Está en la página 1de 13

EDUCACIÓN COMO PROCESO DE FORMACIÓN PARA LA PATRIA

INTRODUCCIÓN

Con el paso de los años, se puede observar que existen una infinidad de cambios, en diversas
áreas, es contradictorio que al realizar un vistazo sobre el desarrollo y evolución de la educación,
aparentemente también ha sufrido cambios, o al menos teóricamente se ve reflejado, sin
embargo en la práctica se evidencia que aún se está trabajando bajo modelos educativos
estandarizados, lineales y estructurados; en los que no hay espacio para el libre pensamiento,
situación que no concatena con la sociedad en la cual vivimos.

Es por ello que, se ha tomado como base la tesis “Del ciudadano católico al ciudadano laico”
escrita por Julián González con el interés de estudiar los planteamientos que surgieron en El
Salvador a partir de la década de 1880 a 1890, en lo relacionado al cambio de una educación
católica a la educación laica. Época en la cual, se esperaban mejores tiempos para El Salvador,
en la cual, la modernización y el progreso del país dependían, de la educación de un futuro
ciudadano laico.

Principalmente, en el primer capítulo, se estudiaran aspectos relacionados al panorama mundial


para esa época, retomando como punto de partida la corriente positivista que se generó a partir
del año 1880, la cual, surgió en Europa; luego se visualizará como esta corriente se trasladó a
América Latina, para llegar hasta exponer datos históricos de El Salvador.

En el capítulo dos, se desarrollarán los enfoques planteados en la tesis de Julián González, “Del
ciudadano católico al ciudadano laico”, que serían parte en la educación laica, los cuales son:
enseñanza de la historia y geografía, formación de ciudadanos armados y educación para el
progreso. Posteriormente, en el capítulo tres, se expondrán temas relacionados al aprendizaje
autónomo y su relación con el bienestar público.

Finalmente, se presentan una serie de conclusiones y recomendaciones surgidas, a través del


estudio realizado, con el afán de enriquecer los planteamientos desarrollados en cada uno de los
capítulos, a la luz de los documentos consultados y particularmente, a mi juicio, personal.
CAPÍTULO I: SURGIMIENTO DE LA EDUCACIÓN LAICA

POSITIVISMO EUROPEO

Al hacer un breve panorama de la educación tomando como punto de partida desde el


año 1880 a 1890, encontramos que predominaba el positivismo en gran parte del
Continente Europeo.

¿Qué es el positivismo?, de acuerdo a Auguste Comte conocido como el creador del


positivismo es el sistema filosófico que admite únicamente el método experimental y
rechaza toda noción a priori y todo concepto universal y absoluto; esto quiere decir que
el único conocimiento auténtico es el conocimiento científico, y que tal conocimiento
solamente puede surgir de la afirmación de las teorías a través del método científico.

De acuerdo a los textos leídos, para esta época, el positivismo tuvo mucho auge dentro
de la educación, pero no sólo se trasmitía en las aulas, sino también, en los funcionarios
públicos, es por ello que la concepción de la sociedad, como un todo integrador daba
pautas de conducta para definir los proyectos que con orden y evolución serian parte
integrante de la estructura social en muchos de los países americanos, en un principio
fue asumido por las repúblicas latinoamericanas que surgieron en el contexto de las
luchas independentistas. Hasta ese entonces, la niñez aprendía los principios y
preceptos de la Doctrina católica.

POSITIVISMO EN AMERICA LATINA

A mediados del siglo XIX, en la sociedad y la educación de América Latina se continuaba


observando, que el control se realizaba a través de la religión, a pesar de la dura crítica
surgida a partir de la ilustración, movimiento que se basa en la creencia de que la ciencia
y la educación al margen de la Iglesia llevará al hombre a su perfección moral. Por tanto,
se hacía necesario un pensamiento que atacara esas viejas formas coloniales y que
propusiera un nuevo camino para llegar a la verdad. El positivismo, proporcionó a los
pensadores latinoamericanos los fundamentos teóricos para hallar la verdad de las cosas
en los hechos y en los fenómenos. Los pensadores latinoamericanos asimilaron la
doctrina positivista, creada por Comte, y la aplicaron a la realidad de esa época.

