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UNIVERSIDAD RURAL DE GUATEMALA

FACULTAD DE CIENCIAS NATURALES Y DEL AMBIENTE

INGENIERIA AGRONOMICA

SAN PEDRO CARCHA 060

JOSUE ISAI CHINCHILLA JUAREZ 150600013

9No. SEMESTRE 2019

ING. CARLOS RENE CAAL CHOCOOJ

MAQUINAS Y MOTORES

TEXTO PARALELO SEGUNDO AVANCE

SAN PEDRO CARCHA ALTA VERAPAZ 10 DE MARZO DE 2019


SEMANA 7 Y SEMANA 8

EL TRACTOR AGRICOLA I Y II

Principales tipos de tractor agrícola

El tractor es una herramienta fundamental y, a día de hoy, insustituible en el


desempeño de tareas agrícolas pero, ¿conoces los diferentes tipos de tractor agrícola
que existen?

Allá van algunos de los principales criterios según los cuales podemos clasificar las
diferentes clases de tractor que podemos encontrar en el mercado.

Tipos de tractor agrícola según el tipo de tracción

Tractores agrícolas de tracción simple

Son aquellos tractores que poseen tracción únicamente en las ruedas traseras, dejando
la dirección para las ruedas delanteras.

Tractores agrícolas de tracción asistida

Se trata de aquellos tractores que poseen tracción en ambos ejes (delantero y trasero)
y dejan la función directriz para el eje delantero. En este caso las ruedas delanteras
son de menor tamaño que las traseras.

Tractores agrícolas de doble tracción

La doble tracción significa que cuenta con tracción en las ruedas delanteras y traseras.
La diferencia con los tractores agrícolas de tracción asistida es que, en este caso, las
ruedas delanteras y traseras poseen el mismo diámetro.

De esta manera se logra un rendimiento superior con un importante ahorro en


combustible, además de lograr una mayor potencia y menores riesgos de que las
ruedas patinen.

En definitiva, cuanto más grandes son las dimensiones del terreno a trabajar, más
factible resulta la adquisición de un tractor de doble tracción.
Tipos de tractor agrícola según su sistema motriz

Tractor general

Se trata del típico tipo de tractor que se nos viene a la mente con ruedas delanteras de
menor tamaño y ruedas traseras más grandes. Se emplean sobre todo en tareas de
arrastre de remolques y herramientas específicas para labrar y sembrar los terrenos.

Tractores agrícolas articulados

Los tractores articulados poseen 4 ruedas de igual tamaño y disponen de un tren motriz
articulado que mejora la capacidad de maniobrar a la hora de desempeñar tareas en el
campo.

Su elevada potencia les permite recorrer mayores distancias a una velocidad superior,
lo cual compensa su menor capacidad de tracción en terrenos irregulares y
complicados, para los que los tractores de oruga resultan de mayor utilidad.

Tractores agrícolas de oruga

Los tractores de orugas se caracterizan por no tener ruedas sino eslabones rígidos
rodeados por un cinturón flexible. Este tipo de tractores facilitan enormemente la
actividad agrícola en terrenos pequeños con grandes pendientes, blandos e irregulares
ya que su sistema motriz le aporta una mayor capacidad de tracción y un centro de
gravedad bajo.

Tipos de tractor agrícola según su potencia

Tractores agrícolas de categoría 1 (potencia entre 15 y 40 caballos)

Son aquellos tractores de menor tamaño y potencia diseñados especialmente para


realizar tareas de jardinería o funciones agrícolas muy básicas.

Tractores agrícolas de categoría 2 (potencia entre 40 y 120 caballos)

Podríamos decir que es el tipo de tractor más habitual ya que poseen la potencia
suficiente para arrastrar remolques y otro tipo de herramientas, que son las tareas más
comunes.

Tractores agrícolas de categoría 3 (potencia entre 120 y 200 caballos)


Los tractores agrícolas con una potencia comprendida entre 120 y 200 hp son menos
utilizados que el tipo anterior y se emplean para tareas específicas en las que se
requiere mayor potencia de lo normal.

Tractores agrícolas de categoría 4 (potencia >200 caballos)

Son los menos habituales, ya que generalmente no se requiere de una potencia tan
elevada. Especialmente pueden ser empleados en terrenos muy accidentados y donde
se precisa de una gran capacidad de arrastre.

Podríamos seguir clasificando los tractores según infinidad de criterios como la tarea
agrícola o cultivo para los que están diseñados, la posición del sistema de dirección y
muchos otros, pero consideramos que estas son las clasificaciones que mejor
segmentan los diferentes tipos de tractores.

TRACTORES SEGÚN SU TREN MOTRIZ:

Además del tractor monocultor, que sigue dependiendo de la tracción humana o


animal para laborar en parcelas pequeñas y horticultivos, podemos distiguir 3 tipos de
tractores:

1. Tractor general:

Son los más frecuentes en el campo, común verlos con sus llantas delanteras
pequeñas, se utilizan para trabajos de arrastre, labrado, siembra y manejo de
suplementos o accesorios articulados. Los podemos encontrar en un par de gamas, la
de tracción simple con ruedas direccionales y con tracción doble, que con sus ruedas
delanteras les permite abrirse paso en caminos complicados.

2. Tractor articulado:

En estos equipos encontramos las cuatro ruedas de igual tamaño, son para labores que
demandan más potencia y su tren motriz está articulado para brindar maniobrabilidad
en sus actividad

3. Tractor de oruga:

Las orugas no son ente exclusivo de las actividades muevetierra, aunque no son los
más populares o demandados y sí de los más costosos, los podemos ver poniendo
orugas a la obra en tierras suaves o removiendo troncos.
TRACTORES SEGÚN LA POTENCIA

Por otra parte, también la potencia juega un papel importante en la clasificación de


los tractores, en ese caso podemos hacer una categorización según la potencia del
equipo agrícola.

 Tipo 1

Tractores con potencia de 15 a 40hp, más comunes para hortalizas, sembradíos


florales y jardines.

 Tipo 2

Aquí encontramos a los equipos de 41 a 120hp, el más común para la actualidad,


donde se promedia 80 caballos de fuerza y al que se le adecúan aditamentos y
transporte de suplementos.

 Tipo 3

Tractores arriba de los 120 y hasta los 200hp, de uso no tan extendido y para
actividades muy específicas.

 Tipo 4

Para actividades verdaderamente demandantes y con una potencia superior a los


200hp, dispuestos a entrarle a terrenos accidentados y darle arrastre a todo tipo de
aditamentos.

Definición de tractor

Los tractores vienen siendo máquinas especialmente equipadas para excavaciones de


tierra en muchos proyectos de construcción, así como el empuje de tierras que
convierten la energía del motor a energía de tracción.
De los elementos con que puede dotarse un tractor, los más importantes y que los
llevan montados la mayoría, destinadas para movimiento de tierra son:
Hoja de empuje u hoja topadora.
Ripper o desgarrador.
Tipos de tractores de acuerdo a su rodadura
Tractor de cadenas o también llamado tractor de orugas
Cuando no se necesitan altas velocidades pero si una buena tracción.
Tipos de tractores, sus usos y funcionamiento
Tractor enllantado
Mayor velocidad, mayor distancia y que no se necesita mucha tracción.
Tipos de tractores, sus usos y funcionamiento
Clasificación basada en el método de levantar y bajar la cuchilla
Controlados por cable.
Hidráulicamente.
Operaciones en que se utilizan los tractores
Los tractores son máquinas versátiles en muchos proyectos de construcción, en donde
pueden utilizarse desde el principio hasta el fin en operaciones tales como:

Limpieza del terreno de árboles.


Abertura de brecha entre montes y terrenos rocosos.
Movimiento de tierra para distancias de acarreo hasta de aproximadamente 100
metros.
Para servir de empujadores a mototraíllas.
Esparcimientos de rellenos de tierra.
Para rellenado se zanjas.
Limpieza de escombros en los sitios de construcción.
Mantenimiento de los caminos de acarreo.
Remoción de derrumbes.
Construcción de taludes.
El movimiento hacia delante de un tractor está limitado por los siguientes factores
La potencia desarrollada por el motor y disponible como tracción en la basura o como
Rimpull.
La resistencia al rodamiento del camino de acarreo.
El peso del tractor y de su carga.
La pendiente por subir.

Clasificación de acuerdo a su hoja topadora

Bulldozers: se montan con las cuchillas perpendiculares a la dirección del avance.


Empujan la tierra hacia adelante.
Angledozers: se montan con las cuchillas formando un ángulo con la dirección del
avance. Empujan la tierra hacia adelante y a un lado.
La hoja topadora de los tractores es un elemento principalmente estructural de acero
reforzado que tiene la finalidad de portar las herramientas de corte y el blindaje, la
cual se encuentra todo el tiempo en operación de empuje y corte, por lo que su
exigencia al desgate y la deformación es constante.

Bulldozers
Cuya hoja de empuje frontal esta fija al chasis del tractor mediante unos largueros y
unos cilindros hidráulicos, quedando esta perpendicular al movimiento de la máquina.
Empujan la tierra hacia adelante.

Angledozers
Cuya hoja es más larga y baja y al no quedar fijada al chasis posee un movimiento
extra con lo que se puede colocar la hoja en ángulo con respecto a la dirección de
movimiento de trabajo. Empujan la tierra hacia adelante y a un lado.
El principio de funcionamiento de las hojas consiste en desplazar la tierra o material
a mover mediante una cuchilla, solidaria con la máquina, que es accionada por el
empuje de esta.
Fases de trabajo de las topadoras
Fase productiva: que se compone de excavación y empuje.
Fase no productiva: que comprende el retorno a la posición inicial.
Rendimiento de los tractores (empuje)

Desgarradores
Los desgarradores forman un conjunto con la máquina y vienen montados en la parte
posterior y su manejo se realiza mediante un control hidráulico sumamente eficaz y
rápido, para aplicar presión hacia arriba o hacia abajo. El objeto principal de los
desgarradores es el de facilitar la rotura del terreno, ya que la gran superficie de la
hoja de empuje impide esta rotura en terrenos difíciles.

Principales componentes de que consta un desgarrador


Barra porta brazos.
Abrazaderas o soportes.
Brazos o vástagos.
Punta.
Variedad de labores para lo que son usados los desgarradores
Romper y destrozar caminos de tierra para facilitar su posterior re nivelación por
medio de Motoniveladoras y hojas topadoras.
Romper caminos de asfaltos, para su posterior renovación.
Aflojar terrenos, para facilitar la nivelación o la remoción de tierra.
Romper capas duras, impermeables.
Aflojar el sub suelo.
Cortar las raíces de árboles grandes, para facilitar su posterior tumbado con la hoja
topadora del tractor.
Estimación del rendimiento con desgarrador
Hay 3 métodos principales de estimar la producción con desgarradores
Secciones transversales en las zonas, y registrar el tiempo invertido en el
desgarramiento. Después de retirar el material, deben hacerse otra vez secciones
transversales, para hallar el volumen del material movido, el volumen dividido por el
tiempo invertido en desgarrar es la tasa de desgarramiento en m3/hora.
Otro método es registrar el tiempo invertido en desgarrar y contar las cargas de traíllas
durante un periodo tiempo; estimando la carga media por unidad de acarreo, se
obtendrá el rendimiento en m3/hora.
El usado frecuentemente es estimar una velocidad media en Km/hora en una distancia
medida, el número de pasadas por hora, la distancia entre pasadas y la profundidad
promedio.
Desgarrador con vástagos múltiples
El desgarrador en paralelogramo de vástagos múltiples permite seleccionar uno, dos
o tres vástagos, dependiendo de las condiciones de la obra.

Fases del ripiado (escarificado con desgarradores de tractor de cadena)


Hincado.
Penetración.
Desgarro.

SEMANA 9
MAQUINARIA PARA LABRANZA

La Labranza es la remoción de la capa vegetal del suelo, que se realiza antes de la


siembra, para facilitar la germinación de la semilla y el crecimiento, desarrollo y
producción de la planta cultivada. Así mismo permite el control de malezas y busca
el mejoramiento de las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo.
Existen 2 tipos de Labranzas: La labranza Primaria y La Labranza Secundaria

La Labranza Primaria
Consiste en una remoción del suelo en toda su profundidad, con el propósito de
mejorar mecánicamente la estructura del suelo mediante el arado, para el desarrollo
de las raíces. Estas operaciones se hacen a una profundidad de 20 a 25 cm,
dependiendo principalmente de la textura del suelo. La Labranza primaria facilita el
drenaje del suelo y mejora la capacidad de retención del agua y del aire. Ésta debe
hacerse por lo menos un mes antes de la siembra, con el fin de permitir la
descomposición de los residuos de la cosecha anterior

Los 6 Implementos con los que puedes realizar La Labranza primaria

1. Arado de Cincel
Consta de una determinada cantidad de arcos de acero separados a 35 cm, uno de otro.
Este implemento opera a una profundidad entre 18 y 25 cm, y a una velocidad
relativamente alta parar que la vibración de los arcos ayude a descompactar el suelo
sin que se invierta la superficie del terreno. El arado de cincel puede ser aplicado en
terrenos duros a gran velocidad; destruye las capas compactadas permitiendo la
penetración de aire y agua, y se logra mayor crecimiento de raíces.

2. Subsolador
Este implemento opera por debajo de la capa arable sin voltear el suelo, especialmente
para su roturación (escarificación) profunda, descompactación, y facilita la aireación,
la infiltración del agua y penetración de las raíces.

3. Arado de discos
La función principal de este implemento agrícola es el volteo del suelo, permitiendo
un buen movimiento y aireación del mismo, incorpora los rastrojos a la superficie,
para su descomposición y desmenuza mejor los terrones de tierra, siempre que no está
demasiado húmeda.
4. Arado de vertedero
También llamado arado de vertedera y rejas, voltea el suelo para formar un canal que
facilite una mayor entrada de aire, mejor circulación de agua, y penetración de ésta
hasta capas más profundas. Cada reja se encarga del corte horizontal. La vertedera se
encarga del volteo de la banda del suelo cortado (como su nombre lo indica: verter).
La cuchilla, que puede estar o no, ayuda al corte vertical de la banda del suelo.

5. La fresadora
También llamado rotocultor, realiza tareas de desmenuzado del suelo, para dejarlo
esponjoso y pulverizado de una manera uniforme. Facilita el mantenimiento y la
aireación de los terrenos para sus posteriores labores de cultivo. Opera a una
profundidad máxima de 25 cm para ofrecer un estrato estructurado, idóneo para ser
cultivado.

6. Rotavator
Es un equipo que se utiliza para la remoción, picado e incorporación de los restos de
cosecha o rastrojos al suelo. Se utiliza para la preparación acelerada o más eficiente
del terreno. Es un implemento combinado y diseñado para reducir el trabajo en la
descompactación, subsolado y el control de malezas.

La Labranza secundaria
El objetivo principal de la Labranza secundaria es crear, en la capa superior de la
tierra, una zona con una estructura tal que permita la germinación rápida y uniforme
de las semillas, además de favorecer un crecimiento normal de la planta. El resultado
de la operación de Labranza secundaria depende, en gran medida, de la calidad de la
labranza primaria.
Luego de una aradura mal elaborada, es difícil ejecutar un buen trabajo de labranza
secundaria. Además la labranza secundaria no puede corregir lo que se hizo mal en la
labranza primaria. La Labranza secundaria incluye todas las operaciones después del
arado, como el refinamiento y nivelación del suelo para la siembra, y después de la
siembra, para el control de malezas.
Los 3 implementos que necesitas para realizar La Labranza secundaria

1. La Rastra
La rastra se utiliza para la preparación del terreno en presiembra sobre labrado. Está
diseñada para deshacer la capa superficial del suelo, permitiendo una buena
germinación de la planta. Tiene una cuchilla trasera, con el fin de cortar la hierba y
uniformizar el terreno para la siembra.

