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" El Hombre " de Juan Rulfo

Enviado por aleconsolata • 16 de Diciembre de 2013 • 2.605 Palabras (11 Páginas) • 977
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Haciendo un resumen podemos descubrimos que hay tres narradores. Primero se


va intercalando el asesino con quien lo sigue, al final el pastor.

Personajes:

• El hombre: Tenía el pie plano y sin el dedo gordo. Quería matar a un hombre
en especial, el que lo seguía, porque mató a su hermano José Alcancía. Quería
venganza y mató a la familia Urquidi (la del espía) pensando que uno de ellos es él.
Se quedó con el remordimiento.

• El que seguía al hombre: Integrante de la familia Urquidi. Seguía paso a paso


al hombre, no iba a dejar que efectuara su venganza así que lo mató al final, de
varios balazos en la nuca. Le dio rabia no haber estado con su familia cuando
murieron, pero él sentía que él o ellos.

• El pastor: Se autodenominaba como ignorante. Cuidaba algunos borregos.


Es testigo del asesinato. Se convierte en el narrador en la última parte. Se hace
incluso amigo de "el hombre", es como un interrogatorio cuando narra.

Si bien lo que puedo bien resumir vemos que la historia narra la persecución
de José Alcancía por quien busca vengar la muerte de su familia, así como el
perseguido buscaba vengar la de su hermano. El perseguidor pudo escapar a ese
designio al ausentarse de su casa para ir a enterrar a un hijo. Su familia murió en su
lugar (“Él vino por mí. No los buscaba a ustedes, simplemente era yo el fin de su
viaje, la cara que él soñaba ver muerta, restregada contra el lodo, pateada y
pisoteada hasta la desfiguración. Igual que yo hice con su hermano; pero lo hice
cara a cara, frente a él y frente a ti

Una segunda instancia del cuento se abre en la voz de un narrador en primera


persona, un borreguero, quien da explicaciones a la autoridad.

El hombre al que alude el título puede ser, inicialmente, tanto el perseguidor


como el perseguido (ambos narran en presente y el cuento discurre en la
indefinición acerca de lo que está siendo narrado: sensaciones y pensamientos
ocupan el primer plano). Se encuentran unidos en un inexorable círculo de
violencia, en un espacio a la vez claro e impreciso. No es fácil discernir un
personaje de otro en una lectura superficial. Más tarde queda en claro que el título
alude al perseguido, a su condición de alguien signado por dos fuerzas: la venganza
y el destino.

Una estructura múltiple

Esta postulación, que resultaría simple enunciada de un modo lineal, está


dada por las voces de cuatro narradores: uno omnisciente al comienzo (“Los pies
del hombre se hundieron en la arena”, el perseguido, el perseguidor, y el
borreguero, y alternancias entre los tiempos, pasado y presente. Estas alternancias
son también el planteo de un círculo cuyo origen es anterior al propio cuento,
haciendo a la venganza que entraña algo inaccesible, que se remonta a antes del
comienzo de la acción.

Hay incluso hechos de los cuales es narrada una simple consecuencia que
permite inferir un estado del personaje: Alcancía se corta un dedo en la huida, pero
no se sabe cuándo ni cómo, sino sólo que: “Le falta el dedo gordo del pie izquierdo.
No abundan los fulanos con estas señas” , “No debí haberme salido de la vereda —
pensó el hombre— ...Pero es peligroso caminar por donde todos caminan, sobre
todo llevando este peso que llevo... Cuando sentí que me había cortado un dedo, la
gente lo vio y yo no, hasta después.

En otro momento, el perseguidor pasa de un soliloquio a dirigirse


directamente al perseguido, como si éste pudiera escucharlo: “Se arrodillará y me
pedirá perdón. Y yo le dejaré ir un balazo en la nuca... Eso sucederá cuando yo te
encuentre” , que lleva a algo frecuente en los personajes de Rulfo: la captación del
mundo desde una intuición propia, honda y genuina, pero no por eso justa: sus
personajes son sabios, y a la vez crueles.

Las razones de la primera violencia (el asesinato del hermano de José Alcancía
por parte de su perseguidor) son desconocidas al lector, tanto como el rostro del
asesino o el momento del crimen. Urquidi sabía que Alcancía vendría silencioso,
como una mala víbora, como si una violencia frontal pudiese ser mejor o ser
asumida como justa. Realmente pasaba una etapa de confusión, como muchas
veces suele pasar en el propio yo en lo que podemos ser tentado a cometer el mal.
Si bien podemos encontrar dos tipos de movimiento en lo son externo y interno,
llevando a responder a la consecuencia de matar, sufriendo luego la persecución
para una venganza. Muchas veces nuestra imagen y especialmente la mia puede
sentirse perseguida por diferente motivos.
El cuento instala la simultaneidad, la ruptura del orden lineal del tiempo y con
ella también diferentes grados de conocimiento de los personajes. José Alcancía
intuye su destino, el perseguidor adivina sus movimientos, y el borreguero —como
el esclavo de Citerón, de Edipo Rey— dice lo que vio sólo porque lo vio. Es este
personaje quien encuentra muerto a José Alcancía. El lector sabe sin embargo lo
que ignora el borreguero: que ese ser, cuyo cuerpo se muestra consumido y agotado
y que intenta escapar, ya está muerto, y que él mismo lo sabe pero busca algún
resquicio por el cual huir de la trama en la que él mismo se insertó. La muerte se
produce antes del hecho material del asesinato.