Fue entonces, que en el último tercio del siglo XIX, las élites gobernantes volcaron su
interés hacia la escuela laica. Inspirados en el liberalismo; parte de los países que
retomaron esta transformación fueron: Argentina, Uruguay, Colombia y México. El
Salvador no se quedó atrás. La opinión pública se dividió en dos bandos, los guardianes
de la tradición advirtieron que solo la religión católica era capaz de formar personas de
bien y de apadrinar el progreso que la patria necesitaba. Los reformistas señalaron que
la modernidad y el progreso exigían un tipo de sociedad secular, es decir, abierta a
principios como la pluralidad religiosa, la tolerancia y la libertad de conciencia.

POSITIVISMO EN EL SALVADOR

Julián González, expone en: “El sueño de una república laica. La escuela y la formación
de los futuros ciudadanos” que en El Salvador la religión fue excluida del plan de estudios
desde junio de 1880. La nueva educación cultivó una sensibilidad secular en la niñez. La
experiencia cotidiana y la observación de las cosas debían ser el punto de partida de la
pedagogía. Educar significó conducir a la niñez desde lo simple hasta lo complejo, desde
lo empírico hasta lo teórico.

En lugar de recrear imágenes del cielo y del infierno en el salón de clases, actividad
propia de la educación católica, el maestro hizo suyo el reto de forjar un imaginario de
nación en los futuros ciudadanos. La patria incluía desde los lagos y volcanes hasta las
virtudes republicanas que el ciudadano debía desarrollar. La escuela laica debía formar
al ciudadano soldado al estilo romano, es decir, un individuo preparado para defender
los intereses de la madre patria frente a cualquier tipo de amenaza. El alma y el cuerpo
debían prepararse para servir a la patria. Se abandonó la lealtad hacia Dios por la lealtad
hacia el Estado.

Ante esta iniciativa, lo que se esperaba era que, a través de fomentar este nuevo modelo
en la educación, se logrará la formación de ciudadanos comprometidos, que lucharan
por defender su patria, en el segundo capítulo se describirán cuáles eran los tres enfoque
que se desarrollarían en la formación de ciudadanos, a través de la educación laica de
acuerdo a lo expuesto por Julián González en su tesis: “Del ciudadano católico al
ciudadano laico”.

CAPITULO II: FORMACIÓN PARA EL SERVICIO DE LA PATRIA

ENSEÑANZA DE LA HISTORIA Y GEOGRAFÍA

Uno de los principales enfoques que planteaba la formación de futuros ciudadanos a


través de la educación laica, era la enseñanza de historia y geografía, con el objetivo de
inculcar una idea de patria en la mente de los futuros ciudadanos y despertar un amor
por ella, esto a través, de plantearles lo sucedido en el pasado; de acuerdo a lo descrito
en la tesis de Julián González, “Del ciudadano católico al ciudadano laico”, la
transformación de los ciudadanos con amor a la patria los convertiría en personas libres,
puesto que, patria era sinónimo de pueblo libre y soberano.

La integración de la enseñanza de historia y geografía en la educación de El Salvador,


parecía una idea fascinante, porque a partir de ello las personas comprenderían los
padecimientos de sus antepasados, y por ende, les permitiría conocer su naturaleza,
esto quiere decir, que le permitirá actuar, pensar y sentir sin influencia de otros sino a
través de la reflexión de la enseñanza recibida; asimismo conocerá su propósito y
finalidad, esto permitiría, que el ciudadano tuviera bien claro quién era, de donde venía,
para que estaba en un lugar determinado y qué planes tenia para su futuro, a donde es
que, quería llegar.

De acuerdo a lo mencionado en el párrafo anterior, es de esa manera como se lograría


que el ser humano dejará un rol de observador y se convertiría en un transformador de
la sociedad, a esto es la lo que se le llamaría patria, ya que, los ciudadanos tendrían su
propia idiosincrasia, por lo tanto, se cumpliría, lo relatado por Karl Marx quien decía que
el hombre es el conjunto de las relaciones sociales; puesto que, se interesará por
transformar el medio en el cual vive; sin embargo, considero que aún en pleno siglo XXI,
no se ha concretizado dicha finalidad en la educación, debido a que siempre se busca
beneficiar a una minoría.
FORMACIÓN DE CIUDADANOS ARMADOS

Dentro de la formación de un ciudadano laico, estaba planificado la incorporación de


ejercicios militares, con el afán de tener ciudadanos saludables, fornidos y ágiles,
capaces de defender a la patria y dar a sus conciudadanos heroicas batallas. Este
enfoque lo basaron, en parte de los principios pedagógicos de Pestalozzi, en donde, él
menciona el principio de la educación física.

