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Son múltiples y se distinguen en: la energía nutricional, la energía defensiva, la energía esencial, la sangre, la energía ancestral, la
energía mental y el líquido orgánico.
En su conjunto, estos términos designan las funciones de nutrición y de defensa, la circulación energética y la sanguínea del cuerpo. Es
una de las partes más importantes de la fisiología acupuntural.
En patología, estas energías y la sangre varían en el curso de la evolución de una enfermedad. Basándonos en los signos clínicos
causados por estas variaciones es como llegamos a diferenciar las enfermedades para poder aplicarles una terapéutica apropiada.
ORIGEN Y DISTRIBUCIÓN
ENERGÍA NUTRICIONAL - Posee el doble sentido de “alimentación” y de “movimiento”. La energía nutricional es pues, la energía
alimenticia en perpetuo movimiento en el cuerpo.
El hombre recibe la energía de los alimentos a nivel del estómago. Esta energía pasa a los pulmones; los cinco órganos y las seis
entrañas la reciben. La energía pura es la energía nutricional; la energía impura es la energía defensiva. La energía nutricional circula en
los meridianos, la energía defensiva circula fuera de los meridianos principales.
La energía nutricional, es la energía pura de los alimentos.
La energía nutricional, es la energía desprendida en el lugar que recibe los alimentos. Esta energía se encuentra primero en el
estómago, luego en los pulmones… desborda del interior y se reparte por el exterior. La parte “pura” de esta energía circula en el
interior de los meridianos, alimenta sin cesar al organismo.
ENERGÍA DEFENSIVA – Es la energía de defensa del organismo. Al igual que la nutricional, se desprende durante la digestión. La
energía defensiva difiere de la energía nutricional, en que la primera circula fuera de los meridianos principales.
Es la energía robusta que proviene de los alimentos. Es a la vez ágil y ligera. No penetra en los meridianos principales porque circula
dentro del tejido celular subcutáneo, las fibras musculares, los peritoneos y se dispersan en el pecho y en el abdomen.
ENERGÍA ESENCIAL – Está compuesta por la energía del cielo (aire, elemento inmaterial) y por la energía de la tierra (elemento
material) tiene la función de mantenimiento (nutrición del organismo).
Las sustancias de los alimentos pasan del estómago a los recalentadores medio e inferior para transformarse en energía esencial que
riega los cinco órganos y las seis entrañas. Esta forma, circula siguiendo la vía de la energía nutricional y la vía de la energía defensiva.
Otra energía llamada “gran energía” no sigue estas vías y se concentra en el pecho, pasa a los pulmones y vuelve a salir por la garganta
y la nariz, lo que produce la inspiración y la espiración.
Resumiendo, la energía esencial del hombre comprende tres energías: la energía nutricional, la defensiva y la ancestral.
La “gran energía” se llama también “energía pura”.
Energía nutricional y sangre. A pesar de sus diferencias, la nutricional y la sangre están ligadas por su circulación y su función de
nutrición.
La piel, el pelo, los músculos, las entrañas y los órganos están mantenidos por la sangre. Cuando la sangre es próspera, el cuerpo
también está próspero; cuando la sangre está débil, el cuerpo también está débil; únicamente el equilibrio sanguíneo permite al
organismo conservar su fuerza y su movimiento. Pero la sangre tiene relaciones muy importantes con la energía. Si la energía puede
moverse y mantenerse, es gracias a la energía.
La energía nutricional es la energía pura de los alimentos, ella armoniza los cinco órganos y riega las seis entrañas.
Por consiguiente, la energía nutricional y la sangre no pueden separarse. Tomemos como ejemplo el caso de desarreglos de la
circulación de la energía nutricional y de la energía defensiva: los vasos están vacíos, el tejido celular subcutáneo y los músculos están
desnutridos, por lo tanto hay sensación de entorpecimiento. Asimismo, si la energía perversa se encuentra en los vasos sanguíneos la
circulación de la energía nutricional será retardada y habrá acumulación de sangre en la región atacada con signos de hinchazón y
dolores.
