Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CORAZON”
Tema 1:
Proverbios 15 (NVI)
(La respuesta amable calma el enojo, pero la agresiva echa leña
al fuego.)
Por lo general, las discusiones matrimoniales se forman a partir de pequeñeces que los
mismos cónyuges se encargan de agrandarlas hasta convertirlas en verdaderos focos
de disputa. Bastaría con saber un poco más de las estrategias utilizadas en
negociación y manejo de conflictos, para ahorrarse muchos de los líos que se
dan en la pareja. A continuación, algunas de ellas.
Pensamos distinto, actuamos distinto y somos distintos. Son dos mundos que deben
vivir en uno solo. Por eso es determinante conocer la esencia del otro, pues esto ayuda
a comprender mejor a la pareja y a actuar de forma efectiva. Entender al esposo/a
desde su óptica de hombre o de mujer, es una de las herramientas más efectivas
para ganar armonía en el matrimonio.
- Elegir el momento adecuado para expresar los desacuerdos; discutir “en frío”.
La vida en pareja debe ser enriquecedora, feliz, armoniosa, satisfactoria; y lograrlo está
en manos de los cónyuges. Buscar peleas donde no las hay, es una forma de
amedrentarse la convivencia, cuando en realidad la vida es para disfrutarla de la
mano del otro.
Tema 2:
Conozca a su cónyuge
(Adaptado del libro “Claves del Amor” del Dr. David Lazo)
¿Qué tan bien conoces a tu cónyuge? En los años que mi esposa Raquel y yo llevamos
como consejeros de matrimonios, nos hemos dado cuenta que muchas de las parejas
que aconsejamos no se conocen a profundidad. En casi todas las conferencias de
matrimonios que hacemos cada año, les entregamos un cuestionario de nueve
preguntas acerca de qué tan bien conocen a su pareja:
1. ¿Cuál es el color favorito de tu cónyuge?
2. ¿Cuál es la comida favorita de su cónyuge?
3. ¿Cuál es el nombre del perfume o colonia de su cónyuge?
4. ¿Cuáles son los más grandes temores de su cónyuge?
5. ¿Cuál es la talla de cintura de su cónyuge?
6. ¿Cuál es la película favorita de su cónyuge?
7. ¿A qué parte del mundo le gustaría a su cónyuge visitar algún día?
8. ¿Cuál es la comida que menos le gusta a su cónyuge?
9. ¿Cuáles son las metas de su cónyuge?
En el momento de participar en este ejercicio, es posible que se den cuenta de que no
se conocen muy bien entre sí. He identificado que las parejas creen saber mucho de su
cónyuge, pero realmente tienen un conocimiento exterior de su relación y el
conocimiento interior es más reducido.
Conocimiento interior: Este conocimiento, sin embargo, sería algo más profundo
como deseos, sueños, emociones, temores, fracasos y victorias. La Biblia nos enseña
lo siguiente en Mateo 12:34: «Porque de la abundancia del corazón habla la boca». Así
que, para conocer bien a nuestro cónyuge, tenemos que conocer su corazón, no sus
hechos.
Años atrás, mi esposa Raquel y yo estábamos juntos los dos en la sala de nuestra
casa. Nuestros dos hijos ya estaban durmiendo y Raquel decidió que nos acostáramos
a un lado de la chimenea. Su plan era conocerme más de lo que ya me conocía. Me
recosté en su regazo, mientras ella me acariciaba la cabeza. En cuanto me sentí
relajado, comenzó a preguntarme: «Cariño, cuéntame, ¿cuáles son tus más grandes
temores? ¿Cuáles son tus sueños y metas en la vida?». Al instante me di cuenta de
que estaba llegando a mi corazón, no a mi mente. Entonces, brotó algo de mí que
nunca antes le había contado a nadie, ni siquiera a ella. Fue un momento agradable
para los dos. Para mí, porque se lo pude expresar a la mujer de mi vida; para ella,
porque le permitió conocerme de manera más profunda.
