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Esta tarta fue un encargo para el cumpleaños del hermano de una de mis amigas y por todos los
comentarios que me han llegado les encantó.
Y sinceramente, yo también la probé jejejeje. Aproveché los restos del bizcocho que corté para
igualar las capas y me las unté bien del buttercream de maracuyá y estaba de vicio total!!!!
El olor del maracuyá impregnaba toda mi cocina y decía sin parar "cómeme" jejeje pero fui dura y
resistí la tentación, eso sí, porque sabía muy bien que más de medio bote de maracuyá en pasta
está en mi poder y que en breve preparé una buena receta para hacer uso de él.
4 huevos L.
50 ml leche entera.
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 170º y engrasamos con mantequilla tres moldes, les ponemos papel de
hornear en la base, esto nos facilitará la labor de desmoldar los bizcochos cuando estén listos.
En el bol de la amasadora, batimos la mantequilla y el azúcar hasta que consigamos una mezcla
esponjosa y blanquecina.
Añadimos los huevos ligeramente batidos y uno a uno, a velocidad baja. No añadiremos el
siguiente hasta que el anterior esté totalmente integrado. Añadimos el extracto de vainilla.
Por último, echamos la mermelada de mango y removemos hasta que todos los ingredientes se
integren.
Repartimos la masa de manera uniform entre los tres moldes que teníamos preparados
previamente. Para que todos los moldes tengan la misma cantidad de masa, lo que hago es que la
reparto a partes iguales usando una cuchara para hacer bolas de helado, así no hay lugar a errores.
Horneamos durante unos 25-30 minutos, o hasta que al pinchar los bizcochos con un palillo, éste
salga totalmente seco.
Dejamos enfriar sobre una rejilla durante 10 minutos. Pasado este tiempo, los desmoldamos, les
damos la vuelta, y los dejamos enfríar totalmente sobre una rejilla.
Cuando estén totalmente fríos, los envolvemos en film transparente y los metemos de un día para
otro en la nevera para que se asienten y su sabor se intensifique.
PREPARACIÓN:
En el bol de la amasadora, batimos a velocidad baja la mantequilla con el azúcar durante un par de
minutos.
Sobre una base para tartas ponemos el primer bizcocho, con la ayuda de una cuchara para hacer
bolas de helado, ponemos dos bolas de buttercream sobre el bizcocho y con la ayuda de una
espátula extendemos de manera uniforme por todas partes, desde el centro a los bordes.
Colocamos la segunda base de bizcocho, apretamos un poco hacia abajo para que se pegue a la
crema y repetimos la operación anterior.
Ponemos la última base de bizcocho y aplastamos un poquito con las manos para que se asienten
bien, como hemos hecho antes.
Comenzamos a cubrir la tarta. Ponemos buttercream en la superficie y con una espátula vamos
extendiéndola hacia los bordes. Después, ponemos también buttercream de maracuyá por los
lados y seguimos alisándola con la espátula.
Ésta es la primera capa, conocida como "tapa migas", por lo que es importante que sea fina.
Cuando tengamos tapada toda la tarta con esta fina capa de crema, la metemos en la nevera
durante al menos una hora para que endurezca. Así nos será más fácil trabajar después para
terminarla. Si no so cabe en la nevera, haced como yo y a la terraza tapada, con estos días tan fríos
sirve perfectamente a falta de hueco en la nevera jejeje
NOTA: es importante que cada vez que cojamos buttercream, limpiemos la espátula con la que
estamos trabajando, de esta forma evitaremos manchar el merengue con restos de bizcocho.
Transcurrido este tiempo, sacamos la tarta de la nevera o terraza y ponemos una generosa capa
de buttercream(es más fácil trabajar con mucha cobertura que con poca, la que nos vaya sobrando
la podemos retirar perfectamente) por la superficie de la tarta y por los lados y volvemos a hacer
lo mismo que anteriormente, con la ayuda de nuestra amada espátula empezamos a alisar la
superficie y los bordes lo mejor que podamos.
Cuando tengamos el buttercream lo más liso posible, ponemos agua caliente en un vaso de tubo e
introducimos la espátula unos segundo en el agua. Transcurrido este tiempo, la sacamos del agua
y alisamos la superficie de la tarta. Con este truco, conseguiremos que nos quede perfecta.