La energía tiene el papel de preservar las actividades orgánicas. Gracias al cordón umbilical ligado a los dos meridianos Vaso
Gobernador y Vaso Concepción de la madre, el feto recibe la energía esencial. Esta energía tomará el nombre de “ancestral” después del
nacimiento. Después del nacimiento, el niño recibe directamente la energía del cielo (respiración) y la energía de la tierra (alimentación)
que le son indispensables.
De esta manera, la energía esencial crea el ser, refuerza y nutre las energías orgánicas, ella mantiene el equilibrio fisiológico del
organismo y activa la circulación de las materias nutritivas por todo el cuerpo. En cuanto a la energía defensiva, su papel es el de
armonizar al interior (hombre) y el exterior (cosmos) y combatir las enfermedades de origen externo (energías perversas cósmicas).
Todas las actividades orgánicas de deben al empuje de la energía esencial. Por eso, en clínica, algunas enfermedades provocadas por
una mala circulación de la sangre o del líquido orgánico se tratan ya sea por la técnica de regularización, ya sea por la técnica de
tonificación de la energía esencial.
El equilibrio de los órganos y de las entrañas con las diversas partes del cuerpo se hace gracias a las relaciones de los meridianos
principales y secundarios. Pero los órganos, las entrañas y los meridianos pueden restablecer sus relaciones sólo después de haber
recibido la energía esencial, antes que esta energía se transforme en otras energías (energía propia de cada órgano, entraña o
meridiano).
Se pueden distinguir los olores, porque la energía de los pulmones sube a la nariz; porque la energía del hígado sube a la lengua, se
pueden conocer los sabores; porque la energía del bazo sube a la boca, se puede conocer el gusto de los alimentos.
Asimismo, las actividades de las siete facultades dependen del funcionamiento de la energía de los cinco órganos. Así, nosotros
podemos comprobar los efectos de la energía sobre los movimientos y sobre las actividades de las materias y de las energías del
organismo, es decir, sobre el equilibrio del cuerpo.
La energía defensiva forma parte de la energía del cuerpo, sus funciones principales son calentar el tejido subcutáneo, dejar la piel lisa y
sedosa, mantener la raíz del pelo; abrir y cerrar los poros; por eso, en estado normal, la piel es tibia, suave y agradable; la musculación
es armoniosa, los poros están bien cerrados, la defensa contra las energías perversas es excelente.
Cuando la energía nutricional lucha contra la energía perversa, el enfermo presenta fiebre y teme al frío. En caso de victoria de la
energía defensiva, el enfermo suda y la energía perversa se dispersa.
La insuficiencia de la energía defensiva acarrea el vacío de los meridianos y retarda la circulación de la sangre; la piel, el tejido celular
subcutáneo y los músculos están mal alimentados, por lo tanto hay sensación de entumecimiento o pérdida de sensibilidad. A veces, las
energías perversas (viento, frío, humedad) localizadas en el tejido celular subcutáneo y en los músculos perjudican a la sangre. Si están
alojadas en las articulaciones provocarán dolores.
“La energía pura de los cinco órganos y de las seis entrañas se precipita a los ojos para volverse quintaesencia.”
ENERGÍA PURA
La energía pura de los cinco órganos y seis entrañas no es otra que la energía esencial que proviene de los alimentos. Es conservada en
las suprarrenales y distribuida en caso de necesidad a los órganos y entrañas y, especialmente, a los órganos genitales. Por eso, cada
vez que la energía perversa (viento, frío, calor…) y las siete pasiones (cólera, tristeza, odio…) atacan al hombre, es siempre la energía
pura la que resulta herida.
En suma, la energía pura de los cinco órganos y de las seis entrañas, es la energía de mantenimiento y de conservación de la actividad
vital, del mismo orden que la energía nutricional, la defensiva, la energía esencial y la sangre.