Realmente, la educación física es un factor elemental dentro de las instituciones


educativas, ya que, permite la formación integral del ser humano, especialmente si es
trabajada en edades tempranas, puesto que los estudiantes desarrollan destrezas
motoras, cognitivas y afectivas, esenciales para su vida diaria y como proceso para su
proyecto de vida, además, a través de la educación física, los estudiantes expresan su
espontaneidad, fomentan su creatividad y sobretodo permite que se conozcan, se
respeten y se valoren a sí mismos y a los demás. Por ello, es indispensable la variedad
y vivencia de las diferentes actividades en el juego, lúdica, recreación y deporte.

En mi opinión, incluir la educación física dentro de la educación laica sería de gran


beneficio para la sociedad, sin embargo, la finalidad no era con el objetivo de inculcar la
creatividad, el respeto hacia los demás, por el contrario, se pretendía la formación de
personas fuertes y rudas dispuestas a pelear por su patria, de hecho, se llegó hasta
introducir rifles de madera a algunas escuelas, decisión que considero inaudita.

EDUCACIÓN PARA EL PROGRESO

La educación es uno de los factores que más influye en el avance y progreso de personas
y sociedades. Además de proveer conocimientos, la educación enriquece la cultura, el
espíritu, los valores y todo aquello que nos caracteriza como seres humanos, además
alcanzar mejores niveles de bienestar social y de crecimiento económico; para nivelar
las desigualdades económicas y sociales; para propiciar la movilidad social de las
personas; para acceder a mejores niveles de empleo; para elevar las condiciones
culturales de la población; para ampliar las oportunidades de los jóvenes; entre otros.
Es por eso, que en gran parte la importancia de la formación en la educación laica, era
inculcar en los ciudadanos la responsabilidad de asistir a la escuela y de trabajar para el
progreso de la patria. A partir de esto, es que Julián González expone que, el objetivo de
la escuela pública primaria era formar futuros ciudadanos a través de la enseñanza
impartida en las escuelas oficiales.

Al implementar estos tres enfoques dentro de la educación laica, considero que la


educación y la sociedad en general sería completamente diferente a lo se vive en la
actualidad, ¿Será que nunca se debió cambiar la educación religiosa por la educación
laica?, de ninguna manera, por el contrario, esta apuesta ha sido una de las mejores que
se han tomado en la educación salvadoreña, más bien, considero, que no tuvo la
aceptación necesaria por el camino al cual se le condujo.
CAPITULO III: APRENDIZAJE AUTÓNOMO Y SU RELACIÓN CON EL BIENESTAR
PÚBLICO.

VIDA AUTÓNOMA

Kant entendía la autonomía como la capacidad de darse a sí mismo las normas de


conducta como un verdadero legislador universal, con la intención de practicarlas, porque
no existe nada tan universal como la conciencia libre para actuar y hacer, instituyendo
en estas normas nuestro comportamiento individual y social, y asumir la propia vida en
función de dicha posición. Podríamos decir entonces, que la autonomía es la capacidad
de la persona de gobernarse a sí mismo, con base en un código de conducta asumido
personalmente, teniendo en cuenta la relación bidireccional y constitutiva con los otros.

Desde el humanismo, la autonomía está vinculada a la educación. Esta permite que el


ser humano integre nuevos principios y valores, asumiendo nuevas actitudes que va
construyendo gracias a la experiencia y percatándose de la capacidad que posee para
tomar decisiones libres, para dialogar e intercambiar ideas, y para convertirse en sujetos
críticos, reflexivos y con capacidad de formarse sus propias decisiones.

