartado. Si quedan
preservados en los sedimentos tienen tanta oportunidad de convertirse en petróleo crudo como
las formas acuáticas marinas. Los estudios de las composiciones de carbono isotópico de los
petróleos han mostrado chic los petróleos crudos procedentes do organismos marinos pueden
distinguirse de los derivados de materiales que vivieron en aguas dulces. Este hecho os a su
vez evidencia de que el petróleo puede proceder de materia orgánica no marina.
La vida marina, excepto los vertebrados, era abundante y bastante avanzada al principio del
paleozoico y son estas especies a las que suponemos que pertenecen la mayoría de los
organismos de los que se deriva el petróleo.Las plantas y animales unicelulares, tales como
algas y foraminíferos, fueron abundantes en los mares desde los albores del paleozoico hasta
la actualidad y pueden haber contribuido a los yacimientos petrolíferos de todas las edades.
Los tipos más avanzados de vida marina, además de ser menos abundantes en los períodos
geológicos más remotos, tenían también menos oportunidades de superviviencia a causa de la
presencia y vigor de los animales devoradores del fondo del mar. Es difícil imaginar la
acumulación de las partes blandas de peces (bastante comunes del devoniano en adelante),
estrellas de mar o incluso corales en suficiente abundancia en el suelo del mar para constituir
una fuente de petróleo cuantitativa suficiente.
6
Más y más investigadores de los materiales originarios del petróleo están dedicando su
atención al fitoplancton marino (plantas flotantes) como la más probable sustancia originaria de
la mayoría del petróleo del mundo. Este material tiene muchos puntos a su favor:
1. Las plantas, como fuente primaria de alimento para todos los animales, son
más abundantes que éstos.31
2. El fitoplancton es la vida más abundante en los océanos. Es también la más

abundante en los lagos, pero aquí la cantidad total es, y probablemente lo ha
sido siempre, relativamente insignificante comparada con la vida marina.
3. El fitoplancton es más prolífero en las áreas cercanas a la costa donde existen

los materiales nutritivos aportados por los ríos; ésta es también el área de
mayor sedimentación.
4. Debido a la fotosíntesis, por lo menos algunas de las plantas del fitoplancton

han producido aceites grasos antes de su deposición.
Nada en este concepto exceptúa la mezcla con otros tipos de vida. En el suelo del mar se
acumulan no sólo los restos del material planctónico (incluyendo formas animales), sino
también otros «productos de desecho procedentes de la vida existente en el momento en que
se acumularon las capas madres del petróleo.Desde hace tiempo ha sido costumbre atribuir las
diferencias en los petróleos a las diferencias en la abundancia relativa de los diversos tipos de
organismos originarios.™ Así se podría esperar que los organismos ricos en grasas produzcan
un petróleo parafínico, mientras que los organismos que contengan proteínas darían lugar a un
petróleo asfáltico. En realidad, la actual tendencia de la opinión es contraria a todo concepto
basado en grandes1 diferencias en las materias primas. Aunque es posible que los petróleos
muy recientes deban algunas de sus diferencias en composición química y propiedades físicas
a diferencias en el tipo predominante con el material del que proceden, es también probable
que las diferencias en la naturaleza de los petróleos viejos sean más bien debidas al tiempo
transcurrido y a las condiciones de existencia que a las diferencias iniciales en el material
originario.34 En otras palabras, dos petróleos que procedan de materiales distintos, si tienen
historias similares después de su generación, tenderían a hacerse similares en naturaleza.
ÉPOCA DE LA GENERACIÓN DEL PETRÓLEO
El estudiante de la génesis del petróleo ha de tratar por lo menos do cinco edades distintas:
1) edad de los materiales origen: 2) edad del petróleo: 3) edad de la trampa en la que el
petróleo se acumula; 4) edad de la acumulación, y 5) edad de la roen filmaren. Sabernos poco
acerca de las primeras cuatro de estas edades y, sin embarco, son de extrema importancia en
el hallazgo ríe petróleo. Normalmente se conoce la edad de la formación productiva y por
conveniencia se acepta comúnmente esta fecha como la del petróleo, pero en realidad no
existen muchas justificaciones para esta práctica. 1 Los siguientes párrafos contienen una
discusión de las épocas en que pudo tener lugar la conversión de la materia orgánica sólida en
petróleo Líquido; las otras cuatro edades se consideran en las siguientes secciones.
7
Los geólogos difieren ampliamente en sus opiniones respecto a la época de conversión. En
un extremo están los que creen que el petróleo se formó mientras que se acumulaban los
restos orgánicos en el fondo del mar. Esta es la teoría singenética. Los siguientes' son los que
creen que el petróleo es epigenético, formado posteriormente a los sedimentos que lo
albergan, pero antes de que tuviera lugar la petrificación. Por último existe la escuela de la
postpetrilicación, algunos de cuyos miembros creen que el petróleo está! formándose en los
estratos rocosos enterrados en el tiempo presente.
La determinación de la edad en años mediante el método del carbono 14 puede aplicarse

únicamente a material geológicamente reciente. Se ha determinado que dos petróleos crudos
de California procedentes de yacimientos del plioceno superior tienen en un caso «más
antigüedad que 27780 años»'y en el otro «más antigüedad que 24000 años».35 Hidrocarburos
extraídos de sedimentos acumulados en la costa de Luisiana han demostrado ser de 12000-
13000 años.36 Otro estudio independiente de los sedimentos del Golfo encontró que las
muestras examinadas variaban en edad entre los 3000 y 10 000 años, mientras que los
hidrocarburos similares encontrados en suelos demostraron tener menos de 500 años.37 Una
edad de 5000 años ha sido citada para una arena petrolífera al nordeste de Venezuela.38 Todo
esto prueba que algunos hidrocarburos son muy recientes; pero no es una prueba de que no
puedan existir petróleos más antiguos.
Las posibles causas de la transformación se considerarán posteriormente. En esta sección
se discute únicamente la época de la generación del petróleo.
Petróleo singenético. Si el petróleo es singenético con los sedimentos, los hidrocarburos
líquidos deben haberse formado (o estaban ya presentes) mientras los sedimentos estaban
acumulándose sobre el fondo del mar. Puede demostrarse fácilmente por métodos
experimentales que el petróleo disperso a través de sedimentos finos puede ser conducido
hasta el fondo del mar y retenido allí por esos sedimentos asociados.'0 Los «placeres» de
petróleo son por tanto una posibilidad. Corbett" cree que el aceite pesado («alquitrán») del área
Alhabaska, Alberta, fue depositado con la arena que lo encierra.
" J. McCoNNF.Li, SANDERS : «The Microscopic.nl Examinntion of Crut'e Potro-Icum», Jour. Inst.
Pctrol. Technologists, vol. 23 (1!)37), pác.s. 525-573. 10 W. A. WAI..DSCHMIDT: «Progress Heport on
Microscopio Kxaminalion of Pcrmian Crudo Oils», l'royram '¿tilli Animal Convantion, A\n. Assoc.
Pc.trol. Gcot. (1!)41), pág. 23." ÁLFRED TKEIIJS : «Chlorophyll uncí JTaminderivate in bituminosen
Gcstci-nen, Erdolen, Erdwachsen und Erdols», Annalen der Chemie, vol. 510 (1934), págs. 42-
62; ALFRED TREIBS : «Chlorophyll-und Hamin-Derivate in bituminosen Gesteinen, Erdolen, Kohlen,
Phosphoriten», Annalen dcr Chemie, vol. 517 (1935), págs. 172-190; ALFRED TRKIIIS : «Chlorophyll-
und Haminderivate in organischen Mineralstoffen», Angewandte Chemie, vol. 4!) (1936), págs.
682-686." BENJAMÍN T. BKOOKS : «Origin of Pelroleum», Thr. Chemistry n{ PeírolíttmHydrocarbons
(Reinhold, Nueva York, 1954), cap. 6, págs. 83-102." K. C. HEALD : «Essentials for Oil Pools»,
Elements o! thc Petroleum Inilustry (American Institute of ining and Metallurgical Engineers,
8
El uso de hielo seco para mantener congeladas las muestras de fondos marinos entre su
recogida y su análisis ha conducido al descubrimiento de hidrocarburos ampliamente
distribuidos en tales sedimentos. Las muestras recogidas anteriormente al uso de esta técnica
pueden haber perdido su contenido original de hidrocarburos a causa de la actividad de las
bacterias oxidantes de hidrocarburos.
Por medio de los procedimientos analíticos modernos, que incluyen la cromofotografía y los
estudios con rayos infrarrojos y espectros de masas, los investigadores que trabajan con
muestras obtenidas por debajo del suelo del mar en el Golfo de Méjico, 42 California 43 y
Rusia, 44 así como de sedimentos lacustre en Minnesota43 y Wisconsin, 46 han comprobado
la presencia constante de porcentajes pequeños pero medibles de hidrocarburos líquidos. Lo
mismo ha sucedido en el estudio de suelos.47 Y más aún, los porcentajes, multiplicados por los
kilómetros cúbicos de sedimentos, dan un enorme volumen de hidrocarburos líquidos.
Así Smith48 ha encontrado componentes parafínicos, nafténicos y aromáticos en testigos

tomados del fondo del mar en la Costa del Golfo de Luisiana en proporciones que varían hasta
un máximo de 11700 partes por millón de sedimento seco. Convertido en metros cúbicos de
hidrocarburos por kilómetro cúbico de sedimento, la cifra máxima resulta 30 000, o un poco
más de 2200 litros por hectárea metro.
Cálculos semejantes fueron hechos por Orr y Emory " con muestras recogidas en tres
cuencas en el fondo del mar al sur de California. Los hidrocarburos constituían del 2 al 19 por
ciento de la materia orgánica extraíble, o del 0,003 al 0,038 por ciento del total del sedimento
seco. Incluso estos pequeños porcentajes indican un rendimiento potencial de hidrocarburos
líquidos de estas cuencas igual que 10 veces la recuperación eventual anticipada de petróleo
en .los campos petrolíferos de la cuenca de Los Ángeles. Sin embargo, si estos mismos
sedimentos fueran sujetos a pirolisis (descomposición a alta temperatura) su rendimiento sería
diez veces mayor.
Stevens, Bray y Evans ™ apuntan que las complejas mezclas de hidrocarburos asfálticos
que encontraron en suelos y sedimentos marinos recientes en el Golfo de Méjico «difieren
significativamente de los que componen los petróleos crudos». Por tanto, si estos
hidrocarburos son anteriores al petróleo, deben estar sujetos a cambios posteriores.
Orr, Emery y Grady " investigaron la pérdida de derivados de la clorofila entre el fitoplancton
vivo en el mar y los sedimentos en el fondo del mar. El objeto de este estudio era la explicación
de las porfirinas existentes en el petróleo. «Con que solamente un 1 por ciento de los
pigmentos preservados • en las zonas superficiales de las cuencas sedimentarias se convirtiera
eventualmente en porfirinas en el petróleo, las cantidades serían suficientemente amplias para
explicar el contenido normal de porfirinas! en los petróleos crudos.»
Podemos concluir que existen hidrocarburos líquidos diseminados en los sedimentos

marinos y lacustres que no constituyen «placeres» de petróleo. No sabemos si estos
hidrocarburos son el
resultado del metabolismo de los organismos y por tanto verdaderamente singenéticos o
son el resultado1 de procesos diagenéticos, que los colocarían en la siguiente categoría
(petróleo de prepetrificación). Sabemos solamente que los hidrocarburos en los sedimentos
recientos no son del tipo del petróleo.
Parecen existir tres posibles alternativas para la génesis del petróleo en esta fase: 1) los
hidrocarburos en los sedimentos se convertirán en petróleo en el futuro a través de cambios
cualitativos, pero sin enriquecimiento cuantitativo; 2) tendrá lugar una posterior generación de
hidrocarburos líquidos a partir de la materia orgánica enterrada en los sedimentos que se
mezclará con los hidrocarburos líquidos indígenas para formar el petróleo, y 3) los
hidrocarburos líquidos singenéticos desaparecieran por disipación o destrucción, en cuyo caso
el petróleo será únicamente el resultado de una generación posterior.
Petróleo anterior a la petrificación. Es el caso de la generación de petróleo después de la

deposición, pero antes de la petrificación como lo define Hoots:
El enterramiento y la expulsión de fluidos que lo acompaña por lo compresibilidad de los

sedimentos es una experiencia necesaria para la formación de rocas sedimentarias de grano
9
fino. Ninguna arcilla ha podido escapar a este fenómeno. Además del electo del enterramiento,
las compresiones laterales pueden causar una compacidad adicional. El movimiento resultante
de grandes cantidades de agua ofrece la mejor oportunidad al petróleo para moverse a lo largo
y a través de la estratificación desde las capas madres de grano fino hacia las capas permea-
bles vecinas. A causa de este hecho, la mayoría de los teóricos convienen en que la
generación del petróleo y su emigración a través de la roca almacén tienen lugar durante los
procesos de compactación. Aunque Hoots se ocupó principalmente del origen del petróleo en
los campos petrolíferos de California donde la roca madre es sin duda alguna arcilla, es
también posible que un fango calizo sometido a compresión pudiera ser igualmente la fuente
de hidrocarburos líquidos. Trask " ha encontrado que los depósitos calcáreos (así como los
lodos silíceos) contienen porcentajes relativamente altos de materiales orgánicos. Observó
también que «el período de tiempo inmediatamente posterior a la deposición de los sedimentos
es probablemente de gran importancia en la generación del petróleo».51
Un argumento que se opone a la teoría de la prepetrificación es la; presencia en algunos
casos de campos petrolíferos con más de una época de acumulación. Van Tuyl y Parker55
citan varios ejemplos. El caso mejor conocido es el de Oklahoma City, donde la perforación ha
demostrado la existencia de residuos asfálticos en un contacto discordante entre los sedi-
mentos pensilvanienses y las rocas almacén del ordoviciense. La interpretación natural do esta
situación es que el petróleo emigro hacia arriba formaciones buzantes del ordoviciense y
escapó hasta la superficie en la época anterior al pensilvaniense, A continuación este escape
fue cerrado por la deposición do los sedimentos del pensilvaniense y los grandes yacimientos
petrolíferos del campo Oklahoma City se acumularon debajo do la discordancia. Algunos otros
ejemplos de residuos petrolíferos en discordancias son citados por Van Tuyl y Perker, 50 pero
Rich hace notar que, en proporción al número total de discordancias, las acumulaciones de
asfalto residual son decididamente raras.
En realidad, los residuos de aceites pesados en discordancias situadas sobre yacimientos
de petróleo no son en sí mismos evidencia de una generación múltiple o continua de petróleo.
Pueden interpretarse únicamente como evidencia de que el petróleo estaba en movimiento en
la roca almacén en dos períodos de tiempo muy distanciados entre sí. Es posible que el
basculamiento regional durante la época en que las formaciones truncadas del ordoviciense
fueron expuestas a la superficie permitiera alguna fuga del petróleo de un anticlinal situado
hacia la cuenca. Después de que los sedimentos relativamente impermeables del
pensilvaniense se hubiesen depositado sobre las capas cortadas, un basculamiento posterior
pudo haber dejado en libertad en un punto más profundo mucho más petróleo, que se
acumuló finalmente debajo de la discordancia, o puede haber sido forzada la entrada de nuevo
petróleo procedente de la compresión de los sedimentos superiores. Hiestand ha observado
que el petróleo se adapta a las actuales trampas estructurales y concluye como corolario que el
petróleo y el agua asociada «han hecho ajustes emigratorios en direcciones varias según que
una trampa dada fuera destruida o preservada por modificaciones estructurales». Weeks 58
describe «estructuras tectónicas secundarias» que causan «una redistribución o Vocalización
secundaria del petróleo». Ideas semejantes son expresadas por Van Tuyl, Parker y Skeeters:
«No se sigue necesariamente que estas sustancias (petróleo y gas) sean generadas en las
rocas madres continuamente o en sucesivas cosechas". Es posible que puedan estar
almacenadas durante considerables períodos después de su generación, ya en condición
diseminada o en bolsas, que pueden sufrir una emigración renovada como .resultado de
cambios en la estructura geológica... En algunos casos puede tener lugar una
nueva emigración de petróleo y gas desde bolsas previamente formadas como resultado de
cambios en la dirección o grado de buzamiento, fallas, aumento en el vigor de la circulación
artesiana u otras causas.»59
25
F. C. WIHTMOHE: Revisión del API Resenrrh Projert 43B, Refearch on Ocrur-rence and
Rrconerj/ of t'ctrolpitm (American Potroloum Instituto, 1943).
30
SOL R. SILVERMAN y SAMUEL EFSTEIN: «Carbón Isolopic Compositions of Petroleums and
Other Sedimentary Organic Materials», Bull. Am. Assoc. Petrol. r,enl.. vol. 42 (mayo, 1958),
págs. 998-1012.
10
Petróleo posterior a la petrificación. Algunas de las más antiguas teorías sobre la
generación del petróleo están basadas en el supuesto de quo la conversión de la materia
carbonácea sólida a hidrocarburos sólidos no se efectúa hasta que los sedimentos no hayan
sido profundamente enterrados y presumiblemente petrificados. Sin embargo, existe poca
evidencia real de que la generación del petróleo tenga lugar después de la petrificación. En
muchos yacimientos petrolíferos, especialmente en calizas almacén, la edad de la
acumulación local es evidentemente posterior a la petrificación, pero t esto no es todavía
prueba de que el petróleo fuera generado a partir de los materiales origen en sedimentos
petrificados. Stadnichenko 60 determinó experimentalmente que los materiales originarios
«tienen puntos o zonas de diferente temperatura en los que se forman petróleo o gas, lo que
indica que el petróleo encontrado en nuestros campos petrolíferos puede contener productos
generados en etapas diversas en oí largo curso de la desvolalización de la materia orgánica
de los sedimentos». Más aún, cuanto más tardía sea la generación del petróleo en una serie
do generaciones, mayor será el contenido de carbono fijo en la roca madre y mejor la calidad
del petróleo. Cuando oí contenido de carbono se eleva por encima del 63 por ciento, sólo se
produce gas natural.61 Los materiales usados en estos experimentos fueron pizarras
bituminosas, carbones de llama larga, y otras rocas ya petrificadas. Pero Hoots 62 escribe
que, si el petróleo no se produce hasta después de verificarse la petrificación, se debe aceptar
la tesis de que grandes cantidades de petróleo son generadas y emigran a través de rocas
que se han convertido en compactas y relativamente impermeables. Uno se pregunta
naturalmente por qué una arcilla compacta puede permitir como roca madre que el petróleo se
escape de ella, pero como roca de cobertura no permite que el petróleo la atraviese.
SEDIMENTACIÓN Y ACTIVIDAD BIOQUÍMICA
La primera fase en la formación del petróleo es la deposición de los sedimentos físicos y

orgánicos, que van a convertirse en roca madre. Simultáneamente a esta acumulación sobre el
suelo del mar se verifican ciertos cambios químicos en los sedimentos orgánicos como
resultado del medio ambiental y la actividad de las bacterias.
Deposición tic los sedimentos. La ecología de las rocas madre ha recibido considerable
atención. La industria petrolífera y posteriormente el Departamento Geológico de Estados
Unidos han financiado un programa continuo de estudios llevados a cabo por Parker D. Trask y
sus asociados. Este programa ha dado como resultado la publicación de numerosos artículos y
de dos monografías: Parker D. Trask, Origen y medio ambiental de los sedimentos de los que
procede el petróleo (Gulf Publishing Company, Houston, 1932; y Parker D. Trask y H. W.
Patnode, Capas madre del petróleo, Asociación Americana de Geólogos del Petróleo, Tulsa,
1942). Otra publicación en este 'campo es el compendio, Sedimentos marinos recientes
(Asociación Americana de Geólogos del Petróleo, Tulsa, 1934). Las investigaciones modernas
sobre el contenido de hidrocarburos en los sedimentos marinos y lacustres fueron estudiadas
en la sección precedente.
Medio Ambiental De Deposición. Uno de los principales factores que determinan el

volumen de la acumulación de petróleo es la cantidad del material orgánico originalmente
depositado en los sedimentos marinos o lacustres Esta cantidad es a su vez función del
ambiente, que incluye clima, profundidades de las aguas, composición de las mismas,
topografía tanto de la costa
como del suelo del mar, ríos y estuarios aluviales, corrientes y carácter y procedencia de los
sedimentos.
" NICKOLA PROPOPOVICH : «Primary Source of Petroleum and Their Accumu-

lation», Bulí Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 36 (mayo, 1952), págs. 878-883. '
" PARKER D. TRASK y otros: Origin and Environmcnt o¡ Source Sedimenta o/ Petroleum (Gulf
Publishing Co., Houston, Texas, 1SI32), pág. 234.
" JOSEPH A. TAFF : «Physical Properties of Petroleum in California», Problems of Petroleum
Gcology (American Association Petroleum Geologists, 1934), pág. 177; DAVID B. REGER: «Gravity of
Oils in the Appalachian Province», Problems o¡ Petroleum Geology (American Association of
11
Es esencial que el sedimento inorgánico se deposite simultáneamente a la materia orgánica
para que actúe como agente preservador. Para la máxima deposición de materiales orgánicos:
1) debe existir vida adecuada, especialmente fitoplancton, y 2) deben ser óptimas las
condiciones para el enterramiento de este material. Es posible tener vida abundante sin
ninguna preservación, pero lo contrario es naturalmente imposible.
El plancton es más abundante donde existe un suministro constante de las sales minerales
que necesita para alimentarse. La fuente principal de estas sustancias nutritivas es la tierra y
así el crecimiento del plancton es máximo en la boca de los ríos, incluyendo los deltas. Sin
embargo, las corrientes pueden conducir este plancton a áreas más distantes.
También se encuentran los nutrimientos secundarios. Las formas planctónicas se hunden
cuando mueren. Durante este lento movimiento de descenso tiene lugar la descomposición y
se liberan sales "nutrientes. Estas sales vuelven a ser utilizadas por el plancton como alimento
en las zonas de aguas poco profundas como en las áreas cosieras de bancos de arena."-1 Por
tanto, la vida es más prolífica dentro y cerca de las bocas de los ríos, en las zonas: costeras y
las áreas de bancos de arena. Es axiomático que por muy abundante que sea la vida en el
mar, sólo aquella que queda enterrada en los sedimentos es petróleo en potencia. Si el; agua
es profunda, todo el plancton en descenso puede descomponerse antes de alcanzar el fondo
del mar. Emery, Orr y Grady °4'65 encontraron al investigar los sedimentos de las cuencas de
la costa de California que el grado de descomposición está determinado por la profundidad del
agua, contenido de oxígeno de la misma y topografía del fondo del mar. En esta área la pérdida
debida a la oxidación del fitoplancton era casi el 93 por ciento. Además, casi la mitad del 1 por
ciento de los restos orgánicos que alcanzan el fondo se oxidan antes de quedar enterrados en
el nivel de oxígeno cero. Es de gran importancia en la acumulación de materiales orgánicos la
configuración del fondo del mar. Trask 66 notó que el contenido orgánico de los sedimentos
modernos es mínimo en las cadenas montañosas submarinas y máximo en las cuencas
submarinas. La razón es que los sedimentos de las cuencas están protegidos contra las
corrientes; donde el agua está en movimiento los ligeros materiales orgánicos no pueden
quedar en reposo.
En un tiempo se creyó que para preservar la materia orgánica depositada para su eventual
conversión en petróleo, el agua que cubría el fondo del mar había de ser supersalina o de tan
alto contenido en ácido sulfhídrico que no podría existir vida en ese nivel.67 Esta última
condición se conoce por «euxénica», derivado del Mar Euxeno o Mar Negro, que es notable
por su contenido de ácido sulfhídrico en profundidad y por la acumulación de' restos orgánicos
en su fondo. Se sabe ahora que, incluso en el Mar Negro, se ha exagerado el efecto del
envenenamiento por ácido sulfhídrico sobre la acumulación de materia orgánica.68
La tendencia actual no es buscar lo inusual, sino considerar que la deposición de capas
madre se efectuó en aguas de composición normal. La mayoría del material orgánico del que
procede el petroleo fue probablemente depositado en aguas salinas, algo en aguas salobres
(en áreas deltaicas y en «lagos» tipo Maracaibo) y una cantidad relativamente pequeña en
agua dulce.
La proporción de capas madre depositadas bajo cada una de estas Iros situaciones no es
probablemente muy diferente de las proporciones de sedimentos inorgánicos de textura similar
en los mismos ambientes. En otras palabras, el agua salina-no presenta ventajas, excepto en
cantidad. La prueba de esta afirmación es el hecho de que el salobre Lago Maracaibo está
reputado como una de las más productivas masas de agua, en términos de vida acuática, del
mundo actual.6A causa de las condiciones ambientales, los sedimentos inorgánicos o físicos
que acompañan, y exceden con mucho en volumen, a los sedimentos orgánicos son
usualmente barros consistentes de arcilla, limo o fango calizo. Más raramente las arenas de
grano fino pueden contener suficiente materia orgánica para constituir una fuente potencial de
petróleo.70 Smith 71 ha encontrado en un testigo de la Costa del Golfo que una capa de arena
contenía aproximadamente ocho veces más hidrocarburos que la capa inmediatamente
superior de arcilla arenosa. Esto puede ser debido a un contenido original más alto, pero es
más probable que sea el resultado de un primer proceso de compresión del sedimento de
grano más fino, que expulsó el líquido contenido. Esta «emigración primaria» se discutirá en el
capítulo 9.
" Esta conclusión os contraria a la que llega. L. C. SNIDEH : «Current Ideas Regarding
Source Bods», Problems o¡ Petroleum Geoloay (American Association Petroleum Geology,
1934), pág. 63." W. F. LILLEY: «Chicago Radiocarbon Data», Science, vol. 116 (16 diciembre,
1952), pág. 677.
12
Como es lógico, el porcentaje de materia orgánica dentro de los sedimentos varía en forma
amplia de un punto a otro. El contenido medio de materia orgánica en los sedimentos recientes
es alrededor del 2,5 por ciento en peso. Esta cifra es inferior en áreas deltaicas y en las
plataformas continentales donde las corrientes son relativamente fuertes; es más alta en
cuencas cerradas. En masas de agua estancada, como el Mar Negro, el porcentaje puede
alcanzar el 35 por ciento; en lagos pequeños la cifra puede incluso llegar hasta el 40 por ciento.
El promedio en el océano abierto lejos de tierra firme es menor del 1 por ciento.72
Además de clasificar los sedimentos en marinos, salobres y de agua dulce, existen
diferencias locales entre los depósitos marinos. Los más importantes en el pasado geológico
han sido las cuencas, en las que los hundimientos periódicos permitían la entrada del agua del
mar y la deposición de sedimentos. Estas cuencas contenían plataformas, cinturones
intermedios, partes más profundas y zonas más agitadas. La influencia de las cuencas sobre la
distribución general del petróleo y la distribución del petróleo dentro de las cuencas se estudia
en el capítulo 15, «Aspectos regionales de la acumulación». Sin embargo, debe indicarse en
este punto que la forma de la zona de deposición del material orgánico y el tipo de sedimento
inorgánico que lo en-tierra, es otro factor posible que influye sobre las diferencias en el carácter
de los petróleos crudos. :
Procesos bioquímicos. En el transcurso del tiempo en que la materia orgánica va

acumulándose en el fondo del mar, está ésta sujeta al ataque y transformación química por
bacterias. Las opiniones varían ampliamente respecto a la relativa importancia de la etapa
bioquímica en la génesis del petróleo. Es cierto que durante este período la materia orgánica
pasa a ser químicamente más semejante al petróleo;" hay quien cree que puede formarse el
mismo petróleo."
La acción de las bacterias en el fondo del mar ha sido el tema de una activa investigación
durante algunos años. Un artículo de Hammer 75 sobre este tema, publicado en 1934, cita 81
referencias. ZoBell 76 incluye 200 ¡referencias en un artículo publicado en 1947.
Distribución De Las Bacterias. Las bacterias han sido encontradas en sedimentos

recientes hasta la profundidad desmuestrada (7,5 metros). Son más abundantes en los
primeros centímetros y van disminuyendo gradual mente hacia abajo." Se ha dicho que
muestras de rocas sedimentarias' recogidas asépticamente a una profundidad de 475 metros
contenían bacterias indígenas,78 pero esta conclusión ha sido puesta en duda. En las
muestras de arena petrolífera de una «mina» de petróleo de Pensilvania se encontraron
bacterias donde la formación estaba en contacto con el aire, pero no en los
centros de los trozos.70 Es probable que las bacterias encontradas en las muestras de
sedimentos antiguos, aunque abundantes, sean foráneas. Sería extremadamente difícil, si no
imposible, controlar de tal modo las condiciones sobre la plataforma de la torre de sondeo para
poder obtener una muestra incontaminada.
EFECTO E LAS BACTERIAS EN LA FORMACION DEL PETROLEO
Condiciones aeróbicas, no sólo los materiales de los que procede el petróleo sino también el
mismo petróleo es destruido. Se ha visto como oí fitoplancton que se hunde a través del agua
del mar en la costa de California pierde el 93 por ciento por descomposición; otro 3,5 por ciento
se pierde en las capas superiores de los sedimentos antes de alcanzar el nivel de oxígeno
cero. Existe también amplia evidencia de la actividad de las bacterias oxidantes de
hidrocarburos fuera del agua, como puede verse en la desaparición relativamente rápida del
petróleo derramado sobre el terreno. Las bacterias oxidantes de hidrocarburos pueden también
alterar la composición y 'características del petróleo destruyendo algunos compuestos con
preferencia a otros. Por tanto, si el proceso de destrucción se detiene en algún momento, el
petróleo residual puede ser completamente distinto del petróleo inicial.
" P. V. SMITII, Jr.: «Studies on Origin o£ Petroleum. Occurrenco ot Hydro-carbons in

