Está en la página 1de 17

Deuteronomio 6:1-9

Conduciendo nuestra posteridad en los caminos del Señor


Uno de los slogans de los reformadores fue Ecclesia semper
reformanda est, Iglesia reformada siempre reformándose,
quiere decir que una iglesia reformada tiene que
constantemente autoevaluarse frente la palabra de Dios para
permanecer firme, inamovible en los principios de la palabra de
Dios. (tenemos que seguir creciendo…)
Este ha sido un principio que hemos tratado de cuidarnos como
iglesia en estos casi diez años, y por la gracia de Dios hemos
avanzado, y oramos al Señor que nos dé gracia y sabiduría para
seguir avanzando en Sus caminos y viviendo para Su gloria.
Y uno de los temas que hemos estado tratando hace algunos
meses es acerca de la permanencia de los niños en el culto. Nos
llegaron algunas inquietudes sobre si los niños deben salir o no
en el momento del sermón para escuchar una enseñanza bíblica
que fuera compatible a la edad de ellos. Y nuestra practica hasta
el momento ha sido que los niños en los días de santa cena
permanecían en el culto y en los demás domingos los niños
menores de 6 años iban a la clase con una maestra.
Bien el consistorio de la iglesia ha considerado y orado sobre el
tema y entendemos que para que fuéramos coherentes con
nuestra teología pactual, es decir que los hijos de los creyentes
son parte del pueblo de la alianza, para que fuéramos
coherentes entonces los niños no deberían separarse de sus
padres y del pueblo de Dios en el momento de la adoración
pública.
La iglesia reformada ha esta dividida en este punto, hay iglesias
donde los niños salen como veníamos haciendo y hay iglesias
que no.
Por ejemplo, la argumentación de los que suelen separar los
niños es que ellos no entienden los sermones y que es
demasiado tiempo para que ellos estén quietos. Uno de los
textos bíblicos usados es Nehemías 8:2 - “Entonces el sacerdote
Esdras trajo la ley delante de la asamblea de hombres y mujeres
y de todos los que podían entender lo que oían. Era el primer
día del mes séptimo.” (Neh 8:2 LBA)
Un segundo argumento es que los niños pequeños no iban a la
sinagoga que es modelo de iglesia para nosotros, sino
solamente a los 13 años cuando pasaban por la ceremonia bar
mitzvah – hijo de los mandamientos, un niño era considerado
responsable por sus actos, cumplir la ley, leer la torah
públicamente.
Los que argumentan que los niños no deben ser separado de los
padres y de la congregación está basado en muchos textos
bíblicos y en la coherencia con la teología del pacto.
No hubo ni una palabra de todo lo que había ordenado Moisés
que Josué no leyera delante de toda la asamblea de Israel,
incluyendo las mujeres, los niños y los forasteros que vivían
entre ellos. (Jos 8:34-35 LBA)
y ofrecieron aquel día grandes sacrificios y se regocijaron
porque Dios les había dado gran alegría, también las mujeres y
los niños se regocijaron; y el regocijo de Jerusalén se oía desde
lejos. (Neh 12:43 LBA)
Hijos, obedeced a vuestros padres en el Señor, porque esto es
justo. HONRA A TU PADRE Y A tu MADRE (que es el primer
mandamiento con promesa), PARA QUE TE VAYA BIEN, Y PARA
QUE TENGAS LARGA VIDA SOBRE LA TIERRA. (Eph 6:1-3 LBA)
Y es cierto hermanos que cuando miramos a la palabra de Dios
vemos que las familias estaban siempre reunidas todos juntos
durante el tiempo de adoración al Señor.
Por eso, queremos hacer un tiempo de transición como iglesia
donde hoy y en otros momentos vamos a estar instruyéndonos
como iglesia sobre la importancia de que los niños estén en la
iglesia y de sean conducidos desde los hogares en los caminos
del Señor. A partir del próximo año no vamos a tener más esta
separación, sino que los niños van a estar con sus padres en el
culto todos los domingos, seguimos haciendo el club feliz los
sábados de tarde, los clubes de vacaciones.
Como dije esto será un proceso, tenemos unos meses para ir