2. Surcadora
Como bien claro lo indica su nombre, este implemento se utiliza para elaborar los
surcos, y sembrar aquellos cultivos que convienen ser sembrados bajo la modalidad
de surcos. Por ejemplo papas, hortalizas, entre otros. Este implemento ayuda a obtener
la forma perfecta del surco y propiciar un buen drenaje del terreno. El surcador puede
ser usado también para acollar los cultivos sembrados en hilera.
La surcadora ofrece buena adaptabilidad y permite el fácil ajuste de espaciado de
surco, así como su altura, filas y ángulo. Puede ser acoplado con tractores de diferentes
potencias. Este surcador se caracteriza por su fácil movimiento, tamaño y precisión
de proceso. Puede romper, pulverizar y surcar en un solo paso.

3. Sembradora
Claramente, se utiliza para sembrar. La sembradora lleva unas rejas delante de los
tubos por los cuales se distribuyen las semillas, que van a abrir los surcos en los que
éstas se depositan y luego son cubiertos con tierra por los, rodillos o gradas.

Aplicación del arado según el tipo de suelo


En el caso de suelos arcillosos es recomendable que la aradura se realice con una cierta
anticipación a la labranza secundaria y la siembra. Así se permitirá una granulación
natural, complementaria a la granulación por la aradura. Además la aradura temprana
permite la acumulación de agua en el perfil y previene la inmovilización del nitrógeno
en el suelo.
En el caso de suelos arenosos, livianos, éstos no requieren una granulación natural
complementaria. Tampoco es recomendable la aradura temprana debido a que su
estructura no es muy estable. Se debe arar en el momento más cercano a la época de
la siembra.

Hay condiciones adversas donde no se puede usar un arado de vertederas, como ocurre
en campos con raíces grandes y piedras, así como en terrenos duros y secos,
pedregosos o rocosos, en los que al girar el disco, franquea los obstáculos.

Labranza cero o siembra directa


Existe un tipo de laboreo del suelo conocido como cero Labranza o siembra directa.
O mejor dicho, es siembra sin laboreo de maquinaria; se siembra directamente, sin
aplicación de labranza. Sin embargo se deben hacer operaciones preliminares a la
siembra. El objetivo de estas operaciones preliminares es dejar el campo en el mejor
estado para el establecimiento de la semilla, germinación y desarrollo del cultivo.
La Labranza o preparación de las tierras agrícolas deben ser efectuadas en el orden de
sucesión mostrado en este artículo. Siendo que la aradura o Labranza primaria
representa la operación principal del mejoramiento de la estructura del suelo, es
esencial que se efectúe este trabajo de la mejor forma posible.
Las rastras de discos son equipos de labor secundaria principalmente. Aunque en
algunos lugares y ocasiones también se utilizan como equipos de labor primaria.

Su cometido es el de preparar la cama de siembra, no superando los 10 a 15 cm de


profundidad de trabajo.

Con el paso de la rastra de discos conseguimos picar y desmenuzar rastrojos, nivelar


el suelo de siembra y mezclar otros materiales como el estiércol.Su versatilidad las ha
colocado como equipos referentes en el mercado agrario. Aun teniendo algunas
características desfavorables, contrapesan a favor otras características, como por
ejemplo un menor consumo energético y menor tiempo del proceso de labor con el
implemento agrícola.

Por otra parte, las rastras de discos han cobrado fuerza en las labores primarias con
algunos cambios en el implemento agrícola, tales como discos con mayor diámetro y
peso para poder trabajar a mayor profundidad de laboreo primario y poder
descompactar y controlar las malezas.
Tipos de las rastras de discos

Por el tipo de enganche al tractor y según la disposición de los cuerpos:

Enganche al tractor.

 Integrales. Son aquellas que enganchan al tractor por tres puntos. Van
suspendidas en el transporte. Equipadas con discos de 50 kg. y su peso es
relativamente pequeño.
 De arrastre. Enganchan al tiro del tractor por medio de una barra de tiro. Estas
rastras de discos son mucho más pesadas y van equipadas con ruedas que sirven
para el transporte y dar la profundidad de labor. Las ruedas son controladas por
medio de un cilindro hidráulico.

Disposición de cuerpos.

1. Las de simple acción. Los cuerpos están dispuestos en forma de “V”. Trabajan
el suelo solo una vez por pasada. Los discos se oponen por sus lados convexos
equilibrando las fuerzas oponentes entre los mismos.
2. Doble acción o de tándem. Trabajan el suelo dos veces por cada pasada.
Provistas de cuatro cuerpos a forma de “X”. Los dos cuerpos delanteros trabajan
el suelo hacia afuera, mientras que los dos traseros lo trabajan hacia el interior.
En este tipo de implemento agrícola, queda una faja en el centro sin labrar, esto
se puede evitar descentrando los cuerpos delanteros y traseros o incorporando
otro brazo que trabaje el camellón.
3. Rastras excéntricas (offset) o tiro desplazado. Consta de dos cuerpos en
forma de “V”. El peso y el ángulo de ataque del implemento, son decisivos en
la profundidad de trabajo. La línea de trabajo delantera, sus discos trabajan
hacia la derecha, mientras que la línea trasera lo hace a la inversa. A
consecuencia de las fuerzas de resistencia que ofrece el propio suelo, la línea
de tiro a de estar desplazada hacia la izquierda de la rastra de discos.

Despiece y partes de las rastras de discos

 Enganche. Bien ya he comentado que este puede ser de dos tipos o bien de tres
puntos para ir suspendido el implemento o bien de tiro por medio de una barra.
 Con barra de tiro. Solo en los casos de rastras con ruedas para el transporte.
Engancharan al tractor por medio de esta barra.
 Estructura o chasis. Este es cuerpo del implemento agrícola donde van sujetos
todos los elementos del mismo, habitualmente suelen ser robustos para poder
soportar los esfuerzos a los cuales son sometidos.
 Discos. Estos son la propia herramienta de trabajo del implemento, tienen por
finalidad cortar, desterronar, pulverizar o mullir el suelo. Van montados sobre
un eje y separados por carretes. Existen discos de varias medidas y formas para
distintos tipos de labor.
 Carretes. Estas piezas van colocadas entre discos, sirven para mantener una
distancia constante entre ellos, existen carretes de diversas medidas según los
tipos de discos y tareas a desarrollar.
 Rodamientos o cojinetes. Son el punto de unión del eje de trabajo con el chasis.
Estos absorben parte de los esfuerzos axiales.
 Raspadores. Son los encargados de limpiar el material que queda pegado al
disco.

Profundidad de trabajo

Esta profundidad está determinada por varios factores del implemento, dependen
esencialmente de:

1. El ángulo de ataque de los discos, determinan en gran medida la profundidad.


A mayor ángulo, mayor es la profundidad, la resistencia del suelo obliga al
disco a profundizar de forma proporcional.
2. La presión ejercida por la línea de trabajo de los discos es otro factor
determinante en la profundidad de laboreo. En esta presión influyen el peso de
los discos, forma y filo y altura del enganche al tractor.
3. La velocidad de trabajo con el tractor, cuando esta velocidad aumenta
disminuye la profundidad de laboreo, por el contrario al disminuir la velocidad
aumenta la penetración. Podemos decir que la velocidad y la profundidad son
inversamente proporcionales.

La combinación de estos tres factores importantes determinara la profundidad y el


rendimiento del apero agrícola.

Consejos de mantenimiento

Limpieza del apero de los restos de materiales de trabajo como barro o rastrojos.

Conveniente guardar bajo techo y lijar y pintar cuando sea necesario para evitar la
corrosión por oxidación.

Revisar las uniones por soldadura y reparar las fisuras y posibles deformaciones del
chasis.

Sustitución de piezas muy gastadas o rotas por la labor desarrollada.


Reapriete de todos los tornillos y tuercas, sustituir aquellos que se hayan perdido
trabajando.

Engrase generoso de las piezas mecánicas como rodamientos, ejes…

Un rodillo, rolo o rulo es un apero empleado en agricultura para compactar el


terreno cuando la tierra está muy suelta preparándola para la siembra y desterronar en
caso de ser necesario. Hay diversos tipos de rodillos: liso, de listones, acanalado,
“Croskill”, “Cambridge”, etc.
El rodillo liso consta de dos o más secciones cilíndricas sobre un eje común montados
sobre cojinetes de superficies adecuadas. Los cuerpos del rodillo se construyen con
planchas de acero enrollado y sostenido por medios de radios; también de construyen
en hierro fundido.1
El rodillo de listones o “esqueleto” es similar al anterior, con la diferencia de tener
listones en lugar de una superficie cilíndrica lisa. Ambos rodillos también se suelen
usar para compactar la tierra después de una siembra, en caso de haber quedado
demasiado suelta, para que la semilla quede en buen contacto con el suelo.

Rodillando un terreno con un rodillo acanalado.


El rodillo acanalado en lugar de tener una superficie lisa es un conjunto de ruedas de
llanta cuneiforme que al operar deja surcos muy pequeños en el suelo. Su función
principal es desterronar el suelo, por lo que también se suele denominar rodillo
desterronador.2

Rodillo "Cambridge" o dentado para enganche de tres puntos.


Los rodillos “Croskill” y “Cambridge” son derivados del rodillo acanalado, con la
diferencia que entre las ruedas de llanta cuneiforme intercalan ruedas dentadas que
evitan el empastamiento de aquél cuando opera en suelos arcillosos húmedos. Ambos
se diferencian en que el “Croskill” tiene ruedas dentadas de diámetro más pequeño y
más angostas que el “Cambridge”, de ruedas dentadas de diámetro mayor que las
cuneiformes.
Los rodillos lisos también se empleaban antiguamente en las eras donde
se trillabanlos cereales, para apisonar y compactar el terreno.

Equipos para labores superficiales


La función básica de las labores superficiales es preparar la zona de semillas mediante
el uso de diversos tipos de implementos. El mullimiento del suelo, la nivelación, el
control de las malezas y la compactación necesaria para asegurar un buen
establecimiento del cultivo son sus objetivos fundamentales.
La agricultura moderna tiene una amplia gama de equipos para cumplir esta función,
entre los que se encuentran las rastras de discos, clavos, resortes, escardillos,
vibrocultivadores, rotofresadoras, rotovatores rastrones niveladores, niveladoras de
micro relieve, rodillos y otros.

a) Rastra de discos: Es una herramienta muy común en nuestro medio y ampliamente


difundida en toda el área papera. Es utilizada fundamentalmente para mullir el suelo
y controlar malezas en la zona de semillas. Existen dos modelos básicos que difieren
en la disponibilidad de los discos y los cuerpos del chasis: rastras de discos
desplazadas offset y rastras de discos tandem.

La «eficiencia» de la rastra de discos depende de varios factores:


• peso del equipo
• tamaño, concavidad, filo y ángulo de ataque (traba) de los discos
• velocidad de trabajo
• contenido de humedad del suelo.

Este equipo actúa cortando franjas angostas de suelo con desplazamiento lateral del
mismo para provocar su mullimiento. Además, cortan los residuos vegetales de la
cubierta en trozos de tamaño variable, según sean las dimensiones del equipo,
condición de suelo y la traba de los cuerpos de la rastra.
Con respecto al control de malezas, éste equipo actúa sobre las plántulas recién
emergidas, desarraigándolas para que el sol y el viento completen su destrucción.
También es posible utilizar este equipo para picar las praderas como labor previa a su
incorporación.
La rastra off-set es más eficiente por diseño y peso, razón por la cual se recomienda
su uso en Iabores de mullimiento de suelos pesados y para el picado superficial de los
rastrojos o cubierta vegetal. Con una rastra off-set pesada debidamente trabada
actuando sobre un suelo liviano, se puede realizar una labor profunda similar a una
aradura que sólo permite soltar el suelo sin invertirlo.
Debe tenerse especial cuidado en evitar el uso exagerado de estos equipos, puesto que
su agresividad afecta considerablemente la estructura del suelo, y su naturaleza
cortante multiplica las malezas de reproducción asexuada, como la chépica,
zarzamora y otras. No tiene justificación usar una rastra de discos para lograr el
mullimiento deseado, cuando se opera sobre suelos de textura franca de fácil
disgregación, por cuanto existen otros equipos de costos operacionales más bajos y de
mayor eficiencia y calidad de trabajo, como son las rastras combinadas de clavos y
rodillos, vibro-cultivadores y otros.

Rastras
Rastra offset

Rastra offset de tiro animal


b) Rastras combinadas:
Son equipos de gran efectividad para la adecuación de la zona de semillas. Salvo en
casos muy justificados, este equipo desplaza a la rastra de discos en toda su amplia
gama de trabajos, debido a su costo más barato y rendimiento superior. Su accionar
se basa en el principio de mínima labranza que postula la realización de varias labores
en una sola operación. Las rastras combinadas se ofrecen en las versiones con resortes
o vibrocuItivadores y con clavos rígidos. El uso de vibro-cultivadores se recomienda
para realizar labores un poco más profundas (10 cm.), en atención a su mayor
agresividad, pero ambos modelos cumplen satisfactoriamente con la misión de
acondicionar la zona de semillas.
El uso de rastra combinada, al igual que el arado, y como todos los equipos que actúan
en la zona de semillas mulliendo el suelo y controlando malezas, consiguen su mayor
efectividad cuando se desplazan sobre 8 km/ hora, lo que permite una gran capacidad
de trabajo. Otro diseño de rastra combinada recientemente incorporada a la agricultura
nacional es la rastra de clavos rotativos accionada por el eje toma fuerza del tractor.
Existen una gran variedad de diseños de la unidad roturadora, destacándose el sistema
de rotor de eje horizontal con clavos o azadas y el de clavos verticales giratorios y
oscilantes. La acción mecánica de gran fuerza que se ejerce sobre el suelo, otorga a
este equipo condiciones especiales para el mullimiento de terrones y picado de
praderas, especialmente bajo condiciones extremas (suelos arcillosos secos y praderas
densas y duras). A pesar que es la mejor herramienta disponible para picar las praderas
de gramíneas previo a su incorporación con las labores de preparación de suelos, no
es conveniente generalizar su uso, puesto que consume bastante energía motriz y
somete al tractor a un esfuerzo especial en su sistema de transmisión.
No se recomienda utilizar una roto fresadora para mullir suelos de textura liviana que
se disgregan fácilmente o para controlar malezas de reproducción por semillas que
recién emergen, puesto que una rastra combinada de clavos fijos o resortes y rodillos,
puede hacer esa labor a bajo costo y con gran rapidez, sin usar el eje toma fuerza del
tractor.

Esquema de retrofresadora de coronas rotativas


c) Rastras de resortes, clavos y rodillos:
Son también de gran utilidad para afinar la terminación de la cama de semilla. Las dos
primeras se usan preferentemente para controlar malezas en germinación en sus
primeras etapas de desarrollo. Al igual que las rastras combinadas, es deseable que
operen a altas velocidades para obtener un buen mullimiento del suelo y erradicación
de malezas. Los rodillos, ya sean lisos o corrugados, de acción superficial o
subsuperficial, buscan completar el mullimiento del suelo y compactar la cama de
siembra para darle la firmeza que necesita para soportar la unidad sembradora.
El mercado de maquinaria ofrece una gran variedad de equipos para Iabores
superficiales, tanto de tracción motriz como animal que permiten al usuario
seleccionar la herramienta en función a su disponibilidad de energía. En cuanto a los
tipos de rodillos más usados en nuestro medio, van desde los de madera, los metálicos
que pueden ser llenados con agua y los de acción combinada de rodillo pulverizador
con doble corrida de rodillos corrugados y una rastra de resortes entre ellos,
considerado un excelente equipo para destruir terrones y terminar el afinamiento de
la zona de semillas.

d) Niveladoras de micro relieve o rastrones:


Las niveladoras de micro relieve se utilizan por lo general para dejar el suelo en
condiciones que permita siembras de precisión como es el caso de remolacha. En el
caso de la siembra de papa se pueden utilizar rieles o rastrones para afinar la cama de
semillas al final de la preparación del suelo. Por lo general, se usan después de la
plantación para borrar el surco de siembra dejado por la máquina plantadora o para
compactar y alisar la superficie del suelo cuando la plantación se realiza manualmente.
Rastras y rastrones de tiro animal

Rodillos compactadores
SEMANA 10
MAQUINARIA PARA IMPLANTACIÓN DE CULTIVOS

MAQUINARIA AGRÍCOLA
Es la que se utiliza para labrar la tierra, plantar, cultivar y recolectar la cosecha. Desde
la antigüedad, cuando las civilizaciones comenzaron a cultivar plantas, el ser humano
ha empleado herramientas que le facilitaban las labores agrícolas. Todas las
maquinarias agrícolas mencionadas en este trabajo pueden ser de gasolina o de diesel
dependiendo del fabricante.