Recent Sediments». Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol. vol. 38 (marzo, 1954), página 383." NELSON P.
STEVENS, ELLISE. BRAY y ERNEST D. EVANS : «Hydrocarbons in Sediments of Gulf of México», Butl.
Am. Assoc. Petrol. Geol., vol 40 (mayo, 1956), págs. 975-983; reproducido on Habitat of Oil
(volumen especial de American As-sociation of Petroleum Gcologists, 1958), págs. 779-789.
" «How Long Does it Take to Form Crude Oil», Oil and Gas Joitr. (11 marzo, 1957), pág. 263.
13
Las bacterias anaeróbicas (reductoras) son abundantes en aguas estancadas, pero son de
mucha mayor importancia geológica en los sedimentos marinos o lacustres por debajo del nivel
de oxigeno cero. Estas bacterias' liberan oxígeno, nitrógeno, fósforo y azufre del material
orgánico. En consecuencia, aumenta el porcentaje de hidrógeno y carbono, haciendo el mate-
rial de composición más semejante al petróleo.
Es de dominio general que las bacterias pueden producir metano a partir de restos
orgánicos. Este hecho no sólo está demostrado en el laboratorio, sino que también puede
verse en la naturaleza en la producción del gas de pantano. Es aún tema de discusión si estas
bacterias pueden producir también hidrocarburos líquidos. ZoBell ha encontrado que tales
hidrocarburos pueden ser producidos en el laboratorio: «Es especialmente digno de mención
que ciertas bacterias anaeróbicas, aisladas de sedimentos marinos, han demostrado que
producen extractos semejantes al petróleo, solubles en éter y no saponificables a partir de
lípidos o ácidos grasos que se encuentran en la naturaleza».
Otro efecto de las bacterias anaeróbicas sobre los sedimentos marinos es la reducción de
los sulfates a sulfures (pirita); Emery y Rittenberg 81 citan que en algunos testigos tomados en
la Costa de California los sulfates han desaparecido totalmente por debajo de los 2 metros.
Las bacterias productoras de hidrógeno pueden concebiblemente contribuirá la evolución de
los hidrocarburos al aumentar el porcentaje de hidrógeno. Esta «hidrogenación bioquímica»
puede efectuarse probablemente con metano, CH4, así como con hidrógeno puro.
Otras actividades de las bacterias que pueden ser significativas en la acumulación y
explotación del petróleo incluyen la producción de ácidos que pueden disolver las rocas de
carbonatos, liberando al mismo tiempo dióxido de carbono que hace aumentar la presión y la
liberación de petróleo de las superficies de los granos en la roca almacén.
Conclusiones. La función principal de las bacterias es la desaparición de los elementos

que no sean hidrógeno y carbono, especialmente oxígeno y nitrógeno, haciendo así que la
composición de la materia orgánica sea más semejante a la del petróleo. El metano puede ser
producido en esta forma, pero es motivo de conjetura si los hidrocarburos líquidos pueden ser
así generados.
Las diferencias en la intensidad y carácter del ataque bioquímico sobre los restos orgánicos
que se acumulan en el fondo del mar pueden ser otra explicación de las diferencias
existentes en la composición y propiedades del petróleo
ENTERRAMIENTO Y ACTIVIDAD DINAMOQUÍMICA; EVOLUCIÓN DEL PETRÓLEO
El enterramiento del material orgánico empieza cotí su deposición, pero puede continuar
largo tiempo después de haber cesado la acumulación de materia orgánica en el fondo del mar.
Hemos visto ya que dentro de los sedimentos que contienen material orgánico existen
hidrocarburos, que no poseen, sin embargo, carácter petrolífero. No sabemos aún si estos
hidrocarburos son el resultado del metabolismo de organismos vivos o el producto del ataque
bacterial. Sospechamos lo primero, pues aunque en el laboratorio se ha producido metano a
partir de acetatos por acción bacterial, los intentos, para hacer lo mismo con los ácidos grasos
más complejos no han tenido éxito."2 la conversión do los ácidos grasos en hidrocarburos por
la perdida de CO2 está aún por explicar."
También existen sólidos orgánicos en los sedimentos. As!, en los sedimentos modernos de
la costa de California, estos últimos exceden, en volumen potencial de hidrocarburos, por diez
a uno a los hidrocarburos singenéticos.*4 Esta conversión simultánea y posterior al
enterramiento de los sólidos orgánicos en hidrocarburos líquidos es lo más difícil de explicar.
Mucho se ha escrito respecto a las condiciones y procesos mediante los que se puede
efectuar la conversión de los restos orgánicos en petróleo dentro de la certeza terrestre, pero a
pesar de esta especulación aún no sabemos cómo, cuándo, ni dónde se forma el petróleo.
Quizá la clave del misterio es la presencia de hidrocarburos líquidos singenéticos. Trask 95
cree que sólo es necesaria la formación de una pequeña .cantidad de «petróleo ancestral»
como iniciador y que el volumen aumentaría enormemente por la disolución de los sólidos
orgánicos tales como pigmentos, ceras y ácidos grasos, que el líquido encuentra en su camino.
Con la incorporación de esta materia orgánica, el petróleo ancestral evolucionaría hasta
convertirse en verdadero petróleo.
Sin tener en cuenta si el petróleo es exclusivamente singenético, exclusivamente
14
epigenético o una mezcla de ambos, es altamente probable que en su primera fase sea un
asfalto semisólido o a lo más un líquido viscoso compuesto principalmente de hidrocarburos
asfálticos. Estos hidrocarburos j contienen oxigeno, nitrógeno y azufre procedentes de la
materia orgánica original. Ejemplos posibles de tales «neopetróleos» son los yacimientos de
aceite pesado («alquitrán») de Athabaska, la caliza oolítica asfáltica Gasper ' (Misisipiense) en
el norte de Alabama y la caliza fragmental asfáltica Anacacho (Cretáceo) del condado Uvalde,
Texas.86 Por otro lado, estas ocurrencias asfálticas pueden ser el resultado de la
desvolatización de petróleo, como en el caso de las filtraciones asfálticas.
No hay duda de que el petróleo, una vez formado, puede sufrir un cambio progresivo dentro
de la roca almacén desde un petróleo crudo consistente principalmente de hidrocarburos
asfálticos a uno que contenga compuestos parafínicos.87 Barton, después de un intensivo
estudio de los petróleos crudos de la Costa del Golfo, concluye:
La temperatura, presión y quizás otros factores actúan sobre el petróleo para producir con el
paso del tiempo una lenta transformación evolucionaria; de un petróleo crudo, pesado, que
consistiría principalmente en residuos según la fraseología de los análisis del Departamento de
Minas de Estados Unidos, pasaría, a través de una serie de petróleos progresivamente más
ligeros, a convertirse en un crudo de base parafínica compuesto predominantemente de
gasolina y queroseno y, por último, a su extinción por dispersión como miembros finales
volátiles de la serie parafínica.88
Más recientemente, McNab, Smith y Betts han llegado a una conclusión similar: «.existe
considerable evidencia de una evolución progresiva en los petróleos crudos, desde los crudos
pesados cíclicos formados en primer lugar j y encontrados en rocas sedimentarias jóvenes
hasta los crudos más ligeros y parafínicos que contienen mayores proporciones de
componentes de bajo peso molecular que se encuentran comúnmente en los horizontes
productivos de más edad o profundidad».8'
Enterramiento del material orgánico. Hay dos fases en el enterramiento del sedimento
orgánico. La primera es la deposición simultánea con el mucho más abundante sedimento
fisco. En la sección precedente se hizo notar que este material es usualmente una arcilla o un
limo fino pues la ligera materia orgánica puede quedar en reposo únicamente donde el agua
estaba tan tranquila que el sedimento no orgánico depositado estaría en suspensión. El
enterramiento es esencial para preservar la materia orgánica bajo condiciones anaeróbicas; el
agua contiene casi siempre suficiente oxígeno para sustentar vida.
La segunda fase en el enterramiento del sedimento orgánico es la deposición de la roca
inorgánica inmediatamente superior, seguida de otras rocas, capa tras capa, de diversos tipos.
La potencia eventual de esta cobertura varía entre amplios límites.'0 No es posible declarar con
alguna seguridad la cobertura mínima que existía en el tiempo en que la transformación tuvo
lugar. Los campos petrolíferos de Kansas oriental son citados con frecuencia como ejemplos
de petróleo existente en rocas que nunca estuvieron profundamente enterradas.
ocks»,
Es cierto que en la actualidad el petróleo se encuentra aquí en las rocas del Pensilvaniense
Superior a una profundidad de sólo unas pocas decenas do metros y que la adición de las
formaciones más altas; del Pensilvaniense y el Permiano que afloran hacia el oeste
constituirían una cobertura total do monos de 600metros, pero es posible que rocas más
jóvenes, especialmente del Cretaceo, puedan también haber cubierto esta área. En el otro
extremo, se conoce hoy petróleo que se encuentra bajo una cobertura do más do GOOO
metros y probablemente existe a profundidades considerablemente mayores.
'" P. V. SMITH, Jr.: «Studies on Origin of Petroleum: Occurrence of Hydrocarbons in Recent

Sediments», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 38 (marzo, 1954), págs. 377-404; P. V. SMITH,
Jr.: «Status of Our Present Information on the Origin and Accumulation of Oil», Proc. Fourth
World Petrol. Congress (1955), sección 1, págs. 359-376; NELSON P. STEVENS, ELLIS E. BRAY y
ERNEST D. EVANS: «Hydrocarbons in Sed ¡monis ot Gulf of Moxiro», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol..
vol. 40 (mayo, 1956), págs. 975-983." WII.SON Ij. ORR y K. O. EMKHY: «Composition of Organie Matter
in Marino Scdimonls: Preliminary Data on Hydrocarbon Distribution in Basins oft Southern
California», Bull. Geol. Soc. Am., vol. 67 (septiembre, 1956), págs. 1247-1258.'* IU. N. PETROVA y
15
I. P.KA « POVA : «Chemical Composition of Dispersed Or-ganic Matter in Sedimentary R
Cambios físicos posteriores al enterramiento. Por lo menos se efectúan dos cambios en las
condiciones físicas con el enterramiento. Uno es el aumento de la presión hidrostática con cada
metro de cobertura añadida Se ha determinado que la presión a una profundidad de 4000 m es
de 430 atmósferas.91 Otro cambio está causado por la subida de las isogeotérmicas o niveles
de iguales temperaturas de la tierra. Los sedimentos enterrados a 4500 metros pueden estar
sujetos a temperaturas de hasta 150"C.
El primor efecto físico sobre los lodos orgánicos como consecuencia del enterramiento y el
peso del material depositado sobre ellos es su compacidad. A causa do la naturaleza del
material, los sedimentos pueden Hogar a sor comprimidos hasta el 50 por ciento 'o más do su
espesor original y el peso específico de los sedimentos puede aumentar desde una densidad
inicial do 1,3 hasta más de 2." Esta compresión va acompañada do la expulsión do un volumen
igual de agua o de otro fluido. La importancia de este proceso en la emigración del petróleo
desde la roca madre hasta la roca almacén será considerada posteriormente en el capítulo 9.
La compacidad y el endurecimiento transforman los sedimentos incoherentes en una roca

sedimentaria. Una deshidratación posterior y los pequeños movimientos de la tierra, crean la
fisuración y crucero de la roca y, si el diastrofismo o metamorfismo estático se hace intenso,
tiene lugar la recristalización e incluso el desarrollo de esquistosidad. Sin embargo, la
generación del petróleo tiene lugar bastante antes de que se alcance la etapa del metamor-
fismo físico. Se demostrará a continuación que, en realidad, los hidrocarburos son destruidos y
no formados por los procesos metamórficos.
Cambios químicos posteriores al enterramiento.93 Aunque no tan obviamente como los

cambios físicos que se producen bajo la carga, la composición química de un sedimento
orgánico cambia con el enterramiento y la mayor parte del cambio tiene lugar antes de que se
haga notable el metamorfismo físico. Campbell creó el término «metamorfismo incipiente» 9l
para designar los cambios químicos que se producen en las rocas orgánicas a causa del au-
mento de la temperatura y presión que acompaña al enterramiento y a la compresión
subsecuente. El porcentaje relativo de volátiles disminuye y aumenta el del carbono fijo.
" FREDERICK M. SWAIN: «Stratigraphy of Lake Deposits in Central and North ern Minnesota»,
Bull. Am. Assoc. Pelroi. Geol., vol. 40 (abril, 1956), págs. 600-653.'" SiiFxnoN JUDSON y RAYMOND
C. MURRAY: «Modern Hydrocarbons ¡h Two Wisconsin Lakes», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol.
40 (abril, 1956), págs. 747-761." NELSON P. STEVENS y otros: op. cit. ' P. V. SMITH, Jr.: op.
cit." WILSON L. ORR y K. O. EMERY : op. cit. 50 NELSON P. STEVENS, ELLIS E. BRAY y ERNEST D.
16
EVANS : op. cit.
En los carbones esta alteración química es la causa de sus diversas clases que van desde el
lignito hasta la antracita, con el grafito como miembro extremo rara vez alcanzado.
Entre los muchos agentes y procesos a los que se ha atribuido la transformación de la materia
orgánica sólida en petróleo líquido, están la presión, las bacterias, los catalizadores, el calor
acompañado del «cracking», la destilación natural y los minerales radiactivos. El tiempo
geológico ha sido también considerado como un factor contribuyente importante.
La presión, para ser efectiva, tendría que ser del orden de magnitud de la presión de
cizallamiento para poder transformar la materia orgánica sólida en petróleo. Los experimentos
hechos a la temperatura ambiente sobre la aplicación de altas presiones a las pizarras
bituminosas y carbones de llama larga dieron como resultado alguna desvolatización
insignificante, pero nada de aceites.95 En la realidad, pocas o ninguna roca madre del petróleo
experimentan presiones de esta magnitud. «El calor superficial por fricción» 9 ha sido citado
como un factor en la generación del petróleo. Se supone que ( este calor es generado durante
la compresión de la roca madre, pero la velocidad de movimiento, que es muy importante en el
calor por fricción, es tan baja en los procesos de compresión, que es difícil imaginar un
aumento apreciable de temperatura por esta causa.
No se conoce exactamente cuándo dejan de ser activas las bacterias1 en el proceso de
enterramiento. Hay quien cree que las bacterias pueden ser causa de la generación del
petróleo líquido. «Falta aún la prueba concluyente de que las bacterias sean fisiológicamente
activas en los depósitos subterráneos de aguas saladas o petróleo, pero las bacterias son
incuestionablemente activas en los sedimentos marinos recientes hasta las mayores
profundidades demostradas, alrededor de los 8 metros.» 97 Pero Illing " pone en duda que las
bacterias, incluso si están presentes, produzcan petróleo: «...todos los estudios de tal ataque
conducen a confirmar la impresión de que el producto final de tal composición tiende a ser
metano y hasta que aya sido demostrado de modo concluyente que el ataque bacterial pueda
producir los hidrocarburos do mayor peso molecular, la teoría bacterial debo ser considerada
únicamente como una solución sugestiva».
Temperaturas. La presencia de; porfirinas en petróleos crudos es una prueba positiva de

que estos petróleos nunca pudieron estar a temperaturas altas, pues los compuestos de
porfirinas no pueden existir por encima de los 200°C. Existe también mucha evidencia química
que descarta una historia de temperaturas altas. Lo confirma el hecho de que los petróleos
crudos profundamente enterrados en los sedimentos tranquilos de la Costa del Golfo no están
a alta temperatura en la actualidad y no existe evidencia geológica de que lo estuvieran alguna
vez. Este hecho hace insostenibles las teorías de la génesis del petróleo, basadas en el
cracking natural y la hidrogenación, pues estas reacciones exigen temperaturas más altas de
400°C. Insostenible también a causa de la historia de bajas temperaturas del petróleo es la
teoría, en un tiempo popular, de que el petróleo crudo era resultado de un proceso natural de
destilación. Aunque los hidrocarburos más1 volátiles empiezan a desprenderse a la
temperatura de 40°C e incluso inferior, otros hidrocarburos del petróleo no se vaporizan hasta
temperaturas considerablemente superiores al límite de 200° de las porfirinas. Además, «...toda
destilación destructiva, cualquiera que sea su temperatura, debe dejar un residuo. Tal material
es fácilmente identificable y es improbable que el material de este tipo haya escapado al
reconocimiento en todos los campos petrolíferos que han sido investigados».99
Improbabilidad De La Generación Del Petróleo Por Radiactividad. La posibilidad de que

las emanaciones radiactivas puedan convertir la materia orgánica encerrada en las rocas de la
corteza terrestre en petróleo, ha sido investigada por diversos científicos en los últimos años y
el American Petroleum Institute ha patrocinado un proyecto de investigación en este campo.1"0
Los elementos radiactivos que pueden estar presentes en los sedimentos en cantidades
adecuadas son el uranio, el torio y el potasio. Se han encontrado algunas arcillas orgánicas
altamente radiactivas. El contenido de radio de las calizas disminuye al aumentar su pureza,
mientras que en las areniscas es altamente variable. Algunos petróleos crudos son radiactivos.
Pero queda por demostrar si estos casos están genéticamente relacionados o son simplemente
fortuitos.Los físicos han demostrado que el bombardeo de material orgánico, especialmente
17
ácidos grasos, por rayos alfa, produce hidrocarburos, hidrógeno libre y dióxido de carbono. De
este hecho se ha inferido que el bombardeo de las arcillas carbonáceas por rayos alfa es
adecuado para explicar el origen del petróleo. Un ejemplo posible, que lia sido citado, es la
arcilla radiad i va y carbonácea Anlrim de Michigan. De acuerdo con los cálculos, basados orí
un cierto número de suposiciones y por tanto «aceptables con al;;una precaución», esta arcilla
debe contribuir con 26773 litros por hectárea-metro en diez millones de años.""
Hasta ahora, al menos, los argumentos que se oponen a la génesis del petróleo en gran
escala, debido a la radiactividad, sobrepasan con mucho a los argumentos a favor. Uno se
pregunta, por ejemplo, por qué la arcilla Antrim del Devoniano no ha producido más de 25000
litros por hectárea-metro en los últimos 10 millones de años. Esta arcilla tiene más de 60
metros de potencia y se extiende sobre miles de kilómetros cuadrados. No sólo debían estar
llenas de petróleo las areniscas que yacen sobre ella, sino que también Michigan debía exudar
petróleo por todos sus poros. Un ejemplo similar es el kolm de Suecia, un depósito cambriano
que contienen un 20 por ciento de materia orgánica volátil y casi el 0,5 por ciento de uranio. Un
caso extremo es la existencia de tucolita, un hidrocarburo sólido, en una pegmatita fuertemente
radiactiva en Parry Sound, Ontario. Ni en la arcilla Antrim, ni el kolm sueco ni en la tucolita de
Ontario se encuentra petróleo líquido, aunque en todas estas localidades existe materia
orgánica sólida o hidrocarburos que han estado expuestos a un fuerte bombardeo radiactivo
durante centenares de millones de años. De hecho, no existe correlación alguna entre el grado
de radiactividad y la cantidad de petróleo. Además de los sedimentos orgánicos expuestos a
radiactividad sin nada de petróleo, 102 existen yacimientos petrolíferos que tienen y han tenido
siempre poca o ninguna radiactividad.
Algunos autores 103 han hecho notar la usual ausencia de hidrógeno libre y dióxido de
carbono en el petróleo, gas natural y sedimentos asociados y, sin embargo, el bombardeo
radiactivo debe producir copiosas cantidades de ambas sustancias, tanto como hidrocarburos.
Knebel se pregunta «por qué después de que los ácidos grasos han sido descarboxilados por
la radiactividad, las mismas radiaciones no rompen las moléculas de hidrocarburos resultantes,
produciendo hidrógeno e hidrocarburos no saturados.
Catálisis. El uso de arcilla en el cracking catalítico del petróleo crudo es un procedimiento

normal en las refinerías petrolíferas. Brooks-""1 dudara que las reacciones del ion carbonio (un
radical de hidrocarburos) no exigen las altas temperaturas alcanzadas en el proceso industrial
del cracking catalítico. Cree que la evolución natural del petróleo es debida a la influencia de
los silicatos ácidos catalizadores encontrados por el petróleo a lo largo de su historia en el
subsuelo. Los catalizadores naturales explicarían:
1. El complejo carácter y variedad de compuestos en el petróleo.

2. La ausencia virtual de olefinos.
3. La formación de naftenos en cantidad.
4. La presencia de aromáticos. Su presencia no ha sido explicada en ninguna otra
forma desde el momento en que no es posible una historia de temperaturas altas por la
existencia de porfirinas en los petróleos crudos. \
5. La formación de hidrocarburos ligeros incluyendo el metano.
6. Las diferencias en el carácter de los petróleos crudos debidas a las diferencias
en los catalizadores presentes.
7. Los cambios de composición en el curso del tiempo geológico.107
Los posibles argumentos que se oponen a la evolución mediante catálisis: son: 1) el

petróleo está rara vez, o ninguna, en contacto real con la roca que lo encierra, a causa de una
delgada película de agua que recubre las paredes de los poros (capítulo 7), y 2) los
catalizadores parecen ser bastante menos efectivos cuando están húmedos que cuando están
secos.
" WILSON L. ORR , K. O. EMERY y JOHN R. GHADY : . «Preservation of Chlo-rophyll Derivativcs

in Sedimenls oCf Southern Calilornia», Buí!. Am. Assoc. Petrol. Gcol., vol. 42 (marzo, 1958),
págs. 925-962." H. W. HOOTS : «Origin, Migration, and Accumulation of Oil in California», CttUf.
Diw. Mines. Bull, 118 (agosto, 1941), pág. 260.
18
Por tanto, la aceptación de la teoría catalítica en la evolución del petróleo incluye también la
aceptación del concepto de que la actividad catalítica puede tener lugar aunque el catalizador
se encuentre recubierto de una película de agua. Quizá la explicación es que una actividad
demasiado lenta para que sen medible en el laboratorio, debe ser adecuada en un tiempo
geológico.Se han sugerido cierto número de sustancias como posibles catalizadores1 en el
proceso natural derefinacion.'8 Brooks ha publicado una lista que muestra el efecto
polimerizante de las rocas sedimentarias de Oklahoma, más algunos minerales, sobre la
trementina. Por regla general, la greda, arcillas y esquistos arcillosos encabezan la lista; las
areniscas varían de altas a intermedias, pero el cuarzo puro es inerte.
Entre los minerales arcillosos, la montmorillonita es muy activa y la caolinita no. La calcita
pura y la dolomía no ion catalíticas.Se ha encontrado que algunas trazas de impurezas poseen
una actividad catalítica mas alta.110 Además, la parte activa de un material catalizador está
aparentemente en su superficie, con lo que una película o una serie de partículas de una
impureza catalíticamente activa diseminadas en el cuarzo o entre los granos de carbonato del
mineral pueden convertir a una roca no catalítica en un activo catalizador. Este hecho puede
explicar la evolución del petróleo en algunas areniscas y calizas.
Brooks111 cita como ejemplos de petróleos que no tuvieron el beneficio de catalizadores en

un grado adecuado, los petróleos pesados encontrados en algunas calizas en Méjico,
Oklahoma, Kansas y Wyoming y el «alquitrán», en realidad un petróleo muy pesado, que se
encuentra en la arenisca limpia (sólo de cuarzo) del área Athabaska, Alberta.
Existen numerosos ejemplos de petróleo de caracteres distintos en la misma provincia

petrolífera, pero en rocas de diferentes facies sedimentarias. Las variaciones de las facies
indican naturalmente la variación de las condiciones ambientales en el tiempo de la deposición.
También implican diferencias en el contenido de agente catalizador. Bornhauser112 explica la
presencia de petróleos rnás ligeros en las facies de arcillas o en la zona de transición entre las
facies de arcilla y arena en ciertas rocas almacén de la Costa del Golfo en Luisiana por un
contenido más alto de arcilla. Los geólogos rusos que han investigado el carácter de los
hidrocarburos y la litología de las rocas almacén en los campos petrolíferos del distrito de Bakú
han notado el aumento en oí porcentanje de gas natural y la disminución do la densidad del
petróleo al aumentar la cantidad de arcilla.1"
EL TIEMPO GEOLÓGICO TOMO FACTOR EN LA GENERACIÓN DE PETRÓLEO.
Varios investigadores han demostrado que la formación de betumen a partir de materia

carbonosa es una función do la temperatura y el tiempo."'1 La teoría de que un moderado
aumento en la temperatura produce los mismos resultados a lo largo del tiempo geológico que
los conseguidos por una temperatura relativamente alta en unos pocos minutos ha sido
comparada al hecho, conocido por todos los cocineros, de que, con el tiempo suficiente, una
baja temperatura de horno puede llegar a asar tan enteramente como un horno caliente.115
Pero Illing116 pone en duda la conclusión general de que la formación de betumen pueda tener
lugar a temperaturas bajas cualquiera que sea el período de tiempo implicado. Descubrió que
las velocidades de reacción de un carbón típico de llama larga disminuían mucho más
rápidamente que la velocidad calculada por debajo de los 250°C y que se aproximaba al
«estancamiento virtual» alrededor de los 220°C. Brooks1" llama la atención sobre el hecho de
«que los compuestos aromáticos no pueden formarse a partir de las parafinas sólo con el calor
a temperaturas inferiores a los 500'C; por debajo de esta temperatura las reacciones de
descomposición térmica son de diferente clase, por lo que los compuestos aromáticos no pue-
den formarse a partir de las parafinas únicamente por la acción del calor, por muy largo que
sea el período de tiempo, a las temperaturas que sabemos que existen en los estratos
productivos de petróleo».
53PARKER D. TRASK y otros: «Origin and Environment of Source Beds of Petroleum» (Gulf
Publishing Co., Houston, Texas, 1932)." P/VHKF.U D. TRASK: «Some Studies of Source Bcds oC
Petroleum», Intc.rna-tional Gcol. Congress, Memoria de la 10.a sesión, 193:1, vol. 2 (l!K!6), pág-
1011." F. M. VAN TUYL y BEN II. PAHKKH: «The Time of Origin and Accumulation of
19
Petroleum», Quarterly Coló. School o¡ Mines, vol. 36, núm. 2 (abril, 1941), págs. 84-98.
Ambos autores ling y Brooks118 apuntan que la existencia de materia orgánica en pizarras
bituminosas tan antiguas como las del precambriano es incompatible con la teoría de que tal
materia se convertiría en betumen a temperaturas moderadas si se les da suficiente tiempo.
Tampoco existen diferencias importantes entre pizarras bituminosas de la época terciaria y las
depositadas durante la era paleozoica.110
Sin embargo, el concepto de tiempo es de considerable importancia en la teoría de la

evolución por catálisis del petróleo. Cuanto más tiempo esté el petróleo en contarlo con los
materiales catalizadores, más evolucionar:'). Esto hecho está de acuerdo con la máxima
popular: «Cuanto más viejo ex el petróleo, mejor es su calidad». El adagio solidario del anterior:
«cuanto más profundo es el petróleo, mejor es» resulta con frecuencia cierto puesto que el
petróleo más profundo suele ser el más antiguo. Las temperaturas más altas existentes a más
profundidad pueden también acelerar la actividad catalítica.
El hecho de que los petróleos más recientes comercialmente explotables ' parecen ser de la
época del Plioceno que, tal como el hombre mide el tiempo, es muy antigua, es una nueva
prueba de la importancia del tiempo en la evolución del petróleo.
Contaminación Y Descomposición Del Petróleo. La mayoría de los compuestos químicos

que componen el petróleo crudo son susceptibles de reaccionar con sustancias extrañas. El
material contaminante puede ser: 1) minerales de las rocas con las que el petróleo se pone en
contacto durante su emigración; 2) compuestos disueltos en las aguas en circulación y .3)
oxigeno y otros gases de la atmósfera.
La contaminación del petróleo crudo por azufre u oxígeno hace cambiar la evolución natural
y produce petróleos pesados y no saturados.120 Se ha sugerido que las bajas densidades de
muchos petróleos en calizas se debe a la , absorción selectiva de los constituyentes más
ligeros por la caliza».121 La exposición al aire o la disminución de la presión del yacimiento al
acercarse a la superficie permitiría el escape de los constituyentes volátiles disueltos dejando
un residuo asfáltico más pesado. Pueden haberse efectuado: en el pasado procesos de
meteorización y fuga de volátiles exactamente debajo de lo que en la actualidad es una
discordancia. Bienner l2'- y sus colaboradores declaran: «Algunos petróleos crudos expuestos
al aire y a la luz del sol evolucionan gradualmente hacia la formación de asfaltos... Esta
evolución va acompañada de un cambio en su naturaleza química; así un petróleo parafínico o
de base mixta produce un asfalto nafténico». Ejemplos son Chelif en Argelia y Pecholbronn,
Francia.
Resumen. En el tiempo del enterramiento de los sedimentos la materia orgánica presente
está generalmente en estado sólido, pero un pequeño porcentaje son hidrocarburo;
probablemente residuos de procesos vitales, en forma de líquidos densos o semisólidos. La
forma en que la materia orgánica sólida en convierte en líquido no es aun conocida. Sin tener
en cuenta el origen, el petróleo evoluciona mientras esta en los yacimientos de la naturaleza a
través del tiempo geológico. El petróleo inicial es probablemente un material asfáltico
semilíquido evoluciona convirtiéndose en un petróleo que contiene aceites más ligeros,
parafinas y compuestos aromáticos. Esta evolución no puede ser provocada por temperaturas
superiores a los 20(TC, pues las porfirinas encontradas en petróleos crudos serían destruidas
por encima de este nivel de temperatura. La teoría mas plausible desarrollada hasta ahora para
explicar la evolución natural del petróleo es que ciertos minerales, tales como los silicatos
ácidos, actuaron como catalizadores a lo largo del tiempo geológico.
" T. C. H TES TAN D : «Regional Investigations, Oklahoma and Kansas», Bull.Am. Assoc. Petrol.
Gcol., vol. 19 (julio, 10,15), pág. !)G5." L. C. WEEKS , F. M. VAN TUYL , BEN II. PAHKER y H. .
SKEETF . RS : «The Migration and Accumulation of Petroleum and Natural Gas», Quarterly oló.
Scliool of Mines, vol. 40, núm. 1 (enero, l (J4, r >), pág. 53." Op. cit., pág. 56." TAISIA ADNICHENKO :
20
PROCESOS METAMÓRFICOS Y DESTRUCCIÓN DEL PETRÓLEO
El calor y la presión, favorecidos por el agua intersticial, son los agentes del metamorfismo
de las roca1;. Sin embargo, existe una amplia diferencia entre los límites de tolerancia del
petróleo y las rocas. Las magnitudes necesarias del calor y la presión para producir un
metamorfismo visible en las rocas son demasiado grandes para permitir la presenciare petróleo
dentro de la roca. Sólo el aumento de temperatura y presión necesarios para producir un cierto
grado de metamorfismo incipiente 123 en las rocas, medible por el aumento del contenido de
carbono fijo en los carbones asociados, es indefectiblemente suficiente para provocar la
destrucción del petróleo. Un grado ligeramente mayor de metamorfismo da como resultado la
desaparición del gas natural.
El petróleo en el subsuelo no está generalmente afectado por las presiones a que está
sujeta la roca que lo encierra. Ocupa los intersticios entre los granos de la roca y el peso
estático de las rocas que están encima o las fuerzas laterales creadas por el diastrofismo son
soportadas por la roca y no por los fluidos que contiene. Sin embargo, el petróleo está sujeto a
las presiones hidrostáticas creadas por el peso de la columna de agua que se extiende hasta el
nivel de las aguas freáticas. En rocas profundamente enterradas llegan a ser considerables.
El petróleo y la roca que lo contiene experimentan las mismas temperaturas. La causa usual
del calor es la subida de las isogeotermas o niveles de temperaturas iguales de la tierra que se
produce al irse enterrando los sedimentos. El incremento medio de la temperatura con: la
profundidad es de 1°C cada 33 m. Evidentemente los petróleos profundamente enterrados
están a temperaturas superiores a la del punto de ebullición del agua al nivel del mar. Otras
causas posibles del calor son el diastrofismo y la actividad magmática. Pero el diastrofismo,
para producir calor, debe ser de intensidad de entallamiento y el calor magmático es de
naturaleza tan localizada que ninguna de estas causas puede considerarse de aplicación
generalizada en la evolución del petróleo.
Distribución de los campos petrolíferos y de las rocas metamórficas.
El petróleo no ha sido encontrado en cantidades comerciales en las fajas de rocas