Hay así un saber profético, que se habla a sí mismo, y que habla al lector: el de
ese perseguidor sin nombre, que se confunde con el narrador omnisciente del
principio: “Te cansarás primero que yo. Llegaré adonde quieres llegar antes de que
tú estés allí —dijo el que iba detrás de él—. Me sé de memoria tus intenciones,
quién eres y de dónde eres y adónde vas. Llegaré antes de que tú llegues”. De algún
modo, como señala Foucault, el de ver más allá, y al mismo tiempo, podemos
agregar, no ver, es un saber solitario y de la experiencia. La muerte es experiencia y
también soledad, pero el saber del perseguidor y del perseguido hace que la
venganza sea tan incuestionable como lo que ven. Ambos ven más allá (intuyen al
otro) y al mismo tiempo, como Edipo, son ciegos (ya que obedecen a un propósito
autoimpuesto pero que es evitable). La suerte está echada. Sólo falta el mecanismo
que la ponga en marcha.

Acción y conocimiento

La acción del cuento en sí es la de la primera parte, la segunda es una


alternancia del punto de vista: el perseguidor ya ha declarado muerto a Alcancía, le
resta encontrarlo, y el borreguero ve a un hombre que es un espectro. A su vez, las
acciones de cada personaje se ramifican: éste último rememora la noche en que dio
muerte a la familia Urquidi , y su perseguidor, el entierro de su hijo y cómo imagina
el asesinato . Pero en él hay algo más: sus acciones tienen el poder de vaticinar,
contienen a ese destino de violencia, que es el elemento estructurarte del cuento:
andar es encaminarse al cumplimiento de una venganza, y a la muerte; no hay otra
condición existencial.

Alcancía trata de huir pero, tal como lo había vaticinado su perseguidor, es


encajonado por el río, acá encontramos más un movimiento externo. Siendo un
compañero el camino y me pregunto cuantas veces uno siente en su propia soledad
un gran ausencia en la que la remplaza con la naturaleza siendo las planta, el aire y
hasta el propio rio, por es la única compañía por escapar de su perseguidor.
Debe volver sobre sus pasos dejando su huellas en la son un movimiento
interno, cuanta veces pasa que en la vida queda un huellas en la vida en la que es
muy difícil de borrarla, pero si bien tenemos que saber que no es imposible.

El escenario se vincula a ambos personajes: impone limitaciones al


perseguido, y es leído por el perseguidor. A uno lo domina la ansiedad , el otro sabe
esperar. El destino aparece en el simple hecho de que si José Alcancía había creído
dar muerte a toda la familia Urquidi, entonces cabe la pregunta acerca de quién
huye en realidad. No obstante, Alcancía sabe que la venganza es sólo un momento
de ese círculo de la violencia. En la que descubriendo un culpa anagnórisis, es todo
sin sentido la venganza. Porque hoy en día vemos que la sociedad se rige mucho en
la venganza lastimando muchas veces a gentes inocente

Este cuento comenta algo bien discutido y común en estos días que es la doble
venganza, ósea, el perseguido se salvó del perseguidor pero ahora el perseguidor
ahora es el perseguido y el perseguido el perseguidor.

Esta historia es bien especial tanto como su estructura como la forma en que
se manifiestan los hechos. La historia se divide en 2 partes que las dividiremos para
hacerlo más fácil de comprender.

Está armada con distintos narradores que son: el perseguidor y el perseguido.


Esta forma de exponer los narradores provoca un pequeño grado de dificultad al
leerlo ya que hay que estar pendiente de cada diferencia que marcan los distintos
personajes. Tiene un juego de tiempos bien marcados porque hay momentos en
que el narrador habla en presente lo que pasará en el futuro pero que ya es pasado.
Las oraciones cortas dominan el texto aunque siempre dándole el mismo sentido
pero sin dar demasiados datos ni detalles. El texto tiene muchas metáforas y
personificaciones que le dan un sentimiento más profundo como por ejemplo “La
Yedra baja” es un ejemplo de personificación y “”La tierra se había caído para el
otro lado” es una Metáfora. Tiene Símbolos y una descripción mínima de los
personajes.

El narrador está a la 3º persona acompañado de 2 personajes que son el perseguido


y el perseguidor.

El narrador tiene un grado de conocimiento limitado y no se da a conocer los


rasgos físicos ni de uno ni de otro. Tiene un punto de vista interno informando lo
justo y necesario al lector.
La Historia es confusa pero con un contenido enorme que deja mucho de qué
hablar. El perseguido antes de serlo, era el perseguidor que tenía la misión de
matar a su futuro perseguidor pero en el momento de entrar a su hogar no se dio
cuenta que el no se encontraba en el lugar, matando a su mujer e hijo. Entonces el
perseguido arranca del lugar adonde nadie lo conozca como lo dice este fragmento:
“Tengo que estar al otro lado, donde no me conocen, donde nunca he estado y
nadie sabe de mí...” pero el gran problema de el perseguido es que el muestra un
ansia que lo llevará a cavar su propia tumba.