implementando este cambio, y en estos meses que quedan
siempre cuando haya niños las personas responsables estarán
dispensando el cuidado a ellos.
Este no es una decisión que afecta solo a los que tienen hijos
pequeños ahora, afecta toda la iglesia, Montevideo, Mercedes,
afecta los que tendrán más hijos, los que vayan a casarse y
tener hijos, los tíos, los abuelos, los miembros de la iglesia.
Esto va a afectar la manera como tendrá que trabajar con los
niños desde el hogar hasta el tiempo que se queda en la iglesia.
Queremos dejar siempre la parte del fondo cerca de la cocina y
de los baños libre para los padres con niños pequeños para que
puedan sentarse en estos lugares y en caso de una necesidad
especial puedan atender a sus hijos sin tener que cruzar todo el
salón. Segundo queremos pedir a los padres que no den
celulares o tablets para los niños en el momento del culto, los
niños permanecerán en el culto, pero para aprender a estar
junto a los padres y junto a la iglesia en el ambiente de culto,
para crecer en reverencia y adoración a Dios. Tercero, no
traigan juguetes para dentro del culto, ellos pueden jugar en el
cuarto con los juguetes que tenemos después del culto. Cuarto
los que se sientan cerca de los niños, no les cause distracción
durante el tiempo del culto, los padres estarán enseñándoles a
estar tranquilos durante el culto y si uno los distrae no ayuda a
los padres.
Como dije es un cambio, será un proceso y con eso dejamos
claro que queremos a los niños, que los queremos en la iglesia,
y que queremos que el poco tiempo que pasan en la iglesia sea
para que aprenda la reverencia, la adoración y la comunión con
el pueblo de Dios.
Cualquier duda puedan hablar con uno de los oficiales de la
iglesia o conmigo después del culto, cualquier ayuda que
necesiten para adecuarse a estos cambios queremos servir de
apoyo para todos especialmente a los padres con hijos
pequeños.
Con eso en mente me gustaría adentrar al tema propuesto para
el sermón de esta mañana:
En nuestra sociedad el éxito es medido a través de las
conquistas obtenidas en el transcurso de la vida. Si lograste una
formación académica, si lograste un puesto importante en el
ámbito laboral, o si tenés una empresa lucrativa, si llegaste a
tener un inmueble, si tenés un auto, si has podido viajar a otras
partes del mundo.
En nuestra sociedad para la gran mayoría poco importa lo que
pasa con la familia, podes llegar a ser una persona exitosa,
aunque tu esfera familiar sea un desastre, aunque esté en la
tercera o cuarta familia.
No es así con los principios de Dios, una persona
bienaventurada, dichosa primero es aquella que tiene al Señor
Jesús como Su salvador, que anda en Sus caminos y que
conduce su posteridad, hijos y nietos (6:2) en los caminos del
Señor.
Preguntas:
¿cómo podemos nosotros, como padres cristianos, levantar
generaciones piadosas?
¿Qué legado de vida estamos dejando a nuestros hijos?
¿Cuáles son los valores que estamos inculcando en sus mentes
y corazones?
¿Qué lugar ocupa Dios en la vida de nuestros hijos?
Contexto:
Deuteronomio 6 es un mensaje de Moisés al pueblo de Dios
antes que entren en la tierra prometida, es un mensaje de como
deberían vivir en un contexto contrario a Dios (entre los
cananeos) rodeados de paganos y de tentaciones, como
deberían vivir expresando Su fe en Dios y conduciendo sus hijos
y nietos en el mismo camino.
El mensaje era para que ellos temerán al Señor y andarán en
Sus caminos, que lo amarán con todo su ser y que usaran todo
tiempo y oportunidades para conducir sus hijos en los caminos
del Señor. El propósito es que 6:3, disfrutaran de las
bendiciones de Dios.
¿Cómo conducir nuestra posteridad en los caminos del Señor y
ayudarlos a aprender la importancia de estar en el culto?
Hay tres enseñanzas en el texto que me gustaría compartir con
los hermanos para que veamos nuestra responsabilidad en esta
tarea que Dios nos ha concedido.