metamórficas. No se ha encontrado incluso donde el carbón ha sido alterado en antracita.
Thom 12d estima que las probabilidades de encontrar petróleo en áreas de carbones
semiantracitosos y semibituminosos es del orden de 1 a 1000; sin embargo, las probabilidades
de encontrar gas son diez veces mayores.
Puede darse una excepción a la generalización de que el petróleo no se encuentra en rocas
metamórficas donde rocas metamórficas porosas y permeables están en contacto con rocas
madres de épocas posteriores.
Proporción De Carbono. El metamorfismo invisible pero incipiente puede determinarse por

la proporción de carbono en los carbones. Es decir, relación entre el carbono fijo y los volátiles,
la cual puede obtenerse con un análisis inmediato. El porcentaje de carbono fijo, después de
calcularlo sobre la base del carbón libre de cenizas o de humedad, es la proporción de
carbono. La proporción de carbono en los lignitos está por debajo de 60, en el (carbón
bituminoso está entre 60 y 85, en la antracita de 86 a 98, y el grafito, que es el miembro
extremo en el metamorfismo del carbón, tiene una proporción de carbono de 100.
El concepto de la proporción de carbono puede aplicarse en regiones como los Apalaches y
Oklahoma oriental donde existen petróleo y carbón. El procedimiento corriente es llevar sobre
un mapa las localidades y las proporciones de carbono de los carbones para los que existan
análisis! 125 Entonces se dibujan las líneas que pasan por los puntos de igual proporción de
carbono, generalmente con intervalos del 5 por ciento. Naturalmente estas líneas marcan el
afloramiento de los planos de igual proporción de carbono. Estos planos buzan alejándose del
área de deformación mas intonsa, así que en un punto dado el porcentaje de carbono lijo
mímenla con la profundidad.
En la provincia de los Apalaches estas líneas son paralelas al rumbo de las rocas y
aumentan de valor hacia el este en la dirección del diastrofismo más intenso. Aquí y en otras
parles se ha encontrado que existe poro petróleo por encima de la línea 05 y no mucho gas por
encima de la línea 70. Existen excepciones, pero son poco frecuentes. Una excepción notable
fue el descubrimiento de un campo de gas en el condado Rockingham, Virginia, próximo a la
línea 85.
21
La naturaleza de la roca es un factor en el grado de metamorfismo. Si los sedimentos están
poco consolidados, pueden ser intensamente plegados sin demasiado metamorfismo. Por
ejemplo, los sedimentos terciarios de California están, más altamente plegados y menos
metamorfizados que las rocas endurecidas del Paleozoico de Pensilvania occidental. También
las rocas que ceden fácilmente al plegamiento o a las fallas están menos metamorfizadas que
las rocas más rígidamente asociadas. La explicación do la existencia de yacimientos
comerciales de petróleo en algunos puntos de proporción de carbono aparentemente alta en la
provincia de los Apalaches es que el metamorfismo ha sido menor a causa de la acostumbrada
tendencia de las rocas a ceder.120
La razón generalmente aceptada de por qué existe poco o nada de petróleo por encima de
la línea del 65 por ciento de carbono fijo es que el metamorfismo, incluso aunque sea sólo
incipiente en lo que se refiere a las rocas, ha • destruido el petróleo que existía allí en cierta
época. Esta idea está apoyada «...por evidencia de que existieron alguna ve/, bolsas
petrolíferas en esta región entre los campos actuales y la faja metamorfizada. Arenas
impregnadas de petróleo afloran a la superficie y han sido encontradas en sondeos, pero el
petróleo es solamente un residuo que tapiza los granos individuales de arena.
En conclusión, es evidente que incluso las primeras fases del metamorfismo son enemigas
de la supervivencia de hidrocarburos, especialmente del petróleo. Donde existen carbones para
análisis, el concepto de la proporción de carbono tiene un valor decisivo, aunque de naturaleza
negativa, en la búsqueda de nuevos campos de petróleo y gas. Pueden encontrarse yacimien-
tos en regiones situadas por encima de los límites citados de carbono fijo, pero las
probabilidades de tales descubrimientos son mucho menores que en las áreas de proporciones
inferiores de carbono.
" NICKOLA PRoropovrcH: «Primary Sources of Petroleum and Their Accumu-lation», Bull. Am. Assoc. Petrol.
Geol., vol. 36 (mayo, 1952), págs. 878-883; MAR-GAIIETHA BRONGERSMA-SANDERS : «On conditions Favouring the
Preservalion of Chlorophyll in Marine Sedimenta», Third World Petrol. Congress, 1951, sección I, págs. 400-411.
" KENNETH O. EMERY: «Southern California Basins», Habitat o¡ Olí (AmericanAssociation of Petroleum
Geologists, vol. especial, 1958), págs. 955-967.; " WILSON .L. ORR, K. O. EMERY y JOHN R. GRADY:
«Preservation of Chlorophyll Derivatives in Sediments Off Southern California», Bull. Aro. Assoc. Petrol. Geol.,
vol. 42 (marzo, 1958), págs. 925-962.D. TIÍASK : «Oreanic Contení oí Recent Marine Sediments»
22
ORIGEN DÍA GAS NATURAL
Proporcionalmente se ha escrito mucho menos acerca del origen del gas natural que acerca
del origen del petróleo. Aparentemente se ha supuesto que el petróleo y el gas natural tienen
un origen semejante, pero esto no es necesariamente cierto.
El término «gas natural» implica generalmente hidrocarburos en forma gaseosa. El más
común y establo de estos hidrocarburos gaseosos es el metano». CII.,. También pueden estar
presentes otros hidrocarburos gaseosos como etano, propano y butano y quizá petano, hexano
y heptano en forma de vapores. Además, ciertos gases no hidrocarburos pueden estar
presentes con los hidrocarburos gaseosos o pueden existir en acumulaciones separadas. Entre
estos constituyentes erráticos están el ácido sulfhídrico, el dióxido de carbono, el nitrógeno y el
helio, Su origen se estudiará a continuación.
El gas natural puede existir en cinco formas distintas: 1) disuelto en el petróleo; 2) con el
petróleo pero encima do él («sombrero de gas»); 3) en la misma trampa estructural que el
petróleo, pero ocupando capas diferentes (usualmente más altas); 4) en distritos con petróleo
pero ocupando trampas separadas, y 5) en acumulaciones muy alejadas de yacimientos
petrolíferos conocidos. La historia ha demostrado después de una exploración más intensa,
que muchos campos de gas originalmente clasificados en la quinta categoría, pertenecen a la
tercera o a la cuarta. Algunos campos grandes de gas, por ejemplo los del norte de Luisiana y
sudoeste de Wyoming, están a cierta distancia del petróleo más cercano conocido. Muchos
geólogos creen que es cuestión de tiempo el encontrar grandes yacimientos de petróleo debajo
o en la vecindad de estas acumulaciones de gas.
Existen dos teorías generales respecto al origen del gas natural: 1) el gas tiene una génesis
distinta del petróleo y puede no haber estado asociado nunca con petróleo líquido, y 2) el gas
es un subproducto, o un producto final, del origen y evolución del petróleo y en cierta época
pasó por una fase líquida.
23
El gas natural con génesis separada del petróleo. No hay duda de que algo de gas se ha
formado directamente a partir de materia orgánica en putrefacción sin pasar por una fase de
hidrocarburos líquidos. El llamado «gas de pantano», generado durante la descomposición de
materia vegetal en ciénagas y marismas, es un ejemplo bien conocido. Las bacterias ayudan
en la generación del gas de pantano, que es casi metano puro. Un gas semejante puede
producirse en la descomposición de materia animal. El metano procedente de arcillas o lodos
que contengan almejas abundantes ha sido citado por lo monos en dos Lugares; en uno de
ellos, el gas esta presente en volumen suficiente para permitir su uso local en cocinas de
gas.11
Otras acumulaciones de gas metano muy conocidas no relacionadas con la formación de
petróleo es el grisú que procede de los restos de plantas de agua dulce encontrados en el
carbón y que se acumulan en los filones de carbón y en las rocas porosas que puedan estar
presentes. Un origen análogo se cree que tiene el gas encontrado en el suelo glacial
inmediatamente encima del zócalo rocoso en ciertas partes -de Illinois en abundancia suficiente
para las cocinas y calefacción de granjas. Otro posible origen de este gas es la
descomposición de materia orgánica más reciente tal como capas de turba.1-" ,Se ha sugerido:
1) que el petróleo se deriva de materia orgánica que se acumula bajo condiciones marinas,
pero que el gas procede de plantas terrestres, y 2) el petróleo se genera en capas que
contienen una «rica microflora» y que el gas se deriva en gran parle de materia vegetal de
mayor tamaño.1""
El metano también puede producirse mediante procesos inorgánicos, ha sido hallado en los
gases expulsados por los volcanes. Baker sugiere que el metano y otros hidrocarburos
gaseosos pueden producirse durante el metamorfismo de contacto por la combinación del
carbón de rocas carbonosas con el vapor de agua disociado causado por la intrusión de rocas
fundidas.
Gas natural derivado del petróleo. De acuerdo con el concepto comúnmente aceptado de
la evolución del petróleo, el metano y otros hidrocarburos gaseosos son productos de esta
evolución natural. Estos gases se producen probablemente a lo largo de la historia
evolucionaría del petróleo, quizá mediante procesos catalíticos. Si esto es cierto se podría
esperar que, a igualdad de los restantes factores, cuanto más antigua sea la acumulación de
hidrocarburos más alto será el porcentaje de gas natural. Esto ocurre en la Costa del Golfo
Marine Sediments (American Association oí Pelroleum Geologists, Tulsn, Okla -homa, 193!)), pág.
42»." W. A. J. M. VAN WATERSCHOOT VAN DEU GHACIIT : «The Stratigraphipal Dis-Iribution of Petroleum»,
Science o¡ Petroleum (Oxford Universily Press, 1938), vol. 1, pág. 58." LEONID P. SMIRNOW : «Black Sea
Basin», Habitat oí Oil (American Associa-Ijon of Petroleum Geologists, vol. especial, 1958), págs. 982 -
994." ALFRED C. REDFIELD : «Preludes to the Entrapment o£ Organic Matter in theSediments of Lake
Maracaibo», Habitat of Oil (American Association of Petroleum ( Geologisls, vol. especial, 1958), págs.
968-981.,
" PARKER D. TRASK: «Some Studies of Source Bcds ot Petroleum», Proc. XVI International Geologic.nl
Congre.ss (1933), vol. 2 (1936), pá«. 1011." P. V. SMITH , Jr.: «Slalus of Our Prcscnt Informati on in the
Ori'™inandAccumulation of Oil», Proc. Fourth World Petrol. Congress (1955), sección 1, páginas 395-396."
24
donde la razón gas-petróleo aumenta con la edad geológica así como con la profundidad.
Una situación análoga se encuentra en muchas otras partes del mundo. El resultado final de
esta progresión natural sería la conversión completa del petróleo líquido en gas natural. Quizás
el mejor ejemplo de la aplicación de esta teoría es la presencia de gas natural en considerable
abundancia en la provincia de los Apalaches más allá (es decir al este) de la «zona de
extinción», donde la proporción do carbono sube por encima de 05 y los campos petrolíferos
tienden a desaparecer;
El mejor testimonio, sin embargo, de la generación del gas durante la evolución natural del
petróleo es la asociación casi invariable de los dos en la naturaleza, como se indicó en la
introducción de esta sección. La mayoría del gas natural se encuentra disuelto en el petróleo,
en el sombrero de gas de un yacimiento petrolífero o en un yacimiento cercano. El gas natural
tiene una movilidad mucho mayor que el petróleo y una vez que se ha parado de él puede
pasar por caminos que el petróleo no puede seguir y así sé acumula en yacimientos
separados. Con toda probabilidad, el «filón madre» de todos los campos de gas actualmente
aislados será descubierto algún día. Como generalmente los yacimientos de gas están más
extendidos, el descubrimiento de gas ha precedido en el pasado al del petróleo en la mayoría
de las áreas.
No puede negarse la generación directa de gas en la descomposición de material

compuesto de celulosa. Es dudoso, sin embargo, que las acumulaciones grandes de gas
natural hayan tenido este origen.
Origen De Los Gases Naturales Que No Son Hidrocarburos."™ El ácido sulfhídrico es el

único de los cuatro gases «erráticos» considerados aquí que, se encuentra comúnmente con el
petróleo y los hidrocarburos gaseosos y tiene una distribución análoga. Al mismo tiempo, es el
único gas no hidrocarburo que puede proceder de los mismos materiales originales que el gas
metano. El ácido sulfhídrico y otros compuestos de azufre se generan en la descomposición de
organismos bajo condiciones reductoras (euxínicas). Este azufre puede quedar «fijo» como
FeS2 (marcasita o pirita); puede escaparse en forma gaseosa o disuelto en el agua; o puede
quedar atrapado en el mismo material orgánico reapareciendo posteriormente en el gas natural
o en petróleos crudos ricos en azufre.
El dióxido de carbono se encuentra en unos pocos casos con el petróleo y los hidrocarburos
gaseosos, pero esta asociación es probablemente fortuita. La mayoría de las grandes
acumulaciones conocidas de dióxido de carbono se encuentran en áreas que no son
productoras (por lo menos hasta ahora) de hidrocarburos. Se ha encontrado dióxido de
carbono en los gases volcánicos y en las fumarolas. La calcinación de las calizas por los
magmas intrusitos puede producir también este compuesto. La generación por acción bacterial
y su desprendimiento de calizas disueltas por Ias aguas del invierno son otros orígenes
posibles sugeridos para este gas. Un reciente trabajo de Lang con el espectrómetro de masas
demostró que los gases de dióxido de carbono de las muestras analizadas procedían de
calizas. El ha hecho notar que en las áreas en las que se ha encontrado dióxido de carbono en
cantidad existen rocas ígneas en asociación con calizas y propugna la teoría que «los gases de
dióxido de carbono se originaron en la rotura de las moléculas de caliza en contacto o
adyacentes a intrusiones ígneas».
El helio y el nitrógeno están corrientemente, pero no necesariamente, asociados. El helio es
mucho menos abundante que el nitrógeno, pero a causa de su valor ha recibido mucha más
atención en las publicaciones técnicas. Su presencia es también más fácil de explicar. El helio
es un producto de la desintegración radiactiva.
Durante los tiempos geológicos ha sido liberado un considerable volumen de este gas,
quedando atrapado por los sedimentos que le cubren, por los minerales radiactivos de las
rocas cristalinas del Precambriano, en los yacimientos en venas hidrotermales o en los estratos
sedimentarios que contienen granos clásticos de estos minerales. En este aspecto es
interesante notar que un yacimiento de pegmatitas famoso por sus minerales radiactivos
" PARKER D. THASK: «Organic Contení of Recent Marino Sedimenta», Recent Marine Sediments (American
Association of Petroleum Geologists, Tulsa, Okla-homa, 1939), pág.428." CLAUDE E. ZOBELL : «Biennial Report
for 1!)45-1!)47 en API Research Proj-ect 43A acterioloííical and Scdimentation Phascs of the Transformaron
of Organic Material into Petroleum», Rept. oj Progreas-Fundamental Rcsea-rch on Ocurrence and Recovery of
Petroleum (American Petroleum Instituto, 1949), páginas 100-106: «Bacterial Aclivitics and thc Origin ot Oil»,
World Oil, vol. 130(junio, 1950), págs. 128-138." G. D. HODSON : «Biochemical Aspects of thc Origin of Oil»,
Science of PetrntoMm iT>vforrl Universitv Press, 1938), vol. 1, págs. 54-56.
25
adora en superficie en el Precambiano de la Región Mineral Central de Texas, a unos
pocos centenares de kilómetros al sudeste de la estructura Cliffside en Panhandlé, donde los
yacimientos del Permiano que cubren las Montañas Amarillas del Precambiano contienen el
mayor depósito conocido de helio. Otras acumulaciones de helio han sido encontradas en
Utah, donde la Meseta del Colorado es notable por sus yacimientos sedimentarios de uranio.
Es también probablemente una coincidencia el que se encuentre algo de helio en el gas
natural, habiendo quedado ambos tipos de gas cogidos en la misma trampa.
Es probable que el nitrógeno, como el helio, procede originalmente de las rocas del
basamento cristalino. El nitrógeno ha sido encontrado en cierto número de minas metálicas, en
algunos puntos en cantidades letales (a causa de sus características no respirables).131
Ruedemann y Oles133 han sugerido que el nitrógeno pueda ser un residuo del aire atrapado
en los estratos en el tiempo de la deposición. Sin embargo, existe la duda de si el aire puede
quedar atrapado en volumen adecuado en los sedimentos que se acumulan bajo el agua. El
nitrógeno fijo es un constituyente constante de las rocas ígneas, tanto en granitos como en
basaltos.136 Su cantidad actual es aproximadamente 25 partes por millón.
PROBABLES ROCAS MADRES EN CAMPOS PETROLÍFEROS
Muchos investigadores de campos petrolíferos individuales batí intentado señalar la roca o

rocas madre de las que procede el petróleo. Sin embargo, en casi ningún caso ha sido posible
probar en forma definitiva que el petróleo partió de una cierta unidad rocosa. Quizás el mejor
caso para una identificación positiva de la roca madre son las bolsas en arenas lenticulares del
sudeste de Kansas y nordeste de Oklahoma, donde las lentes de arena llenas de petróleo
están completamente rodeadas de la arcilla altamente carbonácea Chcrokce,1" pero incluso la
designación de esta arcilla como roca madre del petróleo de las areniscas ha sido puesta en
duda.13"
26
No es suficiente encontrar una roca orgánica en la misma sección que las rocas almacén
con petróleo. Algunas rocas orgánicas pueden no haber producido ni una gota de petróleo,
mientras que otras pueden haber dado mucho. IV hecho, las verdaderas rocas madre pueden
tener un contenido orgánico menor en la actualidad que oirás rocas carbonosas de la misma
sección. Pero como es improbable, sin embargo, que todo el petróleo posible fuese generado
durante su período de formación, la roca madre debe retener algo de materia carbonosa.
Los intentos de identificar la roca madre son algo más que simples ejercicios didácticos.
Cuando sea posible determinar, con alguna certeza, la roca madre de un campo petrolífero, los
cambios laterales en las características de esta roca madre serán de la máxima importancia en
el hallazgo de petróleo.
Identificación de las rocas madre. Muchos geólogos han expresado su creencia de que
una cierta unidad rocosa era la fuente del petróleo de un campo petrolífero, basando
usualmente esta conclusión únicamente sobro la cercanía de una roca orgánica a la roca
almacén y las dificultades de emigración de un punto más distante.'" Desgraciadamente, las
rocas madre no contienen señales claras por las que puedan ser reconocidas. Aunque puedan
haber proporcionado millones de litros de petróleo a las rocas almacén, la mayoría de ellas no
contienen petróleo visible. Por esto Hoots11" concluye «que el proceso de generación y
emigración del petroleo en las arcillas está en la actualidad esencialmente completado». Sin
embargo, más adelante veremos que los procedimientos analíticos modernos has conducido a
desarrollo de hidrocarburos en las que probablemente son rocas madre.
Muchos han intentado fijar criterios para la identificación de roca madre. Snider llevó a cabo
una extensa búsqueda en la literatura sobre este tema y publicó sus conclusiones en 1934. Él
cree que las rocas madre están generalmente cerca de las rocas almacén. La cantidad de
material orgánico en las rocas madre es altamente variable. Una bolsa prolífera puede ser
'debida a la presencia de un rico material orgánico en un área restringida o puede recoger el
M) E. TlAMMKii: «Ilolation of Micro-oriüinisms lo Gonorntion of Pelro-leum», Problema o¡ l'elrolcwn Geoloyu

(American Associatlon of Petroleum (¡eol-ogists, Tulsa, 1934), págs. 35-49." CLAUDK 12. ZOBKLL: «Mirrobinl
Transformalion of Molecular Hyclrogen in Marine Sediments, with Particular Rel'erences to Petroleum», Bull.
Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 31 (octubre, 1!)47), págs. 1709-1751; CLAUME K. OBELL: «Bacterial Activities and the
Origin of Oil», World Oil., vol. 130 (junio, 1950), págs. 128 y iguientes." CLAUDE E. ZOBELL : «Occurrence and
Activity of Bacteria in Marine Sediments», Receñí Marine Sedimenta (American Association o£ Petroleum
Geologists, Tulsa, Oklahoma, 1939), pág. 416." CLAUDE E. ZOBELL: «The Rolo of Bacteria in Ihe Forrnation and
Transfor-malion oí Petroleum Hydrocarbons», Science, vol. 102 (12 octubre, 1945), pág. 305." G. M. KNEIJEL:
«Progrcss Reporten API Research rojcct 43, The 'IVansl'or-mation of Organic Material into Petroleum». Bull. Am.
Assoc. Petrol. Geol., vol. 30 (noviembre, 1946), pág. 1943.
27
petróleo procedente de una roca madre más pobre que se extiende sobre un área mucho
mayor. En opinión de Snider la roca madre número uno es arcilla, usualmente (pero no
necesariamente) gris oscura, marrón chocolate, azul o negra. Sin embargo, otros colores,
especialmente el rojo, pueden enmascarar la coloración oscura que indica material orgánico.
La composición orgánica, especialmente la cantidad de algas microscópicas presentes, fue
considerada por ('bailes David White1'1' para la identificación de probables rocas madre. Las
rocas ricas en algas fueron consideradas rocas madre, mientras que las rocas de igual o
incluso mayor contenido vegetal, si el material pertenecía a órdenes superiores
(principalmente tipos terrestres) fueron rechazadas como posibles rocas madre.
Heald cree que las rocas madre deben estar situadas entre la roca almacén y las más
próximas rocas acuíferas superior e inferior:
Si en un área de cientos a miles de kilómetros cuadrados una formación particular
permeable contiene petróleo dondequiera que posea «trampas» o «estructuras», y otras
formaciones permeables por encima y por debajo de la formación petrolífera contienen
comúnmente agua y nada de petróleo, se sigue necesariamente que el petróleo debe proceder
de rocas situadas entre las formaciones acuíferas y la formación petrolífera. Parece probable
que el petróleo se origine bien en la formación inmediatamente debajo del estrato permeable
petrolífero o en la parte inferior de la formación inmediatamente encima de dicho estrato."3
En su primera investigación, Trask analizó algunas probables rocas madre al mismo tiempo
que sedimentos marinos recientes. Encontró que .dos de las sospechadas rocas madre, la
Monterrey de California y la Eagle Ford de Texas, son más ricas que los mejores depósitos
marinos. Por otro lado, algunas de estas probables rocas madre no dieron nada do petróleo por
destilación.1'11 En una investigación posterior Trask y Patnocle trabajaron específicamente
sobre las características de los sedimentos que podrían usarse como criterios para el
reconocimiento de rocas madre. Cuatro de las ocho características -la volatilidad, la volatilidad
relativa, la razón carbono-nitrógeno y la razón nitrógeno-reducción— parecen prometedoras,
especialmente la razón nitrógeno-reducción. Esta razón es simplemente la del contenido de
nitrógeno al poder reductor. Las rocas madres son probablemente, aquellas de contenido de
oxígeno relativamente bajo, lo que se reflejaría en una baja razón nitrógeno-reducción. Trask y
Patnode encontraron que los sedimentos inmediatamente adyacentes a las rocas almacén
tenían una razón nitrógeno-reducción inferior, como regla general, que los situados más lejos.
La conclusión a deducir de este trabajo es que las rocas madre tienden a existir cerca de las
rocas almacén (o viceversa).
Hedberg, Sass y Funkhouser 1« creen que las arcillas inmediatamente encima y debajo de
cada una de las arenas productivas del área Greater Oficina de Venezuela fueron las rocas
madre. Aducen que estas arcillas son grises, debido a la presencia de materia carbonosa
finamente dividida, mientras que las arcillas Freites, asociadas con arenas estériles, son verdes
y les falta materia carbonosa.
La aplicación de técnicas modernas al demuestre y análisis de sedimentos recientes se
estudió en una parte anterior de este capítulo. Se han llevado á cabo investigaciones similares
en las sospechadas rocas madre. Así en 1954 Hunt, Stewart y Dickey."7 estudiaron los
hidrocarburos en los sedimentos del Eoceno de la Cuenca Uinta, Utah, que incluyen «pizarras
bituminosas» Green River (en realidad estas rocas son dolomías silíceas bituminosas). En-
contraron que los hidrocarburos naturales existentes en este área son ozocerita, albertita,
gilsonita o wurtzilita. Cada uno de estos tipos de petróleo se encuentra geológicamente en
estrecha asociación con una unidad estratigráfica y el examen químico de esta última
demuestra que contiene el mismo tipo característico de hidrocarburos. Por tanto se deduce que
aunque no pueda encontrarse la conexión geológica, es aún posible relacionar un petróleo con
su roca madre mediante estudios químicos. Por otro lado Brenneman y Smith no han sido aún
capaces de desarrollar un método generalmente aplicable para correlacionar los petróleos
crudos con sus rocas madre.
En 1956 Hunt y Jamieson informaron lo siguiente:
Prácticamente todas las arcillas y rocas de carbonatos contienen materia orgánica indígena
diseminada en tres formas: 1) hidrocarburos solubles, que son similares en composición a las
fracciones más pesadas del petróleo crudo encontrado en la roca almacén; 2) asfalto soluble,
que es similar a los constituyentes asfálticos del petróleo crudo, y 3) materia orgánica insoluble
" CLAUDE E. ZOBELL: «Transtormation oí Organic Material into Petroleum-Bacteriological and Sedimentation
Phases», Fundamental Research on Occurrence and Rccovery of Petroleum (American Instituto, Nueva York,
1943), pág. 104." K. O. EMERY y S. C. RITTENBERG: «Early Diagenesis of California Basin Sccl-Iments in Relation to
Origin of Oil», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 36 (mayo,
28
(queroseno):, que es. Se han encontrado sedimentos antiguos, que no son rocas almacén,
que contienen cinco veces más petróleo que los sedimentos recientes no consolidados de las
costas del Golfo de California. Una roca madre antigua típica como la arcilla Frontier de la
cuenca Powder River de Wyoming, que ha proporcionado en el pasado millones de litros de
petróleo a las rocas almacén, contiene todavía 7730 litros de petróleo, 25 700 litros de asfalto y
unos 320 000 litros de queroseno por hectárea-metro.
La distribución de este petróleo, asfalto y queroseno dentro de las rocas no almacén do una
cuenca sedimentaria varía entre las diferentes facies de la misma formación.
Otra compañía ha estado investigando en el laboratorio métodos para la identificación de

