Está en la página 1de 1

ORACIÓN DE CASTIDAD

Señor Jesús:

Conozco mi fragilidad, Y sé de sobra que sin tu


ayuda jamás tendré la fuerza necesaria para
mantenerme casto(a) y puro(a), de mente, corazón
y cuerpo.

Pero se también que contigo todo lo puedo; que


con la ayuda de tu Gracia lo que parece imposible
se hace posible.

Por eso te pido hoy: ayúdame a cuidar mi pureza, a


evitar toda situación o lugar que me ponga en
riesgo de caer, a no traspasar ningún límite, y a
saber decir: ¡NO! Cuando la tentación se presente
ante mí.

Señor, mira el propósito y anhelo de este hijo(a)


tuyo y concédeme amar y ser amado(a) de verdad,
con un amor que se asemeje cada día más al tuyo.

¡Que así sea! Amén.

ORACIÓN DE CASTIDAD

Señor Jesús:

Conozco mi fragilidad, Y sé de sobra que sin tu


ayuda jamás tendré la fuerza necesaria para
mantenerme casto(a) y puro(a), de mente, corazón
y cuerpo.

Pero se también que contigo todo lo puedo; que


con la ayuda de tu Gracia lo que parece imposible
se hace posible.

Por eso te pido hoy: ayúdame a cuidar mi pureza, a


evitar toda situación o lugar que me ponga en
riesgo de caer, a no traspasar ningún límite, y a
saber decir: ¡NO! Cuando la tentación se presente
ante mí.

Señor, mira el propósito y anhelo de este hijo(a)


tuyo y concédeme amar y ser amado(a) de verdad,
con un amor que se asemeje cada día más al tuyo.

¡Que así sea! Amén.

También podría gustarte