El perseguidor al saber la muerte de su familia sigue al perseguido con


paciencia y con las pocas pistas que le deja. Como los pies plano y que le falta el
dedo gordo del pie izquierdo.

En el desarrollo de la persecución de este hombre, el perseguidor recuerda y


habla con los espíritus cuando él le decía a su hijo que nadie le hará daño nunca
como lo dice en este fragmento, ”Nadie te hará daño nunca, hijo. Estoy aquí para
protegerte.”

Aquí el tiempo atmosférico siempre se muestra como obscuro, con nubes que
demuestran la melancolía tanto del perseguidor como del perseguido. También uno
se puede dar cuenta que la época en que suceden estos hechos es de hace muchos
años o siglos antes del nuestro porque nunca se menciona la civilización mostrando
siempre lugares vírgenes de la naturaleza.

El espacio en donde se desarrolla este acontecimiento es en lugares áridos,


con escasez de vegetación, con muchas montañas que dan la impresión de
ahogamiento que nos da a conocer el escritor la soledad de los protagonistas del
cuento.

Los acontecimientos atmosféricos y el lugar de desarrollo del cuento son un


símbolo de tristeza, amargura, soledad, ira, culpa, etc.

Hay algo que se destaca mucho en esta parte y que es el mencionado “Recién
Nacido” que se menciona reiteradas veces y que se podría decir que es el causante
de todos los problemas. Este recién nacido es el sobrino del perseguidor que
falleció y él fue al funeral pero mientras el se encontraba allí, el perseguido mataba
a su familia.

Los protagonistas de la historia ya no son específicamente el perseguidor y el


perseguido sino que ahora son un Borreguero como narrador en 1º pers. De la
historia que es a la vez limitado de la información y un Licenciado que es un
personaje nominado.

Tiene una estructura muy similar a la de la 1º parte pero con la diferencia de


que ahora está contada a la 1º persona. Esta parte está contada como presente
contando el futuro pero que ya es pasado, osea que aquí tenemos el mismo caso
que en el de la 1º parte de la historia.

Para hacerlo más claro realizaremos un esquema:

El Borreguero que le cuenta al licenciado que había conocido al perseguido


cuando se zambullía al río. Cuando lo conoció el perseguido ya se veía demacrado y
con hambre ya que así lo demuestra el cuándo se toma la leche de una borrega.

El Borreguero recién ahora se enteró que había matado a la familia Urquidi.


También queda claro que el Borreguero es un hombre ignorante porque el mismo
lo dice diciendo que es un hombre de cerro.

Entre el Borreguero y el perseguido entablaron una amistad y le contaba que era de


lejos, sobre su mujer, etc.

El tiempo en esta 2º parte es parecido al otro... Nublado. El Espacio en donde


se desarrolla esto es al lado de un río y también en otro lugar en donde están
conversando el Borreguero con el Licenciado (que no es determinado en el texto).

El gran problema que se enfrenta el Borreguero es que ahora es acusado de


complicidad por el Licenciado pero el Borreguero se defiende diciendo que el no
sabía que era asesino y que solo fue a hablar con el licenciado porque estaba
muerto en el río boca abajo con la sangre coagulada que le salía por la boca y la
nuca llena de agujeros y por eso, ¿es un encubridor?

Ahora nos podemos dar cuenta que el Borreguero encontró al perseguido


muerto con agujeros en la nuca proporcionados por el perseguidor y que ahora es
acusado de cómplice por el Licenciado. No nos tenemos que olvidar que el
perseguidor había dicho que lo mataría de un balazo.

La gran desventaja que tenía el perseguido es que el NO conocía el lugar en cambio


el perseguidor SIEMPRE supo donde se encontraba...

Conclusión.
De conclusión podríamos decir que el autor de este libro nos quiso demostrar
que siendo el perseguidor de algo, al final uno siempre queda siendo el perseguido
de ese algo.

También se puede deducir que es una doble venganza que se manifiesta en la


vida cotidiana pero esta está representada de otra forma más fuerte. Si bien
podemos decir que no es bueno pagar con la misma moneda.

Esta historia que está plagada de asesinatos, nunca se interpretó la sangre, la


muerte, ni nada, tan crudo como podría haber sido mostrado.

Este cuento me dejó una enseñanza tanto su contenido como su estructura, es


decir, la forma en que está hecha. El juego con los tiempos es asombroso y el
desenlace ya esperado termina siendo, distinto.

Mucho en lo personal descubro que es bueno tener una mirada hacia mí


mismo, y no juzgando a los demás, borrando cada sombra de amargura y dolor
para realmente encontrar bien siempre el camino si alejarme de mi centro como se
el hombre y nunca encerrarme en mi mismo siendo un laberinto si no ser alguien
más abierto a todos lo que me rodean. Es algo que para toda la vida me servirá.

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