I- TENGA UN PROCEDIMIENTO EJEMPLAR DELANTE DE


DIOS - 1-3
El énfasis primario del texto es a los padres. Como ellos deben
proceder para con sus hijos. Si un padre/madre no teme al
Señor y no anda en Sus caminos no podrá guiar sus hijos en la
misma dirección. Es necesario que tengan un conocimiento del
Señor y que anden en este conocimiento para que puedan
influenciar a sus hijos.
El texto nos lleva a pensar primero en que lugar estamos
delante de Dios y como esto se expresa en nuestro vivir diario.
¿Yo tengo a Dios en mi vida? ¿Es notorio esto en mi practica de
vida? Decir temer al Señor no es un privilegio de cristianos, hay
muchos paganos que lo pueden decir. Pero como este temor,
esta reverencia moldea mi manera de vivir.
Los reformadores decían que cada hogar era una iglesia
pequeña, es decir que el conocimiento de Dios y la adoración a
Dios comenzaba en el hogar y culminaba en la iglesia.
Si los padres son espiritualmente tibios, los niños a menudo
estarán fríos como piedras. Los nietos serán completamente
paganos.
Un gran problema en muchos hogares evangélicos es el riesgo
de vivir como paganos en la semana. En muchos hogares no se
le la biblia, no apartan tiempo para orar, muchas veces ni
siquiera en la hora de la comida. Si una persona entra en la casa
del impío y entra en la casa de un creyente tendría dificultad de
ver la diferencia. Consecuencia los hijos vivirán una vida
secularizada, como creyentes nominales y la iglesia será un
lugar para un evento social.
Nuestros hijos no aprenderán a ser reverentes a Dios si nosotros
no somos reverentes a Dios.
Ellos observarán todo lo que hacemos en relación a Dios y esto
impactará sus vidas.
Se tomamos el tiempo para leer la biblia, si tomamos el tiempo
para orar, si llegamos en el horario en la iglesia, si valoramos o
no estar en la iglesia para aprender. Si estamos o no
involucrados en el servicio a Dios. Si hablamos mal o no de los
líderes de la iglesia o de los hermanos.
Si sos critico a la iglesia. Si hay confianza en Dios, si hay gozo
en El Señor. Si te distraes en el culto, no espere que el actúe
diferente. Si te pones a hablar con quién está de tu lado durante
el culto no espere que no hable con los demás…
El texto llama la atención al procedimiento de los padres:
A. Una reverencia: en el versículo 2 se nos dice que debemos
temer al Señor. Es decir, debemos caminar conscientes de su
gloria, su santidad, de su autoridad y su majestad. La
responsabilidad principal de un padre es caminar en el temor
del Señor. Debemos llevar nuestras vidas bajo el liderazgo de
Dios. Un padre piadoso coloca la voluntad del Señor por encima
de todas las demás consideraciones, al darse cuenta de que el
temor al Señor es el primer paso en la sabiduría y en la crianza
adecuada.
B. Una consecuencia: cuando tememos al Señor como nos
dice el texto, entonces esto resultará en nuestra obediencia a la
Palabra de Dios. No hay mejor testimonio o legado que pueda
dejar los padres a los hijos de que ellos aprendan que papa y
mama toman la Biblia en serio. Que la Palabra de Dios es la
regla del hogar.
¡Las normas de Dios deben ser nuestras normas! ¡Nuestros
hijos copiarán lo que ven en nuestras vidas! Se llevarán de su
casa muchas de sus acciones. Por lo tanto, enseñémosles que
la Palabra de Dios debe ser obedecida.
C. Una recompensa: Dios le prometió a Su pueblo que cuando
seguían Su Palabra, que los bendeciría y recompensaría sus
vidas. ¡Lo mismo es cierto hoy! Dios ha prometido bendecir a
quienes caminan en Su voluntad y siguen Su Palabra.
Precisamos mostrarles que toda bendición que recibimos de
Dios procede de Su gracia y de una vida de obediencia a Su
palabra. Dios honrar y bendice la obediencia. Debemos exaltar
la provisión, la protección, y las bendiciones espirituales que
recibimos de Dios a nuestros hijos para que vean que nosotros
disfrutamos de los cuidados del Señor en la vida de obediencia,
que vale la pena, que es el mejor camino (no el más fácil) la
obediencia al Señor.
Aparte tiempo para enseñarles a los hijos, enséñeles a sentarse
a oír la palabra de Dios, enséñeles a orar, a cantar canticos de
adoración al Señor, pero vivamos una vida donde nuestro
procedimiento sea guiado y confirmado por la palabra de Dios,
y ciertamente esto impactará la vida de nuestros hijos y les
ayudará en la adaptación en el tiempo de culto.
I. Tenga un procedimiento ejemplar
II- AME AL SEÑOR CON TODO TU SER - V. 4-5
Una vez más el texto bíblico trata con los padres antes de tratar
con los hijos. El centro, el corazón de la enseñanza es que las
generaciones posteriores serán impactadas por la vida de las
generaciones presentes. Nuestra relación con El Señor es un
instrumento usado por Dios para impactar la vida de nuestros
hijos.
¿Será que la manera como amamos al Señor será importante
para que nuestros hijos aprendan a amar al Señor?
Amar al Señor es una enseñanza frecuente en Deut. 11:1, 13,
19:9, 30:16.
En el v. 4 encontramos lo que es conocido como Shema, una de
las principales oraciones que hacían los judíos en los oídos de
los niños. Oye hijo mío, Jehová es El único Dios, y no hay Dios
aparte de Jehová, por lo tanto, ame al Señor con todo tu ser.
Estas palabras que te mando hoy estarán en tu corazón, de los
padres. Que deben amar al Señor con todo su ser,
supremamente.
Él debe ocupar la centralidad de nuestras vidas: no debe
haber otros dioses en nuestras vidas. Con demasiada