ENERGÍA ANCESTRAL
El feto, desde su formación, recibe primero la energía ancestral de sus padres, es decir, la energía “innata” que es la base de todas las
organizaciones, de la formación de los sistemas nerviosos, óseos, musculares… Después del nacimiento, el niño recibe la energía de la
tierra (alimentación) y la energía del cielo (respiración) para realizar las condiciones de la vida (crecimiento, desarrollo) y para reforzar
la energía ancestral. Poco a poco, esta energía ancestral se desarrolla y se vuelve muy poderosa, se manifiesta por empujones de
crecimiento y desarrollo mental y sexual.
ENERGÍA MENTAL
A estas tres energías los antiguos las llamaban las “energías preciosas”. La energía pura de los alimentos es la base material de todas
las actividades orgánicas. La energía esencial, compuesta por la energía pura de los alimentos y de la respiración es la energía principal
de las funciones fisiológicas del organismo. La energía mental es la energía que engloba el conjunto de todas las actividades fisiológicas
normales de todo el cuerpo.
LÍQUIDO ORGÁNICO
ORIGEN Y FUNCIÓN
El término “líquido orgánico” designan el conjunto de elementos “agua” normales en el organismo. El líquido orgánico se crea a partir de
los alimentos bajo la acción digestiva del estómago, de los intestinos, de la vejiga y del triple recalentador.
Los alimentos, bajo la acción digestiva, producen elementos nutritivos llamados sustancias puras, que se transforman en energía pura.
Esa energía pura pasa al bazo, luego a los pulmones.
Como los pulmones tienen por misión la transformación y la circulación de la energía, los líquidos circulan siguiendo la vía energética
para ser distribuidos por todo el cuerpo, eso quiere decir que el agua del organismo se presenta constantemente bajo la forma de
energía pura que circula por los meridianos de los órganos. La que es enviada fuera es la energía impura.
La cantidad de agua necesaria para el organismo está bien determinada, por eso la absorción de los alimentos y la formación del líquido
orgánico tienen también su límite bien determinado. Esta limitación se hace por la actividad de los órganos y de las entrañas, cuyo
papel esencial es el mantener el equilibrio Yin-Yang del cuerpo siguiendo la evolución de las estaciones El calor (verano) hace sudar, el
frío (invierno) hace orinar. Este ejemplo muestra claramente la influencia de las estaciones sobre los órganos. Pero hay que recordar
sobre todo el papel de los pulmones (formación y circulación de la energía), el de los riñones (formación del agua), el de la vejiga
(conservación del líquido orgánico) y el del triple recalentador (transformación del agua en energía y ensanchamiento de la vía de
conducción de los líquidos).
Si el funcionamiento de los órganos (riñones y pulmones) o de estas entrañas (triple recalentador y vejiga) es deficiente, o si la vía
energética está obstruida, se producirá desarreglos de secreción o de evacuación del líquido orgánico, por tanto, habrá edema.
Notemos que el líquido orgánico, mezclado con la energía nutricional bajo la acción del recalentador medio, puede transformarse en
líquido sanguíneo. Asimismo, bajo la acción de los cinco órganos puede transformase en cinco sustancias diferentes. Sudor, moco,
lágrimas, saliva, baba. En el interior son los órganos, y en el exterior son la piel, el tejido celular subcutáneo, las siete facultades, las
articulaciones, las que sin excepción guardan su armonía y equilibrio gracias al líquido orgánico.
Dicho de otra manera, la energética orgánica es un término que concierne a los caracteres fisiológicos o patológicos que se
manifiestan en el interior o en el exterior del cuerpo, y a partir de los cuales se sacan conclusiones generales aplicables a todas las
energías de naturaleza diferente. “Los órganos se encuentran en el interior, sus formas aparecen en el exterior; por eso se llama la
energética orgánica”. Esta definición ilustra claramente lo que el oriental entiende por “energética orgánica”; designando con este
término no el órgano, sino la energía que emana de él.
Los cinco órganos son: el CORAZÓN, el HÍGADO, el BAZO, los PULMONES y los RIÑONES. Las seis entrañas son: VESÍCULA BILIAR,
ESTÓMAGO, INTESTINO GRUESO, INTESTINO DELGADO, VEJIGA y TRIPLE RECALENTADOR. Las entrañas curiosas son: el sistema
nervioso (cerebro y médula), el sistema óseo, el sistema circulatorio y el sistema genital (útero, ovarios, próstata, testículos).