rocas madre desde 1939.15° Fueron desmuestradas cuencas sedimentarias de todo el mundo.
Una técnica (no descrita) fue desarrollada para distinguir petróleo indígena de petróleo
emigrado. De 5 a 5000 partes por millón de hidrocarburos indígenas fueron encontrados en
arcillas, arcillas limolíticas, margas y calizas arcillosas. La cantidad de petróleo retenido en las
rocas madre es muchas veces superior a la del petróleo que se ha acumulado en los campos
petrolíferos. De esto se concluye que «el mecanismo natural de liberación de las rocas madre
es ineficiente en gran parte de los casos».
No existe duda de que las arcillas son el número uno de las rocas madre, puesto que: 1) la
arcilla es con mucho la roca sedimentaria mas abundante, y 2) las condiciones ambientales
existentes en la deposición .de arcillas favorecen también la deposición y enterramiento de
materia orgánica.
Una pregunta planteada con frecuencia es: « ¿Son las pizarras bituminosas rocas
madre?»'-1 La respuesta es que depende de la pizarra. Por definición una pizarra bituminosa
es aquella que produce aceites por pirólisis. T/a mayoría si no (odas las rocas madre
pizarrosas producen petróleo por pirólisis. Por otro lado existen pizarras "de las que pueden
destilarse aceites que aparentemente no han proporcionado petróleo en volumen apreciable a
los yacimientos de la naturaleza. La explicación de esta diferencia radica probablemente en
diferencias en su historia. La arcilla pizarrosa que funcionó como un «filón madre» tuvo quizás
hidrocarburos singenéticos, o más materia orgánica primitiva, o bacterias más eficientes, o un
catalizador mejor o una combinación de estos factores favorables.
La historia orgánica y ambiental de los carbones (que también producen hidrocarburos
líquidos por pirólisis) parece ser más refractaria a la generación natural de petróleo que la de
cualquier pizarra bituminosa, aunque el carbón ha sido habitualmente sugerido como posible
roca madre de algunospetróleos.
Segundas en importancia después de las arcillas como rocas madre son las calizas. Sin
embargo, en contra de la extendida opinión popular sobre este tema, las calizas arrecifales son
muy improbablemente rocas madre. Los organismos constructores de arrecifes nunca están
presentes en ningún período en gran abundancia. Únicamente las partes superiores del
arrecife están ocupadas y las bacterias y animales devoradores han hecho desaparecer todas
las trazas de materia orgánica posible productora de hidrocarburos de las parles inferiores
abandonadas.
Las calizas rocas madre son las que originalmente fueron un barro calcáreo o un sedimento
clástico fino procedente de un terreno de rocas de carbonates. Este último puede tener
considerable arcilla entremezclada y la roca petrificada se clasifica como caliza arcillosa.
En algunas áreas, notablemente en ciertas partes del Oriente Medio y en el estado de
Michigan, la evidencia de que la caliza ha sido la roca madre es incontestable.
En algunas de las acumulaciones petrolíferas del Oriente Medio no existen otras rocas en la
sección hasta ahora explorada, con la posible excepción de evaporitas. Una caliza ricamente
orgánica, en un tiempo un barro calcáreo, yace en discordancia sobre el principal yacimiento
petrolífero en Michigan, también en una caliza. El petróleo esta acumulado en los primeros
metros superiores de esta última caliza, debido a una lixiviación ¡interior a la deposición del
barro calcáreo. Por debajo de la zona lixiviada la caliza es muy pomparla.
" ROBERT W. STONE y CLAUDE E. ZOBELL: «Origin of Petroleum; Bacterial As-pects (edición industrial), Jour.
Ind. and Eng. Chem., vol. 44 (1952), pág. 2567." BENJAMÍN T. BROOKS: carta (12 julio 1955)." WILSON L. ORR y
K. O. EMERY: «Composition of Organic Matter in Marine Sediments: Preliminary Data on Ilydrocarbon Distribution
in Basins of Southern Calilornia», Bull. Geol. Soc. Am., vol. 67 (septiembre, 195G), págs. 1247-125(1." PARKER D.
TRASK: «Inferences about the Origin of Oü as Indicated by the Composition of the Organic Constituents of
Sediments», U. S. Geol. Survey, Pro-íessional Paper 186-H (1937), pág. 156.
29
Posibles rocas madre de agua dulce. El punto de vista tradicional de que los materiales
orgánicos primitivos deben depositarse en un ambiente marino ha ido perdiendo terreno en los
últimos años. Noble l clasificó esta creencia como uno de los «prejuicios» que se oponen al
descubrimiento de nuevos campos petrolíferos. Ciertamente, por lo menos en lo que concierne
a los depósitos recientes, los sedimentos lacustres pueden ser tan prometedores como los
sedimentos marinos, según se discutió anteriormente en este capítulo. De hecho, petróleo
presumiblemente indígena está presente en cantidad y concentración suficientes en algunos
depósitos lacustres modernos como para ser posiblemente comerciales.
La tradición de un origen marino era tan fuerte hasta hace unos pocos años que todas las
acumulaciones de petróleo o gas en yacimientos continentales eran atribuidos a emigración
desde rocas madre marinas. Sin embargo, recientemente se ha descubierto petróleo en
condiciones difíciles de explicar por emigración de rocas madre marinas. En la provincia de las
Montañas Rocosas, so han encontrado petróleo y gas en estratos no marinos y no fallados del
Terciario en los campos Powder Wash '" y East Iliawntha. Se ha descrito un campo en la
provincia Shensi en China 157 en que las rocas almacén y las probables rocas madre se
encuentran en una potente serie de rocas continentales del mesozoico inferior. Varios campos
recientemente descubiertos en California están también produciendo en rocas continentales y
las probables rocas madre tienen un origen similar.
En 1954 fue celebrado un simposio sobre «Petróleo y gas en estratos continentales». Se
publicaron artículos describiendo la existencia de petróleo y gas en sedimentos no marinos de
Colombia,138 Pakistán Occidental,150 Utah160 y otras partes del Oeste de Estados
Unidos161 e Inglaterra.102 En cada caso el problema de relacionar el petróleo con una roca
madre marina es difícil si no imposible. En las cuencas Green River y Uinta de Wyoming-Utah-
Colorado, por ejemplo, el petróleo está en capas lacustres del Terciario. Si no es indígena sino
de origen marino, este petróleo tendría que haber atravesado una potente serie de materiales
relativamente impermeables para .alcanzar las lentes de arenisca.
Además de distinguirse los depósitos continentales de los sedimentos marinos por medio de
los fósiles (que no siempre están presentes) los estratos pueden identificarse por diferencias
geoquímicas inclinidas, de acuerdo (Ion Degens, Williams y Kcith.1™
Edad geológica de las supuestas rocas madre. Sin duda alguna las potenciales rocas madre
fueron depositadas durante cada período geológico, incluyendo al Precambriano.104 Como
podría esperarse, los períodos de mayor emergencia marina contienen el mayor número de
posibles rocas madre. Los períodos de clima benigno con un exuberante crecimiento de
plantas contienen asimismo un inusual número de posibles rocas madre.
Las más conocidas de las supuestas rocas madre son las arcillas orgánicas de amplia área
de distribución. Entre las más famosas están la arcilla Utica y otras del Ordoviciense, la
ampliamente extendida arcilla Chattanooga que es del Devoniano-Mississippiense, la arcilla
Cherokee del Pennsilvaniense, la
arcilla Eagle Ford del Cretáceo en Texas y la arcilla Monterrey del Mioceno de los campos
petrolíferos de California.
Relación entre la presencia de posibles rocas madre y la distribución de campos

petrolíferos.
La importancia que ha de darse a la presencia o ausencia de posibles rocas madre en un

área en exploración depende en' una extensión considerable de la distancia que se calcule que
puede emigrar el petróleo, tema que se estudiará en el capítulo 9. Los que creen que el
petróleo no pude emigrar una gran distancia consideran de extrema importancia la naturaleza y
abundancia de las posibles rocas madre."55
" D. D. UTTERBACK : «New Questions On Origin of OU», OH and Gas Jour. (23 agosto, 1954X
págs. 121-124." BENJAMÍN T. BROOKS : «Origin of Petroleums», The Chemistry of Petroleum
Hydrocarbons (Reinhold, Nueva York, 1054), vol. 1, cap. 6, págs. 83-102; II. N. DUNNING y J. W.
MOQUE : «Prophyrin Research and Origin of Petroleum», Bull Am. Assoc. Pctrol. Gcol., vol. 41
(noviembre, 1057), págs. 2403-2413." DÓNALO C. BARTON: «Natural History of the Gulf Coast Crude
Oil», Problcms of Petroleum Gcology (American Association of Petroleum Geologists, 1934), página
149." T. G. McNAB, P. V. SMITII y R. L. BETTS : «The Evolution of Petroleum»,
30
La distribución errática del petróleo puede explicarse más fácilmente por las variables
locales del material orgánico original. Heald cita ejemplos de trampas vacías o casi vacías en
la inmediata vecindad de trampas llenas de petróleo. En el campo Conroe, Texas, la trampa
está llena do petróleo y gas, pero cerca existen dos trampas igualmente buenas que
contienen poco petróleo en comparación con la Conroe. El flanco norte del anticlinal regional
que yace sobre las Montañas Amarillo y cruza la formación Panhandle de Texas de este a
oeste está lleno de petróleo y gas. Muy poco petróleo o gas ha sido encontrado en el flanco
sur (hasta ahora por lo menos) y sin embargo las condiciones geológicas son las mismas en
ambos costados. Relaciones similares existen entre trampas llenas y trampas vacías en el
Great Valley en California. Citando a Heald: «La ausencia de material original debe ser
responsable del fracaso en descubrir petróleo en extensas áreas donde existen las restantes
condiciones». También, «el reconocimiento de que las condiciones do deposición del material
original son variables puede justificar la búsqueda de yacimientos petrolíferos en áreas donde
los restantes requisitos se cree que son mediocres o pobres, pues si se ha formado mucho
petróleo éste se acumulará en cuanto las condiciones i sean algo favorables».
31
Geología de los Hidrocarburos
Rocas Almacén
ROCAS ALMACÉN
CAPÍTULO VI
ROCAS ALMACÉN: La acumulación de petróleo o gas en un yacimiento comercial requiere

una combinación de roca almacén, roca de cierre y trampa. La roca almacén es el recipiente;
por lo general, es mucho más que ha sido fijado por la trampas intensa que el yacimiento de
hidrocarburos que ha sido fijado por la trampa. Fuera de los confines de la acumulación del
petróleo o gas, la roca almacén está casi siempre llena de agua.
Calificaciones generales de la Roca Almacén: Las condiciones para que una roca almacén son
simples: debe poseer espacios suficientes para almacenar un considerable volumen de
hidrocarburos y las condiciones de almacenaje deben ser tales que ceda fácilmente el petróleo
o gas contenido cuando sea alcanzado por un pozo. Cualquier roca enterrada, ígnea,
sedimentaria o metamórfica, que cumple estas especificaciones puede ser utilizada por los
hidrocarburos en emigración como roca almacén. En realidad, sin embargo la mayoría del
petróleo y gas del mundo se encuentra en areniscas y rocas de carbonatos simplemente
porque son las rocas más comunes que cumplen con las especificaciones en aquellas partes
de la corteza terrestre que contienen hidrocarburos en generación o en emigración. El carácter
de almacén de una roca puede ser un rasgo original de dicha roca (porosidad íntergranular de
las areniscas) o un carácter secundario resultante de cambios químicos (porosidad por
disolución en calizas) o de cambios físicos (fracturación de cualquier tipo quebradizo de roca.)
Los cambios secundarios pueden simplemente aumentar la capacidad de almacenaje de una
roca originalmente almacén o pueden convertir en roca almacén una que originalmente no lo
fuera. Para que una roca almacén contenga suficiente petróleo o gas para hacer su extracción
es el porcentaje del volumen total de la roca almacén ocupado por espacios vacíos
(intersticios). Un método común para determinar la porosidad es tomar una muestra de roca,
extraer los fluidos que contenga y obtener el volumen total de la muestra, bien por medida
directa u observando el volumen del liquido desplazado cuando la muestra se sumerge se
sumerge totalmente en el liquido. Se determina el peso en seco de la muestra y a continuación
llenan los intersticios de la roca con un liquido de densidad conocida. Se obtiene así el peso de
la roca más el líquido. El volumen de los poros puede entonces calcularse sustrayendo el peso
en seco de la roca del peso de la roca más el líquido y dividiendo en esta diferencia en pesos
por la densidad del líquido. L volumen de poros dividido por el volumen total es la porosidad
fraccional, que multiplicada por 100 nos da la porosidad en tantos por ciento.
El valor de la porosidad y potencia mínimas dependen de las condiciones locales. Las rocas
almacén mas productivas tienen porosidades superiores al 10 por ciento y potencias de mas de
3 metros. Sin embargo, una roca con menor porosidad puede ser explotable si su potencia es
grande, o una roca más delgada puede ser puesta en producción con éxito si su porosidad es
inusualmente grande. El valor del petróleo y el coste de producción, intervienen también para
decidir si un yacimiento es explotable.
Además de una porosidad y potencia adecuadas, una roca almacén debe tener un cierto grado
de continuidad lateral o de lo contrario el volumen de petróleo almacenado no será adecuado.
En algunas áreas no puede darse por supuesta la persistencia lateral de la porosidad. Muchos
pozos exploratorios no han podido convertirse en pozos productivos debido a que la roca
almacén era localmente ``compacta. El primer pozo explorado en el domo El Dorado, en el
condado Butler, Kansas, fue un pozo seco, pero posteriormente ha sido rodeado por pozos
productivos. Por otro lado, otros pozos han descubierto petróleo únicamente para encontrar a
continuación que se trataban de yacimientos de un solo pozo, debido a la disminución de la
porosidad en la roca almacén hacia el norte, sur, este y oeste del primer pozo.
Algunas capas de arenisca y algunas rocas porosas de carbonato son verdaderas rocas
almacén de escala regional que contienen agua o hidrocarburos donde quiera que se perforen.

Rocas Almacén
En el otro extremo existen zonas porosas de tan limitada extensión lateral que son en si
mismas trampas para la acumulación de petróleo o gas. En distrito demasiados numeroso para
mencionar, no solo debe el buscador de petróleo localizar una trampa, sino que también esta
trampa debe contener una zona porosa en la que los hidrocarburos puedan localizarse.
La facilidad con que una roca se desprende de los hidrocarburos que contiene, depende de su
permeabilidad: Son necesarios tres requisitos para la permeabilidad.
1. Porosidad
2. Poros intersticiales
3. Poros de tamaño supercapilar.
Aunque la roca permeable debe ser también porosa, pero no permeable, pues sus huecos no
están interconectados. La piedra pómez es porosa, pero no permeable, pues sus poros
interconectados. La arcilla puede ser muy porosa pero impermeable porque sus poros son
capilares o subcapilares en tamaño, impidiendo por esto el libre movimiento de los fluidos
contenidos.
La permeabilidad se define como la capacidad de la roca almacén de tranmitir fluidos, se

expresa normalmente en milidarcy se deja pasar un milímetro por segundo de un fluido de 1
centipoise de viscosidad a través de una sección de un centímetro cuadrado de roca bajo un
gradiente de presión de una atmósfera por centímetro.
El método usual para obtener la permeabilidad es medir la velocidad de paso de aire a través
de una muestra de la roca almacén. La muestra debe ser de sección transversal uniforme y lo
suficientemente larga para que los pequeños errores en las medidas de su longitud y área no
afecten significativamente el cálculo de la permeabilidad.
La roca que tiene porosidad y permeabilidad se dice que posee ”porosidad efectiva”. La
porosidad efectiva es el porcentaje del volumen total de la roca ocupado por vacíos
interconectados de tamaño supercapilar. Es la porosidad efectiva la que determina la cantidad
de líquido o gas que una roca almacén puede ceder a un pozo.
La porosidad es creada y destruida por procesos geológicos naturales. La porosidad primaria

en las rocas sedimentarias es la resultante en la acumulación de material detrítico u orgánico
en tal forma que queden huesos y aberturas entre los granos de arnas o los fragmentos de
conchas. De hecho, es imposible la deposición de tales materiales, en especial de los granos
esferoidales, sin que quede un considerable espacio vacío interconectado. La porosidad
primaria es de mayor importancia en las areniscas. La porosidad secundaria es el resultado de
algún tipo de actividad geológica después de que los sedimentos se hayan convertido en rocas.
Es de la mayor importancia es rocas de carbonatos. Los tipos más comunes son las cavidades
por disolución que pueden variar en tamaño desde la cabeza de un alfiler hasta las cavernas
de Carlsbad, y las fisuras o fracturas producidas principalmente por el agrietamiento de la roca.
Las aberturas de la roca de tipo fractura son rara vez visibles en los fragmentos de ripio, pero
pueden verse más fácilmente en los testigos. Las determinaciones de la porosidad hechas
sobre muestras de roca son siempre cifras mínimas a causa de la dificultad de evaluar el
espacio vacío presente en las fracturas.
Helad hace destacar que los planos de estratificación pueden interrumpir la porosidad efectiva:
La mayoría de los campos del petróleo y gas del mundo están en rocas sedimentarias y la
mayoría de las rocas sedimentarias contienen planos de estratificación en los que
corrientemente, aunque no invariablemente, existe una película o salbanda de arcilla que
puede constituir una efectiva barrera al libre movimiento del petróleo o gas de la roca de un
lado del plano de estratificación a la roca en el otro lado. Incluso donde no existe tal película de
arcilla puede haber endurecimiento o cementación en el plano de estratificación que reduzca la
permeabilidad.

Rocas Almacén
Se cree que estos planos de estratificación son responsable del fenómeno observado de una
permeabilidad vertical muy baja, manifestada en el comportamiento de los pozos, incluso
aunque las medidas en el laboratorio raras vez incluyen planos de estratificación. Durante el
corte del testigo, la roca tiende a romper a lo largo de las láminas de arcilla planos de
estratificación en forma en que los fragmentos disponibles para las mediciones no incluyen
estas barreras al movimiento transversal de los fluidos.
Las actividades geológicas que disminuyen en incluso pueden destruir la porosidad son la
compactación es el efecto de la compresión provocado por el peso de la roca superyacente;
algunas rocas están sujetas a una compresión adicional por las fuerzas distróficas. La
compactación de arcillas puede alcanzar hasta el 50 por ciento, pero disminución del volumen
en arenas es mucho menor. La compresión de un sedimento produce un empaquetamiento
más cerrado de los granos, expulsando al mismo tiempo el exceso de fluidos.
Los granos sueltos de arena se convierten en areniscas por compactación y cementación. Si la

cementación avanza hasta su último grado, es destruida la porosidad. Afortunadamente, esto
ocurre rara vez y la mayoría de las areniscas retienen suficientemente porosidad primaria para
almacenar grandes cantidades de petróleo o gas. Maxwell y Verrall han intentado determinar
experimentalmente lo que sucede con la porosidad de las areniscas cuando están
profundamente enterradas. Encontradas que en ambos procesos, la compactación y la
cementación, son ayudaos por las altas temperaturas y por la presencia de soluciones
alcalinos. “Los experimentos indican que una arena pura de cuarzo probablemente no tendría
una porosidad apreciable (+/- 10 por ciento) enterradas a profundidades de 7500m o más, con
temperaturas superiores a los 270ªC” Los sondeos más profundos pueden probar que esta
conclusión, basada en datos experimentales, es más bien pesimita.
Lowry encontró que las areniscas de cuarzo del Paleozoico inferior de Virginia han sufrido
pérdida de porosidad debido a la disolución de sílice en los contactos de los granos y la
consecuencia reprecipitación de está sílice en los espacios de los poros como crecimiento de
cuarzo. Estas areniscas no solo han estado profundamente enterradas en el pasado, sino que
también han estado comprimidos por diastrofismo. Hughes y Cooke determinaron que el
volumen original de poros de muestras secas de areniscas sujetas a presiones hidrostáticas de
1000 atmósferas disminuia de un 3 a un 7,5 por ciento. Como podría esperarse, la mayor parte
de la contracción tuvo lugar a presiones inferiores debido a la compactación. Otro experimento
ha sido determinar el efecto de la comprensión de areniscas sobre su permeabilidad. En este
caso, la cantidad de arcilla de la arenisca resulto ser el factor más importante. ``para areniscas
que contienen grandes cantidades de arcilla, las pruebas preliminares indicaron una gran
reducción en la permeabilidad al aumentar las presiones efectivas de carga´´. Fatt encontró
experimentable que la compresibilidad de las areniscas es función de la presión, composición
mineral y textura.
La recristalización puede destruir cualquier porosidad preexistente al convertir la roca en un
denso agregado de cristales entrelazados. Es un rasgo común del metamorfismo y una de las
razones por las que las rocas metamórficas son característicamente impermeables.
La granulación puede disminuir la porosidad y destruir la permeabilidad por comprensión de la
roca. Las rocas que han estado profundamente enterradas en el pasado geológico y las que
han sido comprimidas fuertemente por fuerzas diastróficas laterales han sufrido granulación en
grados variables. El estudio de cinco areniscas de profundidades entre 880 y 2542 m en dos
pozos de Wyoming, mostro un progresivo cambio con la profundidad desde una disposición
original de granos sueltos hasta una textura compacta como resultado de la presión. Los
efectos de la presión incluyen el aplastamiento y rotura de los granos minerales. Como la
exploración petrolífera empieza a traspasar los 6000m, la persistencia de la porosidad con la
profundidad se convierte en un tema de extrema importancia. Es posible que las areniscas
conserven suficiente espacio vacío entre lo granos cualquiera que sea la profundidad hasta la
que penetren en la corteza terrestre las cuencas sedimentaria. Es menos probable que las
cavidades por disolución en calizas tengan una persistencia y fisuras retengan mucha
permeabilidad incluso en los niveles que están siendo explorados en la actualidad.

Rocas Almacén
Algunas minas relativamente en rocas cristalinas que tienen problemas de entradas de aguas
en los niveles superiores son completamente secas en los niveles inferiores debido al cierre de
las paredes de las fisuras con la profundidad. Puede concluirse que, en general, las
porosidades de las rocas almacén tienden a disminuir con la profundidad de enterramiento.
La mejor forma de estudiar la roca almacén de campo petrolífero es por medio de testigos
obtenidos durante la perforación de pozos exploratorios de explotación. Estos testigos
permiten obtener datos cuantitativos respecto a la porosidad, permeabilidad y saturación de
petróleo (porcentaje de espacios vacíos ocupados por petróleo). El estudio de los testigos en el
laboratorio se conoce por análisis de testigos. El procedimiento usual de cortar pequeños
testigos (tapones) e tamaños normalizados del testigo original. Estos tapones se cortan
`paralela y normalmente a los planos de estratificación. La porosidad y restantes datos se
determinan a partir de ellos.
ARENISCAS PETROLIFERAS. En todo el mundo las areniscas constituyen las rocas almacén
más importante. Localmente pueden ser sobrepasadas en el volumen de petróleo producido
por las rocas de carbonatos, pero en gran número de distritos petrolíferos las calizas y
dolomías están enteramente ausentes de la sección estratigráfica. Las areniscas poseen las
propiedades de porosidad y permeabilidad con una mayor y más consistente extensión que
cualquier otra de las ocas comunes. Además, pueden tener gran potencia, en algunos puntos
de varios cientos de metros. Las areniscas pueden tener o no gran continuidad lateral.
La porosidad en las areniscas es de dos tipos, íntergranular y por fracturas. La porosidad

íntergranular es el espacio vacío neto que queda entre los granos que constituyen la roca. La
porosidad íntergranular inicial depende principalmente del tamaño y forma del grano. Granos
de arena moderadamente redondeados, como los que corrientemente forman las areniscas,
aproximadamente del mismo tamaño forman al asentarse en agua un agregado con una
porosidad del 35 al 40 por ciento. Con una mezcla de tamaños la porosidad disminuye, pues
los granos mas pequeños llenan parcialmente los intersticios entre los granos mayores, que de
otra forma permanecerían abiertos. Las arenas que no se hayan asentado bien tienen
porosidades del 30 por ciento y menos. Si el sedimento es una mezcla de granos de arena y
arcilla, la roca puede carecer totalmente de porosidad efectiva.
Como regla general, la cementación disminuye el porcentaje de porosidad de un 30 a 40

iniciales hasta un 10 a 20. Sin embargo, ni siquiera este reducido espacio esté disponible para
el almacenaje de hidrocarburos, pues la mayoría de las areniscas petrolíferas contiene algo de
agua intersticial. Bartle ha calculado que una arenisca con gas en el noreste de Missouri tiene
una porosidad del 7 por ciento.
Los vaciados hechos poros de poros de areniscas han mostrado que aunque algunas
areniscas no han experimentado posteriormente a la deposición otros cambios que la
cementación, otras han sido lixiviadas en forma tal que los poros pueden ser incluso mayores
que los granos más grandes. Algunos de los poros de arenas Bradford de Bradford,
Pensilvania, podrían albergar de 10 a 100 de los granos de arena que lo rodean. Aunque
corrientemente e relacionan las cavidades por solución con las rocas de carbonatos,
evidentemente pueden también ser importantes en areniscas.
Las areniscas compactas, o las zonas compactas dentro de una arenisca, pueden ser debidas
a una cementación casi completa, pero con más frecuencia son el resultado de una
clasificación inadecuada del material detrital en el tiempo de la deposición. La arcilla, el limo o
las laminillas de mica entremezcladas hacen una arenisca virtualmente impermeable.
Algunas areniscas aparentemente compactas contienen agua o petróleo en fracturas, en cuyo

caso la porosidad la porosidad real es muchas veces mayor que la medible en testigos. La
arenisca es una roca apta y quebradiza y está tan sujeta a la fisuración como cualquier otra
roca de aptitud comparable.

Rocas Almacén
Si una arenisca no es compacta, sino que tiene una porosidad normal del 10 al 20 por ciento,
puede poseer una porosidad real mayor debido a la presencia de fracturas, pero su existencia
es menos obvia.
Finn cree que la permeabilidad de una arenisca Orinasky en Pensilvania y Nueva York ha sido
aumentada en muchas áreas productivas por la presencia de pequeñas fracturas abiertas,
algunas de las cuales tienen carácter de planos de diaclasas abiertos que están sellados
parcialmente por cristales de cuarzo. La presencia de estas fracturas o planos de diaclasas
ligeramente abiertos a sido la principal razón de las enormes entradas de petróleo en algunos
pozos en la arena Oriskany y ha sido la causa de esta formación Oriskany tenga una capacidad
de producción generalmente superior a la normal en las arenas productivas del área de los
Apalaches.
La capacidad de almacenaje de una arenisca para el petróleo frente a su capacidad para el
agua es, según Krynine, una funcion del tamaño relativo de poros. Cuando los granos de arena
son muy finos (diámetro 0,125-0,0625 milímetros) almacenan agua con preferencia al petróleo.
El origen de la mayoría de los granos de arena esta en el granito o en los gneis de granito.
Helad opina que la primera arena que resulta de la destrucción de una roca granítica no es una
arena limpia de cuarzo, sino una mezcla de granos de cuarzo, partículas de arcilla y minerales
accesorios en variadas etapas de descomposición. Se obtiene una roca almacén mucho mejor
si la arena ha sido retrabajada una o varias veces. Probablemente la mayoría de las areniscas,
excepto las que descansan sobre rocas del basamento cristalino, consisten en granos de arena
procedentes de areniscas más antiguas.
AMBIENTE DE LA DESCOMPOSICION. Las dimensiones de una masa de arenisca dependen
de las condiciones de su sedimentación. Las capas mas extensas de arenisca se depositan en
un mar de trasgresión. Existen masas continuas a través de toda el área de recubrimiento
incluso aunque la arena depositada al final de la extralimitación sea mas joven que la arena
depositada cuando empezó aquella. Algunos de los mayores yacimientos de la costa del golfo
son de este tipo. Malkin y Jung opinan que, al irse depositando la arena a lo largo de la línea de
la costa, los barros orgánicos iban depositándose hacia el mar. El petróleo procedente de los
sedimentos orgánicos podría emigrar hacia las arenas o areniscas lateralmente adyacentes
con la mayor facilidad.
La mayoría de las areniscas no forman capas, sino que son lenticulares. En un extremo existen
lentes de muchos kilómetros de extensión y en el otro extremo están las areniscas en ``rosario,
que pueden tener pocos metros de anchura. Estas últimas son tan pequeñas que constituyen
trampas en si mismas. Las arenas lenticulares son depositadas por mares en regresión a lo
largo de las líneas costeras estancadas, en barras o bancos fuera de la costa, en deltas y
plataformas en la desembocadura de ríos y en el fondo de lagos.
Algunas de estas arenas lenticulares han sido depositadas en aguas dulces o salobres y
actualmente conocemos numerosos ejemplos de petróleo en areniscas de origen continental.
Algunas rocas petrolíferas de la costa del golfo y California cambian buzamiento arriba de
facies marina a facies continental.
YACIMIENTOS EN CONGLOMERADOS. Los conglomerados pueden ser considerados como
areniscas de grano grande. Poseen todos los requisitos necesarios para constituir una roca
almacén, pero esta variedad de roca sedimentaria es rara, especialmente en las grandes
cuencas sedimentarias. Sin embargo, algunas areniscas basales pueden tener el grano tan
grande para ser llamadas conglomerados; el conglomerado petrolífero Sooey de Kansas
central es de este tipo. Un conglomerado consistente de detritos esquistosos procedentes de
las rocas del basamento cristalino es la roca almacén de dos campos es la cuenca de Los
Ángeles.
Yacimientos en Rocas de Carbonatos. Las rocas de carbonatos son la caliza, la dolomía y
las rocas intermedias entre estas dos. En algunas áreas, notablemente el distrito Lima-Indiana
y la cuenca de Michigan, las rocas de carbonatos son prácticamente las únicas rocas almacén.
En algunas otras regiones, como en el Oriente Medio, Méjico y la región central de Estados
Unidos, ambas rocas, calizas y areniscas, contienen cantidades comerciales de petróleo y gas.
Se ha calculado que el 50 por ciento de las reservas conocidas de petróleo en los Estados
Unidos procede de yacimientos en rocas de carbonatos.
Las rocas almacén de carbonatos difieren en algunos aspectos de las areniscas almacén. La
porosidad es más probable que esta localizada, lateral y verticalmente, dentro de la roca.
Aunque unas pocas rocas de carbonatos poseen porosidad a lo largo de la capa, esta
condición es excepcional.