Motocultor
Los pequeños motocultores son conducidos a mano y son muy utilizados
especialmente por los horticultores y jardineros que los usan en parcelas pequeñas en
terreno. Estos cultivadores desempeñan en menos escala todas las faenas agrícolas
como: arar, sembrar y cultivar al igual que los tractores grandes con sus respectivos
equipos.

Cosechadora de algodón
En otros tiempos la cosecha del algodón se la efectuaba manualmente, como la
cantidad y el manejo de mano de obra, el rendimiento no era óptimo como se esperaba
y el tiempo que se requería era muy largo. Con este tipo de cosechadora se ha
suprimido estos problemas reduciéndolos al simple trabajo de calibrar la cosechadora
de acuerdo al tipo de terreno y de cultivo.

Supercultivador
Es una de las maquinarias agrícolas más sofisticadas y modernas, pues realiza a la
perfección todos los requerimientos de los sistemas mínimos de cultivo. Este
cultivador de una sola pasada en el suelo, tritura los residuos de la cosecha anterior y
prepara al mismo tiempo el terreno para la siguiente cosecha. Esta una máquina de
grande proporciones puede sembrar con precisión hileras de productos, además vierte
insecticidas en el suelo para posteriormente mediante un mecanismo de rodillos
aporcar la tierras sobre las semillas y pulverizar el suelo con herbicidas.
Aspersores aéreos
En grandes extensiones se dificulta la labor de fumigación por el medio terrestre, para
lo cual se han implementado aeronaves como avionetas y helicópteros que realizan
estos trabajos eficazmente. Podemos mencionar algunos beneficios que se consiguen
utilizando estos medios: no se maltratan los cultivos ni el suelo. La fumigación se
realiza con rapidez impidiendo la propagación de las plagas en la totalidad de los
campos. Es más eficaz en aquellos terrenos con obstáculos como cercas, canales de
riego, piedras, etc.
Todas estas razones hacen de estos aspersores los más indicados cuando se tienen
cultivos extensos que requieran optimización en sus resultados.

Cosechadora combinada
Las maquinarias modernas a menudo combinan actividades que facilitan y optimizan
las labores agrícolas. Dentro de estas máquinas se tienen la cosecha combinada, que
ofrece múltiples beneficios a los agricultores especialmente en los cultivos de cereales
pues integra las labores de corte, trilla, separación de impurezas, limpieza y empaque,
representando para el agricultor grandes ganancias, su tiempo y sus costos son
menores y su rendimiento por hectárea es muy alto.

Trilladoras de trigo
Trilladoras de trigo Con una acción mecánica de golpeado, las trilladoras separan las
semillas del trigo (grano) de la cascarilla y los tallos.
Para recolectar grandes raíces y tubérculos como las patatas o la remolacha azucarera
se utiliza maquinaria especializada. Otras máquinas especializadas son las
desmotadoras, que se utilizan para recolectar el algodón. Tienen unos pinchos que
giran, retuercen las fibras de algodón y las arrancan de las cápsulas; después se
deshacen las hojas por procedimientos químicos. Hay variedades de esta planta que
se recolectan con unas máquinas que cardan las fibras y las almacenan en un depósito.
Cada vez más se van desarrollando máquinas recolectoras más eficaces.
Para recolectar frutas y hortalizas se utilizan otras máquinas especiales. Por ejemplo,
las ciruelas, cerezas, nueces y albaricoques se recolectan agitando el árbol con una
máquina que lo rodea; los frutos caen a una estructura que los va acumulando.
Además, los agricultores hacen uso de la ingeniería genética para crear nuevas
variedades de frutos y hortalizas más resistentes que permitan recolectarlos con
máquinas sin dañarlos.

Tractor
Este tractor de ruedas equipado con una pala niveladora aplana la tierra para construir
una carretera. Los dos grandes tipos de tractores, los de ruedas y los de cadenas (o
tractor oruga), se emplean para realizar numerosas tareas en granjas, edificios o
industrias.

Cultivadoras
La cuchilla y la forma del borde cortante forman una restricción continua. El material
es rolado en el instante que empuja, esto a su vez produce menos dragado de material
y eficientiza la utilización correcta del caballaje del tractor, teniendo como resultado
menor consumo de combustible
La cuchilla terracera extra-alto, más el claro del bastidor, ayuda a la capacidad del
manejo de material para la productividad extra. Reversible, puede usarse para empujar
o tirar el material. Ideal para nivelar o mover tierra suelta. El ángulo de la cuchilla
terracera es ajustable mediante un proceso simple
La chaveta de seguridad es ajustable ahorra tiempo y no requiere de ninguna
herramienta. Ajuste descentrado ya que la cuchilla terracera puede desentrarse 45.7
cm a la izquierda o derecha (manual o hidráulico). Especialmente útil en las áreas
difíciles. Las cuchillas terraceras son ideales para trabajos de limpieza de corrales,
arrimar alimento a comederos, nivelación, jardinería y mantenimiento de caminos.

Segadoras
Están diseñadas específicamente para solucionar los requerimientos del profesional
del cuidado de áreas verdes y casas de alquiler. Un sólido bastidor de una pieza,
componentes de la tracción separados, pocas piezas móviles y un motor a toda prueba,
máquinas que producen sin cesar. PRODUCTIVIDAD: por encima de los 2.300 o
3.000 m²/hora, puede airear numerosas parcelas en un día.
Sembradoras
Cada elemento del tren de siembra fueron estudiado y diseñado para brindar una
máxima capacidad y obtener mayores rendimientos operativos:
1) Accesorio para doble fertilización: El disco doble muescado posee gran capacidad
de penetración y corte del rastrojo.
2) Rueda tapadora: Según el tipo de suelo y de rastrojo, coloca la semilla en una cama
de siembra firme, en contacto con el suelo húmedo.
3) Control de profundidad trasero: El brazo soporte de ruedas tapadoras ofrece dos
alternativas de control – trasero y lateral.
4) Rueda lateral: Limitadora de profundidad, controla que las semillas queden
depositadas a la misma profundidad.
5) Doble disco: Forma un surco angosto sin producir compactación lateral. Montado
sobre rodamientos autolubricados.
6) Cuchilla turbo: Rotura una banda de suelo y corta el rastrojo sin incorporarlo.
7) Afirmador de semillas Keeton:Cumple con la función de evitar el rebote de la
semilla y mantenerla en fondo del corte en “V”.
La densidad (plantas por unidad de área) es una de las variables que definen la
estructura de los cultivos. Ésta condiciona la captura de recursos (agua, luz y
nutrientes) de los mismos. Para maximizar los rindes, es necesario lograr una
estructura que maximice la captura de recursos en las etapas críticas de generación de
rinde. El manejo de la densidad es un elemento clave para lograr una estructura
adecuada.

Los distintos cultivos responden de diferente manera a cambios en la densidad. En


todos los cultivos es necesario alcanzar una densidad mínima que garantice la máxima
captura de recursos. Sin embargo, el comportamiento de los cultivos difiere a altas
densidades. Dos cultivos muy contrastantes en este sentido son maíz y trigo. Mientras
que el rinde de maíz puede caer a altas densidades (debido a competencia intra-
específica), en trigo los aumentos de densidad no generan mayores perjuicios (aunque
sí generan aumento de costos por mayor uso de semilla).

Lograr una estructura adecuada para maximizar rindes requiere, entre otras cosas,
lograr un nivel de densidad adecuado. El correcto manejo de la densidad comienza
con la definición de niveles de densidad objetivo. Estos niveles objetivo deben
definirse considerando otras variables relevantes de manejo (por ejemplo,
características de los materiales a usar, fecha de siembra, espaciamiento, etc.). Se
sugiere definir la densidad objetivo en plantas a lograr por metro, aunque luego puede
transformarse a kilos por unidad de área si se cuenta con el dato de peso de 1000
granos de la semilla.
Una vez definida la densidad objetivo, es necesario realizar una serie de procesos para
asegurar el logro de esa densidad o, eventual-mente, cuantificar situaciones
problemáticas que requieran de una intervención (por ejemplo, resiembra).
Dos procesos clave para esto son:
a. el control de la calidad de siembra
b. el control de logro.

A continuación se describen estos procesos y se propone una metodología para


realizar los mismos en los cultivos de trigo y cebada.
1. Control de la calidad de siembra

El control de la calidad de siembra debe enfocarse en observar y controlar los


siguientes aspectos:

a) Cantidad de semilla y fertilizante


El objetivo es asegurar el uso de las cantidades de semilla y fertilizante planeadas para
evitar niveles bajos de densidad o fertilización que puedan disminuir los rindes o
aumentar los costos (y en el caso del fertilizante, generar fitotoxicidad) por
sobredosificación.

b) Profundidad
El control de la profundidad es necesario para asegurar que la semilla quede ubicada
en el lugar apropiado (con humedad, etc.). El proceso contribuye a evitar pérdida de
semillas por falta de humedad o por excesiva profundidad. Asimismo, una
profundidad adecuada y homogénea contribuirá a una emergencia rápida y
homogénea.

c) Surco mal cerrado


El control del cierre de surco tiene como objetivo asegurar que la semilla quede en
estrecho contacto con el suelo y evitar que quede muy expuesta, sin humedad
necesaria para la germinación o al alcance de aves, etc.

2. Regulación de la sembradora
El procedimiento propuesto para la regulación de la sembradora es una regulación
dinámica de la siguiente manera:

a) Clavar la máquina y hacerla andar 5 metros para cargar los dosificadores.


b) Colocar bolsas plásticas en las salidas de los dosificadores (semilla y fertilizante)
en distintos mandos de la máquina.
c) Hacer andar la máquina una distancia tal que cada cuerpo/surco cubra 10 metros
cuadrados. La distancia a recorrer para cubrir 10 metros cuadrados depende de la
distancia entre cuerpos/surcos de la sembradora (por ejemplo, para una sembradora a
19 cm o 0.19 m, esta distancia es 52 metros; 10 m2/0.19 m).
d) Retirar las bolsas y pesar el contenido (el resultado será una determinada cantidad
de gramos/10 m2, que equivale a kg/ha).

El peso de las bolsas se debe comparar con la densidad de siembra objetivo en kg/ha.
Se recomienda que no sea menor al 90% ni mayor al 110% del objetivo. A su vez, y
para evaluar la homogeneidad entre bajadas/surcos, se sugiere calcular el coeficiente
de variación (CV) entre los dosificadores. El CV debe ser inferior a 10%.

La cantidad de semilla a sembrar (en kg/ha o plantas por unidad de superficie) puede
calcularse a partir de la densidad objetivo y un estimativo del coeficiente de logro.
Este valor depende principalmente de la calidad de la semilla que se siembre (pureza,
vigor) y de otros factores como las condiciones de siembra (ej. humedad del suelo),
equipo de siembra, antecesor, etc.

3. Control del logro


Una vez implantado el cultivo, y en una etapa relativamente temprana, se realiza el
control de las plantas logradas. Esto resulta de importancia para determinar si el stand
logrado es el adecuado para la estructura del cultivo definida, o bien si hubo pérdidas
a causa de plagas, heladas o fallas en la siembra. La metodología propuesta consta de
los siguientes pasos:

a) Sitio de relevamiento: Se sugiere realizar al menos 5 o 6 estaciones de monitoreo


por lote. Los relevamientos pueden iniciarse luego de la emergencia y continuar hasta
Z1.3 (3 hojas por planta).
b) En cada sitio se contará el número de plantas en parcelas lineales2 de 1 m2 en dos
surcos contiguos. En las parcelas se registra la cantidad de plantas en distintos estados:
Plantas totales emergidas; Plantas con daño de plagas (pulgón verde en cereales de
invierno); Fallas (semillas sobre superficie que no llegaron a producir una plántula) y
plantas heladas o dañadas por piedra.
Coeficientes de logro inferiores al 60% del objetivo alertarán sobre la necesidad de
resembrar o agregar plantas al cultivo establecido. En esta instancia se debe definir
una nueva estructura de cultivo, ajustando principalmente el ciclo a la fecha de
resiembra y no se fertiliza.

El monitoreo de la calidad de siembra y del logro es un eslabón más en la cadena de


procesos. Asegurar un buen inicio del cultivo con una densidad adecuada resulta
necesario para que, en conjunto con el monitoreo y control de los demás procesos, el
cultivo pueda capturar el máximo potencial del ambiente y de esta manera alcanzar
los objetivos productivos con rindes más altos, estables y de una manera más eficiente.

¿Qué son las sembradoras?

Una sembradora es un elemento de maquinaria agraria, cuya función principal


es situar las semillas y granos en la tierra pre acondicionada por el mismo dispositivo.
Estas máquinas realizan la apertura de surcos en el terreno, la dispensación de semillas
y el tapado de la zanja dentro de un proceso que garantiza una siembra impecable.

Entre sus principales componentes encontramos la tolva, que suele contar con un
único tambor, aunque en ocasiones puede presentar suplementos laterales con los que
cubrir más espacio de siembra.

Otros mecanismos de gran importancia para las sembradoras son los dosificadores y
distribuidores. Éstos insertan el grano en la zanja y permiten variar tanto la forma de
depositarlo, como la cantidad o las distancias entre cada puesta. Así, se pueden
encontrar sembradoras de siembra directa o con diferentes mecanismos. Tanto
neumáticos como mecánicos.

Características de las sembradoras

Una sembradora nueva garantiza el depositado de semillas de forma homogénea, y


sus distintas configuraciones permiten adaptar la labor al tipo de cultivo en cuestión.

Si trabajamos con una sembradora de precisión es posible realizar siembras


monograno, mientras que si el terreno y cultivo requiere una mayor densidad de
plantado se requiere una sembradora a chorrillo.
Todo dependerá del tipo de cultivo y de siembra indicada para la explotación. Por
ejemplo, en el caso de los cereales, una sembradora de cereal asegurará el grado de
esparcimiento óptimo.

Tipos de sembradoras

Dentro del mercado de maquinaria agraria se pueden encontrar gran cantidad de


modelos de sembradoras, tanto con mecanismos de acción mecánicos como
neumáticos.

Las sembradoras agrícolas se diferencian principalmente por el volumen de siembra


que son capaces de cubrir y el grado de control sobre la distribución de semillas.

Sembradoras de precisión

Las sembradoras de precisión están diseñadas para la siembra individual y su


sistema de accionado permite conservar unas dimensiones determinadas entre cada
puesta. Se puede regular la deposición de una o varias semillas gracias a sus canales
o mecanismos de distribución.

Con una sembradora de precisión se consiguen unas líneas completamente paralelas


y uniformes en todo el cultivo, lo que incrementa la eficiencia del sembrado,
ahorrando en semillas y marcando distancias idóneas para otras tareas.

Sus difusores pueden ser desde platos mecánicos hasta dispositivos neumáticos.

Sembradoras a chorrillo

Las sembradoras a chorrillo también son conocidas como sembradoras en línea.


Ofrecen una gran homogeneidad y densidad de plantas. Este tipo de sembradoras
permite insertar sobre cada línea de siembra una cantidad de grano determinado.

La dosificación y la distribución de las semillas se realiza mediante equipos


distribuidores o conductos de caída. Esto puede variar en función de los granos y su
tamaño.

Sembradoras neumáticas

Esta maquinaria, en ocasiones requiere de otros mecanismos que no dependan de la


acción gravitacional para la inserción de semillas. La sembradora neumática, por
ejemplo, dispone de un sistema que permite repartir el grano con aire comprimido.
Esto se consigue mediante una turbina y un distribuidor específico que expulsan los
granos a semillas con cierta fuerza.

Si estás interesado en adquirir alguno de los modelos anteriores de


sembradora, contáctanos, nuestros expertos te ayudarán a seleccionar la más idónea
para tu explotación.

