Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El Servicio Cristiano Eficaz PDF
El Servicio Cristiano Eficaz PDF
Y yo con el mayor placer gastaré lo mío, y aun yo mismo me gastaré del todo por amor de
vuestras almas, aunque amándoos más, sea amado menos. (2 Corintios 12:15)
Rubén Sánchez
Introducción
Servir a Dios y al prójimo no es el problema, sino, las características que deben tener el
servidor y el servicio. Aunque hablemos en términos masculino nos referimos por igual
al hombre y la mujer como verdaderos servidores de Dios.
Muchas veces se ve afectado el servicio cristiano por causa del servidor; el servicio pue-
de ser muy eficiente, pero si el servidor es ineficiente se daña el servicio por causa del
servidor. Por otro lado la persona puede tener muy bonitas cualidades, pero si no sirve a
Dios puede ser que no logre nada en la vida por causa de su ineptitud.
Hay personas que son muy capaces, pero no quieren involucrarse en el servicio a Dios
por alguna razón, pero no hay nada que justifique la parálisis espiritual.
Obviamente, cuando hablamos de este tema surgen preguntas como las siguientes: ¿Qué
característica debe tener un servidor de Dios? ¿Cómo debe ser el servicio cristiano?
¿Qué es lo que puede tornar ineficaz el servicio? ¿Cómo puedo mejorar la calidad de
mi servicio a Dios? ¿Por qué causas hay personas que no sirven a Dios? ¿Cuál debe ser
la motivación de mi servicio? En este estudio contestaremos estas y otras preguntas con
relación al servicio cristiano.
Este estudio tiene como propósito ayudar de alguna manera a mejorar tanto la calidad
del servicio como la vida del servidor. Si con la ayuda del Señor se logran estos objeti-
vos, a Él sea toda la gloria y para mí su misericordia por haber usado este vaso de barro
con toda su fragilidad humana. En el servicio a Dios no se trata de dignidad humana,
sino de misericordia divina, la cual nos hace competente para desempeñar el servicio
con eficacia y eficiencia para su gloria y bendición de las almas necesitadas.
Mayo de 2008
Rubén Sánchez
2
Fundamento Bíblico (1Tesalonicenses 2:1-13)
La palabra griega parresia que se traduce denuedo, indica una mezcla de valor
y confianza en la libertad de expresión. No se oculta la identidad cristiana por causa de te-
mor al descredito; por el contrario, se está preparado para presentar defensa cuando se de-
mande la razón de nuestra esperanza (1Pedro 3:15). Se debe notar que la defensa se debe
hacer con mansedumbre y respeto.
A menudo sucede que el servicio cristiano se ve dañado u opacado por el carácter de la per-
sona que desempeña dicho servicio. Ser valeroso es una cosa y faltar el respeto a la persona
manifestando mal carácter es otra. Se desprenden cuatro cosas de las cita de Pedro:
Nota: Todo esto está contenido en las palabras mansedumbre y reverencia de 1Pedro3:15
El valor que manifiesta el servidor cristiano es con cortesía y educación, expresando de esa
manera el amor por el prójimo.
Pablo dice que no fue su exhortación motivada por el error, la palabra que usa es plane
( de esta palabra viene nuestro término planeta y significa ir errante, desvío ya sea en
lo moral o doctrinal. El servidor de Dios no marcha a la deriva, por el contrario está bien in-
formado y fundamentado en su deber y servicio. Camina en la verdad, sirve conforme a la
verdad, lo motiva la verdad de Dios a servir al prójimo con eficacia y eficiencia.
El servicio que hacemos los hijos de Dios es motivado por la única fuerza motriz de la vida
que es el amor a Dios y al prójimo.
La palabra que usa Pablo aquí para inmundicia es akatharsia ( esta palabra se
usaba para una herida infectada y con pus (William Barclay) lo cual nos habla de una infec-
ción del corazón del hombre que le hace actuar con malos motivos y lo único que expresa es
3
la suciedad que hay en su propio interior. Pablo, entonces dice, que su servicio no era moti-
vado por la infección pecaminosa de su corazón. Es curioso que el diccionario Encarta defi-
na «infección» en su sentido ético como, corromper con malas doctrinas o malos ejemplos.
El servidor de Cristo no sirve por medio de la infección de su corazón corrupto, sino con pu-
reza dando ejemplo y manteniendo una conducta pura y una conciencia limpia; mostrando
así la transformación que Cristo hizo en su corazón por medio del nuevo nacimiento.