Rocas Almacén
Dentro de una formación dada de carbonato, incluso aunque tenga varios cientos de metros de
potencia, la porosidad está en muchos lugares confinada a los 8 a 15 metros superiores. Por
otro lado, los poros pueden ser muchos mayores que en una arenisca, dando a la roca una
permeabilidad no usual. Por esta razón, los pozos perforados en rocas de carbonatos poseen
las marcas de producciones iniciales altas y las bolsas en calizas tienden a tener una vida
menor que las bolsas en areniscas.
ORIGEN Y CARÁCTER DE A POROSIDAD EN ROCAS DE CARBONATOS. La porosidad de
las rocas de carbonatos es el resultado final de los procesos de producción y reducción de
poros. La porosidad efectiva puede ser primaria o secundaria. Los procesos negativos o de
reducción de poros incluyen la cimentación (o precipitación) y la recristalización.
La porosidad primaria es la que resulta en la deposición original de la roca de carbonatos. Con

toda probabilidad gran parte de la caliza es clástica y se compone de restos de conchas o de
granos de calcita procedentes de rocas de carbonatos más antiguas. Teóricamente tal roca
debía tener los mismos vacíos intersticiales que los que tienen la areniscas, pero generalmente
la porosidad la porosidad íntergranular original se ha reducido por los rellenos debidos a la
precipitación de calcita o dolomita de las soluciones en circulación. Existen cuatro tipos de
porosidad primaria en las calizas. Estos son los vacíos originales en las calizas oolíticas, las
coquinas, las calizas arrecifales y las zonas detríticas en los flancos de los arrecifes. Los oolitos
ordinariamente tienen de 0.1 a 0.5 mm de diámetro y son de forma elipsoidal. Son cementados
por carbonato cálcico y puesto que, que como regla general, el grado de cementación es mayor
que en las areniscas, la porosidad y permeabilidad son inferiores. En muchos lugares oolíticos
se encuentran en zonas o lentes discontinuos completamente rodeados por una caliza
relativamente densa. Las coquinas son depósitos clásticos de conchas; sus porosidades
originales (porosidad efectiva) pueden ser muy grandes debido a la disposición desordenada
de conchas de diversos tamaños.
Un arrecife de caliza es un depósito, principalmente de origen orgánico, que se ha levantado a

una velocidad superior a la de los sedimentos contemporáneamente depositados alrededor de
sus márgenes. Aunque los arrecifes modernos están constituidos en su gran mayoría por algas
o corales, muchos otros tipos de organismos, tales como los crinoideos, contribuyeron al
desarrollo de los arrecifes en el pasado geológico. La exploración petrolífera ha conducido a los
descubrimientos de muchos arrecifes antiguos enterrados, algunos de ellos conteniendo
cantidades fenomenales de petróleo. Muchos de los campo petrolíferos de Alberts, incluyendo
Leduc. Son de este tipo.

Rocas Almacén
Los arrecifes son característicamente porosos, pero es probable que la porosidad inicial,
consistente en el espacio interior a los habitáculos donde el animal vivía y en los vacíos
resultantes del libre intercrecimiento de los organismos marinos constructores, haya
aumentado por procesos secundarios, especialmente por disolución por calcita. El principal
arrecife productor de Leduc se ha convertido totalmente en dolomita. De creciente importancia
como formación petrolífera es el material arrecifal detrítico que pueden acumularse en los
flancos y alrededor del perímetro del arrecife. En el yacimiento de Marine de Illinois la principal
roca almacén no es el arrecife sino “la caliza detrítica similar a una coquina que forma el manto
que cubre el arrecife de Niagaran”. Quizá la mayor acumulación de restos clásticos en el atolón
Horseshoe en el oeste de Texas. Posteriormente un pozo con gas cerca del río de Berland en
las colinas de Alberta atravesó 168 m del mismo arrecife. La máxima potencia de los arrecifes
porosos del condado Scurry al oeste de Texas, cuyos primeros campos fueron descubiertos a
mediados de 1948, es aproximadamente 180m.
Campos petrolíferos más antiguos descubiertos en arrecifes son el yacimiento Hendrick del
condado Winkler, Texas, el Southern Field de México, Kirkuk en Irak y otros.
Con excepción de las porosidades de lo arrecifes, que son, al menos en parte, primarias, la
porosidad en la mayoría de las rocas almacén de carbonatos es principalmente secundaria.
Los procesos que producen porosidad incluyen recristalización, disolución, dolomitización y
fracturación. La recristalización, aunque tiende a destruir la porosidad primaria, produce nuevos
huecos entre cristales y entre planos de crucero; se reconoce por el nombre de porosidad
intercristalina. Ohle cree que la permeabilidad de las rocas de carbonatos puede aumentar por
la recristalización de calizas de grano fino: “El aumento del grano reduce los poros, pero los
intersticios creados son mayores y además muchos más derechos y sin rugosidades y mayores
los desplazamientos entre si. Los caminos existentes para el movimientos de fluidos en tales
rocas recristalizadas son bastantes intrincados que los existentes en la caliza original de grano
fino. Puesto que los granos grandes tienden a tener caras planas, el movimiento se efectúa
esencialmente entre paredes paralelas.
El mayor aumento de la porosidad en las rocas de carbonatos es debido a la disolución. La

calcita y la dolomía, especialmente cuando están situadas por encima del nivel de las aguas
freáticas, son lixiviadas por las aguas que se filtran utilizando la porosidad preexistente. Las
cavidades resultantes varían en tamaño desde poros diminutos hasta cavernas gigantescas.
Sin tener en cuenta el tamaño, las cavidades resultantes están conectadas entre sí y son
extremadamente irregulares.
Un cambio de la acción disolvente a la precipitante produce las estalactitas de las cuevas y

depósitos comparables en los poros más pequeños, que tienden a reducir el espacio existente
de poro.
La infiltración del sedimento suprayacente puede también disminuir e incluso destruir por
completo la porosidad de la roca.
La arcilla roja de la formación Molas (Pensilvaniano) ha penetrado en las cavidades de la

caliza inferior Ouray (Misissipiano) en el campo Rattlesnake hasta tal punto que tan solo el
1.5m inferior de la zona meteorizada de 11 a 17m de potencia tiene porosidad y permeabilidad
adecuadas para funcionar como roca almacén.
En la mayoría de las rocas almacén de carbonatos las cavidades por disolución son de tamaño
modesto, ligeramente mayores que los intersticios entre los granos de arena, pero pueden
variar de tamaño hasta constituir verdaderas cavernas.
Otros campos de Texas occidental están también situados en zonas verdaderamente

cavernosas, así como algunos campos de Kentucky.

Rocas Almacén
Tales acumulaciones se aproximaciones se aproximan al concepto usual del profano de las

bolsas petrolíferas.
Cuando las cavidades son grandes es evidentemente imposible determinar el porcentaje de

porosidad por los métodos usuales de análisis de testigos. Cuando es posible medir la
porosidad de calizas dolomías petrolíferas, varía el 5 al 20 %.
La porosidad por disolución está causada por las aguas que circulan por el subsuelo. Estas
aguas aprovechan la porosidad primaria para agrandar los poros ya existentes. También
siguen y agrandan diaclasas y planos de estratificación.
Puede observarse fácilmente en los afloramientos que las conchas de los fósiles pueden ser
muy vulnerables, por lo que las rocas fosilíferas de carbonatos adquieren una apariencia
rugosa marcada de hoyos.
A causa de que la mayoría de la porosidad por disolución se desarrolla por encima del nivel de
las aguas freáticas, las rocas de carbonatos deben ser no solo las emergentes, sino también

Rocas Almacén
deben estar casi o totalmente expuestas a la erosión subaérea. Por tanto, debe existir una
discordancia sobre toda caliza con porosidad por disolución, lo que explica por que las zonas
porosas de las rocas de carbonatos tienden a estar cerca de la parte superior de la formación.
Sin embargo, no tienen que estar necesariamente en la parte superior; en el presente ciclo de
erosión, la disolución por las aguas circulantes del subsuelo se ha efectuado en capas
excepcionalmente vulnerables a varios cientos de metros por debajo de la superficie.
Una lista de los campos que producen cavidades por disolución en rocas de carbonatos
incluiría la mayoría de los campos petrolíferos del mundo en calizas y dolomías.
Como las dolomías son comparables en solubilidad a las calizas, están sujetas a la misma
lixiviación por la infiltración de las aguas meteóricas.
Sin embargo, en algunos lugares en que las calizas han sido dolomitizadas localmente, las
zonas de dolomitas han sido localmente, las zonas de dolomitas son porosas y permeables,
mientras que la caliza no dolomitizada es densa e impermeable. Tales zonas porosas
constituyen almacenes y trampas para el petróleo. Obviamente el desarrollo de esta porosidad
particular está ligado al proceso de dolomitización.
La teoría tradicional de que esta porosidad es debida a la disminución de volumen que

acompaña a la sustitución de la calcita por dolomita, molécula por molécula, es insostenible por
cuatro razones por lo menos:
1) La sustitución es siempre volumen por volumen y no molécula por molécula.

2) Muchas zonas dolomitizadas no son porosas.
3) La porosidad, cuando existe, se aparta de la 12.3 por ciento calculada.
4) Las cavidades no tienen forma de huecos por contracción, sino que son muy
semejantes a las cavidades por disolución.
Pueden estar tapizadas por cristales euhedrales de dolomita. Se ha sugerido que en este caso
al menos la dolomitización fue provocada por las aguas circulantes del subsuelo y que la
porosidad es el resultado de un exceso de la disolución sobre la precipitación durante el
proceso de sustitución. Hohlt y Chilingar y Ferry, declaran que en las rocas de carbonatos
primarios los cristales de calcita secundaria o de dolomita tienen las orientaciones al azar.
Puesto que la vulnerabilidad a la solución de los cristales de orientación al azar es mayor que
en los cristales de orientaciones paralelas, tienden a lixiviarse con más facilidad.
Según Towse la caliza Madison en el Campo Beaver Lodge de Dakota del Norte ha aumentado
su porosidad primaria de tres a cinco veces por dolomitización. Por otro lado Bybee cita un
ejemplo donde la dolomitización de una caliza dolomítica inicialmente y permeable ha destruido
por completo por porosidad.
Las rocas de carbonatos son quebradizas y en muchos lugares están extensamente

fracturadas. En algunos campos las fracturas aumentan la porosidad pero en otros lado las
calizas y dolomías es completamente impermeable en el interior y todos los hidrocarburos
están almacenados en grietas y otros tipos de fracturas. Este último tipo de roca almacén se
describe a continuación en una sección aparte. Un ejemplo de fracturas que aumenta la
porosidad de una caliza es el yacimiento de Marine de Illinois. Las producciones diarias
porosas discontinuas parecen de potencia suficiente para poseer una capacidad de almacenaje
correlativa con la cantidad de fluido producida. Es opinión del escritor de la red de zonas de
porosidad secundaria que rodean el sistema de grietas que unen las fajas productivas
discontinuas entre si y con el núcleo del arrecife principal situado a mas profundidad forman un
yacimiento común. Boyd ha notado una reserva de gas en exceso de la capacidad calculada de
la dolomía siluriana en el campo de gas Howell, Michigan, y supone que esta discrepancia es
debida a la presencia de fisuras en la roca almacén que aumentan su capacidad de
almacenaje. Towse cita una abundante fracturación en las capas más densas de una caliza
petrolífera y cree que estas fracturas permitieron el movimiento de hidrocarburos entre las

Rocas Almacén
zonas porosas. La importancia de la porosidad de fracturas en rocas almacén de carbonatos ha
sido destacada por Rose.
Nuss y Whiting consiguieron obtener un modelo plástico de la porosidad por fracturas
aumentada por disolución en la caliza del Devoniano del campo petrolífero South Fullerton,
Texas.
CONDICIONES DE POSICION. La ecología del desarrollo de arrecifes ha recibido más
atención que la de las otras rocas de carbonatos, probablemente a causa de su papel
primordial en los océanos modernos. Counselman resume las condiciones óptimas para el
desarrollo de arrecifes:
1. Una plataforma relativamente estable.

2. Aguas poco profundas (menos de 200m).
3. Ausencia de contaminación por impurezas físicas o químicas.
4. Aguas templadas (alrededor de los 20ºC).
5. Marejadas o resacas suaves.
6. Ausencia de corrientes fuertes.
Según Adams, las calizas no arrecifales constituyen cerca del 95 por ciento de las rocas de
carbonatos en la corteza terrestre. Sin duda, la mayoría se formaron en condiciones marinas
sobre plataformas continentales. Algunas fueron clásticas, otras evaporiticas, otras orgánicas,
pero la mayoría fueron probablemente mezclas genéticas. Las aguas templadas y poco
profundas aceleran los procesos orgánicos y la precipitación química, pero también son
posibles calizas en aguas frías y profundas. Con mucho el mayor volumen de rocas de
carbonatos han sido depositadas relativamente cerca de tierra, pues las áreas emergidas
suministraron no solo la mayor parte del alimento consumido por los organismos constructores
de arrecifes, si no también el mismo carbonato cálcico, en forma clástica y disuelta.
También se depositaron en el pasado calizas no marinas, pero son cuantitativamente
insignificantes comparadas con las rocas de carbonatos de procedencia marina.
Yacimientos en rocas ígneas. Aunque el número total de acumulaciones conocidas de
hidrocarburos en rocas ígneas es grande, el número de acumulaciones comerciales es mucho
más pequeño. Sellards cita dos en Cuba, una en Méjico y catorce en Texas. La producción en
los campos Cubanos proviene de fracturas en serpentinas. El campo en rocas ígneas de
Méjico es el furbero en Veracruz. Un manto de gabro corta una arcilla, metamorfizándola por
encima y por debajo de dicho manto. El petróleo se encuentra en las zonas porosas del gabro y
de la arcilla metamorfizada.
Cinco condados de Texas en el llano Costero, Williamson, Travis, Bastrop, Caldewell y Medina
contienen petróleo en rocas que originalmente fueron ígneas. En todos los casos, la actividad
volcánica que produjo el material ígneo se manifestó durante el periodo cretaceo y las rocas
volcánicas quedaron estratificadas entre sedimentos del cretaceo. Evidentemente en algunos
casos la lava fue expulsada en el mar cretaceo y formo un cono volcánico submarino. Algunos
de los conos volcánicos sobresalieron por encima del nivel del mar o fueron subsiguiente
elevados y sujetos por tanto a la erosión. Posiblemente algunos fueron enteramente
submarinos. La mayoría de las masas ígneas de esta región, originalmente situadas entre
estratos del Cretaceo, afloran actualmente a la superficie. Ninguna de las rocas ígneas
expuestas produce petróleo, y muchas de las masas ígneas enterradas son igualmente no
productivas. La porosidad es en parte primaria, debido al carácter vesicular de los mantos de
lava, y en parte secundaria debido a la alteración del material volcánico y a su intensa
fracturación. Más de 4 millones de metros cúbicos de petróleo han producido estas rocas
ígneas en el centro y el sur de Texas. El primer descubrimiento fue hecho en 1913, el ultimo en
1955.
Yacimientos exclusivamente en fracturas. Hemos visto que las fracturas pueden aumentar
la capacidad de almacenaje de las areniscas, rocas de carbonatos y serpentinas.
Consideraremos ahora aquellos yacimientos en que virtualmente toda la acumulación esta
dentro de fracturas. Es claro que en areniscas y calizas pueden existir todas las gradaciones
entre la porosidad exclusivamente sin fracturas y la porosidad exclusivamente con fracturas.
La porosidad en fracturas es el espacio vacío entre las paredes de una grieta o una fisura. Este
espacio tiene una anchura definida, pero las otras dos dimensiones son indefinidas. Excepto
donde las grietas han sido ensanchadas por disolución, las anchuras de las grietas van desde
0.25 a 0.05cm. Todas las rocas son fracturables en grados variables, así que todo movimiento

Rocas Almacén
de la corteza terrestre, desde un plegamiento intenso hasta el asentamiento suave, tienden a
fracturarlas.
La fracturación tiende a producir esquemas geométricos. Aunque la forma de este esquema

depende de la naturaleza de las fuerzas que producen la fracturación todos ellos tienen un
rasgo común: las fracturas están conectadas entre sí. El resultado es una red o sistema de
huecos con una permeabilidad máxima, en el supuesto de que las anchuras de las grietas sean
de tamaño supercapilar.
La porosidad de las fracturas de un volumen dado de roca es el producto de la anchura media

de las grietas y el área de los planos de fractura. Esta última depende de la forma del esquema
y de su periocidad en el espacio.
Aunque la porosidad por fracturas, incluso en el mejor caso, cae por debajo puede ser
adecuada para la acumulación de hidrocarburos en cantidades comerciales como se vera en
los ejemplos citados a continuación. No hay nada extraño en este fenómeno. Millones de
personas en todo el mundo dependen de la porosidad por fracturas para su suministro de agua
potable. Petróleo y gas en cantidades comerciales se han encontrado exclusivamente en
fracturas en arcillas, pedernal, limonita, arenisca, rocas de carbonatos y diversos tipos de rocas
del basamento.
ARCILLAS FRACTURADAS: Las arcillas pueden no poseer otra porosidad efectiva que la
debida a la fracturación. Es muy común encontrar gas en arcilla de formaciones paleozoicas en
la mitad oriental de los EE.UU; Esta situación adquiere una considerable importancia
económica al este de Kentucky donde se han perforado más de 3800 pozos que atraviesan
acumulaciones de gas en arcillas fracturadas del Devoniano. La producción ha sido estimada
haciendo que estalle nitroglicerina dentro de los pozos, lo que rompe el terreno hasta las
fracturas no penetradas por el sondeo.
PEDERNALES FRACTURADOS: Los pedernales y arcillas silícias fracturadas del Mioceno han
producida unos 48 millones de toneladas de petróleo. Estos yacimientos están caracterizados
por su baja porosidad y alta permeabilidad. Las producciones iniciales son generalmente del
orden de 30 a 160 toneladas del día, con un máximo de unas 400 toneladas.
LIMOLITAS FRACTURADAS: La limolita es demasiado compacta, a causa del tamaño

subcapilar de los intersticios entre sus partículas, para dar un volumen apreciable del petróleo
que pueda contener, aunque esta roca puede ser comercialmente productora de gas. Por tanto,
la producción de petróleo en formaciones de limonitas debe proceder de fracturas.
ARENISCAS FRACTURADAS: Los yacimientos en areniscas con producción exclusivamente

en fracturas son raros, pues son escasas las arenas cementadas hasta tal grado que pierden la
porosidad. Sin embargo, Pinfold ha descrito un campo petrolífero en Pakistán Occidental, en el
que unas arenas de agua dulce muy cementadas de las postrimerías del Terciario producen
comercialmente a partir de fracturas.
ROCAS DE CARBONATOS FRACTURADAS: Buenos ejemplos de acumulaciones

exclusivamente en fisuras que cortan rocas de carbonatos son algunos campos fuera de los
EE.UU.
EDAD DE LAS ROCAS ALMACÉN. Las rocas almacén pueden pertenecer a varias edades o
épocas geológicas. De importancia comparable es la edad de los materiales orgánicos y la
época de la generación de los hidrocarburos. De mayor importancia es la época en que se
efectúa la acumulación. Pero la edad de la roca almacén tiene una decidida ventaja: es la única
edad que puede determinarse consistentemente con algún grado de exactitud.
Más de la mitad (el 53% de las reservas del petróleo en los mayores campos del mundo libre
está en formaciones del mesozoico. Las formaciones del Mioceno y el Oligoceno vienen en
segundo lugar con 29% y las del Paleozoico las terceras con el 9%. El resto se encuentra en
formaciones del Terciario anteriores y posteriores al Mioceno- Oligoceno.

Rocas Almacén
La siguiente revisión de la edad de las rocas almacén es un resumen tomado de van der
Gracht, añadiéndole algunas informaciones recientes.
ROCAS ALMACÉN DEL MESOZOICO: Aunque se considera usualmente el Plioceno como la

edad de las rocas productoras más jóvenes, existen algunas excepciones menores. Al
sudoeste de Europa y California, algunas de las rocas almacén traspasan el límite Plioceno-
Pleistoceno. Algunas arenas muy recientes de California y Texas contienen petróleo en unos
pocos puntos y se han citado pequeñas producciones en dos campos en los condados Pecos
de este último estado.
En Sudamérica los mayores campos petrolíferos de Trinidad, Venezuela, Colombia y Perú,
producen en rocas del Terciario. En Europa, los campos de Rumania y Rusia del Sur y algunos
campos en el Oriente Medio, incluyendo los prolíficos campos de Irán e Irak, así como el
Petróleo de la India, Birmania e Indias Orientales Holandeses, pertenecen al Terciario.
ROCAS ALMACEN DEL MESOZOICO. El cretaceo contiene abundante petróleo en los EE.UU
en el interior del Golfo y en las Montañas rocosas. Es también de gran importancia en México,
Venezuela occidental y en el área del golfo Pérsico incluyendo la isla Bahrain, en el campo
Safaniya, en el norte de Arabia del Sur, en el campo de Burgan y algunos otros de Kuwait y los
campos del Sur de Irak.
ROCAS ALMACEN DEL PALEOZOICO: La mayoría del petróleo de Paleozoico producido

hasta la fecha procede de los campos de EE.UU y del Canadá. Sin embargo existe una buena
producción en los campos de Rusia y los recientes descubrimientos del Sahara están situados
en Rocas del Paleozoico.
Ciertas rocas del Ordovícico han desplazado rocas del Pensilvaniano como la fuente principal
del petróleo en la Región central de los EE.UU. El en su tiempo gran distrito de Lima- Indiana
de Ohio e Indiana produce en dolomías del Ordovícico. Otras rocas almacén de este periodo
existen en Kentucky y Tennese. Durante muchos años se han obtenidos gas en rocas del
Cambriano en Nueva York.
A continuación hubo una búsqueda activa y fructuosa de campos en rocas del Cámbrico al
oeste de TEXAS y al norte de las rocosas. Existe también producción desde hace algunos años
en la región central de los EE.UU en areniscas basales del Paleozoico que pueden ser del
Cámbrico, pero también posteriores.
El petróleo se produce comercialmente en el Precámbrico en los condados de Rice, Barton y
Rusell, Kansas.

CAPITULO 7
FLUIDOS EN LAS ROCAS ALMACÉN
Los huecos de todas las rocas están ocupados, por agua, agua y
petróleo o agua y gas. Las únicas excepciones son las rocas situadas por
encima del nivel de las aguas freáticas. Incluso entonces sus huecos
están llenos de agua a continuación de una lluvia y después de que el
agua se ha filtrado, las paredes de los poros quedan tapizadas por agua
adherida que puede resistir hasta la siguiente lluvia o desaparecer por
evaporación o por absorción por la vida vegetal.
Los fluidos no son producibles mediante sondeos excepto en las rocas
almacén por las razones expuestas en el capítulo precedente. A menos
que la roca almacén esté aún sufriendo alguna compactación, los fluidos
son simplemente ocupantes de los huecos dentro de una estructura
competente.
Estudiaremos en primer lugar las presiones a que están sometidos estos
fluidos y después discutiremos los fluidos mismos.
Presiones en la roca almacén. La presión de la roca almacén es la ejer-
cida por los fluidos y gases contenidos dentro de dicha roca. Esta
presión puede ser medida durante la producción o cerrando el pozo y
bajando un manómetro hasta la altura del yacimiento. Sus valores están
comprendidos entre un poco más que la presión atmosférica hasta un
máximo registrado de 860 atmósferas. La presión calculada a 6324
metros en el pozo Richard-son y Bass en Plaquemines Parish, Luisiana,
fue de 1190 atmósferas. Como regla general pero no invariable, la
presión de un yacimiento baja durante la vida de un campo de petróle o
1 Stanley C. Herold: Oil Well Drainage (Stanford University Press, 1941);

C. V. millikan : «Production Practice», Elements of the Petroleum Industry
(American Institute of Mining and Metallurgical Engineers, Nueva York, 1940),
págs. 255-257; V. C. illing: «The Origin of Pressure in Oil Pools», Science of
Petroleum (Oxford Universlty Press, Londres, 1938), vol. 1, págs. 224-229; Commrt-
tees on Reservoir Development and Operation (Standard Oil Co. de Nueva Jersey,
compañías asociadas y Humble Oil and Refining Company), Joint Progress Report
on Reservoir E-fficiency and Well Spacing (Standard Oil Development Co., 1943);
george dickinson: «Geological Aspects of Abnormal Reservoir Pressures in Gulf
Coast Louisiana», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 37 (febrero, 1953), págs. 410-
432 (36 notas bibliográficas).
2 Lee S. McCaslin, Jr.: «Tide Water's Record Breaker—Bottom Hole Pressure
12,635 Psi», Oil and Gas Jour. (8 septiembre, 1949), págs. 58 y sigs.

FLUIDOS EN LAS ROCAS ALMACÉN 225
la vida de un campo de petróleo o gas desde un máximo en el tiempo del

descubrimiento hasta un mínimo en el tiempo del abandono. La velocidad de caída
depende de varios factores. Uno es la cantidad de gas presente. La caída más rápida
de presión se verifica cuando existe muy poco gas y la recuperación se debe
principalmente sólo a la expansión de la fase líquida. Otros factores son la presencia
y presión del agua marginal y el porcentaje del volumen total de la roca almacén
ocupado por hidrocarburos. Si las presiones del agua marginal son altas y la zona
acuífera potente y de gran extensión, la presión inicial puede ser mantenida a través
de toda la historia del campo petrolífero e incluso después de que todos los pozos de
petróleo se hayan convertido en pozos de agua. Si la zona acuífera es de tamaño
limitado y los hidrocarburos ocupan la mayor parte del yacimiento, su desaparición
estará acompañada, como es lógico, por una caída de presión al no existir nuevas
reservas de agua que ocupen el espacio abandonado.
La presión del yacimiento es de gran importancia en la producción de petróleo. Las
presiones iniciales pueden ser tan altas que el pozo expulse petróleo
espontáneamente, ahorrando los gastos de bombeo. Incluso si el pozo deja de
manar o no lo hace inicialmente, la diferencia de presión entre el yacimiento y el pozo
es la causa de que los hidrocarburos fluyan hacia él y suban por la tubería, con lo
que la profundidad de bombeo puede ser considerablemente menor que la
profundidad del yacimiento. Además, el mantenimiento de una presión alta en el
yacimiento durante la vida del mismo da frecuentemente como resultado una
recuperación mayor que la que sería posible si se permitiera que la presión
disminuyese apreciablemente. La principal razón para una mayor recuperación con el
mantenimiento de la presión reside en la relación entre el' petróleo y el gas dentro del
yacimiento. Al aumentar la presión, el petróleo puede contener más gas en
disolución, con lo que disminuye su viscosidad. El escape de gas en la superficie en
cantidades desproporcionadas al petróleo producido da como resultado el aumento
de la viscosidad del petróleo que queda en el yacimiento. Asimismo la caída de la
presión por debajo del punto en que empieza a desprenderse gas de la solución
provoca la formación de diminutas burbujas de gas que a su vez entorpecen el flujo
de petróleo. Las prácticas modernas de producción tienden a mantener tanto como
sea posible la proporción inicial gas-petróleo.3 Si el gas del yacimiento está situado
inicialmente sobre el petróleo (<<sombrero de gas») o si durante la explotación se
desprende del petróleo, ocupando la parte superior del yacimiento cumple una útil
función. La fuerza expansiva del gas tiende a empujar el petróleo hacia abajo, for-
zándole a entrar en los pozos que hayan sido perforados en la zona petrolífera.
3 R. V. HIGGINS: «Productivity of on Wells and Inherent Influence of Gas:

Oil Ratios and Water Saturation», U. S. Bur. Mines, Rept. Investigations 3657 (sep-
tiembre, 1942).

