Lección 145 1

Noviembre de 2008
Pastor Dr. Marcelo D’Emilio
Lección Nº 145 para grupos celulares
Tema: “No temas”
Libro de Daniel 10:1-12

Creo yo que la mayor experiencia que un cristiano puede tener es encontrarse cara
a cara con Dios. Pero no estoy hablando de ese encuentro que uno experimenta en
el mundo espiritual de saber que Dios está, porque a la verdad la Palabra dice que
donde haya dos o tres en mi nombre allí estaré, sino que estoy hablando de otro
tipo de encuentro, cuando El se materializa y se hace visible a los ojos de las
personas. Y cada vez que en la Palabra el Señor se ha apersonado a algunos de
aquellos profetas o personas hubo una razón, y un propósito, y obviamente hubo
una reacción, y una palabra. Una de esas apariciones yo la encuentro en el libro de
Daniel en el cap.10 (Leer cap.10:1-12) Aquí tenemos una razón y una gran
catástrofe, porque el mal era grande, Israel estaba asolada, estaba cautiva. No
solamente miserias morales y espirituales, sino también miserias económicas,
privados de la libertad y de los elementos esenciales de la vida. El estado era tan
calamitoso que el mismo Daniel había entrado en una situación de extrema
angustia. Y hay que imaginarse cuál era la situación porque él mismo dice en el
texto que no se ungió con aceite, eso significa que durante 21días no solo no comió
sino que no se bañó. Son de esas angustias capaces de quitarle el hambre a uno y
la voluntad de asearse por tres semanas. Hay una razón, y por aquella razón se
aparece el Señor, y la aparición de El (vs.5 y 6) produce una reacción. El Dios
infinito, el Dios incalculable, incontenible, ahora parece ser medible y se presenta
frente a él, y obviamente la reacción: Caí como muerto y mi fortaleza se transformó
en desfallecimiento y no hubo fuerza en mí... Es el choque de dos mundos, es
cuando el mundo sobrenatural se hace presente en este mundo natural y el hombre,
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crea o no crea en Dios, si Dios se aparece no puede quedar de la misma manera. A

mí me encanta, cuando leo la historia, imaginar cuando una turba de incrédulos
vinieron a buscar a Jesús en Getsemaní y preguntaron a donde estaba El, y cuando
el Maestro dio un paso hacia adelante y dijo: Yo Soy... dice el texto bíblico que
cayeron de trompa en el suelo, porque cuando El se presenta, no importa lo que
pueda creer la persona y cuán ateo sea pero algo acontece en la vida de las
personas. Una reacción. Pero lo más importante es que hubo una palabra que
repite el Señor cada vez que aparece. Cualquiera sea la circunstancia, cualquiera
sea el protagonista, y esta palabra es “No temas”.