Fuera de los cinco órganos se encuentra la envoltura del corazón o maestro corazón. Se trata del PERICARDIO, que es la parte de
defensa exterior del corazón. Por esa razón los clasificamos entre los órganos.
En cuanto a la energía nutricional, la energía defensiva, la sangre, la energía pura, la energía mental, el líquido orgánico, no son
energías que emanan de los órganos (energía orgánica propiamente dicha). Sin embargo, pertenecen a la fisiología.
DISTINCIÓN DE LOS ÓRGANOS Y DE LA ENTRAÑAS
La distinción entre órganos y entrañas es muy clara; las energías orgánicas que tienen por función “hacer salir y llevar”, “transportar
y sustraer”, “propagar y transformar”, emanan de las entrañas; las que tienen por función “guardar la energía pura” emanan de los
órganos.
Esta distinción no indica de ninguna manera la independencia de los órganos y de las entrañas desde el punto de vista fisiológico. Por
el contrario, existe entre ellos un sistema de relaciones extremadamente complejo:
Las relaciones entre los órganos y las entrañas son relaciones con carácter Yin-Yang (interior-exterior).
“El meridiano de la vesícula biliar tiene relaciones interiores y exteriores con el hígado; el meridiano del estómago tiene relaciones
interiores y exteriores con el bazo. Están allí los Yin y los Yang del pie. El meridiano del intestino delgado tiene relaciones interiores y
exteriores con el corazón; el meridiano triple recalentador tiene relaciones interiores y exteriores con el maestro corazón; el
meridiano del intestino grueso tiene relaciones interiores y exteriores con los pulmones. Están allí los Yin y los Yang de la mano.”
Las relaciones “interior-exterior” de los órganos y de las entrañas se basan en el carácter Yin-Yang de los doce meridianos principales
para explicar las relaciones fisiológicas y patológicas.
RELACIONES DE LOS ÓRGANOS Y ENTRAÑAS CON LOS MIEMBROS
Cuando los pulmones y el corazón son atacados por la energía perversa, su energía se detiene en las axilas; cuando el bazo es
atacado, su energía se detiene en las caderas; cuando los riñones son atacados, su energía se detiene en el hueco poplíteo. Estos
ocho lugares son los de reunión, la energía pasa por ellos, la sangre y los vasos los atraviesan.
Los órganos y las entrañas están ligados a los miembros por los meridianos principales y secundarios.
Los miembros tienen relaciones particulares con el estómago, por intermedio del bazo.
Esto quiere decir que los miembros son “alimentados y mantenidos” por el bazo y el estómago.
RELACIONES DE LOS CINCO ÓRGANOS CON LOS CINCO ESTRATOS DEL CUERPO Y LAS “SIETE FACULTADES”
Según los antiguos, todas las actividades vitales internas (digestión, circulación…) o externas (oído, vista…) dependen de las
actividades orgánicas.
“El corazón concuerda con los pulsos, la energía nutricional impregna la tez, el hígado concuerda con los tendones, la energía
nutricional impregna las uñas; el bazo concuerda con el tejido celular subcutáneo y con los músculos, la energía nutricional impregna
los labios, los pulmones concuerdan con la carne, la energía nutricional impregnan los pelos; los riñones concuerdan con los huesos,
la energía nutricional impregna los cabellos.”
“La facultad del hígado se encuentra en los ojos; la facultad del corazón en la lengua; la facultad del bazo en los labios; la facultad de
los pulmones en la nariz; la facultad de los riñones en las orejas.”
Estas relaciones se hacen a través de meridianos secundarios.
Los cinco colores de tez designan la tez verde, la tez roja, la tez blanca, la tez negra, la tez amarilla. En estado normal, la pureza de
la energía de los cinco órganos se refleja a nivel de las cejas, ojos, cara y nariz por una armonía de colores, un aspecto de fuerza y
de inteligencia.
