Está en la página 1de 6

Declaración de Fe Doctrinal
Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones…; enseñándoles que guarden to-
das las cosas que os he mandado… (Mateo 28:19-20)
Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los maltrata-
dos, como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo (Hebreos 13:3)

Fundado Únicamente Para la Gloria de Dios

Pastores Dr. Cristian Hernán Acevedo Romero y María


Adela Martínez de Acevedo
Visión y Misión

La visión del Ministerio Cristiano y Misionero Valle de Beraca es…

➢ Iglesia Cristiana y Misionera Valle de Beraca


➢ Ministerio Carcelario Valle de Beraca
➢ Capellanía Carcelaria, Hospitalaria, Institucional, Empresarial y otras afines
➢ Instituto Bíblico Valle de Beraca físico y online
➢ Universidad Cristiana y Misionera Valle de Beraca
➢ Periódico Misionero Valle de Beraca
➢ Revista Misionera Valle de Beraca electrónica y física
➢ Fundación cristiana Valle de Beraca

La Misión de este Ministerio es…

Declaración de Fe Doctrinal

La siguiente declaración doctrinal es generalizada para los fines debidos y


no entra en los detalles teológicos e interpretativos

El Ministerio Cristiano y Misionero Valle de Beraca se adhiere firmemente a las siguientes Doctrinas
Bíblicas Fundamentales:

1- La inspiración verbal y plenaria de la Sagradas Escrituras

Creemos que la Biblia en su totalidad, compuesta por el Antiguo y Nuevo Testamento es Inspirada por
Dios y la única norma de fe y conducta del cristiano (2Timoteo 3:16-17; 2Pedro 1:19-21).

2- Creemos en un solo Dios verdadero existente en tres personas: El Padre, El Hijo y El Espíritu Santo

Esto incluye nuestra creencia bíblica en la Trinidad lo cual significa que no son tres dioses, sino un solo
Dios verdadero existente en tres personas iguales en naturaleza y esencia.

a) El Padre es Dios (Genesis 1:1; Isaías 42:8; 43:11; Juan 1:1, 18; 3:16)
b) El Hijo es Dios (Mateo 28:19; Juan 1:1, 14, 18; 8:58; 10:30; Tito 2:13; 2Pedro 1:1)
c) El Espíritu Santo es Dios (Mateo 28:19; Juan 14:16-17; Hechos 5:3-4)

3- El hombre caído y su redención

Creemos que el hombre fue creado a la imagen de Dios, bueno y santo. Sin embargo, el hombre incurrió
voluntariamente en el pecado, y, por consiguiente, se hizo merecedor de la muerte física y la muerte

2
espiritual, la cual es separación de Dios. La única esperanza del hombre es la redención por medio de
Jesucristo, el Hijo de Dios. (Génesis 1:26-31; 3:1-7; Romanos 5:12-21)

4- La salvación del ser humano

a) Condiciones para la salvación

Creemos que el hombre es salvo mediante la fe, por gracia y por Jesús; esto significa que la gracia de
Dios se ha manifestado para la salvación de todos los hombres por la predicación del Evangelio mediante
la fe en el sacrificio de Cristo y el arrepentimiento de sus pecados. El hombre es salvo por la obra de
regeneración y renovación del Espíritu Santo, y siendo justificado por la fe llega ser heredero de Dios
según la esperanza de la vida eterna (Juan 1:12; 3:3,7; Tito 2:11; Romanos 3:23-25; 5.1-2; Lucas
24:47; Tito 3:5-7).

b) Las evidencias de la salvación

Creemos que la evidencia interna de salvación en el creyente es el testimonio directo del Espíritu Santo
(Romanos 8:16). La evidencia para todos los hombres es una vida de rectitud, frutos de santidad (Ro-
manos 6:22; Efesios 2:10; 1 Pedro 1:13-16), y el fruto del Espíritu Santo, lo cual es el carácter que una
persona nacida de nuevo debe tener (Juan 3:3, 7; 2Corintios 5:17; Gálatas 5:22-23)

5- El bautismo en agua

Creemos en el bautismo por inmersión en las aguas y que el mismo es un mandato escritural para todo
aquel que se haya arrepentido de sus pecados y haya creído de corazón en Cristo como su único y sufi-
ciente salvador. Creemos que es un acto simbólico de la limpieza del corazón que ya ocurrió al aceptar a
Cristo como salvador y por medio del bautismo se hace una declaración ante el mundo entero de que el
hombre como persona “murió” juntamente con Cristo y juntamente con Él resucitó para una nueva vida.
(Mateo 28:19; Hechos 10:47-48; Romanos 6:4; Hebreos 10:22)

6- El bautismo en el Espíritu Santo

Creemos firmemente en la promesa del Padre: el bautismo en el Espíritu Santo, revelada a través de
Jesús, la cual es una investidura de poder sobrenatural para la vida cristiana y el servicio. Creemos en
hablar en otras lenguas, como el Espíritu Santo dirija a cada persona, como la evidencia y señal de dicho
bautismo. Todos los creyentes cualifican para recibir esta promesa, pero deberán buscarla seriamente y
ardientemente esperarla. Esta tremenda experiencia personal es diferente y subsiguiente a la salvación y
está disponible para todos los creyentes verdaderos (Lucas 11:13; 24:49; Hechos 1:4, 8, 2:4; 19:4-6).