Dice el texto que el temor que tenía Daniel era no ser oído. El texto dice: No temas,
porque por causa de tu oración han sido oídas tus palabras.. . Y el temor de Daniel
se traduce como alguien que teme no ser comprendido. Estaba afligido, angustiado,
y levantó los ojos al cielo y le presentó al Señor su angustia, pero en medio de la
aflicción y la angustia siente la sensación y el temor de que no comprendan lo que
él está viviendo. Y hay personas que tienen temor, y tienen más temor de no ser
comprendidos que de no ser ayudados. Hay gente que dice dolerles más que no los
entiendan que lo que están viviendo, porque les produce una desilusión, porque en
medio de la soledad en la que deben caminar y sobrellevar esta angustia que es
inexplicable, los hace sentir que no pueden poner por palabras cuanto les duele.
Quizás nadie pueda resolverte el dilema, quizás nadie pueda ayudarlos, ni pueda
orientarlos, pero lo que pedimos a veces no es ayuda ni orientación sino
comprensión. Y déjeme decirles que comprensión no significa que me den la razón,
porque quizás no la tenga, quizás esté sufriendo exclusivamente por un error mío,
una mala decisión, pero no busco aprobación solo comprensión, que entiendan
cuanto me está doliendo. Porque yo creo que la comprensión está íntimamente
ligada con el amor, o por lo menos es lo que se cree. Es que uno espera y anhela
que nuestros seres queridos nos comprendan y a veces parece que los que nos
aman no nos aman tanto porque son los más duros de poder comprender. No es
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que acepten lo que digo, no es que den razón, no es que me aprueben sino que
simplemente alguien tenga empatía, se ponga solo un minuto en mi lugar. Cuando
Job perdió a su esposa y a sus diez hijos usted encuentra en el relato un episodio,
tiene tanto dolor ese hombre que sin saber como decirlo mira al cielo y dice: ¡Quién
me diera hallar a Dios... quiero subir a su trono y exponer mi causa! que traducido
es: Le quiero decir que el dolor me está matando... El hecho que te comprendan
significa que no te dejan solo en el camino del dolor. Nos da la idea que la carga es
compartida. Y a veces es mucho más simple que esto, que nos presten el oído. No
siempre importa si alguien puede resolver lo que vivimos, o puede ayudarnos, a
veces es necesario que nos presten el oído. Y ese era el cuadro de Daniel, tenía
temor de que no comprendieran lo que estaba viviendo y en ese temor se aparece
Dios y se produce una reacción. Hay una razón por la cuál Dios vino, pero la frase
que el Señor soltó fue simple: “No temas porque yo sí he comprendido lo que te
está pasando, y aunque otros no te entiendan, aunque otros no alcancen a
dimencionar la profundidad de tu conflicto y tu dolor, aunque alguien no te resuelva
la angustia, las insatisfacciones, inseguridades, y los miedos, el Señor te dice hoy:
Yo he comprendido, comprendo lo que sientes, el dolor, la actitud, y la necesidad, y
a causa de la comprensión que tengo sobre ti hoy me he hecho presente para
decirte “No temas, que aunque nadie te entienda y nadie te comprenda el Señor te
ha comprendido”. Lo maravilloso del Señor es que los dolores que no se pueden
poner por palabra no hacen falta expresarlos porque El ya ha oído tus palabras, tus
lágrimas, tu desesperación, tu voz quebrada, tu angustia, y aunque hayas cerrado la
puerta para evitar que otros puedan observar el cuadro de tu angustia, y aunque
hayas disimulado tu tristeza delante de los demás ¡No temas, porque el Señor
comprende lo que estás viviendo!.

Otra vez que el Señor aparece es en el libro de Marcos 5:22 y 23; 34y 36, y dice
(Leer) No hace falta que yo dedique tiempo para describirles lo que debe ser,
especialmente los que somos padres, tener una pequeña de doce años agonizando.
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No es que está enferma, es que ya pasó a un cuadro mayor, está agonizando y se

sabe que el resultado es la muerte. Si la niña no entra en el estado de agonía
obviamente que la esperanza puede seguir intacta y es lo que sostiene a muchas
personas para afrontar problemas. A veces cuando un ser querido nuestro está
caminando hacia la muerte el Señor es tan tierno con nosotros que nos reviste con
una especie de unción de esperanza. Todo el mundo sabe alrededor que la persona
se va a morir pero usted no acepta eso porque todavía tiene fe. Pero el cuadro de
este hombre es trágico porque ya no tiene esperanza. El entró en aquella dimensión
que entran algunas personas de imaginar lo peor. El le rogaba a Jesús porque en
su mente ya se imaginaba lo peor, se imaginaba que su hija ya estaría muerta. Y
déjeme decirle que el estado de imaginación de una tristeza es más fuerte que la
tristeza misma, y hay personas que sufren por lo que imaginan que pasará. Ellos no
saben que a veces, si les llegara a pasar lo que temen, no traerá tanto dolor como
imaginan y lo soportarán con victoria. Quiere decir que sufrió mucho más
imaginando lo que pasaría que cuando pasó, y este hombre está en ese momento.
Hay personas que viven eso, que tienen temor porque se imaginan que el resultado
médico será malo, tienen temor porque se imaginan que la enfermedad será mortal.
Es gente negativa. Hay gente que se imagina que así como va el matrimonio no
tendrá esperanza, y algunos hasta se imaginan la actitud de los demás y sufren
pensando en actitudes que todavía no ocurrieron. Y ¿qué es el temor?, es fe a la
inversa, porque la fe es la certeza de lo que se espera la convicción de lo que no se
ve, vale decir que yo tengo certeza de que algo que no vi, algo que no ocurrió y que
va a ser bueno, va a ocurrir; pero el temor es a la inversa, tengo la certeza, la
sensación de que algo que no ocurrió va a ocurrir pero este algo va a ser malo, y a
la gente le cuesta salir del temor porque tiene la certeza que se va a morir, que va
a perder, que le va a ir mal. Y ese hombre está prisionero de esa fe a la inversa,
está prisionero del temor y se aparece el Hijo de Dios, y cuando los discípulos
molestos tratan de callarlo el Señor se da vuelta y le dice: No temas, solo cree...
quiero decirte que el Señor te dice no temas, porque aunque nadie te comprende él
si te comprende y te dice: “-No te imagines lo peor, no andes por ahí pensando que
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te vas a enfermar, que vas a perder, que te van a robar, no temas, nada ocurrirá,
porque la deuda se pagará, la hipoteca se saldará, el dolor desaparecerá, no has
nacido para imaginarte lo peor, has nacido para creer que lo bueno está por venir...
No temas, solo cree”. Llegó a la casa y había un alboroto, todo el mundo estaba
prisionero del caos, porque la niña había “muerto”, pero el Señor dijo: Ella solo
duerme... y cuando entró al cuarto tomó a la niña de la mano y le dijo: Talita Cumi,
¡levántate y anda!. Hoy te dice el Señor: No temas, no te imagines lo peor, porque
aún cuando algo parece que se ha muerto para Jesús está dormido. El entrará en
aquél cuarto, entrará en aquella vida, entrará en aquella relación, en aquella
voluntad, y mientras todos digan “se murió” el Señor dirá: No está muerto, para mi
hija y mi hijo no hay nada muerto, solo se ha dormido, el amor se ha dormido, la
esperanza se ha dormido, la voluntad se ha dormido, y el Rey de Reyes, el que te
dice no temas tomará de aquello que se ha dormido y le dirá: levántate y anda...
En Marcos cap.6:45 al 50 (Leer) Cada vez que el Señor aparece esa es su frase
“No temáis”. Ellos estaban remando y estaban fatigados, y el Señor los estaba
viendo remar sin avanzar porque el viento les era contrario.