En patología, el color de la cara varia en función de las enfermedades orgánicas: las enfermedades del corazón se manifiestan a
menudo por una tez roja; las del hígado, por un color de tez verde; las del bazo por un color de tez amarilla; las de los pulmones por
un color blanco, las de los riñones por un color negro.
Estas manifestaciones son, pues, fenómenos patológicos particulares, que pertenecen a casa órgano.
Por el contrario, si se trata de enfermedades evolutivas, los colores varían siguiendo la ley de los cinco elementos. Así, las
enfermedades del hígado se manifiestan por un color blanco (metal-pulmón triunfa sobre la madera-hígado); las enfermedades del
corazón, por un color negro (el agua-riñón triunfa sobre el fuego-corazón…)
Lo que más resalta de esto es que se ponen de relieve fenómenos de “destrucción”, lo que nunca es un buen pronóstico.
El organismo humano tiende, de manera discontinua, a mantener el equilibrio de los órganos, entrañas, facultades…, en una palabra,
a mantener su equilibrio interno. Pero tiende también a adaptarse a las variaciones de los fenómenos externos. Entre los órganos y
las estaciones existen relaciones.
“El corazón comunica con la energía del verano; los pulmones con la energía del otoño; los riñones con la energía del invierno; el
hígado con la energía de la primavera; el bazo con la energía del fin de verano.”
Puesto que el hombre vive en un medio natural, debe, en todo momento, adaptarse al clima de las cuatro estaciones para sobrevivir.
Si no se adapta o si su energía vital es demasiado débil, las seis energías perversas cósmicas (viento, frío, calor, humedad,
sequedad, fuego) pueden influir sobre el organismo para provocar enfermedades.
La energía nutricional, la energía defensiva, la energía pura, la energía mental y el líquido orgánico, los meridianos
principales y secundarios, constituyen el material necesario para el funcionamiento del organismo. La producción, la
distribución y la circulación de este material en el organismo dependen de la actividad de los cinco órganos y de las seis
entrañas, de los meridianos principales y de los meridianos secundarios.
Los meridianos están ligados a los órganos y a las entrañas en el interior, a las extremidades de los miembros en el
exterior. Son las vías de la circulación energética, cuyo papel es el de armonizar las diferentes partes del cuerpo.
PRODUCCIÓN
Uno de los caracteres esenciales de los cinco elementos es producir: la madera produce el fuego, el fuego produce la tierra, la tierra
produce el metal, el metal produce el agua, el agua produce la madera. Así, cada elemento presenta dos aspectos distintos: producir, ser
producido, como “la madre y el hijo”.
Por ejemplo, el metal produce el agua: el metal es madre del agua. El agua produce madera: la madera es el hijo del agua. Es lo mismo
para los otros elementos.
Producir implica los sentidos de nutrir, mantener, ayudar.
Según las leyes generales de la mutación natural, la producción acarrea la destrucción y recíprocamente. Si hay producción sin
destrucción, o destrucción sin producción, el equilibrio natural se destruye.
La destrucción y la producción son las dos condiciones primordiales para mantener el equilibrio de todas las cosas, de todos los seres. Y
son estas combinaciones de acciones mutuas las que conducen los seres y las cosas a desarrollarse, multiplicarse sin discontinuidad.
Por ejemplo, la madera puede destruir la tierra, pero la tierra puede producir el metal que destruye a la madera. (Ver fig. 3)
Estos dos fenómenos se manifiestan sin parar en nuestro organismo; a nivel de los cinco órganos y de las seis entrañas, para mantener
el equilibrio fisiológico.
Así, cuando empleamos el término cinco elementos en medicina, se quiere decir que existen simultáneamente fenómenos de estimulación
(producción) y de inhibición (destrucción).
Hay usurpación cuando, a la ruptura de equilibrio sigue una exageración del fenómeno en su sentido normal, y que hay desprecio cuando
el fenómeno tiende a producirse en sentido opuesto al normal.
Ejemplo:
a) La energía del agua en gran exceso destruye primero la energía del fuego (la acción inhibidora normal, en este caso, es más
poderosa) y simultáneamente ella se vuelve contra la tierra (lo contrario de la acción normal: la tierra destruye al agua).