Podemos notar en este texto que a Pablo se le acusaba falsamente que su servicio incluyen-
do la predicación era de error, había impureza y que era un engañador. Siempre habrá quien
quiera traer descredito cuando servimos a Dios. La vida, la conducta y la conciencia del
hombre o la mujer de Dios debe darle testimonio y como dijo Jesús: «Bienaventurado sois
cuando por mi causa os vituperen y os persigan, digan toda clase de mal contra vosotros
mintiendo, gozaos y alegraos…» (Mateo 5:11-12)
La palabra que usa Pablo para engaño es dolos significa en primer lugar cebo,
trampa; de ahí artificio, engaño, doblez (Vine). El apóstol dice que su servicio no era con
doblez ni de palabra ni de conducta, no era un tramposo, ni tampoco andaba como un caza-
dor al acecho con un cebo tratando de capturar a su presa para servirse de ella.
El hombre y la mujer de Dios sirven a la gente, pero no se sirven de ella; pues el amor que
nos motiva entrega y se sacrifica siguiente el ejemplo de Cristo. Vea 1Corintios 11:1.
Unas de las cosas por un lado más extraña y por otra más grandiosa como es ser aprobado
por Dios y que él nos confíe el evangelio. La palabra que se usa para aprobar es dokimazo
significa probar con la expectativa de aprobar, se usaba de las monedas de oro
que se sometía a prueba para determinar si era o no legitima.
El gozar de la aprobación de Dios es una bendición, pero también una gran responsabilidad,
el ministerio o servicio cristiano no es como la política que se goza de «privilegios especia-
les o diplomáticos» en el servicio a Dios no hay niños mimados; pues al que mucho se le da
también se le demanda. De esto se desprende las exigencias de Dios en cuanto a los requisi-
tos que deben tener los ministros y diáconos, a los cuales les podemos llamar simplemente
servidores de Dios. Nótese la misma palabra griega en 1Timoteo 3:10
4
En muchas ocasiones somos sometidos al tratamiento Divino, es decir, Dios permite pro-
blemas y dificultades en nuestras vidas para aprobarnos y bendecirnos con su gracia y su
poder. La prueba es necesaria para forjar nuestro carácter, producir paciencia y lograr la
mentalidad cristiana y también debemos aprender a descansar en Dios. De esta manera se
logra la constancia y firmeza que debe caracterizar a los servidores de Dios.
La falta de estabilidad en los líderes o servidores de Dios se convierte en un obstáculo para
el desarrollo y crecimiento de los demás. Por otro lado la firmeza y estabilidad espiritual de
los servidores se vuelve motivadoras para el resto de la iglesia que se inspira viendo nuestro
testimonio. (Vea Romanos 5:3-4; Santiago 1:2-5; Isaías 48:17; Salmos 32:8).
La Palabra de Dios prohíbe en forma categórica servir al ojo (Efesios 6:6; Colosenses 3:22-
24) nuestro trabajo sea como empleados en el trabajo secular, o sirviendo al Señor en su
obra debemos hacer todo para agradarle solo a Él. Pablo dice que no hablaba para agradar a
los hombres sino a Dios que prueba los corazones. El servidor de Dios no busca causar
agrado o deleitar a la gente para tenerla contenta, las palabras que salen de nuestra boca no
está destinado para causar excitación, sino satisfacer necesidades profundas del corazón del
hombre mediante el Espíritu Santo y su Palabra. Buscar agradar a las personas podría signi-
ficar la mayoría de las veces desagradar a Dios, pues mucha gente no quiere oír la verdad de
Dios y se molestan (Vea 2Timoteo 4:1-4).
El buscar agradar a la gente para lograr su aprobación, o esconder nuestra identidad cristiana
para estar bien con la gente es algo totalmente pecaminoso y desagradable a Dios (Vea
Gálatas 1:10). Todo esto parecería estar en conflicto con 1Corintios 10:33 pero no es el caso
ya que el contexto es diferente, lo que se condena es buscar la aprobación de la gente por
encima de Dios. No se está condenando el ser agradable de carácter y educado con las per-
sonas lo cual es nuestro deber; lo que se condena es ser complaciente con el pecado de la
gente para que no se enojen y permanezca en la iglesia o siga dando su diezmo y demás.
Lo que nos dice la palabra de Dios es que el servidor de Dios debe aprender a tener tacto y
ser prudente, no ser egoísta buscando su propio bien, por el contrario se debe buscar la sal-
vación de las personas. Note que habla el contexto de la comida y la ética que se debe tener.