Y hay personas que sienten que están remando en la vida y que no han avanzado a
ninguna parte porque es como que sienten que el viento les es contrario, todo lo
que le viene adelante les es malo, intentan dar un paso adelante y es suficiente
para que acontezca algo y se vayan tres para atrás. Y es gente que tiene voluntad y
rema, y rema, pero nunca avanza. Y los discípulos estaban tan metidos en este
concepto que no ven que en medio de lo que el viento sopla vino algo bueno y esto
bueno se llama Jesús de Nazaret. Quiero decirte que no temas, que el Señor te
comprende, no temas porque no te ocurrirá lo peor que imaginas, y no temas
aunque parezca que las cosas que vienen son todas malas; aunque todo lo malo te
acontezca en este último tiempo, ni tu familia, ni tu economía, ni tus hijos, ni tu
negocio perecerá en medio del naufragio y aunque te de la sensación de que remas
y no vas a ninguna parte pues el Señor está mirando tu esfuerzo, él ve como has
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remado en la vida, él sabe que el viento te ha sido contrario y en medio del viento
el Señor se va a aparecer para hacer gran bonanza y para que definitivamente el
esfuerzo de tu vida te lleve a puerto seguro. No temas porque en medio de la
tormenta verás a Uno de vestiduras blancas venir hacia ti. En el evangelio de Lucas
5:8 al 10 (Leer) Simón tenía a Jesús en la barca, él no se daba cuenta quién era
Jesús, pero cuando ese pescador levanta las redes y esta se rompe y él toma
conciencia del milagro se cae de rodillas y dice: Apártate que soy pecador... y lo
que está diciendo es: Yo no soy digno de este regalo, yo no merezco tanto.. y el
Señor le dijo: “No temas, a partir de hoy te estoy escogiendo para que seas digno”.
Hay seres humanos que sienten que no merecen nada de la vida, y es que a las
personas nos cuesta dejarnos amar, creemos que no somos merecedores. Pero el
Señor le dijo a Pedro: “No temas, te he escogido y eres merecedor de esto y de
mucho más”. Escucha, si tu crees que no eres merecedor del amor, de la felicidad,
de una vida mejor, te equivocas, porque el Señor te dice hoy “No temas, tu eres
merecedor de todo lo bueno y aún mucho más hay para ti porque te he escogido y
te he hecho merecedor de todos los milagros que están dispuestos para ti... ¡No
temas!!.