226 GEOLOGÍA DEL PETRÓLEO
Sin embargo, si los pozos se perforan en la zona de gas, solamente pro-

ducirán gas y se disipará la mayor parte de la energía del yacimiento.
Normalmente la presión y la temperatura aumentan con la profundidad del
yacimiento. En estas condiciones aumenta la densidad del gas natural a
causa de la compresión, pero disminuye la del petróleo debido al aumento
de la cantidad de gas disuelto. El resultado final es que en estos
yacimientos profundos llegan a no poder diferenciarse ambos fluidos. El
petróleo en fase con el gas se denomina «condensado», pues vuelve a la
forma líquida cuando la presión baja por debajo del punto de rocío. Con el
aumento de la profundidad en las investigaciones, el número de campos de
condensados es cada día mayor y es de esperar que continúen
aumentando su número y su porcentaje en la producción total.
CAUSAS POSIBLES DE LA PRESIÓN DE LOS YACIMIENTOS.
Ordinariamente la presión del agua en un depósito acuífero es la «columna
hidrostática» o peso de la columna de agua que gravita sobre él. De modo
semejante, la presión en los yacimientos de petróleo o gas es la presión
hidrostática del agua que casi invariablemente se encuentra bajo una
acumulación de petróleo o gas. Si la roca almacén fuera permeable hasta su
afloramiento, la presión ejercida por esta agua marginal sería
aproximadamente equivalente a la de la columna vertical de agua que se
extiende desde el contacto agua-petróleo hasta el nivel de las aguas
freáticas por debajo del afloramiento de la roca almacén. Esta presión es de
0,98 a 1,05 atmósferas por cada 10 m de columna de agua. La variación es
debida a diferencias en el contenido de sólidos disueltos. En algunos
campos petrolíferos la permeabilidad lateral de la roca almacén se extiende
aparentemente hasta su afloramiento, pues la presión del yacimiento está
muy próxima a la presión calculada. Por otro lado, las presiones anormales
indican la falta de conexión (o al menos una conexión inadecuada) entre los
fluidos del yacimiento y el nivel de las aguas freáticas. Probablemente, en
"la mayoría de los campos existe al menos una conexión hidráulica
imperfecta, ya a través de la roca almacén o por un sistema de fracturas, por
lo que la columna hidrostática es una de las varias fuerzas que intervienen
en la creación de la presión del yacimiento.
Cuando la zona acuífera de un yacimiento de hidrocarburos tiene su punto
de descarga en una cota inferior a su punto de toma, las presiones de los
fluidos son hidrodinámicas (capítulo 13) más que hidrostáticas. La presión
del fluido dentro de la zona acuífera en un punto dado depende de la pro-
fundidad de dicho punto por debajo de la superficie piezométrica que buza
desde el nivel del agua en el punto de toma hasta el punto de descarga.
Muchas presiones de yacimientos son consideradas anormales porque no
coinciden con la presión calculada a la profundidad por debajo del nivel local
de las aguas freáticas. Realmente no son anormales a menos que no
correspondan a las diferencias de cota entre el yacimiento y el nivel del

FLUIDOS EN L AS ROCAS ALMACÉN 227
agua en el punto de toma en el caso de presión hidrostática, o el yacimiento y la

superficie piezométrica cuando las presiones son hidrodinámicas.
Aunque el agua pura es solo ligeramente compresible, las aguas saladas de los
yacimientos de hidrocarburos tienen compresibilidades más altas a causa, de la
presencia de sales y gases en disolución. Se ha sugerido que la expansión del agua
que ha acompañado a la disminución de la presión del yacimiento debido a la
explotación del campo East Texas, es el mecanismo por el que el agua marginal
sigue al petróleo al desaparecer éste.4 El movimiento artesiano del agua desde el
afloramiento de la arena Woodbine a la zona petrolífera del campo East Texas no se
considera adecuado para llenar inmediatamente los poros desocupados por el
petróleo que se extrae por los pozos. Bugbee 5 hace resaltar que únicamente donde
el volurnen del agua marginal es grande (como en el East Texas) puede tener
importancia la expansión del agua. Declara también que en los yacimientos en forma
de lente no hay que contar con las presiones hidrostáticas, pues la expansión del
agua comprimida puede y debe ocurrir. Una disminución de la presión confinante es
también la causa de que el petróleo no saturado se expansione hasta alcanzar el
punto de burbujeo, como se indicó en el capítulo 2.
Como los hidrocarburos se encuentran en los poros entre las paredes de la roca no
han de soportar parte del peso de la roca superyacente, en el supuesto de que la
roca almacén esté completamente comprimida. Es muy posible que algunas de las
areniscas más modernas estén sufriendo aún algo de compactación, en cuyo caso
los fluidos de la roca almacén han de soportar parte del peso de la roca
superyacente. En estos casos la presión debida a la carga puede alcanzar hasta 2,2
atmósferas por cada 10 m verticales, más del doble de la presión hidrostática. Un
ejemplo notable de presiones altas anormales es la provincia de la Costa del Golfo G
en los Estados Unidos. Además de la compactación de la roca almacén, si la roca
que está encima de ella no ha alcanzado su máximo grado de compactación, el
yacimiento está sometido a un incremento de presión debido a la expulsión de los
líquidos contenidos en la arcilla, el barro o el fango calcáreo. Otra explicación sugeri-
da para las presiones anormalmente altas de la Costa del Golfo es que son
originadas por la compresión de fluidos en yacimientos completamente aislados de la
superficie.7
4 R. J. SCHILTHUIS y WILLIAM HURST; «Variations in Reservoir Pressure in the East Texas

Fleld», Trans. Am. Inst. Met. Engrs., vol. 114 (Petroleulm Development and Technology, 1935),
págs, 164-173; JOHN S. BELL y J. M, SHEPHERD: Pressure Behavior in the Woodbine Sand,
Jour. Petrol. Tech., vol. 3 (enero, 1951), páginas 19-28.
5 J. M. BUGBEE; “Reservoir Analyses and Geologic Structure”, Trans. Am Inst. Min. Met.
Engrs., vol. 151 (Petroleum Development and Technology, 1943) páginas 99-111.
6 GEORGE DICKINSON. op. cit,
7 DONALD L. KATZ, memorándum fechado en 17 noviembre 1958.

En algunos puntos, como en Long Beach, California, y Goose Creek, Texas, la

producción de petróleo ha estado acompañada de un asentamiento o subsidencia de
la superficie, debido quizás a una compactación acelerada causada por la
disminución de la presión en el yacimiento. Sin embargo, en muchos casos la
extracción de grandes cantidades de arena al mismo tiempo que los hidrocarburos
ha sido la causa de la subsidencia de la superficie.
Se han sugerido diversas causas de la presión de los yacimientos. Según
Waldschmidt,8 «gran parte de la alta presión inicial, en algunos campos puede ser el
resultado directo de la precipitación de minerales cristalinos dentro de los huecos de
la roca almacén». Declara que el volumen del agua con anhidrita en solución es
menor que el volumen total del agua con el sulfato cálcico precipitado. La
cementación natural de la roca almacén clástica daría como resultado, por tanto, un
aumento de las presiones existentes dentro de la roca almacén, en el supuesto que
fuera un sistema cerrado en el tiempo en que tuvo lugar la precipitación de este
cemento natural. La hidratación de las rocas adyacentes y la adsorción del agua por
la arcilla haría disminuir el volumen de agua del yacimiento, provocando la
disminución de la presión. La denudación gradual de un campo petrolífero produciría
también una disminución de la presión debido a la disminución de la columna de
agua y a la caída de la temperatura.
De esta discusión de las presiones de los yacimientos puede concluirse que el grado
de conexión entre los fluidos del yacimiento y el nivel de las aguas freáticas es de la
máxima importancia. En un sistema completamente abierto, donde la arenisca es
lateralmente continua y uniformemente permeable desde la trampa hasta su
afloramiento, la presión se deberá exclusivamente a la columna hidrostática o a la
hidrodinámica. En un sistema cerrado, con ninguna conexión entre los fluidos de la
roca almacén y las aguas en circulación en el subsuelo, cualquiera o todas las
restantes causas de presión enumeradas pueden ser responsables. Probablemente
es de gran importancia la presión creada por la fuerza expansiva del agua atrapada
.con los hidrocarburos en un yacimiento cerrado. La importancia de las posibles
causas de la presión tales como la cementación y la generación del petróleo
depende de la época en que tuvieron lugar. Si la cementación se efectúa después
que los hidrocarburos se hayan acumulado en la roca almacén, se convierte en una
de las principales causas de la presión. De modo análogo, si la petrificación se ha
verificado por completo antes de que se formara el petróleo, la generación de dicho
petróleo produciría un cambio de volumen que daría por resultado un aumento de la
presión.
Probablemente en la mayoría de los yacimientos, el sistema hidráulico no es ni
8 W. A. WALDSCHMIDT: «Cementing Materials in Sandstones and Probable Influence of

Migration and Accumulation of Oil and Gas», Bult. Am. Assoc. Petrnl. Geol., vol. 25 (octubre,
1941), págs. 1839-1879.

completamente abierto ni completamente cerrado. En su lugar puede existir una

conexión imperfecta y con altas pérdidas por fricción con las aguas freáticas, por lo
que la presión del yacimiento se deberá a una combinación de las fuerzas
hidrostáticas con otras diversas fuerzas.
AGUA
El agua, que se puede encontrar en todas las rocas porosas sola y acompañando al
petróleo y el gas en las acumulaciones de hidrocarburos, es el más abundante de los
fluidos de los yacimientos petrolíferos. Desde los comienzos de la industria
petrolífera ha sido costumbre recoger y analizar las aguas de los campos petrolíferos
y se han escrito muchos informes y artículos científicos sobre este tema.9
En los primeros tiempos de los análisis de aguas existían cierto número de
concepciones falsas respecto a la relación entre la existencia de petróleo y la
salinidad del agua asociada. Se sabe ahora que no existe relación alguna entre las
dos sustancias. El agua asociada en algunos de los campos petrolíferos de Michigan
es una salmuera de alta concentración, mientras que en parte del distrito de las
Montañas Rocosas es casi potable.
Importancia y distribución. Todas las rocas almacén contienen agua asociada, que
da origen a muchos problemas en la producción de petróleo. El conocimiento de su
composición ayuda frecuentemente a resolver estos problemas. El análisis del agua
es, por tanto, importante para determinar datos químicos y físicos necesarios para
interpretar diagramas eléctricos, para el estudio de las rocas almacén y, por
correlación con los análisis de aguas conocidas, para determinar el origen del agua
que entra en el pozo.
Los yacimientos de petróleo contienen agua y petróleo en los espacios capilares de
los poros. La naturaleza exacta de esta relación es, sin embargo, compleja y
depende de factores tales como la forma geométrica de los poros de la roca y las
propiedades físicas y químicas de los fluidos.
9 L. C. CASE y otros: «Selected Annotated Bibliography on Oil Field Waters», Bul. Am. Assoc.
Petrol. Geol., vol. 26 (mayo, 1942), págs. 865-881; C. W. WASHBURNE y otros: «Oil Field
Waters», Problems of Petroleum Geology (American Association of Petroleum Geologists,
1934), parte VI, págs. 833-985; C. E. REISTLE, JR.: «Identification of Oil Field Waters by
Chemical Analysis», U. S. Bur. Mines. Tech. Paper, 404 (1927), págs. 1-25; A. R. BOWEN:
«Interpretation of Oil Field Water Analyses», Science of Petroleum (Oxford University Press,
1938), vol. 1, págs. 653-656; C. E. WOOD: «Methods of Analysis of Oil Field Waters», ibid.,
págs. 645-652; H. A. STIFF, JR.: «The Interpretation of Chemical Water Analysis by Means of
Patterns», Jour. Petrol. Technol., vol. III (octubre, 1951); J. F. SAGE: «Water Analysis»,
Subsurface Geology in Petroleum Exploration (Colorado School of Mines, 1958» págs., 251-
263; J. C. McKINNELL: «Identification of Mixtures of Waters from Chemical Water Analyses»,
Jour. Petrol. Technol., vol. 10 (septiembre, 1958), págs. 79-8b.

Sin embargo, las aguas se clasifican en general de acuerdo con su posición relativa
respecto a las zonas productivas, siendo agua en cimera la que está por encima de
dichas zonas, intermedia la existente entre dos zonas productivas y basal la que está
por debajo. Esta última se denomina también agua marginal. El agua basal, en su
sentido exacto, ha de tener la misma extensión que la acumulación bajo la cual se
encuentra, como sucede cuando la capa almacén es más potente que la
acumulación de petróleo. El agua marginal se encuentra en el estrato productivo
alrededor del límite de la acumulación en las capas que son más delgadas que el
intervalo vertical de la acumulación (columna de petróleo y gas). En las zonas
petrolíferas complejas con varias unidades porosas, el agua intermedia es posible
que sea agua basal o marginal de uno de los miembros individuales o puede ser
enteramente una capa estratigráfica con agua.
Las aguas de los campos petrolíferos son generalmente salinas excepto a
profundidades someras. Se encuentran, sin embargo, aguas alcalinas en algunas
áreas, como por ejemplo en los modernos campos terciarios de la Costa Bolívar de
Venezuela. Las sales disueltas, presentes son principalmente cloruros, sulfatos,
carbonatos y bicarbonato s de so dio, magnesio y calcio, pero también se encuentran
usualmente pequeñas cantidades de otros elementos. Normalmente, pocos de estos
últimos se determinan en el análisis químico, aunque Emery 10 ha demostrado con
análisis espectrográficos que pueden usarse para diferenciar aguas distintas. Las
aguas varían desde esencialmente dulces con menos de 1000 miligramos por litro de
sólidos disueltos hasta salmueras con más de 250000 miligramos por litro.
Las características de las aguas encontradas en las diversas zonas porosas de un
campo petrolífero pueden variar ampliamente en sus constituyentes químicos, en su
concentración de iones o en ambas cosas. Estas variaciones pueden darse
lateralmente; esto es, pueden existir entre yacimientos diferentes en el mismo
intervalo estratigráfico, o verticalmente entre diferentes zonas productivas situadas
unas sobre otras.
Usos prácticos de los análisis de aguas. Para poder obtener provecho de estas
variaciones en la composición del agua, el geólogo de producción ha de poseer un
archivo con análisis de aguas de procedencias diversas. Este archivo será tanto más
útil cuanto más completo sea. Los análisis de aguas deben obtenerse en los pozos
de la compañía o de competidores y en organismos tales como los Departamentos
Geológicos del país.
Sus aplicaciones son muchas y variadas. El agua de origen desconocido, como la de
un estrato inidentificado en un pozo exploratorio o el agua producida en un pozo en
el que no se, conoce ninguna sección que contenga agua, puede compararse con los
análisis de aguas conocidas del archivo e identificarse.
10 F. H. EMERY: «Spectrographic Analyses of Oil Well Brines», Oil and Gas Jour. (4 marzo,
1937), págs. 53-54.

En un POZO exploratorio puede correlacionarse un nuevo yacimiento con uno de un

campo conocido y en un pozo en producción la entrada de agua en la zona
productiva puede distinguirse de la entrada de agua debida a una rotura de la tubería
de revestimiento o a un fallo del cemento. En este último caso puede estimarse la
profundidad de la rotura identificando el origen del agua. En un área donde la
producción se obtenga en arenas lenticulares situadas en un intervalo continuo de
arcilla, es difícil determinar mediante pozos los límites laterales de cada lente. Sin
embargo, como la composición del agua de la formación varía de una lente a otra, es
posible definir los distintos yacimientos mediante el análisis del agua. A falta de
evidencia más concreta, la comparación de las aguas de formación puede revelar
algunas veces la existencia de una falla u otra barrera al movimiento de fluidos entre
yacimientos aparentemente conectados entre sí. El origen del agua que aparece
después de un tratamiento por fracturación o acidificación puede ser dudoso, pero a
menudo puede determinarse mediante el análisis del agua, y, si el agua procede de
dos zonas puede calcularse el porcentaje correspondiente a cada una de ellas. El
geólogo del subsuelo, a falta de una medida de la resistividad del agua de la
formación sobre la cual poder estudiar los diagramas eléctricos, puede determinar su
resistividad mediante el análisis del agua. El ingeniero de producción está también
interesado en la composición del agua de formación, particularmente desde el punto
de vista de una recuperación -secundaria. El carácter del agua, si ha de ser
reinyectada, determina el grado y naturaleza del tratamiento necesario en la
superficie para evitar que contamine o tapone la formación.
Otra aplicación muy importante de estos análisis son los estudios del movimiento de
las aguas del subsuelo. Hubbert 11 ha demostrado que las acumulaciones de
petróleo tienen el contacto petróleo-agua inclinado cuando las aguas de la formación
están en movimiento. Además, se ha encontrado que muchas aguas de formación,
hasta ahora consideradas estáticas, están en realidad en estado de movimiento.
Para estos estudios son importantes los análisis de agua porque su densidad
aumenta con la concentración de sólidos disueltos. En una cuenca sedimentaria que
contenga aguas cuya densidad aumente con la profundidad, si dichas aguas Son
estáticas están dispuestas con arreglo a una estratificación horizontal con las aguas
más densas en el fondo y las superficies de igual densidad, o 'igual salinidad,
horizontales. En otras palabras, si las aguas de una cuenca son estáticas, las líneas
de igual salinidad deben coincidir aproximadamente con las líneas de nivel de la
estructura. Si, por el contrario, están en movimiento, es probable que las líneas de
igual salinidad estén más abajo en el costado del que parten las aguas que en el
costado hacia el que fluyen.
11 M. KING HUBBERT; «Entrapment of Petroleum Under Hydrodynamic Conditions», Bull.

Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 37 (agosto, 1953), págs. 1954-2026.

La existencia de agua cualitativamente de baja salinidad a profundidades de unos

miles de metros constituye una evidencia de que el agua está en movimiento, pues a
dichas profundidades deben encontrarse aguas salinas. Se llaman aguas de baja
salinidad aquellas que estén diluidas en comparación con el agua del mar. Esta
última contiene unos 35000 miligramos por litro, mientras que muchas formaciones
profundas contienen aguas con 15000 miligramos por litro e incluso menos.
Cuantitativamente, el agua de una formación dada fluirá si existe un gradiente de
potencial; el potencial del agua en un punto dado viene definido por:
Φ = gz +__p__ (1)
ρw
donde
Φ = gh (2)
O
h = z + __p__ (3)
ρwg
En estas fórmulas, p es la presión, ρw la densidad del agua en un punto de cota z, g

la aceleración debida a la gravedad, Φ el potencial del agua en dicho punto y h su
columna estática o altura por encima del nivel del mar hasta la que el agua se
elevaría estáticamente en un tubo abierto terminado en ese punto.
Puesto que en todos estos cálculos entra la densidad del agua y ésta depende de su
salinidad, se sigue que es importante determinar tal dato.
Informes sobre análisis de aguas. Los análisis de aguas pueden ser presentados en
varias formas usando unidades diferentes. Pueden darse concentraciones reales de
iones o de los iones combinados en sales hipotéticas. Las unidades más empleadas
son:
1. Miligramos por litro (mg/l). Ésta unidad es miligramos de soluto por litro de
disolución.
2. Partes por millón (ppm.). Esta unidad es miligramos de soluto por kilogramo de
disolución (equivale a miligramos por litro divididos por el peso específico de la
disolución).
3. Tanto por ciento del peso (numéricamente igual a ppm. dividido por 10000).
4. Granos por galón (para convertirlos en mg/l multiplíquese por 17,12 si se trata de
galones U.S. o por 14,26 si son galones imperiales).
5. Valor de reacción (expresado en miliequivalentes por litro o en miliequivalentes por
kilogramo).
Para concentraciones bajas, existe poca diferencia entre miligramos por litro y partes
por millón y los dos términos se usan a menudo conjuntamente.

Para concentraciones altas, sin embargo, existe una diferencia apreciable. Por
ejemplo, 200000 ppm. de cloruro sódico en una solución equivalen a 230000 mg por
litro, lo que supone una diferencia del 15 por ciento. El valor de reacción de un ion es
la cantidad equivalente de un ion de hidrógeno con la que reacciona o a la que
sustituye; se expresa en miliequivalentes por litro o por kilogramo. Se determina
multiplicando la concentración del ion en miligramos por el apropiado coeficiente de
reacción.12 La Tabla 1 contiene los coeficientes de reacción de los iones más
comunes.
TABLA 1. COEFICIENTES DE REACCIÓN O RADICALES ACTIVOS

____________________________________________________________________
Radicales Coeficientes Radicales Coeficientes

Positivos de Reacción Negativos de Reacción
____________________________________________________________________
Sodio (Na) 0,04348 Sulfato (SO4) 0,02082

Potasio (K) 0.02558 Cloruro (Cl) 0,02820
Calcio (Ca) 0,04990 Nitrato (NO3) 0,01613
Magnesio (Mg) 0,08224 Carbonato (CO3) 0,03333
Bicarbonato (HCO3) 0,01639
Sulfuro (S) 0,06238
Yoduro (I) 0,00788
La comparación de análisis de aguas usando los valores numéricos de sus

constituyentes es un proceso extremadamente tedioso. Por esto se han ideado un
cierto número de métodos gráficos para representar la composición del agua. El
diagrama Stiff, el más popular de estos métodos, facilita mucho los análisis y la
identificación del agua.
REPRESENTACIÓN GRÁFICA DE ANÁLISIS. Son de uso general cierto número de
métodos de identificación de aguas mediante sus análisis. La mayoría de los
métodos emplean una presentación gráfica para facilitar la comparación de diversos
análisis entre sí. El más antiguo es el sistema Palmer que fue ideado para estudiar
las características de reactividad, salinidad, alcalinidad y dureza más que para la
correlación e identificación de aguas, aunque tiene cierta aplicación como medio de
correlación. Este sistema clasifica los iones como sigue:
IONES POSITIVOS IONES NEGATIVOS
A. Álcalis: Na y K A. Ácidos fuertes: Cl y SO4

B. Tierras alcalinas: Ca y Mg B. Ácidos débiles: CO3, HCO3 y S
12 El coeficiente de reacción es recíproco del peso equivalente. El peso equivalente es igual al

peso molecular dividido por la valencia efectiva. Un equivalente es igual a un gramo

equivalente peso. Un miliequivalente es igual a 1/1000 de equivalente.
Las concentraciones de iones se convierten en porcentajes de valores de reacción y

estos valores se combinan de acuerdo con los principios básicos mostrados en la
figura 7-1, donde la combinación de los ácidos fuertes con los álcalis constituye la
salinidad primaria y con las tierras alcalinas la salinidad secundaria. De modo similar,
los ácidos débiles combinados con los álcalis y las tierras alcalinas constituyen las
alcalinidades primaria y secundaria respectivamente.
La inspección del diagrama evidencia la imposibilidad de que un agua posea al
'mismo tiempo salinidad secundaria y alcalinidad primaria y, si los ácidos fuertes
igualan a los álcalis, el agua posee únicamente salinidad primaria y alcalinidad
secundaria.
Uno de los métodos más sencillos y mejores de representar los análisis dE; aguas de
campos petrolíferos para su identificación y correlación es el propuesto por Stiff, en el
que los valores de reacción de los iones se llevan sobre un sistema de ejes
coordenadas rectangulares, como se ve en la figura 7-2. Los iones positivos se llevan
a la izquierda y los negativos a la derecha de la línea vertical del cero y los puntos se
unen con líneas rectas formando un diagrama cerrado. El significado de los
diagramas ha sido ya discutido. Como ya se mencionó, se puede emplear este tipo
de diagrama para mostrar los efectos de la mezcla de aguas, tal como la
contaminación del agua de la formación por el filtrado del lodo. La determinación de
esta contaminación puede ser importante cuando se estudian diagramas eléctricos,
así como para determinar el origen del agua.
PETRÓLEO
Desgraciadamente para el investigador y consumidor de petróleo, éste es

infinitamente menos abundante en las rocas del subsuelo que el agua. Sin embargo,
se acumula en la misma forma y el agua es un asociado suyo casi invariable.
El geólogo, en su búsqueda de nuevos yacimientos de petróleo y gas natural, no
necesita ser un químico orgánico. No obstante, algunas de las propiedades físicas y
químicas de los hidrocarburos naturales le atañen directamente.
Un conocimiento elemental de la química del petróleo es la base fundamental para el
debido reconocimiento de filtraciones, para una comprensión e interpretación
adecuadas de su historia natural y para un estudio inteligente de sus movimientos en
el subsuelo después de su formación. Además, el valor en el mercado del petróleo o
gas descubierto depende de su constitución química y el geólogo nunca debe perder
de vista la vendibilidad de sus productos.

Fig. 7.1.- Representación grafica del principio básico del sistema palmer para la interpretación
del análisis de aguas. Cortesía de Shell Oil Company.
Naturaleza química del petróleo.13 El petróleo, o «aceite de roca», es un líquido

natural que consiste predominante y esencialmente de hidrocarburos.
13 BENJAMIN T. BROOKS, editor: The Chemistry of Petroleum Hydrocarbons

(Reinhold, Nueva York, 1954), vol. 1; FREDERICK D. ROSSINI y BEVERIDGE J.

MAIR:


Es una mezcla de proporciones ampliamente variables de estos compuestos.
Algunos de los hidrocarburos son gaseosos y otros sólidos; ambos tipos están en
solución en los hidrocarburos líquidos que son los que predominan. Como el petróleo
es una mezcla, no posee una composición química definida, ni tampoco unas
propiedades físicas fijas. Sin embargo, a pesar de su composición química indefinida,
es notable la consistencia de la composición de los elementos en los petróleos
crudos. Por mucho que puedan diferir en apariencia, propiedades e hidrocarburos
presentes, casi todos los petróleos naturales contienen del 83 a187 por ciento de
carbono y del 11 al 14 por ciento de hidrógeno.
HIDROCARBUROS PRESENTES. El porcentaje de hidrocarburos en un petróleo
crudo es también la medida de su pureza. En la mayoría de los petróleos crudos
todos los compuestos presentes, salvo un 0,3 a un 3 por ciento de su peso, son
hidrocarburos. Prácticamente todos estos hidrocarburos pertenecen a los grupos
parafínicos, nafténicos o aromáticos. Como los compuestos aromáticos son los
menos abundantes, la mayoría de los petróleos son de base parafínica, base
nafténica o base mixta (parafínica-nafténica). Un petróleo parafínico tiene un
contenido relativamente alto de hidrógeno en relación al carbono, y lo contrario
sucede en un petróleo nafténico. Los petróleos parafínicos poseen generalmente
baja densidad y durante su refino se obtienen residuos de cera parafínica o petrolato.
Los petróleos nafténicos son más pesados y contienen un porcentaje mayor de
aceites lubricantes viscosos pero volátiles. La descomposición de los constituyentes
líquidos de los petróleos nafténicos durante su destilación produce un residuo
asfáltico sólido o semisólido. Por esta razón los petróleos nafténicos se llaman
también de base asfáltica.
Son típicos los petróleos crudos de base parafínica encontrados en Pensilvania y en
otras partes de la región de los Apalaches. También existen en Michigan y en
diversos puntos al norte de Luisiana y al sur de Arkansas. Fuera de los Estados
Unidos, se han encontrado crudos de este tipo en Perú y Argentina, así como en el
Oriente Medio. Las Indias Orientales Holandesas han producido también algunos
crudos de base parafínica, pero el grueso de su producción corresponde a petróleos
de base nafténica. De este último es la mayoría del petróleo producido en Venezuela
y Colombia. En Estados Unidos se encuentran estos crudos en California y en la
Costa del Golfo. Los crudos de base mixta predominan en Illinois, Kansas, Oklahoma
y en Texas fuera de la Costa del Golfo.
«Composition of Petro1eum», Progress in Petroleum Technology, Advances in Chemistry

Series n° 5 (American Chemica1 Society, 1951), págs. 334-352; FREDERICK D. ROSSINI:
«Hydrocarbons from Petro1eum», Jour. Inst. Petrol., vol. 44 (abril, 1958), págs. 97-107;
BENJAMIN T. BROOKS y A. E. DUNSTAN, editores: «Crude Oils, Chemica1 and Physica1
Properties», Science of Petroleum (Oxford University Press, 1950), vol. 5, parte 1; STEWART
P. COLEMAN: «Physica1 and Chemica1 Properties of Petro1eum and Its Products», Elements
of the Petroleum Industry (American Institute of Mining and Metallurgica1 Engineers, 1940),
págs. 4-20; E. DEGOLYER y HAROLD VANCE: «Bibliography of the Petro1eum Industry»,
Bull. Agr. and Mech. Col. Texas, 83 (1944), págs. 137-144.

Méjico produce petróleos de base nafténica y mixta, así como Rumania. Puesto que
en todas las partes del mundo la perforación de formaciones más antiguas ha
encontrado petróleos más ligeros y parafínicos que los que existen en formaciones
menos profundas, se hace cada vez menos practicable clasificar geográficamente los
petróleos crudos.
El número de hidrocarburos individuales que pueden existir en el petróleo no se
conoce aún con exactitud. La industria del petróleo, a través del API, ha estado
patrocinando desde 1927 la investigación sobre la composición del petróleo crudo.
Uno de los proyectos (Proyecto de Investigación n.O 6) ha sido el determinar los
hidrocarburos existentes en un solo petróleo representativo y después estudiar hasta
qué punto varían los constituyentes principales en diferentes petróleos. El petróleo
crudo elegido fue un petróleo clasificado como de composición intermedia de un
pozo del campo Ponca City de Oklahoma. Hasta ahora, solamente de las fracciones
destiladas de gas y gasolina, keroseno, gas-oil ligero y pesado y lubricantes ligeros,
se han aislado 159 hidrocarburos distintos. Estos varían desde el CH, (metano) con
un punto de ebullición de -164°C hasta el C2.1Hso que hierve a los 389° 14 La
identificación de los' hidrocarburos de la fracción de lubricantes (14 por ciento del
petróleo crudo) no ha sido posible hasta ahora debido a las dificultades para aislar
estos compuestos de alto punto de ebullición, que se descomponen con suma
facilidad.
Al extender el estudio de las fracciones de gasolina a otros siete petróleos
representativos se encontró que «mientras que las cantidades relativas de las clases
principales de hidrocarburos de la fracción gasolina variaban de un petróleo a otro,
las cantidades relativas de los compuestos individuales dentro de una clase dada
eran del mismo orden de magnitud para los distintos petróleos),l" Por tanto, las
diferencias existentes son debidas a las variaciones en las cantidades relativas de
las clases principales de hidrocarburos. Algunos petróleos se componen en casi su
totalidad de las fracciones más volátiles y otros están preponderadamente
constituidos por las fracciones lubricantes menos volátiles.
AZUFRE, OXíGENO Y NITRÓGENO. El azufre es la impureza más común del
petróleo crudo. Alrededor del 7 por ciento del .petróleo producido en los Estados
Unidos .en 1950 contenía más del 2 por ciento de su peso de azufre; casi el 40 por
ciento, sin embargo, contenía menos del 0,25 por ciento. 16 El azufre se encuentra
en los petróleos crudos formando diversos compuestos, tales como el ácido
sulfhídrico, e incluso (pero raramente) como azufre puro. Como los compuestos de
azufre son pesados, únicamente los crudos más pesados los contienen, y,
recíprocamente, la mayoría de los crudos pesados tienen un contenido de azufre
relativamente alto.
14 FREDERICK D. ROSSINI: op. cit., págs. 104-106.

15 FREDERICK D. ROSSINI y BEVERIDGE J. MAIR: on. cit., pág. 349, ,,; H. M.
16 SMITH, citado por Rossini y Mair: op. cit., pág. 335.

Constituyen un serio problema para su refinamiento.
El oxigeno es generalmente más escaso, pero en algunos casos ha alcanzado hasta
el 2 por ciento en peso. Los petróleos crudos que contienen compuestos de oxígeno
en cantidades medibles son también de alto peso específico. El nitrógeno es aún
más insignificante, variando desde menos del 0,05 por ciento hasta un máximo del
0,8 por ciento en unos análisis hechos en los Estados Unidos sobre crudos
procedentes de 150 campos.17 Los porcentajes más altos correspondieron a los
petróleos de California.
CONSTITUYENTES METÁLICOS. La combustión completa del petróleo crudo deja
un residuo de cenizas que va del 0,01 al 0,05 por ciento.18 Hasta la tercera parte de
esta ceniza puede ser cloruros, especialmente cloruro sódico. En estas cenizas se
h3n encontrado muchos elementos. Sin duda, algunos de éstos estaban presentes
en el petróleo crudo original en forma de compuestos disueltos en las gotas de agua
dispersas a través de él, pero otros estaban disueltos en el petróleo mismo.19 Entre
los metales hallados en forma consistente en estas cenizas están el vanadio, níquel,
cobre, cobalto, molibdeno, plomo, cromo, manganeso y arsénico. La presencia del
uranio es más errática.20
Los metales presentes en mayor cantidad son el vanadio y el níquel. Se ha sugerido
que el uranio y otros metales son impurezas de la roca huésped arrastradas por el
petróleo, mientras que el vanadio y el níquel estaban presentes en el material
orgánico original.21 Algo o quizá todo el vana dio y el níquel del petróleo están en
forma de complejos orgánicos metálicos de porfirinas.22
Propiedades físicas del petróleo. Como el petróleo crudo es una mezcla, sus
propiedades físicas varían ampliamente dependiendo del tipo y abundancia relativa
de los hidrocarburos e impurezas presentes. La propiedad citada con más frecuencia
es la densidad o «peso específico».
DENSIDAD. La densidad es el peso específico tomando el agua como unidad.
En la mayoría de los líquidos, sin embargo, es corriente designar la densidad en
términos de grados Baumé o API. En este método de cálculo, el agua tiene una
densidad de 10.
17 H. M. SMITH: op. cit.