Tanto los creyentes en general como los servidores, colaboradores o ministros debemos usar
un vocabulario coherente, es decir, acorde con la creencia y el servicio que desempeñamos
para Dios. No podemos usar palabras lisonjeras para adular a las personas a fin de sacar
provecho de ellas, la palabra griega usada aquí kolakeia indica la adulación con
el fin de sacar provecho material de las personas.
5
La adulación y la hipocresía van tomadas de la mano, y es lo que ha causado tanto daño a la
obra de Dios. Servidores que se sirven así mismo, no sirven ni a Dios ni a las almas, por lo
demás usan a Dios y se sirven de las almas diciéndoles lo que quieren oír con tal de sacar
algún provecho de ellas. La biblia tiene mucho que decirnos acerca de las palabras lisonjeras
o adulación:
No usaré con nadie de títulos lisonjeros (Job 32:21)
No sé hablar lisonjas (Job 32:22)
La lisonja es una expresión de hipocresía (Salmos 12:2)
Dios destruirá los labios lisonjeros (Salmos 12:3)
La boca lisonjera hace resbalar (Proverbios 26:28)
La lisonja es expresión de los falsos profetas y es el deseo de la gente
que no honra a Dios ni quiere oír su palabra verdadera (Isaías 30:10)
La lisonja engaña y seduce al pecado puesto que tiene gran poder de
convencimiento (Romanos 16:18)
Vea por favor Miqueas 3:5; 2Corintios 2:17; 4:2; 7:2; 1Pedro 5:2; 2Pedro 2:3, 14,15;
La palabra que usa Pablo para avaricia es el griego pleonexia los antiguos la
definían de la siguiente manera:
1- Un deseo insaciable
2- El deseo pecaminoso de lo que pertenece a otro
3- Egoísmo despiadado
4- Es el deseo de dinero que conduce al robo
5- Es el deseo de poseer a una persona, lo cual conduce al pecado sexual
6- Codicia cruel, describe a la persona que emplea todos los medios posible para aprove-
charse de su prójimo
7- El maldito amor de poseer
8- El anhelo de tener siempre más
9- Tratar de conseguir lo que no conviene
10- El injusto deseo de aquello que pertenece a los demás
11- Es el pecado del ser humano que valora la vida en términos materiales
12- Es el espíritu del hombre que hace mercadería de la gente
Debemos notar que la avaricia tiene que ver con buscar lo prohibido, por un lado tiene que ver
con lo material y por otro con lo sexual. Se dice que es idolatría (Efesios 5:5; Colosenses 3:5)
6
¿Por qué la avaricia es idolatría? La avaricia es idolatría, puesto que pasa a ocupar el lugar
de Dios; la persona se mueve bajo sus propias motivaciones egoístas y materiales. La
búsqueda del placer y la acumulación de bienes materiales se convierten en la fuerza motriz
de la vida.
Como podemos ver, el Apóstol no uso de ningún antifaz o disfraz para ocultar la avaricia
ya que su servicio no estaba motivado por ningún deseo de avaricia, sino por amor por el
Señor y por las almas perdidas y por lo tanto había sinceridad y transparencia en su servi-
cio.
Es probable que pablo haga aquí una exposición exhaustiva para hacer notar que no busca-
ba ningún tipo de gloria humana. Se podría bosquejar de esta manera:
Es muy triste notar como muchas personas son capaces de negar la sana doctrina por amor
al prestigio humano, para quedar bien con los hombres, recibir reconocimiento y aplausos
humanos, pueden perder la gloria de Dios a cambio de la exaltación humana. No es extraño
que muchos caigan en lo que dijo Jesús: «Habéis invalidado la palabra de Dios por vuestra
tradición, enseñando como doctrinas mandamientos de hombres» (Mateo15:6-9; Tito1:14)
El apóstol usa la metáfora de una madre tierna que cuida a sus hijos con dedicación y ternu-
ra para dar a entender la calidad de servicio que estaba desempeñando con la iglesia.
La dedicación, el cuidado o esmero en el servicio, así como también el amor con el que uno
haga el trabajo es de vital importancia en el momento de la prueba o falsas acusaciones.
«El obrero cristiano necesita tener una conducta que sea más elocuente que sus palabras y
palabras que vayan de acuerdo con la conducta». No podemos ser incoherentes en nuestro
servicio a Dios, de otra manera se puede dañar la obra de Dios por causa del mal testimonio.
«Podemos hacer mucho y no hacer nada a la misma ves, cuando hay incoherencia entre la
vida y el servicio o entre las obras y la lengua».