Es por eso, que en la tesis de Julián González, se plantea que aún cuando en la escuela
se educaba para el amor a la patria y el respeto al bien público, no se perdió de vista que
otra función importante de la escuela era formar en la autonomía al futuro ciudadano;
debido a ello es que, era necesario pasar de la educación católica a la educación laica,
puesto que, el Estado no debería de enseñar ninguna moral que tuviera como
fundamento la doctrina de una secta en específico, sino que, debe limitarse a enseñar
la religión natural. El objetivo de esta educación consistía, en educar a la luz de la razón,
en la sana tolerancia, la reflexión autónoma sobre los hábitos y costumbres, y por
supuesto, en el respeto a las leyes sancionadas por el Estado laico.
De acuerdo, a lo mencionado en los párrafos anteriores, se puede evidenciar que la
enseñanza de la autonomía dentro de las instituciones educativas, era parte fundamental
para lograr el progreso de nuestro país, de hecho, considero, que este planteamiento
estaba muy atinado, realmente, es lamentable que, con el pasar de los años, aún no se
ha logrado su concretización, ya que, en el ámbito social no se le ha permitido tomar a
las instituciones educativas su verdadero rol, sino que, en su mayoría las sectas
religiosas y los medios de comunicación han tomado el control en lo referente a la
educación y estas entidades siguen colaborando con la formación de ciudadanos
pasivos.

BIENESTAR PÚBLICO

El bienestar público es la satisfacción plena de necesidades básicas, culturales,


económicas por parte de una comunidad determinada. Para ello es necesario que exista
un desarrollo social y también un desarrollo económico, puesto que solo a partir de esto
es que se pueden lograr en gran parte las expectativas de la sociedad. No obstante, el
desarrollo económico por sí solo no es suficiente para que el bienestar social sea pleno,
ya que los ciudadanos necesitan de tiempo de ocio, recreativo y de relaciones
interpersonales plenas para que puedan desarrollarse en todo su potencial.

Por lo visto anteriormente, podemos deducir que, el bienestar público o social está ligado
a factores económicos. Es por ello que la sociedad, además de promover el bienestar
social, debe estar preparada para hacer cambios en el sistema económico y social, sin
dejar de lado que para que esto sea posible es indispensable la formación de futuros
ciudadanos que estén dispuestos a velar y trabajar por ello.

Ahora bien, es importante destacar que no existirá un bienestar público, sino se logra
concesionar el bienestar individual, esto era algo que se esperaba con el cambio a la
educación laica, enseñarle a los ciudadanos a que ellos podían tener su propia
autonomía pero a la vez trabajando por los intereses colectivos, es por ello que en el
apartado a continuación se explorará este conflicto.

AUTONOMÍA INDIVIDUAL O NECESIDADES COLECTIVAS


Hemos explorado como surgió el cambio de la educación católica a la educación laica,
así también, como, a través, de este tipo de educación se iban a formar ciudadanos para
el servicio de la patria, además de comprender la importancia de crear en ellos una vida
autónoma, tanto para el bienestar individual como el bienestar público.

Realmente, el planteamiento que propuso en ese entonces el movimiento liberal, es


hasta la fecha de gran beneficio porque a partir de este tipo de educación se planeó la
formación de ciudadanos conocedores de sus raíces y amantes de su patria, buscando
siempre que cada uno tuviese una vida autónoma, que concretizaría en el bienestar
público, puesto que se lograría desarrollar en los ciudadanos un pensamiento crítico y
reflexivo, además de inculcar en ellos un respeto mutuo hacia los demás.

Considero que, este tipo de educación fue de gran beneficiosa para la sociedad de esa
época, ya que le permitía al individuo desarrollarse respetando a los demás, sin embargo,
dicho planteamiento surgió a raíz de la corriente positivista, la cual, se basaba
concretamente en un aprendizaje memorístico y además, este tipo de educación
buscaba formar individuos inflexible, de mentalidad cerrada, individualista y a-critico,
aspectos contradictorios a los planteamientos expresados por el movimiento liberador en
la sociedad salvadoreña, por lo tanto, aún cuando gracias a esta corriente se logró
interponer una línea entre la religión católica y la escuela, fomentando la decisión del
libre culto en los ciudadanos, no era la más asertiva para lograr el progreso de una
nación, sino que, se buscaba formar ciudadanos productivos para el beneficio de los
grupos elites de nuestro país.
CAPITULO IV: CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

CONCLUSIONES

• En general, se puede decir que, aunque gracias al surgimiento de la corriente


positivista se logró pasar del ciudadano católico al ciudadano laico, este tipo de
planteamiento no era el más adecuado, puesto que, se saldría de la sumisión
religiosa para pasar a ser sometidos por el estado.