Las sembradoras se pueden clasificar según el sistema de siembra requerido:

 A voleo: distribución al azar de las semillas sobre toda la superficie


del terreno.

 En líneas o a chorrillo: Colocación aleatoria de las semillas en un


surco, cubriéndolas, para dar líneas definitivas.

 A golpes: Colocación de grupos de semillas a distancias definidas,


en líneas.

 Monograno: colocación precisa de semillas individuales a


distancia definidas, en línea.

Sembradoras a voleo

Sembradora específica para pratenses con rodillos acanalados


Consiste en depositar uniformemente las semillas sobre toda la superficie a sembrar,
y una vez depositada enterrarla con gradas de púas, rulos, etc. Estas sembradoras
suelen ser de construcción muy simple, distinguiéndose dos tipos: centrífugas y
de descarga libre.

Las primeras coinciden con las abonadoras centrífugas, y aunque se puede conseguir
una buena precisión en el reparto, ofrece problemas similares a la siembra manual:
consumo excesivo de semilla e imposibilidad de la posterior mecanización de las
binas o labores secundarias de cultivo.

Las sembradoras de descarga libre son análogas a las sembradoras de chorrillo a las
que se les suprimen los tubos de caída, dejando caer la semilla libremente a poca
altura. Van provistas, en su parte posterior, de una grada de púas o de rodillos para
enterrar ligeramente la semilla. Este tipo de siembra es apropiada para semillas
pequeñas y, especialmente para pratenses.

Sembradoras en línea

Sembradora con dosificación y tubos de caída independientes


Con las sembradoras en línea o de chorrillo se consigue depositar de forma continua
sobre cada línea de siembra una determinada cantidad de grano.

Las operaciones que realizan estas máquinas son:

1. Abrir el surco donde se va a depositar la semilla. Se realiza con


cuchillas circulares (un solo disco cóncavo o dos discos planos) o
con rejas asurcadoras, montadas sobre el bastidor, de forma que van
siguiendo la superficie del terreno y pueden elevarse por encima de
algún obstáculo que encuentre.
2. Dosificar y depositar la semilla en el surco realizado. Se realiza por
medio de los órganos distribuidores y de los tubos de caída.
El órgano de distribución es un parte esencial de la sembradora, debe
permitir una gran regularidad de siembra, y según su polivalencia podrá
ser utilizada para distintas especies de semillas. Pueden ser de rodillos,
centrífugas y neumáticas.
Las sembradoras con elemento dosificador de rodillos llevan uno en
cada línea de siembra, montados sobre un mismo eje giratorio. Se trata de
un rodillo acanalado, una rueda de dientes o cucharillas.
En las sembradoras con distribuidor centrífugo las semillas penetran,
por gravedad, desde la tolva en un cono giratorio por una abertura
regulable. Una vez en el interior, por unas aletas soldadas al cono, son
sometidas a fuerzas que originan su ascensión hasta llegar a la tapa
superior donde existen agujeros por los que penetran en los tubos de caída
y son dirigidas hacia las botas de apertura del surco de siembra
En las sembradoras con distribuidor neumático, la semilla es dosificada
en un solo cilindro situado debajo de la tolva, a cuya salida es recogida
por una corriente de aire y llevada a una cabeza distribuidora que los
distribuye a los tubos de descarga.
3. Enterrar el grano. La propia reja puede realizar esta operación,
aunque se pueden utilizar otras rejas, rastras, cadenas, etc.
4. Comprimir el suelo alrededor de la semilla, mediante rodillos y así
favorecer el aumento de la humedad entorno a la ella.

Sembradoras a golpes y monograno (de precisión)

Sembradora monograno de 6 cuerpos con abonado y distribución de microgránulos


La siembra a golpes consiste en colocar una determinada cantidad de grano sobre
cada línea de siembra, de forma intermitente y de tal forma que los granos queden
separados entre sí una distancia constante. Mientras que la siembra monograno o de
precisión se busca colocar semillas individuales a distancias exactas unas de otras. Lo
cierto es que cambiando los platos de distribución se puede conseguir depositar un
grupo de semillas o una sola.

Por tanto, una sembradora de precisión es aquella que deposita a profundidad


uniforme y a distancias iguales el grano, consiguiendo además un paralelismo entre
líneas. Esta siembra permite:

 Ahorro de semillas a aplicar.


 Exactitud en la superficie unitaria de las plantas para una
productividad óptima.
 Mayor facilidad para realizar labores de cultivo mecanizadas.
 Disminución de las faenas de escarda y aclareo.
 Siembra a distancia definitiva
 Óptimas condiciones para la recolección.
En este tipo de maquinaria, un elemento esencial es el mecanismo distribuidor,
concebidos para que suelten las semillas individualmente, una tras otra, con intervalos
regulares. Existen distribuidores mecánicos (de plato vertical, plato oblicuo, plato
horizontal y de correa) y neumáticos.

Tipos de sembradoras mecánicas

Nosotros como empresa con una larga historia en la fabricación de máquinas y


mecanismos pesados para el campo, conocemos la importancia que tiene para el
trabajador conocer las diversas variedades de un mismo producto. Cada campo es muy
diferente y está sujeto a diferentes particularidades, ya sea por parte del terreno y los
agentes externos, así como por la parte activa y financiera del agricultor.

Para ello, y porque siempre es importante avanzar y apostar por el diseño en este
sector, vamos a destacar algunos de los tipos de sembradoras mecánicas principales y
que no puedes perderte.
Importancia de las sembradoras mecánicas

Las máquinas sembradoras tienen como objetivo el de colocar sobre la superficie


del terreno diversas clases de semilla, a distinta distancia y profundidad de campo.
Esta es la teoría, pero para ello se requiere del uso de una serie de maquinaria
capacitada y diseñada para rentabilizar estos procesos convirtiendo la actividad en una
tarea más dinámica, rápida y profesional. Para esto sirven las sembradoras mecánicas.
Y aquí vamos a distinguir los tipos más características de estas herramientas de gran
precisión y calibre.

Sembradora de siembra directa de reja arrastrada

Como principal ventaja es que el tractor no tiene que hacer una gran fuerza para
remolcarlas. Su sistema destaca por conseguir que la semilla quede colocada en una
zona intermedia, ni muy profunda ni a una gran exposición de la capa superior de la
tierra.

Sembradora mecánica telescópica de siembra directa de reja

Nuestro modelo patentado destaca por ser menos pesada, se requiere menos fuerza
para sembrar, por lo que se reduce el consumo. También se consigue colocar la semilla
en una posición idónea. Además están provistos de amortiguadores para evitar
movimientos de tierra innecesarios.

Sembradora de siembra directa de discos mecánica con rueda de control

Se trata de otro tipo de sembradora mecánica. Un modelo novedoso con un chasis


de pequeño tamaño en contraposición a la gran tolva que acompaña a esta sembradora.
Su poder reside en que son capaces de mantener y conservar la vegetación ya habida
en el suelo, mientras consiguen que la semilla se introduzca dentro del surco.

Sembradora mecánica para siembra directa de reja alzada

Con este tipo de sembradora mecánica se consigue que el surco se cierre antes de caer
la semilla, por lo que quedará apenas a unos 3cm de la superficie, una profundidad
idónea. Así pueden enraizarse bien para aguantar las peores épocas del año.
Sembradora mecánicas plegables

Pese a que otros modelos también pueden plegarse, esta sembradora de cereales a
chorrillo es capaz de reducir un metro su ancho de trabajo para poder ajustar las tareas
y poder remolcarla incluso por carreteras. Nuestros diseños de estas sembradoras
plegables poseen una gran capacidad y llevan incorporado un sistema para avisar por
si alguna semilla no ha caído.

Sembradoras a voleo
La siembra a voleo consiste en la distribución al azar de las semillas sobre toda la
superficie del terreno. La siembra a voleo es apropiada para semillas pequeñas. Estas
sembradoras suelen ser de construcción muy simple, viéndose dos tipos: centrífugas
y de descarga libre.
De las primeras existen tipos manuales, y también para montaje al tractor, se pueden
obtener distintos tipos de distribución superficial.
Las de descarga libre son análogas, en cuanto a sus órganos distribuidores se refiere,
a las sembradoras en líneas, sólo que al final dejan caer la semilla libremente a poca
altura, en vez de introducirla en el terreno a través de la bota de siembra. Generalmente
van provistas en su parte posterior, de una grada de púas o de rodillos, para enterrar
ligeramente la semilla.

Sembradoras en línea o a chorrillo


En la siembra en línea existe una colocación aleatoria de las semillas en un surco,
cubriéndolas para dar líneas definitivas. Puede ser en una anchura de 1 cm o en fajas
o bandas de 6-8 cm. En la siembra en línea, la máquina debe realizar las siguientes
operaciones o fases:
1° Abrir el surco donde se va a depositar la semilla, lo que se realiza por medio de
distintos tipos de herramientas: rejas asurcadoras, cuchillas circulares.
2° Dosificar y depositar la semilla en el surco. Se realiza por medio de los órganos
distribuidores y de los tubos de caída.
3° Enterrar la semilla. La propia reja surcadora crea el efecto de enterrado, aunque
pueden existir rejas adyacentes, cadenas, rastras, etc.
4° Comprimir el suelo alrededor de la semilla, para favorecer el aumento de la
humedad a su alcance. Se realiza por medio de rodillos compresores que pueden
revestir distintas formas, dependiendo del tipo de semilla, de la profundidad y del
suelo.
Son más usuales en las sembradoras de precisión, pudiendo ser sustituida su función
en las sembradoras en líneas por rodillos o barras compresoras.
La tolva de la semilla debe ser de fácil llenado, vaciado y limpieza. Desde ésta, la
semilla desciende a través del mecanismo dosificador por las conducciones y la reja
hasta el suelo. Todos los componentes están colocados sobre un bastidor provisto de
un sistema de rodadura, que sirve a la vez de accionamiento.
Según el mecanismo dosificador, pueden distinguirse tres tipos de sembradoras en
líneas:
a) La usual con mecanismo de rodillo acanalado o rueda de siembra.
b) La sembradora en líneas centrífuga.
c) La sembradora en líneas neumática.
Los elementos de las sembradoras en líneas son: reguladores de profundidad de las
rejas, rodillos o púas cubridoras y, sobre todo, los marcadores de huellas, que son
levantados y bajados manual o automáticamente al final de cada pasada. La huella
que ha de seguir la rueda próxima del tractor en la pasada siguiente está a una distancia
de la rodada actual igual a dos veces la que separa a la rodad de la última línea de
siembra, más la distancia entre líneas (2A + a).

Sembradoras a golpe y monograno (precisión)


En la siembra golpes se pretende depositar grupos de semillas a distancias bastante
uniformes, mientras que en la monograno o de precisión se busca colocar semillas
individuales a distancias exactas unas de otras, cambiando el plato de distribución se
puede conseguir depositar un grupo de semillas o una sola y la uniformidad de
distancias nunca es perfecta.
En general se denomina sembradoras a golpes las empleadas en los cultivos de
semillas gruesas como maíz, algodón y leguminosas para grano, las cuales depositan
un grupo de semillas (golpe) a unas distancias de uniformidad aceptable. En general,
constan de recipientes cilíndricos independientes para cada línea, en cuyo fondo gira
un disco horizontal con corona de muescas o plato de alvéolos.
El tubo de caída está situado en un punto de la periferia del disco. La semilla entra
por gravedad en las escotaduras. Sobre el orificio de salida existen dos pequeñas
piezas o gatillos con muelles, el primer gatillo o cepillo, sirve para enrasar y barrer
cualquier semilla mal colocada en el alveolo, para que no se parta ni se deteriore. El
segundo gatillo empuja a las semillas, forzándolas a caer por el tubo y produciendo u
sonido característico.
Las sembradoras monograno o de precisión deben depositar los granos uno a uno y a
distancias precisas. Trabajan siempre en una sola línea, por lo que en su montaje ha
de guardarse una distancia entre líneas adyacentes de al menos 25 cm. Para distancias
menores han de montarse los cuerpos en dos filas.

4. Mantenimiento
El mantenimiento de las maquinas, antes durante y tras la siembra incluye una serie
de tareas que, además de influir en la calidad de siembra, alarga la vida útil de las
sembradoras y reduce los gastos de reparación.
Tras la limpieza general de la maquina se han de comprobar los elementos de siembra,
estado de los abre surcos, sistemas de muelles en los brazos, tornillos de amarre de las
rejas a la bota y de los brazos al bastidor. Se ha de verificar que no faltan pasadores
en los extremos de los tubos de caída de las semillas, ni los de sujeción de la rastra, ni
cuantos estén dispuestos por el fabricante de la máquina.
Las maquinas arrastradas, que llevan un sistema hidráulico para poner en posición de
trabajo y trasporte los elementos de siembra, conviene engancharlas al tractor para
subirlas y bajarlas varias veces, observando que los elementos conectados a dicho
sistema responden por igual y que no existen desequilibrios entre ellos. Imaginemos
que las ruedas que permiten pasar de la posición de trabajo a la de trasporte, y
viceversa, no se desplaza por igual.
Esto quiere decir que existe un problema de entrada de aire o fuga de aceite en alguna
parte del circuito hidráulico.
Es precisamente en el sistema hidráulico donde los fabricantes alertan al usuario
minuciosamente de los problemas que puedan surgir cuando este decide cambiar
alguno de los componentes. En este caso, hay que seguir al pie de la letra lo que
especifica el manual de instrucciones, o bien, acudir al concesionario de la zona.
Siembra directa y sus consideraciones

Foto 1. Una de las fincas de Eseverri, donde practica la siembra directa. Bajo el
rastrojo se encuentran las semillas de guisante.
Desde el año 2000 Eseverri viene realizando la siembra directa, basada en el modelo
argentino, en prácticamente la totalidad de la explotación, aunque años atrás realizó
pruebas puntuales con éste método de producción agrícola. Desde que la practica, ha
notado una mejoría notable en sus tierras, sobre todo en una mejor permeabilidad y
estructura del suelo, lo que se traduce en una mayor homogeneidad de sus
producciones y un aumento de la biodiversidad del entorno. Pero, como comenta el
presidente de Agracon, esta técnica entraña más consideraciones que la agricultura
convencional.
Al sembrar sobre el residuo del cultivo anterior, la cosechadora de Eseverri cuenta
con un extendedor de paja y de granzas, que evitan una acumulación lineal de tamo.
Además, comenta que el rastrojo que se genera se suele triturar para que cubra mejor
el suelo.
«Tras varios años realizando la siembra directa, he comprobado que ha aumentado
la permeabilidad del terreno»
Un aspecto importante para el éxito de la siembra directa es el tipo de rastrojo que
permanece en el suelo y cómo éste puede influir en el cultivo siguiente. Por ejemplo,
si se trata de un cultivo que genere un exceso de rastrojo, Eseverri tiene la precaución
de realizar una siega alta y retirar el exceso de residuo. Incluso puede llegar a retrasar
el momento de siembra para manejar el rastrojo. Hay que tener en cuenta que, frente
a la agricultura convencional, la época de siembra de la agricultura de conservación
se suele retrasar debido a que las condiciones de humedad del lecho de siembra
pueden derivar en problemas de malas hierbas, plagas o enfermedades.
Foto 2. Detalle de los restos de una babosa tras su muerte, provocada por un
tratamiento a base de metaldehído.
Éste es el caso de la aparición de babosas, muy dañinas en el periodo comprendido
entre la siembra y el ahijado del cereal. Por eso, antes de que comience la oviposición
por parte de los adultos (hacia el mes de octubre), conviene realizar un control
preventivo anterior a la siembra, con una dosis baja de producto a base de
metaldehído. Si durante la siembra todavía perdura, Ignacio recurre a un tratamiento
extra. Para ello, acopla en la parte delantera del tractor un extendedor de gránulos, que
esparce el producto a una dosis baja (alrededor de 5 kg/ha), para asegurarse la
germinación.