En tu caso, es posible que conozcas las obras de tu cónyuge, pero te falte conocer sus
pensamientos. Para lograr conocer los pensamientos de tu pareja, tienes que comenzar
a conocer su corazón. Para poder conocer su corazón, tienes que estar enamorado. El
amor es la llave al corazón de tu pareja. Si no existe el amor, nunca podrás conocer a
tu cónyuge.
En muchas ocasiones digo que la relación matrimonial es como un jardín que hay que
cultivar y cuidar sin cesar. En una relación, hay que buscar nuevas maneras de
alimentarla para no aburrirla y secarla. Aquí entra la creatividad y la habilidad de poder
edificar y alimentar la unión entre marido y mujer.
Una relación no necesariamente se edifica con regalos, viajes y citas románticas. Una
relación se edifica con tiempo, comunicación, comprensión, imaginación y devoción.
Ante todo, cuida tus pensamientos porque ellos controlan tu vida. Proverbios 4.23
Todos dejamos a nuestro paso una fragancia que nos identifica, solo es necesario que
convivan con nosotros para que la descubran al poco tiempo. La mejor de las
fragancias que podemos dejar a nuestro paso es la de ser conocidos como
personas leales, fieles, consistentes y de palabra.
Como caminantes debemos ser coherentes con la partitura que lleva nuestro nombre,
porque se quiera o no, después de nosotros, será seguida por quienes nos aman y,
sobre todo, por las futuras generaciones.
El mejor de los negocios que podemos hacer en la vida, es ser fieles, porque nos
convertimos en personas confiables y vivimos en paz con nosotros mismos y con
los demás. Por eso, es necesario recordar que el amor es más que un sentimiento, es
más que una emoción pasajera, es un acto de la voluntad que se sostiene en el tiempo
con valor, determinación, perseverancia, detalles y una buena dosis de comunicación.
Es un acto de la voluntad que produce los mejores sentimientos, y que proporciona
estabilidad y seguridad a la vida familiar.
Para ser fieles, no podemos confiar en nuestras emociones. El deseo por la aventura va
a seducir; no podemos olvidar que la atracción sexual tiene la particularidad de
distorsionar la realidad y ocultar las consecuencias negativas. Somos expuestos a una
reacción bioquímica que ciega la razón y no nos deja ver los efectos que traerá el
placer instantáneo.
Por eso, para alimentar la fidelidad debemos ser conscientes cada día de lo que
estaría en juego si nos dejamos llevar por nuestros impulsos: lo primero que
perderíamos sería la capacidad de amar, la seguridad del hogar, la paz interior, la
confianza en las personas y la claridad en nuestra mente. La infidelidad nos lleva al
camino de la mentira, a la culpa que daña, a comprometer las finanzas y a arriesgarlo
todo. ¡No vale la pena ser infiel!
Así como hay que pagar un alto precio por lo que tiene un gran valor, igualmente, la
paz interior, la felicidad de la familia y los votos matrimoniales son merecedores
de nuestro esfuerzo y entrega. Nos casamos para ser fieles el uno al otro, para
acompañarnos en las buenas y en las malas, en la salud o en la enfermedad, en la
riqueza o en la pobreza y hasta que la muerte nos separe.
Cuando soy fiel a la persona que amo, soy fiel a mí mismo, porque ¿quién es el que
se tiene que ocultar?, ¿quién es el que tiene que mentir?, ¿quién es el que tiene
sentimientos de culpa?, ¿quién es el que tiene temor? ¿No es acaso la persona infiel?
Lógicamente toda la familia sufre y las víctimas más sensibles son los niños, pero quien
pierde la paz, la capacidad de confiar y el respeto de los suyos es la persona infiel.
El Valor de la Fidelidad.
(Parte II)
Fiel es la persona que corresponde a la confianza puesta en ella. Es una persona que
vive conforme a la palabra que dio y a las normas que promulga. La fidelidad es
consecuencia de una relación de personas libres, que se saben seguras de sí
mismas y tienen claro lo que desean alcanzar en la vida. Personas con una sana
autoestima y deseosos de construir un futuro estable.