7- Los dones del Espíritu Santo

Creemos en la manifestación de los dones del Espíritu Santo en la Iglesia. Estos dones son habilidades
sobrenaturales impartidas por el Espíritu Santo a los creyentes para la obra del ministerio y la edificación
de la Iglesia de Dios. La manifestación de los dones debe ser practicada y ejercida en la Iglesia para

3
edificación, exhortación y consuelo según la enseñanza bíblica (1 Corintios 12; Romanos 12:6-8; 1
Corintios 14).

8- La cena del Señor

Creemos que el Señor Jesús nos ordenó participar de la Cena del Señor, una conmemoración y recorda-
torio de la pasión y muerte de Cristo en la cruz del Calvario, y una proclamación de nuestra fe en la
profecía que anuncia su venida. Es un acto simbólico y consiste de los siguientes elementos: el pan y el
fruto de la vid. La Santa Cena deberá ser administrada solo a creyentes verdaderos luego de un autoexa-
men y conscientes de las consecuencias de participar indignamente de este mandato del Señor a su iglesia
(Mateo 26:26-29; 1 Corintios 11:23-26).

9- La santificación

Creemos que es la voluntad de Dios la santificación de todos los creyentes. Las Sagradas Escrituras
enseñan una vida de santidad “sin la cual nadie verá al Señor”. Con el poder del Espíritu Santo y la gracia
de nuestro Señor Jesucristo seremos capaces de obedecer el mandato: “Sed santos porque yo soy santo”.
Dicha santificación implica una separación total del pecado y de la mundanalidad, y una consagración a
Dios que abarca todas las áreas de nuestro ser. Por tanto, todo creyente debe caminar diligentemente y
en obediencia a la Palabra de Dios (1 Tesalonicenses 4:3; Hebreos 12:4; 1 Pedro 1:15-16; 1 Tesaloni-
censes 5:23-24; 1 Juan 2:6; 2 Corintios 7:1; Juan 17:17).
La santificación verdadera tiene dos aspectos:
a) La santificación posicional e instantánea
Cada persona que acepta a Cristo como salvador de todo corazón, en ese momento es limpia de todo
pecado y una persona apartada por Dios y por lo tanto es santa (1Corintios 1:2; 6:11)
b) La santificación practica y progresiva
A partir del momento de aceptar a Cristo como salvador personal, ese creyente debe progresar a medida
que va conociendo la voluntad de Dios revelada en su Santa Palabra; este progreso en la santificación
practica será mientras estemos en esta tierra (2Corintios 7:1; Hebreos 12:14; 1Pedro 1:14-23).
10- La iglesia y su misión
La Iglesia es el cuerpo de Cristo, la morada de Dios por el Espíritu Santo, con el encargo divino de llevar
a cabo su gran comisión. Todo creyente, nacido del Espíritu Santo, es parte integral de la iglesia (Efesios
1:22-23; 2:22; Hebreos 12:23)
Siendo que el propósito de Dios en relación con el hombre es buscar y salvar lo que se había perdido
(Lucas 19:10), ser adorado por el ser humano (Juan 4:23-24) y edificar un cuerpo de creyentes a la
imagen de su Hijo (Efesios 4:11-16), la principal razón de ser del Ministerio Cristiano Valle de Beraca
es: a) La evangelización nacional e internacional (Marcos 16:15); b) Hacer discípulos a todas las nacio-
nes (Mateo 28:19-20); c) Capacitar a los santos para la obra del ministerio (Efesios 4:11-16); d) Capa-
citar lideres y ministros nacionales e internacionales (2Timoteo 2:2, 15).