Fig. 4 Energía del agua en exceso (usurpación)
b) Cuando la energía del agua está en gran insuficiencia, la acción inhibidora de la tierra se vuelve muy poderosa (ella detiene al agua)
y la energía del fuego se vuelve también contra el agua (es la acción contraria a la normal: el agua destruye al fuego)
El cosmos dispone de cuatro estaciones y de cinco elementos para producir el nacimiento, el desarrollo, declinar, estagnación y para
engendrar las cinco energías: viento, calor, humedad, sequedad, frío.
El hombre tiene cinco órganos que engendran sus cinco energías internas: cólera, alegría, preocupaciones, tristeza, miedo.
Para establecer la correspondencia de los cinco movimientos con los fenómenos externos se toman las estaciones como base de
referencia. El reino vegetal (madera) pertenece a la primavera, el fuego al verano, la tierra al fin de verano, el metal al otoño, el agua al
invierno.
Para establecer la correspondencia de los cinco movimientos con las diferentes partes del cuerpo, se utilizan como intermediarios los
cinco órganos: el hígado pertenece a la madera, el corazón al fuego, el bazo a la tierra, los pulmones al metal, los riñones al agua. Como
los órganos son Inn, tienen relaciones
fisiopatológicas con las entrañas (Yang), los cinco estratos, los cinco sentidos, los cinco elementos psíquicos, los cinco colores…
Ejemplo:
En la primavera, la vegetación nace y comienza a crecer. La primera manifestación de la energía vital es el brote de las hojas, que se
reconoce por su color verde. El elemento madera es, pues, el símbolo de la primavera. El organismo sigue este movimiento de
transformación de la naturaleza. Entre los cinco órganos, es el hígado el que, gracias a sus funciones de regulación, responde
perfectamente a esta transformación. De donde:
Fig. 6
Entonces, según el principio Inn-Yang, el hígado (Inn) está en relación directa con la vesícula biliar (Yang).
Por su circulación energética profunda, el hígado comunica con el exterior a nivel de los ojos y, por su circulación superficial, el meridiano
principal se ramifica en los músculos y los tendones. De donde:
Fig. 7
Así, por intermedio de los cinco elementos se pueden establecer las relaciones de los fenómenos exteriores, con las diferentes partes del
cuerpo.
Por último, clínicamente, se ve:
- el exceso (plenitud) de la energía hepática provoca la cólera; en otros
términos, la cólera perjudica al hígado.
- ciertas enfermedades de origen hepático pueden manifestarse en el exterior
a nivel de la piel (facies, lengua) por el color verde. De donde:
Fig. 8
Estas diversas manifestaciones fisiológicas y patológicas, se designan en conjunto con el nombre de “grupo madera”.
En resumen, se utilizan los caracteres particulares (producción, destrucción) de los cinco elementos para determinar:
- La acción de estimulación o de inhibición de los órganos entre sí.
- El equilibrio fisiológico Inn-Yang de los cinco órganos y de las seis entrañas.
- La evolución de la enfermedad.
Así, la teoría de los cinco elementos pretende poner en evidencia las relaciones entre los fenómenos naturales externos (cósmicos) y las
diferentes partes del cuerpo. En acupuntura, esta teoría tiene mucho valor para el diagnóstico y el tratamiento.
A pesar de su complejidad, la enfermedad evoluciona siguiendo una ley general. El conocimiento de esta ley es indispensable para la
aplicación de la acupuntura.
Las enfermedades de los cinco órganos sólo pueden evolucionar en el cuadro trazado por la ley de los cinco movimientos:
- fenómenos de usurpación
- fenómenos de desprecio
- si la madre es alcanzada, el hijo lo será
- si el hijo es alcanzado, la madre es ofendida
a) enfermedades de la madre que pasan al hijo; la energía perversa viene del órgano que precede; ejemplo: enfermedad del hígado
que llega al corazón;
b) enfermedad del hijo que ofenden a la madre: la energía perversa viene del órgano que sigue; por ejemplo: enfermedades del bazo
que alcanzan al corazón;
c) enfermedades que vienen por la vía “ser destruido”; ejemplo: enfermedades del hígado que alcanzan al bazo;
d) enfermedades que vienen por la vía “destruir”; ejemplo: enfermedades de los pulmones que alcanzan al corazón;
Para comprender mejor la evolución de la enfermedad, describiremos una enfermedad tipo para cada órgano.