frecuencia, los niños ven a los padres poner todo en el mundo
por delante de Dios. Puede ser un trabajo, un pasatiempo, un
amigo, cumpleaños, etc. Cualquier cosa que ocupe el lugar de
nuestro amor a Dios por, sobre todo, es un ídolo y transmite un
mensaje falso a nuestros hijos. Les estamos diciendo con
nuestras acciones, que esto que amamos se adelanta a nuestro
amor por Dios. Nuestros hijos necesitan saber que nada viene
antes de nuestra relación con Dios. Él debe ocupar la
centralidad de nuestras vidas. Si les enseñamos que Dios es
solo para los domingos, vamos a criar una generación de
infieles.
(Muchos hijos de creyentes no tienen a Dios y a Su iglesia con
la importancia que las escrituras dedican porque los padres les
enseraron de esta manera.)
v.5- Él debe ser nuestro bien mayor: mis pensamientos, mis
afectos, mis energías, sean empleados para amar a Dios. Este
amor por Dios es para motivarnos en todas las áreas de la
vida. Nuestro amor por Él debería ocuparnos totalmente.
A la medida que crezcamos en este sentido, nuestros hijos serán
impactados por los resultados y aprenderán a amarlo por, sobre
todo.
I. tener un procedimiento ejemplar
II amar al Señor con todo nuestro ser
III.- UNA TAREA EXIGENTE - V. 6-9
En los vs. 6-9, el texto muestra que lo que está en nosotros de
parte de Dios es lo que vamos a transmitir a nuestros hijos. Lo
que está en nuestros corazones de la palabra de Dios, de
nuestro amor a Dios, de nuestra sumisión a Dios.
Ya se los había dicho antes: Por tanto, cuídate y guarda tu alma
con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos
han visto, y no se aparten de tu corazón todos los días de tu
vida; sino que las hagas saber a tus hijos y a tus nietos.
(Deu 4:9 LBA)
Estarán sobre tu corazón: es decir, la Palabra debe estar en
mí vida y debe cambiar a mi vida. Si espero que mi vida impacte
la de mis hijos, entonces debo ser transformado por la
Palabra. Por lo tanto, es esencial que los padres tengan un
tiempo personal de oración y estudio de la Biblia. Necesitamos
crecer para poder ayudar a nuestros hijos a crecer. ¡Nunca se
debe subestimar la importancia de la influencia de la Palabra de
Dios! Si esperamos criar hijos piadosos, ¡primero debe haber
padres piadosos!
Del corazón de los padres a los corazones de los hijos. Hay una
serie de verbos que expresan la grandeza de esta
responsabilidad en la transmisión. Diligentemente enseñarás,
hablarás, atarás, escribirás… Un proceso largo y demandante.
Vs. 7-9- La palabra "enseñar diligentemente" en hebreo
significa literalmente afilar. Puede tener la idea de la repetición.
Su enseñanza debe penetrar profundamente en su hijo para que
tenga un efecto en él (la NVI lo traduce como "inculcar"). Uno
lo hace desde todos los ángulos, en todo momento y en toda
situación (6:7). Los hebreos vinieron a tomar literalmente los
versículos 8 y 9. Pero la idea es que los mandamientos de Dios
son centrales en la vida del creyente, en todo su procedimiento,
que así que cuando se levanta, cuando se acuesta, cuando
camina, en todo tiempo y circunstancia busca oportunidad para
mostrar cómo debemos amarle al Señor y obedecer Su palabra.
Queremos que aprendan que la palabra de Dios será la norma
que guiará todo lo demás en sus vidas, así como lo hace en la
nuestra.
Por eso deben ser entrenados desde pequeños en todas las
circunstancias y lugares.
Vamos a enseñarlos a adorar en casa, a sentarse, a aprender a
oír, ellos quieren siempre hablar, deben aprender que no son el
centro del universo, de que Dios es El centro de todo. Deben
aprender a bajar la cabeza, a respetar a Dios, a dejar todo lo
que están haciendo para dedicarse a aprender que toda la vida
debe ser guiada por la palabra de Dios.
Un niño que está aprendiendo a adorar a Dios y a obedecer a
sus padres en casa, van a aprender lo que nosotros hacemos
aquí y van a obedecer a los padres cuando les diga que es ora
de sentar para adorar a Dios y aprender de Su palabra.
Los niños no vienen prontos, hay que enseñarlos, y la iglesia
será una ayuda en todo el proceso.
Pero la responsabilidad primaria es de los padres.
Susannah Wesley, que creó a 17 hijos, incluidos John y Charles
Wesley, una experta dijo esto sobre la crianza: " El padre que
obra para someter la voluntad de su hijo a Dios, trabaja con
Dios, trabaja para conducirlo a los pies del Redentor, pero el
padre que busca complacer la voluntad de su hijo, hace el
trabajo del diablo, empujándole a una vida de muerte ".
Ellos no pueden entender el mensaje. Es mucho tiempo para
ellos. La culpa no es de ellos es de los padres. Ellos aprenden
rápido y con facilidad. Por mucho menos aprender a manejar
electrónicos, pasan horas con artefactos o juguetes, y ¿crees
que no pueden aprender nada del culto?
La palabra de Dios no vuelve vacía, que la palabra de Dios es
como espada de dos hilos que penetra lo más profundo del
alma.
Nuestros hijos aprenden y entienden mucho más de lo que
pensamos.
Se aburren…
Adorar a Dios es la cosa más preciosa que el hombre puede
hacer. John Piper. (creemos en eso)
El valor para la vida de un hijo que se sienta con sus padres en
la iglesia y aprender a adorar al Señor es incalculable.
Prepare sus hijos el sábado antes de venir a la iglesia, explique
lo que hacemos aquí, explique lo que tiene que hacer.
Después pregunte que aprendió o comente al niño de manera
breve que se aprendió con el mensaje. Oren pidiendo a Dios que
les ayude como familia a vivir de esta manera.

