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TIPOS DE CONTAMINANTES

Tabla de Contenido
Contaminantes acumulativos y no acumulativos
Contaminantes locales y contaminantes regionales
Contaminantes provenientes de fuentes puntuales y de fuentes no
puntuales
Emisiones continuas y emisiones esporádicas

Tipos de contaminantes

Físicamente, los residuos constituyen una amplia clasificación de los materiales y


energía que fluyen en los tres medios naturales, por lo tanto, es necesario distinguir
entre los diferentes tipos de emisiones, de acuerdo con los factores que afectan su
entorno.

Contaminantes acumulativos y no acumulativos

Algunos contaminantes se acumulan con el paso del tiempo, mientras que otros
tienden a disiparse poco después de ser expulsados. Por ejemplo, un contaminante
no acumulativo es el ruido: mientras la fuente opera, el ruido se manifiesta en el aire
circundante, pero tan pronto deja de funcionar la fuente, cesa el ruido. Un ejemplo
de un contaminante acumulativo lo constituyen los desechos radiactivos. También
los materiales plásticos. Durante años se buscado un plástico degradable, pero
hasta ahora el plástico es un elemento que se

descompone muy lentamente. Muchos elementos químicos son contaminantes


acumulativos: una vez se expulsan se quedan entre nosotros para siempre.

Existen otros tipos de efluentes que son acumulativos hasta cierto punto, pero no
completamente. Por ejemplo, la materia orgánica arrojada en las masas de agua.
Los desperdicios tratados o no, que arrojan las plantas municipales de tratamiento
de basuras. Una vez dispersados, los desechos quedan sujetos a los procesos
químicos naturales que tienden a descomponer los materiales orgánicos en sus
elementos constitutivos, haciéndolos así mucho más benignos.
Sea o no acumulativo un contaminante, se tiene el mismo
problema básico: tratar de corregir los deterioros ambientales y
relacionar éstos con los costos para reducir las emisiones.

Sin embargo esta labor es mucho más difícil para contrarrestar los contaminantes
acumulativos, que para los no acumulativos.
Las concentraciones en el ambiente están estrictamente en función de las
emisiones actuales: reducir éstas a cero, conduciría a concentraciones cero en el
ambiente. Pero en los contaminantes acumulativos, la relación es más compleja:
una reducción en las emisiones actuales tiene sólo un efecto incipiente en las
concentraciones actuales en el ambiente. Incluso si las emisiones actuales se
redujeran a cero, la calidad del ambiente se dañaría debido al efecto acumulativo
de las emisiones anteriores.

Contaminantes locales y contaminantes regionales

Algunas emisiones sólo tienen impacto en regiones restringidas y localizadas,


mientras que otras afectan a regiones más amplias, quizá el ambiente global. El
ruido y la degradación del ambiente visual tienen impactos locales. Pero, de otro
lado, algunos contaminantes tienen amplios impactos, en una región o en el
ambiente global. Por ejemplo, la lluvia ácida es un problema regional. Las emisiones
de un país como EE.UU o de una región de Europa, afectan a personas de otras
regiones. Los efectos por el agotamiento del ozono debido a las emisiones de
clorofluorocarbonos en varios países generan cambios químicos perdurables en la
estratosfera de la Tierra, lo que significa que sus impactos son de orden mundial.

Contaminantes provenientes de fuentes puntuales y de fuentes no puntuales

Las fuentes de contaminación difieren en términos de la facilidad con que pueden


identificarse los puntos reales de descarga. Es fácil identificar los puntos por los
cuales una gran planta de energía descarga las emisiones de dióxido de sulfuro;
éstas son expulsadas por las chimeneas de cada planta. Otro ejemplo: las
descargas de las plantas de alcantarillado, tienen una salida fácilmente identificable.
Los anteriores, se denominan contaminantes de fuentes puntuales.
De otro lado, existen muchos contaminantes para los cuales no existen puntos de
expulsión definidos. Por ejemplo, los químicos agrícolas, los cuales usualmente
fluyen en la tierra en forma dispersa o disuelta. El flujo de aguas lluvias que se
generan en el sector urbano también es un problema importante de fuente no
puntual.

Emisiones continuas y emisiones esporádicas

Las emisiones que producen las plantas de energía eléctrica o alcantarillado son
más o menos continuas. Sin embargo, el hecho de que las emisiones sean
continuas no significa que los daños también sean constantes. Los hechos
meteorológicos e hidrológicos pueden convertir las emisiones continuas en daños
variables. En este caso, el problema político consiste en manejar el ritmo de las
descargas. Pero, por otra parte, tenemos el caso de contaminantes que son
emitidos esporádicamente. Por ejemplo, el caso de derramamiento accidental de
petróleo o químicos. En este caso, el problema político consiste en diseñar y
manejar un sistema que reduzca la probabilidad de descargas accidentales.

Daños ambientales no relacionados con emisiones

Hasta ahora hemos analizado las características de los diversos tipos de


contaminantes ambientales relacionados con la descarga de residuos de materiales
o de energía. Sin embargo, existen otras instancias importantes en cuanto al daño
de la calidad ambiental que no pueden ser atribuidos a descargas de residuos. Por
ejemplo, la transformación de tierras en áreas para vivienda y comercio, destruye el
valor ambiental de los terrenos, bien sea su valor como ecosistema, como hábitat o
humedad, o su valor como paisaje.

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