Localización del abono y riego

Eseverri es un firme defensor del aumento del rendimiento del cultivo mediante
modificaciones en los abonados y en el manejo del suelo, más que en la variedad
elegida. Tiene que luchar por superar los retos que presenta el suelo típico de Tauste.
Estos suelos son variopintos, pasando de los profundos y de buena calidad, cercanos
a la Vega del río Ebro, a los pedregosos, con poco contenido en materia orgánica (un
nivel medio en regadío 1-1,5%) que predominan en esta localidad zaragozana.
Por ello, en la actualidad ensaya con diferentes aplicaciones de abono y con su
localización para aumentar los rendimientos. Partiendo de un análisis de suelo,
realizado por Agracon o por la DGA, y conociendo las extracciones del cultivo puede
llegar a conseguir la misma producción con un importante ahorro de fertilizante.
Para practicar la localización del abono en la línea se vale de la mismas máquina
sembradora, que ha modificado él mismo en su nave-taller, para poder realizar las dos
funciones al mismo tiempo.
Eseverri nos comentó durante la entrevista que posiblemente se subirá al tren de la
teledetección para mejorar la fertilización nitrogenada. Este año, pretende contratar
un vuelo no tripulado, con avionetas de la casa Trimble, que analizarán el estado
nutricional de su cultivo y le ayudarán en la toma de decisiones del abonado.
En cuanto al riego, la mayor parte de sus cultivos son de regadío, ya que la zona cuenta
con una pluviometría media entre 350-370 l/ha y año. El riego se realiza mediante tres
sistemas: inundación, aspersión y goteo.

Rotaciones estratégicas

Este agricultor zaragozano realiza multitud de rotaciones, fruto de años de estudio y


esfuerzo, que con la siembra directa ha ido enlazando estratégicamente y con las que
está teniendo buenos resultados.

Foto 3. La rotación del cultivo de leguminosas o proteaginosas, seguidas por otro de


cereal le ha dado buenos resultados hasta la fecha.
Como norma general, realiza varias rotaciones que consisten en un cultivo de
leguminosas o proteaginosas, seguidas por otro de cereal. Reconoce que con las
leguminosas y proteaginosas se consigue una mejor estructura del suelo, junto a una
buena incorporación de nitrógeno, ahorrando en aplicación de este elemento en el
siguiente cultivo de cereal. En cierta parte de sus fincas, deja crecer la vegetación
adventicia espontánea y no la elimina, para mejorar también el nivel de otros
nutrientes.
Foto 4. Detalle de las semillas de trigo sarraceno o Alforfón.
Una de sus rotaciones estrella es la formada por los cultivos de veza, trigo sarraceno
(que deja poco rastrojo en el terreno tras su siega) y triticale. Resulta llamativo el
cultivo de trigo sarraceno o Alforfón, el cual éste agricultor está intentando
comercializarlo para la industria harinera a través de Agracon y espera mejorar su
producción en los próximos años.

Realmente, aunque se considere un cereal, pertenece a la familia de


las poligonáceas y no a la de las gramíneas. Al no poseer gluten en su composición,
se suele destinar a la producción de harina para celiacos, por lo que su demanda es un
aliciente más para su cultivo, como destaca Eseverri. Otro de los campos de trabajo
de este “trigo”, es la producción de miel que se obtiene al implantar las colmenas en
la parcela para mejorar la polinización.
Con el trigo sarraceno realiza más rotaciones, como la formada por éste seguido de
trigo blando. En este caso, Eseverri deja el rastrojo de trigo sarraceno en el suelo,
donde además crecen las semillas perdidas durante la cosecha. El trigo sarraceno
adventicio, junto con los restos de cosecha se deja morir, para formar parte del lecho
de siembra del trigo blando. Por su parte, el trigo duro se cultiva en secano, ya que en
la zona se produce una buena calidad sin necesidad de riego.
Otra de sus rotaciones es la formada por el cultivo de sorgo, veza, sorgo y guisante.
Eseverri puntualiza que en este caso realiza otro tipo de manejo del rastrojo. Los restos
de cosecha del sorgo se dejan tal cual en el terreno y sin picar. El objetivo es el de
dejar cierta parte aérea del rastrojo del cultivo y conseguir una protección contra el
arrastre del rastrojo por parte del fuerte viento de El Cierzo aragonés. Además, estos
tallos erguidos realizan la función de entutorado para el cultivo de guisante que se
sembrará sobre él. La incorporación a la rotación del guisante es debida a que durante
estos años, ha comprobado que tras el cultivo de sorgo, no se desarrollaba bien el
cereal. Posiblemente, tras él se cultivará girasol.
Una vez está el guisante en flor, a Ignacio le resulta interesante ayudar a la
polinización, permitiendo la colocación de cajas con abejas propiedad de un amigo
apicultor. Desde hace varios años, suele contar con más de 300 cajas de abejas en el
momento de la floración, que se reparten por la finca, aunque anterior a este periodo
suele haber unas treinta cajas casi permanentemente.
El cultivo del maíz es otra de las líneas de actuación de Eseverri, seguido por cebada
y trigo. Este experto comenta que su rastrojo es idóneo en muchos casos para la
siembra directa.

Un Twin Row diferente de siembra directa

Tras haber ensayado previamente esta técnica en fincas experimentales, este año
Eseverri se ha aventurado a cultivar un maíz de ciclo 650 en una parcela de 12 ha
mediante la técnica Twin Row.
El cultivo partió de una cubierta de leguminosa, que se trituró y se dejó secar sobre el
terreno. La labor inicial previa a la siembra consistió en una labor lineal con un apero
tipo Strip-Till, que fisuró a 30 cm de profundidad el terreno en el centro de cada línea
doble de siembra, separadas entre sí 20 cm. En el centro de capa pareja de líneas se
integró la línea de goteo, parte en superficie y parte enterrada. La siembra se realizó
posteriormente, con un equipo de siembra Twin Row.

Foto 5. Detalle del barredor de rastrojo y el brazo de apertura del surco del Strip-Till.
Lo que hace diferente a este cultivo es que, por un lado, Eseverri ha modificado la
estructura del Strip-Till, incorporándole un equipo de abono líquido localizado en
profundidad. Según va penetrando la reja del Strip-Till para formar el surco, se aplica
el abono en la línea de siembra, gracias a un equipo electrónico. Y, por otro lado, ha
modificando el marco de plantación, siendo la distancia de centro a centro de los ejes
de las parejas de 1,40 m, superior a la media. Lo que pretende es dejar un espacio libre
entre parejas de líneas de 1,20 m, a modo de “barbecho”, para realizar ahí el Twin
Row del año siguiente. Gracias al sistema autopilot del tractor podrá discurrir por el
terreno que quedó libre de cultivo.
Como proyecto futuro, le gustaría que todas las labores concurrieran a la vez,
enganchando a la parte delantera del tractor el Strip-Till modificado y la sembradora
Twin Row a la parte trasera.

Vertiente mecánica

Además de su vertiente agrícola, Ignacio Eseverri es un apasionado de la mecánica


agrícola, remodelando y adaptando la maquinaria de la que dispone. Incluso, ha
creado aperos a base de piezas y partes de otras máquinas para trabajar de una manera
customizada.
En la misma máquina de siembra directa que posee, ha incorporado un equipo
fitosanitario y un sistema de abonado localizado, aunque en algunos casos se ha dado
cuenta de que los tratamientos herbicidas para el control de las hierbas de presiembra
o postsiembra no conviene hacerlos en el momento de la siembra, por lo que realiza
un tratamiento anterior o posterior a ésta.

Foto 6. Sembradora plegada.


Su máquina de siembra directa inicialmente medía 3 m y, tras una modificación
realizada por él, ahora mide 5,5 m de ancho de trabajo. Para ello, la línea central de
siembra se ha montado en la parte trasera del tractor, con un hidráulico y con ayuda
de una bisagra. A esta línea central se le han añadido dos líneas laterales, de manera
que no esté formada por un sólo tramo largo de discos abridores, sino por tres
particiones, que se van adaptando a las discontinuidades del terreno y no arrastren
tanto error.
MONITORES DE SIEMBRA Y DOSIS VARIABLE

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Control de hasta 72 surcos.

:: Medición de distancia en metros.


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El monitor AG3000 está construido con tecnología de última generación.

Es ideal para trabajos de siembra y fertilización de alta precisión y en horarios


nocturnos.

Señala mediante alarmas sonoras y mensajes en pantalla cualquier irregularidad en el


trabajo.

Presenta una consola de alta resistencia equipada con una pantalla de gran tamaño que
muestra en forma gráfica y numérica toda la información relacionada con cada surco.

Dispone de un menú gráfico de manejo intuitivo.

Es un equipo de fácil instalación, con sensores de alta precisión, preparados para las
más altas exigencias y con muy bajo mantenimiento, ya que tienen implementado un
sistema de compensación automática según su nivel de suciedad, contando además
con un sistema de protección inteligente contra cortocircuitos en ramal de sensores.
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La Computadora Agrícola Universal AGROTAX AG FUSION es un nuevo concepto


dentro de la Agricultura de Precisión, permite con una única consola monitorear
siembra y fertilización y controla simultáneamente la dosificación variable de esos
insumos de forma manual (4 dosis pre establecidas) o automática (mapa de
prescripción de dosis multi-variable).

Utiliza el sistema FAT (file-assignation table) para total compatibilidad con distintos
sistemas operativos de PC.

Es un equipo de alta prestación y de fácil manejo (amigable con el operador).

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longitud, hora, velocidad, dosis de fertilizantes aplicadas en la línea y al costado de la
línea, dosis de semilla aplicada y densidad de siembra para cada surco).
SEMANA 11
PULVERIZACIÓN Y FERTILIZACIÓN. PULVERIZADORAS.

¿Qué es una pulverizadora?


Es una máquina diseñada para fraccionar el agua contenida en su tanque, la fracciona
en pequeñas partículas y las distribuye sobre el terreno o cultivos en cantidad
controlada. Esto es así, si todos los factores que influyen en la operación también están
controlados.
Nos referimos a pulverizadoras de chorro proyectado que son las usadas en agricultura
forrajera o cerealera y huertas.
Las pulverizadoras de chorro transportado son las que se utilizan principalmente en
montes frutales y forestales.
Las pulverizadoras son máquinas que transforman la energía mecánica en energía
hidráulica, ésta se utiliza para dar presión con la cual -en las pastillas- se fraccionan
las gotas de agua en miles y miles de partículas. Si el agua contiene un producto
químico es posible hacer llegar el mismo dosificado a los lugares deseados.

¿Cómo se calibra una pulverizadora?


Calibrarla es conocer su gasto de agua por há. y adecuarlo a nuestras necesidades.
Luego de acomodar el gasto (litros/há) se agrega al tanque el producto químico
siguiendo las recomendaciones del técnico o el fabricante (litros o kg./há), en
concordancia con el consumo de agua.

Hay un elemento que es imprescindible para la calibración: la jarra graduada.


Las etiquetas del fabricante sirven cuando las pastillas son nuevas y la velocidad de
avance es bien conocida.
Si usamos la jarra especial para pulverizadoras, deben seguirse las indicaciones de su
envase. Esta jarra se adquiere en representantes especializados por ejemplo: Jacto.
La jarra común, es una jarra transparente de cocina graduada (en c.c. o mililitros) y se
puede adquirir en cualquier bazar. Se trabaja con la escala correspondiente a agua.

El siguiente es un método práctico, rápido y simple para la calibración

Con la pulverizadora correctamente enganchada al tractor y el mantenimiento previo


realizado, se coloca el equipo bien próximo a la fuente de agua y se llena el tanque
hasta la boca. Se tapa, se deja derramar lo que sobra de agua, luego se destapa
nuevamente y se marca el nivel final en el borde interno.
Siendo la boca un lugar más estrecho que el diámetro del propio tanque es de mayor
precisión medir allí la reposición del agua gastada.
Se marca también el lugar donde se apoyan los centros de los neumáticos traseros del
tractor para luego poder volver a la misma posición.

3) ¿Qué hacer si se necesita aumentar el gasto por há.?


Lo primero sería aumentar la presión por ejemplo a 3,5 ó 4 kilos y repetir la prueba.
Si aumentar la presión no es suficiente se puede intentar bajar un cambio, aunque esto
implica perder rendimiento horario.
Si finalmente no se logra calibrar sólo resta proceder a un cambio en la numeración
de las pastillas, optando por otras de mayor consumo.
En forma inversa se procede para disminuir el gasto.

4) ¿Qué es el mantenimiento previo?


Es todo lo que se recomienda en el Manual en relación a lubricación de cardan y
bomba, limpieza de cañerías, grifos, filtros y pastillas.
Es muy importante hacer periódicamente el control de pastillas. Como es sabido las
pastillas se desgastan por la presión, los productos y las muchas hás trabajadas.
Usando la jarra graduada se pueden controlar las pastillas.
Esto se hace configurando una planilla donde se anota el gasto por minuto de cada
una de las pastillas del botalón, trabajando a presión constante con agua limpia en el
tanque.

De entrada se descartan las que presentan a simple vista chorros desviados, goteos,
etc. Luego de conocer el gasto de cada una se suma para hallar el gasto total y se
divide por el número de pastillas para obtener el gasto promedio. A ese promedio se
le calcula un 10% por encima y por debajo como rango de tolerancia para pastillas
tipo abanico plano y un 5% en el caso de ser de tipo cono. Las pastillas que no estén
dentro de la tolerancia deben sustituirse por otras que sí lo cumplan. Si hay que
cambiar más de 5 ó 6 pastillas se recomiendan instalar un juego nuevo.

5) ¿Quién tiene la última palabra en pulverización?


Las tarjetas sensibles. Las mismas se adquieren en los comercios especializados.
Con ellas se puede saber cómo está llegando el producto al lugar que interesa que
llegue: suelo, primeras hojas, espigas, etc. Las tarjetas son amarillentas y viran al
violáceo donde son tocadas por las partículas de agua. Esto da una pauta del tamaño
de partículas, cantidad de impactos por cm2 de tarjeta, etc. En general para diversos
tipos de productos es aceptable obtener de 30 a 40 impactos por cm2.
Las tarjetas sensibles además de ser baratas y fáciles de usar resultan un excelente
medio para llegar al control de calidad de la operación de pulverización.

PULVERIZADORES AGRÍCOLAS:

La tecnología debe ir de la mano con absolutamente todas las prácticas agrícolas que
conocemos, de esta forma obtenemos mejores resultados en un corto período de
tiempo. Los pulverizadores agrícolas han permitido mejorar muchos aspectos
fitosanitarios, control de malezas y plagas, por eso la agricultura actual no puede llevar
se cabo sin la ayuda de la mecanización agrícola, por supuesto teniendo una
conciencia y un sentido ético acerca del medio ambiente que nos rodea.
¿Qué son los pulverizadores agrícolas?
La pulverización consiste, en la fragmentación y distribución de un líquido en forma
de gotas, el estudio de dichas gotas resultas imprescindibles para comprenderlos
fenómenos que intervienen durante la aplicación de los fitoterápicos, ya que ellas son
el medio que permiten transportarlo hasta el objetivo final, todas aquellas gotas que
no puedan llegar al blanco, o incluso cuando éstas alcancen el blanco y no queden
retenidas sobre él se conoce como deriva.

Entre las diversas funciones que cumplen los pulverizadores agrícolas tenemos:

1. Aplicación de plaguicidas:
Existen 3 formas de aplicación de plaguicidas mediante la técnica de la pulverización
entre las cuales tenemos:

1. En cobertura total.
2. En banda.
3. Aplicaciones dirigidas.

Es importante destacar que una de las condiciones fundamentales para que los
tratamientos se den de forma óptima y además resulten efectivas, es respetar la dosis
y los caudales de campo recomendados por el laboratorio fabricante del fitoterápico,
además de leer las instrucciones para su uso.

El análisis de plaguicida se basa principalmente en dos parámetros fundamentales


para la pulverización de una superficie objetivo. Estos dos parámetros son:

1. Tamaño de gotas producidas.


2. Cantidad de gotas aplicadas por unidad de superficie (gotas/ centímetro
cuadrado).
Para el estudio de estas características ya mencionadas, se produce a la captura de
gotas, a través de tarjetas hidrosensibles. Esta técnica consiste en colocar tarjetas
dentro del cultivo, con el objetivo de recoger muestras de impactos de las gotas de
pulverización en condiciones reales de trabajo.