1. Corazón: explicación y tratamiento de la taquicardia con insomnio
Esta afección puede deberse a tres causas:
a) Estando en exceso la energía “fuego” del corazón, la sangre está en insuficiencia. Las manifestaciones clínicas son las
siguientes:
Este insomnio está provocado especialmente por las perturbaciones del meridiano del corazón. La afección no viene de otros
meridianos y no ha alcanzado todavía otros órganos.
Tratamiento: Dispersar el meridiano del corazón, tonificar la sangre y curar el órgano (corazón).
b) El bazo en vacío hace enfermar al corazón (el hijo acapara la energía de la madre). Las manifestaciones clínicas son:
Tratamiento: No se podrá curar al enfermo tratando solamente el corazón. Hay que sostener el corazón y, simultáneamente, tonificar
el bazo. Actuar así es devolver poder a la energía del bazo para que “el hijo no coja más la energía de su madre”, la energía del
corazón no será más insuficiente y los signos patológicos desaparecerán solos.
c) Vacío de la energía debido a insuficiencia renal. Los signos clínicos son:
- sensación de calor que sube a la parte superior del cuerpo
- fiebre por crisis
- sudores, tos, hemoptisis
- a veces, insomnio
Estando en insuficiencia los riñones, la raíz Inn no puede dirigir a su energía hacia lo alto del cuerpo; el fuego queda sólo en el
corazón, se vuelve muy tenso y provoca el insomnio.
Tratamiento: Tonificar el Inn-agua (riñones) y dispersar el Yang.
Este fuego, al alcanzar la parte superior del cuerpo, siguiendo sus meridianos, provoca los signos siguientes:
- cefaleas
- desvanecimiento, vértigos
- náuseas y vómitos
- facies rosadas, ojos rojos
- pulso tenso y duro
Tratamiento: Es simple, pues la enfermedad está todavía localizada en el hígado y no ha alcanzado los otros órganos: dispersar el
fuego del hígado.
Por consiguiente, cuando la acción inhibidora del agua es débil, la energía “viento” (Inn) del hígado sube hacia lo alto del cuerpo,
provocando los síntomas siguientes:
Si curamos únicamente el hígado, la afección se agrava. En este caso, “el hijo está alcanzando, hay que tonificar a la madre”, es decir,
tonificar los riñones-Inn (agua).
c) Equilibrio madera-metal
El hígado-madera debe contar con el pulmón-metal para mantener el equilibrio.
En los enfermos con insuficiencia pulmonar, la energía vital circula mal, el líquido orgánico no puede estar en todas partes, por tanto:
- muchas flemas y mucosidades
- tos con esputos
- inapetencia
- disminución de la agudeza visual
- vértigos
- pecho en plenitud, opresión
“La energía del hígado-madera sube hacia lo alto del cuerpo porque la energía del pulmón-metal está en insuficiencia.”
En otros términos, se trata de una deficiencia de la acción inhibidora del metal (pulmón) sobre la madera (hígado). Este último se
vuelve poderoso (plenitud) y engendra el fuego que gana la parte superior del cuerpo.
Tratamiento: Consiste esencialmente en tonificar el metal (pulmón).
Resumiendo, las cefaleas, el desvanecimiento y los vértigos son signos de ataque al hígado. Pero las perturbaciones de los pulmones,
riñones, bazo y estómago pueden alcanzar el hígado para provocar yací estos síntomas. Por eso, una buena terapéutica depende
siempre de un conocimiento perfecto de las causas de la enfermedad
.
3. Bazo: explicación y tratamiento de la diarrea
La diarrea puede tener muchas causas:
- insuficiencia de la energía del bazo
- la humedad (energía perversa)
- insuficiencia de los riñones-Yang (fuego):
el fuego no puede producir más la tierra)
- complicación de las afecciones del hígado
d) Hígado en plenitud
El hígado (madera) en gran plenitud perjudica al bazo (tierra) y puede provocar
la diarrea.