• Los enfoques presentados por el movimiento liberal dentro de una educación


laica, desde mi punto de vista, eran importantes, porque el conocimiento de la
historia y geografía, permitirían que el ciudadano reconociera sus raíces y con ello
se lograría que esté dejará de ser un observador y se preocupará por transformar
la sociedad en la cual vivía; la integración de la educación física en las
instituciones contribuye en la formación integral de los estudiantes y esto permitía
contar con personas fuertes y sanas dispuestas a insertarse en el ámbito laborar
para obtener sus necesidades individuales y contribuir al desarrollo económico de
la sociedad, y por ende, a través de ello, se lograría el progreso de nuestro país.

• La enseñanza de una vida autónoma es indispensable para el desarrollo no solo


de la persona individual, sino también, para el progreso de una nación, por lo tanto,
es necesario formar ciudadanos críticos y reflexivos, lastimosamente, aún en la
actualidad el estado no le apuesta a este tipo de educación, de hecho, la gran
mayoría de sectas religiosas contribuyen a ello, ya que, se les es más fácil
controlar y lucrarse de personas pasivas, que formando ciudadanos reflexivos y
críticos.

RECOMENDACIONES

• Es importante, visualizar que cada una de las corrientes creadas han aportado
aspectos positivos para la sociedad en general, en este caso para la educación,
es ello que, considero, que se deben de retomar los aspectos positivos y continuar
experimentando cambios, puesto que, no se logrará el progreso de una nación si
se continúa trabajando bajo modelos lineales que no contribuyen al desarrollo
individual y mucho menos al de una nación.

• Considero que a estas alturas ya no debe de existir la discusión de si es necesario


la lectura de la biblia en las instituciones educativas, puesto que eso significaría
retroceder, además, no se lograría dar una enseñanza neutral, ya que, cada
docente tomaría la posición desde sus convicciones religiosas, por lo tanto, se le
negaría al estudiante tomar una decisión propia. Es por eso que, la discusión que
debe existir en la actualidad es de, apostarle a una educción que supere las
deficiencias de la educación tradicional ocasionadas por un enfoque que enfatiza
el aprendizaje de hechos, sucesos y productos finales de la investigación
científica, dejando de lado el desarrollo de habilidades, capacidades y actitudes
relacionadas con el desarrollo del pensamiento crítico, reflexivo y la actitud de
investigar para aprender.
BIBLIOGRÁFICAS

• Aguilar Avilés, Gilberto. Reforma Educativa en Marcha. Un vistazo al Pasado de


La Educación en El Salvador. Documento 1. Ministerio de El Salvador. Gobierno
de El Salvador.
• Araujo Lozano, Jorge Gustavo. La iglesia católica salvadoreña y la laicización de
la educación en 1881: ¿Un proyecto liberador frente a una respuesta
ultramontada? 2009.
• Escamilla, Luis Manuel. Reformas educativas. Historia contemporánea de la
educación en El Salvador. . Ministerio de Educación. Dirección de Publicaciones.
1981.
• González Torres, Julián. Del ciudadano católico al ciudadano laico. La escuela
pública primaria y la formación de los futuros ciudadanos. El Salvador 1824-1890.
2012.
• González Torres, Julián. “El sueño de una República Laica: la escuela y la
formación de los futuros ciudadanos. Reforma educativa en El Salvador (1883-
1889)”, Cultura. Revista de la Secretaría de Cultura de la Presidencia, 105, Enero-
Marzo 2011.

WEBGRAFÍA

• http://www.mined.gob.sv/index.php/paes-cat/item/4032-rese%C3%B1a-
hist%C3%B3rica.
• http://elmundo.sv/sexta-y-septima-constituciones-1880-y-1883-administracion-
zaldivar/.
• http://www.lapagina.com.sv/.

También podría gustarte