Conclusión:
¿cómo te sentirías al ver tu hijo creciendo y andando en los
caminos del Señor? ¿Estarías satisfecho con eso?
Bueno hay que trabajar. Si hemos cometido errores, y quién no,
hay ayuda, perdón y renovación en el Señor.
Algunos padres necesitan pedir perdón a nuestros hijos por vivir
vidas contradictorias.
Hay que reordenar la vida, las prioridades, los valores de lo
contrario no vamos a impactar nuestras generaciones. Todas
las conquistas que podamos tener no compensarán si nuestros
hijos no andan en los caminos del Señor. Pero que comience
con nosotros.
Alguien dijo que es mucho más fácil enseñar a un niño que
corregir a un adulto.
Que el Señor nos ayude a hacer todo lo que esté a nuestro
alcance para ser los mejores padres que podamos ser para su
alabanza y gloria.
Aunque no tenemos muchos niños en la iglesia, oramos para
que Dios les bendiga con muchos hijos, nuestra experiencia en
Montevideo y Mercedes es que los niños en el culto tienen
dificultad en estar sentados con los padres cuando tienen que
quedarse y esto se debe a que los padres muchas veces no los
preparan para este tiempo, no los instruyen para este tiempo y
no les corrige cuando necesario.
Y para que apliquemos este principio en nuestra iglesia todos
debemos aprender y ciertamente los padres que tienen hijos
pequeños en este momento tendrán que trabajar para ayudar a
sus hijos en este proceso de transición.

Crisis de autoridades y ejemplos. Ausencia de absolutos. Todo


es relativo.

La familia, el hogar es un lugar de adoración.


Nuestra responsabilidad primaria y mayor para con nuestros
hijos es instruirlos, guiarlos y disciplinarlos en el camino del
Señor.

Es responsabilidad de los padres traerlos a la iglesia, ayudarlos


a sentarse, aprender a escuchar
Nuestro mayor objetivo en la crianza de nuestros hijos si somos
creyentes es que aprendan a vivir para la gloria de Dios. Todo
lo demás debe proceder de este principio orientador. Ellos
tienen que aprender andar con Dios, agradar a Dios porque
tendrán que rendir cuentas a Dios. Si nuestros hijos aprenden
a vivir de esta manera, ellos serán motivo de alegría para
nuestras vidas.