Las manchas que producen las gotas sobre la superficie artificiales, difieren
totalmente de las verdaderas dimensiones de las mismas que la originaron, pero
permite obtener un análisis visual sobre la homogeneidad de las gotas según las
improntas en el contenido de la tarjeta y la cantidad de impacto por centímetro
cuadrado.

2. Producción de Gotas:

La producción de gotas a través de los pulverizadores agrícolas puede obtenerse a


través de diferentes sistemas, las más comunes para generarlas es a través de energía
hidráulica (circuito hidráulico bajo presión y boquillas pulverizadoras).Existen otros
métodos menos utilizados que son aquellos que utilizan energía centrífuga (discos
giratorios) o energía térmica (también llamados nebulizadores por el tamaño reducido
de las gotas que produce).

En la pulverización por energía hidráulica, el líquido sometido a presión es obligado


a atravesar un pequeño orificio calibrado antes de ser expulsado al exterior. La lámina
líquida perturbada por la expansión, termina por romperse en gotas. Cuanto mayor es
la diferencia de presión entre el sistema y la atmósfera, mayor será el grado de rotura
(gotas más pequeñas).

La gama de presión utilizada para la producción de gotas en tratamientos fitosanitarios


varías entre 2 y 7 bares, aunque también hay sistemas de inducción de aire en el chorro
pulverizado, donde el rango de trabajo va desde los 10 hasta los 15 bares.
3. Pastillas pulverizadoras:
Son fundamentales en el sistema de pulverización por hidráulica, además de que
por su estructura, permite la salida del líquido por un orificio calibrado por lo cual su
función es vital. En varios países como Argentina se le conoce como pastillas, pero
en otros países se les denomina toberas, boquillas o puntas de pulverización.

Las pastillas definan el tipo y la forma del chorro, que son las características básicas
que determinan el patrón de distribución de la boquilla y también, en gran medida, el
caudal pulverizado.

Existen muchos tipos de pastillas, pero las formas de distribución son básicamente
dos:

1. Abanicos.
2. Conos.

Por su parte, el caudal es el volumen líquido asperjado que entrega una pastilla por
unidad de tiempo (generalmente se expresa en letra “q”) Y se expresa en
Litro/Minuto. El caudal nominal, es aquel que indica el fabricante de la pastilla,
cuando la misma se pulveriza a una presión de 300 K/Pa.

Uso de pastilla según el Agroquímico que se aplica.


En casi todas las oportunidades, los fabricantes recomiendas ciertas pastillas según la
clase de fitoterápico a utilizar. Esto no quita la posibilidad de que usted no pueda optar
por alternativas diferentes a la propuesta. Esto también varía según la experiencia
personal que posea un profesional, o un aplicador experimentado.
¿Qué son los atomizadores agrícolas?
Un atomizador es una máquina que se utiliza para la aplicación de diversos productos
agrícolas mediante pulverización hidráulica, como insecticidas o pesticidas diluidos
generalmente en agua.

En cuanto a su accionamiento, existen varios sistemas homologados que pasamos a


describir brevemente:

– Pulverización hidráulica: Las gotas se originan cuando el líquido a presión pasa


por un estrechamiento o boquilla en contacto con el aire (presión atmosférica).
– Pulverización neumática: Los nebulizadores son mecanismos de dispersión que
permite repartir productos como insecticidas o fungicidas con ayuda de una corriente
de aire, produciendo gotas muy pequeñas tipo rocío.
– Pulverización centrífuga: Ésta consigue que las gotas se dispersen haciéndolas
girar muy rápido en unos discos que permiten regular el tamaño de las gotas en
función de su velocidad.

Características de los atomizadores

El componente más grande del atomizador es su depósito, donde se carga el producto


que se va a dispersar en la explotación. Los depósitos pueden ser de diversos tamaños
entre ellos de 1000 L, 2000 L y 3000 L de almacenaje óptimo para cultivos extensivos
de larga distancia.

Una de las ventajas más destacadas de su uso es la penetración que logra en las
espesura de los cultivos. Por ello, preferentemente se implementa en cultivos
arbóreos, o boscosos.

El material de su estructura es resistente y fácil de limpiar, con un sistema de vaciado


total y boca de llenado dotada de cierre hermético.
Tipos de atomizadores agrícolas
De acuerdo a su operativa existen dos tipos principales de atomizadores, los
atomizadores arrastrados y los pulverizadores suspendidos.

Atomizadores de arrastre
Están diseñados exclusivamente para ser arrastrados por un tractor. El depósito del
producto contiene mayor volumen de almacenaje, entre 1000 L y 3000 L, y requieren
de una bomba de mayor potencia puesto su capacidad de dispersión suele ser más
elevada.

Atomizadores suspendidos
También conocidos como sulfatadoras suspendidas, tal como su nombre indica, el
mecanismo de trabajo está anclado y suspendido en un tractor, a diferencia de los
arrastrados que requieren de un remolque para desplazarse.

El tanque de almacenamiento posee un volumen pequeño, de 400 L a 800 L y la


bomba de accionamiento es de menor potencia. Este equipo se potencia gracias al
propio tractor.

En el mundo agrario se ha notado un considerable aumento de la venta de


atomizadores en los últimos años. Las garantías que ofrecen, así como su comodidad
de empleo hacen que comprar atomizadores nuevos sea una necesidad para muchos
agricultores que han comprendido la importancia de dotar su explotación con
maquinaria eficiente.
El empleo de sembradoras agricolas ofrece la posibilidad de automatizar la
distribución de semillas, haciendo de la siembra un proceso mucho más eficiente en
términos de tiempo y aprovechamiento de los recursos.

Debido a la rapidez con la que permiten trabajar, comprar una sembradora nueva es
una actuación que favorece la reducción de costes de mano de obra, especialmente
cuando se requiere cubrir un espacio muy amplio.
¿Qué son los rulos agrícolas?

El rulo agrícola está formado por varios elementos de sección circular que se colocan
perpendicularmente a un eje que les permite rodar mientras son arrastrados. Este
dispositivo se debe enganchar a un tractor o cualquier otro vehículo agrario para poder
arrastrarse y aplanar el suelo. Generalmente un enganche de un solo punto consigue
mantener la tracción.

Existen diversos modelos, como los rulos agrícolas hidráulicos y el rodillo de


rulos, ambos creados con el mismo objetivo. Su anchura de trabajo oscila entre los
1,5 m y los 7 m.

El rodillo de rulos está elaborado en diferentes diámetros, puede portar diferentes


elementos auxiliares flexibles, creados para nivelar el suelo y sellar el sembrado.

Características de los rulos agrícolas

Este dispositivo mejora el laboreo secundario. Los rulos nuevos se adaptan


perfectamente al terreno de trabajo, ya que cada rodillo está diseñado para aportar
unas condiciones específicas:

– Los rodillos lisos crean en el suelo una compactación ligera, esponjosa y estable.

– Los rodillos de rulos con elementos independientes y superficie rugosa, incrementa


la compactación de manera más considerable, especialmente si se aumenta la
velocidad de pasada.

Asimismo, la aplicación de rodillos rugosos favorece el asentamiento en las capas


intermedias, lo que permite que las semillas se cubran con tierra fina, dejando la
superficie aterronada y reduciendo el riesgo de que aparezca costra superficial después
de una lluvia intensa.

Tipos de rulos agrícolas

En función de las necesidades de cada agricultor, comercializamos diferentes tipos de


rulos. Entre los más destacados se encuentran los que figuran a continuación.
Rodillos lisos

Esta herramienta está formada por dos o más elementos cilíndricos que giran sobre un
eje común, montados sobre cojinetes. Cada sección está construida con acero
enrollado o hierro fundido. La estructura se mantiene por medio de radios.

Rodillo de listones o esqueleto

Este dispositivo posee una estructura de listones cilíndricos. La función de este rodillo
junto con el rodillo liso es compactar la tierra, principalmente.

Rodillos acanalados

Los rodillos acanalados sirven para crear zanjas en el suelo a medida que el apero pasa
por el área de laboreo. Están formados por un conjunto de ruedas de llanta cuneiforme.

Dentro de esta misma categoría podemos incluir los rodillos ‘Crosskill’ y


‘Cambridge’, los cuales difieren de los acanalados por los dientes que poseen las
ruedas. Gracias a ellos se evita el aplastamiento. Son ideales para terrenos húmedos y
arcillosos.

La variedad de suelos influye en los requerimientos de los dispositivos agrícolas, cuyo


mercado está creciendo enormemente para absorber las necesidades de los
profesionales. Por ello, comprar un rulo agrícola hoy en día resulta más asequible
que hace unos años.

En nuestro catálogo puedes encontrar rulos agrícolas baratos con la configuración


que más te convenga. Pregunta a nuestro departamento comercial por las opciones a
tu disposición.
PULVERIZACION TERRESTRE Y AEREA. VENTAJAS Y DESVENTAJAS
DE CADA UNA.

Equipo terrestre vs avión

Al momento de realizar una pulverización y decidir la herramienta de aplicación de


plaguicidas, debemos tener en cuenta el estado del cultivo y las condiciones
ambientales.

Considerando un cultivo de soja sembrado a 50 cm, con entresurco cerrado, una altura
de planta entre 80-90 cm, en estado fenológico R3 (principio de formación de vainas),
un equipo terrestre automotriz en suelo seco, provoca un pérdida por tránsito del orden
del 3%; para una expectativa de rendimiento de 40 qq/ha la pérdida es 120 kg/ha, que
traducida en pesos representa $120/ha. Un avión no produce estas pérdidas, entonces
al comparar alternativas existe un handicap de US 32/ha a favor de tratamientos
aéreos.

Para esta circunstancia de tratamiento fitosanitario, comparando costos, existe la falsa


idea de pensar que el avión resulta más costoso que un tratamiento terrestre, cuando
en verdad existe un ahorro de una relación 3:1 (por cada tratamiento terrestre pago 3
aéreos).

Aplicaciones aéreas bien realizadas

Para que la aplicación aérea de fungicidas en soja resulte óptima, se debe usar un
volumen de 15 lt/ha, y anchos de faja variables: 18m para aviones chicos y 20m para
aviones grandes.

La cantidad de gotas sobre el cultivo varían entre 50 gotas/cm2 para sistemas


aspersores rotativo y 35 gotas/cm2 para barra con picos. Esta cantidad de impactos
garantizan una penetración de 10 gotas/cm2 en el centro de la biomasa del cultivo,
promedio de 14 y 7 impactos en la base del tercio superior y medio respectivamente.
Cuando la humedad relativa es inferior al 40%, se recomienda no hacer tratamientos
porque no resulta posible mitigar la evaporación de las gotas chicas. Cuando las
condiciones de humedad superan el 60%, la evaporación no resulta significativa. En
situaciones intermedias, se recomienda el uso de aceite antievaporante, a dosis fija
entre 1 y 2 lt/ha, para atmósferas entre 50-60% y 40-50% respectivamente.
También se ha demostrado la ventaja del aceite de soja en tratamientos a 1 lt/ha, por
su mejor comportamiento en la protección de las gotas chicas. En todos los casos se
aconseja el uso de tensioactivo órgano siliconado (sólo y en mezcla con el
antievaporante) por dos razones bien fundamentadas: reduce el tamaño de gota, factor
esencial para una penetración profunda en la masa foliar, y además garantiza una
óptima absorción del fungicida en la hoja por su alta compatibilidad cuticular.

Teniendo en cuentas las condiciones meteorológicas actuales, donde llueve día por
medio, el tensioactivo reduce los riesgos por lavado minimizando las pérdidas de
fungicida por precipitaciones ocurridas 1 hora posterior al tratamiento.

Ventajas adicionales al utilizar avión

Si las enfermedades se inician en el estrato inferior de un cultivo y los fungicidas sólo


traslocan dentro de la hoja, resulta obvio que para lograr efectos de control hay que
distribuir la dosis apuntando al tercio inferior y medio del follaje. Teniendo en cuenta
los distintos estratos del cultivo, los equipos terrestres distribuyen entre 65 y 70% de
la dosis en el tercio superior, en cambio los aéreos (equipados con aspersores
rotativos) sólo el 45% en ese estrato. En el estrato inferior, llega el 20% con avión y
entre el 5 a 2.5% con terrestre, para cono hueco y doble abanico respectivamente. En
otras palabras, el avión ubica al menos 4 veces más dosis donde inicia la enfermedad.

Tratamientos con equipo terrestre

En cultivos altos y foliosos, el volumen de aspersión aconsejado es 150 lt/ha en


combinación con pastillas de cono hueco y alta presión (mínimo 70 lb/pg2 = 5
kg/cm2). La diferencia de respuesta por el uso de cono hueco, en comparación al doble
abanico plano, es de + 1 qq/ha; y la de utilizar un volumen 25% menor (110 vs 150
lt/ha) es - 1 qq/ha.
Esto debe interpretarse que en ambas situaciones, la baja en la respuesta supera el
costo del tratamiento, y en consecuencia resulta económicamente recomendable no
incurrir en ese error. Resulta importante entender la diferencia entre eficacia y
eficiencia, el fungicida incrementa el rinde (es eficaz), mal aplicado no es eficiente
(dejamos de ganar 200 kg/ha).
La recomendación de volumen depende del desarrollo de la masa foliar, en
consecuencia utilizando tarjetas sensibles deberemos lograr sobre el cultivo (sin
interposición de hojas) entre 200 a 250 gotas/cm2, con pastillas doble abanico y cono
hueco respectivamente. Esta cantidad de impactos garantizan una penetración de 120
gotas/cm2 en el centro de la biomasa del cultivo, promedio de 170 y 65 gotas/cm2 en
la base del tercio superior y medio respectivamente. Otras situaciones que producen
resultados deficientes con equipo terrestre son el uso de baja presión y un botalón
bajo, generando gota grande que impacta el estrato superior impidiendo la
incorporación profunda del asperjado. El tamaño de gota se reduce elevando la presión
y utilizando tensioactivo.

Relación beneficio-costo

Para fungicidas en soja está bien evaluado que la respuesta en rinde, en la amplia
mayoría de los casos, paga el tratamiento (fungicida a la dosis de control, más la
pulverización); con incrementos mínimos de 1 qq/ha, máximos entre 7-8 qq/ha, y
medios de 3-4 qq/ha. Además, cuando tenemos altas expectativas de rendimiento en
soja (con un piso de 40 qq/ha), no podemos dudar de la tecnología de fungicidas
cuando el sistema viene acompañado por condiciones que favorecen el desarrollo de
enfermedades. A mayor expectativa de rinde potencial, mayor respuesta al agregado
de fungicidas; tanto por el control de la enfermedad (básicamente Septoriosis) como
por el retraso en el amarilleo y caída de hojas, situación que prolonga el período de
llenado de granos.

Se conoce como deriva a las gotas asperjadas que caen fuera del blanco objeto del
tratamiento, y más específicamente como exoderiva aquellas que lo hacen fuera del
lote tratado. Las aplicaciones en bajos volúmenes necesitan gotas más pequeñas, y por
lo tanto están más sujetas a derivar. Los factores meteorológicos que condicionan o
predisponen esa situación son: la baja humedad relativa ambiente, la alta temperatura,
el viento fuerte y la inversión térmica.
Los dos primeros afectan la evaporación, reduciendo paulatinamente el tamaño de la
gota; el viento incrementa la componente horizontal de la composición del
movimiento de caída, y finalmente, bajo condiciones de inversión térmica la densidad
del aire por encima de la gota es menor que aquella ubicada por debajo, situación que
impide a la gota descender.

¿Qué es una inversión térmica?

Durante la noche el calor se pierde desde el suelo, especialmente en las noches


despejadas, por lo que la temperatura es muy baja a nivel del suelo.
Como el aire frío desciende, se mantiene cerca del suelo y los meteorólogos dicen que
hay una inversión.

En esa situación a menudo no hay viento, de tal forma que las pequeñas gotitas pueden
permanecer más tiempo en el aire, dando como consecuencia la aparición de nieblas
o neblinas durante la mañana. Una vez que el sol está sobre el horizonte, calentará la
atmósfera de forma tal que a medida que transcurre el día el suelo está más caliente,
y éste a su vez calentará el aire y, a medida que ese aire se eleve se produce un gradual
movimiento ascendente.