Consecuencias de la infidelidad
Se pierde la confianza en la persona
Se torna mentiroso y pierde credibilidad
Se afectan sus finanzas
Se arriesga a perder el respeto de sus hijos
Tiende a experimentar sentimientos de soledad y culpa
Pone en riesgo su proyecto de vida
A prueba de aventuras
Puede que ambos se amen el uno al otro con sinceridad y ninguno de los dos esté
pensando en ser infiel, sin embargo, no es cierto que no pueda darse una infidelidad. La
fidelidad hay que protegerla y cuidarla siempre.
Es un mito pensar que, si ama a su esposa, no será tentado ni atraído por alguien
del sexo opuesto. ¿Por qué es fácil ilusionarse con una persona extraña que se
presenta interesada, amable, atractiva y sensual? Porque todo lo que es novedoso;
excita, seduce, ilusiona, pero a la vez, oculta imperfecciones, nubla la mente y no mide
las consecuencias de la decisión.
Los sentimientos hacia una persona del sexo opuesto se pueden desarrollar cuando
nos encontramos en contacto frecuente con esa persona, cuando le comenzamos a
escribir con regularidad o cuando le llamo todos los días. En estas situaciones existe la
oportunidad de que se desarrollen la atracción, el afecto y el cariño. Puede ocurrir entre
compañeros de trabajo, amigos íntimos, vecinos, etc. Puede parecer muy natural, casi
irresistible y aun hasta luce justificable. Pero si siente que le ilusiona, le atrae y le
agrada lo que experimenta, es tiempo de correr en la dirección contraria, luchar contra
el sentimiento y recobre el control de sus emociones.
Escuche las señales de alerta que le indican que hay un peligro, y aunque no haya
ocurrido nada malo aún, corra en la dirección contraria, busque ayuda y hable con su
cónyuge.
Reconozca que está en una relación peligrosa. Por ejemplo, queremos ver a alguien
que nos agrada mucho, estamos esperando que nos llame o le llamamos
frecuentemente, sentimos que nos hace falta ver y hablar con esa persona. La
atracción lleva a la cercanía, la cercanía a la confianza, la confianza a la fantasía y
esta despierta deseos incontrolables y los deseos llevan a la consumación. Es cuando
surge el lamento, la pérdida y el desequilibrio emocional.
Si usted mismo o sus amigos perciben comportamientos inadecuados de su parte
hacia alguna persona que podrían llevarle a ser infiel, no desestime estas advertencias
y tome medidas inmediatamente.
Tenga amigos que protejan su matrimonio. Atienda sus consejos y recomendaciones.
Con su cónyuge tengan intereses comunes, y mantengan proyectos juntos.
Cuiden la privacidad de su hogar.
Aprendan a divertirse juntos.
Seleccione bien sus amigos. Si estos le estimulan a la deslealtad, aléjese
inmediatamente.
No frecuente lugares que estimulan la lujuria.
Recuerde que la novedad excita, pero oculta imperfecciones.
Cultive una buena, franca y profunda comunicación con su cónyuge.
Debe ser consciente de que sus sueños y planes pueden obstaculizarse y verse
truncados por una aventura.
Recuerde que todo lo oculto saldrá a la luz tarde o temprano.
Resuelva conflictos, desilusiones y no acumule resentimiento. Esto evita “tener una
excusa”.
Renueven continuamente su pacto de fidelidad, lealtad, respeto, amor y confianza.
Procure una vida sexual satisfactoria con su cónyuge.
Todos deseamos intimidad; revelar mis sentimientos más profundos, sentirnos
comprendidos, amados, aceptados, cuidados y respetados. Tenga cercanía, ilusión y
un diálogo constante con su cónyuge.
Todos los matrimonios tienen diferencias, desilusión y dificultades. Por lo tanto,
pareciera que todos tenemos una excusa para ser infieles. Por lo que es importante
recordar que ningún cónyuge puede satisfacer todas sus necesidades emocionales.
Valore lo que tanto le ha costado construir. Sea consciente de que edificar un hogar no
es cosa fácil. Haga una lista de lo que más ama de su familia, de cuánto le ha costado y
de lo que perdería si es infiel.