Para terminar con la decoración, hice unas cuantas flores con la ayuda de una manga pastelera y
su correspondiente boquilla de estrella pequeña.
Y el resultado lo tenéis en la foto de presentación, siento mucho no tener foto del corte pero al ser
un encargo no tengo ninguna.
Igualmente espero que os haya gustado y que os animéis a probar una tarta con sabores exóticos,
fresca e innovadora.
Espero que empecéis la semana con energía, un beso fuerte a todos y hasta el jueves, que volveré
con una nueva receta.
¡¡Gracias amigos!!
PASTEL CREMOSO DE CARAMELO
JUEVES, 21 DE NOVI EMBRE DE 2 013
Hace tanto tiempo que tengo hecha la receta de este pastel que casi lo había olvidado, ¿cómo
es posible con los delicioso que está?.
La verdad es que lo preparé para el cumpleaños de mi hermano, fue el que eligió del maravilloso
libro de Peggy Porchen "Boutique de pastelería", otro más de mis libros de cabecera.
Es un pastel tierno y jugoso, con un delicado sabor caramelo, el ideal para celebrar el
cumpleaños de un ser querido o para hacer que cualquier momento sea digno de celebrar.
INGREDIENTES PARA EL BIZCOCHO:
150 ml de agua.
150 grs de azúcar.
1 cucharadita de vainilla en pasta.
2 cucharadas de brandy.
PARA LA DECORACIÓN:
Cacao en polvo.
Una tableta de chocolate con leche frío, yo lo metí en la nevera.
En un bol ponemos la mantequilla, el azúcar, la sal y la vainilla y batimos hasta obtener una
mezcla espumosa.
Añadimos a la mezcla los huevos, previamente batidos en otro bol, poco a poco y sin dejar de
batir. Una vez que todos los ingredientes están bien integrados, vamos echando la harina
(previamente tamizada) a la mezcla hasta que obtengamos una masa homogénea, ligera y
esponjosa.
Repartimos la mezcla de manera equitativa en los tres moldes que teníamos previamente
preparados y horneamos unos 15 minutos.
Transcurrido este tiempo, pinchamos el centro del bizcocho con un palillo para comprobar si
están horneados.
PREPARACIÓN DEL ALMÍBAR:
En un cazo echamos el agua, el azúcar y la vainilla en pasta y lo ponemos a calentar hasta que
rompa a hervir y el azúcar esté disuelta. Dejamos enfriar y añadimos el brandy.
Cuando los bizcochos estén horneados, los dejamos reposar unos diez minutos fuera del horno.
Cuando aún los bizcochos están calientes los pintamos con el almíbar, el calor permitirá que el
almíbar se absorba con mayor rapidez.
Cuando los bizcochos estén tibios los sacamos del molde y los dejamos enfriar completamente
sobre una rejilla.
Una vez fríos, los envolvemos en film transparente y los metemos en la nevera toda la noche.
Ponemos la mantequilla junto con el azúcar lustre y la sal en el bol de la amasadora y batimos
hasta que la mezcla se blanquee y esté cremosa.
Añadimos el dulce de leche a la mezcla y removemos bien hasta obtener una textura
homogénea.
Cogemos los bizcochos y los vamos uniendo con un tercio del relleno de crema de mantequilla
y con el almíbar de brandy para remojar los bizcochos.
Cubrimos los lados y la superficie del pastel con una capa fina de crema de mantequilla y lo
metemos en la nevera durante al menos media hora.
Transcurrido este tiempo, cubrimos el pastel con una capa generosa de la crema de mantequilla
y con la ayuda de una espátula intentamos que nos quede lo más liso posible.
Yo tengo que reconocer que éste es mi segundo layer cake y todavía por aquel entonces no
tenía muy pulida la técnica pero ya la he mejorado y en breve veréis mis últimos layer cake en
condiciones, os lo prometo.
Para terminar, espolvoreamos la superficie del pastel con cacao en polvo ayudándonos de un
colador para que quede uniforme.