Como consecuencia, por desplazamiento, otros paquetes de aire frío descienden, y


con ese movimiento la atmósfera se hace más turbulenta; con la aparición del viento
se pierde la estratificación del aire que caracteriza una inversión. Por ese motivo los
meteorólogos hablan de atmósfera estable o turbulenta; las pulverizaciones agrícolas
no deben hacerse bajo condiciones de calma, es decir sin viento.

Consecuencias de pulverizar bajo condiciones de inversión

Como ejemplo, un avión trabaja a una altura entre 2 a 5 m, según tipo de avión, equipo
aspersor y condición del viento. En una atmósfera normal el aire por encima del avión
está más frío que debajo de él, en consecuencia existe un flujo descendente de aire,
que junto con la aerodinámica del vuelo ("efecto suelo") hacen que la aspersión baje
en dirección al cultivo. Por el contrario, bajo condiciones de inversión, el asperjado
queda flotando y las gotas continúan evaporándose y se trasladan por leves brisas de
dirección variable hasta que alcanzan una zona turbulenta y caen; o cuando
transformadas ya en un aerosol -e independizadas del tipo de atmósfera- viajan largas
distancias.

Cuantificación de la deriva

El tamaño de gota normal para bajos volúmenes varía entre 100-150µ, en cambio para
medios o altos volúmenes entre 200-350µ. Esto tiene implicancias importantes, aún
en una atmósfera turbulenta, en cuanto al tiempo de caída y al ritmo de evaporación.
Desde una altura de 3 m una gota de 100µ cae a una velocidad de 35 cm/seg y tarda
8.6 segundos en alcanzar el suelo; desde 60 cm de altura una gota de 250µ cae a 80
cm/seg alcanzando el suelo en sólo 0.75 segundos. La gota pequeña tarda 11.4 veces
más en caer, y tiene más posibilidades de evaporar. Además, una gota de 150µ
incrementa rápidamente su superficie específica (superficie por unidad de volumen,
responsable del fenómeno de evaporación) cuando pasa a tener 100µ, mientras que la
superficie específica cuando la gota pasa de 250 a 200µ se incrementa muy poco. Se
deduce entonces que las gotas más pequeñas tardan más en caer y se evaporan más
rápido.

Datos comparativos de ensayos para un mismo tamaño de gota, asperjada con avión
bajo atmósfera normal e invertida, demuestran un incremento entre 7 y 8 veces la
deriva: de 7.2 a 49.5 m de desplazamiento horizontal para gotas de 150µ; y 15.8 a 132
m para gotas de 100µ, respectivamente. Deducimos también que las gotas más
pequeñas derivan más, alejándose entre 50 y 130 m de la vertical de caída cuando hay
inversión; mientras que bajo atmósfera turbulenta el alejamiento es mucho menor,
oscilando entre 7 y 16 m (Brooks, FA, 1947; EPA-USA, 1976).

Los mismos autores ofrecen datos para una gota gruesa de 400µ, con valores de deriva
de 3 a 15 m, para condición normal e invertida respectivamente; por lo cual deducimos
que el fenómeno de inversión también afecta a los tratamientos terrestres,
incrementando 5 veces la deriva.
Causas de la deriva en aplicación aérea
Según Fritzs, BK (2003) las causas de deriva pueden dividirse en controlables e
incontrolables, pero evitables. Las primeras corresponden a la configuración y
calibración del equipo aspersor: longitud del botalón, tipo y orientación del aspersor,
presión de trabajo y tamaño de gota. Entre las evitables o remediables figuran: la
velocidad y dirección del viento, la baja humedad relativa, la alta temperatura y la
estabilidad atmosférica, que denominamos inversión térmica. En esta categoría la
única remediable con antievaporantes es la baja humedad; el resto condicionan la
posibilidad de realizar el trabajo.

Deducimos entonces que el aplicador es el responsable de considerar estos factores y


del ajuste de las técnicas de aplicación, acorde a las circunstancias dadas, para reducir
el peligro de deriva tanto como sea posible.
Sin lugar a dudas los efectos más notables de una deriva por inversión se registran al
aplicar herbicidas con avión, no tanto con insecticidas y mucho menos con fungicidas.
No obstante en todos los casos se contribuye a la contaminación ambiental y a reducir
la eficiencia de los plaguicidas.

Indicadores verificables por el piloto

Transcribimos a continuación recomendaciones de dos especialistas en pulverización


aérea, de reconocimiento internacional (Dennis R. Gardisser & Dennis K.
Kuhlman,1992), tendientes a reducir la deriva, y con énfasis en la evaluación de
condiciones de inversión térmica.

"Un piloto también tienen que estar alerta para detectar señales de una inversión
térmica (aire frío a nivel del suelo con una capa de aire caliente más arriba).
A menudo ocurre cuando las velocidades del viento son muy bajas o sólo hay viento
a baja altura. Puede haber alta deposición del asperjado durante las inversiones
térmicas, pero la dirección hacia donde se mueve la deriva de pesticidas resulta
incierta. Los vientos cambiantes puedan causar daños a un cultivo adyacente y en
cualquier dirección durante una aplicación de herbicidas".
"Un piloto puede determinar la presencia de una fuerte inversión observando un
aumento de la temperatura del aire exterior cuando su avión asciende a 30 metros de
altitud. De no observarse un cambio en la temperatura del aire exterior no es garantía
que no exista inversión, pero podría ser el único indicador disponible para el piloto.
La observación de los movimientos del viento, el polvo de los caminos de tierra, humo
o vapor de las plantas industriales, por ejemplo, proporcionará indicadores de la
estabilidad del aire.
La situación de inversión puedo variar de 15 metros a 150-300 metros, o más por
encima del nivel del terreno".

"La principal amenaza es, pues, un gradiente de temperatura que causa que el aire se
eleve y se estanque. El humo que se eleva desde una fuente de calor desde suelo y
alcanza un techo es una indicación ideal de un severo
estancamiento del aire debido a las condiciones de inversión térmica. Bancos de
neblina en el suelo suspendido a la altura del parabrisas, bruma o niebla espesa a través
de un arroyo o depresión, son también indicadores de condiciones de inversión".

"Se pueden formar inversiones localizadas sobre los campos que están mojados o
inundados, que van desde un campo de arroz inundado a un campo de maíz bajo
sistema de riego de pivote central, debido a las bajas temperaturas que existen junto a
la tierra o a los espejos de agua. Estas condiciones pueden ser localizadas y lo
suficientemente fuertes para impedir la penetración de la aspersión dentro del follaje
del cultivo. El humo producido por el aceite arrojado contra el escape de un avión
debe descender hacia el cultivo, cuando la atmósfera está en una condición normal
(turbulenta)".

"La temperatura del aire y la humedad tienen un efecto pronunciado en la tasa de


evaporación de las gotas, así como la actividad de algunos plaguicidas. La
evaporación del agua, o los solventes volátiles, se vuelven críticos con gotas de menos
de 100 micras de diámetro".

"Humedad relativa superior al 70 por ciento es lo ideal. Una humedad relativa por
debajo del 50 por ciento justifica la aplicación de ajustes especiales (antievaporantes,
e.g. aceite). Temperatura, el viento y la humedad relativa no son independientes.
Posicionando las boquillas hacia atrás, con orificios grandes y/o reduciendo la presión
de pulverización son métodos válidos para aumentar el tamaño inicial de la gota. Uno
de estos simples ajustes podría ser una solución para prevenir una falla del control".

"Aplicaciones a la mañana temprano combinan condiciones meteorológicas deseables


para una buena pulverización, como ser bajas temperaturas, velocidad del viento ideal
(entre 5 y 8 km/h) y alta humedad relativa (mayor a 60% HR). Cuando una aplicación
debe hacerse después de las 9 de la mañana o antes de las 7 PM, la pulverización
requerirá de un poco de viento, humedad alta, y día fresco. Cuando este no sea el caso,
el aumento del tamaño de la gota y el volumen total por hectárea resultan necesarios
para lograr que el plaguicida llegue a la meta".

"Costo, riesgo, y porcentaje de eficacia de control de plagas son factores que el


aplicador debe considerar y discutir con el productor. Sin embargo, la aplicación de
ciertos pesticidas alrededor de los cultivos sensibles o lugares delicados, simplemente
no se debe realizar bajo condiciones climáticas adversas. Se debe dejar una zona de
amortiguación amplia y, en estos casos, la pulverización terrestre puede ser la mejor
solución en sitios considerados de aplicación sensible".

"El objetivo de cualquier aplicación es colocar correctamente el material con respecto


a la plaga y la planta de modo que el pesticida pueda actuar. La más valiosa
herramienta que el aplicador aéreo debe ejercitar es la acumulación de materia gris
entre las orejas (capacitarse y experimentar)".

Torre de inversión térmica

Con el propósito de cuantificar las diferencias de temperatura a distintas alturas y el


viento equidistante a ellas se construyó una torre de inversión térmica de 10 m de
altura. Consta de dos termómetros ubicados a 2,5 y 10 m de altura con un anemómetro
de cazoletas ubicado a 5 m del suelo. Los termómetros tienen una precisión de 5
centésimas de grado (? ± 0.05 ºC) y el anemómetro mide el viento con una precisión
de 0.5 km/hora.
Los termómetros están encerrados por tres cilindros concéntricos de 50 cm de largo,
con un ventilador eléctrico en la parte superior que fuerza el aire externo a circular en
derredor de la termocupla.

Una consola estanca ubicada a la altura del operador registra y almacena la


información a intervalos de 10 minutos durante un año. Una plaqueta de circuito
integrado calcula las diferencias de temperatura y combina los datos de viento para
calcular un índice de estabilidad atmosférica.
El conjunto cuenta con una batería de 12 V que se utiliza para el caso de eventuales
cortes del suministro eléctrico. Además, un enlace a distancia permite visualizar la
información en una PC hasta una distancia de 800 m.

FERTILIZADORAS
Las que pagan con abono. Los equipos fertilizadores constituyen uno de los
segmentos más dinámicos de los últimos 20 años en la industria de maquinaria
agrícola. Un total de 36 empresas participan en este mercado,

La aplicación de fertilizantes y su
mecanizado son procesos relativamente recientes en la agricultura argentina. El uso
de nutrientes para el suelo pasó de 800.000 toneladas en 1994 a 3,2 millones de
toneladas incorporadas durante la última campaña, con un crecimiento de 300%.
Ello tuvo su correlato en la industria de la maquinaria, que en los últimos cinco años
reportó más de 100 novedades en el rubro.
Pese a esos números, fertilizar es todavía una deuda del agro. Los especialistas
remarcan la caída de 24% en el contenido de la materia orgánica en las zonas
agrícolas, con notorios déficits en los rangos de nitrógeno, fósforo azufre y
micronutrientes. A ese cuadro se suman, en los últimos ciclos, las deficiencias de
potasio.

Frente a una producción granaria que creció de 40 millones de toneladas en la primera


mitad de los años ´90 a más de 100 millones en el ciclo pasado, la reposición marcha
a otro ritmo.

Según la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (CIAFA)


y Fertilizar Asociación Civil, se aplica en Argentina la mitad de la dosis necesaria. En
lugar de 3 millones de toneladas de fertilizantes por campaña, debería ser el doble.

De acuerdo con evaluaciones del INTA, la “exportación” neta de nutrientes en los


granos durante cada campaña llega a 2,57 millones de toneladas, lo que equivale a
una cifra estimada en U$S 3.630 millones.

Según los productos

La aplicación de fertilizantes sólidos o inorgánicos de formulación química es la


dominante. De todo el mercado argentino, 91% se reparte entre nitrogenados (47%) y
fosfatados (47%).
Los fertilizantes líquidos, en tanto, vienen ganando terreno de la mano del nitrógeno
bajo la forma de nitrato de amonio (UAN). También crecen las variantes nutricionales
orgánicas. Provienen de la intensificación ganadera y de la avicultura. Se dividen en
cama de pollos, efluentes de tambos y residuos sólidos generados en los feedlots.

La corrección de suelos ácidos con yeso y otros productos se convirtió en una práctica
que demandó opciones para su mecanización.
La agricultura extensiva es la principal demandante de nutrición. Entre la soja, el maíz
y el trigo se reparten cerca de 83% del consumo total de fertilizantes en cada campaña.

Sobre ese panorama se abre el abanico de respuestas tecnológicas de la industria de


maquinaria agrícola para que los fertilizantes lleguen a los suelos y a los cultivos.

Oferta

Un total de 36 empresas compiten en el mercado nacional de fertilizadoras, con una


oferta disponible de 143 modelos relevados por MaquiNAC, incluyendo esparcidoras
de doble disco, monodisco y pendulares, más las distintas opciones de distribución
neumática e incorporadoras de sólidos y líquidos.

Cabe consignar que, a los efectos de este informe, en el caso de las abonadoras
orgánicas sólo se computaron los modelos con distribución doble disco (que
generalmente también se adaptan para aplicación de abonos químicos o calcáreos),
por lo que a la cifra apuntada habría que sumarle otros 60 modelos correspondientes
a tanques estercoleros y carros distribuidores de guano. Por cierto, tampoco se
consideraron en este trabajo las pulverizadoras equipadas para aplicaciones de abonos
líquidos.

Provincias

Al igual que en otros rubros, Santa Fe lidera las estadísticas, con 47% de las empresas
que participan en el segmento (17 compañías). Le siguen Buenos Aires (11 empresas,
31%) y Córdoba (8 empresas, 22%). La totalidad de la oferta relevada en este
segmento corresponde a equipos fabricados en el país.
Formato

Las fertilizadoras de arrastre son moneda corriente en el mercado nacional, con 123
modelos que cuentan con opciones de este tipo (86% del total), en tanto que 31
modelos disponen de variantes con acople de 3 puntos (22%).

Aunque todavía son minoría, las fertilizadoras autopropulsadas conforman un nicho


que promete crecer en los próximos años. Actualmente, existen 11 modelos
disponibles (8%), a las que se agregan los desarrollos de equipos convencionales
montables sobre chasis de pulverizadoras o camiones, como los presentados
recientemente por Syra y Metalúrgica SR.

Distribución

Las esparcidoras de doble disco han copado el mercado argentino de fertilizadoras,


con 98 modelos disponibles y una participación de 68% en la oferta total. Versatilidad
y mayor ancho de labor son las cartas fuertes de este tipo de equipos. Muy lejos le
siguen las fertilizadoras pendulares y monodisco (8 modelos, 6%), opciones que
sobreviven en modelos de más antigua data y de menor porte.

Por cierto, las fertilizadoras neumáticas (12 modelos, 8%) constituyen una alternativa
a seguir cuando se apunta a maximizar la calidad en la distribución, al igual que las
incorporadoras de sólidos y líquidos (21 modelos, 15%), aunque en este caso a
menudo se ven desplazadas por las sembradoras con sistemas variados de
fertilización.

Ancho de labor

De la mano de los avances tecnológicos aplicados a la distribución de doble disco, las


fertilizadoras de nueva generación sobresalen por su gran cobertura. Un 44% de las
esparcidoras de doble disco disponibles en el mercado ofrece un ancho de labor de
más de 30 metros, con un rango de aplicación que en general se ubica entre 12 y 36
metros.

Capacidad de tolvas

En paralelo a los avances en materia de cobertura crece la demanda de equipos con


mayor autonomía. 21% de los modelos disponibles cuenta con más de 6.000 litros de
capacidad de tolva.
Tendencias
Las fertilizadoras registraron un amplio cuadro de innovaciones en los últimos 15
años. Los parámetros más destacados que han experimentado transformaciones, son
los siguientes:

Estructura de los equipos

 Capacidad. La fertilización correcta enfrenta dos desafíos: efectuar la tarea


en determinados períodos y de modo rápido y, al mismo tiempo, aplicar las
dosis justas para optimizar la relación costo/beneficio. Eficacia y velocidad
son las dos cuestiones a definir. Un indicador técnico que sostiene el
rendimiento del equipo es su autonomía de trabajo. A mayor autonomía,
menor pérdida de tiempo empleado en la carga. Atendiendo a esa necesidad,
las tolvas han ampliado progresivamente sus capacidades. Mientras en la
década pasada dominaban los modelos de 1.500/3.000 litros, en las campañas
más recientes aparecieron opciones con tolvas de 8.000/15.000 litros.
 Durabilidad. Los modelos lanzados en el país fueron incorporando tolvas
construidas con plástico o acero inoxidable para hacer frente a la corrosión
provocadas por los fertilizantes. En particular, creció la fabricación de tolvas
de material plástico rotomoldeado. Es un material que, además de soportar
mejor que la chapa el efecto desgastante de los agroquímicos, ofrece la ventaja
de generar menor condensación en las paredes interiores.