18 W. A. GRUSE y D. R. STEVENS, citado por Rossini y Mair, op cit.
19 FREDERICK D. ROSSINI y BEVERIDGE J. MAIR, op. cit., pág. 337.
20 R. L. ERICKSON, A. T. MYERS y C. A. HORR: «Association of Uranium and Other Metals
With Crude Oil, Asphalt, and Petroliferous Rock», BulL Am. Assoc. Petrol. GeoL, vol. 38
(octubre, 1954), págs. 2200-2218.
21 HAROLD J. HYDEN, A. T. MYERS, C. A. HORR y otros: «Uranium and Other Trace
Elements in CrudeOils From the Western States», Am. Assoc. Petrol. Geol., Reunión anual
(abril, 1957).
22 GORDON W. HODGSON y BRUCE L. BAKER: «Vanadium, Nickel, and Porphyrins in
Thermal Geochemistry of Petroleum». Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., volumen 41 (noviembre,
1957), págs. 2413-2426.

Los números inferiores a 10 indican sustancias más pesadas. que el agua y los
superiores a 10 sustancias más ligeras. La escala más usada en la industria del
petróleo es la del API, en la que el peso específico es igual a la fracción 141,5:
(grados API + 131,5). Esta escala difiere de la Baumé, que se usa para designar la
densidad de muchos líquidos, solamente en el valor de las dos constantes. En la
escala Baumé el numerador es 140 en lugar de 141,5 y la constante del
denominador 130 en lugar de 131,5.
La densidad se determina simplemente introduciendo en el petróleo crudo un
hidrómetro calibrado con la escala API. Sin embargo, como el volumen y, por tanto,
la densidad del petróleo, varían con la temperatura, es necesario registrar ésta al
mismo tiempo para convertir la lectura de la densidad a la correspondiente a la
temperatura normalizada. En los Estados Unidos, la temperatura normalizada para
registrar densidades de petróleos es 60°F (15,5°C). Las tablas de conversión han
sido publicadas por la Sociedad Americana de Pruebas de Materiales.
La densidad del petróleo crudo varía desde menos de 10° hasta los 60° e incluso
más. Un petróleo por debajo de 10 en la escala API es, sin embargo, aún más ligero
que el agua con que está asociado. Solamente el agua pura tiene una densidad de
100; el agua altamente mineralizada con la que la mayoría de los petróleos están
asociados es considerablemente más pesada. Como regla general, los petróleos
más ligeros contienen un porcentaje mayor que el normal de la fracción gasolina y un
porcentaje menor de los compuestos deletéreos que encarecen su refinamiento. Por
esta razón, el petróleo crudo se valora muchas veces tomando como base su
densidad. La densidad del petróleo puede incluso determinar si un pozo exploratorio
de baja producción ha descubierto un nuevo campo o si tendrá que ser taponado y
abandonado a causa del carácter antieconómico del petróleo descubierto.
La evolución del petróleo, discutida en el capítulo 5, implica una disminución de los
hidrocarburos nafténicos y un aumento correspondiente de los hidrocarburos
parafínicos; en otras palabras, un cambio gradual de base, nafténica a parafínica.
Este cambio produce también una marcada disminución de la densidad (o aumento
de grados API). Se puede poner de manifiesto que se ha efectuado tal evolución
tabulando las densidades medias API de más de 7600 campos petrolíferos de los
Estados Unidos con relación a la edad geológica de la roca almacén (fig. 7-3). La no
concordancia de la densidad del Cambriano se debe probablemente a la escasez de
muestras (sólo el 0,7 por ciento de número total de campos petrolíferos). La densidad
media: anómala de los petróleos del Eoceno se debe con toda probabilidad a que la
mayoría del petróleo del Eoceno de los Estados Unidos procede de los yacimientos
del sur de Texas 23 que están a más profundidad que la mayoría de los yacimientos
23 GEORGE R. HOPKINS: «A Projection of Oil Discovery», Jour. Petrol. TechnoL., vol. 2

(junio, 1950), pág. 7.

del Cretáceo. Las otras interrupciones pueden ser debidas a climas distintos, como
sucedió en el Permiano, que dieron a lugar a distintos materiales orgánicos con
distintas velocidades de maduración o a variaciones en los factores ambientales en
la' deposición de los materiales potencialmente catalíticos.
OTRAS PROPIEDADES FÍSICAS. El color del petróleo puede variar de incoloro a
negro. El petróleo de Pensilvania, notable por su alto rendimiento en las valiosas
fracciones lubricantes, es de color ámbar. Los petróleos de densidad media, como
los de .la región central de Estados Unidos, son predominantemente verdes y los de
densidad alta son corrientemente negros.
FIG. 7.3 Densidades de petróleos crudos de estados Unidos y época geológica (según
Hopkins)
El color del petróleo crudo parece que depende de la presencia de hidrocarburos no

saturados y de los hidrocarburos que contienen nitrógeno, oxígeno y azufre además
de hidrógeno y carbono. Por regla general, cuando más claro es el color del petróleo,
más grados API tiene y mayor es su valor.
El olor de un petróleo crudo depende del carácter y volatilidad de sus hidrocarburos.
Algunos crudos tienen un olor decididamente aromático, debido al predominio del
grupo de hidrocarburos aromáticos. Los crudos ricos en azufre pueden tener olor a
ácido sulfhídrico. Por otro lado, los petróleos ligeros pueden tener un olor a gasolina
muy marcado debido al escape de la mezcla de este material tan volátil.
La viscosidad o resistencia al flujo se mide por el tiempo necesario para que una
cantidad dada de petróleo fluya a través de una pequeña abertura. Algunos petróleos
son tan viscosos a la temperatura ordinaria que deben ser calentados antes de que
puedan bombearse.

Por otro lado, algunos crudos ligeramente más viscosos que el agua a temperaturas
normales pueden convertirse en invierno en altamente viscosos debido a la
congelación de la cera disuelta.
La volatilidad del petróleo crudo depende de los puntos de ebullición de los diversos
componentes presentes en la mezcla. Un constituyente muy común, el metano, tiene
un punto de ebullición de -164°C, mientras que los puntos de ebullición de algunos
compuestos parafínicos son demasiado altos para poder medirse por los métodos
usuales. Como el petróleo está siempre a una temperatura superior a los puntos de
ebullición de algunos de sus hidrocarburos, los compuestos más volátiles están
ejerciendo continuamente presión y tienden a escaparse a menos de que el petróleo
esté en un recipiente completamente sellado. En tales circunstancias, es
evidentemente imposible referirse a. un punto único de ebullición en un petróleo.
Tampoco es posible referirse al punto de congelación. Los hidrocarburos presentes
tienden a solidificarse separadamente a temperaturas distintas. La viscosidad
aumenta al bajar la temperatura hasta que no puede medirse y el petróleo está en un
estado de «sólido plástico», pero si el enfriamiento continúa, se alcanza finalmente
un verdadero estado sólido.
Dos propiedades muy interesantes para el geólogo son la tensión superficial y la:
fuerza capilar, pues estas propiedades físicas tienen un papel muy importante en la
emigración del petróleo a través de las rocas de la corteza terrestre y en la retención
de petróleo en considerable volumen en la roca almacén a pesar de los más
eficientes procesos de explotación. La tensión superficial del petróleo que contenga
gas disuelto es extremadamente baja. «Las bajas tensiones superficiales tienden a
disminuir los efectos de la fuerza capilar en el desplazamiento del petróleo crudo en
medios porosos mediante gases a alta presión.» 24 El agua tiene mayor fuerza
capilar que el petróleo; en consecuencia puede esperarse que el agua ocupe los
poros más pequeños forzando al petróleo hacia los poros mayores.
El petróleo en la roca almacén. Existen grandes diferencias físicas entre el petróleo
crudo en el tubo de ensayo y el petróleo crudo en la roca almacén. Hasta ahora
hemos discutido sus propiedades determinadas en el laboratorio; vamos a intentar
visualizar sus propiedades dentro de la roca almacén.
NATURALEZA FÍSICA DEL PETRÓLEO EN EL SUBSUELO. El petróleo en el
subsuelo está sometido a presiones que van desde unas pocas atmósferas hasta
varios cientos, dependiendo principalmente de la profundidad. Bajo tales presiones el
petróleo contiene en solución una considerable cantidad de gas. Cuando el petróleo
sale a la superficie y antes de ser almacenado, gran parte de este gas se escapa con
el resultado de que el petróleo tiene una movilidad mucho menor en la superficie que
24 D. L. KATZ, R. R. MONROE y R. P. TRAINER: «Surface Tension of Crude 0ils Containing

Dissolved Gases», Am. Inst. Mining Met. Engrs., Tech. Publ. 1624 (194:1).

cuando estaba bajo alta presión en la roca almacén. El gas disuelto no sólo hace
disminuir la densidad del petróleo crudo, sino que también aumenta
considerablemente su fluidez.
El segundo factor en importancia para la movilidad del petróleo en el subsuelo es la
mayor temperatura de la corteza terrestre. Aunque existe una considerable variación
de un punto a otro, el incremento medio general de la temperatura es de 1°C cada 33
m de profundidad. En otras palabras, si el yacimiento está a una profundidad de unos
3300 m, su temperatura es aproximadamente unos 1000 por encima de la
temperatura media de la superficie. Es un hecho comprobado que la subida de la
temperatura disminuye la viscosidad del petróleo. Por regla general, el grado de
disminución es tanto mayor cuanto más denso es el petróleo. Por tanto, el petróleo
en la roca almacén debe tener mucha mayor fluidez que cuando se examina a la
temperatura ambiente en la superficie. Puesto que la viscosidad del agua también
disminuye con la temperatura, la «fluibilidad» de ambos líquidos aumenta con la
profundidad de la roca almacén.
RELACIONES ENTRE LOS FLUIDOS EN EL SUBSUELO. El conjunto de un yaci-
miento petrolífero incluye roca, huecos, agua, petróleo y gas. Los huecos de la roca
están llenos de agua antes de que tenga lugar la acumulación de petróleo. Éste, por
ser más ligero que el agua e inmiscible con ella, empuja el agua hacia abajo en la
roca almacén. Sin embargo, no desplaza toda el agua original. Queda siempre una
película de agua adsorbida tapizando las paredes de los poros. Este agua ha sido
llamada «agua intersticial irreductible».25 Los huecos de tamaño capilar retienen
también este agua original. Como resultado, en el yacimiento no sólo hay agua por
debajo del petróleo, sino que también se encuentra agua intersticial dentro de la
misma zona de acumulación. Algunos ingenieros del petróleo la llaman agua
singenética, lo que constituye una falsa aplicación de un término geológico que se
refiere al origen del agua y no a su ecología.
A causa de la presencia de esta agua, el petróleo no está en contacto con la roca.
Llena los intersticios entre las películas de agua, y el espada de almacenaje ocupado
por el petróleo es menor que la porosidad total de la roca. Sin embargo, si el aire
puede llegar hasta la acumulación de petróleo (como cuando se ha producido una
denudación) el agua se evapora y el petróleo se pone en contacto con la roca
almacén.
La relación entre el petróleo y el gas depende del grado en que el petróleo esté
saturado de gas. Si no lo está, todo el gas que penetre en la roca almacén queda en
disolución en el petróleo. La difusión de este gas a través del petróleo es un proceso
de bastante duración. Si el petróleo está saturado, el gas se acumula por encima de
él, desplazándolo (y también al agua que existe bajo el petróleo) hacia abajo en la
25 W. V. ENGELHARDT: «Interstitial Water of Oil Bearing Sands and Sandstones>, Prac.

Faurth Warld Petral. Cangress (1955), sección 1, págs. 2-18.

misma forma en que el petróleo desplazó al agua, formándose un «sombrero» de
gas.
El punto de saturación depende de la presión y temperatura del yacimiento y de la
composición del petróleo. Por tanto, los cambios en uno o más de estos factores
después de haber tenido lugar la acumulación da como resultado la formación o
aumento del sombrero de gas, o su disminución y desaparición completa. Como la
presencia de gas significa que el petróleo está saturado, puede esperarse que éste
tenga la máxima fluidez y mínima densidad para la temperatura y presión existentes.
Como se indicó en el capítulo 2, los cambios en las propiedades de las fases líquida
y gaseosa de los petróleos crudos son considerables al aumentar la profundidad.
«Con el aumento de la presión, más gas natural se disuelve en la fase líquida y más
hidrocarburos normalmente líquidos se disuelven en la fase gaseosa.» 26
CONCLUSIÓN. El petróleo en el sub suelo tiene una fluidez y movilidad que se
aproximan a las del agua en la superficie. En realidad algunos petróleos ligeros
tienen en el yacimiento menos viscosidad que el agua en ebullición en la superficie,
pero también es cierto que algunos petróleos pesados son considerablemente más
viscosos, incluso en el yacimiento, que el' agua en la superficie. El petróleo ocupa los
intersticios entre las paredes tapizadas de agua de la roca almacén. Es más ligero
que el agua e inmiscible con ella. Es más pesado que el gas y miscible con él hasta
el punto de saturación.
Muchos de los primeros experimentos sobre la emigración del petróleo llevados a
cabo en diversos laboratorios no tuvieron en cuenta la mucha mayor movilidad del
petróleo en el sub suelo debido a la mayor temperatura y al gas disuelto. Por esto,
los resultados obtenidos tenían poco o ningún valor para estudiar el probable
movimiento del petróleo en el subsuelo. Únicamente reproduciendo tanto como sea
posible las condiciones ambientales (incluyendo el efecto humidificante del agua
intersticial) pueden ser los estudios experimentales sobre la emigración del petróleo
de indudable valor.
Aplicaciones geológicas de los análisis de petróleos. Desde que el profesor
Silliman de Yale hizo un análisis de unas filtraciones petrolíferas en Pensilvania
occidental para los patrocinadores del pozo Drake, ha sido una práctica común,
dondequiera que se descubra petróleo, obtener muestras para su examen y
análisis.27 Aunque la finalidad principal de estos análisis es determinar el valor del
petróleo y hallar los datos esenciales para su proceso de refinación, los geólogos han
26 DONALD L. KATZ y BRYMER WILLIAMS: «Reservoir Fluids and Their Behavion>, Bull
A.m. Assoc. PetroL GeoL, vol. 36 (febrero, 1952), pág. 342. Estudio posterior en A. E.
HOFFMANN, J. S. CRUMP y C. R. HOCOTT, «Equilibrium Constants for a Gas-Condensate
System», Jour. PetroL TechnoL, vol. 5 (enero, 1953), págs. 1-10.
27 C. H. McKINNEY y O. C. BLADE: «Analyses of Crude Oils from 283 Important Oil Fields in
the United States», U. S. Bur. Mines Rept. Investigations 4289 (mayo, 1948).

encontrado que el carácter del petróleo es de gran valor para resolver problemas de
correlación y emigración. «Los ingenieros de producción miden la relación presión-
volumen, viscosidad y comportamiento de fases del petróleo crudo en el subsuelo
para poder predecir el futuro comportamiento del yacimiento o los volúmenes y
caudales de los diversos constituyentes que podrán producirse a través de un
número específico de pozos.) 28
Para estudios geológicos es costumbre actualmente transformar los datos analíticos
en un «índice de correlación); 29 estos datos pueden ser aplicados directamente 30
o pueden usarse para agrupar los petróleos crudos en diversos tipos.31 Cuando sólo
se puede obtener de los testigos o el ripio una pequeña muestra de petróleo, puede
usarse el Índice de refracción 32 como sustitución de la determinación de la densidad
e incluso del análisis químico.
Como regla general pero no invariable, los petróleos crudos procedentes de los
mismos niveles estratigráficos de una provincia petrolífera son semejantes y los que
proceden de rocas de distintas edades no lo son.33 Por esta razón, los análisis de
petróleos se han usado para establecer correlaciones estratigráficas. También
pueden usarse para probar la ausencia de una emigración vertical, como en
Oklahoma City, donde los petróleos de las formaciones pennsilvanienses son
diferentes de los encontrados en las rocas del ordoviciense. Las excepciones de esta
regla general pueden indicar la existencia de una emigración vertical, como en
Trinidad 31 y en Garber, Oklahoma, donde se encuentran petróleos semejantes en
catorce niveles distintos.
Se ha discutido con bastante amplitud si la presencia y abundancia relativa de las
trazas de metales puede tener algún significado geológico. Hasta ahora, por lo
28 E. K. SCHLUNTZ, memorándum fechado en 28 octubre 1958.

29 H. M. SMITH: «Correlation Index to Aid in Interpreting Crude Oil Analyses», /}, S. Bur.
Mines Tech. Paper, 610 (1940).
30 L. M. NEUMANN y otros: «Relationship of Crude Oils and Stratigraphy in Parts of Oklahoma
and Kansas», Bull. Am. Assoc. Petrol. Ceol., vol. 25 (septiem1)1'('. 1941), págs. 1801-1809.
31 J. C. CRAWFORD y R. M. LARSEN: «Occurrences and Types of Crude Oils In nocky
Mountain Region», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 27 (octubre, 1943), pag. 1305-1334.
32 HOLLIS D. HEDBERG: ({Evaluation of Petroleum in Oil Sands by Its Index of Refraction»,
Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 21 (noviembre, 1937), páginas-I l464-1476.
33 DONALD C. BARTON: «Correlation of Crude Oils with Special Reference to ('I'lit1 Oil of
Gulf Coast», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 25 (abril, 1941), páf111\l\~ 561-592; L. M.
NEUMANN. y otros: «Relationship of Crude Oils and Stratigraphy in Parts of Oklahoma and
Kansas», Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 30 (Mayo 1946), págs. 747-748; CHARLES
BOHDANOWICZ: «Stratigraphic Comparison 111' Polish Crude Oils», Bull. Am. Assoc. Petrol.
Geol. vol. 21 (septiembre, 1937), 11('/ u· 1182-1192.
34 K. W. BARR, F. MORTON y A. R. RICHARDS: «Application of Chemical Analysis of crude
Oils to Problems of Petroleum Geology», Bull. Am. Assoc. Petrol Geol. vol. 27 (diciembre,
1943), págs. i595-1617.

menos, no ha sido posible usar el contenido de metales como un instrumento de
correlación. Sin embargo, en el área Semínola de Oklahoma se ha encontrado que la
distribución de las concentraciones de vana dio y níquel podrían tener un significado
paleogeográfico. Estos metales son más abundantes cerca de las antiguas líneas
costeras, disminuyendo hacia el interior de la cuenca de deposición.35 Haeberle 36
ha encontrado una aparente conexión entre la densidad y las facies en los campos
petrolíferos de la Costa del Golfo. Los petróleos más pesados tienden a encontrarse
en sedimentos continentales y de aguas someras, mientras que los más ligeros
abundan más en las facies de aguas marinas profundas.
Cálculo de las reservas de petróleo."1 Es imposible calcular exactamente las
reservas no producidas de un yacimiento hasta que no se hayan perforado los pozos
suficientes para delimitar el área de acumulación. Con los datos obtenidos durante la
perforación es posible hacer una estimación bastante exacta de la cantidad de
petróleo que podrá producirse. Debe hacerse la distinción entre. los cálculos de las
reservas en áreas «conocidas» y los hechos a base de un número insuficiente de
pozos para obtener todos los datos necesarios del yacimiento. Si un campo ha sido
delimitado mediante pozos secos por tres lados, pero no en el cuarto, de lo que se
conoce sobre la estructura de la acumulación es posible obtener una estimación del
área «probable» que puede usarse para hacer el cálculo de las reservas. Sin
embargo, si existen sólo uno o dos pozos en un campo recientemente descubierto, el
cálculo de la recuperación total es aún menos exacto. El cálculo se basa sobre la
información existente geofísica y del subsuelo; la exploración subsiguiente hace
posible llegar a una cifra probada de reservas y abandonar el cálculo temporal. Sin
embargo, las cifras sobre reservas consideradas «probadas», que se publican
periódicamente, incluyen no sólo las reservas realmente probadas más las reservas
probables, sino también las suposiciones mejor fundamentadas sobre las reservas
de los campos recientemente descubiertos. Esta práctica no es tan falsa como
parece, pues el número de descubrimientos nuevos aún no desarrolados es en
35 L. C. BONHAM: «Geochemica1 Investigation of Crude Oils», Bull. Am. Assoc.

Petrol. Geol., vol. 40 (mayo, 1956), págs. 897-908 ..
36 FRED R. HAEBERLE: «Re1ationship of Hydrocarbon Gravities to Facies in Gulf Coast»,
Bull. Am. Assoc. Petrol. Geol., vol. 35 (octubre, 1951), págs. 2238-2248.
37 F. S. SHAW: «Review of Ultimate Recovery Factors and Methods of Estimatioll», Oil
Weekly, vol. 106 (13 julio, 1942), págs. 16-26; V. BILIBIN: «Methods of Estimating Oil
Reserves», International Geological Congress, I7a sesión, U. S. S. R., 1937 (reimpresión,
1936); K. MARSHALL FAGIN: «Notes on Estimating Crude Oil Reserves», Petrol. Engineer,
vol. 17 (septiembre, 1946), págs. 92-94; W. A. BRUCE y H. J. WELGE: «Restored-State
Method for Determination of Oil in Place and Connate Water», Tech. Publs. (Standard Oil Co.,
N. J., 1947), págs. 13-33; E. R. BROWNSCOMBE y F. COLLINS: «Estimation of Reserves and
Water Drive from Presure and Production History», Jour. Petrol. Geol., vol. 4 (abril, 1949),
págs. 9299; J. J. ARPS: «Estimation of Primary Oil Reserves», Jour. Petrol. TechnoI., vol. 8
(agosto, 1956), págs. 182-191; DONALD L. KATZ: «Deve1opment of Techniques in Reserve
Estimation», Jgur. Petrol. Technol., vol. 5 (septiembre, 1953), págs. 81-83.
FLUIDOS EN LAS ROCA S ALMACÉN 247

cualquier tiempo relativamente insignificante comparado con el número total de
campos completamente determinados.38
Incluso en áreas probadas existen factores inciertos. Un campo petrolífero nunca se
abandona a causa de su completo agotamiento. Se abandona cuando ya no es
económico bombear el petróleo, separarlo del agua que lo acompaña y venderlo. Los
cálculos del petróleo recuperable están necesariamente basados sobre la situación
del mercado en el tiempo en que se hacen dichos cálculos. Las fluctuaciones en el
precio del petróleo o en los costes de producción pueden ser la causa de que se
alcance el punto de abandono antes o después de lo que se calculó originalmente.
Los métodos para calcular la cantidad de petróleo que puede producir un campo son
de tres clases generales: 1) la historia de producción de campos más antiguos
geológicamente similares; 2) la historia de la producción del campo durante sus
primeros meses, y 3) los métodos volumétricos, en los que se calcula el volumen real
de petróleo en la roca almacén y se estima el porcentaje recuperable.
El primer método no posee un gran grado de exactitud. Todo yacimiento tiene sus
características y comportamientos propios y los casos paralelos son altamente
improbables. El método consiste en tomar el contenido por hectárea-metro de un
campo que tenga el mismo tipo de roca almacén y estructura similar y multiplicarlo
por el área y potencia de la roca almacén del campo en estudio.
La historia de un pozo petrolífero o de un grupo de pozos durante sus primeros
meses de producción puede usarse por lo menos en tres formas distintas para
calcular la producción futura. La primera es tomar la producción inicial diaria o la
producción acumulada en los primeros treinta días O la producción del primer año y
multiplicar dicha cifra por un factor para obtener la probable producción total. Cuando
se toma la producción inicial diaria, los factores usados varían entre 644 para pozos
con una producción inicial de menos de 15 toneladas diarias hasta 240 para los
pozos de más de 100 toneladas iniciales diarias.39 En algunas áreas, como por
ejemplo en California, estos factores son demasiado conservativos. Según Moore, 40
una regla práctica común ha sido multiplicar por 300 la producción durante los
primeros treinta días para obtener la producción total del campo. La experiencia ha
demostrado que en algunos de los campos más antiguos de California la producción
total fue de 4 a 6 veces la producción durante el primer año.
38 F. H. LAHEE: «Our Oil and Gas Reserves: Their Meaning and Limitations» Bull. Am. Assoc.
Petrol. Geol., vol. 34 (junio 1950), págs. 1283-1292.
39 S. F. SHAW: «Review of Ultimate Recovery Factors and Methods of Estimation», Oil
Weekly, vol. 106 (13 julio 1942), pág. 24.
40 FRED H. MOORE, comunicación no oficial.

Como muchos estados prohíben actualmente la producción sin restricciones de
petróleo en un pozo, los métodos basados en la producción libre a lo largo de un
cierto período no tienen ya mucha aplicación. Se ha usado mucho el método de la
curva de caída para estimar las reservas de petróleo de un campo.11 En este
método se dibuja la curva de producción del pozo y por medio de las muchas curvas
existentes sobre las producciones de pozos desde su descubrimiento hasta su
abandono, es posible proyectar hacia el futuro la curva correspondiente a un pozo
que tenga pocos meses de vida y hacer una estimación bastante ajustada de su
rendimiento total. La suma de las estimaciones de todos los pozos de un campo dará
la probable producción total de dicho campo. Un procedimiento algo menos exacto
es dibujar la producción en conjunto de un campo y proyectarla hacia el futuro en
forma análoga.
Un tercer método de aplicar la historia de un pozo para calcular sus reservas es
dibujar la producción acumulada en función de la caída de presión del yacimiento y
entonces proyectar esta «curva de producción-presión del yacimiento» hacia el
futuro. Como se discutirá en uno de los párrafos siguientes, el método de la caída de
presión es uno de los más importantes para calcular las reservas de gas natural. No
es tan exacto, sin embargo, cuando se aplica a los yacimientos de petróleo, pero
tiene la ventaja sobre los dos métodos anteriores de que es aplicable a los pozos con
producción restringida así como a los que se les deja fluir libremente. La falta de
exactitud del método de la caída de presión aplicado a las acumulaciones petrolíferas
es consecuencia de que la presión de dichos yacimientos puede ser debida tan sólo
en un grado limitado al volumen y compresión de los hidrocarburos presentes.
Hemos visto que en los yacimientos con empuje hidráulico natural existe poca o
ninguna disminución de la presión entre la época de su primera producción y la del
agotamiento completo del petróleo.
Katz 42 ha ideado un método para el cálculo de las reservas de las mezclas de
petróleo y gas en un sistema cerrado en el que los datos sobre la producción
cumulativa de petróleo y gas y la historia de la presión del yacimiento se combinan
con la información respecto a las propiedades de las mezclas de petróleo y gas.
El método volumétrico 13 es tan antiguo como la explotación de campos petrolíferos.
Los diversos métodos existentes son fundamentalmente idénticos, basándose para
41 WILLARD W. CUTLER, Jr.: «Estimation of Underground Reserves by Oil Well Production

Curves», U. S. Bur. Mines. Bull 228 (1924).
42 D. L. KATZ: «A Method of Estimating Oil and Gas Reserves», Trans. Am.
Inst. Mining Met. Engrs., vol. 118 (1936), págs. 18-32.
43 JOHN F. DODGE, HOWARD C. PYLE Y EVERETT G. TROSTEL: «Estimations by
Vo1umetric Method of Recoverab1e Oil and Gas from Sand», BulL Am. Assoc. Petral GeoL,
vol. 25 (julio, 1941), págs. 1302-1326; GEORGE R. ELLIOT Y WILLIAM L. MORRIS: «Oil
Recovery Prediction», Oil and Gas Jour., vol. 48 (l6 junio 1949), págs. 84 y sigs.