Después, cogemos una tableta de chocolate fría, yo la guardé en la nevera, y con la ayuda de
un cuchillo liso (SIN SIERRA) vamos raspándola para sacar virutas de chocolate y se las
ponemos por encima a nuestro pastel.
Os dejo para terminar con una vista del relleno, ya nos habíamos comido la mitad jejejeje
Espero que os haya gustado, nos vemos pronto con una nueva receta dulce.
Estoy tan orgullosa de esta tarta, como quien dice es mi primer Layer Cake y estoy encantada
con el resultado, no solo de presentación si no también de sabor.
Tenía tantas ganas de hacer un Layer Cake en condiciones, ya no podía más, estaba a la espera
de cualquier ocasión por pequeña que fuera para hacerlo y una visita familiar me ofreció el
momento que tanto buscaba y.....este es el resultado, espero que os guste!!!
INGREDIENTES PARA EL BIZCOCHO MSC DE CONFETTI:
NOTA: Por si no lo sabéis las siglas MSC hacen referencia al bizcocho Madeira Sponge Cake,
que es el que se utiliza para las tartas fondant cuando hay que tornear, ya que es un bizcocho
denso y consistente.
Estas cantidades debemos repetirlas tantas veces como capas de bizcocho que tenga la tarta,
en mi caso fueron tres.
4 huevos.
200 grs mantequilla a temperatura ambiente.
200 grs de azúcar.
300 grs de harina.
1/2 sobre de levadura química.
1 pizca de sal.
1 cucharadita de extracto de vainilla, yo uso la de Nielsen Massey.
2 cucharadas de confettis de azúcar.
Fresas naturales.
Mermelada de fresa.
250 grs de mantequilla a temperatura ambiente.
325 grs de icing sugar.
200 grs de chocolate sin leche.
3 cucharadas de leche entera.
PREPARACIÓN:
Para el bizcocho:
Añadimos los huevos uno a uno y sin dejar de batir. Añadimos la mezcla de harina y levadura
poco a poco y seguimos batiendo hasta que todos los ingredientes se integren.
Para terminar, echamos los confetis de azúcar y mezclamos con una lengua, no con la
amasadora.
Echamos la mezcla en el molde que teníamos reservado y horneamos durante unos 30 minutos
o hasta que al pincharlo con un palillo, éste salga limpio.
Repetimos este proceso tantas veces como capas tenga nuestra tarta. Como mi tarta tenía tres
pisos, tripliqué las cantidades del bizcocho y los hornee en tres moldes diferentes de una sola
vez.
Para el buttercream:
Batimos a máxima velocidad durante 5 minutos. Cuando más batimos, mayor consistencia del
buttercream.
Preparación del Layer Cake:
Sacamos los bizcochos de la nevera y si es necesario igualamos los bizcochos con la ayuda de
un cuchillo.
Ponemos nuestro primera base de bizcocho y con la ayuda de una espátula echamos el
buttercream hasta conseguir una capa recta. Cortamos las fresas en finas láminas y ponemos
sobre el buttercream. Para pegar esta capa con la siguiente de bizcocho, yo eché unos pegotitos
de buttercream para evitar que los bizcochos se movieran.
Montamos la segunda capa de bizcocho y repetimos la misma operación que con la primera
capa (buttercream+láminas de fresas naturales), la única variante es que para que se peguen
las capas de bizcocho y evitar que se muevan, en esta capa usé mermelada de fresas.
Ahora recubrimos toda la tarta con una capa fina de buttercream, la llamada "tapa migas",
cuando esté totalmente cubierta la metemos en la nevera al menos media hora para que coja
cuerpo y el buttercream endurezca.
Importante no olvidar meter también el cuenco en el que tenemos el buttercream que estamos
usando para cubrir la tarta, si no se nos derretirá y será un desastre absoluto!!!
Transcurrido este tiempo, sacamos la tarta y volvemos a cubrirla hasta tenerla totalmente
forrada de chocolate.
Espero que os guste esta receta, yo estoy muy contenta y orgullosa jejeje parezco una madre
orgullosa de sus hijos y claro, yo en su defecto, orgullosa de mis dulces, en este caso de este
pedazo de Layer Cake que hizo las delicias de mis invitados.