Arrastre o motorización

 Autopropulsadas. Hasta hace sólo ocho años, el mercado argentino de


fertilizadoras se componía de máquinas de arrastre. En 2007 comenzó el
surgimiento de las autopropulsadas cuando Pla presentó el primer prototipo y
en 2009 se sumó Fertec. Después se añadieron otras empresas. Los modelos
con motorización propia hacen otro aporte al objetivo de mayor autonomía de
los equipos. Además, proponen el beneficio de chasis configurados con mayor
despeje, trocha variable y rodados apropiados para los distintos tipos de
aplicaciones.

Precisión

 Dosificación variable. El concepto de heterogeneidad de los lotes desplazó a


la dosis fija en favor de la dosificación variable en tiempo real y los
mecanismos para llevarla a la práctica. Con la asistencia de mapas de
prescripción, se fue avanzando en la aplicación de fertilizantes por sitio
específico, reduciendo la cantidad de insumos utilizados.
 Computadoras. Las computadoras de fertilización constituyen otro avance
tecnológico que se acopla a la contribución que hacen los mapas
georeferenciados. Uno de los beneficios de las computadoras es que generan
un corte automático de la aplicación en zonas ya fertilizadas. Además, la
información acumulada se puede descargar y gestionar en un software para
visualizar los patrones de aplicación.
 Sensores. Un paso más adelante hacia el futuro de la fertilización lo
constituyen los sensores para evaluar parámetros específicos de los cultivos.
Con la interpretación inteligente de la combinación del índice verde y biomasa
en tiempo real, se podrá prescindir, incluso, de los mapas georeferenciados.

Diversificación
Al ampliarse la gama de productos utilizados para la nutrición de los suelos, se
diversificaron correlativamente los equipos para mecanizar esa labor.

 Sólidos en polvo. Fueron apareciendo fertilizadoras para aplicar fertilizantes


minerales sólidos en polvo, los cuales permiten maximizar la respuesta del
fertilizante en 2,5 a 10 veces con respecto al granulado (partículas de 1,5 mm
a 4,5 mm). Cuanto más pequeñas sean las partículas, más rápida es la reacción
(por ejemplo, yeso y dolomita).
 Fertilizantes líquidos. También se lanzaron equipos para trabajar con
fertilizantes líquidos. Estos fertilizantes tuvieron un considerable avance,
especialmente en lo que concierne a fuentes nitrogenadas (UAN o nitrato de
amonio), la más requeridas en pos-emergencia. Los nutrientes líquidos
permiten mayor uniformidad en la aplicación que los sólidos y se pueden usar
en días de mucha humedad.

 Abono y estiércol. La intensificación de la ganadería bovina y porcina y el


crecimiento de la industria avícola, derivo en una enorme masa de
excrementos. Al mismo tiempo que demandaba eliminarla, constituía una gran
fuente de nutrición para la agricultura. De ese modo, se empezaron a fabricar
sistemas distribuidores de abonos sólidos y líquidos con distintas variantes.
 Encalado. También la práctica del encalamiento para corregir suelos ácidos
impulsó la aparición de equipos específicos, adaptados para tal función en
cuanto a los componentes de la tolva, los mecanismos de acarreo y los sistemas
de distribución.

Marcas
A continuación, proponemos un repaso de las principales marcas que participan en el
mercado de fertilizadoras en Argentina. Se puede acceder a los datos técnicos de los
equipos haciendo click en el nombre de cada modelo.

FERTEC. La marca de referencia en el mercado de fertilizadoras presentó en 2015


la nueva Serie 5 de equipos esparcidores, con un diseño adaptativo basado en mayor
ancho de labor con mínimo coeficiente de variación en la aplicación, adaptación para
aplicación de distintos tipos de materiales, compatilididad con herramientas de
Agricultura de Precisión, calidad constructiva con mínimo mantenimiento y seguridad
para el operador. Incluye versiones de arrastre de 3.000 a 9.000 litros de capacidad.
También cuenta con la línea de autopropulsadas, de 6.000 a 10.000 litros.

INDECAR. Renovó en 2014 la desparramadora de abonos orgánicos DO-12, apta


para la aplicación de todo tipo de residuos y abonos orgánicos sólidos. Opera con
tolva de 12.000 litros (hasta 10 toneladas), acarreador con triple cadena y distribución
por platos con paletas en chapa antidesgaste Hardox (8 metros).

 Abonadora Indecar DO12


METALFOR. Presentó en 2012 la fertilizadora autopropulsada 7050, con tolva de
acero inoxidable (4.000 litros) y doble disco esparcidor (hasta 35 metros). En 2014 le
sumó la línea de arrastre, en versiones de 4.000 y 8.000 litros, a las que esta campaña
le agregó la opción FSA 3000 (3.000 litros). La compañía de Marcos Juárez
(Córdoba) también dispone de incorporadoras de sólidos y líquidos.

PLA. Debutó en el segmento en 2014 con la presentación de la novedosa fertilizadora


neumática MAF 6000, galardonada con un Premio MaquiNAC a los mejores
lanzamientos del año. Opera con tolva de 3.600 litros (hasta 7.200 Kg) y alas de 30
metros. En 2015 sumó la opción económica MAF 5000, con transmisión mecánica
4×2, tolva de 3.522 litros (4.000 Kg) y barral de 25 metros.

SYRA. La compañía especializada en equipos de fertilización cuenta con una amplia


línea de modelos para aplicaciones de abonos químicos y orgánicos. Entre las últimas
novedades se destaca la Línea Extreme, en versiones de 8.000 litros (12 toneladas) y
12.000 litros (15 toneladas), con cinta transportadora de gran capacidad y disco
esparcidor (hasta 36 metros). En 2013 presentó el modelo 4000 Electronic, con tolva
de 4.000 Kg de capacidad con caída del material por gravedad y dosificación variable
electrónica.
TANZI. Fabrica la línea de fertilizadora pendulares, en versiones de 600, 800, 1.000
y 1.500 litros de capacidad, con chasis de arrastre o 3 puntos.

VICTOR JURI. Ofrece la fertilizadora incorporadora neumática MY 3.20, apta para


aplicaciones de precisión de abonos sólidos o semillas en siembra directa,
convencional o al voleo. Puede ser configurada en 14 líneas a 52,5 cm (10×70 cm), lo
que reporta un ancho de labor de 7/7,35 metros), más la alternativa de aplicaciones al
voleo con ciclones montados sobre los marcadores (15 metros de ancho de cobertura).

 Fertilizadora Víctor Juri MY 3.20

YOMEL. En 2014 lanzó al mercado la novedosa fertilizadora Impala Truck 25000,


montada sobre camión, apta para aplicaciones de abonos granulados y en polvo, con
tolva de 15.000 litros y distribución de doble disco (hasta 36 metros). El desarrolló
fue galardonado con un Premio MaquiNAC a los mejores lanzamientos del año.
También presentó la fertilizadora Impala 8000 Organic, apta para la distribución de
abonos orgánicos, de 8.000 Kg de capacidad (3.750 litros), y la nueva línea de
fertilizadoras Flex, en versiones de 1.000 y 1.300 litros, con chasis de arrastre o 3
puntos, entre otras novedades.
ALTINA. De larga tradición en el mercado de fertilizadoras neumáticas, desarrolló
junto a Pla un equipo autopropulsado con tolva de 3.600 litros y barral de 30 metros
de ancho de labor. La marca de Zenón Pereyra (Santa Fe) la comercializa con la
denominación Jean LD. También dispone de una amplia línea de fertilizadoras
neumáticas de arrastre, en versiones de 2.000 a 5.000 litros de capacidad.

BERNARDÍN. Desembarcó en 2014 en el segmento con la presentación del modelo


autopropulsado Omega 5000, con tolva de 5.000 litros y doble disco esparcidor
(11/44 metros). En 2015 le sumó las opciones de arrastre de la
línea Conqueror (5.000/9.000 litros) y cuatro versiones de 3 puntos de la
línea Infinity (900/1.250/1.700/2.500 litros).

FERTILIZADORAS SR. Renovó en 2014 la línea de


fertilizadoras DP(Dosificación Precisa), con distribución doble disco y versiones de
3.000 a 9.200 litros de capacidad. En 2015 sumó la abonadora DP Orgánica 8000, de
8.000 litros de capacidad, extensible a 12.000 litros. La compañía de Colón (Buenos
Aires) también fabrica fertilizadoras incorporadoras, con chasis modular, tiro de punta
y autotrailer.
TEDESCHI. Presentó en 2011 la fertilizadora autopropulsada DMF 5500 Lts, un
equipo que combina una esparcidora Syra, montada sobre un chasis de pulverizadora
Tedeschi M 3000. Opera con motor de 126 HP, tolva de 5.500 litros, doble disco
esparcidor (hasta 36 metros) y dosificación por cinta transportadora.

GIMETAL. Presentó en 2015 la fertilizadora de arrastre EDR 8000, con tolva de


acero inoxidable de 8.000 litros y sistema de distribución doble disco (hasta 30 metros
de ancho de labor. Se suma a los modelos EDR 1500 (1.500 litros) y EDR
3000 (3.000 litros).

Otras marcas
El Manejo Sitio Específico (MSE) de malezas es un tema que aún muestra un enorme
potencial de desarrollo tecnológico ya que hay temas no del todo resueltos hoy en día.
Sí existen y tenemos en el mercado desarrollos útiles que marcan el camino y con
buenos resultados.

Las dosis de aplicación de herbicidas a campo no son variables como pueden serlo las
dosis de fertilizantes. Estos fitosanitarios se aplican o no, por motivos netamente
agronómicos y de efecto biológico. Asimismo, alterar uno solo de los parámetros de
pulverización, como el caudal, incide y modifica los resultados de la misma, como
tamaño y distribución de gotas.

El control de malezas en los sistemas convencionales, consiste en la aplicación de una


única dosis en cobertura total sobre el terreno, pero el concepto de MSE busca un
manejo diferente. Es sabido que la distribución de malezas tiende a ser en manchones
con diferente densidad de las distintas especies. Por este motivo muchos
investigadores, consideran que el MSE ideal debe basarse en tres aspectos
fundamentales: el herbicida adecuado, la dosis adecuada y el lugar correcto. Esto se
contrapone con la metodología actual ya mencionada. Pero claro, la puesta en práctica
de esto no resulta tan sencilla.

Modulación eléctrica

Una de las opciones disponibles en el mercado es el sistema compuesto por una


válvula llamada PWM, se trata de una electro válvula del tipo solenoide, de rápida
respuesta, en cada pico pulverizador. Ésta es la encargada de la apertura y cierre del
paso del líquido. Cada ciclo de apertura o cierre demora solo 4 milisegundos (0.004
sg.) en responder al impulso eléctrico responsable de la apertura y cierre, controlado,
claro está, por una computadora autónoma, la cual decide la aplicación en función de
un mapa georreferenciado precargado, y de la señal satelital recibida por su
correspondiente antena.

Los resultados de esta tecnología indican que se minimiza y casi anula el efecto de
inercia que presentan otros sistemas de inyección del fitosanitario en el flujo de caldo.
Pero resulta claro que solo puede utilizarse un producto o mezcla de productos a la
vez, no pueden utilizarse diferentes productos en distintos sectores del lote, en la
misma aplicación.

Un ensayo citado por los técnicos del INTA muestra valores bajos de variabilidad en
los parámetros de caudal por pico y de distribución del caudal en todo el ancho del
botalón.

Para el caso de los fertilizantes, los autores de la publicación mencionan un trabajo


realizado con amonio líquido, el cual concluye que las válvulas de este tipo se adecúan
bien a la aplicación de este tipo de abono en un amplio rango de dosis, caudal y
presiones.
Combinación automática

El diseño de este sistema consiste en colocar más de un pico en cada punto de


pulverización, y cada uno con una diferente pastilla, desde ya. Todos los puntos de
pulverización deben llevar la misma combinación. Es decir que si en cada punto hay
cuatro picos y pastillas, la secuencia debe repetirse de igual modo en todos los puntos.

De este modo ante la necesidad de variaciones en el caudal, la computadora activa la


combinación de pastillas que mejor se adapta a la descarga del caudal requerido. Esto
se logra sin variaciones en la presión de trabajo. Se consiguen así caudales mas allá
de los límites que impone una única pastilla.

Claramente la gran cantidad de posibilidades en la combinación de pastillas permite


trabajar con un amplio rango de caudales de campo. Todo esto ocurre, claro está, sin
que el operario se baje de la máquina; el sistema funciona con una computadora y la
antena receptora de señal satelital.

El concepto general de que los lotes de producción agrícola no son espacialmente


uniformes no es nuevo. Es evidente que existe gran variabilidad espacial a nivel intra-
lote en el tipo de suelo y propiedades edáficas, disponibilidad de nutrientes,
rendimiento de cultivos, contenido de proteína en grano, exportación de nutrientes
con las cosechas y respuesta por parte de numerosos cultivos a la aplicación de
fertilizantes y a variaciones en la densidad de siembra. Si bien la variabilidad espacial
ha sido reconocida desde los inicios de la agricultura, en el pasado reciente los
productores agrícolas no disponían de las herramientas necesarias para cuantificar y
manejar efectivamente dicha heterogeneidad, por lo que solo se empleaban estrategias
productivas espacialmente rígidas con las que podían alcanzar altos niveles de
rendimiento, pero no necesariamente alta eficiencia productiva.

Agricultura de Precisión

En la mayoría de los lotes de producción, la variabilidad natural o adquirida de la


fertilidad del suelo y/o de la productividad de los cultivos hace que la siembra y
fertilización uniforme tiendan a que los niveles de insumos empleados sean excesivos
o insuficientes, lo que deriva en potenciales problemas ambientales y pérdidas de
rentabilidad. Desde inicios de la década del 90, comenzaron a desarrollarse
tecnologías y principios para manejar la variabilidad espacial (y temporal) de los
factores que determinan en mayor medida la producción agrícola, a fin de incrementar
los rendimientos, elevar la eficiencia del uso de los insumos y preservar la calidad
ambiental. El desarrollo de nuevas tecnologías, englobadas en el concepto de
“Agricultura de Precisión”, como los sistemas de geoposisionamiento global (GPS),
sistemas de información geográficos (GIS), monitores de rendimiento, sensores de
suelo y cultivo, imágenes aéreas y satelitales, sistemas de siembra y fertilización
variable, entre otros, transformaron en realidad la posibilidad de diagnosticar y variar
los niveles de insumos a aplicar dentro del lote a una escala en la cual en el pasado
era impracticable. En este contexto nace el “manejo sitio-específico”, que permite
detectar, cuantificar y manejar la variabilidad espacial con el objetivo de aumentar la
eficiencia productiva y disminuir el impacto ambiental.

Si bien la tecnología hoy presente tiene altísima potencialidad, el desafío actual radica
en identificar áreas o zonas dentro de un lote con diferente probabilidad y magnitud
de repuesta a la aplicación de insumos por parte de los cultivos. A su vez, el éxito del
uso de la agricultura de precisión se basa en la habilidad de aplicar los niveles óptimos
de insumos en dichas áreas homogéneas a través de un adecuado diagnóstico basado
preferentemente en múltiples capas de información (Fig. 1). Sin embargo, la
implementación de herramientas de caracterización ambiental, diagnóstico y siembra
o fertilización variable también debe considerar la relación costo-beneficio a fin de
resultar en un incremento significativo en la rentabilidad del productor respecto al
manejo tradicional.

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