Calcular la cantidad de petróleo en el grado de saturación del volumen de poros de
una roca, almacén de dimensiones finitas. La fórmula clásica para determinar el
volumen de petróleo en un yacimiento es X=FAtps, en la que X es la cantidad de
petróleo en metros cúbicos, F el factor 10000, A el área en hectáreas, y tps,
respectivamente, la potencia media en metros, el porcentaje de porosidad y el
porcentaje de saturación de petróleo (que es el complemento del porcentaje de agua
presente). La multiplicación de los tres factores (área, potencia y porosidad) nos da el
número de hectáreas-metro de espacio hueco en la roca almacén. El factor 10000
transforma este volumen en metros cúbicos. La multiplicación del porcentaje de
saturación de petróleo disminuye este volumen de espacios potencialmente
ocupables por petróleo a causa de la presencia del agua en los poros de la roca.
Estudiando los diagramas eléctricos, la historia de la perforación y los análisis de los
testigos es posible calcular con bastante aproximación el área, potencia y porcentaje
de porosidad. El porcentaje de porosidad de la roca masiva puede determinarse con
exactitud mediante el análisis de testigos, pero no es posible obtener el porcentaje,
de porosidad adicional que puede estar presente en forma de fracturas. Si se
sospecha la existencia de porosidad por fracturas, es necesario hacer una suposición
sobre la porosidad total.
En los primeros tiempos de la exploración petrolífera se creía que el petróleo llenaba
los poros de la roca, con lo que el volumen de la porosidad era también el volumen
del petróleo. Esta creencia condujo a estimaciones excesivamente altas de la
cantidad de petróleo originalmente presente en la roca almacén y sobre la cantidad
recuperada que quedaba cuando se abandonaba el campo. Sabemos ahora que las
arenas petrolíferas tienen un contenido de agua intersticial H que va del 10 al 50 por
ciento o más del volumen total de poros. Por regla general, cuanto menor es la
permeabilidad de la roca almacén, mayor es el porcentaje de agua intersticial. Como
el valor medio está comprendido entre el 30 y el 35 por ciento, solamente unos dos
tercios del espacio existente de poros está ocupado realmente por el petróleo. Esta
agua intersticial es llamada corrientemente agua «singenética», aunque, como ya se
mencionó anteriormente, este término no está exactamente de acuerdo con la
definición original. Los modernos análisis de testigos permiten una determinación
bastante exacta del volumen de agua presente, a partir del cual puede calcularse el
porcentaje de saturación de los poros por el petróleo. La interpretación cuantitativa
de los diagramas eléctricos constituye un método independiente para el cálculo de la
porosidad y porcentaje de saturación de hidrocarburos. La aplicación de los análisis
de testigos y los diagramas eléctricos proporciona un método exacto para determinar
la cantidad de petróleo de un yacimiento dado.
44 R. J. SCHILTHUIS: «Connate Water in Oil and Gas Sands», Trans. Am. Inst.
Min. Met. Engrs., vol. 127 (1938), págs. 199-214.
250 GEOLOGÁI DEL PETRÓLEO

La cantidad de petróleo in situ no es, naturalmente, la cantidad que será producida
durante la vida del campo. Para pasar de una cantidad a otra hay que aplicar un
factor de contracción y' un factor de recuperación. El primero tiene en cuenta la
disminución del volumen debido al escape del gas disuelto que ocurre cuando el
petróleo alcanza la superficie. El factor de contracción, que varía con los diferentes
crudos, está usualmente dentro del 75 ± 12 por ciento. El factor de recuperación es el
porcentaje de petróleo que puede ser extraído con provecho económico. No es
posible, como ya se apuntó, predecir la situación económica dentro de 10, 15 o 20
años. Tampoco lo es predecir la evolución que puede tener lugar en las técnicas de
producción. Por otro lado, es posible determinar el tipo de energía que empuja al
petróleo forzándole a entrar en los pozos y calcular por la experiencia en campos
anteriores qué porcentaje de recuperación puede esperarse con los métodos
modernos de producción para el tipo particular de empuje existente. Sin embargo,
como es, inevitable que este factor esté basado en parte sobre opiniones personales,
pueden darse divergencias de hasta el 20 por ciento en las cifras probables de la
recuperación total.
Hidrocarburos semisólidos y sólidos. Además de los petróleos crudos que fluyen
naturalmente a los pozos (algunos con la ayuda del calor) existen crudos demasiado
viscosos para fluir e hidrocarburos sólidos que casi con certeza fueron en un tiempo
líquidos. Por tanto, estos hidrocarburos son, o lo fueron alguna vez, fluidos de la roca
almacén y por ello serán discutidos en este momento. Por su abundancia en la
corteza terrestre, el petróleo líquido viene en primer lugar, el gas natural a
continuación y los hidrocarburos semisólidos y sólidos en el último puesto. En la tabla
número 2 se muestra la relación entre el gas natural y el petróleo, los hidrocarburos
altamente viscosos y los sólidos, y el kerogeno y el carbón:4 5
Los grupos bituminoso s que pertenecen a la clasificación de hidrocarburos
semisólidos y sólidos son el asfalto natural, ozoceritas, asfálticas y los pirobitúmenes
asfálticos. Ejemplos de asfaltos naturales son los líquidos altamente viscosos, como
los depósitos de brea de California que atraparon a tantos animales (algunos de ellos
extintos en la actualidad), y los verdaderos asfaltos naturales, como los que se
encuentran en la isla de Trinidad y en otras partes formando balsas y lagos. Las
llamadas rocas de asfalto son calizas y areniscas impregnadas de material asfáltico
que sin duda alguna fueron originalmente petróleo líquido. La ozocerita es una cera
mineral (parafina natural); existen otros miembros de este grupo, pero son menos
comunes.
Las asfaltitas son vetas de asfalto, tales como la gilsonita, que en lugar de formar
acumulaciones en la superficie forman masas tabulares que llenan las fracturas en
45 E. EISMA, C. F. JACKSON, M. LOUIS, G. R. SCHULZE y H. M. SMITH: «Report by the

Committee Dealing with Resolution 4 of the Third World Petroleum Congress», Prac. Faurth
World Petral. Congress (1955), sección l, págs. 1-4.

Tabla 2
Gas natural del petróleo

Petróleo crudo
Petrobetún (soluble en Asfalto natural
disulfuro de carbono) Ozocerita
Asfaltita
Pirobetún asfáltico
Minerales Materia orgánica de capas

Orgánicos madre
naturales Kerobetún (Insoluble) Kerogeno
(Betunes) Microalgas fósiles
Carbón de bujía, bogue,

ceras y resinas fósiles
Turba
Materia carbonosa (Carbo- Lignito
Betún) (insoluble) Carbón
Antracita
las rocas en la superficie o cerca de ella. Los pirobetunes son similares en .su
propiedades físicas y químicas a los betunes del petróleo, pero su probable evolución
a partir del petróleo no puede demostrarse fácilmente. Algunos de los pirobetunes,
como la albertita, la wurtzilita y la elaterita, se encuentran en vetas en forma similar a
la gilsonita y otras asfaltitas. Otros pirobetunes se encuentran diseminados en rocas
tales como pizarras bituminosas y mármoles. Los estudios con rayos X tienden a
confirmar la creencia de que el asfalto del petróleo, existente en las grietas de las
rocas, se convierte en asfaltitas y pirobetunes mediante el calor y la presión. 46
El kerogeno, la materia orgánica de las pizarras bituminosas, es un betún diseminado
en la roca. Por destilación produce una sustancia análoga al petróleo. La
transformación de sólido a líquido se efectúa únicamente a temperaturas altas; las
presiones existentes en la corteza terrestre no pueden producir petróleo a partir del
kerogeno.
GAS
Propiedades físicas y carácter químico. Las propiedades físicas de un gas natural

incluyen color, olor e inflamabilidad. El constituyente principal de la mayoría de los
gases naturales es el metano, CH4, que es incoloro, inodoro y sumamente
inflamable.
46 ROBERT S. YOUNG: «Preliminary X-Ray Investigation of Solid Hydrocarbons», Bull. Am.

Assoc. Petrol GeoL, vol. 38 (septiembre, 1954), págs. 2017-2020.

Sin embargo, además del metano, etano, propano y otros hidrocarburos gaseosos,
en muchos gases naturales están presentes en cantidades ampliamente variables el
nitrógeno, el ácido sulfhídrico y el dióxido de carbono. Un constituyente menos
corriente es el helio. El ácido sulfhídrico tiene un olor distinto y penetrante y unas
pocas partes por millón son suficientes para dar al gas natural un notable olor. El
nitrógeno y el helio no son inflamables y, si uno o ambos están presentes en
abundante proporción, el gas no arde. La mayoría de los gases naturales contienen
gasolina en forma de vapor (<<gas húmedo»), que se extrae y vende como «gasolina
natural».
Física y genéticamente el gas natural es la fase gaseosa del petróleo y su existencia
en yacimientos es muy similar a la del petróleo. Ya se mencionó su solubilidad en
éste. El gas natural es también soluble en el agua; a las temperaturas y presiones
existentes en los yacimientos, el agua tiene una capacidad de disolución
aproximadamente igual a la veinteava parte de la del petróleo. Por tanto, cuando un
petróleo está saturado de gas, éste ocupa no solamente los huecos de la roca por
encima del petróleo, sino que también está en solución en el agua intersticial a través
de toda la zona de hidrocarburos líquidos. Más aún, el gas natural (principalmente el
metano) puede encontrarse en solución en las zonas acuíferas en cantidades de
hasta 2,5 m3 por metro cúbico de agua fuera de los confines de los campos de
petróleo y gas.
Se ha encontrado que a profundidades por debajo de los mil metros el agua que
llena los poros de las formaciones del sub suelo en la región que bordea el Golfo de
Méjico desde el sur de Texas hacia el oeste hasta Alabama contiene generalmente
una cantidad detectable de hidrocarburos gaseosos disueltos. El principal
constituyente de este gas disuelto es normalmente el metano, pero a menudo están
presentes cantidades medibles de etano, propano y butano. La cantidad de gas
disuelto en este área excede probablemente de las reservas conocidas de gas
descubiertas hasta ahora en acumulaciones comerciales en dicha área."
Una diferencia esencial entre el petróleo y el gas es la movilidad. El g¡1S puede
pasar por aberturas más pequeñas. Puede, por tanto, trasladarse hasta puntos más
distantes de su origen que el petróleo, lo que explica por qué el gas puede
encontrase en trampas por encima del agua, sin que intervenga petróleo alguno.
Existe una considerable variación entre los gases naturales de yacimientos diferentes
e incluso de partes diferentes de un mismo yacimiento en términos de porcentajes de
metano, gasolina, otros hidrocarburos, ácido sulfhídrico, nitrógeno, helio y dióxido de
carbono. Sin embargo, hasta ahora los geólogos han hecho poco uso de los datos
analíticos de los gases naturales. Se ha sugerido que un método efectivo de
47 STEWART E. BUCKLEY, C. R. HOCOTT Y M. S. TAGGART, JR.: «Distribution of

Dissolved Hydrocarbons in Subsurface Waters», Habitat of Oil (American Association of
Petroleum Geologists, volumen especial, 1958), págs. 881-882.

búsqueda de nuevos depósitos de petróleo podría desarrollarse basándose sobre los
análisis de gases.48 Los gases más ligeros tienden a emigrar más lejos de su punto
original. Por tanto, el dibujo de las líneas que pasen por los puntos de igual contenido
de etano en un campo de gas podría mostrar la dirección en la que se debe
investigar para descubrir el petróleo de donde procede y el espaciamiento de las
líneas podría ser indicativo de la distancia.
Cálculo de las reservas de gas.49 Como el gas es una sustancia altamente
comprimible, la extracción de una cierta cantidad da como resultado una caída
medible en la presión del yacimiento (excepto en el caso en que exista un empuje
hidráulico activo) y, debido a que aproximadamente es aplicable la ley de Boyle,
existe una relación definida entre la cantidad de gas existente inicialmente en el
yacimiento, la caída de presión y el volumen de gas producido. Por tanto, a
desemejanza del petróleo, es posible hacer un cálculo de las reservas de gas con un
solo pozo, en el supuesto que dicho pozo haya producido gas suficiente para
provocar una caída medible de la presión del yacimiento. La fórmula empleada es:
( P1d1 – P3d3 )
R = Q______________
( P1d1 – P2d2 )
En esta fórmula R es la reserva de gas, Q es la cantidad de producción entre el
descubrimiento y la fecha en que se hace el cálculo, P es la presión en el momento
del descubrimiento, P2 es la presión en el momento del cálculo, P3 la presión fijada
para el abandono del pozo y d1 d2 Y d3 son los factores de desviación a las presiones
P1 P2 Y P3. Puesto que los gases naturales no se comportan exactamente de
acuerdo con la ley de Boyle, para estimaciones muy exactas es necesario aplicar
factores de desviación. Éstos se obtienen de fórmulas y tablas publicadas.50
También pueden calcularse las reservas mediante la curva de caída y por métodos
volumétricos. Una fórmula volumétrica muy empleada obtiene los metros cúbicos de
48 H. C. ALLEN: «Chemistry Reveals Important Facts», Oil and Gas Jour., vol. 28 (24 octubre,
1929), págs. 42 y sigs.; PAUL H. Price y A. J. W. HEADLEE: «Geochemistry of Natural Gas in
Appalachian Province», Bull Am. Assoc. Petrol GeoL, vol. 26 (enero, '1942), págs. 19-35 .
49 P. McDoNALD BIDDISON: «Estimation of Natural Gas Reserves», Geology of Natura! Gas
(American Association of Petroleum Geologists, 1935), págs. 10351052; E. ·B. ELFRINK, C. R.
SANDBERG y T. A. POLLARD: «Application of compressibility Factors in the Estimation of Gas
Reserves», Oil and Gas Jour., vol. 47 (3 marzo 1949), págs. 89-91; JOHN C. CALHOUN, JR.:
«Estimating Gas Reserves», Oil and Gas Jour., vol. 47 (9 diciembre, 1948), pág. 115; HENRY
J. GRUY y JACK A. Crichton: «A Critical Review of Methods Used in Estimation of Gas
Reserves», Petroleum Development and Technology (American Institute of Mining and Met-
allurgical Engineers. 1949), vol. 179, págs. 249-263.
50 D. L. KATZ: «High Pressure Gas Measurement», parte 2, «A Suggested Standard Method
for Ca1culation of High Pressure Gas Measurement», Refiner and Natural Gasoline
Manufacturer (junio, 1942), págs. 64-69.

gas por hectárea metro a la temperatura y presión bases multiplicando los seis
factores: 1) 10000, número de metros cúbicos por hectárea metro; 2) porcentaje de
porosidad; 3) porcentaje de espacio utilizable, obtenido sustrayendo de 100 el
porcentaje de agua intersticial; 4) presión del yacimiento en atmósfera dividida por la
presión base utilizada, que es ordinariamente una cifra entre 1 y 1,15 atmósfera; 5)
255,5 más la temperatura base (usualmente 15,5°C) dividido por 255,5 más la
temperatura de yacimiento en grados e; 6) 1/2, donde 2 es el factor de
compresibilidad a la presión del yacimiento. 2 puede determinarse por experimentos
en el laboratorio o deducirse de curvas publicadas. El último) paso es multiplicar la
cifra obtenida mediante esta fórmula por el área de la acumulación de gas en hec-
táreas y por la potencia media de la roca almacén. La exactitud del resultado final
depende principalmente de la exactitud con que se determinan estas últimas
dimensiones, especialmente de la estimación de la potencia media.

CAPITULO 8
SELLOS DE LOS YACIMIENTOS
La roca almacén es el depósito en el que se almacenan petróleo y gas. Su confinamiento es

únicamente posible si las paredes de este depósito están selladas con efectividad. A causa de la
importancia de los sellos o cierres de yacimientos en la acumulación de hidrocarburos, se dedica
a este tema un capítulo aparte, aunque sea breve.
Los sellos del yacimiento impiden no sólo el escape del petróleo y el gas, sino también de la
masa inferior de agua que está casi siempre presente y a través de la cual pasaron los
hidrocarburos antes de quedar encerrados en la trampa.
Los sellos de yacimientos pueden clasificarse en dos grupos, que dependen de su relación
estructural respecto a la roca almacén. Si la superficie de cierre es paralela a los planos de
estratificación de la roca almacén se le llama cierre paralelo. Si esta superficie, por irregular que
sea, cruza la estratificación de la roca almacén constituye un cierre transversal.
CONDICIONES NECESARIAS
Un cierre es todo material o combinación de materiales de la corteza terrestre que sea

impermeable al paso de fluidos en cualquier volumen. No existe nada absolutamente
impermeable y los cierres de los yacimientos petrolíferos no son ninguna excepción. Este cierre
es imperfecto en muchos campos de petróleo y gas, notablemente en Kirkuk, Irak, donde los
hidrocarburos alcanzan la superficie a través de multitud de salidas.
Para ser relativamente impermeable no debe poseer fracturas interconectadas ni poros de
tamaño supercapilar. Ya se indicó (capítulo 6) que todas las rocas quebradizas son vulnerables a
la fracturación y los sistemas de fracturas son en sí mismos rocas almacén para hidrocarburos.
Por tanto, las rocas cierre, para que posean efectividad, deben tener cierto grado de plasticidad,
que les permita ceder o fluir en lugar de fracturarse durante los movimientos de la corteza
terrestre. Con toda probabilidad muchas trampas «secas» (llenas de agua) son debidas al hecho
de que su cierre tiene permeabilidad por fracturación.
Cierres paralelos. Se llaman «rocas de cobertura» (“cap rock”) a los estratos rocosos
relativamente impermeables que descansan en concordancia sobre la roca almacén e impiden el
movimiento vertical ascendente de los fluidos. Este término tiene un significado completamente
distinto cuando se usa para designar el disco de anhidrita y quizá de otros minerales en la parte
superior de una masa intrusiva de sal (capítulo 12). Las rocas almacén han de estar cerradas por
abajo asimismo por un estrato impermeable, al cual no es aplicable el término antedicho. Por
esta razón se prefiere el término «cierres paralelos» y llamar al “cap rock” cierre superior.

Cuando la distribución del petróleo en el yacimiento es verticalmente errática, como cuando la
porosidad está determinada por fracturas, la acumulación de petróleo en cualquier punto puede
tener un cierre ¡superior inmediato y un cierre superior último. El cierre inmediato es una zona
compacta situada sobre la roca almacén y que deben atravesar los pozos para alcanzar la zona
productiva. El cierre último es la roca suprayacente consistentemente compacta que detiene por
completo todo movimiento ascendente de los hidrocarburos. Los mejores ejemplos de cierres
superiores inmediato y último se dan en los yacimientos en rocas de carbonatos. Los cierres
paralelos son los únicos posibles en trampas en anticlinales (capítulo 11); son también una parte
del sistema de cierre en la mayoría de los tipos de trampas por variación de la permeabilidad
(“estratigráficas”) (capítulo 14).
Cierres transversales. Un cierre transversal constituye un dique que corta la estratificación de la

roca almacén y por debajo del cual pueden acumularse los hidrocarburos. Son esenciales en las
trampas en fallas y de permeabilidad variable. La forma e historia geológica de los cierres
transversales se estudian en los capítulos 13 y 14. En este capítulo nos limitaremos al estudio de
los materiales que hacen posible el cierre. Con pocas excepciones son los mismos para cierres
paralelos o transversales.
TIPOS DE CIERRES
Arcilla. Se incluyen aquí las rocas clásticas de grano fino laminadas y no laminadas. Las arcillas
son las rocas sedimentarias más abundantes de la corteza terrestre. Están comúnmente
interestratificadas con areniscas, rocas de carbonatos o con ambas. Existen, por tanto, muchas
probabilidades de que la roca almacén esté situada entre capas de arcilla.
Según Grim,1 el grado de impermeabilidad de las arcillas depende de su textura y de los tipos de
minerales presentes. «Muchas arcillas están compuestas de partículas de minerales arcillosos
que tienen forma de escamas y están dispuestas en filas paralelas en forma análoga a las tejas
de un tejado.» La orientación de estas partículas es mucho menos uniforme en otras arcillas; sin
duda la efectividad de su cierre es también mucho menor. Respecto al contenido mineral Grim
escribe:
...si el mineral montmorillonita está presente, la arcilla tendrá probablemente el máximo grado de
impermeabilidad a causa de su grano fino característico, porque tiende a adsorber una pequeña
cantidad de agua y después poco más y por su grado relativamente alto de plasticidad. En el otro
extremo de la escala pueden esperarse las arcillas que contienen caolinita, pues las partículas de
este mineral tienen formas menos escamosas y más granulares, mayor tamaño de partícula y
mucha menor capacidad de adsorción de agua.
Presumiblemente las arcillas menos plásticas de caolinita son más susceptibles a la fracturación
bajo el efecto de las tensiones. Las arcillas de barros, consistentes principalmente en granos de
cuarzo finamente divididos, son probablemente las rocas más quebradizas del tipo arcilla y por
ello las menos efectivas como cierre. Las arcillas calcáreas son mezclas de calcita o dolomita
finamente divididas con partículas de arcilla o limos. Su grado de plasticidad depende de su
contenido de arcilla.
Swann z ha observado que algunas de las arcillas que yacen sobre rocas almacén en la cuenca
de Illinois tienen fugas y otras no: «La mayoría de los yacimientos en la arenisca inferior Chester
no están efectivamente aisladas de las próximas arenas superiores por un manto de 6 a 15 m. de
arcilla, a menos que ésta contenga de 1,5 a 3 m. de caliza. La caliza no actúa probablemente
como cierre, sino que es más bien un indicador del tipo de arcilla más efectiva como cierre.» Las
arcillas fracturadas que yacen sobre la arenisca almacén en Salt Creek, Wyoming, contienen
petróleo. Otros ejemplos de producción comercial en fracturas en arcillas se citaron en el capítulo
6 bajo el epígrafe “Yacimientos en fracturas”.
Las partículas clásticas finas, especialmente de arcilla, son también la causa de los cierres con
otros tipos de roca. Las areniscas arcillosas consistentes de granos de cuarzo groseramente
clasificados y partículas de arcillas son muy importantes como cierres en acumulaciones del
Terciario en muchas partes del mundo. Muchas cuñas de permeabilidad son debidas al aumento
del contenido de arcilla con el buzamiento en areniscas o rocas de carbonatos.
Es también posible en algunos casos que las capas más altas de arcilla de la sección por encima
de una roca almacén sean el verdadero cierre del yacimiento, más que la roca no arcillosa
supuestamente compacta que está en contacto inmediato con la roca almacén.
Rocas de carbonatos. Las rocas de carbonatos son las más versátiles en cuanto a su
comportamiento respecto a las acumulaciones petrolíferas. Sin duda, algunas han funcionado en
el pasado como rocas madre y otras encierran yacimientos extremadamente importantes en
diversas partes del mundo. Por otro lado estas rocas bajo ciertas condiciones actúan también
como cierres. Los cierres superiores de dolomita y caliza más comunes son: 1) las arcillosas, que
pasan gradualmente a arcillas calcáreas; 2) las de grano extremadamente fino y plásticas en
cierto grado, como las margas y ciertas cretas, y 3) las anhidríticas, que contienen partículas
diseminadas de anhidrita. Las calizas o dolomías densas relativamente puras son quebradizas y
por ello vulnerables al agrietamiento en los movimientos de la tierra. En el capítulo 6 se indicó
que este tipo de roca de carbonatos es una importante roca almacén, con el petróleo y el gas
ocupando sus fisuras. El que una roca de carbonatos quebradiza esté fracturada depende de
varios factores que incluyen topografía, carga y especialmente los movimientos a que hayan
estado sometidas. Una caliza en un área estable podría constituir un cierre, mientras que la
misma roca en una faja inestable puede albergar un importante yacimiento. En la próxima
sección se describen calizas que cambiaron de roca cierre a canales de emigración al aumentar
la intensidad del plegamiento.
Evaporitas. Aunque ordinariamente no actúa como cierre, la sal es un material ideal para este
propósito. Es probablemente el más impermeable de todos los minerales sedimentarios. Las
minas en capas potentes de sal son invariablemente secas, excepto por el agua que entra por el
pozo. Es bien conocida la «fluidez» de la sal bajo la presión. En la mayoría de los casos, sin
embargo, debajo de una serie de evaporitas o en el flanco de un diapiro salino, donde la sal
podría actuar como material sellante, existe una capa o manto de anhidrita que es la que efectúa
el cierre en la práctica.
Por esta razón y porque la anhidrita es más abundante que la sal y otros precipitados salinos, es
por lo que es el más importante de los minerales de las evaporitas como material de
taponamiento. Posee también impermeabilidad y plasticidad, aunque en un grado algo menor
que la sal. Tres tipos distintos de anhidritas que actúan como formaciones de cierre en la parte
nordeste de la cuenca Williston (Dakota del Norte-Saskatchewan-Manitoba) han sido descritas
por Johnson; 3
1) La anhidrita secundaria a lo largo de la discordancia sobre la formación Madison forma una

zona impermeable de potencia variable, rellenando las fracturas y poros de las rocas
asociadas.
2) Otro cierre está formado por anhidritas primarias interestratificadas con caliza fragmental
porosa comúnmente con abundantes drusas. Puesto que el ángulo entre la discordancia y la
estratificación es pequeño, las anhidritas primarias pueden ayudar a efectuar el cierre a lo
largo de la zona meteorizada.
3) Un cambio regional de facies, en las que capas almacén porosas pasan gradualmente a
anhidritas densas en dirección este al aproximarse al límite de la cuenca, crea el cierre.
En el área del Golfo Pérsico se depositaron durante el Jurásico una sucesión interestratificada de
calizas de aguas someras y anhidritas. Las calizas han actuado como rocas madre y almacén y
las anhidritas han formado los necesarios cierres.4 En Kirkuk al norte de Irak el cierre superior
actual de esta gran acumulación de hidrocarburos es la sección Fars de evaporitas del Terciario.
Dunnigton cree, sin embargo, que los cierres originales eran delgadas capas impermeables de
calizas anteriores a la formación Fars interestratificadas con capas almacén de calizas
permeables. Opina también que un plegamiento posterior del anticlinal Kirkuk rompió estas
calizas compactas y permitió que los hidrocarburos ascendiesen a través de la estratificación
hasta que fueron parados por las evaporitas Fars.5 Este cierre no es perfecto, como lo
demuestran las fugas mencionadas anteriormente en este capituló y en el capítulo 3 en el
epígrafe “Filtraciones”.6
Un estudio reciente de 12 de los más importantes campos de petróleo y gas de Michigan mostró
que en seis de estos campos la anhidrita tiene un importante papel en la retención de los
hidrocarburos. En algunos casos el cierre es una capa bastante pura de anhidrita, pero en la
mayoría de los campos la anhidrita está diseminada a través de una arcilla o de una roca de
carbonatos.
El yeso también puede actuar en la misma forma.7 Este mineral es excepcionalmente compacto.
Otros cierres. En unos pocos lugares los hidrocarburos líquidos del yacimiento están cerrados
por un tapón de hidrocarburos sólidos o semisólidos, como el asfalto natural (capítulo 14).
Algunas trampas por falla (capítulo 13) contienen una salbanda impermeable a lo largo del plano
de la falla que efectúa el cierre. Esta salbanda puede evitar asimismo las fugas a lo largo del
plano de la falla.
Algunas limolitas son de permeabilidad tan baja que podrían actuar como cierre de yacimientos
petrolíferos y en algunos casos así sucede. La mayoría de las areniscas «estancas» son
impermeables debido a que son arcillosas. Es la arcilla presente en los poros de la arenisca y las
capas arcillosas intermedias las que verdaderamente efectúan el cierre. Las areniscas cuya
cementación es virtualmente compleja también son impermeables, pero tales areniscas son muy
raras. Las limolitas y las areniscas son rocas quebradizas y vulnerables a la fracturación
provocada por los movimientos de la corteza terrestre.

CIERRES POSTERIORES A LA ACUMULACION
Según Heald 8 existen muchos ejemplos de acumulaciones petrolíferas que quedaron «fijadas»
por una cementación completa posterior de la roca almacén en el plano de contacto petróleo-
agua. Este fenómeno puede estar causado por la precipitación de anhidrita en los poros de la
roca almacén debido a la interacción entre los iones de calcio del agua marginal y los iones
sulfato del petróleo o puede ser debido a una asfaltización por contacto.
Las implicaciones geológicas de este cierre de un depósito petrolífero son considerables.
Significaría que el petróleo no se escaparía en un basculamiento regional posterior. Sería una
explicación de la presencia de planos inclinados de contacto entre el petróleo y el agua. Además
este Ajamiento de los hidrocarburos cortaría todas sus conexiones hidrostáticas, por lo que no
sería posible el empuje hidráulico. En la realidad, la mejor evidencia de este cierre posterior a la
acumulación es el hecho de que algunos yacimientos, como lo demuestra la evidencia obtenida
fuera y dentro de los límites del campo, parecen tener la presión de fluido y la porosidad y
permeabilidad adecuadas para poseer empuje hidráulico y, sin embargo, no lo tienen.
1 RALPH E. GRIM, carta fechada en 3 octubre 1958.
2 DAVID H. SWANN: «Effective Seals Above Chester Sandstones of the Eastern Interior
(Illinois) Basin», Program Am. Assoc. Petrol. Geol. Reunión anual, 1956, págs. 31-32.
3WALTER JOHNSON: «Mississippian Oil Fields Northeastern Williston Basin», Program Am.
Assoc. Petrol. Geol. Reunión anual (1956), págs. 25-26.
4R. M. RAMSDEN: «Some Problems Concerning Sealing Factors by Jurassic Anhydrite in the
Persian Gulf», Prograrn Am. Petrol. Geol. Reunión anual (1956), página 39.
5H. V. DTJNNINGTON: «Generation, Migration, and Accumulation of Oil in Northern Iraq»,

Habitat of Oil (American Association of Petroleum Geology, volumen especial, 1958), págs.
1194-1251.
6 Seminar in Advanced Petroleum Geology, Universidad de Michigan, 1959.
7 SHERMAN A. W ENGERD: «Sealing Factors for Non-Structural Paleozoic Oil in the Paradox
Basin of the Four Corners Región», Prograrn Am. Assoc. Petrol. Geol. Reunión anual
(1956), págs. 26-27.
8K. C. HEALD: conferencia, Geology-Mineralogy Journal Club, Universidad de Michigan (5
diciembre, 1951).

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Geologia de los Hidrocarburos UNMSM Ing.

Edwin Mendiolaza Bazaldúa

LA PROFESION DEL GEOLOGO DE ,PETROLEOS

La geología del petróleo es la utilización de la geología en la búsqueda y explotación de yacimientos de

Illing7 ha dicho oportunamente: «...Si la geología ha contribuido considerablemente al desarrollo de la

PRIMEROS TIEMPOS DE LA INDUSTRIA DEL PETROLEO8

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

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FUTURO DE LA GEOLOGIA EN LA INDUSTRIA PETROLIFERA39

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldua[Escriba aquí]UNMSM-Ing. Geológica Catedra Hidrocarburos

Ing. Edwin Mendiolaza Bazaldúa Catedra Hidrocarburos UNMSM EAP.Ing. Geologica

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Para sacar los fragmentos de roca acumulados y el exceso de agua se introduce la

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1. Torre de acero; 2. Bloque de poleas fijas; 3. Bloque de poleas viajeras; 4.

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II. Observaciones geológicas.

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III. Observaciones estratigraficas

a) Espesor de la sección de roca sedimentaria.

IV. Observaciones estructurales.

a) Tamaño y posición de cuencas y de otros rasgos estructurales

El objetivo de los estudios detallados de un área relativamente pequeña es determinar la