Palabra diligente – trabajo duro, diario que exige perseverancia


y dedicación. Ambos los padres tienen que enseñar los hijos la
palabra de Dios para conocerlo y adorarlo.
Las preguntas del catecismo menor de Westminster son de gran
ayuda en esta tarea. Además del culto privado debemos generar
momentos donde los hijos que no saben leer y no tienen
estimulo personal, sean alimentados, instruidos con la palabra
de Dios.

Tú, sin embargo, persiste en las cosas que has aprendido y de


las cuales te convenciste, sabiendo de quiénes las has
aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas
Escrituras, las cuales te pueden dar la sabiduría que lleva a la
salvación mediante la fe en Cristo Jesús. (2Ti 3:14-15 LBA)

Los niños no vienen a jugar, no vienen para lucir, ellos vienen


para aprender a adorar a Dios y ser reverente ante Su
presencia.

Instruir a los hijos en los hogares ha sido una marca en el


movimiento reformado que necesita ser rescatado.
Si queremos ver nuestros hijos andando en los caminos del
Señor y aprendiendo adorarlo.
Instrucción formal y circunstancial
Toda la vida es un medio de aprendizaje. Y algo que Dios les ha
dado a los niños es la habilidad para hacer preguntas.
Empiezan a hablar y comienza a hacer preguntas.
Lamentablemente esto es algo que se va perdiendo con el pasar
de los tiempos y por eso necesitan ser estimulados. Para que
puedan ganar profundidad en el conocimiento de Dios y de Su
palabra. Son oportunidades para enseñarlos a pensar
bíblicamente, contestando las preguntas con las escrituras.
La razón por la cual nuestros hijos cuando confrontados no
saben da razón de la fe es porque ellos no fueron estimulados
a pensar y a hacer preguntas.

Y ahora, Israel, ¿qué requiere de ti el SEÑOR tu Dios, sino que


temas al SEÑOR tu Dios, que andes en todos sus caminos, que
le ames y que sirvas al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y
con toda tu alma,
13
y que guardes los mandamientos del SEÑOR y sus estatutos
que yo te ordeno hoy para tu bien?
(Deut 10:12-13 LBA)

Como vamos a instruir nuestras familias si no estamos leyendo


la biblia. Esta es una responsabilidad primaria de los hombres.
Los hijos pasaran 7x más tiempo en la escuela que en la iglesia.
Tenemos que criar nuestros hijos para que aprendan a vivir para
la gloria de Dios.

Entonces, ¿cómo podemos nosotros, como padres cristianos,


levantar generaciones piadosas? Deuteronomio 6 tiene algunas
respuestas (6:2, "nietos"). Moisés predicó esto a Israel mientras
se preparaban para entrar en la tierra de Canaán. Enfrentarían
muchas tentaciones en la tierra. Estarían rodeados de paganos.
Dice que...

Para criar nietos piadosos debes amar a Dios fervientemente,


enseñar a tus hijos diligentemente, y vivir en el mundo
cuidadosamente.

El resultado es que estará bien contigo (6:3) bajo la bendición


de Dios.

Permítanme recordarles esta noche que los niños son un regalo


precioso del Señor, Sal. 127:3-5, "3.) He aquí, los niños son una
herencia del Señor: y el fruto del útero es su recompensa .
4.) Como las flechas están en la mano de un hombre poderoso;
también lo son los hijos de la juventud. . 5.) feliz es el hombre
que llenó su aljaba de ellos: no será avergonzado Cuando
hablare con los enemigos en la puerta."Con demasiada
frecuencia, los niños son vistos como un inconveniente y como
una molestia. En lugar de ser visto como una bendición, la
crianza de los hijos a menudo se ve como una carga. Debemos
recordar que nuestros hijos nos han sido dados a nosotros, sus
padres, durante unos pocos años. para que podamos ayudarlos
a madurar a la imagen de Dios. No debemos ser culpables de
forzarlos a nuestro molde, pero debemos hacer todo lo que esté
a nuestro alcance para moldearlos a la imagen de Dios.
Este pasaje nos da algunas ideas muy necesarias sobre este
tema de la crianza de los hijos. Tomemos el tiempo esta tarde
para aprender sobre una mejor crianza del Señor y Su Palabra,
mientras pensamos juntos sobre El mayor compromiso del
mundo.

También podría gustarte