7
k) El servidor cristiano es sacrificado en su obra (2:8)
El amor por las personas que uno sirve debe ser tal que nos conduzca a obrar con sacrificio
en pro del bienestar de las almas. El deseo profundo del Apóstol Pablo era ver a la gente
salva y produciendo fruto.
En la vida y en el servicio cristiano siempre debemos estar dispuesto a la entrega y también
al sacrificio, en ocasiones debemos invertir tiempo, esfuerzo, negación de sí mismo y hasta
dinero para poder ser de bendición a otros. «Cuando se ama las almas, ningún sacrificio es
demasiado grande y ningún servicio es demasiado costoso»
Pablo apela a la memoria de la iglesia para que recordaran de qué modo había trabajado du-
ro; la palabra que usa Pablo es kopos que quiere decir trabajo esforzado y doloroso
involucrando un profundo cansancio. Como si fuera poco lo que expresa con esta palabra
usa el término mocthos que involucra la fatiga penosa producida por el arduo tra-
bajo. El obrero cristiano nunca debe darse por vencido, no debe ser un flojo o perezoso.
(Vea 2 Corintios 11:27; 2 Tesalonicenses 3:8)
Debemos recordar también, que en algunas ocasiones Pablo hacia tiendas para ganarse la
vida por causa de la crítica de otros. En otras ocasiones recibía salario y ofrendas; vea lo si-
guientes textos por favor: (Lucas 10:7; Hechos 18:1-3; 1Corintios 9:6-15; 2 Corintios 11:8-
9; Gálatas 6:6; Filipenses 4:14-16; 1Timoteo 5:17-18)
Es interesante notar que Pablo vuelve a poner a Dios y ahora añade a la iglesia también co-
mo testigo de su conducta. ¡Qué ejemplo para nosotros! Debemos notar que Pablo habla en
plural involucrando a los hermanos que andaban con él. Veamos como era su conducta:
La palabra griega que se usa aquí es josios indica «limpio de mala conducta y ob-
servante de la voluntad de Dios» (Vine). Esto es en realidad un comportamiento ejemplar
que solo puede ocurrir cuando hay amor por las almas.
La palabra que Pablo usa para justo es dikaios que significa rectamente, justa-
mente, de acuerdo con Dios y sujeto a las normas divinas. Solo el justificado puede practicar
la justicia divina, puesto que la persona no regenerada nunca podría vivir de acuerdo con esa
8
Justicia ya que se necesita un poder superior dentro de uno para eso, el cual es el Espíritu
Santo. Una vez justificada la persona, ya perdonada y lavada por la sangre de Cristo, cada
creyente se encuentra en la posición de poder practicar la justicia de Dios y vivir de esa ma-
nera de acuerdo con sus normas.
Podía exhortar porque tenía un testimonio de conducta y de palabra detrás que los respalda-
ba (1Corintios 4:6; Filipenses 3:17); podía consolar porque tenía experiencia con Dios
(2Corintios 1:4); podía encargar a otros que se comportaran como es digno de Dios porque
él lo estaba haciendo (2 Tesalonicenses 3:7-9).
La iglesia del Señor necesita en este tiempo personas comprometidas con la vida y la con-
ducta cristiana a tal punto que pueda alumbrar en este mundo de tinieblas. Se necesita servi-
dores coherentes, comprometidos con Dios, y dispuesto a mostrar a Cristo en su vida.
Los Tesalonicenses recibieron la palabra con solicitud porque salía de un vaso digno y pu-
dieron reconocer que no era una palabra cualquiera, sino la Palabra de Dios. Pablo usa dos
palabras distintas de suma importancia en el griego para hablar de recibir; la primera es pa-
ralambano que significa recibir auditivamente en este contexto y la se-
gunda es decomai que significa recibir en el corazón, es una recepción delibera-
9
da y bien dispuesta de aquello que es ofrecido (Vine). El apóstol estaba agradecido a Dios
de la receptividad que tuvo la palabra de Dios en la iglesia. Es obvio, que cuando el mensaje
es transmitido por un servidor de Dios que está respaldado por una conducta coherente con
el evangelio; un vocabulario en armonía con la santidad de Dios y una actitud y servicio mo-
tivado por el amor de Dios, no puede ser sino eficaz y eficiente esa clase de servicio.
Pablo finaliza este texto diciendo que la palabra de Dios actúa, obra, opera o trabaja en no-
sotros cuando es oída con atención y aceptada con determinación en nuestro corazón.
Conclusión
Para conferencias, seminarios, cursos bíblicos o algún comentario comuníquese a la siguiente direc-
ción electrónica:
sanchezras@hotmail.com
ministeriodegracia@gmail.com
10