4
11- Los dones ministeriales
Creemos en los dones ministeriales dados por Dios; esto es, personas llamadas por Dios para desempeñar
un ministerio específico en la iglesia (Efesios 4:11-16). En cuanto a los apóstoles, creemos que hoy no
hay apóstoles siendo que dicho ministerio era para fundar la iglesia naciente y recibir la revelación del
Nuevo Testamento (Efesios 2:20); siendo el Apóstol Pablo el ultimo (1Corintios 15:8-10). Hoy nadie
puede cumplir con los requisitos bíblicos para ser llamado apóstol (Hechos 1:21-22). En cuanto a los
profetas, creemos que hablan para la edificación, exhortación, y consolación (1Corintios 14:3); pero no
creemos en ninguna nueva revelación doctrinal fuera de la biblia. La revelación doctrinal fue recibida en
los tiempos de la iglesia del Nuevo Testamento (Efesios 2:20); los demás ministerios de evangelistas,
pastores y maestros asi como los otros ministerios revelados en la palabra de Dios siguen vigentes hoy
por necesidad de que iglesia cumpla con la gran comisión en el mundo y dichos creyentes sean edificados
en la fe conforme a la Palabra (Mateo 28:18-20; Romanos 12:4-8).
12- El arrebatamiento de la iglesia
Creemos en el arrebatamiento de la iglesia que ocurrirá en cualquier momento y en forma repentina antes
que comience la gran tribulación (1Corintios 15:51-52; 1Tesalonicenses 4:13-18); también llamada la
esperanza bienaventurada (Tito 2:13).
13- La gran tribulación
Creemos que después del arrebatamiento de la iglesia comenzara la gran tribulación (Mateo 24:21),
también llamada tiempos de angustia para Jacob (Jeremías 30:7); la semana setenta de la profecía reve-
lada a Daniel (Daniel 9:24-27); la ira venidera (1Tesalonicenses 1:10); la hora de la prueba que ha de
venir sobre el mundo entero (Apocalipsis 3:10).
14- La segunda venida de Cristo en gloria
Creemos que la venida de Cristo en gloria pone fin a la gran tribulación con la batalla de Armagedón
según la revelación bíblica (Apocalipsis 19:11-21); inmediatamente después de la venida en gloria del
Señor será el juicio de las naciones (Mateo 25:31-46) y también de Israel (Mateo 19:28).
15- El milenio
Creemos que cuando Cristo venga en gloria establecerá un reino terrenal por mil años donde se cumplirá
los pactos de Dios con su pueblo Israel (Isaías 2:4; 9:4-7; 11:6-9; 33:5-6; Apocalipsis 20:1-7).
16- La condenación eterna en el infierno
Creemos que aquellas personas que rechazaron la verdad de Dios y se revelan contra ella, recibirán una
condenación eterna en el infierno preparado para el diablo y sus ángeles (Mateo 25:41); aunque Dios no
quiere que nadie se pierda sino que todos precedan al arrepentimiento (2Pedro 3:9); y manda a todas la
humanidad que se arrepienta (Hechos 17:30); pero los que no quieren arrepentirse del pecado y aceptar
a Cristo como salvador personal serán juzgado y lanzado al lago de fuego (Apocalipsis 20:11-15).
17- La eternidad
Al finalizar los mil años Satanás que había sido atado, será suelto para probar nuevamente a las naciones
(Apocalipsis 20:1-10) y el Señor pondrá fin y hará cielos nuevos y tierra nueva (2Pedro 3:10-13). Un

5
estudio del programa profético de Dios nos enseña que el día del Señor abarca todo el programa de Dios
desde la gran tribulación hasta el estado eterno (Apocalipsis 22:1-5).
18- El matrimonio
Creemos que el matrimonio es una institución divina (Genesis 1:26-28; 2:18-25), compuesto de un hom-
bre y una mujer (Genesis 2:21-25) y de esa manera perpetuar la raza humana y formar la familia donde
nacen hijos como fruto de ese amor en el matrimonio y los niños nacidos del matrimonio tienen un padre
varón que los engendro y una madre mujer que los dio a luz (Proverbios 23:22). Dios ordena honrar al
padre y a la madre (Éxodo 20:12; Mateo 15:4-6) y manda a los hijos obedecer a sus padres en el Señor
(Efesios 6:1-4). No creemos ni aprobamos matrimonios homosexuales los cuales son condenados por
Dios en su Palabra (Levítico 20:13); se condena tanto el lesbianismo como el homosexualismo porque
altera el orden de la naturaleza y es una perversión del plan original de Dios para formar la familia
(Romanos 1:26-27). Dios tiene dicha relaciones homosexuales como abominación (Levítico 18:22); So-
doma, Gomorra y ciudades vecinas quedaron como ejemplo del juicio de Dios por causa de la perversión
sexual al punto que hasta el día de hoy se conoce las practicas homosexuales como «practicar la sodo-
mía», «sodomizar» y a la persona se le conoce como «sodomita» (Génesis 19:1-30; 1Reyes 14:24;
22:46; 1Timoteo 1:10);los sodomitas no entraran en el reino de Dios si no se arrepienten y nacen de
nuevo, Dios quiere y esta dispuestos a salvarlos (1Corintios 6:9-11); pero los que no quieren abandonar
la perversión del homosexualismo solo les queda el juicio (Judas 1:7).
Honramos a las autoridades civiles, policiales, militares y cualquier otra autoridad gubernamental y tam-
bién oramos por ellos (Romanos 13:1-8; 1Timoteo 2:1-6); pero, cuando las autoridades van en contra
de lo que Dios estableció, nos es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres (Hechos 4:19; 5:29).

También podría gustarte