Esta diarrea provocada indirectamente por el hígado, no tiene las mismas características que la provocada indirectamente por los
riñones, es mucho menos fuerte y siempre acompañada de cólicos.
Se trata de una forma evolutiva de la enfermedad llamada “fenómeno de usurpación”. La madera hígado usurpa a la tierra (bazo). Por
consiguiente, hay que tratar simultáneamente el hígado y el bazo, pues dispersando el hígado desaparecería el dolor (cólico) y no la
diarrea y, tonificando el bazo la diarrea y no el dolor.
En conclusión, la diarrea tiene siempre un origen esplénico. Pero hay que buscar la causa verdadera de esta diarrea, para aplicar el
tratamiento apropiado a cada caso.
4. Pulmones: explicación y tratamiento de la tos y del asma
La tos y el asma son dos manifestaciones patológicas de los pulmones. Pueden aparecer simultánea o separadamente.
No vienen únicamente de los pulmones, pues las perturbaciones de los otros órganos pueden acarrear disturbios a nivel de los
pulmones.
a) Frío y humedad
El frío y la humedad luchando a nivel de los pulmones, provocan los signos clínicos siguientes:
- tos y asma
- vómitos
- orina poco abundante
- a veces, temor al frío con fiebre
Tratamiento: Consiste en echar fuera al frío y expulsar la humedad por la técnica de dispersión.
En estos casos hay que tonificar los riñones para que puedan recibir la energía. Cuando los riñones tienen
suficiente energía, la energía pulmonar puede descender hasta ellos y ser absorbida allí. El asma está curada
sin otro tratamiento.
Actuar así, es emplear el principio: “el metal produce el agua”, es decir, utilizar el conocimiento de las
relaciones energéticas entre los riñones y los pulmones, relaciones rotas en caso de insuficiencia renal.
Asimismo, este caso de asma pertenece al grupo de las enfermedades llamadas “el hijo que acapara la energía
de la madre”. El tratamiento pertenece al grupo de las técnicas llamadas “el hijo puede devolver la salud a la
madre”.
- dolores renales
- vértigos y zumbidos
- espermatorrea nocturna (a continuación de un sueño)y diurna
“La barrera renal” no se cierra completamente, por tanto fluye el esperma debido a la
insuficiencia renal.
Tratamiento:
Consiste en tonificar los riñones para que retengan el esperma.
b) Ilusiones que no se realizan durante el día, pero que se transforman en sueños durante la noche, pueden
causar la espermatorrea. En este caso hay que “purificar el fuego y calmar el agua”. El corazón (fuego) se
vuelve normal y los riñones-Inn (agua) reencuentran la paz.
Actuando así, se regulariza la energía del corazón y de los riñones y la enfermedad estará curada. Si se emplea
la técnica llamada “tonificar los riñones para que retengan el esperma”, no sólo el tratamiento será ineficaz,
sino también la enfermedad irá empeorando.
c) En el curso de una tristeza o de un disgusto, la energía fuego del hígado está en gran plenitud y provoca la
salida ininterrumpida del esperma.
“Los riñones desempeñan el papel de conservar la sustancia pura de los cinco órganos y de las seis entrañas, el
hígado se ocupa de la distribución de la secreción.”
Por consiguiente, cuando el hígado está en gran plenitud (a continuación de una perturbación interna), segrega
abundantemente y distribuye la sustancia pura que no puede ser retenida a nivel de los riñones, originando
espermatorrea.
En este caso hay que emplear la técnica de “purificación de la sustancia pura” segregada por el hígado. Esta
técnica no es un método directo de tratamiento de la espermatorrea, pero está basada en el principio “cuando
la madre está en plenitud, hay que dispersar el hijo”. Así, cuando las secreciones del hígado vuelven a ser
normales, la función conservadora de los riñones se vuelve normal.
d) En las personas cuyo estado general es deficiente, se constatan a menudo los siguientes síntomas: